LA FUNDACIÓN

Elena González Jurado

1º B – 2019

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Índice
Página

1. Introducción 3
1.1. La fundación 3
1.2. Antonio Buero Vallejo 3
1.3. Teatro 4
2. Personajes 5
2.1 Tomás 5
2.2. Asel 6
2.3. Tulio 7
2.4. Max 8
2.5. Lino 9
2.6. Berta 10
2.7. Hombre 11
3. Conclusión 12
4. Bibliografía 13

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1. Introducción

1.1. La fundación

“La fundación” es una obra de teatro publicada en el año 1989 por el autor
Antonio Buero Vallejo.
Esta obra trata de un grupo de cinco hombres que se piensan que viven en
una fundación cuando en realidad están prisioneros en una cárcel condenados a
muerte.
Cada uno de estos hombres se comportan de una forma muy peculiar a lo
largo de la obra, con visiones distorsionadas de la realidad, traiciones entre
ellos y comportamientos extraños.
Al final de la obra, a los dos supervivientes los trasladan a otro lugar
desconocido.

“La fundación es, a la vez, lo su título indica: una institución para el

progreso de las ciencias y de la creatividad humana, y la celda de una
cárcel en la que se encuentra un grupo de condenados a muerte. O, tal
vez, en cierta manera, ninguna de las dos cosas. La fundación es el
rechazo de lo verdadero y de lo falso” (Pajón, 1991, página 648)

1.2. Antonio Buero Vallejo

Dramaturgo y pintor español, nacido en 1916 en Guadalajara. Comenzó su

obra en 1949 con su primer premio reconocido con la obra “Historia de una
escalera”.
Sus obras siempre han tenido ciertos problemas con la censura por los
problemas tratados.
Fue elegido miembro de la RAE, recibió varios premios como el premio
Cervantes
(1986) y el Nacional de las Letras Españolas (1996).

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1.3. Teatro

Antonio Buero Vallejo, mediante su teatro, buscaba un diálogo abierto con

la sociedad española. En esa línea, el tema común que une toda su producción
es la tragedia del individuo, pero visto desde los aspectos sociales, éticos y
morales.
Los principales problemas que angustian al hombre, en definitiva.
Suele reflejar a través de su narrativa, los pensamientos después de sus
estancias en la cárcel.

“Buero Vallejo concluye habitualmente sus obras en una especie de

incertidumbre, o, quizá, de ambivalencia en la que cada problema a un
mismo tiempo se distingue y se confunde, se aclara y se oscurece; como
si fuera necesario acudirá segundas intenciones, No sólo para captar el
sentido adecuado de cada cosa, sino para algo más profundo, para
constituir el sentido mismo de los hechos. Belleza, fealdad; bien, mal;
verdad, falsedad, son aspectos fundamentales de esa manera incierta de
planteamientos; pero mi son los únicos ejemplos, ni la obra quiere
significar sólo eso” (Pajón, 1991, página 658)

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2. Personajes

2.1. Tomás

Este es el protagonista de la obra, que nunca abandona la escena.

Tomás es un hombre que tiene una enfermedad mental y vive en un mundo
irreal, paralelo al de los demás presos.
En la primera parte de la obra, se crea un mundo fantástico en el que cree
ver cosas, incluso personas como Berta, que considera que es su novia.
También pensaba haber estado hablando con el hombre enfermo, cuando en
realidad estaba muerto.
En resumen, se olvida del hambre, el sufrimiento y la condena a muerte que
tiene encima.
Tomás cree residir en una fundación con sus compañeros de celda para
desarrollar investigaciones o en su caso escribir una novela.
En la segunda parte de la obra, acercándose más al final, va siendo más
coherente, es decir, va volviendo poco a poco a la normalidad y a la dolorosa
realidad. Lo que le hace volver a la realidad es saber que el hombre que estaba
enfermo, en realidad, era un cadáver, saber que Tulio iba a ser ejecutado
cuando se lo llevaron los guardias de la celda, el suicidio de Asel y el asesinato
de Max.
Al final de la obra, Tomás, es trasladado junto a Lino a un lugar
desconocido y tampoco se conoce si fueron ejecutados según la condena que
tenían.

