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DISLALIA

Intervención en el desarrollo del lenguaje


Profesor: Antonio Martínez
Dislalia

ÍNDICE

1. DEFINICIÓN……………………………………………………………………….. 4

2. ETIOLOGÍA………………………………………………………………………… 4

3. SÍNTOMAS Y CARACTERIZACIÓN……………………………………………. 5

4. EVALUACIÓN…………………………………………………………………….. 6

5. DIRECTRICES GENERALES DE INTERVENCIÓN…………………………… 13

BIBLIOGRAFÍA……………………………………………………………….……. 18

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Dislalia

RESUMEN
La dislalia es una alteración en la articulación de un fonema o grupo de fonemas
aislados. La persona manifiesta una incapacidad para pronunciar o formar
correctamente cierto fonema o grupos de fonemas. Son las más frecuentes y conocidas
de todas las alteraciones del lenguaje. Puede ser debida a: retraso fonológico, trastorno
fonético o problemas físicos; pero generalmente debido a su carácter multicausal, se hace
una clasificación etiológica. Al evaluarlas tratamos de analizar una conducta dinámica
como es la comunicación oral tomando como base las características fónicas estáticas
del lenguaje. Los niños con dislalias necesitan tratamiento con un especialista que
aplicará el tratamiento adecuado, con la ayuda de juegos y mucha colaboración de la
familia y no desaparece sin una intervención, cuyo objetivo será que el niño aprenda a
articular los sonidos correctamente.

PALABRAS CLAVE

ARTICULACIÓN FONEMAS SONIDOS LENGUAJE

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Dislalia

1. DEFINICIÓN
La Dislalia se presenta como una alteración en la articulación de un fonema o
grupo de fonemas aislados. Podríamos decir que la persona manifiesta una incapacidad
para pronunciar o formar correctamente cierto fonema o grupos de fonemas. La
dificultad articulatoria puede afectar a cualquier vocal o consonante y referirse a uno
solo o varios fonemas en número indeterminado, aunque su mayor incidencia puedan
observarse en aquellos sonidos que requieren de una mayor habilidad en su producción
por exigir movimientos más precisos. Si la dislalia es muy grave se pone en peligro la
función comunicativa del lenguaje de la persona haciéndolo ininteligible. Si es un sólo
fonema el afectado, hablaremos de dislalia simple, mientras que si son más los fonemas
alterados, denominaremos la alteración como dislalia múltiple. También comentaremos
que dependiendo del fonema afectado, las dislalias reciben denominaciones diferentes
que se establecen a partir del nombre griego del fonema, más el morfema ¨tismo¨ o
¨cismo¨. Así, la articulación defectuosa del fonema/r/ recibe el nombre de rotacismo; la
del fonema /b/ betacismo; la del fonema /d deltacismo; la del fonema /s/: sigmatismo,
etc.
Las Dislalias son las más frecuentes y conocidas de todas las alteraciones del
lenguaje. En la edad escolar destacan por su relativa frecuencia. Es importante su
intervención precoz, puesto que el niño al ser poco hábil para pronunciar correctamente
aquellos fonemas, sílabas o palabras que suponen una sincronía precisa de los órganos
periféricos del habla ( respiración, fonación, articulación), puede ser considerado por su
entorno como retrasado y ser numerosas ocasiones ridiculizados por sus compañeros. El
niño a consecuencia de la dislalia puede reducir sus interacciones sociales y presentar
conductas desadaptativas. La actitud familiar y escolar son esenciales en el
mantenimiento de la dislalia y en su posterior rehabilitación.

2. ETIOLOGÍA
Puede ser de forma genérica debida a:
 Retraso fonológico. Los niños con esta deficiencia necesitan comunicarse con
palabras básicas porque las frases más complejas no las logran construir.
 Trastorno fonético. Se produce cuando el pequeño no ha desarrollado los
movimientos necesarios para articular las palabras correctamente. Los músculos
encargados de producir el habla no funcionan como deberían y por lo tanto
aparecerán las omisiones, distorsiones o sustituciones en el lenguaje.
 Problemas físicos. Cuando los órganos implicados en el habla se ven afectados
las palabras son difíciles de pronunciar. Las lesiones en el sistema nervioso, una
mala oclusión dental, el frenillo lingual o malformaciones como paladar hendido
serían causas de la dislalia.
Pero generalmente como son varias las causas de esta alteración articulatoria, se
hace una clasificación etiológica:
 Dislalia evolutiva o fisiológica.- Para articular correctamente los fonemas de un
idioma, las personas necesitamos una suficiente madurez cerebral y un adecuado
desarrollo y funcionamiento del aparato fonoarticulador. Esto se consigue a

