Está en la página 1de 26

TEMA

2
Organización territorial del Estado:
las Comunidades Autónomas.
Fundamento constitucional. Los
Estatutos de Autonomía. Delimitación
de las funciones y competencias
del Estado y de las Comunidades
Autónomas. La Administración Local:
Tipología de los Entes Locales
En este tema se analizará lo concerniente al Título VIII de la
Constitución llamado: «La organización territorial del Estado», es
decir, las dos Administraciones que en él se contemplan: la Auto-
nómica y la Local.
La primera parte, Administración Autonómica, es una prepa-
ración para los temas siguientes, mientras que en la segunda se
analizarán de modo general los órganos esenciales que integran la
Administración local.

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 63


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

ESQUEMA INICIAL

1. Organización territorial del Estado. Las Comunidades Autónomas: Funda-


mento constitucional. Los Estatutos de Autonomía. Delimitación de las fun-
ciones y competencias del Estado y de las Comunidades Autónomas
1.1. Introducción
1.2. Principios generales
1.3. Comunidades Autónomas
1.3.1. Introducción
1.3.2. Notas características del derecho a la Autonomía
1.3.3. Constitución
1.3.3.1. Creación
1.3.3.2. Vías de acceso a la Autonomía
1.3.4. Estatutos de Autonomía
1.3.4.1. Introducción
1.3.4.2. Forma de elaboración
1.3.4.3. Significado de los Estatutos de Autonomía
1.3.5. Instituciones Autonómicas
1.3.5.1. Comunidades Autónomas de régimen normal
1.3.5.2. Comunidades Autónomas de régimen especial
1.3.5.3. Comunidades Autónomas de régimen excepcional
1.3.6. Gobierno y Administración
1.3.7. Competencias de las Comunidades Autónomas
1.3.8. Competencias reservadas al Estado
1.3.9. Las potestades legislativas de las Comunidades Autónomas
1.3.9.1. Introducción
1.3.9.2. Las Leyes Autonómicas y sus relaciones con las Leyes Estatales
1.3.10. Control de la actividad de los órganos de las Comunidades Autónomas
1.3.11. Financiación de las Comunidades Autónomas

2. La Administración Local. Tipología de los entes locales


2.1. Concepto
2.2. Características
2.3. Evolución del Régimen Local
2.4. Entidades Locales existentes
2.5. Principios Constitucionales
2.6. Regulación jurídica

64 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

1. ORGANIZACIÓN TERRITORIAL DEL ESTADO. LAS COMUNIDADES


AUTÓNOMAS: FUNDAMENTO CONSTITUCIONAL. LOS ESTATUTOS
DE AUTONOMÍA. DELIMITACIÓN DE LAS FUNCIONES Y
COMPETENCIAS DEL ESTADO Y DE LAS COMUNIDADES
AUTÓNOMAS

1.1. INTRODUCCIÓN
A la organización territorial del Estado se dedica el Título VIII de nuestra vigente Constitución,
de 27 de diciembre de 1978 (CE, en adelante), arts. 137 a 158, dividido en tres Capítulos, que
tratan, respectivamente, de:
a) Los principios generales.
b) La Administración Local.
c) Las Comunidades Autónomas.

1.2. PRINCIPIOS GENERALES


A tenor del art. 137 CE, “el Estado se organiza territorialmente en Municipios, en Provincias y
en las Comunidades Autónomas que se constituyan. Todas estas entidades gozan de autonomía
para la gestión de sus respectivos intereses”.
Por su parte, el art. 138 señala que el Estado garantiza la realización efectiva del principio
de solidaridad consagrado en el art. 2 de la Constitución, velando por el establecimiento de un
equilibrio económico, adecuado y justo, entre las diversas partes del territorio español, y aten-
diendo en particular a las circunstancias del hecho insular. Las diferencias entre los Estatutos
de las distintas Comunidades Autónomas no podrán implicar, en ningún caso, privilegios econó-
micos y sociales.
Finalmente, el art. 139 dispone que todos los españoles tienen los mismos derechos y obli-
gaciones en cualquier parte del territorio del estado. Ninguna autoridad podrá adoptar medidas
que directa o indirectamente obstaculicen la libertad de circulación y establecimiento de las per-
sonas y la libre circulación de bienes en todo el territorio nacional.

1.3. COMUNIDADES AUTÓNOMAS


1.3.1. Introducción
Según LEGUINA VILLA, entre los muchos y complejos problemas con los que se ha tenido que
enfrentar la nueva Constitución española, el lugar más destacado lo ocupa el que se refiere a la
organización territorial del Estado.
Al efecto, la CE mantiene la estructura unitaria del Estado, pero, al propio tiempo, reconoce
el derecho de las Entidades territoriales regionales o nacionales a constituirse en Comunidades
Autónomas con facultades de autogobierno. Entre las distintas opciones posibles de organización
territorial, se ha elegido el modelo de Estado unitario regionalizado, siguiendo el precedente intro-
ducido por la Constitución de la II República española.
En concreto, el art. 2 CE dispone, como vimos, que «la Constitución se fundamenta en la
indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y
reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y
la solidaridad de todas ellas». Y el art. 137 CE, por su parte, prescribe que «el Estado se organiza
territorialmente en Municipios, en Provincias y en las Comunidades Autónomas que se consti-
tuyan. Todas estas Entidades gozan de autonomía para la gestión de sus respectivos intereses».

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 65


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

En definitiva, como ha indicado el autor citado, la soberanía pertenece a un único titular: «el
pueblo español», considerado como una totalidad, «del que emanan los poderes del Estado» (art.
1,2.º), cuya «indisoluble unidad» se manifiesta en la «Nación española, patria común e indivisible
de todos los españoles» (art. 2), que se constituye en un «Estado social y democrático de Dere-
cho» (art. 1,1.º). Pero, junto a ello, la Constitución declara que el Estado, uno e indivisible, está
integrado por un conjunto de regiones y nacionalidades cuyo derecho a la autonomía se reconoce
y garantiza dentro de la indispensable solidaridad entre todas ellas (art. 2).

1.3.2. Notas características del derecho a la autonomía


Según ENTRENA CUESTA, son:
a) La voluntariedad de su ejercicio, salvo que las Cortes Generales, mediante Ley Orgánica
y por motivos de interés nacional sustituyan la iniciativa de las Corporaciones afectadas
(arts. 143 y 144 y Disposición Transitoria Primera de la CE).
b) La generalidad de su otorgamiento.
c) La igualdad en su contenido.
d) La progresividad en su integración (art. 148,2.º), si bien, concurriendo determinados
presupuestos y requisitos (art. 151 y Disposición Transitoria Segunda), las Comunidades
Autónomas podrán asumir desde el momento de su constitución la totalidad de las com-
petencias previstas en la CE, lo que permite distinguir entre las Comunidades Autónomas
de autonomía plena (que han seguido la vía especial) y las de autonomía plena diferida
(que han seguido la vía común u ordinaria).
e) La diversidad de su plasmación (arts. 147 y 152), en cuya virtud y sin merma del princi-
pio de igualdad, las Comunidades Autónomas podrán, dentro de los límites constitucio-
nales, adaptar su estructura y funcionamiento a sus propias exigencias.
Junto a estas notas, hemos de señalar, con ENTRENA CUESTA, dos principios básicos:
a) De solidaridad, que puede ser interpretado como una general exigencia de armonización
de las actividades de las Comunidades Autónomas, y al que particularmente se refiere el
art. 138,1.º, al disponer que «el Estado garantiza la realización efectiva del principio de
solidaridad consagrado en el art. 2 de la Constitución, velando por el establecimiento de
un equilibrio económico, adecuado y justo, entre las diversas partes del territorio español
y atendiendo en particular a las circunstancias del hecho insular».
b) De autogobierno, que, en síntesis, está integrado por las notas siguientes:
1. El establecimiento en la Constitución de una serie de funciones que las Comunida-
des Autónomas podrán asumir como propias a través de sus Estatutos (arts. 148 y
149,3.º).
2. La atribución a dichas Comunidades de la potestad legislativa y de las funciones
políticas y ejecutivas respecto de las funciones que asuman por vía estatutaria.
3. El principio de no interferencia de los poderes legislativo y ejecutivo del Estado en el
desempeño de sus funciones propias por las Comunidades Autónomas.
4. El sometimiento de las Comunidades Autónomas al control del Tribunal Constitucio-
nal (art. 153, a), de los Tribunales de Justicia (art. 153, c), y del Tribunal de Cuentas
(art. 153, d) y de la institución autonómica al efecto.

1.3.3. Constitución
Dentro de este apartado, hemos de tratar diferenciadamente lo relativo a quiénes pueden
constituirse en Comunidades Autónomas y las vías o formas de acceso a la autonomía.

66 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

1.3.3.1. Creación
De acuerdo con los arts. 143 y 144 CE, y, como indica LEGUINA VILLA, podemos señalar que
las Comunidades Autónomas podrán formarse por:
a) Las Provincias limítrofes con características históricas, culturales y económicas co-
munes.
b) Los territorios insulares.
c) Las Provincias con entidad regional histórica o regiones uniprovinciales.
d) Los territorios cuyo ámbito territorial no supere el de una Provincia y carezcan de entidad
regional histórica (este supuesto se refiere a Ceuta y Melilla).
e) Los territorios que no estén integrados en la organización provincial (como Gibraltar).

1.3.3.2. Vías de acceso a la autonomía


Siguiendo a MARTÍNEZ MARÍN, podemos distinguir las siguientes formas de acceso a la
autonomía:
1. Las vías ordinarias del art. 143 CE
Se siguen por las Provincias limítrofes con características históricas, culturales y económicas
comunes, los territorios insulares y las Provincias con entidad regional histórica.
a) Territorios sin régimen provisional de autonomía:
La iniciativa del proceso autonómico corresponde a todas las Diputaciones interesadas
o al órgano interinsular correspondiente y a las dos terceras partes de los Municipios del
respectivo territorio de la pretendida Comunidad Autónoma, cuya población represente,
al menos, la mayoría del censo electoral de cada Provincia o Isla.
El plazo establecido para la fase de iniciativa del proceso es el de seis meses desde el
primer acuerdo adoptado al respecto por algunas de las Corporaciones Locales interesa-
das. En caso de que no prospere la iniciativa autonómica, deben transcurrir cinco años
para reiterarla de nuevo.
b) Territorios con régimen provisional de autonomía:
La iniciativa del proceso en los territorios dotados de un régimen provisional de auto-
nomía, a tenor de la Disposición Transitoria Primera CE, podrá realizarse por sus órga-
nos colegiados superiores, mediante acuerdo adoptado por la mayoría absoluta de sus
miembros.
2. Las vías especiales del art. 151
a) La vía agravada del art. 151:
La iniciativa corresponde a las Diputaciones o a los órganos interinsulares correspondien-
tes, a las tres cuartas partes de los Municipios de cada una de las provincias afectadas
que representen, al menos, la mayoría del censo electoral de cada una de ellas, debien-
do ser ratificada mediante referéndum por el voto afirmativo de la mayoría absoluta de
los electores de cada Provincia, en los términos que establezca una Ley Orgánica (la Ley
Orgánica 2/1980, de 18 de enero, reguladora de las modalidades de referéndum).
b) La vía privilegiada del art. 151 y Disposición Transitoria Segunda CE:
Los territorios que en el pasado hubiesen plebiscitado afirmativamente proyectos de
Estatuto de Autonomía y cuenten, al tiempo de promulgarse la Constitución, con regí-
menes provisionales de autonomía, pueden acceder a la autonomía plena cuando así
lo acuerden por mayoría absoluta sus órganos preautonómicos colegiados superiores,
comunicándolo al Gobierno.

