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La Ética Protestante y el Espíritu del

Capitalismo, Max Weber y el


surgimiento de la sociedad moderna

Nombre: Soledad Astete Araneda


Docente: Dr. Rubén Leal Riquelme

18 de Octubre, 2019
INTRODUCCIÓN

Max Weber, historiador, filósofo y sociólogo nacido en Alemania el año 1864, el cual
creció en un ambiente rodeado de figuras políticas y académicos, demostrando a
corta edad su intelecto. Sus principales trabajos fueron enfocados en la sociología
de la religión, la política y la economía.

Max Weber fue, y sigue siendo, de gran importancia tanto para las Ciencias
Sociales y principalmente para la Sociología, aportó con grandes cambios referentes
a la metodología de estudio que utilizaban las Ciencias Sociales, Weber planteaba
que estas no se podían estudiar de la misma forma que las Ciencias Naturales ya
que en el caso de las Ciencias Sociales estas estudian seres con conciencia,
capacidad de tomar decisiones, voluntad e intenciones. Otro de sus aportes fue el
estudio de “tipos ideales” estableciendo de este modo los fundamentos del método
de trabajo de la sociología moderna, construyendo un modelo teórico el cual se
centraba el análisis y la discusión sobre conceptos rigurosos.

“La Ética Protestante y el Espíritu del Capitalismo” fue publicado en 1905, luego de
que Weber se alejara de su cargo como profesor en la Universidad de Heidelberg,
convirtiéndose este en su trabajo más popular a la fecha.

En este trabajo Weber plantea como tesis que la ética protestante fue de gran
influencia en el origen y desarrollo del capitalismo industrial.

Weber inicia este libro con una introducción, en esta nos muestra cierta
“superioridad” que presenta el occidente en el ámbito de las ciencias, se indica que
occidente presenta una característica particular y única en comparación a otras
partes de mundo, esta es la racionalización. En otras palabras los avances
científicos ocurridos en el resto del mundo siempre se quedarían en un grado
rudimentario de no ser por distintos elementos de carácter racional que occidente
les entrega.

Dicho esto en este informe se analizarán capítulo a capítulo las ideas principales
que Weber nos presenta con respecto a la relación existente entre la religión
protestante, el desarrollo del capitalismo y el surgimiento de la sociedad moderna.

DESARROLLO

PRIMERA PARTE: EL PROBLEMA

I. Confesión y estructura social


Weber comienza este capítulo dándonos a conocer por medio de datos estadísticos
una ya posible relación entre la religión protestante y el capitalismo, en el estudio se
podía ver que en los grupos sociales altos o directivos de empresas de tipo
capitalista y con alguna creencia de tipo cristiana, predominaba la religión
protestante, como también lo hacía en aquellos estudiantes, los que se inclinaban a
estudiar profesiones técnicas o de carácter empresarial o mercantil. Teniendo en
cuenta esto, Weber (1905) nos introduce a la siguiente pregunta.

¿Cuál puede ser el motivo de esta intervención algo más considerable, de este porcentaje
superior de acuerdo a la totalidad de la población, con el que los protestantes toman parte
en la posesión de capital y en la dirección, así como también en los puestos más
encumbrados en el trabajo de las empresas de mayor categoría tanto en la industria como
en el comercio?. (p.11)

Si bien esta respuesta se tratara de responder durante todo este texto, Weber nos
indica una respuesta “provisoria” a este asunto, en la cual considera que estas
situaciones se dan debido a que los diferentes credos religiosos dan paso a ciertos
fenómenos económicos y que por ende los protestantes en este caso tienden a un
racionalismo económico.

