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- MBtodos y estrategias

de investigación
Ablaciones experimentales
EVALUACI~N
DE LOS EFECTOS CONDUCTUALES DE LAS LESIONES
CEREBRALES
PRODUCC~~N
DE LESIONES CEREBRALES
CIRUG~A
ESTEREOT~ICA
MÉTODOS HISTOL~GICOS
TRAZADO DE CONEXIONES NEURALES
ESTUDIODEL CEREBRO HUMANO VIVO
Resumen intermedio

Registro y estimulación de la actividad neural


REGISTRO DE LA ACTIVIDAD NEURAL
REGISTRO DE LA ACTIVIDAD METAB~LICA Y SINÁPTICA DEL CEREBRO
MEDICI~NDE LAS SECRECIONES CEREBRALES
ESTIMULACI~N DE LA ACTIVIDAD NEURAL
EFECTOSCONDUCTUALES DE LA ESTIMULACI~NEL~CTRICACEREBRAL
Resumen intermedio

M6todos neuroquimlcos
DETERMINACI~N
DE NEURONAS QUE PRODUCEN SUSTANCIAS
NEURWU~MICAS ESPECIFICAS
LOCALIZACI~NDE RECEPTORES ESPEC~FICOS
Resumen intermedio
El estudio de la fisiología de la conducta cerebro y evaluar la conducta s u b m e n t e del
requiere los esfuerzos de científicos de muchas mimal. Este método recibe el nombre de abla-
disciplinas, como la fisiología, la neuroanato- ción experimental (del latín ablatus, asacm).
mía, la bioquírnica, la psicología, la endocrino- En la mayorfa de los casos, no implica extraer
logía y la histología. El llevar a buen término el tejido cerebral, sino que el investigador des-
un proyecto de investigación en psicología fi- m y e algo de tejido y lo deja en su sitio. La
siológica requiere el dominio de muchas técni- ablación experimental es el metodo m$s anti-
cas experimentales. Dado que los diferentes guo utilizado en la neurociencia, y hoy en dfa
procedimientos a menudo dan lugar a resulta- sigue siendo uno de los m8s importantes.
dos contradictorios, los investigadores deben
estar familiarizados con las ventajas y las limi-
taciones de los métodos que emplean. La inves-
tigación científica supone un proceso en el que
se plantean cuestiones acerca de la naturaleza.
El método utilizado establece el marco de la El término lesión significa literalmente
cuestión. A menudo obtenemos una respuesta adañow o «herida», y un investigador que des-
confusa, y sólo más adelante nos damos cuenta truye una parte del cerebro generalmente ha-
de que la pregunta que estábamos haciendo no bla de lesibn cerebral para referirse al daño
era la que queríamos hacer. Como veremos, las ocasionado. Los experimentos en los que se
mejores conclusiones sobre fisiología de la con- lesiona una parte del cerebro y después se
ducta se consiguen no a partir de un único observa la conducta del animal reciben el nom-
experimento sino a partir de un programa de bre de estudios de lesión. Se basan en que el
investigacibn que nos permite comparar los funcionamiento de un &-ea del cerebro puede
resultados de experimentos que estudian el mis- inferirse a partir de las conductas que el ani-
mo problema con métodos diferentes. mal ya no puede llevar a cabo cuando esa área
Los investigadores disponen de una enorme es destruida. Por ejemplo, si un animal deja de
-y asombrosa- variedad de métodos de in- poder ejecutar tareas que necesitan de la vi-
vestigación. Si simplemente presentásemos un si6n cuando se destruye una parte de su cere-
catálogo de ellos, no sería sorprendente que el bro, podemos concluir que el animai está cie-
lector se perdiera, o simplemente perdiera inte- go, y que el área lesionada está implicada en la
rés. En lugar de ello, nos referiremos a los visión.
procedimientos más importantes y más común- Debemos ser precavidos al intepretar los
mente utilizados, organizados alrededor de unos efectos de las lesiones cerebrales. Por ejem-
cuantos problemas que han sido estudiados por plo, jc6mo podemos estar seguros de que el
los investigadores. Esto ayudará probablemen- animal está ciego? ¿Choca Contra los objetos,
te al lector a darse cuenta del tipo de informa- o no es capaz d e recorrer un laberinto en di-
ción que proporcionan los diferentes métodos rección hacia la luz que señala la localización
de investigación y a entender sus ventajas y de comida, o ya no contrae las pupilas ante la
desventajas. También nos permitirá describir luz? Un animal puede chocar contra los obje-
las estrategias que los investigadores emplean tos debido a deficiencias en su coordinación
cuando los resultados de un experimento les motora, puede haber perdido el apetito para la
conducen a diseñar y llevar a cabo otro. comida (y con ello su motivación a correr por
e1 laberinto), o puede ver perfectamente pero
haber perdido sus reflejos visuales. Los inves-
tigadores a menudo pueden equivocarse. Du-
rante años pensaron que las ratas albinas eran
Uno de los métodos de investigación más ciepae. (No lo son.) Pensemos en ello: jc6mo
importantes utilizados para estudiar las funcio- podemos comprobar si una rata ve? Recorde-
nes cerebrales consiste en destruir una parte del mos que tienen vibrisas (bigotes) que pueden
w i i l h r para detectar una pared antes de cho- tir una relación entre este déficit y las fun-
cas contra eiia o el borde de una mesa antes de ciones espaciales del lóbulo parietal, pero de
Gr fuera de esta. También pueden encontrar hecho es prácticamente seguro que están rela-
cionados. El lector puede hacer una prueba
por si mismo, intentando multiplicar 55 por
12 sin utilizar lápiz y papel. Cierre los ojos y
trabaje en el problema durante un rato. Intente
rir qué funciones llevan a cabo las analizar cómo lo hizo.
regiones cerebrales y, a partir de ahí, La mayoría de las personas dicen que inteni
cómo se combinan estas funciones tan imaginar los niimeros ordenados uno enci-
ma del otro, como estan'an si se utilizase l@iz y
papel. En otras palabras, «escriben,> el proble-
ma mentalmente. Aparentemente, la lesión de
los lóbulos parietales hace que las personas
tengan diñcultades para poner cada niunera en
un lugar particular en un «espacio> imaginario
y que recuerden dónde estaba.
ue se ejecute la conducta. Por La interpretación de los estudios de lesión
acto de leer intervienen funcio- se complica por el hecho de que las regi*
controlar el movimiento del nes del cerebro están interconectadas. Supon-
gamos que tenemos un buen conocimiento de
las funciones requeridas para que se lleve a
cabo una &terminada conducta. Observamos
en otras conductas; por que la lesión de la estructura X impide una
movimiento del ojo y función específica. ¿Podemos concluir necesa-
para cualquier tarea en riamente que son los circuitos de las neuronas
de la estructura X los que ejecutan esa función?
Desgraciadamente, no. La función en la que
estamos interesados puede en realidad produ-
cirse por circuitos neurales en otra parte del
reconocer las funciones cerebro.
que se Ueve a cabo una Citemos un ejemplo específico para ilus-
trar esta complicación. La lesión de una parte
son responsables de del cerebro (el área septal) interrumpe com-
pletamente la conducta maternal de unrt k m -
Pon: bra de roedor. El anllnal no constmye un nido
gadorts la nahualeza de las para sus crías, y no las agmpa a todas en un
funcione por diferentes par- lugar y las alimenta. El resultado es que éstas
les del L acaban dispersas por toda la jada, y finalmen-
udos er te pueden morir de hambre, a menos que el
neta1 ej, experimentador las rescate y las dé a una ma-
percepci dre adoptiva. iQu6 función lleva a cabo el
en este área septal que es tan vital para la conducta
SU Cap3 maternal normal? Resulta que existe una co-
que reci nexión entre el área septal y la formación
acaban 1 hipocampal que controla esta $tima estructu-
ksioneh ra: pone en marcha o apaga algunas de las
dificuli; funciones del hipocampo. Entre estas funcio-
cos. A 1 nes se encuentran algunas que son necesarias
ALIP..*I

cráneo, se corta la duramadre, y la corteza se


hace visible. Se puede utilizar entonces un dis-
positivo de succión para aspirar el tejido cere-
bral. Para llevar a cabo esta extirpación del teji-
do, se sitúa una pipeta de vidrio sobre la
superficie del cerebro y se succiona el tejido
cerebral por medio de una bomba de vacío unida
a la pipeta.
Con mayor frecuencia, la región que se de-
sea destruir está escondida en las profundidades
del cerebro. Las lesiones cerebrales subcdca-
les se realizan generalmente pasando comente
eléctrica a travCs de un electrodo de acero inoxi-
dable que, excepto en su punta, está aislado
eléctricamente con pintura o barniz. El investi-
gador guía el electrodo estereotáxicamente,
hasta que su extremo alcanza la localización
adecuada. (La cirugía estereotáxica se describe
Rgww61 en el siguiente subapartado.) Entonces pone en
~ A S ~ S Rp r radmofn#cw- LmJlmaS setkkm marcha el aparato de lesión, que produce co-
ik&mrnuyptqM&a p d 1 0 c Wpor el m de niente por radiofrecuencias (RF) -comente al-
d-0- & t w # i € i Eli h~
tl&
tema de frecuencia muy elevada-. El paso &
esta corriente a través del tejido cerebral p m b
rara r3%witTflm&.cti%a&w~fws
a ce calor, el cual destruye las células cercanas a la
&tlir,,"J región que rodea la punta del electrodo (véase b
02%~ W M W 1: LuSwmh A E, P&t, E,
fisum 5.1).
Lat~u,em A L. y Mina de &;U, H E.,Brain
Research Etuliam I S ? , a,215-2W Las lesiones producidas por radiofrecuencid
destruyen todo lo que se encuentra en la vecindad
para que loa animales perciban w l o e a l Í d $ n de la punta del electrodo, como los cuerpos ceh4
en el espaeiu*Cuando d &ea mptd altd ledo-
nada9i,tw ffincianm están pmnantnrnmente
&pagada%. AS&es muy pbable: qwe hw a-
ducm de constmwidn de ni& y dr: agmpm a
la%d a s na $R pK3idua debido a la d~wrga-
nhci~ de .hpxqxidn espacial de: la m-
dm.H se@ no estA d i r e ; f : w @ imgii-
&YI en la pmpcíún &pwiaI, pleto a tmIus,
de m mnml de los ciYr:tiim newales locaíi-
wdq m el hipcmpo+ SU lwi6n impide. h se inyecta por medio de una cánula en
cund~eramaternal. cerebral, destniye los
&dad pero no los
(véase la j?grm 5.2). Esta selectividad

¿Cómo se realizan las lesiones cerebrales?