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partir de una edad determinada que algunos autores (AZCOAGA y otros, 1992)
sitúan alrededor de los seis años, que es cuando los niños suelen alcanzar su
corrección articulatoria, aunque antes o después puedan aparecer alteraciones en
el punto de articulación, en la regularidad de la emisión o sobre la coordinación
del conjunto del aparato neuro-muscular que regula la emisión.
 Dislalia audiógena.- La correcta articulación del lenguaje depende, entre otras
variables, de la capacidad auditiva del sujeto. El niño que no oye bien, que no
percibe su entorno sonoro de forma adecuada, difícilmente puede llegar a
articular correctamente su lengua, ya que confundirá fonemas que ofrezcan
alguna semejanza, al no poseer una correcta discriminación auditiva. La causa
de la Dislalia audiógena está, pues, en una pérdida de sensibilidad auditiva por
parte del sujeto, siendo los sujetos con deficiencia auditiva quienes presentan
mayoritariamente este trastorno. En este sentido conviene subrayar que ¨la
hipocausia, en mayor o menor grado, impiden la adquisición y el desarrollo del
lenguaje, dificulta el aprendizaje de conocimientos escolares, trastorna la
afectividad y altera el comportamiento social (PERELLÓ,1990).
 Dislalia orgánica.- Las anomalías o malformaciones en los órganos periféricos
del habla (labios, lengua, paladar, etc) generan disfunciones en la articulación
fonemática que se denominan dislalias orgánicas. Según el órgano afectado, las
dislalias admiten distintas denominaciones (labiales, linguales, palatales,
alveolares, dentales, nasales).
 Dislalia funcional.- Su etiología es multifactorial, aunque en algunos casos
pueda ser una única causa la desencadenante del trastorno.

3. SÍNTOMAS Y CARACTERIZACIÓN
A continuación vamos a distinguir entre los distintos tipos de dislalias:
 Dislalia evolutiva o fisiológica.- Es aquella fase del desarrollo del lenguaje
infantil en la que el niño no es capaz de repetir por imitación las palabras que
escucha, de formar los estereotipos acústico- articulatorios correctos. A causa de
ello repite las palabras de forma incorrecta desde el punto de vista fonético.
Dentro de una evolución normal en la maduración del niño, estas dificultades se
van superando y sólo si persisten más allá de los cuatro o cinco años, se pueden
considerar como patológicas.
 Dislalia audiógena.- Un elemento fundamental en la elaboración del lenguaje es
la percepción auditiva, siendo necesario para conseguir una correcta articulación
el poseer una correcta audición. El niño que no oye nada, no hablará nada
espontáneamente, y el niño que oye incorrectamente, hablará con defectos. Estas
alteraciones de la articulación producidas por una audición defectuosa, se
denominan dislalia audiógena. Las alteraciones que presente en el hala el niño
hipoacúsico, dependerán de la intensidad de la pérdida de oido que tenga y de la
capacidad del niño para compensarla. Además de dislalia suelen presentar
alteraciones de la voz y del ritmo.
 Dislalia orgánica.- Son aquellos trastornos de la articulación como
consecuencia de que los órganos fonoarticulatorios tienen una alteración
(genética, congénita,...). La dislalia orgánica puede tener su origen en
alteraciones anatómicas y/o fisiológicas o malformaciones de los órganos

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periféricos (labios, mandíbula, lengua, paladar, dientes); en este caso, este tipo
de dislalia se denomina disglosia:
- Disglosia mandibular.- La disglosia mandibular es el trastorno de la
articulación de los fonemas, por alteración de la forma de uno o ambos
maxilares. Puede ser de origen congénito, del desarrollo, quirúrgico y
traumático.
- Disglosia labial.- El trastorno de la articulación de los fonemas por la
alteración de la forma, movilidad, fuerza o consistencia de los labios. Las
más frecuentes se deben a los labios leporinos, frenillo, labial superior y
neuralgia del trigémino.
- Disglosia lingual.- Alteración de la articulación de fonemas por un trastorno
orgánico de la lengua que afecta a la rapidez, exactitud y sincronismo de los
movimientos de la lengua. Las más frecuentes son: El frenillo lingual,
paralisis del hipogloso, macroglosias, y microglosias.
- Disglosias palatinas.- Es la alteración de la articulación causada por
alteraciones orgánicas del paladar óseo.
En cambio, si el trastorno articulatorio está causado por una alteración en el
control muscular de los mecanismos del habla (respiración, fonación,
resonancia, articulación y prosodia) debida a lesiones en los centros neuronales
cerebrales (sistema nervioso central), entonces se tratará de una disartria. Los
síntomas específicos son: la sustitución, omisión, inserción y distorsión de los
fonemas
 Dislalia funcional.- Alteraciones permanentes en la pronunciación de
determinados sonidos, debidas fundamentalmente a dificultades motrices, pero
sin causa orgánica. Afectan generalmente a los sonidos que se adquieren más
tardíamente. Se establece más allá de los 4 años, y hace falta entrenamiento para
que desaparezcan. Sus causas pueden ser:
- Falta de control en la psicomotricidad fina.
- Déficit en la discriminación auditiva.
- Estimulación lingüística deficitaria.
- Errores perceptivos e imposibilidad de imitación de movimientos.
- De tipo psicológico (sobreprotección, traumas, etc).
Los síntomas son: la omisión, sustitución o deformación de los fonemas. Los
tipos de errores que se producen en la dislalia funcional son: sustitución,
omisión, inserción y distorsión.

