Está en la página 1de 16

emergencias 2000;12:192-207

Revisión

Alteraciones de la termorregulación
E. Lizarralde Palacios, A. Gutiérrez Macías, M. Martínez Ortiz de Zárate
SERVICIO DE URGENCIAS Y MEDICINA INTERNA. HOSPITAL DE BASURTO. BILBAO

RESUMEN ABSTRACT

a temperatura corporal se mantiene en unos márge- Disorders of thermoregulation


L nes muy estrechos, regulada por una serie de meca-
nismos complejos coordinados en el hipotálamo ante- ody temperature is maintained between very narrow
rior. Las alteraciones de la termorregulación engloban una
serie de entidades en cuya sintomatología destaca la alte-
ración de la temperatura corporal, sin que existan trastor-
B margins, and is regulated by several complex me-
chanisms, coordinated in the anterior hypothalamus.
Disorders of thermoregulation include a series of entities,
nos de los mecanismos de termorregulación. En la hipoter- clinically chracterized by alterations of body temperature,
mia accidental existe un descenso de la temperatura del without disorder in the thermoregulation mechanisms. In
organismo por debajo de los 35°C, generalmente asociada accidental hypothermia, there is a decrease of body tem-
a la exposición a temperaturas ambientales bajas. En la hi- perature below 35ºC, generally associated to exposition to
pertermia se produce un aumento de la temperatura, bien low environmental temperatures. in hperthermia, we find
por aumento de la producción de calor o bien por una alte- high body temperature, due to an increase of heat produc-
ración en la eliminación del mismo. Los síndromes de ma- tion or an alteration in its elimination. The most relevant
yor trascendencia clínica son los trastornos por exposi- clinical syndromes are heat-related illnesses, malignant
ción al calor, hipertermia maligna, síndrome neuroléptico hyperthermia, neuroleptic malignant syndrome and seroto-
maligno y síndrome serotoninérgico. Se revisan la fisiopa- nin syndrome. The pathophysiology, clinical manifesta-
tología, manifestaciones clínicas y tratamiento de estas en- tions, and treatment of these entities, that should be re-
tidades, que deben diagnosticarse y tratarse en los servi- cognized and treated in Emergency Services, are
cios de urgencias. discussed.

Palabras Clave: Hipotermia accidental. Golpe de calor. Key Words: Accidental hypothermia. Heat stroke. Malignant
Hipertermia maligna. Síndrome neuroléptico maligno. Síndrome hyperthermia. Neuroleptic malignant syndrome. Serotonin
serotoninérgico. syndrome.

REGULACIÓN DE LA TEMPERATURA control térmico se encuentra en grupos neuronales del núcleo


CORPORAL preóptico del hipotálamo anterior, que reciben información de
los receptores térmicos cutáneos, de los situados en grandes
La temperatura corporal es la resultante de un balance en- vasos, vísceras abdominales y médula espinal, y de la sangre
tre la producción y la eliminación de calor. El ser humano, que perfunde el hipotálamo. Cuando aumenta la temperatura
como otros animales homeotérmicos, es capaz de mantener su central, el centro termorregulador activa fibras eferentes del
temperatura en unos márgenes muy estrechos, independiente- sistema nervioso autonómico que aumentan la pérdida de ca-
mente de los cambios ambientales. El centro encargado del lor al producir vasodilatación cutánea (convección) y aumento

Correspondencia: Dr. A. Gutiérrez Macías. Servicio de Urgencias. Fecha de recepción: 24-2-2000


Hospital de Basurto. Avenida de Montevideo, 18. 48013 Bilbao. Fecha de aceptación: 3-5-2000
E-mail: alguma@teleline.es

192
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

de la sudoración (evaporación). Por el contrario, el hipotálamo TABLA 1. Causas de hipertermia


reacciona ante los descensos de temperatura disminuyendo la
pérdida de calor mediante vasoconstricción cutánea y dismi- Por producción excesiva de calor
nución de la producción de sudor; además, puede incrementar • Hipertermia por ejercicio
la producción de calor intensificando la actividad muscular • Golpe de calor activo
(aumento del tono y/o escalofríos). El hipotálamo envía otras • Hipertermia maligna
señales a la corteza cerebral, que ponen en marcha respuestas
• Síndrome neuroléptico maligno
conductuales complejas1,2.
• Síndrome serotoninérgico
La fiebre se define como una temperatura axilar superior
a 38 °C o rectal superior a 38,8 °C. Es una respuesta comple- • Catatonía letal
ja e inespecífica mediada por mecanismos neuroendocrinos, • Hipertiroidismo
inmunológicos, autonómicos y conductuales, que representa • Feocromocitoma
un reajuste al alza del centro termorregulador. Se diferencia • Intoxicación por salicilatos
de la hipertermia en que ésta se debe a un desequilibrio entre
• Deprivación alcohólica grave
producción y eliminación de calor por un aumento de la pri-
• Estatus epiléptico
mera o una disminución de la segunda. A este punto puede
llegarse por aumento del metabolismo, excesivo calor ambien- • Tétanos

tal o alteraciones de los mecanismos de disipación del calor


(tabla 1)3; en cualquiera de estas circunstancias, el termostato Por disminución de la eliminación de calor
hipotalámico está correctamente ajustado. A pesar de las dife- • Golpe de calor pasivo
rencias en su fisiopatología la presentación clínica de la fiebre • Vestimenta inadecuada (excesiva)
y la hipertermia es similar. La hipotermia representa una si-
• Deshidratación
tuación en la que el organismo no es capaz de producir una
• Disfunción autonómica
cantidad de calor suficiente para mantener las funciones fisio-
lógicas, generalmente en el contexto de exposición a tempera- • Anticolinérgicos
turas ambientales bajas4.
En este trabajo vamos a revisar algunas entidades en cuya Alteraciones de la función hipotalámica
sintomatología destaca la alteración de la temperatura corpo- • Síndrome neuroléptico maligno
ral, encuadradas tanto en la hipotermia (hipotermia acciden-
• Enfermedad vascular cerebral
tal), como en la hipertermia (trastornos por exposición al ca-
• Encefalitis
lor, hipertermia maligna, síndrome neuroléptico maligno y
síndrome serotoninérgico). • Sarcoidosis y enfermedades granulomatosas
• Traumatismos

