Juan Estadella

Predicciones
para el siglo XXI
Crónica del Futuro
Predicciones para el siglo XXI. Crónica del Futuro - Juan Estadella

© 2015, Juan Estadella

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Primera edición: Marzo 2015

ISBN: 978-84-15465-75-1
Depósito Legal: MA 372-2015

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Printed in Spain - Impreso en España

“…No hagáis caso de las voces que se oyen tras los matorrales,
porque la noche es larga y, en verdad, que no hay más luz que
la luz de las estrellas…”.
Jaime Balmes
 Índice

Prólogo........................................................................................................................ 9
Capítulo 1. Empieza una Nueva Era............................................................. 11
Capítulo 2. Visión panorámica del siglo XXI . .......................................... 31
Capítulo 3. Las primeras décadas del siglo . ............................................ 49
Capítulo 4. El nudo de 2018-2022 . ............................................................. 65
Capítulo 5. 2020-2030....................................................................................... 69
Capítulo 6. 2030-2040 . .................................................................................... 87
Capítulo 7. 2040-2050 . .................................................................................... 97
Capítulo 8. Las últimas décadas: 2050-2100.........................................109
Capítulo 9. Más allá del siglo XXI.................................................................125
Claves y glosario.................................................................................................129
Epílogo....................................................................................................................139

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 Prólogo

egún el diccionario, crónica es toda narración histórica en que se

S sigue el orden temporal de los acontecimientos. Pero, ¿podemos
hablar de una crónica del futuro? No parece posible, ni desde el pun-
to de vista semántico ni histórico, habida cuenta de que el futuro no
está escrito… ¿o sí?

No soy historiador. Ni tan sólo un autor aficionado a la historia.

Soy astrólogo y nada más. Sin embargo, si es sobre el futuro, la as-
trología sí tiene mucho que decir. Hubo un tiempo en que reyes y
papas escuchaban al astrólogo. Incluso hoy en día, el asesoramiento
astrológico es una realidad en el mundo de la política, de la empresa
o de las finanzas. No es nada nuevo. Hoy, la astrología está en la calle.

¿Y a quién de nosotros no le interesa nuestro destino colecti-

vo? Al fin y al cabo, nuestro destino individual está supeditado al
devenir no sólo de la nación o continente que habitamos, sino a la
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Juan Estadella

civilización que nos ha tocado vivir y de la que formamos parte,

como si de pasajeros de un barco se tratara.
Inicien este viaje junto a este libro, Predicciones para el siglo XXI:
del presente al futuro a través de la astrología.

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 Capítulo 1
Empieza una Nueva Era

E l futuro colectivo que nos aguarda podemos abordarlo, primero,

a partir de un gran marco astrohistórico que cubrirá una macro
etapa para la humanidad. Esto nos permitirá ver nuestro destino
común, a grandes trazos y a muy largo plazo. Este gran marco as-
trohistórico es un extenso período que tiene diferentes fases, que se
repiten sucesivamente como los mismos signos del zodíaco, como
las horas de un reloj eterno. Y cada una de ellas, se extiende hasta
más allá de dos mil años. Es la Era Astrológica. En el pasado siglo XX,
hemos entrado ya en la nueva Era de Acuario.

Las Eras Astrológicas

En astrología mundana, el gran marco que encuadra a toda épo-
ca y civilización es la era. En los últimos tiempos, este término se
ha vuelto familiar, debido a la popularidad de la Era de Acuario en
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Juan Estadella

la recta final del siglo XX, que ha traspasado las fronteras de la as-
trología y ha llegado a las masas. Es un curioso fenómeno social, a
menudo idealizado y desvirtuado. Este gran período que es la era
debe preceder y condicionar a todo estudio o análisis de un momen-
to histórico determinado. La era baña con su color a cada período de
la historia, dotándolo de unas características comunes, generales o
de fondo, acordes con la nota zodiacal de la misma era.

