Introducción y Cap. 1 nitud y energía a la vida. Somos contradictorios.
De la aventura a la cautividad. Compartimos una necesidad básica de seguridad ¿Por qué la búsqueda de la seguridad debilita la que primero nos hace buscar relaciones emocio- vitalidad erótica? nales comprometidas, pero tenemos también una En la actualidad, son muchas las parejas que tie- fuerte necesidad de aventura y emoción. nen sexo muy esporádicamente, aún cuando afir- El amor florece en un ambiente de intimidad, man amarse, y aducen una larga lista de coarta- reciprocidad e igualdad. das y justificaciones que pretenden explicar esta Conocemos a alguien y nos sentimos fuertemente paulatina muerte del deseo. atraídos como por una alquimia. El amor nos atra- Están demasiado ocupados, demasiado estresa- pa, nos sentimos poderosos y queremos mantener dos, demasiado implicados en la crianza de los esa sensación. hijos, y demasiado cansados para el sexo. Y cómo Ahí aparece el temor porque cuanto más apego si esto no fuera suficiente para adormecer sus sen- vamos sintiendo, más hay para perder. Entonces tidos, los antidepresivos tan usualmente prescrip- empezamos a buscar maneras de que el amor sea tos terminan de destruir lo que quedaba de la casi más seguro y tratamos de aplacar nuestras ansie- inexistente libido. dades de vulnerabilidad, abandono y/o pérdida Es irónico que suceda esto con la generación de intentando sujetarlo y hacerlo más dependiente. la posguerra, que hace 30 años fue precursora de Hacemos las primeras promesas y, con alegría, re- una nueva era de liberación sexual. Ahora que es- nunciamos a un poco de nuestra libertad a cambio tos hombres y mujeres, y las generaciones que les de un poco de seguridad y estabilidad. Creamos siguieron pueden tener todo el sexo que quieran, hábitos, rituales, apodos cariñosos que nos dan parecen haber perdido el deseo. tranquilidad y generamos mecanismos de control: Este libro habla sobre el erotismo y la poética del acortamos distancias, minimizamos las amenazas, sexo, sobre la naturaleza del deseo erótico y los ignoramos los riesgos. dilemas relacionados con ello: ¿Qué se siente al Pero esa emoción inicial que sentíamos era tam- amar a alguien? ¿Qué diferencia existe entre amar bién el resultado de cierta incertidumbre. El ero- y desear a alguien? ¿La buena intimidad siempre tismo florece con lo impredecible. El deseo no va de lleva al buen sexo? ¿Por qué la paternidad suele la mano del hábito y la repetición. Es indiscipli- ser sinónimo de desastre erótico? ¿Se puede man- nado y difícil de controlar, y al intentar controlar tener vivo el deseo en una relación de larga dura- los riesgos que trae la pasión, terminamos muchas ción? ¿Podemos mantener la seguridad sin caer en veces acabando con ella. Así nace el aburrimiento la monotonía?, ¿Hay algo intrínseco en el compro- matrimonial. miso que disminuye el deseo?... En el proceso de establecer seguridad muchas Parecería que las personas están todas de acuerdo parejas lo llevan al extremo de fusionarse lo que en que la pasión siempre se enfría con el tiempo. constituye un mal augurio para el sexo, porque Algunos se resisten a eso y otros lo aceptan. Para para mantener el ardor de la pasión hacia el otro los románticos es más importante la intensidad debe existir un puente que cruzar. El erotismo re- que la estabilidad, mientras que para los realis- quiere cierta distancia, porque prospera en el es- tas, la seguridad es más importante que la pasión, pacio entre uno mismo y el otro, y para tener una pero ambos tarde o temprano se sienten desilusio- relación de intimidad con el que amamos debemos nados, porque nadie puede vivir en los extremos. poder soportar esta brecha y sus incertidumbres. ¿Puede haber amor y deseo en una misma rela- Para colmo, existe otra paradoja: generalmente el ción con el correr del tiempo? ¿Cómo sería? deseo viene acompañado de sentimientos que Perel plantea que el amor y el deseo no siempre parecen poner obstáculos al estilo del amor como se dan al mismo tiempo. Todos necesitamos segu- son la agresión, los celos, la dominación y ridad, permanencia, confiabilidad, estabilidad y sumisión, etc. continuidad; echar raíces, anidar. Por otro lado, ¿Entonces? ¿Cómo hacemos? Porque una mínima también sentimos la necesidad de innovación y sensación de seguridad física y emocional es cambios como fuerzas generadoras que le dan ple- vital para tener una conexión y un placer sanos.
