Jheremy Miguel Montilla Colón

A) Escribe un poema o articulo de salud para que sea sometido a la revista Prioridades.

Algunos han expresado desprecio por esta obra de reforma, y han dicho que era del todo necesaria; esta
fue una excitación para distraer las mentes de la verdad presente. Han dicho que los asuntos eran
llevados a extremos. Los tales no saben de qué hablan. Mientras hombres y mujeres que profesan piedad
están enfermos desde la parte superior de la cabeza hasta la planta de los pies, mientras sus energías
físicas, mentales y morales se hallan debilitadas debido a la gratificación de un apetito pervertido y al
exceso de trabajo, ¿cómo pueden ellos pesar las evidencias en favor de la verdad, y comprender los
requerimientos de Dios? Si sus facultades morales e intelectuales se hallan entenebrecidas, no pueden
apreciar el valor de la expiación o el carácter exaltado de la obra de Dios ni deleitarse en el estudio de su
Palabra. ¿Cómo puede un dispéptico nervioso estar siempre preparado para dar respuesta, con
mansedumbre y temor, a quien le pida razón de la esperanza qué hay en él? ¡Cuán pronto podría una
persona tal estar confundida y agitada, y debido a una imaginación enferma ser inducida a ver las cosas
con un enfoque totalmente erróneo, y por falta de la mansedumbre y tranquilidad que caracterizó la vida
de Cristo, ser inducido a deshonrar su profesión mientras contiende con hombres irrazonables! Viendo
las cosas desde un alto punto de vista religioso, debemos ser reformadores cuidadosos para ser
semejantes a Cristo. (CRA, 59)

Mis amados la reforma pro salud es un recurso que el Cielo nos ha enviado para prevenir las
enfermedades que actualmente están azotando al mundo. Un cambio en los hábitos y un nuevo estilo de
vida es lo que la humanidad necesita para evitar las enfermedades que están llevando a miles a la tumba
sin una esperanza en su corazón. Pongamos en práctica de manera estricta las 8 leyes de la salud es el
consejo inspirado para este tiempo.
 Jheremy Miguel Montilla Colón

B) Reumen sección 4 y 5 del libro ¨La Temperancia¨

Sección 4

Otros Estimulantes y Drogas

1. Abstinencia de los deseos Carnales.

Existen una variedad de alimentos y bebidas en nuestro alrededor que son clasificadas como
estimulantes y narcóticos. Nos basaremos en las bebidas, aquellas que estimulan los sentidos de una
manera aparentemente positiva, ya que en algunos momentos les da una sensación agradable, pero al
final esto provoca muchos daños al organismo.

En la biblia, el apóstol Pedro nos dice ¨Os ruego, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan
contra el alma¨ (1 Pedro 2:11), este texto abarca la abstinencia en un amplio sentido, tanto la
alimentación, bebidas y pasiones carnales. Estimulantes como el té, el café, el tacaco, el alcohol, y la
morfina, estos debemos evitarlos cabalmente, en personas que empiezan a usar uno o varios de estos a
temprana edad, se les hace casi imposible de dejarlos, ya que sus sentidos de espiritualidad son
mínimos, porque su mente y su cuerpo están envueltos en esos vicios. Esto trae perdida en la fortaleza
física y también nubla el intelecto.

La energía vital es impartida mediante el cerebro, por eso no debiéramos nunca usar estos estimulantes,
para así cuidar nuestro cuerpo completamente.

En esos días los cristianos estaban acostumbrados a consumir todo tipo de estimulantes, tales como el
café, té, opio, tabaco, incluso el alcohol y siempre que estos no eran utilizados de manera habitual, se
sentían que perdían el interés y el gozo, hasta por las cosas espirituales, se sentían desanimados a la
hora del culto, al momento de testificar y orar, ya que tenían una fuente de gozo que no era espiritual.

Tener una edad avanzada no es una escusa para usar estos estimulantes, y tampoco puede ser una
manera de justificar su uso, si siempre lo han consumido. Solo en el gran día del Señor se verán
revelados todas las cosas que estas personas podrían haber realizado y no pudieron hacer por estos
hábitos intemperantes.

