Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Moderna y
Argentina hasta 1852
Este grabado del 1500 es una alegoría que muestra cóm o el com ercio, vivificando las relaciones entre
hombres y naciones, permite el florecim iento de las ciencias y las artes, fenóm eno del que fueron suma
mente conscientes los hombres que vivieron en los períodos iniciales de la época m oderna, abarcados en
este libro.
JOSÉ C. ASTOLFI
HISTORIA 2
M oderna y
Argentina hasta 1852
De acuerdo con los programas de segundo año del ciclo básico, de las
escuelas nacionales de comercio y educación técnica.
Todos los derechos reservados por (© , 1943) EDITORIAL KAPELUSZ S.A.
Buenos Aires. Hecho el depósito que establece la ley 11.723.
Decimoquinta edición, Febrero de 1980.
LIBRO DE EDICION ARGENTINA. Printed in Argentina.
ÍNDICE
C O M IE N Z O S
DE LA M O D E R N ID A D
1
subsanados m ediante su cesivos te fueron las telas de hilo de las
perfeccionamientos. ropas de desecho.
El empleo de la pólvora restó
eficacia a la armadura de los caba L a i m p r e n t a . G ú t e n b e r g . Pa
lleros, facilitó la toma de los cas ra hacer más rápida y económica
tillos y transformó la táctica de las la confección de libros, ideóse ta
batallas, basada hasta entonces so llar en relieve el texto de las pági
bre los ataques en masa, que las nas, sobre planchas de madera,
armas de fuego volvían demasiado procedimiento que permitía obte
mortíferos. ner muchas copias sin el fatigoso
trabajo de tener que escribirlas a
La b r ú j u l a . Los chinos y los mano.
árabes conocían también la pro Luego, cada letra fue moldeada
piedad de señalar el norte, que por separado, lo que hizo posible
posee la aguja imanada, aunque combinarla varias veces de dife
no la aplicaban a bordo por falta rentes maneras. Pero la madera,
de un aparato capaz de neutralizar blanda y fibrosa, absorbía la tin
los vaivenes de la nave. Los italia ta y deformaba rápidamente los
nos montaron la aguja sobre un trazos.
eje y la encerraron en una caja Juan Gútenberg, natural de M a
( hússola, de ahí brújula), salvando guncia, establecido en la ciudad de
así la dificultad. El invento favo Estrasburgo, introdujo, hacia 1440,
reció la orientación de los barcos dos innovaciones fundamentales:
en alta mar. sustituyó la madera por una alea
ción de plomo, estaño y antimonio,
E l p a p e l . Con la fibra del cá dura e impermeable, y en lugar
ñamo y del algodón, los chinos del tallado a mano co n fe c cio n ó
fabricaban papel. En la primera moldes en hueco, de manera que
mitad del siglo x i i los árabes intro jchando en ellos el metal fundido,
dujeron su elaboración en España, obtenía en menos tiempo una gran
de donde pasó a otros países de cantidad de letras llamadas tipos,
Europa. Al comienzo, la materia con la ventaja de ser todas iguales
prima empleada en este continen en tamaño y aspecto
Una imprenta del siglo X V I: en primer plano, un
hom bre entinta la plancha de texto compuesta con
tipos m óviles. Otro, a su lado, separa las páginas
ya impresas; los de atrás com ponen los textos.
El Renacimiento
M O V IM IE N T O R E N O V A D O R
D E LA ED A D M E D IA
CAUSAS DEL RENACIMIENTO artes, amigo del emperador Au
gusto; sirvió para designar a los
papas, emperadores, reyes, prínci
Entre las prin cip ales causas pes, señores y burgueses, que se
del Renacimiento figuran las si distinguían por su apoyo a la
guientes. cultura.
El mecenato tuvo en Italia sus
La ob ra p r e p a r a to r ia de la
primeros y más decididos repre
Conocida com o pre-
E d a d M e d ia .
sentantes : el papa Nicolás V fundó
rrenacimiento, tuvo su foco princi la B ib lioteca V aticana, formada
pal en Florencia. por 5 000 volúmenes manuscritos;
Pío 11 escribió diversos trabajos de
La in te n s ific a c ió n de lo s es
erudición y educación; Alejandro
tu d io s El conocimien
c lá s ic o s .
V I creó la Universidad de Valen
to de la cultura latina resultó favo cia, inspirada en las nuevas ideas.
recido con el hallazgo de estatuas A estos pontífices del siglo xv, hay
y restos de monumentos, sepulta que agregar los del siglo siguiente:
dos bajo montones de escombros, Julio II, León X , Clemente V II y
obra de la casualidad en algunos Pablo III.
casos, pero luego a consecuencia Los Médicis, de Florencia: Cos
de excavaciones. Otras búsquedas me, llamado El Padre de la Patria,
determinaron el descubrimiento de Lorenzo, apellidado el Magnífico,
obras literarias, olvidadas en los Julián, y, por último, Juan y Julio,
desvanes de conventos y palacios. que fueron, respectivamente, los
La cultura griega, poco estudiada papas León X y Clemente V II ya
hasta entonces, se divulgó y en citados, ocupan el primer lugar
gran parte se reveló, gracias a las entre los señores y soberanos. Su
relaciones cada vez más sólidas y ejemplo fue imitado por los Sforza,
frecuentes con los eru ditos de de Milán, los Gonzaga, de Mantua,
Constantinopla, y más tarde por la el rey Altonso V, de Aragón.
emigración de éstos a los países
occidentales, adonde llevaron sus
bibliotecas y manuscritos, como
consecuencia de la caída de aque
lla ciudad en poder de los turcos.
La p r o s p e r id a d e c o n ó m ic a .
El desarrollo de la industria y el
comercio, vigorizado por el descu
brimiento de América aumentó la
riqueza y despertó el deseo de
embellecer la vida con el lujo y
las obras de arte.
L a a c c ió n d e lo s m e ce n a s.
Este nombre, com o se recordará,
era el de un gran protector de las
4
Las repúblicas de Venecia y Gé- intensidad. El desnudo volvió a
nova, y acaudalados banqueros y servir de modelo; por otra parte,
comerciantes, completan el elenco los cuadros fueron preferentemen
ilustre de los mecenas que favore te retratos, ya que el paisaje y
cieron a los artistas, escritores, sa otros detalles sólo figuraban como
bios y eruditos, con dinero, regalos complemento.
y pensiones, los ampararon contra
las p ersecu cion es de sus enemi El R E S U R G IM IE N T O DE L O S G U S
5
Los esponsales de Santa Catalina, cuadro de Pablo
Caliari (llam ado “ el V eronés” por ser oriundo de
V eron a ). Este pintor trabajó, ante todo, para la
rica ciudad de Venecia, uno de los centros de di
fusión de la cultura renacentista.
6
numerosos estados. El mayor era propicio al desarrollo del Renaci
el reino de Nápoles, que compren miento. Allí adquirió su máximo
día el sur de la península, gober esplendor, para extenderse luego
nado por un príncipe aragonés (las por el resto de Europa. Además
islas de Cerdeña y Sicilia depen del mencionado, otros diversos mo
dían directamente de Aragón). En tivos explican esta prioridad.
el centro se encontraban los esta Como antiguo centro del impe
dos de la iglesia —bajo la soberanía rio romano, Italia poseía el más
del pontífice, residente en Roma—, importante conjunto de monumen
y numerosos señoríos locales, como tos y documentos, sólo en parte
el ducado de Toscana, con capital destruidos por la acción del tiem
en Florencia. En el norte estaban po y de los hombres. Además, la
las repúblicas mercantiles de Ve- tradición y la cultura latinas nun
necia y Génova, los ducados de Sa- ca se habían extinguido totalmente.
boya y Milán y otra porción de La prolongación, durante varios
estados menores. siglos, del dominio bizantino en
algunos puntos de la península, los
viajes regulares realizados por las
EL RENACIMIENTO EN ITALIA flotas genovesas y venecianas a
Constantinopla, y la proximidad
La actividad mercantil e indus con el Oriente, m an tu vieron el
trial de las ciudades y de los seño- contacto con la civilización griega.
ri°s italianos, creó un ambiente El prerrenacimiento florentino,
7
guesía rica, inteligente y amante
de la belleza-, los nobles prefirie
ron el cultivo del espíritu a las ca
cerías y combates, objeto prefe
rente de la atención de los de
otros países.