DISMINUCIÓN DE LA TEMPERATURA
CORPORAL. HIPOTERMIA ACCIDENTAL hipotermia leve a la que cursa con temperatura entre 32-35 °C,
moderada entre 28 y 32 °C, y grave por debajo de 28 °C4,6. Se-
La hipotermia se define como un descenso de la tempera- gún la rapidez de la pérdida de calor puede clasificarse en agu-
tura central del organismo por debajo de los 35 °C. Se deno- da (menos de una hora), subaguda (varias horas) o gradual (en
mina accidental o primaria a la no intencionada, generalmente varios días o semanas)7,8. El pronóstico de la hipotermia acci-
en el contexto de exposición a temperaturas ambientales bajas dental depende de su intensidad, de las condiciones clínicas
y sin lesión de los centros termorreguladores4,5. La hipotermia del paciente y de la existencia de patología de base.
secundaria representa una complicación de otro trastorno sub-
yacente. Es un problema clínico potencialmente muy grave, A) Etiología de la hipotermia accidental
que requiere un diagnóstico temprano y un tratamiento agresi-
vo, ya que se han descrito casos de recuperación sin secuelas Pueden diferenciarse dos causas fundamentales de hipo-
con temperaturas corporales por debajo de 20 °C y tras perío- termia accidental que, con frecuencia, existen de forma si-
dos prolongados de asistolia. La clasificación más aceptada de multánea: 1) la pérdida excesiva de calor por exposición am-
la hipotermia se basa en la temperatura corporal; se denomina biental y 2) la producción insuficiente del mismo por
193
emergencias 2000;12:192-207

disminución del metabolismo, trastornos de la termorregula- en actividades lúdicas o deportivas o en personas con condi-
ción o inducida por fármacos. En la tabla 2 se detallan las ciones socio-sanitarias deficientes, en las que suelen concurrir
principales causas o factores que predisponen a la hipotermia otras circunstancias (edad avanzada, etilismo, malnutri-
accidental9. ción, etc.)6. En países cálidos, la causa más frecuente es la in-
La exposición al frío sucede en personas previamente sa- mersión en agua fría, mientras que en el medio urbano del
nas expuestas a temperaturas bajas sin preparación adecuada, mundo occidental es más habitual la asociada a circunstancias
sociales desfavorables. La piel es la fuente más importante de
pérdida de calor; el principal mecanismo en ambientes secos
TABLA 2. Causas y factores predisponentes
es la radiación; la conducción, convección, respiración y eva-
de hipotermia accidental
poración son menos importantes. En la inmersión en agua fría
Pérdida excesiva de calor el más importante es la conducción10.
Exposición al frio
Accidentes deportivos B) Fisiopatología de la hipotermia
Inmersión en agua fría
Condiciones de vida deficientes La hipotermia produce un amplio abanico de alteraciones
Aumento de riego sanguíneo cutáneo fisiológicas nocivas que se resumen en la tabla 3. En térmi-
Psoriasis nos generales, el efecto neto es un enlentecimiento y depre-
Quemaduras sión progresivos de las funciones vitales, que conduce a un
Vasodilatación inducida por fármacos colapso circulatorio con hipoxia tisular, acidosis láctica, insu-
ficiencia renal y hepática, alteraciones de la coagulación y
Producción insuficiente de calor del nivel de conciencia, secuestro de líquidos y deshidrata-
Disminución del metabolismo ción6.
Edad avanzada
Malnutrición C) Manifestaciones clínicas
Hipotiroidismo
Hipoglucemia
Las manifestaciones clínicas de la hipotermia se resumen
Inmovilidad
en la tabla 4. El diagnóstico de hipotermia se establece mi-
Coma de cualquier etiología
diendo la temperatura central, esofágica o rectal; se precisan
Insuficiencia suprarrenal
termómetros no convencionales que registren temperaturas in-
Insuficiencia hepática
feriores a 34 °C. En la historia clínica es importante recoger
Alteraciones de la termorregulación
el consumo de alcohol o fármacos, las condiciones ambienta-
Lesiones congénitas o adquiridas del hipotálamo
les y las enfermedades concomitantes4.
Lesiones medulares
Las manifestaciones electrocardiográficas dependen de la
Sepsis
Insuficiencia renal
temperatura corporal; inicialmente se produce una bradicardia,
Fármacos
que depende de la disminución de la despolarización espontá-
Etanol nea de las células de Purkinje y que no responde a atropina.
Fenotiacinas Otras alteraciones que pueden observarse son fibrilación auri-
Barbitúricos cular, flutter auricular, extrasístoles ventriculares, inversión de
Opiáceos la onda T y prolongación de los intervalos PR y ST. La fibri-
Litio lación ventricular suele ocurrir con temperaturas menores de
Clonidina 28 °C. En un tercio de los pacientes aparece una onda J (onda
Benzodiacepinas de Osborne), que es una deflexión positiva al final del com-
Antidepresivos tricíclicos plejo QRS4.
Reserpina
Organofosforados D) Tratamiento de la hipotermia
Atropina
Anestésicos generales Una de las tareas más complicadas ante un paciente con
Relajantes musculares hipotermia grave es certificar su muerte, ya que los signos de
muerte en el paciente normotérmico no tienen utilidad en esta
194
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

TABLA 3. Efectos fisiológicos de la hipotermia

Órgano o sistema Efectos

Sistema inmune • Posible disminución de la quimiotaxis, fagocitosis y producción de anticuerpos


Hematológicos • Hemoconcentración
• Granulocitopenia
• Coagulación intravascular diseminada
• Aumento de la viscosidad de la sangre
Cardíacos • Disminución del gasto cardíaco
• Disminución de la contractilidad
• Alteraciones del ritmo cardíaco
• Disminución de la conducción (prolongación de los intervalos del ECG), onda J de Osborne
• Vasoconstricción
Respiratorios • Falsa elevación de la PaO2 (si no se corrige con la temperatura)
• Disminución de la frecuencia respiratoria
• Alteraciones de la relación ventilación-perfusión
• Broncorrea
Renales • Disminución de la función del túbulo renal
Digestivos • Elevación de las concentraciones de amilasa sérica
• Disminución de la motilidad intestinal
• Disminución de la función hepática
Metabólicos • Falso descenso del pH (si no se corrige con la temperatura)
• Disminución de la actividad de las suprarrenales
• Disminución del metabolismo del lactato y citrato
• Hiperpotasemia
Neurológicos • Disminución del nivel de conciencia
• Disminución o ausencia de actividad motora voluntaria y refleja

circunstancia. En términos generales, ningún enfermo en si- cardíacas por el riesgo de inducir alteraciones graves del rit-
tuación de hipotermia debe considerarse muerto hasta no ha- mo; por este motivo no se recomienda el uso de catéteres de
ber sido recalentado11. El tratamiento de la hipotermia se resu- Swan-Ganz 8.
me en la figura 1; puede dividirse en una serie de medidas • Movilización cuidadosa (por el riesgo de desencadenar
generales y en técnicas específicas de recalentamiento. fibrilación ventricular)6.
• Tratamiento de las alteraciones del ritmo cardíaco. Las
Medidas generales arritmias auriculares habitualmente no precisan tratamiento ya
• Mantenimiento del volumen intravascular, utilizando so- que desaparecen con el recalentamiento. La lidocaína y la
luciones isotónicas. desfibrilación suelen ser ineficaces en la hipotermia. El breti-
• Control de la vía aérea. lio es el fármaco de elección en el tratamiento de las arritmias
• Prevención de pérdida adicional de calor. ventriculares; muchos autores recomiendan su uso profiláctico
• Monitorización electrocardiográfica, de presión arterial con temperaturas inferiores a 30 °C y en presencia de extra-
y temperatura central. La monitorización de la presión venosa sístoles ventriculares frecuentes8.
central puede ser útil para guiar la reposición de líquidos. De- • Profilaxis de infecciones con antibioterapia de amplio
be evitarse que la punta del catéter penetre en las cavidades espectro en neonatos, ancianos e inmunodeprimidos.

