problema es inédito el autor de la investigación redacta cada punto según su apreciación del problema, por tanto no lleva autor por párrafo. 1.2.1.1. Identificación del Problema
Debe mostrar claramente el problema
que se va a investigar, sus características esenciales, su distribución y su necesidad de solución. Plantear el problema significa afinar y estructurar más formalmente la idea de investigación. Se debe tomar en cuenta la descripción clara de sus características esenciales del problema, su magnitud, su distribución, sus límites y la importancia de la solución. 1.2.1.2. Formulación del Problema
La formulación del problema, llamado
también pregunta de Investigación. Es la pregunta principal que va a generar el objetivo general, por lo tanto es trazable con el tema, el objetivo general, el límite sustantivo y la justificación. Debe ser enunciado con signos de interrogación. 1.2.1.3. Delimitación del Problema
Se debe colocar límites de tiempo,
lugar y tema, para ello se debe tomar en cuenta: Límite Espacial: Es el lugar donde se encuentra el sujeto de estudio que no está relacionado muchas veces con el lugar de proceso de los datos, laboratorios u otros lugares que solo fueron instrumentos de medición o lugares de estacionamiento momentario del proceso de investigación. Límite Temporal: Es el tiempo o periodo de tiempo cuando se realizó el proceso de investigación. Para investigaciones de corte longitudinal pueden ser de tipo retrospectivo o prospectivo. Límite Sustantivo: Es el tema principal y se relaciona con el objetivo general. Planteamiento del problema Primero que todo, conviene aclarar que mientras un problema cotidiano puede ser una incomodidad, un malestar, un perjuicio, un “problema de investigación” es un interrogante que inquieta al investigador y que clama respuestas. El planteamiento del problema consiste, entonces, en la definición del problema que se pretende abordar a través de la investigación. Este punto surge a partir de la delimitación del objeto de estudio y del análisis del marco teórico, y da a conocer los interrogantes que orientan la investigación. Los problemas de investigación surgen de la realidad y el investigador los encuentra a partir de múltiples situaciones tales como: vacíos en el conocimiento, resultados contradictorios, dudas e inexplicaciones alrededor de un hecho, todo lo cual en conjunto, representa la identificación del problema. Este problema, entendido como interrogante, ayuda a determinar los objetivos, la hipótesis ayuda a decidir el rumbo que tomará la investigación. Para redactar esta sección es importante partir de un planteamiento global, una breve descripción del objeto de estudio, seguida por una pregunta o una serie de preguntas que ayuden a precisar lo que se pretende investigar.
ELEM ENTOS DEL PLANTEAM
IENTO DEL PROBLEM A • Este aspecto representa uno de los mayores retos para la elaboración de un trabajo especial de grado. Cuando se evalúa esta parte, casi siempre, no se detecta con claridad cuál es el problema de la investigación. Se observan deficiencias en su descripción. A continuación se exponen una serie de alternativas para superar estas irregularidades. • Contexto general (citar autores). Significa hacer una introducción teórica sobre la temática del problema abordado, en una extensión de 2 a 3 páginas aproximadamente. • Planteamiento del problema propiamente dicho: Verificar: Síntomas o manifestaciones negativas concretas del problema (indicadores, cifras estadísticas, causas, consecuencias, pronóstico, qué puede ocurrir sino se resuelve el problema, soluciones hipotéticas (sólo enunciar). Estos aspectos deben ser desarrollados en el planteamiento del problema en una redacción lineal sin hacer alusión directa a ellos, es decir, dejarlos colar en el contenido. • Formulación del problema (una interrogante global o varias). • Las preguntas del problema no pueden ser cerradas. Es decir, que se respondan con un sí o un no. Deben ser abiertas. • La extensión debe estar entre cuatro páginas como mínimo y un máximo de seis y ocho páginas. • Realizar todo el desarrollo, de lq general a lo particular.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
En tanto que en la sección precedente se intenta justificar la realización de la investigación, la sección del p la n te a m ie n to d el p r o b lem a debe proveer un argumento contundente que resuma los problemas y las premisas esenciales que hayan surgido. En este punto, es necesario destacar la demanda de nuevas investigaciones, de manera que podría hacerse mediante una reflexión acerca de la falta de investigación en el campo, o bien podría constituirse en un intento de resolver un dilema existente en la disciplina o de apoyar algún enfoque teórico ante un conflicto existente y optar por establecer una nueva directriz al respecto. Hay que tener presente que un problema científico es una duda acerca de la relación (causal, funcional