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INDICE

DEDICATORIA……………………………………………………………………….
INTRODUCCIÓN………………………………………………………………….….
CAPITULO I
DISPOSICIONES GENERALES
1.- CONTRATO……………………………………………………………………….
1.1.- NOCIÓN GENERAL……………………………………………………………
1.2.- CARACTERES GENERALES DE LOS CONTRATOS…………………….
1.3.- ELEMENTOS DE LOS CONTRATOS EN GENERAL……………….…….

CAPÍTULO II
CONTRATOS MINEROS
1. Definición……………………………………………………………………….
1.1.- CONTRATO MINERO DE TRANSFERENCIA
1.1.1.-Retracto……………………………………………………………………….
1.1.2. La Lesión………………………………………………………………….….
1.1.3.- Figuras Jurídicas Inmersas en la Transferencia………………….....
1.1.4. Requisitos……………………………………………………………….……
1.1.5. Consideraciones Adicionales………………………………………….…
1.2.- CONTRATO MINERO DE CESIÓN MINERA
1.2.1. Introducción…………………………………………………………………..
1.2.2. Requisitos………..……………………………………………………………
1.2.3. Consideraciones Adicionales……………………………………………..
1.2.4. Compensación…………………………………………………………….…
1.2.5. Arrendamiento Vs Cesión Minera…………………………………………
1.2.6. Plazo……………………………………………………………………………
1.2.7. Naturaleza Jurídica……………………………………………………….…
1.2.8. Clases De Cesión……………………………………………………………
1.2.9. Características………………………………………………………………
1.3. CONTRATO DE OPCIÓN
1.4. CONTRATO DE PRENDA

1.5. CONTRATO DE HIPOTECA.


1.5.1. Introducción…………………………………………………..………….…
1.5.2. Elementos………………………………………………………..…………..
1.5.3. Características…………………………………………………..…….……
1.5.4. Requisitos…………………………………………………………………....
1.5.5. Consideraciones Adicionales………………………………………….…
1.5.6. Fin De La Hipoteca………………………………………………………...
1.5.7. Base Legal…………………………………………………………….…….

1.6. SOCIEDADES LEGALES MINERAS


1.6.1. Consideraciones Generales………………………………………………
1.6.2. Causales para la formación de Sociedades Legales Mineras.........
1.6.3. Constitución de oficio y aprobación del Estatuto……………………
1.6.4. Requisitos del contrato de constitución de la SMRL…………………
1.6.5. Denominación de la Sociedad Legal Minera…………………………..
16.6. Plazo de la Sociedad Legal Minera………………………………………
1.6.7. Capital de la Sociedad Legal Minera…………………………………….
1.6.8. Convocatoria a las juntas generales…………………………………....
1.6.9. Quorum de las juntas generales………………………………………....
1.6.10. Transferencia de las participaciones…………………………………..
1.6.11. Facultades del Gerente…………………………………………………..
1.6.12. Disolución de la Sociedad Minera……………………………………..
1.6.13. Ámbito de actividades de la sociedad minera……………………….

1.7. CONTRATO DE RIESGO COMPARTIDO


1.7.1. Consideraciones generales………………………………………..………
1.7.3. Amplitud del contrato……………………………………………………...
1.7.4. Aporte en bienes…………………………………..………..………..……..
1.7.5. El contrato como titular de la actividad minera
1.7.6. Escrituración e inscripción………………………………………………..
1.7.7. Partes del contrato y objeto del mismo…………………………………
1.7.8. No constituye persona jurídica…………………………………….……..
1.7.9. Patrimonio de contrato……………………………………………………..
1.7.10. Libre determinación de las estipulaciones……………………………
1.7.11. Designación de representantes…………………………………………
1.7.12. No hay solidaridad…………………………………..………..………..…..
1.7.13. Continuidad del contrato …………………………………..…………….
1.7.14. Estipulaciones mínimas…………………………………..………………
1.7.15. Contabilidad independiente…………………………………..………….
1.7.16. Celebración de contratos de estabilidad………………………………
1.7.17. Contratos de riesgo compartido y zonas de frontera……………….

1.8. CONTRATO DE BIENESTAR HIGIENE Y SEGURIDAD MINERA


1.8.1. Nuevo reglamento de seguridad y salud ocupacional minera...........

CONCLUSIONES…………………………………..………………………………..
BIBLIOGRAFÍA…………………………………..…………………………………..
Fuentes bibliográficas…………………………………..…………………………
Fuentes virtuales…………………………………..………………………………
CAPITULO I

DISPOSICIONES GENERALES

1. CONTRATO

1.1. NOCIÓN GENERAL

El Contrato, según la legislación civil peruana, es el acuerdo de dos o más partes


para crear, regular, modificar o extinguir una relación jurídica patrimonial.

Además todos los contratos se perfeccionan con el libre consentimiento de las


partes, excepto aquellas que, además, deben observar la forma señalada por la
ley, bajo sanción de nulidad, forma que puede consistir en que el mismo contrato
sea elevado a escritura pública o simplemente que las firmas de los contrayentes
sea legalizado ante notario público.

Igualmente las partes intervinientes pueden determinar libremente el contenido del


contrato, siempre que no sea contrario a norma legal de carácter imperativo, que
incluye la noción del orden público y las buenas costumbres.

Por último en Perú, rige además el Principio de la Formalidad Escrita de los


Contratos, al seguir la legislación el sistema romano germánico, muy diferente al
sistema del common law que prima en Estados Unidos y los países europeos.

1.2. CARACTERES GENERALES DE LOS CONTRATOS.

Los contratos tienen como principales caracteres:

a) Su liberalidad, consistente en la atribución de las partes intervinientes de definir


si contratan o no, y una vez definido el contrato, el establecer de común acuerdo el
contenido del contrato.

b) Su fuerza de ley entre los contratantes, dado que los efectos del contrato
celebrado no pueden invalidarse o declararse ineficaz de manera unilateral por
una de las partes, sino sólo de común acuerdo, y en caso de discrepancia o
conflicto mediante la intervención del Juez o de un Árbitro.

c) Su carácter patrimonial, puesto que esencialmente el contrato tiene por finalidad


el generar, regular, modificar o extinguir una relación jurídica patrimonial, y en el
ámbito minero es más valedero este criterio.

d) El imperativo de la voluntad de las partes, característica que se relaciona con la


fuerza de ley del contrato celebrado entre los contratantes.
1.3. ELEMENTOS DE LOS CONTRATOS EN GENERAL.

Según lo establecido por el Código Civil vigente, son elementos de los Contratos
en general los siguientes:

a) El Consentimiento, puesto que el contrato queda perfeccionado en el momento


y lugar en que la aceptación es conocida por el oferente o persona que solicitó
inicialmente a la otra parte (el aceptante) el pactar el contrato.

b) El Objeto del Contrato, consistente en crear, regular, modificar o extinguir


relaciones jurídicas; siendo que la obligación que es objeto del contrato debe ser
lícita, y la prestación en que consiste la obligación y el bien que es objeto de ella,
deben ser posibles.

La Forma del Contrato, por cuanto se presume que la forma que las partes
convienen adoptar anticipadamente y por escrito es requisito indispensable para la
validez del acto, bajo sanción de nulidad.

Adicionalmente es necesario tomar en cuenta los requisitos generales de todo


acto jurídico debe poseer para ser válido:

a) Agente Capaz.

b) Objeto Física y jurídicamente posible.

c) Fin lícito.

d) Observancia de la forma prescrita bajo sanción de nulidad.


CAPÍTULO II

CONTRATOS MINEROS

1. DEFINICÓN
Artículo 163 del TUO

“Los contratos mineros constarán en Escritura Pública y deberán inscribirse en el


Registro Público de Minería, para que surtan efecto frente al Estado y terceros”.

Visto el Contrato en general, puede definirse el Contrato Minero como aquel


acuerdo en el que intervienen dos o más partes intervinientes con el objetivo de
realizar actividades de exploración, explotación, beneficio, labor general y
transporte de productos minerales respecto a una concesión minera, según el tipo
de concesión que fuere, a fin de conseguir una utilidad o provecho de carácter
económico a favor de las partes intervinientes en mención. Incluyéndose en esta
definición de contrato, todas las formas de exploración y explotación posibles que
pudiera realizarse; en estricto cumplimiento de las normas jurídicas mineras y
ambientales específicas aplicables, y de las normas civiles, comerciales y
empresariales de carácter general, aplicables a los contratos mineros de manera
supletoria.

REQUISITOS GENERALES DE VALIDEZ E INSCRIPCIÓN DE LOS


CONTRATOS MINEROS.

Los contratos mineros constarán en escritura pública y deberán inscribirse en el


Registro Público correspondiente (Registro de Derechos Mineros o Registro de
Sociedades o de Sociedades Mineras, según corresponda), para que surtan efecto
frente al Estado y terceros; siendo sólo inscribibles a solicitud de parte. Los actos,
contratos y resoluciones no inscritos, no surten efecto frente al Estado ni frente a
terceros.

Los contratos mineros que se celebren en el extranjero para tener efectos frente a
terceros y al Estado Peruano, deberán ser otorgados por escritura pública ante el
respectivo Cónsul del Perú. Sin este requisito, el Registro Público no podrá
inscribirlos.

Es competente para las inscripciones de los contratos mineros y los demás actos
inscribibles, la Oficina Registral donde se ubica la concesión.

Si la concesión se encuentra bajo la competencia territorial de dos o más Oficinas


Registrales, será competente aquella en la que esté el área mayor de la
concesión. Para tal efecto, el titular de la concesión presentará bajo
responsabilidad declaración jurada con firma legalizada notarialmente señalando
el área mayor y la provincia en que se encuentra ubicada la concesión.

Es competente para las inscripciones de los contratos con respecto a las


concesiones Minera, de Transporte Minero, Labor General y los demás actos
inscribibles que recaen sobre ellas, la Oficina Registral donde se ubica el área a la
que prestan servicios.

Es competente para las inscripciones de los Contratos de Riesgo Compartido, la


Oficina Registral que corresponda al domicilio señalado para el Contrato.

BASE LEGAL.

