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HISTORIA INSTITUCIONAL DE CHILE

I.- DESCRIPCIÓN DEL CURSO:

Este curso aborda la historia política e institucional del siglo XIX y XX, desde una
perspectiva analítica de sus principales procesos, con especial énfasis en la liberalización de
las instituciones y la creciente ampliación del espacio político.

Este curso busca que los estudiantes desarrollen habilidades de comprensión de la


multicausalidad de los procesos históricos, estableciendo relaciones entre los procesos
políticos, económicos, sociales y culturales, y que analicen su impacto en la creación
institucional.

También busca que los estudiantes desarrollen una sensibilidad histórica que les
permita evaluar la profundidad temporal de los procesos políticos e institucionales
contemporáneos. Así, en este curso los estudiantes desarrollarán aquellas habilidades
intelectuales necesarias para interpretar las complejidades del mundo en constante cambio
que les tocará vivir y a su vez transformar, ya sea desde el ejercicio profesional, o bien
desde las instituciones políticas, jurídicas y universitarias donde les tocará desenvolverse.
Estas habilidades y destrezas intelectuales los dotarán de capacidades fundamentales para
desarrollar las competencias que se requieren para desenvolverse como juristas sólidos,
creativos y críticos, en un mundo en permanente transformación en el cual el país se inserta
cada vez con mayor intensidad, proceso en el cual es necesario tener conciencia de los
aportes y valores específicos de Chile, para lo cual es indispensable tener una comprensión
adecuada de su historia, especialmente de su historia política e institucional.

Por tanto, este curso de Historia Institucional de Chile constituye un aporte


significativo para la formación de líderes y juristas que conduzcan los destinos del país, tanto
en el servicio público como en el área privada, sobre la base de una formación apegada a
la ética, la excelencia, la rigurosidad y la justicia.
II.- OBJETIVOS GENERALES:

Los estudiantes se familiarizarán con el análisis histórico de los principales hitos y


problemas del proceso político y de la creación institucional de Chile, con especial énfasis
en las diversas interpretaciones del origen y características del liberalismo parlamentario,
para adquirir una visión de la complejidad de la historia política institucional del siglo XIX
chileno y de su relevancia en el presente.

III.- OBJETIVOS ESPECÍFICOS PARA LOS ESTUDIANTES:

1.- Valorarán la historia política e institucional como una disciplina fundamental para
comprender el presente.

2. - Comprenderán que todo relato histórico es interpretativo, y que se construye en función


de las preguntas del presente.

3.- Serán capaces de discutir las diversas periodificaciones de la historia del siglo XIX y XX
chileno, y vincularlas con interpretaciones divergentes sobre el sentido del siglo y con
valoraciones divergentes sobre los distintos procesos político-institucionales del siglo XIX y
XX chileno.

4.- Serán capaces de ponderar la interrelación entre las dimensiones económicas, sociales,
culturales, políticas e institucionales de los procesos históricos.

5.- Diferenciarán entre las prácticas políticas y las normas jurídicas y evaluarán el impacto
de las prácticas políticas sobre los sistemas institucionales, con especial énfasis en las
prácticas parlamentarias y las prácticas electorales del siglo XIX y parte del XX.

6.- Serán capaces de analizar las bases institucionales del presidencialismo y las reformas
que conducen a un régimen de carácter parlamentario.

7.- Serán capaces de analizar los procesos políticos que dan cuenta de la liberalización y
laicización de las instituciones en el siglo XIX y XX.

8.- Dimensionarán las transformaciones territoriales de Chile en el siglo XIX y evaluarán el


desafío político e institucional que implica la incorporación de los nuevos territorios.
9.- Comprenderán que la riqueza salitrera transforma profundamente la institucionalidad, la
política y la sociedad chilena.

10.- Serán capaces de analizar las normas y las prácticas que dan cuenta del funcionamiento
del régimen político chileno después antes y después de 1891.

11.- Evaluarán los procesos políticos del siglo XIX y XX chileno, revisando el mito portaliano
de la construcción de Estado y el liberalismo parlamentario con nuevos fundamentos.

12.- Lograrán adquirir una visión compleja de la historia política institucional del siglo XIX y
XX chileno.

IV.- METODOLOGÍA:

La metodología del curso combina métodos expositivos, apoyados en bibliografía


dada previamente, con discusión por parte de los estudiantes de las ideas expuestas y uso
de separatas y/o apuntes. Se considera que las pruebas orales, en presencia de todo el
curso, corresponde también a una actividad de síntesis de lo tratado hasta la fecha de ésta.

V.-BIBLIOGRAFÍA:

Heise, Julio, Historia de Chile. El período parlamentario, 1861-1925. Tomo 1 (Santiago,


1974), primera parte.

Jocelyn-Holt Letelier, Alfredo, La Independencia de Chile. Tradición, Modernización y Mito


(Madrid, 1992; Santiago, 1999), capítulos 8 y 9

Heise, Julio, "Democracia y gobierno representativo en el período parlamentario (Historia


del poder electoral)" (Editorial Universitaria, 1982), cuarta parte.

Bobbio, Norberto, Matteucci, Nicola y Pasquino, Gianfranco, Diccionario de Política (Siglo


XXI editores, 10ª edición, 1997) La voz Liberalismo de Nicola Matteucci.
Correa Sutil, Sofía, "El partido conservador ante las leyes laicas 1881-1884, en Ricardo Krebs
y otros Catolicismo y laicismo. Las bases doctrinarias del conflicto entre la Iglesia y el Estado
en Chile 1875-1885 (Ediciones Nueva Universidad, 1981), pp.76-118.

Valenzuela, Samuel, "Hacia la formación de instituciones democráticas: prácticas electorales


en Chile durante el siglo XIX", en Estudios Públicos Nº 66, 1997; disponible en
www.cepchile.cl

Cariola, Carmen y Sunkel, Osvaldo, Un siglo de historia económica de Chile 1830-1930. Dos
ensayos y una bibliografía (Madrid, Ediciones ICI 1982; Santiago, Editorial Universitaria,
1990).

Ortega Martínez, Luis, Chile en ruta al capitalismo. Cambio, euforia y depresión, 1850-1880
(LOM, 2005)

Heise, Julio, Historia de Chile. El período parlamentario, 1861-1925. Tomo 1 (Editorial


Andrés Bello, 1974) Parte 5 cap. 1.Heise, Julio, "Democracia y gobierno representativo en
el período parlamentario (Historia del poder electoral)" (Editorial Universitaria, 1982) Parte
4.

Valenzuela, Samuel, "La ley electoral de 1890 y la democratización del régimen político
chileno", en Estudios Públicos Nº 71, 1998; disponible en www.cepchile.cl

Correa Sutil, Sofía, "El pensamiento en Chile en el siglo XX. Bajo la sombra de Portales" en
Oscar Terán editor, Ideas en el siglo. Intelectuales y cultura en el siglo XX latinoamericano.
(2004)

Bauer, Arnold J., La sociedad rural chilena. Desde la conquista española a nuestros días
(Editorial Andrés Bello, 1994)

Norberto Bobbio, Nicola Matteucci y Gianfranco Pasquino, Diccionario de Política (Siglo XXI
editores, 10ª edición, 1997) la voz Liberalismo de Nicola Matteucci.

Cariola, Carmen y Sunkel, Osvaldo, Un siglo de historia económica de Chile 1830-1930. Dos
ensayos y una bibliografía (Madrid, Ediciones ICI 1982; Santiago, Editorial Universitaria,
1990) Bibliografía Obligatoria
Correa, Sofía, "Zorobabel Rodríguez, católico liberal", en Estudios Públicos N°66, 1997;
disponible en www.cepchile.cl

Correa, Sofía, et. al., Historia del siglo XX chileno (Editorial Sudamericana, 2001)

Correa, Sofía, et.al., Documentos del siglo XX chileno (Editorial Sudamericana, 2003)

Correa Sutil, Sofía, "El pensamiento en Chile en el siglo XX. Bajo la sombra de Portales" en
Oscar Terán editor, Ideas en el siglo. Intelectuales y cultura en el siglo XX latinoamericano.
(2004) Bibliografía Obligatoria.

Cristi, Renato y Ruiz-Tagle, Pablo, La República en Chile. Teoría y Práctica del


Constitucionalismo Republicano (Lom Ediciones, 2006).

Donoso, Ricardo, Las ideas políticas en Chile (Universidad de Chile, Facultad de Filosofía y
Educación, 1967)

Edwards, Alberto, La Fronda Aristocrática en Chile (Imprenta Nacional,1928).

Eyzaguirre, Jaime, Historia de las instituciones políticas y sociales de Chile (Editorial


Universitaria, 1990)

Góngora, Mario, Ensayo histórico sobre la noción de Estado en Chile en los siglos XIX y XX
(Ediciones La Ciudad, 1981).

Heise, Julio, Historia de Chile. El período parlamentario, 1861-1925. Tomo 1 (Editorial


Andrés Bello, 1974) Bibliografía Obligatoria, parte 1 y parte 5 cap. 1.

Heise, Julio, "Democracia y gobierno representativo en el período parlamentario (Historia


del poder electoral)" (Editorial Universitaria, 1982) Bibliografía Obligatoria, parte 4.

Heise, Julio, 150 años de evolución institucional (Editorial Andrés Bello, 1984)

Jocelyn-Holt, Alfredo, La Independencia de Chile. Tradición, modernización y mito (Planeta-


Ariel, 2° edición, 1999) Bibliografía Obligatoria, capítulos 8 y 9

Jocelyn-Holt, Alfredo, El peso de la noche. Nuestra frágil fortaleza histórica (Planeta- Ariel,
1997)
Jocelyn-Holt, Alfredo, "El liberalismo moderado chileno (siglo XIX)", en Estudios Públicos
N°69, 1998; disponible en www.cepchile.cl

Joignant R., Alfredo, "El lugar del voto. La ley electoral de 1874 y la invención del ciudadano-
elector en Chile", en Estudios Públicos, 81 (verano 2001), disponible en www.cepchile.cl

Ortega, Luis, editor, La Guerra Civil de 1891. Cien años hoy (Universidad de Santiago de
Chile, 1991)

Ortega Martínez, Luis, Chile en ruta al capitalismo. Cambio, euforia y depresión, 1850-1880
(LOM, 2005)

Pinto, Julio, Trabajos y rebeldías en la pampa salitrera (Santiago, Editorial Universidad de


Santiago, 1998). Bibliografía Obligatoria, cap. 1.

Salazar, Gabriel y Pinto, Julio, Historia Contemporánea de Chile. 5 volúmenes (Lom


Ediciones, 1999-2002)

Salazar, Gabriel, "Construcción de Estado en Chile (1800-1837)" (Editorial Sudamericana,


2005)

Scully, Timothy, Los partidos de centro y la evolución política chilena (Cieplan-Notre Dame,
1992)

Subercaseaux, Bernardo, Historia de las ideas y de la cultura en Chile. (Editorial


Universitaria, 1997)

Urzúa Valenzuela, Germán, Historia política de Chile y su evolución electoral (desde 1810 a
1992) (Editorial Jurídica, 1992)

Valenzuela, Samuel, "Hacia la formación de instituciones democráticas: prácticas electorales


en Chile durante el siglo XIX", en Estudios Públicos Nº 66, 1997; disponible en
www.cepchile.cl Bibliografía Obligatoria.

Valenzuela, Samuel, "La ley electoral de 1890 y la democratización del régimen político
chileno", en Estudios Públicos Nº 71, 1998; disponible en www.cepchile.cl Bibliografía
Obligatoria.
Valenzuela, Samuel, "Orígenes y transformaciones del sistema de partidos en Chile", en
Estudios Públicos Nº 58, 1995; disponible en www.cepchile.cl
PERIODOS DE LA HISTORIA DE CHILE

1.- INDEPENDENCIA DE CHILE (1810-1823)

1.1.Patria Vieja (1810-1814)

Primera Junta Nacional de Gobierno

Primer Congreso Nacional

Ley de Libertad de Vientres

Campaña de la Patria Vieja

Expedición realista de Antonio Pareja.

Expedición realista de Gabino Gaínza.

Tratado de Lircay

Expedición realista de Mariano Osorio.

Batalla de Rancagua

1.2 Reconquista (1814-1817)

Migración de las fuerzas patriotas a Mendoza

Destierro de patriotas a la isla de Juan Fernández

Formación del Ejército de los Andes

La Guerra de Zapa
1.3 Patria Nueva (1817-1823)

Batalla de Chacabuco

Declaración de la Independencia de Chile

Batalla de Maipú

Guerra a Muerte

Toma de Valdivia

Expedición Libertadora del Perú

Abdicación de Bernardo O'Higgins

2.- ORGANIZACIÓN DE LA REPÚBLICA (1823-1830)

Constitución Moralista

Conquista de Chiloé

Leyes Federales

Constitución Liberal

Revolución de 1829
3.- REPÚBLICA CONSERVADORA (1830-1861)

Constitución de 1833

Guerra contra la Confederación Perú-Boliviana

Colonización de Llanquihue y Aysén

Toma de posesión del Estrecho de Magallanes

Revolución de 1851

Revolución de 1859

4.- REPÚBLICA LIBERAL (1861-1891)

Ocupación de la Araucanía

Guerra hispano-sudamericana

Guerra del Pacífico

Promulgación de la Leyes Laicas.

Anexión de la Isla de Pascua.

Guerra Civil de 1891

5.- REPÚBLICA PARLAMENTARIA (1891-1925)

Abrazo del Estrecho

Terremoto de Valparaíso

Matanza de la Escuela Santa María de Iquique

Centenario de la Independencia de Chile y la Crisis del Centenario


Golpe de Estado de 1924

Plebiscito constitucional de 1925

6.- REPÚBLICA PRESIDENCIAL (1925-1973)

Congreso Termal

Sublevación de la Escuadra de Chile

Matanza del Seguro Obrero

Terremoto de Chillán

Ley Maldita

Terremoto de Valdivia

Reforma agraria

Reforma universitaria

Nacionalización del cobre

Golpe de Estado de 1973

7.- RÉGIMEN MILITAR (1973 - 1990)

Reforma económica de los Chicago Boys.

Violaciones de los derechos humanos del Régimen Militar.

Conflicto del Beagle y Tratado de Paz y Amistad entre Argentina y Chile.

Plebiscito constitucional de Chile de 1980.

Atentado contra Augusto Pinochet.

Plebiscito Nacional de 1988.


8.- TRANSICIÓN A LA DEMOCRACIA (1990)

Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación

Abolición de la pena de muerte

Reforma Procesal Penal

Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura

Reformas constitucionales del año 2005

Crisis del Transantiago

Proceso Constituyente

____________________ 0 _________________________
1.- INDEPENDENCIA DE CHILE (1810-1823)

Patria Vieja (1810-1814)

FACTORES Y CAUSAS DE LA INDEPENDENCIA DE CHILE.

El proceso de independencia americana obedece a distintos elementos que constituyen no


sólo factores políticos y económicos sino que también estructuras de mentalidad, que van a
gravitar en la continuidad de esquemas ideológicos y conductas sociales procedentes del
último siglo colonial, aparejado con nuevas ideas que surgen a fines del siglo XVIII y que
moldean los ánimos criollos bajo nuevas posturas de comprender y resolver la cuestión de
los súbditos americanos respecto de España.

La Independencia Americana forma parte de un proceso integral que debe asumirse como
un todo, dado que se dar origen a la propia “Nacionalidad Hispano Americana”,

Todo esto proyecta la rivalidad de españoles con criollos, pero también el comienzo de las
diferencias nacionales que van a caracterizar el siglo XIX.

Entre juntistas y separatistas se produce el choque de posiciones ideológicas y


principalmente de soluciones político – jurídicas que van a ventilarse hacia 1810, toda vez
que la invasión francesa a España en 1808 gatilló el conflicto institucional sobre la condición
de los súbditos y la igualdad jurídica con los peninsulares, en cuanto a la legitimidad de la
erección de las juntas de gobierno.

Otro aspecto es la rivalidad económica tanto en relación con la metrópoli donde la libertad
de comercio, la apertura de puertos, el quiebre del monopolio comercial no logran satisfacer
las expectativas mercantiles de los criollos, como también las disputas dentro de los
virreinatos entre distintos grupos de comerciantes llevarán a situar las complejas
controversias, por ejemplo de chilenos con peruanos.

La emancipación puede ser explicada por el juego mecánico de causas y efectos,


cuyos factores y causas pueden agruparse en dos grandes unidades:
Causas Internas

La emancipación se ve como una lucha de reivindicaciones. Ellas serían:

la deficiente administración,

la relajación de costumbres,

el régimen comercial de monopolio,

la postergación de criollos y mestizos,

el absolutismo y tiranía de la autoridad virreinal,

las restricciones culturales y otras.

Causas Externas

Tradicionalmente se ha sostenido que influyeron en el proceso de Independencia los


siguientes hechos:

la influencia de la filosofía de la Ilustración,

el influjo que ejercen en los criollos ilustrados los políticos europeos,

la influencia de la revolución francesa,

el ejemplo de la independencia de los Estados Unidos,

la participación activa de los jesuitas expulsados.

A estos antecedentes se deben agregar, la invasión de Napoleón en España


y la reacción que provoca en América el absolutismo de Fernando VII, luego de su
restauración en 1814.
Algunas precisiones:

La independencia no se consuma con la constitución de las Juntas, tampoco en el


momento en que ella se proclama. Se desarrolla en un período de aproximadamente catorce
años y se logra cuando los ejércitos criollos derrotan a las fuerzas realistas en las llamadas
“'guerras de independencia”. Estas guerras tienen el carácter de guerra civil: se enfrentan
casi siempre peninsulares y criollos. Este hecho explica que la lucha armada haya sido
relativamente larga, a pesar de haber enviado España a América escasos contingentes
militares.

Los hechos políticos y militares, definitorios del proceso, se enmarcan en tres


momentos, originados por tres coyunturas histórico - políticas, modificadoras de las
estructuras vigentes en el tiempo. Ellas son:

La crisis monárquica de 1808, provocada por la abdicación de Fernando VII y Carlos IV a


favor de Napoleón, cuya reacción es el movimiento juntista en España y América. Desde
una actitud fidelista se deriva poco a poco al autonomismo separatista. (Las abdicaciones
de Bayona tuvieron lugar el 5 de mayo de 1808 en la ciudad francesa de Bayona. Es el
nombre por el que se conocen las renuncias sucesivas de los reyes Carlos IV y su hijo
Fernando VII al trono de España en favor de Napoleón Bonaparte. El emperador francés,
poco después, cedió tales derechos a su hermano José Bonaparte, quien reinó con el nombre
de José I).

La reacción absolutista de 1814 se manifiesta con la vuelta al poder de Fernando VII, quien
desconoce la Constitución Liberal de 1812 e inaugura la política de pacificación de América.
La respuesta americana al absolutismo fernandino será la propagación del ideal
independentista a sectores sociales hasta ese instante ajenos al movimiento.

El movimiento liberal español de 1820, con el levantamiento de Riego, vuelve a imponer la


constitución de 1812, desbarata el intento borbónico de enviar fuertes contingentes militares
para pacificar América y causa la reacción de los grupos conservadores políticamente
predominantes en México y Lima; estos grupos, para no someterse a los liberales españoles,
favorecen ahora la independencia de sus regiones.

El movimiento independentista es localista. Se fragua en las capitales de los centros


administrativos indianos por la gravitación que ejercen los Cabildos de las ciudades
metropolitanas. Su manifestación histórica posterior será la formación de Estados nacionales
sobre supuestos sociales regionales.

Este proceso de independencia, también significó un enfrentamiento de grupos sociales


internos de cada territorio, pugna entre criollos y españoles y fue una guerra civil.

Como trasfondo podemos situar determinados otros factores exógenos, como por ejemplo,
las ideas de la Enciclopedia Francesa, donde Rosseau, Montesquieu van a impregnar los
nuevos aires constitucionalistas en los ensayos institucionales que se dejan sentir a partir
de 1811 y 12 en nuestro país.

En el mismo ámbito hay que insertar la influencia norteamericana, fundamentalmente en el


ejemplo de la viabilidad del testimonio republicano, como también de las gravitaciones
liberales que más tarde provendrán del influjo español.

Entre 1810 y 1814 encontramos el efecto de las ideas francesas, en ideal separatista, la
repercusión de las 13 colonias y los primeros ensayos constitucionales de Chile.

Entre 1814 y 1818 la reconquista, restauración del viejo régimen y la lucha patriótica

Desde 1818 a 1822 los ensayos de aprendizaje político, en torno de Bernardo O’Higgins,
desde una visión de considerar la independencia bajo formulas de garantías constitucionales
hasta el autoritarismo militar.

A partir de 1822 con la ocupación de los últimos reductos realistas, se delimitan las fronteras
y se forman distintas experiencias constitucionales, que reorganizan el territorio nacional,
bajo formas unitarias y una embrionaria visión federalista, hasta fijar la institucionalidad
política desde un Director Supremo a un Presidente de la República, con el episodio de
cargo de Vicepresidente de la República.
En consecuencia, el proceso de independencia nacional concluye en 1825 con la Batalla de
Ayacucho que significó el fin del imperio español en América del Sur.

1.- INDEPENDENCIA DE CHILE (1810-1823)

Patria Vieja (1810-1814)

El movimiento revolucionario suscitado en la Capitanía General de Chile sigue un


desarrollo semejante al de las otras regiones de América. Desde el triunfo del autonomismo
en el Cabildo Abierto del 18 de Septiembre de 1810, con pretensiones cada vez más
separatistas, hasta la batalla de Rancagua en 1814.

La Patria Vieja, por efecto de haberse experimentado en el gobierno autónomo, prende el


sentimiento emancipador en el grupo criollo con aspiraciones políticas, a la vez que hace
suyo el ideal republicano.

Cuando acontecían los hechos originarios de la crisis monárquica, gobernaba el Reino


de Chile, en forma interina, don Antonio García Carrasco. Su falta de habilidad política e
imprudencia le enajenaron la voluntad de la Real Audiencia primero y del Cabildo de
Santiago enseguida. Medidas tan autoritarias como el apresamiento de tres patricios, Juan
A. Ovalle, José A. de Rojas y Bernardo de Vera y Pintado, llevaron a la aristocracia
santiaguina a exigir su renuncia el 16 de agosto de 1810. Lo reemplazó don Mateo de Toro
y Zambrano, Conde de la Conquista, anciano ya, sujeto a toda suerte de influencias, quien
convocó a un Cabildo abierto al pueblo de Santiago para resolver en vista de la difícil
situación que se vivía.
En el cabildo triunfa la tendencia partidaria del gobierno autónomo, frente a los escasos
partidarios de la sujeción al Consejo de Regencia. Se crea entonces, una Junta de Gobierno.
Esta se declaró fiel a Fernando VII y tomó medidas efectivas:

a) Organizó las primeras milicias para defender el reino.

b) Decretó la libertad de comercio con naciones aliadas de España y neutrales.

c) Convocó a un Congreso Nacional.

Hacia fines de 1810, la ideología claramente revolucionaria se hace presente con la llegada
del fraile de la buena muerte, Camilo Henríquez. Inspirado en la filosofía de la ilustración,
en la ideas del Contrato Social de Rosseau, en el ejemplo de los Estados Unidos, postula la
separación.

EL PRIMER CONGRESO NACIONAL.

El 4 de julio de 1811, se instaló el Congreso Nacional. Predominan los patriotas


moderados, esto es, quienes desean reformas sin romper con la metrópolis. El grupo
conceptuado de exaltados, de pretensiones separatistas, quedaba en franca minoría. Como
medidas tomadas por el Congreso se anotan:

a) Creación de la Provincia de Coquimbo.

b) Ley de libertad de vientres, por la cual se declaraba libres a los hijos de esclavos
nacidos en el territorio y se prohibía el tráfico de negros en el país.

c) Supresión de derechos parroquiales.

d) Envío de Francisco Antonio Pinto como agente diplomático ante la Junta de Buenos
Aires.

La actitud moderada de los congresales fue aprovechada por José Miguel Carrera,
llegado a Valparaíso en febrero de 1811, quien traía pretensiones de darle al movimiento
un cariz más avanzado. Por sucesivos golpes de fuerza (Oct., Nov. y Dic. de 1811), apoyado
por elementos exaltados, logró clausurar el Congreso y establecer un gobierno personal.

LEY DE LIBERTAD DE VIENTRES

Gracias a la iniciativa de Manuel de Salas, nuestro país se convierte en el segundo


país en el mundo en tomar esta medida.

Esta ley consistió en liberar a todos los hijos de esclavos que nacieran desde ese
mismo 11 de octubre de 1811. Igualmente, ese decreto agregaba que todos los esclavos
que permanezcan más de seis meses en el territorio o que estuviesen de paso quedarán
libres.

Es así como la esclavitud en nuestro país empezó a reducir el número de esclavos,


hasta que en un 11 de octubre, pero del año 1823, José Miguel Infante presenta al congreso
un proyecto de ley para abolir totalmente la esclavitud. Así, se libera a un centenar de
personas que aún eran esclavas en nuestro territorio.

Actualmente, nuestra constitución política se refiere a este tema como una forma de
homenajear a José Miguel Infante, indicando en su Artículo 19, N°2 que"La igualdad ante
la ley. En Chile no hay esclavos y el que pise su territorio queda libre. Hombres y mujeres
son iguales ante la ley ".

EL TRATADO DE LIRCAY

El Tratado de Lircay de 3 de mayo de 1814 fue firmado entre el jefe de las fuerzas
realistas estacionadas en la Intendencia de Concepción, el brigadier Gabino Gaínza y los
representantes del gobierno chileno del Director Supremo Francisco de la Lastra, los
brigadieres Bernardo O'Higgins y Juan Mackenna.

Por este acuerdo, de 16 artículos, los patriotas reafirmaban su lealtad a Fernando


VII, se definía a Chile como parte integrante de la monarquía española, se comprometían a
ayudar a España en la medida de sus posibilidades, a enviar diputados a las Cortes de Cádiz
y a retroceder sus tropas al norte del río Lontué. En el preámbulo del documento se
condenaba (sin nombrarlos) a los hermanos Carrera, como los culpables de la ruina del
reino del Chile.

Como parte del cumplimiento del tratado, los patriotas chilenos abandonaron el uso
de la Bandera de la Patria Vieja, retomando el estandarte español.

Los realistas, por su parte, aceptaron el gobierno provisional chileno, retiraron el


grueso de sus fuerzas de la Provincia de Concepción, y se comprometieron a no pasar el río
Maule ni entrar en la ciudad de Talca.

Además se acordaban diversas otras disposiciones prácticas relativas al fin de las


hostilidades, como el canje de prisioneros de guerra, la restitución de bienes confiscados
por el gobierno chileno y el pago de los costo+s a quienes habían hecho aportes a las
fuerzas de Gaínza.

GOBIERNO DE JOSÉ MIGUEL CARRERA (1811- 1813).

Carrera ejecutó varios actos tendientes a conseguir un gobierno independiente.


Adquirió una imprenta. Con ella Camilo Henríquez editó “La Aurora de Chile”, primer
periódico nacional. Tenía como objetivo principal popularizar el pensamiento de Carrera: la
independencia Absoluta. Allí se ataca a España, se elogia a Estados Unidos; se niega el
origen divino de los reyes y se proclama la soberanía popular.

En Chile, este proceso se produjo desde 1811 y se desarrolló en forma diferente al


resto de los países sudamericanos, ya que fue un camino distinto al caudillismo existente
en otros países, los cuales han llegado a tener hasta quince cartas fundamentales. Chile
vivió un período de anarquía, donde se sucedieron ensayos constitucionales, tratando de
imitar modelos extranjeros, pero dicho período fue breve. Posteriormente se redacta la
Constitución de 1833, que se mantuvo prácticamente durante un siglo.
REGLAMENTO CONSTITUCIONAL 1811 (14/08/1811)

Consta de 19 artículos. Constituye una de las primeras normas dictadas por la Junta de
1810, es el “REGLAMENTO PARA EL ARREGLO DE LA AUTORIDAD EJECUTIVA PROVISORIA
DE CHILE DE 1811”, del 14 de julio, considerado como unos de los primeros ensayos
constitucionales del país.

Establecía un gobierno ejecutivo colegiado de tres miembros denominada AUTORIDAD


EJECUTIVA PROVISORIA DE CHILE, y un Congreso unicameral, establecido el 4 de julio de
1811, que desde el momento de su instalación, la Junta queda disuelta, por lo que el
Congreso ejerce las funciones ejecutivas y legislativas, con una marcada tendencia
conservadora leal al Rey de España. Reconoce la soberanía del rey de España.

E el 4 de septiembre de 1811, don José Miguel Carrera, encabeza un golpe contra el


Congreso, puso término a este Reglamento el 4 de Noviembre de 1811. La autoridad máxima
recae en el Congreso Nacional.

REGLAMENTO PARA EL ARREGLO DE LA AUTORIDAD EJECUTIVA PROVISORIA DE CHILE


SANCIONADO EN 14 DE AGOSTO DE 1811

1ª. El Congreso, como único depositario de la voluntad del reino, conocerá


exclusivamente del cumplimiento o infracción general de la ley.

2ª. Por la misma razón no pertenecerá al Ejecutivo el vice patronato real que antes
ejercía.

3ª. Las relaciones exteriores son privativas del Estado en su entable, cuya representación
sólo reside en el Congreso; por consiguiente y para atender tan delicado objeto con el
interés a que empeña, deberá corresponder al Congreso la apertura de la correspondencia
exterior, llevándola al Poder Ejecutivo, como la interior del reino que consultará sólo en los
casos de gravedad.

4ª. El Congreso por la representación inmediata y general del Reino, asegura su


confianza y demanda la seguridad de opinión que se reserva el mando de las armas,
correspondiendo a su Presidente, por delegación especial, dar el «santo», que deberá
mandarlo cerrado por el ayudante de plaza al del Ejecutivo, para que de éste lo reciba el
sargento mayor.

