Está en la página 1de 5

EL ESPACIO FAMILIAR

Casos
 CASO 1: Páginas 156 - 158 y 169 - 172.
 CASO 1: Páginas 180 – 181.

 Tiempo familiar, periodización e historia familiar


Cada familia ordena sus acontecimientos vividos en un tiempo que retiene todas
las características de la estructura familiar. Cuando los integrantes de una familia
relatan su historia como grupo, conscientemente recuerdan algunos acontecimientos
pasados con seguridad y están guardados en la memoria, pero también olvidan
algunos episodios y ocultan otros, posiblemente menos importantes.
El tiempo es considerado un objeto semiótico organizado, derivado de una
estructura familiar inconsciente. Así como el estudio del espacio, en tanto organización
sincrónica, nos permitía inferir una ordenación permanente inconsciente de la
estructura familiar, el estudio del tiempo nos permitirá recuperar una estructura
acrónica.
El tiempo se transforma en un marco donde se ubican no sólo los acontecimientos
vividos sino también la relación entre todos ellos. Para hallar la significación
presuponemos la aparición de por lo menos dos términos, en relación de anterioridad
y posterioridad. En este sentido, muestra relación con la historia y con la memoria. Hay
un tiempo donde los episodios son vividos y otro tiempo donde son recordados y
agrupados desde el presente.
Las familias borran de su historia aquellos acontecimientos indeseables o los
conservan, pero ubicados en otro tiempo, con lo cual readquieren un significado
diferente del original. También pueden empalidecer acontecimientos significativos
ocurridos, reavivar sucesos poco significativos e incluso agregar otros realmente no
ocurridos para dar coherencia al acontecer histórico. Son indeseables los
acontecimientos que arrojan sombra o vergüenza sobre la historia del grupo familiar.
Todo grupo familiar sistematiza y ordena su tiempo en relación con los modelos
más próximos a la conciencia de los integrantes. La historia de una familia aparece
como el relato de los acontecimientos significativos que incidieron en la constitución y
en su desarrollo. Toda familia tiene ordenada su historia en períodos llenos de sucesos
y períodos vacíos. La periodización es una división del tiempo.
En nuestra cultura el tiempo histórico también se puede entender en función de las
distintas estructuras en las que se separa el acontecer, pero para ello es necesario
pasar del tiempo observado al tiempo pensado o concebido como objeto teórico, no
empírico. Es posible agrupar el tiempo en varios tipos de periodización o divisiones del
tiempo.
El tiempo convencional (relojes o calendario): toda cultura maneja un tiempo
convencional, estableciendo acuerdos y puede cambiar el criterio establecido de una
convención por otra. Es un tiempo de común acuerdo. Leenhardt describe dos modos
de existencia del tiempo. ES PRESENTE Y VARIADO.
El tiempo biográfico o cronológico es un tiempo evolutivo, con direccionalidad, no
reversible, porque los acontecimientos están ordenados en una única dirección de
antes a después. Los períodos están agrupados de acuerdo a los acontecimientos
significativos variados de todo grupo familiar tal como casamientos, mudanzas,
nacimientos, muertes, etc. Los acontecimientos introducen otro tipo de segmentación
o periodización temporal. Aparecen períodos significativos y otros no significativos
(susceptibles de ser olvidados). Es un tiempo próximo al convencional, pero distinto,
porque aunque esté ocupado por elementos variados se refiere a acontecimientos
pasados. ES PASADO Y VARIADO.
El tiempo mítico consiste en establecer una determinación causal entre los
acontecimientos pasados merced a algún tipo de relación. Dispone de la relación
temporal antes-después e introduce el tipo de explicación causal por el cual aquello
que ocurrió antes es el motivo de lo que ocurrió después. Es un tiempo con una
determinación causal lineal. Resulta de una reagrupación de los sucesos vividos ya con
una perspectiva teórica lo cual permite fijarlos como conteniendo una relación
constante e invariante. Pero si tomamos el tiempo mítico como un objeto semiótico
vemos que todo puede volver a suceder si se dan ciertos acontecimientos
desencadenantes. Los períodos del tiempo mítico se reproducen en distintas épocas
del suceder temporal de un grupo familiar e implica una primera generalización y un
primer esfuerzo de abstracción. A menudo puede estar marcado en sus períodos por
un miembro familiar significativo (la madre, abuela materna, etc.), que se convierte en
el encargado de “ubicar” en el tiempo los acontecimientos al cual se ceñirán todos los
integrantes del grupo familiar. ES PASADO Y INVARIANTE.
El tiempo inconsciente es no evolutivo, reversible. Es el tiempo de la significación,
del modelo estructural y no sólo el de los acontecimientos biográficos. El tiempo del
modelo es aquel donde las distintas secuencias de acontecimientos se ordenan en una
unidad temporal estable y aunque originada en principio en los acontecimientos
empíricos, sin embargo, les sirve de marco y les otorga significación oculta. En el
tiempo inconsciente ubicamos el desarrollo del significado del vínculo de parentesco
en el grupo familiar; mantiene en una misma estructura acontecimientos ocurridos en
épocas diversas, agrupadas en un modelo regulador que le otorga sentido. Es un
tiempo construido por el observador. Informa de una estructura acrónica y, en este
sentido, no está ordenado de modo cronológico en el tiempo biográfico. ES PRESENTE
Y INVARIANTE.
En síntesis: El tiempo convencional se ocupa de una ordenación temporal fija,
siempre presente, porque se halla ordenado según acuerdos y normas. El tiempo
inconsciente, también contiene acontecimientos de significación cuya relación es
siempre actual, aunque en un sentido diferente al tiempo convencional. El tiempo
biográfico contiene acontecimientos siempre del pasado, retiene el carácter mítico. El
tiempo convencional contiene elementos sucesivos variados como ocurre con los
distintos períodos del tiempo biográfico, cuyos acontecimientos son distintos en cada
fecha (el casamiento de los padres es anterior al nacimiento del primer hijo). El tiempo
mítico contiene una sucesión invariable de acontecimientos, al igual que los períodos
del tiempo inconsciente.
La noción de tiempo va estrechamente unida a la de periodización, en donde se
establece la aparición de una sucesión de tiempos marcados separados por un período
no marcado, períodos con acontecimientos significativos o períodos sin ellos.

