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TAREA VI

Relación de un informe a modo de resumen, considerado.

1. Los distintos elementos que componen el folklore mental espiritual


dominicano.
2-Ofrece recomendación para preservarlo e incorporarlo a la formación académica
de otras carreras. Máximo 4 paginas.

3-Redacta un ensayo sobre la religiosidad popular dominicana.

1)- Es aquel que estudia la parte del conocimiento que se origina


en el pensamiento y, sin ser especulativo abarca la parte más
amplia, pues estudia todo el producto mental incluyendo la vida
religiosa, creencias, actividad del alma humana, etc.
Ejemplos: Oraciones, Supersticiones, Creencias, Mitos, Ensalmo,
etc

2) La religiosidad popular dominicana sumerge sus raíces en las


costumbres y creencias transmitida desde la antigüedad por
nuestros antepasados: nuestros aborígenes taínos, que con sus
ritos, areítos y adoraciones a dioses o cemíes, como les llamaban
a sus ídolos, buscaban una forma de limpiar el alma y llegar al más
allá, después de la muerte, a través de la adoración a varios
dioses, identificándose para esta época como politeístas.

Luego con la llegada de los españoles a la isla, el 12 de Octubre


del año 1492 y la evangelización de América, la religión indígena
empieza a tomar otro rumbo: se construyen iglesias, capillas,
ermitas y catedrales en todas las ciudades importantes de la
época en La Española, entre estos símbolos religiosos tenemos: la
Capilla de la Orden de los Dominicos (1520), la Catedral Primada
de América (1523), la Ermita de San Antón, la Iglesia de San Carlos
de Tenerife, la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen, la Basílica
de Higûey, la Basílica de San Pedro Apóstol, en San Pedro de
Macorís, etc.
El Comercio Triangular entre Europa, África y América trajo
consigo una gran cantidad importante de esclavos negros
africanos, trabajadores en las plantaciones azucareras, dando
como resultado una religiosidad cargada de matices de origen
africanos, excluyendo las costumbres aborígenes hasta el punto
de llegar a exterminarla casi por completa.
La mezcla de españoles y esclavos africanos en los ámbitos
sociales nuestros, trajo inesperados cambios de costumbres y
creencias, hasta el punto de llegar a sincretizar las creencias
religiosas al ritmo del tambor africano y las salves marías
españolas, todo esto en vivas escenas cargadas de ritmos
contagiosos y misterios escalofriantes, como producto de tres
culturas entrelazadas que son: la desaparecida raza taína, la
colonizadora y esclavizante española y la esclava e impuesta por
los colonizadores, la negra africana.
Según Carlos Esteban Deive, el prolongado contacto de los
esclavos trasplantados al Nuevo Mundo y en especial a La
Española, con la cultura europea ha dado como resultado en el
campo de la religión, la formación de sistemas de creencias
sincréticos, donde se trata de conciliar doctrinas distintas. Un
ejemplo típico actualmente de culto sincrético lo podemos ver
presente en el vudú y el ga-gá, practicados en casi todas las zonas
rurales y en algunos barrios de las ciudades del país, donde se
mezclan divinidades y ritmos africanos con ceremonias y
doctrinas católicas.
Para nuestro trabajo por una parte nos hemos servidos de fuentes
muy conocidas: las celebraciones de la fiestas de la Cofradía del
Espíritu Santo de Villa Mella, junto a las ceremonias funerarias
(Noveno Días, Cabo de Año y Banco) de los difuntos ligados a la
tradiciones de los Congos, procedentes de Cabo Verde, San José y
Guinea (África) a los cuales le dedican veintiún toques con sus
instrumentos característicos: Congo, Conguito, Maracas y Canoíta,
con estos instrumentos invocan a Kalunga deidad del mar y de la
muerte, como lo hacían sus antepasados procedentes de África;
las celebraciones de la “Santísima Cruz de Mayo”, la Cofradía
Nuestra Señora del Rosario, de Doña Mencía; el Santo Cristo de
Baya guana; la Virgen de la Altagracia; la Virgen de las Mercedes;
Belié Belcán; Ana Isa Pié Dentó; San Juan Bautista, San Elías
(Barón del Cementerio), etc.
La Cofradía del Espíritu Santo de Villa Mella, donde se mezclan el
catolicismo español y las cofradías de los negros africanos del
Congo (África), transplantada de generación en generación a sus
descendientes (Sixto Minier, último descendiente), se conjugan
acciones religiosas populares.
En el Cabo de Año solo bailan los allegados del difunto, pero no
sus familiares, es el viaje por eterno retorno de los paisajes
africano. Luego viene el Banko, donde bailan los familiares y se
echa el luto a un lado.
Estos veintiún toques van acompañados por salves marías
procedentes de las iglesias del Espíritu Santo, celebradas en Villa
Mella el 21 de Mayo. La Iglesia Católica celebra la fiesta de
Pentecostés. Estas se unen a las de San Juan Bautista y datan
desde inicio de la colonia Española. Tienen un significado especial
en Villa Mella y sus alrededores, y La Virgen del Rosario, abogada
de los marineros, cuya ermita existió desde 1544, situada al lado
de Molinos Dominicanos, de procedencia católica, donde se
sincretiza nuestra religión popular. Estas celebraciones se llevan a
cabo el 18 de Junio, conjuntamente con las patronales de Villa
Mella. En los altares o capillas donde llevan a cabo sus
celebraciones se pueden observar los donativos a imágenes
religiosas o cofradías, llenas de coloridos y ofrendas, que van
desde dinero, comidas, bebidas y golosinas. En la comunidad de
Villa Mella se celebra también el día de la “Dodorita”, que se llevan
a cabo el 14 de Abril, festividad celebra en la comunidad conocida
como Los Morenos.

