Regulaciones y Derecho en

Comunicación.
Trabajo Integrador Final

Dr. Martín Becerra

Mg. Carla Rodríguez Miranda

Autor: Horacio Avendaño

Julio de 2019

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1. Al finalizar el módulo realizar un trabajo escrito de carácter individual sobre alguna
de las problemáticas abordadas en el curso con uso de la bibliografía estudiada.
Los temas marco son la regulación de las comunicaciones en el escenario de la
convergencia, la libertad de expresión en sus facetas individual y social, el poder
de los llamados “intermediarios” y los derechos de propiedad intelectual, de autor y
de acceso a la cultura y a la información. Dentro de estos temas marco cada
estudiante puede elegir un caso o recorte específico. El trabajo tendrá un carácter
reflexivo a partir de las categorías presentadas en la bibliografía. Se puede añadir
bibliografía pero es necesario usar parte de las fuentes trabajadas en el curso.
El tp debe presentar las siguientes características:
• Extensión 10 páginas
• Letra Arial 11
• Espaciado 1.5
• Títulos y subtítulos en negrita
• Alineación Justificada
Estructura:
• Introducción: presentar el tema problema del trabajo.
• Contexto conceptual: exponer las herramientas teóricas aplicadas.
• Análisis: desarrollar el análisis sobre su tema o caso.
• Conclusiones: plantear los hallazgos y/o reflexión teórica.
• Bibliografia: sistema APA

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 Dialéctica de lo humano. Derechos y Derecho en Comunicación Digital.

El motor de búsqueda Google arroja 1.370.000.000 resultados en 0,48 segundos

cuando se escribe la palabra “derechos” (en plural). En cambio, si la palabra por la
que se solicita la búsqueda es “derecho” (en singular), los resultados son distintos:
727.000.000 en 0,88 segundos. Casi la mitad en el doble de tiempo de búsqueda.
Esta diferencia cuantitativa, algoritmica y temporal invisibiliza mucho más que la
ausencia (o presencia) gramatical de la letra “s”. La tensión entre lo propio de la
naturaleza humana, su subjetividad, deseo, autorrealización, libertad y otros
derechos; y las formas simbólicas, superestructurales, objetivas, artificiales, del
derecho moderno que creamos para intentar vivir en un estado de civilidad que
nos aleje de la idea de matarnos unos a otros.
Esta concepción binaria de la interpretación del mundo, derechos – derecho, que
Google jerarquiza exponencialmente para perpetuar el presente y formatear el
futuro, en menos de un minuto, no es nueva. Tiene su origen en la génesis del
logos occidental, con el nacimiento mismo de la concepción griega, algo así como
26 siglos atrás. En un mundo construído sobre lo binario, con conceptos
mutuamente excluyentes como natural – artificial, individual – colectivo, orden –
conflicto, ceros – unos, humano – técnica, hombre – mujer, centro – periferia o
derechos – derecho… ¿Es la Comunicación Digital Interactiva, como forma de la
Convergencia Cultural, la manifestación de un mundo binario que llegó a su fin?
¿Es el prosumidor creativo un “homo mobilis” que abandona la monstruosidad de
un mundo colonizado por el copyright? ¿La libertad de expresión tiene lugar en la
utopía que se propone trascender la dicotomía Estado- Mercado?

La dualidad de la Política: del Contractualismo a la democracia

Thomas Hobbes (1588-1679), fue un filósofo inglés considerado el fundador de la

filosofía política moderna. Especialmente en Leviatán, o la materia, forma y poder
de una república eclesiástica y civil (1651), su obra mas conocida, se origina una
tradición teórica que se conoce en occidente con el nombre de Contractualismo.
Sus postulados básicos, al que luego se suman John Locke (1632-1704) y Jean
Jacques Rousseau (1712-1778), se concentran en tres momentos centrales: un
primer estado de naturaleza donde, movidos por sus pasiones violentas, los
hombres y mujeres entablan una guerra de todos contra todos. No existe ley ni
autoridad, nada es justo ni injusto y todos tienen derecho a todo. Hobbes lo

