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Por otro lado, Jiménez (1988) la define como “un trastorno de la articulación de los
fonemas por alteraciones periféricas de los órganos del habla”, en la cual se suele
diferenciar entre la dislalia funcional (rotacismo, sigmatismo, etc.) y la dislalia
orgánica (audiógena. disglosia, etc.)
Si hay retraso mental, déficit sensorial o motor del habla, o privación ambiental,
las deficiencias del habla son superiores a las habitualmente asociadas a estos
problemas
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FACTORES AMBIENTALES
Otro aspecto es el nivel cultural del ambiente en que se desenvuelve el niño, esto
se ha notar en el vocabulario empleado y en la fluidez de expresión, igualmente en
el modo de articulación, ya que en muchas ocasiones también es defectuosa en el
medio en que se mueve.
FACTORES HEREDITARIOS:
El factor hereditario cuando existe, se puede ver reforzado por la imitación de los
errores que cometen al hablar los familiares, si es que estas deformaciones
articulatorias persisten en ellos.
DEFICIENCIA INTELECTUAL:
En estos casos se puede hablar solo de dislalia funcional, sino de problemas más
complejos, donde aparece la dislalia como síntoma más, como tal, poder ser
igualmente tratada, aunque en estos casos las posibilidades de reeducación estén
más limitadas y condicionadas a la capacidad intelectual del sujeto.
SINTOMATOLOGIA
5. DISLALIA AUDIÓGENA
El niño que presenta una dislalia audiógena, motivada por un déficit auditivo,
tendrá especial dificultad para reconocer y reproducir sonidos que ofrezcan entre
sí una semejanza, al faltarle la capacidad de diferenciación auditiva.
CAUSA
TRATAMIENTO
6. DISLALIAS ORGÁNICAS
Labiales.
Linguales.
Dentales.
Palatinas.
Nasales.
Mandibulares.
TRATAMIENTO
En las dislalias orgánicas se debe realizar la corrección de la deformidad o
malformación anatómica, y juzgar posteriormente la terapia logopédica.
c) Curso estable que no se ve afectado por las remisiones y recaídas que tienden
a ser características de muchos trastornos mentales.
Dislalia fonética
La dislalia fonética es por el contrario una alteración en la realización de los
sonidos, en la ejecución de los sonidos por los articuladores. No hay afectación de
procesos.
No existe problema de discriminación auditiva, los errores son constantes y
afectan a sonidos concretos o a grupos de sonidos concretos. La ejecución no se
beneficia
de la presencia de un modelo a imitar y, por tanto, no mejoran espontáneamente
en repetición. Las dislalias fonéticas se conocen tradicionalmente por el
nombre de los sonidos que se ven afectados. Las más comunes son el rotacismo
(problemas con el sonido vibrante múltiple /rr/) y el sigmatismo (sonido /s/).
Desarrollo anormal: Tiene lugar cuando el niño adquiere los fonemas de un modo
retrasado o desviado, lo que le lleva a pronunciar mal, con las consiguientes
dificultades para hacerse comprender. Se presentan omisiones, distorsiones o
sustituciones de los fonemas del habla e inconsistencias en la pronunciación de
sonidos coincidentes (por ejemplo, el niño puede pronunciar correctamente
fonemas en algunas posiciones de palabras pero no en otras).
Incluye:
Lambdacismo.
Dislalia.
Excluye:
Apraxia (R48.2).
Disfasia o ataxia sin especificación (R47.0).
C. Si hay un retraso mental, un déficit sensorial o motor del habla, o una privación
ambiental, las deficiencias del habla exceden de las habitualmente asociadas a
estos problemas.
* Adición: Consiste en intercalar junto al sonido que no puede articular, otro que no
corresponde a la palabra. Por ejemplo, dice “balanco” en lugar de “blanco”, “teres”
en lugar de “tres”.
Los fonemas con mayor frecuencia de alteración son /l/,/s/,/z/ ,/r/ y /rr/. En segundo
lugar /f/,/k/,/g/ y /ch/.
REFERENCIAS
http://www.tajamar.es/wp-content/uploads/2017/06/dislalia-tajamar.pdf