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Memorias del Pueblo

MEMORIAS DEL PUEBLO Estimado lector:


Revista del
Presentamos a Ud. el último número de esta serie de
Museo Histórico Municipal
“La Para” publicaciones del Museo Histórico Municipal "La Para"
Ex estación ferroviaria
denominada Memorias del Pueblo, la cual se fue
C.P. X5137ANQ
La Para - Córdoba - Argentina posicionando a nivel regional y provincial desde su naci-
www.museodelapara.gov.ar miento en 2001.
museolapara@cooplapara.com.ar
La renovación de nuestra política editorial se debe al
Propietario: cierre de un ciclo y a la necesidad de trabajar con innova-
Municipalidad de La Para ción y vanguardismo.
Año 10 – Nro. 9/10
Diciembre 2010 Por ello, ya estamos proyectando una nueva publica-
ción periódica que esperamos lanzar en 2012, puesto que
Director
durante 2011 el museo estará abocado a colaborar con los
Carlos Alfredo Ferreyra
festejos del CENTENARIO DE LA PARA.
Fotografías En este número, incluimos artículos de diversa índole
Verónica Juárez
que nos permitirán sumergirnos por aspectos de la cultura
Andrés Echenique
material, la antropología social, la historia y el patrimonio.
Néstor Cocco
Claudio Vaca Finalmente, es nuestro deseo que la publicación Me-
Marta Bonofiglio morias del Pueblo haya sido de utilidad tanto para los cu-
riosos de la historia como para los docentes y alumnos que
Colaboración
Carolina Alochis
constantemente indagan sobre el pasado; que haya servido
Marta Bonofiglio para construir identidad y visibilizar nuestra historia.
Sergio Marchetti Esperamos haber cumplido con nuestros objetivos y que
Ramón Loyola
la publicación haya resultado de su agrado.
Jorge Miglione
Erio Curto
Cordialmente
José Luis Zampini La Dirección
APHA
Luciano Faule
Oruga Films
SUMARIO:
-
Derechos reservados.
Queda hecho el depósito que
establece la ley 11.723.

La correspondencia deberá remitirse


a la dirección del Museo.

Los artículos firmados son


responsabilidad de los autores.

Permitida su reproducción siempre


que se cite la fuente.

ISSN: 1666-8839

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 1


Memorias del Pueblo

MUNICIPALIDAD
LA PARA
ic o d e
Al serv ! !!
m u n id ad
su co
San Martín 871 - CP. 5137 - Tel.: 03575 · 491428 – Fax: 491001
Sitio: www.lapara.gov.ar - E. mail: lapara@cba.gov.ar

Autoridades de Municipalidad de La Para


Intendente Municipal
Sr. Mindo Marcelino Tito

Secretario de Gobierno
Sr. Claudio Adrián Vaca

Encargada del Área de Cultura


Srta. Silvana Pellarolo

2 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

Hace posible es
estta Publicación

Casa Central: La Para


Filial 1: Villa Santa Rosa de Río Primero
Filial 2: La Tordilla
Filial 3: Arroyito

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 3


Memorias del Pueblo

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A PA RA - A

Equipo de Trabajo, Colaboradores y Voluntarios del


Museo Histórico Municipal “La Para”

Dirección
Mgr. Lic. Carlos Alfredo Ferreyra

Asistente de Dirección
Téc. Laura Beatriz Ceballos

Conservación
Sra. Angélica Montoya

Atención al Público
Téc. Anahí Folli

Colaboradores
Sr. Ariel Toledo, Sr. Reinaldo Jesús Loza

Área de Investigaciones Históricas


Sr. Jorge Miglione, Téc. Gabriela Silvana Peralta, Mgr. Lic. Carlos Alfredo Ferreyra,
Prof. Ángela Rosa Alegre, Sr. Carlos Eduardo Villarreal

Área de Arqueología
Prof. Marta María Bonofiglio, Sr. Carlos Eduardo Villarreal, Sr. José Luís Giraudo, Téc.
Ulises Carrara, Sr. Néstor Hugo Cocco, Sr. Claudio Adrián Vaca, Sr. Luis María Cerda

Diseño Gráfico
Sr. Diego Zampini, Téc. José Eduardo Pérez, Téc. José Luis Caffarena,
Téc. Micaías Crespín

Informática
Sr. Edgar Rosso

Contacto con ex residentes


Betty Formento

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Memorias del Pueblo

FIESTAS ERAN LAS DE ANTES:


NAVIDAD, AÑO NUEVO Y REYES EN LA PARA EN LA
PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX
Por Carolina Alochis1

Introducción ción esta presente en todos los reportajes, aclarando


Lo que van a comenzar a leer, es un trabajo históri- que dicho principio no tiene porque tener una connota-
co de cómo se celebraba Navidad; Año Nuevo y Fiestas ción negativa, sino que cada uno lo vive de acuerdo a
de Reyes, en la Localidad de La Para, situándonos tem- su clase y su lugar ocupado en el “Campo”2.
poralmente en la primera mitad del siglo XX.
Utilizamos como herramienta de trabajo entrevistas Las fiestas: Iguales pero diferentes
que forman parte del Archivo de Historia Oral del Museo Se puede representar al mundo social en forma de
Histórico Municipal “La Para”. espacio (de varias dimensiones) construido sobre la base
Una ves realizadas las transcripciones y escucha- de principio de diferenciación o de distribución consti-
das las entrevistas comencé a ver de que manera po- tuidos por el conjunto de las propiedades que actúan en
dría abordarlas. Llegando a la conclusión de que dichas el universo social en cuestión, es decir, las propiedades
entrevistas eran ricas en contenido histórico y socioló- capaces de conferir a quien las posea con fuerza, po-
gico. der, en ese universo. Los agentes y grupos de agentes
Por ello es que utilizaré el concepto de “Principio de se definen entonces por sus posiciones relativas en ese
Diferenciación”, de Hugh Trevor Ropper; también traba- campo.
jado por Bourdie, para poder encarar dicho trabajo. Cada uno de los entrevistados, habitantes de ese es-
Justifico y explicito, que éste principio de diferencia- pacio social que es La Para, hablaba de un mismo tema,

Una fiesta masculina, a mediados del siglo XX en La Para.

1
Profesora de Historia (U.N.C.), Directora del Museo Histórico Municipal de Villa Fontana (Córdoba), Secretaria de
A.P.H.A.
2
Definiciones de Campo de Bourdieu: Los campos se presentan como espacios estructurados de posiciones. Pen-
sar en términos de campo significa pensar en términos de relaciones. Un campo puede definirse como una red o
configuración de relaciones objetivas entre posiciones; relaciones objetivas que existen independientemente de la
conciencia y la voluntad individuales. Sus propiedades pueden analizarse en forma independiente de las caracte-
rísticas de sus ocupantes.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 5


Memorias del Pueblo

pero desde su posición en el campo social. Esto lo ve- Esto es lo que pasa aquí: hay tres celebraciones, Navi-
mos reflejado en cada una de las autodenominaciones dad, Año Nuevo y Reyes y 4 maneras de expresarlas dife-
de los entrevistados, “nosotros los que podíamos”; “la rentes, de acuerdo a su propio espacio social ocupado.
españolada”. Otro de los entrevistados habló desde su Ahora, pasaré a demostrar con los relatos de los en-
lugar de “trabajador y de pobre”; y finalmente aquel que trevistados esto que postulo arriba.
habla como habitante de la zona rural, como marcando
la diferencia entre pueblo-campo3. Esto desde mi lectura Los que podíamos celebrábamos…
lo que hace es marcar un sentido de pertenencia y un María Luisa Rivero de Ferreyra…
claro principio de diferenciación. “Yo recuerdo estas fiestas, con mucho cariño y re-
La modalidad de trabajo que encontrarán es una fu- cordando la unidad de todas las familias que estába-
sión entre teorías histórico-sociológicas y los relatos de mos unidas acá en el pueblo, había muchos españoles
cada uno de los entrevistados que fueron: María Luisa y con ellos pasábamos las hermosas fiestas de navi-
“Ñata” Rivero de Ferreyra; Pablo Cavallo; Esteban “Pi- dad.
chón” Giraudo y Benito Ferreyra. Las gente pudiente tenía su buena mesa, bien pre-
Concluida esta extensa introducción, pasaremos a parada con su buen mantel blanco, y a la medianoche
trabajar. cuando ya se hacía la Misa del Gallo, que era celebrada
por el padre Amuchategui, entonces después cuando
ya se terminaba la misa nos veníamos a nuestra casa y
ahí se hacía la fiesta de navidad.
Unos recibían regalos, las familias pudientes, los no
pudientes no recibían nada, porque, unos recibían por
la situación, y otros no recibían por la pobreza.
Cada uno en las familias pudientes se hacía, se fes-
tejaba la navidad con su buen mantel blanco, sus bue-
nos plato, su buen pavo, su lechón, su chivito todo lo
que había a su alcance, pero infaltable la sidra.”

Las fiestas… eran muy simples


Benito Ferreyra…
Amigos celebrando el año en la Farmacia de Juan Cerda
“La fiesta de navidad en La Para en aquellos años
era fiestas muy simples, donde eran pocos los festejos
La celebración de la navidad
que se realizaban. Yo recuerdo que para esperar el Niño
En este apartado vamos a ver, desde la lógica del
Dios, nos reuníamos y luego íbamos a ver el pesebre a
principio de diferenciación, como cada uno de los entre-
la Iglesia, que ya se hacía en aquel entonces aquí en La
vistados, expresa su recuerdo sobre esta celebración
Para. Pero no era el pesebre viviente, como ahora, to-
tan importante para los cristianos.
dos llevaban las vacas, los burritos de material, de yeso,
La Fiesta de Navidad es una sola, pero cada familia
estaba el Niño Dios, la Virgen María, todos de yeso, eran
la vivía de diferentes maneras, por esto que Bourdie plan-
todas estatuitas.
tea de que “el campo” social se puede describir como
Incluso aún no se acostumbraba a armar los árboles
un espacio pluridimensional de posiciones tal que toda
de navidad en nuestras casas. Eso de los árboles es
posición actual puede ser definida en función de un sis-
nuevo, es de ahora.
tema pluridimensional de coordenadas. Los agentes se
Nosotros acostumbrábamos a esperar el Niño Dios,
distribuyen en él, en una primera dimensión, según el
todos reunidos y cantando. Eso lo hacíamos cuando yo
volumen global del capital que poseen y según la com-
era chico, recuerdo que cantábamos así:
posición o estructura de su capital, esto es según el peso
Allá en el lado oriente
relativo de las diferentes especies en el conjunto de sus
Se ve una estrella lucir
posesiones4.
Y brilla resplandeciente
Es lo que trata de explicar Hugh Trevor Ropper, so-
Lo más hermosa entre mil
bre la vestimenta escocesa: a los tartanes y atuendo es-
La virgen mira a su niño
cocés (highland dress), las diferentes clases le aggior-
José la mira también
naban algo que diferenciaba una de otras, no de manera
Y alegres los pastorcitos
intencional, sino desde la lógica de diferenciación.
Mirando estarán los tres”

3
Las comillas hacen referencia a como se autodenominaron cada uno de los entrevistados.
4
Bourdieu. “Espacio social y génesis de las clases” en Sociología y Cultura y “Espacio social y poder simbólico” en
Cosas dichas.

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Memorias del Pueblo

Era una vida de perros… petaban, al igual que Viernes Santo, la fiesta de San
Pablo Cavallo José, los Reyes.”
“En las navidades se hacía poco, que queres, no
había plata, no había tampoco comodidades de nada, Por medio de estos relatos tan maravillosos, pudi-
no había hielo, no había heladera, esas cosas, no la mos conocer como se celebraba una de las fiestas, ahora
salud, para tomar una cosa fresca, había que bajar un pasaremos a retratar, la celebración del año nuevo….
canasto al pozo de agua que tiene 14 metros, bajar la
bebida ahí, un litro de vino (la soda no se conocía), eso Y llegó el año nuevo:
eran los festejos que se hacían. Los lectores, van a notar que aquí solo encontramos
El día de la Navidad era el único día que no se traba- dos relatos, esto sucede porque, si bien a los cuatro
jaba, el día que más se respetaba; después, el primero entrevistados, se le pregunta por la fiesta del 31 de di-
de año, los reyes, las máquinas seguían trabajando. Cada ciembre, solo una de ellas recuerda algo, otro de los
máquina tenía más o menos 22 personas trabajando, una entrevistados dice que algo se hacía y finalmente los
cosa que la gente ahora no va a creer. En esas 22 perso- otros dicen que era un día común…
nas o 23, había maquinistas, foguistas, horquilleros, co-
cineros, todo completo y una casilla, allí dormía el ma- La despedida del año viejo en el hotel savoy:
quinista y los cocineros. La otra gente, cansada, trabaja- María Luisa Rivero de Ferreyra…
ba todo el día al rayo del sol, no se bañaban, dormían “El Año Nuevo, se festejaba con bombas y golpean-
tirando una lona, sobre la paja y así dormían, con mos- do bombos. El que tenía para tirar las bombas tiraban
quitos, sin mosquito, era una vida de perros. las bombas, y el que no tenía, golpeaba un tarro o tira-
El único día, el día de Navidad, no se trabajaba, cada ban tiros con una escopeta a las doce de la noche.
uno, se iba, a su casa.” Nosotros, la españolada, íbamos al hotel de Guglieri,
ahí nos reuníamos toda la españolada, y ahí cada uno
Vivíamos en el campo, llevaba su plato de comida, unos llevaban una cosa, otros
Era casi un día como cualquier otro… otra, en la cual ahí se hacía ya el festejo. La fiesta nues-
Esteban Giraudo… tra, era muy linda porque había la pileta de agua dulce,
“Nosotros vivíamos en el campo, a veinte kilómetros que estaba frente al hotel y la pileta de agua salada, en
de aquí, y ese día era casi un día como cualquier otro. contra del mar; allí estaban, las casillas para damas y
Podía ser que trajeran alguna cerveza, alguna naranjina, caballeros, alquilaban los trajes con las gorras. Una ram-
algo así, pero era un día casi común. La diferencia, era, bla muy larga de más de 3000 metros toda iluminada,
que ese día sagrado no se trabajaba, las fiestas se res- que usted podía pasear en la noche, iba y paseaba.
Había un hangar para que aterrizaran los aviones que
don Pablo Guglieri, hacía venir de Córdoba, para rendir
homenaje a las fiestas que ya habíamos pasado, con
tanto gusto y fervor, ya que eran hermosas, y muy diver-
tidos los gallegos.”

Y en el campo no se hacía nada:


Esteban Giraudo…
“Era un día común nomás, habrá habido una comi-
dita un poquito mejor, pero era un día común.”

Con estos dos entrevistados se concluye la mención


sobre el 31 de diciembre.
En este apartada, creo que es donde más queda
presente la diferencia que existía, lo que no se dice,
también nos está dando indicios de algo, desde mi re-
flexión, esta omisión por parte de los otros entrevista-
dos me esta diciendo que para ellos ese día era muy
común, el acto de no quedar grabado en la memoria
tiene su clara significación social.

Los inmigrantes traían sus músicas para las fiestas. En


este caso Chiantore y Giraudo, pioneros de La Para en
1918 aproximadamente.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 7


Memorias del Pueblo

Llegaron ya… los reyes eran tres, Melchor, preparábamos pastito, poníamos agua, para que toma-
Gaspar y Baltazar ran los camellos. Y esperábamos el regalito, que en
¿Vedes tal maravilla? aquel tiempo, sería un paquetito de caramelos o te re-
Nacida es una estrella. galaban una moneda de 5 o 10 centavos.”
Nacido es el Criador,
que de las gentes es señor.
Iré, lo adoraré

Mutando su importancia, comercial con los años, la


fiesta de Reyes Magos, parece que eran más celebra-
das que el fin de año, aquí a diferencia del anterior
apartado, se recupera un testimonio:

En la confitería “royal”:
María Luisa Rivero de Ferreyra…
“Las fiestas de Reyes también eran motivo de re-
uniones. Se reunían todos los españoles y se festejaba Otra fiesta en La Para en 1958.
en la confitería de don Abelino Fernández, se llamaba
Confitería “Royal”. Era una confitería muy linda, ahí iban Conclusión:
todos, clase media, los que podían iban, y los que no En este trabajo, de mote histórico-sociológico, lo que
podían también los recibía don Abelino. quise reflejar, es algo que era muy común en los prime-
Las reuniones se hacía en las noches y estaban pre- ros cincuenta años del siglo XX, “EL PRINCIPIO DE DI-
sentes los niños también, se hacía a la noche con los FERENCIACIÓN”, como cada uno de los habitantes se
chicos, y ahí doña Carolina, nos tiraba confites. Noso- auto denominaba y se sentía perteneciente a un espa-
tros los recibíamos con mucho cariño y amor, porque cio social.
algunos lo conocíamos y otros no. Nunca creí que un relato oral de este tema pudiera
En esa época eran épocas pobres, el que podía iba reflejarlo también, la gente se distingue una de la otra,
bien vestido y el que no podía, iba con lo que tenía, se lo pudimos ver en: “Nosotros la españolada”, “acá en el
presentaba igual. campo”, “nosotros éramos trabajadores”, “éramos po-
En esa época, ese era el día especial para nosotros, bre”.
la llegada de los Reyes Magos, porque nos esmerába- Esa lógica de diferenciación, no tiene connotación
mos para limpiar bien los zapatos, buscar el pastito, el racial, solo es la reproducción de una forma de vida en
agua, era el trabajo que hacíamos con más ilusión, por un momento determinado de nuestra historia, reflejada
el hecho que a la noche llegaban los Reyes. Al otro día en una tradición como lo es la celebración de las dife-
cuando nos levantábamos ya teníamos los regalos. Nos rentes fiestas cristianas.
poníamos contentos con lo que los reyes nos traían, pero
mirábamos al vecino y resulta ser que, los pudientes
tenían y los no pudientes no tenían; a nosotros nos daba Bibliografía:
lástima, por eso muchas veces jugábamos adentro con BOURDIEU, George: “Espacio social y génesis de
los regalos que nos habían traído los Reyes Magos.” las clases” en Espacios, Nº 2, Buenos Aires, 1988. So-
ciología y Cultura y “Espacio social y poder simbólico”
En el campo poníamos un lavatorio con en Cosas dichas.
agua… TREVOR ROPPER, Hung: La Invención de la tradi-
Esteban Giraudo… ción: Las Highlands en Escocia.
“Nosotros en el campo acostumbrábamos a esperar
los Reyes. Para Reyes poníamos un lavatorio con agua,
un poquito de pasto, y nos traían algún juguetito, que yo
ni recuerdo que lo que eran.”

Preparábamos pastito… para esperar el regali-


to...
Que sería un paquetito de caramelos
Benito Ferreyra…
“También acostumbrábamos a esperar los Reyes
Magos. Eso lo hacíamos ya en nuestras casas, ponía-
mos los zapatos para que nos trajeran algo y nosotros

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Memorias del Pueblo

FUENTES Y OLLAS….
COCINAS Y COCINEROS EN LA LOMA ALTA
Por Marta Bonofiglio1

“Un objeto parece cristalizar todo un mundo en movimiento, dinámicas de acciones e interacciones, reduciéndo-
las a una “pura expresión material” (y la desvalorización implícita en esta expresión tiene un pesado sentido) pero un
objeto parece siempre a punto de despertarse a la vida y permitir acceso a secretos de los cuales solamente él tiene
la llave para su comprensión” (Diasio Nicoletta, 2009).

Introducción Muchos de esos objetos han sido rescatados mediante


El Museo Histórico Municipal de La Para desenvuel- el trabajo de los arqueólogos, las largas recorridas de los
ve una importante tarea patrimonial en la región, parte miembros voluntarios del equipo investigación, o los ha-
de las cuales desarrolla a través de las áreas de inves- llazgos fortuitos de pescadores, vecinos, circunstanciales
tigaciones Históricas y Arqueológicas, adecuando las caminantes de las riberas de la Laguna.
salas a muestras que reflejan dicha actividad, y difun- El Museo los atesora, clasifica y exhibe, pero no los
diendo publicaciones de calidad que ayudan al conoci- conserva a la manera de inertes, inmóviles y mudos re-
miento de los logros alcanzados. siduos de actividades concluidas o interrumpidas por
Con respecto al área de arqueología ha diagramado un súbito abandono, recluidos para siempre en un pa-
una intensa tarea, en la que participan profesionales de sado ignoto
la Universidad Nacional de Córdoba, y un equipo de Intenta en cambio obtener información, datos, evi-
voluntarios, preparados para proteger el patrimonio ar- dencias, testimonios de quienes los usaron en otros tiem-
queológico, y colaborar activamente con los arqueólogos pos. Intenta entrever modos del hacer cotidiano de co-
profesionales. munidades que producían y consumían, que se trans-
El ámbito de la educación es uno de los destinata- mitían técnicas para amasar la arcilla, tallar la piedra y
rios preferenciales en cuanto a la difusión de los estu- el hueso, hilar y tejer las fibras. Intenta, perdida la co-
dios científicos, considerando que los educandos son, municación oral, escuchar las voces de la materia, su
desde hoy, los protectores de ese patrimonio. La rela- composición, el modelado que la hace diferente, las in-
ción con el personal directivo y docente y su colabora- cisiones y guardas que transmiten estéticas que pare-
ción, facilitó el diseño y publicación de Cuadernillos para cen individuales, pero que representan la voz de la cul-
docentes y alumnos, que se han convertido en un ágil tura, de la sociedad a la que pertenecen.
instrumento de trabajo. La intención de este breve artículo es ofrecer a la
Las investigaciones en esta área, poco conocida para comunidad parte de nuestros estudios referidos a las
la bibliografía de la provincia, aportan elementos que sociedades que habitaron las costas y espacios circun-
paulatinamente nos muestran un mundo diferente al que dantes de la Mar Chiquita, algunas de las estrategias
describían los pioneros de la ciencia (Frengüelli y diagramadas para su supervivencia, acciones cotidia-
Aparicio, 1941, Serrano, 1945, Montes, 1960). Socieda- nas que se reflejan en sus representaciones tecnológi-
des que viven el ámbito de la laguna desde hace miles cas y artísticas, el uso del ambiente lacustre y sus posi-
de años, pero que antes de la llegada de los españoles bilidades.
habían desarrollado economías productoras de alimen-
tos, con todo lo que ella significa desde el punto de vista El medio ambiente
tecnológico: avances en el tratamiento del material lítico, Situarnos en el ámbito de la laguna, y en ella ubi-
óseo y cerámico; no debemos dejar de lado otras pro- car los lugares de asentamiento de las comunidades
ducciones (maderas, tejidos) que, por las característi- del pasado, no es tarea fácil. Sabemos acerca de las
cas y la composición del depósito y los procesos de for- transformaciones del entorno; de los pulsos de sequía
mación de los sitios arqueológicos, han desaparecido. e inundaciones que indujeron a los antiguos habitan-

1
Universidad Nacional de Córdoba - Museo Histórico Municipal de La Para.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 9