4. EVALUACIÓN
En primer lugar es necesaria una exhaustiva evaluación del niño para conocer
cuál es la causa de la dislalia. Para ello se realizará una anamnesis, para conocer datos
que puedan ser relevantes para el diagnóstico e intervención. También se hará una
evaluación de la articulación en repetición, lenguaje dirigido y espontáneo. Se
examinará la inteligencia, la psicomotricidad, la percepción y orientación espacial, la
percepción temporal y ritmo, la percepción y discriminación auditiva, la personalidad y
otros exámenes complementarios.

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Es preciso no confundir una dislalia funcional que ya tiene un carácter


patológico por una función anómala de los órganos periféricos, con una dislalia de
evolución que no es más que el defecto de articulación normal en la evolución del
lenguaje. Pero si esta articulación defectuosa persiste pasados los 4 ó 5 años, ya puede
tener un carácter patológico y será conveniente comenzar lo antes posible el tratamiento
adecuado. Si no se atiende debidamente, el defecto se afianza, los órganos fonatorios
pierden plasticidad y su corrección se hará cada vez más costosa.
Al evaluar las dislalias tratamos de analizar una conducta dinámica como es la
comunicación oral tomando como base las características fónicas estáticas del lenguaje.
El niño y la niña perciben los fonemas dentro de una cadena de sonidos estructurados
linealmente en el tiempo: en una producción del tipo: “ven aquí papá” lo que llega a la
zona cerebral receptiva de la audición es /vénavérapapá/, la decodificación fonética se
realiza a partir de este modelo. Cuando presentamos palabras o fonemas sueltos para su
imitación estamos distorsionando el mensaje, es una lenguaje “anestesiado”, estático. La
valoración final de la evaluación articulatoria tendrá como base la del lenguaje
espontáneo de la niña o del niño.
Las características fonéticas y fonológicas del español han de ser conocidas a
fondo.

 Tipos de errores.- Las dislalias pueden producirse por:

- Sustitución.- El niño o niña articula un fonema en lugar de otro. Si no puede


articular correctamente un fonema lo reemplaza por otro conocido y más
fácil de producir para él o ella. Otras veces se da un error en la percepción
auditiva y el sujeto no discrimina entre ambos fonemas. Esta sustitución
puede darse en cualquier posición dentro de la palabra. Es el error más
frecuente y el más difícil de corregir puesto que se da un hábito articulatorio
erróneo. Si a un niño o niña que sustituye un fonema por otro le hacemos
repetir dicha articulación volverá a decirnos de nuevo su articulación errónea
puesto que en él o ella es normal esta sustitución si no es consciente de ella.
Muchas veces dobla la consonante posterior, sobre todo en los vulgarismos.
Las sustituciones más frecuentes son /l/, /d/, /g/ y /r/ en lugar de /ȓ/; /t/ por
/k/; sinfón con /l/ por sinfón con /r/, /ϴ/ por /f/ y /d/ por /l/. Ejemplos:
“damón tiene un toche”
“el peggo no tene labo”
“mi lazo es daggo”
“toma cacé con deche”
“mila qué cattera tan monita”

- Distorsión.- Es el segundo de los errores en la dislalia en orden a su


frecuencia. El niño produce un sonido de una forma distorsionada e
incorrecta, generalmente aproximada al fonema correcto. A veces suele
hacer un movimiento “extraño” como sacar la lengua o vibrar los labios en
lugar de de vibrar la lengua. Se suele deber a una posición errónea de los
órganos articulatorios, a una falta de control del soplo espiratorio, a la falta
de vibración de las cuerdas vocales, etc. Se dan más en posición
intervocálica.

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- Omisión.- No articula los fonemas que no domina. Es una de las


características del retraso en el desarrollo del lenguaje ya que es una fase de
dicho desarrollo cuando se da a principio de palabra: “ato”, “oche”, “toño”.
También es muy frecuente en el lenguaje de niños y niñas con deprivación
afectiva y/o sociocultural y en los vulgarismos., aunque en estos casos se
suele omitir la sílaba entera o el fonema en medio de la palabra si ésta es
polisílaba o de difícil articulación: “tefono”, “teéfono”… Lo más frecuente
es omitir el fonema cuando está en situación implosiva, cerrando sílaba:
“cuatto”, “pueto”, y en los sinfones es frecuentísimo: “pato”, “fesa”.

- Adición.- Un error menos frecuente es la inserción de un fonema para


ayudarse en la articulación de otro más dificultoso. Se suele dar en los
sinfones y en el lenguaje vulgarizado: “palato”, “escampia”.
El tipo de error en la dislalia es muy importante de valorar a la hora de
plantearnos la intervención logopédica para su corrección pues nos hará elegir
una estrategia concreta.

 Proceso de evaluación de las dislalias.- Presentamos ahora qué aspectos


articulatorios han de evaluarse y por cuál comenzar. Se proponen los siguientes
y por este orden:
- Evaluación de la articulación:
o Lenguaje espontáneo para detectar distintos tipos de errores y su
lugar de colocación dentro de la palabra.
o Lenguaje dirigido sin referencia visual (intraverbales).
o Lenguaje dirigido con referencia visual (tactos).
o Imitación provocada de frases, palabras y sílabas.
- Evaluación de las bases funcionales de la articulación:
o Discriminación auditiva de fonemas.
o Habilidad motora de lengua, labios y paladar blando.
o Cantidad, control y dirección del soplo.
o Capacidad respiratoria y tipo de respiración.