También nos presenta otra razón de porqué esto sucede, señalando ciertas
diferencias entre la enseñanza que entregan los padres de la religion Catolica y
Protestante (con mayor hincapié en el Calvinismo) a sus hijos, la que termina
influyendo en la decisión del futuro profesional de estos; ya que la religion Catolica
muestra cierta indiferencia a el obtener riquezas, mientras que los Protestantes no.
Esto se puede explicar muy simple con una frase que aparece en este libro: “Comer
bien y dormir tranquilo”, mientras el Católico prefiere dormir tranquilo, es decir tener
una vida tranquila y asegurada, con los ingresos justos para subsistir, y por el otro
lado el Protestante prefiere el comer bien, generando riquezas que para el Católico
no son necesarias.

Este capítulo concluye dejando en claro que la conexión que se intenta buscar
entre el protestantismo y el capitalismo moderno, esta no se encontraría en el “amor
al mundo” sino en las características religiosas.

II. El espíritu del capitalismo

En este capítulo, Weber nos introduce el concepto de “espíritu del capitalismo”, el


cual dice que no es capaz de definir por completo ya que es terminaria siendo “un
conjunto de eslabones en la realidad histórica, que nosotros enlazamos en un todo,
basándose en sus significado cultural”.
Posteriormente nos introduce a dos textos escritos por Benjamín Franklin,
“Necessary hits to those that would be rich” (1736) y “Advice to young
tradesman” (1748), estos nos dan cierto consejos o ideales del capitalismo, los
cuales indicaré en pocas palabras.

a) “Considera que el tiempo es dinero.”


b) “Considera que el crédito es dinero.”
c) “Considera que el dinero es fecundo y provechoso.”
d) “Considera que, conforme al refrán, un buen pagador es amo de la bolsa de
quien sea.”
e) “... lo que más contribuye al progreso de un joven es la puntualidad y la
rectitud en todas sus empresas.”
f) “Las acciones de menor importancia que pueden pesar en el crédito de una
persona deben ser consideradas por esta.”
g) “... debes manifestar en toda ocasión que no olvidas tu deuda”
h) “Cuidate bien de considerar como propio todo aquello que posees y de vivir
conforme a esa idea.”... “... anota, minuciosamente, tus gastos e ingresos.”
i) “De ser una persona prestigiada prudencia y honradez, con seis libras
llegarás al goce de cien”

Estos no son simplemente consejos que nos entrega Franklin si no una ética que
de no ser cumplida se debe considerar como una torpeza y una omisión al deber,
como también una idea más precisa del concepto de “espíritu capitalista”. Esta ética
consiste en que su bien final es adquirir continuamente dinero, evitando siempre los
goces no moderados de este, ya que el fin de este acumulamiendo de dinero no es
el de satisfacer deseos materiales, sino algo que se debe hacer como meta de vida.
El capitalismo considera esto como algo esencial y natural.

Después de haber explicado el concepto de “espíritu capitalista” Weber pasa a


hablar de la rivalidad existente entre el tradicionalismo y el capitalismo, ideas
totalmente contrarias ya que en el tradicionalismo el fin del individuo no es adquirir
ganancias, sino tener lo suficiente para vivir una buena vida. Estas dos
concepciones lo logran llegar a un punto en común ya que en una economía
capitalista existe el ideal que a menores sueldos, existirá mayor productividad, pero
para el trabajador tradicionalista esto no siempre se cumple, ya que para él, lo
esencial es trabajar lo necesario para recibir el dinero “justo y necesario”.

Sombart, sociólogo y economista alemán, en investigaciones sobre el origen del


capitalismo, identifica estos dos elementos como leit motiv en la historia de la
economía: la satisfacción de lo necesario (tradicionalismo) y el lucro
(capitalismo).

III. Concepción luterana de la profesión. Tema de nuestra investigación.


El tema esencial en el que se enfocará este capítulo es en la palabra profesión
(beruf) la cual tiene variadas interpretaciones dependiendo de el punto de vista
(alemán, católico o protestante), en este caso nos enfocaremos en el significado que
le da el pueblo protestante, de acuerdo a este, la palabra beruf indica una profesión
de carácter religiosos, esta definición apareció por primera vez en la traducción
luterana de la Biblia, por ende, su significado es producto de la Reforma que se
generó en esa época. Como consecuencia, este término se convierte en un
concepto de carácter ético-religioso, en el sentido sagrado del trabajo.

