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El néctar de la adoración

Entrevista con Ravindra Gopala Dasa,


secretario de adoración en ISKCON Brasil
¿Qué es una Deidad? ¿Qué es la adoración a la Deidad? ¿Dónde surge esa práctica?

Ravindra Gopala: Krishna es el Señor Supremo, siendo absoluto en todas las opulencias


(como, por ejemplo, belleza, fuerza, riqueza, fama, conocimiento y renuncia). Sus
manifestaciones son completas y absolutas, tal como Su nombre y Su forma. Él es
omnipresente, omnipenetrante e infalible, entre innumerables cualidades maravillosas,
reales y eternas. Sin embargo, somos incapaces de comprender e interactuar con Su plenitud
apenas con nuestros sentidos imperfectos y nuestras razón e inteligencia materiales. Para
eso dependemos de Su misericordia y de la misericordia del maestro espiritual, que nos
enseña cómo seguir el camino correcto del avance espiritual. Nuestro deseo de servir al
Señor krishna es fundamental, pero dependemos de esa misericordia. Como Krishna es la
fuente de toda misericordia, Él se manifiesta de forma que podamos servirlo y desarrollar
una relación práctica que purifique todos nuestros sentidos y despierte nuestra relación
devocional divina con Él. Así, la Deidad es esta forma. Incluso siendo hecha de elementos
materiales como piedra, tinta, madera y metales, Ella es totalmente trascendental, pues se
esculpe siguiendo las indicaciones de las escrituras védicas reveladas, siendo una
manifestación misericordiosa del propio Krishna junto a Sus asociados. Por lo tanto, la Deidad
es Krishna haciéndose presente para que podamos servirlo ahora y siempre.

Foto: A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada adora Deidades de Radha y Krishna.

De forma general, la adoración a la Deidad consiste en ofrecer canciones divinas, servicios,


oraciones, cuidados, diversos ítems y alimentos obtenidos y preparados en la modalidad de
la bondad, o sea, sin causar sufrimiento a otra entidad viviente. Esta ofrenda a la Deidad se
realiza bajo algunas condiciones. Básicamente, hay dos formas de adoración: en casa o en el
templo. La primera es más flexible, simplificada y puede adaptarse a las condiciones de las
personas que la realizan. La segunda implica procedimientos y mantrasadicionales, y es más
elaborada técnicamente. En este caso, la Deidad debe adorarse con la opulencia equivalente
al trato que se le ofrece a un rey. Sin embargo, en ambos casos los factores fundamentales
son el amor y la devoción.

La adoración a la Deidad existe eternamente en el mundo espiritual, pues Krishna, la Deidad


primordial, el Señor primordial, siempre está siendo adorado de alguna forma por Sus
asociados y siervos elevados. Sin embargo, hace aproximadamente 5000 años, el gran sabio
Vyasadeva, inspirado por su maestro espiritual Sri Narada Muni, compiló sistemáticamente
todo el conocimiento védico, pues en su profunda meditación vio que los sacrificios descritos
en los Vedas, entre ellos la adoración a las Deidades, eran medios por a través de los cuales
las personas podían purificar sus ocupaciones. Para simplificar el proceso, él dividió el
único Veda en cuatro, de forma que se pudiera distribuir entre las personas. Sri Vyasadeva
entregó cada uno de los Vedas a algunos de sus discípulos, que se volvieron predicadores
ideales de los mismos. Sri Vyasadeva y sus muchos discípulos fueron grandes
personalidades, y todos fueron muy generosos y compasivos con todas las almas caídas de
esta era de Kali. Así, el conocimiento y las prácticas se mantienen hasta el día de hoy a
través de la sucesión discipular.

La adoración a las Deidades es un servicio devocional que realmente purifica y eleva


espiritualmente a todos: aquellos que la realizan, aquellos que observan mientras se hace, y
aquellos que ayudan de varias formas a que sea realizada. La plenitud de la vida humana
sólo se alcanza y comprende cuando alguien sirve al Señor Supremo, Krishna, el Todo
Completo, siguiendo las orientaciones del maestro espiritual. La adoración a las Deidades
constituye un elemento fundamental en este proceso.

