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Jimmy Torren no esperaba un ataque cuando estaba fuera en una

misión. También no esperaba ser rescatado por un hermoso sanador


humano, Ryan St. Claire, o para ser nutrido de vuelta a la salud en la isla
privada del hombre en medio de un enorme lago.
Sería casi el escenario perfecto para que seducir al hombre tímido en
que piensa como un compañero si la situación no fuera tan seria. Ahora
Jimmy está preso aquí. Con una gran tormenta, no va a ninguna parte, y
de acuerdo con Ryan, los vampiros volverán pronto, así que Jimmy tiene
poco tiempo para recuperarse y convencer a Ryan para salir con él. 2
Pero Ryan está ocultando algo. No es un sanador privado para un
grupo de vampiros, él es un esclavo, y por ayudar a Jimmy, el hombre
aprendió a amar, está arriesgando su vida y la de su hermana, por la que
se vendió como esclavo para proteger.
Como Aullido
de Lobo 3

MARCY JACKS

Compañeros Grávidos 06
Capítulo Uno

Jimmy Torren limpió la sangre de sus ojos, pero lo hizo con la mano
mutilada, por lo que terminó haciendo un poco más que difundir las
cosas, entonces se volvió más difícil ver.
Incluso con toda la lluvia fría que caía en su rostro, no era suficiente
para lavar el flujo constante de color rojo que estaba en sus ojos.
La herida debe ser mala.
Sus perseguidores no estaban tan lejos de él. Vampiros esclavizadores. 4
Ellos estaban convencidos de atacar a Jimmy y a los dos alfas con que
viajaba.
Había habido plena luz del día y apenas estaba empezando una
llovizna cuando los neumáticos de su camioneta se rompieron, por lo que
su primer pensamiento no había sido para vampiros ilegales que buscan
prostitutas de sangre o luchadores por el deporte de sangre.
Habían detenido su vehículo en la carretera y estaban preparándose
para cambiar el neumático cuando fueron atacados.
Tenía que haber al menos diez de ellos, todos en los trajes que usaban
para protegerlos de la luz solar. Jimmy había olido antes de verlos, y
Aeducan fue el primero en reaccionar, el enorme alfa se mudó a su lobo y
atacaron a los vampiros, que tenían armas.
Le dispararon de inmediato con un dardo tranquilizante y lo
derribaron. El otro alfa, un hombre más joven que había venido de la
manada de Lucius y fue llevado a Mason, el cual no había visto tantas
batallas, fue muerto a tiros cuando los medicamentos no fueron
suficientes para llevarlo hacia abajo, y él había derribado al menos dos
vampiros e hirió a algunos otros, justo antes de ser asesinado.
Jimmy estaba tratando de ayudarlo, y sus garras acababan de cortar a
través de la garganta de otro de los vampiros vestidos en negro, cuando
él había oyó el disparo, y vio justo a tiempo para ver al joven caer.
Jimmy ni siquiera podía recordar su nombre.
Eso fue cuando miró y se dio cuenta de que había una pistola
apuntando a él también. Se agachó para un lado a tiempo para salvar su
vida, pero la bala del rifle le rozó todavía un lado de su cráneo, porque
sintió el dolor caliente estallar y casi cegarlo.
Sonó otro disparo. Los vampiros deben haber sido malos en el trabajo
con este tipo de armas, porque no mataron a Jimmy tampoco. Habían
acertado en su mano, sin embargo, y ahora había un agujero de bala en
ella, y él estaba corriendo por su vida.
Él podría haber sido capaz de superarlos si no fuera por toda la sangre
maldita. Los vampiros pueden no tener el mismo sentido supremo del
olfato que los hombres lobo tenían, pero podían oler una gota de sangre a 5
una milla de distancia, y Jimmy dudaba de que sería capaz de correr todo
el camino a casa antes que fuera capturado y asesinado.
Los huesos de las piernas ya estaban golpeando en él, y se vio
agarrando árboles y usándolos para equilibrarse cada vez más cuando
desaceleró el ritmo a un paso y empezó a temblar.
Las voces detrás de él cada vez más se hicieron eco, pero sabía que no
estaban tan lejos para atraparlo. De hecho, lo tomarían, fue sólo cuestión
de tiempo, pero él siguió adelante.
Tal vez con la estúpida esperanza de que si dejaba su olor por todo el
lugar, si él dio a estos vampiros una verdadera carrera por el dinero,
entonces cuando Mason llegara a buscarlo con los otros, ellos serían
capaces de reconstruir lo que había sucedido.
Mason y Conner habían logrado trabajar juntos para encontrar y
rescatar a Theo. A pesar de que había tomado varios meses y el pobre
hombre había pasado por el infierno, todavía había sido rescatado, y
varios alfas y omegas, incluyendo al compañero de Theo, habían sido
traídos de vuelta en ese momento también.
Jimmy esperaba realmente que no fuera vendido como esclavo sexual
durante seis meses antes del rescate. En verdad, estaba seguro de que iba
a morir, pero si sólo corriendo por el bosque y conseguir su olor en todo
el lugar era suficiente para ayudar a Mason a rastrear de dónde vinieron
estos esclavos y rescatar a Aeducan entonces valía la pena.
― Lo tengo en la mira!
Otro disparo efectuado, y el dolor explotó como un fuego terrible en su
lado.
Mierda! Él estaba tan muerto. Por mucho que Jimmy había pensado
que valía la pena, en realidad no quería morir. Él ni siquiera podía
mantener sus garras más y si alguno de esos vampiros lo atrapaba,
entonces no sería una larga lucha.
El mundo giró un poco demasiado, y la lluvia desde hace mucho
tiempo había dejado de sentirse fría contra su cuerpo, pero él no sabía si
debía pensar que era sólo un cambio en el tiempo. Su cabeza se estaba 6
poniendo muy jodida, y de pronto sintió como si el suelo se hubiera
levantado para convertirse en una pared. Y porque no estaba follando
con Spider-Man y no podía caminar por las paredes, perdió el equilibrio,
cayó en su lado, y vomitó todo lo que había estado en su estómago.
Había omitido el desayuno, por lo que no era mucho.
Jimmy trató de empujar y apoyarse en su mano buena, pero estaba
demasiado débil para pararse, y de alguna manera parecía que la
siguiente caída fue mucho peor, incluso si hubiera estado más cerca el
suelo.
Jimmy acabó de tomar una respiración profunda cuando dejó sus
músculos y el cuerpo dolorido relajarse bajo la lluvia cegadora. Estaba
perdido. No había otro lugar para que fuera y nada que pudiera hacer.
Lodo y agujas de pino estaban metiéndose en sus heridas, y eso en
realidad no importaba mucho ya que él estaba a punto de tener
problemas peores en alrededor de un minuto más o menos.
Él todavía estaba despierto, pero, por poco, cuando un par de botas
llenas de barro marrón se le acercó y se detuvo delante de su cara.
En el primer momento Jimmy se dio cuenta de que el vampiro encima
de él estaba tratando de pensar en una manera creativa para aplastar su
cráneo o algo así, pero luego recordó que los vampiros detrás de él
estaban todos vistiendo equipos de protección negro por si el sol salía de
entre las nubes.
Esta persona no puede ser un vampiro.
Jimmy aspiró el olor del hombre, y entonces fue golpeado con la
sensación más extraña que había tenido en su vida. Bastaba para hacerlo
querer ser fuerte, para saltar a sus pies y arrancar a esa persona y tirarla
por encima del hombro y correr, llevando al ser humano, porque sabía
ahora que es lo que esta persona era, lejos de los vampiros que venían.
Por supuesto que Jimmy no podía hacer eso, sin embargo. También
estaba tan cansado y débil, y había perdido mucha sangre. Su alma
estaba dispuesta, pero el cuerpo no estaba, y todas esas cosas buenas.
Mierda. 7
La persona se arrodilló, la lluvia tamborileaba fuera de su capa de
lluvia amarilla brillante, y ahora Jimmy podría decir que era un él,
incluso con su visión desvaneciéndose. Todo estaba girando.
Bajo la capa que lo protegía de la lluvia, Jimmy pudo ver hebras de
pelo negro. El hombre también tenía la piel ligeramente bronceada y ojos
azules magníficos, el tipo de color que sólo vino del hielo del Ártico, pero
parecía cualquier cosa menos frío cuando miró a Jimmy, claramente
sorprendido al ver a un hombre sangrando aquí.
― Escapa ― Jimmy dijo, y sonaba como un borracho que había llegado
de una muy mala pelea.
Ahora, apenas podía ver nada, pero antes de que su visión se apagara
totalmente, él fue capaz de ver el horror de los ojos muy abiertos en la
cara del hombre guapo.
― Qué est{s haciendo aquí?
Capítulo Dos

Ryan St. Claire estaba mirando lo que tenía que ser un moribundo, con
absoluto horror en su rostro cuando miró y vio las formas de los cuatro
vampiros, que estaban utilizando equipos de luz del día normal que los
vampiros tienden a usar. La única diferencia fue que, debido a la lluvia y
las nubes, habían tomado el riesgo y eliminado sus máscaras.
No parecían contentos de estar en la lluvia y corriendo detrás de este
hombre, y Ryan no podía culparlos cuando se puso de pie fuera de su 8
posición en cuclillas.
El hombre le había dicho para huir. Un hombre que merecía morir, que
era el mal e hizo una cosa horrible y mala, no habría hecho eso.
Se quedó entre uno de los vampiros y el hombre que estaba sangrando
en el suelo fangoso, inconsciente, el ritmo cardíaco de Ryan tomó el
ritmo.
El hecho de que él conocía a estos hombres no quería decir que estaba
seguro con ellos.
Al parecer, el vampiro que estaba al mando de este pequeño grupo
habló, y parecía molesto.
― Hazte a un lado, curandero, nos estamos llevando un presente.
Ryan miró hacia atrás y al hombre en cuestión. Los vampiros
generalmente no tienen como objetivos a los seres humanos, y por lo que
él sabía, ciertamente este no lo era, lo que significaba que tenía que ser un
shifter de algún tipo.
― ¿Qué hizo? ― Preguntó Ryan.
― No es de tu cuenta. Vamos a llevarlo, cuando salgas de nuestro
camino.
Ryan no conocía al shifter. De hecho, no le gustaban los shifters en
absoluto, no después de que había visto de lo que eran capaces de hacer.
Probablemente era sólo una idea mejor irse, pero él no podía hacer eso.
― ¿Por qué lo quieres? ― Preguntó de nuevo, apoyando sus pies y
colocando todo tipo de valentía que no sentía.
Él tuvo un gran gruñido a su problema, pero el vampiro, dijo.
― Est{bamos viendo a su manada. Estos seres estaban tomando
nuestros nidos.
Los ojos de Ryan se agrandaron.
― Yo no era consciente de que su maestro tenía m{s de un nido con él.
― No tiene ― respondió el vampiro, y ahora sus dientes estaban
empezando a salir. ― Ahora no voy a decirlo una vez más, fuera del
camino ― dijo.
Ryan aspiró profundamente. Realmente esperaba que esto no lo
matara. 9
― Quiero mantenerlo aquí.
Uno de los vampiros realmente se rió de él. El líder se quedó en
silencio, pero tenía una sonrisa que a Ryan no le gustaba, como si pensara
que Ryan estaba siendo lindo o algo.
Los otros dos vampiros estaban en silencio y estoicos.
― Lo que sea, humano. Eres un poco m{s que una merienda. ¿Crees
que honestamente nos preocupamos por lo que pidas?
― El líder de su nido puede ― Ryan dijo, y la risa se detuvo, pero los
dos vampiros apenas parecían impresionados. En verdad, a Ryan le
gustaba considerarse afortunado de que no estaba teniendo la cabeza
arrancada, y comenzó a preguntarse ahora si valía la pena arriesgar su
vida por un hombre al que nunca conoció.
El líder le gruñó.
― ¿Cómo te atreves? Tú pequeño...
― Eso es suficiente ― dijo uno de los otros vampiros. Ryan no sabía
quién era. Había un montón de gente en el nido de Gerard que Ryan
nunca había visto ni hablado personalmente, pero la mayoría de ellos
sabían sobre Ryan, o al menos habían oído hablar de él.
Tenían. Ryan era un visitante regular en el nido.
El vampiro gris parecía increíblemente molesto ahora. O porque estaba
perdiendo el control de la situación, o porque un sencillo ser humano
estaba tratando de decirle qué hacer.
Debe ser una nueva transferencia de un nido diferente.
― Realmente vas a dejar que esta mierda haga demandas sobre
nosotros?
El otro vampiro tomó lo que tenía que ser un aliento calmante, si la
forma en que cerraba los ojos era algo cercano.
― Este hombre es el sanador privado de Gerard.
Los ojos del otro vampiro se agrandaron mientras miraba a Ryan, y
luego su rostro se contrajo en una mueca.
― ¿De qué le sirve a un vampiro un curador humano?
― No es para él, idiota. Para su compañero.
Mientras el vampiro masticó al otro, Ryan empezó a sentir la confianza 10
suficiente para ser capaz de sonreír un poco a expensas del hombre.
Sí, eso era seguro. Los tenía por las pelotas aquí. Gerard le estaba
debiendo desde que se hizo cargo del humano de quien se enamoró,
supuestamente suficiente para aparearse con el hombre. ¿Y por qué no
asumiría que todos ellos se aparearon? Después de todo, ¿qué vampiro
en sana conciencia se acoplaría a un ser humano enfermo? Especialmente
uno que se negó a tomar la mordida en el cuello que lo tornaría sano e
inmortal.
El primer vampiro finalmente tomó conocimiento de la sonrisa de
Ryan, y su rostro se puso rojo, en verdad, bajo la lluvia, mientras que su
cuerpo se tensó y tembló. Parecía un perro que estaba luchando para
permanecer quieto y no rasgar a un gato molesto.
― Entonces, ¿qué debemos hacer? ― Estalló el primer vampiro.
El segundo agarró un teléfono celular y marcó un número.
Debe de haber sido atendido de inmediato, porque él empezó a hablar
de una vez que fue cuando Ryan se dio cuenta de que el hombre estaba
hablando con el propio Gerard.
― Mi Señor, tenemos un problema aquí. Se trata de su curador, el
señor St. Claire. No, señor. Sí, señor. Se enfrentó a uno de los hombres
lobo que estábamos buscando. El animal está herido, y St. Claire quiere
llevarlo por lo que supongo que para estudiarlo.
Ryan odiaba esta suposición, pero no había nada que pudiera hacer al
respecto. Si estos hombres pensaron que Ryan quería cortar al lobo,
entonces que así sea, siempre y cuando se fueran.
Ahora que Ryan sabía que el hombre era un lobo, era uno poco más
optimista sobre sus posibilidades de supervivencia, pero eso no
significaba que lo estaba al cien por ciento, especialmente con la forma
como estaba sangrando en la cabeza y en su lado. Su mano nunca sería la
misma si Ryan no podía arreglarla antes que sanara de manera
equivocada.
El vampiro seguía hablando con Gerard. Ryan no podía escuchar lo
que decía Gerard, pero estaba seguro de que los otros vampiros podían y 11
seguían junto con la conversación, gracias a su sensibilidad auditiva.
― Est{ herido, señor. Le dispararon varias veces. Sí. Tenemos al otro, y
un tercero en el camión muerto. Muy bien.
Sin previo aviso, el vampiro se acercó a Ryan y le dio el teléfono. Ryan
estaba tan sorprendido que él hizo poco más que mirar a la maldita cosa
por un segundo antes de que se diera cuenta de que debía ponerlo en su
oído. Él no estaba demasiado preocupado por la lluvia arruinar todo. La
cosa era, probablemente, a prueba de agua o algo.
Miró al lobo inconsciente, y se preguntó cuánto tiempo el hombre
había salido para Ryan estar allí sin hacer nada.
― Sí? ― Preguntó Ryan.
La voz de Gerard fue muy clara en la línea, a pesar del clima.
― Te he hecho muchos favores antes, Ryan.
Ryan cerró los ojos en la memoria, y que tenía que ser más respetuoso
con el hombre que estaba hablando.
― Lo sé, señor.
― Cada vez es m{s difícil para mí complacerte.
― Sí, señor ― dijo Ryan.
― ¿Por qué lo quieres? ― Preguntó Gerard.
Ryan sólo escupió la primera cosa dentro de su cabeza.
― Me siento atraído por él, señor.
La línea quedó en silencio, y Ryan estaba realmente esperando que
Gerard fuera a creerlo. Cristo, él estaba esperando que los vampiros de
pie frente a él lo creyeran, también. No había nada sexualmente atrayente
sobre un hombre sucio que estaba sangrando encima de él y cubierto de
barro, hojas y ramas.
Los vampiros estaban sin duda mirándolo como si estuviera loco, y
estaba seguro de que el silencio que estaba al otro extremo de la línea era
porque Gerard pensaba de la misma manera.
― Quieres tener sexo con él?
Ryan sintió que sus mejillas se inflamaban con el calor en la fría lluvia,
y él estaba agradecido por la capa que estaba usando porque sólo podría
girar ligeramente la cara y ocultar la reacción a los demás vampiros 12
frente a él.
No sabía por qué. Sabía que podía escuchar lo que Gerard había
preguntado.
― ¿Importa? ― Preguntó Ryan.
― Esto muy bien podría. Estos hombres lobo han causado numerosos
problemas para muchos de mis amigos. Vampiros decentes no merecen
que sus casas sean saqueadas y sus pertenencias robadas.
Ryan notó que Gerard no dijo nada acerca de cómo todos estos
vampiros, o la mayoría de ellos, fueron asesinados también. Tal vez
debería heredar en caso de muerte? Otro vampiro podría heredar algo si
se descubría que los dueños originales habían estado reuniendo esclavos
ilegales y robando su sangre?
Ryan aspiró profundamente.
― Sus hombres persiguieron a este lobo sangrando en mi propiedad.
Soy un enfermero, por el amor de Dios.
― Ya no, no lo eres.
― De todos modos, no puedo dejar que lo maten o llevarlo para
venderlo mientras está inconsciente e indefenso. Tengo que ayudarle.
Tengo que hacer algo porque eso no es correcto.
Ah. Ryan acababa de decirlo, y cuando miró por encima a los otros
vampiros por la esquina de su ojo podía ver la manera en que los dientes
fueron extendidos, y sus uñas se habían convertido en largas garras
antinaturales. No como las garras de lobo, como si ellos no se hubieran
cortado las uñas en seis meses.
Trató de no temblar.
― Gerard? ― Ryan preguntó cuando el hombre no dijo m{s nada.
Finalmente, el hombre habló.
― Mantenlo contigo hasta que esté sano. Dile lo que quieras. Eres un
buen samaritano y lo salvaste en el bosque de vampiros peligrosos.
Cuando esté listo, vamos a llevarlo. No dejes que se vaya de nuevo a su
manada. 13
Ryan tartamudeó.
― ¿Cómo voy a mantener a un lobo totalmente crecido lejos de su
manada? Al segundo que sea capaz de caminar, tratará de volver a casa
en busca de ayuda.
Ryan había esperado que Gerard le asigne a alguien para observándolo
mientras Ryan se hacía cargo de él. Si el lobo derribó a un guardia y
huyó, entonces Ryan no podía ser culpado por ello.
Si él era el único responsable de cuidar y ayudar al hombre, entonces
sin duda sería culpado por permitir que el prisionero de Gerard huyera.
― Uno de mis hombres le inyectará con la misma píldora que le damos
a nuestros guardias cuando se portan mal. Él todavía será capaz de
cambiar, pero la mayor parte de su fuerza será tomada. El clima es malo
y se pondrá peor. Él no tendrá la fuerza para salir. Se quedará contigo el
tiempo suficiente para que te diviertas con él, y cuando esté saludable,
mis hombres irán por él y lo traerán de vuelta a mí. Será de un mejor uso
como un luchador en mi zona, que muerto. Ya tenemos un lobo muerto,
que servirá como un mensaje para las manadas.
A Ryan no le gustaba nada de eso. No le gustaba y que no quería
hacerlo. El punto entero detrás de esto era hacer al lobo sano y liberarlo,
y no arreglarlo para que Gerard tuviera otro esclavo y matarlo más tarde.
Le temblaban las manos mientras hablaba sus pensamientos.
― Yo no quiero hacer esto ― dijo.
― Ryan St. Claire ― dijo Gerard, utilizando su nombre completo como
la madre de Ryan utiliza cada vez que estaba en un montón problemas.
― Recuerdas que me debes otros cinco años de tu vida, ¿verdad?
Ryan cerró los ojos y se limpió la cara.
― Sí ― dijo, y volvió a mirar al lobo en la tierra, sólo porque no tenía
más que dónde mirar, y necesitaba un recordatorio de por qué estaba
hablando mierda para este hombre.
― ¿Quieres que cancele el contrato?
La mano de Ryan se apretó alrededor del teléfono, probablemente tan
fuerte como la mano de Gerard estaba apretando las bolas de Ryan. 14
― No.
Los vampiros, imbéciles e idiotas de los que se había reído antes,
estaban ahora sonriendo a Ryan. Sí, todos estaban escuchando la
conversación.
― Bueno. Ahora, yo sé que no est{s tan lejos de mí, así que lleva al
lobo a casa contigo. Límpialo, y jódelo, si quieres, pero no serás capaz de
mantenerlo. Estoy cansado de darte estas pequeñas libertades, Ryan. Ni
sé por qué estás fuera de la isla.
Ryan tuvo que apartar la mirada de los demás vampiros, cuando hizo
una mueca.
― Yo estaba buscando cualquier hierbas silvestres que crecen que
podría utilizar para tratar a su pareja, señor. Me imaginé que podría ser
útil para usted.
No había manera de que Gerard no había escuchado la ira y el
sarcasmo en la voz de Ryan. El hombre tendría que estar sordo para no
escucharlo.
Pero por alguna razón, también optó por ignorarlo.
― Haz lo que tengas que hacer. Él no estar{ en cualquier lugar si el
tiempo empeora cuando llegues a la isla.
― ¿Qué voy a hacer con mi teléfono o mi barco? Cristo, mi Internet? Él
me preguntará por qué no voy a dejar que use esas cosas.
― No cuando estoy cortando la energía de tu casa. Mantén tu teléfono
celular oculto y en vibrar si tienes que hacerlo, por mis propias llamadas
privadas sobre mi compañero. Fuera de eso, el teléfono fijo se apagará.
La culpa es de las condiciones meteorológicas.
Gerard realmente pensaba en todo. No había nada que Ryan pudiera
hacer para salir de esta. No, a menos que quisiera ser arrastrado todo el
camino de regreso a la mansión enorme, jugado en un laboratorio y no
serle permitido salir durante los próximos cinco años.
En realidad, fue un poco asustadora la cantidad de energía que ese
vampiro tenía sobre la vida de Ryan.
Ryan volvió a mirar al lobo que había encontrado. El cuerpo del 15
hombre estaba temblando bajo la lluvia, lo que significaba que su cura
Lobo se vio comprometida.
Este hombre, este perfecto desconocido que había corrido por su vida,
había mirado a Ryan y le dijo que huyera. Ryan tenía que hacer algo.
Incluso si no era mucho. El puede incluso llevar al hombre y arreglarlo.
Incluso podría encontrar una manera de sacarlo de la pequeña isla de
Ryan en el medio del lago. Si la fuerza de este lobo volviera, aunque sea
un poco, entonces qué lo detendría de usar esta fuerza para nadar a
través del lago? Gerard no podía culparlo por eso.
― Est{ bien, esto suena como algo que puedo hacer ― dijo Ryan.
Otra breve silencio. Ryan deseaba que dejara de hacerlo eso.
― Sólo lo hago por ti, por lo que haces por mi compañero ― dijo
Gerard. ― Entrega el teléfono de nuevo.
Ryan hizo lo que se le dijo, y él realmente esperaba que no estaba
siendo demasiado obvio con su afán de satisfacer.
Vio como el vampiro habló un poco más en el teléfono, la conversación
consistía principalmente de asentimientos y "sí, señor”.
Entonces el vampiro colgó y miró a Ryan.
― Voy a llevarte al lago y a tu casa. Vas a cuidar del lobo allí, y voy a
volver por ti dentro de diez días.
― Diez días? ― Ryan miró a su paciente. ¿Ser{ que un Lobo se curaría
lo suficiente a tiempo para nadar a través de un gran lago?
― ¿Hay algún problema? ― Preguntó el vampiro.
Por supuesto que no. ¿Por qué debería? Estos vampiros sólo querían
que Ryan sanara a este lobo para que pudieran convertirlo en un esclavo
o algo así.
― No hay problema ― Ryan murmuró.
Los otros tres vampiros parecían enojados, cuando se volvió, pero no el
que había estado en el teléfono. Él solo caminó hasta el hombre
inconsciente en el suelo y lo levantó en sus brazos como si pesara nada.
― Vamos ― dijo.
Por primera vez en meses, Ryan recordó que él era a la vez un
prisionero aquí como cualquier otro esclavo bajo Gerard. Siguió al 16
vampiro por el bosque y a su barco.
Capítulo Tres

