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lírL, 4-6 ENcÍcr.rc.

{ "C¿s'¡r CoNNuerr" 1233


'l[5fl b) Plan de Ia Encíclíca trio de ningúrn hombre, ui siquiera al
4. Propósitos del Papa y ilmrncio de acuerdo contralio de los mismos cón-
yuges. Esta es la doctrina cle la Sagrit-
los puntos prineipales. Por eso, Vene-
CARTA ENCICLICA da Escritura(3), ésta la constante tridi-
..CASTI COI{NUBII rables Helrnanos, Nos hernos deterrni-
ción de la Iglesia universal, ésta la de-
QUANTA SIT DIGMTAS''I,"I rndo a dirigir la palabra primeramente
firúción soleurne del Santo Coneilio de
(31-XiI_1930) a Vosotros, y por medio de Vosotros a
Trento, el cual, con las misrnas pala-
toda la Iglesia católica, más aún, a todo
bras clel Texto Sagrado, expone y con-
el género humano, para hablaros acer-
SOBRE EL MATITIMONIOCRISTIANO,ATENDIDAS LAS AC'IUALES firrna que el perpetuo e indisoluble
ca de la naturaleza del mattimonio
CIRCUNSTANCIAS, NECESIDADES,ERRORESY VICIOS vinculo del rnatrimonio, su unidad y su
cristiano, de su dignidad y de las utili-
DE I,A FAMILIA Y DE LA SOCIEDAD cstabilidad tienen por tutor a ¡¡o.t+1.
dades y beneficios que de él se derivan
para la familia y la misrna sociedad
.6. Voluntad humana y paeto conyu-
PIO PP. XI hurnana, de los errores contrarios a
gal. Mas, aunque el rnatrimonio sea de
e-steimportantísimo capitulo de la doc-
institución divina por su misma natula-
Venerables l-Ietntanos: Salud g bendícíón apostólica trina,,evangélica, de los vicios que se,
leza, con todo, la voluntad humana tie-
oponen a la vida conyugal, y, última-
ne también en él su parte, y por cierto
mente, de los principales'remedios que
INrnoouccró¡r cia interior. de Dios, se con<Iuzcan,s¡ nobilisima, porque todo matrimonio,
€s preciso ponel'en práctica; siguiendo
a) Doctrína de Cústo g errores ,no- todos sus pensarnientos y en todas sus en cuanto que es unión conyugal entre
asÍ las huellas de Nuestro Predecesor
dernos oblas, en conÉonancia cón la pulísima un determinado hombre y una deter'-
LeóN XIII, de santa memoria, cuya
Iey de Clisto, de Ia cual se -derivan" Carta Encícliea Arcanum(z), publicada
rninada rnujer', no se realiza sin el libre
1. Jesús quiso vivir en un hogan para sí y para sus familias, la felicidaci consentimiento de ambos espososy este
Cuan grande sea la dignidad del cásto hace ya cincuenta años, acerca del ma-
y la paz. acto libre de la voluntad, por el cual
matrimonio, principalmente puede co- trirnonio clistiano, hacemos Nuestra
una y otr-a parte entregan y aceptan el
por esta Nuestra EncÍclica y la confir-

,l
legirse, Venerables llermanos, de que 3. Deplorable estado de eosas; Io,s delecho propio del matrimotr¡s(5), es
t habiendo Cristo, Seíror Nuestro, Hijo motlernos erlores. Ocur.r.e,sin embar- mamos, exponiendo algunos puntos con
|| mayor amplitucl, por requerirlo asÍ las
tan necesario para la constitución del

I
tl
del Etelno Padre, tomado la carne del
homhre caÍdo, no solamente quiso in-
cluir de un modo peculiar este prin-
go, gue, no solamente Nos, observando
con paternales miradas el mundo ente- circunstancias de nuestro tiernpo, y de-
clarando, no sólo que no han caído en
verdadero natrirnonio, q,ue ninguna
potestad humana lo pttede suplir(6). Es

t
ll'i
ro desde, esta como Apostólica atalaya, cierto que esta libertad no da más atri-
ci¡:io y.fundamento de la sociedad do- sino también Vosotros, Venelables Her.- desuso, sino que consel.t'an toda sn
buciones a los cónyuges gue las de de-
t! néstica y hasta del humano cpnsorcio manos, conternpláis y sentidamente os fuerza.
, terminarse o no a contraer matrimonio,
I en aquel su amantÍsirno designio de condoléis con Nos de gue muchos hom- y a contlaello precisamente con tal o
c) Dil1nidad del ll[atrínonio
Il redimir, como lo hizo, a nuestro linaje,
sino que tarnbién lo elevó a verdadero
bres, dando al olviclo Ía divina obr:a de cual persona; pero está totalmente fue-
-
dicha restauración, o desconocen ool 5. Los supremos prineipios: Institu- la de los lírnites de la libertad del hom- ,i:' rl ,
y grande(t) sactamento de Ia Nueva
Le5'. restituyéndolo antes a la primi-
tiva pureza de la divina institución y
com¡.rleto la santidad excelsa del ma-
tlirnonio cristiano, o Ia niegan desca-
eién rlivina. Y comenzando por esa
misma Carta, encaminada casi total-
bre la naturaleza del rnatrirnonio, de
tal suelte que si alguien ha contraído ri;
iifi¡i
ladnmenlc, o h coucnlcan, apoyándose rnente a vindicar la divin¿r. institución ya uratrirnonio se halla sujeto a sus le-
encomendandotoda su üsciplina y cui- en falsos plincipios de una nlteva y del rnatdmonio, su dignidad saclamen- yes y propiedades esenciales, y así el
rlado a Su Esposa la Iglesia. ¡rcrvelsísima moraliclacl. Contra esto.s
¡:erniciosos errores y depravadas cos-
tal y su perpetua estabiliclad, quede
asentado, en prirner lugar', como fun-
Angélico Doctor., tratando de la fideli-
{ad y de la prole, dice: ,Bsfasnecen en iü'
2. La doctrina y graeia de Cristo
"
I
turnbres, gue ya han comenzado a cun- damento firrne e inviolable: que el ma- el ntattítnonio en vírtud del nismo pac-
robustece el matrimonio. para clue de dir entle los fieles, haciendo esfuerzos trimonio no fue instituidc¡ ni restaurado to cory¡ugal, de tal nanera que, si se
tal lelrovación del matrirnonio se-r.eco- solapados por introclucilse más profun-
jan los frutos anhelados, en todos los por obla de los hombres, sino pol obra llegase ct er.presar en el consentímiento,
darnente, creímos ser Nuestro deber, en divina; que no fue pr-otegido, coufirrna- causa del nwtrintonio, nlgo que les fuc-
I lugares del mundo y en toclos los tiem- lazón de Nuestro oficio de Vicario de
pos, es necesario, primelamente, iltuni_ do, ni elevado con leyes hurna.nas, sino te contrario, tto habrú uerdadero ma-

fffi
I Cristo en la tierra y de supremo pas-
nar las inteligencias de los hombres con leyes del mismo Dios, autor de la túmonío$). Por obra, pues, del matri-
tor v Maestro, levantar .lh voz. a fin naturaleza, y de su restauladot Cristo monio se juntan y funden las almas
i con Ia genuina cloclrina de Cristo acer_
ca
de alejar de los eurponzoiaelos pastos Scñor Nuestro, y quc! por lo tanto, sus ¿run antes y más estrecham.enteque los
.de esta rnateria, a fin cle que, des_ y, en cuanto está de Nuestra parte, con-
leyes no pueden estar sujetas al arbi-
pués, los cónyuges cristianos, robuste- cuelpos, y esto no con un afecto pasa-
scrval inmunes las ovejas que Nos han
cidas sus flacas voluntacles con la gra. sido encomendadas. liCi,G-E,r" . Arcanum d.iDitlae slpicnliae, 70 (4) Conc. 'f¡id. sess. XXIV; Dcn:-LImb. nrs,
--GtA'{sl;2 L'cbr. 1880; ASS. 12 (18t9l80) 385-{02; en csta Co- 969-982.
(1930) 539'592. r,a.traducción
e,s la oficial. Los números rornauos I, II, IiI figgran lección; Encicl. 34, págs. 244-256. (5) Cod. iur. can., c. 1081, g 2.
tt'rro oricial.Los Lirulosy subrirul.s en et
¿"lo-i:uirio'niorriíi.i"á-iii'j"":'r"'diliiio:,rl'riilrii ( 3) Gen. 1. 27- 28; G en. 2 , 2 2 -2 3 t Y a t . 1 9 , 3 s s . : (6) Cod. iur. can., c. 1081, S 1.
(1 ) Il fcs. 5 , 3 ? . "on EIes. 5, 23 ss. (7) S. Thom. Aquin., Suurma theol. IIL SuT¡-
plem. q. 49, a. 3,
- 1232-
1234 ENcÍcrrc¡.s orr PP. PÍo XI 11930) 151,7-g f51. 10-12 E¡vcícrrc.^, "C.a.sr¡ CoNNur¡rr"
jero de los sentidos o del espÍritu, sino ción, los fines, las leyes, los bienes dei el plimer lugar entre los bienes d¡rl ción r- conser.r'acióndel género humano
con una determinación firme y delibe- matrimonio; de los hombres, en clra[to ¡¡atrirnonio. Y por. eierto gue el rnis- cn Ia tier.ra, míls aun, ni siguiei.a a
rada de las voltntades, y de esta unión . que hacen una generosa entrega de s¡ nlo Cleadol del linaje humano, quc cduca¡' cualquiel clase de adór¡rdorcs
de las ahn.as sulge, porque así Dios lo propia persona y para toda Ia vida a qtiso benignamente usar cle los hom- del Dios veldadero, sino a injertar nuc_
ha establecido, el sagraclo e inviolable otra persona, es, por donación y coope- bres comó de coopéiádoiés en la pr.o- rra descendencia en Ia Iglesia de Clislo,
vincuio natrimonial. ración de Dios, todo matrimonio parti-
¡ragación de Ia vicla, lo énseñó ?iSíbuan, ¿l plocreal con.ciudadanoscle los Sa¡rto.s
Tal es y tan singular la naturaleza cular, con los deberes y beneficios lior. do, al instituir el rnáli.iiúonio-en el pa- g domésticos de Díos?t7),a fin de aue
propia de este contrato, que en virtud cl Seiror establecidos. raíso, dijo a nuestii-iñ''pi,iinéÍoS pádies, crezca cada día el ¡rucblo dedicaclo aj
de ella se distingue totalmente, asi de
-1¡por ellos a toaói iói futuro'S-¿ónvr,- culfo de D,ios. ¡r .cle-.,n-uest¡o. .salvaclor.
los ayuntamientos propios de las bes- I. ges: C,reced g multi¡tlicctos g llcnad Ia Y -con ser -cier.to .que -los_.cóny.ugescris _
tias que, plivadas de razón y voluntacl tícruartó). Lo cual tambión bellamenle .
Los B¡EN¡s DEL MATRTMoNTo CRrsrrANo tianos ; -.aun.'cuanclo-eltos ..esiénl justif j -
libre, se gobiernan únicamente pol el deduce SaN AcusríN de las ¡ralábráS del
1. En cados, . no -pueclen .tr.ansrnitir.-.la justif:i-
instinto ciego de su naturaleza, como ¡¡cneral apóslol S¿w P¡nro a TrMoruo(r¿),cuan- cación a sus lrijos;.sino.¡.re, po..él coo,
de aquellas uniones libres de los hom- 8. La proleo Ia fiilelidad y el saera- do dice: Qtte se celebre eI ncttrimonío tralio, la natural generaóión-de la. vida
bres que careceii de todo vinculo verda- mento. Cornenzando ahora a exponer., con el fin de en¡yendrar, lo testifíca así es carnino de muer.te, por. el que se co_
clelo y honesto de las voluntades, ,v Venerables llerrnanos, cuáles y cuán el Apóstol: "Quíero, -díce- que lls munica e la plole el pecado originait
están destituidas de toclo derecho ¡ara grandes sean los bienes concediclospor quc son jóucnes sc cesen". l, iomo si c.on [odo. cn alguna ntflllet.a,
Xa vida doméstica. Dios al vercladero matrimonio, se Nos ¡rar.licipurr
;e le preg¡untara: ,," ¿Cort t1ué fin?,', de ar¡uel prirnitivo matr.imonio del pr-
ocurren las ¡ralabras de aquel preclarÍ- añade ett seguidn: "peu,a que críen hí_ raíso, pues a ellos toca ofrecer a la
d) Papel del Estado. simo l)octor de la Iglesia, a quien re- ios.,..pataqrrc sean rnadies dc fanrí- Iglesia sus_propio-sbijos, a fin de cJuc
7, Interveneión de las autoridades cientemente ensalzamos con Nuestra ¡¡o,'(rú)- esta fecundísirna Madre de los hijos cle
públicas. De lo dicho se desprende que Encíclícct "Ad salutem"(lo) dada con Dios los engendre de nuevo a la jüsticia
la autoridad legítima tiene el derecho ocasión del XV centenario de su muer- 10. Creatlos para Dios. Crran grande sobt'euatural por el agua del bautismo.
y por tanto el deber de reprimir las te. Bsfos, -dice Sa¡¡ AcusrÍN-, son sea este heueficio dc Dios r. Itien dei
matrinonio se deduce dc Ia dignidad r- ¡' se lragan nriernblos vir.os de Crislo.
uniones torpes que se oponen a Ia ra- los bíenes por los cuales son buenas
altísimo fin del horn}¡r.e. Forque .l ¡raltícipes de Ia vi<.lai¡rrnoltal, v hel.c_
zón y a la naturaleza, irnpedirlas las nupcias: La prole, la fidelídad, el delos, en fin, de la gloria etelua, la cme
-v sacrantento(r1).De gué rnodo estos tres hombre, en virtud de la preerninencia
castigarlas; y corno quiera que se ttata todos de colazón anhelamos.
de un asunto que fluye de la naturaleza capílulos contengan con lazón una síri de su naturaleza lacionol, ,rrpor"
¡nisma del hombre, no es urenor la cer'- tesis fecunda de toda la doctrina acerca lodas las restantes criaturas üsibles." 12. 'I'esoro de Dios para los pattrr,es.
tidumbre con qu€ consta lo que clara- del matrirnonio cristiano, lo declara ex- Dios, adernás, quiere que sean engen- Consiclelando estas cosas la madi.e cris-
rnente advirtió Nuestro Predecesor cle presarnente el mismo santo Doctor', drados los llornbles no solamcltc ñara tiana entenderá, sin duda, rrue rle elia.
santa rnemoria, L¡óN XIII(s). cuando dice: .Bn la fidelidad se atiende que vivan v llenen la lierra. sino inur- en_un sentido más prolundo I, con.so-
No hag duda de que, para. elegir eI a que, fuera del uínculo cottgugal, no ¡,rrincipaLnenlc para qr¡c sean adorado_ lador, dijo Nuestro Redentor: La ntu_
qénero de uída, está en el arbítrío g se unan con otro o con otra: en Ia pro- les suyos, le conozcan t, le amen, y jer... una uez clLte ha dado a luz eI
uoluntad propía una de esfos dos cosds.. le a que ésta se recíba con emor, se ffinahnente le gocen para siempre en.lois infante, Aa no se acuerda de su angus_
o seguír el consejo de guatdar uirgini- críe con benignídad g se eduque reli- cielos; fin que supera todo iuctnto el tia, con el gozo de haber daclo un l{om_
ojo uio g cl oído agó g ha subido aI
rlad dado por Jeslrcrísto, u obligarse giosatnente; en el sacramento, a que cI bre al mundo(184). ¡r superando todas
con el pínculo matrímonial. Nínguna ntatúmonio no se disuelt)a; g a que el corazón del homl¡re(!6), pol la admi- Ias angustias, cuidados Jr caf€iosnater-
leg humana puede priuar a un hombre repudiado o repudíada no se una a otrc) lable clcvación del hol¡l:r'é al or.den so-
nales, mucho más justa I, santamente
del derecho natural g ot'igínario de ca- ni aun por razón de la prole. Esta es Lirenatur':rl, hecha pol Dios. I)e donde que ac¡uella matrona romana, la macli.e
sarse, ni círcunscríbir en mcLnera algu- Lrna como regla del ntatrimonío, con Ia fácilmente apar.ececuán gran don de ia cle los G¡acos, se gloriará en el Señol
na Ia razón de las nupcias, establecíd.a cual o se embellece la f ecundídad de Ia cllr'iua lrondad ¡.cuán cgiegio frulo del ctc Lrna tan flor.ida corona de hijos. I
por Dios desde el principío: "Creced g naturale.za o se reprime el desorden de matrirnorrio sean los hijos, gue vienen :rnbos cónyuges consiclel'aráiresios hi_
nTultipIícaos" @). Ia incontinencie1z). a este mundo por- la virtud omnipotente jos recibidos cle mano cle Dios, con
de Dios. con Ia cooperaciólr de Ios es_ ánirno pronto y agr.adecido como un
Hállase, pol tanto, eonstituido el sa-
grado consorcio del legítimo matrimo- 2. El prímer bien: los ,hijos Ilosos. tesolo c¡ue Dios les ha encoinentlado
nio por la voluntad divina a la vez gue 9. l\Iandato de Dios y fin de la ins- lo para que Ie crn¡rlcenexclusir.amelrlc
11. Regenerador por la lgtresia y el cn utiliclad pr.opia o de la sociecladhu_
por la humana; de Dios son la institu- titución. La prole, por lo tanto, ocupa -
trrautismo.T'engan, por tanto, mana, sino par.lr que lo lestitu¡.an al
l8) Ca¡ta Enc. Rerum novarum, 15 Mayo 1891. ( 11) ' S. Augus t., D e bono c oni ug., c ap, 24, n.32 "r, "r"rr-
ta los ¡radres cristianos grre no están Señol con ¡rlovecho, en el dia de Ia
ASS.23 (1890/91) 645; en esta Colccción: Enci- (Miene, PL 40, 394).
clica 59, 8, páe. 427. rlestillados úlricamenlc a la pr.o¡raga- cLrerrta.
(12) S. Aususf., De Gen. ad lill., lib. IX, crp.
(9) Gen. 1, 28.
(10) Carta Enc. Ad salufem, 10 Abril 1930. AAS f, n. 12 (l{igne PL 34, 397). í13) G en. 1. 28.
(14) I Tim. 5. 1.'1. (16) \¡cr J Co¡. 2, 9.
22 (1930) 2{)1-234;en esta Colecc.; Encícl. 150, pá- 1 1 7 )E { e s . 2 , 1 9 .
g i l rrs 1 :1 1 0 -1 2 3 1 . S.,4aous f., D c l l or 1 oc o ¡t i u g . , c a D . 2 4 , n . 2 5 (1 E s ) J n a r 1 6 , 2 1 .
-(][ignc
,05)
PL 40, 394).

