..-- ~ . . . . . ..

1 . . . -. . . . . . . -..... ............. .
Los r-egadí·o·s en el C.ampo de Dalías .
En 1824 se dio la primera autorización para la apertura del cauce de riego en Dalías, Roquetas, Félix y
Vícar *
Un proyecto para los sobrantes del río Benínar fue planteado en 1863 pero nunca fue reali-
zado por dificultades técnicas y financieras
"La construcción del pan-
tano de Benfuar abre nue-
vas expectativas a una par-
te sustancial de nuestra pro-
vincia. Estas nuevas posibi-
lidades f u .e r .o n ya adverti-
das en el siglo pasado, du-
.rante el cuaJ se sucedieron
todo tipo de iniciativaS pa-
ra hacerlas poSibles. Destaca
entre tanto esfuerzo la figu-
ra de José Maria Madolell,
emprendedor y activo empre-
sario, natural de Chercos, no
demasiado conocido dentro de
nuestra historia más cercana.
Sirvan estas lineas, junto a
· las de la próxima semana,
para recoroar eu empeño y re-
conocer su trabajo que, ei ha-
ce ciento sesenta años fue
imposible, hoy marcha a cum-
plir su objetivo".
UNA FIGURA DEScO-
NOCIDA
José María Ma<:Iolell fue auto-
rizado por R. o. de 21 de mayo y
2 de agosto de 1824 para la aper-
tura de un cauce que diera rieg()
a 10$ Campos de DaJias, Roque-
tas, Félix y Vicar, aprovechando
para ello las aguas del rio Be-
ntnar, Dieron principio las obra5
de la empresa en octubre de 1833;
Para febrero de 1834 se habían
abierto 10.625. varas (casi 9 ' ki- MULLOR
lómetros), de las que casi 400 m. El pantano ·de Benínar es la culminación de las ilusiones de todó un siglo .
eran minas en, lomas .y piedra
viva.
En abril se construyeron 334 eil. el camino de Dalias <también proyecto. Para noviembre se sus- geniero de Caminos Juan Rabi-
m. de acequia madre en· tierra y en Berja). Para junio se habían pendieron los trabajos por el có- na, trámite imprescindible para
piedra, 162 en las minas del ce- construido 1.720 m. y 13 pozos y lera, aJ contraer dicha enferme- .su aprobación.
rro de Peñarodada <Berja), 543 continuaban las o b ras a buen .dad el señor Madolell, pero "per- 'Pero las dificultades, sobre to-
m. en otros Jugares y 135 m. de ritmo. fecciona<la la obra de la acequia do financieras, aumentaban. Tras
acequia de mamposteria en el Sin embargo, las dificultades madre, estaba corriendo el agua" la muerte de Madolell, Juan E$-
".casi inacc~ble!' Tajo Colorado."'' . .empezaron a - hacer,. mella ,e,n el,-:, desde . la presa construida en el q¡q!lnte, que era ,¡vepino qe ,Ter-
ríó a un espacio de casi tres ki- que pero residía en ,1\]mería, pre-
. lómetros y medio en un trozo to- tendió autorización - para iniciar
do de mampostería. los estudios del trasvase, esta 'vez
Aunque el empresario manifes- a su nombre . . Se le concedieron
' !· taba con fecha de 30 de enero de los sobrantes .del río, pero según
1835 su propósito de continuar las sus cálculos éstos no eran .sufi-
obras una. vez superados sus pa- cientes1 por lo que solicitó los del
decimientos, parece ser que no río Cáaiar, en Granada, tambil'n
pudieron continuarse las obras. autorizados por el gobernador ·de
La inestable situación del pais esta provincia.
que atravesaba la guerra carlista Las obras no pasaron de purÓ
junto a los impuestos y tasas ex- proyecto, pues las d 1 f i e ultades
traordinarias que eran necesa-
VIENE. DE LA PAGINA ANTERIOR ' /,;· . De ' ~~a manera para 1869, ia rias para sobrellevarla y que técnica.s desbordaban la capaci-
dad financiera y el interés eco-
• • • • , " • • •
1
: GQmuru¡ia'd .de, Regantes y Pro-
• arruinaban las haciendas locaJes nómico de unas obras que tenían
duicación de} .cauoe de la antigu~ .. pi·eFarios c(e Vicar y Roquetas se y particulares, impidieron la.S ne- mucho de voluntari&mo.
