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REINSERCIÓN SOCIAL DE LOS INTERNOS EN LOS CENTROS

PENITENCIARIOS DEL ESTADO PERUANO.

PERSONAL INVESTIGADOR:
AUTOR: LISSET ESTELA ROQUE

CARRERA PROFESIONAL:
DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS

LÍNEA DE INVESTIGACIÓN:

Reinserción Social de Los Internos


Jaén- centro penitenciario
Duración estimada del proyecto
4 meses
Fecha de inicio y termino
O2/09/19 – 02/12/19
I. PROBLEMA DE LA INVESTIGACIÓN:

I.1 Realidad Problemática

I.2 Reinserción en las Cárceles de Noruega

Existen dos penitenciarías en Oslo, Noruega, que muchos han llamado “la utopía de


las prisiones”. Allí los reclusos tienen cómodas habitaciones con televisión y baños
privados, se levantan temprano, desayunan y dedican toda su jornada al trabajo: al
cuidado de animales de granja, manejo del ferry (una de ellas está en una isla), cocina,
agricultura, encargado de invernadero o del aserradero. Durante el tiempo libre, estudian
algún oficio para preparase para sus años de libertad, o bien, practican deportes como
baloncesto, tenis o escalada. Luego, pueden reunirse en sus salas de estar a comer o ver
televisión juntos, antes de volver a sus dormitorios.

Nadie llega aquí como regalo, sino después de haber pasado duros años en
prisiones más tradicionales (aunque en Noruega todas tienen un tono más suave que las
que conocemos en Latinoamérica) y de haber demostrado un buen
comportamiento. Este modelo ha inspirado a autoridades en todo el mundo a humanizar
sus prisiones. Hoy queremos mostrarte cómo en Dakota del Norte, Estados Unidos, el
sistema está teniendo increíbles resultados.
Si bien la mayoría de estos presos han cometido delitos muy serios, asesinatos o
delitos sexuales, la pena máxima en Noruega para cualquier crimen no supera los 21
años, por lo que el tema de la rehabilitación es crucial. Todos los presos de Bastoy
alguna vez estarán nuevamente en la calle (si es que no mueren antes), por lo tanto, urge
que tengan un trabajo, se sociabilicen y así, tenga también una nueva oportunidad de
vida.
Halden, por su parte, está ubicada al sur de Noruega, cercana a la frontera con
Suecia, y está rodeada de bosques de abedules, pinos y arbustos de arándanos. La pared
que rodea todo su perímetro no es doble, no tiene torres de seguridad, ni alambres de
púa o cerca eléctrica. Para hacer del espacio un lugar agradable, se gastó un millón de
dólares (unos 650 millones de pesos) en pinturas, fotografías e instalaciones que
decoran los espacios.
La estrategia para que no exista desobediencia, es mantener a los presos
ocupados desde las 8 de la mañana hasta las 8 de la noche. Así, la violencia o los
intentos de escape casi no existen, y se mantienen relaciones amables entre guardias e
internos. Los castigos de reclusión solitaria son muy escasos y responden a actitudes
reiteradas y muy fuera de norma. Además, todos sus guardias pasan por dos años de
formación en una academia, donde se enseña que al recluso hay que motivarlo “para
que su sentencia sea significativa, esclarecedora y rehabilitadora”,
¿Y todo este tratamiento amable tiene buenas consecuencias?
Sí que las tiene! Estas cárceles, unidas a los demás esfuerzos por mejorar la
rehabilitación de los presos en el sistema, han logrado que la tasa de reincidencia
criminal en Noruega sea de sólo un 20%, la menor del mundo, frente a un 77% en
Estados Unidos (en un país con el impactante número de 2,2 millones de personas
encarceladas) y un 71% en Chile. 
Y aunque a muchos les parezca un trato "injusto" y hasta absurdo con quienes
pueden haber cometido terribles delitos, la verdad es que los datos hablan por sí
mismos, está resultando una buena solución para combatir la delincuencia. Mejor que
las cárceles tradicionales.