Ii
n236 ENcÍcuc¡s o¡r PP. PÍo XI rá1. 17-19 Ewcícrrc¡ "C¡sr¡ CoN¡¡u¡rr,, L237
3. -Lu educación de los hújos que por ser de tanta dignidad y de tan pnes, el santo Concilio de Trento de_ clistiano. Pide adcnás ta fitlelidad, del
13. Dereeho y obligaeión de los pa- capital ilnportancia esta dol¡le función ciaró lo siguiente: que por tazón de este matrintonio clue cl uatón g la tnujer
dres de eduear a los hijos. No acaba encomendada a lof,padres para el bien salqedo uínculo, tan sólo dos puedatt estén unidos por cierto amor santo, pu,
con la procreación el beneficio de la de los hiios, lodo honesto eielcicio rto ttnírse, lo enscñó claratnente Ciisúo N. t'o, singular; que no se amen como aáúl_
prole, sino que es necesario que a aqué- laf ac u l t a d f f i Scñor cuando díjo: "Por lanlo, ua no tetos, sitto como Cristo amó a la lgle_
Ila se añada la debida educación. Por- ra procl'eacton de nuevas Yidas- no} $on dos. si¡ro ¿rna carne':\22). Má, ,r., t!!, prygt esta leV dío el Apóstol cuaido
i Iqyr pña@ solarnentepiugo a Cr.isto Nuestro Señor clijo: 'lMaridos, amad a uuestras muie-
#9":1."f
Dr r a p l ' o v r"i.,r
sto ""t.
1...+
rev natrrral. es derech condenar toda forlna de lo gue suelen
l j r os sa Dr e n tÍsim o a lo s res como Cüsto anó a la lglesia,'él,
fil¡i nr.los, lnás a¡:n, a todo el qéner.o huma_ exclusrvoso", urr*ofr*',.tffi#*
-.-r=-.-ff
llatnat poligania ¡- poliand¡ia sirnultá_ a la cual cíertamente se abraLó con futí
-
- a nea o sucesiva, o cualquier otro acto inmensa carídad, no por su ct¡ttuenien_
#
cl)o y la óbligación de edrrcar.aguienes ra vrda convusal, deshonesto exter.Do, sino tarnbién los cia, síno solamente ntíranclo a ta utili_
dro el derecho v Ia Doteslaclde eneen_ lrrisrrros pensamientos ¡' deseos volun- dad de la Esposq?e). Caridad, clecirnos.
(trar. Irorque a nadie se le ocrrlta que t*^rr"r* bien:kt firtelidad con- larios de todas estas cosas, a fin de rJue no se funda solaruenle cu el ape_
la prole no se basta ni se puede proveer. gugal guardal inr.iolado en absoluto el recinto lito car.nal, fugaz r. ¡rel.cccdero,ni err
ii :r sí misma, no. ya solamente en las 15. Dereehos y deberes mutuos. El sagrado del rnatrimonio: pero go os palabras suaves, sino en ei afecto ínti_
I cosas pertenecientes a la vida natural, tligo que-.todo el que mira a una muler
i' pero mucho menos en lo que dice rela-
segundo de los bienes del matrimonio.
para c.odícíurlu ga adulleró cn su co-t.a_ 3o q"l alma y gue se comprueba con
enumerados. corno di jimos, pol Sal: las obras, puesto que como suele de_
I ción con el orden sobreñatural, siuo AcusrÍN, es la fidelidad, que consiste :óttt:r). Esfas palabr.asde Cristo Nues_ crlse oD¡¿Is son anlores g no buenas
que durante muchos años necesita del en la rnutua lealtad de los cónyuges eu tro Señor ni siquiera con el consenti_ razones(27).

i auxilio. de la instrucción v de la eclu-


clción de los demás. Y está bien clal'o,
según lo que exigen Dios y la natula-
eI curnplimiento del contrato matri-
rnonial, de tal rnodo que lo que eu este
miento rnutuo de las partes pueden
irnularse:_pues naniliestan urru iug na_
turcl g dioina quc la uc¡Iuntad d'e los
19. Ayurla reeíproea. sobre lodo es-
¡riritual, .úeausa primera.! del rnatri-
i contrato, sancionado por la ley divina,
leza, que este derecho J' obligación de hontbre.s^..jamús puetle rluebrantar ní meinio. Todo Io cual no sólo cornpren_
¡ cducar a Ia ¡rrole pertenecen en plimer
compete a una de las partes, ni a ella
desuiart2+). dc el auxilio mutuo en la socicdad do-
le sea negado ni a ningún otro per.mi-
Iugar a quienes, al engendrar, incoaron rnéstica, sino gue es necesalio glre se
tido, ni al consorte se conceda lo que :ii' 17. Castidad y revereneia entr.e los
la obra de la naturaleza v. habiéndola extiencla también, y aun
jamás puede sc,r concedido, por iet
csposos. 1\{írs aun, hasta las mutuas lpre se drdene
clejado irnperfecta, les esiá totalmente contrario a las divinas leyes y dere- lelaciones familiares entre los cónvlr_
¡rrohibido exponer.la a una ruina segu- chos, y del todo disconforme con la ges debelr cslar adornadas con la nóta
ra. Ahora bien; en el matrimonio es fidelidad del matrimonio.
alonde se proveyó mejor a esta tan ne- de castidad, para gue el beneficio de la
cesaria educación de los hijoÁ, pues fidelidad resplandezca con el decoro
estando los padles unidos entre sí con a) Unidad absoluta debido, de suer-te que los cónyuges se también cada dÍa en la virtud i or"r-
indisoluble vínculo, siempre se halla a couduzcan en todas las cosas coniorme can sobre todo en Ia verdadera éaridad
16. Dios estableció y Cristo resta- a la ley de Dios y de la naturaleza v
nrang su cooperación y mutuo auxi- bleeió Ia unidad. Tal fidelidad exige, paru con- Dios 1' para con el prójimo,
(
¡ ¡ o 1 8 b ). por lo tanto, y en primer lugar, la abso. I)rocuren curnplir. la r.olunlad del Crea_ cle la cual en último término, iepinden
Todo lo cual, polque ya en otra oca- dor Sapientísimo v Santísimo, con €nte_ Ioda la Ley g los profet¡1se9). Todos.
luta unidad del matrimonio, ya prefi- ra y sumis¿rr.everencia a la clivina obra.
sión tratamos copiosamenLedc la cris- gurada por el mismo Creador en el de en efeclo. de cualquier condición qllé
tiana educaci6t (re) ¿s la juventud, en_ nuestlos prirneros padres, cuando quiso seal. J- cualquiera que sea el génóro
cerrareltos en las citadas palabras de gue no se instituvese sino entre un b) Amor ¡' ayuda lro,nesto d.e vida que lleven. puederr
¡,
.SaN AcusrÍN: en orden a la prole el honrbre y una mujer. Y aunque des- deben irnitar aquel ejemplar'absoluto
.luc se reciba con amor 18. .{mor santo rla nobleza. Esta sue de toda santidad que Dioi señaló a los
V se edttque pués Dios, supremo Legislador, mitigó llarna.con mucha propiedad, SaN Ac'us_ hombres,
relígíoscLment¿(20). y lo rnismo dice óon un tanto esta prirnitiva ley por algún Cristo Nuestro Señor, y, con
rlr,t, Iidelídad ett Ia castidad, flor.ece
frase enérgica el Códígo de Derecho tiempo, la le¡r eyangélica, si¡ que c¡ueda la a_yuda cle Dios. llegar. inclusó a la
más fácil y rnucho rnás agradable v ctrnbre ¡rás alta de la
Canóníco: El fín pfimrtrio del matrí- lu¡¡al a duda ninguna, restituyó ínte- ¡relfección cris_
noblemente, considerando oiro motivá tiana, como se puede comprobar con
monio es Ia .proueación u educacíón
Sramente aquella primera y perfecta importantísirno, a saber, el amor con_ el
tte la prole{2l). unidad, y der.ogótoda excepción, conro ejemplo de muchos santós(ze).
¡uugal gue informa todos los deberes lfsta formación interior y recíproca
lo demuestran sin sombra de clurla las de-la vida de los esposos r. tiene cierto _
14. Exelusivo detr verdadero matri_ de los esposos, este cuidadó asiduo de
¡ralabras de Cristo v la doctrina y prác- principado de nobleza en el matrirnonio
rnonio. Por úItimo, ro ha-v que omitir tica constantes de ia lglesia. Con razón, rnutua pelfección, pueden llamarse
-Eil
Con".iriA. sess.XXI\¡;Den:-ürnb.
nr. 969;
. ( 1 8 D)V é a se .a J r.csn e clo.tainl,i¿r ; León XIII, En_ 110) (l¿¡¡¿ Enc. Dipüri itlius ,[.fo¡ristri. 31 fric. 30,7 in Eoans.
, l,?r-l;,"rtíii,['Fr,*;¿,,\í#,., -ro.
c t c - trta Cu r¡l a ti s p ro u idr ntinetlue.,, l0_III_1g94, lfr29. ASS. 22 (7930\ 40-86; cn esta Colccción: En- (23)Mar. 5. 28.
(28) Mat. 22, 40.
n l o s c¡tó l i co s d c l )o to r r ia: ASS.' l¡ , ¡ Sl; ;n er t; ciclr ca 149. págs . l tT J - 120!,. Dec¡. S. Officii. 2 Márt. 16?9 rrropos. 50;
ilen?Umb. .l2lr).Comnárese al rcsDec[o: León XIII,
j",il"lo1',*^¡;ll,r;'i¡;'8
C o l e cci ó n : E n ci cl . 6 ? . S . páS. 510. (?0) ^(24) nr. 1200. En¿i_
,S Aueret.. De Gen. acl liü., lib. IX, cap. 7,
n. 12 (Misne PL 34. ggD.
( 21) Cod . i r r r . c ar r ., c . 1013, 1.
l ') 5) Ltr .s . 5, 25; r 'c r . C o1. l . i 9 .
{:.16) C l l c c l r . fi on¡ .. l l . c ,r p . \ : l I l . q . 2 1 .
iÍil'";;
áil:"tii:Hi ó;;;
S
1238 ExcÍcrrcas p¡r PP. PÍo XI 151,20-2? 167,23-26 ExcÍcric¡ "Casrr CoriNr-¡str" 1239
i1930)

también, en cierto sentido, muy 'r'erda- cia que no se cuida del l:ien cle familia.' ño que esta fidelidad hala sido siernpre pueblo de Dios que, por la dureza de
dero, corno enseña el Catecismo llo- plohíbe qrre cn este cuerpo de ia fa- enulreratla entre los exirnios V Peculia- su colazón y por cletelminadasrazones,
ntanto{Go)la causa )'razón prüuela del rnilia se sepale el colazón de la ca6eza l.esbicncs del nlah'ilnonio. cliesen a sus mujeres libelo de repudio,
matlimonio si es que el matrirnonic¡ cou glandísimo cletrilnento del con- Cristo sin ernbargo levocó, en virtud
no se tona estrictarnente corno una junto ¡' con próxirno peligro de ruina, de su poder de legislador supremo'
5. El tercer bien: Ittdisolttbilidad g
institución gue tiene por fin procrear aquel pelmiso de rnayor libeltad' y
Pncs"si el var'ón es la cabeza,h muie¡, eleuacíón a Saüamento
restableció ínteglainente la ley prirnela,
y educar convenientemente los hijos, es. el " cor:czó.rr,r' collo aquél ticne-Ei-
sino en un sentido rnás amplio, como 23. Doble eoneepto tle sacrarnento. con aquellas palablas que nunca se han
'cómunión, costumbre y sociedad de gQq Se completa, sin eml.rargo, el cúrnulo de echar en olvido: No sePate eI hom-
t'eSl-q4g:.¡¿ala sí, como cosa cu" bie lo que ha unido Dios. Por lo cual
toda la vida. Con esta rnisma caridad -j:---::a::-:--;-:-T:----J;:-
Ié lrcrrer¡ece,ct ftii"E[ñ3ó-?ei-aññ de tan grandes beneficios y, por decirl<r
es rnenester que se infolrnen los res- así, háIlase coronado, con aquel bien muy sabiamente escribió Nuestro ante-
tantes derechos y deberes del rnatri- ciel matrirnonio que en frase de S¡N cesor Pío VI, de.feliz memoria, contes-
?1. Estruetura fundarnental y or.deu,
tando al obispo .Agricnse:Es pues cosn
rnonio, pues no sólo ha de ser ley de obediencia nol¡tre cle Ia rnujer. EI grado -{cusrÍN lremos llamado sacramento,
justicia, sino también nol'ma de cari- Dalabra que significa tanto la indisolu- clctra que eI matrímonío, aun en el
v el modo de tal sumisión de ia luuiel 'estado de natu¡aleza put'!t,9 sin níngún
dad, aqnello del Apóstol: EI ntarído al malido puede ser diverso según ias ¡niAaA del vínculo como la elevaeión v
pague a la nujer el déItito g, de la consagración que JrsucarsTo ha hecho género de duclasga mucho antes de ser
varias condiciones de las personas tle
ntistna suerte la ntujcr al mat'ídoÉ7). rlel contrato, constitu-Yéndolo signo efi- eleoado a la dignidad cle sacrantento
los lugares Jr de los tiempos y más au¡.
caz de la gracia. propiamente
'Dios, dicho, fue instítuido por
si el marido faltase a sus debet'es,debe
de tal mancra que llcucr consígo
c) La jeralquía del amor la mujer hacer sus veces en la dil.ec-
24. La indisolubiliilad. I' ¿¡r prímer un lazo petpetuo e índisoluble,A es pot
ción de Ia fanrilia. Pero tocal ó clestruir ::: ta.nto ínposíble qtte Io desate níngunrt
20. Sumisión y libertad de la mujer. la ¡nisma estmcfuln lanriliar y su lev htgctr, el mismo Clisto urge la indisolu-
f1i
Hi Finalmente, robustecida la sociedad
douréstica con el 'r'ínculo de esta cari-
dad, es necesalio gue en ella florezca
lo que Saw AcusrÍN liamaba jerarquía
fundamental, establecida y confirinada
por Dios, no es lícito en tiernpo alguno
ni eu ninguna par.te.
Soble ei orden gue debe gu.ardalse
l¡ilidad del pacto nupcial cuando dice:
:rir No separe eI lrcmbre lo que ha unido
Oios(3a)y: Cualquiera que repudia a str
mujer g se casc con otra' conete adul-
treg ciuil. En consecuencia,aunque pue-
rla eitar separada del mr¡trinonio la
tazón de sactatnento, conlo acantece
entre los infieles, sin ernbatgo, antn en
del amor, la cual abraza tanto Ia pri. terio; g cl que'se casa con Ia que ftte este matrimonío, por lo rnismo que es
entre el tnalido v la mujer., sabiamente uerdadero, elcbe mantene[se g se m(rn-
rnacía del ..ya_r:órr-
sgbr:e,Ja mujer y los repudiada por eI marido, comete adul-
cnseñ.r Nuestlo Pledecesor LróN XIII, hape tíbne absolut(lmente firme aquel lazo,
hijos corno la.diligente surnisión de..Ja
dc santa mcrnoria, en su \-a cilacla.Dn- ¡rir¡6!s). En tal indisolubilidad
mujer'. y su rendida obedie,ncia, reco- consistil S.tN AcustÍ¡s lo que él llama tantíntinanente unido pot prescrípcíón
cíclica acerca del rnatrirnonio cristiano: diuina desde eI pt'ittc'ipio aI mattímo-
menclada por el Airóstol cor¡ estas pala-
El uarón es cI jefc de Ia fantílía g ca- cl bien del sacranento con estas claras
Irra.s: .Las cascdas estétt snjetas a sus palabras: Por sctcramento pues (se en- nio, que está lueta del alcanee de todo
beza de la tnujct, la cual, sín entbaryo, porlei ciuil. Así pues, cualquíer matrí'
man'idos, cotno al Señor, por cuanto eI iiende) r1¿¿e eI matrimonio sea indíso-
puesto que cs carne cle su carne g lueso Áonio que se conttaiga o se contrae de
hombre cs cabeza de la tnujcr, así conto Iuble g que el rcPudiado o tePudiada
de stts hu.esos, debc someterse g oberle- suerte que sea' en tealidad, un uerda',
Crísto es cabeza de la lglesiaF2). cer aI ntarído, lto a ntodo de esclaua, ilo se una con otro' ní aun p}r tazón
Tal sumisión no niega ni quita la li- rle kt ProIeG6), dero matrimonío, g entonces lleoarít
sítto de contpañera, es decir, de ta| cortsígo el perpetuo lazo que, pot leg
bertad clue en pleno delecho compete tttoclo que a su obedíencia no Ie lalte
a la mujer, así por su dignidad de 25. Aún el matrimonio no cristiano clíuína, va oneio a toilo verdadero ma-
ní lrcnestídad ní digníclad. En eI quc trimonio; o se suqone que sc cotúrae
pelsona hurnana corrlo pot sus nobilí- es indisoluble. Esta inviolable estabili-
¡trcsidey en Ia quc obedecc,puesto quc dacl, aun cuando no en la rnisrna ni tan sin dicho perpetuo laza, g entonces no
simas funciones de esposa, rnadre y el tzno reptesenta a Cristo g kt otra u
conrpañera, ni la obliga a clar satisfac- perfecta [redida a cada uno' compete a hag natrintonio, sino unión íIeg¡ítina
Itt lglesíct, sectsientpre la carídad cliuinn coitraria, por su obieto, a Ia leg diuína,
ción a cualesquiera gustos clel m*rido, iodo matr¡irnonio verdadero, puesto que
Ia reguladora de sus oblígacíones$i). eue, por Io mismo, no se Puedc con-
no muy conformes quizá con la razón irabiendo dicho el Señor, de la unión
o la dignidad de esposa, ni finahnente de nuestros primeros padres, prototipo iaer' ní conseruar(zi).
22. Resumen de la ficlelidad. Estirn,
enseña que se ha¡'a de equiparar la es- rle todo matrimonio futuro: No sepate
llues, comprendidas en el beneficio cle eI hotnbre, Io que ha !-¡nido Dios, por 26. Menor firmeza en el matrimo-
posa con aquellas petsonas que en de- la fidelidad: Ia unidad, la castidad, la
necesidad ha de extendelse a todo ver- nio no cristiano y el no consurnado'
recho se llarnan rrrenores v a las que, caridad y la honesta v nol;lc obcdicn-
por falta de madurez de juicio o por cladero matrimonio. Aun cuando antes Y aunque parezca que esta filmeza está
cia; nombres todos que significan otras sujeta a alguna excepciór, bien que ra-
desconocimiento de los asuntos huma- de la venida del MesÍas se mitigase de
tantas utilidades cle los esnosos v del rísirna, en ciertos matrimonios natura-
nos, no se les suele concedel el eier- tal manel'a Ia sublimidad y serenidad
rnattirnonio, con las cuales sc plornue- les contraídos solamente entre infie-
cicio de sus derechos; siuo que. al cln- de la ley primitiva, que MorsÉs llegó a
\¡en y garantizan Ia paz, Ia felicidad les(ss), o también, tratándose de cris-
Ír tralio, prohibe aquella exagelada licen- pernitir: a los mismos ciuclaclanos del
rnatrimoniales, pol Io cual no es extrR.
üil ,,i!.Lcrlt""tr Rorn. p. II, cap. S, q. 19.
(31) I Cor. 7. 3.
(il3) Carta Enc. Arcanunt diuhae sapíen|ktc,
10 l¡ebr. 1880: ,ASS. 12 (1879/60) 389; en -csta Co-
-(34)
l4rt' 1r, 6; I\'Iarc' 10, I'

llll !::,;',''i: Dt (ie,. attrí1r..


rib rX,car¡7,
(37) Pius TI, Rescrip. ad Episc. Agriens ' 1l
1u1. 1780. [,4.. de Roskován]. NIatri)noniuln in
Ecclesir Caiholica i (1870)2911'
fri
Íj
(32) Ilics. 5, 22-13. lccciór ¡ : Enc i c l . 3J , J , D áS. 3l ;. n. 1? (Misnc lL 31' 397).
(38) \¡éase Cod. Der. Can. c. 1120.