5ª. No podrá el Ejecutivo provisorio disponer de las tropas de ejército y milicias en


servicio extraordinario, ni extraerlas de sus partidos sin aprobación del Congreso, el que se
reserva proveer los empleos de este ramo desde capitanes inclusive, y todo grado militar.

6ª. En los demás ramos hará la provisión el Ejecutivo a consulta de los jefes, y las de
éstos las pasará en ternas al Congreso, para que vea si están o no arregladas a la ley, el
que las devolverá con su declaración, que será última para que a nombre del Rey libre el
Poder Ejecutivo los respectivos despachos que contendrán en su relato y a la letra la
resolución del Congreso, pasándose igualmente y para el propio fin los decretos de empleos
cuya dotación exceda de cuatrocientos pesos anuales.

7ª. Los recursos sobre provisiones de la Autoridad Ejecutiva serán admisibles en el


Congreso, en primer orden y para declarar si son o no conformes a la ley, instaurándose
con arreglo a ella y bajo su pena, reponiéndose al agraviado si intentare con justicia.

8ª. Sólo es dado a la autoridad del Congreso crear y suprimir empleos, aumentar o
minorar dotaciones, remover empleados y otorgar honores de gracia, exigiéndolo las
circunstancias.
9ª. La Autoridad Ejecutiva no conocerá causas de justicia entre partes, sino las de puro
Gobierno, Hacienda y Guerra.

10. Las de Hacienda tendrán sus alzadas ordinarias a la Junta de ella y sala de ordenanza,
y las de Guerra por el recurso de la ley de Indias, con la variación que en adelante formarán
la Junta de Hacienda, el Vicepresidente del Congreso, Ministro más antiguo del Tribunal de
Justicia, Contador Mayor, Ministro de Real Hacienda y Fiscal; y la alzada de guerra el mismo
Vicepresidente, Subdecano del Tribunal de Justicia y Auditor de Guerra.

11. Las provisiones, resoluciones y sentencias del Poder Ejecutivo se suscribirán, para
ser cumplidas, por todos los miembros que la compongan, o al menos por dos, anotándose
en ellas mismas, con fe del Secretario, el que por enfermo o ausente no lo hace.

12. La arbitrariedad con que se ha usurpado el crimen de alta traición y su naturaleza


misma, exigen que conozca de estos delitos el Poder Ejecutivo, sin quedar enteramente
inhibido este Congreso para formar causas de esta clase, cuando lo tenga por conveniente.
Para la ejecución de penas capitales falladas por cualquier poder o juzgado del Reino, se
impetrará del Congreso el permiso instruido.

13. La Autoridad Ejecutiva llenará su objeto conforme a la ley vigente; se compondrá de


tres miembros con su Secretario y Asesor; y entre aquéllos turnará la presidencia por meses,
siendo su dotación dos mil pesos anuales, y las de éstos mil quinientos.

14. Las recusaciones de estos Vocales se arreglarán a la ley que detalla las de los
Oidores.
15. La Autoridad Ejecutiva librará sobre el tesoro público todos los gastos ordinarios y
extraordinarios que, siendo ejecutivos, no excedan de dos mil pesos, acordando los mayores
con el Congreso que, por los sagrados objetos a que lo liga su representación, debe
empeñarlo con preferencia.

16. Los Vocales nombrados al Despacho Ejecutivo jurarán en el Congreso fidelidad a los
grandes objetos que éste proclama y sostiene, y la pureza de sus operaciones, de las que
son responsables al reino por las resultas de la residencia que se les tomará, al arbitrio de
sus representantes en el tiempo y diputación que deleguen.

17. El Poder Ejecutivo provisorio en cuerpo tendrá de palabra y por escrito tratamiento
de Excelencia y se le harán honores de capitán general de provincia, y cada miembro en
particular el de Señoría dentro de la sala.

18. Asistirá en cuerpo a toda función de tabla.

19. Su duración es pendiente de la Constitución del caso; y no forma ésta en el perentorio


término de un año, expirará en él La comisión.

Tendrálo así entendido la Autoridad Ejecutiva para su puntual cumplimiento, y lo hará


publicar y circular para que llegue a noticia de todos.- Santiago de Chile y 8 de agosto de
1811.- Manuel Pérez Cotapos, Presidente del Alto Congreso.- Doctor Juan Cerdan,
Vicepresidente.- Agustín de Urrejola.--José Antonio Soto y Aguilar.- Domingo Díaz de
Salcedo.- Luis Urréjola.- Doctor Juan Infante.- El Conde de Quinta Alegre.- Manuel
Fernández.- -Agustín de Eyzaguirre.- Doctor Gabriel José de Tocornal, -Marcos Gallo.- Mateo
Vergara- Francisco Ruiz de Tagle.- José Nicolás de la Cerda.- Doctor Juan José de
Echeverría.- Fernando Errázuriz.- Juan José Goycolea.- Doctor Joaquín de Echeverría.-
Estanislao Portales. -Javier Errázuriz.- José Miguel Infante, Diputado Secretario.

DECRETO

Santiago, 14 de agosto de 1811. Guárdese y cúmplase lo contenido en el presente


Reglamento; y respecto de haberse publicado ya por bando de orden de S. A., en la mañana
de este día, tómese razón en los Tribunales, oficinas y cuerpos militares; sáquense
prontamente por la escribanía los testimonios necesarios para circular a todo el reino; y
archívese original en la Secretaría.- Calvo Encalada.- Aldunate.- Benavente.-Bórquez.

Críticas:

Se trata de un texto breve y de escasa técnica.

Se establece que el Congreso debía prestar su consentimiento a la mayor parte de los actos
de la Junta de Gobierno. Además le corresponde ejercer el vicepatronato real sobre la
Iglesia, el control supremo sobre las armas y conducir las Relaciones Exteriores del reino de
Chile.

La Autoridad Ejecutiva Provisoria radica en 3 miembros elegidos por el Congreso, que se


turnarían la presidencia por meses.

Las desaveniencias entre los distintos bandos que conformaron el Congreso Nacional, la
rivalidad existente entres las tres provincias y los sucesivos golpes militares de José Miguel
Carrera, terminarían por ponerle fin a la vigencia de este efímero texto legal, el 2 de
diciembre de 1811.
REGLAMENTO CONSTITUCIONAL 1812(27/10/1812):

Rigió en Chile entre el 27 de octubre de 1812 hasta el 6 de octubre de 1813 además


se procedió la Fundación del Instituto Nacional por un derecho de la Junta de gobierno. Fue
promulgado por José Miguel Carrera y elaborado con una importante participación del cónsul
estadounidense Robert Poinsett

Constaba de un preámbulo y 27 artículos. Aunque en su prefacio declara la fidelidad


del país a la monarquía española, durante la ausencia del rey Fernando VII debido a su
captura por las tropas de Napoleón Bonaparte, es considerado como el primer texto oficial
que manifestaba una velada declaración de independencia de Chile.

Este texto plasma las ideas de los llamados "exaltados" liderados por Carrera y son
el primer indicio de un movimiento emancipador, contrario a aquellos que creían en un
gobierno provisional hasta la restauración monárquica. Al comienzo del texto se presenta
una fuerte crítica al gobierno colonial.

El Ejecutivo estaba compuesto por 3 miembros denominado “JUNTA SUPERIOR


GUBERNATIVA”.

El poder legislativo era unicameral, y estaba compuesto por un SENADO DE 7


MIEMBROS, los cuales se renovaran cada 3 años (senado consultivo).-

Por una parte reconoce la soberanía del rey, pero a la vez establece que ningún
decreto u orden emanada de una autoridad extranjera tendrá efecto en Chile.

Los puntos más relevantes de este reglamente, entre otros, son:

"la religión católica, apostólica es y será siempre la de Chile";

“Gobernará la Junta Superior Gubernativa";

"Si los gobernantes dieren un paso contra la voluntad declarada en la Constitución, volverá
el poder a manos del pueblo".
En materia de garantías, están casi todos los preceptos relativos a la libertad personal, de
imprenta, igualdad de derechos en favor de todo habitante. Este reglamento tuvo una vida
corta, fue derogado el 6 de octubre de 1813.

REGLAMENTO CONSTITUCIONAL PROVISORIO de 1812.

Artículo Primero. La religión Católica Apostólica es y será siempre la de Chile.

Artículo 2º. El pueblo hará su Constitución por medio de sus representantes.

Artículo 3º. Su Rey es Fernando VII, que aceptará nuestra Constitución en el modo mismo
que la de la Península. A su nombre gobernará la Junta Superior Gubernativa establecida
en la capital, estando a su cargo el régimen interior y las relaciones exteriores. Tendrá en
cuerpo el tratamiento de Excelencia, y sus miembros el de los demás ciudadanos. Serán
tres, que solo durarán tres años, removiéndose uno al fin de cada año, empezando por el
menos antiguo. La presidencia turnará por cuatrimestres en orden inverso. No podrán ser
reelegidos hasta los tres años. Todos serán responsables de sus providencias.

Artículo 4º. Reconociendo el pueblo de Chile el patriotismo y virtudes de los actuales


gobernantes, reconoce y sanciona su elección; mas, en el caso de muerte o renuncia, se
procederá a la elección por medio de una suscripción en la capital, la que se remitirá a las
provincias y partidos para que la firmen y sanciones. Las ausencias y enfermedades de los
vocales se suplirán por el Presidente y Decano del Senado.

Artículo 5º. Ningún decreto, providencia u orden, que emane de cualquier autoridad o
tribunales de fuera del territorio de Chile, tendrá efecto alguno; y los que intentaren darles
valor, serán castigados como reos del Estado.

Artículo 6º. Si los gobernantes (lo que no es de esperar) diesen un paso contra la voluntad
general declarada en la Constitución, volverá al instante el poder a las manos del pueblo,
que condenará tal acto como un crimen de lesa patria, y dichos gobernantes serán
responsables de todo acto que directa o indirectamente exponga al pueblo.

Artículo 7º. Habrá un Senado compuesto de siete individuos, de los cuales el uno será
Presidente, turnándose por cuatrimestres, y otro Secretario. Se renovará cada tres años, en
la misma forma que los vocales de la Junta. Sin su dictamen no podrá el gobierno resolver
en los grandes negocios que interesen la seguridad de la patria, y siempre que lo intente,
ningún ciudadano armado o de cualquiera clase deberá auxiliarlo ni obedecerle, y el que
contraviniese será tratado como reo de Estado. Serán reelegibles.

Artículo 8º.Por negocios graves se entiende: imponer contribuciones; declarar la guerra;


hacer la paz; acuñar moneda; establecer alianzas y tratados de comercio; nombrar
enviados; trasladar tropas, levantarlas de nuevo; decidir las desavenencias de las provincias
entre sí, o con las que están fuera del territorio; proveer los empleos de gobernadores y
jefes de todas clases; dar patentes de corso; emprender obras; crear nuevas autoridades;
entablar relaciones exteriores; y alterar este Reglamento. Las facultades que no le están
expresamente declaradas en esta Constitución quedan reservadas al pueblo soberano.

Artículo 9º. El Senado se juntará por lo menos dos veces en la semana, o diariamente, si
las circunstancias lo exigiesen. Estará exento de la autoridad del gobierno en el ejercicio de
sus funciones.

Artículo 10º. A la creación del Senado se procederá en el día por suscripción, como para la
elección de los vocales del gobierno. El Senado será representativo, correspondiendo dos a
cada una de las provincias de Concepción y Coquimbo y tres a la de Santiago. Por ahora,
los electos son suplentes.

Artículo 11º. El Senado residenciará a los vocales de la Junta y los juzgará en unión del
Tribunal de Apelaciones. Cualquiera del pueblo podrá acusarlos por traición, cohecho y otros
altos crímenes; de los que siendo convencidos, los removerá el mismo Senado, y los
entregará a la justicia ordinaria para que los castigue según las leyes. Promoverá la reunión
del Congreso. Tres senadores reunidos formarán el Senado. Llevará diarios de los negocios
que se trate y de sus resoluciones, en la inteligencia que han de ser responsables de su
conducta.

Artículo 12º. Los cabildos serán electivos, y sus individuos se nombrarán por suscripción.

Artículo 13º. Todas las corporaciones, jefes, magistrados, cuerpos militares, eclesiásticos y
seculares, empleados y vecinos harán, con la posible brevedad, al excelentísimo gobierno
juramento solemne de observar este reglamento constitucional hasta la formación de otro
nuevo en el Congreso Nacional de Chile; de obedecer al gobierno y autoridades constituidas;
y concurrir eficazmente a la seguridad y defensa del pueblo, bajo la pena de extrañamiento;
y en el caso de contravención después de prestado el juramento, se impondrá a los
transgresores las penas de reos de alta traición. Los vocales del gobierno prestarán igual
juramento, en la parte que les toca, en manos del Senado. En las capitales de las provincias
y partidos, se prestará el juramento ante los jueces territoriales, verificándolo éstos primero
en los cabildos.

Artículo 14º. Para el despacho de los negocios habrá dos secretarios, el uno para los
negocios del reino y el otro para las correspondencias de fuera.

Artículo 15º. El gobierno podrá arrestar por crímenes contra el Estado; pero el reo podrá
hacer su recurso al Senado, si dentro de tres días no se le hiciere saber la causa de su
prisión, para que éste vea si la hay suficiente para continuarla.

Artículo 16º. Se respetará el derecho que los ciudadanos tienen a la seguridad de sus
personas, casas efectos y papeles; y no se darán órdenes sin causas probables, sostenidas
por un juramento judicial, y sin designar con claridad los lugares o cosas que se han de
examinar o aprehender.

Artículo 17º. La facultad judiciaria residirá en los tribunales y jueces ordinarios. Velará el
gobierno sobre el cumplimiento de las leyes y de los deberes de los magistrados, sin
perturbar sus funciones. Queda inhibido de todo lo contencioso.

Artículo 18º. Ninguno será penado sin proceso y sentencia conforme a la ley.

Artículo 19º. Nadie será arrestado sin indicios vehementes de delito, o a lo menos sin una
semiplena prueba. La causa se hará constar antes de tres días perentorios; dentro de ellos
se hará saber al interesado.

Artículo 20º. No podrá estar ninguno incomunicado después de su confesión, y se tomará


precisamente dentro de diez días.

Artículo 21º. Las prisiones serán lugares cómodos y seguros para la detención de las
personas contra quienes existan fundados motivos de recelo, y mientras duren éstos, y de
ningún modo servirán para mortificar a los delincuentes.
Artículo 22º. La infamia afecta a las penas, no será trascendental a los inocentes.

Artículo 23º. La imprenta gozará de una libertad legal; y para que ésta no degenere en
licencia nociva a la religión, costumbres y honor de los ciudadanos y del país, se prescribirán
reglas por el Senado.

Artículo 24º. Todo habitante libre de Chile es igual de derecho; sólo el mérito y virtud
constituyen acreedor a la honra de funcionario de la patria. El español es nuestro hermano.
El extranjero deja de serlo si es útil; y todo desgraciado que busque asilo en nuestro suelo,
será objeto de nuestra hospitalidad y socorros, siendo honrado. A nadie se impedirá venir
al país, ni retirarse cuando guste con sus propiedades.

Artículo 25º. Cada seis meses se imprimirá una razón de las entradas y gastos públicos,
previa anuencia del Senado.

Artículo 26º. Sólo se suspenderán todas estas reglas invariables en el caso de importar a la
salud de la patria amenazada; pero jamás la responsabilidad del que las altere sin grave
motivo.

Artículo 27º. Este reglamento constitucional se remitirá a las provincias para que lo
sancionen, y se observará hasta que los pueblos hayan manifestado sus ulteriores
resoluciones de un modo más solemne, como se procurará a la mayor brevedad. Se dará
noticia de esta Constitución a los gobiernos vecinos de América y a los de España.

REGLAMENTO CONSTITUCIONAL 1814 (17/03/1814:

Consta de 13 artículos. Promulgado el 17 de marzo.

Crea un Ejecutivo unipersonal, con el nombre de Director Supremo (Francisco de la Lastra),


que duraría 18 meses, al término de los cuales quedaba sujeto a juicio de residencia, ya al
cual se asignan amplias atribuciones con el objeto de hacer frente el problema bélico
existente. Como Director supremo, es nombrado el coronel Francisco de la Lastra,
gobernador de Valparaíso.
Existe un Senado Consultivo, compuesto por 7 miembros (4 años), elegidos por el Director
Supremo.

Con este reglamento el Senado perdió su carácter representativo, transformándose en un


organismo meramente consultivo. Fue suspendido en octubre de 1814 con la Reconquista.

Después de un largo conflicto entre patriotas y realistas, se logra a principios de 1817 el


triunfo militar que comienza a consolidar, finalmente, la idea y el sentimiento de
independencia, la cual es proclamada por Bernardo O’Higgins el 12 de febrero de 1818.

REGLAMENTO PARA EL GOBIERNO PROVISIONAL (17 de Marzo de 1814)

Artículo Primero. Las críticas circunstancias del día obligaron a concentrar el Poder Ejecutivo
en un individuo, con el título de Director Supremo, por residir en él las absolutas facultades
que ha tenido la Junta de Gobierno en su instalación de 18 de Septiembre de 1810.

Artículo 2. Por tanto, sus facultades son amplísimas e ilimitadas, a excepción de tratados de
paz, declaraciones de guerra, nuevos establecimientos de comercio y pechos o
contribuciones públicas generales, en que necesariamente deberá consultarse y acordarse
con el Senado.

Artículo 3. Su tratamiento será el de Excelencia, y usará para distintivo una banda de color
encarnado con flecos de oro, según acordó la Junta de Corporaciones.

Artículo 4. La escolta y honores deberán ser de un Capitán General, sin que, por motivo
alguno, pueda dejar de usar de ellos, por ceder en desdoro de la alta dignidad y empleo
que se le ha conferido.

Artículo 5. La duración será de 18 meses, y concluido este término, la Municipalidad, que


para entonces deberá estar dirigida por el pueblo, uniéndose al Senado, acordará sobre su
continuación o nueva elección.

Artículo 6. Ésta deberá hacerse por aquella autoridad en que se hallare concentrado el poder
y representación del pueblo.
Artículo 7. En caso de ausencia o enfermedad, sucederá el Gobernador-Intendente de
provincia, y lo mismo por su fallecimiento, mientras se procede a nuevas elecciones, que no
deberán demorar más de tres días después de publicada su muerte.

Artículo 8. Concluido el término de su gobierno, quedará sujeto a residencia, y el juez de


ella será elegido por el Congreso, si está convocado o próximo a convocarse, y de no, por
las corporaciones.

Artículo 9. Por ahora, atendidas las circunstancias del erario, solo gozará el sueldo de cuatro
mil pesos, que se le enterarán sin descuento con cese de otro por razón de empleo o grado,
y con calidad de aumentarlo a proporción de la dignidad y distinción del empleo.

Artículo 10. El Intendente de Provincia despachará, como hasta ahora, con su asesor, que
será también Auditor de Guerra. Su duración, la del Supremo Director; el sueldo, dos mil
pesos; uno y otro con la misma calidad; su asiento en Cabildo, presidiéndolo. El
Excelentísimo señor Director despachará con sus tres secretarios de gobierno, hacienda y
guerra, elegidos en Junta de Corporaciones.

Artículo 11. La duración de estos empleos como la del Asesor y Auditor de Guerra, será de
cinco años, al menos que por algún justo motivo deban ser removidos, sin que haya
inconveniente para reelegirlos según sus méritos.

Artículo 12.El sueldo de éstos será por ahora de un mil doscientos pesos, sin descuento
alguno; y en el caso que la patria pague del fondo público alguno de estos empleados por
otro motivo, se le enterará aquella cantidad sobre el sueldo que goce.

Artículo 13.El asiento en funciones públicas será el de huéspedes en Cabildo, entre las
justicias ordinarias.

Habrá un Senado compuesto de siete individuos, que se elegirán por el Excelentísimo señor
Director, de la propuesta en terna que le hará la Junta de Corporaciones.

Al efecto, esta elegirá veintiún individuos de las calidades necesarias para aquella
magistratura y los pasará en lista al supremo gobierno para el nombramiento de los siete
senadores.
La duración de éstos será la de dos años. Al cabo de ellos se elegirán cuatro en los mismos
términos que ahora se haga la de todos, y, al año siguiente, los tres estantes, debiendo salir
primero los más antiguos.

De este cuerpo será elegido uno Presidente y otro Secretario, variándose cada cuatro meses
por nuevas elecciones.

Su asiento en funciones públicas será inmediato al Excelentísimo señor Director, y


concurrirán solo al Presidente y el Secretario.

Su servicio será sin más sueldo que la gratitud de la patria.

La policía interior de la sala de este cuerpo en su despacho, será la misma que tuvo el
antiguo Senado, y juntos tres de sus vocales por ausencia o cualquier impedimento de los
demás, podrán hacer sus acuerdos.

Su tratamiento en cuerpo será de Señoría, y en particular, ninguno; y antes de entrar en


posesión de sus empleos, deberán hacer el juramento de fidelidad, sigilo, etc., en manos
del excelentísimo Supremo Director.- Santiago y Marzo 15 de 1814.

Doctor José Antonio Errázuriz.- Francisco Antonio Pérez.- José María Rozas.- Camilo
Henríquez.- Andrés Nicolás Orjera.
Reconquista (1814-1817) (Restauración Absolutista)

La Reconquista es el nombre del periodo de la Historia de Chile que comienza con la


Batalla de Rancagua el 1 y 2 de octubre de 1814 y termina con la victoria patriota en la
Batalla de Chacabuco el 12 de febrero de 1817.

Durante este lapso, los defensores del Imperio español restablecieron su dominio en
Chile después de que dicho país se desprendiera de la Corona española, instalara su Primera
Junta Nacional de Gobierno (1810) la primera institución de autogobierno en Chile, creara
el Primer Congreso Nacional de Chile (1811) y posteriormente eligió al primer Director
Supremo, don Francisco de la Lastra (1814). Los patriotas trataron de expandir las ideas
independentistas en los sectores populares por motivo de la creciente influencia realista
española, función llevada a cabo por la acción guerrillera de Manuel Rodríguez.

Autores como Julio Heise o Jaime Eyzaguirre prefieren llamar a este periodo
“Restauración absolutista”, al considerar que se trató solamente del retorno del bando
realista al poder de los chilenos.

Después del Desastre de Rancagua: Al saber el resultado de esta, muchos patriotas


decidieron reunir aquellas pertenencias que podían llevar y comenzaron su exilio en
Mendoza. Los soldados que salieron vivos de Rancagua, resguardaban la caravana de
mujeres y niños en el ascenso de Los Andes.

Sin embargo, las grandes diferencias entre Bernardo O'Higgins y José Miguel Carrera
no acabaron con la batalla de Rancagua; al llegar a Cuyo, los recibió el gobernador
intendente, don José de San Martín, amigo de O´Higgins y miembro de la Logia Lautarina,
quien decidió enjuiciar a los hermanos Carrera y sus seguidores en Buenos Aires, por la
muerte de Juan Mackenna, muerto en un duelo a manos de Luis Carrera, uno de los más
destacados colaboradores de O'Higgins.

Restauración del antiguo régimen: A partir del 9 de octubre de 1814, con el gobierno
de Mariano Osorio, se restablecieron las instituciones coloniales. Osorio recibió órdenes del
virrey de ser el encargado de la seguridad del reino, el capitán del Regimiento Talavera de
la Reina, Vicente San Bruno, no lo toleró.
Se crearon los “Tribunales de Vindicación”, a los que debieron asistir todos los
patriotas y todos los sospechosos de haber colaborado con ellos. Si se les encontraba
culpables, debía pagar una multa, y, si el cargo era mayor, se les apresaba para luego ser
desterrados a Juan Fernández. En noviembre de 1814, zarpó un barco desde Valparaíso
llevando más de 200 desterrados, hasta ser rescatados en 1817. A aquellos patriotas que
se exiliaron en Mendoza les fueron confiscados sus bienes.

En febrero de 1815, San Bruno fingió abrir la cárcel para que los patriotas escapasen,
pero afuera les esperaba un pelotón de fusileros que acabó con las vidas patriotas. Este
acto llenó de indignación hasta al más realista. En vista de esto, Osorio reabrió la Real
Audiencia y más tarde la Real Universidad de San Felipe, derogó los decretos promulgados
durante la Patria Vieja (1810-1814) y eliminó las instituciones creadas en ese periodo.

Debido a conflictos con el virrey José Fernando de Abascal (1806-1816), Osorio fue
destituido de su cargo de gobernador (1815) y se designó a Casimiro Marcó del Pont.

Marcó del Pont hizo buena amistad con San Bruno, a quien puso en el cargo de
presidente del Tribunal de Vigilancia y seguridad pública, estableciendo una red de espionaje
que impuso el terror en Santiago. El nuevo gobernador llegó a prohibir moverse dentro del
país sin su autorización.

Clausuró las denominadas “chinganas”, lugares donde el pueblo comía, bebía y


bailaba. Asustado por los secretos sobre una expedición libertadora de O'Higgins y las
actividades guerrilleras de Manuel Rodríguez, puso precio a su cabeza.

Los gobernantes españoles fueron sumamente violentos, por lo que se profundizó el


sentimiento patriótico provocando la formación del “Ejército de Los Andes”, liderado por el
capitán general San Martín con la ayuda de los brigadieres O'Higgins, Miguel Soler y Juan
Gregorio de Las Heras.

Fin de la Reconquista española: El 12 de febrero de 1817 se produjo la victoria en


Chacabuco, al mando del General San Martín, secundado por el chileno Bernardo O'Higgins
y el argentino Soler, dando inicio a la Patria Nueva (1817-1823).
LA PATRIA NUEVA (1817-1823)

La Patria Nueva es un periodo de la historia de Chile que abarca desde el 12 de


febrero de 1817, cuando ocurrió la victoria del Ejército de los Andes en la Batalla de
Chacabuco, hasta el 28 de enero de 1823, cuando se procedió a la renuncia al poder de
Bernardo O'Higgins—. Durante esta etapa, se intentó consolidar el proceso de
Independencia y establecer un proyecto político para organizar el Estado.

Primeras medidas de O´Higgins como Director supremo

A los pocos días de asumir como Director Supremo, O'Higgins envió al bergantín
Águila, (Barco de vela con dos palos, el mayor y el trinquete, y con velas cuadradas o
redondas). capturado en el puerto de Valparaíso, a rescatar a los desterrados patriotas en
Juan Fernández.

Rápidamente, organizó un ejército para enfrentar a las fuerzas realistas que se


encontraban atrincheradas en Talcahuano y enfrentar las montoneras (patriotas desertores,
indígenas y bandidos), que actuaban en las riberas del Biobío. Además, desterró a los
sacerdotes que seguían predicando fidelidad hacia la Corona española.

Bandera de Chile

Bandera de la Transición (1817-1818). Esta fue utilizada antes que la bandera chilena
actual.
Se diseña bandera chilena, utilizada entre 1818 y 1847.

Cancha Rayada

Los independentistas esperaban en Talca a los realistas, pero estos últimos tomaron
otra ruta y sorprendieron al bando de San Martín y O'Higgins, ganando la batalla conocida
como sorpresa porque la tropa independentista no alcanzó a reaccionar.

En Santiago, cundió el pánico cuando llegó la noticia del revés del Ejército de los
Andes y los cuerpos milicianos chilenos. Muchos ya estaban tomando sus cosas para exiliarse
otra vez en Mendoza e incluso corrió el rumor de que O'Higgins y San Martín estaban
muertos.

En esas circunstancias, en el cabildo del 23 de marzo, Manuel Rodríguez lanzó la


siguiente frase: “Aún tenemos patria, ciudadanos” y se proclamó Director Supremo.
Rápidamente, organizó un escuadrón llamado “Húsares de la Muerte”. Se incorporaron
muchos carrerinos, jurando morir antes de ver nuevamente a la patria en manos de España.
Alertado por esto, O'Higgins volvió a Santiago, sin el consentimiento de su médico, junto a
San Martín. Ambos fueron recibidos con una salva de cañonazos al amanecer del 24 de
marzo.

Batalla de Maipú

Tras reponerse, Osorio volvió a Santiago. San Martín organizó un escuadrón de defensa en
los cerrillos de Maipú. Allí, el 5 de abril, las dos fuerzas empezaron a batallar antes del
mediodía. Dos horas más tarde, las tropas realistas estaban en retirada, perseguidas por los
patriotas. En ese momento, O'Higgins apareció del lado contrario a San Martín y acorraló a
los realistas. Vencieron las tropas patriotas y se produjo el abrazo de Maipú.

Independencia de Chile(1818)

La independencia de Chile corresponde al proceso histórico que permitió la


emancipación de Chile del Imperio español, que acabó con el periodo colonial e inició la
conformación de una república independiente.

Oficialmente, la emancipación de Chile fue declarada el 1 de enero de 1818 a través


del acta de Independencia de Chile, en Concepción. Pero oficialmente fue jurada y firmada
el 12 de febrero de 1818, en Talca, fecha del primer aniversario de la batalla de Chacabuco.
Esta declaración fue reconocida por España el 24 de abril de 1844.-

Declaración solemne (Acta de Independencia de Chile)

La declaración solemne de la independencia de Chile que se efectuó en 1818. produjo


la retirada de las tropas españolas y comenzaron las creaciones de constituciones buscando
la forma correcta de gobernar. Una de las medidas tomadas por los líderes fue la abolición
de los títulos de nobleza y mayorazgo, los cuales brindaban un prestigio social que quisieron
omitir para lograr mayor igualdad.
Consolidación y avances del proceso independentista

Pese a haberse firmado el acta de independencia, había una insegura independencia


de Chile y Argentina por la presencia de los realistas en Perú. Por ello, San Martín siguió
adelante con su plan de invasión de Perú que concretó con la plena ayuda de O'Higgins. La
Expedición Libertadora, liderada por el general en jefe José de San Martín y con Lord
Thomas Cochrane a cargo de la armada, fue una de las fuerzas protagonistas de la
independencia del Perú; retirado San Martín de la escena, fue el libertador Simón Bolívar
quien logró concluir la gesta.

