Este método surge en Estados Unidos alrededor de los años 40, con la 2ª Guerra Mundial.

También fue llamado "Army Method". Se basa en la ideología conductista. Aconseja que los
estudiantes usen un lenguaje directo, sin necesidad de utilizar la lengua materna para explicar
nuevas palabras o la gramática de la lengua extranjera.

Está basado en el conductismo, una teoría que ve a los estudiantes como receptores
pasivos de información cuyo comportamiento se moldea mediante refuerzo positivo o
negativo.

Este sistema promueve un aprendizaje natural a base de oír y repetir. Aunque el método tiene
como eje central la gramática, no la contextualiza ni la explica. En este método, el docente se
limita a hablar el idioma y los alumnos lo aprenden a base de escucharlo y repetirlo hasta
interiorizarlo como si se tratase de su propio idioma.