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APELLIDOS Y NOMBRES: Istaña Flores Liz Almendra

E.A.P: Ingeniería Civil.


Ciclo: I
Grupo: C
TEMA: Resumen del libro: Conflicto de los siglos. (Capítulo I y II)

CONFILCTO DE LOS SIGLOS


CAPÍTULO 1: El destino del mundo predicho

Jerusalén la ciudad amada, creía que estaba segura. Dios les había dado tanto amor,
pero ellos le devolvieron odio. Dios les había dado oportunidades mas ellos no las
tomaron en cuenta. A pesar de que los hijos de Israel "hacían escarnio de los
mensajeros de Dios, y menospreciaban sus palabras, burlándose de sus profetas", el
Señor había seguido manifestándoseles como "Jehová, fuerte, misericordioso, y
piadoso; tardo para la ira, y grande en benignidad y verdad." Mas tarde la copa de ira
de Dios estaba por rebalsar, entonces decidió ya no compadecerse. Pero cuando su
ciudad amada sufría ÉL se sentía mal, y decidió salvarlos.
Dios es un ser divino, supremo; es mas no podría el coeficiente humano llegar a
describirlo. Naturalmente en nuestra mente podríamos llegar a cuestionar: ¿Cómo
puede una “persona” llegar a amar tanto a seres que no son agradecidos con él?.
Tenemos una mente muy reducida es por ello que muchos no logran comprenderlo,
más Dios es incomparable con cada uno de nosotros.

CAPÍTULO 2: La fe de los mártires

La enemistad contra Dios iniciaría cuando, todos estuvieran en contra de los que
creyesen en su palabra. Comenzó en los tiempos de Nerón, muchas veces los
creyentes de nuestro Señor Jesucristo fueron muertos, sufrían bastante, pero ellos no
se quejaban contra Dios. Es por eso que cuando resuciten ellos nacerán de nuevo y
podrán ver La Gloria Infinita de Nuestro Señor. Muchos fueron los seguidores de Cristo
y este dice que cualquiera que lo siguiera debería de estar orgulloso, gozoso de que
por su Fe, Dios los a salvado.
También estuvo presente Satanás presente queriendo apartar a los seguidores y Dios,
mas sus intentos eran vanos.
Dios siempre acompaña a sus seguidores, por más que podríamos llegar a morir en su
nombre ÉL lo sabe todo, sabe porque hacemos las cosa y nunca nos abandonaría.

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