Memorias del Pueblo

tes a diseñar acciones para adaptarse a las nuevas El terreno está cubierto por el monte, en el que abun-
condiciones. dan quebrachos, especialmente blanco, algarrobo, tala,
Hoy todavía, luego de haber vivido una etapa seme- chañar , vegetación espinosa, pastizales y una fauna
jante, nos cuesta reconstruir el paisaje, imaginar como compuesta de gran variedad de aves, la mayor reserva
menos de 100 años atrás, lo que llamamos “Isla” era de la Argentina: peces, caracoles, anfibios, saurios,
una península que se adentraba en la Mar, tierra firme a mamíferos, entre ellos coipo o nutria, carpincho, aguará
la que llegaban sulkis y camiones, donde se explotaba guazú, comadreja, tucu-tucu, zorro, rata colorada. El
el monte, actualmente casi todo sumergido, como en el puma habita todavía el monte chaqueño, en tanto que
caso de El Mistolar. otras especies que lo caracterizaron en el pasado, como
Los mapas satelitales muestran la diferencia de pro- el jaguar y venado de las pampas, están prácticamente
fundidad en la parte norte de la laguna, su inclusión con extintos.
el área de bañados, las pequeñas “islas” que se recor- Diversas técnicas como las imágenes satelitales, los
tan entre las aguas. resultados de estudios geológicos y paleontológicos,
En nuestros recorridos observamos cómo emergen observaciones sobre el clima etc. han permitido estu-
las partes altas de las copas de los árboles, especies diar la alternancia entre etapas húmedas y secas, que
chaqueñas convertidas en blancos referentes de lo que definieron paisajes diferentes (Piovano et al.:2002; 2005)
era la tierra firme, invadida desde los años 70 por la ha estudiado los sedimentos de la laguna desde 13.000
mar. años atrás y las fluctuaciones que, desde el ciclo húme-
La trama del paisaje y sus diferencias y los resulta- do correspondientes a dicha época, dieron lugar a trans-
dos de nuestras búsquedas: los artefactos, los restos gresiones que se prolongan hasta el 4000 AP, inicio de
de alimentos, los yacimientos, las relaciones entre ellos, una etapa mucho más seca.
constituyen parte del contexto arqueológico. Los com- Estos cambios se reflejaron en el paisaje y sus com-
ponentes culturales y el medio natural constituyen un ponentes, en el espacio ocupado por las sociedades
corpus de información dinámico, en el que juegan dis- humanas, que debieron adaptarse a dichas condicio-
tintas variables, motivo de estudio de la arqueología, nes. Para el arqueólogo es un verdadero desafío inter-
geo-arqueología, la geología, la arqueobotánica, la pretarlas, ya que debe observar las particularidades del
zooarqueología, entre otras. registro, las alteraciones post deposicionales,
Geográficamente, la depresión de la Mar Chiquita geomorfológicas, biológicas y las repuestas antrópicas.
está relacionada con el pie de monte de los cordones Los sectores seleccionados para nuestras investi-
serranos de Córdoba, con la penillanura, con las llanu- gaciones: la playa y la barranca, que si bien actualmen-
ras y bañados de Santiago del Estero; la cuenca del te están separadas por una bahía, formaron un solo
Salí-Dulce la une con los ámbitos del Noroeste argenti- espacio al que denominamos “Loma Alta”, en el que se
no. La cartografía jesuítica muestra el antiguo recorrido estableció una población numerosa, de acuerdo al vo-
del Salado que desembocaba en ella; posteriormente lumen de los hallazgos. Estos se recuperaron de la pla-
cambió el curso y llevó sus aguas al Paraná. ya, arrastrados y depositados por las aguas de la ba-
Esta facilidad de acceso y las posibilidades de su- rranca, donde se exploró el amplio perfil que quedó al
pervivencia que aportaron el bosque chaqueño, y los descubierto por la acción del oleaje. Ambos mostraron
espacios lacustres debieron hacer de la región un lugar evidencias de un establecimiento permanente, donde
de tránsito y explotación usados por las sociedades ca- además de manufacturar la cerámica, se realizaron otras
zadoras-recolectoras, de acuerdo a algunas evidencias, actividades
sobre todo del material lítico, y posteriormente, por gru-
pos de economía productora de alimentos. Ergología
Nos ocuparemos de la producción cerámica, prefe-
El sitio rentemente, sin olvidar que es sólo un componente más
En este artículo haremos referencia a los hallazgos del contexto que conforma el registro de las actividades
del sector denominado Loma Alta (Sudoeste de la lagu- de estos grupos.
na). Actualmente se ve como una barranca, elevada a Nuestra idea no es centrarnos en el objeto en sí mis-
unos 5 metros sobre las playas. Era parte de un espacio mo, sino en éste como reflejo de los modos de actuar
mucho mayor de tierra firme, a juzgar por los copas de de los hombres que los produjeron. Pensamos que de-
árboles que emergen de la mar; siguiendo la dirección trás de ellos se esconden sucesos, acciones sociales,
oeste-este existe una continuidad con la actual “isla” del elecciones, programas de trabajo, soluciones a los te-
Mistolar, con la que estaba unida. Barranca, playas ale- mas de todos los días.
dañas y la isla constituyen el sitio arqueológico en el Hemos elegido la producción cerámica en este artí-
que estamos trabajando, parte de las riberas que se culo, porque ella refleja un renglón interesante dentro
extienden hacia el norte y que rodean la laguna, hasta del sistema económico y social en general; indica acti-
encontrarse con los bañados del Río Dulce. vidades individuales: las del alfarero que maneja la se-

10 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

lección de las arcillas, la preparación de las pastas, las ticas tecnológicas y posibles funciones. Los alfareros
formas, las decoraciones, el proceso de cocción, las de la laguna seleccionaron los componentes adecua-
posibilidades de uso; y la presencia de la sociedad a la dos, tanto los que se refieren a la matriz arcillosa, como
que pertenece, que se manifiesta mediante tradiciones, a los desgrasantes en caso de usarlos (cuarzo y tiesto
estilos, y otras convenciones que proceden de las trans- molidos, vegetales), con los que consiguieron texturas
misiones colectivas. de distinto tipo.
La organización tecnológica es, de algún modo una En cuanto a las formas, éstas definen las funciones
respuesta, y a la vez una estrategia, con ellas se elabo- para las que fueron concebidas: el tamaño, la estabili-
ran planes de uso de los recursos existentes, y se dise- dad, la accesibilidad del contenido , determinado por la
ñan condiciones para afrontar la vida cotidiana. Los res- abertura de la vasija, la facilidad de transporte o movi-
tos cerámicos constituyen una de las muestras mas miento, si es fácil de asir, si tiene asas, etc.y la
abundantes entre los materiales recuperados en la ta- durabilidad, o sea la vida útil. Estas propiedades tienen
rea del arqueólogo, tienen además una larga persisten- que ver con el grosor, la resistencia al stress mecánico,
cia en la matriz del registro, conservan una serie de pro- el comportamiento térmico, la porosidad, permeabilidad,
piedades que permiten establecer indicadores, base de densidad y el tratamiento de la superficie (Rice, 1987)
la sistematización de estudios y análisis; es posible so- Agregamos que la relación entre la forma y la fun-
meterlos a técnicas de investigación apropiadas para ción de una vasija constituye un problema complejo, ya
determinar su composición, cronología, procedencia. que responde, además de las características tecnológi-
El hombre manipuló desde muy antiguo la arcilla. Es cas descriptas, que determinan posibilidades de uso, a
posible que los primeros contenedores hayan sido cala- las condiciones en que ésta se integre, a las disponibili-
bazas vacías y secas u otros frutos similares, sus res- dades de sus usuarios, a la ideología o desempeño sim-
tos no han llegado hasta nosotros. Politis, (2001) afirma bólico de la sociedad a la que pertenece
que en la región pampeana y zonas aledañas la alfare- Por otro lado, las denominaciones que empleamos
ría datada tiene una antigüedad de 3000 años, en con- proceden de nuestra visión actual, integran la materiali-
texto de cazadores recolectores tardíos dad de una cultura de la que no tenemos otra referen-
La arcilla sirvió para dar forma a contenedores, es cia.
decir objetos que tienen que ver con el proceso de la Leroi-Gourhan (1989) observa en culturas
alimentación, desde la recolección de las materias pri- etnográficas, que “el hecho de comer trae aparejado dos
mas hasta su consumo, y almacenamiento; también con series paralelas de tres o cuatro objetos adaptados, unos
ella se confeccionaron otros artefactos cuyos usos son para comer y otros para beber”.
diferentes y que pertenecen a diversas esferas de ac- Intentaremos, sin pretender atribuir esquemas de uso
ción: adornos, estatuillas. entre los antiguos habitantes de La Loma Alta, recono-
Las playas de la Mar Chiquita albergan miles de frag- cer tipos de objetos usados en la alimentación y de este
mentos pertenecientes a estos objetos, transportados modo, aportar datos para la reconstrucción de uno de
por los movimientos de la laguna; es decir, están fuera los aspectos del modo de vida de sus habitantes.
de su contexto de uso. En cambio, los que recupera- Las vasijas son contenedores, que pueden haberse
mos en La Loma Alta corresponden a trabajos arqueo- utilizado para diversas funciones alternativamente; lo
lógicos en el perfil y la parte superior de la barranca, cual hace difícil una especificación exacta de su papel
evidencian un establecimiento permanente, y la ocupa- en la cadena de procedimientos alimenticios. Rice
ción del sector por una población numerosa, que desa- (1989:299) explica que ninguna de las variables prima-
rrolló allí tecnologías variadas. rias de la cerámica (forma, tamaño, función composi-
Contaron con recursos diversos, que sostuvieron la ción y número de vasijas) puede predecir de manera
producción alfarera y los montes de la Región Chaqueña consistente y confiable a la otra
Oriental aportaron el combustible suficiente para la coc- Existe una relación entre atributos como la forma y
ción, el suelo, arcillas adecuadas; desarrollaron conoci- el uso que se ha previsto. Un artefacto para cocinar al
mientos y técnicas que tienen que ver con la composi- fuego necesita poseer propiedades como un contorno
ción y el manejo de los materiales, la búsqueda de las redondeado que permita una mayor difusión del calor
formas apropiadas para aplicarlos a usos diferentes. interior, al mismo tiempo que su conformación evite el
Con respecto a las vasijas, éstas se concibieron para daño térmico. De eso se desprende la diferencia, entre
cumplir con varias funciones: almacenar los productos otros atributos, de vasijas abiertas y cerradas.
elegidos para un uso posterior, formar parte del proceso Las primeras, según Balfet (1992) son aquellas que
de preparación y cocción de los alimentos, servirlos o no tienen constricción de diámetro y cuyo diámetro máxi-
exhibirlos, facilitar la ingesta individual, es decir, dividir mo coincide con la boca (ollas, platos, fuentes, escudi-
en porciones y reservar. llas, etc.)
Una de las características de la producción cerámi- Las segundas, cerradas y restringidas, con o sin
ca en el sector, es la variabilidad de formas, caracterís- cuello, y cuyo diámetro mínimo es superior a un tercio

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Memorias del Pueblo

del diámetro máximo (jarro, botella, etc.) lograr una superficie rugosa, relacionada tal vez con su
Las ollas son vasijas abiertas, con un orificio sufi- función En muchos casos la arcilla que forma el borde
ciente para introducir los alimentos y el líquido necesa- se estira para tomar prolijamente la terminación de la
rio para la cocción, además permite manipular los con- red y cubrirlo.
tenidos y controlar el proceso del cocido.
Recuperamos ejemplares de ollas de distintas ca-
racterísticas, (enteras y fragmentadas) La altura media
es de 20-22 cm., hay ejemplares mayores y menores,
las variaciones, dentro de estos rangos no son impor-
tantes. Se trata de vasijas cuyo grosor oscila entre 3 y 4
mm. con bases planas o plano-cóncavos, con asas en
algunos casos, o pequeños rebordes modelados (ore-
jas) que facilitarían el uso; otras no tienen asas.
Un 30% de los ejemplares recuperados presentan
huellas de hollín o de haber sido sometidas al fuego en
forma directa.
Interiormente están alisadas, éste puede ser un
método para lograr impermeabilizar el recipiente. Dicha
característica permitiría tipos de cocción como los her-
vidos o guisados. Los estudios arqueobotánicos actua-
les han ampliado la calidad de las informaciones acerca
de los alimentos procesados en ellas. En dos fragmen-
tos con estas características se recuperaron restos de
materia grasa y en uno de ellos, evidencias de
microfósiles sílico fitolitos afines a Zea-Maiz (Laura Se usaron múltiples formas de redes cuyas
López 2008 com. pers.). cuadrículas son rectangulares, cuadrangulares,
El monte y las costas brindaban, como lo explica- romboidales, grandes (desde 20mm a 5mm.de lado),
mos mas arriba, múltiples opciones culinarias: cérvidos, con nudo simple o doble, hilos fabricados con fibras grue-
camélidos, aves, coipos, nutrias, peces. etc., de algu- sas o finísimas. Es notable la intencionalidad, el tiempo
nos de los cuales, además obtenían otros productos: y la técnica puestos en práctica para lograr este efecto
pieles, plumas, huesos, dientes; el ñandú aporta grasa, y aplicarlo a funciones que apenas logramos entrever.
carnes, huevos... Entre los vegetales, el algarrobo es
generoso, sus vainas y semillas se comen verdes o se-
cas; mezclados con miel se fabrican “bolanchaos”, como
se los llama hoy en Santiago del Estero, se comen tos-
tadas, se preparan bebidas fermentadas como la aloja
o chicha; añapa, arrope; con sus harinas se hace
“patay”,el chañar brinda similar utilidad. Otros vegeta-
les, poco conocidos para nosotros, debieron usarse,
entre ellos el tasi, la totora, ajíes nativos, el yuyo colora-
do, etc.
Los recipientes en este caso, las ollas, se manipu-
lan cotidianamente, se exponen al fuego, y a los cam-
bios de temperatura y a causa del shock térmico y me- Un tema importante es el de la actividad pesquera.
cánico, sus consecuencias son roturas frecuentes, por Son escasas las evidencias del manejo de peces
lo que, los hallazgos más comunes pertenecen a estas como integrantes de la dieta humana en la región, posi-
piezas sobre todo en el espacio que hemos definido blemente por las condiciones del registro, en especial
como de actividades domésticas. las características ácidas y salinas de los sedimentos. A
Un 20% de los fragmentos que clasificamos como modo de hipótesis planteamos la posibilidad de uso de
ollas tienen en su parte interna impresiones de redes, este renglón de la subsistencia, ya que por largos pe-
de cestas o ambas a la vez. ríodos sociedades de cazadores-recolectores y produc-
El uso de esta técnica puede deberse a múltiples toras eligieron este ámbito predominantemente acuáti-
causas: fabricación de un molde previo en base a una co para establecerse, espacio no solo integrado por agua
cesta cubierta por una red, sobre el que se distribuye la salada, sino por importantes espacios de agua dulce en
arcilla, aplicación de mallas de red antes de la cocción el que pudieron prosperar diversas especies. Investiga-
sobre la superficie interior, a modo de decoración o para dores actuales (González, 2005) han demostrado la

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Memorias del Pueblo

obtención de recursos marinos en sociedades tempra- Otras ollas, además de las características estructu-
nas. En nuestro caso, carecemos de hallazgos direc- rales mencionadas, aportan elementos como orificios,
tos; contamos con evidencias indirectas: el uso del crá- círculos perfectamente logrados. En algunos casos, bajo
neo de un moncholo, bágrido que habita en las cerca- el asa, en otros en el cuerpo de la vasija, en otros, en la
nías de la desembocadura de los ríos Suquía y Xanaes, base. Sólo enunciamos hipótesis: algunos fragmentos
con el que se fabricó un colgante en forma de búho, así remontados tiene 2 agujeros próximos entre sí, lo que
como la cantidad y variedad de técnicas para tejer re- sirve para “parchar” la olla por un tiempo, o sea unir
des, la facilidad de acceso a sectores con aguas dulces partes que se han fragmentado. Colocados en la parte
con posibilidades de obtener ejemplares de fauna íctica. superior, (cuello), paralelos, sirven para colgar el reci-
Ceruti (2000) menciona información etnohistórica refe- piente durante la cocción y no someterlo directamente
rida a los querandíes avistados por las huestes de al fuego Sin embargo, la mayoría de estos orificios no
Gaboto, que pescaban, salaban y ahumaban el pesca- cumplen estas funciones, sino que se los encuentra ais-
do y elaboraban “manteca de pescado”. lados. En algunos casos, como los agujeros en la base,
A través del tiempo y de acuerdo a los usos previs- está claro que pudieron usarse como colador, para per-
tos, se han diseñado redes de distinto tipo: fijas y móvi- mitirla pérdida de líquidos; tal vez sirvieran para escurrir
les, redes individuales, llamadas salabres o salabardos, grasas en otro tipo de cocciones.
sostenidas por un círculo de vegetales, desde el cual se
maniobran, que se emplean en aguas poco profundas
(Leroi Gourhan ,1989).Algunas, de tramado muy peque-
ños (2mm) pudieron obrar como tamices para harinas.
No sabemos qué formas adoptaron nuestras redes, y si
realmente se emplearon para conseguir el alimento; sus
magníficas impresiones en los contenedores de cerá-
mica esperan nuevas investigaciones.
Queda abierto el problema del material del que se
componen los hilados. Observamos torciones diferen-
tes, a partir de 2 o más cabos; pueden tratarse de fibras
conformadas por lanas, fibras vegetales, como pajas,
palo borracho. Según Parodi (1964) el algodón en la
Argentina es originario del área subtropical, región Chaco
paraguaya, Litoral, por lo que no sería imposible su co-
nocimiento y uso en la región.
Ninguno de los ejemplares analizados de estos
ceramios con impresiones de redes o de cestas presen-
ta restos de hollín, signos de cocción o adherencias gra-
sas, por el contrario, se los ve absolutamente limpios, lo
que permite observar las técnicas textiles empleadas. ¿Cómo cocinaban? Sometiendo los elementos ve-
Pensamos que sirvieron como contenedores de sólidos: getales o animales directamente a la llama de hogueras
vainas de algarrobo o chañar, mistol, frutos, diferentes y fogones, mantenidos con el abundante combustible
objetos. de la zona.
Comer los alimentos asados, es quizá la más anti-
gua forma de adaptación de la ingesta inventada por el
hombre, quien, desde épocas remotas descubrió que la
carne se digiere mejor cocida que cruda y es más fácil
de ingerir. Algunos huesos quemados de ciervos y
camélidos recuperados en La Loma Alta, pueden co-
rresponder a esta forma de consumo
Otro sistema muy antiguo es cocinar con cenizas o
piedras calientes, colocando el producto entre ellas. Tal
vez de este sistema derive el horno de tierra, extendido
en diversas partes del mundo desde inicios del Holoceno
Se trata de un hoyo practicado en el suelo, en cuya base
se colocan piedras incandescentes u otros combustibles
y encima se disponen capas de alimentos, separadas por
vegetales. Se cubre el hoyo con ramas, hojas y tierra: la
cocción se efectúa lentamente, en forma completa.

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Memorias del Pueblo

Algunos de nuestros hornitos que se distribuyen por


cientos en las playas, costas y que se entreven bajo el
agua pudieron cumplir esta función, aunque también
otras. Estamos investigando el contenido de los que
hemos excavado.
Los recipientes de barro pueden exponerse directa-
mente al fuego, tomando precauciones para su coloca-
ción mientras se efectúa la cocción: por ejemplo, apo-
yándolos sobre la cara horizontal de tres o más piedras,
fabricando un intermedio incombustible que asegure la
circulación de aire y el apoyo del contenedor.
Como lo explicamos antes las ollas pueden colgar- blecer regularidad en su posición con respecto a las
se sobre el fuego, usando distintos tipos de procedimien- partes del ceramio, y que hacen imposible albergar lí-
tos: pendientes de ramas, con ganchos, atadas, etc. quidos o sólidos, salvo para funciones como transvasar
Las vasijas pueden ser lisas o decoradas Interna- o colar.
mente, están alisadas para impedir el paso de los líqui-
dos entre las paredes, a veces el efecto del pulido se
logra por el uso y la presencia de materia grasa.

Una de las características de los conjuntos arqueo-


lógicos recuperados es la presencia de grandes fuen-
tes. Balfet (1992), las denomina “platos grandes”. No-
sotros las llamamos de este modo por que son recipien-
tes redondeados cuyo diámetro corresponde a un pro-
medio de 30 cm.; de paredes divergentes, muy abiertos
con bases circulares planas o plano cóncavas. Las he-
mos dividido entre las que presentan un perfil en ángulo
Externamente, las decoraciones son variadas, es- obtuso y las que presentan perfil en ángulo recto. Las
pecialmente adornan los bordes con multitud de formas: primeras están adecuadas a contener sólidos, dada su
zig-zag, líneas rectas u ondulantes llenas de puntos, escasa profundidad y bases de diámetro muy reduci-
unguiculados, en surco rítmico, guardas simples y com- dos; las segundas, pueden contener sólidos o líquidos,
plejas. Es posible que algunas terminaciones, como el según la altura de sus lados y las características de la
cepillado con surcos profundos, las incisiones forman- base, del mismo diámetro que la abertura.
do guardas y el alisado muy tosco, hayan cumplido fun-
ciones utilitarias como facilitar la expansión del calor o
permitir manejar con mayor seguridad la pieza. Algunos
autores (González 2005; Politis, 2001) consideran que
estas representaciones constituyen elementos aptos
para materializar y transmitir contenidos sociales y sim-
bólicos.
Agregamos grandes recipientes troncocónicos, con
impresiones de redes y cestas interiores y/o exteriores
que debieron usarse para almacenar, ya que no pre-
sentan evidencias de haber sido sometidos al calor
Otro tipo de vasijas posee características especia-
les: de excelente manufactura y cocción, se les ha prac-
ticado aberturas longitudinales sin que podamos esta-

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Memorias del Pueblo

vanta escasos centímetros de la base. Podrían usarse


para cocinar tortillas u otras preparaciones colocando
la placa mediante soportes (piedras a modo paredes de
de sostén, apoyadas en los bordes) directamente sobre
el fuego.