1.3. Reinserción en las Cárceles de Chile


En base al informe de la Fiscalía Judicial de la Corte Suprema, y para el cual se
visitaron 53 de los 93 centros penitenciarios, se indica que hay ocho regiones donde las
cárceles superan el límite de su capacidad, llegando a duplicarse en algunos casos. Por
ejemplo, el Centro Penitenciario Femenino de Talca alberga a 100 personas pese a estar
construido para 36.
Así también, se constató que Gendarmería ha establecido un sistema de horarios
que resulta “completamente disfuncional a los objetivos de reinserción social”, ya que
hay internos que pueden pasar encerrados en celdas individuales o colectivas entre 14 y
16 horas diarias. “Esto tiene como agravante que, en general, se encuentran encerrados
sin luz natural, sin ventilación adecuada y sin servicios higiénicos”, añaden.
Se suma el acceso insuficiente al agua potable en algunos recintos, lo cual es
considerado como “un problema latente y emblemático de las cárceles chilenas”. Tal es
el caso del Centro Penitenciario de Valparaíso, donde los internos acceden a dicho
suministro dos veces al día durante dos horas.
En cuanto a deficiencias en la estructura, en el CCP de Copiapó “los espacios
son reducidos, no hay comedores y los escasos baños que existen están en estado
deplorable”. En Ovalle, en tanto, “se constatan graves deficiencias en el sistema
eléctrico, con alto riesgo para los internos y funcionarios, como tampoco se cuenta con
una red húmeda ni seca para casos de incendio”. Se critica además en la mayoría de los
centros se aplica el uso de celdas de castigo “sin mayores restricciones”; ya sea para
segregar internos, por razones de seguridad o mantenerlos de manera provisoria.
De acuerdo a la UDP, en el periodo analizado se pudo verificar una serie de
casos donde gendarmes ejecutaron actos de violencia. Uno de ellos ocurrió en enero en
Santiago 1 y fue registrado en un video: “Se logra apreciar el momento y la forma en
que un imputado es golpeado" por los uniformados. Posteriormente, el herido fue
llevado hasta el hospital de la cárcel por los propios internos; y luego a la Posta Central,
donde falleció producto de una muerte cerebral.
Pese a lo anterior, se reconoce que sí ha habido avance en materia legislativa.
Esto, luego que entrara en vigencia a fines de 2016la ley que tipifica el delito de tortura
y que penaliza también otros apremios y tratos crueles, inhumanos o degradantes,
actualizando así el ilícito de acuerdo a estándares internacionales, Otra situación implica
a los familiares de internos. En septiembre de 2017, la Corte de Apelaciones de La
Serena acogió un recurso a favor de seis menores de edad, familiares de presos, “que
fueron objeto de revisiones corporales denigrantes, incluidos desnudamientos, en el
contexto de visitas a sus familiares”. Tanto niñas como niños, debieron quitarse
pantalones y ropa interior, además de tener que hacer sentadillas ante el personal de
Gendarmería.
En Colina I ocurrió algo similar en abril: cerca de 900 internos hicieron una
huelga denunciando el “trato vejatorio” que recibieron sus parientes, que constó, entre
otros, de alumbramiento de sus partes íntimas con linternas. De acuerdo a los reos,
dicha situación no ocurría con las visitas de los detenidos por violaciones a derechos
humanos en el mismo penal.
Por esto, proponen al Estado ejecutar una política que implique disminuir la
población penitenciaria actual. Para esto, se indica que la principal herramienta es,
“prioritariamente, dejar de encarcelar personas cuando tiene otros medios disponibles
idóneos y más efectivos, como son las medidas alternativas a la cárcel”, para lo que “se
requiere de un compromiso y una política de largo plazo”.
Además, se aconseja aplicar medidas que permitan mejorar los procesos que de
división de módulos; aumentar búsqueda de armas en celdas; perfeccionar los
protocolos por denuncias de abusos sexuales o agresiones, donde se tomen inmediatas
medidas de seguridad como separar a los involucrados; mejorar la infraestructura y la
formación de los funcionarios, especialmente “en materia del uso de la fuerza física”.
1.4. Reinserción en la cárcel de San Antonio – Venezuela