En un recorrido por la zona rural se pueden observar polvorientos


hogares techados de madera y zinc, con una Cruz al frente, como
símbolo de la “Santísima Cruz de Mayo”, que se celebra los días 2
y 3 de Mayo en todo el país, donde se adora la Cruz a nivel popular,
forma de representar los más altos relieves religiosos de nuestros
antepasados, esto es si prefiere pasar de reojo, pero si usted se
introduce de manera improvisa en dichos hogares verá que no
faltará alabanzas y adoraciones a ciertas imágenes como la Virgen
de la Altagracia, San Miguel y el Espíritu Santo.
Las fiestas de la “Santísima Cruz de Mayo”, celebrada en
Matagorda y Cañafistol y La Sarandunga banileja, celebrada en la
provincia Peravia (Baní), donde se mezclan los símbolos, la
música, el canto, los santos, los luaces y misterios. Se pueden
observar las tradicionales fiestas con alusión a San Juan Bautista
y la Virgen de la Altagracia, donde participan los sectores
populares y de descendencia ancestral de negros africanos. La
Sarandunga, fiesta principal de la “Santísima Cruz de Mayo”,
celebrada desde los tiempos coloniales, se originan en hallazgo de
la cruz de Cristo por parte de Santa Helena, madre del Emperador
Constantino. En el país se adornan las cruces a calvarios, se
construyen altares y se hacen procesiones, al son de los palos y
salves.

En la cultura española el Espíritu Santo era imagen conocida y ha


mediado del siglo XVI, ya se le brindaban ofrendas religiosas en la
ermita de Doña Mencía, junto a la Cofradía de Nuestra Señora del
Rosario, donde jugaban un papel importante para la sociedad en la
época por sus aportes, con ayudas de socorros mutuos a sus
cofrades, donde tenían por objeto financiar los gastos ocasionados
por las muertes de sus miembros, tal como se ha venido haciendo
en la Cofradía del Espíritu Santo de Villa Mella, este tipo de
asociaciones ha venido desde la colonización hasta nuestros
tiempos, como una forma de incentivar a las congregaciones
religiosas populares.