- D.S. No. 014-92-EM, TUO de la Ley General de Minería, Arts. 106, 108, 162 y
163 (Pub. 04.06.92).

- D.S. No. 003-94-EM, Reglamento de Diversos Títulos del TUO de la Ley General
de Minería, Art. 128 y 129 (Pub. 15.01.94).

- Código Civil, Arts. 140, 1351, 1352, 1354, 1373, 1402, 1403 y 1411 (Pub.
25.07.84)

- R. No. 052-2004-SUNARP/SN, Reglamento de Inscripciones del Registro de


Derechos Mineros, Art. 10o. (Pub. 12.02.2004).

1.1.- CONTRATO MINERO DE TRANSFERENCIA


Artículo 164 del TUO

“En los contratos en los que se transfiere la totalidad o alícuotas de concesiones,


no hay rescisión por causa de lesión”.

Se debe explicar que el contrato de transferencia es al Derecho Minero lo que el


contrato de compra-venta es al Derecho Civil. La diferencia radica en que el
contrato de compra-venta se transfiere la propiedad de un bien al recibir una
contraprestación, mientras que en el contrato de transferencia se transfiere el título
de una concesión, toda vez que el dominio originario sobre el yacimiento siempre
permanece en manos del Estado y la concesión puede extinguirse por cualquiera
de las causales establecidas en la Ley.

 Transferente

Es la persona natural o jurídica titular de la concesión minera, concesión de


labor general, concesión de beneficio o concesión de transporte minero.
Es aquel que realiza la transferencia del derecho minero, que tiene la condición
de bien inmueble de acuerdo al Artículo 885 -Incisos 3º y 7º- del Código Civil.

 Adquirente

Es la persona natural y/o jurídica nacional y/o extranjera que, mediante acto
traslaticio del dominio útil o derivado, adquiere el derecho minero del titular de la
concesión minera o, excepcionalmente del petitorio minero.

 Precio

En el contrato de compraventa el precio es un elemento esencial de dicho acto


jurídico.

En el contrato de transferencia de derechos mineros, el precio o contraprestación


es un elemento de validez de dicho acto jurídico traslaticio de dominio útil.

La forma del pago del precio o contraprestación esta sujeto a la libertad de


contratación de las partes.

1.1.1.-Retracto

El Artículo 1592 del Código Civil establece lo siguiente:

«Artículo 1592.-El derecho de retracto es el que la ley otorga a determinadas


personas para subrogarse en el lugar del comprador y en todas las estipulaciones
del contrato de compraventa.

El retrayente debe reembolsar al adquirente el precio, los tributos y gastos


pagados por éste y, en su caso, los intereses pactados.

Es improcedente el retracto en las ventas hechas por remate público».

Tal como dice Manresa1, es «un derecho que tiende a convertir en verdadero
adquirente a aquel a quien el retracto le corresponde. Salvo en lo que se refiere a
la diferencia de persona, no trata de introducir alteración ninguna en las
condiciones estipuladas; la voluntad del que retrae carece de eficacia jurídica para
influir en las condiciones de la adquisición; estas condiciones están ya fijadas por
el comprador y el vendedor; al retrayente toca respetarlas y cumplirlas en lo que le
afecta; con vista de ellas determinará si hace o no uso del retracto; y si a ello se
decide, ya sabe que el pacto está hecho y que es una ley a la cual tiene que
someterse».

1
MANRESA y NAVARRO, José María. Comentarios al Código civil español. Madrid: Reus S.A., 1967, Tomo X,
Volumen 1, pág. 495.
La ley crea el derecho de retracto y lo pone a disposición del retrayante, que es un
tercero calificado, correspondiendo a éste activar o no tal derecho en su favor
cuando el propietario del bien proceda a enajenarlo. Si el retrayente se decide a
hacerlo se coloca en el lugar del comprador en el previo contrato de compraventa,
sin que se modifiquen las estipulaciones de este contrato, salvo en lo relativo al
cambio de personas.

Bigio2 dice, con razón, que el retracto no limita el derecho de disposición del
enajenante sino el derecho de propiedad de quien lo adquiere por compraventa.
Fundamenta su opinión en que el propietario del bien ejercita libremente su
legítimo derecho de transferir su propiedad a un tercero que adquiere la calidad de
comprador. Sólo después de adquirido el derecho a la propiedad por el
comprador, este derecho se ve afectado por el ejercicio del derecho de retracto
por parte del retrayente, cuyo efecto es la subrogación del comprador por el
retrayente.

Establecer esta secuencia constituye, en el fondo, ganas de hacer y deshacer, ya


que si, en definitiva, se concede a alguien el derecho de adquisición respecto de
cierta cosa, parece preferible que no tenga que esperar a que ésta se haya
enajenado, para entonces reclamarla, sino concederle la facultad (y establecer las
oportunas disposiciones para que tenga efectividad) de que pueda hacérsela
transmitir antes que aquél a quien se proyectaba enajenarla.

Esta opinión, si bien descansa en una razón de orden práctico, desconoce la


naturaleza jurídica del retracto, pues siendo un derecho de subrogación se
requiere que el comprador adquiera el bien para que después el retrayente ocupe
su lugar en el contrato de compraventa. Si el retrayente pudiera adquirir el bien
directamente del propietario, se trataría de un derecho similar al de tanteo o de
preferencia y no de un derecho de retracto3.

1.1.2.- La Lesión

Es una institución lega que protege a los contratantes débiles, del abuso cometido.

Esta es una causal de rescisión (anulación) de los contratos onerosos y


conmutativos (prestaciones ciertas y concretas) y que opera cuando el lesionado
sufre un desmedro económico por un notorio desequilibro entre los valores de la
prestación al momento de la celebración del contrato.

2
BIGIO CHREM, Jack. Exposición de Motivos Oficial del Código civil-Derecho de retracto. Separata Especial
del diario oficial «El Peruano» de 26 de noviembre de 1990, pág. 6.
3
BADENES GASSET, Ramón. El contrato de compraventa, Barcelona: Librería Bosch, 1979, Tomo lI, pág. 98
Por ejemplo si: A tiene una propiedad cuyo valor en el mercado es de 50 mil
dólares y por razones de liquidez inmediata u otros motivos de urgencia la vende
en 30 mil dólares a un comerciante que se aprovecha de ese estado de necesidad
por lo que puede invocar la lesión.

Ejemplo:

Mateo tiene un hijo muy enfermo que requiere una operación urgente en el
extranjero cuyo costo es de 58 mil soles. Lo único que tiene es una casa que
recibió en herencia y que tiene un valor de 1100 mil soles. Mateo acude donde un
prestamista, Pepe y le propone un préstamo por la sima de 58 mil soles, dejando
hipotecada su casa. Pepe no acepta y le propone una contra oferta consistente en
comprar la casa por el precio mencionado. Mateo debido al estado de necesidad
va a aceptar y vende su casa por ese monto.

 Elementos de la Lesión

La lesión en los contratos se presenta cuando un contratante se aprovecha del


estado de necesidad apremiante del otro, con la finalidad de obtener una ventaja o
beneficio patrimonial a su favor.

La acción rescisoria por lesión sólo puede ejercitarse cuando la desproporción


entre las prestaciones es mayor de los dos quintas partes y siempre que tal
desproporción resulte del aprovechamiento por uno de los contratantes de la
necesidad apremiante del otro.

El aprovechamiento significa sacar provecho del contratante, es decir inducirlo a


aceptar la desproporción entre las pretensiones, con astucia o abuso ya que
conocía la situación precaria.

El estado de necesidad es aquel que induce a una persona a celebrar un contrato


desventajoso para él con el fin de evitar un mal mayor. No solo es la situación de
angustia económica sino también moral.

 La acción de Rescisión por Lesión

Mediante esta acción, el lesionado busca romper el vínculo y poner fin al contrato.

Una vez que el juez declare la rescisión, las partes deben restituirse
recíprocamente lo que hayan recibido. Le rescisión no podrá perjudicar los
derechos de los terceros de buena fe.

Si el lesionante ha perdido o deteriorado el bien, debe ser considerado como un


poseedor de mala fe y debe responder por dicha pérdida o deterioro.
Otro caso es que el lesionado no pueda restituir el precio recibido, porque
justamente el lesionado utilizó la prestación para salir de su estado de necesidad.
En esta hipótesis, el lesionado podría retener el bien hasta que se le devuelva el
precio o el juez podría disponer que el lesionado otorgue las suficientes garantías
de que va a devolver el precio y así disponer mientras tanto la devolución del bien.

 Crítica

La razón de porque se excluye la rescisión por lesión es por lo difícil de determinar


el volumen total de reserva de mineral comercialmente explotable, así como
asignar un valor a dichas reservas en un plazo dilatado. Esas han sido
consideraciones principales para explicar la lesión de los contratos mineros.

Guillermo Montúfar sostiene que con los actuales adelantos tecnológicos es


posible calcular con bastante precisión el tonelaje de las reservas. En opinión de
García Montúfar no hay razón en la actualidad para excluir la lesión. Ya que
también se puede transferir otro tipo de concesiones como las de beneficio, labor
general y transporte minero, cuyos principales activos están constituidos por
equipos, maquinarias, instalaciones y construcciones perfectamente valorizables.

Sin embargo, el TUO conserva la norma de excluir la lesión de los contratos de


transferencia de concesiones.

Sobre este punto el suscrito está de acuerdo con la exclusión, al menos en lo que
se refiere a la concesión minera, porque la actividad minera, a pesar de los
adelantos tecnológicos sigue siendo una industria de alto riesgo. Particularmente
la fase de la exploración, donde no se conocen las características y dimensiones
del nacimiento y cuyos resultados pueden ser negativos luego de haberse
efectuado una importante inversión.

1.1.3.- Figuras Jurídicas Inmersas en la Transferencia.