~ Lic. Paula Gallacher | Psicóloga. M.P.91.398 | pollygallacher@gmail.com ~
Sin embargo, sin un toque de incertidumbre no dades. Algunos establecen vínculos íntimos con- hay anhelo, ni ilusión ni estremecimiento. cientes de que necesitan conectarse, estar cerca, Anthony Robbins, un experto en motivación dice no estar solos y no ser abandonados. que la pasión en una relación es directamente pro- Para otros, la conexión erótica y afectiva crea una porcional a la cantidad de incertidumbre que se cercanía que puede ser abrumadora, provocando pueda tolerar. una sensación de claustrofobia. Y en realidad, la incertidumbre y la inestabilidad En la etapa inicial de una relación, la entrega y son las únicas constantes, y no es más que pro- la fusión resultan relativamente inofensivas por- ducto de nuestra arrogancia el creer que podemos que los límites que separan a ambas personas aún controlar la seguridad y certeza de nuestros vín- están definidos externamente. Cada uno es nuevo culos. Anhelamos cierta constancia, y podemos para el otro, y aunque están emigrando al mundo esforzarnos en conseguirla, pero eso no garantiza del otro, aún no han establecido una residencia nada. fija allí; todavía constituyen dos identidades sepa- Woody Allen decía: “Si quieres hacer reír a Dios, radas. Todavía están cautivados por el encuentro cuéntale tus planes”. y no han consolidado su relación. Al principio Incorporar cierta incertidumbre a veces sólo re- la personas pueden concentrarse en la conexión quiere dejar de lado la ilusión de la certeza y la porque existe la distancia psicológica, por eso no seguridad, y reconocer el misterio inherente a es necesario cultivar la individualidad en las pri- nuestra pareja. meras etapas del enamoramiento. En esa etapa, La invitación es a pensar en formas de introducir de hecho, las personas aspiran a invadir esa alte- riesgo en la seguridad, misterio en lo familiar e ridad. Muchas veces, para que el deseo vuelva a innovación en lo duradero. casa, debemos recrear esa distancia que nos cos- tó tanto salvar. La inteligencia erótica consiste en Capítulo 2 crear cierta distancia para luego hacer cobrar vida Más intimidad, menos sexo: El amor busca a ese espacio. (página 64) proximidad pero el deseo requiere distancia La intimidad viene de la mano de una creciente El amor descansa sobre dos columnas: la entrega preocupación por el bienestar de la otra perso- y la autonomía. Nuestra necesidad de estar juntos na, lo cual incluye el temor a lastimarlo. Pero la coexiste con la necesidad de estar separados, van excitación sexual requiere de la capacidad de no juntas. Con demasiada distancia no hay conexión, preocuparse, y la búsqueda del placer exige cierto pero cuando hay demasiada fusión, no hay nada grado de egoísmo, y algunas personas no pueden que trascender, ningún puente que atravesar, na- permitírselo porque están demasiado absortos en die a quien visitar al otro lado, ningún otro mundo el bienestar de su pareja. (ejemplo John página 60) interno en el que penetrar. La conexión desapare- El deseo sexual no obedece las mismas leyes que ce porque no hay otro con quien conectarse, por mantienen la paz y satisfacción entre los miem- eso, la conservación de la individualidad es una bros de la pareja. La razón, la comprensión, la condición necesaria para que exista la conexión. compasión y el compañerismo son el sostén de una Esta es una paradoja fundamental de la intimidad relación estrecha y armoniosa. El sexo sin embar- y el sexo. go, despierta a menudo una obsesión irracional en Llegamos a nuestras relaciones adultas con un lugar de un criterio reflexivo o un deseo egoísta en archivo de memoria afectiva que contiene la lu- lugar de una consideración altruista. La agresión, cha que mantuvimos en la niñez por encontrar un la deshumanización y el poder existen