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DESCARTES

EL AUTOR EN SU CONTEXTO

La vida de Descartes abarca la primera mitad del siglo XVII, un siglo de crisis en el que las
bases del mundo medieval (la teología, la ciencia aristotélica, la unidad religiosa, la filosofía
escolástica, la unidad Iglesia-Estado…) se quiebran. Los nuevos tiempos que corren por la
Europa del siglo XVII son los mismos que a final del XVI: crisis económica, demográfica y
política que producen un gran malestar social.

Descartes es el primer gran filósofo de la Edad Moderna, así como el iniciador de una de las
dos corrientes fundamentales que caracterizan a esta época: el racionalismo. Nació en Francia, en
la Haye, en 1596. Recibió una educación esmerada en el colegio jesuita de la Fleche. Tras un
período de estancia en el ejército y luego de continuos viajes, en 1629 se marcha a Holanda, donde
se instaló definitivamente. En 1649, por invitación de la reina Cristina de Suecia, se trasladó a
Estocolmo, y allí muere en 1650.

1. Contexto histórico

La filosofía de Descartes se desarrolla en una época de crisis que se manifiesta en el campo


demográfico con un descenso importante de la población, en el campo económico con el inicio
de un período de inestabilidad, en el campo social con el estallido de múltiples revueltas de
campesinos, que protestan por la introducción de los impuestos reales, en el campo político con
la caída de la monarquía absoluta en Inglaterra, y en el campo ideológico con las guerras de
religión, la más significativa de las cuales fue la Guerra de los Treinta Años en lo que ho y es
Alemania. Resisten por ahora las monarquías absolutas continentales, aunque tiene que soportar
algún episodio revolucionario. El resultado de todo esto fue la aparición del hambre y las
enfermedades, especialmente la peste, que asoló a Europa.

2. Contexto cultural.

En el ámbito de las ideas y creencias, el Renacimiento de los siglos XV y XVI ya había


presentado un modelo de mundo, de hombre y de cultura distinto del teocentrismo medieval. Pero
todavía en el siglo XVII las seguridades antiguas del pensamiento medieval, como el
geocentrismo, el aristotelismo y el tomismo se exponían en las Universidades. Los intelectuales
se sentían inquietos y vivían una experiencia de confusión y malestar provocada por distintas
causas, entre las que destacan:

● La destrucción de la unidad religiosa

La pérdida o el cuestionamiento de los valores religiosos dominantes que se produce a partir


del Renacimiento y la poca atención dada a las exigencias de renovación espiritual condujeron a
la gran división de la Europa cristiana occidental en tres Iglesias: católica, protestante y anglicana.
Esta destrucción de la unidad religiosa, y los conflictos entre los Estados de distinta religión,
condujeron a un clima de intolerancia religiosa, tanto en la Europa de la Contrarreforma (y de ello
fueron víctimas Giordano Bruno, Galileo, Descartes) como en la de la Reforma (Miguel Servet
fue víctima de la intolerancia calvinista).

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En este clima de conflictos religiosos, el pensamiento de Descartes fue muy mal recibido por
las autoridades eclesiásticas en tanto que niega el principio de autoridad y se muestra muy
crítico con la filosofía escolástica (que era la filosofía aceptada por la Iglesia católica). Eso,
además, fue una de las razones por las que Descartes trasladó su residencia a Holanda, el país de
mayor libertad intelectual de la época y donde se sentía más seguro.

● La Revolución Científica

Durante la época medieval, la ciencia había estado supeditada a las directrices marcadas por la
teología. A partir del siglo XVI, se produce un gran avance en la ciencia conocido como la
Revolución científica, que se inicia por la astronomía. La física y la astronomía habían estado
dominadas por Aristóteles y Ptolomeo. Copérnico, Kepler y Galileo gestaron una revolución en
la ciencia que provocó la caída del modelo geocéntrico y la consolidación del heliocentrismo.

En el ámbito de la metodología, se consideraban ineficaces los métodos escolásticos para


alcanzar un conocimiento verdadero. Al respecto, destacan en este siglo los métodos de Descartes
y de Galileo:

- Galileo Galilei es el defensor del método resolutivo-compositivo (hipotético-deductivo),


basado en observación, hipótesis matemáticas y comprobaciones empíricas.
- Descartes es el defensor del método matemático, cercano al método de la Geometría de
Euclides, donde está ausente la experimentación.