Bajo la modalidad genérica del contrato de transferencia, se regulan diversas


modalidades específicas, tales como la permuta, la donación, la dación en pago y
el aporte a una sociedad.

a) La Permuta, consiste en que los permutantes (concesionarios) se obligan a


transferirse recíprocamente el dominio de las concesiones mineras que cada uno
tuviera.

b) La Donación, consiste en la transferencia gratuita que un concesionario hace a


otra persona natural o jurídica respecto de su concesión.
c) La Dación en Pago, consiste en la entrega efectiva y real de la concesión
minera, cuando el pago por una deuda anterior en la que el concesionario tiene la
calidad de deudor, queda efectuado al recibir el acreedor como cancelación total o
parcial una prestación diferente, en este caso la entrega de la concesión minera, a
la que debía cumplirse originalmente.

d) El Aporte a una Sociedad(), consiste en que cada socio integrante de la


sociedad, está obligado frente a la sociedad por lo que se haya comprometido a
aportar al capital de la misma. El aporte transfiere en propiedad a la sociedad el
bien aportado, salvo que se estipule que se hace a otro título, en cuyo caso la
sociedad adquiere sólo el derecho transferido a su favor por el socio aportante, en
el presente caso la transmisión del dominio que tiene el concesionario sobre la
concesión. El aporte de la concesión minera (bien inmueble no dinerario) se
reputa efectuado al momento de otorgarse la escritura pública a favor de la
sociedad.

1.1.4.- Requisitos

Los Contratos Mineros constarán en Escritura Pública y deberán inscribirse en el


Registro de Derechos Mineros del Registro de Propiedad Inmueble de la Oficina
Registral competente (contrato "ad solemnitaten"), haciendo la salvedad que ya no
se inscriben en el Registro Público de Minería, dado cuenta que las funciones
registrales de dicha ahora inexistente institución han sido tranferidas a la
Superintendencia Nacional de los Registros Públicos.

De manera general los contratos mineros que se presenten para su inscripción


deberán contener lo siguiente:

1.1.4.1- REQUISITOS DEL CONTRATO DE TRANSFERENCIA

 Para su Inscripción en los Registros Públicos

a) Los nombres y apellidos, nacionalidad, estado civil de los contratantes y


nombres y apellidos y nacionalidad de sus cónyuges de ser el caso. Cuando se
trate de personas jurídicas, su denominación o razón social y los datos de su
partida en el Registro de Personas Jurídicas y los del poder de su representante;

b) Identificación de los derechos mineros objeto del contrato;

c) Lo demás que corresponda según la clase de contrato.

El contrato de transferencia de derechos mineros, para su inscripción debe


contener además, cuando menos, el precio o la valorización en su caso, la forma y
modo de pago por cada derecho minero.
El contrato que no cumple con estos requisitos no surte efecto frente al Estado y
terceros. El contrato en ésta situación es ineficaz y sólo tendrá la calidad de
prueba (contrato "ad probationen").

1.1.5.- Consideraciones Adicionales.

De conformidad con el Artículo 164o. del TUO de la Ley General de Minería,


puede transferirse el derecho minero o la parte de derecho que, sobre el mismo,
corresponde a alguno o algunos de los solicitantes, previamente a la constitución
de una sociedad legal minera ().

Adicionalmente el retracto () no es aplicable a la transferencia de derechos


mineros, o de parte de derecho sobre ellos.

Por último en los contratos en los que se transfiera la totalidad o parte de


concesiones no hay rescisión por causa de lesión ().

1.2.- CONTRATO MINERO DE CESIÓN MINERA


El concesionario podrá entregar su concesión minera, de beneficio, labor general o
transporte minero a tercero, percibiendo una compensación.

Este contrato constituye una modalidad de arrendamiento en la que, en lugar de


cederse temporalmente el uso de un bien a cambio de una renta periódica, se
cede la explotación de una concesión a cambio de una compensación económica.

El cesionario se sustituye por este contrato, percibiendo una compensación. El


cesionario sustituye por este contrato en todos los derechos y obligaciones que
tiene el cedente.

La cesión implica una entrega física de la concesión al cesionario para que éste la
explote, pagándole al cedente una compensación.

1.2.1.- Introducción.

El Contrato de Opción es una modalidad del contrato preparatorio prevista en el


Código Civil, por lo que dicho contrato es nulo si no se celebra en la misma forma
que la ley prescribe para el contrato definitivo bajo sanción de nulidad.

El cesionario se sustituye por este contrato en todos los derechos y obligaciones


que tiene el concesionario, sin embargo el cesionario que esté operando una
concesión, no podrá a su vez celebrar con terceros contratos de cesión minera
sobre dicha concesión.
El contrato de cesión minera podrá ser transferido en su totalidad a tercero, con el
consentimiento expreso del cedente.

1.2.2.- Requisitos

De manera general los contratos mineros que se presenten para su inscripción


deberán contener lo siguiente:

Requisitos Del Contrato De Cesión Minera

Para Su Inscripción En Los Registros Públicos

a) Los nombres y apellidos, nacionalidad, estado civil de los contratantes y


nombres y apellidos y nacionalidad de sus cónyuges de ser el caso. Cuando se
trate de personas jurídicas, su denominación o razón social y los datos de su
partida en el Registro de Personas Jurídicas y los del poder de su representante;

b) Identificación de los derechos mineros objeto del contrato;

c) Lo demás que corresponda según la clase de contrato.

El contrato de cesión minera, para su inscripción debe contener, cuando menos, la


siguiente información:

a) La cesión que el titular hace de su derecho minero, como cedente, al


cesionario;

b) La sustitución del cesionario en todos los derechos y obligaciones del cedente;

c) La compensación que abonará el cesionario al cedente;

d) El plazo de la cesión.

El contrato de Cesión Minera constituye una modalidad de arrendamiento en la


que, en lugar de cederse temporalmente el uso de un bien a cambio de una renta
periódica, la ley minera faculta al concesionario la entrega de su concesión minera
a un tercero cesionario, cediéndole además el concesionario el derecho a la
explotación de la concesión en mención, a cambio de una compensación
económica. Este contrato puede aplicarse a la concesión minera propiamente
dicha, a la concesión de beneficio, como a la de labor general o a la de transporte
minero.

1.2.3.- Consideraciones Adicionales.

En el caso de que se dé en cesión uno (1) o más derechos mineros a dos (2) o
más personas, éstas quedarán obligadas a designar un apoderado común. A falta
de designación, ejercerá la representación la persona natural o jurídica siguiendo
el orden alfabético de apellidos y, en su caso, de nombres.

Adicionalmente procede el pacto de opción para la celebración de contratos de


cesión minera.

En los procedimientos en los que se discuta el título o el área de la concesión,


deberá entenderse necesariamente con el cedente y el cesionario, salvo que
cualesquiera de ellos hubiere delegado expresamente el derecho de defensa en
favor del otro.

Son causales de resolución del contrato de cesión minera, el incumplimiento de


las obligaciones contenidas en el Título Sexto, capítulo I de la Ley General de
Minería, referidas a la obligación de trabajar y hacer producir la concesión, como
al pago del derecho de vigencia de la concesión, así como de aquéllas causales
de resolución que se hubiesen pactado en el contrato.

Las acciones sobre resolución del

1.2.4.- Compensación

A que está obligado el cesionario; por tanto, por compensación debemos entender
a la contraprestación o renta a que está obligado el cesionario frente al cedente.

La compensación puede ser en dinero en algún otro bien. Como la ley no


establece norma al respecto, la compensación puede ser un porcentaje del valor
de la producción, un porcentaje de la renta o utilidad.

La compensación en especie implica el pago en mineral proveniente de la


concesión cedida o de otras concesiones, e incluso en la forma de servicios.

La ley otorga la más amplia libertad al respecto y no señala ninguna limitación en


cuanto al monto de la compensación.

1.2.5.- Arrendamiento Vs Cesión Minera

Doctrinalmente se diferencia del arrendamiento en cuanto que el bien arrendado


debe ser devuelto a su propietario en el mismo estado de conservación en que se
recibió, lo que no ocurre con la concesión cedida que es transformada y
eventualmente agotada como consecuencia de la explotación.

Cabe precisar que el arrendamiento tiene como presupuesto jurídico la propiedad


del arrendador sobre el bien que se arrienda, en cambio el concesionario minero
nunca llega a tener la calidad de propietario así ejerza ciertos derechos, siempre la
propiedad del recurso natural minero permanece en manos del Estado.
1.2.6.- Plazo

Se entiende que el contrato de cesión es por un plazo, pero la ley tampoco lo


señala. Sin embrago, por la propia naturaleza del contrato este debe estipular un
plazo de duración y de vigencia.

El plazo es de duración determinada o determinable, sin que la legislación minera


haya previsto; pero por la naturaleza misma de las actividades mineras, que
resultan de duración, no puede ni debe interpretarse que el plazo de duración
indeterminada no puede exceder los 10 años como establece para el contrato de
arrendamiento el Artículo 1688 del Código Civil.

El cesionario que opere una concesión no podrá celebrar, a su vez contratos de


cesión con terceros respecto de la concesión cedida. Sin embrago si podrá
transferir a terceros dicho contrato cuando tenga el consentimiento expreso del
cedente.

1.2.7.- Naturaleza Jurídica

Es un contrato de arrendamiento en minería y si bien hay entrega del derecho


minero, debe entenderse como la cesión en uso del derecho minero a cambio de
una renta.

El nomen iuris de cesión minera es por el principio rerum salva substantia.

En la legislación minera el arrendamiento sería extensible a la infraestructura de


las concesiones de labor general, transporte minero y beneficio.

1.2.8.- Clases De Cesión

La cesión minera es una sola, lo que varía es “la entrega de la concesión”


para el ejercicio temporal de la actividad minera que el título minero otorga:
exploración y explotación, beneficio y refinación, labor general y transporte minero.

El concesionario podrá entregar su concesión minera, de beneficio, labor general o


transporte minero a tercero, percibiendo una compensación (Artículo 166, primer
párrafo, del Texto Único de la Ley General de Minería).

1.2.9.- Características

Típico: Porque tiene desarrollo normativo en el Texto Único Ordenado de la Ley


General de Minería, D. S. N° 014-92-EM.

Principal: Porque tiene autonomía en su existencia y no está sujeto a otro contrato.

Bilateral: Las prestaciones tanto del cedente y cesionario son recíprocas.


Oneroso: No es un contrato gratuito, está sujeto a un quantum o retribución que
realiza el cesionario a favor del cedente.

Consensual: La forma no es sustancial al acto y surte efecto entre las partes, para
su inscripción en el Registro de Derechos Mineros se requiere escritura pública.