Posteriormente, Lord Thomas Cochrane comenzaría a asentar el golpe decisivo a los


realistas en Chile cuando, en 1820, se apoderó del Sistema de fuertes de Valdivia en la
famosa Toma de Valdivia; para luego enviar una pequeña fuerza a cargo de Jorge Beauchef
para perseguir al ejército realista que huía desde Valdivia hacia Chiloé y en el proceso ocupar
las ciudades ubicadas más al sur de Valdivia, (entre ellas Río Bueno y Osorno), concluyendo
la campaña de Beauchef con el combate de El Toro, en marzo de 1820.

Igualmente desde Valdivia, Cochrane se dirigió a Chiloé; pero fracasó en un ataque


terrestre a Ancud y por ello debió regresar; así para el año 1820, luego del combate de El
Toro, se comenzó a consolidar igualmente la presencia chilena en la región sur, salvo aún
en Chiloé.

Abdicación de Bernardo O'Higgins.

La Patria Nueva termina con la renuncia de O'Higgins en el cabildo abierto del 28 de enero.
O'Higgins, emocionado se despidió de la concurrencia con las siguientes palabras:

“Siento no depositar esta insignia ante la asamblea nacional, de quien últimamente la había
recibido; siento retirarme sin haber consolidado las instituciones que ella había creído
propias para el país y que yo había jurado defender; pero llevo al menos el consuelo de
dejar a Chile independiente de toda dominación extranjera, respetado en el extranjero,
cubierto de gloria por sus hechos de armas.
Doy gracias a la Divina Providencia que me ha elegido instrumento de tales bienes, y que
me ha concedido la fortaleza de ánimo necesaria para resistir el inmenso peso que sobre mí
han hecho gravitar las azarosas circunstancias en que he ejercido el mando.

Ahora soy un simple ciudadano. Mientras he estado investido de la primera dignidad de la


república, el respeto, sino a mi persona, al menos a ese alto empleo, debía haber impuesto
silencio a vuestras quejas. Ahora podéis hablar sin conveniencia. ¡Que se presenten mis
acusadores! ¡Quiero conocer los males que he causado, las lágrimas que he hecho derramar!
¡Acusadme! Si las desgracias que me echáis en rostro han sido, no el efecto preciso de la
época en que me ha tocado ejercer la suma del poder, sino el desahogo de mis malas
pasiones, esas desgracias no pueden purgarse sino con mi sangre. ¡Tomad de mí la
venganza que queráis, que yo no os opondré resistencia! ¡Aquí está mí pecho!

Bernardo O'Higgins”

Anexión de la Isla de Chiloé

Sin embargo, el último territorio español en Chile, la isla de Chiloé, sería conquistada y
anexada a la nueva República de Chile, solo recién en enero de 1826 al firmarse el Tratado
de Tantauco, durante el gobierno de Ramón Freire, sucesor de O'Higgins.

CONSTITUCIÓN DE 1818:

Tenía el carácter de provisoria, y formalizó la dictadura de O’Higgins. Entregó el


poder ejecutivo a un Director Supremo Vitalicio, sin plazo para su mandato.

Instituyó un senado de 5 miembros y un Supremo Tribunal, todos designados por el


Director Supremo.

Su ideólogo fue O´Higgins. Contaba con 22 artículos y fue redactada por una Comisión
encabezada por O´Higgins.

Estipulaba en sus puntos más importantes:


La libertad e igualdad civil; Seguridad individual; Honra y Hacienda;

Nadie puede ser castigado o desterrado, sin ser antes oído y legalmente reconocido de algún
delito contra la sociedad;

Las casas y documentos de cada individuo son privados;

Libertad de los hijos de esclavos;

Todo individuo debe completa sumisión a la Constitución, a sus estatutos y leyes;

La religión oficial será la católica, apostólica y romana, única y exclusiva del Estado de Chile

Divide al país en tres provincias: Santiago, Concepción y Coquimbo. Esta Constitución rige
durante la mayor parte de la administración de O´Higgins, cuya dictadura no tiene otro
contrapeso que la resistencia que se asila en el Senado, ya que sus miembros, aunque
designados por el Director Supremo, supieron mantener alto grado de independencia frente
a él, con eficacia.

CONSTITUCIÓN DE 1822 (José Antonio Rodríguez Aldea).

Redactada durante el gobierno de O´Higgins fue obra de su ministro don José Antonio
Rodríguez Aldea.

El Poder Ejecutivo recaía en el Director Supremo durante seis años y con la posibilidad de
ser reelegido por otros cuatro años más.

El Poder Legislativo reside en el Congreso, compuesto de dos Cámaras (bicameral), lo que


ocurre por primera vez en la historia constitucional chilena.

La Constitución de 1822, en el aspecto doctrinario, expresa que la nación chilena es la unión


de todos los chilenos y en ella reside la soberanía.

La religión del Estado es la católica, apostólica y romana, con exclusión de cualquier otra;
La organización institucional se sintetiza en la afirmación de que "el gobierno de Chile será
siempre representativo, compuesto de tres poderes independientes: Legislativo, Ejecutivo y
Judicial. La Constitución de 1822 se convierte en un nuevo factor, que hace a O´Higgins
insoportable como gobernante, para la mayoría de la clase dirigente, siempre poderosa
aunque, entonces, reducidísima en número. O´Higgins abdica en enero de 1823.

Otorgaba la ciudadanía a los hombres mayores de 25 años, con exclusión de los


sirvientes y procesados criminalmente.

Las provincias se alzaron contra O’Higgins, lo que impidió su aplicación.

CONSTITUCIÓN DE 1823(promulgada el 29 de diciembre de 1823). Juan Egaña.

Consta de 277 artículos.

Fue redactada por don Juan Egaña, y se le denomina la constitución moralista.

Consagraba un régimen unitario de gobierno, a cargo de un Director Supremo, que


duraba 4 años, reelegible.

La función legislativa quedaba radicada en Senado de 9 miembros, el cual debía velar


también por la moralidad pública, mediante la dictación de un Código Moral.

Duró pocos meses en vigencia, y fue dejada sin efecto a fines de 1823, por el
gobierno encabezado por Ramón Freire.

Se llamó a elección a un Congreso Nacional, comenzando lo que se ha denominado


la etapa de los ensayos institucionales.

Contiene el vacilante pensamiento político de su autor. Se observa, una confusión


entre los órdenes políticos, moral y religiosos.

Sus principales artículos tratan de establecer un Estado chileno unitario e


independiente. Ideada y redactada por Juan Egaña Riesco, quien en ese entonces estaba a
la cabeza del Congreso.
Determina la religión del Estado como Católica, Apostólica y Romana, excluyendo el culto y
ejercicio de cualquiera otro credo.

En su artículo 4º se determinan los límites del territorio nacional, de sur a norte, desde el
Cabo de Hornos hasta el despoblado de Atacama; y de oriente a poniente, desde las
cordillera de Los Andes hasta el mar Pacífico, con todas las islas adyacentes, incluso el
archipiélago de Chiloé, las de Juan Fernández, Mocha y Santa María. No se considera la
Patagonia ni la Antártica como partes del territorio nacional, ni tampoco a Perú como límite
norte.

El Ejecutivo será controlado por la fiscalización del Consejo del Estado, el Senado, la Cámara
Nacional y las asambleas de ciudadanos. De estos organismos el más novedoso es el último,
las asambleas de ciudadanos, ya que en ellas recae la labor de calificar y censurar a los
empleados públicos, incluyendo al Director Supremo. Cualquier distrito, parroquia o
municipio con un mínimo de 200 ciudadanos activos, puede formar una asamblea.

Lo más singular de esta constitución, y a lo cual se debe su calificativo de "moralista", es


que se caracteriza por ligar las normas que rigen la administración del Estado con aquellas
que regulan la conducta moral, tanto de los funcionarios como de los ciudadanos. Así por
ejemplo, en el artículo 250 se afirma: "En la legislación del Estado se formará el código
moral que detalla los deberes del ciudadano, en todas las épocas de su edad y en todos los
estados de su vida social, formándole hábitos, ejercicios y deberes, instituciones públicas,
ritualidades y placeres que transforman las leyes en costumbres y las costumbres en
virtudes cívicas y morales".

En realidad, esta constitución no se implanta, pues requiere de un engorroso y complejo


sistema administrativo que para muchos va a significar un mayor gasto fiscal, y tampoco
cuenta con el consenso de la clase dirigente para ser aplicada, siendo sus mayores críticos
el sector liberal, que la considera autoritaria y centralista. El 10 de enero de 1825 se dicta
el acta de defunción de la Constitución de 1823, sin haber sido ésta puesta en práctica.
ENSAYO FEDERAL DE 1826 :

El Congreso Nacional en 1826 aprueba la aplicación de un régimen federal en Chile,


siendo su principal precursor don José Miguel Infante.-

Se prepara un proyecto de Constitución que consagraba dicho régimen, inspirada en


el modelo mexicano. El territorio se dividía en 8 provincias, dotadas de asambleas
provinciales y con un intendente designado por las municipalidades. Coquimbo (similar a la
antigua provincia de Coquimbo), Aconcagua, Santiago, Colchagua (estas tres derivadas de
la antigua provincia de Santiago), Maule, Concepción, Valdivia y Chiloé (estas cuatro
derivadas de la antigua provincia de Concepción).

Luego de asumir el presidente Manuel Blanco Encalada, y mientras se comenzaban


a organizar las labores necesarias para la redacción de la nueva Constitución, el 11 de julio
del mismo año se aprobó un proyecto de ley que expresaba “La República de Chile se
constituye por el sistema federal, cuya Constitución se presentará a los pueblos para su
aceptación”.

Posteriormente, se aprobaron otras leyes encaminadas a adelantar la federalización


del país (de 26, 27 y 29 de julio y de 30 de agosto), que establecían la elección popular de
gobernadores, cabildos y párrocos e implementaban Asambleas provinciales con carácter
legislativo.

Estas reformas causaron gran agitación política, lo que sumado a la crisis de la


hacienda pública produjo una grave crisis que impidió la aprobación definitiva del proyecto
de constitución federalista.

Efectivamente, mientras el Congreso prepararaba el proyecto de nueva constitución, llegó


al problema central de precisar el sistema del Estado; no se adoptó decisión alguna, y en
mayo de 1827 suspendió sus sesiones y decidió consultar directamente a las provincias. Las
respuestas de éstas tardaron en llegar o no llegaron, debido al rechazo al federalismo. Y
ese mismo año el Congreso tuvo que dejar sin efecto. El Ensayo Federalista Chileno, coincide
con el abismo en que se hunde la vida política, administrativa y económica del país, sumida
en el más completo caos.
CONSTITUCIÓN DE 1828 (8 de agosto de 1828). Melchor de Santiago Concha Cerda

Fue confeccionada por el Diputado don Melchor de Santiago Concha Cerda, quien
realiza el proyecto constitucional que fuera revisado por el Ministro del Interior subrogante
don José Joaquín de Mora. Se promulgó el 8 de agosto de 1828.

Esta norma de principios liberales, considerada como la más completa y de contenido


superior a las constituciones promulgadas hasta la fecha, pero no responde, a la realidad
social y cultural del país. Garantizaba en forma expresa la libertad personal, la libertad de
imprenta, el derecho de petición y el de propiedad.

En términos generales, a través de ella, se establece una clara independencia de los tres
poderes del Estado, determinando que la República sería gobernada por un Presidente
elegido por votación indirecta de electores o de segundo grado, a razón de tres por cada
miembro del legislativo; el gobierno duraría cinco años, posibilitando la reelección sólo
después de un período de otros cinco años; el Presidente podría, en caso de muerte o de
imposibilidad física o moral, ser reemplazo por un Vicepresidente, elegido de igual forma
que éste única constitución que crea la figura del vicepresidente. Además, de sus facultades
ejecutivas, el presidente de la república tiene facultades legislativas: puede proponer leyes
y hacer uso del derecho de veto suspensivo. Anualmente debe presentar al congreso el
presupuesto de los gastos necesarios y rendir cuenta de la inversión del presupuesto
anterior.

El Poder Legislativo reside en el Congreso Nacional compuesto por dos cámaras: una
Cámara de Diputados, elegidos indirectamente por el pueblo por dos años a razón de uno
por cada 15.000 habitantes; y otra de Senadores elegidos por las asambleas provinciales, a
razón de dos senadores por cada provincia, y duran 4 años. Los parlamentarios gozan de
las inmunidades de la inviolabilidad y del fuero.

Por otra parte, se mantiene la división del país en 8 provincias, y en cada provincia
se establece una asamblea provincial compuesta por miembros de elegidos directamente
por el pueblo. Entre otras atribuciones la asamblea provincial debía proponer en terna a los
Intendentes y jueces letrados y designar a los senadores.
El poder judicial se estructura en una escala jerarquizada: Corte Suprema, Corte de
Apelaciones y Juzgados de Primera Instancia.

Se establece la tolerancia religiosa y su culto privado; se establece la libertad de


imprenta sin censura previa; se refuerzan los derechos individuales.

LA CIUDADANÍA:

Se confiere a los chilenos que habiendo cumplido 21 años o antes, si fueren casados, o
sirvieren en la milicia, profesen alguna ciencia arte o industria, o posean algún capital, bien
raíz o empleo.

Se amplía el electorado a las milicias suprimiendo el requisito de saber leer y escribir, entre
otros.Se consagraba un derecho a sufragio amplio, ya que lo podía ejercer todo varón mayor
de 25 años inscrito en las milicias.

Promulgada la Constitución, se llama a elecciones presidenciales, siendo electo


presidente Francisco Antonio Pinto, pero la elección del Vicepresidente, no logró mayoría de
ninguno de los candidatos, lo que finalmente termina por provocar una guerra civil, que
finaliza el año 1830, con el triunfo de Diego Portales en la batalla de Lircay, ocasión en que
se nombra como Presidente de la República interino, a José Tomás Ovalle, uno de cuyos
ministros, Diego Portales, tendría enorme incidencia en la dictación de la Constitución
Política que regiría por los siguientes 92 años. Termina así, una prolongada etapa de
inestabilidad política caracterizada por variados ensayos de organización constitucional.

Se le critica a esta Constitución, que marca el último intento del federalismo en Chile.
Es un texto breve y claro y aunque sus disposiciones son de toda sensatez, no convenían al
estado de anarquía y desorganización en que vivía el país. Otros incluso le criticaron diciendo
que era constitución demasiado avanzada para la época. Se le critica también que debilita
en extremo el poder del presidente de la república, y confería a las provincias una exagerada
autonomía que no eran capaces de ejercer. Finalmente, para los efectos de su reforma
estableció que recién en el año 1836 se convocaría a una “gran convención” con el único
objetivo de reformar o adicionar esta Constitución. Sin embargo, y dada la situación del país
y por iniciativa del Cabildo de Santiago que representó al gobierno, se logró el consenso
para la dictación de una nueva ley fundamental (1833). Así, en 1831 don Manuel José
Gandarillas presenta una moción al Senado para modificar la actual Constitución.

PENSAMIENTO POLITICO DE DON DIEGO PORTALES

Portales, el incansable formador de opinión pública, el músico improvisado, el


escritor infatigable gran observador y relator asertivo, visionario, de gran instrucción y
criollismo, de gran amor por la tierra y su responsabilidad cívica. En fin, el hombre que se
desvivió y murió por Chile.

Fue diputado suplente por Santiago, en las Asambleas Provinciales de 1823,


Asamblea Provincial de Santiago, 29 de marzo-3 de abril de 1823.

Fue electo senador Fue nombrado ministro del Interior y Relaciones Exteriores, 6
de abril de 1830 al 1° de mayo de 1831, durante los gobiernos de José Tomás Ovalle, y
Fernando Errázuriz. Y ministro de Guerra y Marina, en el mismo período. Reasumió como
ministro del Interior y Relaciones Exteriores, el 9 de julio al 31 de agosto de 1831; y
reasumió también, paralelamente y durante el mismo período, como ministro de Guerra y
Marina.

Fallece el 6 de junio de 1937 en Valparaíso. Asesinado luego de 3 días de cautiverio.

Pensaba que el gobierno autoritario debía educar y guiar a la ciudadanía por el


camino de la virtud y el orden, cuando esta obra estuviese completa, podría venir el gobierno
liberal que fuere, lleno de ideales flexibles, pero antes la organización debe ser establecida
sobre bases sólidas dirigidas por modelos de virtud y patriotismo, repudiando el
personalismo político y el enriquecimiento a través del Estado; es por eso que Portales nunca
se definió en política, era un organizador innato.

Portales había resumido en tres puntos su visión de la situación institucional de los


países de América española (carta dirigida a O`Higgins en 1822):

“La democracia que tanto pregonan los ilusos es un absurdo en países como los americanos
llenos de vicios y donde los ciudadanos carecen de toda virtud, como es necesario para
establecer una verdadera república.”
“La monarquía no es tampoco el ideal americano: salimos de una terrible para volver a otra
¿ y que ganamos ?”

“La república es un sistema que hay que adoptar. ¿Pero sabe como yo la entiendo para
estos países ? Un gobierno fuerte, centralizador, cuyos hombres sean modelos de virtud y
patriotismo, y así enderezar a los ciudadanos por el camino del orden y de las virtudes.
Cuando se hayan moralizado, venga el gobierno liberal, libre y lleno de ideales, donde
tengan parte todos los ciudadanos”

“Esto es lo que yo pienso y todo hombre de mediano criterio pensará igual”

Él pensaba: “… ni Monarquía Dinástica y Absoluta, ni Democracia Prematura y Desorbitada,


sino una República Autoritaria y Educadora, cuyo Régimen Político no podía ser Rígido ni
Estático, sino Flexible y Adaptable a las nuevas circunstancias”.

Se ha definido la república como la forma de gobernar de los países en los que el


pueblo tiene la soberanía y facultad para el ejercicio del poder, aunque sea delegado por el
pueblo soberano en gobernantes que elige de un modo u otro. En la práctica suele pensarse
que la forma de estado de un país es la monarquía si tiene rey, y república si no lo tiene.
Lo cierto es que una república está fundamentada en el “imperio de la ley” y no en el
“imperio de los hombres”.-

SU PENSAMIENTO O IDEARIO:

1.- Autoridad impersonal y fuerte y democracia progresiva

El Gobierno es una entidad abstracta, un símbolo llamado Presidente de la República,


absolutamente separado de la persona que lo ejerce”. Para Portales era esencial establecer
una autoridad fuerte, respetable y respetada, eterna, inmutable, superior a los partidos y a
los prestigios personales. El gobierno no es Carrera, ni O’Higgins, ni el general tal o cual. El
Gobierno es la autoridad, el Estado. La autoridad es impersonal. En esta idea, que hoy
resulta simple pero que en aquella época fue una novedad, se establecía el orden portaliano.
En adelante, debe existir un poder fuerte y duradero, superior a cualquier grupo, partido o
caudillo. Se restablece el respeto por la autoridad en abstracto, por el poder legítimamente
constituido y legalmente ejercido. En cuanto a la democracia progresiva, en una carta de
1822, dice: “La democracia que tanto pregonan los ilusos, es un absurdo en los países
americanos, llenos de vicios y donde los ciudadanos carecen de toda virtud para establecer
una verdadera República. La República es el sistema que hay que adoptar, pero como un
Gobierno fuerte, centralizador, cuyos hombres sean verdaderos modelos de virtud y
patriotismo y así enderezar a los ciudadanos por el camino del orden y de las virtudes.
Cuando se hayan moralizado, vendrá el Gobierno completamente liberal, libre y lleno de
ideales, donde tengan parte todos los ciudadanos».

2.-Fiscalización ordenada y legal de los actos del Gobierno

Frente al Gobierno fuerte, es legítimo hacer oposición, siempre que ella se encauce
legalmente y no por la violencia y la revolución. Era partidario de una oposición decente,
moderada y con el fin de encaminar al Gobierno a obrar en el sentido de la opinión pública
y para que no fuera degradante al país y al Gobierno.

3.-Rigurosidad de la sanción e igualdad ante la justicia

En aquella época no existía sanción por nada ni por nadie. El país estaba infestado
de bandoleros, de asesinos. No había sanción, la Administración Pública estaba corrompida,
floja y sobornable. La sanción portaliana era inflexible: militar que conspiraba, era
sumariado; ladrones y asesinos, castigados sin piedad; siendo la suya una sanción fría y
pareja, ajena a odios personales. El concepto de la sanción en Chile había estado
subordinado a la condición social del delincuente. La sanción portaliana era igualitaria, lo
que le acarreó la molestia de la aristocracia. El que contrariando el orden jurídico se alza
contra el régimen debe ser sancionado sin compasión. Para Portales, la ley penal es igual
para todos y no admite excepciones fundadas en la clase, la fortuna o la nacionalidad.
4.-Dignidad nacional y rechazo al imperialismo

Su patriotismo no fue un patriotismo “chileno americano” como el de O’Higgins ni


“americano” como el de San Martín. Era un patriotismo chileno, y por lo tanto excluyente y
exclusivo. En una carta de 1822, Portales se muestra reacio a los imperialismos y cauteloso
ante el apoyo del Presidente Monroe de EE.UU. Dice: «Cuidado con salir de una dominación
para caer en otra. Hay que desconfiar de esos Señores que muy bien aprueban la obra de
nuestros campeones de liberación, sin habernos ayudado en nada. ¿Por qué ese afán de
Estados Unidos en acreditar Ministros, delegados y en reconocer la independencia de
América sin molestarse ellos en nada? Creo que todo esto obedece a un plan combinado de
antemano:

Hacer la conquista de América no por las armas, sino por la influencia en toda esfera.
Esto sucederá, tal vez hoy no, pero mañana sí».

En 1832, Portales escribe: “Hagamos justicia a los extranjeros, démosle la


hospitalidad que sea posible, pero nunca hasta colocarlos sobre los chilenos”. Portales se
opone a toda actitud de los extranjeros que importe una rebaja en la dignidad o
independencia de Chile.

5.- Predominio del poder civil.

Los cuerpos armados son esencialmente obedientes y no tienen derecho a deliberar.


El caudillaje debe ser reprimido con energía. Para ello, se organizaron las guardias cívicas y
más tarde la Academia Militar.

6.- Probidad administrativa

Portales no admitía enriquecerse a costa del Estado. Pensaba que debía servirse al
país sin ninguna remuneración y personalmente no cobro jamás su sueldo y los cedió al
ejército. El mismo inspeccionaba las oficinas públicas, que hizo limpiar y eliminó el hábito
de beber alcohol de los funcionarios. Puso orden en la Administración Pública; fue inflexible
con los prevaricadores, los flojos y los incapaces.
7.- La Impersonalidad y probidad de los cargos:

Uno de los grandes peligros que Portales veía para la estabilidad republicana era la
corrupción y personalización de las funciones del estado. El pensaba que la estabilidad
republicana se garantizaba sólo cuando la lealtad de los ciudadanos y los funcionarios del
Estado fuera a las instituciones y no a tal o cual persona; el ministro recordaba los profundos
daños que había ocasionado en el pasado la lucha entre Carrerinos y O`Higginistas.

El sueño portaliano era quelas instituciones llegaran a funcionar por sí solas,


independientes de qué personas las integraran.

8.- La necesidad de la existencia de una oposición:

Uno de los mayores problemas que debieron afrontar las nuevas repúblicas
americanas fue la continua intervención de las Fuerzas Armadas en la política. Portales vio,
a lo largo de la década de 1820, que uno de los factores de inestabilidad era el ejército,
que, de tanto en tanto, se sublevaba. Por esto, aparte de practicar una violenta depuración
de sus filas, incentivó en la ciudadanía la creencia de que el ejército debía ser obediente al
poder político, por la simple razón de que su exclusivo derecho al uso de la fuerza armada
lo tornaba un elemento desequilibrante en la vida nacional.

9.- El carácter pedagógico del estado:

Una de las creaciones más originales de Diego Portales fue la Guardia Cívica. Esta
fue una organización de civiles que debía estar preparada para apoyar la labor de las Fuerzas
Armadas en defensa de la nación. Pero, en la concepción portaliana, las Guardias Cívicas
debían ser verdaderas escuelas de civismo.

10.- La desconfianza a los extranjeros:

Portales no temía a los extranjeros, pero desconfiaba de algunos países -


particularmente Estados Unidos- que estaban demostrando por esa época un marcado
interés por las republicas americanas. El creía que el aporte de los extranjeros a la nación
podía ser beneficioso, siempre que existiera respeto entre iguales.
Las ideas expuestas triunfaron, no solo porque representaban el pensamiento de
Portales, sino que coincidían, en gran medida, con el pensamiento de la clase dirigente. Por
esto se dejó actuar a Portales con entera libertad.

Puede decirse que Portales restableció el gobierno identificado con los grandes
intereses de la patria sobre las bases de las instituciones indianas que aún seguía vigentes,
bajo una forma constitucional.

La Constitución del 1833 donde queda reflejado su pensamiento, no se dictó (como


sucede tantas veces para establecer un régimen de gobierno determinado), sino para
consolidar uno ya establecido.

CONSTITUCIÓN DE 1833 (promulgada el 25 de Mayo de 1833).

Autores: Manuel José Gandarillas y el conservador Mariano Egaña.

Importancia:

1.- El Estado de Chile se conforma y consolida realmente con esta Constitución. Con esta
nueva carta.

2.- Se estructura al Estado según las necesidades de la realidad social y política de aquél
tiempo y

3.- Otorga un período de estabilidad importante para el desarrollo del país.

El principal ideólogo de esta Carta es Diego Portales, con un Ejecutivo fuerte e


impersonal, con un Gobierno apoyado bajo el principio de autoridad y el respeto a la ley,
con el fin de asegurar el orden público.

Los redactores del texto fueron el liberal Manuel José Gandarillas y el conservador
Mariano Egaña, quienes debieron ceder en sus posiciones ideológicas para llevar a buen
término su cometido.

La Constitución contaba con 168 artículos, agrupados en 12 capítulos. En su


preámbulo declara que el régimen de gobierno es "popular representativo" y "la soberanía
reside esencialmente en la nación, que delega su ejercicio en las autoridades que establece
la Constitución".

La religión del Estado es la Católica Apostólica Romana, con exclusión del ejercicio
público de cualquier otra.

Incurre en el grave error de fijar los límites del país, lo que significada que si
cambiaban aquellos, debía reformarse la Constitución.

En materia de nacionalización es muy estricta. Los extranjeros requerían de


residencia de 10 años para los solteros y 6 para los casados con extranjera y 3 para los
casados con chilena.

Impone el sufragio restringido, lo cual está muy de acuerdo con la época:

“Son ciudadanos activos con derecho a sufragio los chilenos que habiendo cumplido 25
años, si son solteros y 21, si son casados, y sabiendo leer y escribir, tengan alguno de los
siguientes requisitos:

1. Una propiedad inmueble o un capital invertido en alguna especie de giro o industria.

2. El ejercicio de una industria o arte, o el goce de algún empleo, renta o usufructo".

Nadie podía gozar del derecho a sufragio sin estar inscrito en el Registro de Electores
de la respectiva Municipalidad.

Se reconocen garantías constitucionales como: igualdad ante la ley, igualdad en la


admisión a todas las funciones públicas y empleos, igualdad en el reparto de los impuestos
y contribuciones a proporción de los haberes, libertad de permanecer en cualquier punto de
la República, inviolabilidad de todas las propiedades, derecho de petición, libertad de
imprenta y mantención del régimen de mayorazgos con algunas salvedades. (En
1818 Bernardo O'Higgins realizó un intento fallido de abolirlos, situación que se repitió en
1823, 1825, 1827 y 1828 con los sucesivos gobiernos. Aunque la constitución de 1828
declaró abolidos los mayorazgos, el triunfo conservador del año siguiente los volvió a
restablecer).
La Constitución de 1833 permitió la libre enajenación de los bienes, a condición de
que se aseguraran a los herederos el valor de lo enajenado. Sin embargo, sólo en 1852 se
declararon abolidos los mayorazgos, reglamentándose el procedimiento por medio del cual
se verificarían las ex-vinculaciones. En 1857 una nueva ley confirmó la extinción de las
vinculaciones, cuyas propiedades pasaron a regirse por el nuevo Código Civil.

El Poder Ejecutivo recaía Presidente de la República, quien administraba el Estado y


era Jefe Supremo de la Nación. No se ajustó ni al régimen parlamentario ni al presidencial,
tenía elementos de uno y de otro. Para ser elegido debía haber nacido en el territorio
nacional y tener no menos de 30 años de edad. Duraba en su cargo 5 años, pudiendo ser
reelegido por un lapso igual de tiempo. Se elegía por votación indirecta por los electores
designados por los departamentos. Entre sus principales atribuciones estaban: designar a
los ministros, intendentes y gobernadores, ejercer el patronato y el exequátur, vetar por un
año los proyectos de ley que le presentaba el Congreso y decretar el Estado de Sitio, entre
otras.

Los ministros de Estado podían desempeñar simultáneamente cargos


parlamentarios, pudiendo asistir a sesiones de las ramas del Congreso y participar en sus
deliberaciones, aunque no tenían derecho a voto aquellos que no formaban parte de la
respectiva Cámara. Los ministros no podían ser acusados constitucionalmente por el
Congreso, destituyéndolos de sus cargos.

La Constitución de 1833, estableció un Consejo de Estado compuesto de personas


designadas por el Presidente de la República, los cuales emitían su opinión frente a las
consultas del jefe de Estado.

El Poder Legislativo reside en un Congreso Nacional, compuesto por dos Cámaras:


una de diputados que duraban 3 años, elegidos por los departamentos de votación directa
uno por cada 20.000 almas, y otra de senadores, integrada por 20 senadores nombrados
por electores, que duraban 9 años en sus cargos pudiendo ser reelegidos.