Cuenco, puco, escudilla2


Conforman un conjunto de piezas muy frecuentes
en el sitio, muchas de las cuales hemos recuperado
enteras; las clasificamos en hemisféricas y
troncocónicas. Su diámetro oscila entre los 5 y 8 cm.
Contamos con ejemplares enteros o fragmentos de Algunas se han manufacturado toscamente, otras se
más del 75% del recipiente, lo cual nos ha permitido caracterizan por las cuidadas terminaciones, en algu-
observar características de su manufactura, entre ellas, nos casos, tienen guardas incisas paralelas al borde.
la forma ondeada de los bordes, los diferentes tipos de Los cortes delgados efectuados sobre las del primer
incisiones con las que se decoran, los acabados inter- grupo evidencian pastas con escasa cantidad de arci-
nos y externos: guardas incisas, pinturas rojas. En este lla, arenas con abundante cuarzo, tiesto molido y grá-
caso, el pigmento rojo cubre toda la superficie o lo hace nulos de carbón. Su manufactura es expeditiva, y si bien
a modo de bandas (rojas, alternadas con las de color las paredes resultarían buenas transmisoras del calor,
ante de la superficie, negras).Ambas formas no han sido podrían ser frágiles. Un 15% de las bases son planas,
concebidas para someterlas al fuego, no presentan ras- pero la mayoría posee bases redondeadas, carentes de
tros de hollín, no sería posible manipularlas sobre el apoyo autónomo. Se debieron sostener en la mano, para
calor. consumir alimentos o bebida en forma individual, o de-
Resulta factible pensar que los alfareros han toma- positar sobre la arena u otro soporte. Se adaptan para
do decisiones durante las etapas del proceso de manu- almacenar o consumir líquidos o sólidos, en porciones
factura y que han seleccionado materiales, formas de o cantidades pequeñas.
trabajar la arcilla, tamaño, decoraciones, de acuerdo al
desempeño que ese artefacto tendrá durante su vida
útil, o sea el tipo de funciones para el que ha sido desti-
nada, (Shiffer y Skibo, 1997) en este caso, claramente
diferenciadas .Interpretamos dichas características como
la expresión de conductas sociales, del funcionamiento
de los sistemas culturales.
Estas fuentes tal vez signifiquen el acceso a la co-
mida en forma comunitaria “para poner el alimento de
todos los comensales, cada uno de los cuales se sirve
de una fuente común” (Leroi Gourham, 1989:184) lo cual
puede ocurrir en forma cotidiana o en momentos espe-
ciales. La decoración de estos objetos, integrada por
guardas incisas, punzonadas, en surco rítmico; pinta-
das a modo de paneles o cubriendo toda la superficie,
implican la preparación del artefacto para exhibir, mos-
trar, resaltar los alimentos, crudos o cocidos, sólidos o
líquidos que se ofrecían a los comensales. Una vez dis-
tribuidos, los participantes de la comida observarían las
características de la decoración, especie de escenario,
de puesta en valor de los productos y del acto de servir.
En cuanto a la tecnología empleada en la produc-
ción de las fuentes, las pastas y la cocción son unifor-
mes, están alisadas o pulidas, ostentan decoraciones
variadas: la externas son especialmente incisas, las in-
ternas incisas y pintadas
Hemos identificado fragmentos que asignamos a
“placas” (Balfet, 1992), dado que la pared lateral se le-

2
Primera Convención Nacional de Antropología, Córdoba 1969.

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Memorias del Pueblo

Botellas Comentario
Se trata de vasijas cerradas con un gollete cuyo diá- “…comer sirve, no sólo para conservar la máquina
metro es igual o inferior al tercio del diámetro máximo biológica del cuerpo, sino para concretar una de las
(Balffet1992). Sheppard (1963) las considera: “restrin- maneras de relación entre las personas y el mundo, al
gidas-independientes”. Para su reconstrucción contamos perfilar así una de las marcas fundamentales en el ám-
con una pieza entera y fragmentos del cuello o gollete, bito espacio-temporal” (De Certau. 2000: 189)
que en todos los casos ostenta decoraciones incisas Sabemos todavía poco acerca de los antiguos habi-
paralelas al borde. Su forma las hace aptas para conte- tantes de la laguna, por lo que adentrarnos en su mun-
ner líquidos; su tamaño oscila entre los 20-25 cm. de do a través de los artefactos que usaron en la prepara-
largo y su diámetro entre 10cm y 15cm. ción de sus comidas y en otras acciones que integran
ese proceso resulta una vía por la que empezar a tran-
Vaso sitar en su mundo cotidiano.
Corresponde, según Sheppard (1963) a una vasija Los objetos relacionados con la alimentación adquie-
restringida simple. Contamos con escasos ejemplares, ren una significación muy especial, ya que, a su implíci-
por lo que provisoriamente les adjudicamos 15cm de ta materialidad se agregan los infinitos sentidos que
largo y 6cm de diámetro de la base. Éstas son planas y surgen en la cadena de acciones que parten desde la
apoyan independientemente. Pudieron contener líqui- recolección, el cultivo, la cosecha, la caza, o la cría, el
dos o sólidos. Internamente están alisadas, lo que faci- almacenamiento, la preparación, la cocción ,el consu-
lita la impermeabilización mo… Acciones que producen objetos materiales, pero
Algunos ejemplares han sido decorados en el borde que se confunden con sentidos religiosos, creencias,
con incisiones en zig-zag, el cual se restringe suave- ritos, modos de fabricar, de guardar, de ofrecer; rece-
mente. tas, recuerdos, maneras de relacionarse, de establecer
. vínculos.
Sabemos que no recuperaremos los gestos de la vida
diaria: llevarse la carne a la boca, morder una fruta, in-
troducir agua en la olla. Pero podemos inferir, a través
de las huellas dejadas en los objetos, en los objetos
mismos los resultados de estas acciones.
Por otra parte, “un objeto circula, vive, cambia, pone
en contacto, hace y deshace relaciones, muere, rena-
ce” (Nicoletta Dasio, 2009)
Forman parte del mundo material, de un modo de
concebir formas y colores, de un mundo de ideas, sen-
saciones experimentadas de quien lo fabrica y de las de
sus destinatarios
Los alimentos que se cocinan nos llevan al ámbito
Cucharas de producción ya sea ocasionada por la naturaleza o la
Definimos de este modo a objetos de cavidades ova- mano del hombre. Los habitantes de La Loma Alta, y los
les, con o sin mango, pero cuya función puede consistir de la región que los comprende, habitaron un territorio
en manipular harinas, semillas u otros sólidos, o líqui- muy particular, entre el agua y el monte, con los recur-
dos. También consumir individualmente comidas o be- sos que ello significaba y entre los que seguramente
bidas. Dentro de esta clasificación incluimos variantes eligieron.
como pequeñas fuentes ovales sin mango, de manu- Las experiencias, pruebas errores y aciertos los ha-
factura similar a las cucharas. brán llevado a manejar vegetales y animales de acuer-
do a gustos y selecciones de distinto tipo, así como a
Pipa probar técnicas de cocción, de almacenamiento, de con-
En el mismo contexto fue recuperado un fragmento sumo inmediato o diferido y a diseñar instrumentos para
de pipa. Se trata del extremo final (3cm de largo. Diá- ello.
metro máximo 2,5cm. Diámetro mínimo 2cm). Es de El artesano que fabrica el artefacto concibe la forma
pasta homogénea, muy bien cocido, con decoraciones que le va a dar, planea y modela de acuerdo a la finali-
incisas, un círculo que rodea el extremo e incisiones dad que tendrá: Así surgen ollas grandes y pequeñas,
irregulares sobre el tubo. La presencia de este artefacto de paredes adecuadas al fuego, botellones para conte-
plantea la posibilidad de consumo de estimulantes, es- ner líquidos, fuentes para servir, coladores y cucharas,
peraremos contar con otras evidencias para profundi- asas para manipular con más facilidad los recipientes.
zar el análisis. Pensamos que estos objetos son parte de un siste-
ma complejo, componentes de un orden establecido,

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Memorias del Pueblo

transmitido en el tiempo, una costumbre tal vez incons- según Caggiano (1986) es un rasgo que caracteriza a
ciente (“habitus”, Bourdieu, 1979); participan así mismo los habitantes de las Tierras Bajas de América del Sur.
de tabúes, rituales y significados simbólicos (Orton, Esta misma autora, Calandra y Cremonte, los señalan a
1997). lo largo de la Cuenca del Plata.
Hacia el 1300 D.C. las costas noroeste, este y sur Ceruti (2000) las identifica para Goya-Malabrigo.
de la Mar Chiquita comparten formas de producción ce- Politis (2001) y González (2005) en la región pampeana,
rámica que distinguimos en contenedores y en objetos nosotros (Bonofiglio y de la Fuente, 1984) en la cuenca
sin utilidad en el mundo del manejo directo de alimen- media del Xanaes. Se trata de un amplio espacio en el
tos: estatuillas, muñequeras, colgantes. No podemos aún que esta costumbre decorativa se extendió, manifesta-
definir un estilo, pero advertimos componentes muy vi- da en trazos simples o muy complejos. Sin embargo, no
sibles dentro de un ámbito que podríamos llamar cultu- hemos identificado en la zona del Mar de Ansenuza, los
ral. Creemos que estas formas compartidas favorecie- corrugados que caracterizan la región chaqueña y las
ron un modo de integración y comunicación. cuencas del Paraná y del Plata, así como son escasas
Las vasijas de formas equilibradas, cuidadas y va- las cabezas de ave como agregados a los contenedo-
riadas, con guardas complejas incisas, ya sea con sur- res, tan frecuentes en el litoral.
co rítmico, unguiculares, con combinaciones de líneas La Loma Alta ha brindado valiosa información sobre
curvas y rectas, pintadas, el trabajo de bordes y labios, las tecnologías mencionadas y en especial, la cerámi-
las impresiones de redes y cestas, indican el trabajo de ca. Insistimos que el sitio estudiado es parte de un es-
artífices especializados, con dedicación de tiempo a pacio mayor, con sectores sumergidos, y otros aún no
estas tareas. La insistencia en el ámbito costero estu- explorados de la profundidad del monte. Creemos que
diado, de las formas y decoración mencionadas, son aporta información acerca de algunas características de
reflejo de relaciones sociales muy consolidadas, tal vez la organización social de este grupo que vivió allí las
de una cierta integración regional que pudo transmitirse últimas centurias antes de la Conquista.
desde antiguo. La posibilidad de dedicar parte de la fuerza laboral a
Ceruti considera la existencia de los “hornitos”, como la manufactura de objetos, que si bien se emplean para
el "elemento marcador" de la presencia de grupos hu- la vida cotidiana, exceden el uso común, implican divi-
manos de economía cazadora-recolectora-pescadora, sión del trabajo y especialidad. Entre ellos menciona-
que el llama “Cultura de la llanura Central Argentina” mos los siguientes: fuentes muy bien elaboradas, exce-
Sus integrantes recorrían espacios áridos, pero relacio- lentes cocciones, selección de decoraciones, las que
nados con lagunas; comunicaban la cuenca del Paraná muestran tendencias, modelos; diferentes objetos para
y sus tributarios principales, con el pie de las Sierras funciones diversificadas: cántaros, botellas, escudillas,
Pampeanas, es decir, la zona de la región chaqueña, cucharas, grandes vasijas troncocónicas, posiblemente
en sentido amplio, el norte de la Provincia de Buenos usadas para almacenar sólidos. Estas piezas son parte
Aires, las cuencas del Río Dulce y de la Mar Chiquita. de acciones sociales: cocinar, ofrecer, servir, consumir.
Lagens (2007 com. personal) aporta fechados mayores Integran un sistema que tuvo sus reglas, determina ac-
a 4000 años para un esqueleto recuperado en la Lagu- ciones técnicas, prácticas.
na del Plata; un fechado posterior, de la Loma Alta, to- Nos interesa agregar a lo anterior los objetos que
mado sobre carbón relacionado con un hornito y cerá- llamamos simbólicos: estatuillas, vasos zoomorfos, ob-
mica (Bonofiglio;2007) indica una cronología de 1300 jetos de piedras foráneas muy pulidas o grabadas, pi-
D.C. Estos datos apoyarían la idea de una continuidad pas, a fin de aportar datos para definir el proceso de
en la ocupación de las costas de la Mar Chiquita3, por intensificación de la producción y de la complejidad so-
sociedades que debieron adaptarse a períodos de cam- cial, algunas de cuyas características están dadas por
bios en cuanto al comportamiento biológico y climático la disposición de mano de obra especializada, tanto para
de la zona, y por ende, a la variabilidad de recursos. la producción de objetos de uso doméstico como
En el Holoceno Tardío la región mencionada alcan- suntuarios.
zó desarrollos importantes en cuanto a la tecnología Los objetos a que hemos hecho referencia son una
cerámica, lítica, ósea, textil. Algunos elementos com- pequeña parte de un conjunto mayor, de un contexto
partidos son los hornitos, el instrumental lítico muy ela- de utensilios, armas, adornos que no tienen entidad
borado, artefactos pulidos, grabados, piedras con ho- en si mismos, sino en cuanto representan una dinámi-
yuelos, elementos de molienda sobre minerales locales ca de co-construcción del universo habitado. Sujetos y
o foráneos, cerámica con pintura roja; negra y roja so- objetos se recrean en la acción, en el entramado de la
bre ante. En cuanto a las decoraciones el surco rítmico, cultura.

3
Fabra et al 2006.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 17


Memorias del Pueblo

Agradecimientos Fabra , M.; A. Laguens D. Demarchi


Este trabajo pudo concretarse gracias a la colabora- 2006 Análisis intra e inter poblacional de rasgos
ción del Sr. Intendente Municipal Mindo Tito, el Sr. Se- craneanosnométricos de aborígenes prehispánicos en
cretario de Gobierno, Claudio Vaca y la Sra. Encargada el actual territorio de Córdoba. Revista Argentina de
del Área de Cultura, Silvana Pellarolo; del Sr. Director Antropología Biológica
del Museo Histórico Municipal de La Para Lic. Mgtr. Car-
los Ferreyra. Frenguelli J.; F. de Aparicio
Mención muy especial merece la dedicación y apo- 1932 Excursión a la Laguna de la Mar Chiquita. Pu-
yo permanente del grupo de voluntarios que forman el blicaciones del Museo Etnológico y Etnográfico de la
equipo del Museo: José Luis Giraudo, Eduardo Villareal, facultad de Filosofía y Letras. Serie A Bs. As: 121- 147
Néstor Cocco, Luis María Cerda, Ulises Carrara, Angé- 1941 Nuevos datos sobre hornos indígenas. Anales
lica Montoya del Instituto de Etnología Americana. Tomo II Universi-
Agradecemos las ilustraciones a Luciano Faule, Lita dad Nacional de Cuyo. Mendoza.
Guillermon y Cecilia Oshiro
Furlong Cardiff.
1936 Cartografía jesuítica. Instituto de Investigacio-
Bibliografía nes históricas. Buenos Aires,
Bucher E., editor
2007 Bañados del Río Dulce y Laguna Mar Chiquita, González, M.
Academia Nacional de Ciencias, Córdoba, Argentina 2005 Arqueología de alfareros, cazadores y agricul-
tores pampeanos. Ed. Sociedad Argentina de Antropo-
Balffet H.; M. F. Fauvet- Berthelot; S. Monzón logía. Buenos Aires
1992 Normas para la descripción de vasijas cerámi-
cas. México Leroi Gourhan, A.
1989. El Medio y la Técnica (Evolución técnica II).
Bonofiglio, M. Taurus. Madrid
2004 Estudios iniciales en la Cuenca baja de los ríos
Suquía y Xanaes. En Memorias del Pueblo. Revista del Mu- Montes, A.
seo Histórico Municipal de La Para. Ed. Brujas. Córdoba. 1960 El Hombre fósil de Miramar (Córdoba) En Se-
parata de la Revista de la Facultad de Ciencias Exactas
Bourdieu, P. Físicas y Naturales de la Universidad Nacional de Cór-
1979. La distinction. Critique sociale du jugement. doba. Serie Ciencias Naturales Año XXI Números 1 y 2.
Paris. Enero Abril. Córdoba
1999 Razones Prácticas. Edit. Anagrama. Barcelona
Orton C.; P. Tyers y A. Vince
Caggiano, M.; M. Mineiro, M.C. Jacobus A. Luiz 1997 La Cerámica en Arqueología. Editorial Crítica.
2003. La cerámica Tupí Guaraní, un ensayo de sis- Barcelona
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Argentina. Tomo III Córdoba Parodi, L. R.
1935. Relaciones de la Agricultura Prehispánica con
Ceruti, C. la agricultura Argentina actual. Observaciones genera-
1998. La tradición de las llanuras centrales. En FADA les sobre la domesticación de las plantas. Anales de la
(Fundación Argentina de Antropología); volumen Home- Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria, Bue-
naje pág. 181-197. UBA. Buenos Aires. nos Aires
2000 Rios y Praderas. Los pueblos del Litoral .Nue-
va Historia Argentina ed, por M Tarragó); 105-146. Edi- Piovano, E.; S. Bernasconi, D. Aristegui.
torial Sudamericana. Buenos Aires. 2002 La laguna de la Mar Chiquita. Córdoba, Argen-
tina. Un modelo actualístico para cuencas lacustres ce-
De Certeau, M.: L. Girad, P. Mayol rradas de salinidad variable. IX Reunión Argentina de
2000 La invención de lo cotidiano 2 Habitar, Coci- Sedimentología. Córdoba.
nar. Universidad Iberoamericana. Méjico
Piovano, E.
Diasio, N. 2005. Los cambios ambientales en la Laguna Mar Chi-
2009-Re-penser l´antropologie de la culture quita durante los últimos 300 años. En comunicaciones
matérielle. En le sujet contre les objets… tout contre. del Museo de la Región de Ansenuza “Aníbal Montes”
Etnographies de cultures materielles France

18 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

Politis, G.; A. Martínez, M. Bonomo


2001 Alfarería temprana en sitios de cazadores-
recolectores de la Región Pampeana
( Argentina) Latin American Antiquity12(2) Society for
American Antropology

Primera Convención Nacional de Antropología


1969- Cerámica en Primera Convención Nacional de
Antropología Universidad Nacional de Córdoba..

Rice P. M.
1982 Pottery production, pottery classification, and
the roleofphysicochemicalanalyses. En: J. Olin and A.
Franklin (ed.). Archaelogical Ceramics, Smithsonian
Institution Press, Washington D.C,

Shepaed, A.
1954 Ceramics for theArchaelogist. Publications 609.
Washington. Carnegie Institution

Shiffer, M. y L. Skibo
1997 The explanation of artifact variability. American
Antiquity 62(1)

Serrano, A.
1945 Los Comechingones. Serie aborígenes argen-
tinos Volumen I. Instituto de Arqueología Lingüística y
Folklore “Dr. Pablo Cabrera” (U.N.Cba.) Córdoba
1972. Líneas Fundamentales de la Arqueología del
Litoral. Un Intento de periodización, Instituto de Antro-
pología XXXII

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 19


Memorias del Pueblo

1911 - LA PARA - 2011

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20 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

ENTRE CARRETAS, POSTAS Y CAMINOS:


DESCRIPCIONES DE VIAJEROS QUE
TRANSITARON POR EL ESTE CORDOBÉS
Por Sergio Ariel Marchetti1

Introducción
Dentro de la política de conservación de bienes cul-
turales, llevada adelante en los últimos años por la Aso-
ciación Civil Amigos del Patrimonio Histórico de
Ansenuza, Suquía y Xanaes (APHA), se encuentran el
estudio de los antiguos poblados, capillas, estancias y
caminos que conformaron una red de asentamientos
interrelaciones entre sí, ya sea por funciones a escala
regional, provincial o nacional.
Para sistematizar dichos estudios, y resolver su ver-
dadero significado que le cupieron en el pasado, es que
se presenta cada itinerario en forma individual, para lue-
go compararlos entre si, y poder arribar a conclusiones
más precisas. La investigación incluye estudios históri- Un transporte antiguo en plena posmodernidad: Pedro
cos, cartográficos, relevamiento de campo, imágenes Titti y su chata, 2003.
satelitales y memorias de viajeros.
En esta oportunidad presentamos al lector una cialmente utilizados para el contrabando de mercade-
aproximación al relevamiento de las crónicas de viaje- rías y evasión del pago de tributos a la Aduana de Cór-
ros que describen a su paso, el paisaje de la región, sus doba. Tal es el caso del Camino de los Porongos, y el
habitantes, costumbres, lugares, edificios y poblados. de los Santiagueños.
Son varios los caminos hasta ahora detectados, con sus El conflicto con los españoles, primero; las guerras
tramos principales y ramificaciones secundarias, que civiles y luchas contra los aborígenes del Chaco, des-
fueron jalonando a lo largo de quinientos años, una par- pués fueron circunstancias que obligaron a los gober-
ticular forma de apropiación del espacio territorial regio- nantes a definir estrategias de poblamiento, defensa de
nal. Entendemos por Este Cordobés, los actuales terri- líneas de frontera internas, planes que necesariamen-
torios de los Departamentos Río Primero, Río Segundo te, incluían las vías de comunicación para relacionar
y San Justo que hasta el siglo XIX conformaban en el cada lugar. A continuación desarrollamos los primeros
orden militar, la Frontera Este o del Chaco. resultados obtenidos, de dos caminos.
El primer camino establecido en la región fue el Ca-
mino Real de Córdoba a Santa Fe, que se transitaba Camino Real de Córdoba a Santa Fe
por las inmediaciones del Río Segundo, cuando el fun- Una de las primeras menciones documentales de
dador de Córdoba, Jerónimo Luis de Cabrera, partió este recorrido data del 14 de marzo de 1576, en la mer-
hacia el Este de la ciudad mediterránea para encontrar ced de tierra otorgada por el gobernador Suárez de
una salida al Río de la Plata y fundar a orillas del Río Figueroa a Juan de Barragán en las inmediaciones del
Paraná el Puerto de San Luis de Córdoba. Luego de la Río Segundo: “...para su estançia de vn pedaço de tie-
fundación de la ciudad de Buenos Aires, se estableció rra q[ues]ta catorze leguas desta dicha çiudad poco mas
una ruta más directa con Córdoba y quedó trazado el o men[os] hazial pueblo de Cantamala por el camino
Camino Real al Alto Perú que tenía escala continental. que pa[sa] para el rrio de la Plata, dos leguas (-poco
Sobre las márgenes del Río Primero corría el Camino mas o menos-) de Cantamala e[sta] vn arroyo, y mas
llamado a Suquía y Ansenuza; y con el paso del tiempo abajo vn poco esta vn estanque a manera de pozancon,
aparecieron caminos secundarios y no oficiales, espe- e la estançia de Tomas de Yrubi esta mas abajo vna

2
Arquitecto, egresado de la U.N.C., especialista en Conservación del Patrimonio Arquitectónico, Presidente de la
Asociación Civil Amigos del Patrimonio Histórico de Ansenuza, Suquía y Xanaes (APHA).

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 21


Memorias del Pueblo

Vida rústica y tradicional a orillas de los caminos del Este. Zona de La Para, fines del siglo XIX

legua desta estançia, vna legua en rredondo desdel di- vo porque el camino antiguo que se andaba después de
cho pozancon ([en [rre]dondo]) de todas partes”2. hecha la merced de tierras a Antonio Suárez Mejía era
La propiedad dada a Barragán se situaba sobre el de la otra banda por que estaban poblados el pueblo de
Arroyo de Alvarez, ya que desde éste al Río Segundo Blas de Peralta y Costasacate de Don Jerónimo Luis de
existe una distancia de dos leguas, parajes por donde Cabrera y Nabosacate de Nicolao de Dios y Cantamala
pasaba el Camino Real a Santa Fe en la banda sur del de Don Fabián Maldonado y otro de Hipólito de Espino-
Río Segundo en dirección Este-Oeste, viniendo del paso sa de la otra banda del Río Segundo y en estos pueblos
que estaba en el pueblo de indios de Guamacha, donde hacian paradas los pasajeros y no se andaba el camino
cruzaba de la banda norte a la sur del río. que ahora se anda de esta banda de Córdoba por que
Un viajero que visitó estos parajes en los primeros estaba todo despoblado y más que el dicho Río Segun-
años de vida de Córdoba, fue Fray Reginaldo de do estaba antiguamente después de la dicha merced
Lizárraga quién informaba en 1598: “[…] En el camino todo encenegado y después que poblaron Manuel
de Córdoba a Buenos Aires, y desde Santa Fee por tie- Rodríguez y Manuel de Fonseca y Don Fabián
rra es necesario ir muy a percibidos de armas y Maldonado con los ganados que metieron y más gente
arcabuces, y en las dormidas velarse, por que salen al- que anda por el río se ensanchó el río con los dichos
gunos veces indios cazadores de venados, y fácilmente ganados porque era entonces angosto […] y después
se atreven contra los nuestros; sus armas son arco y se volvió el dicho Blas de Peralta a poblar esta banda
flecha como los Chiriguanos, y demás desto usan de de esta ciudad de esta parte del río y por estar ahora
unos cordeles, en el Perú llamados aillos […]”3. poblado de esta banda de pocos años a esta parte se
Con mayor precisión se detalla su recorrido en el anda el camino que ahora se anda que será de quince
año 1613, según declaración testimonial de Francisco años y veinte a esta parte…”4.
Mejía. Expresaba el encomendero del Río Segundo, que En el transcurso del siglo XVIII esta vía de comuni-
“…el camino de carretas que en este tiempo va a la ciu- cación comenzó a disponer de un punto estratégico de
dad de Santa Fe desde esta ciudad de Córdoba es nue- parada, y defensa de los indios del Chaco, con la cons-

2
TANODI Aurelio, FAJARDO María Elsa, DAVILA Marina E. Libro de mercedes de tierras de Córdoba de 1573 a 1600,
UNC, Fac. de Filosofía y Humanidades, Instituto de Estudios Americanistas, Córdoba, 1958, p. 70.
3
LIZARRAGA Fray Reginaldo de: Descripción colonial, Biblioteca Argentina dirigida por Ricardo Rojas, Buenos Ai-
res, Librería La Facultad de Juan Roldán y Cía., 1928, p. 232.
4
FERREYRA María del Carmen: Las estancias del Río Segundo 1573-1700, Nº 24, Junta Provincial de Historia de
Córdoba, Córdoba, Copiar, 2004, p. 72.