Con este concepto comprendido, Weber comienza a señalar la diferencias


existentes entre el Luteranismo y la religión Católica, como también, ciertas
características de la concepción luterana que ayudaron a formar este concepto,
como también a desarrollar la concepción capitalista.

En contraposición del pensamiento católico, Lutero considera que “... la vida


monacal, además de faltarle valor para justificarse ante Dios, la sujeta un desamor
egoísta que la desobliga del cumplimiento de los deberes de su paso en el mundo”
(Weber, 1905, p.43). demostrando el evidente carácter tradicionalista de la religión
católica, en donde la “profesión” no era considerada como medio de salvación.

Si bien no se considera que el Luteranismo haya generado un gran impacto en el


desarrollo del capitalismo, no se puede negar que este elevo el significado religioso
de la palabra profesión, dándole un carácter de tendencia capitalista, ya que gracias
a la Reforma, la profesión era vista como un tipo de “amor al prójimo”, por ende el
cumplir los deberes profesionales se convierte una la forma de llegar a Dios.

SEGUNDA PARTE: LA ÉTICA PROFESIONAL DEL PROTESTANTISMO


ASCÉTICO.

I. Los fundamentos religiosos del ascetismo laico

En el cuarto capítulo de este texto Weber analiza el protestantismo ascético, el cual


está formado por 4 grupos: el calvinismo, el pietismo, metodismo y las surgidas
del movimiento. Pero antes de adentrarnos en el capítulo me gustaría definir el
significado del ascetismo, según la RAE, como la “persona que, en busca de la
perfección espiritual, vive en la renuncia de lo mundano y en la disciplina de las
exigencias del cuerpo”, con este concepto claro, podemos seguir con en análisis.

El grupo que analizaremos será el Calvinismo, ya que este es el más esencial en


este texto. El dogma de esta consiste en la predestinación, idea que se plasma en
las proposiciones presentes en la “Westminster Confession of Faith” de 1647, los
cuales indicaré brevemente a continuación.

a) Cap. IX. Del libre albedrío.


N° 3. “Con la caída del hombre en el pecado, su voluntad se ha visto del todo
incapacitada para encauzarse en el bien espiritual…”
b) Cap. III. Del imperecedero mandato de Dios
N°3. “ [Dios], ha predestinado a unos hombres a la vida eterna y ha
condenado a otros, para la eterna muerte.”
c) Cap. X. Del llamamiento poderoso.
N°1. “Dios se complace en llamar con el poder de su palabra … a quienes ha
destinado a la vida.”
N°6. “Por lo que se refiere al hombre malo e impío… [Dios] no sólo lo priva de
su gracias… le despoja también de los dones recibidos … y lo entrega a sus
propios placeres”

Al contrario de los que pensaban los Luteranos, quienes indicaban que si bien la
gracias de Dios se podía perder, esta también podría ser recobrada por medio de la
humildad y la fe en la palabra de Dios. Es así como al hombre no le queda más que
vivir una vida llena de incertidumbre, en donde donde no sabe si es un elegido por
Dios o no. Desde aquí vuelve a surgir el concepto de “profesión” que para los
luteranos consiste en el “amor al prójimo” mientras que para el Calvinismo los
labores profesionales era una forma de “servicio de utilidad pública” que el hombre
realiza por amor al prójimo y por ende con el fin de glorificar a Dios.

Pero, ¿Cómo se entrelazan ambas ideas presentadas anteriormente?


(predestinación y el concepto de profesión). Debido a la idea de predestinación, no
existe ser humano alguno que se sintiera seguro de su destino, pero el Calvinismo
reposaba en que este se consideraba un “instrumento” de Dios, por ende, se sentía
seguro de su gracia, y le bastaba simplemente con el hecho de saber que existe una
posibilidad para él de ser uno de los elegidos por Dios, y para sentirse más seguro
de aquello el Calvinismo apostaba a que el trabajo profesional (que finalmente iba
generando riquezas) era esencial para que el hombre dejará de lado la duda y así
confiar en su “supuesto” estado de gracias que reside en él desde el comienzo.