Duración: De plazo determinado o determinable.

1.3. CONTRATO DE OPCIÓN

1.4. CONTRATO DE PRENDA

1.5. CONTRATO DE HIPOTECA.


1.5.1. INTRODUCCIÓN.

Por la Hipoteca se afecta un inmueble en garantía del cumplimiento de cualquier


obligación, propia o de un tercero. La hipoteca debe recaer sobre inmuebles
específicamente determinados y sólo sobre inmuebles transferibles (una
Concesión Minera en particular), y más específicamente en el ámbito minero, sólo
puede constituirse Hipoteca sobre una concesión minera inscrita en el Registro de
Derechos Mineros del Registro de la Propiedad Inmueble de la Oficina Registral
competente.

Puede constituirse hipoteca sobre concesiones inscritas en el Registro de


Derechos Mineros (Artículo 172 del Texto Único Ordenado de la Ley General de
Minería).

La garantía no determina la desposesión y otorga al acreedor los derechos de


persecución y venta judicial del bien afectado (Artículo 1097 del Código Civil).

Tanto la Legislación como la Doctrina definen a la Hipoteca como un Derecho


Real de Garantía y es así considerada en forma casi universal.

La hipoteca cubre el capital, los intereses que devengue, las primas del seguro
pagadas por el acreedor y las costas del juicio.

1.5.2. ELEMENTOS

Objeto: Ggarantiza, a través de un derecho minero, el cumplimiento de cualquier


obligación, propia o de un tercero.

Forma: Es ad solemnitatem, es decir que su constitución será mediante escritura


pública.
Afecte un derecho minero: La concesión minera tiene la categoría de bien
inmueble, de tal manera que su titular es el único facultado a gravar a favor de un
tercero; por el ello el bien es determinable.

Asegure una obligación determinada o determinable: Para los efectos de la


valorización y remate, los contratantes pueden considerar como una sola unidad,
varias concesiones que formen un conjunto de bienes unidos o dependientes entre
sí; lo que lleva implícito que el derecho minero debe asegurar o garantizar una
obligación determinada o determinable (Artículo 173 del Texto Único Ordenado de
la Ley General de Minería).

El gravamen sea de cantidad determinada o determinable: El derecho minero


puede ser objeto de cuantificación a soportar como gravamen. Cuantificación que
será en función de la actividad minera misma, si la concesión esta en exploración
o explotación.

Se inscriba en el Registro de derechos mineros: Para efecto de oponibilidad del


gravamen y garantizar la obligación, será necesario la inscripción en el Registro de
derechos mineros.

1.5.3. CARACTERÍSTICAS.

a) Afecta sólo Bienes Inmuebles:

La razón de la Hipoteca es garantizar una obligación propia o de terceros


conforme a las condiciones pactadas para tal obligación. Es, por consiguiente, un
medio legal destinado a facilitar el crédito sin privar al deudor de la posesión del
bien hipotecado.

La Hipoteca Minera es un Derecho Real de garantía que sólo afecta a las


concesiones mineras.

De acuerdo a la Ley General de Minería y al Código Civil, las concesiones mineras


son considerados bienes inmuebles. En consecuencia, sobre ellas se podría
constituir contratos de hipoteca minera.

b) No Origina Desposesión:

La Hipoteca Minera no origina la desposesión del bien hipotecado (concesión


minera). El deudor o garante hipotecario en todo momento conserva la posesión
de dicho bien (concesión minera) hasta la eventualidad de la ejecución judicial de
la garantía (toma de posesión del acreedor sobre la concesión minera hipotecada
por el incumplimiento de la obligación del deudor).
c) Otorga al acreedor los derechos de persecución, preferencia y venta judicial
del bien hipotecado (concesión minera), en caso de incumplimiento de la
obligación principal.

d) Se extiende a todas las partes integrantes del bien hipotecado:

La hipoteca se extiende a todas las partes integrantes del bien hipotecado, a sus
accesorios, y al importe de las indemnizaciones de los seguros y de la
expropiación, salvo pacto distinto. Salvo estipulación en contrario la hipoteca sobre
una concesión afecta también a las construcciones, instalaciones y demás objetos
destinados permanentemente a la actividad minera, sin perjuicio del derecho de
prenda que pueda constituirse sobre ellos.

e) Es indivisible:

La hipoteca es indivisible y subsiste por entero sobre todos los bienes


hipotecados.

1.5.4. REQUISITOS.

El contrato de Hipoteca se constituye por escritura pública.

Son requisitos para la validez de la hipoteca:

1.5.4.1. REQUISITOS PARA LA VALIDEZ DEL CONTRATO DE HIPOTECA


MINERA

a) Que afecte el bien el propietario o quien esté autorizado para ese efecto
conforme a ley.

b) Que asegure el cumplimiento de una obligación determinada o determinable.

c) Que el gravamen sea de cantidad determinada o determinable y se inscriba en


el Registro de la Propiedad Inmueble (Registro de Derechos Mineros) de la
Superintendencia Nacional de los Registros Públicos, el Oficina que sea
competente.

De manera general los contratos mineros que se presenten para su inscripción


deberán contener lo siguiente:

1.5.4.2. REQUISITOS DEL CONTRATO DE HIPOTECA MINERA PARA SU


INSCRIPCIÓN EN LOS REGISTROS PUBLICOS

a) Los nombres y apellidos, nacionalidad, estado civil de los contratantes y


nombres y apellidos y nacionalidad de sus cónyuges de ser el caso. Cuando se
trate de personas jurídicas, su denominación o razón social y los datos de su
partida en el Registro de Personas Jurídicas y los del poder de su representante;

b) Identificación de los derechos mineros objeto del contrato;

c) Lo demás que corresponda según la clase de contrato.

El contrato de Hipoteca para su inscripción debe contener, cuando menos, la


siguiente información:

a) La obligación determinada o determinable garantizada por la hipoteca;

b) El monto del gravamen determinado o determinable;

c) La fecha de vencimiento del plazo de la obligación garantizada y


el interés pactado, cuando consten del título, en el caso de hipotecas que
garantizan créditos;

d) Valorización del bien para el caso del remate;

e) El pacto de diferenciación de accesorios, si lo hubiere.

1.5.5. CONSIDERACIONES ADICIONALES

La hipoteca puede ser constituida bajo condición o plazo.

Los contratantes pueden considerar como una sola unidad para los efectos de la
hipoteca, toda explotación económica que forma un conjunto de bienes unidos o
dependientes entre sí.

Aunque no se cumpla la obligación, el acreedor no adquiere la propiedad del


inmueble por el valor de la hipoteca. Es nulo el pacto en contrario.

Adicionalmente el acreedor tiene derecho a inspeccionar los bienes dados en


garantía y solicitar la mejora de la misma, pudiendo realizarse dicha inspección en
la oportunidad que determine el acreedor.

Para los efectos de la valorización y remate, los contratantes pueden considerar


como una sola unidad, varias concesiones que formen un conjunto de bienes
unidos o dependientes entre sí, pudiendo ser sólo ejercida dicha atribución cuando
los derechos mineros objeto de la hipoteca no tengan gravámenes previos o, en
caso los tuvieran, los acreedores o titulares de las cargas consintieran
expresamente en el pacto de unidad. Para proceder al remate de una concesión
hipotecada no será necesaria la tasación de la misma.
La hipoteca minera es un típico derecho real de garantía que grava la concesión
minera a fin de respaldar una obligación presente, futura o eventual. No se puede
constituir hipoteca sobre bienes futuros (Artículo 1106 del Código Civil). (no sobre
un proyecto minero o que se encuentra en procedimiento)

1.5.8. FIN DE LA HIPOTECA

La hipoteca se acaba por:

a) Extinción de la obligación que garantiza.


b) Anulación, rescisión o resolución de dicha obligación.
c) Renuncia escrita del acreedor.
d) Destrucción total del inmueble.
e) Consolidación

1.5.7. BASE LEGAL.


 D.S. No. 014-92-EM, TUO de la Ley General de Minería, Arts. 10, 172 a
174 (Pub. 04.06.92).
 D.S. No. 003-94-EM, Reglamento de Diversos Títulos del TUO de la Ley
General de Minería, Art. 128, 129, 138 al (Pub. 15.01.94).
 Código Civil, Arts. 140, 885, inc. 8; 1097 a 1107, 1111 a 1113, 1122, 1300,
1301, 1351, 1352 (Pub. 25.07.84).
 R. No. 052-2004-SUNARP/SN, Reglamento de Inscripciones del Registro
de Derechos Mineros, Arts. 6, 10, 29 y 33 (Pub. 12.02.2004).

1.6. SOCIEDADES LEGALES MINERAS

1.6.2. Consideraciones Generales

La Sociedad Legal Minera es aquella creada de oficio y de modo obligatorio por la


autoridad minera cuando por razón de petitorio minero, sucesión, transferencia o
cualquier otro título, resulten dos o más personas titulares de una concesión. Es
decir, esta clase de sociedades legales, nacen de hecho, ya que un derecho
minero pertenece a dos o más personas, sean estas naturales o jurídicas; se dice
que son sociedades legales, porque su origen está dado por una resolución
administrativa.

Asimismo, ésta es una modalidad específica de las sociedades de personas,


legisladas en la Ley General de Sociedades. Pero a diferencia de las demás
sociedades su origen no proviene de la voluntad de los socios sino del mandato de
la Ley, desencadenado a su vez por el hecho de haberse producido una situación
de cotitularidad. En dichas sociedades los socios no son titulares de acciones
libremente transferibles en el mercado, sino de participaciones sociales cuya
transferencia implica una modificación de su constitución social.

El capítulo VIII del Título Décimo Tercero del Texto Único Ordenado de la Ley
General de Minería, a partir del artículo 186° al 203° legisla acerca de las
Sociedades Legales Mineras; asimismo, en su artículo 115° establece que si por
cualquier causa aparecen superpuestas, total o parcialmente, dos o más
concesiones con título inscrito en el Registro Público de Minería por más de
noventa (90) días a partir de la fecha de la publicación aludida en el artículo 124°
del T.U.O., el Jefe del INACC, ahora titular del INGEMMET, constituirá una
sociedad legal respecto del área superpuesta. En este caso el área superpuesta
constituirá una nueva concesión que tomará el nombre de la concesión
superpuesta más antigua, precedida de la palabra “reducción”. Dicho artículo
también señala que la participación de los socios será en partes iguales, salvo
pacto en contrario.