Las partes del cerebro que se encuentran inme-
diatamente por debajo del cráneo pueden des-
truirse fácilmente; se anestesia al animal, se cor- vestigadom descubrieron que las les
ta el cuero cabelludo, se saca una parte del & una región concreta del tronco
abolían el sueño paradójico, por lo que los inves- nes cerebrales es diferente a la de los animales
tigadores creyeron que esta región estaba involu- controles con lesión falsa, podemos concluir que
crada en su producción. (E1 sueño paradójico es el las lesiones son responsables de los dkficits con-
estadio del sueño en donde se producen los sue- ductuales. (Como podemos ver, una lesión falsa
ños.) Pero estudios posteriores mostraron que cumple el mismo objetivo que un placebo en los
cuando se utiliza ácido W c o para destruir las estudios famacológicos.)
neurona de esa región, el sueño de los animales Generalmente, los investigadores producen
no resulta afectado. Asi, la alteración del sueño lesiones cerebrales permanentes, pero en algu-
observada tras las lesiones por RF debió de estar nas ocasiones resulta interesante interrumpir la
actividad de una determinada región del cere-
bro temporalmente. La forma más sencilla de
hacerlo es inyectar un anestésico local en el
lugar adecuado del cerebro. El anestésico blo-
quea los potenciales de acción de los axones
que entran o salen de esa región, por lo que
produce una lesión temporal eficaz (llamada
generalmente lesión cerebral reversible). Las
lesiones reversibles también pueden conseguir-
se enfriando el tejido nervioso suficientemente
como para suprimir la actividad neural. La fi-
gura 5.3 muestra un instrumento llamado crio-
do, que puede utilizarse para producir lesiones
temporales de una región de la corteza cerebral
través del electrodo o por

daños cerebrales adi-

encima de la lesión puede

de animales y producir
Para ello, se anestesia a Figura 5.2
en el aparato estemtáxi- .Lesión encitotdxica Se inyectd un aminoácido
excitatorio en un lado de la fonnacidn reticular
pontina del cerebro de un gato. (a) Seccidn
frontal. Las dos fotograftas en (b) y (c) muestran el
tejido cerebral con mayor detalle (indicados aquf
con recuadros negros). @) Tejido daíáado. S610 se
pueden ver c6lulas gliales. (c) Tejido normal. Se
pueden ver grandes neurona y pequeñas células
gliales.
(De Suzuki, S. S., Siegel, J. M. y Wu, M.-F., Brain
Research, 1989, 484, 78-93.)
del cerebro del mono. El dispositivo consiste
en una serie de tubos de acero inoxidable a
través de los cuales puede circular un líquido No existen dos cerebros de animales de una
enfriado. Se implanta entre el cráneo y la su- misma especie completamente idénticos, pero las
perficie del cerebro (véase la figura 5.3). similitudes entre individuos son suficientes como
para poder predecir la localización de una deter-
minada estructura cerebral en función de las ca-
r'-rdremTEfmmw racterísticas externas de la cabeza. Por ejemplo,
un determinado núcleo subcortical de la rata pue-
¿Cómo podemos situar la punta de un elec- de estar a tantos miiímetros ventral, anterior y ,
trodo o una cánula en un lugar preciso de las lateral de un punto formado por la intersección de
profundidades del cerebro de un animal? La varios huesos del cráneo. La figura 5.4 muestra
respuesta es la cirugía estereotáxica. Stereo- dos perspectivas del cráneo de la rata: un dibujo
taxis significa literalmente «disposición sóli- de la superficie dorsal y, en la parte inferior,un&
da»; más concretamente, se refiere a la capaci- visión sagita1 medial (véase la &um 5.4). E3,
dad de localizar objetos en el espacio. Un cráneo se compone de varios huesos que
aparato de estereotaxia consta de un soporte juntos y forman suturas (uniones). La cabeza de
que permite fijar la cabeza del animal en una los niños recién nacidos contiene una zona blanda
posición estándar y de un brazo que desplaza el
electrodo o la cánula en los tres ejes espaciales
de acuerdo con unas distancias precisas. Sin
embargo, para llevar a cabo una intervención palabra griega que significa «parte anterior de
estereotáxica, se debe estudiar en primer lugar cabeza>>.Podemos encontrar también bregma
un atlas estereotáxico. el cráneo de una rata, y es útil como punto

- - - - - - - - -- - - - - - - -

O Figura 5.3
Criado, instrumento que produce lesiones
temporales de la corteza cerebral. El aparato se
implanta quirúrgicamenteentre el crdneo y el
cerebro, y la k i d n temporal se puede producir
mientras el animal se halla despierto y alerta. A
trau& de [os tubos de acero inoxidable se hace
circular un lfquidofrio. El criodo que se muestra
en lafotografía se situd sobre una región de ka
corteza de asociacidn visual del hemisfkrio
izquierdo del enctifalo de un nono.
(Corteskade James Horel, SUNY Upstate Medical
Cerater.)
Figura 5.6
Aparato estereotáxicu para r&r cirugla
cerebral en ratas.

un atlas estereotaxico, podemos determinar su


localización en relación con bregma (que sí po-
demos ver). Debemos señalar que, debido a las
variaciones en las diferentes cepas y edades de
los animales, los atlas dan sólo una localización
aproximada. Siempre es necesario probar una
nueva serie de coordenadas, cortar y t& el
cerebro del animal, ver dónde se ha realizado la
lesión, corregir los valores e intentarlo de nuevo.
(La sección y la tinción cerebral están descritas
más adelante.)

Un aparato estereotáxico funciona según


principios sencillos. El dispositivo incluye un
soporte para la cabeza, que mantiene el cráneo
del animal en la orientación adecuada, un so-
porte para el electrodo y un mecanismo calibra-
do que permite desplazar este soporte en los
tres ejes espaciales a lo largo de unas distancias
calculadas: anterior-posterior, dorsal-ventral y
lateral-medial. La figura 5.6 ilustra un aparato
estereotáxico diseñado para animaies peque-
ños; para adaptar este instrumento a las dife-
rentes especies de ratas, ratones, h h t e r e s , pa-
lomas y tortugas se pueden utilizar varios tipos
de soportes de la cabeza (véase l a j i g u ~ 5.6).
Tras haber obtenido las coordenadas estereo- cerebro. Estos procedimientos, en conjunto, se
táxicas, el investigador anestesia al animal, lo denominan métodos histológicos. (El prefijo his-
coloca en el aparato y hace una incisión en el tu- hace referencia a «tejido orgánico».)
cuero cabelludo. Tras localizar bregma, el experi-
mentador ajusta los números apropiados en el
aparato de estereotaxia, trepana un agujero a tra-
vés del cráneo y hace descender el dispositivo a Si deseamos estudiar el tejido tal como era
través del tejido nervioso hasta la profundidad en el momento de la muerte del organismo,
adecuada. Ahora la punta de la cánula o del elec- debemos destruir los enzimas autolfticos (auto-
trodo se haila situada en el lugar adecuado del lírico signXca «autodisolvente»), los cuales,
cerebro y el investigador está listo para producir en caso contrario, harán que el tejido se con-
la lesión. vierta en una masa deforme. El tejido debe ser
Naturalmente, la cirugía estereotáxica pue- además conservado, para evitar su descompo-
de utilizarse para otros propósitos además de sición por bacterias o mohos. Para conseguir
para producir lesiones. Los electrodos situados estos dos objetivos, situamos el tejido neural en
en el cerebro pueden servir tanto para estimular un fijador. El más comúnmente utilizado es la
neuronas como para destruirlas, y se pueden formalina, una solución acuosa de formaldehí-
inyectar sustanciasquímicas que estimulen neu- do, un gas. La formalina detiene la autolisis,
ronas o bloqueen receptores específicos. Las endurece el tejido, que es exfremadamente blan-
chulas o los electrodos pueden implantarse do y frágil, y mata cualquier microorganismo
permanentemente siguiendo un procedimiento que pudiera destruirlo.
que describiremos después en este capítulo. En Antes de fijar el cerebro (es decir, de poner-
todos los casos, una vez finalizada la interven- lo en una solución fijadora), generalmente se
ción quirúrgica, se cose la herida, se saca al perfusiona. La perfusión del tejido (literaimen-
animal del aparato estereotáxico y se le permite te, «fluir a través de») supone la extracción de
recuperarse de la anestesia. la sangre del mismo y su sustitución por otro
Existen también aparatos estereotáxicos para líquido. El cerebro del animal se perfusiona
humanos. Algunas veces, los neurocirujanos rea- porque se obtienen mejores resultados histoló-
lizan lesiones subcorticales, por ejemplo, para gicos cuando no hay sangre en él. El animal
Mucir temblores graves causados por la enfer- cuyo cerebro va a ser estudiado se sacrifica
medad de Parkinson. Generalmente, los ciruja- mediante una sobredosis de un anestésico ge-
nos utilizan múltiples señales y verifican la loca- neral. Se abren los vasos sanguíneos de forma
lización del electrodo (o de otro dispositivo) que pueda salir la sangre de ellos y ser sustitui-
insertado en el cerebro tomando imágenes de da por una solución salina diluida. Se extrae el
RM antes de realizar la lesión cerebral. cerebro del cráneo y se sitúa en un recipiente
que contenga el fijador.
Una vez fijado el cerebro, el investigada
debe seccionar10 en finas láminas y teñir dife-
rentes estructuras celulares para poder ver sus
Después de producir una lesión cerebral y de detalles anatómicos. La sección se realiza me-
observar sus efectos sobre la conducta del ani- diante un mimtomo (literalmente, «aquello
mal, tenemos que seccionar y teñir el tejido que corta en rebanadas pequeñas»). Las seccio-
cerebral de forma que podamos observarlo bajo nes que se preparan para su examen al micros-
el microscopio y localizar el lugar de la lesión. copio óptico tienen típicamente un grosor de 10
Las lesiones cerebrales con frecuencia no que- a 80 mm;las que se preparan para el microsco-
dan en el lugar pretendido y por ello es necesario pio electtónico se cortan generalmente en me-
verifmc su localización precisa después de rea- nos de 1mm. (Por varias razones, los cortes de
lizar las pruebas conductuales. Para ello tene- tejido cerebral se denominan generalmente sec-
mos que fijar, seccionar, teñir y examinar el ciones.)
finos. Por ello, para el estudio de la neuroanato-
mía microscópica se requieren tinciones histo-
lógicas especificas. Los investigadores han de-
sarrollado muchos tipos diferentes de tinciones
para identificar sustancias específicas del inte-
rior o del exterior de las células. Para verificar
la localización de una lesión cerebral, utilizare-
mos una de las más simples: la tinción de los
cuerpos celulares.
En el siglo pasado Franz Nissl, un neur6logo
alemán, descubrió que un tinte denominado azul
de metileno teñía los cuerpos celulares del tejido
cerebral. El material que capta el tinte, conocido
como sustancia de Nissf,consiste en ARN, ADN
y proteínas asociadas localizados en el niricleo y
dispersas, en forma de gránulos, por el citoplas-
ma. Se pueden utilizar muchos tintes para teñir
los cuerpos celulares, pero el que se emplea con
mayor frecuencia es el violeta de cresilo. Por
cierto, los tintes no se desarrollaron expresa-
a mayoría de los casos, la plataforma mente para fines histológicos sino que, origina-
accesorio que congela el cerebro endu- riamente, se fabricaron para la tinción de telas.
lo suficiente para ser cortado en finas El descubrimiento de las tinciones de cuer-
figura 5.7 muestra un mimtomo. pos celulares hizo posible la identificación de
la cuchilla se desliza hacia delante masas nucleares en el cerebro. La figura 5.8
muestra una secci6n frontal de un cerebro de
gato teñida con violeta de cresilo. Podemos
esta última sube a una altura distinguir fasciculos de fibras por su apariencia
más clara debido a que no absorben el tinte
(véase lafigura 5.8). Esta tinción no es selecti-