Entre las atribuciones exclusivas del Congreso estaban: la de "autorizar al Presidente


de la República para que use de facultades extraordinarias, debiendo siempre señalarse
expresamente las facultades que se le conceden y fijar un tiempo determinado a la duración
de esta ley".
La misión del Congreso era de discutir y aprobar las leyes, entre las cuales estaban
las llamadas “Leyes Periódicas” (actualizables cada 18 meses), la Ley de Presupuesto
(autorizaba los gastos del Estado), la Ley de Cobro de Contribuciones cada 18 meses y la
ley referente a la existencia de fuerzas armadas de mar y de tierra.

Existía una “Comisión Conservadora” que velaba por el cumplimiento de la


Constitución y las leyes.

La Constitución establecía que no podían ejercer funciones judiciales, ni el Presidente


de la República ni el Congreso Nacional. Los Tribunales establecidos eran los encargados de
hacer justicia. Se establecía la inamovilidad de los jueces, salvo en casos especiales, como
cohecho, falta de observancia de las leyes o mala administración de justicia.

Las Fuerzas Armadas eran una entidad obediente y no tenían derecho a deliberar.

La Constitución de 1833 no respondía claramente al modelo presidencialista ni al


modelo parlamentario.

Durante los primeros cuatro decenios de su vigencia tuvo una aplicación


esencialmente “presidencialista”; sin embargo, a partir de 1871 se dará comienzo a una
serie de reformas constitucionales que contribuirán, hacia fines del siglo XIX y principios del
XX, a la instauración en Chile de un “régimen parlamentario” o a un "parlamentarismo a la
chilena".

Esta carta establece la división territorial en provincias, departamentos y distritos, y


se suspenden las asambleas provinciales.

La Constitución del 33 era de tipo rígida con respecto a su proceso reformatorio,


requería de la concurrencia de dos congresos sucesivos. El primero debía declarar que era
lo reformable, y el segundo, debía realizar las modificaciones respectivas
Algunas de las principales reformas a la Constitución Política de 1833:

Entre 1871 y 1888, bajo los 4 gobiernos liberales, se hicieron importantes reformas
a la Constitución:

En 1871, se dispuso por ley que el Presidente de la República durara en el ejercicio


de sus funciones 5 años, sin poder ser reelegido para el siguiente período.

En 1873 se aprueba una ley que se refiere a los quórum que necesitan las cámaras
para sesionar. El Senado sesionaría con 1/3. La Cámara de Diputados con 1/4 de sus
miembros.

En 1874, se modifican las condiciones para la nacionalización por parte de los


extranjeros: después de un año de residencia en el país se obtiene la nacionalidad. Por otra
parte, se agregan a las garantías constitucionales el derecho a reunión sin permiso previo y
sin armas, el derecho de asociación y el derecho de petición y la libertad de enseñanza.

También en 1874 se reforma la manera de elección de los diputados y se dispone


que los senadores se escojan por votación directa en las provincias. Además, se aprueban
varias leyes que otorgan mayores atribuciones al Congreso. Entre las más importantes está
la ley que permite agilizar la acusación a los ministros del gobierno de turno.

Se fijaron incompatibilidades parlamentarias entre los diputados y el Senado pasó a


ser elegido en votación directa por las provincias, rebajando el período de los senadores a
6 años;

Otra reforma se refiere a otorgar al Ejecutivo un plazo no mayor a la de un año para


restringir la libertad personal y la libertad de imprenta.

Se ampliaron las facultades de la Comisión Conservadora (1874) y se modificó la


normativa para reformar la Constitución Política (1882). Antes, en 1872, fue aprobada una
ley de imprenta que reemplazó la estricta norma conservadora de 1842

En 1877 se creó en Diario Oficial.

En 1882 se establecieron nuevas normas para las reformas constitucionales.


También en 1882, se amplia el universo elector pues se dispone que son ciudadanos
activos con derecho a sufragio los chilenos que hubieren cumplido 21 años de edad, que
sepan leer y escribir y estén inscritos en los registros electorales.

En 1924 se introdujo una importante modificación al Texto Constitucional. Esta


consistía en que los diputados podrían manifestar si los ministros merecían o no confianza.
Con esta modificación se consolidaba definitivamente el sistema parlamentario de gobierno.

PERIODO 1833 A CRISIS DE 1991.

Se extiende desde la vigencia de la Carta de 1833 hasta la crisis de 1890-91 se


desarrolló bajo relativa normalidad, considerando incluso los fallidos movimientos
revolucionarios de la década de los años 50, bajo la Presidencia de don Manuel Montt.

En aquellos sesenta años se presentaron dos etapas identificables:

a) Desde 1831- 1860 “república conservadora”

b) Desde 1860 - 1891, “república liberal”.

Con el Presidente don Joaquín Prieto comenzaron los decenios presidenciales,


contemplando la reelección en la Constitución de 1833, y el control del aparato electoral y
administrativo del país por parte del Ejecutivo fue manifiesto.

El uso frecuente de los estados de excepción y de las facultades extraordinarias por


parte del Presidente de la República prácticamente imposibilitó la iniciativa parlamentaria
en materia de leyes.

No obstante, el Congreso funcionó regularmente durante el período conservador,


salvo la legislatura de 1838, que no se efectuó, por hallarse el país en la Guerra contra la
Confederación Perú-Boliviana, aunque sí sesionó la Comisión Conservadora del Senado.
REPUBLICA CONSERVADORA (1831 – 1861)

Sus orígenes :

En 1829 estalló una revolución que enfrentaba dos facciones que querían imponer
sus propios modelos políticos, en su visión de la forma que debía adoptar la naciente nación
estado chilena. La cual termina con la batalla de Lircay.

Unos eran los liberales, su mirada se dirigía especialmente a Francia, proponiendo


un modelo político que garantizaría la mayor cantidad de libertades individuales.

La contraparte era representada por los conservadores, cuya mirada se centraba en


el pasado colonial, en el sentido de un poder central fuerte y autoritario que fuera capaz de
imponer orden.

Se produjo a raíz de los resultados de los comicios para elecciones de congresales.

El Congreso dominado por los liberales eligió en el cargo de vicepresidente a Joaquín


Vicuña Larraín. A pesar de ser tercera mayoría, pero de tendencia pipiola, los conservadores
consideraron que la constitución había sido violada, por lo que se unieron en un solo bloque
O’Higginistas, estanqueros y pelucones en contra del gobierno.

El Ejército del sur se encontraba instalado en Concepción bajo el mando del General
Joaquín Prieto, quien se sublevó en defensa de la Constitución y marchó hacia Santiago.

En la capital, las tropas de gobierno quedaron a cargo del General Francisco de la


Lastra. El primer choque entre ambos ejércitos se produjo el 14 de diciembre de 1829 en
Ochagavía, cerca de Santiago. Tras el combate en que no hubo vencedores ni vencidos,
ambos bandos acordaron firmar una tregua y poner a disposición de Freire el mando del
país.

Prieto, apoyado por los sectores conservadores, asumió la dirección del Ejército, lo
que motivó que Freire partiera con sus tropas por Valparaíso a Coquimbo, a comienzos de
1830.

La batalla de Lircay se remontan al 14 de abril de 1830, cuando el ejército del bando


pipiolo, encabezado por el general Ramón Freire, cruzó el río Maule y ocupó Talca. El 16 de
abril, las tropas del bando conservador, encabezadas por el general José Joaquín Prieto, se
ubicaron en el cerrillo de Baeza, muy cerca al noreste de la ciudad. José Rondizonni hizo
entender a Freire que el encierro en Talca era un verdadero suicidio y decidieron abandonar
la ciudad al día siguiente, pero el ejército de Prieto los estaba esperando con una línea de
batalla dispuesto a mantenerse a la defensiva.

El ejército de Freire prefería morir antes que rendirse ante Prieto, y los hombres de
éste veían a los extranjeros Viel, Tupper y Rondizonni como los verdaderos responsables de
la Guerra Civil.

Por los testimonios dados por participantes en la batalla, murieron alrededor de 500
hombres, mientras que aproximadamente 1.000 fueron tomados prisioneros.

Terminada la batalla, Prieto fue elegido Presidente de la República y su gobierno,


bajo la inspiración de Diego Portales, estableció las sólidas bases de la República en Chile,
con un sistema político conservador con la promulgación de la Constitución de 1833.

En el ámbito económico:

Chile se encontró en una situación muy favorable para la economía del país,
concluidas las guerras de independencia. Se le dio la posibilidad de insertarse de manera
activa en los mercados internacionales debido a la importancia de sus exportaciones de
trigo, plata y cobre. El descubrimiento de oro en Australia y California (1848) causo una
gran demanda de trigo y harina en Chile ya que no había otros exportadores en la costa del
Océano Pacifico.

Muchos hallazgos de “minería de la plata” situaron a Chile entre los tres primeros
exportadores del mineral. Entre 1841 y 1850 fue el segundo productor de cobre en el mundo
y entre 1851 y 1880 ocupo el primer lugar. Inglaterra era el principal destino de las
exportaciones.

A su vez se impulso la minería del carbón, ya que los empresarios mineros hicieron
grandes inversiones en la “construcción de fundaciones.” En 1840, el carbón sustituyo a la
madera. Se crearon fundiciones en distintos lugares para abaratar los costos de transporte
del combustible. En 1852 se descubrió el yacimiento de “Tamaya” el cual se unía con la
fundición de Tongoy. En esta época la industria estaba en manos de empresarios chilenos.

Los gobiernos de los decenios conservadores ordenaron las finanzas del Estado y
por medio de la “política económica liberal”, se impulso el comercio exterior.

Manuel Rengifo (Estanquero), ministro de hacienda, transformo el sistema de


impuestos agrícolas mediante la institución de un pago anual basado en el valor de cada
propiedad. También estableció una “ordenanza de aduanas”, facilito las operaciones y
redujo los derechos, y se preocupo de la ampliación de los almacenes francos en Valparaíso.
Valparaíso se convirtió en uno de los primeros puertos del Océano Pacifico. Los ingresos
aumentaron y el Estado cancelo sus deudas, pudiendo así acceder al mercado crediticio (de
préstamos) internacional, nuevamente.

1.- Gobierno de José Tomás Ovalle (1830-1831)

José Tomás Ovalle(1830-1831) fue el último presidente del periodo de organización


de la república y el que inició la República Conservadora. Asumió la Presidencia de Chile el
1° de abril de 1830 de manera provisional debido a la renuncia de Francisco Ruiz-Tagle. Su
gobierno se vio marcado por la estabilización nacional y por el nacimiento del periodo
conservador.

Ovalle, un joven senador, hombre sencillo a pesar de su opulencia y no manifestaba


ansias de poder, pero debido a su popularidad, todos sus intentos fueron aguados por el
Congreso y asumió la presidencia más como un deber.

Al asumir el gobierno, nadie quería aceptar las responsabilidades ministeriales, un


país con anarquía, sin una constitución respetada y con los fondos casi vacíos, el único que
aceptó los ministerios fue su amigo, el estanquero Diego Portales, figura clave en éste
periodo.

Ovalle removió a Ramón Freire de su calidad como Comandante en Jefe del Ejército
y lo envió al exilio, en su reemplazo fue designado José Joaquín Prieto y los revolucionarios
pasaron a ser los oficialistas, bajo disposiciones enviadas por Ovalle al ministerio de Guerra,
y por las estrategias de Prieto, los conservadores triunfaron el 17 de abril de ese año en la
Batalla de Lircay, originándose este periodo de consolidación al cual nos referimos.

Con la guerra ganada, los liberales, en su mayoría fueron exiliados y no pudieron


retornar al país en muchos años, el ejército fue limpiado de los insurrectos, despidiendo a
la mayoría de los comandantes freiristas y sellándose la guerra pacíficamente con el Tratado
de Cuz-Cuz que evitó una nueva batalla pero no fue reconocido por la presidencia. El Tratado
de Cuz-Cuz fue un acuerdo suscrito en el marco de la guerra civil chilena de 1829-1830, la
que tras la batalla de Lirca y dio paso a la denominada República Conservadora. Se firmó
entre los rebeldes pelucones, triunfadores de la contienda bélica, y los pipiolos o liberales
en el pueblo de Cuz-Cuz, actual IV Región de Coquimbo. Acordaron firmar un acuerdo de
unión para terminar con la Guerra Civil. Determinaron no tomar represalias contra ninguno
de los soldados y civiles que hubieran participado en ella. Este tratado o convención fue
desaprobado por Portales y no fue reconocido por el Gobierno de José Tomás Ovalle.

Como una de las prioridades, el gobierno de Ovalle devolvió todas sus posesiones
expropiadas a la Iglesia Católica y la acercó fuertemente al Estado, fijando su alianza en
una especie de concordato, como se llamó al realizado en Portugal.
La prensa y los organismos fueron fuertemente fiscalizados, bajo el control de
Portales y Ovalle, siendo la censura una de las herramientas fundamentales del gobierno.

Ovalle además acercó el congreso con el gobierno y le pidió facultades


extraordinarias, teniendo el gobierno gran control político.

La economía fue superada entregándose los estancos a Diego Portales y


nombrándose Ministro de Hacienda a Manuel Rengifo, además que se incrementó la
producción, sitiando a Chile como el cuarto productor de cobre mundial.

Además, para derogar la anti-conservadora Constitución, Ovalle llamó a una


Asamblea Constituyente, que violaba a la constitución para la elaboración de una nueva,
que se concretaría en 1833.

El país sería cambiado irreversiblemente con estas medidas y disposiciones, además


se daría un pequeño inicio a la fomentada educación del conservadurismo, llamando a
Claudio Gay para la elaboración de estudios e investigaciones sobre Flora y Fauna de Chile.

Sin embargo, la obra más recordada de su breve administración fue ajena a la


consolidación republicana, la creación de la ciudad de Ovalle, la ciudad fue planteada al
presidente y este la financió, sin embargo falleció días antes de su fundación, ésta ciudad
considerada como una gran cripta en su honor fue una muestra de la creciente popularidad
conservadora.

El 8 de marzo de 1831, el presidente Ovalle renunció a la presidencia por una causa


de muerte aún no esclarecida, se dice que fue un ataque al hígado pero oficialmente fue
una tuberculosis fulminante. El 21 de marzo de 1831, Ovalle fallece a una corta edad,
causándose de nuevo la inestabilidad anterior a su gobierno.

La prematura muerte del presidente hace que el poder accidentalmente quede en


manos de su vicepresidente provisorio, el congresista Fernando Errázuriz Aldunate, su
gobierno intentó seguir la línea de Ovalle, a diferencia de éste a Errázuriz le gustaba
gobernar, sin embargo los quiebres con sus ministros y el poco éxito que ocasionó seguir la
fórmula de bajo perfil de Ovalle hizo que su gobierno pasara a la historia sin grandes
cambios y con baja popularidad, ese año llamó a elecciones, las primeras realizadas en
Chiledesde 1829, triunfando finalmente el general José Joaquín Prieto, líder de la revolución.
2.- Gobierno de José Joaquín Prieto (1831-1841)

José Joaquín Prieto(1831-1841) fue el primer decenio presidencial y primer


conservador electo en elecciones. Asumió la Presidencia de Chile18 de septiembre de 1831,
su gobierno marcó finalmente la consolidación conservadora y se tradujo en el orden y las
obras que Ovalle no pudo realizar debido a su carácter provisional.

Entre las obras más importantes de Prieto están la Constitución de 1833, que fue el
resultado de la cuestionada Asamblea llamada por Ovalle en 1830, la consolidación del orden
público y la continuación del depurado del ejército.

Prieto además oficializaría los símbolos patrios y sería el artífice de varias obras
públicas y mejoras viales en el país, producto del auge platero del Mineral de Chañarcillo y
el aumento de exportaciones agrícolas y minerales hacia Estados Unidos.

Diversas escuelas e institutos fueron un importante legado de la administración de


Prieto, contando además con la creación del Ministerio de Justicia e Instrucción Pública, que
cumplía la función del actual Ministerio de Educación de Chile.
La labor del general Prieto fue opacada casi en su totalidad por el verdadero líder
político y hombre fuerte del sistema, el ministro Diego Portales, quien ya con la experiencia
como ministro universal había sido el verdadero consolidador de la república y el ideólogo
del sistema conservador.

Prieto con la promesa del orden fue reelegido en 1836 para un nuevo periodo
presidencial, el cual se vería empañado casi en su totalidad por tragedias y conflictos bélicos.

Al iniciar su segundo mandato, por una recomendación de Portales, Chile


supuestamente amenazado por los movimientos en las naciones al norte del país, le declara
la Guerra a la Confederación Perú-Boliviana. Esta guerra, aparte de empañar la segunda
administración de Prieto, fue la causa original de la rivalidad de Chile con Perú y Bolivia que
desembocó en la sangrienta Guerra del Pacífico décadas más tarde y una rivalidad que se
mantiene hasta la actualidad.

La Guerra contra la Confederación Peru - Boliviana

Con los almacenes libres, Valparaíso se había convertido en el primer centro


comercial del Pacífico. Perú deseaba revertir la situación a favor del puerto de Callao, para
lo cual le agregó impuestos especiales a las mercancías provenientes del puerto chileno.

Entre 1824 y 1825, Simón Bolívar dividió el antiguo Virreinato del Perú en dos estados
independientes: Perú y Bolivia. Pero había un militar que deseaba la reunificación, el
mariscal boliviano Andrés Santa Cruz.

En 1836, Andrés Santa Cruz, que había asumido la presidencia de Bolivia, aprovechó
la anarquía interna en Perú, ganó adeptos y fuerza, y pudo controlar a sus enemigos políticos
en dicho país, Agustín Gamarra y Felipe Salaverry. Así, Santa Cruz apareció como el salvador
del Perú y pudo proclamar la unión de ambas naciones en la Confederación Perú-Boliviana,
de la cual se autonombró su Gran Protector.

Tras el objetivo de reunificar ambos territorios, el extremo norte de Chile y la zona


noroeste de Argentina, Santa Cruz fomentó las conspiraciones contra Portales y convenció
a Freire -exiliado en ese país tras la Batalla de Lircay (La guerra civil, iniciada en diciembre
de 1829, tuvo su desenlace el 17 de abril de 1830 en el campo de Lircay, la victoria de Prieto
fue definitiva y completa, pues entre muertos y heridos, el ejército de Ramón Freire
prácticamente desapareció, para que organizara una escuadrilla y atacara Chile, pero
fracasó.

Portales pasó a la ofensiva; ordenó al marino español Victorino Garrido que iniciara
un ataque contra la escuadra peruana fondeada en Callao. Pese a la inferioridad de la
escuadra chilena, la gran mayoría de los barcos peruanos fueron capturados. Ante esta
situación, la Confederación intentó entablar negociaciones pacíficas.

El gobierno chileno envió a Mariano Egaña a exigir a Santa Cruz la solución de los
temas económicos pendientes y la disolución de la Confederación, entre otras cosas. Como
el Presidente boliviano se rehusó, Egaña dio por declarada la guerra el 28 de diciembre de
1836.

La situación no era muy favorable para Chile, ya que Santa Cruz consiguió el apoyo
de Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos; Y los aliados chilenos eran Argentina y Ecuador,
quienes no se atrevieron a intervenir en el conflicto.

Las consecuencias del conflicto fueron las siguientes:

1.- El gobierno chileno estableció el estado de sitio y dotó de facultades


extraordinarias al Ejecutivo. En 1837 se promulgó la Ley de los Consejos de Guerra,
tribunales que se regían por el código militar y cuyas sentencias no eran apelables.

2.- A causa de estas medidas, la oposición acusó a Portales de autoritarismo. A través


de la prensa se desató una campaña en contra suya y de la guerra. Finalmente, el ministro
fue asesinado el 6 de junio de 1837, producto de una sublevación del regimiento de Quillota
(primer homicidio político relevante en el país).-

3.- La guerra contra la Confederación terminó con la batalla de Yungay, al norte de


Lima, en Perú, donde las tropas dirigidas por el general Manuel Bulnes derrotaron a las
fuerzas de Andrés Santa Cruz (20 de enero de 1839). Santa Cruz huyó a Lima y de ahí a
Arequipa, y como tanto en Bolivia como en Perú se pronunciaron en su contra, se fue a
Guayaquil, Ecuador.
Al llegar a Lima el general peruano Agustín Gamarra, enemigo de Santa Cruz, declaró
terminada la guerra el 6 de marzo de 1839. La Confederación se había desintegrado.

Aunque la guerra fue una victoria para Chile, se disolvió la Confederación y el país
no se afectó casi nada en comparación a lo que se creía, el gobierno se ganó gran oposición,
especialmente Portales, esta oposición no terminaría hasta1861.

Luego originaría una época de paz en el gobierno sucesor, el de su sobrino Manuel


Bulnes Prieto.

3.- Gobierno de Manuel Bulnes (1841-1851)

Manuel Bulnes (1841-1851) fue el segundo decenio presidencial y el segundo


gobierno conservador oficial. Asumió la Presidencia de Chile el 18 de septiembre de 1841,
siendo el segundo Presidente Conservador. Su gobierno, a pesar de ser él militar, fue el más
pacífico de todos.
Su mandato se inició con alta aprobación, debido a ser el gran ganador de la Guerra
contra la Confederación Perú-Boliviana, las condiciones de gobierno le fueron muy
favorables, Chile en auge creciente y libre de oposición relevante.

La preocupación de Bulnes se centró en cuatro pilares fundamentales:

 Colonización
 Pacificación,
 Educación e
 Internacionalización.

Bulnes elaboró en su gobierno la primera ley de colonización, destinada


principalmente a la toma del Estrecho de Magallanes, por sus codiciadas guaneras y puntos
estratégicos militar y comercialmente. También para apaciguar los ánimos en la llamada
Araucanía.

La toma del Estrecho de Magallanes fue exitosa y beneficiosa, siendo este estrecho
además la única vía de comunicación favorable entre el Océano Pacífico y el Océano
Atlántico por muchos años, el inicio de esta colonización fue la fundación del llamado “Fuerte
Bulnes”.

El panorama en la Araucanía fue muy distinto, las etnias ubicadas en la zona no se


frenaron nunca y destruyeron cualquier incursión del Estado. Sin embargo, en la zona de
Llanquihue quedó acordada una ley de colonización con Alemania, que no sería concretada
hasta el gobierno de Montt.

El país sumido en la total calma hizo que los exiliados de la guerra retornaran a Chile,
viviendo desde ese momento el país una real democracia.

La paz en el país sirvió para que Chile incrementara su acción exterior y fuera
reconocido como estado soberano y autónomo oficialmente por el ya desgastado Imperio
Español.

En Educación, Chile, libre de conflictos tuvo bajo la administración de Bulnes un gran


impulso, la creación de diferentes escuelas e institutos y entidades como la Universidad de
Chile entre otras hicieron que en el periodo de Bulnes existiera un gran florecimiento
cultural, caracterizado por el movimiento literario de la Generación de 1842, este importante
movimiento literario haría que cien años después, en 1942, el gobierno de Juan Antonio
Ríos iniciara la entrega del Premio Nacional de Literatura de Chile y los de Arte, mantenidos
hasta la actualidad, en conmemoración de este hecho.

Por su hábil gobierno, Bulnes fue reelegido sin contendores y sin reclamo para un
segundo periodo presidencial en 1846, su segundo gobierno siguió la línea del anterior pero
tuvo una diferencia, aparte del traslado de la casa presidencial al Palacio de la Moneda, que
fue la Revolución de 1851, que rompió con la paz de Bulnes, que fue un movimiento para
evitar la toma de posesión por parte del presidente electo, Manuel Montt.

Antes, y a partir de 1817 los Jefes de Estado de Chile (Directores Supremos,


Presidentes y Vicepresidentes) heredaron el modesto y antiguo palacio de los Gobernadores,
ubicado donde hoy está el Correo Central, en el costado norte de la Plaza de Armas. Este
edificio, a pesar de sus continuas reparaciones era estrecho y pobre de construcción. Su
mayor mérito venía dada por la larga tradición de tres siglos de ocupación por los
gobernantes de Chile (desde Pedro de Valdivia hasta Manuel Bulnes Prieto), y por su
ubicación en la propia plaza principal, entre la Catedral y el edificio de la Real Audiencia,
donde estaba la capilla de los Gobernadores. En 1845 el presidente Manuel Bulnes Prieto,
decidió que pasara a ser la sede del gobierno y la residencia de los Jefes de Estado. El
traslado de las oficinas y de la residencia del Presidente, se hizo por parcialidades, a
mediados de 1846. En el Palacio tendrían su sede el Ministerio del Interior, en la esquina
noroeste de las calles Moneda y Teatinos; la residencia de los Presidentes fue instalada en
la esquina noreste de las calles Moneda y Morandé. La acuñación de moneda siguió
ocupando el sector del Palacio, con sus hornos, calderas y máquinas.
4.- Gobierno de Manuel Montt (1851-1861)

Manuel Montt (1851-1861) fue el último conservador al poder y el penúltimo decenio


presidencial. Asumió la Presidencia de Chile el 18 de septiembre de 1851, su gobierno estaría
marcado por un irreversible declive del conservadurismo y aunque tuvo excelentes logros
se vio empañado por la Revolución de 1851 antes de tomar posesión y la Revolución de
1859, además de diversas acusaciones constitucionales que apagaron la carrera del político.

Montt decidió continuar la línea de su predecesor, además era el primer civil desde
José Tomás Ovalle que ejercía la presidencia en el país (Errázuriz había participado en
la Guerra de la Independencia de Chile), por lo que se demostraba la ya pacificada senda
conservadora.

Montt dió varios impulsos a la educación y la investigación, Andrés Bello, quien


aparte de ser rector de la Universidad de Chile fue el redactor del Código Civil de Chile,
diversas investigaciones concluyeron en el mandato de Montt.

Como ya se dijo, una gran obra de la administración de Montt fue el Código Civil de
Chile, redactado por Bello en 1855 y promulgado ese mismo año por el ministro de justicia,
hijo del ex-presidente Ovalle Francisco Javier Ovalle.
El gobierno de Montt impulsaría las obras públicas, creándose diferentes escuelas,
puentes y caminos, pero el ferrocarril y la fundación de ciudades fueron las principales joyas
de este plan de obras públicas, para la red de ferrocarril además de su ampliación, se creó
la emblemática Estación Central de Santiago y se perfeccionó la red.

Con la mejora de las leyes de colonización, el gobierno de Montt incursionó con éxito
en el sur, produciéndose la llamada Colonización de Llanquihue, obra magna de este
periodo, donde se destacó la figura de don Vicente Pérez Rosales y la del Ministro Antonio
Varas, fundándose las importantes ciudades de Puerto Montt Puerto Varas y otras. Sin
embargo, la Araucanía fue abandonada.

El gobierno de Montt marchaba rápidamente, fue propuesto por los conservadores,


ahora con oposición verdadera y triunfó en las elecciones de manera aplastante, en 1856.

La inauguración de su segundo periodo presidencial traería consigo divisiones y


problemas que no tuvieron mejoría a través del tiempo, la “Cuestión del Sacristán”, en ese
mismo año se produjo el alejamiento del principal aliado del gobierno, la Iglesia Católica,
dimitiendo varios ministros y dividiéndose el partido.

La “Cuestión del Sacristán” fue un suceso histórico ocurrido en Chile en 1856, fue
una acción disciplinaria interna de la Iglesia Católica (el Sacristán Mayor de la Catedral de
Santiago destituyó al sacristán Pedro Santelices por su mal comportamiento, el Cabildo
Eclesiástico lo repuso en su empleo, pero el Vicario General suplente, Vicente Tocornal,
declaró válida la expulsión. Los canónigos reclamaron ante el Vicario General, José Miguel
Arístegui, quien ordenó el cumplimiento de la decisión de Tocornal), pero producto de
diferentes hechos posteriores, terminarían provocando una gran división dentro de la
coalición del gobierno del presidente Manuel Montt y de todo el sistema político: la postura
frente a la posición de la Iglesia en el Estado. El quiebre culminó con la fragmentación
definitiva de los pelucones en dos bandos: Conservadores ultramontanos (cercanos a la
Iglesia Católica) y Conservadores Montt-Varistas o Nacionales (progresistas). Esta
separación debilitó de modo tal al partido conservador que terminaría con la hegemonía
llevada hasta ese entonces en la política de Chile.

Efectivamente, este conflicto se inició en el mes de enero de 1856,


al sacristán llamado Pedro Santelices, a quien se le acusó de haber destrozado de una
pedrada la claraboya de la sacristía, además de beber junto a sus amigos el vino consagrado.
Éste buscó apoyo en el tribunal eclesiástico para revertir tal situación. El tribunal falló a su
favor, razón por la que el edecán recurrió a un tribunal superior en La Serena, el cual
enmendó la sentencia recurrida. Esto motivó a los sacerdotes que componían el Tribunal
eclesiástico a someter el conflicto al conocimiento de los tribunales de justicia civiles, que
tenían perfecta competencia en estos asuntos debido a que no existía una separación entre
el Estado y la Iglesia. La Corte Suprema de Justicia, en uso de sus atribuciones, falló a favor
de los clérigos y resolvió que el sacristán volvería a su puesto.

La resolución de la Corte final no fue reconocida por el entonces arzobispo de


Santiago, Rafael Valentín Valdivieso, para quien esto suponía aceptar la competencia civil
en asuntos eclesiásticos y, por tanto, no repuso al sacristán en su cargo, rebelándose al
fallo. De esta forma se exponía públicamente a ser arrestado e incluso exiliado. El caso era
propicio para poner en una situación incómoda al presidente Manuel Montt, a quien el clero
y los sectores más conservadores de la sociedad se oponían por su visión del Estado y la
sociedad.

El arzobispo, siguiendo con su estrategia y conocedor del espíritu que animaba al


presidente, recurrió a él en su calidad de "Protector de la Iglesia", prerrogativa propia de
los presidentes de la República en la época.