Muchos tenían un mal concepto acerca del árbol de la vida, diciendo que el tabaco, el opio y otras
drogas tienen su origen allí, algo que es totalmente satánico. Muchas son las vidas que se pierden por
estar consumiendo estos males. El plan de Dios no era que sus hijos usaran estas sustancias, cosas que
el hombre impío dice que son tan maravillosas. Estos son productos venenosos, que el mismo enemigo
ha puesto para que se usen y los engaña pensando que es este el árbol de la vida, todo esto para la
perdición de las naciones.

Es nuestra misión como cristianos evitar estos estimulantes al cien por ciento, y ayudar a las personas
que se encuentran hundidos en estos males, el mismo señor nos dice que esto es un pecado y las
escrituras del espíritu de profecía nos muestran todo el mal que causan en nuestro organismo y en
nuestra mente, que es el centro de nuestro cuerpo.
 Jheremy Miguel Montilla Colón

2. Te y Café.

En primer lugar, cabe resaltar que los cristianos en la época de Elena de White consumían tanto café, té
y tabacos. Elena en este subtema les insta a que no continúen consumiendo estos estimulantes, ya que
ni siquiera son alimentos necesarios, sino que, al contrario, estos son dañinos para nuestro cuerpo.
Estos ofrecen una fuerza falsa, ya que cuando su efecto pasa el cuerpo queda en peor condición.

Se hace mucho inca pie en los efectos que produce el tomar té y café, estos son bien dañinos, porque
afectan directamente nuestro sistema nervioso, nos da una fuerza aparentemente mayor, cuando esté
efecto pasa, nuestro cuerpo y mente queden finalmente agotado mucho más de lo normal. Esto porque
nuestro sistema necesita el descanso necesario para nuestro cuerpo y en vez de esto, le damos más
trabajo, agregando una energía pasajera, por medio de los estimulantes. También puede provocar
síntomas como: dolor de cabeza, insomnio, fuertes palpitaciones del corazón, indigestión, temblor
nervioso y muchísimas más. Estos estimulantes son veneno para el organismo, su consumo debe ser
detenido.

También nos habla hacer caso de las bebidas que contienen cafeína, estas son tan peligrosas como
tomar el mismo café, sus efectos en principio son agradables, no se nota el cansancio y la inteligencia y
la imaginación de avivan, pero luego trae las mismas consecuencias.

Estas bebidas no son saludables ni necesarias para nuestro cuerpo, más su uso constante se convierten
en un hábito. Como consecuencia perdemos tiempo por las enfermedades que luego esto nos trae.

Todos los organismos sufren, los nervios se desequilibran, el hígado funciona mal, se afecta la calidad de
la sangre y su circulación, la piel se vuelve inactiva y pálida. Lo peor es que la mente también de ver
afectada, ya que el cerebro se excita y lo lleva a realizar muchas actividades que al final lo dejan más
agotado.

Una de las situaciones más preocupantes, y también mas comunes, es cuando un grupo de personas se
reúnen para compartir un rato y disfrutar del té, el café, o otra bebida de su gusto que no son favorables
al cuerpo. Luego de que estas hacen efectos en el cuerpo, las lenguas se sueltan y hasta sin darse
cuenta, empiezan a hablar en contra de los demás hermanos y amigos. Estos actos de chisme pasan con
mucha frecuencia, y muchas veces se nos olvida que tenemos un angel vigilando todo lo que hacemos,
este escribe todas nuestras palabras en un registro que luego es llevado al cielo. Jesús lleva cada uno de
estos registros de criticas contra otros, esto que hacemos bajo los efectos de una taza de café, el mismo
señor se toma estas criticas para el mismo, siguiendo lo que dice el verso ¨En cuanto lo hicisteis a uno de
estos mis hermanos más pequeños, a mi lo hicisteis¨

Estas bebidas destruyen nuestro cuerpo que es el templo de Dios. Satanás mismo es quien dirige el
dominio de su razón, de sus pensamientos y de sus acciones. Alguien bajo estos efectos vende toda su
razón por una copa de este veneno. El que toma constantemente esta destruyendo el templo de Dios.