La prisión de San Antonio, en la isla de Margarita en Venezuela, no es una


institución penal cualquiera. Mientras que en otras prisiones los reclusos están obligados
a obedecer las reglas estrictas duramente impuestas por guardias armados, en este lugar
atípico son los prisioneros quienes hacen las reglas. Desde cocinar su propia comida,
ver la televisión, navegar por Internet en sus computadoras portátiles hasta administrar
sus negocios ilícitos desde sus teléfonos, los presos de San Antonio son libres de hacer
lo que quieran.
La única cosa que no pueden hacer es salir de la cárcel. Cualquier intento de
fuga podría resultar en la muerte instantánea, cortesía de francotiradores en las torres de
la prisión. Pero, afortunadamente, la mayoría de los presos son tan felices aquí que una
fuga potencial es la última cosa en la que piensan.
En San Antonio, los presos disfrutan de muchos privilegios, tienen puestos de
trabajo y ganan dinero real. Algunos son barberos, otros venden medicamentes,
mientras que otros organizan las peleas de gallos de un club local que les deja muy
buenos dividendos.
Incluso hay un tipo que “photoshopea” imágenes de prisioneros apoyados en un
Hummer, utilizando su propia cámara digital y un ordenador portátil. Otros perezosos
pasan todo el día en sus celdas con aire acondicionado viendo la televisión en compañía
de sus esposas o novias que son libres de entrar y salir cuando quieran. Para la
satisfacción de los hombres, las unidades del Anexo A 54 de mujeres fueron construidas
en 2009, lo que naturalmente provocó que el número de relaciones amorosas entre los
reclusos aumentara.
Los hijos de los presos también pueden utilizar la prisión como un patio de
juegos y pasar el día nadando en una de las cuatro piscinas internas. Los fines de
semana, el lugar abre sus puertas a todos los visitantes que quieran pasar buenos
momentos de diversión y desenfreno en los clubes de reggaeton.
Los presos de San Antonio deben todos los privilegios al tal Teófilo Rodríguez,
mejor conocido como “El Conejo”, debido a su adicción a comer zanahorias crudas.
Rodríguez es un narcotraficante convicto, mismo que manda a los internos. Su marca
registrada, el logo del conejito, aparece en varios de los muros de la prisión, o tatuado
en los cuerpos de algunos presos como signo de fidelidad y lealtad. Él se estableció a sí
mismo como el verdadero líder de este lugar, mejorando las condiciones de vida y
haciendo de San Antonio extrañamente más seguro que las propias calles.
1.5 Reinserción en las cárceles de Cárcel de Aranjuez
El Centro Penitenciario Madrid VI, la Cárcel de Aranjuez, fue pionero al poner
en marcha un módulo experimental especial para parejas con hijos menores de tres años
en las que ambos cumplen condena en prisión. En el Módulo de Familias la pareja
convive con sus hijos en una celda hasta que los pequeños cumplen tres años y la tutoría
pasa a manos de familiares o a ser responsabilidad del Gobierno si no los hubiera.
Según los voluntarios de las ONG que trabajan con los reclusos, el ambiente de las
cárceles, exento de los estímulos de la vida ordinaria, es estresante también para los
niños, que no dejan de percibir la tensión de la convivencia en espacios cerrados y
vigilados. También la medida humanitaria se puede volver una herramienta de represión
cuando los reclusos no se comportan al gusto del funcionariado, que puede llegar al
extremo de eximir de los cuidados médicos básicos tanto a los padres como a los bebés
ante la total indefensión de reos, con el consentimiento de compañeros, voluntarios de
ONGs y demás personal relacionado y presente.
2.2. planteamiento del problema
Se llama reinserción social al proceso a través del cual un individuo se integra
nuevamente en el contexto social, luego de que este sujeto ha atravesado una etapa de
privación de libertad, al haber estado en la cárcel cumpliendo una pena en concreto por
ser acusado culpable de cometer alguna infracción de la ley.
Por su parte la cárcel tiene como finalidad, además de ofrecer un castigo a quien
ha cometido un delito, es la reinserción de la persona, para que de esa manera luego de
otorgado la libertad, este pueda incorporarse con la mayor naturalidad posible a la
sociedad de manera que sea una persona que se ha reinventado. Es importante
mencionar que todo ser humano tiene derecho a tener una segunda oportunidad en
especial luego de que ha cometido un error grave.
Los más importante es reconocer y responsabilizarse, es decir, que una
persona debe demostrar que ha cambiado y ha tomado conciencia de sus errores. La
reinserción social de un individuo es ejemplo de un trabajo interdisciplinario, el cual
puede ser enfocado desde distintos puntos de vista gracias al apoyo en el ámbito
educativo, al apoyo psicológico, a la realización de deporte como una forma de
transmisión de valores como por ejemplo el compañerismo.
Esta integración a la sociedad refleja la confianza que como seres humanos se
deposita sobre un individuo a pesar de todos esos errores que haya cometido puede
iniciar un camino mejor en su vida gracias al arrepentimiento. A parte de todo esto, la
reinserción social también muestra la capacidad de superación con la que cuentan todos
los seres humanos gracias a la fuerza de voluntad y a su capacidad de reflexionar con
respecto a una determinada situación. Sin embargo, es importante acotar que no todas
las personas tienen esta capacidad tan desarrollada como otras.

