18 NEGOCIOS COMERCIO EXTERIOR
INTERNACIONALES
El "serio" PLAN DE
GOBIERNO de Ollanta Humala
Los objetivos macroeconómicos del plan de
gobierno de Humala son exactamente los mismos
que los de cualquier programa neoliberal que se
precie de serlo. Las políticas propuestas en el resto
del documento hacen imposible que se cumplan
esos objetivos. De llevarse a cabo, su plan tendría
tres claras consecuencias: 1. Una grave crisis fiscal,
2. Una profunda depresión económica, y 3. Un
aumento radical de la pobreza. Con un sector
público quebrado y un sector privado en recesión,
será imposible atender las necesidades de la
población de menores recursos económicos.
PRIMERA REFLEXIÓN:
"¡LA PLATA CRECE EN LOS ÁRBOLES!"
UPP plantea realizar gastos que el Estado no puede finan-
ciar. Por ejemplo: Humala quiere que el Estado garantice prés-
tamos por S/. 5,000 millones todos los años. Según UPP, las
garantías que da el gobierno no pueden considerarse gastos.
Falso. Cuando el gobierno garantiza un crédito es responsa-
ble de pagarlo si es que el deudor no paga. Es decir, si la
propuesta no funciona, solo en un periodo de gobierno, el
Estado tendría que asumir pagos equivalentes a más de la
mitad del presupuesto anual de la República (54.9%). Como
si fuera poco, también quiere que el Banco de la Nación
otorgue préstamos a las PYME. Recordemos que entre 1970
y 1990 las bancas de fomento tuvieron una pérdida de alre-
dedor de US$ 3,000 millones (en gran parte por culpa del
gobierno del otro candidato populista).
Según el IPE, solo con algunas de las propuestas se ten-
dría que gastar S/. 16,889 millones anuales y, aun si fueran
exitosos en su aumento de recaudación en 4 puntos por-
centuales del PBI, se mantendría un gasto no financiado equi-
valente a S/. 9,860 millones (3.56% del PBI). Y esto sin
considerar la reducción de los ingresos del Estado producto
de las medidas que comentamos en el siguiente subtítulo.
SEGUNDA REFLEXIÓN:
"LA RECESIÓN HUMALA"
Humala se ha propuesto espantar la inversión. Su estrate-
gia consiste en revisar cuanto compromiso ha firmado el
Estado con inversionistas privados: las privatizaciones de
monopolios públicos, Camisea Lote 88, contratos de trans-
porte y distribución de gas natural en Lima, y contratos de
explotación petrolera dados por Perupetro, entre otros.
En su afán de espantar la inversión extranjera, el plan de
Humala considera además que se debe mantener medidas
discriminatorias hacia la inversión extranjera. Precisamente,
una de las razones por las que se opone al TLC es porque
este impedirá la aplicación de estas medidas. Parece que el
señor Humala no ha leído nuestra Constitución (¿o será por
eso que la quiere cambiar?), que consagra exactamente lo
mismo y que ha permitido que la inversión extranjera directa
pase de US$ 1,636 millones en 1993 a US$ 14,278 millo-
nes en el 2005.
Humala tampoco entiende el rol del Estado, pues cree
que este debe intervenir no solo cuando el privado no parti-
cipa, sino cuando subjetivamente se considere que el privado
no es capaz de producir bienes para la sociedad. Para empe-
zar, quiere que Petroperú y Electroperú intervengan en todas
las fases de sus actividades. Es decir, que el Estado emplee
sus recursos en actividades riesgosas como la exploración
petrolera. También habla de la planificación agropecuaria en
función de la zonificación ecológica y de la demanda. ¿Preten-
derá que el Estado decida qué se debe producir, cuánto se
debe producir y a qué precio se debe vender?
Pero, al parecer, no le bastará con ahuyentar la inversión.
También piensa cerrarnos los mercados extranjeros. En efecto,
Humala quiere renegociar el TLC con EE.UU., pero EE.UU.
no aceptará y nos quedaremos sin TLC. Nuestros competi-
dores, Chile, Colombia y Centroamérica, entre otros, nos
quitarán el mercado estadounidense. Gracias al Plan Humala
se pondrían en riesgo 194 mil empleos directos y 550 mil
empleos indirectos, asociados a exportaciones bajo el
ATPDEA. Ante esto, UPP solo ha respondido con plantea-
mientos utópicos como tratar de renovar el ATPDEA o, en
su defecto, compensar a los exportadores. ¿Cómo piensa
compensar los US$ 2,973 millones que exportamos a
EE.UU. usando el ATPDEA? Esto tendría que sumarse al
subtítulo anterior.