Estas bebidas tienen como única función destruir, Todos debemos tener un testimonio claro acerca del
consumo en contra de té y café, no debemos usarlo nunca más. Estas son sustancias adictivas, que nos
hacen daño tanto al cerebro como a nuestro cuerpo y todos los órganos. También a nuestro espíritu ya
que este no ejerce la misma fuerza o influencia en nosotros.
 Jheremy Miguel Montilla Colón

3. Las Drogas.

El uso de toda droga es malo para el cuerpo. En este subtema, la sierva de Dios no ilustra sobre el uso de
drogas, que en este caso no son los estupefacientes ilegales como tal, sino que nos habla de aquellas
drogas que conocemos y son legales, estas son las medicinas o medicamentos. Muchas veces cuando
nos vemos afectados por una enfermedad, buscamos algo que nos alivie y nos quite el dolor
rápidamente y recurrimos a los medicamentos, en vez de atacar la causa de nuestra enfermedad, que es
muy posible que la tengamos por nuestra falta de temperancia.

En vez de cambiar nuestros malos hábitos, vamos donde un médico buscando un alivio inmediato a
nuestras dolencias, y muchas veces tomamos pastillas que ni siquiera sabemos cuál es su composición, y
nos volvemos adictos a ellas.

Muchas veces nosotros somos los culpables en los pecados de alguien más. Por ejemplo, un familiar o
amigo que está enfermo y en la desesperación le entregamos un medicamento para su pronto alivio,
aunque no sabemos qué efectos secundarios le pueda traer.

Los medicamentos son drogas venenosas y su resultado es muy triste y traen consecuencias para toda la
vida y se continúan con las mismas enfermedades, todo esto se hubiese podido evitar si en su momento
se practicaran métodos de sanación naturales.

Estas drogas nos hacen un daño directo a nuestro sistema nervioso.

Nuestro Dios quien creo todo, también establecido leyes, y entre esas leyes también esta como deber
ser el buen uso y cuidado de nuestro cuerpo, y la violación a estas leyes siempre traen consecuencias,
tarde o temprano pero siempre llegan, ya que estas son consecuencias de nuestro pecado. La mayoría
de las enfermedades que hoy afectan la humanidad, son creadas por nosotros mismos, ya que hemos
desobedecido en gran manera las leyes que el señor puso para nosotros.

El uso de medicamentos constantemente nos envuelve en un circulo vicioso. Mientras usamos

medicamentos y seguimos con nuestros malos hábitos, estamos pecando y deshonrando al mismo Dios,
mediante el maltrato al templo de nuestro cuerpo.

Usar medicamentos es la vía más fácil y rápida para aliviar cualquier dolencia, pero la hermana White
nos motiva a que utilicemos siempre los remedios naturales que Dios nos ha dado. Algunos como el aire
puro, la luz solar y el buen uso del agua son muy beneficiosos para la restauración de la salud.

Es muy importante que practiquemos la medicina preventiva. Debemos evaluar y ver que podemos
hacer para evitar las enfermedades, el sufrimiento y hasta la muerte prematura.

Nuestra misión es enseñar a la gente que las drogas de medicamentos no curan totalmente las
enfermedades. Muchas veces proporcionan un alivio inmediato por un momento, y los efectos parecen
curados, cuando en realidad estos no atacan la fuente de dolor o sufrimiento, sino que anestesian
nuestro cuerpo por un tiempo y estos medicamentos se quedan en nuestros organismos, curando uno y
dañando otros.

Debemos ejecutar los hábitos que son apropiados y correctos, seamos inteligentes y perseverantes, para
así eliminar la causa de la enfermedad y no tener que necesitar recurrir a las drogas que solo nos dan
una calma momentánea.
 Jheremy Miguel Montilla Colón

Sección 5

Bebidas embriagantes más Suaves

1. Importancia de los hábitos de estricta temperancia.

El uso de bebidas embriagantes es un tema no de nuestra actualidad, sino que es un tema muy antiguo.
En la biblia se nos insta a no tomar vino, nos muestra ejemplo de personajes que incluso se les dijo a sus
madres que no tomaran vino.

El señor eligió a Sansón para que fuera nazareno, y les dio instrucciones tanto a su madre como a su
hijo, les dijo que no tomara vino y cosa inmunda. En el nuevo testamento esta Juan el bautista, que de
igual manera un mensajero celestial le dio las mismas instrucciones. Este en su adulteres se separó de
todo y decidido llevar un estilo de vida muy temperante, por ejemplo, su estilo de vida fue solo
vegetales.

En el mundo témenos mucho pecado y nuestro cuerpo también ha sufrido una degradación con ello, no
solo por el pecado de Adán, sino por el estilo de vida de caídas que ha tenido el ser humano desde
entonces.