22 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

trucción de varias fortificaciones en la zona del Tío. Uno un tiempo a esta parte, según dije, los indios del Chaco
de los testimonios al respecto, es el que dejó Fray Pe- han recobrado muchos de sus antiguos dominios; el
dro José de Parras en 1749, en un viaje que realizó des- camino esta casi abandonado y expuesto a los asaltos
de Santa Fe a Córdoba, aunque desvió el trayecto, pa- de los salvajes; de ahí que el viajero no pueda
sando por la capilla de Villamonte sobre el Río Primero. aventurarse sino con armas convenientes y bien prepa-
Escribía el sacerdote franciscano español: “[…] El rado a la defensa.
día siguiente, que fue el 28, al amanecer, llegaron veinte Para hacer este viaje, habíamos convenido con don
soldados que el maestre de campo de Cordoba dispu- Pancho Rodríguez que nos conduciría de Santa Fe a
so salieran a encontrarnos, por que ya tenía noticia Córdoba y nos traería después a Santa Fe por la suma
deque habiamos salido de Santa Fe, y quiso hacernos de noventa y dos pesos plata, quedando por su cuenta
este obsequio; yo después de haber almorzado muy el servicio de ocho caballos y tres peones. Todos íba-
bien, anduvimos cuatro leguas hasta mediodía y para- mos provistos de buenas armas y no temíamos al peli-
mos en las Víboras, donde comimos y descansamos gro. Yo tenía también una orden del gobernador Echagüe
toda la siesta, y por la tarde llegamos a un presidio para uno de los destacamentos militares de frontera, a
llamado el Tío, de donde salió a recibimos el maestre fin de que se nos facilitaran caballos y una escolta, en
de campo con todos los demas soldados que allí ha- caso de necesidad. El gobernador nos hizo todas las
bía, que serían por todos unos cuarenta. Nos hospe- prevenciones necesarias, como puede suponerse, re-
damos en el mismo fuerte que está construido con muy comendándonos mucha atención, no solamente con res-
buena idea y foso, que aunque todo él es de tapia, pecto a los indios sino también a los desertores del ejér-
pero es competente para la defensa de los indios, cu- cito que solían aparecer en la frontera, constituidos en
yas armas no son proporcionadas para batir ningún bandas de asaltantes. Otro peligro que debíamos pre-
género de muralla por débil que sea. Pase por inme- venir, era la posible escasez de alimentos; como el via-
diato a la fortaleza del Río de Córdoba que juntamente je podía ser de unos cinco días, hicimos provisión de
poco más abajo con el de Santiago se sumen ambos unas lenguas de vaca, bizcochos y queso. Durante dos
en un arenal, componiendo un gran pantano que lla- días del trayecto íbamos a carecer de agua, al atrave-
man la Mar Chiquita. sar un desierto de treinta y cinco leguas, por lo que lle-
Habiendo pues descansado a satisfacción, ya sin vábamos cada uno un chifle de buey, con agua suficien-
recelo ni cuidado de indios, continuamos la marcha por te para esa jornada.
la mañana y anduvimos seis leguas, hasta mediodía, Así preparados y provistos, salimos de Santa Fe poco
paramos a comer en la margen de un pequeño arroyo antes del mediodía. Dejando atrás los suburbios de la
de cuyo nombre no me acuerdo, y por la tarde fuimos ciudad, atravesamos una extensión de diez leguas muy
en compañía al Río Segundo, que tiene una de las me- escasamente poblada, hasta llegar a Sauce […].
jores agua que he bebido en mi vida. Al día siguiente por la mañana continuamos el cami-
El día 30, por la mañana fuimos a la Plaza de Ar- no, los de la escolta quedaron asando un venado, caza-
mas, distante nueve leguas de dicha estancia, donde el do la noche anterior. Poco después pasamos por Que-
maestre de campo tiene su ordinaria habitación. Des- bracho Herrado. Este punto fue teatro de una cruenta
cansamos aquí todo el día y el 31 hallamos por la ma- batalla durante las guerras civiles de 1838-1841. Don
ñana un coche que venía encontrarnos y en él fuimos a Pancho, nuestro guía, se había encontrado presente en
una bellísima estancia de un vecino de Córdoba llama- la acción y la describió con lujo de detalles; lucharon en
do Villamonte con muchos cuartos y preciosa capilla y ella veinte mil hombres, hubo dos mil muertos y dos mil
nos detuvimos en ella hasta después de haber dicho soldados prisioneros, amén de mil mujeres, prisioneras
misa el día de finados, que luego salimos para Córdo- también. Quebracho Herrado fue antiguamente una al-
ba, donde entramos el día 3 para la mañana […]” 5. dea bastante próspera, pero durante las guerras civiles,
Durante el siglo XIX, las crónicas de viajeros son los indios del Chaco la destruyeron completamente.
mucho más detalladas, y entre ellas sobresalen las sa- Desde entonces, los venados y guanacos, más afortu-
gaces observaciones de los ingleses. Muestra de ello, nados que los hombres, se han posesionado del suelo.
es el clásico relato de William MacCann del año 1848. Pudimos ver una sola tropa de guanacos. Interrumpi-
Llegó a Córdoba proveniente de Santa Fe, y anotó en mos la marcha para almorzar a la sombra de un
sus hojas de viaje: “[…] Los preparativos del viaje a duraznero. En la laguna próxima había una bandada de
Córdoba nos llevaron un día entero. Esta ciudad dista hermosos flamencos y por el lugar en que nos hallába-
ochenta leguas de Santa Fe. Antiguamente existía un mos sentados, corrían, de un lado a otro, unas lagarti-
camino público y seguro que las comunicaba, pero de jas verdes. Algunos momentos después cruzábamos la

5
PARRAS Fray Pedro José de: Diario y derrotero de sus viajes. 1749-1753. España, Río de la Plata, Córdoba,
Paraguay, Ediciones Solar, Buenos Aires, Imprenta López, 1943, p. 228.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 23


Memorias del Pueblo

ballo dispuesto a pasar la noche en aquel mismo sitio.


De ahí a poco, cruzó cerca de nosotros un muchacho,
que parecía volver a su casa. Nos acompañó y no tar-
damos en llegar al destacamento. Después de una bre-
ve conversación con el Comandante y de haber bebido
agua largamente, tendimos nuestros recados en el pa-
tio y dormimos toda la noche.
En El Tío, dejamos los caballos de remuda que lle-
vábamos, porque debíamos cruzar un campo donde cre-
ce una planta venenosa, del género de los cardos, que
solamente come el ganado extraño a la región, y que le
produce la muerte. El instinto ha enseñado gradualmente
a los animales criados en los mismos campos, a no co-
mer esa hierba. Le dan el nombre de chucha (escalo-
frío, fiebre) y la llaman así por los efectos que produce.
Teníamos ahora que marchar unas treinta y cinco
leguas, a través de una región habitada en su mayor
parte por gentes laboriosas, propietarios de pequeñas
estancias, cuyos campos medían de mil a tres mil acres
ingleses. Toda la riqueza de estos propietarios consis-
te en algunas vacas, una majada de ovejas y otra de
chivos; la tierra les produce trigo, maíz, etc. pero de-
ben luchar con diversas dificultades para el cultivo de
la tierra.
En aquella estación del año -era el mes de diciembre-
las cosechas estaban condenadas a ser comidas por la
Inspeccionando las orillas del río Suquia, principios del langosta que, cuando sale de los bosques, cubre mate-
siglo XX rialmente la tierra. La langosta pequeña, no vuela en un
principio, sino que camina y salta como el saltamontes;
frontera, entrando en la provincia de Córdoba. El cam- después le crecen alas y emigra en verdaderas nubes,
po, muy montuoso, era semejante al de las cercanías hacia el norte, acabando con toda vegetación en el lu-
de Santa Fe. gar donde se detiene a comer. Por espacio de varias
A eso del mediodía, el agua, que no habíamos ad- millas, mientras caminábamos, todas las plantas y ár-
ministrado bien, se terminó y como el sol estaba muy boles aparecían cubiertos de langostas que semejaban
fuerte, sufrimos tanto de sed que nos consideramos afor- enjambres de abejas. Cuando aparece este acridio, las
tunados al poder beber de un charco cenagoso. Yo traté gentes se precipitan a espantarlo, agitando trapos y tra-
de purificar el agua, filtrándola con un paño. Ya atarde- tando por todos los medios de que pase sin causar per-
cido, tratamos de acampar para pasar la noche y andu- juicios. Otra plaga que causa muchos daños es la de
vimos recorriendo el monte, muy empeñados en encon- las vizcachas, por que come los sembrados de trigo.
trar agua. El croar de unas ranas nos hizo concebir al- Hay ocasiones en que los pobladores pasan la mayor
guna esperanza, pero pronto pudimos comprobar que parte de la noche persiguiéndolas con sus perros. Tam-
no tenían líquido suficiente para ellas mismas. Cerca bién la falta de agua ocasiona muchas calamidades; no
de ese lugar se levantó una avestruz con pichones que llueve lo bastante para las necesidades del cultivo y en
ya estaban en condiciones de correr. Desilusionados, algunos sitios el agua de los pozos es salobre.
apresuramos el paso en dirección al Río Segundo, adon- Con todo, y a pesar de los inconvenientes mencio-
de llegamos mucho después de entrado el sol. Grande nados, estos habitantes viven mejor, al parecer, que los
fue nuestra decepción al encontrarnos con que estaba de la provincia de Buenos Aires. Su alimento consiste
seco. en legumbres, frutas silvestres, leche, pan y carne. En
Sólo nos quedaba, como última esperanza, marchar todas las casas se ve un gran mortero de madera, con
hasta el El Tío, un destacamento fronterizo, pertenecien- su maza, para pisar maíz y trigo que, cocido con leche,
te a la jurisdicción de Córdoba, Al acercarnos a ese lu- resulta un plato excelente. En Santa Fe se cosecha una
gar, equivocamos el camino. Entonces hicimos alto y especie de trigo que llega a la sazón dentro de los cua-
estuvimos aguzando el oído en la espera de oír ladridos tro meses de sembrado; si aquí cultivaran esa misma
de perros que pudieran servirnos de orientación. Perdi- semilla, ahorraríanse muchos meses de trabajo, perdi-
da la esperanza de encontrar un poblado, bajé del ca- dos en defender los plantíos, de las vizcachas. Las mu-
jeres son muy industriosas; ellas hilan y tejen casi todas

24 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

las ropas de los hombres. Por desgracia, estas pobres


gentes carecen de iniciativa suficiente para trasladarse
a otra región, donde se verían libres de todas estas
molestias. Con el mismo trabajo que desarrollan aquí,
estarían en condiciones de ganar algo más que los sim-
ples medios de subsistencia.
Al atravesar esta comarca encontré, por primera vez
en mis andanzas, algunos campos cercados; las cer-
cas de componen de ramas de árboles, aseguradas
con estacas en algunos sitios. Toda la extensión com-
prendida entre Santa Fe y Córdoba tiene buenas arbo-
ledas. Crece mucho en ella un pequeños arbusto, pa-
recido en su forma y olor al té de la China. También
abunda el árbol de algarrobo, semejante al roble en su
forma y calidad. Las raíces de los árboles no son muy
profundas, como pude comprobarlo al observar algu-
nas derribados por las tormentas. Esto prueba que la
capa de tierra vegetal es muy superficial. Los insectos
producen entre los árboles un ruido aturdidor; por la
noche se agregan los gritos de los pájaros, el croar de
las ranas y otros reptiles, hasta forma un clamoreo tan
fuerte, áspero y discordante, que no es para describir.
En estos bosques se albergan tigres, leones y serpien-
tes, pero poco o nada peligrosos. Las luciérnagas -in-
sectos muy bonitos- abundan mucho; pude coger una
con la mano y ver de cerca sus ojos encendidos como
bolitas de fuego.
La explotación forestal era la más desarrollada en la zona.
Ya muy avanzada la tarde nos pusimos en marcha
desde El Tío; el dueño de la casa donde pasamos esa
noche era un hombre verdaderamente industrioso; se las a cierta distancia o bien pisarlas en el suelo. A la
dedicaba a la fabricación de carretas con la madera que mañana siguiente seguimos camino a Córdoba y llega-
cortaba en los montes vecinos, y las trocaba en Buenos mos a la ciudad ya cerca de mediodía […]”6.
Aires por ganado vacuno obteniendo hasta quince y En los primeros años del gobierno de la Confedera-
veinte animales por cada carro. ción Argentina, se publicó un Almanaque Nacional don-
El tiempo estaba húmedo y dormí bajo techo por te- de se mencionan los itinerarios de las carreras de pos-
mor al relente de la noche. Toda la familia de la casa tas. Referido al Camino de Santa Fé a Córdoba pasan-
durmió al aire libre. Al día siguiente, pasamos cerca de do por el Tío, se detallan los siguientes puntos y las
la villa de Ranchos y, antes de entrarse el sol, nos detu- distancias entre cada uno de ellos: “De Santa Fe al Paso
vimos en la vivienda de una pobre familia. Yo arreglé mi del Río Salado, dicho paso de Santo Tomé, 1. (hay una
cama bajo un árbol, pero empezó a tronar y a llover, balsa). Del Paso de Santo Tomé al bajo de las Tunas, 5.
viéndome obligado a buscar abrigo en el rancho mis- El camino es trillado, y atraviesa unos montes bastante
mo. Este hubiera servido apenas, como establo, para espesos donde se hace el carbón.
dos caballos; sin embargo, estaba ocupado por un hom- Sauce, pueblo como de 800 almas, la mayor parte
bre, dos mujeres y dos niños, los que todavía se dieron Indios reducidos. Hay iglesia, escuela y un puesto mili-
maña para dejarnos un sitio a mí y a don Pedro. Por tar, 4. Cañada de Romero. (Fuerte con pequeña guarni-
cierto que es preferible dormir al aire libre y no en el ción), 12. Es la pampa, hay una cañada y unos bañados
interior de estos ranchos del país, cerrados y peque- como de una legua en caso de grandes lluvias, siempre
ños. Las chinches y las pulgas resultan más que moles- hay agua potable en dos lagunas, y unos manantiales
tas; un solo ejemplar de las primeras es más ofensivo cerca de algunos algarrobos.
que tres de sus congéneres de Inglaterra. Hay que cui- Quebracho solo, 6. Pampa sin agua, punto un poco
darse de aplastarlas contra uno mismo porque lo ensu- elevado. No hay sino un quebracho que da su nombre a
cian todo; preferible es cogerlas con la mano arrojándo- este lugar. Quebracho Herrado, 6. Laguna grande, hay

6
MAC CANN, William: Viaje a caballo por las Provincias Argentinas, Biblioteca Argentina de Historia y Política,
Hyspamérica, Buenos Aires, 1985, p. 232 a 245.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 25


Memorias del Pueblo

Un alto en el duro trabajo del campo en la zona de Villa del Tránsito

siempre agua y leña en abundancia. Este lugar se llama los destinos específicos del trayecto en cada caso. Son
asi de un quebracho grande marcado con un fierro. Allí de notable valor en este sentido, las impresiones que
empiezan los límites de la Provincia de Córdoba. Hay escribió sobre una parte de la región Este de Córdoba,
un fortín con guarnición militar, y empieza a formarse un el Dr. Thomas J. Hutchinson en 1863. Este físico, médi-
pueblito. co y geógrafo de origen anglo-irlandés fue nombrado
Tío (villa, la primera población desde el Sauce), 14. Cónsul Británico en la ciudad de Rosario en 1861. Le
Del quebracho herrado al Tío, el camino es regular, pero encomendaron la misión de explorar territorios en la
en tiempo de lluvia, hay una cañada bastante fea llama- Provincia de Santiago del Estero para plantar y explotar
da Cabeza de Vaca, es como de ¾ de legua de baña- algodonares con destino a Inglaterra.
dos. La Villa del Tío tiene 600 habitantes y ofrece toda Dos años más tarde emprendió un viaje a Córdoba
clase de recursos. Hay guarnición y postas. desde Rosario, y entró en nuestra Provincia por Que-
Rosario o Villa de los Ranchos (villa), 19. Del Tío al bracho Herrado y el Tío, pero no siguió el itinerario tra-
Rosario hay dos caminos llanos y fáciles. Los dos están dicional por las inmediaciones del Río Segundo, sino
con poblaciones y recursos. Existen postas de trecho que en éste último lugar desvió por un tramo secunda-
en trecho. El camino atraviesa los montes a veces, o rio que conectaba el Camino de Córdoba a Santa Fe,
sigue a la orilla de ellos. La Villa es una población anti- con el Camino de las Tropas, y llegó hasta Las Encruci-
gua de 800 habitantes. Hay iglesia con cura y escuela. jadas, al Norte del Departamento Río Primero.
Posta de Galinda, 10; Córdoba, 8. Desde la posta de Así comienza el diario de viaje, prolijamente ano-
Galinda hasta Córdoba, el camino es bueno con pos- tado por el diplomático británico: “Nuestro viaje noc-
tas, poblaciones, y bastante tránsito de carretas. Como turno a la luz de la luna nos condujo en la mañana
a 5 leguas del Rosario, se pasa el río 2º, siempre con siguiente al Cantón del Quebracho, en la actualidad
agua aun en tiempo de seca. Pero el paso es bueno con completamente abandonado. Este es el límite que di-
excelente fondo de arena […]”7. vide las provincias de Santa Fe y Córdoba. En sus
Las crónicas de los viajeros permiten vislumbrar los vecindades había una bonita arboleda, donde se con-
intereses que movían a los extranjeros visitar nuestro taban algunos pequeños árboles de duraznos y pe-
país, mediante el estudio de las rutas que llevaban, y queños granadillos.

7
REPUBLICA ARGENTINA. Almanaque Nacional de la Confederación Argentina para el año 1855, Buenos Aires, s/
f.
26 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.
Memorias del Pueblo

Enero 6. Como a las cuatro y media de la mañana primitivos telares, peculiares a las provincias. Una mu-
salimos de la estancia de Don José María Lenzilla, por jer trabajaba en él, y estaba haciendo una colcha de
entre una arboleda de chilcas, árbol parecido al sauce lana. El hilo era color rosa, amarillo y colorado -el rosa
enano, y por sobre un pantano que tiene alguna conexión sacado de un especie de semilla, y el amarillo de la ho-
con el Río Segundo, pero sin señal alguna de canal. jas de dos hierbas, una llamada “chasco yonis” y la otra
Pasando el Río Segundo, que está completamente llamada “Romerillo”, que se emplea cuando no se pue-
seco, a pesar de haber llovido durante los últimos dos de encontrar la anterior.
días, entramos al pequeño pueblo de la Concepción, En los primeros tiempos de los españoles esta era
que es la Capital del Partido del Tío, en la provincia de la línea de frontera entre las provincias de Córdoba y
Córdoba. Este pueblo se llamaba antes San Justo (SIC). Santiago. Desde que entramos a esta provincia, y cada
La plaza no tiene más de tres o cuatro casas en cada vez que la noche llega, escuchamos un ruido muy pare-
cuadra de los costados. Tiene una pequeña y bonita igle- cido al silbato del ferrocarril, que me dicen es producido
sia, pero no tiene la usual Columna de la Libertad. por una especie de cigarra. El nombre indio de este in-
El cura de esta iglesia tiene también obligación de secto es “Coyuyo”. Cuando me fui a la cama, no pude
oficiar en una pequeña capilla, llamada del Arroyito, evitar el pensar que para que un hombre duerma cómo-
como a cinco leguas de la Concepción. En este cantón damente en un monte de Sudamérica, debería haber
hay como doscientos hombres que no están sido educado en un molino, o en la puerta siguiente al
acuartelados, viniendo a ser en realidad un regimiento almacén de un hojalatero; pues el continuo chillar de
de comisarios especiales. Algunas pulperías son la se- este silbato de la cigarra ferrocarrilera y el abominable
ñal que hay negocios en este punto. ruido de los sapos y ranas, es permanente y dura hasta
Enero 7. Cambio de tiempo: truenos, relámpagos y algunas horas después de entrado el sol.
lluvias durante toda la noche. Todavía está lloviendo, Sobre el cauce del Río Primero, noté a nuestra iz-
cuando escribo en la casa de pueblo del señor Lenzilla, quierda una bonita escena. Multitud de lagos divididos
donde hemos dormido anoche. Hay aquí un jardín de unos de otros por pequeñas torrecillas de tierra, pare-
tunas, cuya fruta es muy estimada cuando madura. Con cían otras tantas fortificaciones en miniatura, disminu-
ellas se hace una especie de dulce llamado “arrope” yendo su circunferencia de la base a la altura, y limita-
[…]. dos a la espalda por la línea de árboles que forma el
De la Concepción marchamos, en la mañana del 8 horizonte del monte. Estos lagos son, a no dudarlo, del
de enero, hasta la estancia del coronel Alvarez, distante mismo cauce del río en que corren, y parece que han
como tres leguas. Según me dicen está en la posición sido formados por las últimas lluvias. Donde nosotros
señalada en el mapa de Mr. Coghlan, con el nombre de pasamos el río, no había una gota de agua, pero la are-
la “Caña”. De aquí al Manantial distante como 9 leguas, na del lado opuesto reluce mezclada con mica.
y en la cual ocupamos día y medio, nuestro camino se Aquí noto mujeres sentadas bajo los árboles y char-
hizo por entre una serie de montes y potreros, pasando lando; una hembra a caballo, otra barriendo delante de
grandes represas de agua, llamadas “tajamares”, y por una puerta, todas con grandes crinolinas, -tan es la vis-
entre majadas de ovejas y cabras en cada casa. En los ta que presenta una floresta tan distante de lo que acos-
montes hay muchos cardenales y cotorras verdes. Noto tumbramos a llamar civilización- Un grupo de hombres
que en cada puerta hay montones de vainas de algarro- bajo la sombra de un coposo algarrobo, tomando mate
ba. Este es el alimento para el invierno, y se guarda en y fumando cigarrillos; cabras, ovejas, perros y “eras” para
un depósito hecho al estilo de una colmena grande. trillar trigo, es todo lo que encontramos en las cinco o
En el “Manantial” escribí estos apuntes en mi libro: seis cuadras de camino que hay hasta el antiguo cauce
-“mientras estábamos esperando, a la sombra de una del Río Primero, que hoy se llama Río Viejo. Este último
glorieta formada de cañas de castilla, la mujer de la casa era el curso que llevaba el río anteriormente, y del que
entabló conversación con nosotros sobre el algodón, se ha separado, durante el último año.
haciéndonos saber dos cosas: -primera, que no se po- Los montes por los que atravesamos, parecen tener
día conseguir semilla de esta planta en estas vecinda- más quebrachos que algarrobos, y aquéllos tienen mu-
des, ni dada ni vendida, aún cuando fuera para reme- cha semejanza con el sauce llorón. Un labrador me ha
dio; segunda, que no podía comprar en Córdoba ni un dicho aquí, que una fanega y media de semilla, le ha
pedazo de zaraza, por que según le habían dicho los producido 80 fanegas, o en realidad más de un dos mil
comerciantes, los ingleses habían quemado todas las por ciento. Después de haber andado como cinco le-
fábricas donde los capullos de algodón se convierten guas por entre un espeso monte y bajo un sol abrasa-
en cocos (SIC) pintados”. dor, paramos en un rancho abandonado en la estancia
Se dice que los leones y tigres repiten mucho por la Anita Pozo, donde había una diminuta laguna con poca
noche sus visitas a los corrales en estos lugares. Nues- agua, y un pequeño pozo con menos aún, estando el
tra parada, esta tarde, fue pocas leguas más adelante agua a una profundidad de veinte y cinco varas.
en un paraje llamado “Tacuruces”, donde vi uno de los Difícilmente se podrá imaginar nada más hermoso