Después de que Ryan y el guardia vampiro, cuyo nombre él no sabía,


se metió en su barco y encendió el motor, la lluvia y los vientos realmente
comenzaron a golpearlo.
Quizás Gerard tenía razón y eso sería tan sencillo como culpar de todo
al tiempo.
Cuando llegaron a su pequeña isla en el medio del lago, Ryan dirigió al
vampiro para la habitación que utilizaría para su nuevo invitado. 17
Después de eso, vio como el vampiro se volvió, y no sólo tomó todo lo
que se podría utilizar para alcanzar el mundo afuera, sino que todavía
fue al poste donde estaba el satélite de Ryan y subió con la facilidad de
un pequeño mono antes de arrancarlo hacia abajo.
Ryan se encogió cuando vio que se rompía en tres piezas. No más
teléfono o Internet.
― La culpa es del viento. Recibirás uno nuevo después que la misión
se haya completado, ― dijo.
Ryan quería darle un puñetazo. Casi esperaba que el hombre fuera a
llevarse todas las fuentes de alimentación, pero no lo hizo. Lo que él lo
hizo entonces fue arrancar el motor del pequeño barco de Ryan y tirarlo
lejos en el agua oscura donde se hundió fuera de la vista de Ryan.
― Volveré por ti en diez días ― dijo el vampiro, mirando a los ojos de
Ryan, y Ryan se congeló cuando se dio cuenta de que los ojos del
vampiro se volvieron de un rojo brillante, que fue prácticamente
brillando en un clima sombrío.
Definitivamente había un aviso en la mirada, pero el guardia no dijo
nada mientras se giraba y se sumergió en el agua con toda la gracia de un
nadador sincronizado olímpico, y luego se alejó nadando en velocidades
inhumanas.
Bueno, él no era humano, después de todo.
Ryan suspiró cuando regresó a la casa. Incluso con su impermeable y
botas, el frío se había filtrado en sus huesos por un tiempo atrás. La
primera cosa que hizo fue comprobar a su nuevo paciente. El vampiro, al
menos tuvo la decencia de poner al hombre en la habitación de invitados.
Ryan nunca tuvo invitados aquí, a excepción de Gerard y tal vez su
compañero si el hombre se sentía bien para una visita, por lo que sólo se
utilizó como una sala de examen, y ahora había un enorme lobo dentro.
El hombre había sido ignorado por mucho tiempo, por lo que Ryan fue
directamente a trabajar. La mayor parte de su ropa tenía que irse porque
estaba demasiado sucia y sangrienta, y la manera más fácil de hacerlo era
conseguir las tijeras y recortarlas.
Realmente esperaba que este hombre no se enojara con él. Parecía un 18
alfa. Se supone que eran un poco más propensos a estar enojados sobre
ciertas cosas.
Comenzó a trabajar lavando el cuerpo y las heridas del hombre. A
pesar de haber hecho esto miles de veces con muchos diferentes
pacientes, cuando aún era un enfermero, y pensando que se había vuelto
insensible a un cuerpo desnudo, no podía dejar de notar que este hombre
era muy bueno.
Su cabello era de un color marrón oscuro que era sólo un poco más
ligero que la suciedad que se había caído. Tenía la piel buena y un
maravilloso conjunto de músculos que había sido una especie de difícil
de percibir, incluso cuando él estaba cubierto de barro y ramas y sangre.
Había una pequeña cicatriz en su labio inferior, probablemente un
ataque alfa. Fue de ahí que las cicatrices en hombres lobo llegaron
generalmente, a pesar de haber estado curioso que no tenía más que eso.
Ninguno de los hombres lobos tienden a luchar entre sí, incluso en sus
propias manadas?
Cuando Ryan terminó la limpieza, agarró inmediatamente sus
herramientas. Gerard se aseguró de que estaba bien abastecido con sus
propios medicamentos y jeringas. El hombre parecía pensar que Ryan era
un cirujano o algo real, que resultó ser una buena cosa en el momento,
porque significaba que Ryan tenía acceso a lo que necesitaba para
obtener la bala de la cadera del Lobo.
También tenía analgésicos suficientes para asegurar que el chico estaba
inconsciente mientras él realizó este trabajo un poco desagradable.
Debido a que Ryan era un enfermero humano, no estaba seguro si el
hombre iba a necesitar puntos de sutura, pero decidió ponerlos sólo para
estar seguro. La mano del hombre, probablemente tendría una cicatriz.
Mala. Ryan no pensó que siquiera un lobo podría volver de eso.
Cuando había terminado con los puntos y las vendas, tuvo que volver
atrás y admirar lo que estaba delante de él.
Santo Dios. Maldita Sea. Este tipo era muy, muy hermoso. Ryan se
quedó allí mirándolo durante tanto tiempo que casi se olvidó de poner el
suero del hombre. 19
Cuando terminó, él tuvo que encender la luz, porque estaba
literalmente oscuro como la noche ahora, y el sol se había ido. La lluvia
estaba disparando en sus ventanas.
No podía ver más de dos metros para afuera debido a toda el agua. El
agua del lago se vio obligada a subir un poco, también.
Joder, que era una buena cosa que acababa de tener sus suministros
entregados, y si la luz se acabase, entonces el paciente no se pondría peor
porque no tenía soporte de vida ni nada.
Ryan suspiró mientras miraba al hombre. Cristo, si él lo hubiera visto
todo limpio en primer lugar, entonces no hubiera tenido que mentir para
Gerard sobre estar atraído hacia él, porque él estaba muy atraído por el
lobo en su cama.
No sabía por qué. No era como si él era su tipo o nada, y era un lobo
encima de todo. Tenía que ser porque no había estado con nadie desde
que firmó el contrato de servidumbre. Las únicas personas que había
visto eran los vampiros malditos, y no eran buena compañía en absoluto.
Dos años de su vida hasta ahora, los pasó completamente solo, y ahora
aquí estaba un hombre que Ryan pensó que era hermoso.
No es que importara de todos modos. No importa lo que le había dicho
a Gerard, él no estaba dispuesto a actuar sobre cualquier impulso que
podría tener con un hombre herido, especialmente teniendo en cuenta lo
que Gerard pensó sobre toda la cosa. De alguna manera ser atraído por
este hombre parecía medio sucio, teniendo en cuenta lo que le había
dicho al vampiro, no importa como él ya estaba un poco extraño por ser
atraído por un tipo que estaba inconsciente y apenas había hablado dos
palabras con él.
Ryan tenía que salir de aquí. Tenía que entrar en la ducha y lidiar con
su pene estúpido, que palpitaba dolorosamente contra los dientes de
metal de su cremallera y hacía que sus pantalones vaqueros parecieran
mucho más pequeños de lo que eran.
Descubrió que era mejor entrar en su ducha antes que se taponaran las
cañerías debido a toda la lluvia o algo.
Ryan encendió el chorro caliente, sin su ropa, y luego inmediatamente 20
estaba bajo el agua. Podría haber sido una mejor idea abrir el agua fría,
por lo que no tenía que hacer eso, pero estaba muy caliente para querer
parar ahora. Simplemente deslizando sus vaqueros por sus piernas y
liberando su polla trajo un placer que casi lo hizo correrse allí mismo.
La primera cosa que hizo fue meter la cabeza debajo del chorro de
agua caliente y, enseguida, enrollar sus dedos alrededor de su pene
dolorido. La cabeza se había revelado debajo del prepucio en la parte
superior, y él mantuvo un férreo control mientras movía su mano hacia
arriba y hacia abajo.
Ryan tuvo que poner su palma contra el azulejo mojado mientras
empujaba en su mano.
¿Qué demonios le pasaba? Esto era tan confuso, masturbándose por un
hombre inconsciente en la habitación de al lado, pero no había manera en
el infierno que estaba parando ahora. Sus bolas se estaban levantando y
el final ya estaba a la vista.
Estaba tan cerca. Ryan se mordió el labio inferior mientras él apretó
alrededor del eje de su pene.
― Oh Dios ― él gimió, y luego se le doblaron las rodillas y fue una
lucha sólo para mantenerse mientras se corría duro.
Era el tipo de orgasmo que lo dejó temblando al final, su cuerpo tenso
y sus pulmones luchando por respirar apropiadamente.
La peor parte fue que él estaba pensando en la cara hermosa del
extraño todo el tiempo, su piel suave y todo músculo.
El chico todavía estaba sanando, inconsciente, y Ryan no sabía ni su
nombre. Fue así que iría al infierno por ello.

Jimmy regresó a la conciencia con el peor dolor de cabeza de su vida.


Nunca pensó que usaría la palabra grueso para describir un dolor de
cabeza, pero lo era. Era grueso y doloroso en la cabeza, y era difícil pasar
a través de él para que pudiera centrarse en los ojos cuando por fin logró 21
abrirlos.
Estaba tan aturdido, pero no había un buen olor en toda la habitación.
Un olor bueno y uno malo.
Jimmy fue finalmente capaz de concentrarse, y notó que él
definitivamente no estaba de regreso en su habitación. Este lugar no olía
a la casa o a su grupo, pero tampoco tenía la apariencia u olor de una
prisión donde se colocaría un esclavo de sangre.
Miró hacia abajo y tomó nota de las vendas que estaban en su mano y
en donde había recibido un disparo. Había también un suero que estaba
en el otro lado. Esto podría ser justo donde estaban poniéndolo para
recuperarse hasta que pudiera dar sangre.
Aunque, por qué los vampiros lo curarían después de darle tal
persecución, no tenía idea.
Jimmy trató de incorporarse, pero luego abucheó cuando el dolor lo
apuñaló, y se dejó caer en la cama. Buen Dios, él no iba a ninguna parte.
¿Qué diablos pasó?
Observó las vendas en su cuerpo, pero no debería estar doliendo tanto.
Su curación iba a cuidar de él. Un poco de dolor era una cosa, pero se
sentía como una mierda completa.
La puerta se abrió, y dolor o sin dolor, Jimmy estaba en alerta y
sentado.
No era un vampiro quien entró en la habitación, sin embargo. No sería
un vampiro que llevaba una camisa a cuadros roja con pantalones
vaqueros descoloridos, o tener la piel que no era blanca como la nieve.
Entonces el olor lo golpeó, y la frecuencia cardíaca de Jimmy subió.
Era el mismo hombre de antes, el que estaba en el bosque. Incluso
cuando su visión estaba trabajando como si estuviera bajo el agua, él
reconocería el pelo negro y los ojos azules en cualquier lugar.
― Eres tú ― dijo Jimmy, lo primero que salió de su boca.
Los ojos del hombre se abrieron. Joder, que eran muy bonitos ojos.
― No estaba seguro de que ibas a recordar algo. 22
― Por qué no? ― Preguntó Jimmy, y sintió la cabeza, tratando de ser
lento sobre eso porque todo seguía doliendo, pero estaba seguro de que
no tenía una lesión en la cabeza. No sentía los apósitos o nada.
― Nada, creo que me di cuenta el trauma de tus heridas... no lo sé. Yo
no estaba pensando. Puedo acercarme a tu cama?
Podía hacer eso y más si quisiera.
― Claro.
Jimmy miró las piernas del hombre mientras se movían a través del
cuarto. Tenía un tono muscular decente sobre él, y su ropa no era
apretada ni nada, pero Jimmy no podía dejar de notar lo bien que
encajaban en él. Sus mangas arremangadas, y si el músculo en sus brazos
era algo cercano, entonces, el resto de él parecía bastante bueno, también.
Por supuesto, Jimmy debería saber que su pequeña fantasía sexual era
todo por nada, porque en lugar de caminar hacia él con una mirada
entrecerrada de "Quiero ser follado" en sus ojos, el hombre sólo
comprobó el suero, miró los vendajes, y luego sacó una jeringa.
― Hey, hey, ¿qué diablos es eso? ― Preguntó Jimmy.
Los ojos del hombre se abrieron.
― Es un analgésico.
No oyó el corazón del hombre disparar, pero eso no siempre había sido
una indicación de mentira, y Jimmy nunca había sido bueno para
detectar este tipo de cosas de todos modos.
El hombre por encima de él suspiró.
― Si yo quisiera matarte, lo habría hecho antes de ahora. Confía en mí,
no hay nada más que quiera que te mantengas saludable y salgas de aquí
lo más rápido posible.
Ahora fue el turno de Jimmy para tener los ojos desorbitados.
Realmente, estaba seguro de que él sintió a sus ojos saliendo un poco.
― No es un secreto, ¿no es así?
El rostro del hombre se sonrojó un poco, y cuando él se inclinó hacia
adelante y colocó el extremo puntiagudo de la aguja en el brazo de
Jimmy, Jimmy lo permitió.
― Discúlpame. Esto... esto no es un gran lugar para ti. Si te acuerdas 23
de mí, entonces estoy seguro de que recuerdas quién te persiguió en mi
propiedad.
― Vampiros ― Jimmy dijo, gruñendo la palabra un poco, y ahora él
estaba en un infierno de mucho m{s desconfiado de su entorno. ― Me
preguntaba qué era ese olor.
― Sí, bueno, yo soy el curador personal del compañero del líder del
nido. Los convencí de que te dejaran ir, como un favor, pero si todavía
estás aquí en el momento en que alguno de ellos vuelva, entonces
nosotros vamos a tener algunos problemas.
Jimmy no podía creer lo que estaba escuchando.
― Cu{ndo regresarán?
― Siete días ― dijo el hombre, y Jimmy no estaba seguro, pero creyó
ver un poco de esa cosa del corazón sugiriendo que no estaba toda la
verdad pasando aquí.
Miró por la ventana cuando un trueno sonaba en la distancia, y la
habitación fue iluminada con luz blanca a partir de un rayo.
Jimmy nunca haría un buen detective si le tomó tanto tiempo darse
cuenta de que estaba lloviendo como loco por ahí. Él apenas podía ver
nada fuera en absoluto. La luz estaba todavía, pero cada vez que la
iluminación golpeó, era más brillante en la habitación.
Jimmy tenía que averiguar algunas cosas aquí, es decir, el nombre del
bonito.
― Quién eres tú? Dijiste que eres un curador? ― Él esperaba que
sonara tan suave y confiado como lo fue en su cabeza.
El hombre sonrió un poco en el lado de la boca. Se veía bien, y él sacó
la jeringa.
― Sí. Yo solía ser un enfermero estrictamente humano, pero luego fui
traído. Mi nombre es Ryan ― dijo, y extendió la mano para estrechar la
de Jimmy. ― Ryan St. Claire.
Jimmy tomó la mano del hombre, y tuvo un shock cuando las palmas
de las manos aseguraron uno al otro.
Tenía que saber si Ryan sintió lo mismo, porque él parecía un poco
aturdido también. 24
Jimmy descubrió que el mejor curso de acción era simplemente no
decir nada al respecto. Había oído eso, pero él no estaba dispuesto a
decirlo en voz alta por si acaso se había equivocado.
― Um, eso fue... extraño ― dijo Ryan, cuando sacó la mano, pero al
menos él todavía tenía una hermosa sonrisa.
― Sí, choque extraño ― respondió Jimmy, y decidió dejarlo como una
cosa de estática, por ahora.
― Uhm, yo no escuché tu nombre ― dijo Ryan, y Jimmy se sintió
como un idiota.
― Lo siento. Es Jimmy Torren.
― Nombre legal ― dijo Ryan, y Jimmy no pudo evitar observar cómo
las feromonas del hombre estaban cambiando, y tenía que estar un poco
más caliente en la habitación. Mierda, este tipo estaba totalmente en la
lujuria con él. ― ¿Est{s listo para un paseo alrededor de la casa? Puede
ser que sea mejor para que ti estar en tus pies lo más rápido posible.
― Tiene sentido ― dijo Jimmy, y no fue hasta que sacó la manta fuera
de sus piernas, que se dio cuenta que estaba completa y totalmente
desnudo.
Ryan se sonrojó antes de mirar hacia arriba y lejos de la polla de
Jimmy.
― Maldita sea, lo siento, yo debería haberte advertido. Tus ropas eran
ruinas. Tenía que deshacerme de ellas. Voy a traer algo nuevo en un
minuto.
― Estaré esperando aquí ― Jimmy dijo, tirando de la manta sobre sí
mismo mientras observaba a Ryan salir de la habitación.
El hombre tenía una de sus manos en el camino sobre los ojos, como si
todavía las necesitara para ocultar la visión de la polla de Jimmy de sí
mismo, incluso si se rebeló y se dirigió en la dirección opuesta.
Jimmy no iba a tomar eso como una especie de algo en su contra, o
incluso como una mala señal. No lo fue. Él sabía perfectamente bien lo
que estaba pasando aquí. Olía la lujuria de Ryan y vio la mirada en su
rostro cuando se fue.
Ningún sanador es tímido y salió corriendo de la habitación con la 25
imagen de un hombre desnudo. Ryan tuvo que haber visto cientos de
pacientes desnudos antes, y Jimmy dudaba que ya hubiera huido de
cualquiera de ellos.
Y encima de eso, Jimmy estaba desnudo ahora. Ryan lo había
desvestido antes, y para que Jimmy estuviera todo limpio eso significaba
que Ryan lo había cuidado bien.
Fue porque Jimmy estaba despierto ahora que Ryan había tenido esa
reacción? Si es así, entonces eso podría ser bastante impresionante.
Siete días. Jimmy tendría que ver lo que iba a hacer en este corto
espacio de tiempo.
Capítulo Cuatro

Ryan no tenía idea de qué demonios estaba mal con él. Salió corriendo
de la habitación como si fuera una especie de virgen o algo así. Era un
maldito curador, por el amor de Dios. Había visto hombres y mujeres
desnudos muchas veces antes, durante exámenes. No fue una cosa de
todos los días en este momento, ahora que ya no estaba trabajando en un
hospital de verdad, pero aún así.
Bueno, tal vez tuvo que ver con el hecho de que él acababa de 26
masturbarse con imágenes del hombre en la cabeza. Cuando estaba
vendando las heridas de Jimmy, había sido diferente, porque Ryan no se
había tocado a sí mismo en la ducha todavía.
Cristo, era un idiota. Tenía que ser profesional acerca de eso, entonces
fue a su oficina y trató de buscar las posibles soluciones para los hombres
lobo en el equipo, ya que no eran exactamente su especialidad.
Cuando el equipo no se encendió y Ryan recordó que tenía que volver
a encenderlo, también recordó que su Internet no funcionaba porque
Gerard había ordenado al vampiro idiota derribar su satélite.
Sacó su teléfono celular después de eso, la mierda de teléfono celular
que era sólo un teléfono de concha con botones y de ninguna manera le
daba acceso a Internet, y se sorprendió al darse cuenta de que él todavía
tenía barras de recepción en el mismo.
Él puso la cosa para vibrar. Ahora entendía por qué Gerard insistió en
darle este teléfono en lugar de algo inventado en la última década. Pensó
que el rico vampiro estaba siendo tacaño, pero ahora sabía que era para
tener un mayor control.
Bueno, ahora iba a probar un poco de control de su autoría. Le dio al
lobo siete días. Esto debería ser más que suficiente para que se recupere,
incluso con la bola de plata que le había sido inyectada. Gerard le había
dado al vampiro 10 días para volver aquí, por eso mismo, él decidió
venir más temprano, Ryan sospechaba que lo haría, entonces debería ser
más que tiempo suficiente. Más que suficiente.
Se echó hacia atrás en su silla, se pasó las manos por el pelo y suspiró.
Luego dio un puñetazo sobre su mesa antes de levantarse y moverse al
cajón.
Jimmy era unos centímetros más alto que Ryan, y tenía hombros
definitivamente más amplios, con los muslos y los pies más grandes. No
había nada que Ryan tuviera que encajara en él.
Sacó una de sus grandes camisas negras que llevaba para dormir
algunas noches. Esto puede servir realmente en el hombre. Los
pantalones de gimnasia elásticos que Ryan iba a tener que darle para 27
usar, sin embargo, no lo harían.
Ryan se preguntó si los pantalones no harían justo que fuera más fácil
para Ryan recordar que él estaría caminando por ahí sin ropa interior por
debajo de ellos.
Regresó a la habitación, y ahora, que ya sabía que Jimmy estaba
despierto, él llamó a la puerta.
― Estoy cubierto ― dijo Jimmy.
Bien, Jimmy acabó de decir que estaba decente, entonces por qué dar
permiso para que su polla se animara como si no estuviera?
Ryan respiró hondo y abrió la puerta. Esto no fue realmente una gran
cosa. No lo fue.
Sólo que era. Él realmente era. Si Ryan pensó que Jimmy era grande
cuando parecía débil e indefenso bajo la lluvia, entonces no fue nada
comparado con lo grande e impresionante, que él parecía simplemente
de pie en medio de la habitación con las sábanas blancas de la cama
alrededor de su cintura estrecha, y su gran pecho y el vientre perfecto
completamente expuesto.
Puta Mierda, ese lobo podía oler el deseo de Ryan si no paraba esto
ahora.
― Esos son para mí? ― Preguntó Jimmy.
Ryan se aclaró la garganta y asintió con la cabeza.
― Sí, aquí est{n. ― Ryan aseguró la ropa para que Jimmy la tomara.
― Perfecto ― dijo Jimmy, y él a su vez acercó su gran mano, la mano
grande que estaba anexada a un brazo perfecto y bíceps. Él claramente no
estaba llegando más cerca. Ryan tenía que ir con él.
Si era así que iba a ser. No había nada de malo en eso. Ryan dio un
paso adelante y le dio a Jimmy la ropa.
Sus manos se tocaron, y el chisporroteo agradable se levantó en la
mano de Ryan y golpeó como un rayo fuera, justo en su polla y bolas.
Así, no fue doloroso como uno esperaría si fuera alcanzado por un rayo
en las bolas.
― Sentiste eso, ¿verdad? ― Preguntó Jimmy, y su nariz ardía. El 28
hombre dejó la ropa caer al suelo y agarró el pulso de Ryan.
El corazón de Ryan saltó. De hecho, saltó, y cuando sus ojos se
movieron hacia abajo, pudo ver el contorno duro de la polla de Jimmy a
través de las sábanas, creando una especie de tienda de campaña, Ryan
no haría eso. Él sabía que los hombres lobo eran criaturas sexuales, más
que los seres humanos, y a pesar de lo que había dicho a Gerard no
tendría sexo con este hombre. Eso no era de lo que se trataba.
Ryan se apartó, rompiendo el contacto de sus manos.
― Vístete. Voy a tener algo de comer cuando estés listo ― dijo, luego
salió de la habitación.

Jimmy no sabía exactamente lo que había sucedido, pero sabía que no


había nada que pudiera hacer al respecto ahora. Él sabía perfectamente
que sólo estaba empujando al hombre lejos, si empujaba con más fuerza.
Tocó a Ryan de nuevo, le sintió el pulso y esa conexión chisporroteaba
entre ellos, y ciertamente no había hecho nada al respecto para ocultar su
erección tampoco. Llevaba la sábana, pero no había manera de que
hubiera hecho todo lo posible para evitar que Ryan se diera cuenta. Ryan
lo había mirado, por el amor de Dios.
Entonces, Jimmy decidió que no iba a empujarlo, por esta noche. Se
vistió y educadamente se unió a Ryan en la cocina. Se dio cuenta que
cruzó la pequeña cabaña apenas como, bueno, lo pequeña que fuera.
Allí estaba la habitación en que Jimmy había despertado, y dos
dormitorios más después de esto, uno de los cuales asumió era la
habitación de Ryan. El resto era una zona de cocina que se adjuntó a la
sala de estar, con espacio suficiente para una pequeña mesa para
sentarse.
Sólo había una persona que vivía aquí.
Jimmy comió en silencio, mirando a Ryan tanto como podía, y él hizo
muchas preguntas como pudo también.
Estaba en una de esas pequeñas islas en medio de un lago que era casi 29
tan grande como el lago Erie. Era el tipo de cosa que él pensaba que sólo
la gente rica utiliza para escapar de sus problemas y la vida rápida en las
ciudades, pero al parecer ser el sanador del compañero de un rico
vampiro puede ser tan beneficioso.
Jimmy estaba tan sorprendido al escuchar sobre el lago que corrió bajo
la lluvia sólo para verlo, dejando a Ryan atrás.
La isla no era precisamente pequeña, exactamente, por lo que pudo
correr unos diez minutos, y había árboles suficientes sobre ella, e incluso
un invernadero donde se supone que el curador mantiene las verduras y
otras hierbas curativas, pero el agua parecía áspera en el viento y la
lluvia, y no podía ver la tierra a cada lado de la isla.
Encontró un satélite roto en un charco de barro, y lo recogió. La cosa
había quedado atascada en varios lugares, pero en el lugar en que los
tornillos debían tener la cosa para el poste parecía deforme y
distorsionado como si una mano fuerte hubiera arrancado la cosa.
Miró en el poste, y a pesar de la lluvia y el viento, pudo ver la parte
superior.
La lluvia se detuvo abruptamente de golpearlo, aunque el clima seguía
siendo una mierda, y el sonido de la lluvia golpeando el plástico lo hizo
mirar hacia arriba.
Ryan estaba allí en el mismo impermeable y botas que había utilizado
por primera vez cuando Jimmy puso sus ojos en él. Él estaba asegurando
un paraguas sobre la cabeza de Jimmy.
― La lluvia lo llevó para abajo ― dijo, casi a gritos las palabras en su
oído.
Jimmy miró hacia atrás en el poste. No podía oír exactamente el latido
del corazón de Ryan, pero él tenía lo suficiente para sospechar.
― Volvamos adentro ― dijo Ryan, y puso la mano en el hombro de
Jimmy. ― Tus vendajes est{n sucios.
Jimmy no creyó que había mucho que pudiera hacer sino obedecer al
hombre.
Se levantó y entró en la casa, y él estaba de regreso en su habitación en 30
la que se sacó la única ropa en la casa, que sospechaba, le quedaría.
Ryan no salió esta vez, gracias a Dios, pero puso esa mirada en su
rostro, la vergüenza con la cara roja que a Jimmy le gustaba tanto.
Decidió jugar con él un poco cuando simplemente se sentó y esperó
que Ryan cuidara de él. No se cubrió con la sábana esta vez.
Ryan actuó como un verdadero soldado como él tomó otro rollo de
vendas y compresas y comenzó a trabajar, poniéndose de rodillas al lado
de Jimmy, y no entre las piernas, por desgracia, y luego desenrollaba los
vendajes de Jimmy, limpió la herida de nuevo, y enseguida puso otros
nuevos.
Jimmy tenía dificultad para concentrarse, y a pesar de que Ryan no
estaba entre sus piernas ni nada, su polla todavía decidió ponerse dura
para el hombre.
Ryan obedientemente mantuvo los ojos fuera de ella, pero sus mejillas
rojas y el corazón acelerado fue suficiente para que Jimmy supiera que el
hombre guapo podía verlo.
Eso tenía que ser él. Tenía que ser. El lobo dentro de Jimmy estaba
corriendo en su cabeza, y él estaba haciendo todo tipo de arañazos y
ruidos patéticos dentro de su cráneo, pidiendo ser liberado para que
pudiera tocar al otro hombre y ser su mascota, como un perro o algo
como eso.
Sólo un compañero podía hacer eso, pero Jimmy sólo había oído hablar
de reacciones fuertes como esta ocurriéndoles a otras personas, y nunca
con un ser humano.
Ryan definitivamente no sabía lo que estaba pasando. De lo contrario,
no estaría actuando sobre eso porque definitivamente podía sentirlo
también.
― Tengo que llamar a mi alfa ― dijo Jimmy. ― Antes de que tus
teléfonos se vuelvan tontos o algo así.
― Pensé que eras un alfa? ― Ryan dijo, mirando en sus ojos por
primera vez. Tenía unos ojos tan bonitos. Jimmy nunca se cansaría de
ellos.
Jimmy negó con la cabeza. 31
― No. Soy un beta. Somos tan fuertes como los alfas la mayor parte,
pero menos propensos a luchar. Todavía podemos ser muy protectores,
si pensamos que algo es nuestro, sin embargo.
El rubor de Ryan se profundizó, y miró hacia otro lado.
― Veo. Bueno, me gustaría tener mejores noticias para ti, pero el
satélite que has visto en el exterior fue lo que le dio a mi teléfono de casa
una señal.
― ¿Qué tal un teléfono celular? ¿Cuentas con recepción aquí fuera?
Ryan negó con la cabeza.
― Lo siento, no tengo uno.
El corazón del hombre seguía latiendo, y ahora Jimmy podía oler su
lujuria y el nerviosismo, todo en uno. Era miedo porque estaba teniendo
estos sentimientos por un lobo? Será que había estado en una habitación
con un lobo antes?
― Bueno, eso es una mierda ― dijo Jimmy. ― No tienes que tener
miedo de mí, ¿sabes? No voy a cambiar y ser violento si me das una
respuesta que no me gusta.
Ryan dejó escapar un suspiro y le sonrió. Derritiendo el infierno fuera
del corazón de Jimmy, claro, ¿por qué no?
― Soy tan obvio? ― Preguntó Ryan.
Jimmy se rió un poco.
― Pareces con un poco de miedo. Esa luna llena y todo, engaña a la
gente ― él negó con la cabeza. ― No, esto es sólo para los lobos salvajes,
y se necesita mucho para que suceda. Yo podría querer correr y borrar
tus existencias de carne en tu refrigerador, cuando la luna llena llegue
hasta aquí, pero no será más que eso.
― No sé cuando es luna llena ― dijo Ryan. ― Nunca tuve que
comprobar en mi calendario antes.
― Es mañana a la noche.
Los ojos de Ryan se abrieron un poco.
Jimmy se encogió de hombros.
― Puedo sentirla llegando. 32
Ryan asintió y sonrió, y entonces empezó a desenvolver los vendajes
del lado de Jimmy, que tenían el efecto interesante de traer al hombre
más cerca, ya que tenía que poner sus brazos alrededor del cuerpo de
Jimmy antes de envolverlo de nuevo.
La polla Jimmy se movió, y mientras a él no le importaba si el hombre
que creía que era su compañero lo vio, estaba seguro que Ryan no
querría que Jimmy lo golpeara en la barbilla o algo así.
Concéntrate, tenía que concentrarse. Podría pensar con su polla
después. Ahora era más importante pensar en cómo iba a volver a su
manada. Aeducan estaba todavía faltando, y allí estaba el niño muerto
para pensar. Estaba a varias horas lejos de su manada en camión. Tenía
que ponerse en contacto con ellos.
― ¿Qué pasa con tu Internet? Tienes un equipo?
Ryan miró hacia otro lado y sacudió la cabeza de nuevo.
― No. El satélite tiene eso, también, y con el tiempo como está, todavía
estoy esperando por el corte de la luz.
Como si fuera una señal, las luces parpadearon, de hecho, prendían y
apagaban por tres segundos, y ambos Ryan y los ojos de Jimmy se
ensancharon. Luego se rieron.
― Ya veo lo que quieres decir ― dijo Jimmy, y fue bueno relajarse un
poco y no ser tan desconfiado sobre eso.
Ryan fue a sentarse al lado de Jimmy en la cama, y él comenzó a
trabajar en su mano.
― Debería haber curado ― dijo Jimmy.
― Los tipos que te perseguían sabían lo que estaban haciendo. Creo
que te inyectaron algo, antes de que llegar a ti, y que va a ralentizar tu
metabolismo por un tiempo. No hay mucho que pueda hacer al respecto,
pero voy a cuidar de ti lo mejor que pueda hasta que estés lo
suficientemente bien como para irte. Lo prometo.
El corazón de Jimmy se derritió un poco. No iba a aparearse con un
chico que estaba tratando de engañarlo. Estaba seguro que sus instintos 33
no le permitirían hacer eso. Si Jimmy estaba eligiendo eso, entonces podía
entender cómo pudo ocurrir con algunas personas y sus compañeros,
pero no era la elección de este. La naturaleza era buena, y ella nunca lo
orientaría hacia algo equivocado.
Aun así, no pudo evitar dejar de reír. Alguien estaba muerto, y los
vampiros estarían de vuelta aquí en siete días.
― ¿Crees que la luz, para tu teléfono e Internet, estar{ de regreso
pronto? Un amigo mío está faltando, y un niño murió. Estoy seguro que
esto fue por las personas que trabajas. Tengo que informar a la mayor
brevedad posible.
El rostro de Ryan palideció, y Jimmy fue golpeado con el deseo de
proteger al hombre de la terrible información que acababa de darle. No
quería que Ryan tuviera miedo de sus propios empleadores,
preguntándose si iban a hacerle daño enseguida. Infierno, él no quería a
Ryan aquí si estaba trabajando para los mismos vampiros. Esas personas
estaban fuera de sus mentes.
― Espero que sea pronto, pero para ser honesto, cuando el tiempo est{
así, incluso menos que esto, el agua del lago tiende a subir. El motor de
mi barco se ha ido y sólo tengo que estar hasta aquí hasta volver a tener
una señal. O mis empleadores vengan por mí. Ellos saben que estoy aquí,
¿sabes?
― Sí, lo sé ― dijo Jimmy. Tendría que saber si eran los que necesitaban
de Ryan tan mal para su líder de nido.
Siete días.
Tenía siete días para ponerse mejor y conseguir su culo fuera de aquí, y
cuando él no diera a Conner una llamada esta noche, el hombre iba a
estar sin duda buscándolo desde entonces.
Jimmy se relajó. Odiaba que no hubiera nada que pudiera hacer por
Aeducan, o el niño, pero también se tomarían acciones. Conner sabría
que los tres estaban desaparecidos, y él iba a hacer algo al respecto de
eso. Sabía dónde Jimmy estaba ese día, y él estaría siguiendo el rastro
para encontrarlos.
Estos vampiros podían ser capaces de deshacerse de la camioneta, pero 34
los olores eran mucho más difíciles.
Excepto por este tipo de lluvia. Tal vez sería más complicado de lo que
Jimmy pensó que sería.
― Hey ― dijo Ryan, y extendió la mano y sostuvo la cara mal afeitada
de Jimmy. ― Te lo prometo, ¿de acuerdo? No voy a dejar que nada malo
te suceda. Vas a salir de esto muy bien.
Jimmy sonrió y miró hacia otro lado. Él negó con la cabeza.
― Qué es lo gracioso? ― Preguntó Ryan.
Jimmy suspiró.
― Es gracioso porque yo debería ser la persona diciendo cosas como
esas. Yo me ocuparé de ti. Todo esto va a estar bien.
― ¿Por qué me dirías eso? ― Preguntó Ryan.
Jimmy no pudo resistir más. Puso una mano detrás de la cabeza de
Ryan de suave pelo negro, y después llevó los labios rosados adelante
por un beso.
Definitivamente debería haber atrapado a Ryan con la guardia baja
porque el hombre inhaló una fuerte bocanada de aire, y su corazón se
aceleró, pero no se movió para alejarse.
Ryan, sin embargo, le puso la mano en el pulso de Jimmy, pero, de
nuevo, no quitó la mano de Jimmy. Él sólo lo aseguró, con un suave
apretón.
Aunque Ryan no estaba en la necesidad desesperada de afeitarse como
Jimmy estaba, de hecho, Jimmy apenas notó alguna cosa alrededor de su
boca en absoluto, mientras besaba al otro hombre, podía sentir lo suave.
Debe estar viniendo de pequeñas plántulas que estaban brotando, y a
Jimmy le gustó.
Sacó la lengua hacia adelante y lamió a lo largo del pliegue de los
labios de Ryan. Ellos eran tan suaves, y Ryan gimió un poco.
Él gimió!
Él también se alejó.
― No puedo hacer eso. Eres un paciente ― dijo, levant{ndose y
alejándose.
La polla de Jimmy se marchitó, pero él se acercó y tomó la mano del 35
hombre, deteniéndolo.
― No... no un paciente oficial ― dijo.
Sí, esto suena realmente desesperado.
Ryan lo miró con una expresión de dolor en su rostro, y luego llegó
suavemente hacia abajo y tomó la mano de Jimmy.
― Voy a calentar la cena. Puedes volver por ella en cualquier momento
que desees. Estaré en mi oficina.
Jimmy dejó que el hombre se fuera. Parecía lo correcto a hacer,
considerando todas las cosas.
Además de eso, haría al otro hombre un favor y simplemente se
quedaría donde estaba por ahora. Su polla no estaba dispuesta a dejarle
pensar en los alimentos.
Jimmy se dejó caer en la cama. Ryan había cerrado la puerta al salir,
por lo que no vio un problema, entonces descendió y envolvió el puño
alrededor de su polla dolorida.
Tuvo que morderse el labio inferior apenas para evitarse de hacer
cualquier ruido que pudiera ser oído mientras el órgano grueso palpitaba
en su mano. Podía sentir cada uno de sus latidos del corazón a través de
su pene. Fue genial.
Era mejor después de que Jimmy escupió en su mano y retomó lo que
estaba haciendo. Cada vez que se tocaba a sí mismo, jugando con la
cabeza como a él le gustaba, y masajeando sus bolas usando la cantidad
justa de presión, se imaginó que las manos de Ryan estaban allí,
haciéndolo por él.