a la sombra equilibrio entre nuestra profunda dependencia del deseo, y son componentes de la pasión que no hacia nuestros padres y la necesidad de cierta necesariamente cultivan la intimidad. El deseo independencia. La medida en que ambas necesi- funciona siguiendo su propia trayectoria. dades hayan sido estimuladas u obstruidas deter- Simone de Beauvoir escribe en su libro El Segun- minará qué es lo que más querremos y qué es lo do Sexo “El erotismo es un movimiento hacia el más temeremos en nuestras relaciones adultas. Su otro, ésta es su característica esencial”. Sin em- intensidad y prioridad oscila a lo largo de nuestras bargo, al intentar establecer cierta intimidad, a vidas, y mientras eso ocurre, tendemos a elegir menudo buscamos eliminar la otredad y así ex- parejas que coincidan con nuestras vulnerabili- cluimos el espacio necesario para que el deseo flo-
~ Lic. Paula Gallacher | Psicóloga. M.P.91.398 | pollygallacher@gmail.com ~
rezca. Todos necesitamos un jardín secreto. Perel fuiste? A veces pueden ser preguntas que simulan defiende el desarrollo de la conexión con una in- cercanía pero que en realidad esconden una pro- timidad personal como contrapeso para la pareja. funda necesidad de controlar al otro. La intimidad personal delimita una zona privada, Hoy más que nunca, la vida que llevamos requiere un espacio físico emocional e intelectual que sólo de una gran adaptación. Debemos ser capaces de me pertenece a mí. No todo tiene que mostrarse mantener la conectividad de nuestras relaciones a ni compartirse. En la intimidad mutua hacemos el pesar de las presiones constantes de nuestra aje- amor, tenemos hijos, compartimos intereses, sue- treada vida. La feminización de la intimidad pone ños, sentimientos, etc. el énfasis en el diálogo abierto y sincero, y esto Mezclamos las partes fundamentales de nuestras coloca al hombre en una posición de inferioridad vidas, pero fundamentales no significa todas. ya que el papel social del varón es el de actuar, El amor disfruta sabiendo todo sobre el otro, el competir y ser audaz, y las conversaciones íntimas deseo necesita algo de misterio. El amor necesita frecuentemente dejan al hombre sin saber qué decir acortar distancia, y el deseo se fortalece gracias a por la dificultad en expresar sus sentimientos. la distancia. Si la intimidad crece a través de la re- Ante la ausencia de una narrativa verbal más de- petición y la familiaridad, el erotismo se adormece sarrollada del Yo, muchos hombres buscan otros con la repetición. El misterio, lo original y lo in- campos de autoexpresión y el cuerpo se convierte esperado le dan alas. El amor pretende poseer; el en un lenguaje fundamental y un conducto para la deseo pretende anhelar, y para anhelar, hace falta intimidad emocional. El terreno erótico ofrece a un carácter esquivo. A menudo, a medida que la los hombres una experiencia reconstituyente para pareja se instala en la comodidad que brinda el su capacidad de expresión y su lado más tierno. A amor, dejan de avivar la llama del deseo al olvi- través del sexo, muchos hombres pueden recuperar darse que el fuego necesita aire. el placer de la conexión sin tener que encerrar sus necesidades tan difíciles de expresar dentro de la Capítulo 3 prisión de las palabras. Las dificultades de la intimidad moderna: A las mujeres, que son partidarias de la intimidad el diálogo no es el único camino a la inti- a través del diálogo, muchas veces les es difícil midad reconocer estos otros lenguajes para lograr la cer- En el pasado, el matrimonio constituía una socie- canía, y minimizan o descalifican la importancia dad de por vida y solía ser fundamentalmente una de la comunicación no verbal, como hacer cosas cuestión de sustento económico. El amor podía sur- agradables para el otro, buscar contacto físico, co- gir con el correr