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GUÍA DE LA

ALIMENTACIÓN
FUNCIONAL
Los probióticos en la
alimentación humana
Estilos de vida saludables III

GUÍA DE LA
ALIMENTACIÓN
FUNCIONAL
Los probióticos en la
alimentación humana

LLUÍS SERRA MAJEM


Catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública,
Universidad de Las Palmas de Gran Canaria;
Presidente de la Fundación Dieta Mediterránea

J A V I E R A R A N C E TA B A R T R I N A
Profesor Asociado, Departamento de Medicina Preventiva
y Salud Pública, Universidad de Navarra, Pamplona;
Presidente de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC)
ÍNDICE

Autores IX

Introducción
El porqué de una guía sobre alimentación funcional XI

Capítulo 1 ESTILOS DE VIDA SALUDABLES 1


Dieta, ejercicio físico y salud 1
Dieta equilibrada 2
Dieta mediterránea 3
Características principales 3
Evolución de la dieta en el mundo 4
Evolución de la dieta en España 5

Capítulo 2 LA SITUACIÓN DE LA SALUD EN EUROPA Y EN ESPAÑA 11


Enfermedades crónicas no transmisibles (enfermedades
cardiovasculares, hipertensión, diabetes, cáncer,
alergias y enfermedades reumáticas) 11
Epidemiología en Europa de las enfermedades
crónicas no transmisibles 12
Obesidad y sus consecuencias: dolencias
cardiovasculares, hipertensión y diabetes 12
Cáncer 14
Alergias 15
Enfermedades reumáticas 16
V
Epidemiología en España de las enfermedades
crónicas no transmisibles 16
Obesidad y sus consecuencias: dolencias
cardiovasculares, hipertensión y diabetes 17
Cáncer 17
Alergias 18
Enfermedades reumáticas 19
Percepción del estado de salud de los ciudadanos 20
Política de Salud Pública en Europa 20
Papel de la industria 23
Conclusiones 24

Capítulo 3 LOS ALIMENTOS FUNCIONALES 25


Tipos de alimentos funcionales 27
Funcionales de naturaleza proteica 27
Proteínas lácteas 27
Proteínas de otros orígenes como ingredientes
funcionales en productos lácteos 28
Péptidos e hidrolizados proteicos 28
Funcionales de naturaleza lipídica 29
Lípidos lácteos 29
Lípidos de otros orígenes como ingredientes
funcionales en productos lácteos 30
Probióticos, prebióticos y simbióticos 30
Probióticos 31
Prebióticos 31
Simbióticos 32
Otras sustancias de origen natural con efectos
funcionales 32
Calcio 32
Fibra alimentaria 33
Ácido fólico 33
Compuestos antioxidantes 33
VI
Capítulo 4 LA ACTUACIÓN DE LOS PROBIÓTICOS 35
¿Qué es la flora intestinal? 35
Inmunonutrición 36
Acción de las bacterias lácticas: tipos de bacterias
lácticas y sus efectos 37
Tránsito intestinal 38
Digestibilidad de la lactosa 40

Capítulo 5 MARCO JURÍDICO Y REGLAMENTARIO DE LOS ALIMENTOS


FUNCIONALES 41
Reglamento (CE) N.o 1924/2006 del Parlamento Europeo
y del Consejo relativo a las declaraciones nutricionales
y de propiedades saludables de los alimentos 42
Fundamento científico de las declaraciones 43
El papel de la EFSA 43

Bibliografía 45

Índice alfabético 57

VII
AUTORES

DIRECTORES

Lluís Serra Majem


Javier Aranceta Bartrina

COLABORADORES

Victoria Arija Val


Eva Elisa Álvarez León
Inmaculada Bautista Castaño
Lourdes Carrillo Fernández
Carlos Díaz Romero
Pilar Viedma Gil de Vergara
Blanca Gonzalvo Heras
Emilio Martínez de Victoria
José Mataix Verdú
Rosa M.ª Ortega Anta
Luis Peña Quintana
Carmen Pérez Rodrigo
Blanca Raidó Quintana
Lourdes Ribas Barba
Gemma Salvador Castell
Josep Antoni Tur Marí

COORDINACIÓN

Julio Basulto

IX
INTRODUCCIÓN

EL PORQUÉ DE UNA GUÍA SOBRE


ALIMENTACIÓN FUNCIONAL
Desde hace unos años, los consumidores españoles han aprendido a con-
vivir con productos que prometen altos beneficios para la salud. Todo
ha valido hasta ahora, y se ha visto cómo en las estanterías de los super-
mercados compartían espacio productos con sólidas bases científicas para
justificar sus estudiadas formulaciones con otros que se han subido al carro
sin demostrar sus beneficios.
Y ha sido tal la proliferación de este tipo de alimentos (unos fun-
cionales y otros que pretenden serlo) que parece lógico pensar que los
consumidores actuales se dividen en dos grandes grupos: los que creen
ciegamente en todos los productos que propagan sus milagrosos efectos,
y los que desconfían de todos.
En julio de 2007 entró en vigor el Reglamento CE/1924/2006 de la
Comisión Europea, para poner orden en las alegaciones nutricionales y
de propiedades saludables que las empresas alimentarias utilizaban en el
etiquetado y en la publicidad de sus productos. La norma era necesaria,
precisamente para que los productos que realmente aportan beneficios
de salud sean reconocidos como tales y no metidos en el mismo saco que
los productos milagro sin ningún tipo de base científica.
Pero ¿qué es en realidad un alimento funcional? Según consenso eu-
ropeo, un alimento puede considerarse funcional si ha demostrado satis-
factoriamente que afecta de manera beneficiosa a una o más de una de las
funciones del organismo, más allá de sus efectos nutricionales, de manera
que es relevante tanto para mejorar el estado de salud y bienestar como
para reducir algunos de los factores de riesgo de enfermedades.
XI
De hecho, los alimentos funcionales hace tiempo que se estudian. El
país pionero en su introducción fue Japón, cuando en la década de 1980
se hizo necesario garantizar una mejor calidad de vida de las personas de
edad avanzada, a la vista de los elevados gastos sanitarios originados por
el aumento de la longevidad de la población.
Así pues, estamos frente a una forma de alimentación con sólidas bases
científicas y una complejidad que dista mucho del, por ejemplo, «con
vitaminas A, B, C, D y hierro» presente en muchos de los paquetes que
compramos a diario.
Por ese motivo, la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria ha
querido contribuir al conocimiento de la alimentación funcional (la ver-
dadera alimentación funcional) con la elaboración de esta guía. En ella se
repasan los motivos que han llevado a las empresas a apostar por este tipo
de productos, ya que los índices de prevalencia de las llamadas «enferme-
dades crónicas no transmisibles» van en aumento y la calidad de vida de
las personas, a causa del estrés y la poca actividad física, va en descenso.
Asimismo se repasan todos los tipos de alimentos funcionales y sus efectos
sobre el organismo. La guía finaliza con la reglamentación que rige este
tipo de productos.
Una buena alimentación es básica para no contraer enfermedades y
alcanzar edades avanzadas con buena salud. Los alimentos funcionales no
deben sustituir a los alimentos naturales, pero sí, en una dieta equilibrada,
contribuyen a mejorar la salud de quien los toma, al reforzar una o más
funciones del organismo.
Queremos que este trabajo ayude a sus lectores a conocer a fondo la
razón de ser de los alimentos funcionales, desde el contexto de la realidad
que vivimos, sus efectos sobre el organismo y lo que es legal o no en su
comunicación. Sólo con información se pueden extraer conclusiones. ¡Y
así lo esperamos!

XII

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