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1. Identifica los temas principales: En tus notas, resume la experiencia, lectura o lección
en 1 a 3 oraciones.
2. Anota el material que destaque en tu mente: Determina por qué ese material destaca
y escribe otra nota sobre lo que descubras.
3. Haz un gráfico de las cosas: Puede serte útil hacer un gráfico o tabla para llevar un
registro de tus ideas.
En la primera columna, haz la lista de los puntos principales o experiencias clave. Estos
puntos pueden incluir lo que el autor o conferencista haya considerado importante además
de cualquier detalle específico que hayas considerado importante. Divide cada punto en una
fila por separado.
4. Hazte preguntas para guiar tu respuesta: Si te cuesta medir tus propios sentimientos
o precisar tu propia respuesta, puedes hacerte preguntas sobre la experiencia o lectura
y cómo se relaciona contigo. Algunas preguntas modelo pueden ser las siguiente:
¿La lectura, clase o experiencia te desafían a nivel social, cultural, emocional o teológico? De
ser así, ¿dónde y cómo? ¿Por qué te molesta o llama tu atención?
¿La lectura, clase o experiencia ha cambiado tu manera de pensar? ¿Entró en conflicto con
las creencias que previamente tenías? ¿Qué pruebas te brindó para que cambiara tu manera
de pensar sobre el tema?
¿La lectura, clase o experiencia te deja con alguna pregunta? ¿Te habías hecho esas
preguntas antes o te surgieron después de terminarla?
¿En qué manera los puntos o ideas mencionados en la lectura, clase o experiencia encajan
con tus experiencias o lecturas pasadas? ¿Las ideas se contradicen o se apoyan entre sí?
1. Procura que sea breve: Un informe de reflexión suele tener entre 300 y 700 palabras
de extensión.
Si tu profesor solicita una extensión mayor a este rango, acata sus instrucciones.
3. Desarrolla una propuesta de tesis: Al final de tu introducción, debes incluir una sola
oración que explique rápidamente la transición de tus expectativas a tu conclusión
final.
4. Explica tus conclusiones en el cuerpo: Los párrafos del cuerpo deben explicar las
conclusiones o las interpretaciones a las que llegaste al final de la lectura, lección o
experiencia.
Tus conclusiones deben estar explicadas. Debes brindar detalles de cómo llegaste a esas
conclusiones valiéndote de detalles lógicos y concretos.
El enfoque del ensayo no es hacer un resumen del texto, pero aun así debes extraer
detalles concretos del texto o experiencia para brindar el contexto para tus conclusiones.
Escribe un párrafo por separado para cada conclusión o idea que desarrolles.
Cada párrafo debe tener su propia oración temática. La oración temática debe identificar
claramente los puntos principales, conclusiones o interpretaciones.
Si no te sientes cómodo dando detalles personales que afectan las conclusiones a las
que has llegado, lo más prudente será no incluir esos detalles tuyos.
Evita denigrar a alguien en tu informe. Si cierta persona hizo que la experiencia de la cual
haces la reflexión haya sido difícil, desagradable o incómoda, aun así, debes mantener tu
distancia mientras describes la influencia de esa persona. En vez de escribir “Carlos fue un
cretino maleducado”, opta más bien por “Un hombre fue cortante y habló con rudeza, lo cual
no me hizo sentir bienvenido”. Describe las acciones, no la persona, y enmarca dichas
acciones dentro del contexto de cómo influyeron tus conclusiones.
Procura que tus oraciones estén enfocadas. Evita insertar muchas ideas en una sola
oración.
Evita dejar fragmentos de oración. Asegúrate de que cada oración tenga un sujeto y un
verbo.
Varía la extensión de tus oraciones. Incluye tanto oraciones simples con un solo sujeto y
verbo como oraciones complejas con varias cláusulas. Así, tu ensayo parecerá más
conversacional y natural, y evitará que tu redacción se vuelva demasiado rígida.
Algunas frases transicionales habituales son “por ejemplo”, “por consiguiente”, “otros
piensan que”, “otra perspectiva argumenta que”.
