Está en la página 1de 1

Uno de los baluartes de la sociedad es el respeto irrestricto de la dignidad de la persona, así, la

propia Carta Magna considera en su primer artículo que la persona humana y su dignidad son el
fin supremo de la sociedad y el Estado1. En efecto cabe precisar que con el transcurrir del tiempo,
desde la aparición del hombre hasta hoy en día, el ser humano paulatinamente se han venido
revistiendo de valores que más adelante serían denominados “derechos”, concepto que se ido
manejando desde una acepción simple, básica y genérica hasta un concepto teleológico,
complejo protegiendo así no solamente a la persona en sí sino también a sus actividades, a sus
relaciones interpersonales, sus bienes, entre otros a tal punto que hoy en día a alcanzado niveles
inimaginables protegiendo cada vez más a todo que lo rodea, entre ellas el ambiente, los
animales, plantas, y todo el ecosistema, tal es así que este valor supremo es protegido de manera
que no pueda ser mancillada de ninguna manera de no ser que la propia persona pone en juego
sus libertades y derechos al transgredir las normas de carácter penal, hecho que está
condicionada a un juicio previo (debido proceso) en el cual se ha respetado sus derechos y el
estado le ha garantizado dichos atributos, se han activado todas las garantías que el propio
estado alguna vez le ha reconocido.

Desarrolle las implicancias de tener derecho a un juicio previo, oral, público y


contradictorio

Respondiendo el foro: En primer lugar, cabe señalar que los principios consagrados en
el Nuevo Modelo Proceso Penal, como son Juicio previo, oralidad, contradicción,
igualdad de armas, presunción de inocencia, juez natural, entre otros, tienen una doble
dimensión, por un lado implica garantizar al justiciable (no solamente al imputado sino
también a la víctima) el respeto ineludible de sus derechos y el reconocimiento de sus
garantías constitucionales que le asiste, y por el otro, brindar una seguridad jurídica al
ciudadano de a pie, de que al ser sometido a un proceso tenga la predictibilidad que
serán con sujeción a sus derechos reconocidos; por lo que el debido proceso implica que
el juicio llevado por el tribunal será resulto en un marco de que implique a las partes en
conflicto una satisfacción en tanto se ha desenvuelto en completa observancia de sus
garantías, ya que hablar de debido proceso implica hablar de una gama de principios
como presunción de inocencia, de imparcialidad, del principio acusatorio, del derecho
de defensa, del derecho a probar, del derecho al contradictorio, del derecho a la igualdad
sustancial en el proceso, del derecho a no ser desviado de la jurisdicción predeterminada
ni sometido a procedimientos distintos de los previstos por la ley, a la observancia del
principio de legalidad procesal penal, entre otros.

1
Artículo 1° de la Constitución Política del Perú de 1993.

También podría gustarte