M ig u e l á n g e l . L eonardo. R a
fael. Miguel Ángel B uonarroti
nació en 1475, en el pueblecillo de
Caprese (Toscana). A los catorce
años ingresó en la escuela de escul
tura de Florencia, fundada por L o
in ic ia d o e n la s e g u n d a m i t a d d e l
renzo el M ag n ífico. Su primera
s ig lo x i i i , f u e e s c u e l a d e g r a n e f i
estatua célebre, La Piedad, repre
c a c ia . senta a Cristo yacente sobre el re
Italia había sufrido en menor gazo de la Virgen María; a ella
escala las numerosas guerras que siguió David, obra maestra de su
asolaran otros países; el ambiente juventud.
de relativa paz favoreció la preocu En 1505 se trasladó a Roma,
pación por la cultura. llamado por el papa Julio II, y allí
La autonomía y el florecimiento residió hasta su muerte, salvo una
económico de muchas de sus ciu breve estada en Florencia. En R o
dades dio nacimiento a una bur ma escu lpió el M oisés, para la
8
tumba del mencionado pontífice
colocado luego en la iglesia de San
Pedro Encadenado (llamada así
por conservarse en ella las cadenas
con que los romanos aherrojaron
al apóstol). La estatua es consi
derada como la obra más pujante
de la escultura moderna.
El patriarca hebreo aparece sentado,
con el rostro vuelto a la izquierda. Su
cabeza ostenta dos cuernos, representa
ción de rayos o, según otros, símbolo
pagano de la energía; los brazos, muscu
losos, están desnudos; bajo el derecho se
hallan las Tablas de la Ley; una larga
barba cae sobre el pecho, en gruesos
haces.
La figura correspondería a una perso
na de cerca de tres metros y medio de
alto. Dícese que Miguel Ángel, al con
cluirla, le dio un martillazo en la rodilla,
gritándole; “ ¡Habla!”
10
Después de residir largamente
en esa ciudad, bajo la protección
de los Sforza, pasó a Francia, lia
mado por el rey Francisco I, y allí
murió, en 1519.
R a fa el Sanzio era natural de
Urbino, ciudad de los estados de
la iglesia, donde nació en 1483.
Fue discípulo del gran pintor Pe
dro Vannucci, conocido por El Pe-
rugino, cuya influencia se nota en
sus primeras producciones. A los
veinte años se trasladó a Florencia,
y de allí a Roma, protegido por
su compatriota Bramante.
Los principales méritos de sus obras
residen en la pintura de tonos suaves,
poeta. Hizo ensayos sobre navega impregnada de una luz dorada, en la her
ción aérea y submarina, y estudió mosura y gracia de sus imágenes, en la
química, física, anatomía, fisiología pericia en agrupar los personajes y en el
y medicina, ocupándose de la res dominio de la perspectiva, que infunde
a sus cuadros gran profundidad y espa
piración y de la circu la ción de cio. Buscó la belleza perfecta: una cier
la sangre. Mantuvo en secreto la ta idea que tenía en el espíritu, decía.
mayor parte de sus investigacio
nes, a cuyo efecto escribía los re
sultados de derecha a izquierda,
m ediante un sistem a de signos
ideado por él.
Sus dos cuadros más notables
son: el retrato de la Gioconda, da
ma florentina, cuyo rostro anima
una sonrisa apenas percep tible,
que parece irradiar de toda la fiso
nomía; las manos, de exquisita de
licadeza, son consideradas las más
perfectas salidas de un pincel, y
La Cena, que representa a Jesús
y los doce apóstoles, pintada en
el refectorio de un convento de
Milán.
Trabajó infatigablemente en la Además de los tres artistas máximos
composición de frescos y telas. En que acabamos de estudiar, florecieron en
Italia muchos otros. Sólo citaremos a
tre los primeros sobresalen los de
Ticiano Vecellio, Pablo Caliari, el Vero-
las salas del Vaticano, como La nés, y Sa n tia go R o b u s ti, el Tintoreto,
escuela de Atenas, conjunto de re principales representantes de la escuela
tratos de los principales filósofos; veneciana de pintura. Ésta se caracteri
zó por su colorido vivo y luminoso, rico
El Parnaso, que representa a los
en matices -d e cuyos contrastes, más que
más célebres poetas, y La disputa del dibujo y del claroscuro, obtenían los
del Santísimo Sacramento, consi efectos—, por la importancia que conce
derado com o “la más alta expre dió al paisaje y por el empleo del óleo
sión de la pintura cristiana; más en los frescos.
que una obra maestra, una fecha
en el desarrollo del espíritu hu L a l i t e r a t u r a . Las letras ita
mano”. lianas del Renacimiento presentan
las siguientes figuras principales:
Entre las telas figuran varias
sagradas familias, muchas mado- Nicolás Maquiavelo, oriundo de
nas (la Virgen M aría), designadas Florencia, actuó muchos años en la
por algún personaje o detalle que diplomacia como secretario de su
las singulariza, com o la de la silla, ciudad natal. Escribió El Príncipe,
del pescado, del gran duque, del tratado de política que preconiza
prado, de San Sixto; los retratos de la astucia y la falta de escrúpulos
Julio II, de León X , de la forna- en la conducta de los monarcas
rina, su modelo preferida, hija de para conseguir sus fines. El térmi
un panadero ( fornaro); su autorre no maquiavélico califica hoy un
trato. procedimiento pérfido; en realidad,
Murió en 1520, a los treinta y hizo una pintura fiel del ambiente
siete años, después de una breve de su tiempo.
enfermedad. Su último cuadro, La Francisco Guicciardini, también
Transfiguración, terminado por un florentino, es autor de una Historia
discípulo, fue conducido procesio de Italia, correspondiente a su épo
nalmente en las grandiosas exe ca, notable por el análisis profundo
quias que se le tributaron. de los personajes y de las causas
12
En el siglo X VI fueron creadas
doce universidades, mientras con
servaban todo su prestigio la de
Alcalá, centro del renacentismo, y
la de Salamanca, fiel al saber tra
dicional. T am bién se fundaron
muchas bibliotecas, como la de El
Escorial —por iniciativa de Felipe
II-, y diversos jardines botánicos.
La ciencia y la filosofía alcan
zaron inusitado brillo. Entre sus
m ayores cu ltores figuran: Juan
Luis Vives, natural de Valencia,
pensador y erudito profundo. Es
Torcuato Tasso (1 5 4 4 a 1 59 5 ) escribió p oe
cribió en latín Tratado del alma
sías desde los dieciséis años, cuando estudiaba y de la vida, libro de psicología
con los jesuítas. Su obra más importante y c o
y educación; Tratado de la ense
nocida es “ La Jerusalén libertada” .