fijo el cubreobjetos.

Figura 5.8
Seccidn frontal de un enctfab de gato, teiiida con
violeta de cresib, U M tincidn de cuerpos
celulares. Las flechas señalan núcleos, o grupos de
nentes. Sin em- cuerpos celulares.
@velarán los detalles más (Material histoMgico cortesia de Mary Carkon)
Botones terminales
Neurona sinaptando con la neurona
\

Figura 5.1 O
Microfotograjk electrónica de barrido de
neurona y g l h
@e Kessel, R. G., y Kárdon, R. H., Tissues and
Organs:A text-atlas of scanning electron
rnicroscopy.San Francisco, W. H. Freeman, 1979.
Con autonzaCión.)

puesta por los electrones. Las microfotogmfías


electrónicas producidas de esta forma pueden
aportar información acerca de los detalles es-
tructurales en un orden de unas pocas unidades
de ángstrom (véase lajigum 5.9).
'
Un microscopio electrónico de banide
permite una menor amplificacián que el es-
tándar, que transmite el haz de electrones a
través del tejido. Sin embargo, muestra los
VzU pE1Iya 10s m WF&@. To- objetos en tres dimensiones. El microscopio
das las &das,ya seao n e w w o gUa;quedan explora el tejido mediante un haz móvil de;
~eEdasp~igual. Par lo m&,son los in-- electrones. La información recibida por la re-
gidaw los que deben detemha m131es c d , flexión del haz se utiliza para producir una
p r ~1e l o , la f m y h haxíhtcibn. imagen tridimensional considerablemente &'
tallada (véase la jxgura 5.10).

El microscopio óptico tiene una escasa ca- ? ~ a i : ~ ~ ~ # ~ ~ e i l ; l a r r w e a


pacidad de resolución para detalles extremada-
mente pequeños. Debido a la naturaleza misma Supongamos que estuviéramos inter
de la luz, una amplificación superior a 1.500 en descubrir los mecanismos neurales r
veces no añade ningún detalle. Para poder ver sables de la conducta reproductora.
estructuras anatómicas pequeñas tales como las pezar, desearíamos estudiar la fisiol
vesículas sinápticas y detalles de los orgánulos conducta sexual de ratas hembra. Bas
celulares, los investigadores deben utilizar el en algunas pistas que obtuvimos leyendo
microscopio electrónico. Éste hace pasar un culos de experimentos realizados por
haz de electrones a través del tejido a examinar, investigadores publicados en revistas ci
proyectándose entonces una sombra del mismo cm, utilizamos la cirugía estereotáxica
sobre una placa fotográfica, la cual queda ex- grupos de ratas hembra. A las ratas del
expmim@nMlas p m t i c m s una lesb6fi en 61 ¿Cómo podemos investigar las conexiones
ndd@O~Mnnediial del h i(m, ~ del HVM?
~ Para responder
~ a~esta pregunta no se
y e 1% ratas conm1una cirugía faIsa (h)pueden
. utilizar los procedimientos histológicos
Desp* de &o% dfas de rempr&6n, slir;ua- que tiñen todas las neuronas, tales como las
tinciones de los cuerpos celulares. Si observa-
mos detenidamente un cerebro que ha sido pre-
parado de esta forma, únicamente veremos una
en la conrlwta de c~m- masa enmarañada de neuronas. En los últimos
años los investigadores han desarrollado méto-
dos muy precisos que permiten destacar neuro-
nas específicas de entre todas las demás.

En última instancia el HVM tiene que afec-


tar a la conducta. Es decir, las neuronas de este
núcleo tienen que enviar axones a zonas del
encéfalo que poseen neuronas que son respon-
sables de los movimientos musculares. La vía
probablemente no es directa; lo más seguro es
que las neuronas del HVM afecten a células de
otras estructuras, las cuales a su vez influyen en
otras localizadas en otras estructuras, hasta que,
finalmente, se estimulan las neuronas motoras
apropiadas. Para descubrir este sistema, debe-
mos ser capaces de identificar las mtas que
siguen los axones que salen del HVM. En otras
palabras, queremos trazar los ~ o n e eferentes
s
de dicha estructura.
Utilizaremos un método de trazado ante-
r w d o para marcar dichos axones. (Anteró-
grado significa «moverse hacia adelante».) Es-
tos métodos emplean sustancias químicas que
son captadas por las dendritas o los cuerpos

Figura 5.11
Cuando sabemos que una regrregr6n
concreta del
cerebro participa en unafunción determinada,
nas pre&tarbs cuáles son las estructuras que le
proporcionan informacidn y cuáles son las que la
reciben.
La W - Z seinyecta eg una
re@&del JX!E&XC~ y es

Los %xwmsy botones


-t puedtn

d* y a la Izuga dei WD ~ ~ e n ~ d e n d n ~ e l ~ m a ? l a x
haGL 1m botonm temida. fiodassus~m~yealm~esrsrmi-
AIs@dolrxs-b-mh deis, En-, el mpakmwbr sacrEiw al
i3bwrdllladE,Qlf-. pala ei tl7mcb ~ ~ o m e l . ~ y m @ l a S & o
~Ia%viasque&guernlOe~ones~E%Sa'Lla sabn:pmmbjm.E);wx hacar Msibles las mo16-
~ o i d & d o ~ N 6 L L m e n t e ~ d e s pcnúaa&Pm-LseutilizammétodoespaetaI
~a
l o s m ~ p o r I a q u e ~ & k ~m ~ u- ,
~ y las preErazStnones, sa m-
m.h bt610gos ~ l u i i mlrao~ &ub&t~ una minan al odicncrscapia @&SS2 la&m $12).
f& de pmeíiw pmduWpplanm que e;e L x i s - ~ ~ ~ s
m a r n c d h l a compl~asespedí?6(1~pwentm las inn~16tztii~~ El SWDM ~ I U -
. e n l a s ~ d e l ~ $ O m a ~ i t a u l onimio ~ 01:gankm tiene k
b ~ del
tehas, U d kirinai, hzui mdtsado de utilt- duQv a n w s ea mpumlt.l il Iw imrígam.
s a d & l Q 5 san prcmdms (a &ti&],
d ; i d ~ ~ e n e I t r a z a d o d e v f % s f l e ~ , P ~ r uLas Wmo
i & m maws efmntes sa ulillza una 1 m i b las que se emamtran mla supdisie de las bflcte-
en @ailm @ ~ par & h jridla, la m - L riasolos~~mrlínce~qimc.m~sQ
@ h e & vi&& .J-* p ~l a pmdwen
~ las gKhdos
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PmícbmW el de#ím& lm wamePe- sangre~destniirlosmi~mosr~
r e n ~ ~ s & h n e u r o n a s l ~ e n d H V U ,n r x , L o s a n t i ~ ~ ~ s e r ~ ~ t
podemos hyecfar en $51 w diminuta c ~ a t i h i gl6hulos hlanm oUW ~~ mbxe su BU@-
de PHA-L. ellQ utííbemmzm i- cie,cfe$mtsmf~quelos~delos
te* un ti&wrmb%?mm&dco']Las ~01- & ne-misom 6m 1
- s a b la
P H A - L m n ~ ~ p o r ~ ~ m y a a a s p o~r - & l a s ~ . ~ l ~ ~
~ a t t w ~ $ e l s o m a a l W , p r ~ v i a j ~p nm , enw m Iot sugerióECli13 -del rnim-o
?zlwlbb% t-raqme3&op18smátlm*& has- jnvttsor e n m en mWto cm las anrlcumpcs
ta la.- tt3míAm. Eln pws & &U- quel~s=nm--d~e
heststn üems de moI* dePHA-Lmsu de las gltibuh blancos sobm d i n m ,
núcleo ventrornedial del hipotálamo @iVM), desde
1Iargo de los axones de las células hasta sus botones
de la inyeccidn. (b) Rxones y boi zes terminales marcados en la sustancia gris

eisen Ricciardi and Jeffey Bla :tein, Universidad de Massachusetts.)