36
Capítulo Cinco

Ryan no durmió en toda la noche. Miró el teléfono celular para los


mensajes, el triple de verificación de la cosa en vibrador, y entonces él lo
escondió bajo el colchón sólo para asegurarse de que el lobo en la casa
con súper audición sensible no escuchara el sonido de las vibraciones.
Esa noche, él lo hizo de nuevo, y, al menos en ese momento, mientras
lo hacía sabía el nombre del hombre con quien estaba fantaseando, y
tenía la ventaja añadida de no sentirse tan culpable por eso tampoco, 37
teniendo en cuenta que sabía, que Jimmy estaba haciendo lo mismo con
él.
Ryan iba a ir al infierno.
A la mañana siguiente, él ni siquiera podía decir que era de mañana,
sin mirar el reloj, porque estaba muy oscuro afuera. Lo primero que hizo
fue comprobar a su paciente, que estaba durmiendo profundamente
como...
Tan profundamente como un hombre que no sabía que un bando de
vampiros quería convertirlo en una puta de sangre. Del tipo saludable
que daban buena sangre y sexo.
Ryan se estremeció y se fue a hacer el desayuno. Afortunadamente
estaba bien surtido de alimentos, huevos, bacon, ese tipo de cosas, pero
no había podido comprobar ninguno de sus lazos de conejo antes de
encontrarse con Jimmy, entonces estaría un poco corto de carne hasta
después de que el hombre se fuera y Gerard enviara más comida.
Si el viejo vampiro incluso recordara hacer esto cuando Ryan le contara
la historia acerca de la fuga de Jimmy.
Se preguntó cuánto de un punto de partida, debería dar al hombre
antes de que estuviera sospechando. Quería que Jimmy consiguiera
llegar lo suficientemente lejos para que no fuera capturado, pero él no
quería morir, porque quiso dejarlo escapar, tampoco.
Ryan miró a la imagen de sí mismo y de su hermana. Estaba siempre
en la cocina, enmarcada en la pared al lado de la estufa. Una imagen lo
suficientemente pequeña que fácilmente la podría sacar de pared y
ponerla sobre su escritorio en su oficina.
Andrea no se parecía en nada con él. Ella era rubia y tenía los ojos
marrones ámbar, y era tan pequeña en sus brazos, a pesar de estar cerca
de la misma edad. Ella sólo tenía 1.60, y no era el tipo de persona que
Ryan pensó que se habría vendido a sí misma como una prostituta sangre
a los vampiros.
Suspiró y dejó de revolver el tocino que chisporroteaba en la sartén, y
él tuvo que secarse la cara y la espalda. 38
Gerard amenazó con cancelar su contrato. Si él lo hacía, Ryan
fácilmente podría ser sacado de aquí y tomar a Andrea de vuelta. Él no
sabía que estaba teniendo problemas para pagar la escuela, y ella era tan
terca e insistente en que podría hacer su propio camino que realmente
había vendido diez años de su vida por el dinero necesario para asistir a
la escuela y tomar todas las clases de arte que quería.
Diez años, y las únicas cláusulas que pidió fue poder mantener su
propio lugar y continuar asistiendo a la escuela como una estudiante
regular, pero era difícil ser una estudiante normal cuando ella fue
perseguida constantemente por sangre y sexo.
Por el momento en que Ryan se dio cuenta de eso, habían pasado tres
años, casi sin dinero, ni por asomo cerca de graduarse debido a la fatiga,
y llorando en el suelo con una botella de píldoras en su mano. Ella
explicó todo para él, después de comprobar para asegurarse de que no
había tragado la botella entera, o incluso la mitad.
Después de eso, sólo había una cosa que Ryan podía hacer, sino
encontrar un abogado y tratar de renegociar el contrato.
El se puso en su lugar. Podía mantener el resto del dinero, y ella no
tenía que renunciar a más sangre o dar sexo. Ella era libre para caminar
con la condición que Ryan renunciara a los siete años restantes de su vida
que requería el contrato.
Si su contrato fue cancelado, sin embargo, enseguida, Andrea estaría
de vuelta en esa casa. Joder, si Gerard pudiera encontrar otro sanador,
uno mejor, Ryan podría estar de vuelta en esa casa, donando sangre y
sexo sólo para mantener a Andrea lejos.
Lo único que lo mantenía esta isla, y lejos de los vampiros, en su mayor
parte, fue el hecho de que al compañero de Gerard le gustaba él. Nada
más y nada menos.
Ahora estaba a punto de arriesgar mucho por un chico que no era su
familia. Estaba a punto de arriesgar su única familia por un hombre que
nunca conoció.
― Est{s bien? 39
― Whoa! ― Ryan saltó y se volvió, los latidos de su corazón contra la
caja torácica, cuando Jimmy se acercó por detrás y le puso la mano en el
hombro de Ryan.
Ryan dejó escapar un suspiro duro y tuvo que agacharse por un
segundo para agarrar sus rodillas.
― Tú asustaste la mierda fuera de mí ― Él dijo, y pronto se dio cuenta
de que su tocino estaba ardiendo, entonces volvió hacia él.
― Tus manos tiemblan ― dijo Jimmy.
― No es nada. Estoy bien ― dijo Ryan, cuando en verdad se sentía que
iba a vomitar después de todos estos pensamientos malos que pasaron
por su cabeza. Pensando en el pasado, sobre los vampiros que habían
usado a su hermana y a él mismo, por sangre y sexo, siempre dejándole
un mal sabor en la boca.
― Creo que el olor del tocino te despertó? ― Preguntó Ryan, forzando
una sonrisa en su rostro cuando trató de hacer conversación. ― Estaba
pensando que un lobo puede responder a eso.
― Eso, y me pareció oír algo ― dijo Jimmy. ― Un ruido extraño
procedente de... No sé. Creo que es sólo los cimientos de la casa, o las
luces tratando de mantenerse encendidas o algo.
Las luces parpadearon de nuevo, pero seguían siendo tercas.
Ryan, sin embargo, sintió la sangre drenar de su cara.
Un ruido? ¿Qué ruido? Jimmy no había especificado de dónde había
llegado, entonces era posible que él oyera el celular vibrando, incluso
bajo el colchón en la habitación de Ryan.
Tal vez.
Ryan se aclaró la garganta. Él necesitaba un recordatorio de por qué
estaba tomando este riesgo, o por qué estaba asustando a la mierda fuera
de sí mismo por un hombre que no conocía y por quien tenía una
erección.
Sonrió a Jimmy. Tenía que llegar a conocerlo, saber cuáles eran sus
gustos y disgustos, quién era su familia y mascotas que tenía y las cosas 40
buenas que había hecho a lo largo de los años.
Si Ryan iba a trabajar hasta las pelotas para hacer eso, entonces él
quería gustar de Jimmy como persona. Él quería ser amigo del hombre.
De esa forma, él no estaría arriesgando mucho por un desconocido
virtual.
― Entonces, Jimmy, parece que tendremos que aguantar aquí por un
tiempo, y todo lo que tengo son algunos juegos de cartas y todo lo que
descargué en mi equipo. Vamos a pasar mucho tiempo juntos.
Jimmy le sonrió, y fue una mirada que fue directo a la polla de Ryan.
La maldita cosa no sabía cuándo parar.
― Parece que sí.
Ryan bañó rápidamente los huevos y el tocino.
― Espero no te importe, estamos sin el pan rebanado, pero hay un
poco de jugo de naranja en el refrigerador.
Jimmy corrió en busca de él, y les sirvió a ambos un vaso y extendió la
silla de Ryan para él.
Un caballero, entonces, era una cosa nueva que Ryan había aprendido
sobre él.
Jimmy se sentó.
― Mi vida es un libro abierto. Pregúntame cualquier cosa y voy a
hablar sobre eso.
Ryan deseaba que él pudiera hacer lo mismo.

Horas más tarde, Ryan se estaba pateando por preguntar algo en todo.
Su gran plan para que fuera más fácil para él relacionarse con Jimmy, y
que le gustara lo suficiente para querer correr ese riesgo por él, estaba
frustrado porque cuanto más aprendía, más le gustaba.
Y ya le gustaba demasiado.
No eran sólo las cosas que dijo de sí mismo, o la forma en que él
insistió en ayudar con la limpieza. Cualquiera de los dos podría parecer
excesivamente educado para un hombre que estaba tratando de ir a la 41
cama con él. Esto era diferente.
Era como si él realmente parecía importarle cuando le preguntó a Ryan
acerca de su hermana en la imagen, y cómo él sabía que no debía
presionar para obtener más respuestas cuando Ryan dijo todo lo que
pudo, y luego declaró que no quería hablar sobre el resto.
Se avergonzó de Andrea lo suficiente porque ella trató de matarse. No
estaba a punto de decirle a Jimmy que estaba tomando su lugar como un
esclavo legal. Jimmy pensaba que era un curandero respetable, y eso era
suficiente.
Ni siquiera eso, sino que también fue la mirada en los ojos de Jimmy
cuando hablaban entre sí. Nadie podía fingir la cantidad del amor y el
interés que Jimmy tenía cuando hablaba de sus amigos, su manada, su
alfa, y los bebés que nacieron.
― ¿Tienes familia? ― Preguntó Ryan.
Jimmy negó con la cabeza.
― Sólo la manada.
Le sorprendió a Ryan un poco.
― De verdad? Nadie m{s? Ni incluso padres?
― Las guerras lobo fueron hace mucho tiempo. Yo era un niño muy
joven cuando terminaron― explicó Jimmy.
Ryan sintió que su rostro se calentaba.
― Cierto, la liberación de los lobos contra los vampiros. Lo siento, se
me olvidó.
Jimmy se encogió de hombros, y todavía tenía ese aire de buena
naturaleza a su alrededor, como si él no estaba realmente molesto por
eso.
― Muchos seres humanos realmente no piensan en eso debido a que
apenas sabían de estas guerras, hasta que fueron más y todo se puso
sobre la mesa. De hecho, una gran cantidad de Lobos de mi edad son
huérfanos.
Algo brilló en los ojos de Jimmy mientras lo decía, y eso fue suficiente
para que Ryan se preguntara si el hombre realmente estaba bien con el
hecho de que sus padres se habían ido. 42
― Es por eso que tienes esa cicatriz? La única en tu labio ― preguntó
Ryan.
Jimmy la tocó, y él sonrió.
― Fue una bofetada dura en la cara por haber mandado a la mierda a
mi alfa de entonces. No le gustaba que los niños pequeños lo llamaran
idiota.
― ¿Tienes hermanos? ― Ryan preguntó mientras él y Jimmy llevaron
los platos. Ryan tuvo que insistir en hacer el lavado ya que la mano de
Jimmy estaba vendada, pero Jimmy no aceptaría sentarse y no hacer
nada, entonces él los secó y ayudó a guardarlos de nuevo.
― Un hermano mayor, pero él se ha ido, también. Era bastante mayor
para ser capaz de salir con mi padre y portador y luchar y nunca regresó.
― Oh. Lo siento mucho ― dijo Ryan, y entonces él se dio cuenta de
que no había más platos para lavar, porque se quedó quieto.
Sí, Ryan se había realmente jodido por tratar de conocer al hombre
mejor, porque ahora todo lo que sentía era más que atracción hacia él.
Quería consolarlo y decirle que todo iba a estar bien.
Jimmy se encogió de hombros otra vez, y Ryan definitivamente pudo
ver una máscara para el dolor.
― No lo hagas. Tengo una nueva familia ahora, y yo quiero estar
seguro de que están a salvo.
― Y yo quiero estar seguro que vuelvas a ellos.
Ryan había agarrado el hombro de Jimmy entonces, y él deseó no
haberlo hecho, porque no había más que un sentimiento abrasador que
siempre pasó cuando entró en contacto con Jimmy. Ni siquiera estaba
piel con piel. Jimmy llevaba la camiseta y el corto de nuevo, ya que
estaban limpios, pero la polla de Ryan se puso dura muy rápido.
Se tocó más en dos días que lo que lo había hecho en un mes, y la cosa
todavía no se bajaba. Parecía que sus bolas se preparaban para caer,
porque él no estaba haciendo algo al respecto.
Ryan no aceptó más. Mientras miraba a los ojos de Jimmy y su nariz,
Ryan no hizo nada. No podía alejarse de inmediato, ya que esto habría 43
sido un poco demasiado extraño, entonces él estaba contando
prácticamente los segundos antes de que decidiera que era práctico ir
para atrás.
Esperaba que Jimmy lo agarrara y besara de nuevo, empujando la
lengua a lo largo del pliegue de su boca, y Ryan estaba interiormente
rezando para que esto no ocurriera.
― Voy a comprobar tus vendajes, ― dijo. ― Así tal vez podamos
encontrar algo para mantener nuestras mentes fuera del tiempo.
¿Suena esto sexual saliendo de su boca? ¿O era la mente de Ryan
jugando con él?
Jimmy estuvo de acuerdo.
― Suena bien.
Jimmy no hizo ningún movimiento, ni una sola vez a lo largo de día.
No cuando jugaron juntos Risco, o Plants vs Zombies en su computadora,
e incluso cuando estaban sentados frente al otro jugando póquer. Ryan
esperaba que Jimmy al menos intentara algo cuando cambió las vendas
del hombre, pero lo único que consiguió fue una carga de nada.
Eso decepcionó el infierno fuera de él, y no había realmente pensado
que sería.
Ya era demasiado tarde. Ryan estaba tan jodido, porque estaba
deseando a este hombre, y tal vez fueran hormonas de lobo o algo que lo
estaba haciendo, pero no era como que se estaba yendo o algo.
Ryan sabía que Jimmy tenía una excelente cara de póquer cuando él
quería tenerla, gracias a todo el tiempo que pasaron solos jugando los
juegos juntos, cocinando y comiendo y hablando. Cristo, Jimmy era sexy
como el infierno apenas casualmente hojeando las páginas de su copia de
Gray Anatomy.
No fue sino hasta anochecer, y no sólo el tipo causado por pesadas
nubes negras, que Jimmy cerró el libro para levantarse.
Ryan levantó la cabeza de su propio libro, pero Jimmy no estaba
caminando hacia él. Se movía a la puerta de salida.
― Adónde vas? ― preguntó Ryan, pero Jimmy extendió la mano 44
cuando Ryan trató de levantarse.
― No, no, quédate ahí. Estoy bien. Sólo tengo que salir por un rato.
Los ojos de Jimmy brillaban cuando dijo eso, pero había algo cansado
en su voz. Parecía un poco agotado, y fue cuando Ryan recordó.
― La luna llena, cierto. Lo siento.
― Vuelvo enseguida. Tengo que quitarme mis vendajes para eso,
¿sabes? ― Jimmy dijo, y él ya se estaba quitando la camisa cuando la
tiraba en la silla.
El corazón de Ryan corrió cuando él se imaginaba a Jimmy haciendo lo
mismo con los pantalones, pero no lo hizo.
― Vuelvo en un par de horas.
Un par de horas? Pero la isla era tan pequeña.
― Puedes enfermar si permaneces en el mismo lugar por mucho
tiempo.
Gerard no había mencionado que Jimmy sería más débil? Sería capaz
de enfermar?
― Tengo que ir ― dijo Jimmy, y luego una explosión de viento entró
en la casa cuando él abrió rápidamente la puerta y se fue.
― No vayas demasiado cerca del agua! ― Ryan gritó, pero luego, la
puerta estaba cerrada, y estaba solo.
En realidad, no había nada que pudiera hacer para detener al hombre.
Jimmy todavía puede estar recuperándose, pero él era un hombre adulto
y un lobo. Dijo que esto podría suceder y que tendría que correr vueltas
alrededor de la isla un par de veces.
Ryan decidió dejarlo. Él no tenía que gustar de eso, pero en realidad no
había mucho que pudiera hacer al respecto.
Decidió hacer algo de comida, algo con un montón de carne y proteína.
Esto debe ser bueno para un lobo en una noche de luna llena, ¿no?
El problema era que Jimmy no vino a cenar. Había ido por un total de
dos horas y el hombre no le respondía cuando Ryan llamó su nombre en
la puerta.
Lo cual era bastante embarazoso. Ryan sabía que el hombre podía
oírlo, pero él no iba a volver. Esto era molesto en sí mismo, porque se 45
sintió horrible llamando el nombre de Jimmy en la puerta como si fuera
algún tipo de perro.
Afortunadamente, Ryan podía oír a Jimmy correr al aire libre, y
cuando el hombre, o el lobo, como era ahora, estaba en la línea de visión
de Ryan, tal vez a seis metros de distancia, Ryan fue al menos capaz de
respirar un suspiro de alivio y saber que no había caído en el agua.
Ryan negó con la cabeza. Estúpido. Era tan maldito estúpido. Los
vientos no fueron tan fuertes más, y no era como si él estaba en el océano.
Este era un lago. El agua estaba fría, pero no era como si fuera a ser una
corriente que dominaría a un lobo.
Aún así, Ryan estuvo en su puerta durante unos minutos, protegido
por el techo de su balcón, viendo a Jimmy dar la vuelta otra vez. Era
difícil para él ver los detalles del pelaje del lobo con la lluvia, pero no
había duda del tamaño. Él era enorme, y era hermoso. La piel parecía ser
un color similar al del pelo de Jimmy. Marrón oscuro, si es que estaba
viendo eso correcto. Él se preguntó si la cicatriz todavía estaría en el labio
inferior del lobo. Será que los lobos tienen labios?
Esta línea de pensamiento se estaba poniendo rara, por lo que la cortó
rápidamente y volvió a entrar a su casa, parando su abierta admiración
del gran hombre en forma de lobo antes de que Jimmy lo notara.
Envolvió la cena de Jimmy en papel de aluminio y la puso en el horno.
Jimmy comería cuando llegara el momento, o Ryan lo prepararía para el
almuerzo del día siguiente.
Se dio una ducha y se fue a su habitación para comprobar sus
mensajes. Es mejor hacerlo ahora, mientras que Jimmy estaba fuera de
casa.
Había unos cuantos textos de Gerard. Nada malo estaba sucediendo a
su compañero, pero él quería saber si dar las píldoras de menta al
hombre antes de su cena ayudaría con el dolor de estómago.
Ryan respondió que no podía lastimar, pero luego comenzó a moverse
hacia abajo para el resto de los mensajes, y él los contestó lo más rápido
posible. 46
Gerard no estaba acostumbrado a esperar una respuesta, y parecía que
el hombre se había olvidado de que había un lobo en la casa con Ryan
porque había unos textos de rabia mezclados con otras cuestiones abajo
de la parte inferior de la pantalla.
Ryan tenía que tratar de calmarlo. Él no quería que nadie fuera
enviado antes de lo necesario.
Odiaba tener que responder a algunos de ellos, sin embargo.
¿Cómo está tu nuevo paciente?
Fue enviado antes del almuerzo, y Ryan gimió cuando él respondió,
ignorando los textos enojados que vinieron después.
Gerard siempre había sido el tipo de persona que envió un mensaje
con la gramática y puntuación y por ello, Ryan tomó pequeños placeres
de hacer lo mismo, ignorando completamente sus mayúsculas y sus
comas.
Mejor. está corriendo afuera ahora aún necesita tiempo de
recuperación sin más sangre saludable
No hubo respuesta inmediata de vuelta, lo que no esperaba, entonces
Ryan pasó el resto de los textos.
Espero que satisfagas tu deseo por él. Servirá para un mejor
propósito aquí.
Ryan suspiró y dio un puñetazo en su respuesta.
Todavia no casi.
Ryan terminó de contestar todos los mensajes, y luego él tiró la cosa
estúpida de nuevo bajo la cama. Se sintió sucio escribiendo esas cosas.
Diciendo que él estaba usando a Jimmy para el sexo, aunque quisiera
tanto sexo, era lo peor del mundo. Sabía lo que era que alguien lo
utilizara para el sexo. No quería eso para Jimmy.
Un sonido fuera lo hizo saltar un poco en su cama, y le tomó a Ryan un
sólido minuto para darse cuenta de lo que el ruido continuo era.
Un aullido.
Seguía lloviendo muy duro, y Ryan no había visto la luna detrás de las
nubes, pero parecía que Jimmy todavía podría sentirla, porque él estaba
aullando hacia ella. 47
Se quedó callado, entonces, nada más que el sonido de la lluvia contra
el techo y las paredes de Ryan.
Entonces el aullido comenzó de nuevo, esta vez más, y Jimmy debe
haber estado vertiendo en realidad toda la tristeza que sentía en esos
ruidos porque él rompió el corazón de Ryan en pedazos sólo de
escucharlo.
Ryan no estaba siendo dramático sobre eso tampoco. Su corazón estaba
en verdadero dolor de escuchar el sonido.
Era una cosa de lobo? Él fue capaz de hacer a Ryan sentir un poco de lo
que sentía con el aullido? Ryan no estaba seguro exactamente qué era lo
que Jimmy estaba aullando, pero tipo que dudaba de que era para la luna
en este momento.
Tal vez él estaba aullando por su familia muerta, o tal vez incluso a sus
amigos, esperando que su manada estuviera en algún lugar cercano, y
ellos lo oyeran y vinieran por él.
Ryan tenía esperanza que lo hicieran, pero no estaba seguro de cómo el
sonido viajaría.
Ryan se sentó en su cama, con el libro en la mano, pero él no leyó.
Lo único que podía hacer era escuchar el conmovedor, aullido
solitario.

