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PRECIOUS: RUIDO Y SILENCIO

Andrés David Mesa Correa

Felipe de Restrepo, 2018


La cámara anecoica es una sala diseñada con el propósito de absorber casi en su totalidad las
ondas del sonido, permitiendo así un ambiente dentro de la misma con un silencio casi perpetuo.
Se han hecho una serie de estudios ingresando personas a la cámara, para ver sus reacciones. Los
resultados no podrían ser más alucinantes. En el silencio total, la única fuente de sonido es el
propio cuerpo, de tal forma que los oídos comienzan a escuchar los latidos del corazón, el sonido
de la respiración, o incluso sonidos del sistema digestivo. Al cabo de 30 minutos, la persona dentro
de la cámara comienza a experimentar pérdida de control sobre sí mismo, incapacidad al
mantenerse de pie, y posteriormente, síntomas de locura.

Precious es una película que sale de lo que se ve a diario en la industria del cine. Trata temas
sociales de la realidad estadounidense muy fuerte, y a su vez, el rechazo social que producen las
situaciones de las personas en situaciones similares, los prejuicios que las rodean. Es una película
difícil de digerir; pues presenta una realidad que hace sentir vergüenza al espectador, con factores
violentos que pueden llegar a ser bastante familiares, dotados de un gran realismo en lo que
respecta a la naturaleza de la violencia.

La película se ambienta en un barrio pobre de Nueva York: Harlem, uno de los mayores centros de
residencia de personas afroamericanas. Una realidad difícil de la que es igualmente difícil de
escapar, y que centra la acción de dicha realidad en Clarisse Precious, una adolescente de 16,
negra, obesa, y analfabeta, madre de dos hijos producto de violaciones por parte de su padre, y
víctima de abusos físicos y verbales constantes de parte de su madre, la cual busca salir de su
realidad y luchar por su educación.

La película logra atrapar en ese ambiente y hacerte sentir que es real, gracias a lo reales que se
sienten las expresiones de los personajes; algo que elogiar a la actuación de dos personajes en
específico: la protagonista y su madre, cuyas actuaciones fueron dignas de elogio, y la forma en la
que se desarrolla el personaje de la madre, visualizándose a sí misma y a su dolor en su hija.
Aunque no es nada que no haya sido dicho varias veces ya.

Sin embargo, gran parte de ese ambiente se entorpece y pierde realismo por el tema del que
habla. Tema que ya ha sido trabajado en multitud de ocasiones (Que por tomar referentes que
todos conocen, Matilda explora una situación muy similar) y que se vale de recursos forzosos
como lo son el drama barato y el morbo para valerse de la lágrima fácil del espectador, en lugar de
buscar conmoverlo realmente. Prefiere hacer sentir lástima al espectador, que hacerlo sentir una
verdadera empatía por sus personajes.

Otro de los factores que afectan a la atmósfera que construye la interpretación de los personajes,
son lo mal llevados y dirigidos que llegan a ser los planos de la cámara. En varias ocasiones, los
planos que toma la cámara son ridículos, ya sea por lo exagerados e imposibles que son, o porque
simplemente, no concuerdan con la escena. Llega hasta tal punto de bizarría que fácilmente los
planos que toma la cámara pueden ser comparados a los de una telenovela como La Rosa de
Guadalupe. No logran concordar con el ambiente, por el contrario, entorpece y destruye varias
escenas.
A pesar de todo, el punto fuerte de Precious es, sin duda, su banda sonora. La mismísima revista
de música y cultura popular Rolling Stone elogió al tema principal de la película (I Can See In Color)
como una gran canción, y no por cualquier cosa.

La banda sonora de la película está compuesta en su gran mayoría por música Soul. Género que
nace de las experiencias de la comunidad Afrodescendiente en América, que bebe del Góspel, y,
por sorprendente que resulta, también bebe de géneros muy animados como el Rhythm & Blues.
Es simplemente perfecto para el ambiente que intenta mantener la película, pero no es sólo su
banda sonora, si no la forma en la que la utiliza.

Al principio del artículo hablaba acerca de la cámara anecoica, y la forma en la cual el silencio total
es perjudicial para el ser humano. Y Precious sabe la naturaleza del silencio, no sólo su naturaleza
física, si no los sentimientos que evoca la misma.

Escenas relevantes de la película son en las que Precious siente tristeza, o es maltratada. Porque
estas escenas tienen una dirección y desarrollo muy especiales. La protagonista asume estos
momentos, escapando a su propia mente, en la cual se idealiza como una celebridad, todos la
aman, todo está lleno de sonido y color, pero luego, la música para repentinamente, para volver a
la cruda realidad, para volver a ese estado de silencio incómodo, en el que el dolor, la locura de la
cámara anecoica, es la predominante. Es una obra sobre el ruido, y el silencio. Es una obra que, en
lugar de apostar por tener una cantidad abismal de obras para su Soundtrack, que de seguro al
finalizar la película no se pueda recordar con claridad más de dos, apuesta por usar temas escasos,
pero memorables, y por usarlos de una forma inteligente, que puede transmitir muchísimo más
que sólo ruido de fondo. Puede trasmitir una vida, una historia, un sentimiento tan efímero como
una rosa.

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