cercanas (véase lafigrm 5.13~).La figura 5.13(b)


muestra una microfotografía de la sustancia gxis
periacueductal (SGP). Podemos observar que esta
región contiene algunos axones y botones termi-
nales marcados, lo cual demuestra que algunas
tejido de color marrón. Otros son neurona eferentes del HVM terminan en la.SGP
(véase lafigum 5.136).
Para continuar con el estudio del papel del
HVM en la conducta sexual.de las hembras,
deberíamos determinar las estructuras que reci-
ben información de las neuronas del HVM (tal
como la SGP) y ver qué sucede cuando se le-
siona cada una de ellas. Supongamos que la
lesión de algunas de estas estructuras también
impide la conducta sexual femenina. Inyectare-
mos PHA-L en dichas estructuras y veremos
hacia dónde van sus axones. Finalmente descu-
briremos la vía principal desde el HVM hacia
las neuronas motoras cuya actividad es necesa-
ria para la conducta de copulación. (De hecho,
los investigadoresya lo han hecho y algunos de
los resultados se explicarán en el capitulo 10.)
enelHVM.Dosdías
habla sido absorbida
región y transportada a
se sacrificó al animal. Trazar los axones eferentes desde el HVM
s6lo nos revelarh parte de la historia sobre el
circuito neural involucradoen la conducta sexual
femenina: la parte entre el HVM y las neuronas
motoras. ¿Qué pasa con los circuitos que se
hallan antes del HVM? ¿Participa el HVM de
la medial es una de las regiones que proporcionan
inputs al I-IVM( v k lafigunt 5.14).
Juntos, los métodos de trazado anter6grado y
retr6grado permiten a los investigadores descu-
brirlas conexiones de una determinada parte del
encéfalo (en este caso, el HVM) con otras de sus
regiones. Asf, estas técnicas nos ayudan a esta-
blecer un «diagrama de cableado~del cerebro
(véase lafigum 5.15).Amados con otros m&-
dos de investigación (incluidos los que se descri-
birán postenormente en este capítulo), podemos
Figura 5.1 4 tratar de descubrir las funciones de cada uno &
Método de tr& retr6grado. Se inyectd oro los componentes de dicho circuito.
fluorado en el HVM,desde donde fue captado por
los botones terminales y transportado a lo largo
de los axones hasta sus cuerpos celulares. La
fotograjüz muestra estos cuerpos celulares,
localrzados en la amígdala medial.
(Cortesla de Yvon Delville, Universidadde Hay muy buenas razones para investigar las
Massachusetts, Medical School.) funciones cerebrales de animales diferentes a los
humanos. Una de eiias es que podemos compa-
alguna manera en el análisis de la información rar los resultados de estudios realizados con ea-
sensorial (como la visión, el olor o el tacto del p i e s diferentes para hacer algunas inferencias
macho)? O quizás los efectos activadores de 1w
-- - - - - - - sab~laeunl.uci6ndevanesw-
7imOnaSsFxualesde la hembra sobre su con- Aun cuando nuestro principal centro de interés
ducta actúan a través del HVM o a través de
neurona cuyos axones forman sinapsis con él.
Trazador anterógado:
Para descubrir las regiones del encéfalo involu-

'
inyecci6n de PHA-Len
cradas en los componentes «del curso alto» del dHCTM
Luego se observanaxones y
circuito neural, tenemos que encontrar las afe- terminales en la SGP
rencias hacia el HVM. Para ello emplearemos
un método de trazado retrógrado. l .
Retrógrado significa «moverse hacia atrás».
Los métodos de trazado retrógrado emplean sus-
tancias químicas que son captadas por los botones
terminales y transportadas a lo largo de los axones
hasta los cuerpos celulares. El método para identi-
ficar los inputs aferentes a una determinada re-
gión del cerebro es similar al utilizado para identi-
ficar sus eferencias. En primer lugar, se inyecta en
la región una pequeña cantidad de una sustancia
química denominada oro fluorado en el HVM.
La sustancia es absorbida por los botones termi- retrógrado: 1
hy-eccibn de oro
nales y transportada hacia el cuerpo celular por fiuorado en el HVM
Se obkrvan entonces
medio del transporte axoplasmáíico retr6grado. cuerpos ce1uiamen
Pocos días después, se sacrifica al animal, se - la amígdala medial
secciona su cerebro, y se examina el tejido bajo
una luz de la longitud de onda adecuada. Las Una de ius aferencias al HVM y una de sus
moléculas de oro fluorado emiten fluorescencia efmencius, ppueskzs de m a n i e t o rnediante
bajo este tipo de luz. Descubrimos que la am'gda- métodos de ir& anterdgradoy retr6grado.
es el funcionamiento del cerebro humano, evi-
dentemente no podemos pedir a las personas que
se sometan a cirugía cerebral con el propósito &
la investigaci6n. Pem las enfermedades y los
accidentes en ocasiones lesionan el cerebro hu-
mano, y si sabemos dónde ha tenido lugar la

ue hacfamos con las lesiones cere


radas en los animales de laborato-

Figura 5.1 6
Esuíner de tomograjk aria1 computaruada
CTACI.
(Luny MulvehilURainbow.)
del paciente cuando éste
La figura 5.17 muestra una serie de estas
imágenes de TAC tomadas a través de la cabeza
de un paciente que sufiió una apoplejía. Este
accidente cerebrovascular dañ6 una parte del
encéfalo relacionada con la consciencia propio-
ceptiva y la percepcidn del espacio. El paciente
perdió la percepción consciente de la parte iz-
quierda de su cuerpo y de los estúnulos localiza-
dos a su ~ u i Lase mnas ~ dañadas se repre-
en las .técnicas de sentan como puntos blancos en el margen inferior
izquierdo de la imagen 5 ( v b la* 5.17).
Una imagen incluso más detallada de lo que
cerebro en vivo. Dichos avan- hay en el interior de la cabeza de una persona
nos la proporciona un prodimiento denomina-
do resonancia magn6tica 0. El dispositivo
te está vivo. El prime- en este caso se parece al del TAC, pem no utiliza
denomin6 tomografia rayos X sino un campo magnético extremada-
mente intenso que atraviesa la cabeza del pa-
ciente. Cuando se sitúa el cuerpo de un indivi-
duo en un campo de esta naturaieza, los núcleos
atómicos de algunas moléculas del organismo
giran en una determinada orientación. Si se hace
tubo de rayos X y, pasar entonces una onda de radiofrecuencia a
través del cuerpo, esos núcleos emiten sus pro-
pias ondas & radio. Las diferentes moléculas
emiten energía a frecuencias distintas. El equipo
de RM se ajusta para detectar la radiación des-
prendida por las moléculas de hidr6geno. Como
estas moléculas se hallan presentes en diferentes
concentraciones en los distintos tejidos, el siste-
ma puede utilizar la información para obtener
imágenes & secciones del cerebro. A diferencia
de las exploraciones de TAC, que están limita-
Figura 5.1 7
Serie de registros de TAC tomados en un paciente con una lesidn en el área occipito-pariecalderecha (regis!
5).La lesidn aparece de wlor blanco debido a que estaba acompañada de hemorragias; la sangre absorbe
más radiacidn que el tejido cerebral que la rodea. La parte rostral es la de arriba, la caudal la de abajo; la
izquierda y la derecha están invertidas. El registro 1 muestra una seccidn a través de los ojos y la base del
cerebro.
(Cortesúz de J. McA. rones, Good Sarnarican Hospital, Portland, Oregon.)

das a un plano horizontal, las de RM pueden ser denadas se obtienen del atlas estereo-
realizadas también en los planos sagita1 o frontal táxico, y la punta del electrodo o de la
(véase lafigura 5.18). cánula se sitúa en el lugar objetivo. Las
lesiones se realizan haciendo pasar co-
Resumen intemúio rriente de RF a través del electrodo o
El objetivo de la investigación en psicolo- infundiendo un aminoácido excitatorio a
gía fisiológica es entender las funciones través de la cánula, produciendo una le-
cerebrales necesarias para la realización sión excitotóxica. La ventaja de esta últi-
de conductas concretas y posteriormente ma es que sólo afecta a los cuerpos celu-
conocer la localización de los circuitos lares; los axones de paso a través de la
neurales que realizan esas funciones. El región no quedan lesionados.
método de la lesión es el más antiguo Una vez observada la conducta del ani-
utilizado para este tipo de investigación y mal, se debe determinar la localización de
sigue siendo uno de los más Útiles. Una la lesión. Para ello, el animal es sacrificado
lesión subcortical se realiza mediante la de forma humanitaria, se perfusiona el ce-
gufa del aparato estereotáxico. Las coor- rebro con solución salina, se extrae del
to mediante métodos de trazado anterógra-
do,corno el que utiliza el oro horado.
A pesar de que no se realizan lesiones
deliberadas del cerebro de los humanos
con propósitos investigadores, las enfer-
medades y los accidentes pueden originar
una lesión cerebral, y si conocemos dónde
se localiza dicha lesión, podemos estudiar
la conducta de los individuos y hacer infe-
rencias sobre la localización de los circui-
tos neurales que realizan funciones im-
portantes. Si el paciente muere y hay
disponibilidad para examinar s u cerebro,
se pueden utilizar los métodos histológi-
cos ordinarios. Si éste no es el caso, pode-
mos examinar el cerebro en vivo utilizando
imágenes de TAC o de RM.
La taMa 5.1 resume los métodos de investi-
gación que se han descrito en esta sección.