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 67


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

3. Vías excepcionales
a) Vía del art. 144,a), CE:
Las Cortes Generales, mediante Ley Orgánica, podrán, por motivos de interés nacional,
autorizar la constitución de una Comunidad Autónoma cuando su ámbito territorial no
supere el de una Provincia, carezca de entidad regional histórica y no sea insular, siguién-
dose la vía ordinaria del art. 143.
b) Vía del art. 144,b), CE:
Las Cortes Generales, mediante Ley Orgánica, podrán, por motivos de interés nacional,
autorizar o acordar, en su caso, un Estatuto de Autonomía para territorios que no estén
integrados en la organización provincial (esta vía está prevista para Gibraltar).
c) Vía del art. 144 y Disposición Transitoria Quinta:
Las ciudades de Ceuta y Melilla podrán constituirse en Comunidades Autónomas si así
lo deciden sus respectivos Ayuntamientos, mediante acuerdo adoptado por la mayoría
absoluta de sus miembros y así lo autorizan las Cortes Generales, mediante una Ley
Orgánica, en los términos del art. 144. Al respecto deben citarse las Leyes Orgánicas 1 y
2/1995, de 13 de marzo, de Estatuto de Autonomía de Ceuta y Melilla, respectivamente.
d) Vía peculiarmente especial de la Disposición Transitoria Cuarta:
En el caso de Navarra, y a efectos de su incorporación al Consejo General Vasco o al
régimen autonómico vasco que le sustituya, en lugar de lo que establece el art. 143
CE, la iniciativa corresponde al órgano foral competente, el cual adoptará su decisión
por mayoría de los miembros que lo componen. Para la validez de dicha iniciativa será
preciso, además, que la decisión del órgano foral sea ratificada por referéndum expresa-
mente convocado al efecto y aprobado por la mayoría de los votos válidos emitidos. Si la
iniciativa no prosperase, solamente se podrá reproducir la misma en distinto período de
mandato del órgano foral competente, y, en todo caso, cuando hayan transcurrido cinco
años desde la primera iniciativa.
Finalmente, el art. 145 CE dispone que en ningún caso se admitirá la federación de Comu-
nidades Autónomas. Los Estatutos podrán prever los supuestos, requisitos y términos en que las
Comunidades podrán celebrar convenios entre sí para la gestión y prestación de servicios propios
de las mismas, así como el carácter y efectos de la correspondiente comunicación a las Cortes
Generales. En los demás supuestos, los acuerdos de cooperación entre las Comunidades Autó-
nomas necesitarán la autorización de las Cortes Generales, que, conforme al art. 74,2.º CE, debe
adoptarse por mayoría de cada una de las Cámaras, iniciándose el procedimiento por el Senado.
En el caso de que no hubiera acuerdo entre Senado y Congreso, se intentará obtener por una Co-
misión Mixta compuesta por igual número de Diputados y Senadores. La Comisión presentará un
texto que será votado por ambas Cámaras, y, si no se aprueba en la forma establecida, decidirá
el Congreso por mayoría absoluta.

1.3.4. Estatutos de Autonomía

1.3.4.1. Introducción
A los Estatutos de Autonomía se refiere el art. 147 CE, conforme al cual:
1. Dentro de los términos de la presente Constitución, los Estatutos serán la norma institu-
cional básica de cada Comunidad Autónoma y el Estado los reconocerá y amparará como
parte integrante de su ordenamiento jurídico.
2. Los Estatutos de Autonomía deberán contener:
a) La denominación de la Comunidad que mejor corresponda a su identidad histórica.
b) La delimitación de su territorio.

68 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

c) La denominación, organización y sede de las instituciones autónomas propias.


d) Las competencias asumidas dentro del marco establecido en la Constitución y las
bases para el traspaso de los servicios correspondientes a las mismas.
3. La reforma de los Estatutos se ajustará al procedimiento establecido en los mismos y reque-
rirá, en todo caso, la aprobación por las Cortes Generales, mediante Ley Orgánica (en parti-
cular, a tenor del art. 152,2.º CE, respecto a las Comunidades Autónomas que han seguido
la vía agravada del art. 151, dispone que, una vez sancionados y promulgados los respectivos
Estatutos, solamente podrán ser modificados mediante los procedimientos en ellos estable-
cidos y con referéndum entre los electores inscritos en los censos correspondientes).

1.3.4.2. Forma de elaboración


Es distinta, según el procedimiento o vía de acceso a la autonomía seguido:
1. En las que siguen la vía común, el Proyecto de Estatuto será elaborado por los miembros
de la Diputación u órgano interinsular de las Provincias afectadas y por los Diputados y
Senadores elegidos en ellas, y será elevado a las Cortes Generales para su tramitación
por Ley (art. 146), que deberá ser Orgánica (art. 81,1.º).
2. En las que han seguido la vía especial, el art. 151,2.º detalla el procedimiento para su
elaboración y aprobación en la forma siguiente:
a) Aprobación del Proyecto de Estatuto por la Asamblea de Parlamentarios que se
constituye al efecto.
b) Examen del mismo por la Comisión Constitucional del Congreso de los Diputados,
para lo cual el referido órgano parlamentario contará con el concurso y asistencia de
una Delegación de la Asamblea.
c) Si se alcanzare acuerdo, el texto resultante será sometido a referéndum del cuerpo
electoral de las Provincias comprendidas en el ámbito territorial del proyectado Estatuto.
d) Si el Proyecto de Estatuto es aprobado en cada Provincia por la mayoría de los votos
válidamente emitidos, será elevado a las Cortes Generales. Los Plenos de ambas
Cámaras decidirán sobre el texto mediante un voto de ratificación. Aprobado el Es-
tatuto, el Rey lo sancionará y lo promulgará como Ley.
e) Si no se llegare a un acuerdo en el seno de la Comisión Constitucional, se tramitará
–el Proyecto de Estatuto– como Proyecto de Ley ante las Cortes Generales, y el texto
resultante se someterá a referéndum en las Provincias afectadas.
f) La no aprobación del Proyecto de Estatuto por una o varias Provincias no impedirá
la constitución entre las restantes de la Comunidad Autónoma proyectada.

1.3.4.3. Significado de los Estatutos de Autonomía


Como vimos, el art. 147,1.º CE los configura como la «norma institucional básica de cada Co-
munidad Autónoma», a la par que señala que «el Estado los reconocerá y amparará como parte inte-
grante de su ordenamiento jurídico», integración que se efectúa con el rango formal de Ley Orgánica.
A estos efectos, los Estatutos pueden considerarse como la peculiar Constitución de cada
Comunidad Autónoma, a la que están subordinadas las restantes normas de la Comunidad (Leyes
y Reglamentos autonómicos), y, por otro lado, son una Ley Orgánica integrada con este carácter
en el total ordenamiento jurídico de la Nación española.

1.3.5. Instituciones autonómicas


Al estudiar la organización de las Comunidades Autónomas, hay que distinguir, con ENTRENA
CUESTA, entre las de régimen normal, las de régimen especial y las de régimen excepcional.

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 69


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

1.3.5.1. Comunidades Autónomas de régimen normal


La Constitución es extraordinariamente parca en esta materia, limitándose a especificar que
los Estatutos de Autonomía deberán contener «la denominación, organización y sede de las ins-
tituciones autónomas propias» y «las competencias asumidas dentro del marco establecido en
la Constitución y las bases para el traspaso de los servicios correspondientes a las mismas» (art.
147,2.º,c y d).
Como puede observarse, existe en cuanto a la organización una libertad absoluta, pudién-
dose afirmar que las distintas Comunidades Autónomas que han accedido por esta vía normal
han establecido un esquema organizativo similar al de las Comunidades Autónomas de régimen
especial.

1.3.5.2. Comunidades Autónomas de régimen especial


Para este tipo de Comunidades se delinea en el art. 152,1.º CE un modelo muy concreto de
organización institucional, que viene sustancialmente a reproducir en el escalón regional el siste-
ma de división tripartita de Poderes característico del propio Estado, a saber:
a) Una Asamblea Legislativa, elegida por sufragio universal, con arreglo a un sistema de re-
presentación proporcional que asegure, además, la representación de las diversas zonas
del territorio.
b) Un Consejo de Gobierno, con funciones ejecutivas y administrativas, cuyo Presidente
será elegido por la Asamblea y nombrado por el Rey, correspondiéndole tanto la dirección
del Consejo de Gobierno como la suprema representación de la Comunidad Autónoma y
la ordinaria (como Estado-ordenamiento y no como Estado-organización) del Estado en
aquélla. El Presidente y los miembros del Consejo de Gobierno –imitando con fidelidad lo
establecido en la instancia estatal– serán políticamente responsables ante la Asamblea.
c) Un Tribunal Superior de Justicia, que culminará la organización judicial en el ámbito
territorial de la Comunidad Autónoma, sin perjuicio de la jurisdicción que corresponde
al Tribunal Supremo del Estado, especificándose, a este propósito, que «las sucesivas
instancias procesales, en su caso, se agotarán ante órganos judiciales radicados en el
mismo territorio de la Comunidad Autónoma en que esté el órgano competente en pri-
mera instancia». A él se refieren los arts. 70 a 79 de la Ley Orgánica 6/1985, de 1 de
julio, del Poder Judicial.

1.3.5.3. Comunidades Autónomas de régimen excepcional


Ante el silencio de la Constitución sobre su organización, habrá que estar a lo antes expuesto
para las Comunidades Autónomas de régimen normal.

1.3.6. Gobierno y Administración


Su Gobierno y Administración siguen miméticamente la estructura de la Administración Ge-
neral del Estado, encontrándonos con:
a) El Presidente.
b) El Consejo de Gobierno.
c) Las Consejerías o Departamentos, equivalentes a los Ministerios.
d) Los restantes órganos superiores centrales: Viceconsejerías (equivalentes a las Subse-
cretarías de los Ministerios), Secretarías Generales, Direcciones Generales y Secretarías
Generales Técnicas.
e) En las Comunidades Autónomas pluriprovinciales: Delegaciones Provinciales de las Con-
sejerías y otros órganos periféricos.