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 resume con la expresión latina “homo homini lupus” (el hombre es un lobo para el
hombre).
El segundo momento corresponde al pacto entre personas. Ese pacto consiste en
la cesión de todo el poder del individuo a un soberano (o corporación), que habrá
de mantener el orden y la paz.
El tercer momento corresponde al estado de sociedad. Una vez firmado el pacto,
se instaura la sociedad (para Hobbes, equivalente al Estado). Se sustituye así el
derecho (a todo) por la ley (entendida como límite), y se instituye un Estado liberal
fundado en el modelo moderno de democracia liberal, en el cual los individuos
eligen a sus gobernantes periódicamente, y éstos tienen como misión garantizar el
orden social.
El abandono de las pasiones y libertades de cada sujeto, violentas para algunos y
naturales para otros, la delegación de las voluntades individuales a mano de un
contrato social colectivo, participativo y democrático, es una tensión intrínseca de
las sociedades modernas que encuentra en la expresión de la teoría política una
de las más influyentes de los últimos trescientos años, configurando, en mayor o
menor grado, la estructura actual de los distintos Estados y Naciones.
La teoría política liberal, fundada sobre la dicotomía individuo - sociedad ha sufrido
también la caída en la propia trampa: el intento de reemplazar esta concepción
dual por otra, mas perversa quizás: Estado – Mercado.

La dualidad de la Comunicación: del emisor a la autocomunicación de masas

Quizás no sea sólo la teoría política la que da herramientas para la comprensión

hermenéutica de un mundo plano como plantea Thomas Friedman.
Manuel Castells en Comunicación y Poder (2009) encuentra una llave que le
permita abrir una puerta y dejar fluir categorías de análisis mas flexibles y
dinámicas: la Sociedad Red, caracterizada por la transformación tecnológica de la
comunicación digital, la estructura institucional y organizativa de la comunicación y
la dimensión cultural de la transformación multinivel, vincula tres modos de la
comunicación. La comunicación interpersonal, la comunicación social y la
autocomunicación de masas.
La Convergencia tecnológica no es un fenómeno espontáneo que surge,
solamente, con el sentido de generar una ruptura en el mundo binario fundado
sobre una forma de pensar lógica. La Convergencia es, también, el modo en que la
televisión, principal medio de comunicación de masas del siglo XX, se transforma
en mutante entre la fragmentación de audiencias y el tiempo de ocio.

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 La radio permite conectar en red un espacio inimaginable y se flexibiliza para
adaptarse a nuevos tiempos y nuevas geografías.
Internet, que se utiliza por primera vez en 1969 mostrando que la vanguardia
técnica estaba en manos de los militares norteamericanos, se propaga en la
década del 90´ pero de la mano del entretenimiento y la comunicación. Pasa de 40
millones de usuarios en 1995 a 1400 millones en 2008 en todo el mundo. Un
quinto de la población mundial.
Los teléfonos móviles son la tecnología de mas rápida difusión en la historia de las
comunicaciones: de los 16 millones de contratos que había en 1991, pasan a
3.400 millones en 2008. Mas de la mitad de la población mundial.
La primera década del siglo XXI cuenta con mas de 115 millones de blogs, en su
mayoría personales, que dan cuenta de un nuevo modo de comunicación: ni
humana, ni tecnológica solamente, sino de autocomunicación de masas, como la
denomina Manuel Castells (2009). Es la convergencia y transformación de la web
2.0, tecnología digital, web 3.0, banda ancha, interfaz y software de código abierto.
La autocomunicación de masas se expresa en un lenguaje digital que comprende
una audiencia global, es multimodal, autogenerada, de emisión autodirigida y
recepción autoseleccionada. Es la síntesis dialéctica de dos momentos previos
imprescindibles, la comunicación individual y la comunicación social.
En su estructura subyacente, la autocomunicación de masas se nutre de una
concepción aséptica del poder. No del poder como capacidad de hacer y decir,
sino como estructura que tiende a la hegemonía: del Estado o del Mercado.

