América Latina ha tenido históricamente un papel de liderazgo en el campo de los derechos

humanos. En mayo de 1948, los Estados americanos firmaron la Declaración Americana de los
Derechos y Deberes del Hombre en Bogotá. Fue el primer tratado internacional sobre derechos
humanos, ya que precedió a la Declaración Universal de Derechos Humanos de las Naciones
Unidas durante siete meses. América Latina estaba al comienzo de un camino que nos obligó
a repensar la concepción tradicional de la soberanía del estado, ya que comenzaba a suponerse
que, en nombre de la garantía y el respeto de los derechos humanos, había cierto grado de
intervención internacional en los asuntos internos. admisible (Petrella, 2014)
La situación de los derechos humanos en América Latina es cambiante de un país a otro. En
países como en Perú, cientos de personas inocentes permanecen en la cárcel, acusados
falsamente de "actividades subversivas" u otros delitos. En Colombia, Venezuela o Brasil las
desapariciones, ejecuciones sumarias y torturas han alcanzado proporciones epidémicas. En
otros, las violaciones más comunes son la brutalidad policial, las condiciones inhumanas en las
cárceles y las violaciones de los derechos económicos y culturales y sociales.
Si hay una violación que es común, hoy en día, para la mayoría de los países de América Latina,
es la impunidad, la falta de castigo, y a menudo la investigación, para quienes son responsables
de cometer los abusos más viles contra los derechos humanos.

Bibliografía
Petrella, I. (22 de diciembre de 2014). America latina y los derechos humnos. La Nacion.
Argentina.