GUIA MISA - VIGILIA DE PENTECOSTES

PROCESION DE ENTRADA

Preside el Cirio encendido portado por Padre Luis

Lo acompañan 7 personas con cirios encendidos en el Cirio y flores para la
Virgen

Guía: Hace 50 días celebrábamos la Pascua de Resurrección. Hoy, en otra

noche santa, celebramos la vigilia de Pentecostés, la presencia del Espíritu en
la asamblea fraterna. También hoy nos reunimos con María a la espera del
Espíritu, que es el mismo que recibieron los apóstoles, que recibimos en el
bautismo y que hoy, Jesús Resucitado sigue derramando sobre nosotros para
animar nuestro caminar creyente y renovar nuestro compromiso cristiano.

Invoquemos la presencia del Espíritu que todo lo inunda, todo lo transforma y

todo lo renueva.

Canto de entrada

Mientras el celebrante deja el Cirio en el portacirio se hace una referencia a

María

Guía. Tomamos como modelo el testimonio de María de Nazaret, oyente de

la palabra, creyente fiel, protagonista humilde, testigo de la acción liberadora
de Dios sobre toda la humanidad. Su testimonio nos ayuda a revisar, actualizar
y celebrar.

. María, Mujer dócil: Esta es la clave para entender todo el misterio y tu

grandeza. Porque le dijiste sí al Espíritu, no una vez ni dos… sino siempre. Le
diste un sí permanente, renovado y feliz.
. Mujer del silencio: Silencio para interiorizar, para guardar en el corazón todo
lo que viene de Dios. Silencio también para acoger todo lo que viene del
hombre, sus anhelos, sufrimientos y esperanzas más profundas.
. Mujer de la escucha: Escuchas la voz del Espíritu para aprender de Él, para
saber el camino, para encontrar las respuestas. Por eso nos decís: “Hagan
todo lo que El les diga”.
. Mujer de esperanza: porque confías en Él. Porque conoces y amas al
Señor. Porque te apoyas en sus promesas. …
Con el anhelo de recibir como María, una fuerte efusión del Espíritu,
iniciamos nuestra celebración.

El sacerdote con la asamblea canta:

En el Nombre del padre, en el nombre del Hijo, en el Nombre del Santo

Espíritu, estamos aquí.

1ª Lectura Hechos 2, 1-11

La lectura nos narra el gran acontecimiento que supuso para la primera
comunidad la venida del Espíritu Santo, que se hace actual hoy, y cada día en
nosotros.

Salmo responsorial

A cada estrofa del Salmo respondemos:

“Señor, envía tu Espíritu y renueva la faz de la tierra.”

2ª Lectura 1 Co 12, 3b-7, 12-13.

San Pablo en su primera carta a los Corintios, describe los dones y carismas
tan variados que hay en una comunidad.

Secuencia

Lector 1: Ven, Espíritu Santo, y envía desde el cielo un rayo de tu luz.

Lector 2: Necesitamos tu luz, Espíritu divino. Andamos a veces

desorientados, en penumbra, en oscuridad. ¿Qué camino hemos de seguir?
¿Con qué criterios hemos de actuar tu Iglesia y cada uno de nosotros? Tú que
eres la verdad, ilumínanos.

Lector 1: Ven, Padre de los pobres, ven a darnos tus dones, ven a darnos
tu luz.

Lector 2: Sabemos que somos pobres. Si prescindimos de ti, nuestras vidas

quedan vacías de sentido. Creemos tenerlo todo y no tenemos lo principal. Tú
eres quien nos anima a cada uno de nosotros para que entremos en comunión
con Dios en la Palabra, en los Sacramentos, en la vida. Necesitamos de ti.
Ven y ayúdanos.

Lector 1: Consolador lleno de bondad, dulce huésped del alma, suave

alivio de los hombres. Tu eres descanso en el trabajo, templanza de las
pasiones, alegría en nuestro llanto. Penetra con tu santa luz en lo más
íntimo del corazón de los fieles.

Lector 2: Muchas veces nos sentimos fatigados. Necesitados de tregua y

descanso, de consuelo en nuestras penas. Ven y danos tu paz, Espíritu Santo.
Alivia nuestras preocupaciones. Seca nuestras lágrimas. Tú que habitas
dentro de nosotros, danos tu alegría y tu esperanza.
Lector 1: Sin tu ayuda divina no hay nada en el hombre, nada que
sea inocente

Lector 2: Tú nos envías siempre tu aliento, pero nos distraemos y no nos

dejamos llenar de tu gracia. Somos pecadores, rebeldes. Ven y danos tu
fuerza, para que nos convirtamos. Purifícanos de todo pecado, guíanos,
corrígenos, para que nos dejemos mover por tus inspiraciones.

Lector 1: Lava nuestras manchas, riega nuestra aridez, sana nuestras

heridas, suaviza nuestra dureza, elimina con amor nuestra frialdad,
corrige nuestros desvíos.

Lector 2: Tú que eres agua de vida, ven y ayúdanos. Nuestro campo está
seco, riégalo. Nuestros corazones están enfermos, sánalos. Tú que eres fuego
y calor divino, transfórmanos, quema lo viejo que hay en nosotros. A quienes
estamos fríos y desanimados, llénanos de tu calor.