Humala también arguye que prefiere la unión latinoamerica-
na, pero con ello también tendrá problemas, pues su plan indica
que se revisarán todos los TLC que involucren bienes agrícolas.

TERCERA REFLEXIÓN:
"EL POPULISMO POR ENCIMA
DE LOS POBRES"
Humala prefiere gastar los escasos recursos que le que-
den para programas sociales (PRONAA, desayunos escola-
res, comedores populares, hospitales, cuarteles, etc.) de
manera ineficiente, asegurando que comprará a nacionales,
en lugar de buscar comprar el producto más barato para
poder ofrecérselo a más niños, y el de mejor calidad para
tener niños más sanos. Él prefiere acomodarse con los pro-
ductores. Y esto es claro cuando se queja de la importación
de alimentos baratos. Todo va cuadrando.
Humala dice que el neoliberalismo ha generado una frac-
tura social sin precedentes. Pero en el Perú nunca llegamos a
tener una economía neoliberal. Tenemos empresas públi-
cas, aranceles de hasta 68%, barreras paraarancelarias, salva-
guardias sin justificación, empresas que logran abusar del con-
sumidor, un mercado laboral rígido, entre muchas otras co-
sas que no tienen nada de liberales. Y aun así, la cuota de
especial electoral
liberalismo que se ha aplicado ha permitido que la pobreza se
reduzca de 64% en 1993 a 48% en el 2005. En cambio, los
planteamientos de Humala nos recuerdan a Chávez en Ve-
nezuela, que ha llevado la pobreza de 42.8% en 1999 a
53.1% en el 2003.
NO LE DIGAN CAPITÁN,
DÍGANLE LICENCIADO
¿A quién juega a engañar Humala? Dice que quiere un país
sin racismo, pero viene del Partido Etnocacerista. Dice que va
a nacionalizar ''la energía, los hidrocarburos, el gas, la electrici-
dad, los servicios esenciales, el agua y saneamiento, el espa-
cio aerocomercial y los puertos". Y luego dice que eso signi-
fica poner los bienes al servicio de la nación y que coexistirán
las empresas privadas en estos servicios. Dice que quiere
discriminar la inversión extranjera y también dice que quiere
aprovecharla.
Definitivamente, su discurso es lo más cercano al de un perso-
naje de Chespirito: "es que cuando digo una cosa digo otra".
20 NEGOCIOS COMERCIO EXTERIOR
INTERNACIONALES
El partido aprista se preparó 61 años para por fin
llegar al poder en 1985. Los resultados de su
gobierno fueron los siguientes:
la inflación acumulada ascendió a 2’178,482%,
el PBI pasó de crecer 10% en 1986 a caer en 11.7%
en1989, la recaudación fiscal cayó de 14% a 4%
del PBI y las Reservas Internacionales Netas (RIN)
pasaron de US$ 894 a US$ -105 millones.
El APRA reconoce que en su gobierno
cometieron “errores” (¿hello?); sin embargo,
nunca menciona la causa de dichos problemas.
LA ECONOMÍA SEGÚN
LA CABECITA DE GARCÍA
Para Alan García la economía se mueve por decreto. Así,
dado que pensaba que la inflación era causada por los altos
costos de producción, tuvo la “brillante” idea de subsidiar los
costos y aislarnos del mundo para que los industriales no
compitan y puedan vender más. Según él, la mayor escala
llevaría a costos más bajos, pero la escasez de competencia
hizo a las empresas ineficientes y los subsidios tuvieron gra-
ves efectos fiscales. También pensó que para evitar precios
altos bastaba fijar precios. Así, generó una escasez de alimen-
tos y otros productos. Lo irónico es que, al colapsar su mo-
delo, no solo subieron los precios, sino que hubo una
hiperinflación.
¿SE PUEDE OBSERVAR UN CAMBIO
SIGNIFICATIVO EN EL PLAN 2005-2011?