“Tomás se propone escribir una novela viviéndola. Es la novela de su

salvación; es la novela que ha de permitir al ratón Tomasito, que Berta
trae en la mano, salvarse de ser utilizado como víctima de la investigación
científica. Atrapado en su propia ratonera, encerrado entre los barrotes
que son para él el mundo, los otros y él mismo, la creatividad le sirve a
Tomás para trascenderse, de tal manera, que su utopía se convierte en una
utopía metafísica.” (Pajón, 1991, página 651)

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2.2 Asel

Es el hombre más maduro y reflexivo de los cinco presos de la obra.

Asel es quién incita la acción dramática: idea la terapia para que Tomás
regrese a la realidad y diseña el proyecto de fuga.
Sus dotes de persuasión y manipulación, lo convierten en el líder del grupo.
Además, este confiesa en la segunda parte de la obra, que él también delato a
sus compañeros en el pasado. Con esto, Asel, quiere decir que él no es un
héroe.
Al final de la obra, Asel decide suicidarse cuando iba a ser trasladado por
los guardias, aunque estos le aseguran que va a volver.

“Encargado: El C-73
Asel: Soy yo
Encargado: Salga
Asel: ¿Con todo?
Encargado: Se le ha dicho que salga y nada más.
Lino: No han llamado por el altavoz…
Asel: Es interrogatorio. No tengo nada que decir y no diré nada.
Encargado: ¡Salga de una vez!
Asel: ¿Puedo despedirme?
Encargado: ¿Para qué, si va a volver?.
Asel: Quien sabe… (página 184-185)

Esto lo hace con el fin de no hablar y hacer posible la fuga de sus

compañeros Tomas y Lino.

“Asel y Max, alcanzan la muerte en sendas caídas del mismo pretil; pero
el uno lo hace mediante un acto voluntario, ejemplificando un momento
culminante de sociabilidad humana, puesto que muere para dar a los
demás la oportunidad de evadirse de la cárcel y conseguir la libertad”
(Pajón, 1986, página 659).

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2.3 Tulio

Es un fotógrafo que conserva su ocupación en la mente de Tomás.

Tulio, en un principio está enfurecido, caracterizado por su mal humor e
intolerancia. Pero todo queda equilibrado con su personalidad soñadora.
Al principio de la obra, se muestra remiso a seguirle la corriente a Tomás
con su enfermedad mental, incluso se burla de su situación. Por esto se encara
con Asel y Max. Pero al final de la obra, resulta ser el que más se identifica con
Tomás.
Tulio termina ejecutado justo cuando empieza a soñar en un futuro mejor
con sus compañeros de celda, antes de que Tomás haya vuelto a la realidad.
Cuando lo trasladan, le insiste a Tomas que deje de soñar despierto y vuelva a
la realidad.

“Tulio habla de su dedicación al tema de los hologramas, modo de

representar ya inventado, pero que puede perfeccionarse. Se logra por ese
medio producir imágenes tan perfectas de lo real que resulta imposible
distinguirlas de la realidad misma. El holograma es una vertiente artística
del futuro, de posibilidades insospechadas: La promesa de la mayor de las
revoluciones en la técnica de la representación plástica” (Pajón, 1986,
página 655)

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2.4 Max

Es un hombre tranquilo y bromista.

Al principio apoya a Tomás, pero en el momento que todos empiezan a
sospechar de éste, empiezan a atacarle. Sin embargo, al final, descubren todos
que fue Max quien a traicionado al grupo a cambio de un poco de comida y de
algunas comodidades.
Al final, es asesinado por su compañero Lino que lo arroja al vacío.

