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Miami 20/06/2020

A LA OPINIÓN PUBLICA

Nosotros, Rita de Martino y Rafael Garrido denunciamos y rechazamos la campaña de


difamación e incitación al odio que se ha emprendido desde las redes sociales en
cuentas que trabajan bajo el anonimato y a la cual se ha sumado el canal de noticias
venezolano Globovision, en contra de nosotros y otros dos respetados y apreciados
colegas como lo son Luisa Mimí Arriaga y Marco Antoima. 

Se trata de un acoso sistemático que se ha prolongado por más de diez años


encabezado por factores "anónimos" que operan bajo la persecución, acoso, extorsión,
difamación, instigación al odio y asesinato de reputación, todo esto bajo el amparo del
régimen.

En infinitas oportunidades hemos rechazado cualquier red social o medio que trabaje
bajo el anonimato y hemos demostrado que somos frontales con nuestras creencias y
convicciones, trabajamos bajo la ética y la legalidad. Salvo ciertas personas con altos
cargos, que demostraron una saña personal, nuestros ex compañeros de trabajo e
incluso jefes directos en Venevision, Globovision y EVTV Miami, pueden dar fe de ello.
(Aunque este último, según la información publicada por Globovision,  “despidió” a Rita
De Martino “al identificarla como miembro de la red de extorsión VVperiodistas”).

Exigimos a EVTV Miami aclare esta información, ya que la explicación dada al


momento del despido se trataba “de un ajuste económico”, informamos que ante este
señalamiento acudimos a las instancias laborales y legales de los Estados Unidos. 

Como periodistas que somos trabajamos con la verdad, con pruebas, con hechos,
dando la cara, situación que no ha ocurrido y que injustamente, sin denuncia y una cara
que acuse, tiene a dos prestigiosos colegas secuestrados en un órgano de seguridad
del régimen.  La publicación de Globovision nos califica como “prófugos y
extorsionadores”. ¿Prófugos y extorsionadores? Cuando desde hace varios años
vivimos fuera de Venezuela y sobre nosotros no hay ningún proceso judicial, utilizan
nuestra imagen para someternos al escarnio publico como si fuéramos delincuentes.
En los últimos meses este acoso se ha venido incrementando con bajos señalamientos,
acusaciones carentes de veracidad pero con mucho ensañamiento, sin presentar
prueba alguna, porque no existe. 

Las redes sociales han sido utilizadas perversamente para perseguir a periodistas
inocentes, periodistas que fueron sacados de sus lugares de trabajo en La Colina en
Caracas y llevados bajo amenaza a sedes policiales y no contaron con defensa alguna,
hoy, indignados y sin temor comentan esa terrible experiencia.

Exigimos la liberación inmediata de Mimí Arriaga y de Marco Antoima. Exigimos el cese


de la persecución contra periodistas, el informar y pensar distinto no es delito.

Rita De Martino Rafael Garrido

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