Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Dialnet LaInclusionDesdeUnEnfoqueDeDerechosHumanosEnEstudi 7054919 PDF
Dialnet LaInclusionDesdeUnEnfoqueDeDerechosHumanosEnEstudi 7054919 PDF
El derecho a la educación
El 26 de agosto de 1789 la Asamblea Nacional de París proclamaba los derechos del
hombre y del ciudadano como uno de los frutos de la revolución francesa. Dos siglos des-
pués y siguiendo esa misma trayectoria, la Asamblea de las Naciones Unidas daba a co-
nocer en su sesión del 10 de diciembre de 1948 la Declaración Universal de los Dere-
chos Humanos, con la que se sancionan los derechos fundamentales de los hombres y
mujeres en esta etapa contemporánea. Luego de recordar la igualdad fundamental de to-
161
MANUEL LÓPEZ TORRIJO
dos los seres humanos (art. 1) y la consiguiente no discriminación por razón alguna (la
discapacidad no aparece en la breve relación de las mencionadas, art. 2), la Declaración
presenta explícitamente y en sendos artículos todos los derechos fundamentales. El art.
26 es uno de los más extensos y recoge el derecho a la educación en los siguientes tér-
minos, nunca suficientemente recordados:
“Art. 26. Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo
concerniente a la instrucción elemental, que será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá
de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos
respectivos.
La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento
del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales; favorecerá la comprensión, la tole-
rancia y la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos; y promoverá el desa-
rrollo de las actividades de las Naciones Unidad para el mantenimiento de la paz.
Los padres tienen derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos”.
Once años después (el 20 de noviembre de 1959) la misma Asamblea refería a los ni-
ños los derechos humanos anteriormente citados, enmarcándolos con sendos principios
de igualdad y de no discriminación (1 y 25). Con respecto a la educación, que deberá im-
plicar su “desarrollo físico, mental o moral” (principio 9), añadía el objetivo de aportarle
“una cultura general que le permita desarrollar sus aptitudes y su juicio crítico, su senti-
do de responsabilidad moral y social…” y los valores de “comprensión, tolerancia, amis-
tad entre los pueblos, paz, fraternidad universal y con plena conciencia de que debe con-
sagrar sus energías y aptitudes al servicio de sus semejantes” (principio 25). Por lo que
respecta a los niños con discapacidad, esta Declaración Universal recoge la primera ex-
presión de sus derechos: “Principio 5: el niño física o mentalmente impedido o que su-
fra algún impedimento social debe recibir el tratamiento, la educación y el cuidado es-
peciales que requiera su caso particular”.
A principios de los años 70 la ONU promulga sendas declaraciones específicas sobre
los derechos de los “retrasados mentales” (1971) y de los “impedidos” (1975). En la pri-
mera se señala su derecho a la atención médica, al tratamiento físico que requiera, así co-
mo “a la educación, la capacitación, la rehabilitación y la orientación que le permitan de-
sarrollar al máximo su capacidad y sus aptitudes” (art. 2). En términos equiparables, la
segunda Declaración expresa el derecho a:
“Recibir atención médica, psicológica y funcional, incluidos los aparatos de prótesis y ortopedia; a
la readaptación médica y social; a la educación; a la formación y a la readaptación profesionales… que
aseguren el aprovechamiento máximo de sus facultades y actitudes y aceleren el proceso de su integra-
ción o reintegración social” (art 6).
Sin embargo, sorprende que esta misma Declaración, en el apartado que dedica a la
discapacidad sensorial, mencione las ayudas médicas, protésicas y rehabilitadotas (art 3),
pero no haga más alusión a la educación que el “material de lectura y educativo” (art. 7).
162
DERECHO A UNA EDUCACIÓN (INCLUSIVA) DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD EN LAS DECLARACIONES INTERNACIONALES
las Naciones Unidas adopta la Convención sobre los Derechos del Niño (20 de noviem-
bre de 1989), que incorpora matices importantes en la educación de los niños con disca-
pacidad. Luego de reconocer el derecho a la salud, a la seguridad social y “a un nivel ade-
cuado para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social” (art. 27), intenta
asegurar, “en condiciones de igualdad de oportunidades”, el derecho a la enseñanza pri-
maria obligatoria y gratuita, así como hacerlo extensivo a la enseñanza secundaria gra-
tuita y a la superior “accesible a todos, sobre la base de la capacidad” (art. 28). Pero an-
tes ha dedicado un artículo (23) al “niño mental o físicamente impedido” con la finalidad
de asegurarle “una vida plena y decente en condiciones que aseguren su dignidad, le per-
mitan bastarse a sí mismo y faciliten la participación activa del niño en la comunidad”.