¿En qué momento surgió su interés por la adoración a las Deidades? ¿Cómo asumió
la posición de secretario de adoración en ISKCON? ¿Cuáles son sus tareas?

Ravindra Gopala: Desde la primera vez que fui al templo en 2003, me sentí muy atraído
cuando vi al pujarirealizando la adoración durante el festival del domingo. Incluso sin tener
ninguna noción de lo que era un pujario quiénes eran las Deidades, sentí mucha afinidad con
toda aquella ceremonia maravillosa. Encontré todo muy dulce, místico y completo.
Inmediatamente pensé: “¡Caramba! ¡Qué lindo! Me gustaría mucho poder hacer esto algún
día”. Me sentía muy curioso con todo lo que hacían los pujaris y quería cultivar amistad con
ellos. Estas amistades fueron fundamentales para mi vida espiritual, y desde entonces,
siempre busco aprender de diversas formas con los devotos y devotas.

Recibí iniciación hari-nama en 2007 e iniciación brahmínica en 2010, ambas por Srila


Jayapataka Swami. En 2008 realicé un curso de pujaris ministrado por Gitamrita Devi Dasi en
el Adi Templo, São Paulo, que contribuyó definitivamente a que comenzara a involucrarme
con este maravilloso servicio devocional. Entonces pasé a servir como auxiliar de pujari. De
esta forma, mi deseo de servir a las Deidades y mi cariño hacia ellas crecían cada vez más. El
día que tenía que realizar algún servicio en el pujari era el más esperado y feliz. Tras recibir
la iniciación brahmínica, me encargué de organizar las actividades en el pujari del Adi
Templo en São Paulo, servicio que realicé con motivación y dedicación. Finalmente, a
mediados de 2012, con las bendiciones de losvaishnavas y vaishnavis, pasé a servir como
secretario de adoración en Brasil.

¿Cuál es la diferencia entre una Deidad debidamente instalada y una Deidad,


comúnmente llamada “murti”, que no se somete a esa ceremonia?

Ravindra Gopala: La palabra murti significa forma, así como la palabra vigraha. Ambas son


plenamente trascendentales, pues son formas e imágenes de Krishna y requieren de todos
los cuidados, compromisos y devoción en la ejecución de los actos de adoración.
Fotos: Deidades domésticas de una familia de devotos.

La Deidad instalada es aquella que recibió una ceremonia especial antes de comenzar a
adorarla en el templo. Esta ceremonia es una invitación formal para que Krishna se
manifieste y resida permanentemente en aquel templo específico. La Deidad que se suele
llamar murti, es aquella que no recibió esa ceremonia. Sin embargo, tal y como se expuso
anteriormente, es una forma de Krishna. Ambas son una fuente ilimitada de misericordia,
energía espiritual, bienaventuranza, amor divino y belleza. Sus presencias traen gran fortuna
espiritual y tornan el lugar trascendental.
Foto: Instalación de las Deidades de Krishna y Balarama en el templo de Vrajabhumi (Rio de
Janeiro, Brasil).
Foto: Caitanya y Nityananda, instalados en la ciudad de Campina Grande (Paraíba, Brasil).

La Deidad que está en el templo es el centro espiritual y la inspiración de los devotos y


devotas de esa determinada región. Ella inspira y une a los devotos y devotas sinceros, y
hace que se sientan verdaderamente felices y realizados.

¿Cuáles son los requisitos para adorar una Deidad en el altar?

Ravindra Gopala: Para comenzar, es necesario haber recibido la iniciación brahmínica y las


bendiciones de un maestro espiritual. En segundo lugar, es preciso consultar el manual de
adoración correcto y entrenarse en las prácticas de los procedimientos que se realizan
durante el día en el pujari, tales como horarios y contenido de las diversas
ofrendas, mantras que se utilizan y formas correctas de realizar las ofrendas y de servir a las
Deidades. Se realizan muchas actividades antes, durante y después de los actos de
adoración en sí. Todas ellas son muy agradables y especiales. Con el aprendizaje y la
práctica, el devoto o devota van desarrollando mucho cariño por el servicio a las Deidades; el
recuerdo  de Krishna se va volviendo constante en su corazón y en su mente, incluso cuando
la persona está en otro lugar cumpliendo sus deberes. La relación entre el devoto o devota,
el guru y la Deidad se vuelve realmente muy intensa, la devoción aumenta y la asociación
con los devotos y devotas se vuelve muy enriquecedora. Para que todo esto suceda, es
fundamental seguir las órdenes del maestro espiritual, tener sinceridad, humildad, deseo de
servir, amor y devoción. De esta forma, se podrá saborear el néctar a cada paso.