ill
I
Co^*rvurtf l24r
1240 ExcÍcrrces orr PP. PÍo XI (1930) 151 27-?s 151.30-.32 ENcícuc.q "C¡srr

pala cum¡rlir sus cleberes y obligacio-


tianos, en los matrirnonios ratos y no quc concerlíó Moisés a los isreelitas ct ¡ o r r s l a l ¡ o l 'l a c x l r e t'i e r r ci aq u c Ia i r l -
nes, fiel, santa y persel'erauterrlente
consuma.dos(3e),tal excepción no de- causa de le dttreze de su corazónl+\). iruehrant¡rlrle filmeza tlcl rnatlitltonio
pende de la voluntad de los hombres l. rrbár'ima fucnte de l¡onrada vida y hasta la muerte.
ui de ninguna autoridad meramente 28. Los benefieios de la intlisolubi- io integridad tnot'al; Y gunrtlaudo cste Porque este sacramento, en aquellos
v .¡ue ttó oponen lo c¡ue se suele llamar
humana, sino del derecho divino, cuya lidad par* Ios cónyuges y la prole. i.,lun Ár,irt galanlizadas la fclicidad
depositaria e iutérprete es únicarnente Cuántos y cuán glandes beneficios sg bi"oc.tt. cle Ia re¡rública, ya-c¡ue.fal óbí"n, :no-sólo aurnenta la vida sobre-
ii
las farnilias natur:al, sino que añade peculiares do-
la Iglesia de Cristo. Nunca sin embargo, deriven de la indisc¡lubilidad del rna- ierli la sociedacl cuales son
como nes, disposiciones -v gérmenes de gra-
ni por ninguna causa, puede esta excep- trimonio, no podr'á rnenos de ver' g1 v ios individuos, de que consta,
ción extenderse al matrimonio cristiano que reflexione, aunque sea ligeramelte, se cornpone de sus miernbros' cia, elevándo y perfeccionaudo las fuer-
.1 c,t"rpo
y consumado, porque asi corno en él ya sobre el bien de los cónyuges y de pnl l o cual todoi aquel l os qtre denoda- zas a fin de que los cónr-ugespuedan'
resplandece la más alta perfección del la prole, ya sobre la utilidad de la del i enri en l u i nv i ol al ¡i e es tabi - no solamente entender, sino intiurarnen-
.t"t"ttt.
g?^ te saborear, retener con firmeza, que-
contrato matelial, así brilla tarnbién sociedad lrumana. Y, en primer lugar., l: li¿a¿ clel rnatrimonio prestan -utt-
pol voluntacl de Dios la rnayol' estabi- los cónyuges en esta misrna inviolable I ,..oioio así al bienestar privado cle los rel con eficacia, y lleval a Ia práctica'
pú- cüanto Tiertenece a Ia condición del
lidad e indisolubilidad, que no puede indisolubiliclad hallan el sello cierto *.tro*o. v al dc los hijos, corno.al
. desatar ninguna ¿rutoridad humana. de perennitlad que reclaman de con- dc la sociedad humana(*"'' matrimouio, y a sus fines y a sus de-
blíco
suno, por su misma naturaleza, la ge- ber.es, concediéndoles además delecho
nerosa entrega de su propia persona 30. Elevaeién tlel matrimonio a la al actnal socorro de la gracia, sieurpre
27. La razón cle la inilisolubilidatl
dignirtait de sacramento. Fero en este crue io necesiten. para cumplir con las
está en la mÍstiea unión de Cristo con ¡r la íntima comunicación de sus co- óbligaciones cle su estado.
la lglesia. Si querernos. investigar, \re- razones, siendo así que la verdader.a bión clel sacramento, adenás de la in-
nelables Hermanos, la razón Íntiura de caridad nunca llcga a faltctr$z). tu disolul:le firmeza, están contenidas
32. Cooperacién tle los esposos eou
esta voluntad divina, fácilmeute la en- establece además un fuerte baluarte oiras utilidades mucho rnárs excelsas y
la gracia. Mas, como en el orden so-
contlalemos en la significación mística para defensa de la castidad fiel con- aptísirnas designadas pol l:r misrna pa-
brenatural es lel' de ia divina Provi-
del matlimolrio, la cual se realiza plena tra los incentivos de la infidelidacl labra sactamctlfot pues tal nomllre no
clencia el que los hornllres no loglen
c¡ue pueden ¡rrovenir de causas extel- cs Darc los cristiauos vnno ui vacío, 1'a
5' perfectamente en el matrimonio con- todo eI fruto de los sacramentos gue
sumado entre los fieles. Porque, según nas o internas; se cierra la entrada ,,,,á C.i.to I\uestro Señor. /undador y
de los- uctrctantdos Sa' reciben después clel uso de la razón
testimonio del Apóstol en su ccrfa o los al temol celoso de si el otro cónyuge )erfeccionrtd.or
'c¡tnncntos(14). si no cooperan con la gracia, pol ello,
pelmanecer'á o no fiel en el tiempo de elevalldo el rnatriuomo
Df esíosÉo), el rnatrimonio de los cris- la qracia clel rnatlirnonio queda en
tianos lepresenta la unión perfectísima la adversidad o de la vejez, gozando; en . ,1. a.t* fieles a verdadero -v 1:rr:opiosa-
r¡r'ari Darte como talento inritil, escon-
que media entre Cristo y la lglesia; de lugar de este temol, de seguridad tran- i cramento tle la Nueva Le¡', 1o hizo sig-
ili¿o or't el camllo, si los cónruges no
modo que, rüientras vive Cristo y Por quila; se provee asimismo rnuy con\¡e- no J, fuente cle una peculial gracia in-
teriár. por la cual aquel su natural ejercitan sus fuerzas snbrenaturales y
El la Iglesia, mrnca podrá ser separada nientemente a la conservación de la dig-
anro¡' só perfeccionase, se conlírtnara crtlti't'att y hacen desarrollar la semi-
por ninguna división. Lo cual enseña nidad de ambos cónyuges y al otorga- lla cle ia gracia que hal recibido'
iambién expresamente S¡N AousríN en miento de su mutua ayuda, porque el su indisoíuble ttttídctd, g los cóttguges
I ueran santif ícado sÉi) . Fn cambio, si haciendo lo que está de
las siguientes paiabras: Esto se obserua vÍnculo indisoluble y para siempre du-
Y porque Cristo, al consentimiento su parte, cooperan diligentemelte' po-
con fidelídctd entre Crísto g la lglesia, ladero constantemente les está recor'-
rnatrimoriial váliclo entre fieles consti- clráir llevar la carga ¡' llenar las obli-
que por uíuír atnbos etetnannente no dando haber contraído un matrimonin gaciones de su estado, v serán fortale-
Img diuorcio que los pueda sieparar- Y tan sólo disoluble por la muerte y.no iur,ó en signo cle la gracia, tan íntima-
nrente están unidos la lazón de Sacra- tidos, salrtificados y como consagrados
esta místeric¡st.ttlníótt dc tal stterte se en razón de las cosas caducas, ni pala Dor tan excelso sacramento; pues, se'
cumple en lct cü.tdad dc Díos... cs decit, entregarse al deleite, sino para pro- mento v el matrimonio cristiano que
¡ro Duede existir entre Lrautizados vel- sún enseña SaN AcusrÍN, así como por
cn la l¡¡lesicrde Cristo... que aun cuando cu.r'arse mutuaurente l¡ienes rnás altos el Bautismo y el Orden el hombre que-
se casen las ntttietes g totnen esposas y pelpetuos. También se atiende ¡rerfec- cladero matrimonio, sin que por Io
mismo sea ga sacrantcnto\a6)' cla destinaclo y recibe auxilios tanto
Ios uatones con eI fin de tener Jrijos, no tamerte a la protección y educación de
uara vivil cristianamente' como para
es lícito repudíar a Ia esposa estéril los hijos, que debe durar nnuchos ahos. ja-
31. La gracia sacrarnental y Ia- ayu- Li"r""t el rninisterio sacerdotal, y
pata tomar otra fecunda. Y si algútt polqrre las graves y continuadas calgas ." 'r'e rlestituido del auxilio de di-
uarón así lo hícíere, serri teo dc adul' de este oficio más fáeilmente pueden ila ¡livina a los esposos. Desde el rno-
prestan los fiele-s sincera'- -á.
chos sacramentos, asÍ ¡' casi del mismo
lcrio, así conto Ia rnt.ricr .si sc une a sobrelievar los padres á.una.ndo sns rnento que
mente tal consentirniento, ablen para modo (aunque no por el carácter sacra-
otro, ante Ia le¡trdel Eutrngelio, no ante l'uelzas. nrental) ioJfieles, una \¡ez que se han
sí mismos el tesoro de la gracia sacra'
Ia leg dc este siglo, la anl concede,
ntertal, de donde han de sJcal energías r-rnido por el vínculo matrimonial, ja-
une Dez que se ha hecho eI rePudio, 29. Beneficios para la soeiedad. Ni
celebrar nu.euasnttpcictscon ottos cón- soir l1er]ores los bienes que se derivan
-,q¡l
f¿llÍ¡l¡
,,,;;:'i,:.;';,';;;'i;;';
habia dicho rl rcspcto en "No-
áéi zñ ¿" Novicmbre de 18e0:
""#l
f s,x.T:$''lilT;"oii?lá"$1",,,Í'll'"6"'.,fi
guges, conlo tanú¡íétt atestigtta el Señor para toda la socieda.d, pol'que Nos :;'ü;ir;' Not hemos enseñado ¡nás i*""i"ii*"ntJ de la existencia de familias san-
íi;i;,'1,;;;" tal¡cnte collstituidas".
,lil;; "o"il tie*po que constituven las '"ilii ---
(41) S. .,lur¡ust., I)e nu¡tt. tl cortcup., lib. l, ;;;.';i-ittiir"ó c o n . . Tri d ' , s e s s . X X T\ ' : D e n : -U ml ' ' n r' 9 6 9 '
(39) \tóasti Cod. Der. Cnn. c. 1119. tecon,nensri dc la vida exlerlla' iltferesrn .tanl- nr' e6tl'
cr p. 10 ( l fi gne l '1, .11.420) . bi Én i l a or os ner i dad d e l a s o c i e d a (l (t o me s l l c a
i;;; ó;;;. iii¿', ."'". xxlYi ncn:-um¿''
(40) Efes. 5, .32. ( 12) I C o¡ . 13, 8. su- i ¡c ; C o ri . i u r. , c n n . c . 1 [ } t r2 .
riÍc i¿t ioác¿"¿ civil, que cn ruestra época ,1i:
ii

il
t242 ENcÍcrrcas DEL PP. Pío XI {1930) 151.33-3? fól .38-41 ilNcÍcuc¡, "C¡srr CoNivu¡rr" t243

rnás pueden verse plivados clel auxilio No es va de un modo solapado ni en custodio cle su carnpo, a c¡uien ¿¡¡,geel pura inverrción de la mente humana,
y del lazo de este saclamento. Más aún, la obsculidad, sino que {arnbién en ¡ri1- oficio sacrosanto dc plocrlxat r¡ue la pula institución de la voluntad de los
como añade el misrtro Santo Doctor, blico, dc¡rucsto todo sentirniento ¿¡ huena setnilla no sea sofoc¿ldapor hier.- hombres.
llevan consigo este vínculo sagrado aun pudor, lo xrisrno de viva voz que por. bts venenosas, juzgarnos como a Nos
los que han cometido adulterio, aunque escrito, ya eir Ia escena con replesen- rliligidas por cl Es¡ririlu Sanlo nquellas 40. I-as terribles conseeueneias de
no ya para honor de la glacia sino taciones cle todo géuero, ya por medio llalabras gtavísirñas. con las cuales el esa tesis. Cuan grirlemente verr.an to-
para castigo clel crimen, como el alnta de novclas, dc cuentos arnatolios ¡r s6- .\¡róstol S¡N P¡sl-o cxlrortahu :r su dos ellos y cuan tot:pemente se apartan
del apóstata que, aun separúndose tle rnedias, cIeI cinematógrafo, de discu¡- amado TIMorxo: Tú, cn ct{m.bíói,uígiia, de la honestidad, se colige de lo que
la uníón de Crísto, g aun perdida Ia fe, sos radiados, en fin, de todos los inven- umpie tu minísterío, predica, ínstct llevarnos expuesto eitu Encíclica
no p|ercle el saüamento de Ia le que tos de la ciencia rDoclerna, se conculca oportttna c importunarncnte, argLtge, "tr
acerca del origen ¡'naturaleza del ma-
recibíó con eI agucrdel bctutismo3T). J¡ se pone en ridícuio la santidad del mplica, íncrepa con todn pacíencia g tlimonio, y de los fines ¡' bienes inhe-
matlimonio, mienlras que los divorcios, tlactrínt$ü. lentes al misnro. Que estas ficciones
33. Yiva imagen tle la ¿rnión tle Cris- ios adulterios y los vicios rnás tor.pes sean perniciosísimas, clararnente apar.e-
to con su lglesia. Los q_ipmqr_qónyg- son ensalzadoso al menos revestidos 1. Err¡¡res contra la scmtíclud del ce taurbién de las conclusiones que de
ges.no,l'a gncoden¡rdos. de
sino ¡rÍlol'nados. tales colores que aparecen libres ntatrímonio ellas deducen sus urisrnos defensores,
de
no va innediclol'sino confortados con toda culpa J, de toda infamia. Ni faltan a saber: que las leyes, instituciones v
38. Urge señalarlos. Y porc¡ue, para
el lazo de r-¡r'ocfel Sacramento. dcben lil¡ros a los cualcs n{J se ntcrgüenzarr costurnbles por las qne se rige el rna-

H
ctilrr los cngaños del euemigo, es mc-
TfóCfÍEr l'csuellarne¡rtc quc su uniótt de llamar científicos pero que, en rea- nestel antes clescril:irlos, a5'uda mu- trimonio, debienclo su origen a la sola
conyugal, no sólo por la fuelza y la liclacl,rnuchas \¡ecesuo tienen sino cier'- j;:'cho ¡nostt'ar a los incautos-rsus al'gucias, voluntad de los hombres, tan sólo a
significación clel sacramento, sino tarn-
ti bién por la mutua concordia por' la
to barniz de ciencia, con el cual hallatr nun cuando más quisiér.amos lto lnelt- ella están somelidas, 1', por consiguien-
'te, pneden serr establecidas, carnbiadas
I -r'
conducta de su licia, sea sierlple v pel-
ca.mino más fácil parzr insinuarse. Las
doctrinas que en eilos se defienden se
cionnr'[afcs iniqtridades cotno conuienc
r¿ /os .Sn¡zlos(ro),sin ernbalgo, por. el ), ablogaclas según el arbitrio de los
lh manezca viva irnagen de aquella fecun- ponderan corno poltentos del ingenio l:ien .v seh'ación cle las alrnas no pode- hombres y las 'r'icisitudes de las cosas

III dísima uuión de Cristo con su Iglesia

de Ia perfecta caridad.
moclerno, de un ingenio qne, buseando
que es, en verdad, el misterio veneral¡le únicamente la veldad, clice haberse
entancípado cle ciertas prejuzgadas opi-
niones de los antiguos, entre las cuales
mos persar:lasen silencio.
39. I[ie¡ian la insti[rieiiin Divina v
la santificaeióir ¡ror Cristó. Es'inStitu-
hurnanas; que la facultaci generativa,
qlre se funda en la misrna naturaleza,
es rnás sagrada y se extiencle más que
el matrirnonio y que, pot' consiguiente,
34. [iesurnen del primer punto, Todo ción meramente hiiman¡i. p¿ii.á coinén-
I
ri,
Io cual, \'enerables lleunanos, si pon-
deramos atentame¡rte y con vir,a fe, si
ilustramos con la debida luz estos exi-
se pone la cloctliu¡¡ tradicional cristia-
na del matrimonio.
su.principal raíz eStáen qlre; según'lo-
puecle ejelcitarse, tanto fuera comtr
zar',pues, por el ofigen de estos m¡iles, dentro del santuario clel ma.trimonio.
aun sin tener en cuenta los fines del
{r 36. Universalidad dc los ataques. ciferan sns detractores; él lnat¡iinonio
't'
'a rnisrno, como si el vergonzoso lil¡erti-
rnios bienes del matrimonio, sal¡er:: lfstas cloctrinas lirs iuculcan a toda cia- no ha siclo instituido por el Autol cle naie rle la ¡nuier f otnicaria goz¿rse
. r-

