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Parcial domiciliario

Seminario de Informática
y Sociedad

Alumna: Agustina Gómez


Cátedra: Claudia Kozak
Segundo Cuatrimestre 2016
Comisión: 25
Profesora: Ingrid Sarchman
E-mail: achu.g_@hotmail.com
1) A partir de la idea de “Tekné” como un “Hacer del hombre” proponer distintos
autores que discuten esa idea para reformularla o para acentuarla.

2) `Con la profunda tranquilidad de los grandes revolucionarios, el artista –un


hombre muy joven- se aparta desde la pieza inaugural, en que nos da un acceso
a su mundo, de esa visión neopagana y naturalista en la que nuestros
contemporáneos se extenúan buscando la imagen del Ausente. No sin una
valerosa audacia, adopta el punto de vista de un Dios que coparticipa al lado del
hombre en la (re)construcción del mundo´” (El mapa y el territorio, Michel
Houellebecq)

¿Con qué autores y posiciones acerca del arte discutiría esta posición acerca
del lugar del artista y su rol en la modernidad?

Aclaraciones:
a) Espacio para cada pregunta: una carilla y media
b) En cada pregunta deben estar citados los autores de teóricos y prácticos
que den cuenta del desarrollo del concepto pedido.
1) En relación al concepto de “tekné” como modo de hacer del hombre se puede
relacionar con algunos autores, entre ellos Cornelius Castoriadis, planteándola
con dos características principales:
 En primer lugar, la tekné, construye lo posible
 En segundo lugar, tiene la capacidad de inventar donde no había nada.
Además de no imitar la naturaleza, construye siempre cosas nuevas

En tanto, esa capacidad de inventar siempre cosas nuevas, se relaciona con la


imaginación primera (la imaginación radical), la cual permite imaginar lo que no
existe, la cual no tiene referente.

Aunque en su teoría la tekné se puede pensar desde diferentes roles: como un


hacer, como un ensamble, como un hábito, como un saber instrumental, como una
creación, entre otras.

Para Castoriadis, todo aquello que fue creado, es responsabilidad de su creador,


pero desde el preciso momento en que es imaginado por la anteriormente
mencionada, imaginación primera. Por ende, la técnica ya no es neutral, y lo
importante ya no es el creador, sino que es el resultado. Es así que todo nuestro
entorno técnico es nuestra responsabilidad, porque fue imaginado y/o creado por
la sociedad.

En el caso de Murray Bookchin, en la mente moderna, también es protagonista lo


creado antes que el creador, en donde es muy importante la eficiencia.

Según este autor carecemos de una noción sobre una matriz social en donde
deberían estar insertas todas las técnicas, o mejor dicho, del significado social que
reviste a las tecnologías.

La teoría de Bookchin tiene relación con la de Marx, haciendo un análisis técnico


del trabajo. Por lo tanto, radica en centrarse en el problema de la técnica: su
vínculo con los ideales y con las estructuras sociales de la libertad. En relación con
este planteo, la burocracia tuvo su primera máquina- la religión- que su mayor
logro fue la efectividad con que redujeron sus sujetos activos en títeres
inanimados.

El cristianismo fue el factor ideológico más importante que fomentó el capitalismo,


haciendo énfasis en el individualismo, en el ego personal y en la obsesión cristiana
por el trabajo. Cuando la tekné fue puesta en oposición a la comunidad recobró
importancia la palabra, rasgo en el que también hace hincapié Castoriadis (la
presencia de lenguaje surge con la carencia, por lo tanto, sin ella no hay vínculo
social).
Sin duda la técnica está inscripta en una matriz social comunal, donde hay carácter
cooperativo del trabajo. Y así es como las relaciones sociales de mercado
reemplazan los vínculos de la familia extendida. Y sino, en sus palabras “El
trabajo, quizás más que cualquier otra actividad humana, sostiene a las relaciones
contemporáneas en todo nivel de la experiencia, ya sea por las retribuciones que
otorga, los privilegios que confiere, la disciplina que demanda, las represiones que
genera, o los conflictos sociales a que da lugar […] Debido a nuestro énfasis sobre
la <<dominación de la naturaleza>>, nuestra economización de la vida social,
nuestra inclinación a la innovación técnica, y nuestra imagen del trabajo como
homogéneo <<tiempo laboral>>, la sociedad moderna puede ser más
acertadamente consciente de sí misma como un mundo basado en el trabajo que
cualquier otra sociedad anterior.” (Bookchin, 1999; p. 338, 339)

Por último, las técnicas no son neutrales, sino que están pensadas en función de
una lógica; al no ser neutrales conllevan una responsabilidad, que recae en el
hombre

Para Martin Heidegger la técnica también es un hacer del hombre, es un hacer


instrumental y antropológico que busca ser dominado, pero que escapa a ello. Este
hacer va en busca de determinados objetivos: crear, disponer y utilizar objetos.

