Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
DANIEL.- No entiendo.
DIEGO.- El dinero lo prefiero en efectivo. Cash is better. Los cheques y yo no
somos amigos. No es nada personal, pero nunca sabes con qué clase de gente
estás tratando. Y me he llevado algunas sorpresas desagradables.
DANIEL.- ¿De qué estás hablando? ¿Quieres que te dé dinero por lo de tu
pierna?
DIEGO.- Estamos hablando de negocios.
DANIEL.- …Ya te dije que estoy dispuesto a pagar las consultas…
DIEGO.- No, no…
DANIEL.- …Y las medicinas… Sé que te provoqué un daño...
DIEGO.- ¡Olvida lo que pasó!
DANIEL.- ¡Fue un accidente!
DIEGO.- ¡Olvida el accidente!
DANIEL.- ¡No puedo hacerlo, yo conducía!
DIEGO.- ¡Pues no existe el accidente! ¡Bórralo de tu memoria!
DANIEL.- ¡De no haber sido por eso, tú no estarías aquí… asustándome!
DIEGO.- (PAUSA BREVE). ¿¿What??
DANIEL.- …¡Ni siquiera sé si tenías planes… o a dónde ibas!...
DIEGO.- A ver, a ver, a ver… ¡Stop! Pausa. ¿Dices que yo no estaría aquí?
DANIEL.- Te arruiné la noche.
DIEGO.- Tú me trajiste.
DANIEL.- No te iba a dejar en la calle, podía ser algo serio.
DIEGO.- Esto es serio.
DANIEL.- Lo sé. Conozco un buen especialista…
DIEGO.- Estás bromeando.
DANIEL.- No.
DIEGO.- Quieres romper el hielo. Relax… Ok?
(DANIEL ASIENTE CON LA CABEZA, CADA VEZ MÁS CONFUNDIDO).
DIEGO.- (SEXUAL). No hace falta, soy muy sociable. Sólo tranquilízate. (SE
ACERCA A DANIEL).
DANIEL.- (ALEJÁNDOSE). Eso intento, pero tú no me ayudas mucho.
DIEGO.- (SEXUAL). Sólo déjame hacer mi trabajo… Déjate llevar… ¿Quieres
contarme algún secreto?...
DANIEL.- ¿De qué?
6
DANIEL.- Vamos a ver, esto es muy confuso. Creo que no nos estamos
entendiendo… Y yo estoy hiperventilando, esa no es buena señal…
DIEGO.- Se trata de algo muy simple. Yo estoy aquí por una razón, es todo.
DANIEL.- Porque te lastimé.
DIEGO.- Es todo.
DANIEL.- Sí.
DIEGO.- ¿Es todo?
DANIEL.- ¡Sí!
DIEGO.- ¿Y si eso no hubiera ocurrido?
DANIEL.- Posiblemente no estaríamos discutiendo.
DIEGO.- ¿Y yo?
DANIEL.- Seguirías en la calle o en tu casa… no lo sé….
DIEGO.- (ENTENDIENDO EL ERROR). Esa cena…
DANIEL.- (TODAVÍA NERVIOSO). ¿Eh?
DIEGO.- …Es para dos.
DANIEL.- Sí, mi novio y yo.
DIEGO.- No me tenían en mente, ¿verdad?
DANIEL.- ¡Claro que no, no te conozco!
DIEGO.- (QUE AL FIN COMPRENDE EL MALENTENDIDO). Oh, my God! Oh,
my God!
DANIEL.- ¿Qué?
DIEGO.- Ay, ay, ay…
DANIEL.- (SEÑALÁNDOLE LA PIERNA). ¿Te duele?
DIEGO.- ¡No! (PAUSA MUY BREVE). ¿Daniel, a qué se dedica tu novio?
DANIEL.- (TITUBEA). ¿Para qué quieres saberlo?
DIEGO.- ¡Sólo dime!
DANIEL.- Es… contador.
DIEGO.- ¿Y tú?
DANIEL.- Antropólogo… ¿Eso qué tiene que ver?
DIEGO.- Oh, my God!