á.eeq·Ui!L <k riego ~n la .Vega d~: ., reur;t~Q. pa,ra inte~.t~r organizar el cesartas a,yudas para continuar
las obras.
· D84ías. As,i, 'el;l 1841,. par!\ la re':' . · ~J;?roy.~!:!hallliento de aguas de los El proyecto .no se había aban- · EL RmGO DEL CAMPO
camposjción de cua~¡:o Iargoo\i tr!> ...,,. 1• :cti~o:; ,. su~rflciaJes . .:(l:n 1871 ~ . donado. Para 1845 se publicó en
~ de a.cegui~· que también afeo~ :~·.· q~p rtl~ cur1oso ejemplo~ al obser . Madrid como prospecto informa- La.s partes más accesibles del
, ·,tat\ol:). ·aL Camtx>i :~¡¡· g·a s't a; r :o,J:i, ;. 'i~~r:S,e ~ui! .,varl<;J6,.. ~a.~ra.ll,<]OS a. CJl!- . tivo de la dirección de la socie- _Campo eran regadas (con mucha
1 ~14.520. ·re8.1es e!ll1tia!Jid !fiuy ''cq'n·~ ·.:. ·,:~o · paso,.~ e. hab1ap r~?. alizado opra, dad formada, a cargo de Ramón dificultad, eso sí) con los exce-
.· t·· . bi :. ' · 1 '·é·~ · '"" . J.8SR'1: ,,,: Q,e fá·J;lvi~a ,a :bandppaban.sij anti .. de la Sagra, una memoria sobre dentes de la Fuente de Dalias, en
s ~er!IJ . e p~ra ~ · ~e~• .~l} · ·. ~ ~ g~g cr;u;ib.~ , ~bflé.naó .o tro nJ.lev y un sistema ro t a tivo de origen
se Jx>nstru•.a UnJ'I.ltlo~qma pa~:a re,, li a:~ra~e¡S~n~o ·en ' a¡~unos sltioo0 la elvolvían "Canal de DaJias ". En él se
1 }. •

a recoger los ventajosos musulmán, recientemente estu-

gar el campo por v¡¡.~or. ~e .50,..000 , ,. .:nueva ., e'!!!'i' reteta.· que se . estaba
1 beneficios que ocasionaría una diado. Tal era 'el caso de las ca-
reales, contando SÓ~O ..OOn )!)S J:l,la• ~. cblilst uyeÍldó.' ': ; . · ' . , inver,sión ·en estas obras. · ñadas de Onáyar y del Puerco.
yores hacendacto.s. · l!:s~ latitun;.; '1 . • I: ·. · .; · · Pero la escasez · e irregularidad.
dios tenían , én ·parte su . or.ige'n·: .: ·. '· ·· · SE OONTINUAN LAS OBRAS del e a u d a 1 ocasionaba las fre-
en la reinversión agt'!cola' 1:d~ l~ : .' /: · ,:NUEVA~ IESPl<:R.,\NzAS . cuentes protestas de los propieta-
capitales mmeroo, siendo en ' Jn?-".· 1
'!\ ,. . . ·. ' · ¡ 1 Habremos de esperar bastante .rios de aquella zona.
• •' • •.': , :'. • • • ••
tiempo para que nuevamente se Los corrientes abusos en su uti-
portante p ~o p p reJón cte· orig¡:j:¡t Es't "' f · ' tJ. • i ..d lización habían privado normal-
virgitano. Un año despuéS 's,e con-.· '· ..... ,· · ,q~ · ra~oo np ' JIC eron . e- decidan practicar estai; grandes
mente de un aprovisionamiento
'r. sistir r,!li 1~ a g r l•cu'llioree pero obras hidráulicas en el regadío
tribuía con 24.5QO en o~ro · pro¡ ! q?}ig~~P. . a r~plan~ar , la situa- de las apenas cultivadas tierras minimo a la.s zonas del · Cam•
yect?, ~ parecer distirito, .lo· <¡1\J<~ . . cion . .. . del Campo de Dalias. po. A este estado de cosas ha-
1;100 mdiCa el interés en wnl'!r en · l· . • • ., " • ; . .Juan Justo Escalante, apode-
•
bían pretendido poner ~reno las
ordenanzas de ríegoo del término
cultivos productivos el" ~; ampo Y,;·,:.. ·' C1,1arid~ ~~ 1878, J~é G,apzález rado del señor Madolell, adqui- de Dalias, redactadas en 1836.