ñanza, lleno de ideas nuevas y
acertadas; Instrucción de la mujer
cristiana.
y propósitos que inspiraron sus Elio Antonio de Nebrija (nom
acciones. bre de su pueblo natal, cercano a
Sevilla), cronista de los R ey es
Ludovico Ariosto, de Módena, C atólicos, profesor universitario,
escribió un poema heroico-cómico, autor del Arte de la lengua caste
llamado Orlando Furioso, destina llana, de inapreciable valor para
do a cantar las aventuras fabulosas la consolidación del idioma. Cola
de Rolando, nieto de Carlomagno. boró en la gigantesca Biblia Poli
Torcuato Tasso, de Sorrento, es glota, que contiene la versión he
cribió La Jerusalén Libertada, epo brea, griega y latina del libro
peya de la primera Cruzada, con sagrado, monumento insuperable
Godofredo de Bouillon como pro de filología.
tagonista. Juan de Valdés, su rival, escribió
un Diálogo de la lengua, rico vene
EL RENACIMIENTO EN ro de observaciones lexicográficas.
LOS DEMÁS PAÍSES EUROPEOS Las letras españolas alcanzaron
su máximo esplendor, culminando
E spañ a. El movimiento rena en el Siglo de Oro, como veremos
centista, fomentado por los sobe en el capítulo V. En Portugal flo
ranos de la casa de Austria, adqui reció Luis de Camoens, autor de
rió su plenitud en España a fines
del siglo xvi y en la primera mitad
del siguiente. Italia influyó consi
derablemente, pero el genio ibérico
no tardó en encontrar su carácter
distintivo y una expresión propia.
El palacio del Escorial, construido por orden de Felipe II en las proximidades de M adrid, está en
un páramo pedregoso que justifica su nom bre (es coria l). E jem p lo de estilo “ herreriano” , lo carac
terizan la sobriedad, la simetría y la unidad de estilo. Su construcción dem andó veintiún años
(1 5 6 3 a 1 5 8 4 ).
14
En n u m e r o s o s altares y reta
blos españoles de la época del
R enacim iento se admira la per
fección alcanzada en la talla de
estatuas de madera. U no de los
más importantes escultores es
pañoles, que tam bién c u lt i v ó
este género, fue A lonso Berru-
guete, autor de esta “ Virgen y
el N iño” que form a parte del
retablo de la Epifanía. (M u seo
de Valladolid.)
15
realismo de las imágenes, en con las M en in as (conjunto). Como
traste con el hondo ascetismo de autor religioso, pintó Cristo en la
otras obras suyas. D ejó una estu cruz. En los temas históricos so
penda colección de cuadros de per bresale La rendición de Breda (el
sonajes: Felipe IV, su amigo y cuadro de las lanzas); en los mito
sincero admirador, el infante Bal lógicos, Apolo visitando la fragua
tasar Carlos, el conde duque de de Vulcano; en los populares, Los
Olivares, María Teresa de Austria, borrachos.
B a rtolom é E steba n M u rillo Ronsard y otros seis poetas, con
(1618 a 1682), también sevillano, junto llamado La Pléyade, nombre
discípulo de Velázquez, fue famoso de un grupo de siete estrellas,
por la perfección del dibujo, la ar adoptado ya en la antigüedad para
monía de los matices y la suavidad designar a otros tantos poetas de
de sus vírgenes y santos. Entre sus Alejandría.
cuadros religiosos figuran La In
maculada Concepción, Santa Isa Francisco Rabelais compuso una
bel de Hungría curando a los tiño- novela satírica y por momentos
sos, la Asunción de la Virgen-, entre grosera: La vida inestimable del
los realistas: Muchachos que co gran Gargantúa y de su hijo Panta-
men fruta, Pilluelos jugando. gruel, notable por su apasionada
defensa de la ciencia y sus agudas
Domingo Theotocópuli ( El Gre observaciones.
co), aunque nacido en la isla de A ella pertenece el proverbial episo
Creta, vivió en España, cuyo espí dio de los cameros de Panurgo. Viajando
ritu sintió profundamente. Fue un por mar, Panurgo fue agraviado por un
vigoroso pintor de figuras alarga pasajero que llevaba una majada de ove
jas a bordo. Para vengarse, simuló una
das, rostros enjutos, manos exan reconciliación con el dueño del ganado y
gües y tonos obscuros. El enterra le compró un carnero. Luego, en un mo
miento del Conde de Orgaz es uno mento propicio, lo hizo saltar al agua por
de sus cuadros más celebrados. la borda, ejemplo que fue seguido por los
demás animales, a pesar de los desespe
rados esfuerzos del ovejero, que perdió
así sus bestias.
F r a n c i a . Las letras, protegidas
por los reyes, adquirieron en Fran Miguel de Montaigne escribió,
cia notable impulso. La nueva li sin plan preconcebido, al azar de
teratura fue cultivada por Pedro sus nutridas lecturas y de sus
17
El castillo de Chambord muestra los caracteres que asumió la arquitectura renacentista en Francia.
Tam bién aquí se observa la simetría entre ambas mitades del edificio, señaladas anteriormente com o
carácter propio de este período.
I n g la te r r a . El Renacimiento
culminó durante la dinastía de los
Tudor. Su más alto representante
fue Guillermo Shakespeare (1564
a 1616), de Strafford del Avon,
poeta lírico exquisito, pero, sobre
todo, dramaturgo extraordinario,
creador de tipos perfectos de hu
18
Pedro Pablo Rubens (1577 a
1640) nació accidentalmente en
Westfalia (Alemania), de familia
oriunda de Amberes. Permaneció
diez años en Italia, donde estudió
a fondo los grandes maestros de la
pintura, para establecerse luego en
la ciudad de sus padres.
Compuso cerca de dos mil dos
cientos cuadros. Los más conoci
dos son El descendimiento de la
F lan d es, H olanda y A le m a cruz y Los episodios de la vida de
n ia .Floreció, sobre todo, la pin María de Médicis.
tura, célebre por el colorido bri P a b l o R e m b r a n d t (1607 a
llante, el sabio manejo de las luces 1669), nacido en Ley den (Holan
y sombras, el realismo de las esce da), hijo de un molinero, habitó
nas, el cuidado de los detalles, la en Amsterdam. Sobresalió en el
fidelidad y exactitud de los retra retrato y en el estudio acabado de
tos y la aparición del paisaje como los interiores: habitaciones con su
tema principal del cuadro. moblaje y cortinados. Fue también
19
un magnífico grabador y aguafuer de Aristóteles, abogando por el
tista. Entre sus cuadros más famo conocimiento experimental de la
sos están La lección de Anatomía, Naturaleza y por el repudio de los
Los síndicos de los pañeros, La ídolos, como llamó a los prejuicios.
ronda nocturna y Los peregrinos Saber de memoria, no es saber,
de Emmaus. decía Montaigne, y en otro pasaje
A n t o n i o Van D y c k (1599 a de los Ensayos agregaba: lo que
1641), de Amberes, discípulo de nosotros queremos es formar un
Rubens, protegido de Carlos I de gentilhombre, y no un gramático o
Inglaterra, en cuya corte residió. un lóg ico...