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Memorias del Pueblo

mapa del NE de Córdoba en 1920, aún se conservan los antiguos caminos citados en éste artículo.

que el choque de las nubes sobre la alta cadenas de las ta. Hay tres clases de algarrobos: el negro, el blanco y
sierras de Córdoba, visto desde aquí. En el momento el espinoso. La hechura de las vainas es parecida a la
que el vaqueano me mostró esas sierras no pude distin- de las judías poco crecidas. El olor y gusto de estas
guirlas de lo que me parecía a mí un panorama de nu- frutas es muy bueno. Toda criatura o animal se alimenta
bes; pero gradualmente, oscuros pedazos de colina se en este país con algarroba. De ella se hace una bebida
fueron distinguiendo de la plateada bóveda del cielo […] fermentada llamada “aloja”, y en muchas partes los po-
De aquí al punto más próximo de la sierra hay por lo bres no tienen más cama sobre que dormir que los mon-
menos sesenta millas […]. tones de vainas de algarroba, guardada para provisio-
Entre la estancia de Anita Pozo y la Capilla de la nes del invierno.
Encrucijada, distante como siete leguas, vimos el pri- En la casa “Puesto del Seco” (la primera habitación
mer árbol de “Jumi”, que los moradores queman para blanqueada que se encuentra después de haber deja-
hacer álcali y con el trabajan jabón. En la Capilla, que do Esperanza, y donde nos detuvimos algunas horas a
no tiene techo, se abren cuatro caminos -uno para la la siesta) ví algunas chiguas [bolsas hechas de cuero]
ciudad de Córdoba, otro para el Río Seco, el tercero llenas de sal ordinaria sacada de una salina que está
para el Chañar y el cuarto, en el que nos encontramos como a una legua de allí, la que forma parte de la Lagu-
que va a Carabajal. na de los Porongos, donde se dice que termina el Río
Aquí encontramos cuatro indios bolivianos. Eran de Dulce o Santiago. El dueño de este lugar me dijo que en
la provincia de Yungas, cerca de la Paz, capital de Boli- vez de estar aislada la Laguna de los Porongos, como
via. Tres de ellos tenían un pollino cada uno y el cuarto la representan los mapas, hay tres, casi en la misma
un caballo de miserable aspecto. Cada animal llevaba dirección a saber: Porongos, Mar Chiquita y Mistoles; y
una bolsa colgada a cada costado que contenía que ellas se extienden desde la Concepción del Tío,
“cinchona” [en estas bolsas llevaban hojas de coca y hasta la estancia del Seco, como diez leguas más al
piedra imán] para vender la cual, atraviesan todo el país. norte de donde estamos ahora.
Eran una especie de hombres de miserable apariencia Huerta de tunas, majadas de ovejas, cabras y pe-
[…]. rros, represas de agua, casas edificadas en pugna con
Habiendo pasado la noche, en casa del señor todos los principios de comodidad y ventilación, cami-
Fragueiro en la Encrucijada, nuestra marcha, a la ma- nos medianamente buenos pero poco pasto en todas
ñana siguiente, fue por un camino tan ancho como cual- partes, es lo que hay, cuanto más nos acercamos a la
quiera de las principales vías de la Reina en Inglaterra, sierra. Nuestro viaje, el día que salimos de la Encrucija-
a cuyos lados había montes de algarrobos, y el suelo da fue solamente de siete leguas, y paramos por la no-
debajo de ellos, materialmente, alfombrado con su fru- che en casa de D. Teodoro Pucheta en los Tajamares.

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Memorias del Pueblo

Debo, tal vez, explicar que para en casa de Fulano, gundo, para continuar “…atravesando el Río 2º en el
Sutano o Mengano en nuestro viaje, quiere decir des- Paso de las Tropas, pasando por Cañada de Machado
uncir nuestros vehículos, armar nuestras carpas, y com- hasta entrar en el Departamento Río 1º”10.
prar una oveja o cabra para nuestra cena […]”8. Su mención más antigua, -hasta ahora conocida-,
La misma ruta que transitó el Dr. Hutchinson se tomó nos ubica en el año 1690, cuando el gobernador del
como base para dividir gran parte del territorio del Cura- Tucumán Tomás Félix de Argandoña, otorgó una mer-
to de Santa Rosa, y crear del Curato de Chalacea en ced de tierras al maestre de campo Antonio Quijano de
1870, según se desprende de los documentos eclesiás- Velasco, situada entre los ríos Segundo y Tercero, ''que
ticos de la época. La mención más clara al respecto, la llaman Las Mojarras, yendo de esta ciudad, saliendo
dejó escrita el cura párroco de Santa Rosa en carta en- desde dicho Río Segundo de la estancia de los herede-
viada a su par de Chalacea en 1875: “Partiendo de la ros del maestre de campo Jerónimo de Funes y Ludueña
Cañada de Nintes que divide este Curato del del Totoral, para dicho Río Tercero por el camino que llaman del
tirando al Este una línea divisoria el camino que pasa Zorro se encuentra con dicho Arroyo de Las
por el Jume, Espinillo, Suncho, Monte del Quebracho, Mojarras...”11. En el año 1800 se lo nombraba como “…el
deviendo quedar la Capilla del Monte del Quebracho al camino carril que iba del Río Segundo al Tercero pa-
Norte o sea en el Curato de Ud. y siguiendo dicho cami- sando por los Zorros”12, y a partir de 1810 ya es llamado
no carretero siempre al naciente, por Timón Cruz, Pozo Camino de las Tropas.
de los ladrones, hasta Cuchi Corral de allí toma al norte Su paso por el territorio del Río Primero llamó la aten-
hasta lo del finado D. Manuel Vega desde dicho punto ción al Cura Párroco del Curato de Santa Rosa, como
vuelve al este pasando al norte de la casa del finado D. ruta nacional que necesitaba ser vigilada por autorida-
Francisco Olmos: de allí siempre al este hasta el paraje des locales, al igual que el resto del Departamento; ra-
denominado Los Cerritos, debiendo quedar las tres o zón por la cual, en el mismo año de la Revolución de
cuatro casas que se hallan en dicho lugar en el Curato Mayo, elevó un informe del estado material del Curato
de Santa Rosa, y dicho camino sigue al mismo rumbo de Santa Rosa al Gobernador de Córdoba Juan Martín
hasta lo del Capitán Brocheros. De allí el camino carre- de Pueyrredón. En dicho escrito dice Juan Antonio López
tero divisorio toma al sud este hasta el lugar dicho El Crespo: “[…] dos Ayudantias tiene este curato, la prime-
Hinojo en donde se junta con el camino que viene des- ra de Santa Rosa, la segunda de Remedios, ambas son
de la Provincia de Santiago del Estero, cuyo camino es de dilatada distancia. En la primera corresponde un Juez
conocido con el nombre de Camino de los Paisanos, y de Ansenuza, y otro en el Quebracho, estos dos lugares
este camino sigue siempre al sud este, hasta la Cañada son puertos precisos del camino nuevo, que del Totoral
del Manantial cuya cañada divide los Departamentos de pasa a Buenos Ayres, sin entrar a Cordova. Así pueden
Río 1º y San Justo, por consiguiente los Curatos”9. celarse los robos de las asiendas, y las maldades que a
distancia de ¼ de leguas de la Parroquia se perpetran
Camino de las tropas […]”13.
Esta vía de comunicación militar y comercial, de es- A partir de las campañas libertadoras, esta zona de
cala nacional, cobró notable trascendencia durante los frontera comenzó a ser asediada nuevamente por las
años de la guerra de la Independencia Nacional, aun- tribus aborígenes del Chaco, debido al descuido militar
que parte de su recorrido ya era usado en tiempos de la de su defensa por parte de los gobiernos provinciales.
administración colonial española como ruta secundaria. Es ilustrativo sobre esta situación, el panorama que ad-
Su misión fue unir la ciudad de Buenos Aires con las virtió el Comandante de la Frontera Norte, Eufrasio Agüe-
Provincias del Norte a través de un recorrido más direc- ro al Gobernador a mediados de 1813, cuando le infor-
to, sin entrar en la ciudad de Córdoba, tal como lo hacía mó, “Que por ahora sus correrías, solo se dirigen al saco
el Camino Real al Alto Perú. Penetraba en territorio pro- [saqueo] y robo de los ganados y hacienda de los vecin-
vincial a la altura de Cruz Alta, pasaba por el Arroyo de darios: que estos justamente rezelan, que convocados
Las Mojarras y Los Zorros en el Río Tercero; tocaba a a aquellos con sus parientes los del interior del Chaco,
Calchín y Villa del Rosario en el Departamento Río Se- quando menos se piense organicen una expedición ca-

8
HUTCHINSON Thomas J.: Buenos Aires y otras provincias argentinas, Buenos Aires, 1945, p. 190 a 208 y 266-282.
9
Archivo Arquidiocesano de Córdoba. Libro del Curato de Chalacea, Nº 48, 1875-1887.
10
GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE CORDOBA. Compilación de Leyes, Decretos y demás disposiciones de carác-
ter público dictadas en la Provincia de Córdoba, Año 1887, Tomo XIV, Córdoba, 1887, p. 10.
11
MUNICIPALIDAD DE LOS ZORROS. Los Zorros, Edición de Historias Populares Cordobesas, Ministerio de Go-
bierno, Coordinación y Políticas Regionales de la Provincia de Córdoba, Córdoba, Ferreira Editor, 2005, p .32.
12
MARCHETTI Sergio A. “Estancia Los Altos”, En: Hechos, Periódico Regional, Año IX, Nº 107, Villa del Rosario,
noviembre de 1998, p. 10.
13
Biblioteca Monseñor Pablo Cabrera, antes Instituto de Estudios Americanistas de la Facultad de Filosofía y Huma-
nidades de la U.N.C. Fondo Documental, Doc. Nº 5786, año 1810.

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Memorias del Pueblo

haran habitavles dandose á moderada composición de


que reportará el estado un ingreso considerable, y el
gremio de hacendados y la labranza se aumentarán, á
proporción de las ventajas que ofrecen unos terrenos
fértiles y abundosos de pasto. El camino de carreterías
de la capital á las provincias interiores quedarán en el
todo cubierto y asegurados los intereses del estado, y
comercio, que hoy corren gran riesgo en el despoblado
de mas de setenta leguas que media desde el Río de
Córdova hasta la Reducción que fue de yndios Abipones
de la jurisdicción de Santiago del Estero, por donde ne-
cesariamente deben girar y cuyos puntos todos pueden
al presente experimentar las carreterías, los robos, y
asesinos a que han dado principio los yndios barbaros
del Chaco…”16.
La Capilla de Las Saladas, ejemplo de arquitectura
Por el Camino de las Tropas transitaron los ejércitos
vernácula, de fines del siglo XIX. Foto de principios del
patrios durante la guerra de la Independencia. Sus pol-
siglo XX.
vorientas huellas fueron testigos del forzoso paso de los
paz de atacar la frontera y aún saquear las carreterías Batallones de Libertos enviados a Tucumán, del coro-
del comercio y caudales del estado que necesariamen-
te giran por el gran despoblado que hay desde la juris-
dicción de Santiago hasta la Villa de los Ranchos del
Río Segundo; y que actualmente tengo en el campo
partidas zeladoras, sin que por el estado se me provea
arbitrio alguno,…”14.
El 11 de agosto de 1813 el gobernador intendente
Javier de Viana se dirigió al coronel Agüero, para infor-
marle que había dispuesto de un plan militar para refor-
zar dicho territorio: “Esta fuerza -escribía el mandatario-
contribuirá al servicio de esa frontera, a las ordenes a
vuestra señoría y Comandante de ella; con lo que se
habra ocurrido a las necesidades que representa
documentadamente haver en la carrera de Santiago a
la Villa de los Ranchos de un campo que afianse en
todo tiempo el trancito del comercio...”15
El mismo comandante Eufrasio Agüero, debió insis-
tir ante la máxima autoridad provincial, ya que el plan
mencionado no se puso efectivamente en práctica. Un
año más tarde elevó un informe con las características
topográficas de la zona, con la finalidad que se planifi-
que sobre fundamentos más precisos. “La frontera nor-
te de esta provincia en propios terminos es una misma
con la de Santiago del Estero: -señalaba- solo las
pluraliza la división del territorio de aquella y de esta
jurisdicción Norte; y discurre de occidente a leste [sic],
hasta dar con los fuertes de la de Santa Fe. Asegurada
esta línea que la describe el Rio mismo de Santiago son
inmensos los terrenos que quedan al leste [sic], occi-
dente y sud hasta dar con las poblaciones del Tío y Río Doña Tomasa Valdez de Crocce, preparando el mate en
de Córdova. Estos terrenos puestos en seguridad, se su rancho norteño.

14
LOBOS Héctor Ramón: “La Frontera Norte de Córdoba (1810-1820)”, En: ACADEMIA NACIONAL DE LA HISTO-
RIA, Investigaciones y Ensayos, Nº 21, Buenos Aires, 1976, p. 370.
15
Ibidem, p. 371.
16
Ibidem, p. 385.

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Memorias del Pueblo

nel Cornelio Zelaya, del Presidente de la primera Junta


de Gobierno, Brigadier Cornelio Saavedra, y posiblemen-
te de Santiago de Liniers y los contrarrevolucionarios
cordobeses, horas antes de su ejecución en Cabeza de
Tigre.
En el año 1815 un gran contingente militar compuesto
por 2000 hombres surcó los campos de los Departa-
mentos Río Segundo y Río Primero. Era el Ejército Auxi-
liar del Alto Perú que comandó el coronel Domingo
French enviado por el Director Alvarez Thomas para re-
forzar el Ejército del Norte al mando del general
Rondeau. A fines del mes de agosto se ordenó que la
columna militar salga de la Plaza de Mayo en Buenos
Aires, la que se componía de los Regimientos de Infan-
tería 2 y 3 y una División de Artillería. Comandaba el
N°2 el coronel cordobés Juan Bautista Bustos, y el N°3
el coronel mayor Domingo French, que por grado, se le
asignó el mando general de la fuerza expedicionaria17.
Al iniciar su marcha por la jurisdicción de Córdoba,
French lanzó una proclama el 19 de septiembre de 1815
desde el Campamento Volante de Cruz Alta anunciando
que viene en misión de paz con el único objeto de re-
unirse con “aquellos héroes... del ejército de Norte y te-
ner el gusto de perecer entre sus filas de tan dignos
compañeros o lograr con ellos la consolidación de nues- Mapa Electoral del Departamento Río Primero en 1918
tra suspirada libertad”.
El gobernador José Javier Díaz brindó el apoyo ne- French por disposicion del Exelentisimo Supremo Di-
cesario a French y sus hombres, ordenando al teniente rector de Buenos Ayres...”18. En el mismo escrito se co-
José Victoriano Carranza para que tome un oficial de su municaba que en el Oratorio de Calchín se prepararon
entera confianza y 25 hombres escogidos de su compa- 50 carretas y 250 bueyes; en tanto que la Primera, Se-
ñía, cada uno con dos caballos, y armados de sable, gunda, Tercera, Cuarta y Quinta División ocuparon 71
espada, chuza o lanza para que se pongan a la orden caballos, 40 reses, 16 hombres que cuidaban estos bie-
del coronel French luego de su arribo a Cruz Alta y lo nes, 2 carretas y 12 bueyes. Los Milicianos consumie-
acompañe hasta la Villa de los Ranchos (Villa del Rosa- ron 5 reses y en Villa del Rosario se destinaron 18 ca-
rio) a donde lo relevarán. Ordena a los “pedáneos ofi- ballos, 3 reses y 2 hombres. En cuanto a la fecha de
ciales y vecinos de la carrera” para que le suministren llegada del ejército patriota, se produjo entre el 26 y 28
los auxilios, no solo de caballos que demandare la es- de septiembre, ya que el día 30 de ese mes, Domingo
colta de Carranza, sino también la caballada o reses y French y sus 2000 hombres ya estaban acampados en
armas que les faltase al mismo Ejército. el Campamento Volante de Puesto de Sánchez en el
El día 28 de septiembre de 1815 los comisionados Departamento Tulumba19.
por el Gobierno de Córdoba para organizar y coordinar Desde Calchín el contingente militar siguió su mar-
los auxilios en el Departamento Río Segundo, José An- cha hasta Villa del Rosario, desde donde fue escoltado
tonio Zeballos y José Domingo Luque y Zeballos, remi- por el capitán José Ramón Pérez, 25 hombres y un ofi-
tieron al Gobernador la lista detallada de dichos apres- cial hasta el Fortín Espinillos de Río Seco, lugar donde
tos donde se expresaba: “Razon individual de los auxi- el comandante Ramón Brochero escoltó a French y sus
lios que hemos aprontado en este Curato del Rio Se- soldados hasta la frontera con Santiago del Estero20.
gundo por orden del Supremo Gobierno de la Provincia En los primeros meses del año 1816 otra división
de Cordova para los 2000 hombres que han pasado al compuesta por 400 hombres transitó por el Camino de
Exercito del Perú al mando del General Don Domingo las Tropas, proveniente desde Buenos Aires con rumbo

17
CARCANO, Miguel Angel: “La División Auxiliar del Ejército del Perú y el Gobernador Díaz”, En: ACADEMIA NACIO-
NAL DE LA HISTORIA, Investigaciones y Ensayos, N° 13, Academia Nacional de la Historia, Buenos Aires, Julio-
Diciembre de 1972, pág. 15.
18
MARCHETTI Sergio A.: Calchín. Orígenes históricos y apuntes de su pasado, Córdoba, Gráfica Copias, 2002, p. 96.
19
CARCANO, Miguel Angel... op. cit., pág. 21.
20
BISCHOFF, Efraín U. “Y fue en Córdoba...”, Córdoba, Imprenta del Banco Social de Córdoba, 1997.

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Memorias del Pueblo

al Alto Perú, con las mismas órdenes que el coronel habonará de aquella Tezoreria con nuevo haviso […]
French. Para tales efectos, las autoridades del Departa- En el Oratorio de Calchin y en esta Villa se prepararon
mento Río Segundo, organizaron en el mes de enero de quarenta Carretas, y Docientos quarenta Bueyes; nose
ese año, los aprestos necesarios para el auxilio de di- ha ocupado ninguna, ni Bueyes. En los mismos dos
cha división en los mismos lugares donde se había dado puntos se prepararon Cincuenta y sinco Reses de las
auxilio al coronel French, es decir Villa del Rosario y el quales se quitaron diez y seis, y se havonaron solo
Oratorio de Calchín. En éste último lugar se acopiaron catorze para dicho Comandante menos las dos que
carretas, bueyes, caballos y reses, a cuyo cuidado es- ocupo la ultima Divicion de oficiales. Assi mismo se
tuvo Domingo Luque y López, vecino de Calchín resi- han consumido sinco para los Milicianos Auxiliares, las
dente a poca distancia del Oratorio. que no están havonadas. Ygualmente se depararon
El contingente con los 400 soldados, al parecer arri- ochenta y tantos Caballos de los quales nose ocupa-
bó a Calchín el 3 de febrero de 1816, ya que el día ante- ron sino catorze”22.
rior José Antonio Zeballos informaba al Gobernador: “Oy El Camino de las Tropas, al entrar al Departamento
mismo acabo de tener noticia que mañana 3 del corriente Río Primero, pasaba por Cañada de Machado, Capilla
llegara a Calchin la Division que se dirije de la Capital de Villamonte, Tala, Monte del Quebracho, después lla-
asi al Perú estando preparados los auxilios suficientes y mado Monte del Rosario, y las Encrucijadas; para conti-
no demorará un instante por falta de ellos”21. nuar por los Departamentos del Norte provincial, por
El 12 de febrero del mismo año los comisionados Puesto de Castro, Puesto de Fierro, Puesto de Sánchez
para prestar estos auxilios, José Antonio Zeballos y y Candelaria.
José Domingo Luque y Zeballos, remitieron desde Vi-
lla del Rosario al Gobernador de Córdoba la razón de Conclusiones
los mencionados auxilios cuyo texto es el siguiente: Desde la Asociación Civil “Amigos del Patrimonio His-
“Razon de los auxilios de carretas, bueyes, caballos y tórico de Ansenuza, Suquia y Xanaes”, y como investi-
reses que se prepararon por orden del Superior Go- gador del patrimonio, he pretendido con este trabajo
bierno de esta Provincia para que ocupare el Señor acercar a los lectores y amantes de la historia los argu-
Comandante de la Divicion de los 400 hombres, arma- mentos fundamentales que nos llevan a valorizar los
mentos y municiones que han pasado por esta via en caminos históricos del NE cordobés.
auxilio del Exercito del Peru de orden del Excelentisimo Con el trabajo de todos, con más investigación y con
Supremo Director de la Capital de Buenos Aires; con planes de promoción y desarrollo, pero fundamentalmen-
exprecion de lo que ha ocupado y satisfecho dicho te contando con el apoyo de las comunidades de la zona,
Comandante como asi mismo de lo demas que se ha lograremos que esas trazas por donde circuló la histo-
gastado y no está satisfecho, que prebiene S.S. se ria patria no se pierdan de la memoria social.