195
emergencias 2000;12:192-207

TABLA 4. Manifestaciones clínicas de la hipotermia

Grado de hipotermia Manifestaciones clínicas

Hipotermia leve (grado I) • Escalofríos


(32-35 °C) • Vasoconstricción cutánea
• Aumento de la presión arterial
• Aumento de la frecuencia cardíaca
• Poliuria
• Confusión o delirio
• Disartria
Hipotermia moderada (grado II) • Temblor fino
(28-32 °C) • Rigidez muscular
• Estupor progresivo
• Hiporreflexia
• Descenso de la presión arterial
• Descenso de la frecuencia cardíaca, existe riesgo de alteraciones graves del
ritmo cardíaco por debajo de los 30 °C
• Descenso de la frecuencia respiratoria
Hipotermia grave (grado III) • Poiquilotermia
(menos de 28 °C) • Coma profundo
• Presión arterial indetectable
• Bradicardia extrema
• Fibrilación ventricular
• Arreflexia
• Miosis o midriasis

Métodos de recalentamiento (tabla 5) contexto de una reducción del volumen intravascular) y au-
La elección del procedimiento se basa en el grado de hi- mento de la pérdida de calor con disminución de la tempera-
potermia y en la situación hemodinámica del paciente. En los tura corporal (“afterdrop”). El método más rápido de este gru-
casos de hipotermia leve, la capacidad de producción de calor po es la inmersión en agua caliente, que no puede utilizarse
y los mecanismos de compensación se encuentran intactos; en pacientes graves, que precisan monitorización, maniobras
por lo tanto, las medidas de recalentamiento pasivo externo de resucitación, etc.8,11.
suelen ser suficientes, siempre que exista estabilidad hemodi- • Recalentamiento activo interno:
námica9. En los casos de hipotermia grave, los mecanismos de — Calentamiento de la vía respiratoria: aplicando oxígeno
compensación claudican, conduciendo a una situación de poi- humidificado a 42° C, con mascarilla o intubación orotraqueal.
quilotermia; en estas situaciones se precisan técnicas de reca- Consigue una elevación de temperatura de 1-2 °C a la hora13.
lentamiento activo12. — Sueros isotónicos calentados. Debe evitarse la admi-
• Recalentamiento pasivo externo: retirada de ropas hú- nistración de soluciones con lactato, por la existencia de una
medas, cubrir al paciente con sábanas o mantas en un ambien- alteración de su metabolismo en la hipotermia13.
te templado. — Lavado gástrico, mediastínico, de colon, vejiga, pleu-
• Recalentamiento activo externo: aplicación directa de ral o peritoneal con líquidos calentados. El más eficaz parece
fuente de calor sobre la superficie externa corporal. Existe el ser el lavado pleural; para realizarlo, se colocan en el hemitó-
riesgo de producir vasodilatación periférica con disminución rax derecho dos tubos torácicos (tercer espacio intercostal, lí-
del flujo sanguíneo a los órganos internos (sobre todo en el nea medioclavicular y sexto espacio intercostal, línea medioa-
196
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

Figura 1. Algoritmo de tratamiento de la hipotermia.

197
emergencias 2000;12:192-207

TABLA 5. Métodos de recalentamiento en pacientes con hipotermia

Tipo de recalentamiento Método Velocidad de


recalentamiento

Externo pasivo • Entorno cálido 0,5-2 °C/hora


• Mantas
Externo activo • Inmersión en agua caliente 1-9,5 °C/hora
• Mantas eléctricas
• Calefactores ambientales
• Objetos calentados
Interno activo • Lavado gástrico, pleural o peritoneal con líquidos 1-2 °C/hora
isotónicos calientes
• Administración de líquidos isotónicos recalentados por
vía intravenosa
• Inhalación de oxígeno templado
Calentamiento • Hemodiálisis Hasta 10-12 °C/hora
extracorpóreo • By-pass cardiopulmonar convencional
• Calentamiento extracorpóreo con shunt arterio-venoso
femoral
• Calentamiento extracorpóreo con shunt veno-venoso

xilar); posteriormente se introduce suero salino a 41-42 °C tores de la población susceptibles a los efectos del calor, bien
por el tubo anterior a un ritmo de 2 L/minuto y se deja drenar por realizar actividades físicas intensas en circunstancias am-
por gravedad por el tubo posterior5. bientales adversas, o bien por presentar alguno de los factores
— Shunt extracorpóreo (hemodiálisis, arteriovenoso o predisponentes a los trastornos por calor (tabla 6)16,17.
venovenoso) o by-pass cardiopulmonar. Son las técnicas de re- El denominador común en los trastornos por calor es la
calentamiento más eficaces, aunque su complejidad es mucho exposición a temperaturas ambientales extremas, que dificultan
mayor. Están contraindicadas en pacientes en parada cardíaca la disipación de calor por radiación y convección; además, la
con temperatura por encima de 32 °C, en presencia de lesiones elevación de la humedad relativa interrumpe la disipación por
traumáticas graves y con niveles de potasio sérico superiores a evaporación. En estas circunstancias, cualquier trastorno sub-
10 mEq/L11,14. El bypass cardiopulmonar se considera la técni- yacente que produzca un aumento de la temperatura corporal,
ca de elección en el enfermo con hipotermia grave o moderada afecte al intercambio de calor o altere los mecanismos de com-
con inestabilidad hemodinámica o parada cardíaca14. El shunt pensación, puede hacer que los mecanismos de enfriamiento se
femoro-femoral es, probablemente, el método más adecuado, vean superados, conduciendo a las lesiones por calor5,18.
dado que es más sencillo de realizar, no interfiere con las ma-
niobras de resucitación y no precisa de toracotomía12. Síndromes menores por exposición al calor
Existen una serie de síndromes por exposición al calor en
los que, en general, los mecanismos de regulación de la tem-
AUMENTO DE LA TEMPERATURA CORPORAL peratura corporal permanecen intactos. Los síntomas son la
consecuencia de los mecanismos utilizados para disipar el ex-
A) Trastornos por exposición al calor ceso de calor16,19.