La dualidad de la propiedad y la libertad: de las tablas de arcilla a Google

Las tablas de arcilla eran protegidas por los sacerdotes al igual que la Biblia que
estaba escrita en Latin. Hasta 1980 la NBC, ABC, CBS dominaban el espectro
Norteamericano y el mundo se construía a partir de un cartel de noticias globales
que conformaban Reuters (Británica), Haves (Francia) y Wolff News (Alemania). El
siglo XXI, no trae noticias distintas: News Corp es un concglomerado de medios
global que basa su éxito en la capacidad para conectar con la red global de
comunicaciones mediadas. Google es Youtube, Chrome, Gmail, Android, Nest
(domótica para el hogar), Titan Aerospace (Drones) y obtuvo en 2013, según la
carta que Mathias Döpfner (Ceo de Axel Springer – Alemania) le envía a Eric Smith
ganancias por 14.000 millones de dólares.
Ese mundo real que describe Lawrence Lessig (1998) estaba regulado por cuatro
limitaciones: la ley, las normas sociales, el mercado y la arquitectura, limitación que

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 impone el mundo como lo encuentro, ya diseñado y construído. Pero el otro mundo
espacial, que se podría considerar a priori como un espacio de libertad, está más
regulado que el real: por la ley, las normas sociales, el mercado y el código
algorítmico que, materializado en el software y el hardware, se transforma en una
clase soberana. Regula y desplaza a las soberanías locales.
¿Cuál es el rol del Estado como garante del Derecho Humano a la Comunicación?
se pregunta Damian Loretti. Nuevamente, la concepción binaria de Libertad de
información versus Propiedad privada de los medios de información reduce el rol
del Estado a la garantía de una libertad negativa. No se puede garantizar el
Derecho a la Comunicación si sólo se considera la abstención de censura. La
libertad de expresión no sólo significa la posibilidad individual a expresarse, sino a
la cualidad colectiva para recibir dicha información.
En las palabras de Owen Fiss (2011), la dualidad derechos – derecho se inscribe
en lo que denomina “tradición” de la libertad de expresión, un proceso que se nutre
de cada nueva desición y que orienta al Juez en sus desiciones.”La libertad de
expresión no tiene como fin la autorrealización individual sino la preservación de la
democracia que propicie un debate desinhibido, vigoroso y abierto” (Fiss, O. 2011).
Más allá de proteger al “orador de la esquina” el Estado debe potenciar el debate
público para que la libertad de expresión, mse transforme en una libertad
preferente.
El informe sobre Libertad de Expresión elaborado por la Comisión Interamericana
de Derechos Humanos (CIDH) publicado en 2013 expresa, respecto de Internet,
que el acceso debe garantizar la conectividad y acceso universal a la
infraestructura de internet y a los servicios de la Tecnologías de la Información y
de la Comunicación. El Estado debe decidir cuáles son los medios mas adecuados
para achicar la brecha digital y potenciar el pluralismo, la diversidad de voces y la
no discriminación de grupos en situación de vulnerabilidad.
La privacidad en Internet, garantizada específicamente en el Artículo N° 11
establece que “Nadie puede ser objeto de injerencias arbitrarias o abusivas en su
vida privada” pero no debe inhibir ni restringir la investigación y difusión de
información de interés público.
La neutralidad de la red, es intrínseco al diseño original de internet. El tratamiento
de los datos y el tráfico de internet no debe ser objeto de ningún tipo de
discriminación. La red no es sinónimo de intermediario, motor de búsqueda o
plataforma, como bien se lo recuerda Mathias Döpfner, CEO de la Editorial
Alemana Axel Springer, a Eric Smith (Google) en una carta abierta publicada en
2014: “los que critican la posición dominante en el mercado de Google, no critican