. las fuer~es in ve.r s.i one,¡¡ qjle lo : .ce¡¡ezuel'a, ve.cino .de )3erja, due- rió por R. o. de 15. de enero de
Por otra parte, .en esta zona ·del
1863 permiso para practicar en
acompanaron. . · . . :' . · :ño ;de.:J.a CQnqesjórL para el ruum- el término de un año los estudios .la Campo no existía más fuente que
. . · · . ,.. · · b~al;lliento de·· aguas "San Emt~ de un canal que utilizara nueva- del Reveque, de riego muy pro•
OTRAS OBRAS ;MENPRES : )i.o~·. ~o~igue éncpn~r¡1!.1' e~ ·: pre- mente los sObrantes del río Ben.i- blemático por Jo menguado de su
,, , · ·. c1ado líquido en. abunqancia en nar; el viejo proyecto que vere- caudal.
Las esperanzas, y ai parecer
Tr86 infructuosos e5fl!erzoo · y· :. J.a"S~erra cte ' Oá:dor . en :su inten- mos tantas veces repetirse. El 13
también · las posibilidades cam-
nuevos pr0yectoo, esta vez .desde .·. GióJ?. .de . enca'l\z.a:rlos ¡¡ti . Campo, . de agosto de 1864' ve aumentado
el plazo con la prórrQga de ocho biaron cuando se ~probó la mo-
. Madrid (A. Bonffant; y F. Casti- e~ta abnendd 1,.1na.S nJtevas ,posí- meses concedida. A este proyec-
llo M. Baxerá.s) . el medio . más ..bilídades, cuyo ' éxito se alcanza- to acompaña un informe del in- PASA A LA P I\Gif.U\ W; !P H-!TE
común de promo~ionar los 're~a.. ' ra.'''con. l~ p u ·e.s ti a .en funcio~a;.
diOS en·: la zona fue la constrUC~ .: m,IentQ . de' :f1Uehtenueva a princi•
1

ción de represas; del que encon~ · : 1 Pi<>s de si_glo, pqsipilit!!.lido ampliar

tramos un ejemplo cl,estacable en ·. · ·el :reg¡WIO a IJ1,Uchas otras. zonas
el Cortijo d~ loo A t a·'juelo5 <El .: cl,el . Caf;Opo,~ ~ . con ello · la· 1'íqueza
Ejido) con un .sistema ·cte.·.reco- ... ·. a mu~ti,~s. ~·amiU~· ..'
girniento de a~as que ·.turvo· que . . , . . · . . . " · .
ser completado más tal.'de co~ la · . ~'< C!.(RA.· ~~RitiONU ··· EVO ·
construcción de u;na a ·c .e q.wa y · ~
acueducto, pues l!'IS escas.as . llu- . (;r~titi.ttó d~ ,. '11:5-tudlo.<; ' Pllme-
vias apenas lo hadan . vi~ble. . · ' riens~) ,. ·
. '·
.,, '
':·•·'

Ideal, 5-IV-1984 p. 19
y 20 '
Benínar, un proyecto de 1863 para riego que no se ha llevado a cabo
 Propuesta
Obras públicas en la Almerfa del siglo XIX (1 1)
Los rega
Los primeros intentos de construir una presa surgieron en 1820, pero fracasaron
de N ijar obtuvo real licencia para construir un pantano en 1835
obra destacada, el pantano de Isabel 11, con capacidad de 26,5 millones de metros cúbicos
de coherencia política, de repoblación y el emplazamiento, frustró el intento
El siglo XIX es una época de
aislamiento y dependencia para
Almeria. Dusiones y proyectos y
una falta de perspectivas para
nuestro desarrollo contrastaron
siempre con las amplias posibili-
dades que nuestra tierra y sub-
suelo guardaban. Casi todos los
trabajos que entonces se realiza-
ron guardan hoy el suefio de la
inutilidad, de lo realizado con
mucho trabajo como tan poca
rentabilidad. Por eso Almeria es
rica en Arqueología, en arqueolo-
gía industrial, y en posibilidades
de desarrollo.
En el Campo de Nijar se ma-
lograban, como en el de Dalias,
casi · todos los a.tios las cosechas.