La patología asociada a la exposición a temperaturas am- • Edemas por calor


bientales elevadas es relativamente frecuente en nuestro me- Son edemas con fóvea de extremidades que aparecen tras
dio, sobre todo en los meses de verano15. Existen amplios sec- exposición al calor, desaparecen tras la aclimatación y mejo-
198
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

TABLA 6. Factores predisponentes de los trastornos por calor

Por aumento de la producción de calor


• Actividad física intensa
• Fiebre. Infecciones
• Convulsiones
• Enfermedad de Parkinson
• Feocromocitoma
• Hipertiroidismo
• Afectación del sistema nervioso cental

Por alteración en la eliminación de calor


• Obesidad
• Consumo de alcohol
• Trastornos dermatológicos o neurológicos que alteren la sudoración
• Enfermedades sistémicas que alteren la vasodilatación cutánea o los mecanismos de sudoración (diabetes,
cardiopatías, obstrucción crónica al flujo aéreo, insuficiencia renal crónica, etc.)
• Ingesta hídrica insuficiente
• Falta de aclimatación al calor
• Fármacos que dificultan las respuestas de adaptación (diuréticos, betabloqueantes, anticolinérgicos, fenotiazinas,
litio, anfetaminas, antiparkinsonianos, antidepresivos, antihistamínicos, narcóticos, etc.)

ran con medidas posturales. Están causados por vasodilatación tiempo prolongados; en estas circunstancias existe un desvío
periférica y dificultad en el retorno venoso18,20. de sangre a la periferia para aumentar la pérdida de calor, así
como una dificultad en el retorno venoso que producen un
• Tetania por calor compromiso momentáneo del gasto cardíaco, de la presión ar-
Puede ocurrir en el contexto del agotamiento por calor o terial y de la perfusión cerebral. El tratamiento se realiza con
del golpe de calor (GC), o bien en pacientes que no presentan medidas posturales y administración de líquidos orales y, en
otra sintomatología. Está causada por la hiperventilación que, casos más graves, intravenosos19,20.
ocasionalmente, aparece durante la exposición al calor. Cursa
con parestesias, espasmo carpopedal, tetania y alcalosis respi- • Agotamiento por calor
ratoria. No requiere ningún tratamiento específico, excepto Es un cuadro intermedio entre los anteriores y el GC, lo
modificar las condiciones térmicas ambientales19. que refleja el solapamiento clínico existente entre estos síndro-
mes. En estos enfermos los mecanismos de enfriamiento son
• Calambres por calor aún eficaces. Clínicamente la elevación de la temperatura y la
Son calambres musculares asociados a la realización de deshidratación son similares al GC; sin embargo, no existen
ejercicio físico intenso, con sudoración profusa, en un entorno síntomas de afectación del sistema nervioso central. Pueden
cálido. Suceden durante el ejercicio o después de éste. Se deben aparecer cefalea, astenia intensa, vómitos, sudoración, taqui-
a la pérdida excesiva de sal y su tratamiento se realiza con re- cardia, taquipnea, hipotensión ortostática y elevación de la
posición de líquidos y electrolitos por vía oral o intravenosa16,18. temperatura. El tratamiento incluye ubicación en un entorno
templado y reposición hidroelectrolítica oral o intravenosa16,18,19.
• Síncope por calor
Representa una forma clínica peculiar de hipotensión or- Golpe de calor
tostática. Ocurre en personas expuestas a temperaturas eleva- Es el cuadro menos frecuente y el más grave de los tras-
das y que se mantienen en posición erecta durante períodos de tornos por calor. Se pueden establecer dos grupos de pobla-
199
emergencias 2000;12:192-207

ción susceptibles, que son, por una parte, individuos jóvenes 1. Disminución de la temperatura corporal
sometidos a ejercicio físico intenso y, por otra, personas con El objetivo fundamental del tratamiento es disminuir la
antecedentes clínicos predisponentes o factores favorecedores, temperatura corporal con la mayor brevedad posible, ya que la
que pueden agruparse en trastornos que aumentan la produc- duración de la hipertermia se relaciona directamente con la
ción de calor o que alteran la eliminación del mismo (tabla mortalidad26. Conviene recordar que en este contexto las me-
6)17,19. Tradicionalmente, se suele clasificar el GC en activo, didas antitérmicas farmacológicas no son útiles22. Los métodos
cuando se debe a un aumento de la producción de calor, y en más utilizados para el enfriamiento son:
clásico o pasivo, cuando se debe a la dificultad en la disipa- • Lavado continuo con compresas de agua fría.
ción del calor exógeno. En ambos casos, existen evidencias de • Inmersión en agua fría (15-16 °C). La inmersión en
que las manifestaciones clínicas y las complicaciones derivan agua a temperatura inferior produce una vasoconstricción cutá-
de un estado de activación del endotelio vascular, mediado nea intensa que dificulta la disipación de calor; además, difi-
por la liberación masiva de citocinas21. culta las maniobras terapéuticas en los pacientes más graves19.
• Rociar al paciente con agua a 10-15 °C, aplicando si-
• Manifestaciones clínicas multáneamente corrientes de aire (por ejemplo con un ventila-
Las manifestaciones clínicas típicas del GC incluyen hi- dor) para aumentar la evaporación18.
pertermia extrema (> 41 °C), alteración del nivel de concien- • Lavado de cavidades con suero frío. El método más uti-
cia, que puede llegar al coma, y anhidrosis20,22. Son frecuen- lizado es el lavado peritoneal, que está indicado cuando fraca-
tes, sobre todo en el GC activo, las complicaciones tales san otros métodos de enfriamiento menos agresivos20.
como convulsiones, hipotensión, síndrome de distress respi-
ratorio del adulto, rabdomiolisis, insuficiencia renal aguda 2. Otras medidas terapéuticas
(generalmente multifactorial), alteraciones hidroelectrolíticas, La reposición hidroelectrolítica se realiza de forma agresi-
insuficiencia hepática aguda y coagulación intravascular di- va, utilizando soluciones de cristaloides y con un adecuado
seminada18,19,23. El diagnóstico del GC es clínico, y debe sos- control hemodinámico20. Se pueden usar en casos refractarios
pecharse en pacientes con las manifestaciones clínicas des- agentes inotrópicos; su necesidad es un factor de mal pronós-
critas en los que exista el antecedente de exposición a tico. Pueden utilizarse benzodiacepinas como anticonvulsivan-
temperaturas ambientales elevadas24. Las diferencias entre el tes o para el tratamiento de la agitación, y dantroleno si existe
GC clásico y el GC activo se recogen en la tabla 720,25. Hay rigidez muscular22,25.
que realizar diagnóstico diferencial con otras causas de hi-
pertermia (tabla 1). • Pronóstico
La mortalidad global del GC se sitúa en aproximadamente
• Tratamiento un 15-25%, y puede llegar al 80% en pacientes mayores de 50
El tratamiento del GC debe realizarse preferentemente en años; la mortalidad es menor en los centros con experiencia
una unidad de cuidados intensivos, debido a la gravedad del en el tratamiento de estos enfermos23. El principal determinan-
cuadro, el carácter invasivo de ciertas medidas diagnóstico-te- te del éxito del tratamiento es la duración e intensidad de la
rapéuticas y para la prevención y tratamiento de las posibles hipertermia, de modo que la mortalidad es inversamente pro-
complicaciones20. porcional a la premura con que se inicia el enfriamiento18,26.