Reconoce la Convención el derecho del niño impedido a recibir cuidados especia-
les adecuados a su estado y a las circunstancias de los padres. Define con precisión y
de manera ciertamente completa su alcance y objetivos, si bien propone su desarrollo
en términos meramente posibilistas: “…la asistencia …será gratuita siempre que sea
posible” y, “estará destinada a asegurar que el niño impedido tenga un acceso efectivo a
la educación, la capacitación, los servicios sanitarios, los servicios de rehabilitación, la
preparación para el empleo, y las oportunidades de esparcimiento y reciba tales servicios
con el objeto de que el niño logre la integración social y el desarrollo individual, inclui-
do su desarrollo cultural y espiritual, en la medida posible”.
Pero el verdadero punto de inflexión en el camino hacia una educación para todos vi-
no de la mano de la UNESCO y tuvo inicio en Jomtien (Tailandia) en 1990, bajo el tí-
tulo explícito de Declaración Mundial sobre una Educación para Todos. Luego de de-
nunciar los graves incumplimientos respecto al derecho a la educación suscrito en las
declaraciones anteriores, de señalar las amenazas afines, pero también de destacar las po-
tenciales del desarrollo actual, concluye que “la educación básica para todos –por prime-
ra vez en la historia– en un objetivo alcanzable”.
Desde el recuerdo del derecho fundamental de todo hombre y mujer a la educación
y de que ésta es indispensable, tanto para el desarrollo individual y el mejoramiento so-
cial, como para la consecución de un mundo “más sano, más próspero y ambientalmen-
te más puro y que simultáneamente contribuye al progreso social, económico y cultural,
a la tolerancia, y a la cooperación internacional”, la Declaración proclama para cada per-
sona la satisfacción de las necesidades básicas de aprendizaje, que variarán en su forma
en cada país:
“Estas necesidades comprenden tanto las herramientas esenciales para el aprendizaje (tales como
lectura y escritura, expresión oral, aritmética, resolución de problemas) como los contenidos básicos
mismos del aprendizaje(conocimientos teóricos y prácticos, valores y actitudes) requeridos para que los
seres humanos sean capaces de sobrevivir, desarrollen sus capacidades, vivan y trabajen con dignidad,
participen plenamente en el desarrollo, mejoren la calidad de sus vidas, tomen decisiones fundamenta-
das y continúen aprendiendo”.
Como uno de los compromisos de esta nueva visión de la educación, plantea “uni-
versalizar el proceso y promover la equidad”. En este sentido, señala como prioridades la
educación de las niñas y de los marginados sociales (pobres, indígenas, itinerantes, mi-
norías, refugiados, desplazados…), a los que añade de manera explícita las personas dis-
163
MANUEL LÓPEZ TORRIJO
capacitadas, para quienes demanda “tomar medidas para facilitar a las personas impedi-
das igualdad de acceso a la educación como parte integrante del sistema educativo”.
Esta Declaración recuerda la necesidad de conseguir un aprendizaje real de conoci-
mientos, razonamiento, destrezas y valores, que deberá iniciarse desde la edad temprana
y llevarse a cabo en la escuela. Para ellos los gobiernos deben concitar y coordinar las es-
trategias, recursos y organizaciones pertinentes, puesto que la educación debe verse co-
mo “una dimensión fundamental de todo proyecto social, cultural y económico”. Y ello
debe hacerse desde la solidaridad internacional ya que “la satisfacción de las necesidades
básicas de aprendizaje constituye una común y universal responsabilidad humana.” A
continuación se acordaron diversos “Marcos de acción” para llevar a cabo la Declaración:
el propio Marco de Jomtien, el de Acción Regional para todas las Américas (Sto. Do-
mingo, febrero de 2000), el Marco de Dakar (abril del 2000),… Es justamente éste últi-
mo el primero en plantear una Educación Inclusiva que alcance también a los alumnos
con discapacidad (apartado 5 de los Compromisos).