En el interior de la Catedral Primada de América se pueden


observar algunas bóvedas o sepulturas de personajes importantes
religiosos o que de algún modo merecen honores especiales, esto
se debe a la influyente religiosidad española de la época, donde se
hacían enterramientos a personajes que merecían estos principios
básicos del catolicismo
Las fiestas patronales de cada pueblo, llevada a cabo en todo el
país es una herencia española, fueron fiestas fundamentalmente
religiosas y después se le introdujeron algunos conceptos
folklóricos. Estos carnavales se caracterizan por su diversidad
cultural y sus coloridos, pero identificados como un sello nuestro.
De igual manera tenemos las celebraciones del Santo Cristo de
Baya guana con toros-ofrendas y corridas de caballos, celebradas
el 28 de diciembre y el 1 de enero.
En el año 1740, el arzobispo Pantaleón Álvarez de Abreu, dice en su
“Compendiosa noticia de la isla de Santo Domingo”, que existe una
imagen muy representativa en la comunidad de Bayaguana, y el
titular es San Juan Bautista. Según Dagoberto Tejeda, la procesión
a la imagen del Cristo de los Milagros como comúnmente se
denomina, es una lucha entre una modernización y una
permanencia de las tradiciones religiosas y culturales nuestras,
llevadas a cabo por los lugareños. Tejeda afirma que la religiosidad
popular es el gran espacio de espiritualidad dominicana
simbolizada a través de la creatividad, el vigor, la energía,
amparada en la generación de dos razas: la española y la esclava
negra africana.
Desde el 29 de septiembre de 1970, se celebran en todo el país las
fiestas en honor a San Miguel Arcángel (Belié Belcán), jefe de la
división Radá, el más apreciado de los luaces a nivel nacional. Sus
colores son verdes y rojos. Sus creyentes se visten de colores
espléndidos o encendidos de los pies a la cabeza, principalmente
de rojo y verde. Su boca se caracteriza por un cigarro encendido
de tabaco o anduyo, acompañado de una botella de ron, estas
personas llevan por sobre nombre de “luaces”.

A su alrededor se observan imágenes de San Miguel y velas de


distintos colores, como amarillo, rojo y verde y una campana
casera en su mano derecha, dando toques que solo ellos
comprenden su significados. Su procesión es un vistoso escenario
calgado de banderas de coloriros encendidos, acompañado de
tambores, palos, güiras, maracas, cigarros, ron, que se desliza por
toda la zona del Mercado Nuevo hasta la Iglesia de San Miguel,
ubicada en la Zona Colonial de Santo Domingo, también se
celebran en otros lugares de la República Dominicana. Según
Tejeda los luaces son energías vitales, trabajan con los cuatros
elementos de la naturaleza: tierra, fuego, aire y agua.

El 26 de Julio se celebra el día de Ana Isa Pié Dentó (Santa Ana),


reina de la provocación, del amor, símbolo de la liberación
femenina, amante de los perfumes, y la cervezas, su color favorito
es el amarillo, según se dice es la mujer de Belié Belcán (San
Miguel). Para los creyentes dominicanos significa amor, por lo
general sus creyentes son mujeres, denominadas “mestresas”. Y
en sus celebraciones pueden ser poseídas por éstas hasta llegar a
hablar como que si estuviera dentro de aquella mujer. Sus colores
favoritos son: amarillo, y los colores brillantes, además usan varias
prendas que van desde pulsas, cadenas, guillos, aretes, brazaletes,
que sobresalen de lo normal. Sus vestidos por lo general son
faldas muy largas, blusas, y un pañuelo amarrado a la cabeza,
adornados por fuertes maquillajes de vistosos colores.Luego se
embriaga de perfumes muy fuertes, desde los pies a cabeza, le
gustan las bebidas alcohólicas, como cervezas, ron, vinos, etc. De
su boca se deja salir gran bocanada de humo por aquel enorme
tabaco que sostiene con sus labios sin ponerle las manos, hasta
gastarlo por completo y sin molestarle aquella acción, que a
cualquier humano deja sorprendido.
Estas celebraciones van acompaña de bailes especiales, en todo
el recorrido de la zona donde se llevan a cabo, al ritmo del tambor
africano y las salves marías españolas, cantadas a una sola voz y
con una perfección inigualable, solo comprendidas por las
personas devotas.
Tejeda dice que las causas que hacen la religiosidad popular
fueron las respuestas para las sobrevivencias, las persecuciones,
las discriminaciones y que a estas causas le ha dado el nombre de
vodú dominicano, la cual abarca otras manifestaciones
espirituales. Donde el vodú es una estrecha relación entre lo
humano y lo sobrehumano, los vivos y los muertos, exclamaciones
a misterios y ofrendas a imágenes. Tenemos varias divisiones del
vodú dominicano: la división Legba, la división Guedé, la división
Radá, la división Ogún, la división India y la división Petró. Sus
ritmos musicales son los palos y la salve, donde se usan los
pañuelos, cuyos colores son los que dan origen a los luases y
misterios.