Objetivo Aspecto a evaluar Estímulo - material


Lenguaje espontáneo
Conversación libre
Sin referencia visual
Lenguaje Preguntas inductoras
Evaluación de la dirigido
Con referencia visual
articulación
Objetos-fotos

Lenguaje repetido
(imitación provocada) Frases, palabras…

Evaluación de las
Audición Discriminación auditiva Sonidos – palabras
bases funcionales de

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la articulación Lengua
Habilidad Labios Imitación
Motora Paladar Órdenes
blando
Aparato Cantidad Imitación
articulador Soplo Control Órdenes
Dirección Materiales de soplo
Capacidad Imitación
Respiración
Tipo Exploración
Cuadro 1. Proceso de evaluación de las dislalias

Todo ello ha de ir anotado en la hoja de evaluación. En ella van en blanco los


fonemas del español y sombreados los que no lo son en Andalucía o no pueden
darse según la posición dentro de la palabra, por ej. /r/ no se da en posición
inicial, no existe el grupo consonántico /ĉl/, etc. (Cuadro número 2). En dicho
cuadro aparecen colocadas en su lugar correspondiente las palabras que pueden
ser usadas en la evaluación de las dislalias siguiendo las estrategias de imitación
provocada (lenguaje repetido) y la de tactos (lenguaje con referencia visual); se
han escogido estas palabras por su sencillez y por la facilidad de disponer de los
objetos, fotos o dibujos correspondientes.

Fonemas consonánticos

Ante Sinfones
Inicial Intervocálica Final
consonante l R
p polo copa optar plato comprar
t tele seta atlas tren
k cama boca acto clavo cristal
b boli escoba obtener pueblo brazo
d dedo nudo admitir tomad ladrillo
g gato agua signo globo grifo
f foca gafas flan fresa
ϴ zapato taza puzle pez
s silla casa vestido ojos
y yema payaso
x juguetes conejo reloj
ĉ chupete coche
m mesa camisa campana
n niño cuna manzana pan
ņ uña
l lápiz bola calcetín sol
ļ llave calle
r pera percha bajar
ȓ rana perro

Fonemas vocálicos y diptongos más usuales

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a cara aḭ baila já Lluvia


e pelo aṷ jaula jé Pie
i indio eḭ peine wá Agua
o ojos wé Rueda
u puño

ANOTACIONES

Sustitución: escribir el fonema Lenguaje espontáneo: ο


Distorsión: ͝ Intraverbales: □
Omisión: ͠ Tactos: ∆
Adición: escribir la palabra Lenguaje repetido: ―
Cuadro 2. Hoja de evaluación de las dislalias

Evaluación de la articulación.- Explicaremos cada una de las estrategias del


cuadro 1.
 Lenguaje espontáneo.- Después de que el niño o la niña nos conozca,
mantendremos juntos una conversación individual y agradable, sobre
temas que les interesen procurando crear un ambiente que favorezca la
comunicación entre ambos. Ayudan mucho en estos primeros momentos
los muñecos de guiñol y el material gráfico de láminas, cuentos, etc. Con
un poco de práctica se consigue que el niño/a articule todos los fonemas.
Conviene ir anotando los fonemas que articule incorrectamente en la hoja
de evaluación (cuadro número 2) sin olvidar el signo correspondiente al
lenguaje espontáneo (O).
 Intraverbales.- En la misma sesión evaluadora analizaremos mediante
lenguaje dirigido a base de preguntas cuyas respuestas impliquen la
articulación del o de los fonemas a evaluar. En el cuadro número 3, se
proponen algunos de los intraverbales que se pueden utilizar.

/p/ - /t/. Para entrar en el coche hay que abrir la …


/k/ - /ĉ/. Tiene cuatro ruedas y hace pipí, piií. Es un …
/b/ - /s/. Bebo agua en un …
/d/ - /n/ - /r/. Para comprar juguetes y golosinas hace falta …
/f/ - /g/. Los bomberos apagan el …
/ϴ/ - /p/ - /t/ - /s/ o /k/ - /l/ - /ϴ/ - /t/ - /n/ - /s/. En los pies nos ponemos
los … (zapatos y calcetines).
/ļ/ - /b/. La puerta se abre con la …
/y/ - /m/. El huevo tiene dentro una cosa amarilla. Es la …
/x/ - /b/ - /n/. Me lavo las manos con agua y …
/ ņ/. En la punta del dedo tengo una …
/ ȓ/ - /l/ - /x/. Para saber qué hora es miramos el …
/t/ - /r/. El papá de las vacas es el …
/pl/. La sopa se echa en el …
/bl/. La leche es de color …
/fl/. Los indios tiran … con el arco.
/kl/. Lo contrario de oscuro es …
/gl/. Se inflan con aire y son de colores. Son los …

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/pr/. Voy a la tienda a … golosinas.