La Conferencia hizo una llamada a todos los gobiernos participantes a priorizar po-
lítica y presupuestariamente la educación integradora y a desarrollar proyectos, identifi-
car estrategias, garantizar la formación de los profesores y evaluar los resultados de las
experiencias integradoras que incorporen los alumnos con NEE al sistema ordinario.
Dicha convocatoria se hace extensiva a las organizaciones internacionales, programas
de cooperación internacional, ONGs a quienes se insta a “defender el enfoque de esco-
164
DERECHO A UNA EDUCACIÓN (INCLUSIVA) DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD EN LAS DECLARACIONES INTERNACIONALES
165
MANUEL LÓPEZ TORRIJO
Recogiendo algunas de las propuestas del Informe Warnock, que diera lugar al mo-
vimiento de la escuela integradora, la Carta reitera el derecho de los padres a elegir el ti-
po de educación que desean para sus hijos, la importancia de la intervención temprana,
la coordinación institucional y personal debidas, la evaluación permanente del proceso,
las potencialidades que ofrecen las nuevas tecnologías, la imprescindible capacitación de
los profesionales que han de aplicarla y termina instando a los gobiernos a promulgar las
legislaciones que “garanticen a todos los niños y adultos el derecho a acceder al sistema
ordinario de enseñanza”.
Como estrategias de aplicación de esta nueva educación para todos propone una es-
cuela flexible y capaz de responder a las deferentes necesidades educativas; un enfoque
centrado en las necesidades, intereses y deseos de cada alumno; sustituir el planteamien-
to clínico por el pedagógico; informar a los padres para que ejerzan su derecho a la elec-
ción de modelo educativo; fomentar la mobilidad de los alumnos con NEE. en progra-
mas nacionales y europeos, sensibilizar a la opinión pública para que cambio su
mentalidad hacia estas personas, y termina apuntado el protagonismo de la persona con
NEE, quien con el asesoramiento de los padres/tutores “debe ser el actor determinante
de las decisiones referidas a su vida”.
Este mismo protagonismo ha sido reivindicado de manera contundente en un Con-
greso europeo de especial trascendencia. Se trata del celebrado en marzo del 2002 con el
lema “No discriminación + acción positiva = inclusión social”. No es casual que nueva-
mente fuera una ciudad española la que albergara un acontecimiento de este calado. En
esta ocasión y con motivo de la celebración en 2003 del Año Europeo de las Personas
con Discapacidad, más de 600 participantes, en representación de 50 millones de euro-
peos discapacitados, presentaron la nueva mirada y planteamiento sobre la realidad, de-
rechos y participación social de este importante colectivo.
Sus propuestas, con forma de proclamas, suponen una nueva forma de ser ciudadanos:
- “La discapacidad es una cuestión de derechos humanos.
- Las personas con discapacidad desean la igualdad de oportunidades y no la caridad.
- Las barreras sociales llevan a la discriminación y a la exclusión social.
- Las personas con discapacidad: los ciudadanos invisibles.
- Las personas con discapacidad forman un grupo diverso.
- No discriminación + acción positiva = inclusión social”.
A partir de esta nueva mirada, presentan un programa de cambios para conseguir una
sociedad integradora que incluya su plena ciudadanía: medidas legales antidiscriminato-
rias; un cambio en las actitudes de toda la sociedad; servicios que promuevan y permitan
alcanzar una vida independiente; apoyo a las familias par cumplir sus funciones; medidas
adecuadas para eliminar la discriminación añadida que sufren las mujeres con discapaci-
dad; el empleo como clave para la inserción social y el acceso a los servicios ordinarios de
salud, educativos, profesionales y sociales.
Y convocan a todos los agentes sociales –autoridades europeas, nacionales y locales,
empresas, sindicatos, medios de comunicación,…– a realizar un esfuerzo común para
conseguir la equidad en los derechos de todos los ciudadanos, respetando un lema bási-
co: “nada para las personas con discapacidad sin las personas con discapacidad”.