 Etapas posibles en el desarrollo de la estructura familiar


Todo grupo familiar pasa por una serie de etapas no siempre coincidentes, con
momentos precisos y cuya duración es variable. Son etapas sucesivas de manera
que la anterior es contenida por la posterior y ésta a su vez contenida por la
siguiente. Puede haber persistencia en alguna de ellas y su significado es
trasladado a las otras etapas:
1. Etapa de la conexión con la familia materna: define la constitución de la pareja
mediante la relación con la familia materna. El intercambio se inicia desde los
aspectos afectivos, lingüísticos, de bienes y de productos. Puede pasar a la
segunda etapa o la pareja disolverse en este primer período. Coincide con el
enamoramiento y la definición del tipo de pareja constituida en una unidad de
intercambio, cuyo eje pasa por la elección sexual heterosexual.

2. Etapa de la alianza: definida en base a la relación conyugal como pareja


sexuada. Es el período en el cual se fijan nuevas normas de acuerdo, consciente
o inconsciente. Dependen de la evolución psicosexual y de la evolución edípica
de ambos integrantes, de lo que hayan terminado o dejado inconcluso en su
evolución.

3. Etapa de la filiación: aparecen los hijos. En esta etapa queda completada la


evolución del grupo familiar. Aunque sobrevenga la separación de los
cónyuges, la presencia de los hijos toma ya incuestionable la existencia de la
estructura familiar.
La etapa inicial es constitutiva y su impronta rige en toda la evolución del grupo
familiar. El período de alianza puede ser corto o largo (una pareja puede esperar 10
años para ser papás, o solo 1 año). La etapa de filiación es variable (puede ser solo un
hijo o varios). La determinación de esta secuencia es inconsciente. Se puede conocer
sólo por medio de la reconstrucción del plan inconsciente y del tiempo propio, por lo
general, encubierto por el tiempo cronológico.
 Significación del tiempo familiar
Consideramos el tiempo familiar como dimensiones que retienen propiedades
de los grupos familiares que viven ese tiempo y habitan ese espacio. Por ser
dimensiones socialmente pautadas se prestan para contener propiedades
inconscientes y, por lo mismo, pueden ser ocultadas con facilidad y racionalizadas.
Todo grupo familiar tiene un ordenamiento temporal realizado según algunas ideas no
explicitadas por los propios miembros. La dimensión temporal se presta para estudiar
esta relación causa-efecto, tomando como indicios la sucesión relatada de los
acontecimientos históricos.
La significación de tres tipos distintos de ordenación temporal…
a. La significación del tiempo de los sucesos históricos: se trata de grandes
unidades de tiempo, “macro-tiempo”, tomando como indicio el relato de los
informantes familiares. Es natural que no todos conozcan los acontecimientos
por experiencia directa. Es en este punto donde el relato de los
acontecimientos históricos adquiere características míticas. Son significativos
por su contenido y por la forma en que están relacionados.