“Lino: Pero si tu no eres el chivato, ¿quién es? No nos llevaron abajo, nos
permiten visitas…Alguien de esta celda les está informando. Asel es un
preso muy significado y le han puesto al lado un espía. ¿Quién es el
soplón?, ¿Tomás?
Max: Yo ya no digo nada. Estáis locos.
Lino: Porque ya nada puedes decir” (página 180)

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2.5 Lino

Es un tornero que en la mente de Tomás aparece como ingeniero.

Lino parece ser una persona violenta y con poco tacto. Pero su actitud
callada y pasiva se va transformando en una participación activa cuando
informa a sus compañeros de la traición de Max y decide matarlo. Al obrar así,
se unifica a los carceleros. Pero por otro lado, su acción, podría haber echado a
perder la posibilidad de escapar.

“Lino: Tenemos el derecho de indignarnos…

Tomás: Y el deber de vencer.
Lino: Si, todo lo he podido echar a perder. Aún tengo que aprender a
pensar…
Tomás: Y yo…
Lino: …Para entender qué es todo esto. ¿Lo sabes tú?
Tomás: El holograma… de las fieras.
Lino: Será eso que tu dices. Pero tan sucio, tan duro…” (página 193)

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2.6 Berta

Es un personaje diferente, proveniente de la imaginación de Tomás.

Al principio de la obra, cuando mantienen un diálogo Tomás y Berta,
Antonio Buero Vallejo, da a entender que son un apareja que viven en la
fundación. Pero al final de la obra cambia el concepto y da a entender al lector
que Berta era sólo una imaginación de sus subconsciente.

“Tomás: Ella…no ha venido

Asel: ¿Lo reconoces?
Tomás: Nunca vino” (página 146)

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2.7 Hombre

Es un hombre enfermo y desconocido. Es el compañero de celda de los

cinco hombres condenados a muerte, con el que habla Tomás hasta que es
consciente de que estaba muerto desde hace seis días.
Tomás es consciente de eso en el momento en el que entran los guardias y el
encargado destapa al hombre y lo zarandea hasta darle la vuelta.

“Encargado: ¿Cuántos días lleva muerto éste hombre?

Tomás: ¿Muerto?...¡Si acaba de hablar!
Encargado: ¡Usted cállese! (a los demás) ¡Contesten!
Asel: Seis días.
Tomás: No es posible.
Encargado: ¿Por qué se lo callaron? Querían aprovechar su ración, ¿eh?
¡Sacad de aquí esta carroña” (página 106)

Cuando el hombre es descubierto muerto, el encargado ordena a los

camareros que trasladen el cuerpo de éste.
Éste personaje aparece principalmente en la subconsciencia de Tomás.

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3. Conclusión

Este libro me ha parecido interesante, a pesar de ser un poco antiguo. A la

hora de realizar este trabajo, me han surgido dudas de qué decir de cada
personaje. Porque cuando fui a la biblioteca de la universidad sólo encontré un
libro que me podía servir.
Me han gustado las transformaciones que sufren los personajes a lo largo de
la obra. Aunque me hubiera gustado saber el final de la obra. Porque lo dejan
en el aire y no sabes si los llegan a matar, si consiguen que los lleven a otra
celda o si consiguen escapar de la cárcel.
Me parece que la obra presenta una visión muy real de la vida en las
cárceles y el deseo de libertad de las personas que se sienten atrapadas al no
poder expresarse con libertad. Además, muestra un gran contraste entre la
realidad y la ficción y lo fácil que puede llegar a confundirse los dos conceptos.
Cuando he empezado a leerla, me esperaba un final totalmente distinto al de
la obra.

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4. Bibliografía

 “La Fundación”.
Autor: Antonio Buero Vallejo
 “El teatro de Antonio Buero Vallejo, Marginalidad e infinito”.
Autor: Enrique Pajón.
 “Buero Vallejo y el Antihéroe. Una crítica de la razón creadora”.
Autor: Enrique Pajón

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