El presidente Manuel Montt se encontró con una disyuntiva. Por un lado no podía
oponerse a la ejecución del fallo de los tribunales de la República y, al mismo tiempo,
comprendiendo que la situación favorecería a sus opositores que buscaban cualquier excusa
para alzarse contra su gobierno. SOLUCION: pidió, mediante su ministro Antonio Varas, a
los eclesiásticos miembros del tribunal y al sacristán retirasen su querella contra el edecán.
El sacristán y los clérigos así lo hicieron, y de esa forma pudo terminar el problema, sin que
Valdivieso fuese arrestado.

Como resultado de este hecho, muchos conservadores que apoyaban el gobierno de


Manuel Montt se distancian de éste por su tendencia patronatista. Gracias a esta lejanía,
estos conservadores encontraron apoyo en los liberales que habían sido sistemáticamente
excluidos de los gobiernos durante la época llamada República Conservadora.
De esta reunión nació la Fusión Liberal-Conservadora, coalición que resultaría
vencedora en la elección presidencial de 1861 con José Joaquín Pérez como candidato. Por
otra parte, con esto se da inicio al sistema de partidos pues la discusión política se dará en
torno a grupos claramente definidos y organizados, y con un eje divisorio claro: la posición
de la Iglesia en el Estado.

El recurso de fuerza utilizado por lo canónigos rebeldes fue un derecho inherente del
Patronato y consistió en la facultad que tenían los miembros del clero de recurrir a los
tribunales ordinarios de justicia para reclamar las resoluciones del tribunal eclesiástico. De
este modo, una cuestión que no parecía tener mayor trascendencia precipitó la ruptura del
Partido Pelucón y generó la discusión pública sobre los límites de las competencias estatales
y clericales.

Desde la revolución hasta 1861, el gobierno de Montt sería criticado por la mayoría
de los sectores políticos y sociales, incluso el propio partido y la Iglesia, la descomposición
del sistema conservador, hizo que para las elecciones de 1861 se buscara un candidato
neutral y de transición, triunfando sin opositor el pseudo-liberal José Joaquín Pérez, quien
a pesar de ser un hombre moderado, con su toma de posesión culminó con la República
Conservadora.

En adelante, los períodos legislativos se sucedieron sin interrupción hasta completar


22 en 1891 (el primero fue en 1828). A partir del decenio del Presidente don José Joaquín
Pérez Mascayano (1861-1871), considerado como de “transición” entre la etapa
conservadora y la liberal, las prácticas parlamentarias (leyes periódicas, interpelaciones a
los ministros de Estado, votos de censura, obstrucciones y otras) pasaron a ser una
constante en la vida política nacional.

Los liberales, apoyados por los nuevos radicales, insistían en reformar la Constitución
para democratizar al país y en este sentido, haciendo uso de las herramientas políticas
vistas, luchaban desde el Congreso contra el Ejecutivo.

No obstante, cuando alcanzaron la Presidencia de la República con don Federico


Errázuriz Zañartu (1871) hicieron todo lo posible para frenar las aspiraciones del Congreso,
lo que era una constante cualquiera fuera el sector político que asumiera.
En aquellos años comenzaron también a despacharse numerosas leyes de
importancia. Nacieron los primeros Códigos (Civil, 1855; de Comercio, 1864; Penal, 1874).

Asimismo, y en armonía con el auge del liberalismo y del radicalismo, se aprobaron


las llamadas “leyes laicas” destinadas a restringir la injerencia de la Iglesia Católica, apoyada
por los conservadores, en la sociedad: en 1875 se abolió el fuero eclesiástico, en 1883 se
despachó la ley de secularización de los cementerios y en 1884, la ley de matrimonio civil y
de registro civil.

Las “leyes laicas” son:

 Ley de los cementerios laicos (2 de agosto de 1883): Estableció la no discriminación por


credo religioso en el entierro de las personas en los cementerios creados con fondos
fiscales o municipales. Los entierros solo se podían efectuar en los cementerios. Se
prohibieron los entierros en recintos particulares. Ante la negativa de la Iglesia
católica de cumplir dicha norma, se decretó la prohibición de entierros en las parroquias
o cementerios privados autorizados después de 1871 (en la práctica significó la clausura
del Cementerio Católico de Santiago). Derogado el decreto en 1890, se pudieron
establecer cementerios particulares.

 Ley de matrimonio civil (16 de enero de 1884): Eliminó la facultad de la Iglesia católica
de consagrar y registrar legalmente los matrimonios. Por esta ley dichas funciones pasan
al Estado. No se reconoce como legal el matrimonio religioso, sólo es válido aquel
celebrado ante un oficial del registro civil.

 Ley de registro civil (julio de 1884): Complementó las dos anteriores al establecer el
registro civil como la instancia encargada de registrar los nacimientos, matrimonios y
defunciones. Retira de la Iglesia la función que cumplía por medio de los registros
parroquiales.
Durante la Guerra del Pacífico (1879-1883), el Congreso sesionó normalmente.

Aunque las incompatibilidades, el sufragio universal y el parlamentarismo ya existían


en Derecho, aún era el Ejecutivo el que detentaba una mayor cuota de autoridad. Cuando
el Presidente don José Manuel Balmaceda Fernández asumió el mando, en 1886, lo hizo
apoyado por sectores liberales que sostenían un presidencialismo, ahora antioligárquico, ya
que se mostraban proclives, como el Presidente, a la nacionalización de la minería del salitre
en manos de capitales privados chilenos y extranjeros.

El choque entre Poder Ejecutivo y Legislativo, este último dominado por la oposición,
se hizo cada vez más intenso. En 1890, el Senado decidió no discutir la ley de presupuesto
para 1891. El Presidente replicó clausurando el período de sesiones del Congreso y luego
anunció su propósito de gobernar con el presupuesto de 1890, con lo que se precipitó aún
más la crisis. El Presidente Balmaceda fue quedando solo, mientras sus más ardientes
opositores del Senado preparaban un acta para deponerlo. En el verano de 1891 estalló la
guerra civil con el levantamiento de la escuadra y terminó con el triunfo militar de las fuerzas
congresistas, en agosto de 1891. Luego, con el gobierno del Presidente don Jorge Montt
Alvarez se inició una práctica parlamentarista incompleta e ineficaz, período que se ha
llamado “república parlamentaria” y que se mantuvo hasta 1925.

REPÚBLICA LIBERAL (1861- 1891)

Entre 1861 y 1891 se expresan en Chile cada vez con más fuerza las nuevas ideas
liberales que demandaban cambios a la sociedad conservadora y portaliana de la época, se
viven en Chile transformaciones políticas sociales y económicas. Se comienzan a generar los
primeros grandes debates en torno a cómo delimitar los poderes del Presidente y aumentar
los del Parlamento, disminuir progresivamente el poder de la Iglesia católica, en el ámbito
político hasta llegar a la separación del poder civil y del poder religioso.

La República conservadora o autoritaria que se había consolidado con la Constitución


de 1833, dio paso a la República Liberal, que como indica su nombre, estimulaba un mayor
liberalismo en Chile. Así, entre 1861 y 1891, se aprobaron leyes que buscaban limitar la
influencia de la Iglesia en la sociedad y en la política chilena.

Sus ideas se centraban en:

a) La búsqueda de equilibrio entre los poderes del Estado.

b) Búsqueda de una disminución del poder e intervención de la Iglesia Católica en aspectos


que se consideraban como propios del Estado.

c) Búsqueda de igualdad ante la ley y mayores libertades individuales.


Los liberales impulsaron los cambios que habían planteado en su programa de
gobierno, para lograrlo realizaron una serie de reformas, se deseaba por una parte:

a) Limitar el poder del Presidente.

b) Aumentar las libertades individuales (libertad de conciencia).

c) Se dictaron las “Leyes Laicas” a partir de 1883 la ley de Cementerios Laicos, la ley de
Matrimonio Civil y la ley de Registro Civil, que quitaron a la Iglesia los registros de
nacimientos, defunciones y matrimonios; además, de la tuición sobre los cementerios.

Durante este período Chile logró mejorar considerablemente su situación económica


debido a la explotación de importantes yacimientos mineros de plata, cobre y de salitre.
Esta bonanza económica trajo consigo una serie de problemas con Perú y Bolivia que
derivaron en 1879 en la Guerra del Pacífico.

Como consecuencia de la victoria sobre Perú y Bolivia en la guerra del Pacífico, se


incorporaron al territorio nacional Tarapacá y Antofagasta, se anexó la Isla de Pascua y se
ocupó las tierras de la Araucanía.

La República Liberal, finalizó con la guerra civil de 1891 entre los partidarios de un
gobierno presidencialista y aquellos que apoyaban un sistema parlamentario.

Entre los años 1886 y 1891, gobernaba al país el Presidente José Manuel Balmaceda.

1.- Gobierno de José Joaquín Pérez (1861-1871)

Llega al poder como un candidato de consenso, siendo el último presidente que


gobierna con reelección inmediata.
Dentro de los hechos que destacaron su gobierno tenemos:

- Tratado de límites con Bolivia (1866).


- Ley interpretativa del artículo 5° de la constitución, que establece, en la practica la libertad
de cultos.
- Descubrimiento del mineral de Caracoles (1870) y salitre en el Salar del Carmen.
- Colonización al sur del Biobío. Comello Saavedra desplaza la frontera con los mapuches
hasta el río Malleco (1861).
- Reforma constitucional que prohíbe la reelección inmediata del presidente (1871).
- Guerra contra España (1865-1866).
2.- GOBIERNO DE FEDERICO ERRÁZURIZ ZAÑARTU (1871-1876)

La constitución sufre importantes reformas: Ley Orgánica de Tribunales (1875),


Código Penal (1874), libertad de enseñanza y de imprenta.

- Remodelación de la ciudad de Santiago, bajo la influencia de Vicuña Mackenna.

- Se convirtió en paseo público el Cerro Santa Lucia y el Parque Cousiño.

- Se abrieron nuevas avenidas y calles.

- Se modernizaron las plazas públicas y comenzaron a usarse tranvías urbanos.

- Ministro de la Corte, el conservador Abdón Cifuentes dicta un decreto el 15 de enero de


1872, mediante el cual los colegios particulares que existían (principalmente católicos)
podían tomar ellos mismos los exámenes a sus estudiantes, sin la intervención de comisiones
venidas desde el Instituto Nacional. Esta medida, que generó una serie de exámenes
dudosos y la extensión de certificados de enseñanza fraudulentos, fue duramente criticada
por los sectores liberales del gobierno.

- Extensión del ferrocarril hacia el sur (Chillan, Angol).


- Tratado de límites con Bolivia (1874).

1.- ANÍBAL PINTO GARMENDIA (1876 – 1881)

Le tocó asumir la presidencia con el país en una profunda crisis económica. Para
revertir la situación, trató de captar recursos, creando nuevos impuestos y restringiendo el
gasto público.

Aun se recuerda al gobierno de Aníbal Pinto por las siguientes obras:

- Establecimiento de la incompatibilidad de los cargos judiciales con los parlamentarios y


administrativos (1880).
- Tratado de límites con Argentina (1881).
- Ley de inconvertibilidad de los billetes de banco (1878): comienza con el régimen
monetario del papel con las consiguientes inflaciones.
- Inicio de la Guerra del Pacífico (1879).
4.- DOMINGO SANTA MARÍA (1881 – 1886)

El gobierno de Domingo Santa María, sin duda alguna se le conoce como el que más
avanzó el proceso de laicización de la vida nacional. También se pueden destacar los
siguientes hechos que caracterizan el desarrollo de su administración:

- Fin de la Guerra del Pacífico (1883).


- Pacificación de la Araucanía.
- Ley de garantías individuales (1884) que limitó el derecho de las autoridades judiciales y
administrativas para arrestar a las personas.
- Ley de Sufragio Universal (1884): que eliminó el requisito de poseer una renta para
participar en procesos eleccionarios.
- Reforma constitucional que eliminó el veto presidencial (1882).
- Aprobación de las leyes Laicas: ley de Cementerios Laicos, comunes para individuos de
cualquier credo (1883); Ley de Matrimonio Civil y Registro Civil (1884), privándose al clero
de su derecho de constituir legalmente a la familia, función que pasó a desempeñar el
estado.

5- JOSÉ MANUEL BALMACEDA FERNÁNDEZ (1886-1891)

Su gobierno lo inició en condiciones favorables, pues gozaba de mayoría política en


el Congreso (liberales, nacionales y radicales); la elección de Mariano Casanova como
Arzobispo de Santiago apaciguó las disputas político - religiosas, y el crecimiento de las
rentas fiscales le dio, en sus inicios, estabilidad al régimen.
Balmaceda pretendía concretar un programa político de unidad nacional, que
comprendía tres propósitos básicos:

1- Concretar la unidad de todos los partidos "liberales", con el propósito de realizar un


amplio programa de progreso material e intelectual para la nación.

2- Neutralizar la acción de los conservadores, lo que impulsó a reanudar relaciones con la


Santa Sede.

3- Llevar a cabo un vasto programa de obras públicas y fomento a la educación nacional.

El presidente Balmaceda se caracterizó por ser un hombre inteligente, brillante,


orgulloso y susceptible; "amaba la gloria e identificaba la patria con su persona. Esta
complejidad contribuyó a dar giro dramático a la lucha que sostuvo con el Congreso, la que
concluyo con su caída"
El desahogo financiero con que recibió al país le permitió a Balmaceda llevar a cabo
una vasta política educacional y obras públicas.

En lo económico sostuvo: "La función fundamental -del Estado- es solo garantizar la


propiedad y la libertad, pues únicamente la libertad de trabajo alumbra y vivifica la industria"
(discurso pronunciado en Iquique en 1889).

Obras:

Política educacional:

- Fundación del Instituto Pedagógico (1889).

-Introducción del sistema concéntrico (1889).

- Se funda la primera universidad particular: La Pontificia Universidad Católica, obra de


Mariano Casanova (1888).

- Se construyen los edificios para escuelas: Medicina, Normal de Preceptores, Militar, Naval,
de Artes y Oficios, Internado Nacional.

Obras públicas:

Con el propósito de atender las necesidades de un vasto plan en el sector, crea el


Ministerio de Obras Públicas en 1887. Entre las grandes realizaciones materiales destacan:

- Canalización del Mapocho.

- Construcción del Viaducto del Malleco.

- Construcción del dique seco de Talcahuano.

- Construcción de más de mil kilómetros de líneas férreas, extensión de líneas telegráficas


e instalación de agua potable.
- Construcción de edificios públicos como: gobernaciones provinciales, cárceles, hospitales,
escuelas, y liceos.

LA CODIFICACIÓN EN CHILE

El proceso es codificación es susceptible de dividirlo en tres etapas.

A) 1822 - 1833 donde se plantea la fijación por parte de O’Higgins que constituye una
formulación germinal. En este período se confronta la idea de formar nuevos códigos
(codificación) con la de reformar los existentes (consolidación), pero también la de encargar
la tarea a un individuo para seguidamente encargarla a una comisión.

B) 1833 – 1840, con la iniciativa de Manuel Camilo Vial de hacer una recopilación del Código
Civil, “no se habla ya de fijación”.

C) 1840 - 1855, es la etapa de la codificación, empieza con el proyecto de ley de Andrés


Bello de 10 de agosto de 1840, esta etapa distingue 3 períodos:

1.- 1840 a 1847, caracteriza al período el trabajo de comisiones, entre otras la


comisión de legislación del congreso nacional, responsable de la redacción del código y la
junta revisora, ideada por ley de 29 de octubre de 1841 para examinar los trabajos
despachados por la primera.

2.- 1847 a 1853, corresponde al trabajo solitario de Andrés Bello, destinado a


sustituir el título preliminar publicado en 1841.

3.- 1853 a 1855, funcionó una nueva comisión revisora creada por decreto
presidencial del 26 de octubre de 1855, examinó el proyecto de 1853 y más tarde revisó
proyecto de 1855, hasta que finalmente se promulga el Código Civil, el 14 de diciembre de
1855, entrando en vigencia el primero de enero de 1857. (Código una sola ley – recopilación
de muchas leyes).

Las primeras décadas fueron invertidas en darle a Chile una estructura política e
institucional estable, lo que se logró finalmente con la Constitución de 1833. De este modo,
en la década de 1830 comenzaron las obras para rearmar el resto de la legislación patria.
Un avance substancial en algunas materias de interés urgente en la fecha, se dio con la
promulgación de las llamadas Leyes Marianas, en 1837. Fueron redactadas por don Mariano
Egaña.

Las Leyes Marianas

Se dictaron bajo el D.F.L. del 2 de febrero de 1837. Se refieren

a.- Fundamento de la Sentencia.

Señala: "Toda sentencia se fundará breve y sencillamente".

La ley está hecha para que un grupo pequeño lo entienda.

El fundamento se reduciría solo a esclarecer los casos de derecho o de hecho, sobre


la que recae la sentencia judicial, señalando las leyes utilizadas.

b.- Decreto sobre la implicancia y competencia de los jueces. Los jueces deben ser
imparciales. Además se dictan normas sobre el procedimiento ejecutivo.

c.- Recurso de nulidad, siguiendo hasta la elaboración del Código de Procedimiento Civil.

d.- Juicio Ejecutivo.-

Sin embargo, en el siglo XIX era fortísima la influencia del Código Napoleónico, y del
movimiento codificador en general. Chile debía tener su propio Código Civil. Esto se logró
con la promulgación del llamado Código de Bello, apodo informal con el que se conoce a un
Código Civil que fue casi íntegramente redactado por el jurista Andrés Bello, publicado en
1855, que entró en vigencia en 1857, y que aún sigue vigente, aunque con grandes
modificaciones, tanto en el interior del mismo, como por obra de leyes complementarias
que han ido extrayendo materias desde el mismo.

Este Código Civil fue después complementado por otros códigos que trataban
materias substantivas, y de este modo se promulgaron:
Código de Comercio (1865)

Código Penal. (1875)

Durante la segunda mitad del siglo XIX se produjo también la codificación de las
materias procesales.

Ley de Organización y Atribuciones de los Tribunales, (1875) antecedente inmediato


del actual Código Orgánico de Tribunales. Por su parte, en 1903 entró en vigencia el Código
de Procedimiento Civil, y en 1907, el Código de Procedimiento Penal. Este último hoy en día
está casi por completo derogado, siguiendo vigente sólo para los hechos punibles acaecidos
con anterioridad a la entrada en vigencia del moderno Código Procesal Penal.

En el siglo XX, la tendencia en materia de codificación fue a promulgar códigos


sectoriales, esto es, que cubrieran un determinado sector de la vida jurídica. De esta manera
entraron en vigencia sucesivos Códigos del Trabajo (de 1931 y de 1994) (materia antes
regulada por el Código Civil), el Código Tributario, el Código Sanitario, etcétera. Una función
análoga, aunque no de tanta profundidad como un código, la han cumplido las llamadas
"leyes de base" (por ejemplo, la Ley de Bases del Medio Ambiente, la Ley Orgánica
Constitucional de Enseñanza, etc.).

Códigos vigentes

Código Civil. Vigente desde 1857.

Código de Comercio. Vigente desde 1865

Código Penal. Vigente desde 1875.

Código de Procedimiento Civil. Vigente desde 1903.

Código de Procedimiento Penal de 1907.

Código de Derecho Internacional Privado de 1928. También conocido como Código


Bustamante. Vigente en Chile, con la reserva de que se aplicará sólo en lo que no
contravenga a la legislación interna chilena.
Código Orgánico de Tribunales. Vigente desde 1943.

Código Sanitario de 1968.

Código Tributario de 1974.

Código de Aguas de 1981.

Código de Minería de 1983.

Código Aeronáutico de 1990.

Código del Trabajo de Chile de 1994.

Código Procesal Penal. Vigente desde 2000 (sin embargo, entró en vigencia de manera
escalonada entre 2000 y 2005, según la región del país.

GUERRA CIVIL DE 1891

CAUSAS Y DESARROLLO

El gobierno de Balmaceda (1886-1891) llevado a cabo de forma pacífica, si no por


una guerra civil, que, hasta hace unos años, dividió generaciones de familias; en la cual, el
Congreso se levantó en armas contra el presidente, contando con el apoyo de la Armada y
este para defenderse con el apoyo del Ejército.

El primer combate de la Guerra Civil fue el combate de Zapiga (23 de enero de 1891),
el cual desencadeno la campaña en el Norte. Posteriormente, los combates más importantes
en el Norte fueron el de Dolores (15 de febrero), el combate de Huara (17 de febrero), el
combate de la Aduana de Iquique (19 de febrero), la batalla de Pozo Almonte (7 de marzo)
y los combates navales de Caldera y Calderillas (en uno de estos dos combates fue hundido
el buque de guerra Blanco Encalada). La guerra finalizo con los combates de Concón (21 de
agosto) y Placilla (28 de agosto), en donde, las tropas Presidenciales, fueron definitivamente
derrotadas por las tropas Congresistas.
El presidente Balmaceda se refugió en la embajada Argentina en Chile, en donde
espero hasta finalizar su mandato oficialmente (18 de septiembre), al día siguiente se acostó
en su cama perfectamente vestido y se disparó en la cabeza. Así finaliza esta trágica guerra
civil, en la cual se derramo sangre chilena en tierra chilena.

I.- El propósito de esta investigación es resumir de forma simple la Guerra Civil de 1891,
para aquellos lectores recién entrados en esta materia.

Hay distintas causas para que se halla llevado esta trágica guerra, pero la principal causa
son los recursos producidos por el salitre.

La incorporación de las provincias de Tarapacá y Antofagasta y del territorio de Arica (en un


comienzo de manera transitoria), los que concentraban casi la totalidad de los yacimientos
salitreros del planeta, durante la Guerra del Pacifico. A partir de ese momento la economía
nacional tuvo un giro a la exportación del denominado oro blanco que despertó un nuevo
sueño minero que opacaría todo lo conocido en materia de expectativas, ganancias y
frustraciones.-

El Estado no invirtió en esta nueva área de la economía, solo se limita a cobrar


impuestos por la exportación del mineral quedando la explotación de este en manos de
privados extranjeros, principalmente ingleses. El presidente Balmaceda quería nacionalizar
el salitre, de manera que las ganancias de este mineral fuesen para el Estado; este dinero
iba a ser ocupado en obras públicas y mejorar la producción del país, pero muchos
inversionistas de las salitreras eran senadores y diputados del Congreso Nacional, y al
nacionalizarse el salitre estos perderían sus ingresos. Como consecuencia, estos se
sublevaron contra el presidente con el apoyo de la Armada Nacional, dejando al presidente
el Ejército para defenderse.

En enero de 1891, el Congreso no aprobó las leyes de presupuesto para ese año,
presionando así al presidente, pero este no hizo caso a la presión y siguió gobernando con
las leyes del año anterior, los congresistas, tacharon a Balmaceda de autoritario y declararon
que, si Balmaceda no cedía el cargo, lo obligarían mediante la fuerza. Balmaceda no cedió.
Así, el 7 de enero de 1891, dio inicio a la Guerra Civil, que termino con la muerte del último
presidente liberal y el inicio de los gobiernos parlamentarios en Chile.
1.- Balmaceda y su gobierno.

José Manuel Balmaceda Nació el 19 de julio de 1840 en Bucalemu, en una familia


acaudalada. Sus padres fueron Manuel José Balmaceda y María Encarnación Fernández.
Estudio con Los Padres Franceses y termino su educación en el Seminario Conciliar. Entro a
temprana edad a la política y, con tan solo 24 años, fue electo diputado.

Siempre mostro entusiasmo por la doctrina liberal y milito en el Club de la Reforma,


en donde demostró ser un gran orador. Durante el periodo del presidente Aníbal Pinto
ejerció en la Cámara de Diputados, pero su verdadera participación política empieza con el
gobierno de Domingo Santa María, en donde este primero lo nombro Ministro de Relaciones
Exteriores y después Ministro de Interior y Defensa, para finalmente convertirse en el
sucesor de Santa María.

Su gobierno: José Manuel Balmaceda tenía 46 años cuando asumió a la presidencia


el 18 de septiembre de 1886, tenía sus ideas muy claras y eso se puede reflejar en su
programa de gobierno, que comprendía los siguientes pasos:

Buscar la paz de los espíritus católicos agitados por la secularización de las costumbres
sociales, mediante un entendimiento con la Santa Sede que regularizara las relaciones
suspendidas durante el anterior gobierno;

Acercar a los distintos sectores del liberalismo, puliendo sus diferencias y otorgándoles
responsabilidades gubernativas, de manera que pudiese su sueño de unificar a la gran
familia liberal y asegurar la continuidad de las administraciones inspiradas en dicha filosofía
política;

Aprovechar los ingresos derivados de la exportación del salitre, guano y de los minerales
de rendimiento aduanero, en un vasto plan de obras públicas y ferrocarriles, en
construcciones y dotaciones educacionales, en activar los planes de colonización de la
Araucanía, ya pacificada por su antecesor, y en incrementar la escuadra nacional, como
asimismo el equipo del ejercito;

Nacionalizar la industria salitrera que estaba en manos capitales extranjeras,


especialmente inglesas. Adquirir para el Estado los mantos aun en poder de otros
particulares y también ferrocarriles destinado al transporte de dicho nitrato;
Lograr la conversión metálica suprimiendo las autorizaciones de emisión de papel moneda
otorgadas a los bancos privados y creando un banco del Estado como regulador de la función
monetaria;

Estimular e intensificar la actividad agrícola para abastecer todo el consumo interno,


importando exclusivamente aquellas maquinarias o elementos que no pudiesen fabricarse
en el país, como así también las cepas, semillas y reproductores destinados a elevar la
calidad y rendimiento agropecuario;

Acelerar el crecimiento de la industria fabril en todos sus rubros, de manera de abastecer
satisfactoriamente el mercado interno, eliminando la internación de artículos que se puedan
elaborar en el país y sin permitir los monopolios industriales, para la cual se estimularía la
creación de factorías paralelas en cada especialidad;

Y, entre otras aspiraciones, propiciar las reformas constitucionales tendientes a una


efectiva independencia de los poderes Ejecutivos, Legislativos y Judiciales, sin que ello le
quitase responsabilidades y cooperación al progreso general.

Muchos puntos del programa del presidente se pudieron lograr a pesar de la incomprensión
de su propio partido político y los otros problemas que se encontró a lo largo de su gobierno.

Durante su gobierno, a diferencia de sus antecesores que encontraron cierta


estabilidad política, tuvo que cambiar su gabinete muchas veces (catorce en total). Ello
debido a las exigencias del Congreso y a su sueño de unificar a los partidos liberales,
dándoles oportunidades de tomar parte directamente en el gobierno. Durante su
administración se encontró con dos grandes problemas: la epidemia de cólera aparecida en
ese mismo año y que se cobró 30.000 vidas, y la guerra civil, que se produjo ocho meses
antes de que terminase su mandato, donde murieron aproximadamente 10.000 chilenos,
entre ellos, él mismo.
2.- El inicio del conflicto.

Antes de revisar lo que fue el inicio del conflicto, hay que echar un vistazo a las causas.
Hubo diferentes causas para que el Congreso no estuviese de acuerdo con el Presidente
Balmaceda, estas son las principales:

La nacionalización del salitre: tras la Guerra del Pacifico, Chile se hizo con todo el salitre
del Norte, pero el 55% se los dio a los ingleses, el 30% se los repartieron naciones como
Alemania y Francia y el 15% restante se lo quedo, el problema era que la mayor parte de
ese 15% era de privados y muy poco (por no decir nada) del Estado. De los privados, la
gran parte era de John Thomas North, Congreso (de las persona que lo conformaban) y al
nacionalizarse el salitre estos perderían sus inversiones, por lo tanto, North apoyo
financieramente la Guerra Civil, defendiendo así sus intereses propios en el Norte del país.

La unificación de los liberales: los liberales no se quería unificar debido a intereses propios
(como en el caso del salitre).

Conflicto entre conservadores y radicales: estos dos caminos ideológicos siempre se han
peleado, desde Diego Portales que es así, por lo tanto Balmaceda no los incluía en la
participación del gobierno. Oposición desde siempre de los conservadores: Balmaceda
siempre conto con la desaprobación de los conservadores (desde que era Ministro de
Interior).

Loco y derrochador: Carlos Walker Martínez (Diputado conservador) jactaba apoyaban más
fuerte en sacar a Balmaceda de la presidencia.

Desaprobación del Parlamento para ocupar el dinero producido por el salitre.

Ya visto las principales causas de la desaprobación del Congreso, podemos trabajar en lo


que fue el inicio del conflicto que tanta sangre derramo y a tantas familias separo.

Primero hay que entender que la llamada oposición (congresistas) no estaba en contra del
avance, si no de la forma en que se realizaba, les molestaba la política presidencialista de
Balmaceda y el hecho de que este fortaleciese y agrandase el Estado, quitándole poder al
Congreso (Parlamento).
Balmaceda siempre supo de la desaprobación de los conservadores y radicales (y más tarde
los nacionales), pero en 1890, los liberales le empezaron a abandonar (como ya se dijo,
para defender sus intereses propios en el salitre, principal causa de la desaprobación hacia
Balmaceda). Pero todo empieza cuando Julio Zeguers, diputado liberal y amigo de
Balmaceda, lo abandona, apoyando la Guerra Civil. La Cámara apoyó esta moción.

Las dos herramientas del Congreso para presionar al presidente, son hacer que cambie de
gabinete y dejarlo sin recursos. La primera la hacen variadas veces, causando que el
presidente Balmaceda cambe catorce veces su gabinete, provocando una inestabilidad
ministerial. La segunda se hace en enero de 1891, no aceptando las leyes de presupuesto
para ese año, Balmaceda decreta que se ocuparan las del año anterior. Al no ceder
Balmaceda, el Congreso llama al gobierno del mandatario de “autoritario y fuera de ley”.-

Balmaceda termina cerrando el Congreso Nacional, clausura los lugares de reunión y


encarcela a la oposición. Los congresistas firman un acta en el que se declara que el
presidente debe abandonar el cargo o habrá sublevación, el presidente se niega. El Congreso
se traslada a Iquique con el apoyo de la Armada, en donde se aseguran las riquezas
salitreras y forman un gobierno provisional.