/br/. Se monta en una escoba y sale en los cuentos. Es la …
/fr/. En invierno hace mucho …
/tr/. Vamos a contar: uno, dos y …
/kr/. Veo la calle a través del … de la ventana.
/dr/. El gato maúlla y el perro …
/gr/. Para que salga el agua abro el …
Cuadro 3. Evaluación de la articulación intraverbales

 Tactos.- Con objeto de ir afinando más y especificando qué tipos de


errores de dan, evaluamos la articulación usando la estrategia del
lenguaje dirigido con referencia visual. Siempre que poseamos el objeto
real lo usaremos preferentemente; en los casos en que no nos sea posible,
utilizaremos fotos, dibujos, etc. Anotar en hoja de evaluación (cuadro
número 2). Es muy importante no olvidar la evaluación por tactos puesto
que los procesos implicados no son los mismos que ante las estrategias
antes mencionadas; no usamos las vías o rutas auditivas; los estímulos no
son orales sino visuales.
 Imitación provocada.- El uso del lenguaje repetido para la evaluación de
las dislalias es el que está más extendido. Nosotros proponemos usar las
palabras de la hoja de la evaluación y formar con ellas frases sencillas y
adecuadas a la edad de cada sujeto. A estas alturas no será necesario
usarlas todas sino solamente aquellas que llevemos anotadas como
incorrectas para confirmar las dislalias. Anotar los errores en la hoja de
evaluación.
En este punto ya podemos diagnosticar claramente todas las dislalias y los tipos
de errores. Los pasos siguientes se destinarán a evaluar las bases funcionales de
la articulación: audición y aparato fonador.
Dicha evaluación dependerá de qué clase de dislalias hayamos detectado y en
qué tipos de errores se dan. Recordemos las características fonológicas de los
fonemas mal articulados: si la dislalia es de omisión de /p/ estudiaremos la
capacidad para cerrar los labios; si sustituye /b/ por /p/ analizaremos su
discriminación auditiva y la vibración de las cuerdas vocales; si la dislalia se da
por alteración de /ȓ/ hemos de ver la habilidad motora de la lengua y la capacidad
respiratoria y de soplo de los sujetos.

Evaluación de las bases funcionales de la articulación

 Discriminación auditiva.- Para evaluar la discriminación auditiva


podemos comenzar con la identificación de los ruidos conocidos por el
niño o la niña en los que éste señalará o nombrará la fuente sonora hasta
llegar a la discriminación auditiva de fonemas parecidos. Es mejor que
las respuestas sean motoras y claramente diferenciadas para cada fonema
presentado: por ej. Si estamos evaluando la discriminación entre /l/ y /r/,
podemos pedir al sujeto que al oír /pelo/ o /pero/, si percibe /l/ levante un
brazo y dé un golpe en el suelo si lo que cree escuchar ha sido /r/. Para
ello pueden usarse las LISTAS FONÉTICAS DE QUILIS, de las que a
continuación ofreceremos algunos ejemplos:

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OCLUSIVAS
p
Se opone a b, en cuanto sorda-sonora.
Se opone a f, en cuanto oclusiva-fricativa.
Se opone a t, en cuanto labial-dental.
Se opone a k, en cuanto labial-velar.
Se opone a m, en cuanto oral-nasal.
p/b p/f p/m p/t p/k
par bar pavor favor poda moda capa cata peso queso
peso beso pez fez capa cama copo coto poso coso
paño baño pino fino puerto muerto trapo trato paso caso
pata bata pía fía pozo mozo pinta tinta pasa casa
pelo velo copia cofia trapo tramo poca toca puente cuente
poca boca paz faz pala mala pino tino apostar acostar
parra barra puente fuente copa coma mapa mata pulga culpa
pez vez poso foso pato mato lapa lata puño cuño
pino vino presa fresa pana mana aspa hasta puro curo
pesa besa prisa frisa rapo ramo guapa guata puñado cuñado