Por ejemplo, si tienes que hacer una reflexión sobre un artículo de crítica literaria, puedes
mencionar la manera en que tus creencias e ideas sobre la teoría literaria tratada en el
artículo se relacionan con lo que tu profesor te enseñó sobre la misma y cómo se aplica a la
prosa y la poesía leída en clase.
Otro ejemplo: si tienes que hacer una reflexión sobre una nueva experiencia social para
una clase de sociología, puedes relacionar esa experiencia con ideas específicas o patrones
sociales tratados en clase.
REFLEXIONES SOBRE LA ENSEÑANZA Y APRENDIZAJE DE LAS MATEMÁTICAS
Las matemáticas, tanto histórica como socialmente, forman parte de nuestra cultura y los
individuos deben ser capaces de apreciarlas y comprenderlas. Es evidente, que en nuestra
sociedad, dentro de los distintos ámbitos profesionales, es preciso un mayor dominio de
ideas y destrezas matemáticas que las que se manejaban hace tan sólo unos años. La toma
de decisiones requiere comprender, modificar y producir mensajes de todo tipo; en la
información que se maneja cada vez aparecen con más frecuencia tablas, gráficos y
fórmulas que demandan conocimientos matemáticos para su correcta interpretación. Por ello,
los ciudadanos deben estar preparados para adaptarse con eficacia a los continuos cambios
que se generan.
Presentan unas características que se deben destacar para comprenderlas y saber cómo
aplicarlas.
Las matemáticas son universales: Los resultados que se obtienen son aceptados por toda
la comunidad internacional, lo que no quiere decir que los métodos que se han utilizado
históricamente sean iguales: lo que sí son universales son las actividades, muchas
entroncadas con la cultura de los pueblos, que han impulsado el conocimiento matemático.
De esta manera hablamos de: contar, localizar, medir, explicar, jugar, entre otros.
La Matemática es una ciencia viva. Su conocimiento no está fosilizado, además de una
herencia recibida es una ciencia que hay que construir. Un reto interesante es el
contextualizar adecuadamente los nuevos contenidos que se presentan.
Las matemáticas son útiles. Miremos donde miremos, las matemáticas están ahí, las
veamos o no. Se utilizan en la ciencia, en la tecnología, la comunicación, la economía y
tantos otros campos. Son útiles porque nos sirven para reconocer, interpretar y resolver los
problemas que aparecen en la vida cotidiana. Además de proporcionarnos un poderoso
lenguaje con el que podemos comunicarnos con precisión. Dentro de estas utilidades es
necesario resaltar su importancia en relación con los medios de comunicación en los que los
análisis cuantitativos (datos estadísticos, precios, índices diversos, hipotecas, entre otros)
aparecen continuamente en todo tipo de información.
Las matemáticas son una ciencia de patrones y relaciones. Entender y utilizar esos
patrones constituye una gran parte de la habilidad o competencia matemática. A medida que
se relacionen ideas matemáticas con experiencias cotidianas y situaciones del mundo real,
nos daremos cuenta que esas ideas son verdaderamente útiles y poderosas.
Las Matemáticas es una de las asignaturas formativas por excelencia, de modo que no
debemos desperdiciar ninguna ocasión para ayudar a los alumnos a que de manera activa se
adentren en ellas para que obtengan todo el provecho posible. Las matemáticas tienen varias
líneas de conocimiento y en cada una de ellas hay que conocer lo anterior para así poder
acceder a nuevos conceptos.
Es obvio que el papel del maestro es fundamental ya que será el único que sabe en qué
momento los alumnos manejan adecuadamente los conocimientos que les permitirán
acceder a nuevas actividades.
• Aprender a hacer, a fin de adquirir no sólo una calificación profesional sino, más
generalmente, una competencia que capacite al individuo para hacer frente a gran número
de situaciones y a trabajar en equipo.
En esa concepción deben buscar inspiración y orientación las reformas educativas, tanto
en la elaboración de los programas como en la definición de las nuevas políticas
pedagógicas.”
Educar para SER incluye aprender a querer, a sentir, expresar sentimientos y controlar
emociones, comprender la vida, definir creencias y valores, encontrar motivaciones, aprender
a pensar, moldear actitudes y comportamientos.
