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Día internacional de los idiomas indígenas (27 de mayo de 2018)

INSTITUTO NACIONAL DE IDIOMAS INDÍGENAS-MPPE.

Conferencia:

“CIENCIA INDÍGENA: conocimientos ancestrales develados”

Prof. Omar González Ñáñez.

Caracas: 29 de mayo de 2018

El conocimiento tradicional es el conjunto de sabidurías y la adopción de tecnologías


desarrolladas particular y colectivamente, fundadas en las experiencias ancestrales
transmitidas, preservadas, innovadas y practicadas por un pueblo indígena o
comunidades locales.

De lo anterior se desprenden varios elementos:

a) La existencia de los pueblos indígenas y la posibilidad de gestionar integralmente los


recursos naturales parte de su vida en colectividad, lo que les permite intercambiar
conocimientos, compartirlos, complementarlos e interactuar con la naturaleza, en calidad
de sujetos colectivos;

b) La gestión integral de los recursos naturales se enmarca en la visión holista de los


pueblos indígenas sobre la naturaleza. Esta visión consiste en interpretar la realidad como
una totalidad donde todos sus elementos se articulan y concatenan entre sí,
complementándose unos con otros;

ESTADO DE PROTECCIÓN DE LOS CONOCIMIENTOS TRADICIONALES...

c) La gestión integral de los recursos naturales expresa la cosmovisión indígena holista,


es decir el uso y aprovechamiento integrado de los recursos naturales traducidos en la
aplicación de sistemas económicos estacionales y ciclos productivos rotativos, entre otros
aspectos, que resguardan la conservación de los ecosistemas y la sostenibilidad de los
recursos;

d) Los conocimientos se constituyen en tradicionales en tanto constituyen experiencias y


saberes colectivos acumulados y transmitidos de generación en generación (tradición
oral).

Los estudios etnoecológicos exploran las maneras cómo la naturaleza es visualizada por
los diferentes grupos humanos (culturas), a través de un conjunto de creencias y
conocimientos, y cómo en términos de esas imágenes, tales grupos utilizan y/o manejan
los recursos naturales, ofrecen un marco conceptual y un método para el estudio integral
de los procesos de la apropiación humana de la naturaleza (Toledo, 2008; 2005). La
etnoecología se centra en el estudio del complejo kosmos-corpus-praxis, es decir en la
triple exploración de:
 El sistema de creencias o cosmovisiones (kosmos).
 El repertorio de conocimientos o sistemas cognitivos (corpus).
 El conjunto de prácticas productivas, incluyendo los diferentes usos y manejos de
los recursos naturales (praxis).

Otro etnógrafo con una metodología latinoamericana, DE AQUÍ, es el colombiano


LUIS Guillermo Vasco Uribe. El plantea:

“Otro criterio clave que se agregó a los que yo llevaba, y quienes lo agregaron fueron Los
guambianos, es el de recorrer. Cuando llegamos a la casa de Cruz esa primera noche,
en la cocina estaba la mamá de Cruz, una abuelita muy mayora, y Cruz contó que íbamos
allá para conocer; entonces la abuelita —que debía tener como 75 años, pero que
siempre creyó que yo era mayor por mi pelo blanco—, me dijo: «¡ay! Pobre abuelito, se va
a cansar mucho»; yo le pregunté porqué, y me respondió: «porque para conocer hay
que caminar mucho»; y así fue. De aquí, de esa cocina, esa noche salió algo que se fue
materializando en la práctica y que luego se conceptualizó en las mismas palabras de la
abuelita: «conocer es recorrer»; éste es un principio metodológico fundamental de la
etnografía que se hizo en Guambía.