DANIEL.- ¿Qué pasa?
DIEGO.- Yo no soy contador… ni antropólogo.
DANIEL.- ¿Y qué eres?
8
DANIEL.- ¡Claro que no! Eso lo sé también. ¡Pero yo soy el que se llevó la peor
parte! ¡Yo soy el que está aquí compartiendo sus problemas con un trabajador
sexual!
DIEGO.- Si crees que me ofendes, pierdes tu tiempo. (NUEVAMENTE, SE
ACERCA A LA COMIDA).
DANIEL.- Ni siquiera para eso sirvo.
DIEGO.- (PROBANDO ALGÚN PLATO). Pues cocinas very good. Ese es un
punto a tu favor.
DANIEL.- ¡La compré! Yo no sé cocinar.
DIEGO.-Tienes razón. No sirves para un carajo.
(DANIEL LO MIRA, FURIOSO).
DIEGO.- Eso querías oír, ¿no?
DANIEL.- Voy a pedir tu taxi.
DIEGO.- Ya era hora, thank you.
(DANIEL SACA OTRO TELÉFONO CELULAR DE SU PORTAFOLIOS).
DIEGO.- 975 08 06.
DANIEL.- (MARCA. PERO NO RESPONDEN. CUELGA). Está ocupado.
DIEGO.- Esperemos un poco más entonces… No sé si quieras bailar un rato.
(SEÑALANDO SU PIERNA). Aunque tal vez no pueda llevarte el paso…
DANIEL.- (MIRANDO FIJAMENTE A DIEGO). Eres raro.
DIEGO.- (LIGERAMENTE BURLÓN). Soy encantador. Te falta conocerme. Y
no me has visto sin pantalones.
(DANIEL LO MIRA, MOLESTO).
DIEGO.- ¿Qué? ¿Por qué no ríes en vez de lamentarte?
DANIEL.- ¿Dónde está lo gracioso de esta situación?
DIEGO.- ¿De veras no te has dado cuenta? Hay material de sobra.
DANIEL.- ¡Mejor cállate, antes de que cometa un prostitucidio!
DIEGO.- ¡No tienes sentido del humor!
DANIEL.- ¿Debo reírme de mi vida, eso insinúas?
DIEGO.- Ay, por favor… ¡La vida de todos es demasiado ridícula como para
tomarla en serio!
DANIEL.- ¿Ahora soy ridículo? (SARCÁSTICO). Hombre, sí que eres
encantador. ¡Eres un sol!
DIEGO.- ¡Quiero alegrarte! ¡No me gusta ver sufrir a nadie! Me dedico a dar
placer no a escuchar tragedias. Esto es… inusual.
14
DANIEL.- Por favor. (PAUSA MUY BREVE). Te ofrezco una disculpa, no estoy
en mi mejor momento.
DIEGO.- Lo sé. Disculpa aceptada.
DANIEL.- (LE SEÑALA LA MESA SERVIDA). Siéntate.
DIEGO.- (CÓMICO). ¡Me estás invitando! Oh, my god! ¡Nunca había tenido una
cena romántica en la primera cita! Por lo general, sólo cogemos, pero no
cenamos. No sé si esté preparado para esto. No puedo darte una respuesta
todavía, es demasiado pronto.
DANIEL.- (SONRIENDO). ¿Por qué no puedes ser un prostituto normal?
DIEGO.- Porque ser normal es aburrido.
DANIEL.- A mí me parece, más bien, un mecanismo de defensa.
DIEGO.- Tampoco pueden culparme por eso.
DANIEL.- Eres peculiar. No te comportas como los demás.
DIEGO.- Tal vez los demás no son como crees.
DANIEL.- Hablo de tu ocupación.
DIEGO.- ¿Conoces muchos sexoservidores?
DANIEL.- No.
DIEGO.- ¿Entonces?
DANIEL.- Hay estadísticas... estudios acerca del tema.
DIEGO.- Las personas somos demasiado complejas como para clasificarnos en
grupos y etiquetas, tú lo sabes. No todos los que vendemos sexo somos
iguales. Así como tampoco todos los antropólogos son neuróticos. (SE SIRVE
UN POCO DE VINO Y LE SIRVE UNA COPA A DANIEL).