IL& sequía de enero a marzo,
,acompañada de la estival, ·difi-
cultaban los cultivos en unas tie-
rras que como las llamadas "del
Rondón", famosos en la época,
poc:Uan producir a veces "cienro
por uno". El propósito general
de poder regar estas tierras sólo
había producido la construcción
de boqueras, etc., en los cauces
principales como en el llamado
rfo de las Lanchas y en la ram-
bla del Arteal o que se constru-
yeran muros para recoger las
aguas de las cerradas de los Tris-
tanes y de Inox. Obras siempre
muy reducidas por los avatares
polftfcos. ·
El reglamento de aguas de las
fuentes de Nijar y Huebra data-
ba del atío 1735, pero dichas fuen-
tes, junto a otras pocas más, eran
claramente insuficientes para re-
gar las extensas ttonas del campo
y satisfacer las grandísimas ne-
cesidades que demandaban losd
hacendados. ,,.
PRIMEROS INTENTOS
En 1820 se formó una compli.-
tíia de propietarios que tomaron
a su cargo la coristrucción de una.
empresa lo suficientemente ren-
table como para asegurar el riego
a sus propiedades. Pero como se
entenderá fácilmente, la época.
no era propicia para este tipo de
actividades.
Todo quedó paralizado hasta
1831 en el que la villa de Nijar
obtuvo ·real licencia para cons-
truir un pantano en Los Trtsta-
nes. La guerra civil paralizó, tam-
bién aqui, las obras.
Pasada esta, en 1842 el AYUnta-
miento y Diego Maria Madolell,
representante de la sociedad de
accionistas creada para la cons-
trucción de un pantano en la
Sierra de los Trlstanes con el fin
de facilitar el riego a casi sete-
cientos mil metros cuadrados, em-
pezaron las obras. Ya antes, en
1823 y 1831, Madolell habla inten-
tado tramitar ayudas y reunir los
esfuel'ZOI!I necesarios, una vez con-
seguido el permiso, pero entonces
otras actividades ocupaban todo
BU trabajo.
EL PANTANO DE ISABEL R
l"ue el 24 de agosto de 1842,
CIUando el Ayuntamiento de Nljar
cedió sus derechos sobre la cons-
trucción del pantano a una com-
patíía de dos mll accionistas que
tenia previsto concluirlo en cua-
tro atíos. Sus aguas ten!an en
proyecto regar más de cien mil
fanegas de tierra, como se ve la
mayoría del Campo de Nijar. · ,Y
Para 1849 la obra se hallaba
casi concluida, después de innu-
merables dificultades. Esta gran-
diosa obra, a decir de la época, .
formaba un embalse de mil dos-
cientos metros de longitud, mas
de novecientos de anchura y
treinta y tres de profundidad, y
Cubeta del embalse, presa y garita del vigilante, en el embalse de <d$abel lh>, en Níjar
,
lOS del Cam
En 1849 quedaba terminada una
Presa del Pantano de Isabel 11, en Níjar
podfa contener, según los cálculos
de los constructores, veintisiete
millones y medio de metros cúbi-
cos de agu!).. Sus muros tenían
más de treinta y tres metros de
longitud y casi diecisiete de gro-
sor. Además de las aguas que
confluían en lo que fue cortijo de
Vivandama, se llevaban a efecto
en los primeros años cincuenta
varias obras de enc!),uzamiento
en la cabecera.
Completadas las obras de las
canalizaciones de agua y depen-
dencias para los responsables de
su vigilancia y aprovechamiento,
en junio de 1857 Benito Pulido,
junto a otros representantes de
la empresa, publicaron una me-
moria de las obras realizadas.
DIFICULTADES INSAL•
VABLES
La sociedad creada para el re-
gadío del campo, era consciente
de la erosión del terreno, y que
éste era uno de los principales
problemas a solucionar para lle-
var a .buen término la empresa.
Se intentó una tlmida repobla-
ción forestli.l en los cerros llml-
trofes, pero este esfuerzo fue m-
sUficiente.
Atíos de sequia, lluvias torren-
ciales y la lejanía de la sede
central de la empresa, radicada.
en Madrid, ocasionaron la poca.
rentabilidad de tanto esfuerzo.
