Universidad Técnica de Manabí

Facultad Ciencias de la Salud

Escuela de Medicina

Catedra De Riesgos y Desastres

Tema:

Storytelling en salud mental y en desastres

Nivel/Paralelo

Séptimo – “F”

Docente:

Lcda. Katiuska Elizabeth Loor Vélez

Realizado por:

Caicedo Arcentales Laura Isabel

Loor Cedeño Cinthya Lorena

Mendoza Resabala Lissette juliana

Vinces Zambrano Bryan Bladimir

Zamora Pinargote Christopher Gilberto

Periodo:
Mayo 2020 – Octubre 2020
 REALIZAR UN STORYTELLING EN SALUD MENTAL EN DESASTRES

16A: STORYTELLING EN SALUD MENTAL

Eran las 6:58 la noche del sábado 16 de abril del 2016, cuando se dio un fuerte sismo de
7.8 grados en la Escala de Richter con epicentro en las ciudades de Pedernales y
Esmeraldas, y según el Instituto Geofísico, con más de 200 réplicas, algunas con magnitud
por encima de 6 en la escala de Richter se produjeron desde el sábado. Mediante la red
social, Facebook, la población reportaba los estragos y los momentos de tensión que
sufrieron durante el fuerte sismo y los daños a algunas infraestructuras.

La Presidencia de la República informó que en especial la costa ecuatoriana, había sufrido

un sismo, las autoridades estaban evaluando los daños y tomando acciones frente a lo
acontecido. El presidente, de aquel entonces, Rafael Correa, informó de que, aunque no
había evidencia de tsunami INOCAR recomendaba alejarse del perfil costanero a zonas
altas, para evitar oleajes y mareas, además firmó un decreto de excepción movilización
nacional. Las zonas más devastadas fueron Pedernales y Portoviejo sin embargo se
seguían receptando nuevas cifras e información, en rueda de prensa el vicepresidente
Jorge Glas confirmó 41 personas muertas por sismo.

El vicepresidente Glas viajó a la zona cero del fuerte sismo para empezar a coordinar
ayuda para las víctimas, se le notificaba que el balance provisional del terremoto era por
el momento, de 77 muertos y 588 heridos y 135 réplicas registradas. En las primeras horas
del domingo se expresó mediante imágenes fotográficas y de video el daño que causo el
terremoto en Manabí y Esmeraldas, viviendas devastadas. Con el paso de las horas la cifra
oficial de personas fallecidas ascendió a 233 muertos y 588 heridos.

Un sentimiento de solidaridad despertó en el alma de los ecuatorianos, desde distintos

puntos del país se comenzó a fraguar campañas de ayuda para beneficiar a los afectados
por el terremoto y desde el exterior también comenzaron a llegar casi medio millar de
personas para las labores de ayuda. Entre las noticias de los continuos movimientos, se
informó de un milagro: las escenas captadas por un miembro de la policía nacional dieron
testimonio del rescate de una niña bajo pedazos de losa y cemento, la infanta gracias a
sus lamentos fue escuchada por los moradores de un sector de Portoviejo, agentes de la
policía, rescatistas y vecinos unieron esfuerzos para sacar a la niña con vida y ponerla a
buen recauda.
Desde el MIES se presentó la dirección en donde se podían reportar menores abandonados
o desamparados, se tomó atención especial en los niños y en las personas heridas en el
terremoto, entre ellas 16 estaban en el Hospital Eugenio Espejo de Quito. Se combatió la
tristeza del terremoto mediante obras de teatro de artistas callejeros, además se presentó
infografías de cómo actuar frente a un desastre natural como el terremoto. Sin embargo,
se emitía un nuevo informe sobre la cifra de muertos que ascendía a 558.

Se activó el hash tag #DesaparecidosEC con el cual se trabajaba de localizar a los seres
queridos de muchas personas, el cual al mismo tiempo que genero alegría en corazones
de muchas familias también provoco desenlaces fatales para otros.

La Junta de Beneficencia de Guayaquil tras el sismo del pasado 16 de abril, ha apoyado

con 30 especialistas, quienes han visitado hospitales, albergues, campamentos y barrios
de Manabí. Calceta, Portoviejo, Playa Vieja, Chone, Jaramijó, Jipijapa, Pedernales,
Tarqui y Bahía de Caráquez son algunas de las localidades a las que han llegado con
dinámicas y charlas para atender la salud mental y emocional de los afectados.

Es a través del Instituto de Neurociencias, de la Junta de Beneficencia de Guayaquil, da

un reporte de los síntomas más frecuentes asociadas al sismo encontrado en los
damnificados, entre ellos están: trastornos del sueño, angustia, depresión, inseguridad,
temor. Son cerca de 1300 damnificados por el sismo, a quienes han llegado con atención
psicológica y terapias.

Los especialistas afirmaron, de no brindar ayuda oportuna, estos síntomas podían

desencadenar patologías más severas como hipertensión, problemas coronarios o de
circulación. “De ahí la importancia de la ventilación emocional con los especialistas para
que puedan manifestar lo que sienten y sean diagnosticados correctamente”, cita un
comunicado del Instituto. A más de las terapias, las brigadas suministraron medicina
psiquiátrica.

Además, este Instituto dono tres camiones con kits de primeros auxilios y de higiene
personal, juguetes y otros artículos, se mantuvo con brigadas especializadas para
continuar con los tratamientos en las zonas del desastre, además de brindar capacitación
para voluntarios, entre los temas de capacitación se incluyó protocolos de atención en
desastres naturales, intervención psicológica en emergencias e intervención en crisis.