DANIEL.- ¿Piensas que tengo ganas de brindar?
DIEGO.- ¿No?
DANIEL.- Mi novio me cambió por otro. Mi corazón está roto. Me acabo de dar
cuenta que puse mis esperanzas en una relación que ya no existe. Mi vida dio
un giro de ciento ochenta grados… para mal. Dame un motivo para celebrar.
DIEGO.- (PIENSA UN POCO Y LUEGO, CON AIRE DE INDIFERENCIA,
VACÍA EL CONTENIDO DE LA COPA DE DANIEL EN SU PROPIA COPA).
Don’t worry. Más para Diego.
DANIEL.- (LE ARREBATA LA BOTELLA A DIEGO). ¡Por supuesto que tengo
motivos para brindar!
DIEGO.- ¡Claro que sí!
DANIEL.- ¡Me tengo a mí mismo!
DIEGO.- ¡Exacto!
16
DIEGO.- Nada.
DANIEL.- ¿Lo conoces?
DIEGO.- (NERVIOSO). No.
DANIEL.- Parece que sí.
DIEGO.- (NIEGA CON LA CABEZA Y SONRÍE NERVIOSAMENTE. SE
ACERCA A LA MESA). Yo conozco a mucha gente… pero no conozco a todo el
mundo. ¿Quieres más vino?
DANIEL.- Diego…
DIEGO.- What??
DANIEL.- (PIENSA UN POCO. REACCIONA). No me digas que…
(ENTENDIENDO, SORPRENDIDO). ¡Ay, dios mío! ¡Mi Dante no!
(DIEGO LO MIRA APENADO, TORPE).
DANIEL.- (INCRÉDULO). ¡Él y tú…! ¿Tú le hiciste…? ¿O él te hizo…?
DIEGO.- Los dos hicimos.
DANIEL.- (GRITA, FÚRICO). ¡Te voy a matar!
DIEGO.- ¿Y a mí por qué? ¡Mátalo a él!
DANIEL.- ¡Los voy a matar a los dos!
(DANIEL SE VA ENCIMA DE DIEGO Y SE ORIGINA UNA PERSECU-
CIÓN).
DIEGO.- (ESQUIVÁNDOLO). ¡Cálmate! Take it easy!
DANIEL.- ¡Que se calme tu madre!
DIEGO.- ¡Yo no lo obligué! ¡Él me buscó!
DANIEL.- ¡No me des más información, no quiero saber!
DIEGO.- Daniel, please… ¡No puedo correr! (LO EVADE).
DANIEL.- ¡Eso me facilita las cosas!
DIEGO.- (SE TROPIEZA Y COJEA). ¡Esto no es divertido!
DANIEL.- ¡Tú te lo buscaste, Darling! ¡Espero que al menos lo hayas disfrutado!
DIEGO.- Are you crazy? ¡Ni siquiera me gustó!
DANIEL.- ¿Estás diciendo que mi Dante no es un buen amante? ¡Ahora resulta
que lo conoces más que yo!
DIEGO.- ¡No es tu Dante, sino tu ex Dante! ¡Además, no se movía mucho!
DANIEL.- ¡No me cuentes los detalles! ¡Me vienen imágenes a la mente!
DIEGO.- ¡Entonces deja que te explique!
DANIEL.- ¡Eres un idiota!
23
DANIEL.- (PAUSA BREVE). ¿Te has preguntado alguna vez con cuántos
novios y novias de tantos imbéciles ya te acostaste? No, ¿verdad? Cómo
saberlo. ¿Para qué? ¡Es mejor vivir en la inconsciencia de un mundo
imperfecto, se me olvidaba! Es más inteligente y menos victimizante.
DIEGO.- Creo que esa palabra no existe.
DANIEL.- (ALTERADO). ¡Sabes lo que quiero decir! ¡Y eres lo suficientemente
inmaduro como para que todo te valga madre! ¡Y yo… yo… soy el pendejo,
como siempre! (LLORA).