Los accionistas, preocupados, pre-
tendian beneficiar lo más pronto
posible sus inversiones. Los agri-
cultores, escépticos, protestaban
por el precio del agua y el modo
de distribuirla.
de Panoran1a
de
,.IJar
En 1831 la villa *
*
La falta *
das oficiales para impedir tal de-
rroche de capital e ilusiones en
proyectos fracasados. S1 en lugar
de haberse¡: yectado estas obras
en los años treinta del pasado si-
glo lo hubieran sido en los sesen-
ta o setenta, quizá no se hubie-
ran autorizado. Lo cierto es que
poco o nada contribuyeron al tan
deseado desarrollo agrícola alme-
riense.
De Madolell conocemos otro
proyecto de embalse realizádo en
1856 para Urrácal. No sabemos si
llegó a efectuarse o si por el con-
trario no pa,só de los trámites
previos, lo que parece más proba-
ble habida cuenta de la falta de
noticias posteriores' sobre el miS-
mo.
Lorenzo
CAR,A. BARRIONUEVO
(Instituto de Estudios
Almerienses>
Idea.l,
12-I~J-19134,
p. 19
BAMOS
Esto motivó nuevos esfuerzos.
Para 186o se estaba construyen-
do una presa en la Rambla Hon-
da (Lucainena) para aumentar la
capacidad de embalse de la presa,
muy mermada por entonces y que
nunca se habla llenado del todo,
defraudando a los propietarios.
Los hacendados colindantes a.
esta rambla protestaban por en-
tender que dichas obras menos-
cabában sus posib1lidades de rie-
go, todo ello infructuosamente,
pues la obra había consegutdo
mucho antes la declaración oficial
de interés. Las protestas seguían.
Un año después nuevamente se
protestaba ante Juan Marfil de
Villalonga, presidente del depar~
tamento de la empresa en Ma-
drid, por el abuso del precio de Jos
riegos. La obra, que nunca fue
rentable, comenzada a ser one;-o.;.....
sa. ~
EL FINAL DE LA EM-
PRESA
Una memoria oficial de obras
públicas de finales de los atíos
sesenta, recoge que para la fe-
cha no prestaba ningún servido
debido a su mal emplazamiento,
pues las riadas habían acabado
por cegarla. Muerto Madolell,
principal promotor de la obra,
no babia ningún interés especial
en reformar un proyecto que ha-
bía demostrado sólo sus buenas
intenciones. Sin duda eso fue lo
que le sobró a este activo empre-
sario almeriense, al igual que
buenos ingenieros y proyectos es
lo que faltaban ..Los errores, estos
y otros, obligaron a tomar medí-
 Propuesta
las comunica(iones constituyeron el problema principal para
a~gilizar el comercio, la industria y- la cultura
Las obras de reforit1a del camino de Cranada fueron iniciadas en 1817 y completadas veinte años des-
pués *·
El caminQ de Fondón fu e abierto a principios del · XIX para dar salida a las , fundiciones de
minera le$ plomizos *
«La Puente» de Alhama es una de las· mejores obras neoclásicas de la provincia
«Abandonados, cruzando,
nítidamente aún, paisajes
perdidos, montuosos y olvi-
dados, muchos caminos guar-
dan una pequeña historia de
siglos. Los grandes trabajos,
el esfuerzo · de multitud de
obreros y de incontables años
fue un día despreciado por
las modernas comunicaciones.
iLas ventas, las construcciones,
·d~aparecen poco a poco. Pe-
ro quizá. al recorrerlos vea-
mos. aún alzarse majestuosa-
mente la arrogancia de un
puente o la solidez de unos
muros cargadOs de años y de
inutilidad.
Los caminos guardan una
parte importante de nues-
tra historia. Fueron a pesar
de su dificultad un primer
.intento por romper las ba-
rreras que nos condenaban
al aislamiento. Fueron vía de
penetración de hombres y cul-
turas, muchas veces iDáa an-
tiguas que la propia histo-
ria que conocemos».
. En ·oplnlón casi unánime . de
todos aquellos preocupados por
el desarrollo .almeriense en el .si-
glo pasado, fueron las dificUlta.;· sorprendente. E!!. los afios cin-
. des en las ·co:munica.ciones el pro-
blema principal para agilizar el
comercio, la industria y la cUl-
tura. ·DesconocidoS, traemo.s aquí
algunos breves comentarios so-
bre .los camirtos antiguos en la.
provincia.