Fue un pintor elegante y mesu Rabelais nos presenta el contraste en
rado, de exquisita técnica. Hizo tre el escolasticismo y el humanismo:
treinta y ocho retratos de Carlos I, Gargantúa, gracias a veinte años de es
fuerzos, sabe sus textos de memoria, del
y los de los principales personajes principio al fin, “y sin embargo, su padre
ingleses. vio que en nada le aprovechaban y, lo
que era peor aún, que lo volvían loco,
H ans H olb ein , de Augsburgo necio, soñador y atontado” . E u d em on ,
(sur de Baviera), pintor de Enri por el contrario, piensa con justicia, ha
que V III de Inglaterra. Señala la bla con facilidad y tiene confianza en sí
mismo. Ambos jóvenes se encuentran:
transición entre la escuela medie
Eudemon avanza con la gorra en la ma
val y la renacentista. Su obra no, franco el rostro, la mirada tranquila,
maestra es el retrato de Erasmo. y cumplimenta a Gargantúa con frases
elegantes y graciosas. Éste lo mira cohi
Alberto Durero, de Nuremberg bido, trata de responder algo, y, al fin,
(norte de Baviera), hijo de un “todo lo que hizo fue echarse a llorar
como un becerro, y se escondía la cara
joyero húngaro, fue llamado “el
con su gorra y no se le pudo sacar una
último de los pintores góticos”, por palabra” .
su cuidado escrupuloso en el dibu De más está decir que los humanistas,
jo de los menores detalles y la entusiasmados con sus ideas, exageraban
los defectos ajenos y enaltecían las pro
fidelidad en la reproducción de los
pias virtudes.
modelos. Entre sus obras figuran
Los apóstoles y La adoración de
los reyes magos. Eximio grabador,
el primero de su tiempo, nos legó LA NUEVA CONCEPCIÓN
La vida de la Virgen y La melan DEL HOMBRE
colía.
El humanismo, favorecido por la
invención de la imprenta, la emi
El Humanismo gración de los sabios griegos y la
protección de los mecenas, presen
Las universidades permanecían ta los caracteres siguientes.
fieles a la escolástica de la Edad
Media. En contra de su enseñanza, La e r u d ic ió n y e l e n c ic lo p e
ceñida a los programas y textos Los humanistas se dedica
d is m o .
consagrados, los hombres del R e ron afanosamente a la lectura, la
nacimiento propiciaron el estudio meditación y la investigación, esti
libre y humano, basado en el razo mulados por una sed insaciable
namiento personal. de conocimiento; algunos, com o e!
El inglés Francisco Bacon escri famoso Pico de la Mirándola, abar
bió El N uevo Órgano, en contra caron la totalidad de los conoci
posición al Órgano o Lógica formal mientos de su época. Consecuencú
20
logia y la filología, ciencias nue- años entró en un convento, pero
de sus trabajos fueron la arqueo- más tarde, con permiso del papa,
vas, dedicadas al estudio de los dejó los hábitos monásticos. Cursó
monumentos del pasado y de los teología y filosofía en las univer
idiomas. sidades de París y Oxford, y adop
tó el nombre de Desiderio Erasmo,
L a r e s t a u r a c i ó n d e l l a t í n . El que significa deseoso de ser amado.
contacto asiduo con las obras clá Débil, enfermizo, dotado de pode
sicas depuró este idioma empleado rosa inteligencia, dedicó su vida al
por los eruditos, devolviéndole el estudio, siendo protegido por el
brillo y la corrección perdidos en emperador Carlos V y por Enri
la Edad Media; con ello se dife que V III de Inglaterra. “Cuando
renció definitivamente del habla tenga dinero —decía—, compraré
nacional. antes libros griegos, y luego vesti
dos.” Hizo largos viajes con el solo
E l e s tu d io d e la s le n g u a s objeto de leer manuscritos raros.
El griego, descuidado
o r ie n ta le s . Publicó ediciones corregidas y
y hasta despreciado antes, fue en anotadas de autores clásicos, tra
señado con entusiasmo y apren dujo obras griegas al latín, redactó
dido con pasión. Las obras de una versión griega de la Biblia,
los pensadores helénicos pudieron escribió numerosos libros, opúscu
leerse en su versión original, sin los y folletos, y sostuvo una nutri
las deformaciones de los traduc da correspondencia intelectual con
tores. En menor escala, fueron humanistas y eruditos. Es autor
también cultivados el hebreo y el del Elogio de la locura —aguda
caldeo. sátira dedicada a su amigo el es
critor inglés Tomás M oro—, de los
E l d e s a r r o llo d e l r a c io c in io
C oloqu ios, y de otros trabajos.
y d e l e s p ír it u L o s hom
c r ít ic o .
Falleció en Basilea en 1536.
bres del medioevo, profundamente Los españoles ya mencionados,
respetuosos de los sabios y filóso Vives, Nebrija y Valdés, figuran
fos antiguos, especialm en te de entre los más prestigiosos huma
Aristóteles, no osaban contradecir nistas.
los. Los humanistas, en cambio,
con criterio más libre, descubrieron
numerosas fallas, lagunas y contra La crisis de la Cristiandad
dicciones en esos autores, y comen
zaron a buscar la verdad por su Sus a n t e c e d e n t e s . El movi
miento religioso de la Reforma fue
propio esfuerzo.
llamado así por sus promotores
Erasmo encarna en grado emi
nente la figura del humanista. Na
ció en Rotterdam (H olanda), en
el año 1467. Abandonado por sus
padres, fue recogido por los mon
jes Jerónimos, quienes le dieron
una esmerada educación. A los 17
22
León X , deseoso de obtener dinero
para la construcción de la basílica
de San Pedro, organizó, en 1515,
una concesión de indulgencias en
gran escala.
Los dominicos recibieron el en
cargo de hacer propaganda en Ale
mania, lo que provocó el disgusto
de los agustinos. Además, para
abreviar trámites, el papa confió la
gestión financiera de las indulgen
cias a los Fugger, banqueros de
Augsburgo, que le dieron un carác
ter puramente comercial.
de profesor de teología de la Uni En octubre de 1517, Lutero pu
versidad de Wittemberg. blicó un escrito con 95 proposi
Tenía una imaginación ardiente ciones contrarías no sólo a la venta
y una voluntad inflexible. Era per de las indulgencias, sino al prin
tinaz, irascible y decidido; el temor cipio en que se basaban. Siguiendo
de ser tentado por el diablo lo su campaña, entabló controversias
inquietó largo tiempo. públicas con teólogos y redactó
diversos panfletos en alemán. Sus
En el tabique de una habitación, ocu ideas y el movimiento provocado
pada por Lutero en 1521 y 1522, se por ellas constituyeron el lutera-
mostraba una mancha de tinta producida
—según la tradición—, cuando le arrojó el nismo.
tintero “ al diablo que lo molestaba” , im
pidiéndole escribir. A principios de este C o n d e n a c i ó n d e L u t e r o . León
siglo la mancha quedó cubierta bajo una X no dio al principio mucha im
capa de pintura. portancia al hecho, atribuyéndolo a
Una frase de San Pablo, que simples rivalidades entre los domi
dice: el justo es salvado por la fe, nicos y los agustinos, pero en 1520
le devolvió la tranquilidad, pues condenó la doctrina de Lutero y
pensó que aunque el hombre co lo amenazó con la excomunión.
meta pecados, salvará su alma si En diciembre de ese año, el refor
confía firmemente en Dios. mador, apoyado por sus discípulos
y secuaces, quemó públicamente el
Q uerella de las in d u l g e n
Llamábase indulgencia a la
c ia s .
facultad de convertir las peniten
cias merecidas por los pecados, en
el pago de una multa a la iglesia.
documento que le comunicaba la Para conseguir el apoyo de los
amenaza. El papa la hizo entonces nobles, Lutero despertó su codicia,
efectiva. aconsejándoles quitar a la iglesia
Carlos I de España, nieto de los los bienes que poseía en Alemania:
Reyes Católicos, acababa de ser palacios, bosques, aldeas, y campos
designado emperador de Alemania, fértiles bien cultivados, cuya exten
con el nombre de Carlos V. Deseo sión equivalía a la tercera parte de
so de evitar una guerra civil, reu la superficie del país. Sus exhor
nió una asamblea, la Dieta de taciones fueron de inmediato escu
Worms, ciudad de las orillas del chadas; el despojo se llamó secula
Rin, y otorgó a Lutero un salvo rización (devolver las riquezas al
conducto para concurrir ante ella. siglo, es decir, a los laicos). Los
Tras una agitada controversia, caballeros y los campesinos quisie
la Dieta desautorizó las doctrinas ron participar en el reparto, pero
de Lutero y le exigió una retrac la alta nobleza los aplastó al tér
tación que éste no quiso formular. mino de una doble y sangrienta
Condenado a morir en la hogue guerra civil.
ra, como ftereje, Lutero fue salvado Las propiedades eclesiásticas pa
por el elector de Sajonia, que lo saron a poder de los reyes y prín
llevó secretamente al castillo de cipes. A lb erto de B randeburgo
Wartburg, donde quedó escondido adquirió la porción mayor, consis
cerca de un año. Allí redactó una tente en los territorios de los caba
nueva traducción de la Biblia al lleros de la orden teutónica, con
idioma alemán. vertidos en el ducado de Prusia.