70 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

1.3.7. Competencias de las Comunidades Autónomas


El entramado competencial de las Comunidades Autónomas, pieza esencial de las autono-
mías, no ha quedado deslindado con precisión por la CE en un precepto único, sino que es la
resultante de la conjugación de diversos artículos constitucionales.
En efecto, el art. 148 CE señala las competencias que podrán asumir las Comunidades Au-
tónomas, indicando las siguientes materias:
1. Organización de sus instituciones de autogobierno.
2. Las alteraciones de los términos municipales comprendidos en su territorio y, en general,
las funciones que correspondan a la Administración del Estado sobre las Corporaciones
Locales y cuya transferencia autorice la legislación sobre Régimen Local.
3. Ordenación del territorio, urbanismo y vivienda.
4. Las obras públicas de interés de la Comunidad Autónoma en su propio territorio.
5. Los ferrocarriles y carreteras cuyo itinerario se desarrolle íntegramente en el territorio de
la Comunidad Autónoma y, en los mismos términos, el transporte desarrollado por estos
medios o por cable.
6. Los puertos de refugio, los puertos y aeropuertos deportivos y, en general, los que no
desarrollen actividades comerciales.
7. La agricultura y ganadería, de acuerdo con la ordenación general de la economía.
8. Los montes y aprovechamientos forestales.
9. La gestión en materia de protección del medio ambiente.
10. Los proyectos, construcción y explotación de los aprovechamientos hidráulicos, canales
y regadíos de interés de la Comunidad Autónoma; las aguas minerales y termales.
11. La pesca en aguas interiores, el marisqueo y la acuicultura, la caza y la pesca fluvial.
12. Ferias interiores.
13. El fomento del desarrollo económico de la Comunidad Autónoma dentro de los objetivos
marcados por la política económica nacional.
14. La artesanía.
15. Museos, bibliotecas y conservatorios de música de interés para la Comunidad Autónoma.
16. Patrimonio monumental de interés de la Comunidad Autónoma.
17. El fomento de la cultura, de la investigación y, en su caso, de la enseñanza de la lengua
de la Comunidad Autónoma.
18. Promoción y ordenación del turismo en su ámbito territorial.
19. Promoción del deporte y de la adecuada utilización del ocio.
20. Asistencia social.
21. Sanidad e higiene.
22. La vigilancia y protección de sus edificios e instalaciones. La coordinación y demás fa-
cultades en relación con las policías locales en los términos que establezca una Ley
Orgánica.
Por otra parte, conforme al art. 148,2.º CE, transcurridos cinco años, y mediante la reforma
de sus Estatutos, las Comunidades Autónomas podrán ampliar sus competencias dentro del mar-
co establecido en el art. 149, que se refiere a las competencias exclusivas del Estado.
Al efecto, el número 3.º del art. 149 prescribe que las materias no atribuidas expresamente
al Estado por esta Constitución podrán corresponder a las Comunidades Autónomas, en virtud
de sus respectivos Estatutos. La competencia sobre las materias que no se hayan asumido por

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 71


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

los Estatutos de Autonomía corresponderá al Estado, cuyas normas prevalecerán, en caso de


conflicto, sobre las de las Comunidades Autónomas en todo lo que no esté atribuido a la exclu-
siva competencia de éstas. El Derecho estatal será, en todo caso, supletorio del Derecho de las
Comunidades Autónomas.
Finalmente, el art. 150 CE prevé, entre otras cuestiones, la atribución de competencias es-
tatales a las Comunidades Autónomas, al disponer que:
1. Las Cortes Generales, en materia de competencia estatal, podrán atribuir a todas o a
alguna de las Comunidades Autónomas la facultad de dictar, para sí mismas, normas
legislativas en el marco de los principios, bases y directrices fijados por una Ley estatal.
Sin perjuicio de la competencia de los Tribunales, en cada Ley marco se establecerá la
modalidad del control de las Cortes Generales sobre estas normas legislativas de las
Comunidades Autónomas.
2. El Estado podrá transferir o delegar en las Comunidades Autónomas, mediante Ley Or-
gánica, facultades correspondientes a materia de titularidad estatal que por su propia
naturaleza sean susceptibles de transferencia o delegación. La Ley preverá en cada caso
la correspondiente transferencia de medios financieros, así como las formas de control
que se reserve el Estado.
3. El Estado podrá dictar leyes que establezcan los principios necesarios para armonizar las
disposiciones normativas de las Comunidades Autónomas, aun en el caso de materias atri-
buidas a la competencia de éstas, cuando así lo exija el interés general. Corresponde a las
Cortes Generales, por mayoría absoluta de cada Cámara, la apreciación de esta necesidad.
Al efecto, ha de hacerse mención a la Ley Orgánica 9/1992, de 23 de diciembre, de transfe-
rencia de competencias a Comunidades Autónomas que accedieron a la autonomía por la vía del
artículo 143 de la Constitución, por la cual se posibilita la ampliación del abanico competencial de
estas Comunidades Autónomas concediéndoles tanto competencia exclusiva, como de desarrollo
legislativo y ejecución o de ejecución sólo.

1.3.8. Competencias reservadas al Estado


En concreto, al Estado se le reconoce competencia exclusiva en las siguientes materias (art.
149 CE):
1. La regulación de las condiciones básicas que garanticen la igualdad de todos los españo-
les en el ejercicio de los derechos y en el cumplimiento de los deberes constitucionales.
2. Nacionalidad, inmigración, emigración, extranjería y derecho de asilo.
3. Relaciones internacionales.
4. Defensa y Fuerzas Armadas.
5. Administración de Justicia.
6. Legislación mercantil, penal y penitenciaria; legislación procesal, sin perjuicio de las ne-
cesarias especialidades que en este orden se deriven de las particularidades del derecho
sustantivo de las Comunidades Autónomas.
7. Legislación laboral; sin perjuicio de su ejecución por los órganos de las Comunidades
Autónomas.
8. Legislación civil; sin perjuicio de la conservación, modificación y desarrollo por las Co-
munidades Autónomas de los derechos civiles, forales o especiales, allí donde existan.
En todo caso, las reglas relativas a la aplicación y eficacia de las normas jurídicas, rela-
ciones jurídico–civiles relativas a las formas de matrimonio, ordenación de los registros
e instrumentos públicos, bases de las obligaciones contractuales, normas para resolver
los conflictos de leyes y determinación de las fuentes del Derecho, con respeto, en este
último caso, a las normas de derecho foral o especial.

72 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

9. Legislación sobre propiedad intelectual e industrial.


10. Régimen aduanero y arancelario; comercio exterior.
11. Sistema monetario: divisas, cambio y convertibilidad; bases de la ordenación del crédito,
banca y seguros.
12. Legislación sobre pesas y medidas, determinación de la hora oficial.
13. Bases y coordinación de la planificación general de la actividad económica.
14. Hacienda general y Deuda del Estado.
15. Fomento y coordinación general de la investigación científica y técnica.
16. Sanidad exterior. Bases y coordinación general de la sanidad. Legislación sobre produc-
tos farmacéuticos.
17. Legislación básica y régimen económico de la Seguridad Social, sin perjuicio de la ejecu-
ción de sus servicios por las Comunidades Autónomas.
18. Las bases del régimen jurídico de las Administraciones públicas y del régimen estatutario
de sus funcionarios que, en todo caso, garantizarán a los administrados un tratamiento
común ante ellas; el procedimiento administrativo común, sin perjuicio de las especia-
lidades derivadas de la organización propia de las Comunidades Autónomas; legislación
sobre expropiación forzosa; legislación básica sobre contratos y concesiones administra-
tivas y el sistema de responsabilidad de todas las Administraciones públicas.
19. Pesca marítima, sin perjuicio de las competencias que en la ordenación del sector se
atribuyan a las Comunidades Autónomas.
20. Marina mercante y abanderamiento de buques; iluminación de costas y señales marí-
timas; puertos de interés general; aeropuertos de interés general; control del espacio
aéreo, tránsito y transporte aéreo, servicio meteorológico y matriculación de aeronaves.
21. Ferrocarriles y transportes terrestres que transcurran por el territorio de más de una
Comunidad Autónoma; régimen general de comunicaciones; tráfico y circulación de ve-
hículos a motor; correos y telecomunicaciones; cables aéreos, submarinos y radiocomu-
nicación.
22. La legislación, ordenación y concesión de recursos y aprovechamientos hidráulicos cuan-
do las aguas discurran por más de una Comunidad Autónoma, y la autorización de las
instalaciones eléctricas cuando su aprovechamiento afecte a otra Comunidad o el trans-
porte de energía salga de su ámbito territorial.
23. Legislación básica sobre protección del medio ambiente, sin perjuicio de las facultades
de las Comunidades Autónomas de establecer normas adicionales de protección. La
legislación básica sobre montes, aprovechamientos forestales y vías pecuarias.
24. Obras públicas de interés general o cuya realización afecte a más de una Comunidad
Autónoma.
25. Bases del régimen minero y energético.
26. Régimen de producción, comercio, tenencia y uso de armas y explosivos.
27. Normas básicas del régimen de prensa, radio y televisión y, en general, de todos los
medios de comunicación social, sin perjuicio de las facultades que en su desarrollo y
ejecución correspondan a las Comunidades Autónomas.
28. Defensa del patrimonio cultural, artístico y monumental español contra la exportación y
la expoliación; museos, bibliotecas y archivos de titularidad estatal, sin perjuicio de su
gestión por parte de las Comunidades Autónomas.
29. Seguridad pública, sin perjuicio de la posibilidad de creación de policías por las Comuni-
dades Autónomas en la forma que se establezca en los respectivos Estatutos en el marco
de lo que disponga una ley orgánica.

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 73


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

30. Regulación de las condiciones de obtención, expedición y homologación de títulos aca-


démicos y profesionales y normas básicas para el desarrollo del artículo 27 de la Cons-
titución, a fin de garantizar el cumplimiento de las obligaciones de los poderes públicos
en esta materia.
31. Estadística para fines estatales.
32. Autorización para la convocatoria de consultas populares por vía de referéndum.
Por otra parte, sin perjuicio de las competencias que podrán asumir las Comunidades Autó-
nomas, el Estado considerará el servicio de la cultura como deber y atribución esencial y facilitará
la comunicación cultural entre las Comunidades Autónomas, de acuerdo con ellas.

1.3.9. Las potestades legislativas de las Comunidades Autónomas


1.3.9.1. Introducción
En España, tras la CE, el Estado y las Comunidades Autónomas son los titulares de la potes-
tad legislativa.
En cuanto a la potestad legislativa del Estado la ejercen las Cortes Generales, con arreglo al
art. 66,2.º CE.
En lo que concierne a las Comunidades Autónomas, corresponde a sus respectivas Asam-
bleas Legislativas.
Finalmente, la sanción de las Leyes corresponde al Rey (art. 62 CE), estableciendo el art. 91
del texto constitucional que «el Rey sancionará en el plazo de quince días las Leyes aprobadas por
las Cortes Generales y las promulgará y ordenará su inmediata publicación».
En cuanto a la sanción y promulgación de las Leyes de las Comunidades Autónomas, corres-
ponderá al Presidente de cada una de ellas, en nombre del Rey.