¿La adoración también puede ser una forma de prédica, tal como las clases
del Bhagavad-gita o la venta de libros sobre bhakti-yoga?

Ravindra Gopala: Sí, sin lugar a dudas. La Deidad es totalmente atractiva, purificante,


misericordiosa y amorosa. Cuando la adoración se realiza de forma regulada, amorosa,
devocional, siguiendo los padrones y queriendo satisfacer a Krishna y a los vaishnavas y
vaishnavis, todo el ambiente se purifica con energía espiritual y todos se sienten inspirados a
servir y formar parte de la misión de Srila Prabhupada. Pujaris, predicadores,
administradores, sankirtaneros, kirtaneros, cocineros, jardineros y muchos otros se contagian
con la bienaventuranza. Cada devoto y devota se siente más motivado a ofrecer su servicio a
Krishna en la forma de Deidad, del guru y a los otros devotos y a todos aquellos que todavía
no recuerdan su relación con Krishna. Toda la región y todas las personas se purifican.
Incluso una persona que aparentemente no muestre apego por la Deidad se puede beneficiar
por el simple hecho de verla, estar o vivir cerca del  lugar donde está el Señor Krishna en la
forma de Deidad en el templo. Además, la misericordia de la Deidad se puede distribuir en la
forma de prasada.

¿Cuál es la meditación correcta por parte del sacerdote a la hora de adorar a la


Deidad en el altar? ¿Qué significan los diferentes artículos que ofrece y qué
simboliza cada uno de ellos?

Ravindra Gopala: El sacerdote, o pujari, debe tener sentimientos de servidumbre, cariño,


humildad, reverencia y devoción mientras adora a la Deidad en el altar. Debe recordar que
está ayudando a su maestro espiritual a servir en la sucesión discipular. De esa manera se
garantiza la satisfacción espiritual.

Foto: El entrevistado adora las formas trascendentales de Baladeva, Subhadra y Jagannatha


(Krishna), en el templo de Suzano (São Paulo, Brasil).

Ofrecemos artículos especiales durante la adoración a las Deidades con sentimientos


amorosos de rendición y servidumbre a Krishna. La ofrenda es una recepción a Krishna, a
quien se destina toda la ceremonia. Todos purifican su existencia por realizar y observar
todos los actos de la adoración. Todos los artículos que se ofrecen (incienso, lamparita, agua,
pañuelo, flor, acamana y abanico) representan los elementos de la naturaleza en su estado
puro e inmaculado y sus respectivos objetos de los sentidos (perfume, tacto, forma, etc.). De
esa forma, purificamos todos nuestros sentidos durante la adoración a las Deidades.

¿Qué le dirías a alguien que esté deseando comenzar a adorar a Krishna en su


casa?

Ravindra Gopala: Cantar los santos nombres del Señor Krishna, leer los libros de Srila
Prabhupada, desear desenvolver una relación devocional específica con el Señor Supremo,
buscar conocimiento con devotos de más experiencia y ver constantemente a las Deidades
en el templo más cercano, son factores fundamentales. Comparada con la adoración del
templo, la adoración en casa es mucho más simple y flexible, e incluso se puede realizar a
través de fotos o fotos. Esta adoración debe realizarse de manera en que el hogar sea una
extensión del templo, y se debe realizar de manera simple y cariñosa, dentro de las
posibilidades de la persona, con el propósito de aproximar y motivar al devoto o devota a
prestar algún tipo de servicio a la Deidad del templo. De esta forma se consigue una
situación favorable para el avance espiritual y la satisfacción plena de todos aquellos que se
involucran en ella.

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