También entre los guambianos hallé otros elementos que permitían entender algunos
planteamientos alternativos en la antropología. Por ejemplo, encontré que Lévi-Bruhl tenía
razón en algo que había percibido en las sociedades indígenas, aunque no en la forma
como lo expresó. No se trataba de que el pensamiento indígena no fuera un pensamiento
abstracto, si no, pre-lógico, meramente concreto o experimental. Al contrario, las
abstracciones de los guambianos se expresaban a través de cosas concretas, es decir,
que lo concreto y lo abstracto estaban interrelacionados, fundidos, y no separados como
entre nosotros, cosa que había percibido Lévi- Strauss, pero pensándolo y explicándolo
de otra manera, al considerar que el mito estaba construido con elementos de la vida
material que eran buenos para pensar. En el trabajo empezaron a surgir conceptos
básicos del pensamiento guambiano que eran cosas, como por ejemplo el concepto de
caracol, que permite plantear que para los guambianos la historia es un caracol que
camina, caracol que los antepasados, los antiguos, dibujaron o «leyeron» en las piedras,
en el sombrero tradicional, en la manera como el fríjol se enreda en la vara del maíz en
muchos otros elementos de la naturaleza o de la cultura guambiana.

Todos estos elementos concretos con los cuales los guambianos piensan la realidad y la
explican, la comprenden y la transforman, son elementos presentes en su medio y en su
vida cotidiana; por ello, a diferencia de lo que ocurre con los nuestros, los conceptos
guambianos no están en los libros, ni en las cabezas de la gente, que se los ha metido en
ella a partir de los libros, sino que están en la vida cotidiana.

Si la orientación clave del trabajo, que ya venía desde los embera, es trabajar sobre la
base de los conceptos propios de la sociedad con la cual se está trabajando, —por
ejemplo, la caracterización embera del jaibaná como verdadero hombre, o la idea embera
de que a través de los cántaros de barro Chocó ellos se hacen como los ancestros, o
como los dioses, en el lenguaje cristiano que aprendieron de los misioneros—, en esa
nueva visión de la etnografía, la metodología fundamental, el principio básico, como lo
conceptualizo ahora, pero como se dio primero en la realidad de Guambía antes de ser
conceptualizado, es el de recoger los conceptos en la vida; para poder hacerlo así, para
poder recogerlos en la vida, fue preciso vivir ésta, vivir con los guambianos y participar de
su vida, y parte clave de esa vida eran sus luchas; en un momento determinado en la vida
de los guambianos, ése fue el eje fundamental de sus vidas, hasta el punto en que por
entonces se definieron a sí mismos diciendo: un guambiano es un luchador”

(Luis Guillermo Vazco Uribe “Así es mi método en Antropología” En: TABULA RASA
No.6, enero-junio 2007 pág. 19-20).

Otro pensador nuestroaericano es el profesor añú JOSÉ QUINTERO WEIR del


“NUCLEO UNIVERSITARIO INDÍGENA DE LUZ
(NUILUZ)”. Escuela de Letras-LUZ. 2011.

Eje horizontal de la interculturalidad

El Eje de la Interculturalidad será el que atraviese horizontalmente todos los ejes


verticales de formación como principio motor de los estudios universitarios de los
estudiantes indígenas ello por cuanto, lo que se busca es; por un lado, reconocer la
existencia de formas de conocer y saberes generados desde las perspectivas propias de
las cosmovisiones de los pueblos originarios, y, por el otro, potenciar esas mismas formas
de conocer y los saberes producidos como paso trascendental para la generación de
nuevas formas de conocer y nuevos conocimientos desde una perspectiva muy propia,
esto es, desde una base epistémica particularmente definida y, por ende, desde una
epistemología generada desde la relación intercultural. De tal manera que, se trata, de
universalizar lo particular, pues, estamos convencidos que siempre habrá que pasar por
la comarca para llegar al universo.

Registro bibliográfico: casos venezolano y latinoamericano

La manera como van a ser presentados los datos en esta sección fueron
originalmente elaborados para enmarcarlos al interior de un proyecto de investigación de
la Facultad de Ciencias de la Universidad Central de Venezuela en 1993 llamado
“Contenidos Etnográficos para la Educación en ciencia y Tecnología”. Esta temática
también fue considerada como línea de investigación en el Doctorado en Ciencias
Humanas de la Facultad de Humanidades de la Universidad del Zulia.

En este segmento reseñaré brevemente las contribuciones que, desde nuestra


perspectiva, pueden considerarse como aportes a una futura bibliografía sobre
etnociencias y etnotecnologías en el país.