 Habilidad motora de lengua, labios y paladar blando.- Las capacidades


motoras a evaluar dependen de la dislalia concreta. A veces se da una
inhabilidad general de movimientos de labios y de lengua, sobre todo si
el niño o niña posee varias dislalias. Tengamos en cuenta que es más
difícil realizar un movimiento lento que otro rápido, largo que corto,
fuerte que débil. En general se evaluará:
Labios:
- Capacidad de presión (apretar labios)
- Capacidad de movimientos lentos.
- Capacidad de proyección de labios y de sonreír.
Lengua:
- Capacidad de movimientos lentos laterales.
- Capacidad de movimientos lentos verticales.
- Capacidad de tensión / relajación.
- Capacidad de doblado.
- Capacidad de colocación en puntos concretos.
- Capacidad de movimientos rápidos y de vibración.
Paladar blando:
- Capacidad de movimiento.
 Soplo.- Evaluaremos el soplo en los casos de articulación poco intensa y
en dislalias de fonemas explosivos y vibrantes. Nos interesa la cantidad
de soplo, el control y la dirección del mismo.
Cantidad: soplar la llama de una vela que colocaremos a una distancia tal
que exija una determinada potencia para apagarla.
Control: capacidad de emitir una determinada cantidad de soplo y
mantenerla, aumentarla o disminuirla o disminuirla a voluntad. Usar una
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pajilla para soplar la base de la llama de una vela; cuanto menos sea la
distancia mayor control será necesario para no apagarla.
Dirección: soplar una vela o sobre la mano; cambiarla de posición y
comprobar que el soplo sigue la dirección adecuada.
Anotar en hoja de evaluación.
Nota: siempre referidos a soplo espiratorio bucal, salvo en el caso (poco
frecuente) de dislalias de fonemas nasales (/m/, /n/ o /ņ/) en los que
habría que evaluar el soplo nasal. Igualmente en el caso de dislalias por
alteración nasalizada del fonema.
 Respiración.- Si la capacidad de soplo es pequeña o existiese un
deficiente control del mismo evaluaremos su respiración. Nos interesa
conocer la capacidad respiratoria y el tipo de respiración. Para conocer la
capacidad respiratoria se usan los espirómetros. Aconsejamos realizar
varias mediciones y usar boquillas de un solo uso. La medida a tomar es
la mayor de todas las recogidas; la mayoría vienen acompañados de unas
tablas comparativas por talla, peso, edad y sexo, según el modelo. Si no
disponemos de espirómetro podemos comparar el aumento del volumen
del tórax, abdomen o ambos tomando como modelo otro niño / niña o a
nosotros mismos.
Para comprobar el tipo de respiración podemos seguir distintos
procedimientos:
- Colocar una mano sobre el pecho y otra sobre el vientre del niño / niña
y comprobar cuál es la que se desplaza. Se debe hacer de pie. Algunos
autores recomiendan tender al niño / niña sobre una camilla; podemos
usar varias sillas o dos mesas.
- Colocar nuestras dos manos con las palmas hacia el niño / niña y con
los pulgares extendidos y tocándose levemente ambos sobre la espalda
bajo las axilas para la respiración torácica y en la cintura para al
abdominal. Si los pulgares se separan en el primer caso tendremos una
respiración de tipo torácica y en el segundo del tipo abdominal; si se
separase en ambos será del tipo torácico abdominal o completa. En niños
/ niñas es más frecuente la torácica. Al llegar a la edad adulta se produce
en los varones un cambio en el tipo de respiración, pasando de la torácica
a la abdominal.

5. DIRECTRICES GENERALES DE INTERVENCIÓN


Frecuentemente se aborda el tratamiento de la dislalia funcional con dos
estrategias: intervención indirecta e intervención directa.

1. La intervención indirecta tiene por objeto conseguir la maduración de los


órganos fonatorios y por lo tanto sus apartados son similares a los que hemos
mencionado al hablar de la estimulación del lenguaje oral en la Educación
Infantil aunque, cuando hablamos de dislalias funcionales, su finalidad es ya
más correctiva que preventiva y los ejercicios, aunque han de seguir siendo
motivantes, tienen un componente menos lúdico.
2. La intervención directa intenta la articulación del fonema-problema y la
generalización de éste en el lenguaje espontáneo. Continúa con ejercicios del

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tratamiento directo pero incide fundamentalmente en el punto y modo de


articulación.

Directrices generales en el tratamiento de dislalia.- Es conveniente saber que los


niños con dislalias necesitan tratamiento con un especialista que aplicará el tratamiento
adecuado, con la ayuda de juegos y mucha colaboración de la familia. Es importante
señalar que la dislalia es un problema que no desaparece sin la intervención de un
especialista.
La intervención en los trastornos fonéticos tendrá como objetivo que el niño
aprenda a articular los sonidos correctamente. Se evaluará el nivel articulatorio del niño
y se realizará un programa adecuado a sus necesidades. En general se darán los
siguientes pasos en la intervención:
1. Estimular la capacidad del niño para producir sonidos, reproduciendo
movimientos y posturas, experimentando con las vocales y las consonantes y se
le enseñara a comparar y diferenciar los sonidos.
2. Estimulación de la coordinación de los movimientos necesarios para la
pronunciación de sonidos: ejercicios labiales y linguales. Se enseña al niño las
posiciones correctas de los sonidos más difíciles
3. Se realizan ejercicios donde el niño debe producir el sonido dentro de sílabas
hasta que se automatice el patrón muscular necesario para la articulación del
sonido.
4. Llegados a este punto el niño ya está preparado para comenzar con las palabras
completas, a través de juegos se facilitará la producción y articulación de los
sonidos difíciles dentro de las palabras.
5. Una vez que el niño es capaz de pronunciar los sonidos difíciles en cualquier
posición de una palabra, se tratará que lo realice fuera de las sesiones, es decir,
en su lenguaje espontáneo y no solo en las sesiones terapéuticas.
A lo largo de toda la intervención se ejercitará de forma paralela la musculatura
que está interviniendo en la producción de los sonidos. Toda la terapia se va a centrar en
juegos que faciliten la adquisición de las habilidades necesarias con la participación e
implicación del niño, logrando así, que sea el propio niño quien descubra por sí mismo
los procesos.
Es conveniente que los padres participen y colaboren en todo el proceso
terapéutico siguiendo las instrucciones del terapeuta y realizando las actividades para
casa que considere necesarias.
Cuando la causa del trastorno viene por malformaciones físicas se requerirá un
procedimiento médico para ayudar al niño a que supere las dificultades en el desarrollo
de las capacidades del habla. Cuando la causa del trastorno es por retrasos fonológicos,
será necesaria una intervención educativa especializada para conseguir la adquisición de
las habilidades para producir los sonidos del habla de forma completa.
Hay casos, como los del frenillo lingual que se necesita de una intervención quirúrgica