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 Internet, sino el monopolio mundial y el abuso por posición dominante de una
empresa que tiene concentrado el 91,2 % del mercado alemán de motores de
búsqueda.
El acceso a Internet alcanza un potencial inédito en la segunda década del siglo
XXI. De acuerdo con los datos de la Encuesta Nacional de Consumos Culturales
de la Argentina, publicada en 2017, el tiempo promedio de conexión a internet es
de 4:29 hs, valor que supera el tiempo diario de consumo de música (3:15 hs.) y de
televisión (2:45 hs.). Y aunque el tiempo de utilización de internet no es
exclusivamente cultural, se trata de una práctica que atraviesa y/o posibilita el
consumo masivo de bienes culturales. La extensión y la intensifcación del uso de
internet y del celular impactan en el tiempo y la modalidad que asumen las formas
contemporáneas de consumo cultural: el consumo simultáneo y deslocalizado e
hiperconectado de la cultura digital.
Internet, que sirve como plataforma para la realización de otros Derechos
Humanos, propicia el cierre de la brecha digital, la accesibilidad y disponibilidad y
la alfabetización digital.

La dualidad de la forma y el contenido: vender vino sin botellas

“Una idea es exclusiva mientras está guardada” sentencia John Perry Barlow en La
economía de la mente en la Red Global (1994). Cuando las ideas se hacen
públicas, como las invenciones por ejemplo, no pueden ser sujetas a propiedad
porque eso restringe la circulación y distribución generalizada del pensamiento.
La historia de la humanidad da cuenta de la propiedad y su defensa como un
asunto militar, que se debía defender con las armas. Los Bienes raíces (Real
State) protegían el bien mas preciado de la época: el suelo o la tierra.La riqueza
estaba allí y potenciaba la agricultura como firma de generación de riquezas.
La Revolución Industrial es el tiempo de la invención masiva de herramientas,
mecanismos y procedimientos que transformaron un modo de producción de tipo
Feudal en uno Capitalista, cuyos medios y relaciones de producción generaron una
acumulación de capital exponencial en manos de los que Karl Marx, desde el
Materialismo Histórico Dialéctico, denominó burguesía. La protección de la
propiedad privada extendió sus dominios a otros objetos (herramientas y
máquinas) y la patente protege ahora una cosa material o física que funcione. En
palabras de Barlow “Se protege a la botella y no al vino”.
Alvin Toffler utiliza la figura de la ola para representar esta dinámica productiva de
la humanidad: la primera ola la constituye la agricultura y por lo tanto la ley

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 protegía la tierra. La segunda ola es la de las manufacturas o de la industria y por
eso la ley moderna protege la propiedad del capital. La tercera ola es la de la
información. ¿Quién y cómo se pretege? La información no es una “cosa” el el
sentido tangible de la revolución industrial capitalista. Es una forma de vida, se
transmite, se reproduce en las grietas de laposibilidad, se experimenta, es
relacional y dinámica. En palabras de Barlow, ¡es el vino!.
La información se corresponde con los fenómenos propios de lo que Zygmun
Bauman denomina Modernidad Líquida. Una acción similar a las narraciones de la
tradición oral trasumante que caracterizaron desde el Neolítico a Gutemberg. Lo
relacional, perecedero, creativo de la información líquida del mundo digital
desborda caóticamente el sitema de Copyright, que no dá cabida a expresiones
que no se fijen an algún punto. Menos a expresiones culturales que no tienen autor
o inventor concreto.
¿Es posible un mundo sin Copyright? Se pregunta Joost Smiers (2006). El
Copyright, derecho exclusivo de un autor, editor o concesionario para explotar una
obra literaria, científica o artística durante cierto tiempo, es uno de los productos
comerciales mas importantes del siglo XXI.
Dice Wikipedia que “el derecho de autor es un conjunto de normas jurídicas y
principios que afirman los derechos morales y patrimoniales que la ley concede a
los autores, por el simple hecho de la creación de una obra literaria, artística,
musical, científica o didáctica, esté publicada o inédita”.
En el motor de búsqueda Google arroja cerca de 3.040.000.000 resultados en 0,49
segundos, cuando se solicita información sobre la palabra “Copyright”, el doble que
la búsqueda sobre la palabra “derechos”. Y 6 veces mas que igual búsqueta por la
palabra “derecho”.
Entendiendo el arte como todas las formas del entretenimiento y el diseño, la
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura
(UNESCO), en el marco de la Convención sobre la Protección y Promoción de la
Diversidad de las Expresiones Culturales (2003) encomendó a los Estados
Nacionales el derecho a regular el mercado cultural a favor de la diversidad. La
globalización económica no garantiza la persistencia del legado cultural del que
somos herederos. Menos aún garantiza la libertad cultural como un hecho
colectivo. El arte, campo de batalla simbólico, es una forma específica de
comunicación, no es neutral, se manifiesta en lugares específicos y perfila nuestro
modo de pensar. El arte, la comunicación y la cultura son sinónimo de mas
democracia. Pero, como lo advirtieron Max Horkheimer y Theodor Adorno,
exponentes de la Escuela de Frankfurt, hablando de la cultura de masas del siglo