Así, el 7 de enero del año 1891, se da inicio a la Guerra Civil, en la cual murieron 10.000
hombres.

3.- Campaña del Norte y Masacre de las Cañas.

Al dividirse las Fuerzas Armadas, los bandos quedaron con los congresistas y la Armada por
un lado y a los balmacedistas y al Ejército por el otro.

La mayoría de los combates se produjeron en el Norte, para finalizar la Guerra Civil con los
combates de Concón y Placilla. Ahora se hablara de los primeros.

- Combate de Zapiga, 21 de enero de 18913 : Primer enfrentamiento armado de la


guerra civil. En las inmediaciones de Zapiga se encontraron las fuerzas gobiernistas
(balmacedistas) comandadas por el teniente coronel Marco A. Valenzuela y las de los
congresistas dirigidas por Estanislao del Canto. Estos últimos salieron de Pisagua con una
columna de infantes navales de un centenar de hombres, con cañones y ametralladoras. De
Iquique salió un destacamento de 60 infantes de la 4° de línea, una compañía de granaderos
y 25 artilleros sin cañón para enfrentarse con las fuerzas del Congreso. El combate duró
media hora, Del Canto se retiró a Pisagua ante la presión, y el destacamento de Valenzuela
a Negreiros.

- Combate de Alto Hospicio: Debido a la sublevación de la guarnición de Pisagua,


que se declaró partidaria del bando revolucionario, el intendente de Tarapacá ordenó la
recuperación del puerto. La defensa de Pisagua quedó a cargo de Estanislao del Canto.
Durante el ataque, que se libró en una zona vecina del Alto Hospicio, los partidarios del
gobierno fingieron rendirse, engaño en que cayeron los revolucionarios, que fueron
apresados. Cuando ambos grupos entraron en Pisagua, los ciudadanos se percataron del
truco gobiernista y los desarmaron. Sin embargo, la victoria fue parcial, pues los
revolucionarios tuvieron que abandonar Pisagua ante la inminente llegada de un segundo
cuerpo balmacedista, que entró en la ciudad el 27 de enero.

- Combate y toma de Pisagua, 6 de febrero 1891: Los revolucionarios, encabezados


por el coronel Estanilao del Canto Artigas, contaban con el apoyo de los buques de la
escuadra insurrecta Cachapoal, Amazonas, O'Higgins y el blindado Cochrane. Por su parte,
las fuerzas del gobierno balmacedista se hallaban en Pisagua, a cargo del teniente coronel
Manuel A. Valenzuela. Los barcos surtos frente al puerto comenzaron un cañoneo a las 6 de
la mañana, luego se desembarcó a 200 hombres en el sector de Playa Blanca al mando de
Manuel Aguirre y otros tantos fueron desembarcados en Punta Pichalo al mando del mayor
Julio Moraga. De las fuerzas gobiernistas, la caballería pudo escapar, pero los demás se
rindieron luego de combatir, con un balance de 12 muertos, 29 heridos y 176 prisioneros.
Quedaron en poder de las tropas revolucionarias seis cañones y 160 fusiles. Las fuerzas
opositoras a José Manuel Balmaceda tuvieron sólo 8 muertos y diez heridos.-

- Batalla de Dolores, 15 de febrero de 1891: Combate que tuvo lugar en el cerro


Dolores (el mismo escenario de la batalla durante la Guerra del Pacífico). Las tropas
gobiernistas, dirigidas por el coronel Eulogio Robles Pinochet, se enfrentaron a las
revolucionarias de Estanislao del Canto. Terminó con la derrota balmacedista.

Combate de Huara, 17 de febrero de 1891: Episodio bélico que marcó el inicio de la campaña
del norte después de la toma de Pisagua. En él las tropas que defendían el gobierno de José
Manuel Balmaceda, unos 900 soldados al mando del coronel Eulogio Robles, se enfrentaron
con el ejército 96 Guerra civil de 1891: causas y desarrollo. congresista formado por unos
1.200 hombres, al mando del coronel Estanislao del Canto, en la estación de Huara, en la
vía férrea que iba de Pisagua a Iquique. El combate tuvo una duración de 3 horas y en él
las fuerzas gobiernistas (balmacedistas) lograron derrotar a las parlamentarias
(congresistas), las cuales debieron escapar del lugar, dejando abandonados a sus heridos.
A pesar de esta victoria, el ejército de Robles no fue capaz de mantener el control de Iquique
y terminó perdiendo todo el norte del país.

Combate de la Aduana de Iquique, 19 de febrero de 1891: Los revolucionarios, comandados


por Vicente Merino Jarpa, se habían hecho fuertes en Iquique y habían ocupado el edificio
de la aduana. El gobierno ordenó a José María Soto Pereira que retornara a la ciudad, pero
este contaba solo con un destacamento de 150 hombres, de los cuales 120 murieron en la
batalla. Los congresistas recibieron apoyo de los buques Esmeralda y Blanco Encalada, que
cañonearon a los balmacedistas. Estos últimos, vencidos, acordaron con los revolucionarios
el abandono del lugar, lo cual se llevó a cabo con todos los honores de rigor.-

Batalla de Pozo Almonte, 7 de marzo: El coronel Estanislao del Canto comandaba a 1.700
soldados revolucionarios, que se enfrentaron a 1.200 hombres de las fuerzas gobiernistas,
al mando del coronel Eulogio Robles. Estas últimas se encontraban desplegadas en las lomas
al sur de la localidad de Pozo Almonte, A las 7 de la mañana los insurrectos iniciaron fuego
de artillería. En el transcurso de este combate el coronel Robles resultó herido. A mediodía,
las tropas del gobierno se dispersaron; 500 soldados se evadieron del escenario de batalla,
y otros se quedaron renovando los combates y arrasando a la población. El desenlace dio
como resultado 400 muertos para el bando del gobierno y 397 en el revolucionario. Como
resultado de este enfrentamiento, el presidente Balmaceda perdió la región de Tarapacá,
donde se realizaban las operaciones de los sublevados y funcionaba la Junta de Gobierno
revolucionaria (Iquique). 97 Rosario Meza Martínez

Combate Naval de Caldera, 23 de abril: Enfrentamiento marítimo. Las fuerzas navales del
presidente de la República contaban con el apoyo de dos torpederas, la Almirante Lynch y
la Almirante Condell, que se enfrentaron al blindado Blanco Encalada. Los comandantes de
aquéllas, Alberto Fuentes y Carlos E. Moraga, respectivamente, decidieron el ataque. El
Blanco Encalada recibió un impacto definitivo en su costado derecho, producto de uno de
los torpedos disparados por la Lynch, e hizo agua en pocos minutos. Pese a que los
revolucionarios fueron derrotados y sufrieron numerosas bajas, el presidente de la cámara
de diputados, Ramón Barros Luco, que se encontraba a bordo del Blanco Encalada, fue uno
de los que logró escapar.

Combate de Vallenar, 7 de julio de 1891: Las fuerzas del Congreso, opositoras a Balmaceda,
habían dejado un piquete de caballería en Vallenar. El 27 de junio, 168 soldados del
regimiento Coquimbo, dirigidos por el comandante gobiernista Villalobos, ocupó Vallenar sin
oposición, tres días después esta ciudad fue recuperada por los congresistas. El 7 de julio,
el comandante Almarza trató de sorprender al enemigo y cortarle el paso, siendo repelido
por una descarga de fusilería. La guarnición parapetada en los edificios se retiró en busca
de socorro. Hubo 13 muertos y 23 heridos de ambos bandos.

Masacre de las Cañas: En la noche del 19 de agosto de 1891, 70 jóvenes de la alta sociedad
y 20 artesanos Martínez, el grupo planeaba destruir el puente Maipo (que servía como línea
telegráfica), para evitar la organización de las tropas balmacedistas, en eso entraron
sorpresivamente fuerzas presidencialistas y fusilaron a la mayor parte sin juicio previo.

Concón y Placilla. Famosos son estos combates que decidieron el fin de la Guerra Civil, más
bien son los más conocidos y esto es debido a las cosas que pasaron en ellos. Estos son los
dos últimos combates que ocurrieron en la Guerra Civil. 98 Guerra civil de 1891: causas y
desarrollo. Después que los congresistas se tomaran el Norte, fijaron la mira en la zona
centro, primero se trasladaron tropas a Concón, y el 21 de agosto de 1891 se produjo la
batalla en dicha localidad. El combate inicio a las 7:30 a.m. con los disparos de la Batería
Hurtado de la 1° Brigada del Ejército Constitucional (congresista), esta dispara los primeros
cañonazos sobre la Infantería Presidencial. Tan sorpresivo fue el inicio de los cañoneos, que
las tropas balmacedistas no fueron capaces de responder el fuego hasta las 8:30 a.m. En la
confusión, el 1° Brigada cruzo el rio Aconcagua por Concón Bajo, abriendo fuego sobre el
regimiento San Fernando a eso de las 11:30 a.m., hora en la que se da inicio formal de la
Batalla de Concón. El combate se prolongó tenazmente, las tropas congresistas habían
hecho retroceder a los balmacedistas, haciendo imposible la huida hacia Viña del Mar. A las
15: 30 p.m., ya habían pasado largas horas de combate, el cansancio era ejército
Congresista celebro su victoria, mientras que el ejército balmacedista, empezó su lenta y
desordenada marcha hacia los valles de las tierras interiores. El 28 de agosto de 1891, a
eso de las 7:30, los ejércitos congresistas y balmacedistas no se habían visto aun, ya estando
en los cerros del pueblito de Placilla, el Coronel Fuentes hace disparar cuatro cañonazos las
colinas frente ellos. En ese instante, unos de los tiros estallo en la cumbre del cerro donde
estaba el ejército congresista, estos aún no habían sido vistos, pero pensando que sí, las
baterías constitucionales situadas en la cumbre contestaron sin demora el tiro de las
contrarias, con el resultado que desde luego hicieron perder el tino a los artilleros
balmacedistas. 99 Rosario Meza Martínez y definitiva batalla de la 4 Después de una hora
de puro cañoneo, los congresistas lograron romper el flanco izquierdo de la defensa
balmacedista, dejando entrar de inmediato a la caballería, esto desalentó rápidamente a las
tropas presidenciales, permitiendo que las tropas revolucionarias rompieran rápidamente las
defensas de las tropas de Balmaceda. Durante un momento se produjo una lucha cuerpo a
cuerpo, porque muy pronto las tropas Presidenciales soltarían las armas e iniciarían su última
retirada del campo de batalla. A las 11:00 a.m. ya había terminado la batalla, destruyendo
la última esperanza del presidente. En la batalla de Placilla morirían los generales
balmacedistas Barbosa y José Miguel Alcérreca, además de 1.115 soldados, registrándose
2.500 heridos. Los revolucionarios registraron 2.070 muertes..
Fin de la Guerra Civil y muerte de Balmaceda. A las 7 de la tarde del 28 de agosto, Balmaceda
se enteró, mediante telegrama, del resultado final de la batalla de Placilla. No le quedaba
otra que entregar el mando a otra persona, a un oficial de alta graduación y sobrado
prestigio que pudiese conserva el orden, evitando las posibles represalias que seguramente
se producirían. Para esto eligió al General Manuel Baquedano. En la madrugada del 29 de
agosto Balmaceda había aceptado la oferta de la legación estadounidense para acoger a su
familia en dicho recinto, él se dirigido a la legación argentina, aceptando la invitación de
José Evaristo Uriburu, penitenciario de dicho país. Lamentablemente la presencia de
Baquedano no fue suficiente para mantener el orden. Ese mismo día varios grupos dirigidos
por revolucionarios excitados con la victoria saquearon y destruyeron las residencias de los
más conocidos balmacedistas. El 31 de agosto entro a Santiago Jorge Montt (protagonista
de guerra en la Armada congresista) con parte del ejército revolucionario y asumió el mando
mientras llegaba el gobierno provisional de Iquique, Baquedano se fue silenciosamente, sin
ser notado. En la legislación argentina, Balmaceda escribió varias cartas, en ellas reflejaba
sus deseos de suicidio, escribía a su esposa y a los pocos amigos que le habían sido fieles,
también escribió un testamento político, que no se va a poder transcribir (por cosa de
espacio). El ex presidente José Manuel Balmaceda decidió quietarse la vida, espero hasta
que terminase su mandato de forma oficial (el 18 de septiembre de 1891), se vistió con su
mejor ropa, se acostó en su cama y se pegó un tiro en la sien, terminando así su vida. En
la mañana del 19 de septiembre se encontró su cadáver recostado en su cama. de sangre
chilena en la propia patria, terminada con la muerte de un presidente y 10.000 personas
chilenas en suelo nacional.

La Guerra Civil de 1891 marco el fin y el inicio de una nueva era, lamentablemente
no se puede decir que llevada a cabo mediante el uso de la razon, se derramo sangre de
cerca de 10.000 chilenos en suelo chileno y provoco lo que años después seria uraron hasta
1925, en ese año el presidente Arturo Alessandri Palma llego al poder y dio termino al
régimen parlamentario, promulgada la Constitución en la que se restablecería el sistema de
gobierno presidencial. Si analizamos bien, las ideas de Balmaceda, en su mayoría, eran
buenas, pero el pais y la mentalidad de aquellos que lo dirigían no estaban preparadas para
afrontar semejante cambio. Una de las cosas que hizo Balmaceda fue crear el Ministerio e
Obras Publicas, que sigue hoy en dia. Otro puede ser la creación del Banco Estado, no fue
creado en su mandato pero la idea en principio fue suya, este se creo en un mandato
posterior y sigue hoy en dia. Estos y otros ejemplos más son legados de la Guerra Civil, que
perduran en el tiempo y nos recuerdan que hace 125 años hubo una persona que pensó en
el futuro y no lo dejaron preparar al pais de los problemas que mas tarde vendría a perturbar
su paz y estabilidad.

PARLAMENTARISMO (1891 - 1925) (Pseudoparlamentarismo en Chile)

Entre 1891 y 1925 se manifestó un claro predominio del Congreso sobre el Ejecutivo.
A pesar de la esterilidad política de esos años, hubo continuidad administrativa lo que
permitió el desarrollo de planes generales de obras públicas. Pero en el país, desde fines
del siglo XIX surgía lentamente la llamada “cuestión social” cuando miles de obreros
cesantes como consecuencia de las quiebras de las compañías salitreras del norte del país
retornaron al centro en busca de trabajo y hogar; y el Estado carecía de leyes sociales y
laborales para enfrentar la grave crisis económico-social.

El período llamado parlamentario que predominó en la política chilena durante 34


años, recibe este nombre pues el poder del Estado fue ejercido principalmente por el
Parlamento o Congreso. Durante todo el período político anterior a 1891, en la República
Liberal, se había ido gestando un proceso de pugna entre el poder ejecutivo y el legislativo,
representado por el Parlamento, en el cual a través de sucesivas reformas, fue arrebatando
poder al Presidente. Esta pugna concluyó violentamente pues hubo un presidente,
Balmaceda, que se resistió a perder su autoridad.

Al estallar la guerra civil de 1891, el Presidente Balmaceda fue derrotado por la


Armada, que apoyaba a los congresistas. Este hecho, es decir, que el predominio del
parlamento se impusiera por las armas, marcó el sistema parlamentario chileno.

El parlamentarismo, como sistema de gobierno tuvo su origen en Inglaterra. Pero, a


diferencia del chileno, el sistema inglés implicaba un equilibrio entre el poder ejecutivo y el
legislativo.
El parlamentarismo chileno estuvo lejos de ese equilibrio, por eso se le denomina
también "pseudo parlamentario", justamente por haberse impuesto sobre la derrota
absoluta del presidente y sus aliados. El predominio parlamentario se impuso así en forma
tan extrema, que el presidente durante este período muchas veces fue un representante
formal del poder público, pero sin autoridad efectiva, pues la que le correspondía legalmente
era amilanada seriamente por un conjunto de prácticas, muchas de ellas viciadas, que
ejercía el Congreso. Lamentablemente estos mecanismos eran utilizados principalmente
para bloquear la acción del Ejecutivo más que para gobernar como un poder
complementario. Es decir, no es que en este período el parlamento haya gobernado en lugar
del presidente, sino que más bien por el bloqueo que hizo de la acción presidencial.

En realidad este llamado Período Parlamentario, marcó la cima del poderío político,
social y económico de la oligarquía chilena. Pero no todo se mantuvo estático, creció la clase
media y en especial el sector obrero; se formaron numerosas organizaciones sindicales y un
sentimiento de desilusión y protesta fue tomando fuerza contra el sistema político,
indiferente a los problemas sociales, conocido como la Crisis de fin de siglo.

La clase alta se había formado por la fusión de dos grupos. Uno de ellos era el de la
“aristocracia tradicional”, que venía desde la Colonia, y que tenía en la posesión de la tierra
su principal fuente de ingresos. El otro, estaba compuesto por “comerciantes, mineros e
industriales” –enriquecidos durante el siglo XIX- y por sus descendientes. Ambos tenían una
tradición de vida burguesa y urbana. Se habían unido, dando lugar a un tipo humano y un
estilo de vida nuevo. Las costumbres cambiaron con rapidez. Lo europeo, y en especial lo
francés, empezó a dominar.

Este nuevo estilo de vida aisló al sector dirigente chileno del resto del cuerpo social.
Muchos autores de comienzo de siglo denunciaron la relajación moral de la oligarquía,
considerada como una de las causas más importantes de la crisis nacional. De este modo,
entre 1900 y 1920, se planteaba la decadencia de la clase alta, en cuanto grupo dirigente
de la sociedad, mientras se presentaba el surgimiento de nuevos sectores sociales. Como
estos no tenían cabida en el sistema ni en el estilo predominante, muy pronto aspiraron a
cambiarlo.

El Congreso en el ejercicio del poder, hizo frecuentes prácticas:


- Diputados y senadores hacían valer sus fuerzas cuando tenían que aprobar las
llamadas leyes periódicas de presupuesto, contribuciones y Fuerzas Armadas.
- Los parlamentarios imprimían al despacho de dichas normas, el ritmo que la
conveniencia política les aconsejaba.
- El Congreso ejerció, también, en forma exagerada, la facultad para interpelar o
censurar al gabinete presidencial. De este modo, obligaba a los ministros a
comparecer para justificar sus acciones, o a renunciar, llegando a establecer una
intensa rotativa ministerial
CONSTITUCIÓN DE 1925 :

Previo a un plebiscito Arturo Alessandri Palma promulga esta Constitución.


Reemplaza el régimen parlamentario por un régimen representativo de carácter presidencial
(muy peculiar). De hecho, la causa determinante de la dictación de esta constitución es
justamente la sustitución del régimen de gobierno.

Para entender cómo funcionaba la política de Chile durante las primeras décadas del
siglo XX, es necesario que recordemos algunas ideas relacionadas con los tres poderes del
Estado.

Desde el año 1891 hasta 1925 Chile tuvo un sistema de gobierno que se ha
denominado como “parlamentarista”, donde el Congreso logró tener más poder que el
propio Presidente de la República. El parlamento a través de diversos mecanismos legales,
consiguió debilitar el poder de los Presidentes que gobernaron durante este periodo. Un
ejemplo de estos mecanismos fue la “rotativa ministerial”, pues a pesar de que los ministros
de Estado eran elegidos libremente por el Presidente, éstos debían rendir cuentas ante la
Cámara de Senadores y Diputados. Es decir, por decisión del Congreso los ministros eran
cambiados frecuentemente.

Otro recurso utilizado fue dificultar los proyectos de ley. Así, quienes se oponían a
algún proyecto, alargaban las discusiones o abandonaban la sala para que no se consiguiera
el número mínimo de parlamentarios exigidos para realizar una votación. De esta forma,
lograban negociar para modificar o rechazar las leyes según su conveniencia.

Este sistema de gobierno tuvo lamentables consecuencias en el ámbito social, pues


no fue capaz de responder a las urgentes necesidades sociales de la época. A las pésimas
condiciones de vida y mínimas garantías laborales que afectaban al mundo popular
(especialmente a los mineros y obreros urbanos junto a sus familias), se les llamó “Cuestión
Social”. Los principales problemas fueron el hacinamiento, la higiene, las enfermedades, la
alta mortalidad infantil, la inseguridad laboral, entre otros. Ante la falta de soluciones
efectivas, los trabajadores se organizaron en sindicatos y mancomunales, convocando a
huelgas y manifestaciones para exigir mejoras en sus condiciones de vida.
En este contexto aparece Arturo Alessandri Palma, político que por primera vez en
nuestra historia dio un carácter social a las discusiones políticas. Alessandri se hizo conocido
en el norte salitrero como Senador de Tarapacá, su discurso representó enérgicamente las
quejas de la provincia contra el poder de la oligarquía santiaguina, característica que le daría
el apodo de “El León de Tarapacá.” Su gran popularidad lo impulsó a ser el candidato
presidencial de la Alianza Liberal en 1920, compitiendo con el candidato conservador Luis
Barros Borgoño.

Alessandri ganó las elecciones presidenciales por un estrecho margen. Sin embargo,
durante su gobierno enfrentó una situación económica complicada. La competencia del
salitre sintético provocó el cierre de bastantes salitreras, elevando el número de cesantes,
quienes junto a sus familias migraron hacia las ciudades en busca de oportunidades. La
disminución de los recursos estatales también afectó a los sectores medios de la población,
por ejemplo en 1924 los empleados públicos (incluidos los militares) estuvieron tres meses
sin recibir su sueldo. Por otra parte, las reformas sociales prometidas por Alessandri, estaban
detenidas en el Congreso. En 1921 presentó como proyecto el Código del Trabajo, pero el
Senado, integrado mayoritariamente por la oposición al gobierno, no estaba dispuesto a
colaborar con el poder ejecutivo.

El Ruido de Sables

Frente a esta dificultad, Alessandri influyó en las elecciones parlamentarias de 1924


para conseguir una mayoría favorable a su gobierno en el Congreso. Realizó una gira
nacional para apoyar a los candidatos de la Alianza Liberal y escribió manifiestos en la prensa
apoyando un sistema de gobierno presidencial.

Los resultados de la elección favorecieron políticamente al Presidente, quien


motivado por este triunfo, envió al parlamento un proyecto para modificar la Constitución y
fortalecer el poder ejecutivo. Pero las cosas no cambiaron, este proyecto quedó entrampado
en el Congreso, al igual que las leyes sociales. Sumado a esto, el parlamento comenzó a
trabajar en un proyecto de ley que fijaba un sueldo para Senadores y Diputados, a pesar de
que anteriormente había negado un leve aumento a los sueldos de los empleados públicos
y militares, debido a la disminución de los recursos estatales.
Ante esta situación, los militares intervinieron en el Congreso el 2 de septiembre de
1924, justo en el momento en que los Senadores iban a aprobar el sueldo para los
parlamentarios. Desde las galerías expresaron su disconformidad con el Congreso
murmurando y haciendo sonar sus sables. El Presidente Alessandri aceptó recibir una carta
con las peticiones de los militares, mensaje que fue redactado por el mayor del ejército
Carlos Ibañez del Campo. Los requerimientos fueron variados, desde algunos
exclusivamente militares, hasta otros directamente sociales y políticos, como la modificación
de la Constitución para otorgar mayor poder al Presidente, la aprobación del Código del
Trabajo y otras leyes sociales. Estando de acuerdo con todo el petitorio, Alessandri lo
convirtió en proyecto de ley y lo presentó al Congreso. En menos de 24 horas los
parlamentarios aprobaron 16 leyes.

Sin embargo, todo este movimiento político perjudicó a Alessandri. Los militares
estaban divididos, unos pedían su renuncia y otros que abandonara el país por un tiempo.
Finalmente el Presidente deja Chile en septiembre de 1924 y una junta militar ejerce el
poder. No obstante, en enero de 1925 los militares que apoyaban a Alessandri (entre ellos
Carlos Ibañez del Campo), dan un golpe militar y exigen el regreso del Presidente.

La creación de una nueva Constitución Política para Chile, fue el primer proyecto de
Alessandri a su regreso. Para realizarlo organizó una comisión consultiva, donde reunió
desde conservadores hasta comunistas, pero los políticos participantes se negaban a aceptar
un régimen presidencialista.

Sin embargo, el Ejército se manifestó diciendo que para esta institución era imposible
aceptar una organización política que no fuese presidencialista. Finalmente la Constitución
del 1925 fue establecida el 18 de septiembre de ese año, reemplazando la Constitución de
1833.De este modo se puso fin al largo proceso que terminó con el régimen parlamentarista
en Chile.

La Constitución de 1925 fue redactada por José Maza Fernández y principalmente se


caracterizó por entregar importantes funciones administrativas al ejecutivo, sin perjudicar
las libertades públicas e individuales. En este sentido, establece que el Presidente de la
República es quien nombra o remueve a los ministros de Estado. Además, puede elegir a
los jueces de los tribunales ordinarios de justicia a partir de candidatos propuestos por la
Corte Suprema de Justicia o por las Cortes de Apelaciones.

Para acabar con las medidas de presión utilizadas por el Congreso hacia el
Presidente, la Constitución de 1925 determinó un tiempo límite para que el parlamento
rechazara una ley de presupuesto, si el plazo no era respetado, entraría en vigencia el
proyecto presidencial.

La nueva Constitución estableció un Estado de Derecho, procurando entregar al


menos un mínimo de bienestar a los ciudadanos y responder a los problemas sociales de la
época. Se instauró la protección al trabajo y se impulsaron iniciativas de previsión social
(especialmente de higiene y vivienda).

Mientras Alessandri estuvo exiliado en Italia, aprovechó de negociar en el Vaticano


un acuerdo para que Chile se convirtiera en un Estado laico. De este modo, la Constitución
del 1925 instituyó la separación de la Iglesia y el Estado, garantizando la libertad de
conciencia y de culto en nuestro país.

Fijó un nuevo régimen representativo, de carácter presidencial y con una separación


estricta de poderes. El presidente tiene las funciones de Jefe de Estado y gobierno,
nombrando y removiendo a los ministros.

Un Congreso bicameral con función colegisladora.

La forma de gobierno territorial unitaria y se estableció una cierta posibilidad


descentralización. Entre 1932 y 1973, bajo ésta Constitución se perfeccionó el sistema
político, posibilitando el acceso de los sectores medios y populares, llegando a ser Chile,
una de las democracias más estables de América. Dicho régimen fue interrumpido por el
Golpe Militar del 11 de septiembre de 1973.

La Carta de 1925 además ofrecía reformas de gran trascendencia para la época que
se estaba viviendo:

a) La Separación de la Iglesia y del Estado. A través de ello se aseguró a los habitantes de


la República la manifestación de todas las creencias, y quedaron abolidos los derechos del
patronato nacional sobre la iglesia católica.
Con esta separación se dio término a los conflictos político – religioso y la iglesia se
vio libre para desenvolver sus actividades como institución de derecho privado.

No se produjo una separación violenta, conflictiva, sino de un modo muy chileno y,


podría decirse, muy parlamentario: por la vía de la armoniosa o amigable negociación.
Alessandri había tratado previamente el asunto en Roma con la Santa Sede que, por su
parte, impuso la separación a su adversario, el Partido Conservador, que no podía
comprender que el Estado no respaldara a la religión de la abrumadora mayoría del país.
Con la constitución de 1925 termina, pues, la época en que el Estado de Chile es confesional,
es decir, en que hay una religión reconocida oficialmente.-

b) Tribunal Calificador de Elecciones, al cual se confió la calificación de las elecciones de los


miembros del Congreso y del Presidente de la República. La Constitución de 1833 entregaba
esta atribución a cada una de las cámaras respecto de sus propios miembros, y al Congreso
pleno respecto de los electores de presidente, esto es, a las pasiones políticas dominantes.
El tribunal calificador que estaba compuesto de ministros de las cortes de justicia y ex
presidentes o vicepresidentes del senado y de la cámara de diputados, inspiraba plena
confianza a todos los partidos.

c) Ampliación de las facultades de la Corte Suprema, para declarar a petición de parte, en


los casos de que conozca, o le fueren sometidos en recurso interpuesto en juicio que se
siguiere ante otro tribunal, la inconstitucionalidad de los preceptos de cualquiera ley. Esta
reforma fue tomada de la constitución de Estados Unidos, que confiere a la Corte Suprema
Federal la facultad de resolver si una ley se halla o no de acuerdo con la constitución.

d) Creación del Banco Central, fue creado en virtud de Decreto Ley de agosto de 1925.

El presidente del Senado entregó el mando al ministro del Interior Juan Esteban
Montero, nombrándolo vicepresidente de acuerdo a la Constitución (27 de julio). Este
gozaba de amplia popularidad, por su rectitud durante los últimos días de Ibáñez.

Montero impuso el criterio de resolver los problemas desde la legalidad. Además,


restableció las libertades que habían sido restringidas durante la dictadura. Para normalizar
la situación, se convocó a elecciones presidenciales para el 4 de octubre.
A mediados de agosto, una convención de profesionales reunida en Santiago nominó
candidato a la presidencia a Montero. Este finalmente aceptó, renunciando a la
vicepresidencia, que recayó en el ministro del Interior Manuel Trucco, el 22 de agosto.

Resumen:
 1925 Emiliano Figueroa Larraín asume la presidencia de Chile

 1927 Carlos Ibáñez del Campo asume la presidencia de Chile

 1931 Juan Esteban Montero asume la presidencia de Chile

 1932 Arturo Alessandri Palma es elegido Presidente de Chile por segunda vez Golpe
de Estado derroca a Juan Esteban Montero e instaura una república socialista, que
sólo dura 100 días.-

 1938 Pedro Aguirre Cerda es elegido Presidente de Chile

GOBIERNOS RADICALES (1938-1952)

PEDRO AGUIRRE CERDA (1938-1941)

JUAN ANTONIO RÍOS (1942-1946)

GABRIEL GONZÁLEZ VIDELA (1946-1952).