48
Capítulo Seis

Jimmy era feliz cuando sacó todo fuera de él. La luna siempre sacó al
lobo dentro, pero ahora el efecto fue peor porque estaba sin su manada,
Aeducan todavía faltaba, el muchacho estaba todavía muerto, y ahora
tenía a su compañero en la casa que insistía en no tocarlo.
Hablando de sus familias no se había hecho todo mejor. Después de
una buena carrera que tenía un montón de energía reprimida de Jimmy
fuera de él, el aullido definitivamente se sentía mejor. 49
Era casi como gritar su frustración con la ventaja adicional que tal vez
si Conner lo estaba buscando, pudiera escucharlo a través del lago, y un
aullido de lobo no parecía tan psicótico como un hombre solo gritando en
la lluvia.
Él se sacudió su abrigo de piel y corrió de vuelta a la casa. Él dejó sus
pantalones en el balcón, pero estaban todavía un poco húmedos por
haber estado fuera, e incluso cuando él estaba de vuelta en forma
humana, todavía olía como un perro mojado.
Jimmy entró a la casa. Estaba seguro que golpear no era necesario una
vez que no había nadie más en esta pequeña isla, y Ryan no había
cerrado la puerta.
No había ni rastro del hombre. Debe de haber ido a su habitación, pero
el lugar tenía el olor persistente de carne y especias. Ryan había estado
llamándolo para alimentarlo hace un rato, y ahora que Jimmy terminó de
correr alrededor, se sentía mal que había ignorado al hombre.
El primer lugar al que fue era el cuarto de baño para ducharse. La
lluvia y el viento no eran tan malos como lo habían sido ayer, pero aún
así era muy terrible. Tal vez el tiempo mejoraría lo suficiente que sería
capaz de remar de nuevo a la orilla. Había visto los remos en el barco, y
con su fuerza, sabía que podría hacerlo.
El baño le hizo bien. El agua caliente era el cielo contra los músculos
doloridos, pero aún había otro problema importante mirándolo de entre
sus piernas.
Jimmy miró hacia abajo en su polla. Estaba dura, la cabeza estaba
oscura y se estaba volviendo casi loco si no hacía algo al respecto.
― Nunca te rindes? ― Dijo Jimmy, pero luego cerró los dedos
alrededor del eje de todos modos, acariciando la longitud de su pene
como si Ryan estuviera en él. ― Oh, mierda ― gimió, y luego se volvió
boca arriba al spray.
Si él no estuviera mirando para su propia mano, entonces podía
imaginar que era la mano de Ryan tocándolo. El hombre estaba en la
ducha con él, desnudo y de rodillas. El agua mojaría el pelo negro
cuando la mano del hombre estuviera agarrando el pene de Jimmy. 50
Su boca estaba chupando suavemente sobre las bolas de Jimmy,
tirando de cada testículo en su boca uno a la vez antes de besar y lamer
su camino a través de las caderas y los muslos de Jimmy.
La mano de Jimmy se apretó alrededor de su polla mientras él semen
brotó por todo el azulejo de la ducha de Ryan.
Él gimió un poco, pero aparte de eso, contuvo el aliento, estaba seguro
de que no había hecho mucho ruido.
El agua de la ducha parecía mucho mayor, y oyó cuidadosamente
cualquier ruido que viniera del cuarto de Ryan.
No podía oír nada, pero eso podría ser porque no podía oír sobre el
agua.
Esto era una locura. No había sido un total dos días desde que abrió los
ojos, y ya no podía sostenerlo más.
Jimmy salió de la ducha y se secó, pero no se vistió.
La puerta de la habitación de Ryan estaba sólo ligeramente abierta,
entonces Jimmy pudo ver la luz en el interior, y ver que su compañero no
estaba durmiendo.
Yacía de espaldas, apoyado en las almohadas, con la copia de Gray
Anatomy en sus manos que Jimmy estaba hojeando antes.
Estaba en realidad un poco impresionado. Cuando vio la cosa, pensó
que tal vez era sólo para la referencia ocasional o lo que sea. No sabía que
Ryan realmente podía leerlo.
El primer pensamiento de Jimmy fue que debía golpear, anunciarse
incluso, y luego caminó, pero al ver a Ryan en la cama que sólo llevaba
una camiseta casual y shorts largos que expuso realmente hizo al lobo de
Jimmy aullar.
Eso, y que él podía olerlo. Podía oler a Ryan todo el camino hasta aquí,
y quería al hombre tan mal.
Él acabó de abrir la puerta.
Por supuesto, Ryan se dio cuenta cuando se abrió la puerta, pero sólo
apenas miró.
Entonces realmente miró, los ojos muy abiertos, casi como si fuera un 51
espectáculo o algo. Esto podría haber sido gracioso si Jimmy estaba
viendo la televisión en lugar de estar aquí con su polla dura y mirando
para él, todo el sentido que tenía para ir salió mal, porque el olor de Ryan
era tan abrumador.
Ryan finalmente se movió. Se sentó y encogió las piernas, pareciendo
increíblemente joven cuando agarró las sábanas y miró para él.
― Um qué, uh, ¿qué est{ pasando?
Jimmy dio un paso dentro, y luego otro, hasta que fue poniendo su
rodilla en el colchón y subiendo en el cuerpo de Ryan, pero él no tocó al
hombre. Todavía no. Control, tenía que mantener el control, y él iba a
mantener el control.
Podía oír el corazón de Ryan latiendo como loco. El hombre respiraba
con dificultad, pero el olor de su deseo también se hizo pesado en el aire.
No tenía miedo, pero eso no significaba que le gustaría que Jimmy
empezara a besarlo y desnudarlo sin decir una palabra.
― Dime que no quieres esto, ahora ― dijo Jimmy.
Ryan frunció el ceño un poco.
― Q-qué?
― Esto ― dijo Jimmy, y él le agarró la mano de Ryan y la puso en su
pene. Los latidos de Ryan se hicieron más fuertes, y Jimmy apretó los
dientes y luchó por mantener cerrados los ojos, cuando el placer era casi
demasiado.
La mano de Ryan estaba en su pene, así como lo había fantaseado todo
este tiempo, pero había más para hacer primero.
― Esto ― Dijo Jimmy. ― Dime que quieres que me vaya de aquí, que
no quieres que te folle hasta desmayar, porque si no lo dices, es
exactamente lo que voy a hacer. Esta es la única vez que te puedo
advertir al respecto.
Jimmy no había tratado con muchos seres humanos en una base sexual
antes. A partir de su comprensión, muchos de ellos eran increíblemente
distantes cuando se les daba un ultimátum así, mientras que a otros les
encantó ser dominados.
Ryan no pareció caer en una u otra categoría. Sus ojos se ampliaron un 52
poco, pero él no parecía asustado. Tampoco estaba gimiendo de
necesidad y de inmediato poniendo el culo en el aire como algunos
humanos lo hacen.
Él estaba excitado sin embargo, mucho si el olor era algo cerca.
Ryan tragó, y Jimmy podía oír su garganta corriendo antes de que el
hombre asintiera con la cabeza, casi tímidamente.
Jimmy no estaba teniendo nada de eso.
― Si lo quieres, entonces tendrás que decir esto. No quiero oírte decir
que no querías cuando llegue la mañana.
― Me veo como el tipo de persona que te acusaría de aprovecharse de
mí? ― preguntó Ryan, y su pecho subía y bajaba pesadamente ahora.
Jimmy sabía que si miraba hacia abajo, vería el contorno de su polla a
través de sus pantalones cortos.
― Dime que quieres esto, entonces ― respondió Jimmy.
― Joder, tus ojos se pusieron rojos ― dijo Ryan, y él se apoderó de la
parte de atrás de la cabeza de Jimmy y tiró de su boca para una beso
duro.
El resto del cuerpo de Jimmy descendió con él, y estaba completamente
sobre el hombre más pequeño, y no había nada suave sobre él ahora
cuando su lobo interior aulló y corrió dentro de su cabeza, como si Jimmy
no hubiera estado afuera corriendo hace menos de una hora.
No importa eso ahora, porque pronto lo resolvería cuando se diera
cuenta de que Jimmy les estaba dando lo que exactamente ambos
querían.
Ryan le devolvió el beso. Ryan tenía sus brazos alrededor del cuello de
Jimmy y el hombre sostenía a Jimmy tan apretado cuando él molió su
polla en la cadera de Ryan.
Jimmy cambió de posición, poniendo su polla y la de Ryan juntas y
empujando hacia adelante.
Ryan gimió contra la boca de Jimmy, abriendo sus labios para que
Jimmy pudiera empujar su lengua dentro de ese espacio caliente.
Jimmy acababa de tener un orgasmo hace unos minutos pero se sentía 53
como si no se hubiera tocado en un mes. Sus bolas dolían y estaban
apretadas y cada impulso hacia adelante de sus caderas sacó otro
gruñido obsceno de su boca y lo llevó más cerca del borde.
Ryan empezó a empujar contra el pecho de Jimmy, y él
inmediatamente se alejó, con miedo de que él se corriera muy fuerte y
Ryan estaba cambiando de idea.
El hombre no había, en realidad, dijo que sí, al final de cuentas.
Pero entonces no estaba empujando a Jimmy. Ryan estaba de repente
sacando su ropa con desenfreno.
― Tengo que quitarme esta ropa ― Ryan dijo, su voz jadeando y su
rostro sonrojado en un tono rosado que era hermoso en él.
Jimmy lo ayudó a desvestirse. Fue fácil, ya que no llevaba mucho, pero
fue una gran excusa para poner sus manos en todo el cuerpo del otro
hombre.
Jimmy dejó escapar un suspiro duro con la visión del pene de Ryan.
No era tan grande como el de Jimmy, o tan grueso, pero era de un buen
tamaño, más que bueno, y la cabeza de su pene estaba oscura, con el flujo
de sangre, y su eje prácticamente suspendido en sus pantalones cortos
cuando Jimmy los casó por sus caderas.
Llevó la mano a su alrededor y vio como la cabeza de Ryan cayó hacia
atrás cuando abrió la boca. Ryan cerró los ojos y gimió en silencio.
― Te ves tan malditamente lindo ― dijo Jimmy, y cuando agarró la
polla de Ryan, lo besó y mordió el lado del hombro y el cuello del
hombre, saboreando su piel y su lujuria. ― El hombre m{s hermoso que
he visto en mi vida.
― Por favor, c{llate y jódeme ― dijo Ryan, jadeando las palabras, pero
luego él se acercó a su mesa junto a la cama y tomó un poco de lubricante
y condones. ― Ponte eso.
Jimmy no pudo evitar sonreír.
― Me gusta que seas agresivo en la cama.
― Sí? ― Dijo Ryan, todavía sonriendo mientras atraía la boca de
Jimmy de nuevo a la parte superior de la suya para otro beso. ― 54
Entonces date prisa y llegar a él antes de que vuelva en mis sentidos.
Mierda, es una cosa de lobo que estoy caliente a tu alrededor?
Jimmy se rió y comenzó a abrir el paquete de condones.
― M{s o menos.
― Eso parece muy incómodo ― Ryan dijo, y entonces él cambió su
posición rápida e inesperadamente, antes de apoyarse y poner los labios
húmedos alrededor de la cabeza de la polla de Jimmy.
Jimmy estaba tan sorprendido por esto, que casi dejó caer el condón. Él
dejó caer el lubricante, pero afortunadamente estaba en la cama, y Jimmy
se puso de rodillas, jadeando mientras miraba al hombre entre sus
piernas.
― Oh, sí ― dijo, y él cambió su peso en las rodillas antes de poner la
mano detrás de la cabeza de Ryan, enhebrar los dedos por el cabello del
hombre. Tenía el pelo suave y Jimmy casi se sintió mal por agarrarlo tan
firmemente como lo hizo, pero no había mucho que pudiera hacer al
respecto, ya que casi perdió todo su control.
Él arqueó la espalda y el culo, empujando su polla más en la boca de
Ryan, mirando al grueso eje desaparecer de nuevo y de nuevo entre sus
labios, y Ryan sacó su boca hacia atrás y hacia adelante cuando no había
nada en el mundo que preferiría estar haciendo.
Era como ver el mejor porno del mundo. Ryan estaba allí abajo en sus
manos y rodillas con el culo al aire, sus labios apretados alrededor del
pene de Jimmy, y Jimmy se mordió el labio inferior, echó la cabeza hacia
atrás y gimió.
Él se iba a correr, pero no quería disparar su carga en la garganta de su
compañero. Eso sonaba divertido y todo, pero él quería reclamar al
hombre primero.
― Para, bebé ― dijo Jimmy, pero no pudo poner las manos para
empujar al hombre lejos. Le acarició la parte de posterior de la cabeza de
Ryan en su lugar.
Afortunadamente, Ryan era el tipo de hombre que era capaz de
detenerse cuando se le indicó.
El hombre lo miró, los hermosos ojos azules brillantes con la lujuria. 55
― Qué es? ― Preguntó.
Jimmy no pudo resistirse a dejar su mano deslizándose por el pelo una
vez más antes de agarrar el lubricante.
― Quiero correrme con mi polla en tu culo primero. Eso puede venir
después.
Ryan le sonrió, una sonrisa de confianza sexy que mostró lo blanco de
sus dientes. Jimmy estaba bastante seguro de que era la primera vez que
había visto una sonrisa como esa en la cara del hombre y su polla
palpitaba.
― ¿Cómo tú... Gah! ― Ryan gritó cuando Jimmy lo agarró y lo echó en
su espalda. Saltó un poco en el colchón, pero luego el cuerpo de Jimmy
estaba encima de él, el calor de sus cuerpos uniéndose.
Y Jimmy estaba besando al hombre de nuevo.
No necesitaba decirle a Ryan para hacerlo, o darle una señal de
cualquier tipo para que el hombre de buena voluntad separara las
piernas, dejando a Jimmy entre sus muslos.
Oh, mierda, era tan malditamente perfecto.
Jimmy abrió el lubricante y lo roció en la mano, y él acarició dos de sus
dedos con la sustancia resbaladiza.
Ryan lo miró con ansiedad, con la mano en su pene pesado todo el
tiempo.
― Dios, por favor date prisa ― dijo.
Después del primer día de bailar alrededor del otro, y oír lo mucho que
Ryan lo quería, escuchar a su compañero rogándole para joderlo era
música para sus oídos.
Jimmy movió sus dedos hacia abajo en la entrada del hombre, y
empujó contra el anillo de músculo.
Estaba apretado, y Ryan aspiró una fuerte bocanada de aire.
― Toma una respiración profunda y empuja hacia fuera ― Jimmy dijo,
viendo como sus dedos se hundieron más profundamente en la entrada
del hombre.
― Lo sé, es sólo.... joder, ha pasado un tiempo. 56
Jimmy se quedó helado.
― Te estoy lastimando?
― No, no, quema, pero me esperaba eso. Sólo puedes tener un poco de
calma conmigo?
Jimmy suspiró, agradecido de que él no había hecho daño al hombre
más pequeño. Había olvidado que este no era otro lobo con quien él
estaba tratando. Ryan no era un omega que podría manejar las cosas un
poco más ásperas. Él era un ser humano, y Jimmy tendría que trabajar
para no ser tan fuerte.
Se tomó su tiempo. Jimmy sacó los dedos y añadió más lubricante,
cuando pensó que lo necesitaba. Añadió un tercer dedo, gimiendo
cuando el culo de Ryan los agarró apretados cuando los empujó hacia
atrás y adelante, follando al hombre con los dedos.
Ryan gimió e inclinó sus caderas hacia ellos. Jimmy no pudo evitar
sonreír ante eso.
― Te gusta?
― Sí ― dijo Ryan, su mano todavía perezosamente acariciando su
pene.
Yo soy el único que estará aquí de nuevo.
― Creo que est{s listo ― dijo Jimmy, y sólo dijo eso porque él era el
único que no podía aguantar más.
Miró a su pene e hizo una mueca. Estaba de color oscuro y con fugas
pre-semen.
― Ponte el condón ― dijo Ryan, con la voz sin aliento y desesperada.
― Y entonces date prisa dentro de mí.
Jimmy no quería perder el tiempo diciéndole al hombre que no podía
darle ninguna enfermedad. Mucha gente se burlaba de eso, y Jimmy
sabía por experiencia que ninguna cantidad de garantías convencería a
un ser humano de otra cosa. Realmente, algunos de ellos se habían
ofendido absolutamente y le darían una patada fuera de la cama por
tratar de engañarlos.
No le gustaba la idea de que hubiera algo entre él y su compañero,
pero estaba demasiado excitado para cuidar eso, y sus dedos temblaban 57
cuando desenvolvió el paquete y rodó la cosa en sí mismo.
Fue una grata sorpresa cuando su polla se calentó casi
inmediatamente.
― ¿Qué es esto? ― preguntó Jimmy.
― Te gustó? ― Ryan preguntó, todavía sonriéndole.
― Claro que sí.
Jimmy le dio un beso y luego empujó la cabeza de su polla contra el
agujero de Ryan y se abrió paso dentro.
Se tragaron el gemido uno del otro. El beso fue húmedo y no muy bien
coordinado debido a esto, pero aún así fue increíble.
Enseguida las bolas de Jimmy tocaron el culo de Ryan, y él gruñó y
dejó un poco más de su lado salvaje, pero sólo un poco.
Se echó hacia atrás y golpeó hacia adelante, escuchando atentamente
los ruidos que Ryan estaba haciendo, lo que era difícil porque él sentía
que estaba a punto de implosionar.
Sin dolor. No sentía ningún dolor en la forma como Ryan agarró sus
hombros y el cuerpo, o los gemidos que hizo o incluso la manera misma
en que su rostro se contorció. Todo lo que Jimmy podía sentir viniendo
de él era placer.
― Jódeme, oh sí, jódeme ― Ryan imploró.
Jimmy obedeció. No había nada lento o sensual al respecto. Este no fue
el acto sexual, tanto como lo fue la lujuria animal salvaje y el celo, que
sirvió a los dos muy bien. El Lobo interior de Jimmy aulló, pero de
felicidad, esta vez, en lugar de dolor, y en la forma cómo las manos de
Ryan agarraron el culo de Jimmy.
En un pequeño extraño giro, comenzó a preguntarse lo que ellos
parecían, pero entonces incluso ese pensamiento fue desterrado de su
cabeza cuando Ryan comenzó a besar el lado del cuello de Jimmy, y
luego comenzó a presionar más besos mordaces a lo largo de su hombro.
Jimmy gimió, sus caderas bombeando más rápido, como si tuviera una
mente propia.
No había forma, no hay manera en el infierno que su compañero podía 58
saber lo que estaba haciendo, sobre cómo llevó al lobo de Jimmy salvaje.
Entonces Ryan estaba presionando su cara en ese lugar mientras
gemía, y sus manos rascaban la piel de la espalda de Jimmy.
No, no lo sabía, pero estaba bien. Jimmy dejaría al hombre morderlo
allí pronto, y Jimmy pondría una marca en su cuello también.
La cama debajo de ellos empezó a gritar y hacer ruido protestando con
la fuerza de los golpes de Jimmy. Ryan gimió incontrolablemente
mientras su culo apretaba alrededor del pene de Jimmy y semen caliente
salpicó a través de ellos.
Su olor, junto con cómo el cuerpo de Ryan estaba apretando sobre él,
era demasiado difícil de soportar, y Jimmy se corrió también.
Enterró su polla tan profundo como pudo dentro del otro hombre y se
dejó correrse. Su cuerpo se estremeció y espasmos del nudo apretando
los músculos habían trabajado en sí mismo, y luego cayó en el hombre
más pequeño, su compañero.
El sonido de su respiración era fuerte.
― Eso fue... Mierda ― dijo Ryan con una sonrisa.
Jimmy suspiró y sonrió.
― Aj{.

59
Capítulo Siete

― ¿Qué quiere decir que no quieres venir conmigo?


Ryan hizo una mueca al escuchar el tono en la voz de Jimmy cuando
limpiaba los platos del desayuno. Trató de no mirar para el dolor, o la ira
en sus ojos tampoco.
― No puedo ir contigo. No es así de simple.
― El infierno no lo es ― dijo Jimmy, gruñendo bajo en su garganta. Se
veía muy peligroso en ese momento. ― Si trabajas para un grupo de 60
vampiros que cazan y capturan a los de mi tipo, incluso los matan, como
si el tratado humano nunca se hizo. Estás diciendo que estás bien con
eso?
― Estoy diciendo que yo no puedo salir! ― Ryan agarró. ― Tú eres el
que debería estar saliendo, no yo.
Mierda. Esa fue una mala cosa que decir, y Jimmy parecía como si
hubiera sido golpeado.
Bueno, él no sería un buen lobo si no se recupera rápidamente, y la ira
estaba de vuelta.
― Entonces, ¿qué fue la noche pasada? Eso no significó nada para ti?
Era todo para él.
― Lo hice porque entraste en mi habitación desnudo e implorando por
ello. Los dos somos adultos y no tenemos que estar enamorados para
querer tener relaciones sexuales con el otro.
Ryan trató de salir en ese momento, él realmente lo hizo, pero Jimmy
lo agarró por el hombro, de modo más o menos que su corazón saltó
cuando fue empujado contra la pared más cercana.
En un segundo, estaba con miedo, pero no había nada violento en los
ojos de Jimmy cuando el hombre lo miró.
― Yo no te creo ni por un segundo ― dijo Jimmy. ― En realidad, sé
exactamente lo que está pasando y lo que estás haciendo.
Todo el cuerpo de Ryan estaba frío, como si toda la sangre que tenía
acababa de ser drenada de él.
― Ya sabes?
Los ojos de Jimmy eran duros.
― Vives en esta pequeña isla en el medio de un lago. Est{s aislado aquí
y trabajas para vampiros. No hay manera en el infierno que voy a creer
que lo haces por voluntad propia.
Él no lo sabía. Ryan dio un suspiro de alivio, porque Jimmy no sabía lo
que realmente estaba pasando.
― ¿Qué pasa si yo estoy aquí por elección?
Jimmy señaló la imagen de la hermana de Ryan. 61
― Me vas a decir que la dejaste atr{s para estar aquí porque quieres?
― Todavía sigo en contacto con ella. Ella sabe donde estoy.
― Est{s aquí a causa de ella? ― Jimmy le preguntó, y debe haber sido
algo en sus ojos que le dijo que estaba en el camino correcto, porque él
asintió con la cabeza. ― Es eso, ¿no es así? Ellos le harán daño o tomarla,
o hacer cualquier cosa si no tratas al compañero del jefe del nido.
― No voy contigo y eso es todo lo que diré sobre eso! ― Ryan rompió,
y él empujó a Jimmy fuera de él.
Sentió como si empujara contra una pared de ladrillos, pero Jimmy no
estaba forzándose en Ryan. Dio un paso atrás.
Ryan no se entendía realmente a sí mismo últimamente. Él estaba
intencionalmente empujando al hombre lejos, enseguida, estaba
decepcionado cuando Jimmy se retiró.
― Yo saldré a correr ― Jimmy murmuró, y luego se volvió y salió por
la puerta.
Ryan lo vio alejarse. El chico fue probablemente a cambiar a su lobo y
correr para aliviar más la tensión.
Ryan quería llamarlo. Abrió la boca para hacer precisamente eso, para
decir que lo sentía, pero la puerta cerrándose lo hizo cerrar su boca de
nuevo.
Probablemente era mejor dejar que Jimmy saliera e hiciera lo suyo con
su lobo. Eso pareció ayudarlo cuando lo necesitaba.
Ryan volvió a su habitación y verificó sus mensajes de Gerard. No
había ninguno hoy.
Ryan suspiró. Tal vez sólo estaba siendo un narcisista o algo. Era
halagador tener a alguien en la casa que lo cuidaba lo suficiente para
empujarlo contra la pared y exigir que sea fiel a sí mismo, y la situación
en el momento, pero había sido una conversación de miedo, no porque se
sentía amenazado por el tamaño de Jimmy.
El hombre estaba en lo cierto. Él golpeó justo en la cabeza. Ryan estaba
aquí por su hermana y nada más. Él era tan prisionero aquí como Jimmy
era, aunque Jimmy no sabía eso, y esperaba que nunca lo hiciera. 62
Abrió las cortinas y miró por la ventana. La lluvia había ralentizado
hasta el punto en que sólo se veía como una lluvia normal, dura. En uno
o dos días, la tormenta podría pasar por completo. Debido a esto, él fue
capaz de ver claramente cuando Jimmy, en su forma de lobo, corrió, justo
en el borde del agua, dando vueltas alrededor de la pequeña isla.
Después de ver a Jimmy por ahí, Ryan se sintió lo suficientemente
seguro para tomar el teléfono celular y enviar a su hermana algunos
textos. Él no debería comunicarse con ella con este teléfono, pero lo que
sea. Gerard había eliminado su satélite.
Sólo esperaba que estuviera en el almuerzo. Quería hablar con ella.
Ella envió una respuesta de vuelta en dos minutos.
Qué pasó?
Ryan suspiró antes de empezar a escribir de nuevo.
Tengo noticias para ti. Alguien aquí en mi isla. Hablando de
sacarme. Él es un lobo y no gusta de vampiros.
Hubo una pausa antes de responder.
Él puede hacer esto?
Sabía lo que quería decir.
Yo creo que sí. Tiene una manada. Él sabe que me cambié por ti, pero
nada más.
Ryan respiró hondo antes de continuar.
Me gusta mucho, y yo le gusto. Él no me quiere aquí.
Su respuesta fue instantánea.
Adelante.
Es un riesgo, dijo. Él quería que ella supiera que todo podría ir mal
antes de que lo hicieran. Infierno, que era un riesgo enviarle mensajes de
texto por este teléfono. Ryan estaba aterrorizado con la posibilidad de
que Gerard pudiera leerlo.
Lo sé, hazlo de todos modos, si dices que te podría ayudar. Eso es
mierda. No me gusta que estés allí. Escapa con él, si es posible.
Ella estaba enviando sus textos rápidamente. Él ni siquiera tenía la
oportunidad de escribir antes de que ella lanzara otro.
Quién es él? 63
Él le dijo el nombre de Jimmy, y el nombre de su líder de manada,
Mason, y porque Ryan no tenía Internet para comprobar, le pidió a ella
para buscar a la manada para asegurarse de que estaba registrada. Lo
último que quería era escapar de un nido oscuro de vampiros, sólo para
caer en manos de una manada de lobos oscuros.
Ella volvió a él rápidamente.
Parece legítimo. Muy rico también. Qué vas a hacer?
Ryan suspiró y se frotó la cara antes de contestar.
Voy a pensar en ello. No quiero arriesgarte. Tenemos unos días más
para decidir antes de que los vampiros vuelvan por él.
Ok, fue su respuesta, y las sonrisas realmente hicieron a Ryan sonreír
antes de empezar a enviar mensajes de texto de nuevo.
Me tengo que ir. no me envíes textos a este teléfono, te contacto
cuando sea seguro. No quiero que Jimmy lo oiga vibrar.
Su última respuesta fue: Ok.
Ryan suspiró y puso de nuevo el teléfono debajo de la cama.
Tenía que descansar y pasar las manos por el pelo.
Insano. Eso era lo que era. Estaba loco por querer correr este riesgo
cuando ella estaba bien donde estaba. Ella estaba de vuelta en la escuela,
estaba viendo a su terapeuta, y no estaba en las manos de personas que
querían usarla.
Y a pesar de todo eso, Ryan estaba pensando en arriesgarlo todo por
un hombre al que apenas conocía.
Apenas conocía, pero que le gustaba mucho. Realmente, realmente le
gustaba.
El olor de Jimmy todavía estaba en la cama con Ryan. Lavó las sábanas
esa mañana, pero podía oler a Jimmy en todo el tejido de todos modos,
como si él no hubiera hecho nada.
Se dio la vuelta y puso su cara en una de las almohadas, respirando el
olor del otro hombre.
Y a pesar de haber tenido el mejor sexo de su vida la noche pasada, la
polla de Ryan se endureció de nuevo después de sólo respirar ese olor. 64
Quería llorar. Ryan no había llorado en años, pero él realmente quería
ahora, y se dio cuenta de que su rostro estaba enterrado en una
almohada, y en la intimidad de su habitación, sería bueno simplemente
dejar que suceda, entonces lo hizo.