No. Ahora pretende duplicar el capital de Agrobanco y
canalizar más préstamos hacia este sector. También señala
que otorgará “incentivos fiscales” y “recursos financieros” a
las PYME y MYPE, pretendiendo repetir el plato de los ban-
cos de fomento. Parece que no aprendió de su gobierno,
¿Alan
Alan García
reformado?
cuando el Banco Agrario solo recuperó el 5% del capital
prestado. Además, tampoco apoyó a los pobres, pues solo
el 3.3% de los US$ 2,950 millones prestados se dirigió al
20% más pobre del Perú, mientras que el 75% se dio al
40% más rico (ver Semanario COMEXPERU Nº 311). La
solución no es que el Estado duplique el capital prestado, sino
permitir que la agroindustria pueda obtener préstamos a
menores tasas de interés por medio de la reducción real de
su riesgo. Esto se consigue, por ejemplo, fomentando la
asociatividad, ofreciendo mejoras con TLC, y reduciendo los
costos de formalización, entre otras medidas que afectan al
sector real. ¡No hay atajos, señor García!
El APRA también quería que las empresas no tuviesen
competencia extranjera para fomentar el desarrollo indus-
trial. Así, García implementó mayores aranceles (de 86% en
1985 pasó a ¡120%! en 1986), licencias para importar (de
350 en 1985 a ¡1,574! en 1986) y prohibiciones para la
importación de una gran gama de productos (las partidas
prohibidas pasaron de 8 en 1985 a ¡541! en 1986). El resul-
tado es que la producción industrial se redujo en 2% cada
año del gobierno aprista y los consumidores tuvimos que
pagar precios altísimos por bienes de pésima calidad. Hoy no
ha cambiado mucho su mentalidad. En su plan no reconoce
en absoluto los beneficios de las importaciones para los con-
sumidores.
Asimismo, existen contradicciones en sus declaraciones
con respecto al TLC. Por un lado, indica que buscará aprobar
el TLC con EE.UU., pero lo condiciona al análisis de costos
y beneficios para el país, cuando el TLC ya ha sido publicado
y ya debería saber si está de acuerdo o no. También quiere
que lo apruebe el próximo Congreso para hacerlo más suyo,
pero su propuesta egoísta puede costarle el TLC a todo el
Perú. Para rematar, en su afán por la economía artificial, García
propone impulsar las exportaciones con zonas francas; otro
sistema de subsidios, otro sistema que ha fracasado.
Otra joyita del APRA fue su afán por que el Estado se
dedicase a la actividad empresarial y aumentase la burocracia
estatal. En el periodo 1985-1990, empresas estatales como
Ecasa, Enci y Pescaperú tuvieron pérdidas de US$ 622 millones
en conjunto; no obstante, el número de empleados se
incrementó en 242%. En general, las empresas públicas no
financieras perdieron más de US$ 1,700 millones; sin embargo,
la población adecuadamente empleada pasó de 53% a ¡5%!
Hoy el APRA no solo se niega a privatizar empresas como
PetroPerú y Sedapal, sino que propone crear más institucio-
nes estatales como el Ministerio de Pesquería. Estas entida-
des solo crearán mayores gastos públicos y no reflejarán una
mejora económica, pues la duplicidad de acciones no contri-
buye al desarrollo del país. Por otro lado, el mayor gasto en
programas de empleo tampoco tuvo efectos positivos. Por
ejemplo, García quiere restituir el Programa de Apoyo al In-

¡Más bien "RECARGADO"!
greso Temporal (PAIT), que en el periodo 1985-1990 pre-
tendía aliviar el desempleo de jóvenes a través de empleos
innecesarios, donde las consecuencias solo fueron mayores
días de ausencia escolar para trabajar en el PAIT, disputas
comunales (se contrataba según un sistema de lotería) y un
alto grado de corrupción.
UNA PEQUEÑA DIFERENCIA
No obstante, existe una diferencia entre las políticas de
financiamiento que obtuvo García entre 1985-1990 con las
que podría obtener actualmente. Dado que buscó incremen-
tar las RIN (aunque hizo todo lo contrario), limitó el pago de
intereses de la deuda pública externa a 10% de las exporta-
ciones. Ello, sumado a los atrasos en el pago de la deuda,
ascendentes en 1985 a US$ 2,581 millones, terminó por
cerrarle al Perú los canales de préstamos externos. Los agen-
tes internos tampoco confiaban en el país, y ello llevó a que
García recurriera a la emisión. Esto fue agravado por los cre-
cientes déficit observados con el gobierno aprista, creando
un círculo vicioso donde se recurría cada vez más a la emisión
para poder pagarlos. Ahora, este último canal es inviable.