Una advertencia sobre los efectos del vino, tenemos la historia sobre Nadad y Abiud como una
advertencia para nosotros, que nos muestra que los efectos del vino sobre el intelecto es confundir y
siempre va a tener esta influencia, es por eso que Dios prohíbe su uso. Ellos se embriagaron antes de
entrar al santuario a ejercer su oficio, y todo por su falta de temperancia al tomar más vino de la cuenta.

2. Efectos psíquicos de las bebidas embriagantes suaves.

No podemos tener en nuestras casas bebidas embriagantes suaves, ya que estas conforme van pasando
el tiempo nos llevaran a querer tomar algo más fuerte, todo para ruina de nosotros. La razón se pierde y
podemos caer en cualquier tentación. Este es el resultado de complacer nuestro cuerpo con vino y
sidras.

No podemos crecer en la gracias, esto es imposible. Las pasiones animales dominan nuestra mente y las
cosas espirituales y celestiales no son admiradas. Pervierte nuestras mentes, estos ejercen influencia en
nuestros gustos por los estimulantes y se desequilibra el sistema nervioso, manteniendo la mente en
una inquietud fuerte, hasta que todos los principios quedan derribados.

El jugo puro de la uva sin fermentación es una bebida saludable, si la sidra y el vino se usan sin
fermentar estas no destruyen la razón.

Con el constante uso de estas bebidas suaves, se va adatando el paladar a las bebidas embriagantes,
nuestro mismo cuerpo las exige. Y si continuamos cediendo, es como si el mismo satanás tomara el
control de nuestras vidas y acciones.
 Jheremy Miguel Montilla Colón

3. Los efectos embriagantes de vino y la sidra.

Con vinos y sidras también podemos embriagarnos, al igual que con cualquier alcohol, estas bebidas son
más peligrosas porque son bebidas suaves, y esto de da más confianza a la persona que está tomando
ya que toman mucho porque no sienten que los tragos tienen alcohol, pero si está presente y en gran
cantidad, llega a ser igual que cualquier bebida fuerte.

1 solo vaso de vino nos puede llevarnos al habito de la embriagues. Algunas enfermedades que se
pueden producir por el uso de la sidra, hidropesía, desorden hepático, desorden nervioso y congestión
cerebral, muchas veces estas enfermedades son permanentes. Muchos mueren de tuberculosis,
algunos sufren de dispepsia, los médicos solo dicen que tienen desarreglos apáticos, pero la cura de esto
es dejando de tomar.

Efectos del vino después del diluvio, Dios elimina la población del mundo por su perversidad que había
gracias a el vino, y a las bajas paciones, luego del diluvio, tomar vino hasta embriagarse, esto lo llevo a
comer carne en exceso. Los hombres se levantaron contra el dios del cielo, tanto así que preferían
honrarse a sí mismos antes que a su creador.

Tomar sidra nos lleva a tomar algo más fuerte, ya que prepara nuestro organismo, perdiendo su vigor
natural, perdiéndose toda su sensibilidad.

La hermana Elena de White nos dice que se opone rotundamente a que nosotros los cristianos tomemos
vinos y sidras, ya que así se inicia por este camino del mal. Muchos de los hombres exitosos, de gran
mente, de grandes obras, creadores de cosas inimaginables, han caído en las garras del alcohol porque
una vez iniciaron tomando estas bebidas suaves.

4. El vino en la biblia.

Nos relata acerca del vino de las bodas de Caná, nos dice que este no era vino fermentado, sino que era
puro jugo de uvas, llamado en ese tiempo como el Mosto, el cual la biblia manda a que no los
desperdicie porque bendición hay en él. El mismo Cristo dijo ¨El vino es escarnecedor y la cerveza
alborotadora, y cualquiera que por ello errare no será salvo¨ (Prov. 20:1).

Cristo no suministra esta bebida, sino que es inducida por el mismo satanás, para que los hombres se
dejen llevar por estas cosas que nublan la razón y entorpecen las relaciones espirituales, más Cristo nos
enseña a dominar la naturaleza inferior. Dios no nos dará algo a la humanidad que sea una prueba para
nosotros, sino que el mismo nos llama hacer temperantes. El mismo Jesús dio ejemplo de temperancia,
Él mismo ayuno 40 días en el desierto, y en nuestro beneficio soporto la prueba más grande que la
humanidad ha visto. El mismo dio la atinencia a la madre de Sansón y a los padres de Juan el bautista.