1.3.9.2. Las Leyes Autonómicas y sus relaciones con las Leyes Estatales
El reconocimiento constitucional de las Comunidades Autónomas, a las que se les ha dotado
de poder legislativo, plantea el problema de las relaciones entre sus Leyes y las del Estado, de-
biendo partirse en su resolución de que, como ha señalado GARCÍA DE ENTERRÍA, las distintas
relaciones interordinamentales entre las Leyes estatales y las de las Comunidades Autónomas,
han de entenderse desde el postulado de la separación previa entre ellas, del reconocimiento de
una sustantividad propia a cada una de ellas.
Por ello, las normas autonómicas no están jerárquicamente subordinadas a las del Estado,
por lo que, para explicar su primaria relación con éstas, no hay que acudir al principio de jerarquía,
sino al principio de la competencia, según el cual en el ámbito competencial autonómico la norma
autonómica excluye a la del Estado y, en general, a la de cualquier otro ordenamiento, y viceversa.
Ahora bien, como indica este Autor, partiendo de ambos ordenamientos (estatal y autonómi-
co) son igualmente dependientes del supraordenamiento constitucional y de que son coextensos
en cuanto a los sujetos y en cuanto al territorio de aplicación, no existe una separación y corre-
lativa exclusión entre estas normas con carácter absoluto, sino que puede decirse que existen
relaciones de colaboración entre ambos, distinguiendo este mismo Autor las siguientes clases,
sobre la base de la CE:
a) Relaciones de cooperación:
Sobre la base de los arts. 148,1.º (competencias exclusivas de las Comunidades Autóno-
mas) y 149,1.º (competencias exclusivas del Estado) CE, se producen tres tipos de relacio-
nes de colaboración entre los ordenamientos del Estado y de las Comunidades Autónomas:
1. La regulación concurrente del Estado y de las Comunidades Autónomas: El art.
149,1.º define la competencia exclusiva del Estado para una «regulación de condi-
ciones básicas que garanticen la igualdad de todos los españoles en el ejercicio de

74 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

los derechos y en el cumplimiento de los deberes constitucionales» (subapartado


1.º), o formulación de «bases de las obligaciones contractuales, bases de la orde-
nación del crédito, banca y seguros, bases y coordinación de la planificación general
de la actividad económica, bases y coordinación general de la sanidad, bases del
régimen jurídico de las Administraciones Públicas y del régimen estatutario de sus
funcionarios», etc. (subapartados 8.º, 11.º, 13.º, 16.º y 18.º), de «legislación básica
y régimen económico de la Seguridad Social, legislación básica sobre contratos y
concesiones administrativas, legislación básica sobre protección del medio ambien-
te y sobre montes, aprovechamientos forestales y vías pecuarias» (subapartados
17.º, 18.º y 23.º), de «normas básicas del régimen de prensa, radio y televisión y,
en general, de todos los medios de comunicación social, y normas básicas para el
desarrollo del art. 27 de la propia Constitución» (subapartados 27.º y 30.º), y de
«régimen general de comunicaciones» (subapartado 21.º).
En definitiva, se trata de enunciar una competencia normativa estatal que no agota
la regulación de la respectiva materia, sino que se prevé una participación ulterior de
las Comunidades Autónomas, por vía legislativa o reglamentaria, en tal regulación,
mediante las normas que en el propio art. 149,1.º se denominan, en algún caso,
como «normas de desarrollo».
Por lo demás, esta normativa básica no debe confundirse con las denominadas
Leyes de Bases a que luego nos referiremos, al tratar de las disposiciones del Poder
Ejecutivo con rango de Ley.
2. La ejecución autonómica de la legislación estatal, prevista en el subapartado 7.º
(en relación con la legislación laboral), en el subapartado 17.º (en relación con la
legislación básica y régimen económico de la Seguridad Social) y en el subapartado
28.º (en relación con la gestión autonómica de los bienes culturales del Estado) del
art. 149,1.º CE.
3. La coordinación por el Estado, reconocida en los subapartados 13.º (respecto de la
planificación general de la actividad económica), 15.º (sobre la investigación cientí-
fica y técnica) y 16.º (sobre la sanidad), cuya forma de plasmación es la elaboración
por el Estado de Planes, como reconoce explícitamente el art. 131 CE, conforme al
cual «el Estado, mediante Ley, podrá planificar la actividad económica general para
atender a las necesidades colectivas, equilibrar y armonizar el desarrollo regional y
sectorial y estimular el crecimiento de la renta y de la riqueza y su más justa distri-
bución».
b) Relaciones de interferencia entre los dos ordenamientos:
GARCÍA DE ENTERRÍA incluye en estas relaciones, que suponen excepciones singulares
o modificaciones al esquema de la distribución de competencias (bien porque el Estado
traslada a una o varias Comunidades Autónomas por vía delegativa competencias que
le pertenecen, para que, manteniendo su titularidad sobre las mismas, sean ejercitadas
por dichas Comunidades Autónomas, bien porque el Estado interviene, con habilitación
constitucional explícita, para «armonizar» la competencia normativa autonómica median-
te Leyes propias, o bien porque el Estado intervenga por vía coercitiva en el funciona-
miento autonómico por la vía excepcional del art. 155 CE) los siguientes supuestos:
1. Las delegaciones estatales en favor de las Comunidades Autónomas, dentro de las
cuales, a su vez, deben distinguirse:
– Las delegaciones normativas a que se refiere el art. 150,1.º CE, conforme al
cual «las Cortes Generales, en materias de competencia estatal, podrán atribuir
a todas o a alguna de las Comunidades Autónomas la facultad de dictar, para
sí mismas, normas legislativas en el marco de los principios, bases y directrices
fijados por una Ley estatal. Sin perjuicio de la competencia de los Tribunales, en
cada Ley marco se establecerá la modalidad del control de las Cortes Generales
sobre estas normas legislativas de las Comunidades Autónomas».

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 75


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

– Las delegaciones de competencias a que se refiere el art. 150,2.º CE, según


el cual «el Estado podrá transferir o delegar en las Comunidades Autónomas,
mediante Ley Orgánica, facultades correspondientes a materia de titularidad
estatal que por su propia naturaleza sean susceptibles de transferencia o dele-
gación. La Ley preverá en cada caso la correspondiente transferencia de medios
financieros, así como las formas de control que se reserve el Estado».
2. Las Leyes estatales de armonización, a las que se refiere el art. 150,3.º CE, a cuyo
tenor «el Estado podrá dictar Leyes que establezcan los principios necesarios para
armonizar las disposiciones normativas de las Comunidades Autónomas, aun en el
caso de materias atribuidas a la competencia de éstas, cuando así lo exija el interés
general. Corresponde a las Cortes Generales, por mayoría absoluta de cada Cámara,
la apreciación de esta necesidad».
Estas Leyes de armonización, como señala el Autor al que venimos siguiendo en esta
exposición, pueden actuar sobre normas autonómicas dictadas o, preventivamente,
sobre normas autonómicas aún no producidas. Asimismo, se trata de Leyes de prin-
cipios, por lo que no agotan por sí mismas la materia de que se trate, es decir, se
limitan a fijar un cuadro general dentro del cual se produzca después la normación au-
tonómica, a la que no pueden sustituir o excluir. Finalmente, han de ser dictadas con
carácter general (y no para una o varias Comunidades Autónomas sólo) y vinculan a
las normas autonómicas, provocando la derogación de estas Leyes de armonización el
restablecimiento de las potestades autonómicas en la situación anterior a las mismas.
3. La ejecución y coerción estatal, a que se refiere el art. 155 CE, según el cual «si una
Comunidad Autónoma no cumpliere las obligaciones que la Constitución u otras Leyes
le impongan, o actuare de forma que atente gravemente al interés general de España, el
Gobierno, previo requerimiento al Presidente de la Comunidad Autónoma y, en el caso de
no ser atendido, con la aprobación por mayoría absoluta del Senado, podrá adoptar las
medidas necesarias para obligar a aquélla al cumplimiento forzoso de dichas obligaciones o
para la protección del mencionado interés general. Para la ejecución de estas medidas, el
Gobierno podrá dar instrucciones a todas las autoridades de las Comunidades Autónomas».
c) Las relaciones de integración entre los dos ordenamientos, plasmadas en dos cláusulas
constitucionales que se encuentran en el art. 149,3.º: las normas del Estado «prevale-
cerán en caso de conflicto sobre las de las Comunidades Autónomas en todo lo que no
esté atribuido a la exclusiva competencia de éstas», y «el Derecho estatal será, en todo
caso, supletorio del Derecho de las Comunidades Autónomas». Son las cláusulas de
prevalencia y de supletoriedad del Derecho estatal.
En cuanto a la supletoriedad del Derecho estatal, su razón se encuentra, según GARCÍA
DE ENTERRÍA, en que es un Derecho general o común, orgánicamente completo, mien-
tras que el autonómico es un Derecho especial, fragmentario, incompleto, precisando
para su integración total de la suplencia del Derecho común estatal.
La propia Constitución confirma esta afirmación al reservar al Estado lo relativo a toda la
Legislación Civil (salvo el Derecho Foral, donde exista), el Derecho Penal y Penitenciario,
el Derecho Laboral, el Derecho Mercantil, etc., así como la competencia para dictar las
«bases» de otra serie de materias, como el régimen jurídico de las Administraciones Pú-
blicas y de sus funcionarios, prensa, radio y televisión etc.

1.3.10. Control de la actividad de los órganos de las Comunidades Autónomas


A él se refiere el art. 153 CE, señalando que se ejercerá:
a) Por el Tribunal Constitucional, el relativo a la constitucionalidad de sus disposiciones
normativas con fuerza de Ley.
b) Por el Gobierno, previo dictamen del Consejo de Estado, el del ejercicio de las funciones
delegadas a que se refiere el apartado 2 del art. 150.

76 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

c) Por la jurisdicción contencioso–administrativa, el de la Administración autónoma y sus


normas reglamentarias.
d) Por el Tribunal de Cuentas, el económico y presupuestario.
Por su parte, el art. 155 establece que:
1. Si una Comunidad Autónoma no cumpliere las obligaciones que la Constitución u otras
leyes le impongan, o actuare de forma que atente gravemente al interés general de Es-
paña, el Gobierno, previo requerimiento al Presidente de la Comunidad Autónoma y, en
el caso de no ser atendido, con la aprobación por mayoría absoluta del Senado, podrá
adoptar las medidas necesarias para obligar a aquélla al cumplimiento forzoso de dichas
obligaciones o para la protección del mencionado interés general.
2. Para la ejecución de las medidas previstas en el apartado anterior, el Gobierno podrá dar
instrucciones a todas las autoridades de las Comunidades Autónomas.

1.3.11. Financiación de las Comunidades Autónomas


Para concluir este epígrafe, se ha de hacer referencia a la financiación de las Comunidades Au-
tónomas, requisito indispensable para que puedan asumir y desarrollar la actividad que les es propia.
Al respecto, el art. 156 CE establece que las Comunidades Autónomas gozarán de autono-
mía financiera para el desarrollo y ejecución de sus competencias con arreglo a los principios de
coordinación con la Hacienda estatal y de solidaridad entre todos los españoles.
Las Comunidades Autónomas podrán actuar como delegados o colaboradores del Estado
para la recaudación, la gestión y la liquidación de los recursos tributarios de aquél, de acuerdo
con las leyes y los Estatutos.
Por su parte, el art. 157,1.º CE determina los recursos de las Comunidades Autónomas, que
estarán constituidos por:
a) Impuestos cedidos total o parcialmente por el Estado; recargos sobre impuestos estata-
les y otras participaciones en los ingresos del Estado.
b) Sus propios impuestos, tasas y contribuciones especiales.
c) Transferencias de un Fondo de Compensación Interterritorial y otras asignaciones con
cargo a los Presupuestos Generales del Estado.
d) Rendimientos procedentes de su patrimonio e ingresos de Derecho privado.
e) El producto de las operaciones de crédito.
Las Comunidades Autónomas no podrán en ningún caso adoptar medidas tributarias sobre
bienes situados fuera de su territorio o que supongan obstáculo para la libre circulación de mer-
cancías o servicios (art. 157,2.º).
Mediante Ley Orgánica podrá regularse el ejercicio de las competencias financieras enumeradas
en el precedente apartado 1, las normas para resolver los conflictos que pudieran surgir y las posibles
formas de colaboración financiera entre las Comunidades Autónomas y el Estado (art. 157,3.º).
La Ley Orgánica 8/1980, de 22 de septiembre, de Financiación de las Comunidades Autónomas,
sustancialmente modificada por la Ley Orgánica 1/1989, de 13 de abril, por la Ley Orgánica 3/1996,
de 27 de diciembre, por la Ley Orgánica 10/1998, de 17 de diciembre, complementaria de la Ley
sobre introducción del euro, por la Ley Orgánica 5/2001, de 13 de diciembre, complementaria a la
Ley General de Estabilidad Presupuestaria, por la Ley Orgánica 7/2001, de 27 de diciembre, por la Ley
Orgánica 3/2009, de 18 de diciembre, de modificación de la Ley Orgánica 8/1980, de 22 de septiem-
bre de Financiación de las Comunidades Autónomas (que ha derogado parcialmente a la Ley Orgánica
7/2001), y por la Ley Orgánica 2/2012, de 27 de abril, de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad
Financiera (que ha derogado a la citada Ley Orgánica 5/2001, de 13 de diciembre, así como al Texto
Refundido de la Ley General de Estabilidad Presupuestaria, aprobado por el Real Decreto Legislativo
2/2007, de 28 de diciembre), ha venido a regular por extenso esta materia, creando, en su art. 3,