la prole, Ia fe ¡r el s¿rcramerlto,no po- ..'-_ cusi


se de homl:res, ricos y pobles, obrero"r la naturaleza, ni elevado por Cristo Se- de los rnlsmos der'eci)osoue la caslá
dlemos rnenos de admirar la sabidurÍa.
)¡ patroüos, cloetos e ignorantes, soltr- r'ior Nuestro a la diglridad cle saclarnen-
la santidad y la benignidacl divinas que ros 5' casarlos, fieles e irnpíos, adultos to verdadero, sino que es iirvención cle
en forma tan copiosa pl'ove)'ó. tanto a v jór'enes, sienclo a éstos plincipalmeu- los hornbres. Otros asegJulanque naclei
I
t,
la dignidad y felicidacl de los eónyuges, te, como más fáciles de seducir, a quie-
corno a Ia conservación y propagación nes ponen peores acechanzas.
descuJ:ren en la naturaleza y en sus
leles. sino que sólo eucue¡rlr"allIa fa-
41. Nuevos ruodos de uniones iXÍcitas.
Fundándose en estos mismos princi-
piós, algunos han llegado a inventar
del género humano, susceptible {:an cultacl de engenctrral la .r'icla y un irn-
1 sólo de proculalse con la casta J' sagra-
cla unión del r'ínculo nuDcial.
37. Las concesiones y eomponelrdes
se rechazan. Desde luego que no todos
pulso veherneute cle saciarla cle cual-
lluevos rnodos de unión, acomodados,
en su opinión, a las actuales cilcuns-
gdier manela; oti.os, irot ei contrario, 'tancias de los tiernpos y de los hom-
los partidarics de tan nue\¡as doctrinas reconocen qrre se encuentran en la na- bres, que consideran como otras tantas
II. Ilegan hasia las illlil¡as consccueuci¿ts tuialeza del hombre ciertos comienzos especies de rnatrirnonio, distinguiendo
cle li¡'iandad tan desenfrenada; ha)'
Los araqurs AL MATRIMoNIo .1-como gérmenes de vee'dadera unión ei rnatrimonio por cíerto tíempo, el ma-
quienes, empeñados en seguir un tél- natrirnonial, en cuauto cfue. de no tlimonio de prueba, el rnatrimonio
35. I-as insiilias. Ios fraudes, los pe- mino meclio, opinan que al menos en unil'se los honrl-¡l'escorr cielto vínculo ttmistoso que se atribuve todas las li-
ligros. Al ponderar la excelencia dei :rlgunos preceptos tie la ley naturai v estable, no se hablia provistc suficien- cencias y todos los derechos del rnatri-
casto nratrimonio, \/enerables Herma- divina, se ha de ceder algó en nuestLos tenente a la dignidad de los cónyugcs rnonio, ornitiendo, empero, el vínculo
uos, se Nos ofrece ma)'or motivo de días. Pero trnrbión óstos son crnisarios ti al fin netural de la plopagación y
t: indisoluble y excluyendo la prole, a
I dolor por vel a esta divina institución más o nenos conscieufes de aquel ene- educación de Ja prole. Añade.n, sin no sel que las partes hat:an después
tantas veces despreciada y en diversas nígo que trata siempre de senbrar en embargo, que el matrimonio mismo, transforrnado su unión v costurrrbre
partes conculcada, sobre todo en [ues- ntcdio de! trigo la cizaña$S). Nos, pnes, puesto que sobrepasa estos gérmenes, de vida en rnatlimonio jur.ídicamente
I -
flos días. a quien el Paclre de familia puso pol' es, por cl concurso de r':rrias causas. pel'fecto.
i (¿Z) S. Augur¡. , De nupt. et concup. tib.'I, c. 10 lls) Ver l {nl .13. ?i . (4{r) II Tim. 4. 2-5. (50) EIes. 5. 3.
(l\{ieue PL 44, 420).
L244 ENcÍcrrc¡s o¡r. Fp. pío XI (l{i30) 151,42-4{ 151 45-48 ENcÍcrrc¡ "C.{srr CoNNUBit" 124ít
Más aún: hay quienes insisten y abo_ cuánto aborrecimiento
la Divina !¿¿_ ¡ralalrras de Cristo: I)l/os s¿'¡zclegas que cencia, cu)'a consecución en lnanera
gan porgue sernejahtcs monstltiosida- jestad ha perseguido este nefando
de- qu.ían a otros cíegos, y sl un cie91oguía alguna está vedada a los esposos,sieru-
des sean cohonestadas incluso por las Ijto, castigándolo a \reces con la pena
Leyes, o al menos hallen descaigo en a otro, atnbos caen en la fosu(i2). pm que c¡uede a salvo la naturaleza
de muerte, como recner¿a SaN ¿cus_ intrínseca de aquel acto y por ende sn
Ios públicos usos e instituciones Je los
pueblns, y ni siquiera paran rrrientes ::.^ :::q: : _. lt!.cít.a
¡ ..c itn p ti 4 i cu ttliÁie .45. Bxageraeiones respeeto ttre vida suboldinación al fin ¡rr.irnalio.
!¡rcc, lun can su_legilinta ntujet., el glc v salud de la rnadre. Por lo gue se
en que tales cosas nada tienen, en ver_ e.uttata concelcign dc la nroJc. fi;; 47. tr-a indieación de la pobreza no
refiere a las catlsas c¡ue les ürueven a
dad, de aquella moderna cullu:ru, clela to quc t1r:o Onrin. hijo dc Judcts, nor dcloga a Ia ley de llios. Tar-rrbién)ios
" clefender el rnal uso del uratrimonio,
cual tanto se jactan, sino c¡re son ne_ Io cuul Dios llenan de arnarga pena los gernidos de
Ic quitó In 1¡[(utsL). ' frecuentemente suelen aducirse algunas
fandas con'uplelas que har:ían r-olver. I{abiéuclose itues, algunos rnanifies- aquellos esposos que, oprimidos por
fin¡¡idrs o exagcradas, pof no ltablar
sin duda. aun a Ios ¡lreblos cir-ilizados, tamente separado dura pol-rleza,encuentran gravísima cli-
cle la doctrina cris- cle las c¡ue son velgonzosas. Sin ernba¡:-
a los bárbalos nsos de ciertos salvajes. tiana cnseñada, ficultad para procura¡: el alimento a
dcsclc cl princi¡rio i. go la lglesia, Madre piadosa, entiende
l¡'asmitid¡¡en todo tierl¡ro sin intclr.up_ üluy lrien y se da perfeeta cuenta de sus hijos.
2. Errores cotttrct la prole ción, y creyendo ahora gue sob.e cuanto suele aducirse solxe la salud y Pero se ha de e¡'ital en a]tsoluto g¿le
ül las cilcnnstalrcias c:itcrnas deu ocasióu
modo de ol¡rar. se clebía predicar solem_ peligr:o de la vida cle la madre. ¿i
.tr2. I-as insi¡trias contra a un error mucho más funesto todar'ía.
la fe,cundi- nernente otr¿i cloctrina, la Iglesia quién pondelará estas cosas sin com-
dad. Vinit¡ndo ahor.a a tratar, Vene- Cató-
lica, a quien el misrro Dios ha confiado padecelse? Ninguna dificultad puede presentarse
rables_Hermanos, de lo que se oporle la rc ¡rdrnirará cr-
enseñalza y defensa de ia integridad ff lo que r,alga ¡rara derogar. la obligación
a los bíenes cle rnatrirnonlo, henos de tlaol'tlinaridi?rffi
¡,- ironestidad de costurnbres, colocaclu nlad.¡'eentt'csandosea trna l¡lncr.le casi. impuesta por los mandanr.ientos cle
lrablar en prinrcr lugar d.e ta plote, ia ell rnedio de esta luina rnoral, para Dios, los cuales plohiben todas las
cual muclros se atreven a llntnai. Dcsada colrserval' stgllln, coD lor'taleza hel.orca. Dal'a corl-
inmulre dc ian ignomiriio.:r acciones que son rrralas por su íntim¿l
calga del nratr.irnonio, natul'aleza; cualesquiera que sean las
¡ror Io qle Ios rnancha la castidad de la unión nupcial. ñaq-? Solrrnente uno, Dios. inlncnsa-
cónyuges han de evitar.la con toáa dili_ cn sciral de sn divina legación,eleva ,ri circ.unstancias, pueden sicurpre los es-
gencia, no ciertamente tDcnrerlco Y lrltsel.rcordloso,Dagal.¿isus
¡ror medio de \'oz llol Nueslros labios r'-una vez m¿lr s-urlllnrenlos, sol)or.taOosDar.a cutnDlrl posos, robustecidos por la gracia divina,
una honesta continencia (permitida clesempeñar' sus deberes con fidelidad
qrrectalguier'" ussEiIül colllo es det)rdo et olrcro de la nalura-
también en el matlirnolio süuesf.o el Bgry.lga' tlnngniq c} crlvo ejglgilio el agtg. rlc )' conserl¡ar la castidad lirnpia de rnan-
corrsentinieuto de ambos espoios) sino Jgtr ]' dará. cier'[an'tenie, ncdida, no cha tan velgonzosa, pues está firrne la
viciando el_ acto convugal. .drróganse ¡¡op1a_!¡{rrs.!'.!a, queda destituido ñF sólo apretado, síno colntada$8).
'r'erdad de la doctrina cristiana, expre-
su u a tu ral tuel 'za D-t.ocr.eahva. \.a corri r.,
otros Ia climinal licencia de coáicial re-
46. Contineneia según el orden de sada por el nragistelio del Concilío I'rí-
únicarnente ]a satisfacción cle su vo- v los que ¡tI conreleu se lracen culnr- la uaturaleza. Los fines seeundarios. clentina: Nadíe debe emplear aqttetrla
luptuosiclad, abolreciendo la plole, Jrles([e nn grave clelito. .Sabemuy l¡ien la Xglósia santa que, no lrase tenteraria ¡¡ por los Paclres anate-
rnientras otros dicen que no púeden " %%4-
raras veces, uno de los cónyuges, más tnatízada, de que los preceptos de Dios
_S.""_rg."tcontinencia, ni tarnpoco aclmi_ 44. Normas para los confesores. pol que cometer el pecado, lo soporta, al son ímposíbles de cuntplir al hombre
tir hijos a causa de sus propias riecesi_ permitir, 'por una €ausa-rnuJr grave, el redintído. Dios tto ntanda ímnosibles,
consiguiente, según pide Nuesira supre-
dades, de las de iá madre L d" la fr_ trastolno del r.ecto orden gue aquél síno que con sas preceptos Ic ámonestu
ma autor:idadr- cl cuidrdo cle Ia saiva-
rnilia. rechaza, y que carece pol tanto de óul- qtte hagas cudnto pttedas 11pidas Io quc
cióll de todas las almas, encargamos a
los confcsol'cs5- a {odos los quó tienerr pa srempre que tenga en cuenta la lev nct puedas g El te da su auttda para
43. Condenaeién del onarnismo con- cura de las misrnas que no consientan de la caridad y no se descuide en disua- que pued.as(úa\.La misna docttina lut
yuga!. Ningún rnotjvo, sin embargo, en los fieles eucomendados a su cui- dil y apartar. del pecactro a su com- sido solemnentente reiterada g cottftr-
aun cuando sea gravÍsimo, puecle haóer clado el'r'or alguno acerca de esta gra- parte. Ni hernos de decir gue ntada por la lglesía al condenar la he-
que lo gue \¡a intrínsecamente contra r'ísilna ley de Dios, r' nucbo rnás que contra Cl ol reiía iansenistct que contra Ia bond.ad
la nafuralcza sea honesto r- conforme a se conserven inrlunes de estas falsas clc l)ios osó blasfemar de esta n:.anere:
la misma tratulaleza; ¡. cstando desti_ opiniones "Ilat¡ algunas pte.ceptos de Díos que
\¡ que no condesciendan en
nado el acto conyugal, por. su misma modo alguno con ellas. Y si algún con- los hontbres justos, au.n queriendo a
naturaleza, a la genelación de los hi- fesor o pastor de almas, lo ctue Dio.s poníendo enlpeño, rto los pueden curn-
jos, los que en eI ejercicio del misrno plir, cttendidaslas fuerzas de que actual-
no pcunila, indujcr.u a los ficlés quc le
lo destituyen adrede de su naturaleza han sido confiados a eslos err.oles.o mente disponen: fítlt.ales asítnismo íu
y virtud, obran contra la naturaleza v al menos les confinnara en los misülos gracia con cugo medio lo puedan flm-
cometen una acción {orpe e infrínseca_ con su a¡;robación
o doloso silencio, tnatrimonial, fines secunda.rios,v. gr. el cer" (55).
mente deshonesta. lenga presente que ha de dar estrccha ¿uxilio mutuo, el fomento del arnor Las "indicaeiones terapéutieasr'-
Por Io cual no es de admirar que las cuenta ai Juez Supremo por haber recíproco y la sedación cle la concupis- '18.
Aborto. Todavía hay que recordar.
rnisrnas Sagradas Letras atestigüén con faltado.a su deber ¡' aplíquese aquellás -i*l-¡,f"t.
l¡, 14; Santo Oiicir¡. 22-trI-1Q22. (55) Const. Apost. Cu¡r?occassíone81 n{a¡'o 1653,
cottius. {:sii) Luc. .6, .38.
llitÑ.^rq;{r-ur,.,,De ar{ulf.,Iib. II, n. 12 puesta de la Penitenciaria del B Abril v 3 J¡nio (.54)Conc. Trid- ses6. \¡I, cap. 1l: Danz-flmb.
pt'opos. 1; l)cnz-U¡tth. nr. 1092.
(MienePL {0, 479);rdaseGéncsis s8, s-ie--iiei- 19.1ú:Dclr :- {r l r ;L. l r '. f,:l 3trl r otl J . 1r r .80{.
1246 ENcÍcucas orl PP. PÍo \i {1930) 151,4g-b1 15,r,52-55 E¡¡cícuc.q "C¡srr CoNxuprr" l¡)lt

\¡enerables Hermanos, otlo criuren gra- caso del llamado dcrecho de ex.tte¡y¡cl gobiernan los pueblos v promulgan las 53. Prirnaeia detr alma. Cuantos
vísimo con el que se atenta coutra la necesíclatl,pol el cual se puede llegat. leyes echen en olvido que es obligación oJrlan de este modq perversarnente se
¡,icla dc l:r plole, cuando aún está en- hasta ¡rrocur'¡r' clirectarncnte la muel.tc ¡ls la autoridad pública defender Ia olvidan cle que es más santa la farnilia
celrada en eI seno rnaterno. Unos con- del inocente. Son, pues, de alabar.ag¡g-
-quc vida de los inocentes con leyes y penas que el Estado, y de cJue los hornbres
sicleran esto cono cosa lícita que se Ilos horrlntlos y expcrlos lnédicos adecuadas, y esto tanto lnás cuanto uo se engenclran plincipalmente para
cleja al lible albitrio del padre o de la ttabajan pol defender y conservar la menos pueden defenderse aquellos cuya la tielra y ei tiernpo, sino para el cielo
macL'e; otros, por el contrario, Io ta- vida, tanto cle la madre como de la ltro- vida se ve atacatla y estír en ¡religro, ¡' Ia elemidad. } de nin¡Juna [tauer¡r
chan de ilÍcilo, a no ser cJueinterven- le: nrientras gue, por cl contratio, ss eirtle los cuales, sin duda alguna, tie- se puede permitir gue a hombres, cie
gan causas gravÍsirnas c¡ue distinguen mosfrar'ían indignos del ilustre nombr.e nen el pr'irner lugar los niños toda\'ía suyo cap¿rces del rnatrirnonio, se les
c:on el ¡rornbre de indícaci¡itz inédica. J' del honor cle rnédicos quienes pro- encerrados en el seno r,rraterno.Y si los considel'e gravemente crilpables si lo
social, eugénica. 'Iodos éstos, por lo que clll'asen la rnnelte de la una o de la gobernantes no sólo no defienden a contraen. porque se conjetur.a que, auil
se lefiele a las leyes penales dc la re- otra so pretexto de medicinar', o mo- csos llir-1ossino gue curr strs lcScs v ernpleaudo el ntayor cuidado y diligen-
¡rública con las qlre se prohibe ocasio- vidos de una falsa misericr¡r'dia(5?). oldenanzas dejan obrar ¡', por 1o mis- cia, no han de engendrar rnás c¡ue
¡r¡rr Ia muelte cle Ia prole ya concebida L,o cual verdaderarnente está en rno, los entregan en manos cle médicos hijos defectuosos, aLlDquede ordinario
J*aún no dada a luz, piden gue las leyes alrnonía con las palabras severas del
l* públicas leconozcan y declalen libre
de toda pena la índicación que cada
obispo de Flipona cuando r-epr.enclea
los cón¡,uge.sdeprav+dgs_gue intentan
o de otlas personas para qlre los ma-
tell. r'ecuelden gue Dios es juez )' \'en-
gacior de la sangre inocente qtte clatna
hay qrie aconsejarles que no Io con-
tlaigan.