cráneo y se conserva en un fijador como la


formalina. Luego se utiliza un microtomo La primera parte de este capítulo trataba de
para seccionar el tejido, que generalmente la anatomía del cerebro y de los efectos de
ha s~docongelado para endurecerlo sufi- lesionar determinadas regiones del mismo. En
cientemente como para poder ser cortado esta sección se considera una aproximación
en secciones muy finas. Las secciones se
difere*: el estudio del cerebro mediante el
montan en portaobjetos. se tiñen con tin-
ciones de cuerpos celulares y luego se registro o la estitnulación de la aotividad de una
examinan al microscopio. región en particular. Las funciones cerebrales
El microscopio óptico nos permite ver cé- involucran la actividad de circuitos neuronales;
lulas y sus orgánulos más grandes. pero el por elio, las diferentes percepciona y respues-
microscopio electrónico es necesario para tas conductuales implican patrones de activi-
ver los detalles más finos. tales como una
dad cerebral distintos. Los investigadores han
mitocondria o las vesiculas sinápticas. El
microscopio electrónico de barrido nos pro- creado métodos para registrar estos patrones o
porciona una visión tridimensional del teji- para producirlos de forma artificial.
do, pero su capacidad de aumento es me-
nor que la de! microscopio electrónico
convencional.
El siguiente paso en un programa de inves-
tigación requiere con frecuencia que el in-
vestigador descubra las conexiones afe- Los axones producen potenciales de acción,
rentes y eferentes de la iregion en estudio y los botones terminales originan potenciales
con el resto del cerebro. Las conexiones postsinápticos en la membrana de las células
eferentes (aquellas que transmiten infor- con las que establecen sinapsis. Estos aconteci-
mación de la región en cuestión y otras mientos eléctricospueden ser registrados (como
regiones del cerebro) pueden revelarse con
métodos de trazado anterógrado como el
ya hemos visto en el capítulo 2), y los cambios
que utiliza la PHA-L. en la actividad eléctrica de una regidn espe-
Las conexiones aferentes (aquellas que traen cífica pueden utilizarse para determinar si la
información a la región en cuestión de otras misma interviene en diferentes conductas. Por
regiones del cerebro) se ponen de manifies- ejemplo, los registros pueden llevarse a cabo
IdentjñcaL la
-1 dsa neurona M6todo de trazado retrógrado ?--

re-0~ la =ti
Los registros pueden realizarse crónicamen- ~ o rni~~electrodos.
n

neralmente se hallan restringidos a estudios de p


vías sensoriales. Estos registros raramente in- rrneos m d
volucran observaciones conductuales, ya que
la capacidad conductual de un animal aneste-
siado es como mínimo limitada.

si la actividad de las neurona serotonégicas y &b m 'Lubo r a p k [vrdnc) &


noradrenérgicas variaría durante los diferentes axtano de aprsxitmdmmte 1 m@
neuronas, cuyas señales eléctricas pasan a tra-
vés de las meninges, el cráneo y el cuero cabe-
f-- El papel se mueve lludo antes de alcanzar los electrodos.
En algunas ocasiones los neurocirujanos
implantan macroelectrodos directamente en el
cerebro humano. La razón de ello es encontrar
el origen de una actividad eléctrica anormal
que origina convulsiones frecuentes. Una vez
se detecta la fuente, el cirujano puede abrir el
cráneo y extraerla -generalmente tejido cica-
trizado producido por alguna lesión cerebral
ocurrida hace muchos años-. Con mayor fre-
cuencia, la actividad eléctrica del cerebro hu-
mano se registra mediante electrodos unidos al
cuero cabelludo y un oscilógrafo de tinta, co-
múnmente denominado polígrafo.
Un polígrafo dispone de un mecanismo que
mueve una larga tira de papel sobre la que
Figura 5.21 escriben una serie de plumillas. Esencialmente,
Registro realizudo por un osciiógrafo de tinta. estas últimas son las agujas de grandes voltíme-
tros, moviéndose hacia arriba y hacia abajo en
drenérgicas durante los diferentes estados del respuesta a la señal eléctrica que les envían los
sueño, veremos que la tasa de actividad de amplificadores biológicos. La figura 5.2 1 mues-
estas neuronas decae hasta casi cero durante el tra un registro de la actividad eléctrica captada
sueño paradójico. Esta observación sugiere que por medio de macroelectrodos situados en va-
dichas neuronas tienen un efecto inhibitorio rios lugares del cuero cabelludo de un indivi-
sobre este tipo de sueño. Es decir, el sueño duo (véase lafigura 5.21).
paradójico no puede tener lugar hasta que estas Estos registros reciben el nombre de elee-
neuronas dejen de emitir potenciales. troencefalogramas (EEGs), o «escritos de la
electricidad de la cabeza». Pueden u t i l i m
para el diagnóstico de la epilepsia o de tumora
cerebrales, o para estudiar los estadios de suew
A veces queremos registrar la actividad de y vigilia, asociados a patrones característi-
una región del cerebro en su globalidad, no la de actividad eléctrica. 3
acti~idadd e .sus neuronas individuales. Para La figura 5.22 muestra el EEG regis
ello se utilizan macroelectrodos. del hipocampo de una rata durante el
Los macroelectrodos no detectan la activi- durante la ejecución de varias con
dad de neuronas individuales; en realidad, los vigilia. Podemos observar que los
registros obtenidos mediante ellos representan actividad cambian drásticamente durante
los potenciales postsinápticos de muchos miles diferentes conductas (véase laj?gura 5.221.
-o millones- de células de las áreas en que se
halla el electrodo. Estos electrodos pueden con-
sistir en alambres no afilados insertados en el TBilrrPrn~JYEnn#PIatiiillQI
cerebro, tornillos fijados sobre el cráneo o in- r-m-
cluso discos de metal ubicados sobre el cuero
cabelludo de humanos mediante una pasta que Las señales eléctricas no son lo
conduce la electricidad. Los registros obteni- nos de actividad neural. Si la activid
dos del cuero cabelludo, en particular, repre- una determinada región del cerebro
sentan la actividad de un número enorme de tasa metabólica también se incrementa,
palmente como resultado del mayor funciona-
miento de las bombas iónicas de la membrana de
las células de esa región. Este aumento de la tasa
metabólica puede medirse. Los experimentado-
res inyectan Ldesoxiglucosa (2-DG) radiactiva
al animal. Esta sustancia qufmica es un análogo +
Salto de 22"
de la glucosa (la principal fuente de energía del
cerebro), y por ello se transporta al interior de las
células. Así, las células más activas, que utilizan Situado en la jaula sa1to.de 22"
una mayor cantidad de glucosa, absorben la rna- \ q{(vl\fll,/llli(
yor concentración de 2-DG radiactiva. Sin em-
h ~ M w % \ ~ k ~\;,$~\! ~* p~, ,k\$,?\~j~?~;;~~~
~\~~~q14f
41 4

Poniéndola '
bargo, a diferencia de la glucosa, la 2-DG no Cogiendola en agua Nadando lsaliendo

-
,del agua
puede metabolizarse, por lo que se acumula en
wi interior. El experimentador sacrifica entonces
Sentada Castaíieo W n d o Sentada 1
quieta de,digntqs ,Iq cabeza quieta 1
~ / q ~ ; ~ ~ ( k l ~ ~ ~ k ! ; d q d J ~ / ~
-3500mv
Su~ño 1 segundo

se llevan entonces a una habi-


de se cubre el tejido con una Sueflo El observador da
ca (ia sustancia que se halla en golpecitos con el liípiz

Figura 5.2-2 ---------

Actividad EEG del hipocampo de la rata,


registrada durante el desarrollo de diferentes
conductas.
(De Whishaw, I. Q. y Vandemlf;C. H.,
Behavioral Biology, 1973, 8, 461-484.)
mo lo harían los rayos X o la luz.
más activas del cerebro contie-
rdiactividad, la cual aparece, en

6n de cerebro de rata; las


la parte inferior (indicadas
cleos del hipotálamo que
lica especialmente ele-

Figura 5.23
Autorradiogra@ de 2-DG del encéfalo de una
rata (seccidnfrontal;arriba, la parte dorsal), que
muestra regiones con actividad especialmente
elevada en los dos hipotúlarnos, en la base del
cerebro.
íDe Schwart., W.J. y Gainer, H., Science, 1977,
197, 1089-1091.)
Condíci6n de reposo