o estadística) entre dos o más hechos o fenómenos, y que tal problema debe ser original, importante y verificable mediante la experiencia. Es muy importante percibir con claridad el problema que ha de investigarse y plantearlo como una relación de variables (Kerlinger, 1979), ya que de su correcto planteamiento depende el éxito del estudio (Rojas Soriano, 1981). En consecuencia, el problema debe plantearse de manera breve y precisa. Hay dos formas de hacerlo: la condicional y la interrogativa, por ejemplo-. La presente investigación pretende determinar si las características familiares predisponen a las adolescentes a embarazarse fuera del matrimonio. El problema de investigación es el siguiente: ¿predisponen las características familiares a la adolescente a embarazarse fuera del matrimonio? Existen numerosos ejemplos de problemas de investigación en la literatura científica, cada uno de los cuales inquiere acerca de la relación entre las variables en estudio. No obstante, el método de investígación que se haya elegido determinará la manera en que el problema se plantee. Por ejemplo, como se comentó en el capítulo 1 de esta obra con el método descriptivo se pretende determinar la naturaleza, frecuencia o distribución de las variables (Ary y col., 1982), por lo que el problema se plantearía como sigue: ¿Cuántas horas diarias ven televisión los niños de 5 a 10 años de edad que pertenecen a familias de clase baja? Otro problema en relación con el mismo tema es: ¿Qué tipo de programas de televisión ven con más frecuencia los niños que pertenecen a familias de clase baja? A continuación se presentan ejemplos de problemas de investigación de los otros métodos que Gay (1987) plantea. Método histórico ¿Cómo se proporcionaba educación sexual a los jóvenes en la cultura azteca? ¿Cómo se inició la educación para adultos en México? Método correlacional ¿Existe relación entre el nivel de aspiración profesional y la edad del primer matrimonio? ¿Los factores de personalidad predicen la permanencia en el trabajo? Método causal-comparativo ¿Existen diferencias de personalidad entre obreros con altos y bajos Índices de accidentes de trabajo? ¿Los niños que asisten a escuelas de enseñanza Montessori obtienen mejores puntuaciones en una prueba de sociabilidad que los que asisten a escuelas con enseñanza tradicional? Método experimental ¿Cuál es el efecto del programa Cambio Interno en el autoconcepto de adolescentes?
Qué efecto tiene la estimulación
social dependiente e independiente de respuestas sobre las vocalizaciones infantiles? Estos ejemplos no son los únicos posibles ni pretenden ser representativos de cada método particular, pero se presentan con el propó sito de orientar un poco más al investigador principiante. En otro orden de ideas, es importante aclarar que el apartado correspondiente al planteamiento del problema no únicamente debe contener el problema de investigación, sino que deben redactarse algunos párrafos previos con los argumentos que se mencionaron en la introducción del capítulo para, posteriormente, establecer el problema. Se trata de preparar al lector con los antecedentes que sustentan al problema que se ha de investigar. De esta manera, esta sección del primer capítulo contendrá los siguientes elementos: resumen de la justificación del tema, demanda de la investigación y establecimiento del problema: 1. R esum en d e la ju stifica ció n d e l tem a. Aquí se replantean algunas ideas que se tocaron en la sección introductoria, pero se condensa la información de tal forma que sólo se planteen los aspectos más relevantes de la misma. No debe ser una simple repetición del apartado anterior, sino una exposición más clara y convincente. Pueden volver a citarse algunos estudios que se hayan mencionado anteriormente pero, lógicamente, nunca deben repetirse frases o párrafos com pletos; sólo se permite retomarlos y replantearlos. Un autor puede estar citado en varias ocasiones a lo largo de la tesis cuando su escrito proporciona información relevante para la misma en diversos momentos. Recuerde siempre ir de lo general a lo particular y descender luego a lo específico. La tendencia general del investigador principiante es revelar en las primeras líneas de qué se trata específicamente el tema que comenta sin esperar ni dar tiempo a interesar al lector y a despertar su curiosidad. 2. D em a n d a d e la investigación. Como se mencionó en párrafos anteriores, debe describirse la necesidad de realizar la investigación y los motivos por los que se precisa llevarla a cabo. 3. E sta b lecim ien to d e l p r o b le m a . Hacia el final de la sección del planteamiento del problem a, una vez que se han agotado los dos puntos anteriores, es cuando se establece el problem a de investigación. Como se señaló previamente, el problem a se puede plantear en forma condicional o interrogativa, pero se debe explicitar que se trata del problem a de investigación.