González Ñáñez, Omar

1980 Mitología Guarequena. Monte Ávila editores.


Es un ensayo que explora la cosmovisión, la etnovisión, la mitología y la
etnohistoria de la sociedad warekena (guarequena) desde su propia perspectiva.
Los WAREKENA son indígenas de filiación lingüística Maipure-Arawakos
habitantes del río Guainía en la frontera colombo-venezolana. La aldea principal
donde se realizó la investigación durante los años ´70 fue la de “Guzmán Blanco”,
situada a escasos 20 minutos a motor de la población de Maroa, Municipio
Autónomo Guainía del Estado Amazonas. El ensayo, siguiendo los planteamientos
de Mircea Eliade (1972) concluye que esta sociedad configura una tipología no
occidental cuya visión de la historia es circular y no lineal. Esta característica es
comprobada especialmente en el mundo chamánico warekena aun cuando existe
en casi todos los órdenes de su mundo de vida tradicional. El estudio da un perfil
de cómo los warekena categorizan su mundo y el de los criollos ya que es una
sociedad bastante intervenida por la cultura dominante o criolla, es pues el mundo
de vida de los warekena tradicionales.

Bonfil Batalla, Guillermo

1989 “La Teoría del control cultural en el estudio de procesos étnicos” Revista
Arinsana. N° 10:5-36. Caracas.

El etnólogo mexicano introduce una noción clave en la antropología mundial y,


particularmente latinoamericana como es la de control cultural , la cual había
desarrollado inicialmente en un artículo sobre “Lo propio y lo ajeno, una
aproximación al problema del control cultural”, publicado en la Revista Mexicana
de Ciencias Políticas y Sociales, número 103 UNAM, México. Bonfil define así este
proceso:

“Por control cultural entiendo el sistema según el cual se ejerce la capacidad


social de decisión sobre los elementos culturales. Los elementos culturales son
todos los componentes de una cultura que resulta necesario poner en juego para
realizar todas y cada una de las acciones sociales: mantener la vida cotidiana,
satisfacer necesidades, definir y solventar problemas, formular y tratar de cumplir
aspiraciones...” (Pág. 10)

...El conjunto de niveles, mecanismos, formas e instancias de decisión sobre los


elementos culturales en una sociedad dada, constituye el sistema global de
relaciones que denomino control cultural (Pág. 12)

A Bonfil corresponde la introducción en la antropología del sur o latinoamericana


del concepto de etnodesarrollo según la cual, las poblaciones indias que en el caso de
su país él llamaba “el México profundo” asume el control cultural como la capacidad de
decisión que tienen los hombres sobre tierras recursos, y si se quiere, sobre sus propias
vidas.

Bonfil elabora un interesante cuadro acerca de los “Ámbitos de la Cultura en


Función del Control Cultural”

Elementos

culturales Decisiones

Propios Cultura Cultura


Autónoma
Enajenad
a

Ajenos Cultura Cultura


Impuesta
Apropiad
a

González Ñáñez, Omar Enrique. 2005. “Etnonomatemáticas entre los indígenas kurripako
(arawak) y los programas de educación intercultural bilingüe”. Equisangulo, Revista. de la
Facultad de Humanidades y Educación Universidad de Los Andes.Venezuela.

"Antes del presente no existía nada, lo que es objetos, solamente existían:

· majínkanali "el secreto de la Creación

· kurrídali "la Nada"

· liúyawaka "el Abismo"

· lidáuka "la Tiniebla"


Los maestros de la ciencia de la etnia kurripako, en sus estudios científicos usando el
yátu, ñúday dúpa, polvo de la ciencia, usando estos elementos, usaron el ojo de la
imaginación y visiones celestes, vieron y consideraron a la Nada como el
MAJÍNKANALI...su traducción es majín: materia, cerebro, principio; kaná, ilikanánia:
resplandor, luz, calor; dáli, jilidáuka: "tiniebla, espíritu, figura..."
(Filintro Rojas, filósofo kurripako, Sejal, río Guainía, Colombia,1991)