Cierne y ape- dal puho derecho

Figura 5.25
Registros de TEP de rlri encifalo I~unaaizo
(seccioi~esIiorizoiltales). La parte sicperior
irzitesrra tres registros correspoizdieiztes a riiza
Una dé sw prohints naic1ezu-e~@uci- persorza eil reposo. La parte inferior rrzicestra tres
registros correspoildierltes a lu rrzisina persona
da duran& la wtivwi&ommi 1~21% e1 nw- mierztras cierra y abre el puño derectzo. Los
ds Fa.&ordem que.~z&ibum5d i - registros irlrcesnarz un incr-eineiitode la captación
zando una investigasi& WZXCB cid circuito de 2-desoxiglucosa radiactiva en regiorzes del
newd hvaImado m la cmdwta kexu81de la encéfalo que inreruienerz en el control de
rata hienhFsm. Supangdimm que p u e ~ o atili-
s naovimieizto, lo cidal indica itiz aunzento de la tasa
de actividad mecabólica erl esas áreas. Las
zar d mt(b;adoFOBen nuaim proyecto de e%- diferentes tasas de captacióil de 2-DG estdii
perinit-ibn, Se situim wks hembra 6011m- iridicadas por diferentes colores gerzerados por
ehw y se les peamite a p w m . L u q p se ordenador-, tal coirio se muestra en la escala de la
e ~ í i i l u : d w m b r a & h ~ ~ . r r e ~ i SE
unay parte inferior.
(Cortesia del Brookhaven Nacional Laboratory y
dgu6 m p m 2 ) a t a pm t*& la p t e f n a la State Ufiiuersiy of Neui York, Stoily Brook.)
%s. La f j p 5-24 muestra los r~stlltados:las
n-.*nta7amfgd&a meditd de una ma
~ q w ~ & ~ c q u i l i t r u ~ ; & o n l a p rTEP. e - En primer lugar. el paciente recibe una
sea& de k ~ oscuca& h h&&o b pm- inyección de 2-DG radiactiva. (Al cabo de un
8acia de p&&& PO$.M, rima tiempo, la sustancia química se degrada y sale de
pflu-amn.llahme d v h p r la, l?&hUlrbei60. las células. La dosis que se da a los humanos es
física & l a &We8 que ddurante k inocua.) La cabeza del sujeto se sitúa en un
actividad de mpulaeid~.Coma ~ m o s , aparato similar al de un escáner de TAC. A
. ~uhurdose inyeta un tmxador retn5grado medida que las nioléculas de 2-DG radiactivas
(aro flumdo3 en 6133VM,se observa que esta decaen, emiten partículas subatómicas llamadas
re@h mib de la migdalo medial positrones que son detectadas por el equipo de
(&&le bfigzzm 5.m. TEP. Un ordenador determina qué regiones del
La mividad meWIie8 de @(1m cerebro han utilizado la sustancia radiactiva y
~ & e l w m b w ~ & p & ~ w e genera l una imagen de una sección del cerebro,
d m humana&-u un tx&&o k-k?lwmi- mostrando los niveles de actividad de diferentes
n a d o t m m g m & ~ d e & Q n & ~ ~ o regiones de esta sección (véase lafigura 5.25).
Una de las desventajas de la TEP es su coste
de funcionamiento. Por razones de seguridad,
las sustancias químicas radiactivas que se ad-
ministran tienen una vida media muy corta; es
decir, decaen y pierden su radiactividad de for-
ma muy rápida. Por ello deben producirse en el
lugar, con un acelerador de partículas atómicas
denominado ciclotrón. De este modo, al coste
de la TEP hay que añadirle el del cicioh6n y los
salarios del personal que trabajan en ellos.
El desarrollo más reciente en imágenes ce- Figura 5.26
rebrales es la resonancia magnética funcional Registro de RM funcional del encéfalo humano.
Aumentos localUados & In actividad neurona1 en
(Wf).Los ingenieros han diseñado modifica- hombres (izquierda)y mujeres (akrecha) mientras
ciones a la RM ya existente que permiten obte- estaban juzgando si pares de palabrns escritas
ner imágenes muy rápidas y medir el metabo- rimaban o no.
lismo regional. La RM funcional tiene una (De Shaywitz, B. A. y cok., Nature, 1995,373,607-
609. Con a u t o m i ó n )
mayor resolución que la TEP, por ello revela
información más detallada sobre la actividad
de regiones cerebrales específicas (véase la fi- -un trozo de membrana &cid moldeada
en fonna de cilindro, seiiada al extremo infe-
rior-. Otro pequeño tubo de metal extrae la
solución despu6s de que esta haya circulado
D E U S S E - S Y por el tubo de diálisis. En la figunz 5.27 se
--
---------
muestriündibujodeeSteti~desondas.
as ocasiones, el investigador de- Para implantar un tubo de microdiáíisis en
no la actividad metabólica gene- el cerebro de la rata se utiliza cirugía estereo-
táxica de forma que la punta de la sonda se
sitúe en la región en la cual estamos interesados.
A través de uno de los pequeños tubos de metal
se bombea hacia el tubo de diálisis una pequeña
cantidad de una solución similar al fluido ex-
ntrol del sueño paradójico. tracelular. El fluido circula por el tubo de diáli-
sis y pasa al segundo tubo de metal, de donde
es recogido para su anáiisis. Al pasar el fluido
) Una de las características por el tubo de diálisis, se lleva consigo mlécu-
las del líquido extracelular del cerebro, las cua-
les difunden a través de la membrana empuja-
s nuestros sueños. Decidi- das por la fuerza de la difusión.
de acetilcolina en una El contenido del fluido que ha pasado al
se sabe que contiene tubo de diálisis se analiza mediante un método
analítico extremadamente sensible. Este méto-
do es tan sensible que puede detectar sustancias
transmisoras (y sus productos de degradación)
que hayan sido liberadas por los botones termi-
nales y escapado del espacio sináptico al resto
del líquido extracelular. De hecho, observamos
que la cantidad de acetilcolina presente en el
fluido extracelular del núcleo del bulbo se in-
crementa durante el sueño parad6jico.
El fluido es
bombeado a través
de la cánula interna
Cemento El fluido se
dental , recoge y analiza

Registros de que muestran la capmi6n de


L-DOPAradiactiva en los ganglios basales de un
paciente con síntomas de Parkinson inducidos
por una sustancia química t6x& antes y después
de recibir un trasplante de neuronas
dopaminérgicasfetaies. (alRegistro antes de la
Figura 5.27 intervención (b) Registro obtenido 13meses
Microdiálisis. Se infusiona lentamente una después. El aumento en la captacidn de L-IXIPA
solución salina en el tubo de rnicrodiálisis, donde indica que el trasplantefetal secretaba dopamina
capta molkculas que difunden desde el lfquido (Adaptadode De Widner,H.; Tetrud,J.;
extracelular. El fluido se analiza posteriormente Rehncrom, S.; Snow, B.; Brundin, P.; Gustauii,B.;
mediante cromatografia líquida de alta Bjorklund, A, Lindvall, O., y Langston, J. W., New
resolución (HPLC). England Journal of Medicine, 1992,327,1556-
(Adaptadode Hemandez L,Stanley, B. G. y 1563. Reproducido con autorimidn.)
Hoebel, B. C., Life Sciences, 1986, 39,2629-2637.)
zarse cada exploración. Como vimos en el ca-
Teóricamente, el procedimiento de micro- pítulo 3, la L-DOPAes captada por las termina-
diáiisis puede aplicarse al estudio del cerebro les de las neuronas dopaminérgicas, donde se
humano, pero razones éticas y prácticas no lo convierte en dopamina; de esta forma, la ra-
permiten. Afortunadamente, existe un modo no diactividad mostrada en las imágenes indica la
invasivo para medir sustancias neuroquímicas presencia de terminales que secretan doparnina
del cerebro humano. A pesar de que la TEP es en los ganglios basales. Las imágenes muestran
un dispositivo muy caro, también es muy ver- la cantidad de radiactividad antes (parte a) y
sátil. Puede utilizarse para localizar cualquier después (parte b) de recibir el trasplante de
sustancia radiactiva que emita positrones. neuronas dopaminérgicas fetales, que mejoró
Hace algunos años, algunas personas jóve- de forma significativa sus síntomas (véase la
nes se inyectaron una droga ilegal que estaba figura 5.28).
contaminada con una sustancia química que
destruyó sus neuronas dopaminérgicas. Como
resultado sufrieron un parkinsonismo grave.
(Este fenómeno se describe con mayor detalle
en el capítulo 8.) Recientemente, los neurocim- Hasta el momento, en esta sección se han
janos han utilizado procedimientos estereotáxi- tratado los métodos de investigación que mi-
cos para trasplantar neuronas fetales doparni- den la actividad de regiones específicas del
nérgicas en los ganglios basales de algunos de cerebro. Pero a veces deseamos cambiar artifi-
estos pacientes. La figura 5.28 muestra imáge- cialmente la actividad de esas regiones para
nes de TEP del cerebro de uno de estos pacien- observar qué efectos tienen estos cambios so-
tes. Al paciente se le administró una inyección bre la conducta del animal. Por ejemplo, las
de L-DOPA radiactiva una hora antes de reali- ratas hembra copularán con machos s610 si
1 1- Tubo de

i n t r a c r d Se ins- permanentemente en i?1crdneo una cánula gufa, y posteriormente se inserta


Mediante este dispositivose pueden hacer infuswnes

m o n a s sexuales femeninas están pre- tancia transmisora excitatoria del cerebm, y


Iextirpamos los ovarios de las ratas, la ambas sustancias estimulan los receptores glu-
%e esas hormonas anulará su conducta tamatérgicos, activando así las neuronas en don-
Wn nuestros anteriores estudios obser- de se sitúan estos receptores.
bla lesión del HVM interrumpe esa La inyección de sustancias químicas en el
$mAs si activamos el HVM com- cerebm puede realizarse crónicamente, median-
k la falta de hormonas sexuales fe- te un dispositivo permanentemente unido al
kmia volverá a copular. cráneo, de forma que la conducta del animal

L
mos activar las neuronas? Me- pueda observarse repetidamente. Para eiio, se
ulación eléctrica o qulmica. La sitúa una cánula de metal (la cánula guía) en el
'ca consiste simplemente en cerebro del animal, cementando su extremo
a corriente eléctrica a través de superior sobre el cráneo. Más adelante, en otro
*o en el cerebro, como vi- momento, se sitúa una cánula de menor diáme-
P5.20. La estimulación química tro y de longitud adecuada en el interior de la
te inyectando una cánula gula, y se inyecta una sustancia química
Pde un aminoácido excitato- en el cerebro. Como el animal se mueve más o
@fiuicoo el ácido glutámico, menos libremente, podemos observar los efec-
gp.&os en el capítuio 4, el tos de la inyecci6n sobre su conducta (véase la
bhmato) es la principal sus- Pgura 5.29).
El principal inconveniente de la estimuíación investigadores utilizan una dcmpipeta m W
quúnica es su mayor complejidad en compara- pIe.Este dispositivo consiste en dos o más micm
ción con la eléctrica., requim cánulas, tubos, bom- electrodos de vidrio (también l i a m a h micropi-
bas o jeringas especiales, y soluciones estedh- petas), unidos entre sí de forma que sus puntas
das de aminoácidos excitamios. Sin embargo, la estén muy cercaunas de otras.
estimulaci6n química tiene una clara ventaja so- La figura 5.30 muestra una micropipeta de
bre la elécrriac activa los cuerpos celdaes pero siete unidades unida a un mimlrxtrodo de
no los axones. Como los receptores glutaamkqg- registro. Caáa una de las siete micropipetas
cos s6lo se encuentran en los cuerpos celulares (y puede rellenarse con sustancias transmisoras,
en sus dendntas, natmhente), podemos estar neuromoduladores, hormonas o drogas. El pH
seguros de que la inyección & un aminoácido (equilibrio ácido base) de las disoluciones de
excitatorioen una determinada red611 del cerebro las micropipetas se ajusta de forma que las
excita las células y no los axones & otras neun sustancias químicas se ionicen. Entonces, cuan-
nas que pasan por esa regi6a De esta forma, los do se hace pasar comente eléctrica a través de
efectos de la estimuiaci6n química son m& loca- una de las micropipetas, se liberan algunas mo-
iizados que los de la estirnulación eléctrica. léculas de la sustancia. La inyección de canti-
Acabamos de decir que el Bcido kaínico, des- dades exkmdamente pequefías de una sus-
crito anteriormente como una neurotoxina, puede tancia química según este procedimiento se
utilizarse para estimular a las neuronas. En reali- denomina mierowntqforesis (iontoforesis sig-
dad, esto no es conidictorio. De hecho, el ácido nifica «transporte de iones», de pherein, «trans-
kaínico produce lesiones excitotóxicas debido a portar o llevan>)(véase lafigure 5.30).
que estimula las nemnas hasta su muerte. Así, El micmlectrodo de registro detecta la acti-
las dosis altas de una soluci6n concentrada matan vidad neural de la célula que esta siendo expues-
las neuronas, mientras que las dosis bajas de una ta a una de las sustancias químicas de las mi-
solución diiuida simplemente las estimula.
¿Qué sucede con los resultados de nuestro
experimento? De hecho (como veremos en el
capftulo lo), la estimuiaci6n del HVM si que
sustituye a las hormonas sexuales femeninas.
Es posible entonces que las hormonas sexuales
femeninas ejerzan sus efectos en este ndcleo.
Veremos cámo comprobar esta hipStesis en la
swi6n final de este capitulo.
Las sustancias químicas inyectadas en el
cerebro mediante cánulas difunden por un área
que contiene cientos (o miles) de neuronas.
Algunas veces se desea estudiar el efecto de
una sustancia sobte la actividad de una neurona
individual. Para eiio se emplea una técnica iia-
mada microwntoforesis.
Cuando las sustancias transmisoras se unen
con los receptorespostsinhpbcosse abren d e s
i6nim, produciendo potenciales p o s ~ c m 1