Si algo aprendió el Perú del gobierno aprista fue que se
necesita que el BCRP sea independiente, para que no
existan futuros gobernantes que recurran a la maquinita.
Por consiguiente, ¿cómo conseguirá Alan García enfrentar
los mayores gastos que pretende realizar? Puede
cuestionarse el apoyo externo, pues difícilmente las insti-
Fuente: Banco Central de Reserva, Memoria 1995. Elaboración: COMEXPERU.
Fuente: Instituto Cuánto (1991). Elaboración: COMEXPERU.
especial electoral
tuciones que tuvieron grandes problemas de cobro duran-
te su gobierno querrán prestarle dinero (con las pérdidas
del Banco Agrario hubiera podido cumplir con el pago de la
deuda externa).
Si algo aprendió el Perú del gobierno aprista fue que se
necesita que el BCRP sea independiente, para que no
existan futuros gobernantes que recurran a la maquinita.
PROYECCIONES SI GARCÍA ES ELEGIDO
Alan dice que ha cambiado, pero pide restituir la Constitu-
ción firmada por Víctor Raúl Haya de la Torre. Dado que las
políticas que aplicará son similares a las que realizó en 1985-
1990, se puede sostener que para observar nuestro futuro
solo tenemos que recordar el pasado. Así, observaremos
que el porcentaje de hogares por debajo de la línea de pobre-
za pasó de 16.9% en 1985 a 44.3% en 1990; el gasto en
alimentos disminuyó en todos los niveles socioeconómicos,
cayendo en promedio 50.9%; el PBI per cápita cayó 20%, al
nivel de 1960; y el salario real por hora pasó de S/. 7.9 a
S/. 0.9. El salario real por hora se ha incrementado desde
1991 de manera sostenida; no obstante ello, los errores
(horrores) del gobierno aprista fueron tales que actualmente
este asciende a 50% del que había en 1985. Por lo tanto, aún
no nos recuperamos del gobierno aprista. Si es este el Perú
que queremos, ¡ya sabemos por quién votar!.
Fuente: Instituto Cuánto (1991). Elaboración: COMEXPERU.
Fuente: ENNIV. Elaboración: COMEXPERU.
especial electoral
22 NEGOCIOS COMERCIO EXTERIOR
INTERNACIONALES
PARLAMENTO ANDINO… ¡¿What?!
E
l Parlamento Andino (PA) no es iniciativa nueva. La
Comunidad Andina (CAN) lo creó en 1979 como
uno de los órganos reguladores dentro del Sistema
Andino de Integración para promover de manera justa y de-
mocrática la integración andina. Lamentablemente, aún de-
jando de lado este ambiguo propósito, no se le puede sus-
tentar una misión más proactiva. Entre las últimas recomen-
daciones del PA están "la implementación de una zona andina
de paz" (pues hoy en día realmente es importante la paz), "la
semana cultural 2006" (con el maíz como tema central) y la
recomendación para la "creación de empleo decente y digno
para los ciudadanos andinos" (¡qué lindo sería!). La proble-
mática en la fortaleza de las recomendaciones no es la falta de
obligatoriedad de las mismas (un similar mecanismo se em-
plea en la UE y en el APEC y sí funciona), sino la carencia de
un consenso de intereses entre los países miembros. Este
hecho ha llevado a recomendaciones débiles que a fin de
cuentas solo llevan a un mal gasto de recursos.
¿Por qué recién nos estamos enterando de este parla-
mento? Porque a partir de 1996 la CAN acordó que se
determinarían los parlamentarios andinos por medio de elec-
De la inmunidad a la IMPUNIDAD
¿
Cómo garantizar que el Congreso que venga no repita
lo que vivimos en el pasado? La confianza de la pobla-
ción en el Congreso se ha perdido y no es para menos.
Durante el último periodo de gobierno hemos sido testigos
de cómo muchos de los congresistas -además de ejecutar
cuestionablemente sus funciones legislativas, fiscalizadoras y de
representación- han sido acusados de delitos que los imposibilita-
rían de ser contratados en cualquier empresa peruana relativamen-
te seria. Muchos de ellos tenían ya un prontuario antes de ser
electos y hoy gozan de la tan ansiada inmunidad parlamentaria.