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 77


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

para alcanzar el principio de coordinación a que se refiere el art. 156 CE, el Consejo de Política Fiscal
y Financiera de las Comunidades Autónomas. Junto a ella, debe tenerse en cuenta la Ley 21/2001,
de 27 de diciembre, por la que se regulan las medidas fiscales y administrativas del nuevo sistema de
financiación de las Comunidades Autónomas de régimen común y Ciudades con Estatuto de Autono-
mía (parcialmente derogada por la Ley 46/2002, de 18 de diciembre, de reforma parcial del Impuesto
sobre la Renta de las Personas Físicas y por la que se modifican las Leyes de los Impuestos sobre
Sociedades y sobre la Renta de no Residentes; modificada por la Ley 47/2003, de 26 de noviembre,
General Presupuestaria; parcialmente derogada por la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General
Tributaria; modificada por la Ley 51/2002, de 27 de diciembre, de reforma de la Ley 39/1988, de
28 de diciembre, Reguladora de las Haciendas Locales; por la Ley 53/2002, de 30 de diciembre, de
Medidas Fiscales, Administrativas y del Orden Social; por la Ley 25/2006, de 17 de julio, por la que se
modifica el régimen fiscal de las reorganizaciones empresariales y del sistema portuario y se aprueban
medidas tributarias para la financiación sanitaria y para el sector del transporte por carretera; por la Ley
36/2006, de 29 de noviembre, de medidas para la prevención del fraude fiscal; por la Ley 34/2007,
de 15 de noviembre, de calidad del aire y protección de la atmósfera, y por la Ley 53/2002, de 30
de diciembre, de Medidas Fiscales, Administrativas y del Orden Social), a cuyo amparo se han venido
promulgando las específicas Leyes sobre régimen de cesión de tributos del Estado a cada una de las
Comunidades Autónomas, y que ha sido derogada (para aquellas Comunidades Autónomas y Ciuda-
des con Estatuto de Autonomía que hayan aceptado en Comisión Mixta el sistema regulado por la Ley
22/2009, de 18 de diciembre, por la que se regula el sistema de financiación de las Comunidades
Autónomas de régimen común y Ciudades con Estatuto de Autonomía y se modifican determinadas
normas tributarias, que ha sido modificada por la Ley 2/2012, de 29 de junio, de Presupuestos Gene-
rales del Estado para el año 2012) por esta Ley 22/2009, de 18 de diciembre.
Junto a esta legislación, ha de hacerse mención al Real Decreto-Ley 21/2012, de 13 de julio,
de medidas de liquidez de las Administraciones públicas y en el ámbito financiero.
Por lo demás, para conseguir el principio de solidaridad, también recogido en el art. 156 CE,
se ha creado el Fondo de Compensación Interterritorial, a que se refiere el art. 158 CE y que se
ha regulado por la Ley 22/2001, de 27 de diciembre, reguladora de los Fondos de Compensación
Interterritorial, modificada por la Ley 23/2009, de 18 de diciembre.
Este art. 158 dispone que:
1. En los Presupuestos Generales del Estado podrá establecerse una asignación a las Co-
munidades Autónomas en función del volumen de los servicios y actividades estatales
que hayan asumido y de la garantía de un nivel mínimo en la prestación de los servicios
públicos fundamentales en todo el territorio español.
2. Con el fin de corregir los desequilibrios económicos interterritoriales y hacer efectivo el
principio de solidaridad, se constituirá un Fondo de Compensación con destino a gastos
de inversión, cuyos recursos serán distribuidos por las Cortes Generales entre las Comu-
nidades Autónomas y provincias, en su caso.

2. LA ADMINISTRACIÓN LOCAL. TIPOLOGÍA DE LOS ENTES LOCALES

2.1. CONCEPTO
ENTRENA CUESTA la define como «aquel sector de la Administración Pública integrado por los
Entes Públicos menores de carácter territorial».

2.2. CARACTERÍSTICAS
De esta definición, desprende este Autor las siguientes:
1. La Administración Local forma parte de la Administración Pública, por lo que los Entes
que en ella se comprenden están investidos de las prerrogativas y potestades propias de

78 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

aquélla, si bien tales prerrogativas y potestades no les corresponden con carácter origi-
nario, sino derivado, pues, aunque son Entes Públicos, son Entes Públicos menores, es
decir, existen jurídicamente porque el Estado los crea o reconoce.
En concreto, el art. 4 LRL, reconoce a los Municipios, Provincias e Islas, en su calidad de
«Administraciones Públicas de carácter territorial y dentro de la esfera de sus competen-
cias» una serie de potestades, como la reglamentaria, de autoorganización, tributaria y
financiera, expropiatoria, sancionadora, etc., señalando, además, que estas potestades
y prerrogativas podrán ser aplicadas o reconocidas a las restantes Entidades Locales.
2. A diferencia de la Administración Periférica del Estado, la Local está integrada por Entes,
no por órganos; es decir, por sujetos de Derecho con personalidad jurídica propia.
3. Los Entes Públicos menores que se encuadran en la Administración Local –a salvo de lo
que inmediatamente diremos– tienen, a diferencia de los Entes Institucionales, carácter
territorial. El territorio constituye un elemento esencial de aquéllos.
Esto explica que estos Entes se organicen conforme al sistema de la generalidad: pueden
perseguir todos aquellos fines que redunden en beneficio de quienes ocupan el territorio
de su jurisdicción, mientras que los Entes Institucionales deberán enderezar su actividad
pública siempre y sólo a aquel o aquellos fines específicos que determinaron su recono-
cimiento o creación.
Ahora bien, la LRL, junto a las clásicas Entidades Locales Territoriales (Municipio, Pro-
vincia e Isla), reconoce otras de las que no cabe predicar este carácter territorial como
elemento determinante. A ellas nos referiremos después.

2.3. EVOLUCIÓN DEL RÉGIMEN LOCAL


Desde el momento en que los hombres se reunieron en un territorio determinado para satis-
facer sus necesidades comunes, se puede hablar de Régimen Local.
No obstante, sin negar la importancia que en otras épocas, en España, tuvo el Municipio (por
ejemplo, en la Edad Media), a la hora de abordar la evolución del Régimen Local en el sentido
con el que actualmente se le entiende, hay que señalar, como hitos legislativos más importantes,
la Constitución de Cádiz de 1812, así como la restante legislación del siglo XIX, especialmente el
Decreto de JAVIER DE BURGOS, de 30 de noviembre de 1833, la Ley Municipal y Provincial de
1870, la Ley Municipal de 1877 y la Ley Provincial de 1882.
En el siglo XX, han de destacarse los Estatutos Municipal y Provincial de CALVO SOTELO, de
1924 y 1925, respectivamente, la Ley de Bases Municipal de 1935, la Ley de Bases de 1945 y el
Texto Refundido de la Ley de Régimen Local de 24 de junio de 1955, así como las sucesivas nor-
mas que lo desarrollaron y completaron, que han constituido hasta la vigente LRL (la Ley 7/1985,
de 2 de abril, como se dijo) y el Texto Refundido de las disposiciones legales vigentes en materia
de Régimen Local, aprobado por el Real Decreto Legislativo 781/1986, de 18 de abril (TR/86, en
las próximas citas), la normativa básica en la materia, sin perjuicio de las modificaciones introdu-
cidas por la propia CE y disposiciones posteriores.

2.4. ENTIDADES LOCALES EXISTENTES


El art. 3 LRL distingue entre:
a) Entidades Locales Territoriales
1. El Municipio, al que define el art. 1,1.º de este texto legal como «Entidad básica de
la organización territorial del Estado y cauce inmediato de participación ciudadana
en los asuntos públicos, que institucionaliza y gestiona con autonomía los intereses
propios de la respectiva colectividad», y al que confiere el art. 11,1.º personalidad
jurídica y plena capacidad para el cumplimiento de sus fines.

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 79


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

2. La Provincia, que define el art. 31 LRL como «Entidad Local determinada por la
agrupación de Municipios, con personalidad jurídica propia y plena capacidad para
el cumplimiento de sus fines», reconociéndole el art. 1,2.º autonomía para la ges-
tión de sus intereses, y el carácter de división territorial para el cumplimiento de las
actividades del Estado el art. 141 CE.
3. La Isla en los archipiélagos balear y canario, con idéntica autonomía para la gestión
de sus intereses (art. 1,2.º) y gobernadas, administradas y representadas por los
Cabildos y Consejos Insulares (art. 41).
b) Otras Entidades Locales
El art. 3,2.º LRL establece que gozan, asimismo, de la condición de Entidades Locales:
1. Las Entidades de ámbito territorial inferior al municipal, instituidas o reconocidas por
las Comunidades Autónomas, conforme al art. 45 de esta Ley (este artículo dispone,
en su número 1.º, que las Leyes de las Comunidades Autónomas sobre Régimen
Local regularán las Entidades de ámbito territorial inferior al Municipio, para la ad-
ministración descentralizada de núcleos de población separados, bajo su denomi-
nación tradicional de caseríos, parroquias, aldeas, barrios, anteiglesias, concejos,
pedanías, lugares anejos y otros análogos, o aquella que establezcan las Leyes). En
Andalucía, a tenor de lo dispuesto en la Ley del Parlamento de Andalucía 5/2010, de
11 de junio, de Autonomía Local de Andalucía (LPA 5/2010, en adelante), reciben
la denominación de Entidades Locales Autónomas, junto a las que esta misma Ley
distingue otras Entidades.
2. Las Comarcas u otras Entidades que agrupen varios Municipios, instituidas por las
Comunidades Autónomas, de conformidad con esta Ley y los correspondientes Esta-
tutos de Autonomía. Se trata, de acuerdo con el art. 42 LRL, de una agrupación de
Municipios, cuyas características determinen intereses comunes precisados de una
gestión propia o demanden la prestación de servicios de dicho ámbito.
3. Las Áreas Metropolitanas, a las que define el art. 43,2.º como Entidades Locales
integradas por los Municipios de grandes aglomeraciones urbanas entre cuyos
núcleos de población existan vinculaciones económicas y sociales que hagan ne-
cesaria la planificación conjunta y la coordinación de determinados servicios y
obras. Su creación se efectúa por Ley de la Asamblea Legislativa de la Comunidad
Autónoma.
4. Las Mancomunidades de Municipios, para la ejecución en común de obras y servi-
cios de su competencia, según el art. 44,1.º. Se crean por acuerdo de los propios
Municipios que se mancomunan.

2.5. PRINCIPIOS CONSTITUCIONALES


La Constitución trata de las Entidades Locales en su Título VIII, que versa sobre “la orga-
nización territorial del Estado”, y, concretamente, en el Capítulo Segundo de dicho Título, que
comprende los arts. 140 a 142.
Con carácter general, el art. 137 dispone que “el Estado se organiza territorialmente en Muni-
cipios, en Provincias y en las Comunidades Autónomas que se constituyan. Todas estas Entidades
gozan de autonomía para la gestión de sus respectivos intereses”.
A la vista de éste y de los demás artículos citados, se pueden señalar tres principios funda-
mentales en relación con el Régimen Local:
a) La autonomía de las Corporaciones Locales en la gestión de sus intereses.
b) El carácter democrático y representativo de sus órganos de gobierno.
c) La suficiencia de las Haciendas Locales.