21
MARCHETTI Sergio A.: Calchín… op. cit., p. 97
22
Ibídem, p. 97-98.

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Memorias del Pueblo

VILLA CONCEPCION DEL TIO, LA PARA, ROSARIO


DEL SALADILLO Y UN RETORNO COMPLICADO
Por Ramón Loyola Saumell

Había sido un buen año, ese que estaba cercano a


terminar, el que se despedía con las temperaturas habi-
tuales de los fines de noviembre. Ya habían sido vendi-
dos los potrillos de raza de dos años nacidos en la pro-
piedad de don Ramón, los que participarían, previa pre-
paración y entrenamiento por los compradores, en las
carreras cuadreras regionales, el año próximo.
Uno de los de la generación anterior, ahora de tres
años, reservado por los criadores, de nombre “El Dora-
dillo”, había ganado todas las carreras en las que parti- Ramón Loyola, abuelo del
cipó. autor y partícipe de esta
Don Ramón, abuelo del autor de éste artículo, junto anécdota.
a alguno de sus hijos, habían empezado a preparar el
arreo, mediante el que trasladarían una importante can- Cañada de Luque, Las Peñas, Simbolar y llegó a desti-
tidad de ganado vacuno hacia los campos que el gana- no donde fue entregado. Los compradores retirarían el
dero tenía en Rosario del Saladillo, donde ya habían ganado y pagarían el importe a uno de los hijos de don
sido vendidos. La tarea debía completarse antes que Ramón quien llegaría en los próximos días. Oscar fue el
las lluvias estacionales provocaran el desborde del Río designado para esta misión ya que era el conductor
Segundo y la formación de los célebres bañados, cuya habitual del automóvil, un Ford T color borra de vino,
erradicación fue iniciada durante el segundo gobierno con capota de lona y cortinas con ventanillas de celuloi-
del Dr. Ramón J. Cárcano, quien había dispuesto iniciar de para el caso de mal tiempo.
las obras de desvío del Río por la Cañada de Plujunta Oscar había sido instruído en cuanto a que, en Ro-
hacia la Mar Chiquita. sario del Saladillo debía desarmar la rueda de auxilio y
Don Ramón marcó que en este arreo habría una colocar el dinero entre la cámara y la cubierta para ha-
novedad. Por primera vez participaría uno de sus nietos cer así el viaje de regreso, tarea que debía cumplir con
-entonces de nueve años- Sería quien esto ahora escri- total discreción. Todo esto se lograría también sin nove-
be. Claro que, junto a sus protestas, mi madre logró dades. Oscar partió en el Ford el que, por ser conocida
pactar que yo sólo haría parte del trayecto y utilizaría mi su velocidad de crucero, permitía estimar el tiempo que
propio caballo, un petizo negro para el que tenía cabe- tardaría en cubrir la distancia desde y hasta Villa Con-
zal, riendas y montura inglesa. Caballo y apero habían cepción del Tío. El viaje lo debió hacer sólo ya que ni
sido el regalo de don Eliseo, mi tío abuelo, en oportuni- Vicente ni Leandro, sus hermanos, podían acompañar-
dad de mi bautismo. Queda totalmente explícito que mi lo. Cargaron un arma -una escopeta calibre 16 y sus
madre no pudo oponerse a lo decidido por el abuelo. Yo municiones- y dos latas de veinte litros de nafta para
llegaría hasta La Para, o sus inmediaciones, y uno de agregar al tanque cuando fuere necesario... Nótese que
los peones de confianza me traería de vuelta hasta la en ese entonces, década iniciada en 1931, no había
Villa. estaciones de servicio en cada pueblo como ahora. Sólo
Todos los preparativos se cumplieron sin inconve- las había en algunos en los que se repondría la carga.
nientes y convengo que, pese a mi corta edad, tuve una El viaje de ida y el cobro en Rosario del Saladillo se
experiencia inolvidable que compartí con mis amigos de realizaron sin inconvenientes. El Ford, a un promedio
la Villa y de El Tío. Imaginen galopar siguiendo a las de entre veinte y veinticinco km. por hora, había transi-
reses, comer con los utensillos que llevaba, portar mi tado los más de 180 kms. por caminos de tierra y salva-
adecuado facón, dormir una noche bajo las estrellas... do algunos difíciles guadales.
El ganado, tras seguir viejos e históricos caminos y El viaje de regreso se iniciaría tambien según lo pre-
atravesar campos y montes en trayecto conocido y don- visto. Oscar compró combustible y algún alimento para
de encontraría agua y pastizales, pasó cerca de La Para, el camino. Ya en retorno pasó por San José de la Dor-

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 33


Memorias del Pueblo

cil. Los animales -más de 30- topaban el árbol para de-


rribarlo. Sacó el filoso puñal y cortó una larga vara a la
que quitó hojas y brotes y trató de atarle el cuchillo con
el pañuelo de seda que llevaba al cuello, regalo de una
novia que tenía en Balnearia. Con esta forma de lanza
intentó herir a uno de los pecaríes que golpeaban el
árbol. Pero la atadura no era suficientemente firme y
entonces hizo una afilada punta en el extremo mas grue-
so de la vara. Mientras, se le cayó el pañuelo y los chan-
chos se ensañaron en él, hasta destrozarlo.
Oscar contó que, con esa forma de lanza, hirió a
uno, el que gritó y fue ferozmente rematado por el resto
y lanceó a varios matando a algunos. Ante los chillidos
de uno de los heridos, la piara se distrajo persiguiéndo-
lo hasta destrozarlo, lo que fue aprovechado por Oscar
para bajar del árbol y correr, aterrorizado, hacia el auto-
La Basílica de Villa Concepción del Tío en la actualidad móvil. No intentó usar la escopeta temiendo los anima-
les le rompieran los neumáticos. Logró “dar manija” y
mida, Las Peñas, Cañada de Luque… para dirigirse arrancar el motor al primer intento. Volvió al camino y se
hacia La Para. Había salido muy temprano y pasado el alejó lamentando no haber podido recoger alguno de
mediodía empezó a sentir cansancio. Antes de llegar a los cerdos para llevarlo, ya que su carne es un exquisito
La Para sacó el auto del camino y buscó la sombra y el bocado. Pero, tampoco era cuestión de arriesgar... y lo
resguardo de un montecito para pasar la siesta veranie- invadió una gran pena por la pérdida del pañuelo que
ga. Comió algo del pan y fiambre que comprara y dur- tan orgullosamente luciera.
mió un rato. Llegó sin otra novedad a Villa Concepción, donde,
Despertó como a las 16 y, para hacer sus necesida- ya mas sereno, contó la peligrosa aventura que le tocó
des se alejó del auto y quedó fuera de la vista desde el vivir. Dijo que había matado a varios de los 30 o 40 que
camino. Se había trasladado unos cien metros cuando formaban la piara. Yo creo que pudieron ser 3 o 4... pero
vió aparecer, cerca del vehículo, una piara de pecaríes, son sólo deducciones mías.
los temibles “chanchos del monte”, que se movieron al- Don Ramón mandó depositar el dinero en San Fran-
rededor del automóvil y, tras olfatearlo, se dirigieron hacia cisco y la vida retomó su ritmo habitual.
donde él estaba , interponiéndose entre el Ford, donde Oscar lamentó, durante mucho tiempo, la pérdida
quedara el arma y el sitio que Oscar había alcanzado. del pañuelo, pero nunca olvidaría el acontecimiento que
Tocó el puñal que conservaba y se lamentó intimamente fue motivo central de los comentarios en las reuniones
de no haber llevado consigo la escopeta. Pero… no era familiares realizadas en mi casa, en El Tío, como en la
cuestión de demorarse. Eligió uno de los árboles y tre- de mi abuelo, en Villa Concepción.
pó a él ágilmente.
Los porcinos salvajes lo habían olfateado como pre- CORDOBA,
sa y empezaron a rondar el árbol. El sabía de lo que en el mes del
eran capaces y se dio cuenta de estar en situación difí- Bicentenario de la
Revolución de Mayo.

34 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

UN NOMBRE QUE NO PUDO SER:


CUANDO “LA PARA” FUE
“MIGUEL DE ARRASCAETA”
Por Jorge Miglione

El 31 de agosto de 1908, con posterioridad a la san-


ción de la ley 6.011 por la que se autorizaba al poder
Ejecutivo a construir la línea férrea de Dean Funes a
Laguna Paiva para dar base portuaria a la red del F.C.
Argentino del Norte, constituyéndose a su vez en una
obra fundamental para el surgimiento y posterior desa-
rrollo de numerosos pueblos en el noreste cordobés, el
Ministerio de Obras Públicas de la Nación emite el res-
pectivo decreto aprobando los estudios para el trazado
de esa línea, así como el presupuesto asignado, que
ascendía a $ 8.295.852,25 o/s y dado que por acuerdo
de Ministros de fecha 23 de octubre del mismo año (EXP.
Nº 8383-F-908) se dispuso que la Dirección General de
Vías de Comunicación proceda por administración a su
construcción, el 22 de diciembre de 1908 el Presidente
de la República, Dr. José Figueroa Alcorta, mediante un
decreto crea la Dirección de la Construcción del ferro-
carril de Dean Funes a Laguna Paiva, dependiendo de
la anteriormente citada Dirección.
Al promediar los intensos trabajos que demandó su
construcción, el 30 de septiembre de 1911 se fija la ubi-
cación definitiva de las estaciones de esa línea y el 21
de diciembre de 1911 (EXP. Nº 6188-F-1911) el Ministro
de Obras Públicas resuelve su nomenclatura, corres-
pondiendo a la ubicada en el kilómetro 243,505 -para Expediente de habilitación del ramal ferroviario en 1913.
cuyo asentamiento la Sra. Petrona Rodríguez de Peralta
había donado el terreno necesario al ferrocarril, acepta- primitivo del lugar en que se encuentran ubicadas (LA
da a través del Decreto Nº 9957-F-1911 del 31 de octu- PRENSA - SABADO 1 DE MARZO DE 1924 - ESTACIO-
bre de ese año) la denominación “LA PARA” siendo li- NES CON NOMBRES DE PERSONAS).
brada al servicio público, según consta en el expediente El doctor Eufrasio S. Loza, por entonces titular del
Nº10.089 del Ministerio de Obras Públicas fechado el 6 Ministerio, decide que el informe lo presentara respecto
de diciembre de 1912, en carácter provisional, para todo de cada empresa y a medida que termine la investiga-
tráfico, a excepción de hacienda, el 1 de febrero de 1913. ción correspondiente. En los considerandos de la men-
Pasados los años y las gestiones políticas, El 20 de cionada resolución, el ministerio dice que la designa-
febrero de 1924, el Ministerio de Obras Públicas de la ción de las estaciones ferroviarias con nombres de per-
Nación decide proceder a la revisión general de los nom- sonas importa tributarles un verdadero homenaje, exhi-
bres de las estaciones ferroviarias de todas las líneas biéndose a la consideración del país y perpetuando su
del país, y con excepción de las que indican nombres memoria, de tal modo que importa una consagración
de lugares, ciudades o países, próceres o nombres pú- histórica. Dentro de este concepto, agrega, no es justo
blicos de actuación destacada y notoriamente reconoci- ni apropiado que a la par del nombre de nuestros próce-
da, resuelve que la Dirección General de Ferrocarriles res y demás personalidades de destacada actuación en
eleve una nómina de las que a su juicio no encuadran las distintas actividades de la vida pública o en las no
dentro del concepto enunciado, proponiendo a su vez menos meritorias de su actuación en bien de la humani-
aquellos con que puedan sustituirse; debiendo igualmen- dad aparezcan las de otras personas sin mérito alguno
te recoger los informes necesarios acerca del nombre o sin los bastantes para merecer este alto honor y dis-

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 35


Memorias del Pueblo

tinción, inconveniente, que se agrava si se tiene en cuen- que después de haber salvaguardado con la espada la
ta que, en general el nombre de la estación trascienda vida de sus conciudadanos y los intereses de la civiliza-
al propio pueblo que se forma a su alrededor como con- ción, sucumbió a manos de los indios” y finalmente de-
secuencia lógica del impulso que ello significa para el talla las modificaciones que se ha decidido realizar en
progreso y adelanto de la región o de la localidad en los nombres de algunas de las estaciones ferroviarias
que queda establecida. Subalternizando el concepto - cordobesas, entre las que ubica a “BARRETO” en la lí-
expresaba- se ha llegado a veces a designar ciertas nea del Ferrocarril Buenos Aires al Pacífico a la que se
estaciones con el nombre de personas sin más funda- le cambia el nombre por el señalado “MIGUEL DE
mentos ni antecedentes que el haber donado el terreno ARRASCAETA”.
en que están ubicadas aquellas, sin reparar, siquiera en Esta decisión es fuertemente resistida por los veci-
que, frecuentemente, ese procedimiento entraña una nos, elevando una nota por la que fundamentan su pe-
mera especulación comercial del donante, por la valori- dido de mantener la identificación original, a la que el
zación del excedente de su propiedad; y sin que por ella Ministro responde mediante la resolución del 21 de di-
pueda ostentarse un título al reconocimiento público. Es ciembre donde sostiene que “teniendo en cuenta que
obra de sano patriotismo mantener en el más alto nivel las propiedades que circundan dicha estación pertene-
que corresponda la conmemoración tributada cieron desde hace más de medio siglo a D. Yarbas M.
justicieramente a nuestros grandes hombres como me- Barreto primer colonizador de esa región quien median-
ritorios servidores del país -fundamentaba-, evitando que te un esfuerzo personal llegó a la que hoy es una impor-
se encuentren en la misma línea, otros que no revisten tante colonia, razón por la cual es procedente acceder a
las cualidades necesarias para perpetuarlos (LA PREN- lo solicitado” y resolviendo en consecuencia “mantiénese
SA - 6 DE JULIO DE 1924 - CORDOBA - NOMENCLA- el nombre de la estación Barreto F.C.P., que en lo suce-
TURA DE LAS ESTACIONES FERROVIARIAS). sivo se denominará “Yarbas M. Barreto” pero decide a
El doctor Loza decidido a comenzar la revisión en continuación “desígnase con el de Miguel de Arrascaeta
Córdoba, la provincia en que fuera gobernador, se diri- a la estación La Para F.C.C.N.A.”.
ge al presbítero doctor Pablo Cabrera, catalogado como La variación de los nombres produjo una serie nota-
de reconocida autoridad en cuestiones de índole histó- ble de inconvenientes operativos, ya que fue importante
rica local, solicitándole su valioso concurso en la obra la cantidad de estaciones involucradas, como asimismo
que se proponía realizar, pidiéndole que se sirva indicar una reclamación mayúscula por parte de los cercanos a
los nombres de aquellas personas que a su juicio me- las mismas que estimaban elemental mantener la no-
rezcan figuración entre las que honraron a nuestro país, menclatura preexistente. El mismo presbítero docto Pa-
como asimismo le envíe un memorándum con las fe- blo Cabrera consideró necesario declarar que él no ha-
chas de nacimiento y fallecimiento, el principal o princi- bía desempeñado misión oficial alguna ni había tenido
pales hechos de su acción y, en lo posible la localidad en absoluto intervención en los cambios de nombres,
en que los realizaron, para establecer y llevar a la prác- habiéndose limitado, ante un pedido del doctor Eufrasio
tica la relación entre aquella y la estación más próxima S. Loza, a suministrar antecedentes sobre personalida-
a la misma, en que correspondiere el cambio de nom- des y lugares de la provincia de Córdoba, entendiendo
bre, quien le responde que “a la vez que aplaudo muy con ello realizar una obra patriótica y de cultura, como
de veraz una sanción semejante, sabia y discreta, a no es la de difundir “nuestra historia, salvando del olvido
dudarlo, pongo al servicio de ella, para los fines de su hechos trascendentales de nuestro pasado” (LA PREN-
ejecución, y de conformidad a los deseos manifestados SA - 14 DE DICIEMBRE DE 1924 - LA NOMENCLATU-
por usted en su invitación particular el contingente de RA DE LAS ESTACIONES).
mis luces y experiencia exigua, si se quiere en esta A todo esto estalló una crisis dentro del gobierno del
materia” (BOLETIN OFICIAL 26.11.1924 - DESIGNAN- presidente Alvear, que el 14 de enero de 1925 provocó
DO Y MODIFICANDO NOMBRES DE ESTACIONES). la retirada del mismo de algunos funcionarios que ha-
En forma intensa continúan los estudios y es así que bían ingresado bajo la influencia de Hipólito Irigoyen,
el 20 de noviembre de 1924 el Ministerio de Obras Pú- entre los que se hallaba el doctor Loza -quien fue reem-
blicas emite una Resolución por la que considerando plazado interinamente por el Ministro de Guerra, gene-
que "corresponde perpetuar los antiguos nombres con ral Agustín P. Justo- y del Director General de Ferroca-
que se designaban en la época de la conquista las dife- rriles, ingeniero Herminio Capdevila (LA PRENSA - 15
rentes localidades o regiones, tanto mas cuanto han sido DE ENERO DE 1925 - EL GENERAL JUSTO HIZOSE
suplantados por otros que carecen de valor histórico", CARGO INTERINAMENTE DEL MINISTERIO DE
hace un detalle de varios nombres de personalidades OBRAS PUBLICAS).
“que invisten títulos bastantes para que sus nombres En función de lo expuesto, ante una presentación de
sean perpetuados en la forma enunciada” citando entre la Empresa del Ferrocarril Central Argentino, en la que
ellos a “Miguel de Arrascaeta, jefe de las fronteras su- ésta hace algunas consideraciones sobre los inconve-
cesivamente a las puertas del Chaco y de la Pampa y nientes que, a su juicio, originarán los cambios de nom-

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Memorias del Pueblo

bres de estaciones dispuestos por la resolución de fe-


cha 20 de noviembre de 1924, y en la que además ma-
nifiesta “que por su parte, estima que en lo que se refie-
re a la imposibilidad o dificultad al menos de sustituir en
los horarios actuales y otras publicaciones con ellas re-
lacionadas, los nombres que llevan las estaciones por
los que ahora les han sido dados, que habría motivo
suficiente para disponer que se postergue la sustitución
de nombres que se ha ordenado, tanto en las líneas de
la empresa recurrente como en las demás que se en-
cuentran en iguales condiciones”, el nuevo Ministro de
Obras Públicas resuelve “proveer de conformidad con
lo propuesto, no debiendo en consecuencia hacerse
efectivo los cambios de denominación de que se trata
hasta nueva disposición” (BOLETIN OFICIAL - 13 DE
MARZO DE 1925).

Lo cierto es que la “nueva disposición” que se citaba


nunca existió, recuperando de esta manera las estacio-
nes ferroviarias involucradas, sus denominaciones an-
teriores y lo efímero de la vigencia de los cambios re-
sueltos hizo que inclusive muchas de éllas, como asi-
mismo algunas reparticiones oficiales, nunca se dieran
por enteradas provocando en muchos casos situacio-
nes de distinta resolución y que en definitiva el tiempo
se encargó de cubrir con el manto del olvido, quedando
como una rareza más de nuestra historia y recobrando Publicidad con la noticia de la habilitación del ramal fe-
así la estación de La Para su denominación original. rroviario de Jerónimo Cortés a Deán Funes, pasando
por La Para, 1913.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 37


Memorias del Pueblo

LA CONCRECIÓN DE UN SUEÑO DE LOS PUEBLOS


DEL DEPARTAMENTO RÍO PRIMERO
Y DE LA REGIÓN DE ANSENUZA

(IMÁGENES DE HIPOLITO LA PELICULA, VAN EN ADJUNTO)

ggggggggggggggggggggggggg
dime cuales
gggggggggggggggggggggg

Con gran éxito de público se presentó HIPOLITO en Plaza de Mercedes, en ocasión


de los trágicos hechos del 17 de noviembre de 1935, y para el 75º aniversario de
esos históricos hechos que cambiaron la historia de Córdoba

38 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

LOS POR QUE DE DON PABLO GUGLIERI


Por Jorge Miglione

Como investigador entiendo que toda tarea que de-


sarrollo tiene tres etapas: la previa, que está fundamen-
tada en la inquietud que se despierta por un tema a in-
vestigar a través del interés por conocer ciertos suce-
sos y lo que se desprende de los mismos por diferentes
motivos. Se podría relacionar esta etapa con las pre-
guntas ¿Qué? o ¿Quién? A medida que el trabajo se va
cumplimentando surge el conocimiento sobre el acon-
tecimiento o el personaje seleccionado, pudiéndose
entonces asociar este segundo estamento a las pregun-
tas ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Donde? El último momento son
las conclusiones, que muchas veces permiten entender
y fundamentar el tema investigado con gran certeza e
inclusive pueden estar requeridas en distintas fases de
la labor. A ellas se llega respondiendo a la interrogación
¿Por qué? Quizás la más difícil y que mayores discusio-
nes posibilita.
En la medida que la investigación sea correcta, efi-
ciente, con la profundidad buscada y exista el basa-
mento documental o testimonial necesario, las dos pri-
meras fases y sus interrogantes se pueden conocer
con suficiente certeza para ser aceptadas indiscutible-
mente; pero el tercer nivel siempre quedará sujeto a la
interpretación que se haga del estudio realizado, que-
dando sin duda un margen amplio para las mismas por
la subjetividad que ello implica. Además en la medida
que surjan novedades en el conocimiento de los acon- Pablo Guglieri de joven, recién llegado a Argentina
tecimientos analizados la misma puede variar. De lo
expuesto se desprende que sin duda la respuesta cer- diferentes regiones del mundo, son muchísimos sus co-
tera solo la conoce el o los autores de los hechos que metidos que se conocen mas al no tenerlos probados
se han descrito por los innumerables factores que pue- no es posible aún comentarlos, pero inclusive de aque-
den coyunturalmente haber incidido para que los acto- llos conocidos son también numerosos los que al con-
res tomen determinadas decisiones que han produci- cepto del analista no ofrecen una respuesta palmaria a
do los episodios verificados, siendo válido inclusive, la cuestión del hecho motivador.
dudar muchas veces de los motivos que ellos mismos Es por ello que me he decidido encarar este artículo
exponen. con un sentido inverso de lo que hasta el momento he
Siempre consideré correcto escribir o difundir tan solo venido haciendo, es decir describiendo algunas de las
conocimientos que a través del trabajo desarrollado se numerosas dudas que Guglieri y su obra presentan, y
han podido verificar como ciertos, mediante la documen- que hasta el momento no se han podido dilucidar con
tación o los testimonios obtenidos. Esto fue así hasta el precisión.
trabajo realizado sobre Pablo Guglieri, en el que si bien Por ejemplo, ¿Por qué no realizó ninguna actividad
durante los años que lleva el mismo -aquí creo necesa- con su hermano con quien dice que convivió a su llega-
rio aclarar que una investigación nunca finaliza, el límite da al país, teniendo en cuenta la solidaria actitud que
lo pone el propio investigador- se han podido conocer luego demostró para con sus compatriotas ayudándo-
innumerables emprendimientos de este personaje por los en su ahorro y la obtención de pasajes de regreso a