En concordancia con lo detallado ut supra, el artículo 150° del Reglamento de


Diversos Títulos del Texto Único Ordenado de la Ley General de Minería - Decreto
Supremo N° 03-94-EM, establece que en el caso de Sociedades Legales, para los
fines del artículo 193° de la Ley, el Jefe del Registro Público de Minería
determinará en su resolución el capital inicial de la sociedad, el valor de cada
participación y la cantidad que corresponda a cada socio. Para la determinación
del capital inicial se considerará el monto de los derechos pagados al momento de
formular el petitorio y de inscripción, en su caso, honorarios profesionales,
publicaciones y cualquier otro en que se hubiera incurrido hasta la expedición de
la resolución, según lo acreditado en el expediente. Si los interesados no
acompañasen o no presenten documentación sustentatoria, el capital social inicial
será determinado por el Jefe del Registro Público de Minería, según su criterio.
La regulación antes descrita, se fundamenta en el hecho de que el legislador
considera que el condominio o cotitularidad sobre una concesión minera no es
conducente ni compatible con una explotación eficaz de la mima. Por esa razón se
ha optado por la creación forzosa, a través de la autoridad minera, de una
sociedad que asuma la titularidad de la concesión y que cuente con órganos
decisorios y órganos administrativos perfectamente determinados por la ley.

1.6.4. Causales para la formación de Sociedades Legales Mineras

El artículo 186° del Texto Único Ordenado de la Ley General de Minería amplía lo
dispuesto en su artículo 115°; ya que señala que las causales para la formación
obligatoria de dichas sociedades legales. En efecto, dicho artículo establece que
cuando por razón de petitorio, sucesión, transferencia o por cualquier otro título,
resulten dos o más titulares de una sola concesión, se constituirá de modo
obligatorio una sociedad minera de responsabilidad limitada, salvo que las partes
decidan constituir una sociedad contractual. Dicha sociedad minera de
responsabilidad limitada es una persona jurídica de derecho privado y por el acto
de la constitución se convierte en titular de la concesión que la ha originado. Los
socios no responden personalmente por las obligaciones sino hasta por el monto
de sus participaciones.

Asimismo, para dicha formación, será de aplicación supletoria en lo que fuere


pertinente, las normas de la vigente Ley General de Sociedades.

1.6.5. Constitución de oficio y aprobación del Estatuto

Antes de la expedición de la actual ley general de minería, por razón de denuncio


minero, la sociedad nacía en la expedición del AUTO DE AMPARO
PROVISIONAL. En ese entonces, de oficio las jefaturas regionales al expedir
dichas resoluciones administrativas sin perjuicio de amparar provisionalmente la
solicitud de denuncio minero, declaraba la constitución de la sociedad legal
minera.

Ahora, de conformidad a la actual norma vigente, esta clase de sociedades son


declaradas constituidas de OFICIO por el titular del INGEMMET al momento que
se expide el título de la concesión minera -esto es, por una decisión del órgano
jurisdiccional administrativo- y se inscribirá en ese registro por el mérito de la copia
certificada de la resolución que la declara constituida, o cuando las partes lo
solicitan por razón de copropiedad; o también puede ser de oficio cuando la
autoridad minera advierte la copropiedad por diversas razones.

Cabría decir que si bien el origen de la sociedad legal minera es forzosa, los actos
posteriores a su constitución si emanan de la voluntad de los socios, concordante
con lo dispuesto en el artículo 188° del TUO; ya que dispone que la sociedad se
rija por la dispuesto en él y por el Estatuto Social que, en su caso, convengan en
otorgar los socios.

Para la aprobación del Estatuto Social se requiere de un Quórum y de una


mayoría calificada. En primera convocatoria los socios que representen los dos
tercios del capital pagado y en una segunda las tres quintas partes de dicho
capital. En cualquiera de os dos casos, para la validez de los acuerdos se requiere
el voto favorables de socios que representen cuando menos, la mayoría absoluta
de las participaciones sociales.

1.6.4. Requisitos del contrato de constitución de la Sociedad Minera de


Responsabilidad Limitada, para su inscripción en los registros públicos

Se tendrán en cuenta los siguientes:

a) Denominación
b) Fecha de auto de amparo o resolución que la constituya; nombres y apellidos
de la autoridad minera que expida la resolución
c) Nombres y apellidos de sus cónyuges; la denominación o razón social,
número de registro único de contribuyente (RUC) y el domicilio en caso d
personas jurídicas, así como el nombre de quien o quienes las representen
d) Capital social, teniéndose presente que la sociedad legal constituida en el auto
de amparo, tiene como capital inicial la suma del valor de los derechos del
denuncio y de la inscripción registral, así como los gastos en que se hubiere
incurrido para formular el denuncio, en tanto que en otros casos, los
interesados, al solicitar la constitución de la sociedad legal, deberán señalar el
capital social inicial de la sociedad y forma en que se pagará
e) El domicilio
f) El régimen de la administración
g) Derechos y obligaciones para las Juntas Generales
h) Designación del Gerente y demás representantes en su caso
i) El día y la hora de presentación del Título en la Unidad de Tramite
Documentario Registral y el número del asiento del Libro Diario;

Para la inscripción de la sociedad legal no son imprescindibles los datos a que se


refieren los 5 últimos incisos, los que serán consignados si constan en la
resolución o auto de amparo que lo constituya.

1.6.6. Denominación de la Sociedad Legal Minera

La sociedad legal minera tomara la denominación que corresponda a la concesión


que la origina, y si tuviera más de una concesión, el nombre y el domicilio de la
más antigua. Si todas tuvieren la misma antigüedad, la sociedad tomara el nombre
y el domicilio que corresponda a la concesión que sea la primera en orden
alfabético. Si se transfiere la concesión que dio origen al nombre de la sociedad,
en el supuesto de que fuere titular de otras concesiones al momento de la
transferencia, se deberá modificar el nombre de la sociedad siguiendo el
procedimiento establecido en el artículo 190° del TUO.

16.7. Plazo de la Sociedad Legal Minera


El plazo de duración de la sociedad minera de responsabilidad limitada es
indefinido; sin embargo, la sociedad se disuelve sea por la extinción de las
concesiones incorporadas a su patrimonio o por la transferencia de las mismas,
salvo que en el plazo de 60 días de la transferencia o extinción de la última
concesión las partes acuerden su transformación a una sociedad contractual o que
se formule un nuevo pedimento de concesión. Esta norma faculta a las sociedades
mineras de responsabilidad limitada a formular nuevos petitorios en la
circunstancia específica de estas ad portas de su liquidación o en cualquier otra,
partiendo del principio constitucional de que nadie está impedido de hacer lo que
la ley no prohíbe.

1.8.7. Capital de la Sociedad Legal Minera

Con anterioridad a la vigencia de la actual ley general de minería, las sociedades


legales eran constituidas sin fijar el capital social; ahora de modo obligatorio se
tiene que señalar el capital social, el número de participaciones en que se
encuentra representado, la distribución de las mismas y debe quedar designado el
gerente de la sociedad, normalmente es asignado el que tiene mayores
participaciones.

Así, el capital de la sociedad minera se forma mediante aportes de dinero, de


bienes (se entiende de la concesión en primer lugar, sin excluir a otros) y/o de
créditos. Los aportes se rigen por la Ley General de Sociedades. El capital se
divide en participaciones iguales e indivisibles, así como acumulables. Las
participaciones no pueden ser representadas por títulos valores ni denominarse
acciones. Las participaciones confieren a su titular de calidad de socio y le otorgan
ciertos derechos mínimos, tales como participar en el reparto de las utilidades y
del patrimonio social en caso disolución, intervenir y votar en las Juntas Generales
de Socios, así como fiscalizar la gestión de los negocios sociales.
Los socios de las sociedades mientras de responsabilidad limitada no responden
personalmente por las obligaciones sociales sino hasta el límite de sus
participaciones.

El capital inicial de una sociedad constituida en el acto del petitorio será la suma
de los derechos del denuncio y de inscripción y los gastos incurridos para formular
el petitorio, sin perjuicio de los aportes dinerarios y de otros bienes que hagan los
socios. El artículo 150° del Reglamento de Diversos Títulos del Texto Único
Ordenado precisa que el jefe del INACC, ahora titular del INGEMMET, al constituir
la sociedad minera fijará su capital inicial, el valor de cada participación y la
cantidad que corresponda a cada socio. Para estos efectos se consideraran los
gastos e inversiones efectuadas hasta la expedición de la resolución. A falta de
información o documentación sustentatoria, el capital será fijado según el criterio
del jefe de INGEMMET.

¿Pueden los socios darle un valor económico a las concesiones que se incorporan
a la sociedad?

La ley no dice nada al respecto pero cabe efectuar un subsiguiente aporte de


concesiones a la sociedad, el cual debe ser valorizado necesariamente para su
incorporación al capital social conforme la Ley General de Sociedades.

1.8.8. Domicilio de la sociedad

El domicilio de la sociedad legal será la Provincia y departamento donde se ubique


la concesión que le dio origen, a menos que los socios acuerden modificarlo. Esta
modificación implica un cambio del Estatuto Social.

Además, dicho domicilio determinara la competencia de la oficina registral.

1.8.9. Órganos de la sociedad

Los órganos de la sociedad son la Junta General de Socios y la Gerencia. Las


juntas generales de socios pueden ser ordinarias y extraordinarias.
La junta general ordinaria debe reunirse cuando menos una vez al año, dentro de
los tres meses siguientes a la terminación del ejercicio económico anual
precedente.

La junta general ordinaria debe resolver sobre la gestión social, las cuentas y el
balance general del ejercicio y disponer la aplicación de las utilidades si las
hubiere.