80 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

En efecto, el art. 140 dispone que “la Constitución garantiza la autonomía de los Municipios.
Estos gozarán de personalidad jurídica plena. Su gobierno y administración corresponde a sus
respectivos Ayuntamientos, integrados por los Alcaldes y los Concejales. Los Concejales serán
elegidos por los vecinos del Municipio mediante sufragio universal, igual, libre, directo y secreto,
en la forma establecida en la Ley. Los Alcaldes serán elegidos por los Concejales o por los vecinos.
La Ley regulará las condiciones en las que proceda el régimen de Concejo Abierto”.
Por su parte, el art. 141 establece que:
1. La Provincia es una Entidad Local con personalidad jurídica propia, determinada por la
agrupación de Municipios y división territorial para el cumplimiento de las actividades del
Estado. Cualquier alteración de los límites provinciales habrá de ser aprobada por las
Cortes Generales mediante Ley Orgánica.
2. El Gobierno y la administración autónoma de las Provincias estarán encomendados a
Diputaciones u otras Corporaciones de carácter representativo.
3. Se podrán crear agrupaciones de Municipios diferentes de la Provincia.
4. En los archipiélagos, las Islas tendrán además su administración propia en forma de
Cabildos o Consejos.
Finalmente, el art. 142 prescribe que “las Haciendas Locales deberán disponer de los medios
suficientes para el desempeño de las funciones que la Ley atribuye a las Corporaciones respecti-
vas y se nutrirán fundamentalmente de tributos propios y de participación en los del Estado y de
las Comunidades Autónomas”.
Por lo demás, al margen de estos principios constitucionales especialmente establecidos res-
pecto al Régimen Local, no puede olvidarse la existencia de otros preceptos constitucionales que,
referidos a todas las Administraciones Públicas, establecen otros principios, como los recogidos
en el art. 103,1.º CE, según el cual “la Administración Pública sirve con objetividad los intereses
generales y actúa de acuerdo con los principios de eficacia, jerarquía, descentralización, descon-
centración y coordinación con sometimiento pleno a la Ley y al Derecho.
En el mismo sentido, puede hacerse mención al art. 9 CE, con arreglo al cual:
1. Los ciudadanos y los poderes públicos están sujetos a la Constitución y al resto del orde-
namiento jurídico.
2. Corresponde a los poderes públicos promover las condiciones para que la libertad y la
igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; remover
los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de todos los
ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social.
3. La Constitución garantiza el principio de legalidad, la jerarquía normativa, la publicidad de
las normas, la irretroactividad de las disposiciones sancionadoras no favorables o restric-
tivas de derechos individuales, la seguridad jurídica, la responsabilidad y la interdicción
de la arbitrariedad de los poderes públicos.

2.6. REGULACIÓN JURÍDICA


La legislación vigente en materia de Régimen Local se puede concretar en los siguientes
textos:
1. En el escalón más alto, la Constitución, especialmente los arts. 137 a 142, además de
otras normas dispersas en su articulado.
2. En segundo lugar, la vigente LRL, que, dicho sea de paso, fue declarada parcialmente
inconstitucional (y por lo tanto derogada en esos puntos por la Constitución) por la
Sentencia 214/1989, de 21 de diciembre, del Tribunal Constitucional, y que ha sido mo-
dificada parcialmente por la ya derogada Ley 39/1988, de 28 de diciembre, reguladora
de las Haciendas Locales; por la Ley 9/1991, de 22 de marzo, por la que se modifican

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 81


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

determinados artículos de la Ley 25/1983, de 26 de diciembre, de Incompatibilidades


de Altos Cargos, de la Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las bases del Régimen
Local, de la Ley de Contratos del Estado y de la Ley 24/1988, de 28 de junio, del Mer-
cado de Valores; por la Ley 31/1991, de 30 de diciembre, de Presupuestos Generales
del estado para 1992; por la Ley 10/1993, de modificación del régimen de puestos de
trabajo reservados a funcionarios de Administración Local con habilitación de carácter
nacional, y, en esta misma materia, por el Real Decreto Legislativo 2/1994, de 25 de
junio, de modificación de esta Ley y del TR/86; su art. 70,2.º, por la Ley 39/1994, de 30
de diciembre; por la Ley 13/1995, de 18 de mayo, de Contratos de las Administraciones
Públicas; sus arts. 12, 15, 16, 17 y 18,2.º, por la Ley 4/1996, de 10 de enero, por
la que se modifica la Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases del Régimen
Local, en relación con el Padrón municipal; sus arts. 26,1.º,c) y 86,3.º; por el Real
Decreto-Ley 5/1996, de 7 de junio, de medidas liberalizadoras en materia de suelo y de
Colegios Profesionales; por el Real Decreto-Ley 7/1996, de 7 de junio, sobre medidas
urgentes de carácter fiscal y de fomento y liberalización de la actividad económica; por
la Ley 7/1997, de 14 de abril, de medidas liberalizadoras en materia de suelo y de Cole-
gios Profesionales; por la Ley 34/1998, de 7 de octubre, del sector de hidrocarburos; su
art. 108, por la Ley 50/1998, de 30 de diciembre, de Medidas Fiscales, Administrativas
y del Orden Social; sus arts. 5, 20, 21,22, 23,2.º,b), 32, 33,2.º y 3.º, 34, 35,2.º,b),
46,2.º, 47,3.º, 48, 49, 50, 52,1.º, 58,2.º, 64, 65, 66, 67, 73, 75,1.º, 77, 84,3.º,
118,1.º, así como las Disposiciones Adicionales Quinta y Sexta, por la Ley 11/1999, de
21 de abril, de modificación de la Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora de las Bases
del Régimen Local, y otras medidas para el desarrollo del Gobierno Local, en materia
de tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial y en materia de aguas; sus
arts. 21,1.º,f), 33,2.º,l), 34,1.º,f) y k) y 101, por la ley 55/1999, de 29 de diciembre,
de medidas fiscales, administrativas y del orden social; sus arts. 75 y 102, por la Ley
14/2000, de 29 de diciembre, de Medidas fiscales, administrativas y del orden social;
su art. 99 por la Ley 24/2001, de 27 de diciembre, de Medidas Fiscales, Administrativas
y del Orden Social; sus arts. 61 y 75,7.º por la Ley Orgánica 1/2003, de 10 de marzo,
para la garantía de la democracia en los Ayuntamientos y la seguridad de los Concejales,
y sus arts. 16 y 17; su Disposición Adicional Séptima por la Ley Orgánica 14/2003, de
20 de noviembre, de Reforma de la Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre dere-
chos y libertades de los extranjeros en España y su integración social, modificada por la
Ley Orgánica 8/2000, de 22 de diciembre; de la Ley 7/1985, de 2 de abril, Reguladora
de las Bases del Régimen Local; de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen
Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, y de
la Ley 3/1991, de 10 de enero, de Competencia Desleal; buena parte de su contenido,
por la citada Ley 57/2003, de 16 de diciembre, de medidas para la modernización del
gobierno local; derogada (su art. 92 y el Capítulo III del Título VII, arts. 98 y 99) por la
Ley 7/2007, de 12 de abril, del Estatuto Básico del Empleado Público (LEBEP, en otras
referencias); sus arts. 22,2º, 70 ter (nuevo), 75 y su Disposición Adicional Decimoquin-
ta, por la Ley 8/2007, de 28 de mayo, de suelo, derogada posteriormente por el Real
Decreto Legislativo 2/2008, de 26 de junio, por el que se aprueba el Texto Refundido de
la Ley de Suelo (que, no obstante, mantiene la redacción dada por aquella Ley, y que
ha sido parcialmente modificado por la Ley 2/2008, de 23 de diciembre, de Presupues-
tos Generales del Estado para el año 2009; por el Real Decreto-ley 6/2010, de 9 de
abril, de medidas para el impulso de la recuperación económica y el empleo; por la Ley
13/2011, de 27 de mayo, de regulación del juego; por el Real Decreto-ley 8/2011, de 1
de julio, de medidas de apoyo a los deudores hipotecarios, de control del gasto público y
cancelación de deudas con empresas y autónomos contraídas por las entidades locales,
de fomento de la actividad empresarial e impulso de la rehabilitación y de simplificación
administrativa, y por el Real Decreto-ley 20/2011, de 30 de diciembre, de medidas
urgentes en materia presupuestaria, tributaria y financiera para la corrección del déficit
público); derogados parcial o totalmente sus arts. 21, 22, 33, 34, 88 y 127 y modificado
su art. 85 por la ya derogada Ley 30/2007, de 30 de octubre, de Contratos del Sector

82 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

Público; modificados sus arts. 70 bis y 84 por la Ley 25/2009, de 22 de diciembre, de


modificación de diversas leyes para su adaptación a la Ley sobre el libre acceso a las
actividades de servicios y su ejercicio; modificados sus arts. 29 y 46 por la Ley Orgánica
2/2011, de 28 de enero, por la que se modifica la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio,
del Régimen Electoral General; añadidos sus arts. 84 bis y 84 ter por la Ley 2/2011, de
4 de marzo, de Economía Sostenible, y declarado parcialmente inconstitucional su art.
126 por Sentencia del Pleno del Tribunal Constitucional 103/2013, de 25 de abril de
2013, en Recurso de inconstitucionalidad 1523-2004, interpuesto por el Parlamento de
Cataluña en relación con diversos preceptos de la Ley 57/2003, de 16 de diciembre, de
medidas para la modernización del Gobierno Local, en cuanto al nombramiento como
miembros de la Junta de Gobierno Local de personas que no ostenten la condición de
concejales.
3. En tercer lugar, el Texto Refundido de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, apro-
bado por el Real Decreto Legislativo 2/2004, de 5 de marzo (TR-LHL, en otras citas), par-
cialmente modificado por la Ley 2/2004, de 27 de diciembre, de Presupuestos Generales
del Estado para el año 2005; por la Ley 36/2006, de 29 de noviembre, de medidas para
la prevención del fraude fiscal; por la Ley 42/2006, de 28 de diciembre, de Presupuestos
Generales del Estado para el año 2007; por la Ley Orgánica 4/2007, de 12 de abril, por
la que se modifica la Ley Orgánica 6/2001, de 21 de diciembre, de Universidades; por la
Ley 16/2007, de 4 de julio, de reforma y adaptación de la legislación mercantil en ma-
teria contable para su armonización internacional con base en la normativa de la Unión
Europea; por la citada Ley 2/2008, de 23 de diciembre; por la Ley 26/2009, de 23 de
diciembre, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2010; por la Ley 39/2010,
de 22 de diciembre, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2011; por la
también mencionada Ley 2/2011, de 4 de marzo; por la Ley 20/2011, de 21 de julio,
del Registro Civil; por el Real Decreto-Ley 6/2012, de 9 de marzo, de medidas urgentes
de protección de deudores hipotecarios sin recursos; por el Real Decreto-Ley 19/2012,
de 25 de mayo, de medidas urgentes de liberalización del comercio y de determinados
servicios; por la Ley 2/2012, de 29 de junio, de Presupuestos Generales del Estado para
el año 2012; por la Ley 9/2012, de 14 de noviembre, de reestructuración y resolución
de entidades de crédito; por la Ley 12/2012, de 26 de diciembre, de medidas urgentes
de liberalización del comercio y de determinados servicios; por la Ley 16/2012, de 27 de
diciembre, por la que se adoptan diversas medidas tributarias dirigidas a la consolidación
de las finanzas públicas y al impulso de la actividad económica; por la Ley 17/2012, de
27 de diciembre, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2013, y por la Ley
8/2013, de 26 de junio, de rehabilitación, regeneración y renovación urbanas. Junto al
mismo, ha de tenerse en cuenta el Texto Refundido de la Ley del Catastro Inmobiliario,
aprobado por el Real Decreto Legislativo 1/2004, de 5 de marzo, también modificado por
la citada Ley 2/2004, de 27 de diciembre; por la también citada Ley 36/2006, de 29 de
noviembre, de medidas para la prevención del fraude fiscal; por la asimismo mencionada
Ley 16/2007, de 4 de julio; por la también citada Ley 26/2009, de 23 de diciembre;
por la Ley 40/2010, de 29 de diciembre, de almacenamiento geológico de dióxido de
carbono; por la reiterada Ley 2/2011, de 4 de marzo, de Economía Sostenible; por la Ley
16/2012, de 27 de diciembre, por la que se adoptan diversas medidas tributarias dirigi-
das a la consolidación de las finanzas públicas y al impulso de la actividad económica,
y por el Real Decreto-ley 7/2013, de 28 de junio, de medidas urgentes de naturaleza
tributaria, presupuestaria y de fomento de la investigación, el desarrollo y la innovación,
y que ha sido desarrollado por el Real Decreto 417/2006, de 7 de abril.
4. En cuarto lugar, habrá de estarse a las Leyes sobre Régimen Local que dicten las Comu-
nidades Autónomas, dentro del esquema competencial que tengan asumido. En particu-
lar, por lo que respecta a Andalucía, el art. 98 del Estatuto de Autonomía para Andalucía,
que ha sido promulgado como Ley Orgánica 2/2007, de 19 de marzo, de reforma del Es-
tatuto de Autonomía para Andalucía, señala que una ley de régimen local, en el marco de
la legislación básica del Estado, regulará las relaciones entre las instituciones de la Junta
de Andalucía y los entes locales, así como las técnicas de organización y de relación para

