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El autor Daniel Cassany nos habla en el libro “Describir el Escribir” del artículo
planteado por el autor Frank Smith (1983) en él se menciona como realmente
podemos aprender a escribir. El autor empieza su reflexión con una lista de todos
los conocimientos que posee un escritor competente, es por esto que propone la
lectura como la única forma viable de aprendizaje con los textos que contienen
todos los conocimientos que necesita. Pues es la única manera de formar no solo
bueno lectores sino buenos escritores, es decir que leyendo textos se aprende
gramática, mecanismos de cohesión y reglas de coherencia textual que son
necesarias para escribir.
Así mismo, un escritor debe dominar las características del código, la ortografía
de miles de palabras, la estructura, los registros y las formas de cohesión propios
de los textos que quiere escribir. Es un extraordinario, vasto y variado conjunto de
conocimientos. también el autor Smith propone que la manera más adecuada de
formarse es aprender de los textos ya escritos que han redactado otros autores,
ya que solo estos textos muestran el uso de todos los conocimientos lingüísticos
necesarios para escribir, y el único modelo para escribir una carta es una carta ya
escrita. Más bien parece que lo que tenemos que aprender se da de una forma
inconsciente, sin saber que estamos aprendiendo y también sin esfuerzo. Smith
sugiere que se aprende de esta forma al leer.
El autor da mucha importancia a este último punto, porque el niño solo aprende de
los grupos a los que pertenecen o quieren pertenecer, y Este hecho lo lleva a
distinguir dos maneras de escuchar: escuchar como un emisor que es cuando
además de comprender lo que se dice, queremos aprender a utilizar el lenguaje de
la misma forma, además queremos aprender a decir lo que escuchamos y
escuchar como un receptor es cuando entendemos lo que se dice pero no
deseamos aprender a decirlo. Entonces podría afirmarse que los aprendices de
escritores tienen que leer como un emisor para aprender a usar el lenguaje escrito
de la misma manera como lo usan los buenos escritores. Quiere decir que a
medida que leamos el texto, lo estamos escribiendo y reescribiendo con el autor.
Así pues, podemos leer de dos maneras y solo una de ellas sirve para adquirir el
código escrito.