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 XX, las industrias culturales de la era global y digital poseen propietarios
oligopólicos de los medios de producción.
“La técnica cultural por excelencia de la era digital es el software” dice Beatriz
Busaniche (2005). Las industrias culturales fundadas sobre las leyes de copyright
están sumidas en una profunda crisis en el mundo digital.
El software es texto. Es la hoja de ruta que le da ordenes al hardware y entonces
la computadora, tablet o notebook hace lo que el software le ordena. El texto
fuente, binario, ejecutable no es legible para los seres humanos. Así como el
software le ordena al hardware, el dueño del software (quien posee el Copyright) le
ordena a los usuarios que pueden y que no pueden hacer con el mismo. Este
proceso, explicitado en la “licencia de uso” del software, consolida el monopolio del
copyright porque imposibilita la lectura humana del software escrito como binario y
ejecutable.

La dualidad de lo humano y lo técnico: una dialéctica de la praxis.

La palabra “dialéctica” significa lo mismo en griego que en latin: conversación.

Teoría y técnica retórica de dialogar y discutir para descubrir la verdad mediante la
exposición y confrontación de razonamientos y argumentaciones contrarios entre
sí. El filósofo alemán Georg Hegel (1770-1831), exponente del Idealismo Alemán,
fue quien planteó por primera vez que la posibilidad de salir de las dualidades,
estaba en la dialéctica. Es decir que los momentos estáticos de la primera
negación (tesis) y los de la segunda negación (antitesis), puestos en tensión, en
diálogo o en conversación producen un tercer momento superador de los dos
previos denominado sintesis (provisoria) que no era ni uno ni otro de los anteriores,
sino que mantenía algunos rasgos y poseía otro distintivos.
La Comunicación Digital Interactiva demanda este nuevo estadio. El mundo digital,
líquido, fluido, convergente no tolera mas ser definido desde la dualidad derechos
– derecho. Las categorías binarias se transforman en una ¿nueva? forma de la
colonización humana.
La Psicología de la Comunicación demuestra la capacidad de las personas para
modificar el significado de los mensajes de acuerdo con sus marcos culturales. Las
audiencias creativas que hoy re-presenta la Convergencia Cultural y la
Comunicación Digital Interactiva, fueron bocetadas por Umberto Eco en el siglo XX
al subrayar la capacidad de la gente para añadir sus propios códigos y sub códigos
a los códigos del emisor que constituyen los significantes del mensaje.