ñ uno dcfiendc, no faltando todavía quie- frustlar la clescendencia5', ¿1 no.obte_ dc In líerra nl cícln(to). 54. I¡rtrourisión clel Estado. Los eo-
I nes ¡rretendan que los nagistrados pú- nerlo, no temen destruirla perversa_ J¡ctnllltes nc tie¡rcu ¡rotcsfaclalguna
I irlicos ofrezcan su concrlrso para tales rrrente: . Algutta ue-2,.dice, llega a._tal 52. Frohihieiones ilieit¡¡s: La cuge- directa r:n los órganos de sus súl:di-
¡t
L
operaciones destluctoras, lo cu:rl, tliste puttto la crtteldacl lasciuct o.la. lascíuiu lrcsia. Es, plres, [ecesario que sea l.e-- los; así, trues, jamás puedeu dañar ni
I
I es confesallo, se hace en algunas par- crttel . qtte procLtl'(! tambíén qenenos.cle probado este uso pernicioso que, pró- run tocar dilectamente l¿r integridactr
I tcs, conlo todos saben, flecuentÍsima- cstcrílidad, g si cLuttno logra at int-ento, ximaurente, en verdad" se lelaciona con corporal tlonde no mcclie culpa algutra
I rnente. Pol lo que atañe a la indicación
nédicct 1t terupéuticct,para emplear sus
ntata g dcstruge en las entrañas g,l.fgto
conce.b.ido,qLteriendo que .perezccLIa
el derecho natrual del hombre a con-
traer netrinonio, ¡tero que tarnbién
o calrsa de pena cruenta ¡'esto ni po¡
causas cagtínicr¿sni Pol otras caugas
p.liabras, \'a lremos dicho, Venerables prole antes tlue uiucL;o, $i ctt eI uientre peltenece, en cierto sentido verdader.o, cralesguiera.
I-trerrnanos.cuánto Nos mueve a com- pta uiuía, natarla entes qu.e nazcct. En al l¡ien de los hijos. Ha¡' algu¡os, err I-o ruismo enseira SaNto TouÁs o¡
¡nsión el estado de la rnadle a quien moclo alauno sotr cóngtt^clessi anbo,s efecto, que, clernasiacl<¡ soiícitos de lc¡s AqurNo cuando, al inquilir si los jueces
$firenaza, por razórr del oficio natlrlal, proceden así: g si lueron así desde cl fines eu¡¡énicos, no se contentan con hurnanos,.paxa pleca\¡er ntales futuros,
el peligro de percler la salucl y aun la ptincipío no se uníeton por eI lazo rlar ciertos consejos saludal:les para pneden castigar con penas a los hom-
vida; per:o ¿cJué causa podr'ár€xcusar cottgugal, siuo Ttor cstupro; V si los mirar con rnírs seguridad pol Ia salud bles, lc concede en olclen a cieltos ma-
.iamás de alguna rnanel'a la rnuerte di- dot-rto sott trsí,- ,r-ñf:; y vigor de la plole -lo cual, desde les; pero, con justicia y razón, lo niega
leetarrrente plocurada del inocente? tlla cs en ciertlmodo ntcrefui: dclnl luego, no es contrario a la lecta ra- de la lesió¡r colporal: "/arn¿Ís-dice.--
Porgue de ésta tlatamos aquí. rido o él adúItcro dc Ia nuicr(rs). zón- sino gue anteponen el fin eugé- scgtin el juício hunano, se debe casli-
nico a todo otro fin, aun cle orden más gar a nadie sin culpa con Ia pena dt
49. Las r¡¡zones invocadas sc rcfn- 50. La indieaeién soeial. Lo que sc elevado, y quisieran gue se prohibiese azote, corT priuarle dc lcr uida, ntutílu.-
tan. Ya se callse tal rnuerte a la rladre. s,;neieadncil en favor ¡fe la indicacítin por la pública autoridad contrael ma- le o ntaltratailc$7).
t,a a l¿Lplole, siernpre será contra el social .t1etwéltíca se debe y se puede trimonio a todos los que, segrin las nor- Por Io dernás, establece la doctrina
l)recepto de l)ios ¡,' la voz de la natu- tener en cuenta siendo los meclios líci- mas y conietulas de su ciencia, juzgan clistiana, y consta con toda certeza pot
ri'ulezaqne cl:u.n¿r:¡No ncttarás!(5e).Es, los.v honestos,..ydentlo.de los lírnites que habían de engendrar hijos defec- la luz natural cle la razón, c¡ue los
tin efecto, igualmente sagrada la vida <trebidos;pe¡o- es indecoroso.querer"?ro- tuosos pol razón de la tlasnisión hele- rrisnos hombres pri'r'ados no tienen
r.[e am]ros \' ilunca tendrá poder, ni veer a las necesidades en- que..ello,es- ditaria, aun cuando sean de suyo aptos otro dorninio en los miernblos de su
slquiera la autolidacl pública, para des- triba .dando muer'.te a los.iuoce,ntes, :v para contlaer lnatrimonio. Más alrn: cuerpo que el que pertenece a sus r"incs
truirla. T'al ¡roder contra la vida de los es contrario al precepto <iivino; promüi- guiererl privarlos por la ley, hasta con- natulales, 5' no puedel consiguiente-
inocentes neciamente se cluiere deducil gaclo tarnbién por.el Apésto|:. N"o.hemos tra su voluntad, de esa facnltad natu- rnente dest¡'uirlos, urutilarlos, o, pol.
<lel cletecho de uidtt o tlTuelte que sola- cle hacer rnales ,pata..que:.aengan bie- lal que poseen, mediante intervención cualquier otro rnedio, inutilizarlos par.a
lllente puede ejelcerse contra los delin- .nes(ñ9). médica; y esto no para solicitar de la dichas naturales funciones; a no sel
cuentes; ni puede aqui invocalse el ptiblica autolidad una pena cruenta por cuando no se pueda proveer de otra
derrecho de defensa contra el injusto 51. Obligaeiones de las autoridaeles. un delito cometido o pat'a precaver fu- rnairera al l-¡ien de todo el cuelpo.
¡{ilesor a un uiño inocente; ni existe el Finalmente, no es lícito que los gue turos crímenes de reos, sino eontra todo
derecho y licitud, atribul'endo a los go- 3. Errares contra la fídelidcLd
(i¡0) Exod., 20, 13; cfr. Dccr. S. OfIic. 4 Mayo gestación, la embriotomia y el leto eatrautc¡¡Do;
1898,24 Julio 1895^ 31 illayo 7884; Denz-Untb. Denz-fImb. nrs. 1889-1890. helnantes civiles una facultad que nunca 55. La diversidaci de ertor.es. \/inien-
]rrs. 1862. 1890a. 1890b. (58) S. .{ur¡ust., De nup| cf concupisc., crP. tuvieron ni pueden iegítimanlente tener.. do va a la segunda raíz de errores, la
(57) \¡ianse lns respüestas del Santo Olicio so- XV (Migrrc PI. 4.1. 421.).).
lrre la inten'ención módica y guirirrgica en la (59) Vcr I'ion. íi. 8. (60) \¡er. Ge¡ l. 10. (01) Summ. theol., 2-2, q. 108 a. 4 ad 2unl.
x
ñ¡
ft
4i I 248 Erucicrrc¿so¡r Pp. pÍo XI 11930) r51. 56-58 1i1,59-62 llNcÍcrrc¡ "l,.asrr Coxwu¡rr'' 124{l
HI
$l cual se refiere a la fidelidad con¡rugal, adulteró cn stt cotazón(63), no bastan- entre€iafse a SUS allclones, Sln pleOCLl' costurnblcs v bien conrún de la familia;
ü. siernpre que se peca contra la prole, se do jamás ninguna costumbre, ni¡g¡r, palse de aquéllos, )'dedicarse a ocupa- y esto contando siempi'e con que quede^
lll
]T ¡reca tanbién, en cierto modo y como ejernplo deplar-ado, ningún pretexto'¿e cioncs ¡'negocios auttqüe sean ¡rirblicos. ¿rsalvo el orden esencial de la sociedad..
ú, conseeuencia contra la fidelidad con- progr'eso humano, para debilitar In <.ioméstica,el cual ha sido estal¡lecido
yugal, puesto que están enlazados en- fuerza de este precepto divino. porque 119.La verdadera lil¡ertad de la mu- por autoridad más excelsa gue la hu-
dl 'lrambos bienes del matrirnonio. pero
jer. No es ésta. sin ernb:u'go, Ia velda- mana, esto es, por Ia divina. no Xlu-
¡ll :rdemás hay gue enulnerat' en particu-
así como es uno y el rnismo Jesucrisfo
der'a ernancipación cle la rnujer ni la ni
diendo consiguientemente carnl-riai'se,
It
ilf
iar tantas fuentes de errores v corrur-
lelas que atacan la ficlelidad óon¡',lgi,
ager ll hc¡V,.!t..el mismo por los síglo.r
de los siqlos(64),así la doctrina de C"ris- lil:ertad dignísima 1' tan conf orme c()ll ¡rol públicas Ie1'es ni por privador
fi to perrnanece siempre absolutamente Ia le tazón que cornpet(r al cristiano ¡' no- gustos.
cualltas son Ias virtudes domésticas que rnisma .t ni una sola jota o ápice de ella hle oficio de esposos;anies bien, es lzr
[! rl-r¡¿2r cst¿l rnisrna fidelidad, o .ader. corrnpción del car'ácte| propio de ln 61. El verdadero amor. Avanzan aún
a{ la casla lcultad dc ambos cónyugcs, la
pasard' hasta c¡ue se cumpla perfecta-
nrujer .r' de su digniclad de madre, cs más Ios rnodernc¡s enernigosclei rnatri.
u
ffi
nente cuanto qs¡1ls¡s(66).
t! honesta ol¡ediencia de la muier al ma- t:l tlastolno de toda i¿r sociedad fani- rrronio. suslilu¡-entloei genuitto \' ('{Jns-
rido, y finalmente la firme y legítima 5-8. emaneipación de Ia mujer. liar', con lr¡ cual al nrarido se le priva tante amor, base de ia felicidacl c{,n--\:u-
ü ca¡'iclad mutua. _ !u
il Todos los que empañan et brillo'de la de la esposa, a lo-s fii.jos de la madre ¡'' gal y de la dulce intimidad, pot' ciert:r
Im fidelidacl y castidad conyugal, como ¿rtodo el hogal clornéstico del custoclio cronvenienciacie¡¡a cie caracteresI' co!r-
56. Bl adulterio. Falsean, por con- rnaestros gue son del error, echan por rlue vigila siempre. X{ás todavia: tal forrnidad de genios, a la cual llarna:r
ff
ll
siguiente, el concepto de fidelidad los tierr-a también fácilmente la obecliencia Iibertad falsa e igualdacl antinatural cle sirrpatía, la cual. al cesar, debilite r"
r¡ue opinan r¡rrehay r¡ue contempolizal confiada v honesta que ha de tener la la nujer con el marido tórnase en daño hasta del todo destruve el único r'íncultr
fi
t cou las ideas ¡,' costumbtes de nuestros muJer a su esposo; y muchos cle ellos de éstamisrn:r,pues si la rnujel descicn- gue unía las almas. ¿Qué es eslo, sino
$ dias acelca cle cierta fingida y pelni- tle cle la sede, veriladeramente regia, a edificar una casa sobre arena? Y la de
se atreven todavía a decir, con rnavor.
ii ciosa ainistad de los cónyuges con al- :rudacia, que es una indignidad Ia ier- c¡ueel Evarrgelio la ha levantado dentlo elia dijo Nuestro Señor JrsucnlsTo qut:
tl telceta persona, defendiendo una r-idurnbre de un cónyuge para con el de k¡s muros clel hogar', bien ¡rronto el plimer sopio de la adversidad l¿r ha-
fll! -qu[a
mavor libertad de sentimientos y de otro; gue son iguales los derechos de cner'áen la servidurnbre, rnriy real, aun- ría cuartearse J, caer: Y soplaron lrss
i trato en dichas relaciones externas, y ambos cónyuges; defendiendo presun_ {¡ue no lo parezca, de la antigüedad, r' uientos g dicron con ímpctu contra ella
I esto tanto rnás cuanto que (como ellos luosísimamenteque. por violarie estos
:rfirman) a no pocos es congénita Lrna delechos, a causa de la sujeción
se verá reducida a ull mero instrurnento ¡J se desplonó g lue grande s¿¡ ¡¡¡í-
.ria(66).X{ientlas !lue, por ei conh'ario.
it, de uu en manos del hoDrbre. como acontecía
indole sexual, que no puede saciarse cónyuge aI otro, se ha conseguiclo entle los paganos. el edificio levantado soJl'e la loce, e-\
i o se
dentro de los estrechos lÍmites del ma- tlebc llegat a corrseguir ciei'ta ¿man- clecil, sobre la mutua caridad convugal,
trirnonio nonogámico, por. lo cual ta- 60. La justa igualrtratl. La igualdad
i c.ipación de ia rnujer. Distinguen tres I' consolidado por la unión delibelad*
chan de estr.echezya anticuada'de en- itre derechos, c¡ue tant'o sc amplifica l collstantc de las allnas. ni sc cltar-
clases dc ernancipación, según ienga por -r.
tendimiento y de corazón, o reputan objeto el gobierno de Ia sociedad do- exagela, del:e, sin duda alguna, admi- teará nunca ni será derribado tror l¿r
coino viles )' despreciables celos, el tilse en cuanto atañe a la persona ¡' adversidad.
méstica, ia administración del patri.
rf¡¡ido estado habitual de ánimo de los clignidad hulranas -_ven las cosas que
monio farniliar', o la vida de la brole
cón¡r¡lgss honrados que reprueba y re- se derivan del pacto nupcial y van ane-
que hay quc evitar o extinguir', llainán- 4. Errotes contra eI sactantento
huye todo afecto 5' todo acto libidinoscr dolas con el nomble de emancipacióri jas al matrimonio; porque en este canr-
(1onun tercero, y por lo mismo sostie- social, ecottónúca po aurbos cónyuges gozan de las mis- 62. Afirman que eI matrirnonio no es
gtrfísiológícu: firiolO.
nen que son nulas o que deben anularse mns obli€iaciones; en lo demás ha de una eosa religiosa sino profana. He-
gica, porque c¡uieren gue las mujeres a
toclas Ias leyes penales de la república leinal desigualdad rnodcración, como rnos defendido hasta aquí, Venerables
su arbitrio, estén libres o que se las -v
t¡ncamina.clasa conservat: la fidelidad exigen el bienestar de la familia v la I-Ielmanos,los dos plimelos y pol cier-
lible de las cargas conyugales o mate-
conyugal. deirida unidad -v firmeza del orclen y to muy excelentes beneficios del matri-
riales propias de una esposa (emanci-
pación ésta que ya dijimos suficiente- sociedad domésticos. rnonio cristiano. I\{as porque excede
57. Las r.azones del reehazo¡ El sen- mente no ser tal, sino crimen horren- . Y si en alguna parte pol razón de con mucho a estos dos eI tercero, o sea
tirniento nol:le de los es¡_lososcastos, cio); econórnica, polque pretenden que los cambios experimentaclos en los usos el del sacram¿nfo, nada tiene de extra-
.:run siguiendo sólo la luz de la razón, Ia mujer pueda, aun sin saberlo el ma- Ji costlnnbres del trato humano, de- íro que veamos a los enemigos del mis-
resueltamente rectraza y desprecia como beu mudarse algún tanto las condicio- rlo impugnar ante todo y con mayor'
rido o no gueriéndolo, encargarse de
vanas y torpes semejantes ficciones; y les sociales )¡ económicas de la. mujer' saila sn excelencia.Afinnan. etr ¡ilimet
sus asuntos, dirigirlos y'adininistrarlos
este grito de l¿r naturaleza lo aprueba casada,toca a la autc¡ridad pública aco- lugar, ser el matrirnonio una cos¿tdel
haciendo caso omiso del marido, de los
l confirmr Io tnismo el divino manda- lnodar los derechos civiles de la rnujer todo profana y exclusivamente civil, lr
hijos ¡i de toda la familia; social, final.
r.niento: No fornicardr(e:) que aquello a las necesidades ¡' exigencias de estos cual en modo alguno ha de ser enco-
mente, en cuanto apartan a la mujer de
de Cristo: Cttalquíera rlue tnirarc a una tiempos. teniendo siempre en cuenta lo mendada a la Iglesia de Cristo, socie-
los cuidados que en el hogar requieren
nrujer con mal deseo hacia eIIa, ga que reclaman la natural y diversa índo- dad religiosa, sino tan sólo a la socie-
su familia o sus hijos, para i¡ue puedan
le del sexo femenino, la pureza de las dad civil, añadiendo que es ¡rreciso exi-
(62) Exod. 20, 14.
(63) Mat. 5, 28.
(64) Flebr. 13, 8. -,oOlilnr.
(65) iuat. 5. 13. i.- zr.
Encíclicas Pontificias 40

