Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Mordeduras PDF
Mordeduras PDF
18 punzantes
F. Álvez González
Servicio de Pediatría. Hospital Clínico Universitario. Santiago de Compostela
Causa Microorganismos
Perros Pasteurella canis
Capnocytophaga canimorsus
Gatos Pasteurella multocida y septica
Corynebacterium
Bartonella henselae
Común en perros y gatos Estafilocos
Estreptococos
Enterococos
Anaerobios: Fusobacterium, bacteroides, Porphyromonas,
Prevotella, Propionibacterium
Ratones y ratas Fiebre por mordedura de rata:
Streptobacillus moniliformis, Spirillum minus
Reptiles Bacterias gramnegativas, anaerobios
Ovejas y cabras jóvenes Parapoxvirus orf
Humanas Estreptococos (sobre todo anginosus)
Estafilococcus aureus
Eikenella corrodens
Anaerobios: Fusobacterium, Peptostreptococcus,
Prevotella
Heridas por objetos Staphylococcus aureus
punzantes Estreptococos betahemolíticos
Anerobios
Pseudomonas aeruginosa (planta del pie)
nunca deben ser consideradas como son por clavos. En otras localizacio-
menores. Aún con una buena irriga- nes suelen ser por astillas de madera,
ción, las mordeduras en otras áreas dis- metal, plásticos y vidrio. La infección
tintas a la mano se infectan en el 10% se produce en el 6-10% de los casos.
de los casos comparado con el 20% de Factores importantes en la trascenden-
los adultos. cia de la herida son su profundidad,
3. Heridas por objetos punzantes. La localización, tipo de objeto penetran-
mayoría (más del 50%) suceden en la te y si hay retención de un cuerpo
planta del pie y más del 90% de éstas extraño(1).
Infecciones por mordeduras y heridas punzantes 179
nes sólo existe dolor a la palpación del te exploración quirúrgica y drenaje pues
dorso del pie o simplemente una sensa- dan resultados más fiables o demuestran
ción dolorosa a la palpación profunda. En microorganismos no identificados previa-
la osteomielitis del calcáneo lo habitual mente(8). La tinción Gram no ayuda a pre-
es dolor en el talón, sin fiebre y los niños decir el riesgo de infección en heridas clí-
prefieren mantener el pie quieto y eleva- nicamente no infectadas.
do. La infección osteoarticular de la plan- Decisión de examen radiológico si
ta del pie por gramnegativos es diferente existe sospecha de compromiso óseo, arti-
de la debida a S. aureus aunque los sig- cular o de algún cuerpo extraño. A los
nos y síntomas no cambian mucho. En la pacientes con una mordedura de perro en
infección estafilocócica el número de días cuero cabelludo (aunque sólo se visuali-
antes del diagnóstico es más corto, entre ce una herida punzante) se les debe prac-
5-7 días. En la infección por Pseudomo- ticar un examen radiológico simple o
nas no suele existir fiebre y se presenta tomografía computarizada (TC), pues en
con dolor e inflamación en la región dor- ocasiones los dientes del perro penetran
sal que van en aumento. Si la infección la calota craneal con riesgo de fractura,
afecta a tejidos blandos con o sin trata- infección e incluso absceso local. En casos
miento tópico, puede observarse una heri- de heridas punzantes de la planta del pie
da o úlcera necrótica con secreción hemo- si hay sospecha de compromiso osteoar-
rrágica y cubierta con un capa fibrino- ticular la prueba de elección es la reso-
purulenta de olor y coloración caracterís- nancia magnética (RM) muy útil sobre
tica (azul grisácea)(6). todo en las primeras fases de la infección.
Detecta la infección ósea y de tejidos blan-
DIAGNÓSTICO dos adyacentes aportando además una
Se basa en la historia y anamnesis y localización precisa de la lesión.
en los hallazgos clínicos referidos. Si una
herida parece infectada y antes de iniciar Tratamiento de las heridas por
tratamiento antibiótico, se obtendrán mordedura y por punción
muestras para tinción Gram y cultivos para Actitud ante una herida antes de la
aerobios y anaerobios: 1) aspiración cerra- infección
da con aguja en zonas de celulitis impor- En muchos casos se consideran heri-
tante, fluctuación o absceso. Si no se das poco relevantes sin prestarles aten-
obtiene material suficiente (en caso de ción médica en las primeras 24-48 horas.
celulitis) se instila un poco de suero sali- Las recomendaciones de tratamiento
no estéril y se aspira nuevamente; 2) con incluyen una serie de medidas generales,
hisopos de rayón de heridas abiertas; y 3) locales y de la necesidad o no de profi-
hisopos más finos y pequeños de algina- laxis antibiótica(9).
