ENSAYO

ESTUDIANTES:

ANGIECAROLINA MEZA CATALÁN

MARÍA ISABEL MEDRANO ESCAMILLA

DOCENTE:

ALVARO ALVAREZ SAMPAYO

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS

UNIVERSIDAD DE CARTAGENA

ADMINISTRACIÓN INDUSTRIAL

FINANZAS A CORTO PLAZO

13 DE OCTUBRE DE 2020
 ENSAYO: El entorno empresarial y el desarrollo de las organizaciones

La empresa desarrolla sus actividades en un entorno, que se compone de una serie de fuerzas que
tienen incidencia sobre la actividad empresarial. Un entorno que es dinámico, complejo y
competitivo. Por esto, la empresa debe ser capaz de conocer ese entorno, adaptarse a las
necesidades, prever los cambios con anticipación, evaluar el impacto de esos cambios en su
actividad y prepararse para cuando se produzcan.

En muchos casos, el entorno resulta un tema complejo de estudiar. Por tal motivo y para facilitar
su análisis, la recomendación general es abordarlo dividiéndolo en dos tipos: el entorno general o
macroentorno y el entorno específico o microentorno. El entorno general o macroentorno lo
conforman componentes no tan directamente vinculados a la empresa y que son difíciles de
controlar; pero que sin embargo podrían afectar a la organización; la conforman lo económico,
tecnológico, político-legal, demográfico, sociocultural y medioambiental. El entorno específico
son aquellos que se encuentran estrechamente relacionados con la empresa y por tanto tienen una
influencia muy directa; la conforman: proveedores, clientes, competidores, entidades financieras,
administraciones públicas, mercado laboral y la comunidad.

Es posible hacer una análisis del entorno mediante cuatro importantes procesos, según Dess y
Lumkin (2003), los cuales son: explorar el entorno, es importante que la empresa haga una
análisis de todo que le esté sucediendo a su alrededor, tanto en el macroentorno como en el
microentorno para que los cambios no los sorprendan y reaccionen cuando sea debido de una
forma proactiva, más no reactiva. El segundo proceso es, vigilar el entorno, el análisis constante
del entorno nos lleva a que podamos darnos cuenta de las nuevas tendencias que se estén dando y
más en la actualidad cuando tanto la tecnología como los gustos de las personas van cambiando;
por lo cual no es sólo explorar el entorno, sino mantener una constante vigilancia en el mismo. El
tercer proceso es, la inteligencia competitiva, que conlleva a identificar tanto las fortalezas
como las debilidades de nuestros competidores y de nosotros mismos como empresa frente a los
demás. Y por último, pronosticar el entorno, ya después de obtenida toda la información es
importante sacar provecho de la misma y tomar decisiones a partir de ésta, por lo que esto nos
permitirá poder reaccionar de forma eficaz ante los cambios que el entorno nos presenta. Analizar
el entorno en que se encuera la empresa es importante para su desarrollo, porque brinda ventajas
como, mejorar la gestión de la empresa, permite minimizar los riesgos externos, tomar
previsiones, para entender el presente y hacer proyecciones. También nos brinda información
importante para tomar decisiones.

El entorno puede componerse de factores que inciden en la estrategia de las empresas, y que,
generalmente, éstas tienen poca capacidad de predecir. Así mismo, las organizaciones no tienen
el control directo sobre los elementos y los segmentos del entorno, por lo que su éxito dependerá
de que recaben la información necesaria y que anticipen sus efectos, con el fin de que seleccionen
la estrategia que pueda llevarlas por un rumbo adecuado. Es por esto, que establecer un proceso
de análisis del entorno es fundamental para desarrollar estrategias empresariales efectivas,
también, para detectar amenazas y oportunidades que el entorno cambiante provocará en la
empresa, con el objetivo principal de sacar partido de las oportunidades y minimizar el impacto
de las amenazas o, en el mejor de los casos, poder transformar esas amenazas en oportunidades.

Los cambios del entorno, sus formas y los efectos que éste tiene representan un reto para las
empresas. Es necesario que éstas tengan una respuesta hacia ellos para conseguir que la empresa
controle al entorno y no sea el entorno quien controla a la empresa.
Las empresas de hoy día enfrentan a entornos muy diversos, complejos y globales, por lo que sin duda,
de manera constante deben de estar vigilando y examinando sus entornos, anticipando de alguna
manera sus efectos, así como analizando a sus competidores y generando estrategias que les permitan
tener una ventaja competitiva sobre otras organizaciones. Sin duda, las empresas no pueden controlar
todos los factores que están a su alrededor, los cuales pueden influir en sus resultados; ejemplo de ello
son: competidores, clientes, proveedores, intermediarios, banca, gobierno, tecnología, economía,
legislación, cultura, entre otros. Es claro que los entornos pueden tener efectos directos e indirectos en
la administración global de la empresa; de igual forma, pueden consolidar en ella empresa
oportunidades de negocio, pero también pueden provocar efectos contrarios que provoquen
consecuencias colaterales a las empresas. Por lo anterior es necesario tomar en cuenta la naturaleza de
las condiciones y factores del entorno que rodean a las organizaciones.