CAMINO DE GRANADA
La. .llamada también Carrete-
ra GeneraJ., era un· irregular ca-
mino real que comunicaba las dos
capitales de provincia. Dé "arre-
cife'', .es · decir con obra. de · mam-
poStería, .sólo hasta .Gád9r· y Sin-
ta Fe, tras pasar por -Ii!. venta·de
La C&lderona. U:Jl poco más ade-
lante seguía el curso de la ram-
bla de Gérgal, pasando por Fuel'l-
santa y Gebera, ya en Gérgal.
Nuevamente, salvando la tortuo-
sa rambla de Alcubillas, seguía
la· ladéra móntati.ooa, para llegar
al campillo y de . alli a la venta
de Doti.a Maria, donde se dormia,
continuando camino para. comer
en CanDes.
Aunque camino mixto, · eran
mayoria los · trechos en los que
sólo se podfa viajar en ca.balle-
ria, pues las cuestas dificUltaban
el tránsito de los vehículos.
Ei hecho de ser 1~~¡ principal
wla Puanta» da llhama. abra de 1887.
Obras pútiticas en fa Almeria.del siglo XIX (UI~
v1a de comuniCación con el exte-
. rlor, abrió las poeib111dades de
su reforma. Asf, para 1817, se co-
menzaron las .obras, completadas
veinte afios después con su re-
composición. De entonces pare-
cen ser algunos de los puentes, de
pequeña luz, que fa.cUitan su re-
corrido, como el de la C&ldero:-
na o el que -atraviesa la. rambla
del Marqués, 65te tllti.rfo ya· en
Gérgal.
EstOs trabajos eran muy limi-
tados en presupuesto. TJ~.n 11m1-
tados como en la envergadura de .
las obras que ae iban superpo-
niendo sin llegar a formar un re-
corrido f·ácU y cómodo. Nueva-
mente en 1844, se libraron nuevaJS
cantidades para la reparación de
.lo6 puentes y de la calzad~~¡, que
eran de tierra apisonada y cas-
cajo de piedras. Aunque el pro-
yecto era el de asegurar las co-
municaciones dirigiéndolas al in·
terior, sin aprovechar el inesta-
ble cauce de las ramblas, para
mediad0111 de siglo (1857) sólo · se
hallaban construidos ·trece kiló-
metro.s y atln estaba. por concluir
el puente llamado del Potro, en
Huércal. Todo .1m éxito.
La. lentitud de los tr&bajos era
cuenta se llegaban a reallzar
sólo siete u ·ocho kft{lmetros por
año. · monumentales obras de ingente-
Estos trabajoa de reforma . del
antiguo camino .quedaron ·para-
lizados cuando ha.cia 1860 se em•
pezaron a construir los primeros
trozos de la carretera de . Las
Correderas que seguia un reco•
rrido tptalmente diferente ya que
llegaba a .las Angosturas . (Gala-
char) . con~ll1!-:¡ldO por el Rica-
vera!. Esta . carretera, la . actual,
atln.l!egUia en·construcción en los
años ochenta. · · · · origen pero a la. vez. abre nue- .la preocupación manifestada des-
lJlS ' VICISFr~ES
DEL vtAJE
Los viajes eran tan penosos y
lentos que debian de realizarse
en este camino . en dos jornadas,
parando en las numerosas ven-
tas para a.Imorza.r .y dormir, lle-
gando muy tarde a Almeria. ·
- El fatigoso recorrido se veia
completado con la ·host1lidad del
• paisaje, en gran parte desierto,
lo que favorecía los frecuentes
golpes de mano de .bandoleros y .
ladrones. P.A. de Alarcón recuer-
da en una .d e sus obras cómo en
su segundo viaje a Almería, atra-
vesando. desolados cerros, fue
FOTO 'DllL AVTOR
de Panora1na
a.SaJtado de noche, .a pesar de la · cinco de longitud y unos siete
confianza de viajar en caballo y
estar ya en 1861. Estos peligro-
sos percances, saldados a veces
con trágicas muertes como la
toponimia popular nos recuerda,
encontraban su contrapunto ama-
ble y alegre en los bailes y zam-
bras nocturnas, al calor de la
hoguera, en la venta de Doña
.Maria.