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 El Copyleft, al igual que el software libre garantizan diversas libertades. La Licencia
Pública General (GLP) es diseñada para garantizar la libertad de usar un programa
con cualquier fin, para acceder al código fuente y modificar su estructura, para
distribuir copias y mejorar el programa desde los aportes de los usuarios.
La Organización Mundial de la Riqueza Intelectual es un colectivo que se funda
sobre objetivos mucho mas creativos e inclusivos que el mero hecho de
reemplazar a la Organización Mundial de Propiedad Intelectual.
Desaprender todo lo que sabemos sobre propiedad intelectual nos permite
entender que las protecciones se apoyarán mas en la ética y la tecnología que en
la ley del derecho.
La Comunicación Digital Interactiva con su expresión mas transformadora, la
narrativa transmedia, propone prosumidores creativos capaces de hacer de la
polisemia de los lenguajes y significados lo mas prístino de la esencia humanas: la
democratización del sentido de la comunicación.
Democratización, participación colectiva, libertad de expresión, arte y creatividad
son conceptos que se identifican plenamete con una cualidad humana exclusiva: la
emancipación. Aun que y a pesar de que ¿sometida? al buscador Google, este
indique sólo 634.000 resultados en 0,40 segundos. Resultado muy por debajo de
Copyright (3.040.000.000), Derechos (1.370.000.000) y Derecho (727.000.000).

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Bibliografía

Becerra, Martín (2016), La convergencia es más que un proyecto de ley , mimeo,

disponible en https://martinbecerra.wordpress.com/2016/05/17/la-convergencia-es-
mas-que-un-proyecto-de-ley/

Busaniche, Beatríz (2005), “Las ideas y las cosas: la riqueza de las ideas y los peligros
de su monopolización”, en: ¿Un mundo patentado?La privatización de la vida y del
conocimiento, Fundación Heinrich Böll, El Salvador, p. 68-82. Disponible en
http://www.boell-latinoamerica.org/download_es/Libro_biopolitica.pdf

Castells, Manuel (2009), Comunicación y Poder , Alianza, Madrid, Cap. 2, “La

comunicación en la era digital”. Pp. 87-187.
https://paisdospuntocero.files.wordpress.com/2015/04/07comunicacic3b3n_y_poder_d
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Comisión Interamericana de DDHH (2013), Libertad de expresión en Internet ,

Relatoría Especial para la Libertad de Expresión. Disponible en
http://www.oas.org/es/cidh/expresion/docs/informes/2014_04_08_Internet_WEB.pdf

Döpfner, Mathias (2014), “Carta abierta a Eric Schmidt”, mimeo, disponible en

http://tallerdedatos.com.ar/wp-content/uploads/2016/07/Dopfner-Google-Carta-abierta-
a-eric-schmidt.pdf

Fiss, Owen (2011), “Libertad de expresión y estructura social”, en Carbonell, Miguel

(ed), Problemas Contemporáneos de la Libertad de Expresión , Porrua CNDH, México.
Pp. 63-86. Disponible en http://unesdoc.unesco.org/images/0021/002156/215627s.pdf

Hobbes, Thomas (1980), “Leviatan. O la materia, forma y poder de una República

Eclesiástica y Civil. Trad. de Manuel Sánchez Sarto—3ª ed.- FCE. - México :

Lessig, Lawrence (1998), “Las leyes del ciberespacio”, conferencia Taiwan Net '98,
mimeo, Taipei,publicado en
http://www.uned.es/ntedu/espanol/master/segundo/modulos/audiencias-y-nuevos-
medios/ciberesp.htm

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Loreti, Damián y Luis Lozano (2014), El derecho a comunicar. Los conflictos en torno a
la libertad de expresión en las sociedades contemporáneas , Siglo XXI, Buenos Aires.
Capítulo 2.

Smiers, Joost (2006), Un mundo sin copyright: artes y medios en la globalización ,

Gedisa, Barcelona, 383 p. Capítulo 7 pp. 283-304, “Una reglamentación a favor de la
diversidad cultural” http://sgpwe.izt.uam.mx/files/users/uami/ana/Smiers-Joost-Un-
Mundo-Sin-Copyright.pdf

Véliz, Carissa (2018) “Por qué es importante proteger nuestra privacidad en Internet”,
en The New York Times , 4 de abril, disponible en
https://www.nytimes.com/es/2018/04/04/opinion-veliz-facebook-privadidad-cambridge-
analytica/

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