.:i
r 250 E¡rcÍcrrcas o¡r pP. pÍo
.\I (IgB0)
15I, 6B-06,l
mi¡ el contrato rnatr.imonial tr61.67-69 ExcÍcr r c¡ ,,C ¡ sr i C o N N u str ,'
de todo dcl \tcrbo de Dios$i)..Esta 1251
vÍnculo indisoluble, por. naturalezr
medio de di- sagrada del matlirno ujttguge católíco g de Ia prole, el nru_
vorcros que la ley halrrá no 68. EI divorcio. pcr.,-rlo <¡ue imnidc
solarnente nrenteligada trintonío estci adencis ueclaclo' por Ia
de tolerar, sino de sancionar; ru i:lt::!.: ':, .sobre lotlo, corno y& helnos odr;r¿i;;.
qrt"..:I rnátrimonio, despojado
;;; l; sagladas,se "o'
deriva"ltrt¡ooi¿'ritl
¿.f..is"" i;;ij; nisma leg diuinq(as). vcnet'ables Hcl.ma¡ros, csta r.eintegra_
d; il; arril¡a mencionado; d, , Y-aunque la Iglesia, a veces, según ción y
santidad, quedará relegáOó perfeccióu del rnatr.irnonio
al ,r,¡mero
de Ias cosas ¡:rofanas y civiles. sinoer.de ensendrai
li 'jl;,3,1fl?,:: ' las diversas concliciones de los tieni os estableció Cristo nuestlo Redentor,lue
¡;ara Dios y unir personas no niegue Ia dispensa de es
óio, ;-i;.':::. J' la facilidacl que existe para el divorcir¡
't'uges "or,
medianteun n1uluo ., .,.;",i111,- ,estas.sev€r'as leves {salvo siempre el
63.. illatrimonio eivil. Fúndase para
oll.9r, y finalmente, d.l J¡ gue va siendo cada día mayor. M/rs
,_ plrurero
ro^ derecho divino, y alejado, aún: los defensores O"t
en gue ya el solo u"t" ii"il oficio dcl matrinronio, -i.irr;;;;::,:1,; posible, con las convenientes "r, cautelas
"rrüto ".
r)a de sel.considerado el no aleccionados por Ia tristó ""opugor.ir-i;.
colno verdadero ¡l'ovidentisimo desicnio"rtr¡l".iil"illit peligro de perversión) dificilmente suce- oe cón¿iclári
contrato-matrinronial ( matrimonio d"t C;;;;";": tas cosas.se desatan, con ac¡.inror¡il
suelen llamallo) ; el acto ciiil fin de que fuera afuo asl como tlerá que el cónyuge católico no reciba ca_d1ilez rna),or. contra la santa inrli_
religioso, eii el rÉ- :rlgún detrimento de tales nupcias(ro).
cambio, es cieria o¡u¿i¿"ru, ra vida, ñ. d q;;-l;;";:- solubilidad del rnatrimonio
ü"""i
jo ,t::::r:1:
Dres cooperanen cietto r"o¿o ¡, las Iere.r
sumo. hal¡r'á de pennilirse .""'ll" c¡ue I.a
pclsticioso. euióren además
at outgo s,r_ divina ornnipotcncia.e
cuat, *.'.lr:
67. Consecuencias deplorables del lr.g:te:.gen.pr.etendierrcloquc' s{.
rnatrirnonio mixto. De clonde se orili_ rlecle{c la licitud del divorcio, a iin c¡e
rr.slricciór¡ alguna. se permilau ñ; ;; zón tlel sacramenfo, deDe -lo añadirsc .¡racon frecuencia gue que una ley nueva, más humana.
,,,. los descendienüs susti-
lo, _"_ nuevo fítulo de. dignidad q""
jr:or]9. Drixtos dc cátóticos ]. a;;_ ."nolri"i
-rrr"t.irrroni.: se alejen deplorablernente de la religión tuva las lcr-es nntiguas va olvjdaclas.
ce- extraordinaliamente .l
usus. sln pleocuparse de o. al
ni de solicitar el penniso
Ia religión, cristiano, ller,ándolo
o tu" ulta u""ul _menos, que \.avar) inclinánáose 69. I os pretextos que adueen. y
de la autori_ lencia.que para el Apóstol IrÍulatrnarncnlelracia la ]lamada indi_ ,rcn estosaducir suc_
dad leligiosa. En -cuanto *pu."* ferencia religiosa, rayana en la infide- nruchasv val,iascausa,*
a lo scgurr-dá, grandóu I'o,*o.o-ot"t"i.I ""ülo unas,sueiro,rran:;j"ü:
r eslo es una consecuo,r"i" Iiclady en la impiedad. También sucecle 9:1t":g::
,,""i*"Jo, ii.,l$:'"t' : que en lc¡s matrimonios mixtos vas, y qüe tienen su raíz t:n
illulltr",t". divorciosp"rfe"ros ¡--ai"_ se hace Ios
el vició rle
rrar¡ )' Iomentau Ias lc¡.es civiles guc más dificil la r,iva conformidad cle vo- ,cón-vug-es:ofras. objctivas, ;; i;
Iavol'ecel la disolrrciórr .65- Santa revereneia. Este car.ácte¡
del .,ri.irr<, religioso luntades que imita aguel misterio cle :.:r]dloorr cte.ias-cosas;todo. cn fin, ln
r'Íneulo m:rtlimonial. del matrimonio, con su excen- que ¡ace más dilr.a e ingrata
gue hemos hal¡lado, a iaber, Ia arcana la vid,r
sa.significación de la gracia y común.
la ;;i;; ¡nión de Ia Iglesia 6r¡51e(?1).
enire Crjs.to y la Iglciia, Para prueba de estas causas y
sagrado del matrimo_ Porque fácilmente"on se echará cle me- . cle es-
_._64..Caráeter conttuyentes uua santa r.evelencia
"ltiS.--A;'i."" tas leves pretenden encontrar
nto. Acclca del carácter. hit- nos la estrccha unión ¿" lu. uf"i*r,^lo muchas
religioso Je cia_ el matr-imonio cristian" lazones.
todo rnatrimonio
¡, rnueho ,rdá"f"rrri_ ), ;; .J_ crr¡1,.corno^cs nota
i, distintivo <tc ii ,En primer lugar cl hicrr rJ..
tambiéir :lmnos cónyuges.ya porque
lrimonio ludo :'celo santos a ftir, ¡; .I;; lstcsta de cl.isto, delre ser {alnbién uno de los
¡rocas ¡ralabras lre- el matrimonio que intentan el cos es rnocente v por lo tnismo
rlus. Agur-clistianó.
de añadil.. ¡ruesto que Nos contraer se scllo t el decril.oy ol.nalo del malrimo_ tiene
acelque, lo más posible, al prototipo oel.echo a sepa¡.arse.dcl culpable.
a las Calras eñciciicas- cie ruo cr.lstrano,pues se suele r.onrper. r,a
l"Iiltt:: ác Cristo y de la Islesia. o porgue es reo de crimenes
que ya hernos citado repe_ aI menos relajar, el nudo q"" \-. t)or. i(r
iiill'_^rt,
udas veces y explesamente las almas cuando ha5, disóonfo;id"; mismo también, se le ha d" .¿lrr';;;
llecho Nu'es- ""í; " ;;
tras, cn_.lascua.lesse trata prohibieióu yry fo¡1a.aa r. clesagradabf"
plolijamenü ^66. del matrimonio de pareceres I' diveriidad ¿" ¿"*
se rnixto. Nfucho faltan en esto, J¡ a veces puls et bien de los hijos, ""ij";
3r defiende con graves razones cuar_ lo más alto y grande"oi""trl a quienes sr.
con peligro de su etern* ,{::, ,"r que el priva de una instruccié"
fo ha¡' que advertii .o¡." üto".iJn, üornDre venera, es decir, en las iercla-
quienes temerariamente des y. sentimientos religioro.. O" a guienes escandalizan fo. "o";";i;;i;;
p"ar..-"oii
A-la sola luz de la razón ".tr-_uiJrlü. J¡ con fite;;
natural, v contmen matriuronios n..lixtos, las_discordias asaz frecuent€s
mejol si se investigan i;;;;ú.j- áe to, que sc deitru;,ara paoi "qiiv 51 9¡¡s<
l'¡rcho que Ia lglesia, basada
en gravísimas :],11:1,Ci.,d"de cónyuges- rnalos
_ejemplos, apartándoles iel cn_
tos monlrmentos de l"
fri.toria, J Je lazones, aparta con I:.r:1,:."-. y que consiguicn"_ nlrno de la vir.tud; ademús. el J.¡iencr,-
plegunfa a la conciencia solicituá y anlor r€rn€nte se dcstruya la paz y fclicidad
constante Ji ja sociedad que
nue¡t99, si. se consulta" h" ¿;rl;;: :111._l:1,"t
a-tos su5,os, corno aparece oe. ta sociedad doméstica. i.esultantes rnun-de exigc en nri-
lo-* por' muchos docurnenIos. mer luga.r Ia desaparición añsoluta
bres e instituciones de toau, f".-!""t"r, reca¡ritulados ¡-rrincipalmentede la unión de 1". de
det razoues._Porque,corno ros matrtmonios que en modo alquno
consta suficientemente que ::^:1, .Códiso canóÁíco, qur "o_
tra¡), ¿1¡¡ "u"p"
esraDleceIo siguiente: 5,a tantos siglos so-n aptos para el objeto naturai
en el rnatrimouio naturai, a¡tes habia definido el antiguo de
nrríino
; La lglesia prohibc scucrísíntaminit, llontano: fufatrimonio es Iá unién V también que lai teyes permitan
Í¡'a9o..rretigioso. rairiia¡ri"rii" "" "ígo - clel ¡-llos,
ra sepalación dc los cónyuges. tanto
rngenuo, t.to procedenle "r de los ltombrcs cit rodes partcs, guc se t,elcbre natr[_ nt.aridoy la nujcr, y la usión
f de todi rta evitar los cr.ímenes q,rl fá"ilrrr"irt"
pa-
s.tnornnalo, I)uesto quc el Iltonro enlrc dos personas ur.ea,ll Ia comunícaciótt tlel
malrimonio (:::::,cuatcs una bautizadtts dercclrc cli_ se pueden temer
tiene sea católiat g Ia otra titt¡ g ftq2qn6fi2). de su córnpañÍa como,
.a .Dios por autár, g lue desde para irnpedir que aurnente el
prtncrprc una a,l od.rcrtla una secta hcrétíca "o cismú_ descrédito
figLtra de la Enca¡naciónt rtca: g ,a i9!l 9od.iur, caD.,c. 1060.
si hay pcligro de pcruersiótt dtt
*rR,f:lst'lt¡.ili,iirfiz,ij,,üÍi
rToi
,'""1
León XltI va hábiá-iec
jiii*:;:is#,iH.*,'":ff
;"¿"i"x'"H,,:1fl
?jiTf.'l,l
",ir.,?,fÍ:
lección:. Enc i c i . g4. 8. pág.
,sol v e¡ .. Ll es ,5.32: 2j 9.
H ebr . i :1,4. 'qn"i,# ir.lfH,##":"fi"*,:l\]liii
pas. 334rt.
4 It.
-
ifi,*;,'ff'd.l'á::,',:T*"*,f
;;'tiiic,jii,ií,:,.11'""'ji'"""¿"il:¿i;il"tí.ili":1".{d^"r
lr¡LrLr¡ualca 48,
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1252 ErucÍcuc¡sorr pp. pÍo
-\I ll980r 151,70-?3 151.74-75 lf NcÍcrrce "Cesr¡ CorsNunr¡', 12á3
de los tribunales de justicia y
de la .sc casa con otra. cotnel e
¿adadeI -Áí- todos esos peligros se er.itan concedien-
autoridad de las_leyes, adul teri o ,- de la posible separación de los cónvu_
¡ruesto que Ios
con)'uges,pala obfcner la deseaáa
scll_ i,oZi',Xi do alguna t¡ez en esas circ[nstancias gcs. o cnte los peligros que se ofreéen
tencia de divol.cio, perpetrar.ár1
rento
de in- "ii',',7:,,'"i,;ír#:
y estas.
palabras de Cristo se refierer
!r' extlemas la separación impelfecta de
i: los esposos, quedando intacto el vÍncu-
de divorcio. l)e una parte, el muturr
por los cuales afecto y la comunión ile bienes, admi_
,crimenes_ lrrtcda el :r cualguier matrimonio, aun at soü- , lo, lo cual concede con palabras claras
Jxez drsolvel'el vínculo confo¡.inea las lablemente consolidada; de la otra, Ia-
J"-,üo';;iil:i:i¿T"i,.ñ3ii;
rDente naful.al y leSítin
-
dis¡tosiciones de la l<
pe.;.,"rrá,i ¡,icdad
' la rnisma Ie¡r eslsei'51'.aen los cáno'eg mentablemenl.e debilitada a causa de la
c"""u or"Yr*li
ff #tTltrl la indisolubilidad,
en virtud de t"-;,::';
gue tratan de la. separación del lecho, misma facultad que se les concede para
juez que ve, sin embargo, la ver¿aá, de la rnesa y de la habitación(?s). Y sel)alal'se.De la una, la fideiidad óasla
por el estado de las cosas. por la solucióndel vínculo ..te f"".u",ili
está toca a las leyes sagt'adas,)' a lo meüos de los esposos encuentra conveniente
dicen que Ias Ieyes se deben u"orrrodui det Leneptácitoclelas p"li..',1 tanbién en ltarte, a las civiles, en cuan-
:,t"ii:"
d e t oda pol estad secul ar.
defensa; de la otra, se suministra a la
en absol¡.rto a todas estas necesidades. to a los efectos y razones civiles se inficlelidad perniciosos incenti¡,os. De
una vez que han cambiado las condicio_ r.efiere, detelminar las ca¿rsasv condi- la una, quedan atendidos con eficacia
nes de los ticmpos, Ias opiniones 72. f,a exeonlunién. No henros cior¡csde esla sc¡tal.ación.y juntamenlc
de los r)^ el reconocimiento, proteccióp 1. educa-
l¡ombtes r. las coslumbres e instilucio_ cchar tarupoco en olvido cl el modo v las cautelas con Ias cuales se
;uicio' ciórr de Ios lrijos: de la otr.a. r.ecibe¡r
nes de ios pueblos; todas las lenrne en que el Concílio ir.:iai"tiri,*l satisfaga a la instruccióu de los hiios srar'ísimos quebrantos. De la una. se
anatematizó esfas doctrinas, Si
zones, )¡a consideradas en particular,
"rrul.rlln_ aZgUiá I' a Ia incolumidad de Ia familia, v evitan rnúltiples disensiones entre los
ya, soble todo, en conjunto, d-íjes_e que el uínculo mqtr¡ntoníat"iii-
au*o".rj l)t'ecavcrlotlos Ios peiigr.osgue arnen,.,- ¡ralientes ¡' farn.ilias; de la otra. se pr€-
tral evidenfemente que se ha de des.atarse¡tor razón an nnru¡ti-, zatr tanto al cónyuge cotrro a los irijos
dc con- í^i" senlan frecuenlcs oc¿rsioncs de divislón.
cecfer'.l)ol' deternrinadascausas, tnolesta cohabítación o A" 'nur"ri),, v a la misma sociedad civil.
Ia fa_ De la una, más fácilmente se sofocan
cultad del divorcio. a,feclada: seo anatenta(?6r: Si Asirnismo, todo lo que se suele adu-
J.: iliir',',, ias sernillas de la discordia: de la otra.
rlijesc qu.c_t¡erra tra lglcsii cir, ¡'rnás alriba tocalnos, para probar nrás co¡riosa ¡. erlcnsantente se sier¡-
cottlorttúdutl con Ia doclrina "unrrl"o'"i,,
,ronii_ la firrneza indisoiuble clel matrio-
privadof'. Con rnar.or. Irla.n. f)e la una, vemos felizmeute rein-
_-.]9: ^..9"1,:afo
procacrdad lica g aposltilíca, cnscñó g ,rrruñá"'írr,, nio, todo )¡ con Ia mism:r necesidacl
todavia, pasan otros rirás tegrada ), r'establecida, en especiai, la
aoetanle llegando a decir. que tto se puede desrdar cl uínculo Iógica excluye, no ya sólo Ia necesidad,
el malr.i_ muiri-_ d i g n i d r d v o fi ci o d e Ia m u j e r . ta n l o cn
monio, corno quiera gue sea un ntonial por razón de adulterío a, sino también Ia facultad de cli.r'orciarse,
contra- i)rr, ia sociedad doméstica como en la civil;
d,e los
¡o nrclamenle privado. depende
nor .có-nguges;g gue ,ri,rguno ar_t;, así c-omo la falta de poder en cualquier de la otra, indignarnente envilecida,
complelo del consentimiento y aos, nr stquicra cl ínocente que no magistrado para conceder.la, de dónde
arbiir.io dio LJaquc se e$pone a las esposas al peli_
causa para el aclulterío, puede contraer tantos cuantos son los beneficios oue
¡rrivado de ambos contrayerrtes, a ia gro tle .ser abrntdanodtts, una Dez que
rnanel'a de los demás colti.atos nueuo matrimr¡nío míentras uit¡a lcpolta Ia indisolubjlidad, otros tauios
áe este e{ Itnn seruido al dctcilt dcl naridotir¡.
olrtt cónquge, U quc ctdullera lo son los peljuicios que ocasiona el cli-
)' que pol tanto se pucde res_ ntísnLo
fn:]'o,
clndlr por. cualquier s¿¡5¿(?3).. et quc dcspuésde repudíar tt Ia adúIteru I'orcio, perniciosísimos torlos. así nata 75. Arnenaza social del rlivoreio. y
se casa con. ott'ct, colno la que, después ios individuos couto para ia sociüacl. porgue, para concluir con las palabras
tle repudiar a uno, sc casecorr olto: glavísiuras de Lróx XIII, n¿rdá conlri-
71. La Ley de Dios y de scft
, Crisfo eon_ unet e m a t '. t . 74. Coseeha de males del divoreio. buge tanto a la peruersión de las fantí-
üena. per.o larnbién
conlra lodos estos
tlesalinos. \.'enerables H"rrrranor, Luego si la Iglesia no erró ni yelrn Y pa.ra aducir una vez más las pal¿- lias g a lo ruitn dc los naciones 'como
n"r._ cuando enseñi¡ r, enseña estas dosas, bras de Nuestl'oPredecesol'.,p"t h"¡. Io cctrrupcíón de las costumbres, fúcil-
¡)laneceen ¡rie aquella lcy dc
Dios úni_ evidentemente es cierto que no puecle necesidad cle decit gue tanta es la". cose_ t)1?nlese echa dc uer
ca e rrrefragable, confil.rnada atúnto sc opon(n
amplÍsi_ desata¡se el vÍnculc¡ ni aun en ei caso cha de rnales del divorcio, cuanto es a la prosperidad de
ma_m,enle,por J¡sucnrsro: W,, r, piri-it la famitía. g rle la
ttomore Io quc ha unido ¿¡orri+t. de adulterio, y cosa clara es gue mucho inrnenso el cúmulo de beneficios gue sc¡ciedadlos díuorcios que nacen de kt
¡ul, lnenos valen r- en absoluto ie han en si conticnc la firmeza indisolublc deprauaciótt maral de
que_no ¡rueden anular ni de los pueblos g
los decretos des¡rreciar las otl'as tan fútiies razones del rnatliuronio. De una parte, contem- quc, como olcsligua la cxparienciti.
de los hombres, ni las convenciones
de t¡ue-¡rrreden y suelen alegarsccorno cau_ plamos Ios rnrll'irnonios prolegidos
Jos.¡;ueblos. ni la volunlad
'salvaguardados por el r'ínculo inviola-¡. franqucttn la puerta g condicen a lus
de ningún sa de los divorcios. truís telajadas costumbres en la uirlu
Iegislador. eue si el iro-¡.n
li;;"";; ble; de otra parte, vemos llue lcs mi-.- pública
inj*stamenrc a sepa'a. l. q;;
ir; ;iri;; !¡ priDada(go).Sube de punto
uros, su acción seria complelamcnte 7_3.La separaeión imperfecta. por lllos pactos matrimoniales resultan Iu graucdod de cstos ntales si sc co¡¡.si_
,
nuIa. lo dernás, fácilmente se résuelve lo gue inestables o están expuestos a inguic- dera que, una uez concedid.ala lacultacl
.pudiéndosele aplicar.'o,, arriba recordábamos gue presentan lanlcs sos¡lechas,ante la l,erspeilir.a de díuorcíarsc, no l-nbrti
cuencra, lo gue el rnismo J¡sucnisto "ánr"_ f rcnó algun,,
contra la indisolubilidad'dei -
coil esfas paiabras tan cla|as: vínculo, (.r8t¿oillir.. can.,c. 1128-1182. nlt linculo poderosisimo cle conservación.
l;seg,urO.
\,uatqutcra que repudia a fundándose en tr.es argurnentos distin- (29)-Carta Encicl. Arcanum clíuinae sapientkte, Entre
v u c s f ro s c o n c i u t l a d a n o s . c u n e n l rc a q u e l l o s
su ntujer g 10 Febr. 18801ASS. 12, J85; en esta Coleci.: Enci- oue
tos. Pues todos esos inconvenientes .¡. clica 34, 13, :páe. 252.
olsrenten dr vosolros. son nunterosot los cut
a c rn rra n . y a p ru e D a n , c s p o n t a d o s d c l a s l i c e n c i a s

ffi j';,lt'áil,i1?;,'ft,,"¿Jti;
,4i-r,t"üti';T$.TJ n.lt6nrrlon..
Trid. sess.XXIV, ca¡:.5. Denz-U¡lt,- _(8C) León XIII en lorr¡rürqua Occani dei 6 rlo
l :ner o de 1895 hal ¡ i r r ec o rd a d o a l o s N o rt e a me _
(¡e . , ro s d l t o ¡c l o s , l a d o c t ri n a y i a s
c o s l u mb rc s
c a l o l rc a s - A l J u z g a ¡ d e e s t a s u e rt e n o l o s g u i a
'?i'nlt 110d.
¡rae :21' r_'¡canoslos perjuicios <¡uc sufria talnbié¡r la socic_ ¡uenos cl arnor a su patr.ia gue los iániájos'án
Trid. sess.XXIV. cap.7. De.¡tz_(Jntl,. dad a c aus a dc l os di v o rc i o s ; , . e u c re mo s h a b l a r,
(75)Luc. 16.rs.
^n'rti. ,,.\t?r!on". c s c r i Li ó. dc l dos m a c r i s t i a n o de
ra pru{lc¡tcla.. t..n etecto, no se puede imá¡inar
d c - la u l i d a d vy cle
l a unidad cle u n a D ra g a D t a s l u u e s l r p a ra e l E s t a d o q u e
la perpetuidad
J¡erpelilidad del nlatrimotrio. c¡ue ¡,roporcion" la
llrcleDsloll podcr ¡otnper un vi¡rculo que !a
no sóio a la lamilia sino a lá ljropiu ioii.¿"á, rcJ' otvilra tIzo -(te perlecto c
indisolublc',-
f254 IlNcÍcrrc¿s o¡r PP. pÍo XI (1980) 151, 76-78 Er .¡ cÍcl ¡ cn ''C .r tsr r C o N N U ¡ ¡ r "
151,79-80 125á