24
C o n f e s i ó n d e A u g s b u r g o . Las los sacerdotes oficiantes la comu
guerras y tumultos inspiraron una nión por el vino, los luteranos la
tentativa de arreglo a la Dieta de otorgan a los fieles en las dos es
Spira, la que propuso, en 1529, re pecies.
conocer la Reforma en los lugares Celebración de la misa en idio
donde imperaba, con el compro ma nacional y no en latín.
miso de no llevarla a otras partes.
Seis príncipes y dieciocho ciudades Supresión de las imágenes. Sólo
protestaron contra esa limitación. conservaron la cruz.
El nombre de protestante sirvió Supresión del clero regular y
en lo sucesivo para designar a los cierre de los conventos.
disidentes. Supresión del celibato. Los sa
.Las gestiones conciliatorias fue cerdotes tienen el derecho de ca
ron proseguidas en 1530. Los par sarse. Lutero dio el ejemplo.
tidarios de la Reforma expusieron
su doctrina -redactada por un dis L ig a d e E s m a l c a l d a . La Con
cípulo de Lutero—, en la Confesión fesión de Augsburgo fue rechazada
de Augsburgo, presentada ante una por la Dieta y por Carlos V. Los
dieta reunida en la ciudad de ese príncipes protestantes formaron
nombre. entonces una alianza, en 1531, lla
Los puntos prin cip ales de la mada la Liga de Esmalcalda, y
doctrina luterana son los siguientes. reanudaron la guerra civil, que con
diversas alternativas se prolongó
Las Sagradas Escrituras consti
hasta el año 1555. En esa fecha la
tuyen el único dogma; la palabra
dieta votó la pacificación de Augs
del papa y las decisiones de los
burgo, que reconocía al luteranis-
concilios pueden ser discutidas.
mo, aceptaba el despojo de los
La fe es la única fuente de sal bienes eclesiásticos, con la obliga
vación; las prácticas devotas, las ción de respetar en lo sucesivo las
penitencias, no son indispensables. nuevas propiedades de la iglesia,
Aceptación de sólo tres de los y establecía el principio absurdo
sacramentos: bautismo, confesión de que la religión de cada soberano
y comunión. No reconoce ese ca sería la de su pueblo. Lutero ha
rácter al matrimonio ni a las órde bía muerto en 1546.
nes sagradas (tomar los hábitos),
La iglesia reformada quedó a cargo
y suprime la confirmación y la ex de los pastores o ministros, en cuyo nom
tremaunción. La confesión es una bramiento in terven ía n los fieles y el
simple conversación, en la cual el estado; sobre ellos estaban los superin
penitente no tiene el deber de enu tendentes u obispos, designados por el
príncipe, con funciones de simple fisca
merar sus faltas, ni el sacerdote el lización.
derecho de absolverlo. La reforma afectó también los pue
Negación de la presencia real blos escan d in av os, complicándose con
una cuestión política. El rey de Dina
del cuerpo y sangre de Cristo en marca dominaba sobre Noruega y Suecia;
la hostia y vino consagrado. Según ésta última, convertida al luteranismo, se
esa
K doctrina, están indirectamente,7 sublevó en 1523, bajo las órdenes de
com o el fuego en un hierro hecho Gustavo Vasa, y consiguió la indepen
ascua”. Además, mientras los ca dencia. Años más tarde, los daneses
destituyeron a su soberano y adoptaron
tólicos dan a los fieles la comunión el p rotesta n tism o, lo mismo que los
mediante la hostia, reservando a noruegos.
25
OTROS REFORMADORES gún la cual las personas están des
tinadas a salvarse o perderse, por
Además de Lutero, actuaron en la voluntad de Dios, desde antes
el movimiento reformador, Calvi- de nacer, y cuanto hagan por evi
no, Zuinglio, Juan de Leyde, el rey tarlo será inútil. Cada uno ignora,
Enrique V III de Inglaterra, Juan desde luego, el fin que le espera,
Knox. ya que “el designio divino es ocul
to e incomprensible, aunque justo
C a l v i n o . La Reforma fue en
y eq u ita tivo”. Esta creencia fue
cabezada en Francia por Juan Cal-
abandonada más tarde por la ma
vino (1509 a 1564). Nacido en
yoría de sus discípulos.
Noyón, cerca de la frontera belga,
Lutero era robusto, violento, ale
Calvino estudió derecho y se con
gre, amigo de los placeres y de la
virtió a las nuevas creencias. Lue
buena mesa; Calvino, en cambio,
go, para evitar persecuciones, huyó
delgado, enfermizo, frugal, melan
a Suiza, donde concretó su doc
cólico y taciturno.
trina en el libro La in stitu ción
En 1536 Calvino asumió el go
cristiana. En general, se adapta al
bierno de la pequeña república de
luteranismo, exagerando su rigor.
Ginebra, implantando en ella la
Así, sólo acepta dos sacramentos:
dictadura que, con un breve inter
el bautismo y la comunión, consi
valo, ejerció tiránicamente durante
derando a esta última como un
el resto de su vida. Sus principales
simple acto simbólico, pues niega
adversarios políticos y religiosos
en absoluto la presencia de Cristo,
perecieron en la hoguera o el ca
directa o indirectamente. Además,
dalso; la víctima más ilustre fue
suprime el altar, la cruz y toda
el médico español Miguel Servet,
jerarquía entre los ministros y pas
tores. descubridor del mecanismo de la
circulación pulmonar.
La principal reforma consiste en Ginebra quedó consagrada como
la teoría de la predestinación, se- el baluarte del calvinism o. La
Academia, especie de universidad,
Juan Calvino (1 5 0 9 a 1 5 6 4 ), reform ador
protestante. preparaba los m isioneros de la
nueva doctrina, esparciéndolos por
millares en todas direcciones, y es
pecialmente en Francia, Holanda
y Escocia. Su difusión fue mucho
mayor que la de las otras iglesias
reformadas.
En Zurich (S u iz a ), Ulderico
Zuinglio adoptó la reforma, hacién
dola mucho más radical, hasta el
punto de provocar los anatemas de
Lutero. Los católicos suizos con
siguieron vencerlo en una batalla,
en la que murió. Los partidarios
de Zuinglio se plegaron al calvi
nismo.
J u a n d e L e y d e . Holandés, en
cabezó la secta de los anabaptistas
(los rebautizados: porque volvían
26
Estatuta de U lderico Zuinglio, que recuerda en
Zurich al iniciador de la Reform a en Suiza.