DIEGO.- Aquí el único pendejo soy yo. Aunque no tanto como para no darme
cuenta de mis culpas. Las acepto. Y te pido perdón.
DANIEL.- No te creo.
DIEGO.- ¿Qué más quieres que te diga?
DANIEL.- Nada. Sigue burlándote.
DIEGO.- ¡No me estoy burlando!
DANIEL.- Pues deberías. Una anécdota más. (IRÓNICO). ¿Por qué no escribes
un libro? Te puede funcionar aun mejor que tu proyecto del restorán. (RÍE,
BURLÓN). ¡Hasta podríamos escribirlo juntos! Con el amarillismo suficiente,
sería un best seller.
DIEGO.- Daniel, a ti no te duele el corazón, te duele el orgullo.
DANIEL.- Felicidades, después de todo sí eres terapeuta. Ya podrás incluir esa
habilidad en tu currículum… y en tu tarifa.
DIEGO.- Sabes que lo que digo es cierto.
DANIEL.- (PAUSA MUY BREVE). ¡Lo único que sé es que vivía con un
farsante, que hoy es mi cumpleaños, que estoy con un tipo que ni siquiera me
interesa escuchar y que no se vale que me esté pasando todo esto! No soy el
mejor hombre del mundo, pero créeme, si el karma existe, esto no me
corresponde.
DIEGO.- En eso estamos de acuerdo.
DANIEL.- ¡Y tú también eres culpable!
DIEGO.- Ya dije que sí. Indirectamente, pero sí.
DANIEL.- ¡Te acostaste con él!
DIEGO.- ¡Yo me acuesto con cualquiera que me llegue al precio, tú lo dijiste! ¡A
eso me dedico!
DANIEL.- ¡Sí… sí… y cobras mil por hora y ganas muy bien! ¡Eres todo un
dechado de virtudes!
DIEGO.- ¿Vas a seguir con tus discursos de moralidad? Para que yo me largue
de una vez. Ya hice tiempo extra y no me estás pagando.
(DANIEL LO MIRA MOLESTO Y DOLIDO).
25
DIEGO.- What??
DANIEL.- ¿Por qué no? Sólo pagarías la mitad de los gastos. ¿Qué te detiene?
DIEGO.- Creo que nada. Pero me sorprende tu propuesta. Me acabas de pedir
que viva contigo.
DANIEL.- Ya ves. Aunque tampoco te estoy rogando. Si no quieres, pues no.
DIEGO.- Sí quiero.
DANIEL.- (SONRÍE). Ok.
DIEGO.- Pero aclaro que, por ahora, no pienso dejar mi profesión.
DANIEL.- Mientras no traigas “trabajo” a la casa, no hay problema. Estoy
aceptando el reto. Necesito un amigo, Diego. Uno que conozca la cuerda floja…
y que me pueda dar la mano si me caigo. Y creo que tú también. Es un
pretexto, pero es un buen pretexto, ¿no te parece?
DIEGO.- (SONRÍE Y ASIENTE CON LA CABEZA). ¿Y cómo te sientes?
DANIEL.- (SONRÍE TAMBIÉN). Good.
DIEGO.- (SONRIENDO MÁS). Okay.
DANIEL.- ¿Brindamos?
DIEGO.- ¿Más?
DANIEL.- Me gusta brindar.
DIEGO.- A mí también. Ya nos estamos entendiendo.
(DANIEL SIRVE MÁS VINO).
DANIEL.- Por el amor.
DIEGO.- Y el desamor.
DANIEL.- Por el sexo.
DIEGO.- Y el dinero.
DANIEL.- Por la locura.
DIEGO.- Y la razón.
DANIEL.- Por el futuro.
DIEGO.- Y la madurez.
DANIEL.- Por el desafío.
DIEGO.- Y las posibilidades.
DANIEL.- ¡Salud!
DIEGO.- ¡Salud!
(CHOCAN SUS COPAS Y A DANIEL SE LE DERRAMA UN POCO EN LA
CAMISA O EL PANTALÓN).
31
TELÓN