ANTECEDENTES

Período histórico chileno que comprende los gobiernos de Pedro Aguirre Cerda, Juan
Antonio Ríos y Gabriel González Videla (del 25 de diciembre de 1938 al 3 de noviembre de
1952). Esta etapa, perteneciente a la República Presidencial, se caracterizó por la idéntica
afiliación partidaria de los presidentes: el Partido Radical, que pudo así gobernar durante 15
años consecutivos.

Su base ideológica en los principios igualitarios de la Revolución francesa. Sus bases


de actuar política se centraba en sus postulados de libertad, igualdad, solidaridad,
participación y bienestar. Había surgido durante mediados del siglo XIX como respuesta a
los gobiernos liberales y conservadores que se alternaban en el país, y como forma de
representar a la clase media, surgida a raíz del desarrollo económico y el crecimiento del
Estado.

PEDRO AGUIRRE CERDA (1938-1941).


Pedro Aguirre Cerda era profesor y abogado de la Universidad de Chile, era un
emergente ejemplo de los hijos crecidos bajo el espacio del Estado Benefactor. Su lema fue
“Gobernar es educar”, difundió la educación.

Le tocó el período de la Segunda Guerra Mundial. En Chile se produce el quiebre de


la coalición por la denuncia ordenada por Moscú de los frentes populares en cumplimiento
del Pacto de no agresión nazi-soviético de 1939. El gobierno careció de apoyo para sacar
adelante sus grandes promesas de campaña, aunque con la invasión alemana a la Unión
Soviética los comunistas dejaron de lado sus reticencias y se sumaron al gobierno.

En la noche del 24 de enero de 1939, se produjo el terremoto con epicentro en


Chillán. Fue muy violento, más de 30.000 personas murieron aquel día y la zona quedó
devastada. Como medida paliativa el gobierno propuso la creación de la Corporación de
Fomento de la Producción, con el objeto de crear un fondo estructural de inversión y de
empresas públicas o semi-públicas, encargada de ejecutar los proyectos de industrialización.

Bajo este alero se creó:

• Empresa Nacional del Petróleo (ENAP);


• Empresa Nacional de Electricidad (ENDESA);
• El holding de la Compañía de Acero del Pacífico (CAP)

Sin embargo, el presidente no alcanzó a terminar su periodo al estar gravemente


enfermo de tuberculosis y entregó el mando a su Ministro del Interior Jerónimo Méndez
Arancibia a comienzos de noviembre de 1941, para morir quince días después.
JUAN ANTONIO RÍOS (1942-1946)

Luego de la muerte del Presidente Pedro Aguirre Cerda, el Vicepresidente Jerónimo


Méndez convoca a elecciones Presidenciales para el 1 de febrero de 1942, en que triunfa
Juan Antonio Ríos, siendo electo presidente con un 55,93 % de la votación, derrotando al
candidato de Derecha Carlos Ibáñez del Campo, en una coalición política que integraba a
los partidos Radical, Socialista, Democrático, Agrario, Comunista, Socialista de los
Trabajadores, Falangistas y a un sector del liberalismo que no aceptaba la candidatura de
Ibáñez.

Su gobierno comete el mismo error de todos los radicales: colocar elementos


opuestos en el gabinete, al asumir Ríos el gobierno no es para nada favorable,
especialmente en materia económica, basado en el proyecto de Fomento de la Producción
a través de la Corfo, el presidente crea Endesa (Chile) y sus respectivas centrales eléctricas,
la Compañía de Acero del Pacífico y su organización financiera y una productiva prospección
de petróleo.

Por presiones externas e internas debe romper con el Eje en 1943 y declararle la
guerra a Japón en 1945, lo que puso al gobierno bastante tenso durante el mandato, Ríos
sin embargo en política interior mantiene la línea radical, se construyen recintos
hospitalarios, casas y se fomentan nuevos proyectos agrícolas y de obras públicas, una de
las obras sociales fue la construcción de la Ciudad del Niño Presidente Ríos.

Las exportaciones de cobre de Chile (1942-1945), solo iban al mercado


estadounidense. Fue bajo, de 11,7 centavos de dólar por libra, un tercio menos. El cobre
alcanzó su máximo esplendor en exportaciones antes de ser chilenizado y el Salitre con un
precio también fijado se reactivó por un tiempo, pero con el fin de la guerra volvió a caer.

En 1944, el gobierno se encuentra superado en los problemas de los años iniciales,


se hace muy difícil, las relaciones Partido-Presidente se ponen cada vez más tensas, la
Alianza tambalea y al presidente se le descubre Cáncer y nadie, ni siquiera el presidente es
informado de esto. Los derechistas salen dolidos del gobierno, por peticiones radicales, el
comunismo se aleja cada vez más y Ríos se siente prisionero de la alianza.

Los problemas se calman hacia 1945, el gobierno supera los problemas nuevamente.
La derecha crece cada vez más en las Elecciones parlamentarias de Chile (1945).

El presidente enferma otra vez, esta vez es más grave, su enfermedad pasa a fase
terminal y debe aleja del poder con una licencia de siete meses. Finalmente el 27 de junio
de 1946 el presidente Juan Antonio Ríos fallece, debiéndose elegir un nuevo candidato y
una nueva coalición ya que la Alianza Democrática cae como su predecesora.

Las mayores obras de este periodo fueron:

• Chilefilms.
• Empresa Nacional de Electricidad S.A. y subsiguiente plan de electrificación y
represas.
• Compañía de Manufacturas de Cobre.
• Compañía de Acero del Pacífico.
• Prospección petrolífera magallánica.
• Ciudad del Niño Presidente Ríos.
• Premio Nacional de Literatura.
• Servicio de Registro Civil e Identificación.
• Apertura diplomática con la URSS.
• Incorporación de Chile en la ONU.
• Rompimiento Diplomático con el Eje.
• Creación de Liceos Experimentales y Escuelas Rurales.
• Caja de Accidentes del Trabajo.
• Ministerio de Economía de Chile.
• Departamento de Construcción de Recintos Hospitalarios y de Educación.

GABRIEL GONZÁLEZ VIDELA (1946-1952).

Por segunda vez en cinco años, Chile va a las urnas para elegir presidente. A la
contienda electoral van:

- Gabriel González Videla por el Partido Radical,


- Eduardo Cruz-Coke por el Partido Conservador,
- Bernardo Ibáñez por el Partido Socialista y
- Fernando Alessandri Rodríguez por el Partido Liberal.
La nueva candidatura de la coalición entre los radicales, representados por un
miembro de su ala izquierdista, como era González Videla, con los comunistas fue a costa
de una unión pública y notoria. El senador comunista y poeta Pablo Neruda dirigió la
campaña de González y sus anuncios de confraternidad fueron famosos, dirigiéndose al
Comité Central comunista: “Yo les aseguro a ustedes que no habrá poder humano ni divino
capaz de romper los lazos que me unen al Partido Comunista y al pueblo”.
González Videla sacó el 40 % de los votos frente a un 29 % de Cruz Coke y un 27 %
de Alessandri. El Congreso Nacional de Chile lo ratificó. Como consecuencia terminó con un
gabinete conformado, al igual que sus predecesores, con elementos contradictorios:
liberales, radicales y comunistas.

Luego, se llevaron a cabo elecciones municipales en las cuales el máximo crecimiento


de un partido fue de los comunistas. Los liberales, al ver esto se retiraron del gobierno. Ante
esta perspectiva, González decidió dejarlos fuera del gobierno, volviendo a la oposición,
siendo éste su mejor y más efectivo lugar de lucha política.

Al poco tiempo, en Santiago, (junio de 1947) los comunistas provocaron incidentes


por una huelga en el transporte urbano que terminó con varios muertos y el Estado de Sitio
aplicado en la capital. El segundo, y mucho más grave episodio, se produjo en agosto y en
octubre del mismo año en las minas de carbón del sur, donde se declararon huelgas que
pusieron en jaque al gobierno. Sólo el propio viaje del presidente pudo salvar la situación,
ante sindicatos dirigidos por comunistas.

Unos días después, los sindicatos de la mina de Chuquicamata se declararon en


huelga. González vió que el ambiente se estaba volviendo cada vez más enrarecido y utilizó
con mayor severidad las leyes de emergencia.

Finalmente, ante la presión de los Estados Unidos, y con el apoyo de los demás
partidos (salvo una facción falangista y socialista), se dictó una severa Ley de Defensa
Permanente de la Democracia (conocida como “Ley Maldita”), que puso al Partido Comunista
fuera de la Ley y eliminó a más de 20.000 personas de los registros electorales. Se
reabrió el campamento de prisioneros en Pisagua (utilizado durante la dictadura de Ibáñez
y reutilizado después en la dictadura de Pinochet), aunque no se fusiló a ningún detenido.
Prominentes comunistas como el entonces senador Pablo Neruda tuvieron que huir al exilio.

Varias protestas se suscitaron, con la intención de generar un estallido social, pero


una fuerte presencia policial y militar lo impidió.

Lugo vino un complot militar de derecha, conocido como el “Complot de las patitas
de chancho” que puso de manifiesto la inestabilidad política del país.
Por último, una severa política de austeridad llevó a cabo el Ministro de Hacienda
don Jorge Alessandri a comienzos de 1950 lo cual produjo masivas protestas que esfumaron
lo que le quedaba de capital político.

Los logros más destacados de este período son:

• El Plan de fomento y urbanización para la provincia de Coquimbo. (Plan Serena)


• El desarrollo de una fuerte política antártica con la determinación del Territorio
Antártico Chileno;
• La creación de la Universidad Técnica del Estado.

• La plena incorporación de la mujer a la vida política, obteniendo la plenitud del


derecho a voto (En 1934 se aprobó el voto femenino para las elecciones municipales,
y recién en 1949 se concedió el derecho a voto a las mujeres para las elecciones
presidenciales y parlamentarias. Las mujeres participaron por primera vez en la
elección presidencial de 1952, en donde fue electo Carlos Ibáñez de Campo. Desde
entonces, su participación en los procesos electorales se fue ampliando
progresivamente hasta llegar en 1970 a la paridad con los votantes masculinos).
• La determinación en conjunto con Perú y Ecuador de las 200 millas de Zona
Económica Exclusiva.

GOBIERNO DE JORGE ALESSANDRI RODRÍGUEZ (1958-1964)

Fue hijo de Arturo Alessandri Palma (elegido dos veces presidente) y de Rosa
Rodríguez. Realizó sus estudios escolares en el Instituto Nacional y la Universidad de Chile.

En este plantel obtuvo el título de ingeniero civil (1919) y luego de ello, trabajó como
catedrático de la Escuela de Ingeniería.

 Fue diputado por Santiago entre 1926 y 1930


 Presidente de la Caja Hipotecaria (1932)
 Presidente de la Empresa Manufacturera de Papeles y Cartones (1938)
 Presidente de la Confederación de la Producción y Comercio (1944).
 Ministro de Hacienda de González Videla (1947).
 Senador electo por Santiago (1956)
 Presidente (1958)
 Murió el 31 de agosto de 1986.

Primeros años de su administración

Al inicio de su gobierno, en 1958, Alessandri contaba con un amplio apoyo de


parlamentarios liberales, conservadores y radicales.

Tratando de mantener la independencia política, formó su primer gabinete con


técnicos e independientes de derecha.

Durante su primer año como presidente se dedicó a detener la inflación y procurar


una racionalización de la administración pública. Estos objetivos los logró a través de la
estabilización del presupuesto y de una política económica liberal. Además de llevar a cabo
una política restrictiva sobre los reajustes salariales y un fuerte plan de construcción de
viviendas y de obras públicas.

En 1960, a través del Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción, pudo


afrontar los desastres sísmicos del terremoto de 1960.

Además, cambió el peso por una nueva unidad monetaria: el escudo, que equiparó
al dólar en esa época.

Elecciones de 1961

En marzo de 1961 se realizaron las elecciones para renovar la totalidad de la Cámara


de Diputados y parte del Senado. Alessandri perdió el tercio derechista en el Congreso.

En estas elecciones, además, se confirmó al Partido Radical como la primera fuerza


política del país.
Pero, la Democracia Cristiana y el Comunista obtuvieron un gran crecimiento.

Finalmente, el Partido Radical se integró al gobierno a través de cuatro carteras:


Relaciones Exteriores, Economía, Salud y Agricultura.

El gobierno contaba, con amplia base política y técnicas para llevar a cabo varias
iniciativas y reformas.

Agitación social

La política económica impuesta por Alessandri comenzó a mostrar señales de


deterioro. Las dificultades en la balanza de pagos, el excesivo endeudamiento externo
producto de los créditos que financiaron gran parte de las obras gubernamentales y el
drástico descenso de las reservas de divisas provocaron un rebrote inflacionario.

Hubo muchas demandas salariales no escuchadas (por tratar de mantener una


política de estabilización) y a una serie de alzas (teléfono, luz, precios de productos básicos,
etc.) provocaron un clima de malestar y agitación social. En 1962, se sucedieron amplias
movilizaciones populares.

En ese período, más de cien mil personas a lo largo del país (entre obreros,
profesores, estudiantes, empleados públicos, etc.) estaban en huelga y aparte de exigir sus
propias demandas, pedían el fin de lo que ellos consideraban la “dictadura económica”
implantada por Alessandri.

La reforma agraria

Alessandri pretendió darle impulso a la actividad agrícola y para ello, en 1962,


promulgó la Ley de Reforma Agraria Nº 15.020.

Esta enunciaba una política tendiente a impulsar la producción agropecuaria, permitir


el acceso a la propiedad de la tierra a quienes la trabajan y mejorar las condiciones de vida
de los campesinos.
Además, implicó la creación de la Corporación de la Reforma Agraria (CORA) y el
Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap), que iniciaron durante este gobierno el proceso
de redistribución de tierras y la ampliación de las superficies de cultivo.

Desde desde el punto de vista legislativo esta ley marcó un hito en la historia del
país, pero desde un punto de vista práctico sus resultados no fueron muy significativos,
debido a que dado el carácter derechista del gobierno, fue una reforma más bien tímida y
conservadora.

La Alianza para el Progreso

A fines de 1961, se celebró en Uruguay la Conferencia de Punta del Este, en donde


los países reunidos suscribieron un acuerdo denominado: “Carta de Punta del Este”. Este
documento fue el punto de partida para la Alianza para el Progreso, ambicioso plan
impulsado por el presidente estadounidense John F. Kennedy. Tenía como fin promover
cambios estructurales que permitirían incentivar el desarrollo de América Latina. A cambio,
Estados Unidos entregaría apoyo financiero a los países que lograran estos objetivos. En
Chile, esto se manifestó a través de las reformas tributaria y agraria (1962). En general, la
Alianza para el Progreso encontró poco apoyo político y fue criticada por ser considerada
insuficiente.

Obras del gobierno de Alessandri

Se construyeron más de 150.000 viviendas y más de 30.000 familias fueron


erradicadas de las poblaciones “callampas”.

Se pavimentaron aprox. 3.253 kilómetros de caminos y se construyeron varios


hospitales y edificios educacionales.

La minería experimentó un gran crecimiento con la explotación petrolífera y con las


notables cifras de producción del cobre, que en 1963 llegó a la cifra récord de 600 mil
toneladas.
La creación de la Empresa Nacional de Minería (Enami), la Empresa Nacional de
Telecomunicaciones (Entel) y la Empresa Portuaria de Chile (Emporchi).

En 1960, Chile adhirió al Tratado de Montevideo, pasando a integrar la Asociación


Latinoamericana de Libre Comercio (ALALC).

GOBIERNO DE EDUARDO FREI MONTALVA (1964-1970)

Fue educado en la Escuela Pública de Lontué y, luego, en el Instituto de


Humanidades Luis Campino. Fue abogado de la Universidad Católica de Chile, y se inició
como periodista en el Diario Ilustrado. En un viaje por Europa, como presidente de la
Juventud Católica de Chile, conoció al filósofo francés Jacques Maritain, quien influyó en sus
ideas.

En 1938 participó en la formación de la “Falange Nacional”. La Falange Nacional fue


un partido político social cristiano chileno que existió entre 1935 y 1957. Fue la base
del Partido Demócrata Cristiano (PDC) Todavía hoy se acostumbra usar las expresiones
"falangista" y "falangismo" para aludir a los miembros y acciones de la Democracia Cristiana
y a ese mismo partido, respectivamente

Fue ministro de Obras Públicas,

Senador por Atacama y Coquimbo,

Senador por Santiago.

Senador por Santiago.

Escribió numerosos libros y ensayos.

Falleció en Santiago, en 1982.


Altas expectativas

Su lema fue: “revolución en libertad”.

Eduardo Frei Montalva asumió la presidencia de la República el 4 de noviembre de


1964. Las condiciones hacían presumir el éxito de su periodo.

Tuvo gran apoyo electoral (triunfó en las elecciones con el 56,1 %), además de gozar
de la primera mayoría en el Senado.

En lo económico, el cobre había alcanzado los más altos precios de su historia en los
mercados internacionales.

En el plano exterior, contaba con el apoyo de Estados Unidos, con lo que podía
obtener créditos para realizar cualquier iniciativa enmarcada dentro de su proyecto de
reformas estructurales.

Bajo el gobierno de Frei se creó el Ministerio de la Vivienda y desarrolló un programa


para moradas definitivas a familias de ingresos medios y bajos (se construyeron,
aproximadamente, 130.000 casas económicas).

Se buscó poner en marcha el “plan de las vigas maestras”, es decir, sentar las bases
del nuevo orden político y social a que aspiraba la flamante administración. Estas vigas eran
la Reforma Agraria y la Chilenización del cobre, los que necesitaban del respaldo del
Congreso para implementarlas adecuadamente.

En este ambiente se creó el lema “un Parlamento para Frei”, para enfrentar las
elecciones parlamentarias de 1965. En estos comicios, el Partido Demócrata Cristiano logró
una amplia mayoría, incrementando su número de diputados, de un 15,4 % en el año 1961,
a un 42,3 % y, en el Senado, de un 14,1 % a un 46,4 %.
Lucha contra el analfabetismo

Dentro de su programa de promoción popular se intentó disminuir al mínimo el


analfabetismo. Aunque no se logró, pero sí se redujo su tasa, desde un 16,4 % a un 11 %.

Simultáneamente, se llevó a cabo la reforma educacional que, extendió la enseñanza


primaria (llamada desde ese momento Enseñanza Básica) de seis a ocho años y disminuyó
la secundaria (denominada luego Enseñanza Media), de seis a cuatro años. Además, esta
última fue dividida en dos áreas: científico-humanista y técnico-profesional.

También se promulgó la ley de guarderías infantiles, se edificaron más de 3.000


escuelas nuevas y se duplicó el programa de asistencia para los alumnos de escasos
recursos.

Reforma agraria

La principal meta de las leyes de Reforma Agraria y de Sindicalización Campesina,


aprobadas en enero de 1967, fue la expropiación de latifundios y la redistribución de la
tierra, que estaba subexplotada. El objetivo fue modernizar los procesos productivos, para
elevar el rendimiento de los terrenos agrícolas.

Al inicio de la reforma se estableció como fase primaria y transitoria los


asentamientos, que eran organizaciones para la explotación de los predios hasta la
designación definitiva de la propiedad de ellos y sus deslindes. Estos asentamientos estaban
bajo la supervisión de la Corporación de la Reforma Agraria (CORA). Hasta 1970, se
expropiaron cerca de 3 millones y medio de hectáreas.
Paralelamente, se fomentó la sindicalización campesina, para fortalecer las
comunidades agrarias.

Chilenización del cobre

Para el gobierno de Frei, era esencial que el Estado adquiriera la propiedad del cobre,
por ser la principal fuente de riquezas del país.

Luego de dos negociaciones: la chilenización (1965) y la nacionalización pactada


(1969), el Estado obtuvo el 51 % de los paquetes accionarios de las filiales de las empresas
estadounidenses que explotaban los yacimientos de cobre de Chuquicamata, El Teniente,
La Exótica y Andina.

Para administrar este enclave económico, se creó la Corporación del Cobre


(Codelco), cuya responsabilidad eran las ventas y producción de este recurso.

Esta iniciativa permitió a nuestro país aumentar su Producto Geográfico Bruto en un


5 % c y lograr un superávit en la balanza de pagos equivalente a 168 millones de dólares
en 1969.
GOBIERNO DE SALVADOR ALLENDE GOSSENS (1970-1973

Se recibió de médico cirujano en 1932, estudió en la Universidad de Chile.

Su actividad política se inició en esa casa de estudios integrando el grupo de


izquierda “Avance”.

Fue uno de los fundadores del Partido Socialista de Chile (1933).

En 1937 fue elegido diputado por Valparaíso y Quillota.

En 1939, asumió como ministro de Salubridad, Previsión y Asistencia Social del


gobierno de Pedro Aguirre Cerda.

Senador entre 1945 y 1969,

Vicepresidente de la Cámara Alta entre 1951 y 1955,

Presidente de la Cámara Alta entre los años 1966 y 1969.

Presidente 1970 - 1973

También fue candidato a la presidencia de la República en las elecciones de 1958 y


1964, hasta 1970.

Situación política

Previo a las elecciones de 1970, hubo un reordenamiento del mapa político del país.
Desde la Democracia Cristiana (DC), surgió un sector que proponía acelerar las reformas
que Eduardo Frei estaba realizando en su gobierno. Este grupo, liderado por Rafael Agustín
Gumucio y Rodrigo Ambrosio formó, en 1969, el Movimiento de Acción Popular Unitario
(MAPU). En 1969, un grupo de ex radicales, encabezado por Julio Durán y Germán Picó
Cañas, fundó la Democracia Radical.

En 1966 nació el Partido Nacional (PN), por la fusión del Partido Conservador y el
Liberal, luego del fracaso en las elecciones parlamentarias de 1965. Asimismo, a mediados
de la década del 60, surgió el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), que buscaba
instaurar el socialismo por la vía armada. Tenía una ideología comunista marxista-leninista.
Es un movimiento de extrema izquierda.

En los comicios presidenciales de 1970, Allende fue respaldado por la Unidad Popular
(UP), una alianza política formada, entre otros partidos, por socialistas, comunistas y
radicales.

La UP se formó en octubre de 1969 con motivo de las elecciones presidenciales de


1970, en reemplazo del Frente de Acción Popular. Conformada por:

Partido Radical,

Partido Socialista,

Partido Comunista,

Movimiento de Acción Popular Unitario,

Partido de Izquierda Radical y

Acción Popular Independiente,

Izquierda Cristiana y (1973)

MAPU Obrero y Campesino (1973)

Además contó con el apoyo de la central sindical nacional, la CUT (Central Única de
Trabajadores). Los partidos políticos estaban representados en la Comisión Política de la UP.
Para los simpatizantes independientes se formaron los CUP (Comités de la Unidad Popular)
a nivel vecinal, de fundo, de servicio público y de fábrica.

Uno de los principales problemas fue la designación del abanderado de la izquierda.


Salvador Allende era el candidato lógico (tenía tres campañas
presidenciales: 1952, 1958 y 1964), el Partido Socialista, dirigido por Aniceto Rodríguez
Arenas era el líder del sector más radical a partir del Congreso de Chillán de 1967— no lo
apoyaba completamente a pesar de formar parte de sus filas.

El Partido Comunista había propuesto a Pablo Neruda.

El Partido Radical sugería a Alberto Baltra.

El 4 de septiembre de 1970:
Salvador Allende 36,6 % de los votos.

Jorge Alessandri, 34,9 %, y

Radomiro Tomic, 27,8 %.

Como no hubo mayoría absoluta, el Congreso pleno tuvo que decidir.

El 22 de octubre fue víctima de un atentado el comandante en jefe del Ejército, René


Schneider, quien falleció dos días después. Este fue un intento por impedir que Allende
asumiera el poder.

Sin embargo, de igual forma el Parlamento lo ratificó como Presidente de


la República el 24 de octubre de 1970, siendo el primer candidato marxista que
llegaba a ese cargo por votación popular, en la historia del mundo occidental.

Su propuesta de gobierno era ser una etapa de transición al socialismo, que


consideraba proceder con cautela para no romper con las tradiciones democráticas de
nuestro país, como también para no provocar un rechazo en las Fuerzas Armadas.

Cuando en octubre 1970 el Congreso debe escoger entre Salvador Allende y Jorge
Alessandri, la UP cuenta con 80 diputados y senadores, la DC con 75 y la derecha con 45.
Aunque la abstención de la DC bastaba para dar el triunfo de Allende, éste quiere sus votos
para ser elegido por un convincente 77,5% de los parlamentarios

Para asegurar el respeto a estos valores y para ser ratificado por el Congreso pleno
como presidente de Chile, Allende tuvo que firmar un “Estatuto de Garantías
Constitucionales”. A través de este, se comprometía a conservar libertades como las de
enseñanza, prensa, asociación y reunión, y a indemnizar las expropiaciones contenidas en
el programa de gobierno de la Unidad Popular. Posteriormente, este estatuto fue aprobado
como reforma a la Constitución en 1971.
Plan económico

El gobierno de la UP propuso dividir la economía en tres áreas:

1) social, donde las empresas de interés clave para el país pasaban a ser del
Estado;
2) mixta, en la que el Estado sería el principal accionista, y
3) privada, formada por pequeñas empresas con bajos capitales.

Ante el rechazo que el Parlamento puso para el traspaso de grandes empresas al


Estado, el gobierno recurrió al denominado Decreto N° 520 de 1932, que autorizaba la
expropiación de cualquiera industria considerada fundamental para la economía. Este
recurso, conocido como resquicio legal, por el uso forzado de la ley, fue usado a menudo
por este gobierno para imponer sus planes ante la oposición parlamentaria.

Fundamento jurídico

El orden institucional vigente en 1970 contenía escasos mecanismos que permitan


transferir empresas privadas al sector social de la economía. Y, como no prevé elecciones
parlamentarias después de las presidenciales, el apoyo mayoritario que recibe la Unidad
Popular en 1971 no puede traducirse en el Parlamento. Sin poder modificar las leyes, que,
además, dan poco espacio a la propiedad colectiva, por lo que en principio el programa de
la UP parece inaplicable.

El Presidente Salvador Allende encomienda a su asesor jurídico ad honorem, Eduardo


Novoa, la búsqueda urgente de una solución imaginativa que concilie la aplicación del
programa con el respeto a la legalidad. Éste identifica un conjunto de preceptos legales
vigentes, aunque poco conocidos, que autorizan las nacionalizaciones. Sus detractores los
tildan de “resquicios legales”, reconociendo implícitamente su legalidad.

Como el Gobierno requiere una ley que autorice la nacionalización de las empresas
monopólicas privadas. Su equipo jurídico examina a fondo la legislación, que contiene leyes
que no se cumplen ni se derogan, muchas que favorecen el individualismo, pero algunas
que amplían los poderes redistributivos del Estado.
Dos agentes de la Dirección de Industria y Comercio informan a Eduardo Novoa de
la existencia del célebre Decreto Ley 520 del 30 de agosto de 1932. Este declara de utilidad
pública, es decir, “expropiable provisoriamente” a las empresas que se nieguen a producir
artículos fundamentales en cantidades y calidades requeridas por el Presidente. En 1966,
bajo Frei, se añade a las causas de expropiación la alteración injustificada del ritmo de
producción y ocultamiento de stocks de artículos de primera necesidad.

Concebido para tiempos difíciles, el DL N° 520 otorga al Gobierno facultades para


revisar la documentación de las empresas, regular la circulación de productos alimenticios,
atribuir la distribución a ciertos empresarios, imponer la distribución y venta de ciertos
productos e, incluso, de establecer el racionamiento de productos fundamentales. Es decir,
contiene disposiciones para iniciar la planificación económica.

Novoa hace verificar la validez del decreto por varios colaboradores, por separado.
Constatan que ha sido aplicado en numerosos fallos jurídicos, acatados por el Ejecutivo y la
Contraloría. La conclusión es unánime: el DL-520 está vigente.

En 1973, el Estado controlaba cerca del 80 por ciento del parque industrial del país
y también muchos bancos fueron apropiados con el objetivo de estatizarlos.

Nacionalización del cobre

Un aspecto importante de la política económica de este gobierno era tomar el control


de la gran minería del cobre, mineral considerado como el “sueldo de Chile”. Sin embargo,
antes de hacerlo, estatizó las compañías nacionales del carbón, creando la Empresa Nacional
del Carbón (Enacar), en diciembre de 1970.

El 11 de julio de 1971, el Congreso aprobó, a través de una reforma constitucional y


por unanimidad, la nacionalización de la gran minería del cobre, cuyos grandes yacimientos
eran, en su gran mayoría, propiedad de empresas estadounidenses.
Un punto polémico se desató luego, debido a que el gobierno determinó pagar la
indemnización correspondiente al “valor libro” a las empresas norteamericanas, es decir,
descontando las ganancias excesivas. En la práctica, esto significaba no cancelar monto
alguno a dichas empresas. Estas, no obstante, pidieron el embargo de los embarques de
cobre chileno apenas llegasen a sus destinos.

Durante el primer año de Allende, el plan económico, aplicado por su ministro de


Economía, Pedro Vuskovic, arrojó cifras positivas: el producto bruto aumentó en un 8,6 por
ciento; la inflación bajó un 12,8 por ciento; la cesantía llegó solo al 3,8 por ciento, y la
producción industrial se incrementó en un 12 por ciento.

Pero la emisión desmedida de dinero sin el respaldo del Banco Central causó una
inflación mayúscula que, en 1972, llegó a un 140 % y, en 1973, alcanzó al 1% diario.