El párrafo anterior forma parte de una reflexión de un importante ensayo escrito por
FILINTRO ROJAS, un desaparecido filósofo kurripako de la región del Guainía, autor de la
obra casi inédita2 titulada "La Ciencia Kurripako: Origen del Miyáka o Principio" la cual fue
reseñada por Silvia Vidal (IVIC-ULA, 2002). En su contenido puede observarse cómo
este pueblo Arawako concibe los orígenes del conocimiento y la ciencia misma como "un
polvo celeste"; para ellos -al igual que para otras civilizaciones amerindias y del Universo-
la reflexión sobre el hombre y sus orígenes o etnogénesis está estrecha y holísticamente
articulada con la idea de la creación del universo. Los warekena, (otra sociedad maipure-
arawaka del noroeste amazónico) comparten la misma concepción sobre el cosmos y la
homovisión cuando usan la palabra Jálenisika (pensamiento, vida, resplandor). (3)

Trasladándonos al ámbito de la educación indígena, Rojas en la reseña de la obra citada


nos dice lo siguiente:

El objetivo de la educación en nuestra cultura es aportar al individuo las estrategias para


la subsistencia, para la vida. Es decir, formar a un adulto, a un ser humano digno y
autosuficiente. Para ello, nuestro modelo (Líikápakana) de pedagogía (Wakanánta)
tradicional, se basa en Wajínke (conocimiento tradicional), el cual tiene su origen, sus
normas, su plan y sus propias formas de transmisión mediante el iwáwaukapeti. Este
último quizás podría traducirse como "socialización", y de acuerdo con la edad del
individuo tiene varios niveles o núcleos de interacción-transmisión: la familia (extendida),
los maestros de sabiduría (chamanes, etc.).

Para hacer renacer nuestra cultura, la cual lamentablemente ha ido desapareciendo poco
a poco, es necesario mostrar la importancia de nuestra ciencia o sabiduría tradicional,
tanto por derecho propio como si se la compara con la cultura centralista (criollo-
occidental).

La misma se basa en tres formas de conocimiento:

· Pensamiento Mágico (espiritual)

· Pensamiento Empírico (relacional)

· Pensamiento Mariñái (chamánico).

Este deberá ser el objetivo cuando se elaboren materiales y libros de lectura para los
jóvenes de nuestra tribu y para los demás grupos que habitan el territorio. Ello permitirá
sentar las bases de una verdadera educación indígena". (F. Rojas, 2000:166-167).

(Nota: estos materiales son solo fragmentos de los artículos citados en la bibliografía)
Bibliografía

Bonfil Batalla, Guillermo (1989) “La Teoría del control cultural en el estudio de
procesos étnicos” Revista Arinsana. N° 10:5-36. Caracas.

González Ñáñez, Omar (1980) Mitología Guarequena. Monte Ávila editores

Gavilán Pinto, V. M. (2012). El pensamiento en espiral, paradigma de los pueblos


indígenas. Santiago de Chile: Ebook Producción, Working paper series 40.

Herrera, N. (2009). Reconstrucción histórica de pueblo Kariña. Caracas: Universidad


Bolivariana de Venezuela, Centro de Estudios Indígenas.

Márquez, Maury (2018) Las Semillas en la Agroculturalidad de Los Andes Venezolanos


(etnografia del patrimonio biocultural). Tesis doctoral. Doctorado en Patrimonio Cultural.
Universidad Latinoameriana y del Caribe.. Caracas.

Rojas Sabana, Filintro Antonio (1997) Ciencias Naturales en la Mitología Curripaco.


Secretaría de Educación y Cultura Departamento del Guainía, Inírida-Colombia. Programa
Fondo Amazónico. Fundación Etnollano. Coama.

Vidal, Silvia (2002) Reseña de la obra "La Ciencia Kurripako: Origen del Miyáka o
Principio" de Filintro Rojas (IVIC-ULA, 2002)

Toledo, V. y N. Barrera-Bassols (2008). La Memoria Biocultural: la importancia


ecológica de las sabidurías tradicionales. Icaria Editorial. Barcelona, España.

Toledo, V. (2005). La Memoria Tradicional: La Importancia Agroecológica de los Saberes


Locales. En: Leisa Revista Agroecológica. México.

Vasco Uribe, Luis Guillermo (2007) “Así es mi método en Antropología” En: TABULA
RASA No.6, enero-junio 2007 pág. 19-20). Bogotá.

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