excitamios o inhibitorios. Estos potenciales au- Figum 5.30


mentan o disminuyen la tasa de descarga de la Micmwntojbresis. Las moléculas de diferentes
célula P m determinar los efectos de las sustan- sustancias qufrnicase expulsan de las siete
rnicroplpetas por medio de una corriente
ciastransmisoras(uotrassusmas~casque eiéctrica. El electrodo de registro mide la
estmiulan o bloquean reoeptores eqxxíficos) so- actividad de la neuronay detem'na si responde o
bre la actividad de una neurona individual, los no a la sllstancia.
cropipetas -por ejemplo, una determinada sus- tratamiento de trastornos convulsivos focales.
tancia transmisora-. Si la neurona modifica su Estas alteraciones se producen como conse-
tasa de descarga cuando una cierta cantidad de la cuencia de que regiones localizadas de tejido
sustancia transmisora sale de la micmpipeta, po- neural irritan periódicamente las áreas circun-
demos concluir que tiene receptores para ella. dantes, desencadenando convulsiones epilép-
ticas (descargas violentas y sostenidas de las
neuronas cerebrales, que producen deterioros
conductuales). En los casos graves de epilep-
sia focal que no responden a la medicación,
puede ser necesaria la escisión quirúrgica del
La estimdación del cerebro de un animal foco. Éste se identifica por medio de registros
que puede moverse libremente produce a menu- EEG previos a la cirugía, y se confirma reali-
do cambios conductuales. Por ejemplo, la esti- zando registros EEG durante la operación,
mulaci6n hipotalámica puede elicitar conductas cuando el cerebro se halla expuesto. (Como
vimos en una sección anterior, puede también
identificarse mediante técnicas especiales de
imagen.)
Cuando se realiza una intervención quinír-
gica con apertura de cráneo, en primer lugar se
debe afeitar la cabeza del paciente. Se le adrni-
en la inhibici6n motora. La estimula- nistra entonces un anestésico local sobre el cue-
ro cabelludo, a lo largo de la línea por donde se
luso como un refuem o un realizará la incisión. No se utiliza anestesia
os en el capítulo 14. general debido a que el método requiere que el
paciente esté despierto y consciente durante la
intervención. El cirujano corta el cuero cabe-
cuando ésta es eléctri- lludo y sierra el cráneo por debajo del corte de
forma que se pueda apartar un trozo de hueso.
A continuación, el cirujano corta y separa la
naturales que tienen lugar en el duramadre, quedando expuesto directamente el
cerebro.
Cuando elimina un foco epiléptico, el ciru-
estimdación artifi- jano desea extirpar todo el tejido anormal sin
ación eléctrica cere- dañar tejido neural que lleve a cabo funciones
te viene a ser algo parecido a importantes, como la comprensión y la pro-
cuerdas a los brazos de los ducción del habla. Por esta razón, antes de
una orquesta y entonces sa- extraer el foco epiléptico, Penfield estimulaba
diferentes áreas del cerebro para determinar
qué regiones podían extirparse sin problemas.
Tocaba varias zonas del cerebro con la punta
de un electrodo de metal, y observaba los
efectos de la estimulación sobre la conducta
sorprendente es que, a de los pacientes. Por ejemplo, la estimulación
estimulación produce del área motora primaria producía movimien-
to, y la de la corteza auditiva primaria daba
más interesantes lugar a que el paciente informase sobre la
del cerebro fue presencia de sonidos semejantes a zumbidos.
La estimulación de porciones de los lóbulos
&+sper, 1954) para el temporal y frontal hacía que el paciente dejase
CONDUCTA

Resumen intenncdio
Cuando los circuitos neuronales participan
en sus funciones normales su actividad eléc-
trica y metabólica, así como sus secreciones
químicas, se incrementan. Por lo tanto, ob-
servando estos procesos mientras un ani-
mal percibe diferentes estímulos o lleva a
cabo diferentes conductas, podemos reali-
zar algunas inferencias acerca de las funcio-
nes en las que intervienen diferentes regio-
nes cerebrales. Para registrar la actividad
eléctrica de neuronas individuales se pue-
den utilizar microelectrodos. Los registros
crónicos requieren que el electrodo esté uni-
do a un zócalo eléctrico, que se fija al cráneo
por medio de adhesivo plástico. Los macro-
Figura 5.31 electrodos registran la actividad de grupos
Aspecto de la supe@cie cortical de un paciente grandes de neuronas. Estos electrodos ra-
consciente cuyo cerebro se ha estimulado. Los ramente se sitúan en la profundidad del ce-
puntos de estimulación se indican por medio de rebro humano; en la mayoríade los casos se
Ias etiquetas numeradas sihradas en 61 por el sitúan en el cuero cabelludo y su actividad
cirujano.
(De Caso M. M., en Wilder Penfield The Mystery es registrada por medio de un polígrafo.
of the Mind: A critica1study of Consciousness La actividad metabólica puede medirse in-
and the Human Brain, con Discusiones de yectando al animal 2-DG radiactiva, que se
William Feindel, Charles Hendel y Charles acumula en las neuronas metabólicamente
Symonds. Copyright 1975 & Princeton Universiw activas. La presencia de radiactividad se de-
Press. Figura 4, p. 24 reimpresa con autorización termina por autorradiografía: se sitúan sec-
de Princeton University Press.) ciones de cerebro sobre portaobjetos, se
recubren con una emulsión fotográfica, se
de hablar y alteraba su capacidad para com- deja reposar un momento y luego se revelan
prender l o que el cirujano y sus colaboradores como los negativos fotográficos. Cuando las
neuronas son estimuladas empiezan a sin-
decían.
tetizar la proteína nuclear Fos. La presencia
Después de extraer la región del cerebro de Fos, que puede determinarse mediante
donde se localiza el foco epiléptico, se vuelve a un método especial de tinción, proporciona
coser la duramadre y se sitúa nuevamente la otra forma de descubrir las regiones activas
pieza del cráneo. del cerebro. El método de la 2-DG también
Además de aliviar a los pacientes de sus permite determinar la actividad metabólica
ataques epilépticos, este procedimiento pro- de diferentes regiones del cerebro humano
porcionó a Penfield datos interesantes. A me- vivo, pero en este caso se utiliza un escáner
de TEP para detectar las regiones activas.
dida que estimulaba diferentes zonas del ce-
Las secreciones de neurotransmisores y
rebro, anotaba sus efectos y situaba un trozo neuromoduladores pueden medirse im-
de papel esterilizado, que llevaba un número plantando la punta de una sonda de micro-
escrito, en el punto estimulado. Cuando ha- diálisis en una determinada región del
bían sido estimulados varios puntos, fotogra- cerebro. Para realizar observaciones simi-
fiaba el cerebro expuesto con sus localiza- lares en el cerebro humano se puede utili-
ciones numeradas antes de sacar los trozos zar un escáner de TEP.
de papel y continuar con la intervención qui- Los investigadores pueden estimular dife-
rentes regiones del cerebro implantando un
rúrgica. Después de la operación, Penfield
macroelectrodo y aplicando una estimula-
podía comparar las anotaciones con la foto- ción eléctrica suave. Otra posibilidad alter-
grafía del cerebro del paciente, que mostraba nativa es la de implantar una cánula gula en
la localización de los puntos de estimulación el cerebro del animal; tras su recuperación
(véase la figura 5.31). de la intervención quirúrgica, insertan una
s de investigación: parte TI.
m8s pequeña e inyectan una solu- a esta pregunta, veamos un ejemplo apecSco.
il de aminoácidos en el cerebro. La Los médicos observaron hace varios años que los
-ient-~u!'lo m i e r o s expuestos a determinados tipos de in-
aquellas neuronas cuyos secticidas (los organofosfatos) tenían sueños par-
S están situados en la ve-
ticularmente intensos y extraños, e incluso podían
ula; los axones que pasan
n no resultan afectados. tener alucinaciones estando despiertos. Una posi-
5 2 resume los métodos de inves- ble explicación de estos síntomas es la de que el
presentados en esta sección. fármaco estimula los circuitos neuraies responsa-
bles & los sueños. @espu6s de todo, los sueños
son alucinaciones que tenemos cuando estamos
dormidos.) Alternativamente, el fánnaco podría
interrumpir los mecanismos inhibitorios que im-
to ya algunos métodos neuro- piden que soñemos mientras estamos despiertos.