b. La significación del tiempo diario: se trata de unidades temporales de tamaño


intermedio, como lo son la ordenación del día o la semana. Es un tiempo en el
cual todos los integrantes participan y al cual podemos acceder por el relato de
las actividades contenidas en esa unidad.

c. La significación del tiempo de las sesiones: son pequeñas unidades de tiempo,


“micro-tiempo”, donde sobre un marco temporal estable fijado por el
terapeuta, los integrantes del grupo familiar establecen una ordenación
inestable, pero recurrente, variable en cada sesión y en el curso del
tratamiento.
CASO 1 (COMPORTAMIENTOS AFEMINADOS – JAVIER): Los padres consultan al
terapeuta por los comportamientos afeminados de su hijo menor (hacía desde los 5
años que pasaba esto, y él ya tenía 10 años al momento de consulta). Anterior a él,
había otra hermana, la única mujer, y falleció a los 18 meses de edad; cuando volvió a
quedar embarazada la mamá deseaba que Javier sea nena, al igual que el padre. Desde
pequeño la abuela materna, que vivía con ellos, lo vestía de niña. Muere la abuela
materna y consultan con el profesional, hay relación con ambos acontecimientos, el
grupo familiar se siente conmocionado aunque desconoce el motivo verdadero de
perturbación que resulta desplazado al hijo menor y la identificación en él de la
pérdida de dos objetos femeninos (ambas abuelas).
Los papás eran primos lejanos. El acontecimiento no marcado respecto al tiempo está
en el origen de la pareja, no pudieron precisar fecha que surgió el amor, pero sí del
casamiento.
La ubicación de la abuela en la casa de la familia era la habitación de los niños,
representaba a la niña muerta, pero ésta última fallecida también, intentó ser
reemplazada de modo inconsciente por Javier. El motivo de consulta fue para terminar
de definir la identidad sexual de su hijo, pero este motivo contenía el deseo de curar el
desequilibrio producido por el fallecimiento de la abuela materna.

 Significación del tiempo en las sesiones psicoterapeúticas del grupo familiar


La consideración del tiempo de la sesión nos permite contar con observables
variables pero recurrentes como las modificaciones introducidas por el grupo familiar y
que remiten a las propiedades estructurales del grupo. A diferencia de las otras dos
dimensiones temporales analizadas con anterioridad (el tiempo de los sucesos
históricos y el tiempo diario), el tiempo de las sesiones cuenta con un observador
participante, el psicoterapeuta, quien marca y define el marco temporal donde se
inscribirían entre otros, los observables temporales. La presencia del terapeuta define
unidades estables de tiempo donde el grupo puede introducir modificaciones estables
o inestables.
CASO 2 (IMPUNTUALIDAD DE UNO DE LOS INTEGRANTES DE LA FAMILIA): Los
integrantes de la familia dividieron la sesión en partes… Los primeros 15 minutos
cuando estuvieron solos en el consultorio el observador y el terapeuta, los siguientes
15 minutos donde estuvieron los papás e hija, y por último, el resto del tiempo que
estuvieron todos los integrantes. Esta organización temporal se halla construida de
acuerdo al modelo dualista vigente en el grupo familiar, cuando reafirmado por la hija,
se le otorga al tratamiento el significado de un grupo dividido entre los integrantes
sanos y el hijo-enfermo.
La interpretación del terapeuta toma a incluir a todos los integrantes,
reconstruyendo el tiempo cronológico como un tiempo estructural y actual, a la vez
con características inconscientes.
El tiempo familiar y su ordenación puede ser analizado, en tanto producción
consciente, como un índice desde el cual hacer inferencias sobre la estructura familiar
inconsciente. El tiempo ofrece configuraciones estables e inestables correspondientes
a modelos encubridores pero no por ello menos informativos. Con estos elementos es
posible rediseñar el tiempo familiar actual y el histórico en un nuevo modelo de
tiempo inconsciente, representado por una fórmula acrónica donde se define la
relación inconsciente entre la familia conyugal y la familia materna.

También podría gustarte