del tiempo, pero no era indispensa- laborar o compartir proyectos, etc. En este sistema ble para lograr una familia; y la intimidad era sólo se exige que quien no habla, cambie, y no que la consecuencia de una relación de larga duración. quien habla sea más flexible para entender otros Estar en pareja hoy en día es una iniciativa de lenguajes. (pag. 77) libre elección y las obligaciones se sustentan en Si una consecuencia de la supremacía del diálogo el amor. es que los hombres se sientan en desventaja, otra Consideramos la intimidad como un proceso fluido es que favorece que las mujeres queden atrapa- que implica la capacidad de revelarse uno mismo das en una sexualidad reprimida que no admite al y compartir con confianza nuestro material más cuerpo como medio de comunicación y expresión, personal y privado y nuestros sentimientos. ya que refuerza la idea que el deseo sexual feme- Cuando compartir se convierte en algo casi obli- nino sólo es legítimo cuando es por amor y está gatorio, cuando los límites personales casi no se inserto en una relación. respetan y sólo se admite el espacio compartido Existen aquellos para quienes el cuerpo es un lu- y se niega el espacio individual, la intimidad no gar de recreo, donde se sienten libres de expre- admite la posibilidad de descubrir cosas nuevas, sarse sin ataduras ni represiones. Pueden actuar y esto ayuda a matar el deseo. Algunas parejas con libertad y son aquellos que desean más inti- confunden intimidad con control, y lo que parece- midad física porque para ellos, el sexo es un alivio ría interés y cuidado hacia el otro, en realidad es a sus ansiedades. Para los otros más inclinados a vigilancia secreta. Quien llamó? lo verbal, el cuerpo puede ser una zona cohibida, Donde almorzaste? De qué hablabas? Con quien incómoda, tensa, y el sexo, al contrario, puede ser
~ Lic. Paula Gallacher | Psicóloga. M.P.91.398 | pollygallacher@gmail.com ~
una fuente de ansiedad. casos, aprendemos a equilibrar, a mediar y a Como terapeutas, el objetivo es lograr que cada comprender. Estos intercambios de poder influ- uno en la pareja domine el lenguaje del otro. A yen en nuestras relaciones íntimas y las diferen- veces las emociones se expresan a través del diá- cias de género implican que los varones devienen logo y otras veces no, y necesitamos reconocer y expertos en las expresiones directas del poder- aceptar las distintas formas de acercarse, alcan- mientras que las mujeres en las indirectas. zar y tocar a alguien. A muchos de los amantes del sexo no tradicional les gusta el erotismo del poder, y no de la vio- Capítulo 4 lencia y el dolor. Los contratos negociados están Democracia vs. sexo apasionado: El de- pensados para garantizar tanto el placer como la seo y el igualitarismo no se rigen por las seguridad. Las personas se someten cuando quie- mismas reglas ren, o dominan sólo hasta donde se lo permiten. Mientras el igualitarismo de los géneros repre- El juego de poder es un experimento temporal de senta uno de los mayores avances de la sociedad una práctica que se detesta en la vida cotidiana. moderna, en el campo del erotismo puede tener Si rechazamos la dependencia o la sumisión o el consecuencias bastante negativas. poder, tal vez los aceptemos en la vida erótica. Sin denigrar el logro histórico que impuso el mo- Si nuestra agresividad nos incomoda, a través vimiento feminista, Perel sostiene que el énfasis del sexo podemos jugarla de manera segura. La en un ejercicio sexual sin expresiones de poder, agresividad es un componente intrínseco de la agresión ni transgresiones resulta, para hombres sexualidad. y mujeres por igual, la antítesis del deseo erótico. Perel cree que los rituales de dominación y su- La poética del sexo generalmente es “política- misión representan una manera subversiva de mente incorrecta”: los juegos