Creo que el concepto de SER parte de los sentimientos, del afecto, de cómo se siente
cada uno consigo mismo, de quién lo quiere y a quién quiere, qué implica querer, dar y recibir
afecto, sentir interés por los otros, compartir alegrías y dolores, éxitos y fracasos, caminar en
los zapatos de los demás, ser solidario. También tiene que ver con la forma como cada quien
interpreta lo que le pasa, comprende el universo, el hombre, la vida y la felicidad, entiende
que el ser humano es el único capaz de planear y construir su futuro.
Esto hace que cada persona consciente o inconscientemente defina unas creencias, una
actitud ante la existencia, encuentre el sentido de su vida, su misión como ser humano, para
qué vale la pena vivir y construya sueños e ideales acordes con sus circunstancias, intereses
y potencialidades.
En este proceso de llegar a SER cada persona va definiendo a qué le da valor, qué es
importante para ella, para su familia y para la sociedad. Y va comprendiendo cuáles son sus
derechos y deberes así como su papel en la comunidad.
Un elemento clave en el desarrollo de las personas es encontrar qué las motiva, por qué
hacen lo qué hacen. Hay quienes actúan para acumular bienes, creyendo que la felicidad
está en tener más. Sin embargo, uno ve que las personas que han hecho aportes
extraordinarios a la humanidad han tenido grandes ideales, sueños de aportar al bienestar de
los demás, fuentes de motivación superior que las mueven a alcanzar sus resultados.
Esto implica aprender a pensar: analizar, reflexionar y cuestionar cada faceta de la vida
evaluando, juzgando y decidiendo qué hacer y cómo comportarse, teniendo el criterio para
definir qué es lo correcto y cómo hacerlo bien hecho.
Todos estos elementos hacen parte de la filosofía de vida que cada persona debe definir
y que la conducen a tener actitudes ante los demás y ante la vida y a comportarse
adecuadamente para construir un proyecto de vida que le permita alcanzar sus metas de
desarrollo en cada una de sus áreas de interés.
El gusto de vivir, la pasión, el entusiasmo, la alegría son consecuencia de tener claro todo
lo anterior, para poder pensar, hablar y actuar coherentemente.
Si hablamos entonces de educar para SER estamos diciendo que el niño, el joven o el
adulto tienen que aprender todo lo anterior. Y esto sólo se aprende viviéndolo,
experimentándolo a través del ejemplo de otros y de la cultura, el ambiente y la convivencia
con otros que tienen una filosofía, unas actitudes y comportamientos que conducen a formar
el ser humano estructurado e integral que cada uno puede llegar a ser.
Esto implica comprender el colegio como una etapa de la vida y no solamente como una
preparación para la vida. Aprender a vivir viviendo, encontrar las fuentes de motivación
acordes con las necesidades e intereses de cada etapa de desarrollo.
En segundo lugar está educar para HACER, esto es adquirir conocimientos, desarrollar
competencias, habilidades, destrezas, hábitos para ver el esfuerzo y el trabajo como el
camino para aprender, crecer y realizarse, satisfaciendo sus necesidades y generando valor.
Por último educar para TRASCENDER, para que cada persona pueda alcanzar sus
ideales y vivir plenamente, dejar una huella y contribuir al mejoramiento de la sociedad.
Ayudarse entre compañeros es utilizar todo lo aprendido en este tiempo para ayudar a
mis compañeros que por ahí no entienden muy bien un problema, una clase, o porque no
hubo tiempo de captar muy bien lo que explicó el profesor o la profesora. Es decir, cuando
veo que uno no consigue, trato de acercarme y, así, de a poco, van tomando confianza y
puedo ayudar a facilitar la comprensión, muchas veces solo falta una nueva explicación para
entender una clase
Este trabajo intenta ser una aportación más para que el aprendizaje de las matemáticas
sea un proceso activo en la enseñanza actual.
La evaluación de los aprendizajes se vuelve un aspecto crítico del proceso educativo. Las
pruebas de opción múltiple o los cuestionarios tradicionales muchas veces no logran recoger
la información que docentes y alumnos necesitan sobre el logro de los aprendizajes. Es por
eso que se recomienda a utilizar estrategias didácticas para que los alumnos vean la
matemática de una forma diferente y divertida.