Ejercicios de intervención indirecta.- Se enumeran a continuación una serie de


ejercicios propios de la intervención indirecta en dislalia, esto no quiere decir que
debamos realizar todos o la mayoría de estos antes de iniciar la intervención directa,

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sino que seleccionaremos aquellos que guardan relación con la causa concreta de la
dislalia. En este sentido algunos autores son partidarios de intervenir siempre
directamente intentando la producción correcta del fonema. A veces basta con explicar
al niño la posición correcta de los órganos articulatorios, la salida del aire fonador y la
tensión necesaria en los labios y lengua para que, en pocas sesiones, se produzca el
fonema correcto y pasemos al afianzamiento y la generalización; con ello hemos
ahorrado un tiempo y un esfuerzo nada despreciable.
Pese a lo anterior deberemos interrumpir el tratamiento directo y centrarnos sólo
en el indirecto cuando:
- El niño parece muy ansioso por el problema del habla.
- El trastorno del habla es muy amplio.
- El niño comienza a tartamudear.
Ejercicios de respiración.- La función respiratoria tiene como objetivo lograr la
coordinación entre la inspiración, pausa y espiración localizadas en la zona
costodiafragmática. Los ejercicios podemos hacerlos acostando al niño en una
colchoneta o también de pie, siempre con ropa floja. La inspiración será nasal, profunda
y regular (como oliendo una flor), el aire se retendrá unos segundos para a continuación
hacer una espiración preferentemente bucal, aunque introduciremos también algún
ejercicio de espiración nasal. Para percibir el movimiento costo-diafragmático podemos
poner un objeto encima del abdomen o bien las propias manos.
Ejercicios de soplo.- Apagar velas, inflar globos, tocar el silbato, la flauta, la armónica,
voltear figuras de papel. Soplar la llama de la vela sin apagarla, plumas, papel, etc.
Desplazar barquitos de papel sobre el agua, hacer mover figuras colgantes, hacer
pompas de jabón. Hacer burbujas, soplar un molinillo, desplazar objetos rodantes sobre
la mesa, mantener una pluma en el aire, mover una hilera de flecos de papel.
Ejercicios de mandíbula.- Abrir y cerrar la boca lentamente, abrir y cerrar la boca
rápidamente, abrir la boca despacio y cerrarla deprisa, abrir la boca deprisa y cerrarla
despacio, masticar, mover la mandíbula inferior de un lado a otro alternativamente.
Ejercicios de mejillas.- Inflar las mejillas, juntas y separadas, movimiento de enjuague
de la boca (inflar y ahuecar alternadamente). Empujar con la lengua las mejillas hacia
fuera, ejercicios de "alas" nasales, movimiento de inspiración forzada. (Estrechamiento
de orificios nasales). Movimiento de espiración forzada, dilatación y retracción
voluntaria de los orificios nasales.
Ejercicios del velo del paladar.- Bostezar, toser, hacer gárgaras, carraspear, con la boca
abierta, inspirar por la nariz y espirar alternadamente por la boca y la nariz.
Ejercicios de labios.- Sonrisa con labios juntos, sonrisa con labios separados, proyectar
los labios fruncidos (beso). Proyectar los labios hacia delante, abrir y cerrar el orificio
bucal, morder el labio superior y el labio inferior, sostener elementos entre el labio
superior y la base de la nariz, con los labios juntos, llenar la boca de aire que se
proyectará al exterior, venciendo repentinamente la resistencia labial, vibración de
labios con fonación, silbar.
Ejercicios de lengua.- (Con la lengua más bien ancha entre los dientes y entre los
labios).

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- Lengua plana dentro de la boca abierta.


- Lengua plana detrás los incisivos superiores e inferiores.
- Lengua ancha por delante de incisivos superiores e inferiores tocando la encía.
- Doblar la lengua ancha hacia arriba y hacia atrás y hacia abajo y atrás.
- Relamerse.
- Chasquido. (Adherir bien la lengua ancha contra el paladar).
- Vibración de la lengua entre los labios.
- (Con la lengua normal o un poco puntiaguda).
- Con la lengua angosta tocar las comisuras labiales.
- Tocar el centro del labio superior e inferior.
- Con la boca abierta pasar la punta de la lengua por el borde de los labios en
forma circular, en ambos sentidos.
- Con la boca cerrada, pasar la punta de la lengua alrededor de los labios en la
pared bucal interior.
- Colocar la punta de la lengua detrás de los incisivos superiores y de los
inferiores.
- Empujar las mejillas alternadamente (caramelo).
- (Ejercicios para la zona media y posterior).
- Colocar el ápice detrás de los incisivos inferiores, levantar la parte media.
- Hacer gárgaras.
- Pronunciar: toc, toc, toc, tac, tac; ding, dong; bang, bang.
Ejercicios de relajación.- Existen distintas técnicas de relajación: de respiración, de
concentración, de asociación de imágenes, etc., pero quizás la "Relajación Progresiva de
Jacobson" basada en la sensación que provoca la "concentración" y "distensión"
muscular, adaptándola a la edad del niño y con el lenguaje apropiado puede ser una de
las técnicas más apropiadas al tratar las dislalias.
Ejercicios de discriminación auditiva y fonemática
1. Discriminación de la duración de los sonidos.
- Discriminación entre sonido largo y corto
- Discriminación entre sonido continuo y discontinuo.
- Discriminación entre uno y dos golpes de tambor. Entre 2-3, 3,-4, etc.
- Discriminación de secuencias: largas y cortas, continuas y discontinuas.
2. Discriminación de tonos.
- Discriminación entre un sonido grave, medio y agudo. Combinarlos.
3. Discriminación de objetos y juguetes sonoros.
4. Discriminación de ruidos producidos por nuestro cuerpo.
5. Discriminación de vocales iniciales. El niño tiene que reconocer las palabras a través
de la vocal inicial.
6. Discriminación de palabras monosílabas.
7. Discriminación de consonantes con oposición del rasgo sonoro-sordo. En este caso
podemos proceder como indicábamos al hablar de la exploración fonemática.

