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Percy Bysshe Shelley Adonais

La inquietud que ha surgido por presentar este escrito se debe gracias al estudio de
los poetas ingleses en el círculo Romántico de Acatlán, de cuyos miembros estoy
agradecida por el trabajo que hemos realizado en conjunto y, que cuyas mañanas
cálidas han sido una verdadera exaltación para mis propios pensamientos. Me
complace el encontrar que nos une un gran sentimiento y propósito, que ha de ser lo
romántico en donde nos hemos encontrado trabajando tras algunas semanas.
El texto que aquí se expondrá se titula ​Adonais del poeta inglés Percy
Bysshe Shelley nacido en Horsham, Inglaterra, 4 de agosto de 1792 y que murió el
8 de julio de 1822) . Pertenece a la segunda generación de los poetas románticos
junto a Byron Hunt y Keats. Hemos elegido el poema en ocasión a la muerte, pues
fue escrito como una elegía que canta la muerte del poeta digno de admiración y
compañero de Shelley, John Keats.
Con invasora lamentación por la inexorabilidad de su muerte, el poema se
compone de 55 estrofas que revelan el sentido melancólico y romántico de la
inglaterra del siglo XIX. El poema es altamente enriquecido con personajes de la
mitología griega que lo caracterizan de un modo peculiar y que dotarán de sentido y
figuras los versos.
Ha de presentarse este poema como un modo desacostumbrado hasta ese
tiempo en que los temas de la muerte se dejaban de lado y se maximiza el uso de la
enciclopedia. Éste se caracteriza por un modo rebelde de presentar las ideas en pro
de la libertad. Pero, sin que sea esta su verdadera pretensión aquí, se caracteriza
de un verdadero sentimiento de lamentación pero que ha de recuperar los ideales
románticos que la ensoñación trae al presente y coloca firme.
En el poema se toma a la muerte con un doble sentido. Es esta dualidad la
que tomaremos como guía para nuestro presente escrito, pues creemos que ahí es
donde se percibe la máxima expresión del romanticismo y la situación de la
sensación humana. Pues, aunque de modo paradójico pueda parecer, podemos
preguntar: ¿En dónde se siente y se reflexiona más la vida si no es en la muerte?
No se necesita ser experto en el tema para saber que es así, basta con la
experiencia propia que en su momento nos llena de melancolía y un sabor amargo
que recorre nuestra garganta, pero que, a su vez, nos invade de preguntas
imparables que cuestionan nuestra propia vida y la del otro.
Así mismo, encontramos que la muerte no distingue entre uno y otro,
animales, plantas, seres humanos, incluso en los hijos de los dioses se ha de
presentar.
Es por ello que no ha de ser casualidad que en éste poema, Shelley
introduzca la imagen de Urania, que Hesíodo en la ​teogonía presenta como ninfa
menor de las 9 hermanas. Es madre de Lino cuyo padre es Apolo. Cuenta la
mitología griega que Lino fue instructor de música de Heracles a quien le enseñó a
tocar la lira y cuya cólera al ser reprendido por su maestro hizo matarlo golpeándolo
con el instrumento en la cabeza. Se dice que Lino es la personificación de un treno
o himno fúnebre de la música griega. De ahí aparece la canción de lino como himno
de lamentación por su muerte.
Urania constituye una figura importante dentro del poema pues como musa,
ha de ser invocada como inspiración para el poeta. Así mismo, se trae
constantemente para que cante, recoja y guarde el alma de Adonais y lo eleve al
mayor plano celestial.
Tras su muerte lo ha de recoger con sus alas de luz lunar y lo ha de llevar a
los cielos donde el amor con musica le enseñará. Llora y su lágrima se desvanece
en su mejilla como el rocío en una flor que duerme.
Incluso en la joven primavera, las hojas se secaron cual otoño, mientras yacía el
cuerpo tendido entre sus jóvenes compañeros y de suspiros se llenaba el viento. La
melancolía se mostraba en su máximo fulgor. llanto, lamentos y cantos invaden su
corazón. Mientras Eco con sus propios pesares desde las montañas, llena de rocío
las flores.
Más, ¡aguarda! que Adonais no ha muerto, ha despertado del sueño de la
vida y se elevó a la eternidad. Junto al pesar de él, Shelley contempla el verdadero
despertar: <<Ya se fundió con la naturaleza; la voz de él, suena en toda su armonía,
del gemido del trueno al dulce pájaro de la noche; se siente y reconoce su presencia
en la luz y la tiniebla, en la hierba y la roca, y se difunde doquiera que palpita ese
poder que recogió su vida y cuyo amor sin desmayo conduce y rige el mundo lo
sostiene en su mano y lo ilumina.>>
Así bien, la muerte cual dolor que comienza enraizado en nuestras almas,
nos tienta la cabeza y nos dice: ¡no hay más y nada puede hacerse, llora y lamenta!
Tan fuerte, tan amargo es el sentir que en nuestro pecho peza. Tranquilizate y
piensa que la suerte de los hombres mala no te sea. En vigilia estás y preguntas si
hay algo más. El sueño te acoge y te llena de esperanza, tranquilo, dormido, sueñas
la libertad. La muerte llega y de esplendorosa luz te llena, ya no tienes que exaltarte
ni luchar, pues ha pasado el pesar. Sepultado, pálido y maquillado se encuentra el
cuerpo, mientras el alma se une a la madre que ha de ser la naturaleza y la
eternidad.
Ay de la muerte y su misterio, ¿cuál será?, ¿qué será? En lo romántico se
presenta como el despertar que se desea. Destino has de tener, la muerte ha de
ser, melancólica parecerá, más te hará despertar. vigilia turbia has llevado, el sueño
te ha rescatado, más la muerte estará y tu tumba se honrará.
Tú que morir querías, has tomado tu voluntad, te has hecho dueña de ella,
simpatizando con la libertad. Arrojaste al agua tu vida, dejando alado tu ser
individual, que ha de ser la gota que se une a la inmensidad e infinitud del mar.

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