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INSTITUTO TECNOLÓGICO DE SANTO DOMINGO

INTEC
ÁREA DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANIDADES.
PROCESOS DE ENSEÑANZA Y APRENDIZAJE.

Jafreury Duran Nivar.

DOCENTE INNOVADOR.
¿Qué es ser un profesor innovador?
Convertirse en un profesor innovador implica superar las prácticas pedagógicas
tradicionales planteando y llevando a la práctica nuevas propuestas a los problemas
pedagógicos. Para poder plantear nuevas propuestas, el docente tendrá que tener,
además de conocimiento y experiencia acerca de su disciplina, una formación que le
habilite para proponer cambios, cambios basados en dotar de herramientas al alumnado
que le ayuden en el principio de “aprender a aprender”, así como conocer al grupo al que
tendrá que acompañar en su proceso de aprendizaje.

¿Por qué es necesario ser innovador?


Estamos cansados de ver cómo nuestros alumnos no se interesan por nuestras clases
porque no están involucrados en la información que se les da, o no saben para qué les
puede servir. Necesitamos preparar a los estudiantes para que aprendan por sí mismos,
motivarlos para que deseen, quieran y ambicionen aprender, esto supone hacer cosas
distintas a lo que hacemos. Si no vamos cambiando paulatinamente el enfoque de
nuestro trabajo estamos condenados a que los problemas que nos acontecen hoy se
acentúen el día de mañana. Partiendo de la premisa de que el alumno es el protagonista
en el proceso educativo, seremos los docentes los que ocupemos un papel primordial en
la innovación educativa por ser quienes guiaremos el proceso de aprendizaje del alumno
el cual se convertirá en un futuro profesional del país.

La innovación puede ser interpretada de diversas maneras. Desde una perspectiva


funcional podemos entenderla como la incorporación de una idea, práctica o artefacto
novedoso dentro de un conjunto, con la convicción de que el todo cambiará a partir de
las partes que lo constituyen. Desde este enfoque, el cambio se genera en determinadas
esferas y luego es diseminado al resto del sistema. Desde otra perspectiva menos
reduccionista, podemos considerar la innovación como una forma creativa de selección,
organización y utilización de los recursos humanos y materiales; forma ésta, nueva y
propia, quedé como resultado el logro de objetivos previamente marcados. Estamos
hablando, pues, de cambios que producen mejora, cambios que responden a un proceso
planeado, deliberativo, sistematizado e intencional, no de simples novedades, de
cambios momentáneos ni de propuestas visionarias. Como proceso que es, supone la
conjunción de hechos, personas, situaciones e instituciones, actuando en un período de
tiempo en el que se dan una serie de acciones para lograr el objetivo propuesto (Havelock
y Zlotolow, 1995).

El éxito o fracaso de las innovaciones educativas depende, en gran parte, de la forma en


que los diferentes actores educativos interpretan, redefinen, filtran y dan forma a los
cambios propuestos. La manera en que estos procesos mediadores operan depende de
lo que los docentes piensan, sienten y hacen y de sus concepciones acerca de diferentes
dimensiones de lo educativo. Por ello, las acciones dirigidas al mejoramiento de los
procesos de enseñanza y de aprendizaje en la educación superior, no pueden
desconocer las mediaciones cognitivas, sociales y culturales que vehiculizan y posibilitan
los cambios pretendidos.

 Salinas, J. (2004). Innovación docente y uso de las TIC en la enseñanza universitaria.


RUSC. Universities and Knowledge Society Journal, 1(1).
 Vogliotti, A., & Macchiarola, V. (2003, September). Teorías implícitas, innovación
educativa y formación profesional de docentes. In Ponencia Congreso Latinoamericano
de Educación Superior. Argentina: Universidad de San Luis.
 Miranda Jaña, C. (2005). Formación permanente e innovación en las prácticas
pedagógicas en docentes de educación básica. Estudios pedagógicos (Valdivia), 31(1),
63-78.

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