Lector 1: Concede a tus fieles que confían en ti, tus siete dones
sagrados. Premia nuestra virtud, salva nuestras almas, danos la eterna
alegría.

Lector 2: Tu, eres el mejor regalo que nos hizo el Resucitado. Te pedimos
que sigas llenándonos de tus dones para ser testigos del Reino en este mundo.
Tú que eres Amor, llena de esperanza nuestra vida y danos, sobre todo, la
alegría de poder vivir para siempre en tu cielo. Amén.

Evangelio. Juan 20, 19-23

Jesús prometió el Espíritu a sus discípulos para que pudieran comprender y

testimoniar. Hoy, su promesa se renueva para nosotros.
Oración de los fieles

A cada intención respondemos:

“Por intercesión de María, Espíritu Santo escúchanos!.”

Pidamos al Espíritu Santo, que al principio del mundo separo la luz de la

oscuridad y transformó el caos en cosmos, que repita este milagro en el
mundo de hoy, en la iglesia y en nuestra alma, llevando unidad donde hay
discordia y luz donde hay oscuridad. Oremos.

Pidamos al Espíritu Santo saber percibir en la Palabra de Dios, su voluntad

viva para con nosotros en cada circunstancia de la vida. Oremos.

Pidamos al Espíritu Santo, que formó la humanidad de Cristo en el seno de

María, nos de la fuerza de anunciarlo a los hermanos. Oremos.

Pidamos al Espíritu Santo que rompa el frasco de vidrio de nuestra humanidad

para que podamos ser el buen perfume de Cristo en el mundo, asistiendo a
los más necesitados. Oremos.

Pidamos al Espíritu Santo que nos abramos hoy a recibir la gracia renovadora
del bautismo en el Espíritu. Oremos.

Ofrendas

Con un corazón renovado por la presencia del Espíritu participemos con

generosidad en la colecta, la misma será destinada a los emprendimientos de
Cáritas.
Con los dones de pan y vino, ofrezcamos al Señor los frutos del Espíritu Santo
en nuestras vidas.

Comunión

Vayamos al encuentro de Jesús y su Espíritu que nos renueva, nos fortalece

e ilumina.

Paso del Santísimo

Se intercala oración y canción

Señor, estoy en tu presencia y te doy gracias por este día. Te doy gracias por
saberme creado de manera especial y única, amado desde antes de nacer y
para siempre!!
Gracias, Señor, por haberte hecho hombre, por amarme y salvarme… por
haber pasado haciendo el bien…
Hoy quiero recibir tu promesa, la promesa del Padre. Esa promesa hecha para
todos y especialmente para mí. Por eso, en esta noche te abro los brazos y el
corazón para recibirte Espíritu Santo de Dios!
Y te pido que derrames tus dones y tu bendición sobre mí! Te pido que me
inundes con tu gracia y tu poder.
Te pido que vengas a mi vida para que pueda tener la fuerza que viene de lo
alto. Para que pueda nacer de nuevo, porque vos sos el agua viva que nos da
Jesús.

Canción…

Ven, Espíritu Santo, para que se convierta en oración este anhelo profundo de
recibirte como huésped del alma. Para que se haga realidad mi conversión de
cada día. Para que Jesús sea verdaderamente mi Rey y Señor.
Ven, Espíritu Santo, a liberarme de los miedos más profundos, de las
inconsistencias, de los prejuicios, de las defensas…
Ven, con tu luz y tu verdad, para que pueda ver quién soy y qué estoy llamado
a ser.
Y Para que así también pueda ver a los demás con la mirada de Dios, con
más misericordia.
Ven, Espíritu Santo, para que pueda soltar las amarras que no me dejan remar
mar adentro, hacia las profundidades de tu amor.
Ven, para que pueda dar los perdones tantas veces negados. Para que pueda
sanar las heridas que me atan al pasado. Para que renueves mi esperanza y
mi fe se consolide.
Ven, Espíritu Santo, para que pueda consentir la presencia de Dios en mi
interior y hacer su voluntad.

Canción…

Ven, con tus siete dones sagrados.

Dame el temor de Dios para que despierte en mí el asombro y la reverencia
ante el Señor. Para que pueda mantenerme fiel y crezca en humildad y
confianza en Dios.
Ven, Espíritu Santo, con el don de fortaleza para que pueda superar los
obstáculos en el camino de mi crecimiento espiritual y de la vida cotidiana.
Para que permanezca fiel a mi vocación y esté cada vez más disponible ante
las necesidades de los demás.
Ven, Espíritu Santo, con el don de piedad, para que sea más amable y
comprensivo.
Ven, con el don de consejo para que encarne la prudencia y así te apoderes
más de mi vida.

Canción…
Ven, con el don de ciencia, para que purifique las falsas imágenes de Dios
que pueda tener y alcance una experiencia de El íntima y verdadera.
Ven, con el don de inteligencia, para que pueda profundizar las verdades de
la fe, tener una visión realista de la vida y conocer la raíz de mi propia
debilidad.
Ven, Espíritu Santo y dame el don de sabiduría para ver las cosas a la
manera de Dios. Purifica mis motivaciones más profundas. Ayúdame a
comprender tus revelaciones.
Ven, Espíritu Santo y se mi guía para que pueda alcanzar el don del amor…
Ven, Espíritu Santo, ven…

Canción…