Dado su largo período cíclico -cerca de 26.000 años-, el más lar-

go en esta rama de la astrología, el estudio de la era astrológica tiene
que ser necesariamente muy importante, a nivel general. Ese gran
marco que es la era (2.100 años), hace que los grandes ciclos pla-
netarios no se repitan indefinidamente y hace que la historia no sea
siempre la misma. De alguna manera, cambia el decorado de fondo
de esa gran obra de teatro que es la vida en la Tierra. Al fin y al cabo,
en la Era de Aries, no primaban en el hombre antiguo los mismos
intereses y motivaciones existenciales que en el hombre moderno
de la Era de Acuario, consideraciones evolutivas aparte. Es el con-
texto general de una civilización y condiciona, de forma más o me-
nos notoria, hasta una simple carta natal, pues esta demandaría una
lectura diferente en cada era.

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 Predicciones para el siglo XXI. Crónica del Futuro

En el gran reloj cósmico de la historia, la era, a modo de maneci-

lla principal, señala la hora de los tiempos, mientras que el conjunto
de cuerpos celestes del Sistema Solar, con sus ciclos, ingresos y con-
figuraciones menores, señalan los minutos de nuestra historia aquí
en la Tierra, como si de la manecilla secundaria se tratara. La era
señala los grandes períodos de tiempo, que cubren civilizaciones y
culturas enteras. Indica una macro etapa en la historia de la huma-
nidad, con unas características determinadas, bien definidas, histó-
ricamente hablando.

¿Se imaginan que este gigan-

tesco reloj cósmico, con su mane-
cilla imaginaria, nos mostrara ver-
daderamente el leit motiv existen-
cial colectivo de cada momento de
la historia? Pues bien, realmente
existe este invisible mecanismo
de relojería, que a modo de en-
granaje perfecto, señala para cada
etapa la hora de los tiempos.

Figura 1. El reloj cósmico.

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Juan Estadella

El punto que marca esta invisible manecilla, en un momento de-

terminado de la historia, señala la constelación que, a modo de re-
sonancia zodiacal, aportará sus características a un período de unos
2.100 años: es la hora de los tiempos, la era astrológica.

Pero para entender esta realidad astrológica, es necesario com-

prender la realidad astronómica sobre la cuál se basa:

Consideraciones astronómicas
El Punto Vernal (0° de Aries), punto de intersección de la eclíp-
tica y del ecuador celeste, en el que el Sol franquea el equinoccio de
primavera cada año, es el inicio de los signos del zodíaco, indepen-
dientemente del trasfondo de las constelaciones. En otro orden de
cosas, la Tierra tiene cuatro tipos de movimiento: rotación, trasla-
ción, precesión y nutación. El movimiento de precesión, el que afec-
ta a la cuestión que nos ocupa, fue descubierto por Hiparco de Nicea
(190-120 a. J. C. ), uno de los mayores astrónomos de la antigüedad.
En sí, es el desplazamiento del Punto Vernal a razón de 50 segundos
de arco por año, en dirección contraria al orden natural de los sig-
nos del zodíaco. Así, de acuerdo con la Precesión de los Equinoccios
e independientemente de los signos del zodíaco, la constelación que

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 Predicciones para el siglo XXI. Crónica del Futuro

se encuentra detrás del Punto Vernal va cambiando a través de los

años, siglos y milenios, hasta completar una vuelta en aproximada-
mente 26.000 años. Este largo período se denomina el Gran Año y
comprende doce eras de aproximadamente 2.100 años cada una. El
movimiento que se observa, como ya he señalado, es de retroceso,
en dirección contraria a la de los signos del zodíaco. De esta manera,
de la constelación de Aries pasa a la de Piscis, en lugar de pasar a
la de Tauro. Hace 2.000 años, el Sol se proyectaba el 21 de Marzo
sobre la constelación de Aries, mientras que hoy en día, debido a la
Precesión de los Equinoccios, se proyecta al principio de la conste-
lación de Piscis, cerca ya de las estrellas finales de la constelación
de Acuario.

El cambio de era
El hecho de que el Punto Vernal esté próximo a las estrellas de
Acuario, ha hecho creer a muchos astrólogos que ya estamos en la
Era de Acuario. Otros astrólogos, opinan que faltan décadas e in-
cluso siglos para entrar en este gran período astrológico. Pero de
hecho, debe existir un solape entre las dos eras, donde en la frontera
entre Piscis y Acuario, se entremezclen las influencias y las incipien-
tes señales de la nueva era borren paulatinamente los signos de la

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