No cabe dudas que todo ser humano ocupa un lugar concreto en la sociedad, esto
quiere decir que ejerce un rol determinado en la comunidad. Por ello, que a través de la
reinserción social se pretende ayudar a una persona para que sea mucho más sencilla su
integración en su entorno social, utilizando para ello una serie de elementos que
permiten que dicho individuo se sienta valiosa mediante la realización de Alguna
actividad, ya sea un deporte, hobby, empleo, etc.
2.3. Formulación del Problema
¿Mediante la reinserción social se reintegran los internos a la sociedad?
2.4. Justificación e Importancia
La reinserción social del condenado se ha convertido en un objetivo que parece
estar muy alejado de las capacidades reales del sistema penitenciario y carcelario de
Perú. Las cárceles peruanas no cuentan con los servicios adecuados en aspectos de salud
y tratamiento psicológico, lo que dificulta la reintegración del condenado a la sociedad
como un miembro productivo de la misma.
Debido a las difíciles condiciones en las que se encuentran los condenados
dentro de los centros penitenciarios y carcelarios, se hace necesario que reciban
tratamiento psicológico acorde a sus necesidades, para que de esta manera se pueda
facilitar la resocialización y reintegración a la sociedad de dichos individuos.
Mediante el presente estudio se pretende analizar la función resocializadora de la
pena desde la perspectiva del tratamiento psicológico y penitenciario que se debe
brindar al condenado, a fin de abrir un espacio destinado a la crítica y a la reflexión
acerca del cumplimiento de dicha función, y, al mismo tiempo, resaltar la importancia
de un adecuado tratamiento psicológico durante el proceso de resocialización y
reintegración del condenado a la vida en sociedad.
2.5. Objetivos de la investigación
2.5.1. objetivo general
Lograr la reinserción social de la población penitenciaria como individuos útiles
y productivos a la sociedad, a través de programas y acciones basados en el respeto a los
derechos humanos, el trabajo, la capacitación laboral, la educación, la salud y el
deporte, en complemento con actividades culturales, cívicas, recreativas y religiosas.
II. MARCO TEORICO:
El proceso y consecuencia de reinsertar o reinsertarse se conoce
como reinserción. Reinsertar, por su parte, es la acción de volver a formar parte de un
conjunto o grupo que, por algún motivo, se había abandonado. El adjetivo social, por
último, está vinculado a la sociedad (el conjunto de seres humanos que comparten
cultura e historia).
La idea de reinserción social hace mención a volver a incluir en la comunidad a
un individuo que, por algún motivo, quedó marginado. El concepto suele utilizarse para
nombrar a los esfuerzos por lograr que las personas que están afuera del sistema social,
puedan reingresar.
En este sentido, hay que decir que se entiende a la sociedad como un sistema que
brinda cobijo y contención a sus integrantes. Las personas que forman parte de una
sociedad tienen acceso a ciertos servicios básicos que el Estado debe garantizar y que
son indispensables para llevar una vida digna: salud, educación, etc. Los individuos que
no tienen acceso a estos servicios, por lo tanto, están marginados de la sociedad.
Los programas de inserción social apuntan a lograr que las personas que están
alejadas de la contención social, sean incluidas. La reinserción social, en sentido similar,
apunta a reincorporar aquellos que han salido del  sistema.
La reinserción social también se refiere a reincorporar a la sociedad a las
personas que cumplieron una condena en prisión y que ahora se encuentran en libertad.
En este caso, el Estado debe facilitar el acceso al empleo para minimizar la posibilidad
de que los individuos caigan en la reincidencia y vuelvan a delinquir.
En el caso de España, tal y como se establece en su Constitución donde se dice
que las penas privativas de libertad estarán orientadas a lo que es la reeducación y la
reinserción social (artículo 25.2), en las cárceles se establecen recursos y proyectos para
alcanzar que los presos al cumplir condena puedan incorporarse a la sociedad con
facilidad.
En concreto, las personas que están cumpliendo condena en prisión tienen al
alcance de la mano desde la posibilidad de formarse y tener una educación reglada hasta
aprender un trabajo para luego fuera tener una profesión. Pero no sólo eso, además
pueden participar en programas específicos de intervención, pueden disfrutar de las
distintas actividades culturales que se organizan, tienen la oportunidad también de
acogerse a los variados programas y proyectos dentro del ámbito deportivo que se
preparan…
En cuanto a los programas de intervención, tenemos que exponer que se trata de
proyectos, guiados y llevados a cabo por profesionales terapéuticos o psicológicos, que
lo hacen es conseguir que los presos puedan superar desde problemas de drogadicción
hasta dificultades para controlar su violencia o su alcoholismo. Pero no sólo eso,
también hay programas específicos para agresores sexuales, maltratadores, enfermos
mentales…
3.1. Antecedentes
- 2017 Cuya Ana (Derecho Penal) en su tesis “Los programas del sistema
penitenciario y la reinserción social de los internos”. Concluye que:

- Primero:
Se demostró la relación entre las variables obteniéndose una relación Rho de Spearman
= 0,976 entre la variable programas del sistema penitenciario y reinserción social
enfocados en el problema indicando que hay una relación positiva, con un nivel de
correlación muy alta, además se obtuvo un nivel de significancia de p = ,000 indica que
es menor a α = ,05; lo cual permite señalar que la relación es significativa.
- Segundo:
Se demostró la relación entre las variables obteniéndose una relación Rho de Spearman
= 0,719 entre la variable programas del sistema penitenciario y la dimensión ambiente
de la variable reinserción social indicando que hay una relación positiva, con un nivel
de correlación alta, además se obtuvo un nivel de significancia de p = ,000 indica que es
menor a α = ,05; lo cual permite señalar que la relación es significativa.
- Tercero:
Se demostró la relación entre las variables obteniéndose una relación Rho de Spearman
= 0,814 entre la variable programas del sistema penitenciario y la dimensión derechos
de la variable reinserción social indicando que hay una relación positiva, con un nivel
de correlación muy alta, además se obtuvo un nivel de significancia de p = ,000 indica
que es menor a α = ,05; lo cual permite señalar que la relación es significativa.
- Cuarto:
Se demostró la relación entre las variables obteniéndose una relación Rho de Spearman
= 0,783 entre la variable programas del sistema penitenciario y la dimensión
cumplimiento de programas de la variable reinserción social indicando que hay una
relación positiva, con un nivel de correlación alta, además se obtuvo un nivel de
significancia de p = ,000 indica que es menor a α = ,05; lo cual permite señalar que la
relación es significativa.
- Quinto:
Se demostró la relación entre las variables obteniéndose una relación Rho de Spearman
= 0,781 entre la variable programas del sistema penitenciario y la dimensión
hacinamiento de la variable reinserción social indicando que hay una relación positiva,
con un nivel de correlación alta, además se obtuvo un nivel de significancia de p = ,000
indica que es menor a α = ,05; lo cual permite señalar que la relación es significativa.
- Sexto:
Se demostró la relación entre las variables obteniéndose una relación Rho deSpearman
= 0,820 entre la variable programas del sistema penitenciario y la dimensión asesoría
multidisciplinaria de la variable reinserción social indicando que hay una relación
positiva, con un nivel de correlación alta, además se obtuvo un nivel de significancia de
p = ,000 indica que es menor a α = ,05; lo cual permite señalar que la relación es
significativa.

3.2. Base teórica

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