Los tres ingredientes que forman parte del nuevo método científico creado por Galileo Galilei
son: observación, matematización (tanto del fenómeno como de la hipótesis explicativa) y
comprobación experimental (de esa hipótesis explicativa). De las tres fases que componen el
nuevo método científico conviene destacar la segunda, la matematización, tanto por la
intervención que ejerce sobre las otras dos (matematización del fenómeno y comprobación de la
hipótesis formulada en lenguaje matemático), como por su influencia decisiva en el pensamiento
de Descartes.

El desarrollo científico, junto con los descubrimientos geográficos, náuticos, bélicos, fueron
posibles gracias a la matematización de las ciencias. Sólo las matemáticas proponían
demostraciones indudables, de hecho, cuando lo matemático se aplicaba a las ciencias, se
producía un inmediato desarrollo. La matemática es la ciencia por excelencia, una ciencia que
parte de elementos simples y definiciones perfectamente claras y distintas, de modo que podamos
alcanzar un conocimiento cierto. El método cartesiano será deudor del desarrollo matemático (se
inspira en este proceder demostrativo de las matemáticas). Descartes espera obtener en metafísica
éxitos semejantes a los obtenidos en ciencia.

Aunque Galileo y Descartes no comparten la idea de la necesidad de la demostración empírica,


sí que comparten la idea de la función de la ciencia, y la importancia de las matemáticas en esta
función: La ciencia ya no busca las causas últimas o esencias del cosmos, sino busca cuantificar
cómo funciona y predecir cómo seguirá funcionando. Con la Revolución científica no sólo se
produce un cambio en la interpretación de la naturaleza, sino también un cambio en la
interpretación del papel de la ciencia en la vida humana. La nueva ciencia deja de ser un
conocimiento meramente contemplativo, y se convierte en un saber práctico (Francis Bacon dirá
que se conoce para manipular la naturaleza, y se manipula la naturaleza para mejorar la vida
humana).

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3. Contexto filosófico

El triunfo de la nueva ciencia acaba con la concepción aristotélica del universo. Además, el
mundo ya no se interpreta como un organismo vivo, sino como una gran máquina en la que el
hombre ya no es el centro del universo. Por otro lado, en el siglo XVII se da una separación total
entre razón (Filosofía y ciencia) y fe (Teología), iniciada en el siglo XIV por Guillermo de
Occam que negó la existencia de verdades divinas cognoscibles mediante la razón y la fe; la razón
no puede llegar al conocimiento de Dios.

La pérdida de autoridad, tanto de Aristóteles como de La Biblia, y la situación de crisis


llevaron a la filosofía a centrar su interés en el conocimiento. Se proponen soluciones a este
problema que dieron lugar a dos líneas de pensamiento enfrentadas, el racionalismo (Descartes)
y el empirismo (Hume). Ambas líneas de pensamiento se caracterizan por la búsqueda de
certezas, y el conocimiento se convertirá en el gran problema de filosofía moderna (¿qué podemos
conocer?, ¿cómo podemos conocerlo?, ¿cómo puedo estar seguro de que mis conocimientos son
verdaderos?). Para resolver el problema del conocimiento y la búsqueda de certezas en el mismo,
la cuestión del método pasa al primer plano. La nueva metodología científica ofrecía dos
modelos: el de las matemáticas y el de las ciencias experimentales. El método matemático será el
modelo a seguir para el racionalismo, que confiará absolutamente en la razón como fuente de
conocimiento y afirmará que los principios del conocimiento son innatos; por otro lado, el
empirismo seguirá el modelo de las ciencias experimentales, es decir, negará la existencia de ideas
innatas y considerará que la experiencia es la fuente y el límite del conocimiento.

Una tercera línea de pensamiento, también provocada por la crisis, fue el escepticismo que
conduce a la sospecha total de la capacidad del conocimiento humano para alcanzar la verdad.
Descartes, intenta hacer frente a este escepticismo, rechazando la idea de que la razón no esté
capacitada para hallar verdades. Solo debemos evitar el error y para eso lo único que necesitamos
es un buen método que resista cualquier error. La estrategia cartesiana, empezará por vencer el
escepticismo, transformando la duda escéptica en duda metódica.