166
DERECHO A UNA EDUCACIÓN (INCLUSIVA) DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD EN LAS DECLARACIONES INTERNACIONALES
Justamente una de las estrategias básicas de esta lucha la sitúan en el sistema educa-
tivo. Las escuelas tienen un papel relevante en la difusión de estos ideales de compren-
sión, aceptación de los derechos de este colectivo, eliminación de miedos, mitos y pre-
juicios erróneos y, en definitiva, en el reconocimiento del derecho a las diferencias. Por
ello defienden que:
“Es necesario lograr la educación para todos, en términos de plena participación e igualdad. La
educación condiciona e influye directamente sobre las perspectivas de futuro en los planos personal, la-
boral y social, por lo que el sistema educativo debe ser el lugar clave para el desarrollo personal y la in-
serción social, que permita que en el futuro los niños y jóvenes con discapacidad sean personas lo más
autónomas e independientes posible. En definitiva, el sistema educativo debe ser el primer paso para
conseguir una sociedad integradora y no excluyente”.
Recientemente, las reivindicaciones de este colectivo, con mayor presencia cada día
en realidad social y política de los países y con una importante organización e infraes-
tructura asociativa, ha conseguido que el reconocimiento de sus derechos vuelva a tener
el máximo respaldo internacional. El pasado 2 de diciembre del 2006 la ONU presenta-
ba la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad, que cuenta en la
actualidad con el respaldo de 137 signatarios y 47 ratificaciones nacionales respectiva-
mente.
Esta Carta Magna de los derechos inalienables de siempre, parte desde su preámbu-
lo de esa nueva imagen de la discapacidad, entendida como:
“Un concepto que evoluciona y que resulta de la interacción entre las personas con deficiencias y
las barreras debidas a la actitud y al entorno que evitan su participación plena y efectiva en la sociedad,
en igualdad de condiciones con las demás”y que incluye “a aquellas que tengan deficiencias físicas,
mentales, intelectuales o sensoriales”.
Al derecho a la educación dedica el art 25. En él se plantea con toda claridad el mo-
delo de Educación Inclusiva como inherente al propio derecho a una educación sin dis-
criminación cuando se propone que:
“1.- …Estados Partes asegurarán un sistema de educación inclusivo a todos los niveles así como la
enseñanza a lo largo de la vida, con miras a:
Desarrollar plenamente el potencial humano y el sentido de la dignidad y la autoestima y reforzar
el respeto por los derechos humanos, las libertades fundamentales y la diversidad humana;
167
MANUEL LÓPEZ TORRIJO
Desarrollar al máximo la personalidad, los talentos y la creatividad de las personas con discapaci-
dad, así como sus aptitudes mentales y físicas;
Hacer posible que las personas con discapacidad participen de manera efectiva en una sociedad
libre”.
168
DERECHO A UNA EDUCACIÓN (INCLUSIVA) DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD EN LAS DECLARACIONES INTERNACIONALES
Webgrafía
http://www.un.org/spanish/aboutun/hrights.htmDerechos del niño (1959).
http://www.unhchr.ch/spanish/html/menu3/b/72_sp.htm.
http://www.unhchr.ch/spanish/html/menu3/b/m_mental_sp.htm.
http://www.retinacv.onored.com/derechos.html.
http://www.unhchr.ch/spanish/html/menu3/b/k2crc_sp.htm.
http://www.unesco.org/education/efa.
http://www.inclusion-ia.org/espa%F1ol/Norm/unesco-docs.htm.
169
MANUEL LÓPEZ TORRIJO
http://www.inclusion-ia.org/espa%F1ol/Norm/declaracion-jomtien.pdf.
http://www.oei.es/quipu/marco_jomtien.pdf.
http://www.inclusion-ia.org/espa%F1ol/Norm/SALAMA_S.pdf.
http://www.inclusion-ia.org/espa%F1ol/Norm/marco-dakar.pdf.
http://www.discapnet.es/documentos/tecnica/0454.HTML.
http://www2.ohchr.org/spanish/law/disabilities-convention.htm.
http://www.european-agency.org/site/info/publications/agency/flyers/docs/Declara-
tion%20ES.pdf.
170