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 83


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

la cooperación y la colaboración entre los entes locales y entre éstos y la Administración


de la Comunidad Autónoma, incluyendo las distintas formas asociativas mancomunales,
convencionales y consorciales, así como cuantas materias se deduzcan del artículo 60
(referido a las competencias de la Comunidad en materia de Régimen Local). Dicha ley
tendrá en cuenta las diferentes características demográficas, geográficas, funcionales,
organizativas, de dimensión y capacidad de gestión de los distintos entes locales. En
cumplimiento de este precepto, se ha promulgado la LPA 5/2010.
5. En quinto lugar, el Texto Refundido de 1986, antes aludido, parcialmente modificado por
la Ley 53/2002, de 30 de diciembre, de Medidas Fiscales, Administrativas y del Orden
Social, y parcialmente derogado por la LEBEP, así como por la citada Ley 30/2007, de
30 de octubre.
6. Los Reglamentos que complementan y desarrollan estas normas; en concreto, los actua-
lizados respecto de las mismas:
a) De Bienes de las Entidades Locales, aprobado por el Real Decreto 1372/1986, de
13 de junio (RBEL, en otras llamadas). En Andalucía, habrá que estar a lo dispuesto
en el Reglamento de Bienes de las Entidades Locales de Andalucía, aprobado por el
Decreto 18/2006, de 24 de enero, dictado en desarrollo de la Ley 7/1999, de 29
de septiembre, de Bienes de las Entidades Locales de Andalucía.
b) De Población y Demarcación Territorial de las Entidades Locales, aprobado por el
Real Decreto 1690/1986, de 11 de julio, que, a tenor de lo dispuesto en la Dispo-
sición Final Primera de la citada Ley 4/1996, ha sido actualizado por el Gobierno,
para acomodarlo a las modificaciones introducidas por dicha Ley, a través del Real
Decreto 2612/1996, de 20 de diciembre, habiendo sido posteriormente modifica-
do por el Real Decreto 3425/2000, de 15 de diciembre, sobre inscripción de los
españoles en los Registros de Matrícula de las Oficinas Consulares en el extranjero
(a su vez, modificado por el Real Decreto 1621/2007, de 7 de diciembre, por el
que se regula un procedimiento de votación para los ciudadanos españoles que se
encuentran temporalmente en el extranjero). Por lo que se refiere a Andalucía, debe
tenerse en cuenta el Decreto 185/2005, de 30 de agosto, por el que se aprueba el
Reglamento de Demarcación Municipal de Andalucía y del Registro Andaluz de Enti-
dades Locales, dictado en desarrollo de la Ley del Parlamento de Andalucía 7/1993,
de 27 de julio, Reguladora de la Demarcación Municipal de Andalucía (Ley que ha
sido derogada expresamente por la LPA 5/2010, por lo que debe entenderse vigente
el citado Reglamento en lo que no se oponga a ésta y hasta tanto se promulgue un
nuevo Reglamento en esta materia).
c) De Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales, apro-
bado por el ya citado Real Decreto 2568/1986, de 28 de noviembre.
Junto a ellos, por el momento, hasta que no se actualicen y acomoden en los términos
de la Disposición Final Primera de la LRL, y mientras no se opongan o contravengan las
normas anteriores, hay que citar los siguientes:
a) De Funcionarios de la Administración Local, de 30 de mayo de 1952, profundamen-
te afectado por la legislación a que luego aludiremos.
b) De Personal de los Servicios Sanitarios Locales, de 27 de noviembre de 1953.
c) De Servicios de las Corporaciones Locales, de 17 de junio de 1955, derogado y
modificado parcialmente por el Real Decreto 2009/2009, de 23 de diciembre.
7. En materia de elecciones locales, la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del Régimen
Electoral General, parcialmente modificada por la Ley Orgánica 1/1987, de 2 de abril, así
como (por ejemplo, en cuanto al quórum para suscribir una moción de censura contra el
Presidente de una Entidad Local) por la Ley Orgánica 8/1991, de 13 de marzo, (respecto
al voto por correo y el delito electoral) por la Ley Orgánica 6/1992, de 2 de noviembre,
por la que se modifican sus artículos 72, 73 y 141, por la Ley Orgánica 13/1994, de 30

84 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

de marzo, por la Ley Orgánica 3/1995, de 23 de marzo (en lo relativo al Censo Electoral),
por la Ley Orgánica 1/1997, de 30 de mayo (para la transposición de la Directiva 94/80/
CE, de Elecciones Municipales), por la Ley Orgánica 3/1998, de 15 de junio, por la Ley
Orgánica 8/1999, de 21 de abril, por la Ley Orgánica 6/2002, de 27 de junio, de Par-
tidos Políticos, por la citada Ley Orgánica 1/2003, de 10 de marzo, por la Ley Orgánica
16/2003, de 28 de noviembre, por la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la
igualdad efectiva de mujeres y hombres, por la Ley Orgánica 9/2007, de 8 de octubre;
por la Ley Orgánica 8/2010, de 4 de noviembre, de reforma de la Ley Orgánica 5/1985,
de 19 de junio, del Régimen Electoral General, y de la Ley Orgánica 2/1979, de 3 de oc-
tubre, del Tribunal Constitucional; por la Ley Orgánica 2/2011, de 28 de enero, por la que
se modifica la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del Régimen Electoral General; por
la Ley Orgánica 3/2011, de 28 de enero, por la que se modifica la Ley Orgánica 5/1985,
de 19 de junio, del Régimen Electoral General, y por la Ley Orgánica 7/2011, de 15 de
julio, de modificación del artículo 160 de la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del
Régimen Electoral General.
8. En materia de funcionarios:
a) La Ley 30/1984, de 2 de agosto, de Medidas para la Reforma de la Función Públi-
ca, derogada en buena parte por la citada LEBEP (a su vez, modificada por la Ley
40/2007, de 4 de diciembre, de medidas en materia de Seguridad Social; por el
Real Decreto-ley 8/2010, de 20 de mayo, por el que se adoptan medidas extraordi-
narias para la reducción del déficit público; por la Ley 39/2010, de 22 de diciembre,
de Presupuestos Generales del Estado para el año 2011; por la Ley 26/2011, de 1
de agosto, de adaptación normativa a la Convención Internacional sobre los Dere-
chos de las Personas con Discapacidad; por la Ley 27/2011, de 1 de agosto, sobre
actualización, adecuación y modernización del sistema de Seguridad Social, y por el
Real Decreto-Ley 20/2012, de 13 de julio, de medidas para garantizar la estabilidad
presupuestaria y de fomento de la competitividad) y modificada parcialmente por la
Ley 23/1988, de 28 de julio, así como por la Ley 22/1993, de 29 de diciembre, la
Ley 42/1994, de 30 de diciembre, de Medidas Fiscales, Administrativas y de Orden
Social, la Ley 13/1996, de 30 de diciembre, también de Medidas Fiscales, Admi-
nistrativas y del Orden Social, la Ley 39/1999, de 5 de noviembre, para promover
la conciliación de la vida familiar y laboral de las personas trabajadoras, las citadas
Leyes 66/1997 y 50/1998, de 30 de diciembre, 55/1999 y 14/2000, de 29 de
diciembre y 24/2001, de 27 de diciembre, la Ley 12/2001, de 9 de julio, de medi-
das urgentes de reforma del mercado de trabajo para el incremento del empleo y la
mejora de su calidad, la Ley 53/2002 antes citada, la Ley 40/2003, de 18 de no-
viembre, de Protección a las Familias Numerosas, la Ley 51/2003, de 2 de diciem-
bre, de igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de
las personas con discapacidad, la Ley 53/2003, de 10 de diciembre, sobre empleo
público de discapacitados, la propia LMMGL, la Ley 2/2004, de 27 de diciembre, de
Presupuestos Generales del Estado para el año 2005, la Ley Orgánica 1/2004, de
28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, la
Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación, la Ley 21/2006, de 20 de junio,
por la que se modifica la Ley 9/1987, de 12 de junio, de órganos de representación,
determinación de las condiciones de trabajo y participación del personal al servicio
de las Administraciones Públicas, y la citada Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo.
b) El Real Decreto 896/1991, de 7 de junio, por el que se establecen las reglas básicas
y los programas mínimos a que debe ajustarse el procedimiento de selección de los
Funcionarios de Administración Local, junto al que debe citarse, con carácter su-
pletorio en esta materia, el Real Decreto 364/1995, de 10 de marzo, por el que se
aprueba el Reglamento General de Ingreso del Personal al Servicio de la Administra-
ción General del Estado y de Provisión de Puestos de Trabajo y Promoción Profesio-
nal de los Funcionarios Civiles de la Administración General del Estado, parcialmente
modificado por el Real Decreto 255/2006, de 3 de marzo, sin que deban olvidarse
las previsiones al efecto de la LEBEP.