Aunque la filosofía de Descartes destaca por su originalidad, su pensamiento registra diversas


influencias. La primera influencia viene de aquellas filosofías de la antigüedad griega que
resurgieron en el Renacimiento, y más concretamente, del escepticismo, el cual es rechazado por
Descartes. La segunda influencia viene del agustinismo, reactualizado por la reforma luterana.
Descartes se asemeja a S. Agustín en la importancia dada al sujeto, en la demostración de Dios a
partir del sujeto (res cogitans). La misma expresión agustiniana ‘si fallor, sum’ (si me equivoco,
existo), se parece bastante al famoso ‘cogito, ergo sum’ (pienso, luego existo) de Descartes.

Por otra parte, conviene resaltar la postura de Descartes ante la filosofía escolástica. Aunque
la descalifica abiertamente, no es capaz de superar por completo algunos de sus conceptos y
planteamientos. Sigue usando la noción de sustancia (res) para referirse al yo, como si el yo fuera
una simple cosa, al modo del realismo. El sistema filosófico que pretende es de carácter
metafísico, organizado deductivamente en torno a las tres nociones metafísicas fundamentales,
Alma, Dios y Mundo. Necesita demostrar la existencia de Dios para justificar que la mente no se
engaña, que las ideas de la mente (res cogitans) son verdaderas y que ese mundo (res extensa)
concebido por la mente, existe en la realidad. A pesar de lo anterior, el pensamiento de Descartes
no pudo penetrar en las universidades que, dominadas por la escolástica, se cerraron a su
influencia. No obstante, su pensamiento tuvo una gran resonancia. Gran parte del siglo XVII en
Francia será una lucha entre cartesianos y escolásticos.

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Anexo I: Características de la filosofía moderna

Muchos historiadores consideran a Descartes el padre de la filosofía moderna (Siglos XVII y


XVIII), la cual destaca por tres aspectos:

- La autonomía de la razón (signo de la emancipación de la tutela teológica)


- La íntima conexión de la filosofía con la ciencia (los filósofos son también los científicos
de la Revolución)
- El carácter subjetivista de la filosofía, centrada en el sujeto. La filosofía moderna da un giro
antropológico con el fin de contestar a qué es el hombre.
- Un modelo mecanicista del universo, opuesto a la tradición platónica, aristotélica y medieval.

Anexo II: Características del racionalismo y comparación con el empirismo

El Racionalismo, como corriente filosófica de la Edad Moderna. Su desarrollo y auge se dio


con más fuerza en la Europa continental, mientras que el Empirismo floreció sobre todo en el
Reino Unido. Si hay que buscar unas características comunes a los pensadores racionalistas
tendríamos:

- Su defensa de la razón como la única fuente y tribunal de conocimiento frente a la Edad


Media, que consideraba a la fe, la tradición y la autoridad como fuentes de verdad; y al
Empirismo, que hará de la experiencia sensorial el origen y tribunal del conocimiento
- La defensa de la existencia de ideas innatas en nuestra mente, frente a los empiristas (la
mente como una tabula rasa, sin contenidos innatos)
- La evidencia racional como clave de la verdad, frente la revelación mediante la fe en la Edad
Media, y frente a la evidencia sensorial de los empiristas.
- La Intuición intelectual y la deducción como modos de acceder al conocimiento, frente a la
inducción del empirismo
- Las matemáticas como el ideal de conocimiento, y el método matemático como el ideal de
método, frente a la Teología como ciencia máxima basada en el método aristotélico, y la física
como el ideal de conocimiento y el método experimental (basado en Galileo) como el ideal
de método en los empiristas.
- Una Metafísica y una Ontología centradas en la noción de sustancia (“aquello que existe de
tal manera que no necesita de otra cosa para existir”) y elaboradas a partir del principio de
causalidad (recogidas de la tradición escolástica). A la noción de sustancia y a la de
causalidad racionalistas dirigirá Hume (empirista) sus críticas más radicales.

Actividad 1: Haz un cuadro comparativo con las diferencias entre empirismo y racionalismo

en qué consiste el escepticismo y cómo lo rebate Descartes


cuáles son las características de la filosofía moderna

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