cyte pucda contenerla dentro de los lí_ 77. Volver al recto orden; l¿r vr¡lun- que es, en realidad, Ia razón principal 79. Una profunda pieilad es necesa-
ntites definidos. o de los antl.esseñala- tad de Dios. Para Io cual Nos parece por la cual se falta contra las santas ria. Luego si de niuguna tnanera se
clos. Mug glctnde es la fuerzct cIe los, convenieute, en pfinet laoar, tr.aer'¿ l¡ pueden refrenar, como se debe, esto.s
leyes del rnatrirnonio, ]' como el hom-
ejcntplos, pero malJor la tle las pasirt_ rnernoria aquel dictarnen que en la sana ímpetus indomables, si el ahna prirnero
bre no puede sujetal sus pasiones si
nes: corT estos íncentíuos tiene que su_ filosofía y, por lo raisrno, en la teologí¿ no rinde humilde obsequio de piedad
él no se sujeta antes a Dios, esto es lo
cedcr que el capricho de cliuorcíarsc, sagrada.es solemne. segrin cl cual: ?'o_ que prirneramente se ha de plocurar', y reverencia a su Creador, es ante todo
cundiendo cctda día más, inficírtnc a do lo qtte se ha desvir¡do de su reckt muy necesario gue quienes se unen colx
conforme al orden establecido por Dios.
tmtt.chas almas, como una enfermedad colocació¡z no tiene otro cumino, p(;.¡¡¡ el Vínculo sarlto del matrimonio estén
(¡ue se propaga por contagio o conro Porquc es ley constante que quicn se
lornar al primitíoo cstado, cri¡¡ido 71¡.¡ sometiere a Dios conseguirá refrenar, animados de una piedad íntima y sólida
lcts caudalosas aguas que, saltctndopor stt nctlutalc:a, sino t,oluer a la ra'zón con lá gracia divina, sus pasiones y su hacia Dios, la cual inforrne toda su vida
encima de los cauces,se desbordan$t). díuina qtte, (corno enseña el cloctor concupiscencia; mas quien fuere rebel- ¡' llene su inteligencia y su 'r'oluntad de
- De consiguiente, corno en la nisma AngéIico)(83), es el ejentplcLr de toda cle a Dios tendrá que dolerse, al expe- acatamiento profundo pala con la NIa-
Encíclica se lee: níentras ¿so.snroclo.s vectítttd. limentar que sus apetitos desenfrenados jestad Infinita.
de pensar no uaúen, han de temer sin Por lo cual Iriuestro Predecesor LsóN le hacen guerra interior. S¡w AcusrÍN Obran, pues, con entera lectitud -!
ccsttr, lo mismo las familias que lct XIII, de santa nlelnoria, con razón expone de este modo con cuánta sabi-
socíedad huntana, eI pcligro qie co- del todo conformes a las normas det
urgía a los naturalistas con estas sra- duría se haya esto así establecido: Bs sentido cristiano los Pastores de ahnas
rren de caer... en una lucha g peligro vísirnas palabras: La lc¡¡ ha sido pnt- que eI ínferíor
conueniente-, -dice- que, para quc no se aparten en el nrt-
uniuersal{g2). La cacla día más tróciente uidentcmente establecídct por Dios cle sc sujete aI superior; r¡tteaquel que de-
corrupción de costumbres v la inaudita trimonio de la divina ley, exhortan en
tctl tnodo qtte las institucírtnes ¿liuin¿r¡ sca se le sujete lo que Ie es inferíor, se prirner luga.r a los cónyuges a los ejer
rleplavación de la fanriliá crue leiull y naturales se nos hagan tanto más sonreta éI a quien le cs superior. ¡Reco- cicios de piedad, a entregarse por com-
el las legiones en que está asentaclo útiles g saludables cuanto ntds pertna- nocc el ord.en,bnsca la paz! Tú a Díos; pleto a Dios, a irnplorar su ayuda con'
lrlenamente el Comunísmo, confilman neccn íntegtas e írunutal)lcs rtl su ¿sfn- la carne tt tí. ¿,Qtlé más justo? 6QLté tinuamente, a frecuentar los sacramen-
¡:Ienarnente la gran verdad del anterior. do natiuo, puesto que l)ios, autor de nttis bello? Tú aI me4¡or g eI ntenor a
vaticinio pronunciado hace va cincuen- tos, a mantener y fomental siempre y
todas las cosas, bien sabe qué es lo que ti; sirtte tú ct c1uíente hí:o pffa que te en todas las cosas una del'ota surnisión
ta años. tnás conoíene a su naturaleza lJ conseF sirua Io tlue se hizo 1:tortí. No recono- a Dios(se).
III- uación, g todas las ordenó de tal ma- cetnos. en uerdad, ni recomendatnos
La Rrsr¡unacróN cRrsrraN¡ o¿r nera, con stt intelígencía g uohtntatl, este orden: ¡A ti Ia cerne V tú a Dios!
80. Los medios humanos son buenos
que cada una ha de obtener stt fin dc sitro: ¡7'ú a Dios t¡ n ti la carne! Y sí
MATRIMONIO pero insuficientcs. Se engañan en a¡-]-
ttn modo conoeníente. Y sí la audacia tú despreciaslct primcro, es decir Tú a
1. El recto orden g la obedícncia a soluto los que creen que posponiendo
11la impiedad de los hombres quisíeran Dios, tto conseguit'tis lo segtutdo, esto
lu Igtcsía o menospreciando los medios que exce-
torcer g perturbar el orden de las co- es, la carne a ti. 7'ú qLte no obedeccs
den a la naturaleza, pueden inducir a
/-6. La restauracién eristiana del scs, con tanta prouidencía establecído, al Señot, sertis atorntentado por el
los hombres a imponer un freno a los
nutrimon¡o. I{emos admirado hasta entonces lo mismct que ha sido fan sn- ¿sclauo(s5).
apetitos de la carne con el empleo J¡ los
aquí, Vener.ables Hermanos, llenos de bia g prouechosamente deternzinado, Y el mismo bienaventurado Apóstol
intcntos de las ciencias naturales (co-
veneración, cuanto en orden al matri- cnpa:arú a ser abslticrtlo' g dejarú dc de las gentes, inspirado pol el Espíritu
mo son la biología, la ciencia de la
¡nonio ha establecido el Creador v Re- ser útí|, sea porque píerda con eI canl- Santo, atestigua también este ordeu,
pues, al recordar a los antiguos sabios, trasmisión hereditaria y otras simila-
tlentor de los hombres, y al rnisrno ltío stt condicíón de aguda, seu porquc
r:es). I-o cual no quiere decir que se
tiernpo lamentamos que los designios Dios mismo qttiera castígar l(t soberbi(1 que habiendo más qüe suficientementé
hayan de tener en poco los medios na-
tan amorosos de Ia divina Bondad se g temeridad de los hontbres$a). conocido al dutc¡r' de todo lo creado,
turales que no sean deshonestos; por'-
vean defraudados y tan frecuentemente Es convenienfc, pnes. que lodos cln- tuvieron a menos adorarle J¡ reveren-
que uno mismo es el autor de la natu-
conculcados en nlrestros días por las sideren atentamente la razón divina del ciarle, dice: Por Io cual las entregó Dios
a los deseos de su corazór7, a la ímpu- laleza .v de la gracia, Dios, el cual ha
pasiones, errores y vicios de loi hom- matrimonio y procuren conformarse
I:res, Es, pues, muy natural que vol- reza, de tal ntaneta que deshonrasen destinado los bienes de ambos órdenes
con ella, a fin cle restituir.lo al debido
¡'amos ahora Nuestros ojos con pater- ellcts mismos sus plopios cuerpos; :l para uso y utilidad de los hombles.
orden.
nal dolicitud en busca de los reuiedios añade: por lo cual los entregó Dios a Pueden y deben, por lo tanto, los fie-
oportunos mediante los cuales desapa- sus pasiones infames(s0). (Por qtte.)Dios les ayudarse también de los ¡nedios na-
78. En el desorden de la naturaleza
l'ezcan los perniciosÍsimos abusos que resiste a los saberbíos g da a los lttt- turales. Pero ¡rerran Ios que opinan qne
busear eI orden de Dios. i\fas, corno n
hemos enumerado, y recobre el mairi- núldes la gracia(st), sin la cual, como bastan los mismos para afianzar la
esta diligencia se opone principalmente
monio la reverencia que le es debida. enseña el mismo Apóstol, el hombre es castidad del estado con¡'ugal o les atri-
la f¡relza de la pasión desenfrenada,
-7gtt ittcapaz dc refrenar la concupíscencia buyen más eficacia que al socorro .de
Co;t" Er"icl. Arcmum diuínac sopien!íac, (83) S. Tlrom. Aquin. Summa, 1, 2, tt. 91, 1-2.
10.II{880; ASS. 12, 385; en esta Colecc.: Énciciicá tebelde(83). Ia gracia sobrenatural.
34. 13, páe. 252. (84) Carta Encicl. árcanum díuínae saoientíae,
(82) Carta Encicl. Arcanum díuinae sapientiae, 10 FeLr. 1tt80; ASS. 12. 391; cn cst¡ (lolccc.; Enci- (85) S. August., Enarrat. in Ps. 143 (tr{igne PL (88) Ron. Cap. 7 y 8.
10 Febr. 1880: ASS. 12, 385; en esta Coleci.: Encí- clica 34, 10, págs. 250-251. 37, 1860). (sg) Compáreie aI resrrecto lo que León XIII
cl i ca 3 4 , 1 4 , p á g . 2 5 3. (86) Rom. 7. 24, 26. clijo en I¡rscrufabili Dei Consilío,21-IY-?8; en
(87) Jac. 4, 6. esta Colecc.: Errcicl. 31, 77, pá5.222.
r256
E¡Égg94r orr pp. pío \r {t980} 151,81-83
- IírI,8tr-85 ExcÍcrrca "C¡str CoN¡rurrr" tqit
EI. Ese^uchary obedeeer a la lglesia.
v macstL¿rde todas l¿rs vcrdacles
ijsta
- confornlidad de las nuircias"r. cle giosas y reli- ,lnismo a los fieles; y esto de ¡ralabra y sus prece¡rtos y hal:clles rnovido suave-
morales; por tanto, ."¡"¿urün*1i
Ias costumbres con las leves'¿el ¡natil;_ por escrito, no l.ara vez )r por. encir-na, merlte a rehuir en al:soluto
los fieles y rindan su jnieligenc¡ la idolatría
lnonio sin Ia cual no puede ser efic¿rz sino a menudo )' con solidez. con razo- cfe Ia carne I' la servidumble innoJ:le a
voluntad.a la Iglesia, si quieren que
su restauración, sr_rporre quc lofl¡rs 1¡1¡¡_ entendimiento se vea inrnune su nes plofuDdas .v ciaras, para conseguir que les sujetaría el placer.. Asimisrno,
den discerni¡' con facilict¡tl. co¡r fit.nlc A"t'erroi de este rnodo que estas verdades linclau lltlralan con terfof y evitar.án con clili_
certeza y sin rnezcla de el.ror, cuáles S,Iibres de cotrupción sus costurnljrsli¡ las inteligencias y penetren hasta lo
otledrencla que se ha de extender, parl gencta suna aquelles máxirnas infame-s
son esas let'es. Ahora bien, ncr hay gozar plenameute del auxilio tan irrtiruo de los col'azones. Sepan )' medi- cJue:para deshonor de ia digniclad hu_
qrrren no vea a cuántos sofisrnas iil.,c-
-a ten con frecuencia cuán grande sal.¡i- tnana. se tJilulgan en
sL ofrecido por Dios, ,OIo nue-slros clía=.
airriría carnino y .cuántos. a..nu", ," .r'alm¡1je. dur'ía, sanliclad y bondad iroslr.ó Dios m cd i a n te l a p a l a b r a r . l a
tas dclrnrciones solenrnesde la "o Iglesi:r. ¡ ,l u tn e , a m p a _
mezclarían con la verdad, si se clejarit l-racialos hombres tanto al instituir el radas con el nornlxe de tnatrimottír¡
sino también, en la clebida p.opoi.";lni
a cada eual exa¡ninarki con las sllas matrimonio como al plotegerlo con Ie- perfecto el cual, al fin y al cabo.
a las constituciones5. decretos .Juu no es
luces d_eIa razón, o inclagar particuiai_ ,"_ )¡es sagladas; v mucho .rlás al .elevalio otra cosa, segúrr esas máximas, sino
mente la verclad revelad¿r.y si estc¡vaie l)r'uebanv condenan algrrnasopiniones ¿rla. adrrirable dignidad de sacr.amenfo, matlimonio depravaclo(9a). un
como peligrosas y per\¡ers¿s(e1).
¡rara muchas otras veldarles del c¡rdelr pol la cual se abre a los esposos cris-
moral, particularnrenle se ha de tcncr tianos tan copiosa fuente de graci:rs 8,{. L1 cxagtrada etlucaeién fisir¡_
82. La falsa autonomía es ilnpropia ,.
en cuenta en lo que se lefiere al rnatri_ para que casta v fielmenfe realicen los rogtca. Irsta saludabJe instnrcción
del. cristiano. 'fengan. por tanto, r.
monio, donde el cleleite libidinoso fír_ cui_ elevados fines del matrimonio, en pl'o- ol'denarión leligiosa sohle el ruatrimn_
ctadolos f ieles cl.islianosde no cael. .r' tle sus Irijos
cilmente puede abrirse paso en Ia fr.ágil en lecho ¡.rlo¡rit-r ¡. de [oda lllo cr.is{iarrotiisla lnucho dc las exa_
una . e x a g e l 'a d a i n d e p e n d e n c i a d e
hurnana, engaíránrtota slr la sociedacl ci'r'il I' consorcio hum¿lrro. geradas doctrinas fisiológicas
latg¡al-eza ¡. ie_ pro.plo Jurclo ]' en una falsa n¡¡fonomín po. *u_
duciéndola; J, esto tanlo más cuanto Y ya que los nuevos enernigos del dío de las-cualesalg¡1¡65-¡cfol.¡r¡adores
de la razón, incluso en estas cnestiones
que, par.a observat la ley divina, los luatrirnonio trabajat con todas sus oe vtda con5.ugal prcicnden ho].
que hoy se agitan acerca clel matrirno- .ta
esposos l¡an de haccr. a r.ecessacrifj_ fuerzas, Io mismo de palabra que cotr lrrxlilar. a los esposos.hablá¡rdoles
¡rio. Es. muy irnpro¡rio de iodo verá¿r_ de
cios dificiles 5' dul'aderos, tle los cuales Iibros, folletos \¡ otrós medioi. par:r aguellas mater.ias fisiológicas
celo crlstrano confiar con tanla osadía to,
se sirve el hc¡ml¡re frágil, según consta ¡.len'crlir Ia.s intcligcncias, ctrrLornper. cullcs, sil ernbalgo, apr.cn<Jen "on bien
en ei ¡roder de su inteligencia, g¡s tiu¡_ lnás
¡;ol la experiencia, como de otros tan_ calnenle pr.esie los co¡azones, ridiculizar Ia castidael el ar'[e de pecar cou ¡efinallictr{o gue
tos argumentos pal"a excusarse cle cnm- asen{ilnieuto.a lo ttuc
co¡loce por r.azonesinlerrtas; creet.qle uratrimonial y enaltecer los vicios rnás la virtud de vivir, castamente.
¡riir la ley divina. Ia lglesia, destinada por Dios pn." inmundos; con mucha má-s razón \¡os- Por lo cual hacemos Nuestras
Pcr lo cual, a fin rte que ningunzr olros. Vclleralrles Her.manos,a rtuicnt.s sumo agrado, con
^. senal' y regir a fodos los pueblos,"il- Venerables Herrnanos"
ficción.ni connrpción dc <.l"icha no cl Espíritu Sarto ha ins!ítuído <lbis¡tos, rc¡uellas pnlabr.as que
l*.,1¿l_ está bien enterada de las condiciones Nrreslr.t_r pr",¡"-
lrna, sino el verdadero r, v para regir la lglesia de Díos, que ln
¡¡enuino co_ cosas actuales: o limifal. su consenli_ cesor L[oN XIII. dc lcliz lnc¡nor.ia,
nocimiento de ella ilumiie-e{ entencli- sanado EI cr.¡n at propía sangre@2), tigia a los obispos de toclo tli_
miento v obediencia a las definiciones el or.be el
rniento de los hornbres y ttirija ,rr. gue arriba llamarnos solemnes, como debéis hacer cuantro esté de vuestra su.Curla Encíclico sobre el nnfrünonio
tumbres, es rnenester que se junte a "nr_
la par'le, ya por vosotros rnisrnos ¡. lrol c^rtstiano: Ptacurad, cott todo
si las restantes decisiones de aquélla el e.s_
devoción hacia Dios ¡. cl desóo de ser_ vuestlos sacerdotes. ya tarnbién por
ser falsas o no ofrecér inoti-. Íuerzo A tctd.ala autoridad que pcttlciis,
\-u'ie, una humilde y filiat obe<.lielrcia ¡rudieran rnedio de se€ilaresescogidos afiiiados a conse-roaren los fíeles que estdñ enco-
vos suficientes de verdad y honestidad.
para con la Iglesia. Cristo Nuestro Se- la Acciótt Cutólicu, ta.n vivamente por. mendados a uuestro
Por el conlrat'io. es ¡rr.opiodc toclo vel.- tnteg;á- u
r-ror constiluyó u su Iglcsia nraestl.e clc Nos deseada¡r recornenCadacomo auxi- íncorrttpta la doctrirut"uídodo
dadero discípulo de Jeiucrislo, sea sa_ que nas hln ctr-
la terdad. incluso en lo que se rcfiere bio liar del apostolado jerárquico, a fin de municado Crísto Señof Nuestro y
al orden _vgobierno de lai costuml:res. ,o .ignorante, dejarse gobelnal l que, poniendo en juego todos los me- Apósrolcs. intórpretes ac m uoúniii
los
conducil' en todo lo que se refieire ir
tull cuand(r rnuciras de ellas estén al c{ios razonables, opongáis al error l¿r atutlta quc Ia Iqlesit¡ ca!ólíca religir,_
la fe y a las costumbres por la santa
alcance del entendimiento humano. verdad, a la torpeza del vicio lns es- samente .g
madre lglesia. por. su supierno pastor ha conscruado,imponiendó' en
Porque así couro Dios vino en auxilio plendores de la castidad, a la servidum- t-ou,oslos licntpos
el. Romano Pontífice, a quien rige ei
de la lazón hurnana por medio de la bre de las pasiones la libertatl de los ;u cuntplinticnt o a
mismo Jesucristo Señor Nirestro. toclos los s¡i5fr'¿¡1¿5(9J) -
¡evelación, a lin de qrie el homlrre aurr lújos de Dio.s(e3),a la inicua facilidad
c n lct actuctl condícióu cn que sc (,r7_ de los divorcios la perennidacl de la 85. fneulear eI coneepfo etrevado y
83. Inslrueeión a trosfieles por lodos
c.Ltentrapuecla conocer genuina caridad rnatrirnonial, y eI in- ree[o. tr{as como la instlucción r.elie'i;_
fúcilmente, cott los medios posibles. Debiéndáse, pues,
plena c,erl.idumbrey sin mezcla dc crror violable sacrameuto de fidelidad pro- sa, pot: buena que sea,no ba.sta,ella
aiustar todas las cosas d la ler,, a las Jota
atgutto\vvt. las rnismas verdades natu_ ¡nelida hasta la muerle. Así los t'íeles para conformar de nuevo
ideas di¡'inas, .para que se obtánga la el matrimo-
lales gue.tienen por objeto la religión resta,uración unir-er.sal l. ¡rcrmaiente lcntlil'án con loda el aln'ra ilrcesa¡rfes Ia Iey de Dios: a Ia instrucciJn
\ las costumb¡.es;asÍ y par.a jdénlico gracias a Dios por haberlos ligado con lin-"ol
del matrimonio, es de ia-mávor irnpor- oe ta rnleligencia es nccesario añldil.,
Irn, constitu¡'ó a srr Iglesia deposilar.!a -igl
tancia c¡ue se instniva bien sobü el ¡"1-ñ, zs.
J9BF*
var., sess.rrr, cap. 2, Dcnz-rinút. (91)_Con_c'.-
YaL.. sess. IlI, cáp. IIi Denz_[Jtttb.
(93) .Iuan 8, 32-59; Gnl. 5, 13.
(94) Dccisión de] Santo Olicio del 11 trfarzo
jir#3,.,í"!6ü,,31,
_-(!)5)-Carta Encicl. Arcqnum
lfl"iqii Íi?i,fl,,:Íli"tixÍ:
nrs. 17$5-1800;Cod. iu¡. cau., é. 132.1. 19111con la prohibición del libro Van de Velde
"El matrimonio DerIecto" AAS 23 (1931) 117.
1258 ENcÍcr¡c¡s o¡r PP. PÍo XI (1930) 151, 86-88 1ó1.89-91 lfxcÍclrc¡ "C.asrr Cox¡ur¡u I 2 ;9

por parte de los cónyuges, Lrna voluntad tido, es necesaria la cooperación {g .descendieroncon sus deseos aun cuan- íttclinacíones desordenadas, f ontentar u
firme y decidida de guardar las leyes los cónyuges, y ésta c.onsiste en que do fueran impuros, sean en el matri- ctrdenar las buenas, desde la nttis tícr-
santas que Dios y la naturaleza han con trabajo y cliligencia sinceramen{e 'rnonio cuales fueron antes de contraer- na infancia, g sobte todo hag que ilu-
establecido soble el matrimonio. Sea plocuren cunrplir sus deberes, ponien- lo, es decir; que cosechen Io que sem- ntinar el entendinúen{.o g fot'talecer la
cual fuere lo que otros, ya de palabra do todo el empeño que esté de su par- braron9e), o seá, tristcza en el hogar. ttoluntad con las oerdades sobrenatu-
va por escrito, quieren afirrnar y pro- te. Pues así como en el orden natural domóstico, llanto, mutuo desprecio, rales 17los tnedios de la gracia, sin kt
pagar, se decreta y sanciona para los para que las fuereas que Dios ha dado discoldias, aversiones, tedio de la vida cuctl tto es posíble dominar las peruer-
cónyuges lo siguiente, a saber: que en desarrollen todo su vigor es necesario comirn, y 1o gue es peor', encontrarse a sas inclínaciones g alcanzar la dcbidtt
todo lo que al matrirnonio se refiere que los hombres apliquen su trabajo 1 sí mismos llenos de pasiones desen- ¡terfeccirin educcttü¡ade lcLtrglesía,pcr-
se sometan a las disposiciones divinas; su industria, abandonado Io cual jamás frenadas. f ecta g completamente, dotada por
en prestarse mutuo auxilio, siernpre, se obtendrá provecho alguno, así tarn- Crislo <lc Iq doctrítm diuittu y¡ da lrtg
con caridad; en guardar la fidelidad en bién las fuerzas de la gracia que pro- 89. Los frutos de la buena pf,cpara- sacratnónlos, ntcdios cficttcei dc lu
101
la castidad; en Do atentar contra la venientes del sacramento, )'ace[ escon- ción. Acérquense, pues, los que se van gracía(