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8. Discriminación de consonantes con puntos de articulación muy próximos.


Con el ordenador, utilizando distintos programas informáticos que trabajen estos
aspectos, podemos convertir estas actividades en un juego de lo más atractivo para el
niño. Entre los programas que trabajan la discriminación fonemática se destaca por su
utilidad el programa Hamlet. Ed. Aquari Soft.

Orientaciones para la intervención directa.- Esta intervención ha de tener un enfoque


pluridimensional, con un doble sentido, por una parte hemos de tener en cuenta, no sólo
el problema de pronunciación, sino el lenguaje en su conjunto y al niño en su totalidad y
por otra hemos de partir siempre de la colaboración con el resto de los profesionales que
inciden en la educación del niño. Conveniencia del tratamiento precoz. Progresivamente
los órganos articulatorios van perdiendo plasticidad. Es más fácil corregir un rotacismo
a los 6-7 años que a los 10 ó 12, además la persistencia del problema articulatorio puede
crear problemas de baja autoestima en el niño.
Importancia de la colaboración de los padres. Si les explicamos de forma clara y
sencilla lo que pueden hacer y si además participan en alguna sesión de reeducación,
tendremos en ellos un apoyo muy importante sobre todo a la hora de afianzar la
articulación del fonema corregido.
 Partir de una buena evaluación (exploración). Esto nos permitirá seleccionar los
ejercicios adecuados. Carece de sentido dedicar tiempo a hacer discriminación
auditiva si el niño no tiene problemas en este campo o hacer ejercicios de labios,
mandíbula etc. si no presenta problemas en la motricidad de esos órganos.
 Elaborar un programa de trabajo: nº de sesiones, duración de las mismas,
ejercicios que vamos a realizar, materiales a utilizar, etc.
 Explicarle al niño en que consiste el problema, lo que vamos a hacer así como el
objetivo de cada ejercicio. Aunque tenga poca edad, si utilizamos el lenguaje
adecuado, nos entenderá y su colaboración será mejor.
 Hacer una autoevaluación constante. Esto nos permitirá suprimir o variar
ejercicios en función de los resultados.
 Intercambiar ejercicios. No debemos hacer monótona la sesión, si es necesario
introducir alguna actividad lúdica.
 Si utilizamos algún aparato, familiarizar primero al niño con él, en este sentido
es aconsejable dejarle el logofón para que juegue con él antes de empezar a
utilizarlo.
 Buscar la colaboración del niño. Nada ayudará tanto a la superación del
problema como despertar el interés del niño, no sólo en cada sesión, sino
también fuera de la misma. Es importante que siga practicando él sólo, como si
fuera un juego, alguno de los ejercicios que hemos realizado en la sesión.
 Importancia de la empatía y refuerzo positivo. Resaltar los avances, minimizar
las dificultades.
 Si no obtenemos los resultados deseados buscar información. En este sentido la
bibliográfica sobre el tema o consultar con otro profesional, nos puede ayudar a
mejorar los resultados.

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BIBLIOGRAFÍA

 Gallardo, J. R., Gallego y J. L. (2003). Manual del Logopedia Escolar. Un


Enfoque Práctico. Málaga: Ediciones Aljibe.

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Málaga: Aljibe.

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<http://www.gescolar.es/material/dislalias > [Consulta: 19 de noviembre de
2011]

 Rodríguez, E. Alumnos/as con Dislalia: evaluación e intervención. En Revista


Digital Reflexiones y Experiencias Innovadoras en el Aula, nº 25.

 “Tratamiento de las dislalias: trastornos fonéticos” [en línea], en


guíadepsicologia.com <http://www.guiadepsicologia.com/infantil/lenguaje-
dislalia.html> [Consulta: 19 de noviembre de 2011]

 “Trastorno fonológico: Dislalia infantil” [en línea], en guíadepsicologia.com


<http://www.guiadepsicologia.com/infantil/lenguaje-dislalia.html> [Consulta:
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 Vázquez, C. (2003). Trastornos del Lenguaje Oral. Bilbao: Servicio Editorial de


la Universidad del País Vasco.

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