27
Acrecentó el poder monárquico:
en los países protestantes, erigien
do al rey en jefe de la iglesia na
cional, o poniéndola bajo su con
trol; en los países católicos, por las
concesiones que el papa tuvo que
hacer al soberano, para conservar
su apoyo.
luchas enconadas, conocidas con el M otivó una gran transformación
nombre de guerras de religión. Lo de la propiedad, que de eclesiásti
mismo a co n te ció en Alem ania, ca se tornó laica, sobre todo en
donde el factor religioso, combina Alemania.
do con el político, originó la desas Favoreció el d esarrollo de la
trosa guerra de los Treinta Años instrucción primaria, pues hizo in
(1618 a 1648). dispensable la lectura directa de
la Biblia, para poderla interpretar
A m p l it u d y c o n s e c u e n c ia s d e individualmente.
la R eform a. El protestantismo Determinó, dentro del catolicis
abarcó a Inglaterra, Escocia, los mo, una enérgica reacción que pro
países escandinavos, Holanda y dujo la llamada C on trarreform a
partes de Alemania, Francia y Sui (ver capítulo IV ).
za, comprendiendo en conjunto un Finalmente originó, durante el
tercio del catolicismo. Produjo los siglo XVII, la emigración de colonos
siguientes resultados. a la América del Norte para sus
Rom pió la unidad del cristia traerse a las luchas religiosas de
nismo en Occidente. Inglaterra.
28
CAPÍTULO II
29
Mapamundi de Behaim. ¿Qué falta representar entre Asia por un lado y
Africa y Europa por el otro?
30
marinos no se atrevían a flanquear
por su pon erlo más extenso. Gil
Eannes logró superar el obstáculo
y avanzó hacia el sur. Más tarde,
otro marino llegó al cabo Blanco,
en cuya cercanía fundaron los por
tugueses su primera colonia.
En 1445, Dionisio Días tocó el
cabo Verde, así denominado por el
bosque de palmeras que lo cubre.
El paisaje, hasta allí árido, cambió
completamente, presentando una
vegetación exuberante, a pesar de
hallarse bajo el trópico. La afir
mación de T o lo m e o quedó des
mentida por la realidad.
te la construcción de los barcos y La muerte de don Enrique, en
alentó las exploraciones. 1460, no detuvo el impulso descu
En 1418 y 1419 los portugueses bridor. En 1472, Juan de Santa-
descubrieron las pequeñas islas de rem y Pedro de Escobar cruzaron
Porto Santo y Madera, y más tar el ecuador. Por la misma fecha,
de ocuparon las Azores, excelentes Fernando Poo descubrió la isla que
estaciones para ulteriores viajes. lleva su nombre.
Sobre tierra firme africana la En la costa de Guinea fue cons
parte conocida term inaba en el truida la fortaleza de San Jorge de
cabo Bojador, prolongado por un la Mina, famosa en los anales de
arrecife de 8 km de largo, que los la época.
En 1482, Diego Cao entró en la ENCUENTRO DE EUROPA
desembocadura del río Congo y Y AMÉRICA
continuó luego por un trecho hacia
el sur. V ia j e s y c o n q u is t a s de los
32
procedió con energía: bombardeó a Ca- dieron las conquistas hasta las islas
licut, capturó numerosos barcos y quemó Molucas, entrando en relaciones
una escuadrilla cargada de arroz, cuyos
tripulantes fueron horriblemente mutila con China y Japón.
dos antes de ser ejecutados, otro buque El imperio colonial portugués
que regresaba de la Meca, corrió la mis
ma suerte.
abarcó entonces desde el cabo Bo-
jador hasta los mares de la Mala
La actividad de los portugueses sia, a lo largo de más de 20 000 km
perjudicaba al sultán de Egipto, de costa.
dueño del puerto de Alejandría, Los portugueses no colonizaron
uno de los principales puntos de esos vastos territorios. Como los
concentración de los productos de fenicios, fundaron centenares de
Oriente. Protestó en vano ante el castillejos, factorías fortificad as
papa; equipó entonces una flota que visitaban periódicamente las
con ayuda de los venecianos, tam carracas, pesadas naves de comer
bién afectados, pero los portugue cio provistas de cañones. Median
ses la derrotaron en la batalla na te tratados, o por la fuerza, obtu
val de Diú. vieron de los reyes indios y de los
Alfonso de Alburquerque com sultanes mahometanos de las islas
pletó la dominación de las rutas la concesión de puertos y zonas,
marítimas. De 1510 a 1515 tomó donde establecieron guarniciones,
a Goa, convertida más tarde en ca almacenes y arsenales.
pital de las posesiones portuguesas
de Asia, Malaca, sobre el estrecho
que comunica el mar de la China Las especias, perlas, piedras preciosas,
perfumes, sustancias medicinales y tin
meridional con el golfo de Bengala, tóreas, tejidos de seda, porcelanas, eran
la isla de Socotora, desde la cual depositados en Lisboa, inmenso mercado
Podía vigilar la entrada del mar que proveía a los intermediarios extran
^ ° j° , y Ormuz, llave del g o lfo jeros, especialmente a los holandeses.
Pérsico. Muchos banqueros alemanes, genove-
ses y florentinos participaron con sus
Posteriores expediciones exten capitales en estas empresas.
33
Cristóbal Colón En 1476 formó parte de la tri
pulación de una flota comercial
A n te ce d e n te s. Cristóbal Co destinada a las islas británicas. Los
lón nació en Génova, en el año corsarios franceses la atacaron y
1451. Fueron sus padres Domingo capturaron la nave que conducía
Colón, tejedor, y Susana Fontana- a Colón, llev á n d ola a Portugal,
rrosa. Sólo asistió a la escuela de pero el barco fue liberado y pudo
primeras letras, sostenida por el continuar su ruta; llegado a Ingla
gremio de tejedores, pues no es terra, Colón participó de una ex
cierto que estudiara en la Univer pedición que alcanzó Islandia.
sidad de Pavía, como suele afir En 1478 regresó a Lisboa donde
marse. E m barcóse a los catorce se unió en matrimonio con Felipa
años, quizás antes, alternando las Muñiz Perestrello, hija de un na
tareas de a bordo con el oficio vegante portugués de ascendencia
paterno. italiana, dedicándose al trazado
de cartas marinas y a la venta de
libros, en cuyas tareas lo secunda
ba su hermano Bartolomé. Duran
te un tiempo residió en la isla de
Porto Santo, en el Atlántico, de la
que su suegro había sido capitán;
allí adquirió interesantes noticias
sobre la existencia de tierras des
conocidas situadas en el occidente
del océano.