El vino de la boda de Cana, fue un vino sin fermentar que dio a los invitados, una bebida sana y
refrescante, este mismo vino fue el que cristo uso en la santa cena ara referirse a la sangre del salvador.

El vino que nos muestra la biblia no es embriagante, la biblia nonos enseña que el uso de vino
embriagante es bueno. Cristo nunca hizo un vino embriagante, esto hubiese sido contrario a todas sus
enseñanzas y ejemplo que mantuvo en su vida. El vino que Jesús hizo era jugo puro de la Vid, esto es
jugo de uvas.
 Jheremy Miguel Montilla Colón

5. Los cristianos y la elaboración de licores.

Existe una fruta llamada Lutulo la cual en ese tiempo se usaba para la elaboración de vinos, no hay
forma de comprender como en ese entonces existían hermanos que se dedicaban a cultivar esta fruta
para fines de ventas o para producir vino para el mercado secular, diciendo que no es una falta, ya que
mientras no están fermentados, estos no hacen daño. Vemos como el egoísmo nos arropa y no nos deja
ver los males que puedan causar estas bebidas. Todos estos tendrán su recompensa según sus obras, ya
que son transgresores de la ley de Dios y serán castigados por los pecados que ellos comenten y
también de los pecados que otros cometan por las tentaciones que ellos mismos pusieron en sus
caminos.

Nos llama que todos los que proclaman seguir la verdad, actúen según la fe que siguen, y de no ser así,
que estos sean puestos en censura por la iglesia. Los que no quieran dejar de hacer esto, deben ser
apartado de entre los que están en la iglesia.

El amor al dinero no debe desviarnos, este amor lleva a los hombres a violar su propia conciencia, Dios
tampoco aceptara una ofrenda que viene de malos pasos o de algún negocio de cosas que el señor no
apruebe. Dios nos llama a que hagamos siempre lo que es correcto y que destruyamos también
cualquier cosa que está planeada por el mismo satanás.

En caso de que amemos a nuestros prójimos no haremos nada que de una forma u otra perjudique a
nuestros hermanos, en este caso cultivando frutos que en un futuro se usara para la elaboración de
cervezas y vinos.

A la luz de la palabra, nosotros con cristianos debemos dar una buena influencia, todo eso basado en la
temperancia aplicándolo en todas las cosas. Que cada cosa que tengamos o que negociemos sea
dándole siempre un buen uso, que contribuyan siempre a la causa de Dios y no en contra, y menos en
contra de nuestros hermanos. Mostremos que nuestros corazones e influencias siempre están regidas
por Dios, aunque hagamos sacrificios por nuestros principios personales por intereses temporales.

6. Temperancia y abstinencia total.

Si hay una bebida que sea necesaria para nuestro cuerpo es el Agua, ya sea antes o después de comer,
es lo que necesitamos para calmar la sed. No son el té, el café, la cerveza, o el vino ni nada alcohólico lo
que necesitamos para calmar la sed. El agua es el mejor líquido que tenemos para limpiar los tejidos.

Hacemos bien en seguir el ejemplo de Daniel y sus amigos, algo muy importante que notamos es que el
peligro no está en los escases, sino en la abundancia, muchas veces estamos tentados en excedernos.
Aquí es que la temperancia la debemos ejecutar en mayor proporción.

Los jóvenes están rodeados de multitud de cosas para tentar el apetito, gracias a satanás, esto más en
las grandes ciudades. Jóvenes que como Daniel son temperantes, obtendrán una gran recompensada
todos sus hábitos temperantes, todos tenemos un Dios poderoso el cual nos da las fuerzas para vencer
las tentaciones siempre y cuando clamemos a él y confiemos que el ara maravillas en nosotros.

Se insiste muchas veces en que, para eliminar un vicio, en este caso de tomar alcohol, se puede hacer
mediante otra bebida más suave, pero esto es incorrecto, ya que con el tiempo el organismo de la
persona exigirá algo más fuerte. Lo mejor que se puede hacer es la abstinencia total del mismo y el
señor dará las fueras para continuar, siempre y cuando nos pongamos en sus manos y nos
encomendemos a él siempre.