Una reacción alérgica que pone en riesgo la vida (anafilaxia) puede causar un choque, un descenso

repentino de la presión arterial y problemas para respirar. En las personas que

tienen alergia, la anafilaxia puede ocurrir minutos después de la exposición a una
sustancia específica que causa la alergia (alérgeno). En algunos casos, la
reacción puede retrasarse o la anafilaxia puede ocurrir sin ningún detonante
evidente.
Si estás con alguien que está teniendo una reacción alérgica y muestra signos de
anafilaxia:

Llama de inmediato al 911 o al número local de emergencias médicas.

Pregúntale a la persona si lleva consigo un autoinyector de epinefrina (EpiPen,
Auvi-Q u otros) para tratar ataques de alergia.
Si la persona dice que necesita usar un autoinyector, pregúntale si debes
ayudarla a inyectarse el medicamento. Por lo general, esto se hace presionando el
autoinyector sobre el muslo de la persona.
Pídele a la persona que se acueste boca arriba y se quede quieta.
Afloja la ropa ajustada y tapa a la persona con una manta. No le des nada para
beber.
Si vomita o sangra por la boca, coloca a la persona de lado para evitar que se
atragante.
Si no hay signos de que esté respirando o tosiendo y no se mueve, comienza a
hacer reanimación cardiopulmonar. Haz presiones continuas en el pecho
(aproximadamente 100 por minuto) hasta que lleguen los socorristas.
Obtén tratamiento de urgencia aunque los síntomas empiecen a mejorar.
Después de la anafilaxia, es posible que los síntomas vuelvan a aparecer. Por lo
general, se requiere supervisión en el hospital durante varias horas.

Si estás con una persona que presenta signos y síntomas de anafilaxia, no

esperes a ver si los síntomas mejoran. Busca tratamiento de urgencia
inmediatamente. En los casos graves, la anafilaxia sin tratar puede causar la
muerte en aproximadamente media hora.

Una tableta de antihistamínico, como la difenhidramina (Benadryl), no es suficiente

para tratar la anafilaxia. Estos medicamentos pueden ayudar a aliviar los síntomas
de la alergia, pero hacen efecto con mucha lentitud en una reacción intensa.
Algunos de los signos y síntomas de anafilaxia son:

Reacciones cutáneas, como urticaria, picazón y palidez o enrojecimiento de la

piel
Hinchazón del rostro, los ojos, los labios o la garganta
Constricción de las vías respiratorias, que provoca silbido del pecho y
problemas para respirar
Pulso débil y acelerado
Náuseas, vómitos o diarrea
Mareos, desmayo o pérdida del conocimiento

Algunos desencadenantes frecuentes de la anafilaxia comprenden:

Medicamentos
Alimentos como maní, frutos secos, pescado y mariscos
Picaduras de insectos como abejas, avispas, avispones y hormigas coloradas

Si has tenido algún tipo de reacción alérgica grave en el pasado, pregúntale al

médico si es necesario que te recete un autoinyector de epinefrina para llevarlo
siempre contigo.
El Ministerio de Sanidad define la alergia como una susceptibilidad especial de
algunas personas que hace que respondan de una forma exagerada a uno o
varios elementos externos.

Normalmente hablamos de elementos ante los que el organismo no debería

presentar ninguna reacción, por eso en muchas ocasiones las alergias se
presentan “por sorpresa” y nos pillan desprevenidos, no sabiendo bien que ocurre
o como reaccionar.

Los síntomas pueden ser:

ORALES.

Picor de boca, lengua, garganta, labios… Pudiendo presentar además erupciones,

hinchazón…

Este tipo de síntomas suelen asociarse normalmente con la ingestión de alimentos

a los que el paciente sea alérgico, pudiendo presentarse al primer contacto o en
contactos posteriores. La gravedad puede variar.
CUTÁNEOS

Urticaria, Angioderma, dermatitis, picor o escozor de ojos…

Este tipo de síntomas pueden asociarse a otros como síntomas secundarios o

bien pueden ser primarios en alergias a pelo de animales, polen, hongos,
medicamentos, metales…

Suelen ser algo más leves que los otros síntomas y pueden deberse a alergias
temporales.
DIGESTIVOS

Vómitos, diarreas, hilos de sangre en heces, rechazo marcado de un alimento,

dolor abdominal, pérdida de peso u otras reacciones digestivas.

Suelen ser síntomas primarios provocados por la ingestión de alimentos que

provocan alergia, y vienen normalmente asociados a otros síntomas secundarios
cutáneos, orales y respiratorios.
RESPIRATORIOS

Estornudo, rinitis aguda, asma, dificultad respiratoria…

Suelen ser síntomas primarios en alergias a polen, productos químicos o pelos de
animales y también pueden aparecer como síntomas secundarios en alergias
alimentarias.

ALÉRGENOS HABITUALES:

El polen de plantas, especialmente gramíneas y olivos; el pelo de animales y los

ácaros del polvo suelen ser los alérgenos a los que mayor porcentaje de población
es susceptible. Estas alergias aparecen en cualquier momento y no suelen remitir
con el paso del tiempo.

Las alergias alimentarias suelen aparecer en la infancia, aunque pueden

diagnosticarse en edad adulta, y pueden remitir con la edad o ver incrementando
sus síntomas. Los alergenos alimentarios más habituales suelen ser proteína de
leche, lactosa, huevos, pescado, algunas frutas, semillas, gluten, soja, marisco,
frutas secos…Este tipo de alergias, si son severas, pueden ocasionar con mayor
probabilidad choques anafilácticos por lo que es importante conocer los
componentes de los alimentos.

El venenos de algunos insectos como avispas, abejas y arañas, también puede

causar alergias, pudiendo llegar a ser letal en caso de muchas picaduras
simultáneas o de darse en lugares muy cercanos al torrente sanguíneo como
cuello…

Las alergias a medicamentos, hongos , metales y productos químicos, aunque son

algo menos habituales, también se dan y debe controlares, especialmente las de
los medicamentos, que al ser productos de ingestión igualmente son más
susceptibles de provocar choques anafilácticos.
CHOQUE ANAFILÁCTICO

Es una reacción alérgica muy aguda y potencialmente mortal, motivo por el cual lo
más importante es la observación, detección muy precoz de síntomas y atención
temprana, que pueden incluir:
 deterioro del estado general
asma y dificultades respiratorias que van aumentando
Náuseas y vómitos
Inflamación.
Hipotensión
Pérdida de conocimientos.
Parada cardíaca.

En caso de sospechar anafilaxia contactar inmediatamente con 112, prepararse

para realizar respiración asistida y localizar inyección de adrenalina que se
administrará con permiso del 112, por lo que es imprescindible que, en caso de
alergias severas, las viviendas, centros de trabajo, educativos,
deportivos…dispongan de estas inyecciones de adrenalina.

En caso de que derive en parada cardíaca localizar desfibrilador por si fuera

necesario su uso.