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 85


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

c) La Ley 53/1984, de 26 de diciembre (y el Real Decreto 598/1985, de 30 de abril),


sobre Incompatibilidades, también afectada por la citada Ley 14/2000, de 29 de
diciembre, así como por la LEBEP y la citada Ley Orgánica 4/2007, de 12 de abril.
d) Ante la ausencia de una normativa específica, el Real Decreto 365/1995, de 10 de
marzo, por el que se aprueba el Reglamento de Situaciones Administrativas de los
Funcionarios Civiles de la Administración General del Estado, parcialmente modificado
por el Real Decreto 255/2006, de 3 de marzo, y que habrá que acomodar a la LEBEP.
e) El Real Decreto 861/1986, de 25 de abril, sobre régimen retributivo de los funcionarios
de la Administración Local (profundamente afectado por la LEBEP), modificado en lo
relativo al complemento de destino por el Real Decreto 158/1996, de 2 de febrero.
f) La casi totalmente derogada (por la LEBEP, así como por el citado Real Decreto-Ley
20/2012, de 13 de julio) Ley 9/1987, de 12 de junio, de Órganos de Represen-
tación, Determinación de las Condiciones de Trabajo y Participación del Personal
al Servicio de las Administraciones Públicas, modificada parcialmente por la Ley
7/1990, de 19 de julio, sobre Negociación Colectiva y Participación en la Determina-
ción de las Condiciones de Trabajo de los Empleados Públicos, por la Ley 18/1994,
de 30 de junio, por la que se modifica la normativa de elecciones a los órganos de
representación del personal al servicio de las Administraciones públicas de las Leyes
anteriores, por la citada Ley 53/2002, y por la también referenciada Ley 21/2006,
de 20 de junio, y desarrollada por el Real Decreto 1846/1994, de 9 de septiembre,
por el que se aprueba el Reglamento de elecciones a los órganos de representa-
ción del personal al servicio de la Administración General del Estado, junto al que,
respecto del personal laboral, se ha promulgado el Real Decreto 1844/1994, de 9
de septiembre, por el que se aprueba el Reglamento de elecciones a órganos de
representación de los trabajadores en la empresa.
g) El Real Decreto 1174/1987, de 18 de septiembre, por el que se regula el régimen
jurídico de los Funcionarios de Administración Local con habilitación de carácter nacio-
nal, cuya Disposición Transitoria Quinta fue derogada parcialmente por el Real Decreto
833/1989, de 7 de julio, y cuya Disposición Adicional Segunda ha sido derogada por
el citado Real Decreto 158/1996, de 2 de febrero, habiendo sido sustancialmente
modificado por el Real Decreto 1732/1994, de 29 de julio, sobre provisión de pues-
tos de trabajo reservados a funcionarios de Administración Local, con habilitación de
carácter nacional, así como por el Real Decreto 834/2003, de 27 de junio, por el que
se modifica la normativa reguladora de los sistemas de selección y provisión de los
puestos de trabajo reservados a funcionario de Administración Local con habilitación
de carácter nacional (que también ha afectado al anterior, y que ha sido afectado, a
su vez, por el Real Decreto 522/2005, de 13 de mayo, por el que se modifican los
requisitos para la integración de los funcionarios de Administración local con habilita-
ción de carácter nacional pertenecientes a la Subescala de Secretaría-Intervención),
desarrollado por Orden de 10 de agosto de 1994, por la que se dictan normas sobre
concursos de provisión de puestos reservados a funcionarios de Administración Local
con habilitación de carácter nacional, y por Orden de 8 de septiembre de 1994, por
la que se aprueba el modelo de convocatoria conjunta y bases comunes por las que
han de regirse los concursos ordinarios para provisión de puestos de trabajo reserva-
dos a funcionarios de Administración Local con habilitación de carácter nacional. Esta
regulación se ha visto muy afectada por la Disposición Adicional Segunda de la LEBEP,
que, entre otros extremos, ha modificado la denominación de estos funcionarios con-
siderándolos como “funcionarios con habilitación de carácter estatal”, manteniéndose
no obstante hasta que se aprueben las normas de desarrollo de dicha Disposición
Adicional Segunda (Disposición Transitoria Séptima LEBEP).
h) El Real Decreto 480/1993, de 2 de abril, por el que se integra en el Régimen Ge-
neral de la Seguridad Social el Régimen Especial de la Seguridad Social de los Fun-
cionarios de la Administración Local, comportando la desaparición de la Mutualidad
Nacional de Previsión de Administración Local.

86 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

9. En materia de Haciendas Locales, además del TR-LHL antes señalado, puede citar-
se, fundamentalmente, la Orden EHA/3565/2008, de 3 de diciembre, por la que se
aprueba la estructura de los Presupuestos de las Entidades Locales, el Real Decreto
500/1990, de 20 de abril, por el que se desarrolla dicha Ley en lo relativo a los Pre-
supuestos de las Entidades Locales, y la Orden EHA/4040/2004, de 23 de noviembre,
por la que se aprueba la Instrucción del modelo Básico de Contabilidad Local, la Orden
EHA/4041/2004, de 23 de noviembre, por la que se aprueba la Instrucción del modelo
Normal de Contabilidad Local, y la Orden EHA/4042/2004, de 23 de noviembre, por la
que se aprueba la Instrucción del modelo Simplificado de Contabilidad Local.
10. En materia de contratación, el Texto Refundido de la Ley de Contratos del Sector Público,
aprobado por el Real Decreto Legislativo 3/2011, de 14 de noviembre, afectado por la
Orden EHA/3479/2011, de 19 de diciembre, por la que se publican los límites de los
distintos tipos de contratos a efectos de la contratación del sector público a partir del 1
de enero de 2012; modificado por la citada Ley 17/2012, de 27 de diciembre; por el
Real Decreto-Ley 4/2013, de 22 de febrero, de medidas de apoyo al emprendedor y de
estímulo del crecimiento y de la creación de empleo; por la citada Ley 8/2013, de 26 de
junio; por el Real Decreto-ley 8/2013, de 28 de junio, de medidas urgentes contra la mo-
rosidad de las administraciones públicas y de apoyo a entidades locales con problemas
financieros; por la Ley 10/2013, de 24 de julio, por la que se incorporan al ordenamiento
jurídico español las Directivas 2010/84/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 15
de diciembre de 2010, sobre farmacovigilancia, y 2011/62/UE del Parlamento Europeo
y del Consejo, de 8 de junio de 2011, sobre prevención de la entrada de medicamentos
falsificados en la cadena de suministro legal, y se modifica la Ley 29/2006, de 26 de
julio, de garantías y uso racional de los medicamentos y productos sanitarios, y por la Ley
11/2013, de 26 de julio, de medidas de apoyo al emprendedor y de estímulo del creci-
miento y de la creación de empleo, y desarrollado transitoriamente y en cuanto no se le
oponga por el Real Decreto 817/2009, de 8 de mayo, por el que se desarrolla parcial-
mente la Ley 30/2007, de 30 de octubre, de Contratos del Sector Público (parcialmente
modificado por el Real Decreto 300/2011, de 4 de marzo, por el que se modifica el Real
Decreto 817/2009, de 8 de mayo, por el que se desarrolla parcialmente la Ley 30/2007,
de 30 de octubre, de contratos del sector público y se habilita al titular del Ministerio de
(FRQRPtD\+DFLHQGDïDFWXDOPHQWH0LQLVWHULRGH+DFLHQGD\$GPLQLVWUDFLRQHV3~EOL-
FDVïSDUDPRGLILFDUVXVDQH[RV \DVLPLVPRHQFXDQWRQRVHRSRQJDDOPLVPR\PLHQ-
tras no se promulga un nuevo Reglamento de desarrollo de la misma, por el Reglamento
General de la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas, aprobado por el Real
Decreto 1098/2001, de 12 de octubre, así como, puntualmente, en el Real Decreto
541/2001, de 28 de mayo, por el que se establecen determinadas especialidades para
la contratación de servicios de telecomunicaciones. Junto a estas normas, deben tenerse
en cuenta los arts. 33 y 34 de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, que contiene
previsiones sobre contratación administrativa.
11. En materia de bienes, la Ley 33/2003, de 3 de noviembre, del Patrimonio de las Admi-
nistraciones Públicas (parcialmente modificada por la Ley 62/2003, de 30 de diciem-
bre, de medidas fiscales, administrativas y del orden social, por la Ley 5/2006, de 10
de abril, de regulación de los conflictos de intereses de los miembros del Gobierno y de
los Altos Cargos de la Administración General del Estado; por el Real Decreto Legislativo
GHGHMXQLRSRUHOTXHVHDSUXHEDHO7H[WR5HIXQGLGRGHOD/H\GH6XHORïD
su vez modificado por la Ley 2/2008, de 23 de diciembre, de Presupuestos Generales
del Estado para el año 2009, por el Real Decreto-ley 6/2010, de 9 de abril, de medi-
das para el impulso de la recuperación económica y el empleo, por el Real Decreto-ley
8/2011, de 1 de julio, de medidas de apoyo a los deudores hipotecarios, de control
del gasto público y cancelación de deudas con empresas y autónomos contraídas por
las entidades locales, de fomento de la actividad empresarial e impulso de la rehabi-
litación y de simplificación administrativa, por el Real Decreto-Ley 20/2011, de 30 de
diciembre, de medidas urgentes en materia presupuestaria, tributaria y financiera para
la corrección del déficit público, y por la Ley 8/2013, de 26 de junio, de rehabilitación,

AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I 87


COMUNIDADES AUTÓNOMAS. ADMINISTRACIÓN LOCAL

regeneración y renovación urbana, que ha afectado también al citado Real Decreto-Ley


8/2011, de 1 de julio–, por la citada Ley 2/2012, de 29 de junio, por la reiterada Ley
17/2012, de 27 de diciembre, y por la también mencionada Ley 8/2013, de 26 de
junio), y desarrollada por el Real Decreto 1373/2009, de 28 de agosto, por el que se
aprueba el Reglamento General de la Ley 33/2003, de 3 de noviembre, del Patrimonio
de las Administraciones Públicas, además de la regulación contenida en la LRL y en la
legislación autonómica citada.
12. Junto a estas normas, hay que citar diversas disposiciones de carácter sectorial, como la
legislación urbanística, la Ley 2/1985, de 21 de enero, de Protección Civil, etc.
13. Finalmente, por lo que respecta a la legislación de la Junta de Andalucía respecto del
Régimen Local, deben citarse, esencialmente, las siguientes Leyes aprobadas por el
Parlamento de Andalucía:
a) Ley 7/1999, de 29 de septiembre, de Bienes de las Entidades Locales de Andalucía,
modificada por la Ley del Parlamento de Andalucía 18/2003, de 29 de diciembre,
por la que se aprueban medidas fiscales y administrativa, así como derogada y
modificada parcialmente por la LPA 5/2010, y desarrollada, como se expuso, por el
Decreto 18/2006, de 24 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Bienes
de las Entidades Locales de Andalucía.
b) Ley 2/2001, de 3 de mayo, de regulación de las consultas populares en Andalucía.
c) Ley 13/2001, de 11 de diciembre, de Coordinación de las Policías Locales.
d) Ley 6/2003, de 9 de octubre, de símbolos, tratamientos y registro de Entidades
Locales de Andalucía, parcialmente modificada por la LPA 5/2010.
e) Ley 20/2007, de 17 de diciembre, del Consejo Andaluz de Concertación Local.
f) Ley 2/2008, de 10 de diciembre, que regula el acceso de los municipios andaluces
al régimen de organización de los municipios de gran población.
g) La reiterada Ley del Parlamento de Andalucía 5/2010, de 11 de junio, de Autonomía
Local de Andalucía, desarrollada por el Decreto 263/2011, de 2 de agosto, por el
que se aprueba el Reglamento de Funcionamiento del Consejo Andaluz de Gobier-
nos Locales.
h) Ley 6/2010, de 11 de junio, reguladora de la participación de las entidades locales
en los tributos de la Comunidad Autónoma de Andalucía.

88 AUXILIARES ADMINISTRATIVOS DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. TEMARIO VOLUMEN I

También podría gustarte