TABLA 7. Diferencias entre golpe de calor (GC) clásico y activo

GC clásico o pasivo GC activo o de esfuerzo

Edad Ancianos Jóvenes


Situación previa Enfermedad crónica Sanos
Presentación Epidémico Esporádico
Pródromos 24-48 horas < 6 horas
Sudoración Ausente Profusa
Complicaciones Raras o leves Frecuentes y graves

200
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

Los signos de mal pronóstico se recogen en la tabla 8. casos se encuentra un defecto en el gen que la codifica;
por lo tanto, se supone que existen otras alteraciones en
• Prevención los sistemas de segundo mensajero aún por identificar29.
El GC es un proceso que puede prevenirse con una serie La fisiopatología de la HM no se conoce por com-
de medidas sencillas a adoptar ante la exposición a temperatu- pleto. Se sabe que la alteración primaria reside en el mús-
ras ambientales excesivas. Debe restringirse la actividad físi- culo esquelético, donde se produce una excesiva libera-
ca, mantener una ingesta adecuada de agua y sal y utilizar ro- ción de calcio en el retículo sarcoplásmico en respuesta a
pas que mantengan una adecuada aireación corporal27. los anestésicos. La elevación del calcio intracelular, y la
contracción muscular intensa y persistente resultante, tie-
B) Hipertermia maligna nen como consecuencias un estado hipermetabólico, con
aumento del consumo de oxígeno y de la producción de
La hipertermia maligna (HM) es una enfermedad muy ra- anhídrido carbónico, potenciación del metabolismo anae-
ra del músculo esquelético, que clínicamente se caracteriza robio, con aumento de la producción de lactato, y altera-
por rigidez muscular, hipertermia y rabdomiólisis, precipita- ción de la permeabilidad o lisis de la membrana celular
das por la exposición a anestésicos halogenados inhalados con liberación de potasio, creatinkinasa (CK) y mioglo-
(halotano, enfluorano, isofluorano) y relajantes musculares bina30,31.
despolarizantes (succinilcolina, decametonio). Si su diagnósti-
co y tratamiento se retrasan puede conducir a fracaso multior- Manifestaciones clínicas
gánico y muerte. Aparece en pacientes con susceptibilidad de- El síndrome aparece típicamente poco después de la
terminada genéticamente. Su incidencia es difícil de administración de los anestésicos, aunque puede existir
determinar, según los criterios diagnósticos utilizados, aunque una latencia de varias horas. Las características clínicas
se estima entre 1/15.000 y 1/50.000 de los pacientes someti- de la HM son elevación extrema de la temperatura corpo-
dos a anestesia28,29. ral, rigidez muscular, taquicardia, hipotensión, acidosis
láctica, hipoxemia, elevación de las concentraciones séri-
Bases genéticas y fisiopatología cas de CK y potasio, rabdomiolisis, coagulación intravas-
En los seres humanos la herencia de la susceptibili- cular diseminada y alteraciones del ritmo cardíaco32. La
dad a la HM se trasmite con un patrón autosómico domi- hipertermia es el signo clínico que define al síndrome,
nante con penetrancia y expresión variables, aunque se aunque su presentación es relativamente tardía y no es
han descrito casos esporádicos y patrón de herencia auto- constante. Aunque la HM sucede generalmente durante la
sómico recesivo. Actualmente se cree que el defecto anestesia, puede desencadenarse por el consumo de otros
genético principal se encuentra en el receptor de rianodi- fármacos, con el estrés o con el ejercicio físico31.
na (RYR1), que regula la liberación de calcio en el retí-
culo sarcoplásmico y se encuentra en el cromosoma 19. Diagnóstico de los individuos susceptibles y profilaxis
Aunque la función de la rianodina está alterada en los de la HM
pacientes susceptibles a la HM, en sólo un 10-15% de los Dado el carácter hereditario, la sospecha de la sus-
ceptibilidad se obtiene a través de una historia familiar de
TABLA 8. Signos de mal pronóstico accidentes anestésicos. El diagnóstico se establece con el
en el golpe del calor estudio de la contracción muscular ante concentraciones
variables de halotano y cafeína, que precisa la realización
• Retraso en el enfriamiento de una biopsia muscular y está disponible en centros muy
• Edad avanzada especializados29. Con frecuencia los individuos suscepti-
• Profundidad y duración del coma bles tienen una elevación basal de la CK, que traduce la
• Convulsiones existencia de enfermedades del músculo que pueden aso-
• Hipotensión ciarse a la HM. Actualmente se dispone de marcadores
para el diagnóstico de mutaciones del gen RYR 1. La
• Insuficiencia renal aguda
identificación de pacientes susceptibles implica la utiliza-
• Coagulación intravascular diseminada
ción de anestésicos seguros y la limpieza cuidadosa de
• Síndrome de distress respiratorio del adulto los equipos de anestesia, para eliminar restos de los
potencialmente desencadenantes. Algunos autores reco-
201
emergencias 2000;12:192-207

miendan el uso profiláctico de dantroleno29. En la tabla 9 mg/kg intravenoso cada 6 horas, durante 24-48 horas 33,34.
se resumen las drogas más utilizadas en anestesia, clasi- Una vez superada la fase aguda la vigilancia intensiva debe
ficándolas según su seguridad en la HM. mantenerse durante el menos 24-72 horas 28,29.

Tratamiento de los episodios de HM C) Síndrome neuroléptico maligno


El reconocimiento temprano del síndrome, la absten-
ción del uso de agentes potencialmente desencadenantes y El síndrome neuroléptico maligno (SNM) es una
la introducción del dantroleno han conseguido una reduc- entidad rara, potencialmente mortal, que consiste en una
ción de la mortalidad de la HM del 80% al 10%. Cuando se reacción idiosincrásica caracterizada clínicamente por
sospeche el síndrome se debe interrumpir la anestesia, rea- hipertermia, rigidez muscular, disfunción autonómica y
lizar una monitorización clínica y analítica estrechas, así alteración del nivel de conciencia, asociada al tratamien-
como un tratamiento agresivo de la hipertermia y de otras to con neurolépticos32,35,36. El fármaco que lo produce con
complicaciones y administrar dantroleno. El dantroleno es mayor frecuencia es el haloperidol, aunque puede apare-
un relajante muscular que disminuye la liberación de calcio cer asociado a cualquier neuroléptico y, además, a otros
por el retículo sarcoplásmico. La dosis es de 2-3 mg/kg fármacos, como antidepresivos tricíclicos, anticolinér-
intravenosos cada 5 minutos hasta un total de 10 mg/kg en gicos y en la interrupción brusca del tratamiento antipar-
15 minutos; posteriormente, se recomiendan dosis de 1 kinsoniano (tabla 10)37. Existen una serie de factores

TABLA 9. Relación con la hipertermia maligna de los fármacos utilizados en anestesia

Fármacos desencadenantes • Anestésicos inhalados


Halotano
Enfluorano
Isofluorano
• Relajantes musculares despolarizantes
Succinilcolina
Decametonio
Suxametonio