El culto a la Virgen tiene dos manifestaciones que son


interesantes en la religiosidad popular dominicana, que son el 21
de Enero que se celebra el día de Nuestra Señora de la Altagracia,
Madre del Pueblo Dominicano, cuya representación se lleva a cabo
en Higuey, ciudad fundada por los españoles en 1505. La
peregrinación es la parte más significativa, el cual se lleva a cabo
desde el pueblo de origen del creyente hasta la Basílica, situada
en la ciudad de Higuey o La Altagracia y el 24 de Septiembre se
celebra el día de la Virgen de las Mercedes, llevada a cabo en La
Vega, con procesión hasta el Santo Cerro y en el Distrito Nacional.
Los Movimientos Mesiánicos han jugado un papel importante en
nuestro país, principalmente en la Región Sur, los cuales surgen
por descontentos y calamidades sufridas por sus creyentes, en
espera de la fiel llegada de un Mesías que le ayude a salir de sus
precarias situaciones y al mismo tiempo lo guiará por un nuevo
camino hasta llegar a un paraíso lleno de impurezas y vivirán feliz
por siempre. En San Juan de la Maguana, tenemos como
representante a Liborio Mateo médico curandero, el cual Carlos
Esteban Deive identifica como “profesional de la magia”, por sus
aportes a la medicina natural, como remedios, tomos(bebidas),
ensalmos, baños, etc., el cual se sublevó en el año 1922, en la
comunidad de Maguana Arriba y la Loma El Naranjal, donde se
encuentra el Santuario “La Agüita de Liborio”, luego le siguió
Palma Sola, que su lucha sobrevivió hasta el 1962. Y por último
aparece Bibiana de la Rosa, en Mana, Yaguate, comunidad situada
entre San Cristóbal y Baní.
Somos un pueblo eminentemente católico y hasta ortodoxo si se
quiere, pero hay algo que nos identifica y no podemos ocultar tan
fácil, tenemos ejemplos vivos en la Cofradía del Espíritu Santo de
Villa Mella, donde se conjugan costumbres religiosas provenientes
de las junglas africanas (vudú) y la evangelización española
(catolicismo).
Existe lo que Antonio Gramsci identifica como “una religión del
pueblo” y “una moral del pueblo”, en su magistral obra “Cultura y
Literatura”, Pág. 330,331. Según Gramsci en el tiempo y en el
espacio se producen costumbres morales estrechamente ligadas a
supersticiones y creencias religiosas muy diferentes a la religión
de los intelectuales, especialmente en los países católicos y
ortodoxos.

La religiosidad popular fruto de la mezcla de los taínos, los


colonizadores españoles y el trajín de negros africanos nos han
transmitido de generación en generación símbolos religiosos que
desde el hogar, iglesias, parroquias, santuarios, ermitas y
conventos dominicanos han permanecidos en nuestra cultura por
siglos. Desde los campos más apartados hasta las ciudades mas
encumbradas, se observa la religiosidad engendrada, nacida,
amparada por el espíritu, la piedad y la devoción de culturas que
han dejado marcado nuestro pueblo por siglos.

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