Así es como la concepción religiosa que presentaba el protestantismo ascético, se


convierte en una forma de actuar que tiene hacia la rectitud, el auto control, y la
profesión con fin religioso.
Si bien nos enfocamos en el grupo Calvinista, esta idea de la profesión con fines
religiosos que influyen finalmente en la economía, se vio en menor o igual grado en
los restantes grupos protestantes. Lo cual explica la influencia protestante en la
acción económica.

II. La relación entre el ascetismo y el espíritu capitalista

En el último capítulo de este libro, se presenta un “quiebre” en la religión Calvinista,


y se comienza a hablar del ascetismo puritano como una versión “mejorada” del
Calvinismo, la cual le daba aún más importancia a evitar la ambición de dinero, ya
que tanto para ascetismo puritano como para el calvinismo, el ejercer la profesión
como una forma de glorificar a Dios y que como consecuencia de esta es que se
genera riqueza. Como también castigan fuertemente a quien por tener riquezas
acumuladas descansaba de forma “innecesaria” ya que la ociosidad no era forma de
glorificar a Dios, el derroche de tiempo era uno de los peores pecados para el
ascetismo puritano.

El ascetismo puritano era permitido trabajar para enriquecerse, pero no para


gastar estas riquezas en bienes materiales que se tradujera en pecado. El
ascetismo ve con igual menosprecio, la indiferencia a las riquezas (característico de
los católicos), como la ociosidad generada por la abundancia de estas.

¿Entonces, cuáles fueron los ideales específicos que lograron influir en el


desarrollo el capitalismo?

Como primer ideal, y con mayor importancia, el “descanso innecesario”, para


los puritanos, como ya mencionamos anteriormente, este era una amenaza, ya que
atenta contra el ideal de trabajo, por ende la glorificación de Dios.

En consecuencia, el ascetismo también presentaba una postura en contra de la


cultura, ya que esta era tomada como una tentación al descanso, aparte de que
usualmente presentan una forma poco ascética de vivir, en el caso de la literatura y
el teatro.

Así fue como el ascetismo protestante, le dio máxima importancia al trabajo


eficiente, como único medio para lograr la gracia de Dios y de esta misma forma, un
desarrollo tanto como de la economía y la civilización moderna, implantando el
comportamiento racional y la importancia del trabajo.
CONCLUSIÓN

Finalmente se logra ver que efectivamente el ideal protestante fue de gran influencia
para el desarrollo capitalista, sin embargo este, claramente, no está guiado por el
ideal esencial de la religión, más bien está simplemente le entregó ciertos
elementos, como la valoración del trabajo y las riquezas, las cuales ayudaron a su
desarrollo.

Al transcurrir el tiempo, y llevándolo más a la actualidad si consideramos la


naturaleza de nuestro ser, a mi parecer era bastante lógico que este ideal se
corromperá, ya que las riquezas que el protestantismo promovia, se terminaban
tornando en tentaciones, y el ser humano teniendo mayor riqueza a su poder se
termina volviendo más soberbio y cercano al mundo, logrando así una separación
del ideal protestante y un mayor apego a lo que es el capitalismo hoy en día. Si bien
los ideales protestantes persisten, estos actualmente se basan más en la forma que
en el espíritu inicial que este presentaba.
BIBLIOGRAFÍA

Real Academia Española. (2001). Diccionario de la lengua española (22.a


ed.). Consultado en http://www.rae.es/rae.html
Weber, M. La ética protestante y el espíritu del capitalismo. (1905). 9° edición.
Puebla, México: Premia Editora. (p. 11)
Weber, M. La ética protestante y el espíritu del capitalismo. (1905). 9° edición.
Puebla, México: Premia Editora.(p.43)

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