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 39


Memorias del Pueblo

la gente del campo y le impide mezclarse con otra más


elevada”? No lo creo, porque Guglieri siempre supo ha-
cer lecturas acertadas de las circunstancias que debió
sobrellevar, relacionándose oportunamente con perso-
nalidades muy importantes como por ejemplo en
Daireaux con Agustín Roca, hermano del general Julio
Argentino, ex presidente de la República que a pesar
de no poder intervenir directamente en la cuestión de
Bolívar por su elevada posición política hizo todo lo que
estaba a su alcance para ayudarlo a lograr la autono-
mía de Daireaux y con quien realizó algunos viajes por
los “territorios nacionales”. Luego, como reconocimien-
to a su desempeño en la guerra que Italia enfrentó en
Libia donde integró una comisión de investigaciones co-
merciales, industriales y técnicas aportando toda su ex-
periencia y conocimiento en lo referente a las labores
agrícolas, fue recibido por el rey Víctor Manuel III, el
mismo que años más tarde le otorgara los títulos ya men-
cionados. Asimismo es de destacar como se conecta
en 1912 en la ciudad de La Plata con importantes diri-
gentes de la ya influyente Unión Cívica Radical, como
el Ingeniero Luis Monteverde, para diligenciar en forma
más que eficiente toda la actividad administrativa reque-
rida para fundar Gardey y en tan solo seis meses obtie-
ne la emisión del respectivo decreto por el cual el Minis-
Título de Commendatore otorgado por el rey de Italia a terio de Obras Públicas de la Provincia de Buenos Aires
Guglieri aprueba los planos autorizando dicho emprendimiento.

su tierra inicialmente, con sus colonos en Daireaux y


años más tarde cuando remitió a Italia varios cargamen-
tos de trigo como ayuda a sus paisanos afectados por el
terrible flagelo de la primera guerra mundial, actitud que
le valió recibir los nombramientos de “Cavalieri”, “Ofí-
ciale” y “Commendatore dell'Ordine della Corona d'Italia”.
Además no ha sido posible ubicar la llegada a la Argen-
tina de ese hermano que él menciona.
También resulta extraño que a su llegada a Buenos
Aires se decidiera a trabajar en el por entonces inci-
piente Ferrocarril del Sud, inicialmente en las construc-
ciones cercanas a Buenos Aires y luego como emplea-
do en la estación Plaza Constitución de la misma em- Medallas otorgadas a Pablo Guglieri por diferentes
presa, dado que los conocimientos laborales que podía servicios brindados en Italia y Argentina
exhibir estaban relacionados con la albañilería que era
la actividad que había desarrollado en Francia durante
los años anteriores a su partida hacia América y la agri- Llama la atención el cambio que hace en cuanto al
cultura por su lugar de nacimiento y también por su ca- desarrollo de la tarea fundacional en Daireaux con res-
riño a la tierra. ¿Por qué no se dirigió directamente a la pecto a Gardey. En el primer caso manifiesta que él mis-
campiña como lo hacían muchísimos de sus coterrá- mo hace la división de los lotes “sin necesidad de recu-
neos, demorando unos cinco años en persuadirse “de rrir a la obra costosa y no siempre perfecta de los agri-
que al ambiente favorable para intentar algo con espe- mensores”, agregando que luego cuando realiza una
ranza de éxito era sin duda el de la campaña, adonde la nueva compra de quinientas hectáreas al señor Daireaux
vida estaba por iniciarse junto al cultivo de la tierra”? “fraccioné yo mismo la nueva finca en pequeños lotes,
Quienes lo conocieron, allegados o familiares, lo que luego vendí para formar el nuevo pueblo”; mientras
definieron como un hombre de carácter fuerte, reserva- que para el trazado de Gardey contrata al ya menciona-
do y un tanto hosco ¿ello habrá sido por lo que él defi- do Luis Monteverde, uno de los agrimensores más im-
nía como “esa repugnancia instintiva que hace arisca a portante de la provincia de Buenos Aires, debiéndose a

40 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

su trabajo centenares de proyectos fundacionales de


centros de población.
En los primeros días de 1900 Pablo Guglieri, en uno
de sus emprendimientos iniciales, se dirige al sur, sin
ningún rumbo determinado pero buscando el ambiente
favorable para intentar algo con esperanza de éxito.
Convencido que ese lugar estaba en la campaña elige
Pigüe, mencionando como compañero de viaje y primer
socio a Bartolomé Villa, luego reemplazado por Aquiles
Garelli. En ambos casos la experiencia no fue muy po-
sitiva, y posteriormente en la etapa de Daireaux contó
con el fundamental aporte de quienes se podría decir
que hasta llegaron a entablar una relación de amistad,
tal el caso de Juan Salduna, Pablo Mendiguren y Juan
Invitación a la inauguración del Savoy Hotel en La Para,
Folli, quienes lo acompañaron en su intento en Gardey
1926.
y en el caso de Folli hasta la provincia de Córdoba como
hombres de su extrema confianza. ¿Porque Guglieri no Aires impuesto por la convención radical, se transforma
los mencionó? en apoteosis. Controlado el movimiento y desarmados
¿Por qué fue tan importante su relación con las dis- los revolucionarios, este Batallón Pigüe fue el único que
tintas colectividades francesas en la Argentina? En 1900, marchó de regreso con sus armas a destino, siendo fac-
en ocasión de aquel viaje al sur, hace una primera eta- tible ver en una foto de la época a algunos de sus inte-
pa en Azul donde permanece un par de días y allí había grantes -entre ellos a Pablo Guglieri- luciendo las
una importante colonia francesa, mayoritariamente emblemáticas boinas blancas partidarias.
bearneses. Luego se asienta en Pigüe, colonia muy re- ¿Por qué concluyendo cada emprendimiento rápi-
ciente, iniciada por franceses unos seis años antes. Allí damente parte hacia algún otro sorprendente destino,
conoce a quien elige como la madre de sus hijos Benig- dejando inclusive algunas propiedades? Eso ocurrió en
na Leveau, nacida en un hogar francés, con quien con- Daireaux donde abandonó un emblemático chalet, ubi-
trae matrimonio. Con posterioridad le compra a un fran- cado frente a la estación ferroviaria, que se fue derru-
cés, Juan Gardey, el campo donde fundaría el centro de yendo de a poco hasta que la piqueta lo demolió. Lo
población que llevaría su apellido. ¿Sería tan solo por mismo ocurrió en Gardey donde hasta la fecha existen
el estupendo dominio que poseía de ese idioma? terrenos a su nombre.
A principios de junio de 1890 desde Pigüe, viaja a ¿Por qué cada emprendimiento nuevo era tan dis-
Buenos Aires, llevando buena parte de su producción tante uno de otro e inclusive sin conexiones aparentes?
para venderla allí. Dado el éxito que tiene, regresa un Él explica muy bien los casos de Pigüe y Daireaux, pero
mes después y es sorprendido el 26 de julio por el esta- nada se sabe del porque de la compra del campo “Las
llido de la revolución radical recordada como “del Par- Horquetas” donde luego fundaría Gardey, compra que
que de Artillería” que si bien fracasa, provoca la renun- inclusive durante un proceso judicial es caratulada por
cia del presidente Juárez Celman, ocasionándole difi- el fiscal como “sospechada de simulada”, y también se
cultades en su gestión comercial. Esta incidencia es desconoce la motivación de sus compras en la provin-
comentada por Guglieri, pero ¿Por qué nada dice de la cia de Córdoba, considerando como no fundamental el
activa intervención que tuvo tres años más tarde en la estado salud de su señora esposa esbozado como tal,
nueva revolución radical de 1893? Aquel movimiento de ignorándose por completo su presencia en Bolivia el 5
1890 que había durado cuatro o cinco días, a fines de de julio de 1910 y la compra allí de 20.000 hectáreas al
julio de 1893 recrudece más virulento, estallando la re- Dr. Leocadio Trigo, Gobernador de la Provincia del Gran
volución simultáneamente en 88 localidades bonaeren- Chaco en el Departamento de Tarija.
ses. Se estima que los insurrectos eran aproximadamen- En fin, considero aquí oportuno recordar las pala-
te 8.000 y se congregan en Temperley. Guglieri partici- bras del Licenciado Carlos Ferreyra en el sentido que
pa del mismo sumándose al Batallón Pigüe, una fuerza queda mucho por investigar sobre Pablo Guglieri, y es
que originalmente estaba formada por 92 hombres y se de desear que con tiempo y trabajo podamos seguir
engrosó hasta tener 700 integrantes tomando las locali- enterándonos más acerca de la notable vida de este
dades de Saavedra, Coronel Suárez, Lamadrid, Ferrari, hombre, que ha de ser sin duda tanto o más interesante
Altamirano, Chascomús y Brandsen. Estuvo en que lo que ya conocemos.
Temperley y entró en La Plata por la Diagonal 80. Como
premio fue designado para hacer guardia en la Casa de Gardey, 7 de septiembre de 2009.
Gobierno, donde el ingreso de Hipólito Irigoyen, que no
acepta el cargo de gobernador provisional de Buenos

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 41


Memorias del Pueblo

¿POR QUÉ CELEBRAMOS EL 24 DE SEPTIEMBRE DE


1911 COMO ANIVERSARIO DE LA PARA?

El origen del poblamiento en La Para es muy anti- en La Rioja y Catamarca, se finalizó en 1917, fundando
guo, pero el pueblo -tal como lo conocemos hoy- es hijo pueblos en todas partes por donde pasaba.
del ferrocarril y de la visión de su fundadora Petrona Como vemos, ninguna de esas fechas coincide con
Rodríguez de Peralta. nuestro 24 de septiembre, y nos e ha encontrado aún el
En 1910 pasaron por estas tierras las vías férreas, decreto de aprobación de los planos del loteo fundacional
construidas por el Estado Nacional; el 14 de junio de de Petrona Rodríguez.
1911 se realizó la mensura y amojonamiento del cua- REPASEMOS: La antigua patrona de La Para era
dro de estación o predio ferroviario a fin de su expro- Nuestra Señora de la Merced (hasta 1926, en que se
piación; el 30 de septiembre de 1911 se fijan los kilo- cambia por Nuestra Señora del Carmen), en 1911 vio la
metrajes definitivos de las estaciones por decreto na- luz la Escuela Nacional Nº 75 (creada en enero, puesta
cional 2988; 31 de octubre de 1911 el Presidente Sáenz en funcionamiento en septiembre e inaugurada en di-
Peña firma el decreto 3798 aceptando la donación de ciembre de ese año); en 1927 la Sociedad Cultural y
Petrona Rodríguez de Peralta de las 17 hectáreas para Sportiva organiza las primeras "Fiestas Populares" de
el cuadro de estación, y el 21 de diciembre por otro septiembre, y en 1961 y en 1975 se celebraron los ani-
decreto se establecen los nombres definitivos de las versarios 50 y 75 del pueblo en el mes de septiembre;
estaciones (las cuales fueron el origen de todos los por esto es que consideramos como UNA FECHA SIM-
pueblos de la línea). BÓLICA PERO BASADA EN DATOS REALES la del 24
Ya a fines de 1911 comienzan a circular los trenes, de septiembre de 1911 como ANIVERSARIO DEL PUE-
aún que la habilitación definitiva para todo tipo de car- BLO LA PARA.
gas, fue en febrero de 1913. La línea con sus extremos

FOTOS (ponelas como y donde te parezca, dentro de esta página)


FUNDACIÓN-1: Plano del cuadro estación antes de la expropiación, firmado por el
Ing. Boassi
FUNDACIÓN-2: Decreto 3798, aceptando la donación de Petrona Rodríguez de
Peralta
FUNDACIÓN-3: Plano fundacional de La Para 1911-1913.
FUNDACIÓN-4: Publicidad del FCCNA, 1917.

42 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

PREGUNTAS FRECUENTES
SOBRE MAR CHIQUITA
Información actualizada a Enero de 2011

Vista satelital de la Mar Chiquita en 2009

1. ¿Qué es Mar Chiquita? te de la provincia de Córdoba. A nivel internacional, Mar


Mar Chiquita y Bañados del Río Dulce constituyen Chiquita ha sido designada sitio Ramsar en Mayo de
uno de los humedales salinos más grandes del mundo. 2002 por la Convención sobre los Humedales, único
Es un área natural de características singulares, muy tratado intergubernamental a nivel mundial dedicado a
atractiva para quienes aman la naturaleza. un ecosistema en particular, es sitio de valor hemisférico
de la Red Hemisférica de Reservas para Aves Playeras
2. ¿Cuál es la importancia ecológica de los e integra la red mundial Living Lakes, organización no
humedales? gubernamental para la protección de los lagos con sede
Los humedales como Mar Chiquita constituyen un en Alemania.
recurso de gran valor económico, científico y recreati-
vo. Además, prestan servicios ambientales importantes 4. ¿Qué significa que Mar Chiquita sea Sitio
en lo que hace a regulación de clima, control de inunda- Ramsar?
ciones, recarga de acuíferos, depuración de agua, etc. La Convención sobre los Humedales (también co-
Por ello, la degradación y la pérdida de humedales pue- nocida como convención Ramsar) es un tratado
de causar graves y a veces irreparables daños. intergubernamental que proporciona el marco para la
acción nacional y la cooperación internacional en pro
3. ¿Mar chiquita es un área protegida? de la conservación y el uso de los humedales y sus re-
Sí, en 1994 se creó la Reserva de Uso Múltiple “Ba- cursos. Argentina es miembro de dicha convención. La
ñados del Río Dulce y Laguna Mar Chiquita” que de- Convención sobre los Humedales toma el nombre de la
pende administrativamente de la Secretaría de Ambien- ciudad iraní de Ramsar donde fue adoptada en 1971.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 43


Memorias del Pueblo

Los diversos ambientes de la laguna incluyen bañados y aguadas ricos en fauna

Aunque Mar Chiquita y los bañados del río Dulce ocu- 7. Cuáles son las dimensiones de la laguna?
pan el noreste de Córdoba y sur de Santiago del Estero, Mar Chiquita ha sufrido enormes oscilaciones a lo
esta designación solo se aplica a la porción del largo de su historia. El menor tamaño documentado co-
ecosistema dentro de la provincia de Córdoba, siendo rresponde al mapa catastral argentino publicado en 1891
de esperar que en el futuro próximo se incorpore la por- donde la laguna aparece con una superficie de unas
ción santiagueña. 110.000 ha, con medidas máximas de 75 Km. de Este a
Oeste y 35 Km. de Sur a Norte. La mayor superficie se
5. ¿Cuáles son las subregiones de la reserva? alcanzó en el año 2003, cuando las imágenes satelitales
La reserva tiene dos grandes subregiones: los Ba- indican una superficie algo mayor a las 600.000 ha, con
ñados del río Dulce en la parte norte y la laguna Mar medidas máximas aproximadas de 110 Km. de Este a
Chiquita al sur. Oeste y 95 Km. de Sur a Norte. En la actualidad (enero
- Bañados del río Dulce: zona de extensos pastizales de 2011) la superficie ronda las 480.000 ha, con ten-
y matorrales de arbustos de suelos salinos (jumeales) dencia decreciente ocupando el espejo de agua unos
que ocupan una extensa planicie por la que corre el río 78 Km. de Este a Oeste y 48 Km. de Norte a Sur.
Dulce proveniente de la provincia de Santiago del Este-
ro. Estos pastizales se mantienen gracias a las inunda- 8. ¿Cuáles son las fuentes de agua que ali-
ciones periódicas del río Dulce, sin las cuales desapa- mentan a Mar Chiquita?
recerían, siendo reemplazados por jumeales. En esta Casi la totalidad del agua que recibe la laguna pro-
área se practica la ganadería transhumante, donde los viene de sus afluentes (ríos Dulce, Primero y Segundo)
animales son trasladados siguiendo los procesos de y también de la lluvia que cae sobre la misma. Todas las
inundación y sequía. Los bañados albergan una gran evidencias disponibles indican que el aporte de agua
biodiversidad, particularmente aves. subterránea no es significativo. La laguna NO TIENE
- Laguna Mar Chiquita: incluye el cuerpo de agua de NINGUNA CONEXIÓN CON EL MAR, como a veces se
la laguna propiamente dicho. menciona (recordemos además que Mar Chiquita está
a más de 60 metros sobre el nivel del mar...).
6. ¿Cuál es el origen geológico de Mar Chiquita?
La laguna Mar Chiquita se originó hace alrededor 9. ¿Por qué el agua de Mar Chiquita es salada?
de 50.000 años. Una falla geológica elevó el terreno Al tratarse de una cuenca cerrada, sin salida al mar,
sobre sus bordes este y sur (Falla Tostado-Selva- el agua que recibe la laguna sólo puede salir de la mis-
Melincué), generando un gran dique natural que cerró ma por evaporación en su superficie. Dado que el agua
el paso de los ríos Dulce por el norte, y Primero y Se- evaporada no lleva minerales, las sales aportadas por
gundo por el sur, los que anteriormente desembocaban los ríos tributarios se han ido acumulando a través de
en el río Paraná. miles de años, lo que explica el alto contenido de sal de
Mar Chiquita.

44 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

El flamenco: majestuoso emblema de nuestro mar interior

10. ¿Cuál es la salinidad de Mar Chiquita? ye en períodos de aguas altas. De consistencia untuosa,
La salinidad (es decir, cantidad de sales disueltas tiene un color negro característico, el que al secarse se
en el agua) varía con el nivel de la laguna. De la infor- torna gris debido a su alto contenido de sulfuro de hie-
mación disponible se sabe que ha oscilado entre valo- rro, con un olor característico a huevo podrido debido al
res muy altos cuando la laguna estaba muy baja (360 sulfuro de hidrógeno. Se le atribuyen propiedades tera-
gramos por litro en 1911) a valores mínimos de alrede- péuticas.
dor de 25 gramos por litro en los momentos de máximo
nivel (2003). En la actualidad (enero de 2011) se regis- 13. ¿Cuál es la profundidad de Mar Chiquita?
tran 63 gramos por litro, dado que el nivel de la laguna Mar Chiquita es una depresión de muy poca profun-
viene descendiendo en forma constante desde 2003. didad ubicada en medio de una llanura sedimentaria.
Como valor de comparación, la salinidad del mar es de La profundidad máxima con el nivel actual (de alrede-
alrededor de 35 gramos por litro. dor de 68 metros sobre el nivel del mar) se ubica entre 8
y 9 metros. Debe tenerse en cuenta que esta profundi-
11. ¿El agua de Mar Chiquita es similar al agua dad se alcanza en áreas muy reducidas ya que la ma-
de mar? yor parte de la laguna es mucho menos profunda, no
La proporción relativa de las distintas sales es simi- superando el medio metro en extensas áreas, lo que
lar a la del mar, con predominio del cloruro de sodio (sal dificulta la navegación.
común). La principal diferencia radica en que el conte-
nido de azufre es mucho mayor en Mar Chiquita (aproxi- 14. ¿Cuál es la riqueza de Mar Chiquita en
madamente 3% en el mar y 15% en Mar Chiquita). Este biodiversidad?
elevado nivel de azufre genera sulfuro de hidrógeno (olor Mar Chiquita posee una rica biodiversidad. Se lle-
a huevo podrido) que a veces se percibe en las costas. van registradas más de 320 especies de aves, 35 de
ESTE OLOR ES UNA CARACTERÍSTICA NORMAL. reptiles, 16 de anfibios (ranas y sapos) y un número to-
ESTÁ RELACIONADO A LA ACTIVIDAD BACTERIANA davía no precisado de mamíferos. La reserva alberga
EN AGUAS SALOBRES Y NO SE ENCUENTRA VIN- tres de las seis especies de flamencos que existen en el
CULADO CON PROCESOS DE CONTAMINACIÓN. mundo, de las cuales la más común, el flamenco aus-
tral, cría en grandes colonias que en ocasiones regis-
12. ¿Qué características tiene el fango tera- traron más de 100.000 ejemplares. Los chorlos o chor-
péutico? litos constituyen otro grupo de aves características de
El fango de la laguna es característico de los lagos Mar Chiquita. Estas pequeñas aves son grandes vola-
salados. Es generado por actividad microbiana en con- doras. Algunas especies nidifican todos los años en el
diciones de baja disponibilidad de oxígeno y alta verano de América del Norte, volando a Sudamérica
salinidad del agua, por lo que es mucho más abundante durante el verano austral (entre Octubre y Marzo). La
cuando la laguna tiene un nivel de agua bajo, y disminu- especie más común en la laguna es el Falaropo tricolor,

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 45


Memorias del Pueblo

del cual se han registrado hasta medio millón de ejem- 18. ¿Cuál es la importancia de Mar Chiquita
plares en ciertos años. como sitio de valor paleontológico y arqueoló-
gico?
15. ¿Qué pasa con el pejerrey en Mar Chiquita? En el área es frecuente el hallazgo de fósiles de los
La laguna no tenía peces hasta fines de la década grandes mamíferos extinguidos hace unos 10.000 años,
de 1970, debido a la salinidad elevada de sus aguas. A tales como megaterios, gliptodontes, toxodontes, etc.
partir de 1980 el nivel de la laguna aumenta en forma Además se encuentran restos de culturas indígenas
rápida y la salinidad decrece proporcionalmente, per- que habitaron la región. Vale la pena visitar el Museo
mitiendo la expansión del pejerrey desde los ríos tribu- Aníbal Montes de Miramar y los Museos Municipales
tarios hacia el interior de la laguna. En los años subsi- de la región.
guientes se genera una actividad pesquera comercial
y deportiva significativa. En la actualidad el aumento 19. ¿Qué son las nubes de sal?
de la salinidad por encima del nivel crítico de 60 gra- En los últimos años, la retracción de la laguna ha
mos por litro ha llevado a la desaparición casi total de generado grandes playas barrosas cubiertas de sal, a
la especie, por lo que solo se encuentran pejerreyes partir de las cuales los vientos levantan pequeños cris-
en la boca de los ríos y arroyos que desembocan en la tales de sal que pueden ser transportados varios cien-
laguna. tos de kilómetros. Este fenómeno se da sobre todo en
la estación seca (Agosto-Octubre)
16. ¿Vuelve Artemia?
El camarón de la sal es un pequeño crustáceo ca- 20. Cuáles son las amenazas ambientales que
racterístico de los lagos salados de todo el mundo. Aun- enfrenta Mar Chiquita?
que se la conocía como Artemia salina, estudios mo- Las principales causas de preocupación incluyen:
dernos indican que el nombre científico de la especie extracción no controlada de agua de los ríos afluentes,
de Mar Chiquita es Artemia franciscana. Artemia ha sido la contaminación de diverso origen, la deforestación, la
muy común en los períodos de aguas bajas y desapare- caza y la pesca no controlada. Cada una de ellas re-
ció casi totalmente por décadas cuando el nivel de la quiere una adecuada consideración y planificación a fin
laguna subió y se hizo menos salina, situación que no le de evitar deterioros ambientales no deseados.
es favorable. Actualmente al bajar el nivel y aumentar la
salinidad del agua, vuelven a aparecer masas densas Para mayor información consultar: Bucher E.H. (ed.)
en las playas de Mar Chiquita. Es totalmente inocua para 2006. Bañados del Río Dulce y Laguna Mar Chiquita
el ser humano. (Córdoba, argentina). Academia Nacional de Ciencias
de Córdoba.
17. ¿Por qué aparecen aguas rojas?
Ocasionalmente pueden verse aguas de color rojo Contacto: Mg. Erio Curto
en Mar Chiquita, las que pueden cubrir grandes exten- Estación Biológica Mar Chiquita
siones. Este fenómeno es común, por ejemplo, en La- (dependiente de Promar )
guna del Plata durante el verano, lo que a veces alarma Almirante Brown y Belgrano. (5143)
a los bañistas. La coloración roja es debida a pigmentos Miramar. Córdoba
carotenoides presentes en bacterias adaptadas a altos
niveles de salinidad. Dichas bacterias son totalmente Pagina web: www.promarmarchiquita.com.ar
inocuas para el ser humano. Email: erio_curto@yahoo.com
Teléfono: 03563-15405401