Ryan casi esperaba que Jimmy entrara en su habitación después de su


carrera, así como la noche anterior. Él no lo hizo. Ryan pensó que tal vez
vendría a él esa noche. Tampoco sucedió. En realidad, Jimmy no habló
con él ese día, o incluso el día siguiente. Jimmy volvió a sus aullidos
tristes por la noche, que sólo hizo la depresión que Ryan estaba tratando
peor.
Su tiempo juntos se estaba acabando, y ellos no estaban siquiera
hablando. Ryan debería haber hecho un mejor trabajo de empujar a
Jimmy más de lo que pensaba, y aun cuando trató de decirse a sí mismo
que era lo mejor, no podía creerlo.
Y asustó el infierno fuera de él cuando Jimmy entró en la casa un día
con los dos remos para el barco.
― Eso estaba en mi cobertizo ― dijo Ryan, tratando de no dejar que la
visión de esas cosas asustar el infierno fuera de él.
Jimmy se encogió de hombros.
― La puerta estaba abierta, y yo los vi.
― Yo no soy lo suficientemente fuerte como para que remar a la playa.
Esos son para emergencias ― dijo Ryan.
― Voy a ser lo suficientemente fuerte. Luego. Puedo sentir mi fuerza
de regreso, y la lluvia ha cesado casi por completo ― dijo moviendo la
cabeza para la ventana.
Era sólo una calma llovizna ahora, y una niebla había rodado dentro.
Aparte de eso, la tormenta había pasado. Ryan quería que la tormenta
pasara por aquí también.
― Voy a hacer una tentativa mañana. Todavía quiero que vengas 65
conmigo.
Ryan miró hacia otro lado lejos de los remos e incluso Jimmy. Su
mandíbula estaba definida y sus ojos eran duros.
Ryan tragó, y le dolía la garganta.
― Yo no... yo te dije...
― Entiendo que est{s tratando de proteger a tu hermana ― dijo
Jimmy. ― Si yo tuviera a mi hermano, iba a hacer todo lo posible para
mantenerlo a salvo, también, por lo que entiendo, y cuando salgas de
aquí, me pondré en contacto con Mason, le diré lo que está sucediendo, y
vamos a encontrarla. Vamos a mantenerla a salvo y a ti también. No
tienes que quedarte aquí. Puedes venir conmigo.
Ryan tenía ganas de llorar de nuevo. Tenía la garganta matándolo por
dentro de esa forma que precede a las lágrimas, y él no podía recuperar
el aliento.
Sentía que estaba cayendo cuando Jimmy corrió alrededor del balcón y
agarró sus hombros. Esta vez fue para sostenerlo, en lugar de empujarlo
en una pared.
― Todo est{ bien. Querido, est{s bien ― dijo Jimmy.
― ¿Quieres decir estas cosas? ¿Hablas en serio? ― Preguntó Ryan, y
ahora él era el que sostenía los brazos de Jimmy. Estaba desesperado y
salvaje, de repente, como si, si soltaba a Jimmy, el hombre desaparecería
frente a él.
Jimmy le sonrió.
― Lo digo en serio. Por supuesto que quiero decir eso. Yo nunca,
nunca quiero que nada ni nadie te haga daño, o intente mantenerte
encerrado aquí. Te amo.
Jimmy podría haber puesto la mano dentro de los pulmones de Ryan y
llevarse todo el aire que tenía y llevárselo lejos por el efecto que esas
palabras tuvieron sobre él.
― Ya sabes? ― Ryan silbó.
― Sí ― dijo Jimmy, una sonrisa de esperanza en su rostro, y se le
ocurrió a Ryan que el hombre estaba esperando que lo dijera de vuelta.
Como si él ya lo sabía. 66
Oh Dios.
― Pero yo no soy... Tú no me conoces. No sabes las cosas que hice. No
me puedes amar ― dijo Ryan, un poco m{s que la desesperación
ganando.
― Por supuesto que puedo. ¿Por qué dices algo así?
― Por qué no valgo la pena ― dijo Ryan, simplemente escupiendo las
palabras que conocía eran ciertas.
Y así, todo estaba en silencio, y Ryan se odiaba a sí mismo por dejar
una enorme inseguridad como esta salir.
Jimmy lo agarró por la parte posterior de la cabeza y el cuello.
― Sí, que vales la pena ― dijo, y atrajo a Ryan adelante para un
profundo y persistente beso.
Y Ryan lo quería tanto que él no luchó más. Después de unos pocos
segundos de estar allí en shock total, sintiéndose como si no tenía idea de
lo que estaba sucediendo con el mundo, él envolvió sus brazos para
arriba y alrededor del cuello de Jimmy y le devolvió el beso.
Fue el quinto día, y Ryan tenía hecha su mente.
Acabaron de vuelta en la cama varias veces durante el día, el lobo de
Jimmy todavía no estaba saciado, incluso cuando Jimmy rodó a su
compañero de lado y perezosamente lo follaba por quinta vez en el día.
Ryan se rió cuando, después de la segunda vez, Jimmy lo había
agarrado por el tobillo y tiró de él hacia adelante a otro lugar.
― Los hombres lobo no se cansan? ― Preguntó, con una alegre
sonrisa.
Jimmy luego lo besó.
― Te ríes ahora, sólo tienes que esperar hasta que esté reivindic{ndote
todo el camino hasta la medianoche.
Los ojos de Ryan se habían convertido cómicamente en amplios.
― Hablas en serio? 67
Jimmy comenzó a mostrar a su compañero cómo de serio hablaba.
Tuvieron sexo duro y rápido al principio, como su primera vez juntos
en la cama, pero ahora, el resto fue lento y suave para el bien del cuerpo
en curación lenta de Jimmy. Sólo estar con un lobo fue suficiente para
que el pene de Ryan se ponga duro cuando el cuerpo de Jimmy liberaba
ciertos perfumes que los llevarían a aparearse, pero todo necesitaba de
tiempo para recuperarse.
Habían terminado con los condones, pero Ryan no parecía
preocuparse. Jimmy todavía tendría que explicar al hombre que estas
cosas no hacen nada con un lobo de todos modos. Para un ser humano,
debería funcionar tal vez el noventa y nueve por ciento del tiempo. Para
un lobo, ese número fue quizás el cincuenta por ciento en un buen día.
Ahora él estaba muy ocupado empujando lentamente su miembro en
el estrecho agujero de Ryan. Él tenía su brazo envuelto alrededor del
pecho del hombre más pequeño, y Ryan tenía un apretón sobre brazo de
Jimmy que probablemente dejaría más marcas cuando terminaran aquí.
― Oh, mierda ― Ryan gimió, echando la cabeza hacia atr{s, donde el
cabello suave tocó el pecho de Jimmy.
― Te gusta eso, ¿verdad? ― Jimmy dijo, su voz retumbante con placer.
Ryan dejó escapar una especie aliento de risa y miró por encima del
hombro. Tenía el rostro encendido, y él parecía estar bien.
― No derrames tu propio ego allí atr{s.
Jimmy se rió y se inclinó para atrapar los labios de color rosa. No pudo
resistirse.
Él sabía cuando su compañero estaba cerca. Podía sentirlo cuando el
ritmo cardiaco y la respiración de Ryan estaban acelerando. El agujero
del hombre apretó alrededor del pene de Jimmy, y lo mismo hizo el
apriete de manos.
― Jimmy, joder, estoy cerca ― dijo Ryan enseguida gimió de nuevo.
― Lo sé ― dijo Jimmy, y él presionó sus labios en el cuello de Ryan y
chupó la piel allí cuando aceleró el ritmo de sus empujes. Las bolas de
Jimmy estaban apretadas y subiendo en su cuerpo. Él también estaba casi
allí. El olor de Ryan y la reacción de su cuerpo estaban haciendo esto con 68
él.
Jimmy extendió la mano y cerró los dedos alrededor del pene de Ryan,
bombeó duro sus impulsos.
― ¡Oh, Dios! Mierda! ― Ryan gimió, y luego el olor de su esperma
estaba en el aire cuando su cuerpo se tensó alrededor del eje de Jimmy,
eso que fue suficiente para arrancar prácticamente el orgasmo de Jimmy
fuera de él.
Jimmy gritó en voz alta, y luego suspiró cuando su olor estaba dentro
de su compañero, reclamándolo de nuevo.
Jimmy se derrumbó, abrazando a su compañero en su pecho, y él
pensó por primera vez que esta noche podría ser completa.
Los ojos de Ryan estaban cerrados, pero él tenía una sonrisa en su
rostro soñoliento.
― No estabas bromeando sobre la parte de no parar ― dijo.
Jimmy se echó a reír y le dio un codazo al hombre.
― Te dejé que pararas. Ya sabes, por la comida y esas cosas. ― Ryan lo
empujó hacia atrás, con una risa suave en la boca.
― El cuarto de baño no cuenta. Un hombre tiene que ponerse de pie
para eso, incluso si lo haces, lobo o no.
― Mmm ― Jimmy dijo evasivamente, pero tendió la mano para las
mantas que habían empujado a la parte inferior de la cama, y las puso
arriba y sobre sus cuerpos.
Jimmy pensó en morder el hombro de Ryan y darle la cicatriz de
apareamiento, pero luego miró al hombre que estaba casi dormido, y
pensó que iba a preguntarle acerca de poner una cicatriz permanente en
él cuando estaba completamente despierto.
Jimmy extendió la mano hacia la lámpara e hizo clic, entonces, curvó el
cuerpo protector alrededor del otro hombre.
― Eres muy caliente ― Ryan dijo, moviendo su cuerpo y
acurrucándose más cerca.
Jimmy sonrió y besó el pelo de Ryan.
― Sí, tendemos a ser un poco más calientes. 69
― Los vampiros son fríos.
Jimmy se quedó inmóvil, pero se dijo a sí mismo que no se preocupara.
Ryan era un curandero, y trabajó con los vampiros. Por supuesto, tenía
un conocimiento de primera mano de cómo fríos las sanguijuelas eran.
A menos que ellos también lo hubieran usado para el sexo. Él se
estremeció ante la idea y besó el hombro de Ryan.
― Jimmy?
― Sí ― preguntó Jimmy, m{s alerta cuando el hombre debajo de él
habló las palabras somnolientas.
Ryan volvió a respirar.
― Lo siento.
― Disculparte? Por qué?
Ryan no respondió. Él sólo respiró de forma profunda y fácil como las
personas hacían cuando finalmente dormitaban.
Jimmy escuchó a su corazón y pulmones. Definitivamente dormido.
¿Por qué podría haber estado disculpándose? Por la discusión? Por ser
terco todo este tiempo? En cualquier caso, ahora que Jimmy había
convencido al hombre para salir con él, no podía haber estado más feliz.
Besó a Ryan en el hombro de nuevo, exactamente donde él planeaba
poner su cicatriz de apareamiento. Se preguntó si a Ryan le gustaría
morderlo, entonces Jimmy cayó haciendo planes adormecidos para
convencer a su compañero humano que morder el hombro hasta sangrar
podría ser una buena cosa.

70
Capítulo Ocho

Jimmy soñaba con abejas. No sabía por qué, pero los sueños nunca
tuvieron sentido tampoco. Solo apenas algunos, y él no podía verlos.
― Maldita sea, esto es tan aburrido, ― dijo.
Ryan le agarró la mano y le sonrió. Todavía no había visto a Ryan en el
sueño con él hasta ahora.
― Sólo ignóralo. Quédate conmigo.
Jimmy sonrió, y él quería estar con el otro hombre. Fue bueno aquí. El 71
cielo era azul y la hierba era suave y verde. Sin lluvia y sin tristeza aquí.
Incluso podía ver las casas de su manada a la distancia.
Pero el maldito sonido simplemente no se detendría.
Jimmy se volvió para encontrar el ruido, y cuando se volteó, Ryan se
había ido.
Jimmy abrió los ojos, y él tuvo una fracción de segundo de confusión a
veces de la que se tiene después de despertarse, pero cuando se dio la
vuelta, el sol entraba a raudales por las ventanas, aunque una versión del
sol desvanecida. Probablemente todavía estaba brumoso fuera, pero
había dejado de llover. Él no podía oírlo más.
Mejor que eso, Ryan estaba profundamente dormido en la cama junto a
él.
Jimmy sonrió mientras miraba al hombre. Se veía tan absolutamente
tranquilo y sin preocupaciones, incluso si había un ceño fruncido suave
en su cara.
Jimmy se inclinó para darle un beso en la frente, pero él no se despertó.
Eso era bueno, Jimmy se dio cuenta de que podía tomar un baño y ser el
primero en ponerse de pie para hacer el desayuno para un cambio, pero
luego el zumbido familiar estaba de vuelta.
Jimmy tenía todo el cuerpo tenso cuando él buscó alrededor por la
fuente del ruido. Era débil y apagado, pero su audición sensible lo estaba
recogiendo. Qué fue eso?
Parecía de nuevo, y entonces Jimmy se dio cuenta de donde estaba
viniendo. Se volvió y llegó bajo el colchón suave y sintió su mano
alrededor, tratando de evitar los resortes irregulares y la madera debajo
del colchón.
Su mano tocó algo pequeño y de plástico, y estaba vibrando en su
mano.
No sabía exactamente lo que él pensó que esto iba a ser, pero
definitivamente no fue el único que hizo.
Era un teléfono celular, uno de esos viejos teléfonos plegables que
tenían retirada la antena y tenían la forma de una especie de huevo. La 72
cosa parecía que era de hace diez o veinte años.
La pequeña pantalla delante parpadeaba. Cada vez que lo hacía
demostró que había un nuevo mensaje, y el símbolo de la batería aparecía
débil.
Jimmy miró a Ryan, que todavía estaba durmiendo como si había sido
noqueado. Ryan le había dicho que no tenía teléfono móvil. ¿Por qué lo
estaba escondiendo?
Jimmy lo abrió. El primer conjunto de mensajes eran de un hombre
llamado Gerard.
Cómo está el asunto? Me estoy poniendo impaciente de esperar a
que satisfagas tus necesidades. Mi compañero está teniendo dolores de
estómago de nuevo y te necesito de vuelta aquí pronto.
― ¿Qué carajo? ― Jimmy dijo, y luego miró de vuelta a Ryan, al darse
cuenta de que tenía que estar en silencio.
Decidió levantarse, con la necesidad de utilizar los botones en lugar de
una pantalla táctil, para que pudiera leer esta discusión de mensajes
desde el principio.
Lo que vio hizo primero su aliento desaparecer, y luego su corazón
hundirse antes de que él comenzara a latir muy rápido. Y la ira se
estableció.
Todo aquí era... “incriminatorio" sería una buena palabra para
describirlo.
Ryan le había mentido. Él no estaba ayudando a Jimmy a mejorar para
que pudiera escapar. Estaba ayudando a conseguirlo mejor para que
estas sanguijuelas, Gerard entre ellos, pudieran usarlo como un esclavo
de sangre o algo así. Iban a tirarlo en una de sus arenas de vampiros para
verlo pelear y matar a otros alfas.
Y Ryan sólo quería a Jimmy para el sexo?
Él negó con la cabeza. No. Eso no tiene ningún sentido. Ryan había
estado evitándolo en un primer momento. No quería que Jimmy lo
tocara.
A menos que hubiera sido un acto? Jimmy no quería pensar en Ryan, 73
un hombre que creía que era su compañero, pudiera ser tan buen
mentiroso, y podría haber estado simplemente fingiendo ser tímido
cuando todo este tiempo él estaba atando a Jimmy juntos, pero él sólo
había conocido al hombre durante unos pocos días.
Si Ryan había estado fingiendo, entonces había hecho un trabajo
increíble. Empujando a Jimmy a distancia, mientras que al mismo
tiempo, dejando toques suficientes, permitiendo el primer beso, y luego
su olor estaba por todo el lugar, por lo que no había duda que él había
estado en la lujuria.
Jimmy rodó a través de los mensajes no leídos, todos los que Jimmy
había entrado mientras él dormía.
Gerard tenía dudas sobre su compañero, por lo que la historia acerca
de ser un sanador era por lo menos cierta.
Espero que la inyección siga trabajando en el lobo. Estoy enviando a
un hombre esta noche para recuperarlos, así que termina tu tiempo con
él ahora.
Jimmy tenía problemas para respirar, y le temblaban las manos. Su
agarre en el teléfono era apretado, tan apretado que el plástico se rajó y la
pantalla se apagó. Algunos de los botones todavía saltaron.
Ahora estaba más nervioso. Mierda, mierda, mierda! Él podría haber
utilizado la maldita cosa para ponerse en contacto con Mason! Pero
debido a que estaba tan enojado lo destruyó.
Jimmy miró a Ryan. Su primer instinto fue agitar al hombre
despertándolo y confrontarlo, exigiendo saber lo que diablos estaba
sucediendo.
Su mano seguía temblando alrededor del teléfono roto. No. Él no lo
podía despertar. Todavía no. Estaba muy enfadado y se sintió muy
traicionado. Lo último que quería era empezar a gritar para el hombre, o
su lobo salir y asustarlo. No creía que su lobo se convertiría en violento
con Ryan, no cuando vio al hombre como su compañero, pero él
realmente quería la oportunidad? 74
Y si Ryan le mintió? Estuvo mintiendo todo este tiempo, por no tener
un teléfono celular, acceso al mundo exterior, y lo que Jimmy estaba
haciendo aquí, y Jimmy no podía decir, por lo que fue lógico que él no
sería capaz de decir si estaba mintiendo de nuevo.
Cristo, inyectaron a Jimmy con algo. Probablemente, un veneno de
plata suave. Había oído hablar de él. Ryan probablemente había dado
una dosis a Jimmy. No es de extrañar que le estaba tomando un largo
tiempo para recuperarse.
Ryan le había inyectado veneno de plata!
Jimmy se levantó de la cama y agarró su ropa. Su ropa prestada que
Ryan le había dado. No podía estar mismo en la cama con el hombre. Ni
siquiera podía mirarlo. Jimmy tenía que comprobar algo, antes de llegar
a su conclusión final.
En silencio salió de la habitación, y luego de la casa, caminando en sus
pies descalzos hasta el lugar donde había encontrado el satélite roto.
Era mucho más fácil comprobar ahora que ya no estaba lloviendo. Las
manchas solares fueron incluso tratando de romper a través de la niebla,
pero iban y venían.
Miró el metal y el plástico, y era difícil distinguir los olores debido a
toda la lluvia. Su propio olor estaba allí, muy vagamente, pero bajo había
algo más, algo que no era el suyo o de Ryan, y no humano.
Estaba seguro de eso, más que seguro, era el olor de un chupasangre, y
el metal deformado, sólo puede significar que uno de los vampiros había
dejado caer la cosa para evitar que Jimmy tratara de contactar con
alguien.
Ellos iban probablemente a sustituirlo por otra cosa agradable y mejor
para el uso de Ryan una vez que Jimmy fuera llevado de aquí, y en su
rabia, y lanzó el satélite en el agua.
Flotó, pero también se hundió rápidamente, y Jimmy todavía no estaba
feliz o aliviado. Quería golpear los árboles y rasgarlos a todos hacia
abajo. Quería gritar y rugir y gritar.
Ryan le había mentido. Ryan le había mentido!
Jimmy cayó de rodillas y tomó unas cuantas respiraciones profundas. 75
Él estaba teniendo dificultad para pensar y todo estaba caliente.
Miró el barco. Él puso los remos dentro durante uno de los descansos
de maratón sexuales, en los que él no quería pensar más.
Podía hacerlo. Él era lo suficientemente fuerte para remar su camino de
regreso a la orilla. No era como si estuviera en un océano ni nada,
entonces todo lo que tenía que hacer era elegir una dirección y la tierra
eventualmente vendría. Podía llegar allí, cambiar a su lobo, y encontrar
los olores que necesitaba, y volver a casa esta noche.
Pero podía dejar a Ryan atrás? El hombre lo había traicionado, pero
todavía se aparearon.
Así, sólo era cuestión de Jimmy si él aceptaría un compañero que trató
de engañarlo así, que lo usaría antes de enviarlo a los vampiros.

Ryan salió lentamente de su sueño nebuloso, estirando sus piernas bajo


las sábanas. Estaba en la cama, las sábanas eran suaves y calientes, y se
sentía muy bien.
Se volvió, esperando ver a Jimmy todavía en la cama, ya sea
durmiendo o descansando con uno de los libros que Ryan le había dado,
pero él no estaba allí.
Al principio todo lo que Ryan vio eran las sábanas sucias y la
almohada arrugada, pero era lo único que estaba en el almohada que
hizo todo dentro de su cuerpo colgar.
El teléfono estaba en las sábanas, y estaba abierto y parecía que se caía
a pedazos.
Ryan lo tomó, de pronto despertó cuando intentó conectarlo y hacer
que funcione.
Su corazón estaba acelerado.
― Joder, no, no, ― dijo. ¿Qué había visto Jimmy? Ser{ que vio algo? Ya
era lo suficientemente malo que había visto el teléfono cuando Ryan le
había dicho que no tenía uno. Gerard, el idiota, debe haber estado
enviando mensajes a Ryan de nuevo y él había despertado a Jimmy. 76
― Oh Dios ― Ryan gimió y se arrojó de la cama, agarrando sólo un
par de pantalones para usar cuando corría para salir de su habitación. ―
Jimmy? Jimmy? ― Gritó, pero no hubo respuesta.
Si Jimmy había leído algunos de los mensajes de Gerard, o incluso las
respuestas de Ryan, enseguida, acabó, no había manera que el hombre lo
perdonaría por eso.
Y definitivamente no estaba en la casa tampoco.
Joder, el barco! Jimmy había dicho que iba a salir con Ryan por la
mañana, pero si se iba ahora?
Ryan salió corriendo por la puerta principal, cerca de sacar la cosa de
las bisagras mientras corría fuera del muelle.
No esperaba llegar a tiempo, y no lo hizo. La única cosa que había
hecho a tiempo fue ver que Jimmy estaba en el lago en la distancia, los
dos remos en la mano cuando él miró atrás y remó lejos.
Ryan corrió hacia el muelle, corriendo todo el camino hasta el borde
antes de que él se viera obligado a parar.
― Jimmy ― llamó.
Jimmy volvió la cabeza, y a pesar de que estaba a distancia, Ryan aún
podía ver la expresión de su rostro, y aplastó su corazón.
Jimmy se estaba burlando de él, la más cruel, más desagradable mirada
que Ryan había visto en su rostro. Nunca había pensado que Jimmy
podría enfrentarlo así. Siempre parecía tan ligero y suave, para a un
hombre lobo gigante.
Ryan no tuvo que llamar a sus excusas o explicaciones. La mirada en la
cara de Jimmy dijo suficiente. Él vio todo lo que había que ver, y así se
hizo. Él se iba, y Ryan no podía hacer nada al respecto, sino estar allí y
ver que se marchaba. No tenía energía para moverse, y sus miembros se
sentían como si estuvieran hechos de piedra cuando su corazón
realmente se rompió.
Jimmy miró por encima del hombro y comenzó a remar de nuevo, y
Ryan apenas observó. Él no se movió.
77
Capítulo Nueve