Plantear el problema
Para el común de la gente un
problema constituye una dificultad o un obstá- culo por superar y, en general, un hecho no resuelto para lo cual hay que buscarle respuesta de algún modo. En el campo científico, un problema se percibe como un vacío teórico que se debe llenar, una formulación teórica que no ha sido explicada suficientemente por nadie, causas o efectos no identificados, etcétera. Se trata de un problema de conocimiento, el cual corresponde a “algo que se desea conocer y que aún no se sabe (o no se ha verificado), es decir, un punto a resolver dentro de nuestra indagación acerca de la realidad” (Sabino, 1998). Así, un problema que crea inquietud a un sociólogo o a un psicólogo puede ser: “¿por qué se dan los conflictos al interior de las familias de un determinado núcleo social?” y de un pedagogo: “¿Qué factores contribuyen a un mayor o menor rendimiento en el aprendizaje de la lectura y escritura en los niños de cinco a seis años de las escuelas del conglomerado social NN?”. No es posible concebir una investigación sin haberla encabezado por la definición clara y explícita del problema, pues este va a ser el eje alrededor del cual girarán todos los elementos implicados en las diferentes etapas y operaciones. METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN - VÍCTOR MIGUEL NIÑO ROJAS 48 Para decir algo, el problema, que naturalmente habrá sido formulado dentro de la misma línea del tema, orientará los objetivos, la justificación, el marco, la metodología, los instrumentos, y demás elementos del proceso, en una misma dirección. La razón es que todo el edificio que se monta en una investigación es precisamente para dar respuesta al problema inicialmente planteado. Es factible distinguir varios tipos de problemas. En primer lugar, hay problemas solubles e irresolubles. Los primeros son aquellos a los que es posible encontrarles respuestas verificables; los segundos son los que, por ser inaccesibles o por no estar bien formulados, aparentemente no tienen respuesta. Es obvio, que una investigación tiene sentido sobre la base de un problema soluble, pero sin que nadie aún le haya dado respuesta. Por ejemplo, un problema como “cuál es la razón por la que no se le permite a una persona conducir un vehículo después de tomar licor”, no amerita una investigación, pues la respuesta es casi evidente. Existen también los problemas teóricos y los empíricos o prácticos. Son teóricos si sitúan en validación o construcción de teorías o modelos del conocimiento; y empíricos si nacen de la experiencia y toman como técnica fundamental la observación de hechos que se sitúan en la práctica. Plantear el problema implica, en primer lugar, una descripción en la cual se delimita y se señalan sus antecedentes y estado actual; en segundo lugar, implica formularlo mediante algún tipo de pregunta. Los antecedentes se refieren a diagnósticos previos, a las razones o motivos que hacen meritoria o viable la investigación, entre otros factores. El estado actual tiene que ver con la contextualización, la situación y delimitación del problema en el campo en que se ocupa el investigador. Convendría especificar aspectos como población afectada o campos afectados, factores que inciden, instituciones o personas con las cuales tiene que ver, etcétera. De pronto sea necesario explicitar de dónde parte y hasta dónde llega, qué no hace parte del problema y qué sí. Las preguntas mediante las cuales se formula un problema deben ser claras, precisas y pertinentes. La claridad y precisión depende de la redacción: que sea una oración interrogativa corta pero que cubra ni más ni menos los elementos que conforman el problema. Según Giroux (2004), para que tengan pertinencia, las preguntas deben reunir tres requisitos básicos: - Han de estar exentas de cualquier suposición, por ejemplo, es incorrecta “¿Por qué a los niños del grado quinto no les gusta aprender el inglés?”. - Deben ser tales que se puedan responder por medio de una investigación empírica; por ejemplo: la pregunta “¿Es justo que los jóvenes deban estudiar”? no se podrá verificar, así se reúnan todo tipo de datos. - No deben referirse a situaciones ficticias o a una ejecución inalcanzable, así no es factible una investigación sobre “¿Si la luna tuviera ríos, sería posible habitarla?”. Existen dos tipos de preguntas, según a donde se dirijan, abiertas y cerradas. Las abiertas son aquellas, cuya verificación conduce a una respuesta positiva o negativa, ejemplo: “¿existe interés entre los estudiantes de la facultad NN porque la enseñanza se imparta mediante la metodología de proyectos?”. Las preguntas cerradas no tienen respuesta positiva o negativa, pues se dirigen a un aspecto concreto de la realidad, para lo cual se encabezan mediante partículas o expresiones interrogativas: por ejemplo, “¿qué componentes ha de tener un currículo que busque una formación centrada en la investigación?”. La partícula en este caso es qué (objetos o fenómenos). Otras formas interrogativas pueden ser: por qué (causa), quién o quiénes, (personas, agente), cómo (metodología, procedimiento), para qué (propósitos), dónde (lugar), cuándo (tiempo, fecha), etcétera. Respecto al significado o contenido de las preguntas, Hugo Cerda (2000) ofrece quince posibilidades muy prácticas que le pueden ayudar al investigador a concretar su problema. Por ejemplo: • Una dificultad que debe ser superada, identificada o explicada para que posteriormente sea eliminada. • Comprensión de una cosa, de sus relaciones, de sus efectos o de sus valores. • Determinar la(s) propiedad(es) de un fenómeno, de una actividad o de un conjunto de personas, con el propósito de definirla, describirla o analizarla.