sección describe otros insecticidasdel tipo de los organofosfatosactivan


ímicos que son de utili- directamente los circuitos neurales responsables
a fisiología de la conducta. & los sueños. (Otras sustancias, como el LSD,
producen alucinaciones debido a que interrum-
pen los mecanismos inhibitonos.)
La primera pregunta que nos debemos hacer
es la de c6mo funcionan los insecticidas del tipo
de los organofosfatos.Los farmacólogos tienen
brimos que un deter- la respuesta: estas sustancias inhiben la acetilco-
conducta. ¿Quéharía- hesterasa Como vimos en el capítulo 4, los
neurales respon- inhibidores de la acetilcolinesterasason potentes
? Para responder agonistas colinérgicos. Al inhibir la AChE, estos
Consideremos en primer lugar los métodos
por los que podemos localizar sustancias neu-
roquímicas específicas, como son los neuro-
transmisores y los neuromoduladores. (En nues-
tro caso, estamos interesados en la acetilcolina.)
Existen tres formas básicas de localizar sustan-
cias neuroquímicas en el cerebro: localizar las
sustancia^ en sí, los enzimas que las sintetizan,
o el ARN mensajero implicado en sus síntesis.
Los péptidos (o las proteínas) pueden locali-
zarse directamente por medio de los métodos
inmunocitoquímicos, descritos en la primera sec-
ción de este capítulo. Las secciones de tejido
cerebral se exponen a un anticuerpo para el pépti-
do, asociado a un tinte (generalmente, uno fluo-
rescente). A continuación se examinan las seccio-
nes al microscopio usando luz de una determinada
longitud de onda, Por ejemplo, la figura 5.32
muestra la locaüzación en el prosencéfalo de axo-
nes que contienen vasopresina un neurotransrni-
sor de tipo peptídico. Se muestran dos conjuntos
de axones. Uno, que se encuentra agrupado alre-
dedor del tercer ventrículo en la base del cerebro,
Figura 5.32 aparece en color oxidado. El otro, esparcido por
LocaluaCi6n de un péptido por medio de e! _septudareralJiene eL specMeeademsde
4 n f f t ~ ' ~ i u z ~ o ~ t o g mUeSEaa r ü f i a fibras doradas. (Podemos observar lo bonita que
una secciiínfrontal del cerebro de rata. Lasfibras
de colores oro y oxidado son arones y botones puede ser una sección cerebral tenida adecuada-
terminales que contienen vasopresina, un péptido mente; véase lafigum 5.32.)
neurotransmisor. Pero estamos interesados en la acehicolina,
(Cortesía de Geert DeVries, Universidadde que no es un péptido. Por ello, no podemos utili-
Massachusetts.) zar los métodos de inrnunocitoquímica para loca-
lizar este neurotransmisor. Aun asi, estos méto-
fánnacos impiden la rápida destrucción de la dos pueden utilizarse para localizar el enzima que
ACh después de haber sido liberada desde los la sintetiza. La síntesis de acetilcoiina tiene lugar
botones terminales, y así prolongan los poten- por medio del enzima colinacetiltransferasa
ciales postsinápticos en las sinapsis colinérgicas. (CAT). Por lo tanto, las newnas que contienen
Ahora que conocemos la acción de los in- este enzima es casi segun, que secretan ACh. La
secticidas, sabemos que estas sustancias actúan figura 5.33 muestra las neuronas colinérgicas de
en las sinapsis colinérgicas. ¿Qué mCtodos neu- la protuberancia que han sido identificadas por
roquímicos deberíamos utilizar para descubrir medio de inmunocitoquímica; el tejido cerebral
el lugar de acción de estos fármacos en el cere- se expuso a un anticuerpo de la CAT unido a un
bro? Hay tres posibilidades: podríamos buscar tinte fluorescente (véase l a m m 5.33).
neuronas que contienen acetilcolina, podria- Otra forma indirecta de localizar una sustan-
mos buscar acetilcolinesterasa (que podría es- cia consiste en utilizar una técnica conocida
tar presente en las membranas postsinápticas como hibridación in situ: todos los péptidos y
de las células que reciben inputs sinápticos de proteínas (incluidos los enzimas, naturalmente)
las neuronas colinérgicas), o podríamos buscar se sintetizan de acuerdo con la información con-
receptores colinérgicos. Veamos cómo funcio- tenida en los cromosomas. Como vimos en el
nan estos tres métodos. capítuio 2, cuando debe sintetizarse una deter-
vasopresina, a partir de la aplicación de este
método. La iluminación lateral de los portaob-
jetos da lugar a que los gránulos de plata de la
emulsión fotográfica aparezcan como manchas
blancas (véanse lasfiguras 5.34 y 5.35).

ARN radiactivo
complementano del 1
ARN mensajero de
interés

--
u---
aaüzacidn de un enzima r+msable de la

iaL de la arotuberancia. Las neuronas

unido al ARN

ARN mewjero
&m$órd. ~ n i k l t School
y of Medicina) I 1
- - - - - - - - -

F t p m5 3 r
Explicacidn del empleo de la hibridación in situ
para la locallzaci6n de ARN mensajero
responsable de la sfntesisde una determinada
proteína o pdptido.

ih mayoría de los casos), los


m pwka sintetizar un trozo
$.@e contiene una secuencia
&idos complementaria a la
. Las &ones de
ai ADN radiactivo,
Gulas de ARN mensaje
,,rql investigador utiliza Figura 5.35
b g a f h (descritos en ia Hibridaci6n in situ Se enpuso el tejido a ARN
radiactivo cupaz de unirse at ARN mensajero
responsable de la sfntesisde uasopresinu, un
p4ptido. La localhddn del ARN radiactivo,
reveIada por autorradiograj% aparece como
manchas blancas. Las muro- marcadas se
encuentran en un par de núchs del hipotálamo.
(Cortesúl de GeertDeVries, Uniuersidad de
Massachusetts.)
Apliquemos el método de determinación ele
recepfmes a otra línea de investigación consids
Como vimos en el capítulo 4, los neuro- rada antes en este capitulo: el papel del hipo&
iransrnisores, los neuromoduladores y las hor- mo ventroMa1 (HVM) en la conducta sexusrl
monas transfieren sus mensajes a las células de las ratas hembra. Tal como vimos, las lesi-
diana uniéndose a receptores. La localización del HVM suprimen esta conducta También diji-
de estos receptores puede determinarse me- mos que la Conducta no ocurre si se extraen ~ I S
diante dos procedimientos diferentes. ovarios de la rata, pero puede activarse estimu-
En el primer procedimiento se utiliza la lando el HVM el&-te o con aminoácidos
autorradiograña. Las secciones de tejido cere- excitatonos. Estos resultados sugieren que lae
bral se exponen en una soluci6n que contiene hormonas sexuales producidas por los ovariw
un ligando radiactivo para un receptor específi- actúan sobre las neurona en el HVM.
co. A continuación, las secciones se enjuagan, Esta hipótesis sugiere dos experimentos. En
de forma que la única radiactividad que perma- primer lugar, podríamos utilizar el procedimien-
nece en elias es la de las moléculas del ligando to mostrado en la figura 5.29 para situar una
que se han unido a sus receptores. F i e n t e , pequeña cantidad de la hormona sexual adecua-
para localizar el ligando radiactivo -y así, los da directamente en el HVM de ratas hembra
receptores- se utilizan métodos autorradio- cuyos ovarios han sido extirpados previamente.
gráficos. Como veremos en el capítulo 10, este procedi-
En el segundo procedimiento se utiliza la in- miento funciona; la hormona reuctiva la con-
munocitoquímica. Como los reoeptores son pro- ducta sexual del animal. En el segundo experi-
teínas, se pueden produciranticuerposcontraeilos. mento podríamos utilizar la autorradioMa
Exponemos las secciones de tejido cegebral al para localizar los receptores de la hormona
anticuerpo adecuado (marcado con un tinte fluo- sexual. Las secciones del cerebro de la rata
rescate) y observamos las secciones a través del serían expuestas a la hormona radiactiva, luego
microscopio bajo luz de una detemiinada longi- serían enjuagadas y a continuación se llevada
tud de onda a cabo la autorradiografía. Si h i c i h o s esto,

Observaciones
aparecen en marrón han sido teñidas con un
método de inmunocitoquírnica que revela la
presencia de receptores de una hormona sexual
femenina. Los botones terminales que forman
sinapsis con estas neuronas han sido teñidos
con PHA-L, que fue inyectada en el HVM.
Estos resultados nos indican que las neuronas
de la sustancia gris periacueductal que son sen-
sibles a los estrógenos (hormonas sexuales fe-
meninas) también reciben inputs desde el nú-
cleo ventromedial del hipotálamo (véase la
figura 5.36).

Ke
S m
l mw-
Los métodos neuroquímicos pueden utili-
zarse para determinar la localización de
Pigum 5.36 una enorme variedad de sustancias en el
cerebro. Pueden servir para identificar neu-
ronas que secretan un neurotransmisor o
neuromodulador específico, así como cé-
lulas que poseen receptores que respon-
den a la presencia de esas sustancias. Los
péptidos y las proteínas.puedenser locali-
zados directamente, por medio de los
métodos de inmunocitoquímica; concreta-
mente, el tejido es expuesto a un anticuer-
leo ventromedinl del hipotáiamo. po que está unido a una molécula que se
hace fluorescente bajo una luz de una de-
Universidad de Massachuse~.) terminada longitud de onda. Otras sustan-
cias pueden ser detectadas a partir de la
radiactividad en el HVM. (Y si localización inmunocitoquímica de un en-
zima necesario para su síntesis. La deter-
ones cerebxales de ra-
minación de péptidos y proteínas puede
lan'amos pruebas acer- también realizarse por medio de los méto-
dos de hibridación in situ, que revelan la
presencia del ARN mensajero que dirige
su síntesis.
Los receptores de las sustancias neuro-
químicas pueden ser localizados de dos
formas. En el primer método se utiliza la
autorradiografía para determinar la distri-
bución de un ligando radiactwo al que se
ha expuesto el tejido. En el segundo mé-
todo se utiliza la inmunociioquimica para
detectar la presencia de los receptores en
sí, que son proteínas. Los métodos de
tinción combinados permiten localizar neu-
ronas que poseen un determinado recep-
tor o péptido y establecen además co-
nexiones con regiones especificas del
cerebro.
de neuronas de la La tabla 5.3 resume los métodos de inves-
tigación presentados en esta sección.

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