• cita y Fondón y más cerca ae
CAMINO DE FONDON
Este cam.lno fue abierto a. prin- _si siete metros de a.ltura sobre la
cipios del S. XIX para dar sa-
!ida a · las fundiciones de mine-
ralea plomizos . de las fábricas
reales de Presidio Y Alcora. Su
trazado demostraba que sólo se · 0 b
tuvo en cuenta su pronta ter-
mtnación, como pensaba el direc-, tos. Sólo en 1857 se empezaron a
tor de caminos vecinales; Gómez
Y Antón, en .1862. Por esto eva-
dia en su trayecto .importantes
poblaciones coino Canjáyar, Pa-
dules, Almócita y Beil'es, no lle-
gando a Laujar.
A pesar ·de estar abierto al
tránsito de carros bien cargados,
sUB pendientes rebasaban en al-
gunos lugares el 10%, estreehán..:
dose considerablemente su an-
chura en otros. · cipios del actual.
En su recorrido se construye-
ron importantes puentes, algunos
de los cuales sobresalen como
ría, casi desconocidas. As!, al atra-
vesar la. rambla del Cuchillo, en-
tre Santa Fe y Gádor e¿tistió uno,
hoy destruido, conocido como
«Puente Mocho•. Tras pasar pór
otros menores, se llega a «La
Puente• d_e Alhama, una de 1M
mejOres . ob¡;as; públicas peoelá··. ,.•: mos que sea «fenicio~ ni que lle-
sicas en la provincia.
En uno de sUB frentes, una
inseripclón no.s informa de su
vas incógnitas, sobre la anti-
gftedad del camino. La lápida
. dice·
• pales lugares de las Alpu.Jarras
SE RE(STAUR>O·ES
TA OBRA ·El, DIA
2 DE AGOSTO DEL
AlltO DE ·1807.
sObre ésta y la Puente hay un
hermoso dicho o refnmillo alha-
mefio, que dice: «El dia de San
Valentin, todos tengamos pre-
sente 1 como Diego· Martfn cayó
por los ojos de la Puente•. La
·tradición popular quiere que és-
te murió preclsS.mente al colocar
la lápida, en una construcción
que ya ex.lstia con anterioridad.
Aunque tenida por obra. cuya
monumenta1idad y proporción es
digna de ser romana, La. Puente
destaca por la sólida construc-
ción y su perfecta ingenierfa,
que atm hoy nos sorprende en
sú sencillez y permanencia. Tie-
ne aproximadamente veintiséis
metros de altura sobre la rambla·
del Serval1llo, casi cuarenta y
Cultural
metros de lUz su vano ·central.
Fue consolidada en 1912, revo-
cando algunos de sus desnudos
muros de mamposterfa. ·
OBRAS Y REFOBMAS
Más hacia el oeste, s1gul.endo
el camino, llegamos a las ruinas
del puente de Cacin entre Alm6-
éste últb:no, nos encontramos con
otro, construido en 1804 con ca-
rambla de Juan campos. ·
Desde que se construyó eete
camino, no se hizo nada por con-
servarlo, a pesar de la buena
d fá.b 1 ·1
ra e !1: ca con · a que se
construyeron pretiles y paramen-
hacer algunas pequetias. repara-
clones, continuadas de modo es-
~~-'"'· 1 ñ t
_¡,nn-.....CO en os a os sesena.
En 1868 se aprobó la amplia-
clón hasta La.ujar. · . ·
Parte de esta carretera quedó
abandonada con la construcción
de la actual, realizada principal-
mente en los afios noventa del
siglo pasado, acabándose a · prin-
Puente sobre el rfo· de Paterna
Máa arriba, fuera de esta ca-
rretera auilque forme .su prolon-
gación natural, nos .encontramos
con Paterna y su -curioso puen-
te. Curioso porque tanto su or1-
gen como su altura y dimenslo-
nes aparecen fantaseadas por el
informe de Madoz, deseoso, co-
mo tantos, de encontrar cosas
dignas de elogio y admiración en
la población descrita. No cree-
· gue a tener «cincuenta varas•
de elevación, pero sf en su anti-
guo origen, quizá relacionado con
de la conquista cristiana y muy
especialmente por los Reyes Ca-
tólleos en comunicar los princi-
entre si y con los puertos, tal
Y como se pone de relieve en la
Cédula de septiembre de 1495
dJ,rlgida al corregidor de Grana-
da.
Lorenzo
CARA BARRIONUEVO
<Instituto de Estudios
Almerienses>
Idea.l, 26-I\1-1984, p. 21