Ryan se quedó exactamente donde estaba hasta que Jimmy estaba


fuera de vista. Hasta mucho más tarde. Sus miembros eran pesados y él
no quería moverlos. Había visto al hombre que amaba irse lejos de él,
probablemente para no volver jamás, y, probablemente, odiándolo más
allá de toda creencia.
Lo único que parecía hacer la picadura peor es que Ryan se había
finalmente liberado. Él estaba dispuesto a admitir que tenía sentimientos 78
por el hombre, y quería ir con él, para estar con él.
Ahora se había ido, y fue como si nunca hubiera estado aquí en todo.
Con el tiempo, cuando Ryan se despertó del estupor en que había
caído, se dio cuenta que estaba de rodillas, sentado en medio de la
madera húmeda. La niebla se había ido, era mediodía, y él estaba helado.
Se estaba haciendo un poco tarde en el año para que estuviera sin
camisa, y él ni siquiera había notado el frío. A pesar del frío intenso en el
aire, medio que Ryan no quería dejar el muelle, tampoco. Incluso bromeó
con la idea de tirarse en el agua. El frío o lo despertaba de la depresión en
que había caído, o lo mataría.
Cualquier opción parecía muy buena en este momento.
Al final, Ryan se estableció para levantarse. Sus rodillas estaban
doloridas y las piernas temblando después de pasar todo ese tiempo en la
misma posición, incluso después de varias horas, no quería alejarse del
agua, de la posibilidad de que Jimmy podría decidir regresar a él.
No. Eso no iba a suceder, entonces no debería estar perdiendo el
tiempo aquí esperando por él.
Aún así, fue como una derrota, cuando le dio la espalda para el agua, y
es entonces cuando el choque se disipó y se echó a llorar.
Estaba empezando a darse cuenta de que era muy emocional cuando
se trataba de Jimmy, y cuando llegó a donde estaba más caliente, y cerró
la puerta detrás de él, se dejó caer contra ella y realmente dejó todo fuera.
Era un desastre cuando se deslizó al suelo, agarrándose su cabello
mientras lloraba. Cristo, la expresión del rostro de Jimmy cuando vio a
Ryan en el barco fue lo peor, e hizo que las lágrimas vinieran más rápido
y el pecho doliera aún más.
Extraño cómo la vida siempre le dio un puñetazo en la cara así.
Primero él cree que conoce a un hombre que necesita ayuda en el bosque,
entonces se enamora de él, pensando... ¿qué? Que ellos iban a cabalgar
hacia el atardecer y vivir felices para siempre o algo? Era tan maldito
estúpido. El mundo real no funciona de esa manera. No existía un final
feliz. Jimmy no iba a volver a él, declarando que había cometido un error 79
y amaba a Ryan tanto que no se preocupaba por los mensajes que había
leído en el teléfono. Ellos no se iban a besar y los créditos no iban a rodar.
Ryan iba a hacer los cinco años restantes de su tiempo, y él iba a tener
que esperar que al final de esos cinco años, no estuviera tan roto y fuera
de contacto con el mundo real que no sería capaz de sobrevivir en él,
cuando volviera a él de nuevo.
Tal vez incluso podría encontrar a Jimmy cuando los cinco años
terminarían. Él le podría enviar un correo electrónico o algo así,
explicando lo sucedido y decirle que lo sentía mucho por todo esto.
Y no estaría absolutamente molesto cuando se enterara que Jimmy
había encontrado a alguien mejor esta vez tampoco. Ni por eso, porque
cinco años fue demasiado tiempo, y este dolor que Ryan estaba sintiendo
tenía que irse lejos entonces.
Él esperaba.
Pero ahora él se estaba muriendo.
Ryan acabó de comenzar a hacerse algo de comer, porque necesitaría
mantenerse ocupado. Él estaba constantemente limpiándose la cara y
usando el suministro de toallas de papel en su intento de secarse la cara y
las manos.
Era una batalla perdida.
Incluso cuando terminó de cocinar, no estaba realmente listo para
comer, y él se limitó a mirar su comida, y el olor de eso lo hizo ir
corriendo al baño a vomitar un par de veces.
Porque él estaba corriendo con tan poca comida en el refrigerador, y
ahora no tenía barco para ir y buscar más, tuvo que envolverla y dejarla a
un lado. Pasó el resto de sus días sentado en la mesa de la cocina,
mirando sus manos y deseando que él hubiera hecho todo de modo
diferente.
Todo lo que podía ver en su mente era la expresión en la cara de
Jimmy, y eso lo hizo enfermar de nuevo.
El intestino debe tener una estrecha relación con el cerebro, y Ryan se
sentía como un avión aterrizando. Tal vez por eso no podía retener nada. 80
Un golpe en la puerta lo despertó de sus pensamientos depresivos, y
cuando Ryan miró hacia arriba a través de su ventana en la puerta, su
quijada cayó con la visión de Gerard con el otro vampiro que había
derrumbado su satélite.
Rápidamente se levantó y abrió la puerta para ellos.
― Adelante ― Él dijo, dando un paso al costado.
Gerard le dio una mirada amarga, pero no era nada en comparación
con lo que Jimmy le había dado antes.
Gerard parecía como cualquier otro líder de nido. Era delgado y
pálido, pero no tenía el pelo rubio blanco demasiado largo. Él tenía el
pelo negro que le llegaba hasta los hombros, o tendría, si no estuviera
atrapado detrás de la cabeza. También llevaba una chaqueta de piel
gruesa, y sus brazos estaban cruzados, como si estuviera tratando de
proteger esa piel del aire contaminado de la cabaña de Ryan.
― Tienes olor a grasa aquí.
― Lo siento, señor. Yo estaba cocinando antes.
― Debes limpiar mejor la próxima vez ― dijo Gerard, y entonces él
estaba junto a una de las sillas en la mesa pequeña de Ryan.
Ryan sabía lo que eso significaba, por lo que rápidamente se movió
hacia delante y tiró de la silla para que el vampiro se sentara dentro
Gerard se sentó, pero lo hizo con tanta suavidad, y él todavía estaba
mirando todo con desconfianza. Era evidente que estaba tratando de
tocar lo menos posible.
― No sabía que iba a venir hoy ― dijo Ryan. ― Le puedo dar un poco
de té?
No había forma de que él estaba ofreciendo a Gerard sus existencias de
café y chocolate. Ryan estaba tomando todo esto en la primera
oportunidad que tenía para ayudarle a superar lo que pasó con Jimmy.
― No ― dijo Gerard simplemente. ― ¿Dónde est{ el lobo?
― No lo siento aquí, señor ― dijo el guardia vampiro, que todavía
estaba de pie junto a la puerta. Estaba lo suficientemente oscuro que el
vampiro no necesitaba hacer algo más que utilizar una capa gruesa de
protector solar, y sería bastante oscuro en menos de una hora. 81
Los ojos de Gerard brillaron rojos.
― Notamos que tu barco faltaba cuando llegamos.
Ryan no estaba de humor para eso, y de repente no le importaba si
Gerard le decía al otro vampiro empezar a golpearlo o algo así.
― Déjeme adivinar, estaba envi{ndome un montón de textos esta
mañana, ¿no?
― Por supuesto que estaba. La salud de mi compañero es dependiente
de un curandero competente ― Gerard espetó.
― Uh-huh, y nunca se le ocurrió en su demasiado pequeño cerebro
que el hombre lobo con la sensibilidad auditiva podía oír la vibración del
teléfono, incluso desde donde lo escondí después de disparar un centenar
de textos en una fila?
El guardia vampiro fue tan rápido como el rayo cuando corrió y
golpeó a Ryan tan fuerte que voló de sus pies y a los armarios. Cayó con
fuerza, aterrizando primero en el mostrador, y luego en el suelo.
Fue una buena cosa que él había guardado los cuchillos antes, pero
parecía que Gerard y su amigo no estaban hechos con Ryan todavía.
Ryan fue agarrado por la parte posterior del cuello y arrastrado. Él
gritó con el dolor de ser movido alrededor, y estaba seguro de que el
vampiro ni siquiera estaba usando un montón de presión cuando su cara
golpeó la mesa.
Respiraba pesadamente, el brazo y la muñeca lastimados, y ahora su
rostro también, pero aún podía ver la expresión desagradable en la cara
de Gerard.
Todavía no era tan mala como la de Jimmy había sido.
― ¿Te atreves a echarme la culpa porque no puedes ocultar mejor tus
dispositivos? ― Gerard exigió.
Cuando Ryan no respondió de inmediato, el vampiro detrás de él
añadió tanta presión sobre su cuello que el dolor blanco lo cegó por un
momento, y pensó en lo fácil que este mismo hombre había arrancado el
metal que levantó el satélite.
― Él te hizo una pregunta, humano. 82
Ryan respondió.
― No, señor. Fue un accidente. Él encontró el teléfono y vio sus
mensajes y los míos. Se robó el barco y se fue esta mañana.
Y era una buena cosa que lo había hecho, también, de lo contrario,
habría sido capturado.
Por primera vez, Ryan estaba contento con el escape de Jimmy. Por lo
menos eso significaba que el hombre estaría seguramente lejos de todo
esto.
Gerard suspiró y cerró los ojos antes de apretar el puente entre ellos.
― Te pedí hacer una cosa simple.
― Lo sé, señor ― dijo Ryan, su cara todavía aplastada.
― Me pediste un regalo, y yo generosamente te lo di. ¿Qué haces para
pagarme? Dejas a mi premio nadar lejos de ti.
Ryan sabía que no debía corregir al hombre. Jimmy no había nadado
en cualquier lugar. Había tomado el barco.
― Ahora, ¿quién me va a reembolsar por la pérdida que acabo de
sufrir? Hice planes para servir la sangre fresca del Lobo en mi próxima
fiesta, y ahora no tengo ningún lobo.
― Usted... usted tiene la guardia del lobo. Estoy seguro de que lo
harían voluntariamente ― Ryan dijo, y se rió nervioso porque sabía que
Gerard tenía más lobos. También sabía que no tenía sentido recordar al
hombre de eso. Gerard estaba jugando con él.
― Por supuesto que tengo mis lobos ― dijo Gerard con un
encogimiento de hombros, como si estuvieran teniendo una conversación
cortés o algo así. ― Pero son perros de guardia. Así que ya ves, ellos
necesitarán su sangre para realizar otras funciones. Tal vez si yo lucho en
contra de ellos juntos en la arena en mi sótano, satisfaga a mis clientes,
pero como ya puedes entender, todavía estoy enojado por no tener la
sangre de lobo para ir con el entretenimiento.
Ryan volvió a reír.
― ¿Entonces quiere que reembolse su pérdida? Ya estoy trabajando
gratis, tú... ahhhhh!
El vampiro detrás de él agarró su cuello con más fuerza, y Ryan se 83
retorcía y goleó a su cuerpo, tratando de salir de este agarre doloroso,
pero no pudo.
― Gratis ― Gerard preguntó, en voz muy baja en un primer momento,
y luego gritó aún m{s fuerte que Ryan. ― Gratis?
Gerard se puso de pie y dio un puñetazo tan fuerte en la mesa que la
dividió en dos y cayó al suelo. La única razón por la que Ryan no
descendió con ella era porque todavía estaba detenido por el cuello, y el
guardia vampiro detrás de él lo obligó a ponerse de pie y frente a su amo.
Los ojos de Gerard eran rojo sangre, y él estaba pie.
― Te doy este pequeño pedazo de paraíso, mi tierra, para llamarla
tuya. Tienes cien veces más que cualquiera de mis otros esclavos
comprados. Libros y juguetes para pasar tu tiempo cuando deberías estar
trabajando en la curación de mi compañero, y te quejas de que estás
trabajando gratis?
― Lo siento, señor ― dijo Ryan.
Los ojos de Gerard brillaron.
― Maestro ― corrigió.
― Lo siento, Maestro ― dijo Ryan.
Gerard negó con la cabeza, y miró alrededor de la casa.
― Buena comida para comer, cosas buenas para entretenerte a ti
mismo, y sin embargo, desagradecido. Me costaste un hombre lobo.
Incluso si finalmente había decidido luchar contra él, me podría haber
quedado 10 años con él. Entonces, voy a cobrarte esos diez años.
Los ojos de Ryan se abrieron, y él balanceó la cabeza.
― No.
El vampiro detrás de él lo sacudió un poco a cambio. Gerard siguió
hablando.
― Se añadir{n diez años a tu contrato. Ahora vas a pasar quince años
del total de tu vida como sanador de mi compañero, suponiendo que no
pueda encontrar a alguien mejor en ese tiempo. Si hago eso, entonces yo
voy a simplemente colocarte de nuevo como un esclavo de la casa.
Puedes entretener a los invitados durante su estancia.
Lo que significaba que si Ryan no se mantuviera siendo muy útil, sería 84
un esclavo sexual. Una vez más.
― Voy a... Voy a ser útil ― dijo Ryan.
Gerard negó con la cabeza, y luego hizo un gesto con la mano para el
vampiro detrás de Ryan. El hombre lo soltó, y el agarre en la parte de su
nuca fue tan brusco que él cayó de rodillas.
Ryan se quedó sin aliento y se aferró a todo lo que le dolía.
― Voy a llamar a m{s hombres para venir aquí ― dijo Gerard. ― Se
llevarán todo lo que no se considera una necesidad. No habrá más juegos
de mesa ni más tiempo libre. Estás aquí para trabajar, comer y dormir,
nada más. Raciones tendrán que ser cortadas, entonces no esperes nada a
entregar hasta la próxima semana.
― Estoy casi sin nada ahora ― dijo Ryan. ― ¿Qué voy a comer?
Gerard puso los ojos. Le molestaba que Ryan necesitara comida para
sobrevivir, lo que era una locura porque incluso los vampiros comieron
alimentos.
― Vives en un lago. Siempre habrá agua dulce y peces para ti. Toma lo
que necesitas de allí.
― No tengo ningún barco. ¿Cómo voy a pescar?
― Permanece en el borde del muelle. Estoy seguro de que no puede
ser así difícil. No voy darte otro barco tampoco. Vendremos con raciones
de comida y un teléfono nuevo. No quiero saber de ti cazando
sigilosamente más conejos. Puedes mantener tu Internet, pero el acceso
será restringido sólo para el propósito de trabajo. También está muy
caliente aquí. El calor debe ser controlado también ― Gerard dijo, y él
parecía estar mirando las cosas que podrían ser eliminadas. ― La
televisión también se eliminará junto con algunos de sus muebles. No
necesitas un sofá y una silla en tu sala de estar cuando tienes dos buenas
sillas aquí. En cuanto a la mesa, bien, puedes comer en tu regazo.
Parecía que Gerard se disponía a llevar casi todo, pero Ryan sabía que
yo no debería decir eso. También sabía que no debía pedir para mantener
las cosas que había traído aquí cuando él firmó en lugar de Andrea. No
importaba para Gerard. Él tomaría lo que él quería.
Gerard se arrodilló delante de él, y Ryan se encogió cuando el hombre 85
puso su mano sobre el hombro de Ryan. Habló con una voz baja.
― ¿De verdad quieres creer que trabajabas de forma gratuita? Pronto
sabrás cómo era yo realmente generoso contigo.
― Y si su compañero quiere venir para un chequeo ― Preguntó Ryan.
― ¿De verdad quiere que vea este lugar tan desnudo?
― Sus síntomas no son potencialmente mortales. Si lo fueran, puedes
creer que estaría haciendo mi mejor esfuerzo para buscar otro sanador
que sería discreto cuando se trata de mis relaciones. ― Y la única razón
por la que Gerard se vio obligado a recurrir a Ryan fue porque le
pertenecía. Él no tenía que ir a buscar a cualquier otra persona, pero
podría.
Un soborno bien colocado podía cerrar la boca de alguien. Es por eso
que todavía algunos nidos de vampiros pensaban que podrían tener
esclavos ilegales.
Pero Ryan no era un esclavo ilegal. No había salida para él.
Gerard palmeó suavemente a Ryan en la mejilla antes de volver a sus
pies. Ellos le dieron la espalda y se fueron de la casa, y luego entraron en
el barco caro de Gerard y lo dejaron solo, pero sabía que estaría viendo
más vampiros en una hora o algo así.
Jimmy lo odiaba, y ahora su estancia en esta cabaña estaba a punto de
convertirse en algo mucho más terrible.
Estaba empezando a pensar que saltar al agua para congelarse hasta la
muerte podía haber sido una buena idea después de todo.

86
Capítulo Diez

Dos meses más tarde

Jimmy miró la bola de nieve en sus manos, pero no sacudió la cosa. Si


quería ver una de las maravillas del invierno, sólo tuvo que mirar hacia
fuera.
No quería ver eso tampoco. Era una nieve agradable también. No era
demasiado frío ahí fuera hoy, al igual que la semana pasada, y los copos 87
caían, trozos pegajosos que hicieron grandes muñecos de nieve, su
favorito.
Cada vez que miraba hacia fuera, sin embargo, todo lo que veía era
oscuridad. Era como si no pudiera disfrutar de todo desde que dejó a
Ryan atrás.
Navidad era en dos semanas, y cada día que pasaba se sintió como
tortura porque no tenía a su compañero aquí con él.
Estúpido. Jimmy era tan maldito estúpido. Deseó poder dejarlo ir, pero
no pudo. Otras personas dejaron detrás lo que sus compañeros hicieron y
siguieron adelante, entonces por qué no podía Jimmy? El hombre le
había mentido y traicionado. Si eso no fuera razón suficiente para dejar
un compañero atrás, entonces no sabía lo que era.
Él estaba de regreso con su manada, la gente estaba buscando a
Aeducan y Mason estaba tratando con los seres humanos todos los días,
en busca de un líder de nido llamado Gerard que era propietario de una
isla privada en medio de un lago.
Hasta ahora, sin embargo, nada había llegado. Otros nombres fueron
mencionados, los nombres del propietario de la isla, pero nadie llamado
Gerard, y Mason tenía pruebas suficientes para reclamar nidos cercanos
como ilegal y hacer un golpe. Incluso Conner y el resto de su manada se
ofreció a ayudar, pero quien este líder de nido era, era plano.
La bola de nieve fue un regalo de Navidad anticipado. El compañero
de Mason, Adam, tenía la esperanza de que fuera a animarlo, y lo hizo
sentirse bien durante un par de segundos, pero ahora estaba de vuelta
pensando en Ryan. Probablemente debido a que la pequeña cabaña
dentro se parecía a la que Jimmy se había quedado con Ryan.
Incluso tenía un muelle y todo, pero no había un cobertizo, y las
ventanas eran diferentes.
De todos modos, pensó en el lugar, y él pensó en Ryan un poco más.
¿Y si había cometido un error al dejarlo atrás? El aspecto aplastado en
la cara de Ryan cuando Jimmy remó lejos de él era sombrío. Incluso
ahora, Jimmy no podía evocar esa mirada en su mente sin querer
acurrucarse en una bola de vergüenza. 88
Apenas podía forzar una sonrisa para los bebés de la manada. Desde
que Mason decidió pasar las vacaciones con Conner, todos estaban juntos
y felices mientras Mason mostró con orgullo a su hijo, Patrick, a Conner y
Ty, quienes exhibieron a su propio hijo a cambio.
Todos estaban convencidos de que sus hijos crecerían y se convertirían
en amigos. Era casi bonito. Jimmy no pudo encontrar nada bonito hoy.
Decidió dar al globo de nieve una sacudida.
Sí, todo el mundo estaba tratando de ser feliz para las fiestas. Cristo,
incluso Kyle estaba siguiendo alrededor a Aelius como un cachorro
enfermo de amor, haciendo todo lo posible para llamar la atención del
hombre.
Probando y fallando. Jimmy podría haber jurado que escuchó al alfa
diciendo que era hetero cuando fue provocado por él.
Un suave golpe sonó en la puerta, y sabía quién era.
― Entra, Mason.
La puerta se abrió, y Jimmy no miró a su alfa. Ni siquiera levantó la
cabeza cuando el hombre se acercó y se sentó al lado de él en la cama.
― ¿No te sientes bien? ― Preguntó Mason.
Jimmy negó con la cabeza.
Mason suspiró.
― Sabes que no se ve tan bien en mí cuando mi propio beta no hace
acto de presencia por unos días.
― Tal vez debas encontrar un nuevo beta ― Jimmy rompió, y él le
gruñó al alfa.
Las cejas de Mason se levantaron por eso, y entonces él sacudió la
cabeza.
― Mierda. Él realmente debe haber sido alguna cosa para conseguir
que reaccionaras así.
― Él era un traidor que me vendería para traficantes de esclavos
vampiros. Yo habría estado atrapado bajo tierra, donde nunca vería la luz
del día y sería obligado a dar sangre o pelear en una arena.
Mason asintió.
― Lo sé. Y eso es algo que realmente no quiero pensar, contigo o 89
Aeducan.
Jimmy suspiró ante el recuerdo del otro hombre.
― Casi estuve cinco minutos sin pensar en ello.
Aeducan todavía faltaba, pero las manadas estaban trabajando para
tener al menos cierta sensación de normalidad por algunos días a causa
de los cachorros. Todo el mundo quería que tuvieran una Feliz Navidad,
ya que eran demasiado jóvenes para saber acerca de las cosas que estaban
mal actualmente en el mundo real.
― Lo siento ― dijo Mason ― pero ahora necesito saber si estar{s bien
con algo.
― ¿Con qué? ― Preguntó Jimmy, y él se puso de pie y puso la bola de
nieve con cuidado sobre su mesita de noche, dando a la pequeña cabaña
un último vistazo antes de que él se enfrentara a su alfa.
Mason también se levantó.
― Hay una chica en la planta baja. Dijo que ella es la hermana de
Ryan, y su apellido es el mismo y todo. Ella está buscándote. Jimmy, sólo
quiero asegurarme de que no explotarás ni nada. Jimmy!
Mason lo llamó, pero Jimmy no se detuvo mientras marchaba hacia la
puerta y la abrió.
Tuvo que pasar por un montón de caras desencajadas en la casa. Él
debe haber tenido una mueca bastante desagradable en su cara para estar
pasando esto, pero al final llegó abajo y a la entrada principal de la casa
de Conner. La joven rubia seguía sentada en su abrigo y bufanda,
aceptando una taza de chocolate caliente de Ty con gratitud.
Ella fue sin duda la chica de la foto que había visto Jimmy en la cabaña.
Andrea. Todavía tenía sus botas ya que ella no sabía si se quedaría
mucho tiempo.
― Qué deseas? ― Jimmy le preguntó, y él hizo su camino,
consiguiendo su atención, y de todos los demás.
Ella lo miró con los ojos muy abiertos, un poco antes de que entregara
la taza de vuelta para Ty y ponerse en sus pies.
― Eres Jimmy Torren? 90
El hecho de que ella sabía su apellido era algo que lo incomodaba.
Ryan había hablado con ella. Probablemente en el teléfono celular de
mierda que estaba escondido. Podría haber conseguido uno nuevo desde
entonces.
― Qué quieres? ― Le preguntó, y luego Jimmy fue, de repente y sin
previo aviso golpeado por un codazo en las costillas por su alfa cuando
pasó.
Mason tenía un poco de brillo en la cara por la forma como Jimmy
estaba actuando, pero casi no le importaba cuando volvió sobre la chica.
― Qué deseas?
Sus ojos se abrieron un poco, y ella se alisó el pelo rubio, como si de
repente estuviera insegura.
― Mi hermano est{ aquí? Yo estaba esperando verlo.
Jimmy no lo podía creer.
― Parece que él est{ aquí? ― Él preguntó, levantando los brazos y
echando un vistazo a su alrededor, como si Ryan acabara de aparecer de
repente de la nada.
― ¿Por qué eres tan cruel?
Jimmy se perdió en ese punto.
― ¿Por qué soy tan cruel?
― Eso es suficiente ― dijo Mason, y aunque su voz sonaba calma, la
mirada de sus ojos y la forma en que agarró el hombro de Jimmy, le dijo
todo lo que necesitaba saber.
Tenía que mantener la boca cerrada y ahora.
Mason volvió su atención a la hermana de Ryan.
― Lo siento sobre él. Andrea, dijiste, ¿no?
Ella balanceó la cabeza, luego miró hacia otro lado de Jimmy a
propósito.
― Entonces mi hermano est{ aquí o no?
― ¿Por qué iba a estar aquí? ― Preguntó Jimmy, y él estaba realmente
curioso ahora para saber qué diablos estaba pasando.
¿Por qué la hermana de Ryan estaba aquí preguntando por él? Si
estaba poniéndose en contacto con ella, entonces tenía que saber que él 91
no estaba aquí.
A menos que él no estuviera en contacto con ella.
Sabía que era el caso cuando los ojos de Andrea se ampliaron, y temor
real entró en ellos.
― Pero pensé estaría contigo! Dijo que ibas a llevarlo lejos de ese lugar!
Jimmy había sentido mucha incertidumbre, ya que había tomado el
barco de Ryan y lo dejó en la isla ese día, pero ahora estaba disparando a
través del techo, como si hubiera sido conectado a un cohete o algo así.
― ¿Cu{ndo fue la última vez que hablaste con él? ― Preguntó Jimmy.
Eso pareció hacerla reaccionar, y ella escupió en sus palabras.
― No lo sé. Creo... Hace dos meses, creo. Me habló de ti, y luego no
había nada. Pensé que tal vez estaba escondido o que no podía ponerse
en contacto conmigo al principio, pero luego empecé a estar aún más
preocupada cuando no había nada que decir para mí, o para escapar a
alguna parte. Él se habría puesto en contacto conmigo si estaban en
problemas.
Jimmy puso todo junto en su mente. Dos meses habían sido
inmediatamente antes o después de que lo había dejado, en función del
número de días.
― Él no entró en contacto contigo después? ― Preguntó Mason.
Andrea negó con la cabeza, y ella todavía estaba mirando a Jimmy
como si esperara que él tuviera todas las respuestas. Él no tenía idea de lo
que estaba pasando.
― Él debe todavía estar en la isla ― dijo Jimmy.
― Qué? ― Andrea gritó, y su ritmo cardíaco estaba en las nubes. ― Tú
lo dejaste allí? Pensé que habías dicho no lo querías allí!
― ¿Cómo sabes siquiera lo que se dijo entre ellos? ― preguntó Hil,
metiéndose en la conversación.
Andrea estaba llamando la atención de la mayoría de los alfas en la
casa. Lucius estaba allí ahora, mirando con un brazo protector alrededor
de su compañero embarazado. Conner y sus alfas estaban también 92
presentes. Stan, Enzo, Aelius, que había logrado escapar de Kyle, y todo
el mundo estaba mirando a Andrea, o Jimmy.
Andrea ahora estaba cavando a través de una gran bolsa de hombro, y
ella cogió el teléfono, mientras marchaba para Jimmy. Era nuevo, algo
mucho más moderno que el pedazo de mierda que Ryan escondía.
― Esto es lo que me dijo acerca de ti ― dijo, y enseguida comenzó a
desplazarse a través de sus mensajes para que pudiera ver.
Cogió el teléfono para que pudiera ver por sí mismo.
La forma en que Ryan escribió estas respuestas era tan diferente de las
respuestas frías y clínicas que escribió a su líder de nido, Gerard.
Parecía que Ryan le estaba pidiendo permiso a Andrea para arriesgar
cancelar el contrato que tenía. Tenía miedo por ella, y ella le estaba
diciendo que fuera por ello.
La única cosa que estaba en los textos que realmente hizo nadar la
cabeza de Jimmy, sin embargo, fueron apenas algunas palabras
pequeñas.
Realmente me gusta.
No era amor que estaba escrito allí, pero era lo suficientemente cerca,
en lo que se refiere a Jimmy.
Para empeorar las cosas, las cosas que Ryan estaba diciendo a Andrea
eran tan diferentes de lo que dijo a Jimmy, sobre cómo los vampiros le
dieron diez días para llevárselo.
Ryan había dicho siete. Y si había mentido para asegurarse que Jimmy
saliera temprano? No había nada en el mensaje de Gerard para sugerir
más, pero de nuevo, Jimmy sólo había leído algunos textos. Que no
quiere decir que él tenía toda la historia, pero ahora estaba convencido.
Su compañero había estado asustado y no sabía lo que hacer. Había
estado aterrorizado de lo que sucedería si él se permitía permanecer con
Jimmy, a causa de su hermana.
Jimmy había sabido de su hermana. Él sabía sobre el cambio del
contrato. Infierno, él era el único que había visto eso! Y sin embargo,
cuando leyó un par de textos, asumió lo peor y dejó a Ryan allí. 93
Dejó Ryan atrás, sin permitir al hombre que lo salvó, la oportunidad
hasta mismo de explicarse.
El disgusto en el rostro Ryan cuando Jimmy remó lejos de él volvió a
su mente, y entonces algo aún peor se le ocurrió.
Si ni siquiera estaba en contacto con su hermana, entonces todavía
estaba vivo? Jimmy había tomado el único barco, y si éstos vampiros
culparon a Ryan porque Jimmy se había escapado, entonces qué habrían
hecho con él? Serían capaces de verificar los registros de los textos que
estaba enviando? Ellos podían leerlos o simplemente saber cuándo un
texto fue enviado?
Jimmy inmediatamente comenzó a moverse hacia la puerta. Él tomó el
abrigo del gancho.
― Adónde vas? ― Andrea rompió, y se veía como que estaba a punto
de tener un ataque de pánico.
― Ir y traerlo de vuelta ― dijo Jimmy.
― No tenemos la autoridad para ir a su propiedad ― dijo Mason.
Jimmy miró al hombre a los ojos.
― No me importa. ― Abrió la puerta y salió a la nieve. No era una
tormenta de nieve o nada de eso, pero aún así era muy frío cuando llegó
en su camión y encendió el motor.
Antes de que pudiera alejarse, la puerta principal de la casa se abrió de
nuevo, y Mason, Conner, Enzo, Hil, y Lucius salieron en su equipo de
invierno. Jimmy sonrió cuando todos subieron arriba en el camión o en la
parte posterior.
Él salía con algún apoyo, después de todo.