de poder, las in- colocarse por encima en una sociedad que glori- versiones de papeles, las injustas situaciones de fica el control, subestima la dependencia y exige ventaja, las exigencias imperiosas, las manipula- igualdad. El cambio explícito de poder que se ciones seductoras, cierta cuota de agresividad y transfiere voluntariamente y de mutuo acuerdo es crueldad, le dan alas. muy diferente que la rígida distribución de poder El erotismo nos permite salir de nosotros mis- que predomina en la sociedad, donde nadie quie- mos. En el erotismo pisoteamos las restricciones re ceder su porción de la torta. culturales, las prohibiciones que defendemos a No buscamos neutralizar el poder sino buscar el plena luz del día son las que transgredimos para modo de expresarlo con seguridad, creatividad, disfrutar en la oscuridad y es un espacio donde sin temor y sexualmente. podemos jugar con los tabúes. P. 92. Si el compromiso pide el sacrificio de la libertad Capítulo 5 a cambio de seguridad, el erotismo es la puerta La ética protestante del trabajo se enfrenta trasera que conduce nuevamente a la libertad. a la degradación del deseo Dentro de nuestra imaginación nos reconectamos Mantener el deseo a largo plazo es difícil porque con la libertad que nos permite tolerar los límites requiere la conciliación de dos fuerzas opuestas: que nos impone la realidad. la libertad y el compromiso. Pertenece a la ca- La misma dinámica de poder y control que puede tegoría de los dilemas existenciales que son tan ser desafiante en una relación afectiva, puede ser insolubles como inevitables y expresa una ten- altamente deseable si se la erotiza. En el crisol sión y una dinámica que está presente en todas de la mente erótica, tomamos los componentes las polaridades: estabilidad y cambio, pasión y más controvertidos del amor: la dependencia, razón, acción y reflejo, etc. la entrega, los celos, la agresión , la sumisión, Por eso, se trata de una paradoja que hay que la hostilidad y los transformamos en poderosas aprender a manejar y no un problema a solucio- fuentes de excitación. P.97 nar. Es un rompecabezas. Es como tratar de ele- En la niñez aprendemos las tácticas de poder. gir entre inhalar y exhalar: no se puede, hay que Tenemos un deseo y nuestros padres tienen otro. hacer ambas. Con el amor y la pasión sucede lo Nosotros exigimos y ellos se oponen. Aprende- mismo: son fuerzas rítmicas que cada una pro- mos a resistir y a rendirnos, y en el mejor de los porciona beneficios y también tiene sus límites.
~ Lic. Paula Gallacher | Psicóloga. M.P.91.398 | pollygallacher@gmail.com ~
Vivimos en una época en donde cuanto más rá- o rechazados. Les damos permisos, reducimos pido, mejor, donde los resultados importan más sus ansiedades, normalizamos fantasías y de- que el proceso, y estamos tentados a simplificar seos y desafiamos las distorsiones de la imagen nuestras complejidades existenciales y cuando corporal. Juntos desenterramos los secretos y si- buscamos resolver la falta de deseo mediante un lencios que acompañaron su educación sexual y plan para obtener, paso a paso, una solución que enfrentamos la influencia cultural y familiar que promete resultados (alquilar películas, baños con atentan contra la expresión erótica. La terapia sales, masajes, cita semanal, juguetes sexuales, es un proceso de expansión sexual que se logra etc), estamos muchas veces desnaturalizando la liberando algunas inhibiciones, fomentando lo situación. corporal y franqueando límites. Nuestros deseos no están exentos de conflictos ni nuestras pasiones libres de contradicciones. Los Capítulo 7 sueños de amor no se rigen por la voluntad o la Modelos eróticos: Dime cómo te amaron y razón y aplicar el espíritu del esfuerzo para lograr te diré cómo hacés el amor un mejor resultado es muy difícil. Ni el enfoque Nuestras