La junta general extraordinaria puede realizarse en cualquier momento, inclusive


simultáneamente con la ordinaria. La junta general extraordinaria trata en principio
todos aquellos temas que no correspondan a la junta general ordinaria y en
especial los relativos a la transferencia y cesión de concesiones, gravamen de las
mismas, modificaciones estatutarias, cambio de domicilio, aumento y disminución
del capital, emisión de obligaciones, transformación, fusión y disolución de la
sociedad, escisión de la misma, nombramiento y remoción del gerente y en
general todos aquellos actos que excedan de las facultades de este último.

1.8.10. Convocatoria a las juntas generales

Las untas generales serán convocadas por el Gerente con diez (10) días de
anticipación tratándose de las ordinarias y de tres (03) días tratándose de las
extraordinarias.

También deben ser convocadas cuando así lo solicite notarialmente un número de


socios que represente al quinta parte de las participaciones sociales, expresando
la agenda a tratar en la junta. En este caso la Junta General debe ser convocada
dentro del plazo de quince (15) días de la solicitud. La convocatoria debe
publicarse mediante aviso en el diario de la capital de la provincia donde la
sociedad tiene su domicilio en el diario oficial el peruano. Dicha convocatoria
indicara el día, el lugar y la hora de la junta así como los asuntos a tratar.

Pueden realizarse juntas generales de socios sin necesidad de convocatoria si


están presentes los socios que representan la totalidad del capital social y acepten
por unanimidad que se celebre la junta para tratar los asuntos que se sometan a
su conocimiento.

1.8.11. Quorum de las juntas generales

Se refiere a las decisiones que son aprobadas mediante acuerdo de junta general
ordinaria o extraordinaria de socios de las sociedades legales.

Por regla general el quorum de las juntas generales ordinaria y extraordinaria será
en primera convocatoria la concurrencia de socios que representen no menos de
la mitad del capital pagado y en segunda convocatoria cualquier número de
participantes.

Los acuerdos se tomaran por mayoría absoluta de los socios concurrentes. El


estatuto social podrá exigir mayorías más altas, pero nunca inferiores. Sin
embargo, cuando se trate de transferencia o cesión de las concesiones de la
sociedad, cambio de domicilio, constitución de hipoteca y prenda sobre derechos
y/o bienes de la sociedad, emisión de obligaciones, transformación, fusión o
disolución de la sociedad y, en general, cualquier modificación estatutaria, se
requiere mayoría calificada. O sea, de un quorum de las dos terceras partes del
capital en primera convocatoria y de las tres quintas partes en segunda
convocatoria; y para la validez del acuerdo, en cualquier caso, el voto favorable de
los socios que representen la mayoría absoluta del capital pagado.

Para el aumento o disminución del capital se requiere, en cualquier citación, la


concurrencia y el voto conforme de no menos del 51% de las participaciones
sociales.

1.8.12. Transferencia de las participaciones

Entendida como aquella por la cual alguno o varios socios deciden transferir las
participaciones que tienen en una sociedad legal de responsabilidad limitada.

La transferencia de las participaciones constituyen una modificación del pacto


social, debiendo formalizarse por escritura pública e inscribirse en el registro de
derechos mineros y/o registro de sociedades de la SUNARP en la partida
correspondiente a la sociedad minera.

Las transferencias de participaciones deberán ser previamente comunicadas al


gerente de la sociedad y este las hará conocer a los demás socios por notificación
escrita cursada a sus respectivos domicilios. Si no se conocen los domicilios, se
tendrá que publicar en único aviso en el diario oficial el peruano y en un domicilio
de la sociedad.

Los socios gozaran del derecho de adquirir tales participaciones a prorrata dentro
de los quince (15) días de efectuada la notificación o publicación. Se entiende que
la adquisición será en los términos del acuerdo de venta de las participaciones
entre el socio vendedor y el posible comprador. En caso de que ningún socio
ejercite su derecho de preferencia el socio podrá vender directamente su
participación.

1.8.13. Facultades del Gerente

Toda sociedad minera tendrá como Gerente inicial al socio que tuviere mayor
participación, y si hubiere dos o más socios con la misma participación, al que
corresponda siguiendo el orden alfabético de los apellidos y, en su caso, del
nombre de pila.

No será de aplicación esta norma cuando los interesados nombren al gerente en


el escrito del petitorio. El Gerente puede ser removido por la Junta General, la cual
nombrará a su reemplazante. El Gerente tendrá las facultades necesarias para la
ejecución de los actos y contratos ordinarios correspondientes al objeto social. El
Gerente es el responsable legal de la sociedad. No puede ser materia de
limitación las facultades que al Ley señala para la representación judicial conforme
al Código Procesal Civil.

El artículo 287° de la Ley General de Sociedades, relativo a la sociedad comercial


de responsabilidad limitada, que es la más próxima a la sociedad minera, señala
que los gerentes o administradores gozan de las facultades generales y
especiales de la presentación procesal por el mérito de su nombramiento.

El Gerente está a cargo de la administración interna de la sociedad y asume las


responsabilidades que señala la ley general de sociedades, siendo especialmente
responsable de la existencia, regularidad y validez de los libros de la sociedad, así
como de la rendición de cuentas y de la presentación de los balances.

1.8.14. Disolución de la Sociedad Minera

La sociedad se disuelve por la extinción o la transferencia de sus concesiones


incorporadas a su patrimonio; por la transferencia de las mimas, salvo que, en un
plazo de (60) días contado a partir de la transferencia o extinción de la última
concesión, las partes acuerden su transformación en una sociedad contractual o
se formule un nuevo pedimento. Igualmente se disuelve la sociedad si una sola
persona resulta ser propietaria de todas las participaciones, salvo que se
restablezca la pluralidad de socios en un plazo no mayor de sesenta (60) días.

La disolución y liquidación de rige por lo dispuesto en la ley general de


sociedades. La sociedad minera se responsabilidad limitada que ha quedado sin
concesiones podrá transformarse a sociedad contractual o formular un nuevo
pedimento dentro de dicho plazo de los sesenta (60) días.

¿Puede una sociedad minera ser escindida? En la redacción original (Decreto


Legislativo N° 109) no se reguló dicho tema, pero en rigor nada impide que se
efectúe al amparo de las normas transitorias que actualmente permiten la escisión
con beneficios tributarios especiales y, asimismo, conforme a las disposiciones de
la vigente ley general de sociedades.

La extinción es la última fase del proceso de liquidación efectuada por la sociedad


que ha sido disuelta, y que trae como consecuencia el fin de la personalidad
jurídica de la misma. La inscripción de la extinción determina el cierre de la partida
registral respectiva.

1.8.15. Ámbito de actividades de la sociedad minera


Es importante destacar que la sociedad minera de responsabilidad limitada podrá
realizar todas las actividades inherentes a la industria minera, dentro y fuera del
área de la concesión que le ha dado origen, formulando los petitorios y solicitudes
que fueren necesarios.

1.9. CONTRATO DE RIESGO COMPARTIDO

1.7.1. CONSIDERACIONES GENERALES

El Decreto Legislativo N° 708, que es la base fundamental del TUO agregó un


contrato que no estaba previsto ni legislado la anterior Ley General de Minería
(Decreto Legislativo N° 109) el llamado contrato de Riesgo Compartido. Esta figura
contractual proviene del derecho anglosajón donde recibe el nombre de “joint
venture”, en otras palabras aventura conjunta, y es muy frecuente para actividades
mineras y petroleras en los Estados Unidos y demás países de la órbita jurídica y
cultural angloamericana. En el Perú era y es frecuente en el ámbito petrolero
cuando varias empresas, particularmente extranjeras, se asocian para explotar un
campo petrolero aportando capitales de Riesgo para luego repartirse las utilidades
operarias en proporción a sus aportes. También se había dado aisladamente en el
campo minero. Max Arias-Schriebeer al referirse a este contrato señala que es “un
instrumento fundamental para la realización de negocios internacionales” y que
tiene además “los más variados matices, partiendo de una premisa fundamental,
cuál es que opera exitosamente en el amplísimo espectro de las grandes
inversiones, por distintos que sean los objetivos perseguidos y las áreas en las
cuales actúa”.

No cabe duda que el contrato de Riesgo Compartido es una modalidad contractual


surgida en los Estados Unidos, pero que haya ido Más allá de las fronteras de ese
país, fundamentalmente por dos razones:

A) Permite que las personas y empresas se asocien para acometer un


proyecto a plazo determinado o indeterminado, juntando sus recursos y
conocimientos para este efecto.
B) Disminuye el riesgo y lo distribuye entre las partes contratantes, con lo
que hace viable el desarrollo de un proyecto, que una sola persona o
entidad probablemente no estaría en condiciones de afrontar en forma
aislada.

El contrato de Riesgo Compartido está legislado como contrato minero en el


capítulo 9 del título XIII del TUO, Artículos 204° (en su texto modificado por el
Decreto Legislativo N° 868) y 205°. Asimismo está reglamentada extensamente en
el capítulo VIII del título X de Reglamento de Diversos Títulos del TUO (en
adelante el Reglamento), artículos 151° a 165° no obstante el contrato de Riesgo
Compartido es una institución contractual de naturaleza asociativa, sus normas
difieren radicalmente y de las disposiciones sobre sobre contratos asociativos
consignadas en el libro V de la vigente Ley General de Sociedades. Por esa razón
no le son aplicables ni siquiera supletoriamente en concordancia con el artículo
162 del TUO.

1. 7.2. DEFINICIÓN DE CONTRATO

El artículo 204 del TUO señala que el titular de actividad minera podrá realizar
contratos de Riesgo Compartido “joint ventures” para el desarrollo y su fusión de
cualesquiera de las actividades mineras”. En este primer párrafo establece
claramente que el concesionario (o cesionario en su caso), tanto de una concesión
minera, como de beneficio, general, de transporte minero, puede asociarse con
otra persona o empresa, no necesariamente titular de actividades o de derechos
mineros para incursionar en una actividad económica dentro del ámbito minero.