to, dentro de heridas punzantes después
de aplicar en la piel una solución de povi- Medidas generales
dona yodada. Pueden ser necesarios cul- • Historia detallada, incluyendo los
tivos de heridas más profundas median- hechos del suceso, tiempo transcurri-
182 Protocolos diagnóstico-terapéuticos de la AEP: Infectología pediátrica
Planta del pie y > 7 días: Planta del pie y > 7 días:
Cefazolina o cloxacilina Reacción no anafilactica:
más cualquiera de: – Cefazolina, más
Aminoglicósido, – Aminoglicósido
Ceftazidima, Reacción anafiláctica:
Meropenem – Clindamicina, más
– Aminoglicósido
conducta del animal sea inusual(10). En tions. En: Burg FD, Polin RA, Gershon
España a partir de 1975 la rabia no se ha AA, Ingelfinger J, eds. Current Pediatric
Therapy 18ª ed. Philadelphia: WB Saun-
documentado en mamíferos terrestres sal-
ders Co.; 2006. p. 200-4.
vo en Melilla, en 2002 donde se detecta-
4. Havens PL. Postexposure Prophylaxis in
ron 5 casos en perros (14). La profilaxis
Children and Adolescents for Nonoccupa-
postexposición (Tabla VI) se debe con- tional Exposure to Human Immunodefi-
siderar tras mordeduras, arañazos, abra- ciency Virus. Pediatrics. 2003; 111: 1475-
siones o contacto con saliva del animal 89.
a través de mucosas o de una rotura en 5. Talan DA, Abrahamian FM, Moran GJ,
la piel y en las siguientes circunstancias: Citron DM, Tan JO, Goldstein EJC. Cli-
1) animales conocidos por padecer la nical presentation and bacteriologic analy-
rabia o aparentemente enfermos; 2) ani- sis of infected human bites in patients pre-
males desconocidos o extraviados; 3) ata- senting to emergency departments. Clin
Infect Dis. 2003; 37: 1481-89.
ques de animales no provocados; 4) inca-
pacidad para capturar y observar el ani- 6. Alvez González F, Iglesias Diz JL, Cutrín
Prieto J. Infecciones por heridas punzan-
mal; y 5) factores endémicos del área tes del pie en niños, Rev Esp Pediatr. 2002;
geográfica(14). 58: 430-8.
Hepatitis B. El riesgo de esta infec- 7. Lederman ER, Austin C, Trevino I, Rey-
ción se ha de tener en cuenta en niños nolds MG, Swanson H, Cherry B, et al.
mordidos por una persona con antígeno Orf virus infection in children: clinical
AgHBs positivo. Los niños no inmuniza- characteristics, transmission, diagnostic
dos deben recibir inmediatamente gam- methods, and future therapeutics. Pediatr
maglobulina hiperinmune humana anti- Infect Dis J. 2007; 26: 740-4.
hepatitis B e iniciar simultáneamente la 8. Laughlin TJ, Armstrong DG, Caporusso
vacunación contra la hepatitis B. Los niños J, Lavery LA. Soft Tissue and bone infec-
que han recibido las tres dosis de la vacu- tions from puncture wounds in children.
West J Med. 1997; 166: 126-8.
nación primaria no necesitan protección
por la buena respuesta y persistencia de 9. American Academy of Pediatrics. Bite
wounds En: Pickering LK, Baker CJ, Long
memoria inmunológica incluso después SS, McMillan JA, eds. Red Book: 2006
de 10 años de la vacunación(15). Report of the Committe on Infectious
Diseases. 27ª edición. Elk Grove Village
BIBLIOGRAFÍA IL: American Academy of Pediatrics;
1. Baldwin G, Colbourne M. Puncture 2006. p. 191-7.
wounds. Pediatr Rev. 1999; 20: 21-3. 10. Hankins DG, Rosekrans JA. Overview,
2. Bradley JS. Bite-wounds infections. En: prevention and treatment of rabies. Mayo
Jenson HB, Baltimore RS, eds. Pediatric Clin Proc. 2004; 79: 671-6.
Infectious Diseases. Principles and Prac- 11. Lewis KT, Stiles K Management of cat
tice. Philadelphia: WB Saunders Co.; and dog bites. Am Fam Physician 1995:
2000. p. 602-9. 52: 479- 90
3. Meredith Sonnett F, Green RA, Dayan PS. 12. American Academy of Pediatrics. Teta-
Mammalian Bites and Bite-Related Infec- nus. En: Pickering LK, Baker CJ, Long
188 Protocolos diagnóstico-terapéuticos de la AEP: Infectología pediátrica
SS, McMillan JA, eds. Red Book: 2000 14. De Juan Martín F. Rabia. En: Manual
Report of the Committe on Infectious de Vacunas en Pediatría 2008. 4ª edi-
Diseases. 27ª edición. Elk Grove Village ción. Comité Asesor de Vacunas. Aso-
IL: American Academy of Pediatrics; ciación Española de Pediatría; 2008. p.
2006. p. 648-54. 516-31.
13. Preventing tetanus, diphtheria, and pertus- 15. Isaacs D. Hepatitis B. En: Isaac D, ed. Evi-
sis among adolescents: use of tetanus dence-based pediatric infectious diseases.
toxoid, reduced diphtheria toxoid ad ace- Massachusetts: Blackwell Publishing;
llular pertussis vaccines. MMWR Recomm 2007. p. 92-4.
Rep. 2006: 51: 1.