94
Capítulo Once

Ryan sopló en sus manos y las puso contra el fuego. La chimenea era
vieja como el infierno, y pequeña. Esto no fue una gran cabaña, por
cualquier medio, y Ryan casi no tenía más libros para quemar.
Gerard había tomado el sistema de calefacción, por lo que Ryan no
podía subir el calor más que unos pocos grados.
Para ello tendría que cerrar la puerta a todas las demás habitaciones
para conservar el máximo de calor posible, pero él se estaba quedando 95
sin cosas para quemar, y para comer.
Su estómago gruñó mientras miraba a sus raciones restantes hasta el
siguiente envío.
Una lata de sopa de fideos de gallina, tres rebanadas de pan en su
bolsa, y una pera.
El próximo envío era en dos días.
Ryan no había oído una palabra del compañero de Gerard desde el día
que el hombre llegó aquí, todo enojado con la pérdida de Jimmy. Se
preguntó si de alguna manera fue capaz de leer los textos que Ryan había
enviado a su hermana sobre la fuga, y ayudar a Jimmy para escapar, y
estaba siendo dejado para morir y ni siquiera lo sabía aún.
Ryan se estremeció con el pensamiento y tiró de la manta más apretada
alrededor de él. Estaba durmiendo en este pequeño nido de mantas y
almohadas cerca del fuego por el último par de semanas, desde la
primera nieve. Una gran cantidad de sus muebles se habían ido, pero él
pudo mantener sus mantas y toallas, al menos, por lo que tuvo lo
suficiente para abrigarse en la noche cuando el fuego se apagó.
Tiró unos cuantos palos secos en el mismo, y el maldito fuego sólo
aumentó un poco. Era difícil de conseguir madera en esta pequeña isla.
Había unos pocos árboles, pero la mayoría de ellos talados hasta el
momento, y ahora que estaban casi en el fin, el invierno estaba apenas
empezando, él trató de quemar cosas en la casa que podrían ser
quemadas, junto con las ramas de los arbustos de fuera.
Había roto la única silla, hace algún tiempo, junto con la mesa de su
despacho. Los viejos estantes se habían ido sin embargo, y ahora Ryan
estaba quemando sus libros, los considerados de menor valor, de todos
modos.
Si esto continuaba, entonces él podría tener que salir y rasgar el balcón.
Ryan se acostó para tratar de dormir. No había nada que pudiera hacer
mucho hoy en día, salvo eso, y fue suficiente por lo menos para llevarlo
lejos de la horrible situación en que estaba.
La única vez que los sueños eran peores que la realidad fue cuando 96
soñaba con Jimmy, acerca de cómo el hombre había hecho el amor con él,
lo tocó y lo besó, y luego se burló de odio para él cuando dejó a Ryan
atrás.
Joder, él no iba a llorar. No iba a llorar.
Ryan gritó, y se limpió la cara contra las toallas que estaba usando.
Eran lo único que mantuvo su cuerpo separado del frío suelo.
Cada vez que pensaba que estaba llorando, él siempre comenzó a subir
de nuevo después de apenas pensar en la cara de Jimmy, o su sonrisa,
cualquier cosa, en verdad.
Debe de haberse dormido, porque cuando despertó, podía ver la
respiración en el vapor en el aire. Hacía frío como el infierno. Su fuego
era poco más que brasas, y alguien estaba llamando a su puerta.
Ryan mantuvo la manta más fuerte alrededor de sus hombros mientras
corría hacia la puerta, excitado como el infierno con el pensamiento de
alguien estar aquí.
Abrió la puerta, y su corazón se encogió al ver a Geoffrey, Ryan había
aprendido anteriormente que era el nombre del guardia que había roto
su satélite, y escoltado a Gerard aquí para su condena.
Aún así, Ryan estaba feliz de verlo.
― ¿Est{s trayendo suministros?
Geoffrey le lanzó una mirada asesina mientras se abría camino en la
cabaña. Ryan cerró rápidamente la puerta.
― Estoy casi sin comida, y yo podría utilizar un poco de leña picada
también.
Geoffrey miró a la chimenea de Ryan, y luego puso su mano en el
bolsillo interior y sacó una lata de chile.
A Ryan no le gustaba mucho el chile. Le dio dolor de estómago, pero
era más grueso que el pollo y la sopa de fideos y lo mantendría completo
por un infierno de mucho más tiempo que eso.
Geoffrey sacó su mano antes de que Ryan pudiera tomar la lata.
― Ya sabes lo que quiero por ella― dijo.
El corazón de Ryan se hundió, y casi se derrumbó.
― No. 97
Geoffrey asintió.
― O eso, o no m{s comida, y tal vez yo sólo decida no volver con tus
raciones o cualquier leña cuando realmente sea hora de que esté aquí
también.
― Te di la sangre, hace una semana! No puedo seguir d{ndote tanto.
Mi cuerpo la necesita para sobrevivir!
― Al igual que el mío ― dijo Geoffrey.
― Es el maldito invierno y estoy siempre con frío y con hambre. Yo la
necesito más que tú. No puedes comprar tu propia sangre?
Geoffrey se encogió de hombros, y luego se dio la vuelta y comenzó a
caminar hacia la puerta.
― Espera! ― Ryan extendió la mano y lo agarró por el brazo, tirando
de él para parar.
Geoffrey lo miró expectante, pero Ryan no pudo decir nada, no al
principio.
― Actúas como si estuviera exigiendo sexo de ti ― él finalmente dijo.
― No, sólo mi sangre a cambio de comida ― Ryan murmuró.
― Veo que tienes algo de comida allí. Difícilmente morir{s de hambre
sin ella.
― Estoy embarazado, idiota, necesito mi sangre!
Geoffrey difícilmente parecía impresionado.
― Creo que el niño necesita comida, y el calor del fuego de su madre
aún más, no lo es?
El hombre era un idiota o realmente creía que no estaba haciendo nada
malo. Ya no se trataba sólo de conseguir la lata de chile, era para
asegurarse de que Geoffrey volvería para alimentarlo más tarde.
Ryan dejó la manta en el suelo, y se abrió la camisa lo suficiente para
exponer el cuello.
Geoffrey sonrió y se adelantó, oliendo el cuello de Ryan antes de dejar
escapar un profundo suspiro.
― Est{s ligeramente m{s bajo de la sangre, pero todavía tienes un olor
delicioso. 98
Ryan no miró para él, o le contestó. Geoffrey estaba en lo cierto, no
estaba exigiendo sexo de él, pero seguía siendo algo increíblemente
íntimo tomar la sangre de alguien, y Ryan odiaba estar estaba siendo
forzado sobre eso.
Dejó escapar un gemido agudo cuando los colmillos del hombre le
atravesaron el cuello, y entonces él podía sentir su propia sangre caliente
salir de su cuerpo.
Era peor cada vez que Geoffrey lo hizo, porque cada vez que esto
sucedió, él lo dejó sintiéndose más frío y más débil, y no había cómo
decir lo que estaba haciéndole al bebé que llevaba.
Jimmy ya lo odiaba lo suficiente por lo que hizo. Lo último en el
mundo que Ryan quería era que la última pieza de Jimmy que le
quedaba fuera asesinada porque era demasiado débil para decir no a los
alimentos.
Pero entonces, sus rodillas se doblaron y se habrían ido a abajo si
Geoffrey no lo hubiera sostenido.
― Whoa allí. ― Geoffrey rió, con la boca sangrando. ― ¿Te sientes un
poco débil?
― No m{s ― dijo Ryan, y trató de empujar a Geoffrey fuera de él, pero
por supuesto estaba demasiado débil para hacer esto.
Geoffrey sólo se rió de él.
― Bueno, bueno, no hasta que me llene ― dijo, y luego volvió otra vez
a morderlo.
Eso no estaba bien. Geoffrey estaba perdiendo el control, porque Ryan
nunca había dado al hombre mucha sangre antes y ahora estaba tomando
claramente demasiada. Iba a matar a Ryan si no se detenía!
Ryan seguía tratando de empujar el vampiro fuera de él, pero se sentía
como si estuviera golpeando débilmente en una pared de ladrillo por
todo lo bien que lo estaba haciendo.
Había una visión de túnel, y estaba cayendo más y más en el túnel, y
todo parecía y sonaba tan distante.
Se estaba muriendo.
Él tenía que estarlo. 99
No había manera de que esto fuera otra cosa sino la muerte llegando
por él.
Entonces se iba a morir, y él ni siquiera tuvo que tirarse en un lago
congelado para hacer esto.
Sus últimos pensamientos antes de que todo fuera demasiado lejos
eran de Jimmy, y cómo deseaba que el hombre estuviera con él en ese
momento.

Debido a la cantidad de horas que se tardó en conducir de vuelta al


lago, fueron capaces de hacer un alto en el camino en una tienda de
artículos de deportes para conseguir un bote inflable con un pequeño
motor.
Con el lago del tamaño que tenía, no quería arriesgarse a congelarse lo
suficiente para poder cruzarlo.
Cuando le preguntaron al hombre detrás del mostrador sobre ello, dijo
que era un gran lago para la pesca en el hielo, pero no estaba seguro de si
el agua estaría dispuesta a conducir un camión sobre ella.
― A menos que sea r{pido como un vampiro o un hombre lobo. Aún
así, si se tratara de mí, yo no haría eso ― dijo.
Jimmy y todos los otros con él sólo se miraron. Compraron el bote
salvavidas de todos modos.
Cuando lo hicieron, finalmente, llegaron allí y vieron que el lago estaba
congelado, era difícil decidir qué hacer a continuación.
― Es evidente que no estamos llevando el bote ― dijo Lucius.
Nadie estaba contento con eso, y Jimmy podía entender porqué. No
quería entrar en un lago congelado tampoco. Uno menor habría estado
bien, pero esto era tan grande que incluso los expertos en la tienda
estaban cuestionando si era o no seguro salir.
Aún así, Jimmy fue el primero en quitarse la ropa y cambiar a su forma 100
de lobo. Estaba nevando de nuevo, y él no podía ver la cabaña, incluso
como una mota en la distancia, pero podía seguro como el infierno sentir
el olor de Ryan y el humo y el olor de un vampiro.
Corrió hacia el agua congelada, creando pistas en la nieve antes de que
los otros cambiaran en sus formas de lobo.
Lo persiguieron, llamándolo por su nombre a través del enlace
compartido, pero todo lo que Jimmy pudo ver en su mente era el rostro
de Ryan, y las palabras del texto que envió a su hermana.
Ryan quería salir con él. Él quería salvar a Jimmy de los vampiros, y
Jimmy lo había dejado atrás con esas sanguijuelas para hacer solo Dios
sabía en los dos meses que se había ido.
El hecho de que podía oler a su compañero era una buena cosa. Jimmy
no podía ignorarlo. Esto significaba que su compañero aún estaba vivo.
Eso fue suficiente para mantenerlo corriendo, sin parar, incluso cuando
se oía el hielo agrietándose bajo sus pies. Él sólo tenía que ser rápido, no
parar y estar tranquilo, y no iba a romperse.
Se dijo una y otra vez. La última cosa que quería era que él o alguien
detrás de él cayeran sobre el hielo. Su corazón golpeaba en el interior de
su pecho peludo en la idea de ir para el agua.
Encontró la casa través de la nieve, y corrió más rápido, sin importarle
en absoluto sobre el hecho de que estaba dejando tras de sí a los demás
cuando él corrió hacia adelante.
Los aromas fueron cambiando a medida que se acercaba. Él olía a
sangre ahora, y algo más que no podía poner, pero estaba dejando a su
lobo salvaje.
El hielo se quebró de nuevo cuando él llegó a la isla y saltó a la orilla.
Su corazón estaba corriendo, pero él no le hizo caso cuando estaba ahora
en tierra firme, y el riesgo de ahogamiento se fue.
El hielo agrietado no le importaba y tampoco la posibilidad de su
propia muerte. Lo había hecho aquí y eso fue todo lo que se preocupaba.
Cambió a su forma humana, y lo primero que se dio cuenta fue que 101
muchos de los árboles fueron talados. Corrió a la puerta principal y no se
molestó en llamar ni nada.
Él sólo la abrió y se abrió paso dentro, exactamente donde de
inmediato vio un vampiro inclinado sobre el cuerpo inerte de Ryan.
El vampiro miró hacia arriba, y había una gran cantidad de sangre
alrededor de su boca mientras le susurraba a Jimmy. Ryan estaba pálido
como el propio vampiro, y él no se movía. Jimmy ni siquiera oyó el latido
del corazón, y su estómago se redujo cuando se dio cuenta de que ya era
demasiado tarde.
Estuvo ausente durante dos meses, y cuando finalmente sacó la cabeza
de su culo y decidió volver, fue demasiado tarde por una cuestión de
minutos.
El vampiro lanzó el cuerpo de Ryan y lo dejó caído sin vida al suelo,
como si no fuera nada, cuando se enderezó y continuó a silbar para
Jimmy.
― Lobo! Tú eres el que quería el maestro!
Y Ryan había muerto a causa de eso.
Había algunas preguntas que a Jimmy le gustaría preguntar al hombre.
Como dónde estaba Aeducan, y el nombre real de su maestro, pero no le
importaba nada de eso en el momento que abrió la boca y gritó al
hombre, un sonido que sólo un hombre lobo podía hacer.
El sonido fue suficiente para sacudir los armarios en la pared, y Jimmy
dejó que sus garras y colmillos salieran cuando atacó al vampiro.
― Jimmy, no! ― Conner gritó, pero Jimmy no se detuvo, y el vampiro
no tenía ninguna posibilidad.
Todo el mundo sabía que los vampiros recién alimentados eran
vulnerables. Sus cuerpos fueron más débiles mientras se ajustaban a la
sangre nueva, y Jimmy estaba seguro de que el hombre moriría cuando él
hundió sus garras en el estómago del vampiro y lo rompió abierto. El
vampiro gritó mientras trataba de empujar a Jimmy fuera de él, pero ya
era demasiado tarde. De ninguna manera, incluso un vampiro podía
sobrevivir a algo como eso. 102
Lucius, Hil, y Conner tuvieron que tomar los brazos de Jimmy y
arrancarlo de él, y sin embargo, él todavía estaba tratando de aferrarse.
― Él est{ vivo! Jimmy! Él est{ vivo! ¡Basta!
Conner no era su alfa, así que no había instinto de obedecer al hombre,
pero fueron sus palabras que tenían a Jimmy saliendo de su rabia
alimentada por la sangre mientras miraba a Ryan.
Mason y Enzo estaban con Ryan, y estaban envolviéndolo en mantas
que habían encontrado en el suelo cerca de la antigua chimenea. Fue sólo
cuando Jimmy realmente miró y pudo ver que el pecho de su compañero
estaba subiendo y bajando.
― No... no te acerques a él ― dijo el vampiro, hablando entre dientes
mientras luchaba por respirar. ― Pertenece al maestro. A-Y entonces...
tú!
Jimmy sólo miró al hombre por encima del hombro, y él tomó otra
larga mirada en el lío que había hecho del intestino del chico. Moriría
bien y despacio, sin más ayuda de Jimmy, entonces no se movió hacia
adelante para hacer algo sobre el estúpido.
Jimmy se volvió hacia su compañero, y no pudo soportar estar lejos de
él más. Él se puso de rodillas y con cuidado lo agarró, tirando del hombre
más pequeño en su regazo y acunándolo.
― Estoy aquí, bebé. Lo siento mucho ― dijo, y fue una lucha para no
derramar ninguna lágrima. Él estaba cerca de eso, sin embargo. Ryan
pesaba casi nada, y todo lo que podía ver Jimmy era su piel
increíblemente pálida, y cada respiración que Ryan sacó de su cuerpo se
sentía como si fuera a ser la última.
― Tenemos que hacer algo. Mason, tenemos que hacer algo ― dijo
Jimmy, y una cantidad severa de desesperación y ansiedad ganó y lo
agarró con firmeza por el corazón. Él nunca había sentido eso en toda su
vida, y ahora estaba pasando y su compañero podría morir si no
mantenía la cabeza fría.
― Tenemos que llevarlo a Theo ― dijo Lucius. ― Mi compañero sabr{
qué hacer, él es un sanador, y alguien puede donarle un poco de sangre. 103
― Es a 1 hora de distancia. No hay hospitales m{s cerca? ― Preguntó
Jimmy, mirando entre los hombres.
Lucius miró al vampiro en el suelo, y él tomó por el cuello a la
sanguijuela.
― ¿Dónde est{ el hospital m{s cercano?
Incluso si Lucius estaba ahogando claramente al hombre, el miserable
vampiro se las arregló para darle una sonrisa sangrienta.
― A horas desde aquí. Ninguno cerca. Morirá. Yo tenía su sangre
dentro mí, pero ahora está por todo el piso.
El vampiro consiguió una risa ahogada, incluso cuando Lucius lo lanzó
de nuevo en el suelo.
Todo lo que Jimmy podía hacer era mirar en la piscina roja en el piso
de madera. La sangre de Ryan.
― Jimmy? ― Mason dijo, poniendo una mano en el hombro de Jimmy.
― Todo lo que hacemos, no podemos hacerlo aquí. No hay nada aquí
para ayudarnos, y necesita un poco de sangre.
Jimmy asintió y se puso de pie, abrazando a su compañero lo más
apretado cerca de él. Mason estaba en lo cierto. Aunque hubiera equipo
para este tipo de cosas en la cabaña en algún lugar, y Jimmy había estado
lo suficiente para saber que no había, ninguno de ellos sabía cómo usarlo.
Infierno, Jimmy ni siquiera sabía qué tipo de sangre tenía Ryan.
― Dame otra manta. Quiero sus pies y la cara envueltos contra el frío
― dijo Jimmy.
― ¿Es seguro correr en tu forma humana en el hielo? ― preguntó
Enzo.
Todo el mundo parecía incierto por los demás.
― ¿Trajiste el bote salvavidas? ― Jimmy preguntó finalmente.
Hil dijo mientras tomaba la cosa en la esquina donde la había tirado.
― Yo la tenía en la boca todo el tiempo. No te preocupes, yo no la
perforé. Sólo estaba mordiendo el cartón.
Mientras Hil hablaba, desenvolvía el bote de todas las piezas de
plástico y cartón que habían venido en la compra.
― Vamos a ser los perros de trineo, ¿no es así? ― Preguntó Enzo. 104
― Por supuesto. Alguien recoja los libros. Estoy tomando esos,
también ― dijo Jimmy. Tomó algunas de las novelas que a Ryan le había
gustado mostrarle, y Gray Anatomía estaba allí también. Sabía que a su
compañero le gustaba ese libro, en particular, sólo por el tema, y el hecho
de que él era un sanador.
No quería dejar atrás todo lo que a su compañero podía gustarle.
Suponiendo que Ryan vivió, lo que Jimmy tuvo que decir una y otra vez
en su mente y que el hombre estaría enojado con él. Sólo teniendo en
cuenta que Jimmy lo había dejado.
Se dijo que no importaba. A pesar de que él y los otros salieron
corriendo de la cabaña, dejando a ese vampiro miserable gritando detrás
de ellos, se dijo que nada de esto importaría. Ryan podría odiar a Jimmy
para el resto de su vida, y Jimmy estaría encantado de aceptarlo, ya que
significaba que su compañero viviría.
Hil tiró de la cuerda que hizo que el bote se inflara inmediatamente.
Era tan rápido, que era impresionante.
― Necesitamos cuerda ― dijo Conner.
― Debe tener algo en el cobertizo ― Jimmy respondió y cuando Hil
lanzó el bote en el hielo, se apresuró a entrar, mientras que al mismo
tiempo trataba de no poner su peso demasiado. Ni siquiera quería que el
bote, junto con su peso y el Ryan, rompiera el hielo más.
Trató de acostarse para difundir su peso, el cuerpo de su compañero
encima de él. Frotó las mantas que estaban cubriéndolo con la esperanza
de dar a Ryan algo más que el calor de su cuerpo, pero fue todavía
enervante ver a su compañero así. Era como si él sostenía un cadáver
envuelto, y no pudo esperar para llevarlos de vuelta a la orilla donde
estaba el camión esperando, y un paseo fácil de vuelta a la manada era
todo lo que Jimmy necesitaba después de eso.
Atar los chicos pareció durar una eternidad, sobre todo porque alguien
tenía que mantenerse en forma humana para lograr esto. Conner, Lucius,
Enzo, y Hil fueron los que tiraron del bote, y Mason corrió junto a ellos
mientras Jimmy trabajó para mantener caliente a su compañero. 105
― Mantente vivo, bebé. Te llevaremos a casa. Por favor, mantente vivo
― dijo.
Capítulo Doce