34
C olón explica sus planes e ideas ante los R eyes Católicos. (Cuadro d e Francisco Jover.J
35
Hernando de Talavera, para exa los posibles pleitos entre Castilla y las
minar las propuestas de Colón; nuevas tierras; finalmente, debía contri
buir con un octavo de los gastos de la
pero la mayoría no las estimó sa expedición, con derecho a igual parte de
tisfactorias por los mismos moti las ganancias que ésta produjese.
vos que la portuguesa, y después
de tres años emitió un dictamen
negativo. Durante este lapso, el
El descubrimiento de América
descubridor recibió ayuda pecunia E spaña en el m om ento del
ria de los reyes, a quienes siguió en Reyes Ca
d e s c u b r im ie n t o . L os
sus frecuentes viajes. Al mismo tólicos, Fernando de Aragón e Isa
tiempo entabló nuevas negociacio bel de Castilla, consolidaron fir
nes con Juan II, sin mayor resul memente las bases de la unidad
tado, com o tampoco lo obtuvo su política española.
hermano Bartolomé ante las cortes
de Inglaterra y Francia. La industria había alcanzado en
su época notable incremento. Pros
Al conocer el fallo adverso de peraban las fábricas de tejidos, la
la junta de peritos, Colón volvió a metalurgia, cerámica, mueblería y
la Rábida, donde había dejado a joyería, la explotación de salinas
su hijo, con el propósito de regre y minas, al par que florecían la
sar a Portugal; Pérez y Marchena
ganadería, la pesca y los cultivos.
lo disuadieron, apoyados por el
piloto Martín Alonso Pinzón. Fray El comercio contaba con cerca
Juan Pérez escribió entonces a la de un millar de barcos mercantes,
reina, abogando calurosamente por que surcaban el Mediterráneo y el
la em presa propuesta. Isabel lo Atlántico. Barcelona, Valencia, Se
llamó, y convencida por sus argu villa y Bilbao eran los principales
mentos, reanudáronse las negocia puertos.
ciones con la venida de Colón a
Los reyes católicos reglamentaron mi
la Corte. La .expedición quedó de nuciosamente la producción y el inter
cidida en principio, pero parecie cambio, suprimieron aduanas interiores y
ron otra vez tan exageradas las otras trabas, y dictaron leyes que prote
condiciones impuestas, que la rei gían la industria nacional de la compe
tencia extranjera.
na no las aceptó.
Los banqueros genoveses, lombardos y
Había partido ya Colón de San florentinos establecieron sucursales en
ta Fe, punto de residencia de los muchas ciudades españolas; a ellos se su
reyes, frente a Granada, que esta maron poco después los alemanes, sobre
todo las poderosas casas de los Fugger y
ban sitiando, cuando a las dos le los Welser, llamados Fúcares y Belzares
guas fue alcanzado por un alguacil, por los castellanos.
con orden de regresar. El 17 de
abril de 1492 la reina Isabel firmó La cultura renacentista comenzó
con el marino las capitulaciones a difundirse en la Península. En
en Santa Fe. Zaragoza y en Valencia aparecie
ron los primeros libros impresos;
Colón adquiría para si y sus descen entre 1474 y 1484 se instalaron
dientes el título de almirante de las islas
cuatro imprentas en el reino de
y tierras firmes que descubriera; sería
virrey y gobernador general de ellas, con Aragón y en el de Castilla.
facultad de proponer los candidatos para El poder exterior de España au
los cargos que fuesen creados; recibiría mentó con las alianzas matrimo
el décimo de las riquezas que se encon
traran; le correspondería a él y a sus niales. Una hija de los soberanos
sucesores entender como únicos jueces en casóse con el rey de Portugal. Otra,
36
C a t a lin a <le A r a g ó n , con A r t u r o , Jttl 3 de agosto zarparon los bar
príncipe heredero de Inglaterra, y cos tripulados por unos noventa
a la muerte de éste con su cuñado, hombres, cuatro de ellos procesa
el futuro Enrique VIII. El infante dos por delitos comunes y que fue
Don Juan y s u hermana Doña ron indultados al regreso; no les
Juana, con Margarita y Felipe, hi acompañaba ninguna mujer ni sa
j o s de Maximiliano de Habsburgo, cerdote.
emperador de Alemania. No debe Colón asumió el mando de la
olvidarse, además, que la corona nave mayor: la Santa María, de
de Aragón poseía las islas de Cer- 225 toneladas, muy velera y pro
deña y Sicilia. vista de puente (o sea de cubier
ta ); Martín Alonso Pinzón, el de
La Pinta, y su hermano Vicente
EL VIAJE DESCUBRIDOR Yáñez Pinzón, el de La Niña.
La expedición permaneció en las
Los gastos ocasionados por esta Canarias hasta el 8 de septiembre,
política y por la guerra de Grana para arreglar algunas averías de
da consumieron el tesoro real. La Pinta.
La escasez de fondos provocó Ese día afrontó el mar descono
dificultades para el equipo de la cido, navegando hacia el oeste, casi
expedición de Colón. De allí nació en línea recta dentro de la zona
la difundida leyenda según la cual de los vientos alisios, favorecida
Isabel vendió o empeñó sus joyas por un tiempo excepcionalmente
para conseguir el dinero indispen bueno.
sable; en realidad, ésta sólo ma
nifestó su propósito de hacerlo, de Colón desplegó en el viaje su recono
haber sido necesario. cida pericia y serenidad de ánimo. Ex
plicó a la temerosa tripulación, en forma
La flotilla quedó formada por convincente, la causa de la desviación de
tres carabelas: la Pinta y la Niña, la aguja magnética hacia el noroeste,
embargadas a cuenta de la Villa pero les ocultó la verdadera distancia re
de Palos, en castigo de algunas corrida, aminorándola, y aprovechó e?
levantarse vientos contrarios para demos-
faltas cometidas por ese municipio, trarles que, con su auxilio, era posible el
y la Santa María, arrendada a su retomo. Un supuesto motín, le habría
dueño. Los aprestos se debieron obligado a pedir tres días de plazo, con
en gran parte a la poderosa ayuda la promesa de regresar si a su término
no encontrase tierra. Los historiadores
pecuniaria y técnica de Martín actuales niegan que se haya producido
Alonso Pinzón. el motín.
R econstrucción de la cabina de C olón en xa
nave Santa M aría.
38
VIAJES POSTERIORES de azúcar de las Canarias y varias
DE COLÓN reses.
En busca de nuevos abasteci
S e g u n d o v i a j e . El 25 de sep mientos, Colón envió a España al
tiembre de 1493, Colón salió de piloto Torres, dedicándose él a re
Cádiz con 17 naves y 1 200 hom correr el interior de la Española;
bres, entre los que figuraban su con tres naves reconoció gran par
hermano menor Diego, el cartó te del litoral sur de Cuba y la isla
grafo Juan de la Cosa, y Alonso de Jamaica.
de Ojeda, futuro explorador del En la Española se halló poco
Darién. oro y pronto faltaron víveres; el
A partir del l 9 de noviembre carácter díscolo y aventurero de la
descubrió sucesivamente diversas mayoría de los exp ed icion arios
islas de las Antillas Menores, desde agravó la situación. En mayo de
la Deseada hasta San Juan (actual 1496, el almirante decidió regresai
Puerto R ico). En la Española en a la Península, dejando como go
contró destruido el fuerte Navidad bernador y capitán general a su
y muertos sus ocupantes, a causa hermano Bartolomé, llegado poco
de violentos conflictos estallados antes.
con los indígenas. Cerca del lugar
fundó una población con el nom T e r c e r v i a j e . Colón llevó con
bre de Isabela, y comenzó las ta sigo quinientos indios, para ven
reas de colonizar y convertir a los derlos como esclavos, lo que dis
indios. gustó a la reina. Por otra parte
A ese efecto, venían con él algu el arcediano de Sevilla, Juan de
nos religiosos, en cab eza d os por Fonseca, encargado de los asun
fray Bernardo Buil, y labradores tos de Indias, manifestó desde el
y mineros. También traía semillas primer momento su antipatía por
de cereales, legumbres, vides, caña el almirante.