46 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

PRIMERAS IMPRESIONES DE
LA MATERIALIZACIÓN DE UN VIEJO SUEÑO
“HIPOLITO 1935”

Recuerdo que en una de mis primeras “incursiones”


tierra adentro en el departamento Río Primero -1979- y
ya como personal de la Agencia de Extensión Rural del
INTA Río Primero visitamos a la pequeña Comuna de
Plaza de Mercedes, de paso a un establecimiento
agropecuario de la zona.
Pequeño caserío, con edificaciones de principios de
siglo XX y algunas ya más modernas, una Plaza pública
desértica con un monolito y placas alusivas de un viejo
episodio que aún resonaban en los ecos y los recuer-
dos de los habitantes y visitantes: la Tragedia (o Ma-
sacre) de Plaza de Mercedes, allá por 1935. Parecía un
relato entre histórico y de leyenda, que trascendía a las
leyes del olvido. Allí, en ese pequeño paraje la comple- des” para gestionar su concreción. Ora dormido, ora
mentaria de una elección tiñó de sangre y fuego, y fue entusiasta, esperando un turno en los magrísimos in-
un hito en la democracia de este joven país que tras- gresos que la buena voluntad de historiadores y aficio-
cendió los límites comarcales y provinciales, llegando a nados le ponían.
repercutir hasta en la misma Capital Federal. Y el tiempo no destruye a la perseverancia. Y los
Por entonces cursaba mi segundo año de magiste- caminos del arte y la historia se cruzaron. En la filma-
rio superior y quizá esa inquietud y el misterio que que- ción del corto “Adopción” nos re-conocimos con Teo
daba luego de algún comentario llegaron a hacerme (Teodoro) Ciampagna, ya que sus padres residieron en
pensar que sería relevante realizar una especie de do- décadas pasadas en Río Primero, desarrollando sus
cumental sobre el hecho, para que el mismo no termi- respectivos trabajos. El entorno de la Estancia y el fra-
nara perdiéndose entre amarillentos diarios y el recuer- gor de una filmación nos transportaron a un mundo que
do de los memoriosos locales o partidarios en pugna. Y desde la historia intuíamos pero que no conocíamos en
como todo pensamiento liberto quedó dando vueltas y realidad. Y allí volvió a surgir la posibilidad de seguir
puede haber sido comentario en ruedas de estudiantes soñando una recreación de la famosa “Tragedia”. En un
o familiares. descanso de “Adopción”, le manifestamos a Teo sobre
En 1985 pudimos fundar el Centro de Estudios His- un proyecto que hacia tiempo imaginábamos llevar al
tóricos de Río Primero, con el objetivo de trabajar por la formato documental.
investigación y la recuperación de la historia local y re- Teodoro Ciampagna y Javier Aguirre nos escucha-
gional. Y hechos pasados como de Plaza de Mercedes ron en nuestra vieja casona de Pablo Robert 90 y por
volvieron a tratarse y hasta investigarse con algunos sus caras recuerdo que mucho no les convencía una
documentos y testimonios. recreación histórica -con los costos que implicaba- de
Más tarde, en 1998, este Centro nuestro junto a otros un hecho perdido en la memoria de un pueblo cuya exis-
y a museos de la región, comenzamos a modelar una tencia ni sabían. No obstante, volvimos a trabajar sobre
entidad de mayores alcances y envergadura que comen- la perseverancia, les suministramos algunos documen-
zó a trabajar por la recuperación del Patrimonio Históri- tos y en la primera oportunidad que fue posible los invi-
co. Dando forma posteriormente a lo que hoy conoce- tamos a Plaza… Y allí creo que se produjo el “clik”, la
mos como Asociación de Amigos del Patrimonio Históri- percepción en el lugar mismo de los hechos y su tras-
co de Ansenuza, Suquía y Xanaes -APHA- cendencia. Desde entonces hasta hoy mismo un largo
Muchos más fueron los proyectos que se asomaron camino hemos recorrido en conjunto para dar forma y
puesto que ya la mirada se ampliaba a una vasta zona y reformular constantemente ese tímido documental de
con un rico pasado histórico. Y desde ese punto de in- 10 a 15 minutos hasta convertirse en una película, un
flexión siempre estuvo el “Proyecto de Plaza de Merce- “largo” ficcional premiado -nada mas ni nada menos-

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 47


Memorias del Pueblo

“castings” regionales desde donde surgió -entre otros-


el mismo Hipólito y un largo etc. que se amontonó hasta
el momento mismo del “avant premier” (en realidad un
estreno regional), que se llevó a cabo los días 27 y 28
de noviembre de 2010: pues sí, en 2005, cuando se
cumplieron 70 años de los hechos en cuestión lanza-
mos el proyecto a la comunidad, y hoy en 2010 a los 75
años nos dimos el gusto (y.. porque no, el lujo) de estre-
nar HIPOLITO en el Año del Bicentenario de la Patria.
que por el mismísimo INCAA (Instituto Nacional de Cine Aun no dimensiono el concreto aporte que podre-
y Artes Audiovisuales). mos llegar hacer a la historia regional y al arte cinema-
Fueron días, meses y hasta años de trabajo y espe- tográfico, solamente digo que me siento plenamente
ranzas puestas en los probables apoyos regionales, satisfecho por todo el esfuerzo y los tiempos dedicados
“metiendo” el proyecto en cada reunión, en cada anun- a este proyecto.
cio, en cada publicación. Creo que fue un fértil tiempo
en donde la historia y la cinematografía trabajaron codo
a codo para conjugar un proyecto que respondiera a los
respectivos objetivos: de respeto por los acontecimien-
tos y por una propuesta estética de jerarquía.
En diciembre de 2009 mientras visualizaba esas pri-
meras imágenes de la filmación de “Hipólito” cuyo roda-
je concluyó ese mismo mes, también y de madrugada,
no podía casi creerlo. Ver en formato cinematográfico
los actores encarnando una historia nuestra, con paisa-
jes comunes, con lugares conocidos y con recreacio-
nes tan reales realmente me conmovieron, por la cali-
dad de la obra y por la certeza de que ese viejo sueño
comenzaba a concretarse, finalmente. Y desde el mis-
mo interior, desde el territorio cordobés, con su empuje
y su talento, con su sapiencia y creatividad. Los hechos de Plaza de Mercedes volvieron a ser
noticia 75 años más tarde, pero esta vez desde una ex-
presión artística audiovisual que mostró a las actuales
generaciones el retazo de historia con pasiones políti-
cas e ideológicas que se manifestaron violentamente
en esta paraje departamental, pero que su simbología a
trascendido los límites del tiempo, acentuando los valo-
res democráticos.
Luego de su proyección, es muy probable que des-
pierte ciertas polémicas y/o críticas. Recordemos que es
una ficción sustentada en hechos reales, es una particu-
lar manera de analizar este hecho que a pesar de su cru-
deza y violencia, reflejan los modos y maneras de una
época... y sin querer comparar realidades, visualicemos
Entonces, en la intimidad de mis pensamientos diri- cualquier noticiero televisivo de la actualidad...
gí mi agradecimiento a los compañeros integrantes de Solicito las disculpas del caso por este modo desor-
APHA que apoyaron siempre esta idea (especialmente denado de escribir estas impresiones luego de ver
a Carlos Ferreyra), a la audacia y visión de Teodoro por “Hipólito”.
aprehender esta inquietud y llevarla adelante a pesar No quiero olvidarme de sus primeros guionistas:
de todos los “avatares” que hubo que superar y que no Lucas Ceballos y Matías Aguirre, de los productores
fueron pocos. Javier Aguirre y Simón Muzart, cuando este proyecto
Seguramente el joven equipo de Teo tendrá a esta era muy modesto y sin embrago se pensaba en “gran-
altura miles de anécdotas para comentar y registrar en de”, de los apoyos recibidos de las Comuna de Plaza
la memoria de la convivencia del proyecto, desde los de Mercedes, Diego de Rojas y Maquinista Gallini, de
sufridos “cambios” en el guión, las reiteradas visitas a los Municipios de Río Primero, Santiago Temple, Villa
las locaciones, la enumeración de objetos museables, Santa Rosa, La Puerta, Villa Fontana, La Para, Obispo
la “búsqueda” enorme de recursos económicos, los Trejo, Marull y Balnearia, de los museos de la región, de

48 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

la Legislatura provincial, del Legislador Hugo Pozzi, del


Gobierno Provincial, del INCAA, de la comprensión del
Dr. Raúl Vivas.
Un gracias mayúsculo al actual joven equipo de
“Hipólito” por haber hecho posible con su trabajo esta
película; y también un reconocimiento al cuerpo de ac-
tores y extras. El agradecimiento también a todos los
integrantes de APHA que posibilitaron nuestros apor-
tes, desde ideas hasta objetos, tiempo, dedicación,
gestión.
Perdón por las omisiones, en los créditos del film
están todos debidamente reconocidos.
Gracias por dedicar unos instantes a esta lectura. José Luis Zampini
Comisión de Cine y Medios Audiovisuales
APHA
Río Primero

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 49


Memorias del Pueblo

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En el año del Centenario,


La Para organiza el

XXXIº Encuentro Anual de la


RED DE INSTITUTOS DE ESTUDIOS HISTÓRICOS DE LA
PROVINCIA DE CÓRDOBA

26, 27 y 28 de agosto de 2011

Con la colaboración de la Municipalidad de La Para,


instituciones y comercios del pueblo

Entrá a:
www.riehc.com.ar
¡Conocé las actividades de la R.I.E.H.C. y sumate!

50 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

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SECCIÓN ESPECIAL

MEMORIAS
2008 - 2009 - 2010

MUSEO HISTÓRICO MUNICIPAL “LA PARA”

Consulte
www.museodelapara.gov.ar
link “Historial de Noticias”

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 51


Memorias del Pueblo

RESUMEN DE LA MEMORIA ANUAL 2008


MUSEO HISTÓRICO MUNICIPAL “LA PARA”

1. Cantidad de visitas durante 2008: 1982 visitan- decena de directores de museos de la zona.
tes registrados 17. Organización del Día Internacional de los Museos
2. Colaboración en la organización del Día del Mé- con la jornada “Raices y alas: memoria e identidad” en
dico Parense, con motivo de cumplirse el cincuentenario la cual se presentaron los nuevos objetos donados al
de la muerte del Dr. León S. Barrionuevo. museo y actuaron diversos números musicales y artísti-
3. Colaboración permanente con el Área de Cultu- cos.
ra y turismo en actividades relativas a la aplicación del 18. Participación en el Primer Encuentro de Museos
proyecto PROFODE. del N.E. de Córdoba, en Arroyito.
4. Apoyo continuado y aplicación local de los pro- 19. Asistencia al curso “La Financiación de la Cultu-
yecto de APHA, en especial lo relativo al proyecto del ra y las Artes: especial referencia al Estado como me-
film HIPOLITO. cenas”, organizado por el CCEC, la AECID y la OEI en
5. Realización de varias campañas de arqueología la ciudad de Córdoba.
y se continuó con el estudio científico y técnico de la 20. Desarrollo y finalización del Proyecto de
colección arqueológica del museo. Digitalización de la Memoria Visual junto a Fundación
6. Se recibieron 169 libros en donación y canje para de la Cuenca y a APHA.
la biblioteca especializada del museo. 21. Colocación de WiFi público en las instalaciones
7. Atención de contingentes especiales, grupos es- del museo.
colares y visitas destacadas (Vito Adesso, Juan Alberto 22. Participación en las V Jornadas Nacionales de
Mateiko, etc.) durante todo el año. Estudiantes y Profesionales de Museología, en
8. Se realizaron investigaciones históricas en archi- Malargüe.
vos de Buenos Aires y de Córdoba. 23. Participación en el XXVIII Encuentro de la RIEHC
9. Participación en diversas actividades e inaugu- en Isla Verde.
raciones de muestras en museos de la zona: Villa Fon- 24. Organización junto a la Dirección de Cultura y
tana, La Puerta, Villa Santa Rosa, Marull, Altos de Turismo de la Municipalidad de La Para de las XXVI
Chipión, Miramar, Santiago Temple, Las Varas, Las Va- Jornadas de Historia, el 25 y 26 de octubre en La Para.
rillas y Río Primero, Plaza de Mercedes, entre otros. 25. Asistencia al XIII Jornada Anual de la Federa-
10. Representación y participación en actividades de ción Mundial de Amigos de Museos, Israel, septiembre
las instituciones locales. de 2008.
11. Participación en jornadas y cursos de capacita- 26. Comenzaron las gestiones para lograr realizar la
ción en Córdoba y en otras localidades. HERMANDAD GUGLIERIANA, junto a los Municipios de
12. Ingresaron constantemente donaciones de obje- Daireaux y Gardey (Pcia. de Buenos Aires).
tos, documentos y fotografías que siguen incrementando 27. Asistencia a las II Jornadas de Patrimonio en
el acervo del museo. Peligro, Ciudad de las Artes, Córdoba.
13. Adhesión al AÑO IBEROAMERICANO DE LOS 28. Participación en las actividades organizadas por
MUSEOS, propuesta del ICOM, de la OEI, de la OEA y FADAM en Córdoba y en Buenos Aires.
de la AECID. 29. Creación del nuevo sitio web del museo:
14. Realización del proyecto de difusión del patrimo- www.museodelapara.gov.ar
nio arquitectónico urbano de La Para, el cual no puedo 30. Recepción de la donación del archivo interno e
imprimirse como folleto. institucional de la Escuela “Juan Domingo Perón” de
15. Colaboración con la Parroquia “Nuestra Señora Colonia El Bagual.
del Carmen” en los festejos del 75º aniversario de la 31. Cooperación con el PROMAR-FCEFN-UNC a tra-
creación de la misma. vés de su Estación Biológica Mar Chiquita.
16. Junto a la Universidad Popular “La Para” y a la 32. Comienzo del establecimiento de contactos con
Universidad Nacional de Córdoba se organizó el curso ex residentes parenses y con familiares de parenses
“Patrimonio, Museo y Sociedad” donde participaron una residentes en el exterior para adelantar trabajo por el

52 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

centenario de nuestra localidad. 34. En cuanto a la organización interna del museo,


33. El año 2008 cerró con un acto de presentación se dividió el Área de Investigaciones en dos nuevas:
de la revista Memorias del Pueblo Nº 8 junto a confe- Área de Arqueología y Área de Historia.
rencistas invitados, actuación de artistas locales y feria 35. Se realizó la primera evaluación de la colección de
de artesanos. La actividad fue organizada por el Área tallas religiosas y obras de arte del museo para considerar
de Cultura de la Municipalidad y la Dirección de este su restauración; esto fue realizado por expertos
museo. restauradores de Córdoba: Paola Rojo y Jacinto Palacios.

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 53


Memorias del Pueblo

RESUMEN DE LA MEMORIA ANUAL 2009


MUSEO HISTÓRICO MUNICIPAL “LA PARA”

1. Cantidad de visitas durante 2009: 1684 visitan- tana, La Puerta, Villa Santa Rosa, Marull, Cañada de
tes registrados. Luque, Brinkmann, Altos de Chipión, Miramar, Santiago
2. Se apoyó constante a la producción de la pelícu- Temple, Colonia Marina, Las Varas, Plaza de Mercedes
la HIPÓLITO, logrando intervenir activamente en el ro- y Río Primero entre otros.
daje y haciendo que La Para tenga una fuerte presencia 16. Colaboración con el Centro de Parenses Resi-
en este exitoso proyecto que está por finalizar. dentes en Córdoba en el almuerzo anual del grupo.
3. Realización obras de refacción, ampliación y 17. Edición, presentación y aplicación escolar del
mejoras en el montaje y la gráfica del museo y se orga- CUADERNILLO DIDÁCTICO DE ARQUEOLOGÍA, ela-
nizaron los festejos del 20º Aniversario de la entidad. borado por nuestra arqueóloga Marta Bonofiglio y que
4. Se lograron donaciones en dinero como parte de contó con el apoyo de empresas e instituciones de la
la campaña de financiamiento con motivo del 20º Ani- localidad.
versario del Museo. 18. Cooperación en la presentación y difusión del li-
5. Colaboración en la organización del Día del Mé- bro EN ISLA del autor local Elder Candusso.
dico Parense, siendo el Dr. Neri E. Bruera el homena- 19. Representación y participación en actividades de
jeado del año 2009 por cumplir 50 años de profesión. las instituciones locales.
6. Colaboración con el Área de Cultura y Turismo 20. Participación en jornadas y cursos de capacita-
en actividades relativas a la aplicación del proyecto ción en Córdoba y en otras localidades.
PROFODE. 21. Presentación del Proyecto de Ordenanza para la
7. Apoyo continuado y aplicación local de los pro- Protección del Patrimonio Histórico y Cultural de La Para.
yecto de APHA, en especial lo relativo a los catálogos 22. Ingresaron constantemente donaciones de obje-
del patrimonio histórico de la región. tos, documentos y fotografías que siguen incrementando
8. Se realizaron varias campañas de arqueología y el acervo del museo.
se continuó con el estudio científico y técnico de la co- 23. Se comenzó a elaborar el proyecto de AULA
lección arqueológica del museo. TALLER DE ARQUEOLOGÍA para ser presentado ante
9. Se recibieron 56 libros en donación para la bi- del DEM. El Aula Taller de Arqueología se instalaría
blioteca especializada del museo. en la antigua casilla de encomiendas de la Estación
10. Se organizó la muestra LOS ROSTROS DE LA Ferroviaria.
DESESPERANZA del fotógrafo profesional Marcelo Rico 24. Colaboración con la Municipalidad en el marco
en adhesión al Día del Aborigen Americano. del Convenio de Cooperación Recíproca con la U.C.C.
11. Organización del curso-taller EL QUICHUA EN 25. Participación en las reuniones de las Mesa de
EL HABLA COTIDIANO DE LOS CORDOBESES, en Gestión del C.I.C.
adhesión al Día Internacional de los Museos. 26. Asistencia a la Iº Jornada de Bibliotecas y Archi-
12. Se atendieron contingentes especiales, grupos vos en Museos, Córdoba.
escolares y visitas destacadas durante todo el año. 27. Coordinación de una Mesa de Trabajo en las VIIª
13. Gracias a un proyecto de APHA y de Fundación Jornadas de Historia de los Pueblos de Paravachasca,
de la Cuenca se logró la digitalización de 1300 fotogra- Calamuchita y Xanaes, Alta Gracia.
fías, planos y gráficos del archivo del museo y de parti- 28. Asistencia al XXVIII Encuentro Anual de la
culares que cedieron sus materiales fotográficos para RIEHC, Quebracho Herrado, Córdoba.
este fin. Lo digitalizado está almacenado en 21 DVDs. 29.Asistencia al Primer Congreso Regional de
14. Se realizaron investigaciones históricas en los Patrimonio, Turismo y Comunicad, Villa Rumipal,
archivos ferroviarios de Buenos Aires y en el Archivo de Córdoba.
Gobierno de Córdoba. 30. Adhesión al Comité Córdoba de Lucha contra el
15. Participación en diversas actividades e inaugu- Tráfico Ilícito de Bienes Culturales del Gobierno de Cór-
raciones de muestras en museos de la zona: Villa Fon- doba.

54 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 55


Memorias del Pueblo

RESUMEN DE LA MEMORIA ANUAL 2010


MUSEO HISTÓRICO MUNICIPAL “LA PARA”

1. Cantidad de visitas durante 2010: 1575 visitan- Monte Maíz, Córdoba.


tes registrados. 14. Mantenimiento del sitio web del museo
2. Se participó en la avant premier regional de www.museodelapara.gov.ar donde se publican todas las
HIPÓLITO. novedades del museo.
3. Colaboración en la organización del Día del Mé- 15. Rectificación del proyecto de Aula Taller de Ar-
dico Parense, siendo el Dr. Rolfe Giraudo el homena- queología por Sala de Muestras Temporarias y Activida-
jeado en este año 2010. des Didácticas del Museo y del Área de Cultura.
4. Colaboración con el Área de Cultura y Turismo 16. Aplicación de dos proyectos educativos: “Nues-
en actividades relativas a la aplicación del proyecto tros Remotos Antepasados Ribereños” y “1810-La Para-
PROFODE. 2010”.
5. Apoyo continuado y aplicación local de los pro- 17. Habilitación de la muestra “50 años formando jó-
yectos de APHA y asistencia a los cursos, jornadas y venes con valores y compromisos: aniversario del I.M.E.”
eventos organizados por esa entidad regional. 18. Asistencia a la III Jornada de Patrimonio en Peli-
6. Realización de varias campañas de arqueología gro, Córdoba.
y se continuó con el estudio científico y técnico de la 19. Asistencia y coorganización del VII Encuentro de
colección arqueológica del museo. Estudiantes y Profesionales Graduados de Museología,
7. Se recibieron 84 libros en donación para la bi- Córdoba.
blioteca especializada del museo. 20. Se realizaron cambios en el Museo Regional del
8. Atención de contingentes especiales, grupos es- Trabajo.
colares (urbanos, rurales y de la región) y visitas desta- 21. Se restauró mesa antigua del siglo XIX de la co-
cadas (Intendentes de la Región Tamar, etc.) durante lección del museo y colocación de dos paños de blindex
todo el año. en dos ventanas del museo.
9. Se realizaron investigaciones históricas en los 22. Organización del 1er Panel de Actualización en
archivos ferroviarios de Buenos Aires y en archivos de Arqueología y Antropología de la Región de Ansenuza,
Córdoba. La Para.
10. Participación en diversas actividades e inaugu- 23. Asistencia al Vº Congreso Provincial de Historia,
raciones de muestras en museos de la zona y de la pro- Villa María.
vincia: Seeber, La Paquita, Altos de Chipión, Colonia 24. El Museo Histórico Muncipal de La Para fue ele-
Marina, Balnearia, Miramar, Marull, El Tío, Tránsito, San- gido para presidir el Centro Regional de Preservación y
tiago Temple, Río Primero, Villa del Rosario, Villa María, Conservación Preventiva del Patrimonio Cultural en
Estación Juárez Celman, Las Arrias, La Francia, Caña- Obras sobre Papel.
da de Luque, Villa Fontana, La Puerta, Plaza de Merce- 25. Concreción del Proyecto “Hermandad
des, Villa Santa Rosa, Las Peñas, Villa del Totoral, Cór- Guglieriana”, junto a la ciudad de Daireaux y al pueblo
doba, etc. También en el exterior, con representación en de Gardey en Provincia de Buenos Aires.
las IIº Jornadas de Museología de Uruguay. 26. Asistencia a las XXVIII Jornadas de Historia del
11. Participación en jornadas y cursos de capacita- Norte de Córdoba, Cañada de Luque.
ción en Córdoba y en otras localidades. 27. Colaboración con el Programa Municipal del Bi-
12. Ingreso constante de donaciones de objetos, centenario Argentino.
documentos y fotografías que siguen incrementando el 28. Conmemoración del Día del Aborigen America-
acervo del museo. no con la presentación del documental “Maká: resistien-
13. Asistencia al XIX Encuentro Anual de la RIEHC, do a la fragmentación” de Marcelo Rico.

56 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.


Memorias del Pueblo

Revista del Museo Histórico Municipal “La Para” / 57


Memorias del Pueblo

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Diciembre del año 2010.
Ciudad de Córdoba
República Argentina.

58 / Año 10 - Número 9/10, Diciembre 2010.

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