Ryan despertó, pero era el tipo de despertar que viene antes de abrir
los ojos. Esto le sucedió a veces cuando vino lentamente de un sueño, en
vez de forma abrupta, y como estaba cálido y confortable, por primera
vez, no quería apartarse de eso.
El medio se quedó dormido dentro y fuera del sueño después de eso.
Ryan no era el tipo de dormir hasta tarde. Su profesión le dio un reloj
interno, que la mayoría de las veces, lo despertó a cierta hora. Pero ahora, 106
él no podía molestarse por quedarse aquí.
Por alguna razón, su cerebro lo estaba engañando en el pensamiento
que estaba en una cama suave, caliente en lugar del suelo frío y duro de
su cabaña, y quería quedarse en este sueño un poco más.
Entonces Jimmy se metió en su sueño. Eran suaves toques, algunos
besos e incluso unas pocas palabras amables que salían de su boca, las
palabras que Ryan anhelaba oír desde que Jimmy lo había dejado atrás,
palabras que sabía que nunca oiría en la vida real.
― Lo siento mucho, querido. Lo siento mucho. Te amo. Tienes que
esforzarte por estar mejor y despertar ahora. Sé que estás durmiendo.
Theo dijo que no estabas inconsciente más.
La voz de Jimmy desapareció después de eso, pero luego regresó.
― Feliz Navidad, Ryan. ¿Crees que puede despertar para mi regalo?
Tengo algunas cosas que yo creo que te gustarían, pero tienes que estar
despierto para conseguirlas.
Sí, Ryan estaba definitivamente soñando. Navidad sería en algunas
semanas más, pero fue divertido soñar con todo lo que pudo tener, que
Jimmy había llegado para él, pensando que eran una pareja feliz.
Cristo, tal vez Geoffrey lo había matado y él estaba de alguna forma
extraña en el cielo, se lo merecía.
― Vamos, bebé, por favor, despierta para mí. Quiero ver esos ojos
azules de nuevo.
Cuando Ryan sintió otro beso en la mano y la boca, estaba empezando
a sospechar que esto no era realmente un sueño, sino que era algo que
estaba sucediendo ahora en el mundo real, lo que significa que Jimmy
había vuelto para él.
Jimmy se mantuvo directo a hablar.
― Los otros decidieron aplazar los regalos por algunas horas para ver
si te despertabas primero. Los niños podrán abrirlos y todo, pero los
adultos decidieron esperar.
Cuando Ryan se dio cuenta de que el verdadero Jimmy estaba
hablando con él, se le ocurrió que no podía ver a Jimmy en su sueño. Ese
hombre se había ido, y todo estaba oscuro. 107
Oscuro, porque sus ojos estaban cerrados.
Trató de abrirlos, pero dolía, y él gimió y sacudió la cabeza.
Allí estaba el crujido de madera deslizándose por el suelo, y Jimmy
parecía más cerca, su mano sosteniendo a Ryan más apretado que antes,
y él parecía un poco desesperado.
― Ryan? Bebé, ¿me oyes?
Ryan fue capaz de abrir los ojos, y fue entonces cuando se dio cuenta
de que no estaba oscuro en la habitación. De hecho, era muy brillante.
Las cortinas estaban abiertas y el sol brillaba a través de la ventana como
si fuera verano.
Llevó su mano libre para cubrirse los ojos.
― Duele ― dijo, la palabra mucho más confusa de lo que pensó que
debería sonar.
Jimmy saltó inmediatamente levantándose y corrió hacia la ventana.
Cerró las cortinas y volvió junto a Ryan, sosteniendo su mano y tocando
su mejilla. La habitación era un poco más oscura, que era bueno, pero
Ryan todavía tenía problemas para mantener los ojos abiertos.
― Bebé, te tengo. Estás despierto ahora y ya estás bien ― Jimmy dijo,
acariciando su mano y presionando besos. ― Todo est{ bien ahora.
― ¿Est{s llorando? ― Preguntó Ryan.
Jimmy se secó los ojos. Ellos estaban brillando y húmedos, pero él
estaba sonriendo.
― No. Solo feliz de que estés despierto.
Ryan miró hacia arriba y en torno a él. Esto definitivamente no era la
cabaña. Incluso si todos los muebles habían sido devueltos, no había
manera en el infierno que estaba en esa cabaña.
Lo que significaba que él no estaba en la isla.
― ¿Dónde estoy?
― En la manada de Conner. Es un amigo de mi alfa, Mason Cayne.
Hemos estado aquí desde que regresé. Theo estuvo cuidando de ti.
Ryan miró el suero que estaba conectado, entonces sintió su cuello,
donde Geoffrey lo había mordido. Sólo había una pequeña pieza 108
vendada allí.
― Dormiste durante dos semanas ― dijo Jimmy. ― Es el día Navidad.
Ryan suspiró y miró por la ventana. Las cortinas ahora se separaron un
poco, y pudo ver nieve cayendo por la pequeña grieta.
― Pensé que lo soñé, ― dijo.
Jimmy negó con la cabeza.
― No.
Ryan lo miró, lo miró a los ojos, y vio el dolor que estaba allí.
― Yo estaba... si el curador aquí dice... todavía estoy embarazado?
Jimmy estuvo de acuerdo.
― Sí, lo estás. Pude sentir el olor en ti después que comenzó la
transfusión de sangre.
Jimmy no parecía tan feliz que estaba a punto de ser padre, pero Ryan
pensó que era suficiente que el hombre había regresado por él.
― ¿Por qué me salvaste? ― Preguntó. ― Yo te engañé. Me odias.
Ryan trató de tirar la mano de Jimmy, pero el hombre la sostuvo firme.
― Por favor, déjame abrazarte durante un tiempo. Después de eso, si
estás enojado, que tienes todo el derecho a estar, voy a dejarte solo y
nunca tendrás que volver a verme. Conner ya se ofreció para protegerte y
a tu hermana, si quieres quedarte aquí.
― Andrea está aquí? ― Preguntó Ryan.
Jimmy concordó.
― No iba a salir después de que te traje.
― Pero ella est{ todavía en la escuela.
― Clases online en la computadora. Ella está bien. Ella lo está haciendo
bien. Puedo traerla aquí, si quieres. ― Ahora Jimmy era el que estaba
tratando de escapar, pero Ryan le tomó la mano, negándose a dejar que el
hombre se fuera.
Jimmy lo miró, y fue como si él no supiera lo que estaba a punto de
suceder.
Eso fue una risa. Jimmy no estaba seguro acerca de alguna cosa. Eso no
era como esto debería trabajar ahora. Jimmy era un hombre lobo
confiado, y Ryan era el traidor. 109
― ¿Por qué volviste por mí? ― Preguntó Ryan.
Jimmy tragó.
― Podemos hablar de eso m{s tarde.
― No. Quiero hablar de eso ahora ― dijo Ryan. ― No huyas de mí.
Pensé que me odiabas, y luego me despierto aquí dos meses... o dos
meses y medio después de que te fuiste.
Jimmy se estremeció ante eso, pero él se sentó en su asiento.
― Supongo que te debo mucho, ― dijo. ― Me fui porque pensé que
estabas usándome. Pensé que sólo estabas aplacándome con sexo hasta
que estuviera lo suficientemente bien como para ser dado a tu amo
vampiro para que pudiera luchar en sus deportes sangrientos.
Ryan negó con la cabeza.
― Eso es lo que querían, pero yo no iba a hacer eso. Iban a venir por ti
en diez días, y yo quería asegurarme de que te fueras de allí antes de eso.
Jimmy estuvo de acuerdo.
― Sí, eh, ahora lo sé. Leí los textos siendo enviados entre tú y tu
maestro, y pensé lo peor.
― Lo sé ― dijo Ryan, y él se miró las manos. ― ¿Pero por qué
cambiaste de opinión?
― Tu hermana vino a buscarte ― dijo Jimmy. ― Ella vino aquí, creo
que ella encontró a Mason y, por extensión, a mí, estábamos pasando sus
vacaciones aquí en vez de en nuestra propiedad de la manada. Algunos
de nuestros alfas están aquí también. Cuando la vi por primera vez,
estaba enojado. Supongo que pensé que estabas tratando de conseguir
manipularme por medio de ella, y cuando ella me mostró los textos que
se enviaron entre los dos, me di cuenta de lo que estaba sucediendo. Y
me di cuenta de mi error.
Jimmy tenía la cabeza hacia abajo, como si estuviera esperando que
Ryan empezara a gritarle o algo así, y el deseo de hacerlo estaba
definitivamente allí. Ryan había pasado los últimos dos meses en el
infierno después de que Jimmy lo dejó atrás, y él quería atacar.
Se mordió el labio inferior y apretó los puños en su lugar. 110
Entonces se puso las manos en el estómago.
― Est{ todo bien ― dijo.
Jimmy frunció el ceño, y luego lo miró.
― Qué?
― Te dije que está todo bien.
― No, no est{ bien. Cristo, Ryan, que casi te mueres!
― No es necesario recordarlo. Yo estaba allí ― Ryan soltó y de
inmediato se sintió culpable cuando Jimmy estuvo de acuerdo y bajó la
cabeza otra vez, como si esperara nada menos que la ira de Ryan, y tal
vez algo m{s con ella. ― ¿Crees que te odio?
― Yo me odio. No me puedo imaginar todo lo que te sucedió cuando
te dejé atrás sin forma de escapar de ese lugar.
― Bueno, no voy a endulzarlo ni nada ― dijo Ryan.
Jimmy esperó, pero Ryan no dijo nada.
― Entonces, ¿qué pasó?
― Te lo dije, yo no quiero endulzarlo.
― Entonces, no lo hagas. Lo que te pasó... quienquiera que fuera que te
hizo eso, no fue tu culpa. Eres mi compañero, y se suponía que era mi
trabajo protegerte y no lo hice.
― De qué est{s hablando? ― Preguntó Ryan. Había algo en las
palabras de Jimmy, que lo confundió, y necesitaba algunas aclaraciones
aquí.
Jimmy lo miró, y luego al estómago.
― El bebé. Estás embarazado.
― Lo sé ― dijo Ryan.
― No, pero ― Jimmy suspiró y se pasó una mano por el pelo. Había
llegado un poco más largo de lo que Ryan había visto por última vez, y
sus dedos ansiaban alcanzar y tocarlo. ― Si quieres, si aún me quieres,
entonces puedo ser un padre para el bebé. Puedo ayudarte a cuidar de él.
Y así, fue muy claro porqué Jimmy estaba haciendo esa mirada en sus
ojos cada vez que miraba en el estómago de Ryan. 111
― Jimmy, el bebé es tuyo ― dijo Ryan.
Los ojos de Jimmy se abrieron, y luego su boca cayó. Era casi un poco
divertido ver a un tipo grande y fuerte mirar como si hubiera sido
golpeado en el estómago.
Jimmy miró el estómago de Ryan, y luego de vuelta a él. Ryan podía
ver el blanco alrededor de los iris de color ámbar del hombre.
― Estás seguro?
Ryan tartamudeó, y luego el dolor y la rabia ganaron.
― Tú estúpido! ¡Fuera de aquí!
― No! Espera, eso no es lo que quise decir! ― Jimmy dijo, saltando
arriba y mirando como si se preparara para calmar a un animal asustado.
― Qué? Significó qué? Que yo estaba trabajando con un bando de
vampiros que me prostituía a mí mismo para ellos o algo como eso?
Bueno, no, es tuyo. Los vampiros no me tocaron en más de un año.
Ryan estaba llorando cuando gritó al hombre encima de él, y fue muy
embarazoso que tuvo que alejarse sólo para limpiarse sus ojos, y él no
quería mirarlo.
Jimmy no se lo permitió, claro. Justo cuando Ryan finalmente decidió
que quería que el hombre se fuera, Jimmy no se fue. Ninguno de ellos
podría decidirse, al parecer.
Jimmy suspiró.
― Cristo, Ryan, no tienes idea de cómo estoy feliz de oírlo. No pensaba
que estabas durmiendo con los vampiros que me mantenían como rehén.
Yo estaba muriendo de miedo que te hubieran violado o algo así. Eso no
es exactamente desconocido para los siervos de los vampiros.
― Y aun así me dejaste allí, pensando que iban a hacer una cosa de
esas? ― Preguntó Ryan.
― No. Quiero decir, nunca se me ocurrió que podría haber sucedido,
hasta que te vi en el suelo, sin moverte. Supongo que solo asumí que,
como un sanador, habrías sido muy importante para castigarte cuando
me fui.
― No soy tan importante ― dijo Ryan, y olfateó y frotó el puño sobre 112
los ojos de nuevo.
Por el rabillo del ojo vio algo blanco, y miró. Jimmy le estaba
entregando un pañuelo de papel.
Ryan lo miró por un segundo antes de tomarlo.
― Gracias ― dijo, y se secó los ojos y se sonó la nariz.
Todavía no miraría a Jimmy después de eso. No porque él estaba
disgustado con el hombre, sino porque estaba sólo... tan jodidamente
triste.
― No era así como pensé que sería ― dijo Ryan, y casi se rió sobre eso.
― Qué? ― Preguntó Jimmy.
Ryan finalmente lo miró, y él hizo un gesto entre ellos.
― Tú y yo. No tienes ni idea de cu{ntas veces fantaseaba que volvías,
me decías que lo sentías, y todavía me querías, a pesar de todo, y yo
llorando y tratando de enviarte fuera de la habitación no era la manera en
que yo lo imaginaba.
― Me lo merezco ― dijo Jimmy. ― Te dejé atrás. Yo te amé, pero
pensé que era mejor simplemente dejar de estar enamorado por alguien
que me traicionaría. En cuanto a eso, tú no me traicionaste. Me salvaste y
cuidaste de mí, y yo te di la espalda.
― No lo sabías ― dijo Ryan, y quería mirar a otro lado de nuevo, pero
Jimmy se acercó y lo tomó de la barbilla, obligándolo a mirar a los ojos de
Jimmy.
― Debería haber sabido.
Ryan le dio al hombre una sonrisa triste, la única cosa que podría darle
en ese momento.
― Bueno, se acabó. No hay ningún punto sobre eso.
Ahora Jimmy parecía que era el que estaba a punto de empezar a
llorar.
― Por favor, dime que no te lastimaron muy mal. Vi que estabas
quemando tus libros cuando llegué allí.
Ryan sintió que su rostro se calentaba.
― Sí, Gerard tomó control de todo. Mantuvo el calor bloqueado a una 113
determinada, temperatura, que era casi nada cuando comenzó la nieve.
Muchos muebles que se consideró innecesarios fueron tomados. El resto
lo quemé una vez que llegó a ser muy frío.
― ¿Y qué m{s pasó? ― Preguntó Jimmy. ― Dijiste que nunca te
violaron, de lo que estoy feliz, pero estaban claramente obligándote a
donar sangre, lo que no me gusta.
Visiblemente, si la forma cómo los ojos de Jimmy habían acabado rojos,
era nada parecido.
Ryan tragó.
― Esto sucedió varias veces, generalmente por Geoffrey.
― Geoffrey?
― El vampiro que viste alimentándose de mí. Qué le pasó?
El rojo en los ojos de Jimmy nunca se fue.
― Me ocupé de él.
El corazón de Ryan empezó a latir más rápido. Él no estaba seguro de
si quería saber los detalles sobre eso.
― ¿Te lastimó de cualquier otra manera? ― Preguntó Jimmy.
― Me golpeó un poco, sobre todo después de que Gerard y Geoffrey
volvieron y encontraron que te habías ido. Estaba aún más furioso
cuando Gerard vio mis textos con Andrea. Fue entonces cuando creo que
decidieron dejarme morir allí. Me tuve que convencer a cada día que otro
vampiro vendría a entregar suministros, comida y cosas que podría
quemar al fuego, pero solo fue Geoffrey, y él siempre estaba solo, con
sólo unas pocas cosas. No sé cuánto tiempo más habría durado si no
hubieras venido por mí.
Sólo pensar en ello, y finalmente aceptar que había estado tan cerca de
la muerte, hizo ahogar a Ryan, y Jimmy estaba en un momento,
envolviendo sus brazos alrededor de los hombros de Ryan y abrazándolo
con fuerza.
Ryan lo abrazó de vuelta. Él no se preocupaba por las sospechas y
rabia más. Lo único que importaba era que Jimmy había vuelto por él.
Jimmy estaba acariciando el pelo de Ryan y murmurándole 114
suavemente cuando besó la parte superior de la cabeza de Ryan.
― Lo siento mucho, bebé, lo siento mucho. Te amo. Yo te amo
demasiado.
Esto sólo hizo el llanto peor, escuchar esas palabras que Ryan sólo
había soñado. Él agarró la camisa de Jimmy aún más apretada y sólo
lloraba mientras sostenía su rostro sobre el pecho del hombre.
― Te amo, te amo. Voy a matarlo de nuevo si es preciso ― dijo Jimmy.
― ¿Quieres decir eso? ― Ryan le preguntó finalmente consiguiendo
un cierto control sobre su voz.
― Acerca de matarlo de nuevo? Desde luego, lo hago!
― No ― dijo Ryan, alejándose de los cálidos brazos de Jimmy. Casi
había olvidado lo que era ser apretado en ellos, y odiaba tener que
alejarse. ― Me amas?
Jimmy acordó.
― Con todo lo que soy. Te amo. Yo me emparejé contigo. Lo único que
no hice fue darte la cicatriz de apareamiento.
― Me amas? ― Ryan dijo, todavía sin poder creer eso. ― Incluso
después de lo que hice?
― Lo que hiciste fue salvar mi vida ― dijo Jimmy.
― Sí, pero yo tenía que esconder tanto de ti. Yo estaba de corazón roto
cuando te fuiste, al principio, pero después, cuando me detuve a pensar
en ello, habría hecho exactamente la misma cosa. Yo no me habría creído
tampoco.
― Bueno ― dijo Jimmy, y él sonrió mientras pasaba ahora los dedos
por el pelo de Ryan. ― Yo estaba un poco pregunt{ndome por qué no me
dijiste que tenías un teléfono para que yo pudiera enviar un texto a mi
alfa.
Ryan parpadeó un ojo, y luego ambos se echaron a reír, como si
acababan de oír la cosa más ridícula.
― Sinceramente, ni siquiera pensé en ello ― dijo Ryan, y luego se
cubrió la cara con las manos y negó con la cabeza antes de tomar una
respiración profunda y enfrentarse a su amante. ― Cristo, tanto podría
haber sido evitado si sólo hubiera pensado en hacer eso, pero yo estaba 115
tan paranoico sobre todo, que ni siquiera cruzó por mi mente.
Jimmy se inclinó para darle un beso, y Ryan le dio la bienvenida.
Fue primero un beso casto. Ellos apenas movieron sus labios alrededor,
pero luego lo hicieron, y se estaban besando como si no se hubieran
besado en años.
O, como en su caso era en realidad, en meses.
Ryan estaba excitado, especialmente cuando Jimmy metió su lengua en
su boca. Su polla no estaba palpitando de la manera que significaba que
estaba al borde de correrse en las sábanas ni nada, estaba demasiado
débil para hacerlo, pero aún podía sentirla creciendo dentro de él, y eso
lo hizo tan condenadamente feliz porque nunca pensó que lo sentiría
más.
Ryan tuvo que alejarse del otro hombre.
― ¿De verdad me amas?
― Sí ― dijo Jimmy inmediatamente.
― Y todavía me quieres?
― Sólo si me quieres de regreso.
Ryan casi se echó a llorar de nuevo.
― Lo hago. Te quiero. Yo también te amo. Te amo.
Se abrazaron y se besaron de nuevo. Ryan estaba empezando a sentirse
como un adolescente otra vez, en caricias con su primer novio, pero no
yendo más lejos que eso. Era difícil besar estando ambos animados pero
era inocente al mismo tiempo.
― Joder, te eché de menos ― dijo Jimmy. ― Yo estaba con tan maldito
miedo cuando me enteré lo que estaba pasando.
― No vamos a pensar en eso ahora ― dijo Ryan, y él extendió la mano
hacia abajo entre las piernas de Jimmy. El hecho de que Ryan no podía
tener una erección completa no significaba que iba a negarlo a este
hombre que llamó compañero.
Los ojos de Jimmy se cerraron, y dejó escapar un gemido de placer, y
luego sonrió, mostrando sus dientes blancos, perfectamente rectos.
― Joder, eso se siente bien ― dijo.
― Puedo decirlo ― dijo Ryan, e incluso si no podía obtener un buen 116
agarre en la polla de su compañero, gracias a los pantalones vaqueros
que llevaba, él todavía era capaz de acariciar su mano entre las piernas
del hombre, y podía sentir cada pulso de energía y placer que estremeció
al otro hombre.
― No, querido, espera ― dijo Jimmy, y él apartó la mano de Ryan
hasta que se rompió el contacto.
― ¿Qué tiene de malo? ― Preguntó Ryan. En su fantasía de final feliz,
siempre hubo sexo involucrado, y Ryan estaba deseando la intimidad
como un loco. ― Dime que no est{s a punto de negar el sexo a tu
compañero embarazado, ― dijo.
― Joder ― dijo Jimmy, y se pasó la mano por la cara. ― Créeme
cuando te digo que es la última cosa que quiero hacer ahora, pero acabas
de despertar. Todavía eres humano, y debes estar recuperándote, y no
preocupado en tener relaciones sexuales.
― Bueno, tal vez no sexo completo, pero realmente te quiero en la
cama conmigo ― dijo Ryan. ― No tenemos que hacer cualquier cosa que
piensas que me cansaría, pero tengo que tener eso, como ahora.
Jimmy se veía tan desgarrado. Era bonito.
― ¿Seguro que no quieres ir allí abajo primero y ver a todos? Tu
hermana? Tal vez abrir los regalos que tengo para ti?
― M{s de uno? ― Ryan preguntó, levantando una ceja.
Jimmy estuvo de acuerdo.
― Fui un poco loco con las compras en línea después de tu regreso. Me
imaginé que tendría que hacer la paz contigo por lo que hice, entonces
hay mucho bajo el árbol con tu nombre.
Ryan se rió.
― Pero yo no compré nada ― dijo, medio se sentía culpable por ello.
― Tú despertaste en la mañana de Navidad. Eso es más que suficiente
para mí ― respondió Jimmy.
Ryan sintió que iba a llorar de nuevo.
― Tengo que echarle la culpa a las hormonas ― dijo, sec{ndose los
ojos.
― Definitivamente ― respondió Jimmy. 117
― Tú y tu increíblemente fuerte esperma de hombre lobo me dejó
embarazado, incluso después de usar condones.
― Bueno, no siempre usamos condones. Corrimos fuera por un tiempo
allí, ¿recuerdas?
Ryan se rió de nuevo, y él atrajo la cara de Jimmy hacia adelante para
otro beso, que su compañero no luchó con él.
Entonces Ryan se retiró.
― De hecho, hay algo específico que quiero.
― Nómbralo y lo conseguiré para ti ahora.
― No tienes que salir de la habitación para ello ― dijo Ryan, y agarró
los grandes hombros de Jimmy y miró esperanzadoramente a los ojos del
hombre. ― Dijiste que la única cosa que no hiciste fue darme la cicatriz
de apareamiento, ¿verdad? Eso haría esto ser oficial?
Jimmy le sonrió.
― Ya es oficial, si quieres que sea, pero hará a cada uno dejarle saber
que eres mío.
― Entonces quiero eso ― dijo Ryan. ― Quiero quedarme en esta
habitación contigo y sólo estar contigo. Puedo bajar y conocer a los otros
después. Ahora sólo quiero estar aquí conmigo.
Jimmy sonrió suavemente, y se metió en la cama con él, evitando
cuidadosamente el tubo que estaba poniendo en líquidos en el cuerpo de
Ryan.
― Est{ bien, pero sólo si te acuestas y no intentas moverte mucho.
― Sí, creo que estoy un poco limitado aquí ― dijo Ryan, mirando en la
bolsa.
― Dime si estás con demasiado frío o malestar ― dijo Jimmy, y él
comenzó a tirar de las mantas que cubrían el cuerpo de Ryan.
Ryan estaba un poco incómodo cuando su ropa interior, un par que ni
siquiera reconoció, salió a la luz.
― No tienes que preocuparte por eso. Yo no creo que pueda estar duro
ahora. 118
― Lo sé, pero todavía me gustaría hacerlo de cualquier manera ― dijo
Jimmy, y deslizó sus dedos en la ropa interior elástica y la tiró abajo por
las piernas de Ryan, exponiendo su pene flácido.
― Esto es todo para ti, bebé. Eres el único cuyo placer me interesa en
este momento.
Y esa fue la cosa más dulce que Ryan había oído hablar en mucho
tiempo. Él sonrió mientras dejaba que sus dedos se deslizaran a través
del pelo suave de Jimmy.
― Después de estar con los vampiros durante tanto tiempo, no doy
una mínima sobre cualquier cosa, esa fue la mejor cosa que podrías haber
dicho.
Jimmy agarró una mano de Ryan y le besó los dedos, luego antes de
que dejara salir su lengua para lamer todo para arriba y abajo de la
longitud de la polla de Ryan.
Ella se movió a la vida cuando Jimmy lo hizo, y Ryan suspiró mientras
miraba a su amante, su compañero.
Jimmy le sonrió.
― ¿Ves? Puedes hacer esto.
― Entonces podemos tener sexo ― dijo Ryan, y su voz ya estaba
increíblemente sin aliento, que lo sorprendió, teniendo en cuenta que no
pensaba que sería capaz de tener mucho placer en todo.
― Podemos, sí podemos ― dijo Jimmy, y él se inclinó y besó
brevemente las bolas de Ryan, lo que puso el pene de Ryan a media asta,
antes de que lo mirara de nuevo. ― Pero ahora no. Tal vez esta noche,
pero todo lo que quiero hacer ahora es hacerte sentir bien, y yo no creo
que sea una buena idea para mí estar volteándote o flexionándote
alrededor cuando sólo acabas de despertar.
― Pero...
― Lo prometo ― dijo Jimmy. ― Voy a hablar con Theo sobre esto, en
el segundo en que estemos listos para descender. Créeme cuando digo
que no quiero nada más que joderte en el colchón, pero tengo que
mostrar cierta moderación aquí. Podría lastimarte.
Ryan no lo creía. Después de todo, él era un sanador, entonces por qué 119
necesitaba una segunda opinión de otro hombre?
Pero, de nuevo, él era un poco parcial en este momento, y Jimmy
parecía que se rompería si Ryan dijo una palabra.
Entonces asintió.
― Yo creo que sería bueno tener toda esta atención para mí.
― Y no ser{ la última vez que lo haga tampoco ― dijo Jimmy, y él
estaba dando claramente un suspiro de alivio antes de abrir la boca y
poner sus labios húmedos alrededor de la cabeza de la polla de Ryan.
Siguió chupando mientras movía su cabeza de arriba a abajo, tirando
de la polla de Ryan en su boca mientras su mano masajeaba suavemente
las bolas de Ryan.
Al principio, el placer fue leve, y la mayor parte del placer que Ryan
sintió era de estar viendo a Jimmy hacer lo que estaba haciendo.
Por supuesto, era fácil para él para olvidar a veces que Jimmy era un
hombre lobo, porque el hombre parecía tan normal.
Hasta que usó sus sentidos adicionales para averiguar lo que el
corazón de Ryan estaba haciendo, y Ryan respiró más duro y más alto su
corazón latía, cuando la boca de Jimmy se tornó más apretada.
― Maldita sea, eso es bueno. Oh, mierda, Jimmy ― Ryan gimió, y él
echó la cabeza hacia atrás en la almohada cuando comenzó a inclinar sus
caderas hacia arriba en la boca caliente de Jimmy. No le importaba tanto.
Cuando Jimmy abrió la boca para que su mano pueda jugar con la parte
inferior de la cabeza de su polla, Ryan estaba hecho. Él se vino duro,
disparando su carga en la boca de Jimmy, y el hombre se la tragó
ávidamente, chupando la polla de Ryan hasta que estaba suave de nuevo
y respirando con dificultad.
Sólo entonces Jimmy dejó la polla de Ryan escapar de sus labios, y
comenzó a presionar besos alrededor de los muslos de Ryan y, luego en
sus caderas y el estómago.
― Vamos a hacer esto mucho más en el próximo par de semanas.
― Creo que tienes razón ― dijo Ryan. ― El sexo habría sido
demasiado. Joder, yo quiero volver a dormir ahora sólo después de esto.
― Trate de mantenerte despierto para mí, sólo por un poco de tiempo 120
― Jimmy dijo, y luego subió por el cuerpo de Ryan, y Ryan notó los
dientes en la boca, al igual que los dientes de un vampiro, pero no había
sólo dos juegos de dientes. Todos estaban afilados.
― Mi cuello? ― Dijo Ryan.
― Sí ― Jimmy estuvo de acuerdo. ― ¿Tienes miedo?
― Ni un poco ― dijo Ryan, y él inclinó la cabeza hacia un lado para
dejar al descubierto su cuello y hombro para su compañero. ― Ser{ que
esto va a casarnos?
― Sí ― dijo Jimmy, y se inclinó para presionar un beso en el pecho de
Ryan, justo por encima de su corazón. ― Qué es lo que piensas de una
larga luna de miel cuando te recuperes? Sólo tú y yo, y puedo hacer todo
contigo en ese momento, incluso después que todo acabó. Pasaré el resto
de mi vida redimiéndome contigo por lo que hice.
Ryan agarró la cara del hombre, sintiendo el calor del cuerpo y su
amor.
― Ya lo hiciste. Ahora muerde mi hombro, lobo.
Jimmy lo hizo, y no le dolió. Se sentía bien, se sentía mejor que
cualquier cosa que Ryan había experimentado en su vida, y abrazó a su
compañero fuertemente contra su pecho, sintiendo el vínculo entre ellos
fortalecido, y él fue consolado por ello.
Finalmente estaba a donde pertenecía.

121
Capítulo Trece

Algún tiempo después…

Aeducan tosió sangre, y su visión nadó cuando fue derribado para el


suelo duro de concreto de la arena. Su cuerpo estaba pesado y sus
piernas se negaron a apoyarlo por más tiempo.
Eso estaba bien. El hormigón era frío contra su piel caliente, febril.
Lo había hecho. Había derrotado a las fieras que habían sido colocadas 122
en la arena con él. Los vampiros claramente no esperaban que
sobreviviera, enfermo como estaba, pero él ya lo había hecho.
Animales, osos y grandes felinos, no cambiadores, que eran grandes lo
suficiente como para todavía darle un descanso al alfa cuando estaba
completamente sano, y que habían estado con hambre y fueron
golpeados hasta el punto donde podrían luchar y matar a cualquier cosa
para tener la oportunidad de tener alimentos.
Aeducan iba a ser su comida. Odiaba tener que luchar contra ellos,
pero toda la simpatía se fue cuando se convirtió en una lucha por su vida
por encima de todo.
Además de eso, con la forma en que estaba enfermo, la carne de su
cuerpo probablemente los enfermaría de todos modos. Él realmente les
estaba haciendo un favor.
Ahora, sin embargo, no estaba tan seguro de que pasaría de mañana
por la noche en absoluto. Podía sentir el sabor de la sangre en la boca de
ser arañado y mordido, arañado y lanzado. Su cuerpo parecía que pesaba
con fuego sobre él, y todavía era leve como una pluma y se estremeció
como si tuviera frío.
Alguien estaba encima de él. Varios alguien. Sus voces eran
amortiguadas, como si hubiera algodón en sus oídos. El hombre rubio,
sin embargo, sacudió la cabeza, y los nuevos amos vampiros de Aeducan
lanzaron varios gritos desagradables muy altos.
Había algo en el hombre rubio por encima de él, sin embargo, algo que
heló a Aeducan y le daba ganas de salir corriendo.
Alguien debe haber traído una hamaca, porque lo siguiente que él
sabía, Aeducan estaba volando por los pasillos, y estaba en una
habitación diferente.
No sabía dónde estaba, o quién era este hombre de cabello rubio que
estaba por encima de él. Su curación alfa trató de entrar en vigor, podía
mover los dedos ahora, pero sus brazos no se movían.
Había tiras en él. Estaba atado. Este hombre por encima de él iba a
sacrificarlo.
No. 123
― Me dijeron que tenía que sacarte de tu miseria. Debería ponerte en
la miseria primero ― dijo, y sus ojos azules eran tan fríos como el hielo.
Aeducan nunca olvidaría ese color el tiempo que le tocara vivir.
El cerebro lento de Aeducan no entendía lo que quería decir, hasta que
una fuerza dura golpeó en sus manos, los huesos de los dedos
quebrándose.
Gritó. El aplastamiento continuó cuando el hombre por encima de él
golpeó en sus manos con lo que tenía que ser un martillo.
Aeducan no podía escapar. No podía huir!
Una breve tregua, y entonces no estaba gritando y gritando. Aeducan
apenas podía entender lo que se dijo. Pero logró captar un poco.
―...Sin ningún valor, hombres lobo!
Sí, era como los vampiros y sus sirvientes pensaban de los hombres
lobo. Este hombre iba a matarlo.
La peor parte fue cuando él se inclinó sobre el cuerpo de Aeducan y
Aeducan podía olerlo ahora. Trató de escapar, negarse al toque, pero él
todavía no podía moverse. Todo a su alrededor nadaba. No sabía lo que
era real y lo que no lo era.
El dolor en sus manos era real, y volvió a gritar cuando irrumpió en él
una vez más. El hombre estaba arrancando sus huesos rotos!
No podía escapar. No podía escapar.
Trató de decir que no, suplicar, aunque el alfa dentro de él odiaba
hacerlo, pero no estaba seguro si su boca estaba formando las palabras
adecuadas.
Iba a matar a este hombre. Tal vez no en esta vida, ya que él estaba a
punto de morir, pero en la próxima, seguro. No importa qué tuviera que
hacer, Aeducan iba a hacer a este hombre cada cosa horrible que le había
hecho a él. Él tomaría venganza.
El toque del rubio fue suave cuando él había mirado a Aeducan a los
ojos, pero Aeducan apenas podía ver nada a través de la niebla. Lágrimas
de dolor, y su propia enfermedad, le impedían tener una visión clara de
algo, pero oyó un grito de asombro sorprendido.
Entonces la puerta se abrió, y los gritos se reanudaron. 124
― Jesús Cristo, Mason, mira sus manos. Mira lo que hizo con sus
manos!

Fin
Tomando Venganza
en su Compañero
125

MARCY JACKS

Compañeros Grávidos 07
Marcy Jacks vive y trabaja en Ontario, Canada donde está
fervientemente llevando a cabo la vida del escritor al escribir sobre un
montón de chicos magníficos. A ella le encanta escuchar a los lectores y
se puede llegar a ella en: authormarcyjacks@gmail.com.

http://marcyjacks.com

Perfil del autor


Q: ¿Por qué escribir para la línea de romance M / M? 126
R: Ellos dicen que escribir acerca de lo que te apasiona, y me parece
que estoy lo suficientemente apasionada por esto para poder conseguir
un montón de ideas en mi cabeza. Además, me gusta el género.
Traducción, Edición, Diseño, y Corrección

IPHI

127
No lo pongan en Facebook
ni en ninguna red social.

Si lo ponen para descargar en su blog, agradezcan y


conserven el formato. Y Gracias por ponerlo

Es de fans para fans


Espero que les guste

Gracias a Hot por la traducción al portugués sino nunca lo


hubiera tenido.

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