preferencias sexuales surgen de las más lógico puede neutralizar las ambivalencias emociones, los desafíos y conflictos de nuestros del amor, e invertir en soluciones pragmáticas primeros años de vida. Creamos un sistema de para “tener sexo” hasta puede agravar la indife- creencias, sentimientos y expectativas concien- rencia. El erotismo nos desafía a la búsqueda de tes e inconcientes sobre cómo funcionan las rela- otro tipo de propósitos, a rendirnos ante lo desco- ciones, y armamos un paquete que entregamos a nocido y romper con lo racional. nuestro ser amado. Y no es casual que toda esta historia emocional se exprese en el aspecto físico Capítulo 6 del sexo porque el cuerpo es la herramienta más El sexo es sucio: Guárdalo para alguien a esencial que tenemos para comunicarnos. Inteli- quien ames, cuando chocan el puritanismo gentemente, nuestros cuerpos recuerdan lo que y el hedonismo nuestras mentes han preferido olvidar, lo bueno ¿Por qué tantas parejas se distancian eróticamente? y lo malo. Generalmente se aduce el stress, pero éste es- El objetivo terapéutico es descubrir cómo estas taba presente en sus vidas antes de conocerse preferencias influyen en el umbral de cercanía y eso no evitó que se enamoraran. Discusiones, y placer. frías distancias, falta de confianza, ciclos vitales, Qué te excita y qué te repele? Qué te atrae? Qué culpas que se reparten… te resulta indiferente? Por qué? Cuanta intimidad En realidad, vivimos insertos en una doble moral. puedes soportar? Puedes disfrutar el placer con Por un lado nos atosigan con estímulos sexuales la persona que amas? P157 por doquier y por otro, seguimos discutiendo si La irracionalidad del deseo es que, a veces, lo impartir clases de sexualidad en los colegios. que excita surge de las heridas y frustraciones El desafío de la intimidad sexual es llevar el ero- infantiles. tismo a casa, y esto a veces aterra porque es otro Jack Morin, terapeuta sexual, explica que la ima- tipo de desnudez, mucho más reveladora que nues- ginación erótica es ingeniosa revirtiendo, trans- tros cuerpos desnudos. Cuando expresamos formando y reparando los traumas del pasado. nuestros anhelos eróticos nos arriesgamos a la Así, las mismas experiencias que causaron su- humillación o al rechazo, ambos devastadores. frimiento en la infancia se convierten luego en Cuando, por el contrario, nuestros deseos son fuente de placer y excitación. P 158 Melinda aprobados y validados, la experiencia es de un El principal agente del erotismo humano es la profundo apoderamiento y autoafirmación para el imaginación, y los mandamientos del amor que corazón, el cuerpo y el espíritu, y trascendemos van contra el egoísmo no aplican al erotismo. la batalla entre el puritanismo y el hedonismo. El erotismo es un acto de generosidad y egocen- Gran parte de la tarea de un terapeuta de parejas trismo, de dar y recibir. Necesitamos ser capaces incluye ocuparse de la vergüenza y los temores de poder entrar en el espacio erótico del otro sin que rodean la sexualidad, que les hacen desear temor a ser absorbido y perder el propio yo, y a alejarse de sus amantes por miedo a ser juzgados la vez, penetrar en nuestro interior, replegarnos
~ Lic. Paula Gallacher | Psicóloga. M.P.91.398 | pollygallacher@gmail.com ~