1.7.3. AMPLITUD DEL CONTRATO

Por la amplitud del contrato cabe la realización de un contrato de Riesgo


Compartido para actividades de cateo, prospección y de comercialización que,
cómo si sabe, no requieren de concesión pero que están calificados por el TUO
como actividades mineras, ¿Qué ocurre con los contratistas mineros? ¿Pueden
ellos suscribir entre sí contratos de Riesgo Compartido al amparo del TUO para
prestación de servicios mineros? La respuesta es positiva, sujeta al requisito de
que los contratistas hayan sido calificado por la Dirección General De Minería y
está inscrito en los Registros Públicos del SUNARP.

En el segundo párrafo del artículo que indica expresamente que por su naturaleza
contrato de Riesgo Compartido es de naturaleza asociativa, destinado a realizar
un negocio común, por un plazo que podrá ser determinado o indeterminado, en el
que las partes se efectúa aportes y bienes, servicios o conocimientos que se
comprimen participando en los resultados en la forma en que convengan,
pudiendo ejercer cualquiera de las partes o todas ellas, la gestión del negocio
Compartido. Salvo pacto en contrario, los aportes en bienes no conllevan
transferencia de propiedad, sino en usufructo de los mismos. En virtud del alcance
segundo párrafo del artículo 204, el contrato de Riesgo Compartido es una
proyección muy grande dentro del cual en toda clase de estipulaciones, tanto
respecto de los aportes, como de la forma en que se distribuyen los ingresos,
utilidades, beneficios, de la operación compartida, es preciso recalcar de la
distribución de las utilidades o beneficios no necesariamente tiene que ser
proporcional a los aportes.

1.7.4. APORTE EN BIENES

En relación con los aportes en bienes es preciso recalcar que conforme a la parte
final del mencionado segundo párrafo, salvo pacto en contrario, tales aportes no
conllevan transferencia de propiedad sino el usufructo de los mismos. Lo cual
significa que por mandato expreso de la ley aportar la titularidad o el usufructo de
una concesión para la realización de un contrato de Riesgo Compartido. El aporte
de la utilidad suscita la interrogante de quién sería nuevo concesionario, toda vez
que, el contrato de Riesgo Compartido no origina la Constitución de una persona
jurídica distinta de los contratantes y el TUO no admite la cotitularidad. Por ello
resulta difícil en términos prácticos aportar la concesión. Sin embargo, el artículo
204 hace posible el aporte del usufructo de la concesión, que no es una figura
legislado en el TUO y que mas bien se separa de la doctrina del derecho minero,
ya que conforme el artículo 1009 del Código Civil, “no debe hacer ninguna
modificación sustancial del bien o de su uso” lo que no puede ocurrir una actividad
minera donde la concesión es transformada físicamente y tienden a agotarse
como consecuencia de la explotación. En este caso concreto, si el usufructo de
una concesión minera es aportado a un contrato de Riesgo Compartido, debe
hacerse la salvedad de que al término del mismo, la concesión se devuelve en la
condición que se encuentre en virtud de la aplicación realizada en ella.

1.7.5. EL CONTRATO COMO TITULAR DE LA ACTIVIDAD MINERA

El tercer párrafo del artículo 204 del TUO, señala que en el ejercicio de la actividad
minera, la asociación Joint venture, al igual que otras formas de colaboración
empresarial, son considerados titulares de actividad minera, Este tercer párrafo
resulta algo confuso, porque conforme el primer párrafo del artículo, así como del
artículo 153 del Reglamento, por lo menos una de las partes contratantes debe ser
titular de actividad minera. Ahora resulta que con arreglo a dicho tercer árrafo, el
contrato de Riesgo Compartido, considerado como una entidad independiente, es
reputado como titular de actividad minera.

1.7.6. ESCRITURACIÓN E INSCRIPCIÓN

Conforme al cuarto párrafo del artículo 204 del TUO del contrato de Riesgo
Compartido, deberá formalizarse por escritura pública e inscribirse en los
Registros Públicos de la SUNARP. Para ese efecto el artículo 156 del Reglamento
baja ordenado que se abra un Libro de Contratos de Riesgo Compartido que
funcionará en los Registros Públicos de la SUNARP. El contrato de Riesgo
Compartido surtira efectos legales respecto del Estado y de terceros a partir de su
fecha de inscripción en el mencionado Libro. de igual manera se deben inscribir
las modificaciones del contrato, la designación de los representantes, o su
vocatoria y la designación de liquidadores. Podrá también de acuerdo a este
artículo inscribirse en la partida de la concesión, que es objeto de dicho contrato o
qué ha sido aportada al mismo.

1.7.7. PARTES DEL CONTRATO Y OBJETO DEL MISMO


El artículo 151 del Reglamento permite que las partes en el contrato de Riesgo
Compartido en personas individuales o jurídicas nacionales o extranjeras
domiciliadas en el Perú. El objeto del contrato puede ser la realización de
cualquier actividad minera señalada en la ley e incluso el desarrollo o ejecución de
trabajos obras y servicios complementarios o accesorios al objeto principal del
contrato. Conforme al artículo 153 del Reglamento, por lo menos una de las partes
debe ser titular de actividad minera.

1.7.8. NO CONSTITUYE PERSONA JURÍDICA

El artículo 152 del Reglamento se precisa que, cada parte mantiene su


individualidad y en el artículo 154 del Reglamento señala de que tales contratos no
constituyan sociedad ni establecen personería jurídica distinta a la de los
contratantes y no genera una persona sujeta de derechos. Sin embargo es
indiscutible que el contrato de Riesgo Compartido tiene algunos de los rasgos que
caracterizan a una persona jurídica, tales como el patrimonio contractual, la no
responsabilidad solidaria de las partes contratantes, y la continuidad del contrato
después de la muerte o de la incapacidad de algunas de ellas.

1.7.9. PATRIMONIO DE CONTRATO

El patrimonio del contrato está constituido por los bienes, recursos o servicios
destinados al mismo. Este aspecto de Reglamento tiene una técnica defectuosa
de redacción, porque si los contratos de Riesgo Compartido no constituye persona
jurídica de derecho privado, se trata en consecuencia de un patrimonio autónomo,
en alguna medida similar a la copropiedad y que pertenecen los contratantes en
proporción a sus aportes, salvo que se acuerde una proporción distinta en el
contrato.

1.7.10. LIBRE DETERMINACIÓN DE LAS ESTIPULACIONES

El artículo 155 del Reglamento se remite el artículo 1354 del código civil y en tal
virtud la parte puede determinar libremente el contenido del contrato sea contraria
a las normas legales de carácter imperativo. Tal como se ha indicado, el contrato
debe celebrarse por escritura pública e inscribirse en el Libro de contratos de
Riesgo Compartido de los Registros Públicos de la SUNARP del lugar del
domicilio contractual

1.7.11. DESIGNACIÓN DE REPRESENTANTES

El artículo 157 del Reglamento indica que as partes del contrato deben designar
obligatoriamente a uno o más representantes con poder suficiente para ejercer los
derechos y contraer las obligaciones relativas al desarrollo del objeto del contrato.

1.7.12. NO HAY SOLIDARIDAD

Conforme al artículo 158 del Reglamento, salvo acuerdo contractual expreso, en


contrario de las partes del contrato de Riesgo Compartido por los actos y
operaciones de derivados de su ejecución contra terceros quedando la
responsabilidad de la parte limitada a los aportes comprometidos para el contrato.
Esta disposición es de gran importancia porque el contrato de Riesgo Compartido
en la práctica una característica propia de las sociedades anónimas o de las
sociedades de responsabilidad limitada. Sin embargo nada impide que quienes su
vez celebren contrato con el representante de contrato de Riesgo Compartido,
exijan la responsabilidad solidaria de la parte del mismo.

1.7.13. CONTINUIDAD DEL CONTRATO

El artículo 159 del Reglamento también contiene una norma muy importante
consistente en que la quiebra, la incapacidad o la muerte de uno de los
contratantes, no conlleva necesariamente a la terminación del contrato de Riesgo
Compartido. Esta es una característica propia de una sociedad anónima de
responsabilidad limitada.

1.7.14. ESTIPULACIONES MÍNIMAS

El artículo 160 del Reglamento Establece que, cuando menos en los contratos de
Riesgo Compartido debe incluir las siguientes estipulaciones:

a) Objeto del contrato


b) Las partes contratantes y sus aportes
c) El plazo del contrato
d) Denominación
e) Designación de los representantes sus facultades y domicilio común.

En adición a la anterior, las partes deberán pasar las partes deberán pactar la
forma cómo se distribuirán los beneficios, ingresos o utilidades y también como
asumirán las pérdidas. En este caso se entiende que las pérdidas no podrán
exceder de los aportes y no compromete el patrimonio individual de cada parte
contratante salvo pacto en contrario.

1.7.15. CONTABILIDAD INDEPENDIENTE

El artículo 161 del Reglamento, señala que las operaciones del contrato de Riesgo
Compartido sean llevadas en una contabilidad independiente. Los estados
financieros se llevaran con las formalidades previstas en la ley y se abriran los
libros y registros bajo la denominación acordadas el contrato. El contrato en otras
palabras, la contabilidad de las operaciones el contrato de Riesgo Compartido,
deberá llevarse en forma independiente y separada de la contabilidad de sus
partes contratantes. El artículo 162 señala que los resultados generales por el
contrato de Riesgo Compartido se atribuyen a las partes contratantes de acuerdo
al porcentaje o al monto que les corresponda en el contrato de Riesgo
Compartido. La distribución de los resultados se considerará efectuada el 31 de
diciembre de cada año, esto significa que las partes contratantes tendrán que
consignarla en su declaración jurada del impuesto a la renta el ejercicio
correspondiente, debiendo pagar regularización del impuesto a la que hubiere
lugar sobre las ganancias derivadas del contrato durante el respectivo ejercicio.

1.7.16. CELEBRACIÓN DE CONTRATOS DE ESTABILIDAD

El artículo 163 del Reglamento, señala que las partes contratantes del contrato de
Riesgo Compartido podrán celebrar con el gobierno contratos de estabilidad
tributaria, cambiaria y administrativa. En este caso la actividad económica, objeto
del contrato, gozarán de los beneficios de contrato de estabilidad. Tales beneficios
se harán extensivos a las personas naturales y jurídicas que hayan celebrado
dichos contratos, inclusive a los que no sean titulares de actividad minera, tal
como lo señala el artículo 90 del TUO, de acuerdo al porcentaje o monto que les
corresponda en el contrato. Los contratos de estabilidad, en estos casos serán
celebrados por el representante de la agrupación (Artículo 164 del Reglamento).