En su definición, tekné, es el medio para conocer algo. Pero para conocer es


necesario que aparezca ese algo, y hacer que esto suceda depende de la
provocación a la naturaleza. Esto es lo que diferencia a la técnica moderna, el
hacer salir de lo oculto, pero no por cualquier medio, sino provocándolo.

Además, aparece una nueva idea, que es la de libertad, emparentada con el salir
del lugar oculto, o mejor dicho, con la verdad. Pero lo libre no solo como
consecuencia, sino también como causa.

En la filosofía griega la tekné se encuentra vinculada al concepto de episteme, y en


este sentido, contribuye al desocultamiento. Así, la técnica despliega su esencia en
el ámbito donde acontece el desocultar. Pero la técnica moderna actúa de un
modo diferente, a pesar de que supone un medio o una vía más de exploración en
la búsqueda del Ser, según Heidegger. Y según su teoría el fin último de todo ello
es conseguir el dominio del ser humano sobre la naturaleza

2) En relación con la cita puedo adoptar la visión de Walter Benjamin, quien


pretende analizar la función de la obra de arte en la Modernidad. La principal
definición que le da es la de ser un síntoma de época, es decir, la evidencia de
una forma social, o en otras palabras más metafóricas: los anteojos con los que
uno ve la sociedad. Se le está dando, entonces, una función que no tenía.
En relación con la teoría de Marx, la obra de arte, según Benjamin, se ubica en la
superestructura como resultado de las relaciones sociales, y no como un mero
reflejo de la base.

El arte, era la forma que tomaba la reproducción en la antigüedad, y que en la


modernidad toma forma de técnica. A su vez, la reproducción representa la pérdida
del aura- el aquí y ahora- debido a que fabrica en serie, que convierte todo en
técnica. Pero la visión de un cuadro recupera algo de ese momento aurático que
fue perdido. A su vez, Benjamin, señala que la dimensión de una obra de arte se
basa en su reproducción, y que es la reproducción la forma de relacionarnos con el
mundo, lo que es igual a decir que la técnica es la forma de relacionarnos con el
mundo.

En cuanto a la reproducción podemos, además, decir que tiene una función


concientizadora, en cuanto a lo social. Quizás pueda ser por su posibilidad de
percepción, potenciada por la técnica.

Por ende, concluyo la relación de la teoría de Benjamin con lo planteado en la cita:


el artista se aleja de cualquier otra obra de arte, o de cualquier otra representación,
para hacer una versión propia, una lectura de la realidad. En cuanto al arte como
síntoma de época, es concordante con “No sin una valerosa audacia, adopta el
punto de vista de un Dios que coparticipa al lado del hombre en la (re)construcción
del mundo”

Luego, puedo relacionar la cita con la teoría de Martin Heidegger en su obra “El
origen de la obra de arte”. En ella, plantea que ser obra es establecer un mundo,
en sintonía con lo dicho en la cita: “el artista –un hombre muy joven- se aparta
desde la pieza inaugural, en que nos da un acceso a su mundo, de esa visión
neopagana y naturalista…”. Por ende, para los tres autores, el arte siempre es una
visión subjetiva, propia de cada artista.

Pero también se contraponen en cuanto al lugar que ocupa cada artista, ya que
según Heidegger, la esencia del arte es desocultar las obras, es una creación que
sale del lugar oculto, pero luego el artista desaparece como tal cuando ya fue
conocida cada obra. Por ende, ya no hace tanto énfasis en la visión del mundo que
tiene cada artista, tal y como dice la cita, sino que lo importante aquí es la esencia,
que surge siempre y cuando algo se da a conocer, surge de la naturaleza.
Bibliografía
Benjamin, Walter. “La obra de arte en la era de su reproductibilidad técnica” en
Discursos interrumpidos I. Madrid, Taurus, 1982.

Bookchin, Murray. “Dos imágenes de la tecnología” y “La matriz social de la


tecnología”, en Ecología de la libertad. Madrid, Editorial Nossa y Jara, 1999.

Castoriadis, Cornelius. “Técnica” en revista Artefacto. Pensamientos sobre la


técnica. Buenos Aires, n° 5, verano de 2003-2004, pp. 50-66.

Heidegger, Martin. “La pregunta por la técnica”, en Ciencia y técnica. Santiago de


Chile, Editorial Universitaria, 1983. ----------------------. “Lenguaje de tradición y
lenguaje técnico” en revista Artefacto. Pensamientos sobre la técnica, n° 1, Buenos
Aires, diciembre de 1996. ---------------- “El origen de la obra de arte (Apartado: “La
verdad y el arte”) en Arte y poesía. Buenos Aires, FCE, 1992

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