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DIFERENCIAS ENTRE LA DISLALIA Y LA DISLEXIA

El lenguaje es uno de los elementos más importantes para la especie humana,


pues nos diferencia del resto de animales y nos otorga la capacidad de
razonamiento, reflexión, idealización, ya que nos da el poder de comunicarnos de
forma sistematizada y clara con nuestros iguales.

La ventaja que tenemos los humanos es de transmitir ese lenguaje por escrito, con
el fin de que perdure en el tiempo y permita a futuras generaciones aprender sobre
nuestros errores y aciertos. Pero nadie dijo que esto iba a ser fácil: existen ciertos
trastornos de aprendizaje y del habla que pueden comprometer el desarrollo
normal de un niño en términos lingüísticos.

Las manifestaciones de la dislexia y la dislalia en los niños pueden dar


lugar a varias confusiones, las cuales vamos a tratar de despejar a
continuación:

Diferencias principales entre la dislexia y la dislalia

La principales diferencias de estos dos trastornos, la dislexia y la dislalia,


radican en su definición, sus causas, los errores más frecuentes que
cometen las personas que las padecen y en su tratamiento.

1. Diferencias en la definición

La dislexia, es un trastorno de aprendizaje con dificultades en la lectura


que tiene origen neurológico y se considera crónico (es decir, las
personas adultas también padecen dislexia).
Las habilidades lectoras de la persona con dislexia están muy por
debajo de lo que se espera para su nivel de inteligencia y nivel
madurativo, y pueden presentar muchas dificultades para reconocer
palabras a nivel escrito. Estas dificultades les pueden llevar a evitar
actividades tan placenteras como la lectura, o a evitar otras actividades
como el estudio, lo que se relaciona con las dificultades académicas que
frecuentemente presentan.

Imaginemos por un momento las dificultades objetivas que tiene que


atravesar una persona con dislexia que está estudiando para un examen
o unas exposiciones. Qué frustrante, ¿verdad?, por ello es habitual que
las personas con dislexia que no saben que la padecen se sienten
desesperanzadas, tristes, con sentimientos de inutilidad, pensar que no
sirven para lo que están haciendo, etc.

A diferencia de la dislexia,

La dislalia es un trastorno del habla fonológico y no suele ser crónica. Es


considerado el trastorno del habla más común en niños menores de 5
años. Es una alteración en la articulación correcta de los fonemas, que
consiste en la incapacidad del menor para pronunciar correctamente los
sonidos de las palabras (o de determinados grupos de palabras) que
serían esperables para su nivel madurativo e intelectual.

2. Diferencias en los errores más típicos de la


dislexia y la dislalia
Los errores más frecuentes que presenta una persona con dislexia
durante al leer son: omitir letras y sonidos, trasladar la posición de las
letras dentro de una palabra, titubear durante la lectura o repetir lo que se
está leyendo… Además, al tener un ritmo más lento en la actividad
lectora, tienen dificultades para comprender lo que han leído.

Los errores típicos de un niño con dislalia son: omisión de sonidos,


sustitución de unos por otros de forma incorrecta (p. ej., dice esa o gesa,
en lugar de mesa). En los casos más severos es posible que sea
imposible comprender al niño.

3. Diferencias en cuanto a sus causas


Las causas de la dislexia parece ser que son neurológicas de base
genética, mientras que las causas de la dislalia son mucho más
variadas, y destacan las siguientes:

 Inmadurez de los órganos del habla


 Defectos en la audición que impiden la pronunciación adecuada de
las palabras
 Funcionamiento anormal de los órganos periféricos del habla,
siendo el motivo más común. Los fonemas que más afectados se ven
son: r, s, z, l, k y ch.
 Educación insuficiente o entorno familiar poco favorable para el
niño
 Defectos de los órganos que intervienen en el habla (labiales,
dentales, palatinas, linguales, mandibulares y nasales).

4. Diferencias en el tratamiento
Estos dos trastornos también difieren cualitativamente en la forma
en que se tratan. En la dislalia lo mejor es prevenir e intervenir de forma
precoz mediante un logopeda y ejercicios de apoyo en el hogar del niño.
En estos casos la fonética del niño puede mejorar con una terapia
adecuada, aunque es cierto que esto dependerá de las causas de la
dislalia. Habitualmente el logopeda se centrará en realizar ejercicios con
el niño de cara a mejorar la musculatura implicada en la producción de
fonemas.

Por otro lado, el tratamiento de la dislexia suele ser psicopedagógico y


logopédico. A parte de utilizar técnicas para mejorar la conciencia
fonológica, se deberá tener muy en cuenta el estado emocional del
menor o adolescente, con el objetivo de que este trastorno no le impida
desarrollar una sana autoestima.

Resumen de las principales diferencias


La dislexia, es un trastorno de aprendizaje con dificultades en la lectura
que tiene origen neurológico y se considera crónico (es decir, las
personas adultas también padecen dislexia).

 La dislexia es un trastorno del aprendizaje; la dislalia es


un trastorno del habla.
 La dislexia es considerada crónica, aunque se puede tratar
obteniendo notables mejorías y adaptaciones al ambiente; la dislalia, con
un buen tratamiento a tiempo, no es crónica.
 Las causas de la dislexia son neurológicas; las de la dislalia son
más variadas (evolutiva o fisiológica, audiógenas, funcionales,
orgánicas).
 La dislexia conlleva más problemas psicológicos y emocionales
asociados que la dislalia. Algunas personas con dislexia pueden tener
serios problemas de autoestima y les puede repercutir a lo largo de la
vida.
 El tratamiento para la dislexia suele ser psicopedagógico, mientras
que la dislalia suele remitir con el trabajo logopédico.

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