Seguridad controvertida • Sales de calcio y potasio


• Ketamina
• Catecolaminas
• Fenotiazinas
• Atropina

Fármacos seguros • Óxido nitroso


• Barbitúricos
• Propofol
• Anestésicos locales
• Opiáceos
• Relajantes musculares no despolarizantes
• Antibióticos
• Propranolol
• Benzodiacepinas

202
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

dependientes del neuroléptico que facilitan la aparición TABLA 10. Fármacos relacionados con el SNM
del síndrome, como son la potencia antidopaminérgica
intrínseca, la administración de una dosis inicial elevada 1. Neurolépticos
o un aumento rápido de la misma, y el uso parenteral. • Fenotiacinas
Aún cuando los fármacos son necesarios para la aparición Clorpromacina
del SNM, se han señalado otras situaciones favorecedo- Tioridazina
ras, como pueden ser agitación, deshidratación, hipotiroi- Propericiazina
dismo, trastorno afectivo de base, retraso mental, síndro- Flufenazina
mes orgánicos cerebrales, catatonía, infecciones y edad Perfenazina
avanzada38. La incidencia del SNM es de aproximada-
Trifluoperazina
mente un 0,5% (entre 0,1 y 2,5%) de la población tratada
• Tioxantenos
con neurolépticos. Es más frecuente en hombres que en
Tiotixeno
mujeres y afecta a todas las edades. Parece que su inci-
• Butirofenonas
dencia puede estar disminuyendo, probablemente por el
Haloperidol
uso más conservador de neurolépticos, la menor utiliza-
ción de neurolépticos de liberación sostenida y el recono- Trifluperidol
cimiento precoz de signos clínicos premonitorios39,40. • Benzamidas
Metoclorpramida
Fisiopatología del SNM Domperidona
La fisiopatología del SNM no se conoce por com- • Otros neurolépticos
pleto, aunque existen varias líneas de evidencia que apo- Loxapina
yan la implicación de la dopamina en el SNC. Se piensa Clozapina
que el SNM está causado por un bloqueo dopaminérgico Molindona
central que produce, por una parte rigidez y contracturas
musculares persistentes por afectación del núcleo estria- 2. Antidepresivos tricíclicos
do, y por otra alteraciones de la termorregulación por • Dibenzoacepinas
afectación del hipotálamo39,41. Probablemente existe, ade-
Imipramina
más, una hiperactividad del sistema nervioso autonómico
Desimipramina
simpático por mecanismos no aclarados42. Además, estu-
• Dibenzocicloheptatrienos
dios recientes han sugerido un papel de las concentracio-
Propitriptilina
nes séricas de hierro disminuidas que se observan en
3. lnhibidores de la monoaminooxidasa
estos casos, ya que el hierro es un modulador de la fun-
ción de los receptores dopaminérgicos40. La contracción • Fenelcina
muscular intensa y persistente pone en marcha una
secuencia fisiopatológica común con la HM31. 4. Deplectantes de catecolaminas
• Tetrabenazina
Manifestaciones clínicas • Cocaína

• Signos prodrómicos 5. Suspensión de agonistas dopaminérgicos


Los síntomas atribuibles al SNM aparecen general- • Amantadina
mente en los primeros treinta días del tratamiento (90% en • Levodopa
las primeras dos semanas); su presentación clínica es
subaguda y relativamente constante, de modo que las alte- 6. Otros fármacos asociados a los trata-
raciones del estado mental y la rigidez muscular preceden mientos anteriores
a la hipertermia y a la disfunción autonómica. Los signos
• Litio
premonitorios del SNM son alteraciones leves del estado
• Carbamazepina
mental, signos extrapiramidales que no responden a los
• Benzodiacepinas
agentes antiparkinsonianos y episodios de taquicardia o
hipertensión. Sin embargo, estos signos son inespecíficos
203
emergencias 2000;12:192-207

y no preceden de forma invariable al SNM establecido38. elevación de CK y mioglobinuria; pueden aparecer, aun-
que son menos frecuentes, hipernatremia, hiperkaliemia,
• Datos clínicos acidosis metabólica, datos bioquímicos de insuficiencia
La presentación clínica es muy variable y heterogé- renal o de coagulación intravascular diseminada, hipoxe-
nea; sin embargo, los síntomas pueden agruparse en: mia, hiposideremia, elevación de LDH y alteración de las
• Síntomas extrapiramidales: pueden presentarse pruebas hepáticas37.
rigidez generalizada, temblor, crisis oculógiras, trismus,
distonías, corea, mioclonías u opistótonos, disfagia, disar- Diagnóstico
tria y discinesias. La rigidez es el síntoma más frecuente. El diagnóstico del SNM es fundamentalmente clíni-
• Disfunción autonómica. Fluctuaciones de la pre- co. Para su diagnóstico se han utilizado diferentes series
sión arterial (hipertensión arterial o hipotensión), taqui- de criterios, que no han sido validados ni comparados
cardia, taquipnea, sialorrea, incontinencia esfinteriana y entre sí. Probablemente los que han alcanzado un con-
diaforesis. senso mayor son los propuestos en el DSM-IV (ta-
• Hipertermia, con temperaturas muy elevadas, que bla 11)44. En el diagnóstico diferencial deben incluirse
pueden producir lesiones cerebrales irreversibles, coma y otros trastornos que producen hipertermia (tabla 1).
muerte.
• Cambios en el estado mental, que incluyen confu- Pronóstico
sión, agitación, estupor, mutismo, rasgos catatónicos o La mortalidad oscila entre el 15 y el 30%. Las cau-
coma36-38,43. sas de muerte más frecuentes son las complicaciones res-
piratorias (insuficiencia respiratoria, neumonía y trombo-
• Datos de laboratorio y exploraciones embolismo pulmonar); cardíacas (infarto agudo de mio-
complementarias cardio, arritmias); renales (insuficiencia renal aguda por
Aunque se han descrito diferentes alteraciones de rabdomiolisis); CID y sepsis. En los enfermos supervi-
laboratorio de forma relativamente constante, ninguna de vientes la recuperación es completa, excepto en los casos
ellas es específica. Las más habituales son leucocitosis, en los que están implicados el litio o el haloperidol, que

TABLA 11. Criterios diagnósticos del síndrome neuroléptico maligno (DSM-IV)

A) Aparición de rigidez muscular intensa y temperatura elevada asociada a la toma de medicación neuro-
léptica

B) Dos o más de los siguientes síntomas:


• Diaforesis
• Temblor
• Disfagia
• Alteración del nivel de conciencia
• Mutismo
• Taquicardia
• Incontinencia
• Fluctuaciones de presión arterial
• Leucocitosis
• Elevación de CK

C) Los síntomas de los criterios A y B no se deben a otra sustancia, a una enfermedad neurológica o médi-
ca o a la presencia de un trastorno mental