a la autoobservación en presencia del otro y sa- tido es creer que nuestras parejas nos pertenecen. ber que el otro estará ahí cuando regresemos y En cuanto reconozcamos esto, el deseo contínuo no se habrá ofendido por nuestra ausencia mo- se convertirá en una posibilidad real. mentánea. Es fundamental la diferenciación: la Nada como una amenaza repentina al statu quo capacidad de aferrarse a uno mismo en presencia de una relación, como una aventura, una ausen- del otro, ya que sin esa capacidad, las personas cia prolongada o una pelea importante para en- no pueden alejarse de la mente del otro lo sufi- cender el deseo. ciente como para poder conectarse con su propia Mantener el deseo vivo significa esfuerzo y prác- excitación. tica. El mismo que estamos dispuestos a hacer También llevamos a cuestas el legado cultural para ser un buen profesional o un buen tenista y donde la socialización busca controlar y dominar no dudamos en dedicarle la energía y el tiempo nuestros impulsos y domar al animal que lleva- que requiera. No es sólo cuestión de estar de hu- mos dentro. Pero la intimidad erótica nos invita mor, requiere trabajo ingenioso y disciplina. a un estado de desenfreno en el que experimen- Existe el mito de que el sexo es una cuestión de tamos una dulce sensación de libertad. Amar a compatibilidad espontánea, se da o no se da. A otro sin perdernos es el dilema de la intimidad, la gente le gusta creer que el sexo surge espontá- porque para poder ser uno, primero hay que po- neamente, por un impulso natural. Sin embargo, der ser dos. esta idea de que el sexo debe ser espontáneo nos aleja de ser dueños de nuestro deseo y de expre- Capítulo 9 sarlo con una intención determinada. Piel y fantasías; en el santuario de la mente Por eso insto a mis pacientes a que no quieran erótica encontramos la ruta directa al placer ser espontáneos. En una relación de larga data, tienen que hacer que el sexo ocurra, es decir, Capítulo 11 cargarlo de intencionalidad. Volviendo a poner la X en “sexo” Tener expectativas implica que estamos esperando Sorprende ver cuantas personas están dispuestas que algo ocurra. Son un ingrediente importante a experimentar con la sexualidad fuera de sus re- del deseo y planear el sexo ayuda a generarlas. laciones de pareja, pese a lo insulsos y puritanos La fantasía de lo que va a suceder, la espera, el que son en casa, En casa, la seguridad; afuera, anhelo son también elementos esenciales del de- la pasión y la aventura. Por eso, cuando los me- seo y se pueden generar con previsión. dios de comunicación advierten que las parejas Las relaciones de pareja actuales son un calde- no tienen relaciones sexuales, lo que es probable ro de deseos contradictorios: seguridad y exci- es que estén teniendo muchísimo sexo, sólo que tación, sólidos cimientos y trascendencia, la co- no entre ellos. modidad del amor y el ardor de la pasión… Lo El erotismo está llamativamente ausente de nues- queremos todo y con una misma persona. tra idea de matrimonio. Sí disfrutamos el sexo, Conciliar lo doméstico y lo erótico representa un pero el erotismo es otra cosa. El erotismo es la delicado acto de equilibrio que logramos, como sexualidad transformada por la imaginación. mucho, de manera intermitente. Surge del cultivo de la excitación y es la búsque- La inteligencia erótica requiere conocer a la pa- da intencionada del placer. reja al mismo tiempo que reconocer su misterio Octavio Paz dice que es la poesía del cuerpo con persistente; crear seguridad y estar abiertos alo el testimonio de los sentidos que se convierten en desconocido, cultivar la intimidad respetando la sirvientes de la imaginación y nos permiten ver privacidad. Alternar la unidad y la individua- lo invisible y oir lo inaudible. lidad de manera armoniosa. El deseo resiste el Al estar ligado a la imaginación, representa una encierro, y el compromiso no debe absorber toda forma de juego. Es un espacio seguro donde ex- la libertad. perimentamos, nos reinventamos y asumimos También el erotismo en el hogar exige un com- riesgos sólo por placer, y libres de presiones y promiso activo y de voluntad. Quejarse de abu- juicios. rrimiento sexual es fácil y habitual. ¿Se puede desear lo que se tiene? Alimentar el erotismo es un acto de valiente En realidad, la gran ilusión del amor comprome- desafío.
~ Lic. Paula Gallacher | Psicóloga. M.P.91.398 | pollygallacher@gmail.com ~