EN BOCA DE MUCHOS
La revisión de la inmunidad parlamentaria es, sin duda, una
de las reformas necesarias para el próximo Congreso, y es
por eso que se ha convertido en uno de los principales temas
tocados por algunos de los ciudadanos que persiguen una curul.
Una propuesta planteada, no solo como proyecto de ley sino
también en el contexto de la elección parlamentaria, es limitar la
inmunidad parlamentaria a denuncias producidas con posteriori-
dad a la asunción del cargo de parlamentario, y que solo se
aplique para denuncias relacionadas con la función parlamentaria.
De esta manera, quienes sean sindicados como violadores,
asesinos, hayan ocasionado lesiones, comercialicen drogas, etc.
(en el entendido de que dichos delitos no guardan relación alguna
con la labor parlamentaria), serán juzgados como cualquier ciu-
dadano, sin privilegio alguno que los ampare.
La propuesta también evitaría que la inmunidad siga con-
virtiéndose en impunidad. Al amparo del “otorongo no come
otorongo” son muy pocos los trámites de levantamiento de
inmunidad presentados en el Congreso que han culminado
en su ejecución efectiva. A la fecha, solo se ha levantado la
ciones directas, es decir, por el sufragio universal. Según el
artículo 3º del Protocolo Adicional de Elecciones Directas,
los ciudadanos de cada país deberían votar por 5 represen-
tantes titulares y 10 suplentes en caso de ausencia temporal
o definitiva. Por lo pronto, solo Venezuela ha cumplido con el
protocolo y ha realizado dos procesos electorales a la fecha.
Perú es el siguiente en la lista, pues realizaría sus elecciones
por primera vez este 9 de abril, seguido por Ecuador el 15 de
octubre. Los demás aún no han aprobado el protocolo en
sus respectivos congresos.
¿Cuánto le vale, cuánto le cuesta? Aún es un enigma. En el
pasado se elegía a 5 congresistas como miembros del PA y
no recibían extensiones salariales. Ahora que el puesto es exclu-
sivo existe un debate sobre cuánto remunerar. Muchos piensan
que el salario deberá mantenerse, lo cual nos costaría
S/.7,900,000 por los 5 años (si también se les paga los gastos
operativos). Otros proponen que el sueldo sea proporcional a
los días laborados, ya que las sesiones del PA no son continuas.
¿Pero, realmente deberíamos perder nuestro tiempo y malgas-
tar recursos estatales votando por 15 parlamentarios que no
aportarían de manera trascendental a la política nacional?
inmunidad a dos parlamentarios cuyos delitos fueron amplia-
mente difundidos y comentados por los medios de prensa
nacionales. Ello a pesar de que la intervención del Congreso
en el procedimiento de levantamiento de la inmunidad debe
ser, de acuerdo con el mismo Reglamento del Congreso,
solo un filtro que verifique si la denuncia tiene fines políticos,
persecutorios, religiosos, etc. Sin embargo, existe más de
una treintena de solicitudes que no han pasado a mayores,
muchas de ellas por faltas como delitos contra el honor o
enriquecimiento ilícito.
Sin embargo, la propuesta omite pronunciarse sobre la
necesidad de reformar la Constitución vigente. Ello se debe a
que esta solo exceptúa de la inmunidad parlamentaria a los
congresistas que hayan sido sorprendidos en flagrante delito.
No existe una excepción que establezca que solo se pueden
proteger con inmunidad los actos funcionales o, más aun, que
establezca que se aplica la inmunidad solo para los procesos que
se inicien con posterioridad a la elección del congresista. La nece-
sidad de esta reforma constitucional se fundamenta en la antigüe-
dad de la inmunidad parlamentaria; la tendencia a reducir sus
alcances es muy reciente. Poco a poco las democracias desarro-
lladas, especialmente en Europa, la han ido limitando.
A PARTIR DE ABRIL…
La propuesta es sin duda interesante y traería como con-
secuencia que el ciudadano se sienta más cerca de su congre-
sista, sin que los separen privilegios infundados. Ya que la
mayoría de congresistas actuales volverá a sus casas en julio
(¿con desinstalación?), el timing parece ser favorable. A partir
del 10 de abril las propuestas como esta se convertirán en
sumamente adecuadas.„