indisolubilidad del vinculo; en usar didas en el fondo del alura, han de de- & casar, bien dispuestos y preparados
siempre de los derechos adquiriclos por sarrollarse por el cuiclado propio y el pala el estado rnatrimonial, y así po- 91. La eleceión del círnyuge. A la
el matrimonio siernpre según el sen- propio trabajo. No desprecien, por tan- drán a¡ludarse mutuantente, como con- preparación prórina del mairimonio
tido y piedad cristiana, soble todo, to, los esposos Ia gLacia del sacramento viene, en las circunstancias prósperas pertenece de una manera especial la
al principio del matlirnonio, a fin de clue hag en ellos(s7); porque des¡rués v adrrersasde la vida y, lo que ¡'ale más elecció-n de consorte, porgue de aquí
gue si las circunstancias exigiesen des- de haber emprendido la constante ob- ¿run,conseguir Ia ¡-id¿reterua y la far- tle¡rende en gran parte Ia feiicidad áei
pués la continencia, una vez acosturn- servancia de srts obligaciones, aunque nwcíón del hontbre interíot hasta la futuro rrrattimonio, ya gue urr cónyuge
brados, Ies sea más fácil guardarla a sea laboriosa, experimentarán cada dia plenítud de Ia edad de Crisúo(100).Estcr puede otro de gran a)'uda pai.a
su fuerza con rrás eficacia. les ayudar'á también para que, cn olderr llevar -ser -al
la vida
cualquiera de los dos. con5rugal cristianaménte.
Y si alguna vez se ven oplirniclos a sus quericlos hijos, se conduzcan co- o, ¡ror el contr.ario, cr.earleserios pcli-
86. Vivir el saeramento. N{ucho les más gravemente por los trabajos de su uro quiso Dios gue los padres se porta- glos y dificultades. para gue no na-
ayudará para conseguir, conservar estado y de su vida, no decaigar¡ de sen con su plole, es decit', que el padle dezcan, pues, por toda la viáa, bs con-
-v
poner en práctica esta voluntad deci- írnimo, sino tcngan como dicho de aI- sea r.eldadero Pa.dre, J¡ Ia madre ver- secuencias de una imprudente elección,
clida, la frecuente consideración cle su guna manera para sÍ lo que el Apóstol cladera madre, de suerte que por sn deliberen seriarnente ios que desean ca_
estado y la memoria práctica del sacra- Sar.¡ P¡sro, hablan<Io de sacramento arnol piadoso .rr solícitos cuidaclos, la sarse, antes 9le elegir la persona con la
¡nento recibido, Recuerden siempre que del orden, escribía a TruorEo, su tliscí- casa patelna, aunque colocada en este que han-de colvivir par.a sienrpre,y elr
para la dignidad y los deberes de dicho pulo queridísimo, que estaba muy ago' talle dc lágrimas v quizá oplirnida por esta deliberación tengan presentes las
estado han sido santificados y for.rtale- lriado por trabajos y oprobios: Tc amo' dnla pobreza, sea un vestigio de aquel consecuencias que se derivan del matli-
eidos con un sacramento peculiar, cu-va nesto qtte resucites Ia gracia de Dios palaÍso de deiicias en el que colocó el monio, en orden, en primer iugar, a la
eficacia persevera siempre, aun cuando que hag en tí, Ia cual te fue dada Por Creadol del género humano a nuestlos verdadera religión de Cristo, v además
no imprima carácter. A este fin rne- la imposición de nis mtnos' pues no primeros padres. l)e aquí resultar'á que e¡r_ordeua si mismo. al otr.o cón5-ugc.
eliten estas palabras, I'etdaderamente nos dio el Señor espíritu de tentor, sino ¡ruedan hacer a los hijos hornbres per- a la futnra prole y a la sociedad ltu_
consoladoras, del santo cardenal Ro- cle uíúttd, cic amor g de sobfiedacl$8). fectos y cristianos pelfectos, que los rnana y civil. Imploren con asiduida<I
BERTo BiLARMTNo, el cual, con otros llenen del genuino espíritu de la Iglesia el auxilio divinoo para qlre elijan según
teólogos de grau nota, así piensa v católiea, y les infiltren aquel doble la prudencia cristiana, no lievados oor.
escribe: Se puede considetar de dos 2. La preparación rcmotcL g prórimct
afecto v amor a Ia patria que exige la el Ímpetu ciego y siu fi'ent¡ cle Ia pasión.
nraneÍas el sactamento del matrimonío: 88. La preparación descuidada' To- gratitud _vla picdad del ánimo. ni solamente por. razones de lucro o
<t míentras se celebta, o en cLranto per- do esto, Venerables Hermanos, depen- por otro motivo menos nohle, sino guia-
ntanece después dc su celebración. Por- de, en gran parte, de la debida PrePa' 90. Preparaeión remota en la jn- dos pol un amor recfo y verdadero v
que eslc sacrdmcnlo es corno Ia euctt- ración al matrimonio, cLsíptóríma co- ventud. Y así, Io mismo quienes tienen por urr afecto leal hacia el fut.uro cón_
ristía, que no solamente es sacrafitento mo remota- Porque no Puede negarse intención de contraer más tarde el san- yuge, buscando además en el natlimr.¡_
ntientras se confecciona, sitto todo el que tanlo el fundamento firme del ma- to matrimonio, gue los que se dedican nio aquellos fines por los que Dios lo
tíempo que permtrnecc; pues tníentras trimonio feliz como la ruina del des' a la etlucación de la juventucl, tengan ha instituiclo. No dejen, en fin, de pedir
viuen los cóngttges, es siempre s¿¿socÍ¿- graciado, se pleparan se basan en los muJ, en cuenta tal porvenir, 1o plepa- para dicha elección el prudente y tan
dad sacramento de Cristo g de Ia IgIe- -v
jóvenes de uno y otro sexo durante los ren que sea feliz y procuren precaver' estimable consejo de sus padr.es,a für
5,¿a(eo). dias de su infancia 5 de su juvcntud. sus males recordando 1o que advertía- de precaver, con el auxilio del conoci_
87. La eooperaeión a la graeia. Mas Y así hay que temer que quienes antes lrros en Nuesfra Encíclíea sobre la edu- miento más maduro J'de la experiencia
para que la gracia del mismo produzca del matrimonio sólo se buscaron a sr cación: Es, pues, illenester corregir las que ellos tienen en las cosas humanas,
todo su efecto, como ya hernos .adver- mismos y a sus cosas, y quieues con- c"l- q. g.
c,.l(}:' l10f) Ca¡t¡ Encícl. llürini. i¿lius ,lfdo¡st,.i, :lJ
(11J0)Efes. 4, 1.3. -
(96) S. iioü. Bellarmín., D¿ cont¡ou¿r's¡ís, tóm. ( tr 7) I Tim., 4, 14. 6e;cD csracolecc.;Errciclicá
(98) II Tin. 1, 6-?.
,li,i r"itl;l^,1¡022'
IIt, De Xfatr. controvers. II, cap. 6.
1260 ExcÍcrrc¡s o¡;r PP. PÍo XI í19J0) 1ó1, 97-99 ENcÍcrrca "C¡.srr CoNNuntt" 1261
151.92-96

toda equivocación perniciosa, y para de conseguir esto con eficacia y cligni_ lrlecios exagerados; si la madre, con de los esposos, y a cosas semejantes, y
conseguir también más copiosa la ben- dad. Y en caso de que no se basten n oran detrimento de la vida dornéstica, a 'que se cumplan fielmente; porque,
dición divina prometida a los que guar'- sí solos fúndense asociaciones privadas ;e ve precisada:a ganarse el sustento corno comprueba Ia historia. la salud
clan el cuarto rnandarniento: Honra a o pirblica.s con c¡ue se pueda acudir aj 6on su propio trabajo; si a ésta le fal- de Ia república y la felicidad de los
ttt padre g u tu tnadre (que es el primer socorro de sus necesidacles{106). tan, en los ordinarios y aun extraordi- ciudadanos no pueden quedal resglrar-
mandamiento que va acornpañado con 1rarios trabajos de Ia rrraternidad, los dadas y seguras si vacila el mismo fun-
lecompensa) para que te DaACtbien g 95. El dobcr ¡le los ricos. Cuando ¿lirnentos y medicinas convenientes, el darnento en gue se basa, que es Ia rec-
tengas larga uidct sobre lct tierraÉo2). con todo esto no se lograse cubrir los úlédico experto, etc., todos entendernos titud del orden rnoral, y si está cegada,
gastos que lleva consigo una farnilia. cuánto se depriman los ánimos de los pol los vicios de los ciudadanos, l¿r
lnavoftnente cuando ésta es nunlerosa cón.vuges,qué dificil se les haga Ia con- fuente donde tiene su origen la socie-
3. La misíón de la sociedad .r'ivencia doméstica )' el cümplimiento
o dispone de medios reducidos, exise dad, es decir, eI matrimonio y la fa-
92. La provideneia social. Y porqüe el alnol crisiialro qr-resupla la caridad de los mandarnientos de Dios, y tarn- rnilia.
con frecuencia el cumplimiento per- las deficiencias del necesitado, que los bién a qué grave riesgo. se expongan la
fecto de los mandamientos de Dios v ricos en primer lugar presten su ayucla tranquilidad ¡rública y la salud y la
98. La ayuda del Estado para la
Ia ironestidad del rnatrimonio se veir a los pobres 5' que cuantos gozan de vida de la rnisma sociedad civil, si lle-
gan estos hornbres a tal grado de deses- Iglesia. Ahora bien, para conservar el
expuestos a grandes dificultades, ya qlre bienes superfiuos no los malgasten o orden moral no basta ni las penas y
los cónyuges sufren con las angustias peración que, no teniendo nada que
dilapiden sino los empleen en socorrer lecursos externos de la sociedad, ni la
de la vida familiar v la escasezde bie- perder, clean que podrían recobrarlo
a quienes calecen de lo necesario. Todo necesidad v atractivo de la virtud, sino
nes temporales, será necesario atender el tJue se desprenda de sus bienes en todo con una violenta perturbación
que se requiere una autoridad religiosa
¿l remediarles, en estas necesiclades,del favor de los pobres recibirá muy currr- social.
que ilumine nuestro entendimiento con
modo que mejor sea posible. plida recornpensa en el día del últirno Consi¡¡uienternente, los gnbernantes la luz de la verdad, y dirija la voluntad
juicio; pero los gue obraren en contra- no pueden descuidar estas materiales y fortalezca la fragilidad humana con
93. El salario justo y familiar. Para rio tendrán el castigo qlre se mere- necesidades de los rnatlimonios -v de los auxilios de la divina gracia, y no
Io cual ha5rque trabajar, en primer tér- 6eri(107),pues no es vano el aviso del las familias sin dañar gravemente a la hay otra fuera de la Iglesia instituida
nrino. con todo empeño. a fin de que la Apóstol cuando dice: .Etr qttíen tíenc sociedad y al bien común; detren, pues, pol Clisto Nuestro Señor. Por lo cual
sociedad civil, como sabiamente dis- hienes de este mundo, g uiendo a at tener especial empeño en remediar la encarecidamente exhortamos en el Se-
puso Nuestro predecesor LEóN XIJI(1o'3), hctmano en necesídad cierra las entra- penuria de las familias tnenestelosas, ñor a todos los investidos con la su-
establezca un régimen económico y so- it.aspara no cornpadecersede é1,¿como t¿rnto cuando legisian como cuando se prema potestad civil a procurar y rnan-
cial en el que los padres de farnilia es posible qtte rcsída la cariclctd dc trata de Ia imposición de tributos; con- tener la concordia y amistad .con esta
puedan ganal y procurarse lo necesario I)ios(108). siderando ésta como una de las princi- misma Iglesia de Cristo, para que me-
para alimentarse a sí mismos, a" la es- irales atribuciones de su autoridad. diante la cooperación diligente de am-
posa y a los hijos, según su clase ú...Las oblígaciot-tcsdel Estado Con ánimo dolorido contemplamos bas potestades, se destierren los graví-
-v
condición; pues eI que traltaja merece cómo, no raras \reces, trastrocando el simos males que amenazan tanto .a la
su reconlpensa(104).Negar ésta o dis- Lo que toea a los Poderes públicos. recto orden, fácilmente se prodigan so- Iglesia como a la sociedad civil, si pene-
minuirla más de lo debido es grande No bastando los subsidios privados, corros oportunos abundantes a la ma- tran en el matrimonio y en la familia
injusticia y, según las Sagradas Escri- toca a la autoridad pública suplir los dle y a la prole ilegítirna (a quienes es procaces libertades.
turas, un grandísimo pecado(7oú);cotno medios de que cal'ecen los particulares, también necesario socorl'er, aun por la
tampoco es lícito establecer salarios tan en negocio de tanta irnportancia para sola razón de evit¡r' rnayoles males). 99. Las leyes eiviles. Mucho pueden
rnezquinos que, atendidas las circuns- el bien pírblico, como es eI que las mientras se niegan o no se concede favorecer las leyes civiles a este oficio
tancias, llo sean suficientes para ali- familias .v los cónvuges se encuentren sino escasamente,y como a la fuerza, gravísimo, de la lglesia, teniendo en
nrentar a la familia. en Ia condición gue conviene a Ia natu- a la madre Y a los hijos cle legítimo cuenta en sus disposiciones lo que han
raleza hurnana. matrimonio. estat¡lecido la ley divina y la eclesiás-
94. Ayuda para los nuevos matri- tica y castigando a los que las qlrebran.
monios. Hemos de procurar, sin ern- 96. Asisteneia social. Porcue si las 97. Garanlias morales y le;Yesjustas taren. No faltan, en efecto, quienes
bargo, que los cónyuges, ya rnu€ho farnilias, sol.lre todo rrurnerosa., care- y cristianas. Pero no sólo en lo que creeR que lo que las leyes civiles per-
tiempo antes de contraer matrimonio, cen de domicilio conveniente: si el ¡'a- atañe a los bienes ternporales importa, rniten o no castigan es también lícito
se ocupen de prevenir, o disminuir al rón no puede plocularse trtibajo y ali- Venerables Herrnanos, a la autoridad según la ley moral; ni quienes lo .pon-
Inenos, las dificultades materiales, v mentos; si los artículos de primera ne- pública, que estén bien constituidos el gan por obra, no obstante la oposición
cuiden los doctos de enseñarlesel modc¡ cesidad no pueden com¡rralse sino a matrimonio y la familia, sino también de la conciencia, ya que no temen a
flOZl Ei* O, 2-3: ¡'er Exod. 20, 12. (106) Carta EDcícI. Ilcrurn nouanrnT, 15 Mayo en lo que refiere al provecho que se ha Dios y nada ju^zgan deber terner de las
(103) Carta Encicl. Ilelr¡m nouarum, 15 X{avo
1891; ASS. 2ll, 661; en esta Colecc.: Encícl. 59, 22,
1891; ASS. 23, 663; en esta Colecc.; Encicl. 59, 25, de llamar propio de las almas, o sea! leyes humanas, causando así no pocas
Dág. 440.
págs. 434-435. 1107)Ifal . 2i . 34.1( '. en que se den leyes justas relativas a veces slr propia ruina ,v la de otros
( 10 4 ) L u c. 1 0 . 7 .
(105) Ve¡ Dcut. 2,f. 14-15. ( 108) I Jo., 3, 1?. la fidelidad conyugal, al mlrtuo auxilio rnuchos.
'i,262
E¡,¡cícucesorr pp P Í o X I ( 1 9 8 0 ) r51, 109_10,3 ENcicr"rc¡, "C¡srr Co¡¡Nusrr" 1263
100. Colaboración de los dos pode- c.jernplo v algurnento de que tarnbién
Caridad, lumbre de los corazones Jr' 104. Bendición Apostóliea. Y parst
nes. I{as'ni a la integridad ni á los cn nuest¡'a edad íen la que ¡ror desgra_-
vigor de los espÍritus, gue cuanto en que Dios Nuestro'Señor, Autor de .!9q.r,
derechos de Ia sociedád puede venir cia tanto se predica ta separáción atsJ-
estas Letras hemos expuesto ac6rca del gracia, cuyo es todo quetet U obrarÉTa't,
peligro o rnenoscabo de esfa unión con Iuta de la autolidad civil, no ya sóio
ae santo sacramento del matrimonio, so- se digne concederlo según la grandeza
Ia lglesia; toda sospecha y todo temor la-fglesia, sino lo que es mAi, ¿e to¿i de su benignidad y de su omnipoten-
semejante es vano y sin fundamento" lo religión) pueden los dos poae.es .i _ irre la ley y voluntad admirables de
cia, mientras con instancia elevamos
crual ya dejó bien plobado LsóN XIII: plemos, mirando a su propio bien Dios en lo que a él se lefiere, sobre los
v aI hrrmildemente Nuestras preces al Trono
Nttdic duda, afir.ma, que el fundador dc I:ien común de la sociedad, unir.ü errores y peligros que lo amenazan y
cle su gracia, Os damos, Venerables
l.a lglesia, Jesucristo, hagu qucrido quc ". ,sobrelos remedios con que se les puede
¡ractar arnigahlerncnte, sin lesión algunu Hermanos, a vosotlos, al clero Y al
lct. potestad sagrada sea distínta de la de derechos y de Ia potestal ae combatir, lo impriman todos en su inte- pueblo confiado a los constantes des-
potestad ciuil, g que tenga cada una _Ios iigencia, lo acaten en su voluntad y, con
ambos, 5' de cotnún acuerdo velar po¡ velos de vuestra vigilancia, la Bendi-
Iibertad g f ctcílídadpara desempeñar su cl matlimonio, a firr de apartar de'lai la gracia divina, lo pongan Por obra ción Apostólica, prenda de la bendición
tanetido; pero con esta aitadídura, que f¿rmilias cristiauas peligroJ tan funesto-q para que así la fecundidad consagrada copiosa de Dios OrnniPotente.
conuiene a las dos e interesa a todos los al Señor, la fidelidad inrnaculadao la
J¡ una ruina I'a inrninente. Dado en Roma, junto a San Pedro'
J¡ombres que haga cntre cllus uttíón g firmeza inquebrantable, la profundidaci el día 31 de Diciembre de 1930, año
concordia...Fues si amígablenenlc con- del sacramento y la plenitud de las no\¡eno de Nuestro Pontificado.
¿tíenenIa potestad sagrada de la lglesia EpÍroco gracias vuelvan a florecer y cobral nue-
¡¡'Ia autoridad ciuil, ha de seguirse por vo vigor en los matrirnonios cristianos. PIO PAPA XI.
fuerza utílidad grande para las dos. La 103. Exhortación a la vid¿ eristiana. -l¡6¡lril:,
dignidad de una se enaltece, g si la reli- Quereinos, pues, Venerables Fler.manos.
rs.
r¡ión ua delante, su gobierno serd siem- que {odo lo qrre, mor-idos de soliciturt
¡tre justo; a la otra se ofrecen aurilíos pastolal, acabamos de considerar con
rle tutela g defensa encaminados aI vosotros, Io difundáis con largueza.
bien públíco de los fielesÉoe). siguicndo las nornras de la pruáencir
c¡'istiana, cnlre lorios nuestroi amados
101. Uu ejemplo ilustrc: El Concor- hijos, confiados a vuestros ciudados in_
dato con ltalia. Y, para aducir ejem- mediatos, entre' todos c¿rantos sean
plo claro ¡'de actualidad, sucedió esto rniernbros
de la gran familia cristiana:
conforme al orden debido . y entera- a fin de qlle co¡tozcan lodos f¡erfecta-
mente según la ley c1e Cristo, cuando rurentela vercladera doctrina aóerca clel
en el Concordafo solernue entre Ia Santa matrirnonio,
se aparten con diligenci:r
Sede y el Ileino de Italia, félizmente de los pcliglos plepararlos por loi pre-
Ilevado a cabo, ésta estal:leció un con- goneros del error, v sobre todo parn
tenio pacífico y una cooperación larn- que renunciando a la ímpiedad g a los
bién'amigable en orden a los rnatrirno- tles.eosmundanos, oiuant,sobüa, justa g .
nios, como convenía a la historia glo- r eligío sament e aguar d ando I a bie naue rl,-
liosa de Italia v a los sagrado. .ecrier- turanza csperada g
Ia uenida ctloriosa
dns de la antigüedad. Véase lo que se clel gran Dios g Saluador Nuestro Je-
Iee en cl pacto de Lelrún: La nucíón , s ¿r c ¡ i s f o ( 1 1 1 ) .
ítoliantt, queriendo restituir aI matrimo- Haga Dios Padre Omnipotente rkl
nío, c1uees Ia base de la família, una cual es notnbrada toda paternídad en
dígnidad que esté en armonía con las
los cielos 17en la ¡¡rrro(fie), que robus-
fuatlíciones de su pueblo, reconoce efec-
tece a los débiles da fuerz-a a lo$
tes ciuiles al sacrannento del ntat'rímo- -v
tímidos v pusiláuimes; haga Nuestro
nío que es cottforme con el detecho ca=
Señor v Redentor Jrsucnrsro fundador
ntinícollla); a la cual norrna y funda-
ntento se añaden después otras conven- t¡ perfeccionador de los uenerables sr
ciones rnuiuas, cramentos$r3) que guisn' v cleterminó
que el matlimonio fnese una irnageri
I02. Ambos han rle velar por el ma- mística de su unión inefal¡le con la
dnimonio. Esto puede a todoi sen,ir de Iglesia; haga el Espíritu Santo, Dios
<lOg, C¡r,n fn cícl. Arcanum ¡líuínac sapienliae. (111)Tit., 2. 72-13.
10 Febr. 1880; ASS. 12, 39t]; en esta Coleéi.: Encf- 1112)D fc s . 3. 15.
r:lica 34. lfi, pÁ9. 254.
l1i0) Concordato de la Santá Sede con Itaiia (113) (lonc. 'frid. sess.XXIV; llen:-Umb. nr. 96)
art. ljl, 11 Fcür. 1929; .{AS 21 (1029) 290.

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