Este panorama causó la aparición del mercado negro, donde se vendían productos
básicos, como el arroz y harina, a precios mucho mayores que en el mercado normal, donde
se transaban a un precio fijo. Junto con esto, muchas mercancías “desaparecieron” de los
almacenes y supermercados. Así, finalmente, los consumidores debieron acostumbrarse a
hacer largas filas o “colas” frente a los establecimientos comerciales, para poder obtener
algunos productos.

En el período de la Unidad Popular aparecieron grupos, tanto de ultraizquierda como


de ultraderecha, que realizaron atentados y acciones violentas en el país. Estas agresiones
también se extendió al campo, donde solo en 1971 ya se habían expropiado más de dos
millones de hectáreas, hecho que enfrentó a los campesinos contra los propietarios de las
tierras.

Entre las víctimas de esta agitación política estuvo Edmundo Pérez Zujovic, ex
ministro del Interior de Eduardo Frei, asesinado el 8 de junio de 1971.

Asimismo, la grave situación económica por la que atravesaba el país fue el


detonante para que la agrupación de dueños de camiones, liderada por León Vilarín,
declarara un paro en octubre de 1972, al que se unieron otros gremios.
Para solucionar el conflicto, el gobierno de Allende nombró, a principios de
noviembre de 1972, como ministro del Interior al comandante en jefe del Ejército, Carlos
Prats, y a otros militares en su gabinete.

A pesar de los graves problemas de gobernabilidad del período de Allende, hubo


algunas iniciativas positivas: Salud: como en salud, área a la que se le destinaron recursos
para adquirir equipamiento y construir infraestructura. Dentro de este ámbito se implementó
el programa alimentario, que significó entregar medio litro gratis de leche diario a cada niño,
con una cobertura de cerca de un 80 por ciento.

En 1973 las dificultades se acentuaron. El Congreso vetaba los proyectos del


Ejecutivo y este optaba por los decretos de insistencia, generando conflictos entre ambos
poderes.

Por su parte, los tribunales no podían hacer cumplir la ley, ya que el gobierno le
negaba la ayuda de los Carabineros.

Lo más grave ocurrió el 29 de junio de 1973, cuando el Regimiento de Blindados


(tanques) Nº 2, al mando del coronel Roberto Souper, rodeó el Palacio de la Moneda, en un
fallido intento de golpe de Estado.

GOLPE DE ESTADO

El 11 de septiembre de 1973, el gobierno constitucional del Presidente Salvador


Allende es derrocado por un golpe de Estado, dirigido por una Junta Militar del Ejército, la
Marina, la Fuerza Aérea y los Carabineros de Chile.

El general del Ejército Augusto Pinochet asume el poder. La represión y la


persecución militar contra los partidarios del régimen anterior, de los partidos de la izquierda
y el movimiento popular comienza de inmediato.

Los primeros enfrentamientos armados entre Fuerzas Armadas y partidarios del


gobierno de la Unidad Popular se producen en diversos puntos del país, en especial en las
grandes ciudades.

En Santiago, el Palacio Presidencial, en el cual se encuentran en ese momento el


Presidente, Ministros y colaboradores fue rodeado y atacado por tropas del Ejército y
unidades de tanques. Las Fuerzas Armadas exigen la rendición incondicional del gobierno
del Presidente Allende y al no conseguir dichos objetivos La Moneda es bombardeada por
aviones de la Fuerza Aérea (FACH).

Después del bombardeo y de la muerte del Presidente son detenidos los


sobrevivientes. Algunos serán ejecutados ahí mismo, otros pasarán a engrosar las listas de
"detenidos no reconocidos" los que, con el correr del tiempo, serán conocidos como los
"detenidos-desaparecidos".

Pasados algunos días, con el control político y militar absoluto de la situación, sin
resistencia masiva u organizada se desencadenará una represión y persecución en contra
del movimiento popular sin parangón en la historia de Chile.

Las nuevas autoridades toman inmediatamente medidas represivas para consolidar


el golpe de Estado y legitimarse en el poder. Entre las más importantes, se pueden indicar
las siguientes:

Represivas

 Aniquilamiento de focos de resistencia popular armada en cordones industriales,


poblaciones, campamentos, universidades, sectores rurales.
 Represión en el interior de las Fuerzas Armadas y Carabineros, en contra de tropas
y oficiales que se negaron a obedecer a los mandos golpistas.
 Búsqueda, detención y/o muerte de funcionarios del gobierno de la Unidad Popular,
de las direcciones políticas y militantes de los partidos de izquierda, de
representantes de la Central Unica de Trabajadores (CUT), de responsables de
medios de comunicación progresistas, de exiliados políticos latinoamericanos
residentes, de extranjeros supuestamente sospechosos.
 Negación de salvoconductos para salir del país.
 Clausura de medios de comunicación no afines.
 Control militar sobre universidades y otros centros de enseñanza.
 Estado de Sitio y toque de queda nocturno permanente.
 Campos de concentración de detenidos políticos en diversos puntos del país, el
Estadio Nacional de Santiago, entre ellos.
 Coordinación de los servicios de inteligencia de las FF.AA. y las policías.

Políticas

 Disolución del Parlamento.


 Disolución de los partidos políticos de izquierda y receso de todos los demás.
 Promulgación de Decretos-Ley contra el sistema legal y constitucional vigente, con
la complicidad de la Corte Suprema de Justicia y la Contraloría de la República.
 Disolución de todas las organizaciones populares a nivel municipal, provincial y
nacional.
 Control de toda actividad nacional en los niveles administrativo, educacional,
poblacional.

Económicas

 Anulación del derecho de huelga.


 Realización de despidos colectivos.
 Congelación y disminución real de sueldos y remuneraciones, en el marco de una
inflación galopante.
 Reconsideración de la propiedad jurídica de las empresas del área social, devolución
a antiguos propietarios.
 Imposición de disciplina militar en el trabajo.
 Liberación de precios de todos los productos de consumo de acuerdo con la
economía de libre mercado.
 Acuerdo con los Estados Unidos para el financiamiento de la deuda externa.
 Indemnización de las empresas extranjeras afectadas por las nacionalizaciones del
gobierno de Unidad Popular.

El mismo día de la instauración del régimen militar se estableció un fuerte dispositivo


represivo que significó la negación de los derechos civiles y políticos. Después de la clausura
del Congreso Nacional, se decretó el Estado de Sitio, Estado de guerra interno, prohibición
del derecho de reunión y organización.

Las nuevas autoridades desconocieron la legitimidad de las instituciones


democráticas y la sociedad fue conducida con lógica militar. Con la justificación del "enemigo
interno" se cometen actos propios de las experiencias fascistas europeas: campos de
detenidos, muertes, ley de fuga, torturas, allanamientos a domicilios y poblaciones,
ejecuciones extrajudiciales, desaparecidos.

Se aplica y profundiza la persecución con el pretexto de un supuesto plan de la


izquierda para tomar el poder total. En efecto, para justificar su acción represiva, la Junta
Militar, apelará a un supuesto "Plan Zeta", "un autogolpe marxista" que tenía por objetivo
asesinar a militares chilenos. Al respecto, Orlando Letelier, ex-Ministro de Relaciones
Exteriores, Ministro de Defensa Nacional al momento del golpe militar, asesinado
posteriormente en un atentado terrorista en Washington por la DINA, en 1976, expresaba
lo siguiente:

"Para justificar o intentar legitimar la masacre y la traición, se inventó primero el


plan zeta. Según declaraciones oficiales de la Junta, consistía en el asesinato masivo de
oficiales de las Fuerzas Armadas el día que en Santiago se esperaba llevar a cabo la Revista
Militar preparatoria de 1973, que antecede a la llamada Parada Militar, que se efectúa en
Chile el 19 de septiembre. Nunca, no obstante, las campañas publicitarias que la Junta hacía
a través de todos los medios de información que controla, y a pesar de los numerosos
interrogatorios a que fui sometido, nunca se atrevieron a preguntarme si yo sabía algo
siquiera del plan zeta. [...] Sin embargo, con el argumento del plan zeta y de la propaganda
desplegada contra la opinión pública se pretendió, en los primeros meses siguientes al golpe,
legitimar y justificar el asalto al poder y la muerte de miles de chilenos.

REGIMEN MILITAR Y/O DICTADURA

Durante los 17 años de dictadura de Pinochet, Chile sufrió un importante desarrollo


económico, pero también muchísimas violaciones a los derechos humanos, llevando a cabo
una fuerte represión sobre los sectores opositores y disidentes.
Lo primero que hizo el nuevo Gobierno fue prohibir los partidos políticos, disolver el
Congreso, restringir los derechos civiles y políticos y ordenar la detención de los máximos
líderes de la Unidad Popular, que fue declarada ilegal.

El 17 de diciembre de 1974, la Junta de Gobierno nombró a Pinochet presidente de


la República. Acto seguido, el nuevo presidente ordenó que se organizase la Dirección de
Inteligencia Nacional (DINA), un organismo represivo del Estado que violó sistemáticamente
los Derechos Humanos.

Así, la violencia continuó en el país mediante la DINA, que en 1977 fue disuelta para
crear la Central Nacional de Informaciones (CNI), deteniendo, torturando, asesinando,
haciendo desaparecer o condenando al exilio a quienes estuvieron involucrados con el
gobierno anterior.

Desde un primer momento, también establecieron un toque de queda que perduró


hasta el 2 de enero de 1987, obligando a los chilenos a quedarse en casa durante
determinadas horas.

Otra de las prácticas más comunes del régimen militar como represión a los
opositores políticos fue el exilio, llegando a expulsar a miles de personas del país.

DE LOS DERECHOS HUMANOS

Los informes de la Comisión de Verdad y Reconciliación (Informe Rettig) y la


Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura (Informe Valech) hablan de 40.000
personas que han sido detenidas, desaparecidas, ejecutadas, torturadas o presas políticas
reconocidas, de las que 3.065 están muertas o desaparecidas. Además, otras 200.000
sufrieron el exilio.
NORMAS CONSTITUCIONALES DE TRANSICIÓN ENTRE 1973 Y 1981 Y LA
GÉNESIS DE LA CONSTITUCIÓN DE 1980

Se refiere al régimen constitucional vigente desde los inicios del gobierno militar
hasta la entrada en vigencia de la Constitución Política de 1980.

NORMAS CONSTITUCIONALES DE TRANSICIÓN:

Debe considerarse la curiosa y tan típicamente nacional política de normar y


reglamentar hasta los periodos en que precisamente se carece de un ordenamiento jurídico
matriz que permita tal ordenación. Es un caso único en la larga lista de los gobiernos de
facto surgidos en el continente desde la Independencia de las naciones de Hispanoamérica.
Para tratar el tema de las normas constitucionales vigentes y aplicables en el periodo
entre el Pronunciamiento Militar del 11 de septiembre de 1973 y la entrada en vigencia de
la Carta de 1980, el 11 de marzo de 1981, deben distinguirse dos grandes etapas, la segunda
de las cuales se subdivide a su vez en dos sub-etapas:
1.- DESDE 11 DE SEPTIEMBRE DE 1973 HASTA 4 DE DICIEMBRE DE 1974.
2.- DESDE DECRETO LEY N° 788 DE 4 DE DICIEMBRE DE 1974 HASTA LA VIGENCIA DE LA
CONSTITUCIÓN DE 1980 EL 11 DE MARZO DE 1981.

1.- DESDE EL 11 DE SEPTIEMBRE DE 1973 HASTA EL 4 DE DICIEMBRE DE 1974:

Durante este periodo el poder constituyente radica en la Junta de Gobierno, quien


lo ejerce mediante DECRETOS LEYES, que paulatina y progresivamente van modificando y
derogando la Constitución.

Las normas constitucionales vigentes se encuentran en:


a) La Constitución de 1925 en aquellas partes no modificadas por los decretos leyes
constitucionales (Capítulo sobre Garantías Constitucionales y el Poder Judicial).
b) Los decretos leyes sobre materias constitucionales dictados hasta el 4 de diciembre de
1974.
Este sistema al parecer sencillo generaba graves problemas, pues al no saberse
cuáles decretos leyes podían modificar la constitución, había que estudiarlos todos a fin de
dilucidar si contenían o no alguna norma constitucional. Desde luego la Corte Suprema no
podía ejercer el control de la constitucionalidad a través del Recurso de Inaplicabilidad por
Inconstitucionalidad.
Desde el punto de vista del Derecho Político es el clásico caso del gobierno de facto
que legisla por decreto. Para resolver el desorden y conflicto creado se dicta un decreto ley
especial.

2.- DESDE EL DECRETO LEY N° 788 DE 4 DE DICIEMBRE DE 1974 HASTA LA


VIGENCIA DE LA CONSTITUCIÓN DE 1980 EL 11 DE MARZO DE 1981:

Esta etapa se caracteriza por la ordenación y sistematización progresiva de las


normas constitucionales en aplicación. No obstante no existir diferencias estrictamente
jurídicas, es preciso distinguir dos sub-etapas en atención al propósito institucionalizador de
las Actas Constitucionales dictadas en 1976:

2.A.- DESDE EL DECRETO LEY Nº 788 DE 4 DE DICIEMBRE DE 1974 A LA DICTACIÓN DE


LAS ACTAS CONSTITUCIONALES (9-1-76 AL 13-9-76):
El Decreto Ley Nº 788 estableció que desde su dictación en adelante sólo podrían
modificar la Constitución y los Decretos Leyes anteriores, aquellos decretos leyes dictados
por la Junta de Gobierno en “ejercicio de la Potestad Constituyente”.
Esta sub-etapa se caracteriza por un orden definido en el proceso de modificaciones
constitucionales, que son claramente precisadas y conocidas. La dictación de decretos leyes
claramente constitucionales y/o simplemente legales hace posible, que respecto de éstos
últimos, la Corte Suprema pueda ejercer el control constitucional a través del Recurso de
Inaplicabilidad por Inconstitucionalidad.

Las normas constitucionales vigentes se encuentran en:


a) La Constitución de 1925 en aquellas partes no modificadas por los decretos leyes
constitucionales (v/gr. El capítulo sobre Garantías Constitucionales y el Poder Judicial).
b) Los decretos leyes sobre materias constitucionales dictados hasta el 4 de diciembre de
1974.

c) Los decretos leyes dictados después del DL Nº 788 que expresamente invocan la potestad
constituyente. (v/gr. El DL Nº 806, que concede al Comandante en Jefe del Ejército la calidad
de Jefe Supremo de la Nación).

2.B.- DESDE LAS ACTAS CONSTITUCIONALES (9-1-76 AL 13-9-76) AL 11 DE MARZO DE


1981:
Jurídicamente no hay diferencias con el periodo anterior. En efecto las Actas
Constitucionales no son sino Decretos Leyes dictados en ejercicio de la potestad
constituyente, pero se denominan actas debido a que tratan instituciones constitucionales
completas.
Estas Actas son dictadas por la Junta de Gobierno con el propósito de preparar la
institucionalización del país.

Las Actas son:

1) Acta Constitucional Nº 1 (DL 1.319 Diario Oficial 09-01-76) “Crea el Consejo


de Estado”, órgano asesor del Presidente de la República integrado por los ex Presidentes
de la República, un ex presidente de la Corte Suprema, un ex Contralor General, un ex
comandante en Jefe del Ejército, un ex Comandante en Jefe de la Armada, un ex
Comandante en Jefe de la FACH, un ex General Director de Carabineros, un ex Ministro de
Estado, un ex Embajador, un ex Rector de Universidad, un profesor o ex profesor de alguna
Facultad de Derecho, un profesor o ex profesor de alguna Facultad de Economía, un
representante de las actividades profesionales colegiadas, un representante de los
empresarios, un trabajador representante de los trabajadores, un representante de una
organización femenina, un representante de un organismo de la juventud.

2) Acta Constitucional Nº 2 (DL 1.551 Diario Oficial 13-09-76) “Bases


Esenciales de la Institucionalidad Chilena”, establece los principios políticos
fundamentales del Estado: Forma de Estado, Régimen Administrativo, el Bien Común, la
Soberanía Nacional, la Democracia, el principio de legalidad y nulidades de derecho público
y los Emblemas Nacionales.

3) Acta Constitucional Nº 3 (DL 1.552 Diario Oficial 13-09-76) “Derechos y


Deberes Constitucionales”, establece el catálogo de garantías constitucionales y deberes
(novedad, pues no figuraban en nuestras constituciones desde la constitución de 1823).
Garantiza por primera vez el derecho a la vida. Y establece los recursos de amparo (ampliado
a las amenazas a la libertad) y la gran innovación constitucional: El Recurso de protección
para asegurar los demás derechos constitucionales (salvo los de naturaleza económica y
social).

4) Acta Constitucional Nº 4 (DL 1.553 Diario Oficial 13-09-76) “Regímenes de


Emergencia”, crea un estatuto constitucional para los regímenes de excepción. Se
establecen el Estado de Asamblea, de Sitio, de Defensa contra la subversión y de Catástrofe
(calamidad pública).

Por consiguiente durante este último periodo las normas constitucionales


se encuentran en:
a) La Constitución de 1925 en aquellas partes no modificadas por los decretos leyes
constitucionales (v/gr. El capítulo sobre Garantías Constitucionales y el Poder Judicial).
b) Los decretos leyes sobre materias constitucionales dictados hasta el 4 de
diciembre de 1974.
c) Los decretos leyes dictados después del DL Nº 788 que expresamente invocan la
potestad constituyente. (v/gr. El DL Nº 806, que concede al Comandante en Jefe del Ejército
la calidad de Jefe Supremo de la Nación).
d) Las cuatro Actas Constitucionales (decretos leyes) ya enunciadas.
LA GÉNESIS DE LA CONSTITUCIÓN DE 1980:

La elaboración de la Carta fundamental en actual vigencia, es una de las primeras


preocupaciones de la Junta de Gobierno y desde el punto de vista de nuestra historia
constitucional, ha sido el texto más detenidamente estudiado de nuestra historia
constitucional.

Se pueden distinguir 4 Etapas: En la elaboración de la Carta distinguiremos la


intervención sucesiva de tres órganos y de un procedimiento de aprobación:
1) La Comisión de Estudios;
2) El Consejo de Estado;
3) La Junta de Gobierno y;
4) El Plebiscito de aprobación.

1) LA COMISIÓN DE ESTUDIOS:
Fue creada con fecha 24 de septiembre de 1973, para estudiar un anteproyecto
constitucional. Entre esta fecha y el 21 de diciembre de 1973 se designó a:

 Sergio Diez Urzúa,


 Jaime Guzmán Errázuriz,
 Enrique Ortúzar Escobar (presidente de la misma),
 Jorge Ovalle Quiroz,
 Enrique Evans de la Cuadra,
 Gustavo Lorca Rojas,
 Alejandro Silva Bascuñan y
 Alicia Romo Román.

Por DS. N° 1.064, de 25 de octubre de 1973, se le encargó “que estudie, elabore y


proponga un anteproyecto de una nueva Constitución Política del Estado y de sus leyes
complementarias".
Marzo de 1977, Alejandro Silva Bascuñán y Enrique Evans de la Cuadra y, en mayo
del mismo año, Jorge Ovalle Q. renunciaron a la comisión debido a discrepancias políticas
surgidas entre ellos y el gobierno militar y la vez, se incorporaron en junio de 1977, como
miembros permanentes:

 Luz Bulnes Aldunate,


 Raúl Bertelsen Repetto y
 Juan de Dios Carmona Peralta.

La comisión fue llamada en un principio “Constituyente”, pero luego denominada


“Comisión de Estudios de la Nueva Constitución Política”.

Se trabajó con el aporte de numerosos colaboradores y documentos. El estudio fue


largo y detenido. Se prepararon textos de ideas sin articular, lo que demuestra el enfoque
preferentemente dogmático de su estudio.
Sin embargo, más tarde el proyecto se estructuró en un conjunto articulado pues así
lo pidió el Consejo de Estado.
El proyecto de la Comisión tiene esa ya apuntada preocupación preferente por los
aspectos dogmáticos (derechos fundamentales y bases de la institucionalidad).

2) EL CONSEJO DE ESTADO:

Fue presidido por el ex-Presidente de la República don Jorge Alessandri Rodríguez y


por el ex-Presidente de la República don Gabriel González Videla como Vicepresidente, e
integrado por 16 representantes de instituciones y actividades relevantes del acontecer
nacional.
Entre noviembre de 1978 y julio de 1980, celebró 57 sesiones plenarias más variadas
reuniones especializadas. El Consejo redactó un nuevo proyecto con más énfasis en los
aspectos orgánicos y con un nuevo elemento: Un periodo de transición política para adecuar
las instituciones de la carta progresivamente, partiendo del gobierno militar existente para
desembocar en una democracia plena.
El proyecto del Consejo consta de 120 disposiciones permanentes, incluidas en 14
capítulos más uno de disposiciones generales, y 27 disposiciones transitorias, que contienen
el período de transición.
Éste período de transición fue obra personal del ex-Presidente Alessandri y establecía:

1. Un lapso de 5 años, encabezado por el presidente Pinochet (Poder Ejecutivo)


2. La Junta de Gobierno y el Presidente en conjunto (Poder Constituyente).
3. Un Congreso Nacional designado: Legislador.
4. Designación de alcaldes por 3 años, para dar paso luego a elecciones.

Los consejeros Pedro Ibáñez Ojeda, y Carlos Cáceres Cáceres, no firmaron el


proyecto y presentaron un voto disidente que se caracterizaba por una organización neo
corporativa del sistema político. Ambos consejeros cuestionaban la idea del sufragio
universal y la elección democrática de los representantes populares.
Durante varios años las actas del Consejo de Estado permanecieron en secreto con
calidad de reservadas, pero hoy están a disposición del público en la Biblioteca del Congreso
Nacional.
El proyecto del Consejo de Estado se entregó al Presidente de la República y don
Jorge Alessandri estimó que necesario indicar que el texto era más bien una reforma a la
Carta de 1925, pues no creía oportuno el “dar un salto al vacío” con un texto desvinculado
con nuestra historia constitucional.
Más tarde y frente a los cambios en el proyecto introducidos en la siguiente etapa,
el presidente del Consejo de Estado don Jorge Alessandri Rodríguez tomó la decisión de
renunciar a la presidencia del mismo. Los motivos de la renuncia se derivan de la supresión
del periodo de transición propuesto y de la alteración de numerosas disposiciones del
articulado permanente de la Carta definitiva en comparación con la propuesta de la Comisión
Ortuzar. El ex-presidente Alessandri consideraba excesivas las facultades y el papel
asignados a las FF.AA y de Orden en el texto definitivo y asimismo que el Presidente de la
República estaría prisionero de tales atribuciones.
3) LA JUNTA DE GOBIERNO: EL GRUPO DE TRABAJO.

El proyecto del Consejo de Estado fue elevado al conocimiento y revisión de la Junta


de Gobierno que nombró para ello a un grupo de trabajo para analizarlo. Este grupo de
trabajo fue integrado por:

 El Ministro del Interior, Sergio Fernández F.,


 La Ministro de Justicia, Mónica Madariaga G.,
 El Ministro Jefe del Estado Mayor Presidencial, General Santiago Sinclair O.,
 El Secretario de Legislación, Capitán de Navío (J) Mario Duvauchelle R.,
 El Auditor General del Ejército, General (J) Fernando Lyon S.,
 El Auditor General de la Armada, Contralmirante (J) Aldo Montagna B.,
 El Auditor General de la Fuerza Aérea, Coronel (J) Enrique Montero M., y
 El Mayor (J) de Carabineros, Harry Grunewaldt

Finalmente, con el informe de este grupo de trabajo, que comparó ambos proyectos
y consideró otros antecedentes, como la declaración de principios del gobierno militar (entre
otros), la Junta de Gobierno acordó el texto definitivo. En general se siguió más de cerca al
proyecto de la Comisión que al del Consejo de Estado.

Fue aprobado por el Presidente de la República y la Junta. Se promulgó por DL N°


3.464, de 8 de agosto de 1980.
Por DL N° 3.465 de igual fecha se convocó a plebiscito de aprobación del texto legal.

4) EL PLEBISCITO DE APROBACIÓN:

El plebiscito resulta interesante de estudiar por varias razones:

a) Se concentró en una campaña de propaganda breve, de un mes de duración, al igual que


en 1925.
b) Esta campaña estuvo más bien enfocada en la continuación o término del gobierno militar
que a debatir sobre la conveniencia de adoptar el texto de la Constitución.
c) La oposición llamó a rechazar el texto. Se celebraron actos de rechazo y la prensa
opositora llamó a votar NO.
d) La televisión fue usada por el gobierno para difundir la alternativa SI.
e) Se votaría en cédulas únicas, con voto secreto, por alternativas Si y No.
f) No había registros electorales.
g) Se votaba ante mesas de tres integrantes con el carné de identidad. Tras el acto de
sufragar, además de entintar el pulgar del votante con tinta indeleble, la cédula de identidad
era recortada en el extremo superior derecho.
h) El proceso fue controlado por un Colegio Escrutador Nacional integrado por el Contralor
General de la República, don Osvaldo Iturriaga Ruiz; un Ministro de la Corte de Apelaciones
de Santiago designado por la Corte Suprema, don Arnoldo Dreyse Jolland y el Secretario de
la Corte Suprema, don René Pica Urrutia.
i) Un reclamo formal de irregularidades fue presentado por el ex senador Patricio Aylwin
Azocar y otros ex dirigentes políticos y gremiales, pero en definitiva desechados.

Los resultados del plebiscito fueron:


Por el SI: 4.121.067 (65,71%)
Hombres: 61,02%
Mujeres: 70,23%
Blancos: 83.812 (1,33%)
Total SI: 4.204.879 (67,04%)

Por el NO: 1.893.420 (30,19%)


Nulos: 173.569 (2,77%)
TOTAL: 6.271.868 (100%)

Las cifras de aprobación demuestran varios fenómenos:

1) El gran aumento del cuerpo electoral. Que desde 3 y medio millones de votos en marzo
de 1973, había aumentado a más de 6 millones en tan solo 7 años.
Ello demuestra que electoralmente Chile era un país joven y en expansión. Ésta sería
la última vez que se observaría un salto tan importante en la masa de votantes.
2) La curiosa política de sumar los votos en blanco a la opción SI, nunca explicada por el
gobierno de la época, tal vez motivada por el deseo de superar la barrera psicológica de los
dos tercios, pero claramente innecesaria habida consideración la tremenda diferencia a favor
del texto que se registró.

3) Nuevamente se observa un comportamiento político electoral muy diverso entre hombres


y mujeres, siendo las últimas mucho más proclives a la aprobación de la Constitución.

En definitiva la Constitución fue aprobada por un amplio margen de la ciudadanía.


Entró en vigencia parcial el 11 de marzo de 1981.
El Presidente Pinochet asumió el mando en un nuevo mandato, pero ahora como
Presidente Constitucional de la República. La sede del gobierno fue restablecida en el Palacio
de la Moneda casa de gobierno tradicional de la República.

FIN DE LA DICTADURA

El 5 de octubre de 1988 realizaron un PLEBISCITO para decidir si Pinochet seguiría


en el poder hasta 1997.

Los opositores decidieron seguir las reglas impuestas por la Constitución aprobada
en 1980, e iniciaron la normalización de los partidos políticos. Entre ellos, fueron cogiendo
forma la Democracia Cristiana, el Partido Socialista y el Partido Por la Democracia.

Aunque se inscribieron, muchos de ellos pensaban que este plebiscito era ridículo,
dado que nunca se había dado el caso de que un régimen autoritario dejara el poder
mediante unas elecciones populares.

Aun así, ese día votó el 92,1% de la población mayor de edad, un récord histórico
en el país. Después de las primeras votaciones, el ambiente empezó a calentarse. Mientras
un lado daba una gran ventaja al "Sí", los opositores entregaban cifras muy diferentes.
Resultado:

- 44,01 % por el "Sí", y


- de 55,99 % por el "No".
Por lo que se abrió el camino a unas elecciones democráticas presidenciales y
parlamentarias para el año siguiente, que daría paso al fin de la dictadura y al comienzo de
la transición a la democracia.
Según documentos desclasificados por el Archivo de Seguridad Nacional(NSA)
estadounidense, Pinochet intentó un segundo golpe de Estado contemplando el uso de la
violencia para anular su derrota en el plebiscito. Describen que el mismo día de las
votaciones, el Gobierno militar intentó manipular la información de los resultados para incitar
a la oposición para que esta provocase el desorden. Al fallar, Pinochet convocó a su junta
en el palacio de La Moneda para proponer anular el escrutinio y solicitar que se le otorgara
poderes extraordinarios. Pero los integrantes de la junta rechazaron esa opción, por lo que
el dictador no tuvo otra alternativa que reconocer su derrota.

Así, al año siguiente, Pinochet dejo la presidencia en manos de Patricio Aylwin,


vencedor de las elecciones, pero el ya ex dictador continuó como comandante en jefe del
Ejército hasta marzo de 1998, cuando pasó a ser senador vitalicio.

Desde el final de su etapa como presidente de la República, Pinochet ha sorteado


diversas acusaciones de corrupción contra miembros de su familia, hallazgos de fosas
clandestinas con víctimas de la represión o la publicación de varios informes que le acusan
de violar los derechos humanos.

En 1998, el juez español Baltasar Garzón solicitó la detención de Pinochet, por lo que
fue retenido en Londres. Pero, tras varios días de incertidumbre, fue extraditado a España
y regresó a su Chile natal.

Allí también hubo varias iniciativas para procesarle para que diese cuenta de los
crímenes que perpetró durante su Gobierno. Poco a poco Pinochet fue siendo desaforado
en algunos de los casos para que pudiese ser juzgado, pero, alegando su frágil estado de
salud, consiguió no ser procesado en ninguna de las acusaciones hasta el día de su muerte,
el 10 de diciembre de 2006, con 91 años de edad. En ese momento, Augusto Pinochet
contaba con más de 400 querellas en su contra.
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