1.7.17. CONTRATOS DE RIESGO COMPARTIDO Y ZONAS DE FRONTERA

Con arreglo al artículo 165 del Reglamento, las personas naturales o jurídicas,
nacionales titulares de concesiones mineras en la franja fronteriza de los 50
metros podrán celebrar contratos de Riesgo Compartido con personas naturales o
jurídicas extranjeras, previo el cumplimiento de los requisitos legales.

En estos casos, el gobierno, de conformidad al artículo 71 de la Constitución,


deberá expedir un Decreto Supremo declarando de necesidad pública la inversión
privada extranjera en el contrato de Riesgo Compartido a ser ejecutado en la zona
fronteriza. En el decreto supremo se deberá autorizar expresamente la
participación del contratante extranjero. Para este efecto se deberá presentar una
solicitud ante el Ministerio de energía y Minas, que deberá contar con la opinión
favorable, entre otros, del Comando conjunto de las Fuerzas Armadas.

1.10. CONTRATO DE BIENESTAR HIGIENE Y SEGURIDAD


MINERA

El título décimo cuarto del TUO legisla sobre temas de bienestar higiene y
seguridad minera. El artículo 206 del TUO establece que los titulares de las
actividades mineras deben proporcionar a sus trabajadores, así como a sus
dependientes familiares, los siguientes servicios cuando los centros de trabajo se
encuentra en zonas alejadas de la población:

A) facilidades de vivienda bajo cualquiera de las siguientes modalidades

1. Viviendas adecuadas para el trabajador y sus familiares


2. Facilidades de vivienda para los trabajadores bajo un
sistema de un n° de días de trabajo por horas de descanso en
un centro poblado. En este caso, con arreglo del artículo 206
del Reglamento de diversos títulos del TUO, el empleador está
obligado a proporcionar alojamiento en áreas cercanas del
centro de trabajo, pero únicamente al trabajador y no a sus
familiares dependientes

B) escuelas y su funcionamiento

C) instalaciones adecuadas para la recreación

D) servicio de asistencia social

E) asistencia médica y hospitalaria gratuita, siempre que estas prestaciones


no sean cubiertas por ESSALUD.

Los familiares de los trabajadores tendrán derecho a una vivienda a condición de


qué depende económicamente de ellos, residan en el centro de trabajo y estén
registrados por el empleador. El artículo 131 del anterior Reglamento de
Seguridad e Higiene minera (Decreto supremo N° 046-2001-EM) considera
dependientes registrados del trabajador a los siguientes:

a) El o la cónyuge
b) El o la conviviente, que resulta de la unión de hecho a qué se refiere el
artículo 326 del Código Civil
c) Los hijos menores de 18 años y que dependan económicamente del
trabajador y los incapacitados para el trabajo aún cuando sean mayores de
edad
d) Los padres del trabajador que dependen económicamente de este y que
residan en el centro minero

El artículo 162 del NUEVO REGLAMENTO DE SEGURIDAD Y SALUD


OCUPACIONAL MINERA (Decreto supremo N° 055-2010-EM vigente a partir del
primero de enero del 201), establecen esencia los mismos requisitos, pero agrega
a:

 Los hijos e hijas mayores de 18 años que estén siguiendo con éxito una
profesión u oficio
 Las hijas solteras que no estén en aptitud de atender su subsistencia.

Para los fines de las obligaciones antes referidas, el artículo 206 del TUO define a
las zonas alejadas como “aquellas que se encuentran a más de 30 kilómetros de
distancia o más de 60 minutos de recorrido en vehículos a la velocidad normal o
segura de la población más próxima”.

Alternativamente, las empresas mineras podrán ofrecer a sus trabajadores


programas de edificación de viviendas en las poblaciones cercanas a sus
campamentos, para que residan permanentemente en ella y la adquieran en
propiedad con facilidades económicas y financieras. Cuando los trabajadores se
acojan a este beneficio de la actividad minera estará exonerado de proporcionar
vivienda. El Reglamento fijará las características de las viviendad y de los demás
servicios.

De acuerdo al artículo 209 del TUO, las empresas mineras deben proporcionar
condiciones de higiene y seguridad en el trabajo que se adecue a lo establecido
en el TUO y disposiciones complementarias. Los trabajadores están obligados a
cumplir rigurosamente las medidas preventivas y disposiciones que acuerden las
autoridades competentes y las que establezcan los empleadores en temas de
higiene y seguridad (artículo 210). Igualmente conforme al artículo 211, los
empleadores deben establecer programas de bienestar, seguridad e higiene de
acuerdo con las actividades que realicen, así como de capacitación de personal en
todos los niveles (artículo 215). Estos programas se formularán anualmente y se
presentará a la Dirección General de Minería. Asimismo deberán presentar un
informe acerca de las actividades realizadas en el año anterior con sus respectivos
cuadros estadísticos (artículo 212).
Los beneficios de bienestar y seguridad serán otorgados por el empleador a sus
trabajadores mientras el contrato de trabajo esté vigente. Terminada la relación
laboral sea por muerte, renuncia, despido o cualquier otra causa, el trabajador, asi
como sus dependientes familiares, deberá desocupar la vivienda en el plazo de 30
días (artículo 218 del TUO). En el caso de que el trabajador cesante o sus familias
por fallecimiento de este último, no devuelvan la vivienda al vencimiento de los 30
días de conformidad al artículo 145 del Reglamento de seguridad e higiene
minera, el titular de la actividad minera podrá recurrir al juez de paz letrado o ante
juez especializado en lo civil, para solicitar la desocupación de la vivienda.
Conforme artículo 165 de nuevo Reglamento y los servicios que proporciona el
titular minero sólo podrán ser utilizados para fines habitacionales, estando los
trabajadores y sus familiares obligados a dar un uso correcto y cuidar las viviendas
asignadas. De acuerdo al artículo 177 del mismo Reglamento, cuando concluya la
relación laboral, el trabajador y sus dependientes, circunstancia que también cubre
el caso de fallecimiento del trabajador, deberán desocupar la vivienda asignada
dentro del plazo de 30 días. En caso contrario, el titular minero está facultado para
pedir la desocupación de la vivienda ante el Juez De Paz Letrado o ante el Juez
Civil.
CONCLUSIONES:

1. El Contrato, según la legislación civil peruana, es el acuerdo de dos o más


partes para crear, regular, modificar o extinguir una relación jurídica patrimonial.
2. Según lo establecido por el Código Civil vigente, son elementos de los
Contratos en general los siguientes: El Consentimiento y El Objeto del Contrato.

3. “Los contratos mineros constarán en Escritura Pública y deberán inscribirse en


el Registro Público de Minería, para que surtan efecto frente al Estado y
terceros”.

4. El concesionario podrá entregar su concesión minera, de beneficio, labor


general o transporte minero a tercero, percibiendo una compensación. El
Contrato de Opción es una modalidad del contrato preparatorio prevista en el
Código Civil, por lo que dicho contrato es nulo si no se celebra en la misma
forma que la ley prescribe para el contrato definitivo bajo sanción de nulidad.

5. La hipoteca cubre el capital, los intereses que devengue, las primas del seguro
pagadas por el acreedor y las costas del juicio. Puede constituirse hipoteca
sobre concesiones inscritas en el Registro de Derechos Mineros (Artículo 172
del Texto Único Ordenado de la Ley General de Minería). La Hipoteca Minera
es un Derecho Real de garantía que sólo afecta a las concesiones mineras

6. Las sociedades legales a diferencia de las sociedades contractuales son


constituidas por orden de la administración, es decir, mediante resolución pro el
órgano competente, mas no por voluntad propia, salvo excepciones.

7. Las formas de poder constituir una sociedad legal minera son las siguientes: en
primer orden, por la autoridad administrativa, mediante resolución
correspondiente, en segundo lugar por la denuncia que hubiese, y por tercer
lugar a petición de las titulares de los derechos de concesión minera.

8. La sociedad legal minera, obtiene el nombre de la concesión más antigua; a


sismo, su domicilio se fijara bajo el mismo parámetro. El patrimonio de la
concesión legal minera se fijara de acuerdo a las participaciones de cada uno
de sus socios.

9. El titular de actividad minera podrá realizar contratos de Riesgo Compartido


“joint ventures” para el desarrollo y su fusión de cualesquiera de las actividades
mineras. Los familiares de los trabajadores tendrán derecho a una vivienda a
condición de qué depende económicamente de ellos, residan en el centro de
trabajo y estén registrados por el empleador
BIBLIOGRAFÍA:
FUENTES BIBLIOGRAFICAS

1. Contratación Minera – Estudio Echecopar Abogados, 2010.


2. Contratos Mineros – Juan Francisco Baldeon Ríos, consultor legal minero,
docente minero en las facultades de derecho y ciencia política de la
UNMSM, UNFV y UPIG/Presidente de la comisión consultiva de derecho
minero, energía, electricidad e hidrocarburos del CAL.
3. Decreto Supremo N° 03-94-EM - Reglamento de Diversos Títulos del Texto
Único Ordenado de la Ley General de Minería.
4. Decreto Supremo N° 014-92-EM - Texto Único Ordenado de la Ley General
de Minería.
5. Derecho minero y empresa – Enrique Lastres Berninzon.
6. Derecho Minero y Concesión – Martin Belaunde Moreyra.
7. Gestión Legal, Sociedades Mineras, Registros Públicos – Instituto para el
Desarrollo Sustentable, 2008.
8. R. No. 052-2004-SUNARP/SN, Reglamento de Inscripciones del Registro
de Derechos Mineros, Arts. 6, 10, 29, 34 (Pub. 12.02.2004).

FUENTES VIRTUALES

9. http://sunarp.gob.pe
10. http://monografias.com.pe/contratosmineros
11. file:///F:/DERECHOS%20MINEROS%20_%20Blog%20de%20revista%20El
ectr%C3%B3nica%20EL%20VISIR.html
12. File:///F:/TAJO%20ABIERTO_%20LAS%20SOCIEDADES%20MINERAS.ht
ml

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