204
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

pueden provocar secuelas neurológicas permanentes38. alternativas como el litio, la carbamacepina o la terapia
electroconvulsiva. Si el tratamiento neuroléptico fuera
Tratamiento imprescindible, debe realizarse con dosis bajas de un fár-
La primera medida terapéutica es la suspensión del maco no relacionado con el que provocó el cuadro, pre-
fármaco implicado, acompañada de tratamiento sintomá- feriblemente de baja potencia y, al menos, a las 2 sema-
tico y de soporte, lo que suele ser suficiente en los casos nas de superado el episodio41,43.
leves45. El tratamiento se basa en:
• Medidas antitérmicas físicas y farmacológicas. E) Síndrome serotoninérgico (SS)
• Corrección hidroelectrolítica.
• Oxigenoterapia y ventilación asistida si se precisa. El SS es un complejo sintomático que resulta de un
• Profilaxis de infecciones y de tromboembolismo aumento de la actividad biológica de la serotonina (5-HT)
pulmonar. sobre sus receptores específicos en el tronco cerebral y
médula espinal; sus síntomas incluyen alteraciones del
• Tratamiento farmacológico estado mental, irritabilidad neuromuscular e inestabilidad
El papel de los fármacos en el tratamiento del SNM autonómica. El exceso de actividad serotoninérgica puede
no está suficientemente establecido. De un modo general deberse a diferentes mecanismos: 1) inhibición del meta-
se puede recomendar el uso de agentes dopaminérgicos bolismo de la 5-HT (inhibidores de la monoamino-oxida-
en casos moderados, y de dantroleno (añadido a los ante- sa); 2) potenciación de la acción de la 5-HT (drogas con
riores) en los casos más graves45. efecto simpaticomimético); 3) activación de los receptores
• Agonistas dopaminérgicos. Los más utilizados son de 5-HT (agonistas serotoninérgicos como el litio, la L-
amantadina y la bromocriptina. Sólo se encuentran dis- dopa, o la buspirona); 4) inhibición de la recaptación de 5-
ponibles formulaciones para administración oral. La HT, selectiva (fluoxetina, paroxetina, sertralina) o no
dosis inicial de bromocriptina es de 7,5-15 mg/día en tres selectiva (antidepresivos tricíclicos); y 5) aumento del
tomas, que puede incrementarse a razón de 5 mg/día aporte de sustrato (triptofano). Generalmente, el síndrome
hasta conseguir el efecto terapéutico deseado. La amanta- se desarrolla cuando se administran simultáneamente dos
dina se administra a dosis de 100 mg/8 horas. Ambos o más agentes que presentan, al menos, una de estas accio-
fármacos deben mantenerse durante al menos 10 días37. nes. Las circunstancias más frecuentes son la introducción
• Dantroleno. Está indicado en los casos con rigidez o el aumento de la dosis de un agente serotoninérgico en
importante o disminución del nivel de conciencia. La un régimen que ya incluía otro/s, o la introducción pre-
dosis es de 1-2 mg/kg/6 horas por vía intravenosa, que matura de un fármaco serotoninérgico, tras la interrupción
puede administrarse por vía oral en la medida que el cua- de otro de vida media larga (por ejemplo los inhibidores
dro evolucione satisfactoriamente33,38. En algunos casos de la monoamino-oxidasa31,46,47).
pueden ser útiles otros relajantes musculares. Clínicamente el SS se caracteriza por alteraciones del
• Otros fármacos. Las benzodiacepinas pueden utili- estado mental (agitación, desorientación, delirio, aluci-
zarse como tratamiento de la agitación y para el control naciones, confusión, mutismo y ocasionalmente coma);
de los síntomas psicopatológicos. Deben usarse com- disfunción autonómica (taquicardia, taquipnea, oscilacio-
puestos potentes y a dosis elevadas38. nes de la presión arterial, diaforesis, diarrea, hipertermia,
epífora, midriasis) y alteraciones neuromusculares (akati-
• Terapia electroconvulsiva sia, mioclonías, hiperreflexia, incoordinación, nistagmo,
Puede ser útil es casos refractarios al tratamiento temblores o convulsiones). De forma similar al SNM, pue-
anterior y como alternativa terapéutica en el control de den existir leucocitosis, elevación de la CK y mioglobinu-
los síntomas psicóticos38. ria, aunque en general son menos importantes. A diferen-
cia del mismo, el síndrome se desarrolla rápidamente (en
• Tratamiento posterior del cuadro psiquiátrico el 75 % de los casos los síntomas aparecen en menos de 24
El tratamiento de la enfermedad psiquiátrica de horas de la modificación del tratamiento), existe menos
base es controvertido, pero existen evidencias de que los rigidez y las mioclonías y la hiperreflexia son caracterís-
neurolépticos de baja potencia o el tratamiento neurolép- ticas47,48. El diagnóstico es clínico; se utilizan los criterios
tico con un fármaco diferente, acompañado de bromo- diagnósticos propuestos por Sternbach (tabla 12)49.
criptina, es bien tolerado. Sin embargo, son preferibles La suspensión del agente causal, acompañada del
205
emergencias 2000;12:192-207

TABLA 12. Criterios diagnósticos del síndrome serotoninérgico

A) Los síntomas deben coincidir con el inicio o aumento de dosis de un agente serotoninérgico conocido.

B) Deben presentarse al menos tres de los siguientes síntomas:


• Cambios del estado mental
• Agitación
• Mioclonías
• Hiperreflexia
• Diaforesis
• Escalofríos
• Temblor
• Diarrea
• Incoordinación
• Hipertermia

C) Se han excluido otras etiologías (infecciosas, metabólicas, abuso o abstinencia de sustancias).

D) No se ha iniciado o incrementado la dosis de un neuroléptico antes del inicio de los síntomas.

tratamiento sintomático (hidratación, medidas antitér- difenhidramina y clorpromacina, aunque no se ha


micas físicas y/o farmacológicas, anticonvulsivantes, demostrado claramente su eficacia. El uso de antago-
etc.) suele ser suficiente para que el cuadro se resuelva nistas inespecíficos de la 5-HT (propranolol, ciprohep-
en 24-72 horas. Los casos graves son poco frecuentes, tadina, metisergida) podría ser de utilidad, aunque exis-
pero las complicaciones pueden ser similares a las del te poca experiencia al respecto. El uso de dantroleno es
SNM. Las mioclonías y la rigidez pueden tratarse con controvertido46,47.
benzodiacepinas (especialmente con clonazepam),

