"Los Corregidores y los Tenientes salen cargados de caudales y
los pobres sin pellejo (T. K)"
Fuiste el caudillo de Macha en Chayanta, y como por tus
venas corría sangre Inca, reclamaste junto con tus hermanos tus derechos de cacique sin ser nunca oído, por eso discutiste planes y estrategias de la Revolución India con Tupaj Amaru y cobijaste en Potosí a Blas Tupaj Amaru y a Lucas Aparicio, representantes del Inca.
Emprendiste un viaje de 600 leguas a pie desde Macha hasta
Buenos Aires acompañado de Tomás Achu ya que los indios no debíamos cabalgar a caballo, era sedicioso y te entrevistarte con el virrey Juan José de Vertiz a quien le expusiste todas las injusticias que sufríamos como indios.
Recibiste recomendaciones firmadas por el virrey, que
ratificaban tus derechos. Pero cuando regresaste a tu casa fuiste tomado prisionero por provocar perturbaciones en el cobro de los impuestos.
Tu gran delito fue predicar contra la mit'a que asesinaba a
nuestro pueblo, y por ello el corregidor Alós dicta tu mandamiento de detención. El 12 de Diciembre de 1779 apareces, y te presentas a la audiencia para exponer sus padecimientos, pero la corrupción se ríe de tus derechos y quedaste prisionero hasta abril en Potosí, luego indios de los pueblos originarios atacaron la guardia en el camino hasta lograr tu libertad. Pero vuelves a ser detenido el 10 de junio de 1780 con la orden que expresa: "... Retener en la Real Cárcel de Chuquisaca al reo Thomas Katari... privándole toda comunicación especialmente con los indios..."
El 26 de Agosto de 1780, mientras estas cautivo, se inicia la
Revolución India en Pocoata, cuando tu compañero de viaje Tomás Achu reclama tu libertad que fué prometida por el funcionario Joaquín de Alós, como respuesta a la exigencia del cumplimiento de su promesa, recibe un pistoletazo que lo mata... y el pueblo inicia la justicia comunitaria destrozando a las fuerzas colonizadoras y llevándose preso al corregidor hasta Macha.
Consumada la sublevación, condujeron el movimiento tus
hermanos Dámaso y Nicolás quienes mandaron emisarios a la audiencia de Characas exigiendo tu libertad, así regresaste a Macha como nuestro Guía indiscutido y con tus facultades de cacique reconocido dispuesto a terminar con la violencia de los españoles, organizando un gobierno indio, para que: "... los gobernadores sean elegidos por los indios y se conduzcan a dirección de ellos" el levantamiento fue creciendo por todas partes y solo se esperaban las ordenes de Tupaj Amaru para iniciar el ofensiva.
Cuando hacías una inspección, un minero llamado Manuel
Álvarez V. con un grupo armado y por ordenes de la Audiencia, te tomó prisionero por ser un indio "alzado" y te entregó a Juan Antonio Acuña tu enemigo declarado, para ser llevado a La Plata, pero una multitud creciente de indios iba detrás de tuyo. Los k'aras chapetones temiendo que les arrebatasen a su preso, en al cuesta de Chataquila (15 - I - 1781) maniatan a Katari y lo arrojan al precipicio, corriendo ellos posteriormente la misma suerte.
Solo ante nosotros mostraste cuanto valías y solo nosotros
podíamos apreciar tu gran capacidad, por eso nuestra admiración la mostramos arrodillándonos ante tu clarividencia, besándote la mano o el pocho que vestías, pues fuiste nuestro redentor.
Tu gran error fue que dilataste tu accionar, esperando las
ordenes del Inca, haciendo pasar la oportunidad de iniciar la ofensiva que hubiera ayudado a la victoria de Tupac Amaru y la resurrección de nuestro Tawa-inti-suyo
Ahora el neo-liberalismo continua la labor depredadora
colonial y busca reforzar y legalizar nuestra condición de servidumbre, para revolcarse en las gangas que logran rematando nuestros territorios, para mostrarnos como grandes conquistas del desarrollo global, la asimilación de sus desperdicios.