Javier Licanqueo

Opinión sobre el alza de los planes de ISAPRE

Marcela González,
Javier Licanqueo,
Tania Lobos,
Jofré, Priscila,
Zaldívar, Pablo.
DIPLOMADO EN GESTIÓN DE SALUD.

MÓDULO: SISTEMAS DE SALUD EN CHILE

El alza de las Isapres, desde una perspectiva económica, corresponde a una medida
desproporcionada, pues su aumento supera al Índice de Precio de Consumo (IPC) de
nuestro país. Las aseguradoras lo explican como una acción justificada debido al aumento
global de los costos de salud, asociados a diferentes motivos, tales como: el aumento de
las enfermedades no transmisibles, incremento de los reposos asociados a estas, aparición
de nuevos estudios y tratamientos, además del creciente aumento de los costos de las
prestaciones.
Nos parece importante hacer notar que la ley de isapres permite a éstas revisar los
contratos y modificar el precio base de los planes, normando también los plazos y los
mecanismos para dar aviso y cumplimiento a la modificación. En la misiva de aviso estas
entidades tienen la oportunidad de presentar la información que acredite la necesidad del
alza. En esta materia, la jurisprudencia ha sido reiterativa en considerar que para que
corresponda una adecuación, el alza debe fundarse en la obligación de otorgar
prestaciones no previstas al momento de contratar el plan o a un aumento en los costos
que sea imprevisible. De modo que las isapres se ven en la obligación de exponer
situaciones extraordinarias que sirvan de sustento para el alza, acción en la que no han
logrado suficiencia a la hora de convencer a las autoridades, debiendo dejar sin efectos las
alzas en favor de los usuarios que han usado su derecho a solicitar arbitrajes.
Considerando los hechos que exponemos; que los tribunales y que la
superintendencia sistemáticamente han relativizado la facultad de las isapres en relación a
la posibilidad de adecuar precios, nos parece pertinente y preciso que se realice una
reforma al sistema de isapres. Esta necesidad se funda primordialmente en el hecho que
las tablas de factores que utilizan las isapres para calcular el precio de los planes, que
consideran sexo y edad, son “inconstitucionales y discriminatorias”, según lo señalado por
Javier Licanqueo

el mismísimo tribunal constitucional, entidad que instó al gobierno de turno y al congreso

en 2010 a reformar la legislación relativa a las isapres.
Si bien en economía hay principios de libre mercado y libre elección, no es menos
cierto que también hay un principio que señala la imposibilidad de lograr una elección
adecuada debido a lo engorroso del proceso, pues existen decenas de planes y más de 90
aranceles diferentes como sucede en el mercado de isapres. Este aspecto debería ser
corregido por la reforma, dando lugar a un número sensato de opciones que permitan al
usuario cotizar.
Otro aspecto a corregir, y que consideramos muy significativo por la injusticia social
que representa, son las preexistencias y las carencias. La eliminación de estas trabas
promovería la movilidad de usuarios dentro del sistema y fomentaría la competencia. Por
su parte, las aseguradoras pueden enfrentar estas modificaciones por medio de un fondo
común “solidario” que podría ser administrado conjuntamente por los aseguradores
privados.
La continua indiferencia de las autoridades y de las mismas aseguradoras a la idea
de reformar el sistema, dará lugar a un aumento del descontento ciudadano y al peligro de
que eventualmente se desarrolle simpatía por soluciones populistas. En resumen,
planteamos que pese al aumento notable de los gastos en salud, el alza no se justificaría
por cuanto se trata de aumentos previsibles que las aseguradoras debieron contemplar en
el contrato primitivo y que además, los precios iniciales son establecidos con una arbitraria
ventaja para el asegurador, toda vez que tiene permitido discriminar por edad, sexo y
preexistencia.

Javier Licanqueo.