BIBLIOGRAFÍA

1- Saper CB, Breder CD. The neurologic 7- Ballester JM, Harchelroad FP. Hypo- 13- Lee-Chiong TL, Stitt JT. Accidental
basis of fever. N Engl J Med 1994; thermia:an easy-to-miss, dangerous hypothermia. When thermorregulation is
330:1880-6. disorder in winter weather. Geriatrics overwhelmed. Postgrad Med 1996;
1999;54:51-7. 99:77-88.
2- Mackowiak PA. Concepts of fever.
Arch Intern Med 1998;158:1870-81. 8- Lloyd EL. Accidental hypothermia. 14- Walpoth BH, Walpoth-Aslan BN,
Resuscitation 1996;32:111-24. Mattle HP, Radanov BP, Schroth G,
3- Simon HB. Hyperthermia. N Engl J
Med 1993;329:483-7. 9- Danzl DF, Pozos RS. Accidental hypo- Schaeffler L et al. Outcome of survivors
thermia. N Engl J Med 1994;331:1756-60. of accidental deep hypothermia and cir-
4- Hanania NA, Zimmerman JL. Acci- culatory arrest treated with extracorpo-
dental hypothermia. Crit Care Clin 1999; 10- Kanzenbach TL, Dexter WW. Cold real blood warming. N Engl J Med 1997;
15:235-49. injuries. Protecting your patients from 337:1500-5.
the dangers of hypothermia and frostbi-
5- Leikin JB, Aks SE, Andrews S,
te. Postgrad Med 1999;105:72-8. 15- Jiménez Mejías ME, Montaño Díaz
Auerbach PS, Cooper MA, Jacobsen TD
M, Villalonga J, Bollain Tienda E, López
et al. Environmental injuries. DM 11- Larach MG. Accidental hypothermia.
Pardo F, Pineda JA et al. Golpe de calor
1997;43:813-916. Lancet 1995;345:493-8.
clásico en España. Análisis de una serie
6- Weinberg AD. Hypothermia. Ann 12- Lazar HL. The treatment of hypo- de 78 casos. Med Clin (Barc) 1990;
Emerg Med 1993;22 (pt 2):370-7. thermia. N Engl J Med 1997;337:1545-7. 94:481-6.

206
E. Lizarralde Palacios, et al. ALTERACIONES DE LA TERMORREGULACIÓN

16- Barrow MW, Clark KA. Heat-related 28- Abrahan RB, Cahana A, Krivosic- 38- Caroff SN, Mann SC. Neuroleptic
illnesses. Am Fam Physician 1998; Horber RM, Perel A. Malignant hypert- malignant syndrome. Med Clin North Am
58:749-59. hermia susceptibility:anaesthetic impli- 1993;77:185-202.
cations and risk stratification. QJM
17- Dematte JE, O’Mara K, Buescher J, 39- Balzan MV. The neuroleptic malig-
1997;90:13-18
Whitney CG, Forsythe S, McNamee T et nant syndrome:a logical approach to the
al. Near fatal heat stroke during the 29- Denborough M. Malignant hypert- patient with temperature and rigidity.
1995 heat wave in Chicago. Ann Intern hermia. Lancet 1998;352:1131-6. Postgrad Med J 1998;74:72-6.
Med 1998;129:173-81.
30- Morón Saen de Casas A, Jiménez 40- Buckley PF, Hutchinson M.
18- Knochel JP. Heat stroke and related Bravo de Laguna A, Blanco López J, Neuroleptic malignant syndrome. J
heat disorders. Dis Mon 1989;35-:301-77. Sánchez López JM, Pérez Rocha C, Neurol Neurosurg Psychiatry 1995;
Manzano Alonso JL. Hipertermia malig- 58:271-3.
19- Tek D, Olshaker JS. Heat illness. na. Rev Clin Esp 1997;197:259-65.
Emerg Med Clin North Am 1992;10:299- 41- Kornhuber J, Weller M. Neuroleptic
310. 31- Bertorini TE. Myoglobinuria, malig- malignant syndrome. Curr Opin Neurol
nant hyperthermia, neuroleptic malig- 1994;7:353-7.
20- Khosla R, Guntupalli KK. Heat-rela- nant syndrome and serotonin syndrome.
ted illnesses. Crit Care Clin 1999; Neurol Clin 1997;15:649-71. 42- Gurrera RJ. Sympathoadrenal hype-
15:251-63. ractivity and the etiology of neuroleptic
32- Heiman-Patterson TD. Neuroleptic malignant syndrome. Am J Psychiatry
21- Bouchama A, Hammami MM, Haq malignant syndrome and malignant 1999;156:169-80.
A, Jackson J, Al-Sedairy S. Evidence for hyperthermia. Important issues for the
endothelial cell activation/injury in heats- medical consultant. Med Clin North Am 43- Velamoor VR. Neuroleptic malignant
troke. Crit Care Med 1996;24:1173-8. 1993;77:477-92. syndrome. Recognition, prevention and
manegement. Drug Saf 1998;19:73-82.
22- Delaney KA. Heatstroke. Underlying 33- Ward A, Chaffman MO, Sorkin EM.
processes and lifesaving management. Dantrolene. A review of its pharmacody- 44- Diagnostic and Statistical manual for
Postgrad Med 1992;91:379-88. namic and pharmacokinetic properties mental disorders. Fourth Edition (DSM-
and therapeutic use in malignant hypert- IV). Washington DC:American
23- Yaqub B, Deeb SA. Heat
hermia, the neuroleptic malignant syn- Psychiatric Press, 1994:739-42.
strokes:aetiopathogenesis, neurological
drome and an update of its use in mus-
characteristics, treatment and outcome. 45- Rosenberg MR, Green M.
cle spasticity. Drugs 1986;32:130-68.
J Neurol Sci 1998;156:144-51. Neuroleptic malignant syndrome.
34- Wedel DJ, Quinlan JG, Iaizzo PA. Review of response to therapy. Arch
24- Bross MH, Nash BT, Carlton FB. Clinical effects of intravenous dantrole- Intern Med 1989;149:1927-31.
Heat emergencies. Am Fam Physician ne. Mayo Clin Proc 1995;70:241-6.
1994;50:389-96. 46- Bodner RA, Lynch T, Lewis L, Kahn
35- Bristow MF, Kohen D. Neuroleptic D. Serotonin syndrome. Neurology
25- Lee-Chiong TL, Stitt JT. Heatstroke malignant syndrome. Br J Hosp Med 1995;45:219-23.
and other heat-related illnesses. 1996;55:517-20.
Postgrad Med 1995;98:26-36. 47- LoCurto MJ. The serotonin syndro-
36- Pelonero AL, Levenson JL, Pandu- me. Emerg Med Clin North Am
26- Bouchama A. Heatstroke:a new look rangi AK. Neuroleptic malignant syndro- 1997;15:665-75.
at an ancient disease. Intensive Care me:a review. Psychiat Serv
Med 1995;21:623-5. 1998;49:1163-72. 48- Martin TG. Serotonin syndrome. Ann
Emerg Med 1996;28:520-6.
27- Hett HA, Brechtelsbauer DA. Heat- 37- Martínez E, Domingo P, Lloret J.
related illness. Postgrad Med 1998; Síndrome neuroléptico maligno. Med 49- Sternbach H. The serotonin syndro-
103:107-20. Clin (Barc) 1994;102:181-8. me. Am J Psychiatry 1991;148:705-13.

207

También podría gustarte