39
Éste, sin duda, era mejor mari Isabela. Los motines y agitaciones
no que organizador y cometió mu seguían perturbando la colonia y,
chos errores, com o pudo compro com o la situación no mejorase con
barlo Juan de Aguado, enviado la llegada del almirante, los reyes
para verificar las frecuentes quejas enviaron a Francisco de Bobadilla
llegadas a la corte. Consiguió Co en carácter de comisionado y con
lón, sin embargo, disipar el am poderes extraordinarios.
biente desfavorable, y en mayo de Bobadilla, prevenido contra el
1498 zarpó de Sanlúcar de Barra- almirante, y procediendo con pre
meda con 6 naves y 600 hombres. cipitación, lo aprisionó junto con
En las Canarias dividió su flota: sus hermanos Diego y Bartolomé,
la mitad fue directamente a la Es y los envió encadenados a España,
pañola; Colón, con la otra mitad, en octubre del año 1500.
tocó las islas de Cabo Verde y se Femando e Isabel repararon en
dirigió hacia el ecuador, pero un seguida el injusto agravio, y susti
largo período de calma le obligó tuyeron a Bobadilla por Nicolás de
a torcer el rumbo hacia el oeste. Ovando en el gobierno de Santo
A fines de julio avistó la isla Tri Domingo.
nidad, penetró en el golfo de Paria C u a r t o v i a j e . El almirante es
después de pasar ante el delta del cribió entonces su Libro de las Pro
Orinoco, y reconoció la isla Mar fecías, dedicádo a los reyes. En
garita, sobre el litoral de Vene uno de los pasajes les proponía
zuela. emprender otro viaje con el exclu
La amplitud y caudal del río sivo fin de conseguir oro y perlas
Orinoco confirmaron su convicción en cantidad suficiente para equi
de haber llegado al Asia, precisa par un ejército, destinado a resca
mente al lugar del Paraíso Terre tar el Santo Sepulcro de manos de
nal adonde nadie podía arribar si los infieles. Accedieron los sobera
no lo amparaba la voluntad divina. nos bajo condición de que no to
En la Española, Bartolomé Co caría en la Española, no tendría
lón había fundado la ciudad de mando alguno sobre las nuevas
Santo Domingo, sobre la costa sur, comarcas que descubriese, y renun
llevando a ella los habitantes de ciaría a participar en toda posible
40
Con naves com o ésta se realizaron los primeros
viajes interoceánicos. La del grabado ilustraba una
Carta que C olón publicó en 1494, dirigida a R a
fael Sánchez.
41
geográfica de las razas y originó la
formación de mestizos. Millares de
blancos fijaron su residencia en
América, y cruzándose con los me
dios engendraron los mestizos. Los
negros, elemento étnico extraño al
medio, al unirse con blancos e indí
genas originaron los mulatos y los
zambos, respectivamente.
C o n s e c u e n c ia s e c o n ó m ic a s .
Cambió las rutas comerciales. És
tas se dirigían antes a Oriente, cru
zando el Mediterráneo, y por los
puertos de Levante tomaban con
tacto con el tráfico terrestre y ma
rítimo de los árabes. Los mercados
C o n s e c u e n c i a s p o l í t i c a s . M o sudeuropeos, a su vez, estaban en
dificó la importancia de los esta comunicación con los de la Liga
dos eu ro p eo s. C on tribu yó a la Hanseática. Después del descubri
decadencia de los estados del M e miento, se abrieron dos grandes
diterráneo, sobre todo Génova y rumbos: uno, dominado por los
Venecia; progresaron en cambio los portugueses, costeaba el continen
del Atlántico, España y Portugal, te africano, y por el cabo de Buena
y posteriormente, Holanda e In Esperanza llegaba a la India, ar
glaterra. Facilitó el robustecimien chipiélago Indomalayo, China y
to de la burguesía. Los comer Japón; el otro, en poder de los es
ciantes, banqueros, industriales y pañoles, cruzaba el océano Atlán
armadores de barcos prosperaron tico y llegaba a América. Amplió
rápidamente. Su riqueza mueble, el comercio. Con la explotación de
formada por dinero, mercaderías, las minas, el tabaco, cacao, algo
naves y útiles, predominó sobre la dón, coca, añil, papa, maíz, aumen
inmueble, constituida por la pro tó el intercambio de productos.
piedad del suelo, principal elemen En el siglo X V I I se formaron com
to de dominación de la nobleza. pañías de comercio, con capitales
Concurrió a la consolidación de la considerables. La existencia de oro
autoridad monárquica. El poder y y plata creció en Europa en pro
la riqueza, proporcionados por las porción de uno a doce, por la con
conquistas, y el apoyo de la bur ducción a España de metales pre
guesía, dieron a los reyes valiosos ciosos. Este aumento produjo un
medios para establecer el despo alza general en los precios. Fomen
tismo. Produjo la reaparición de tó las industrias. La prosperidad
la esclavitud en occidente. La de elevó el nivel general de vida. La
bilidad física de muchos pueblos edificación, el mobiliario, los ves
americanos, y la oposición obsti tidos, la ropa interior, los alimen
nada de otros, provocó el resurgi tos, las alhajas y los artículos de
miento de la esclavitu d (supri adorno mejoraron sensiblemente.
mida por el cristianismo), con el La industria naviera se desarrolló
cautiverio de los negros, que fue con la habilitación de astilleros y
ron empleados en los trabajos más la con stru cción y ensanche de
pesados. Modificó la distribución puertos. Estableció el monopolio.
42
Las naciones colonizadoras acapa com o piloto de la expedición poi-
raron el movimiento económico de tuguesa de Gonzalo Coelho.
sus posesiones de ultramar, exclu Según Vespucio, en este último
yendo toda competencia extran viaje llegó hasta los 50° de latitud
jera. Implantó la explotación de sur, pero parece que a partir del
especies animales y vegetales in cabo Santa María —próximo a la
troducidas en América. El ganado isla Santa Catalina—, perdió de vis
vacuno, ovino, caballar, mular, as ta el continente, internándose en el
nal, porcino y cabrío, variedades océano.
de aves de corral, legumbres, fru Como Vespucio no recibiese del
tas, cereales y plantas industriales, rey de Portugal la recompensa es
originarias del V iejo Mundo, en perada, regresó a España, donde
contraron en el Nuevo, campo pro desempeñó el cargo de piloto ma
picio para su multiplicación. yor, hasta su muerte, acaecida en
En lo que se refiere particular febrero de 1512.
mente a España el descubrimiento En cartas remitidas a Lorenzo
le aportó un inmenso poder, pero el de Médicis, señor de Florencia,
esfuerzo exigido por la conquista y Vespucio hizo un relato pintoresco
población de tan vastas comarcas de sus viajes. Al año siguiente fue
concluyó por debilitarla. Sus indus ron publicadas en París, traducidas
trias, afectadas también por la ex al latín, con el título de Mundus
pulsión de los árabes y los judíos, Novus, pues al referirse al conti
sufrieron el efecto de la magna nente americano decía el autor “y
empresa. a dichas regiones podemos cierta
mente denominarlas nuevo mundo,
porque no las conocieron nuestros
EL NOMBRE DE AMÉRICA mayores”. En otro pasaje afirma:
“al sur de la línea equinoccial, he
El florentino Américo Vespucio encontrado países más templados
dedicóse desde su juventud al co y amenos, de mayor población que
mercio, como agente de la pode cuantos conocemos. Es la cuarta
rosa casa bancaria de los Médicis. parte de la Tierra” (las otras tres
En cumplimiento de sus tareas, eran Europa, Asia y África).
pasó a Sevilla, y al cabo de algún El capellán del duque de Lorena
tiempo se dedicó a la navegación. concibió el proyecto de incorporar
De los cuatro viajes que declara dichas cartas a una obra que tu
haber efectuado, sólo dos son indis viese como base la cosmografía de
cutibles: el de 1499 a 1500, con Tolomeo, rectificada con los últi
Alonso de Ojeda, y el de 1501, mos descubrim ientos. Para ello
recabó la colaboración de tres pro
fesores, uno de los cuales era el
alemán Martín Waltzemüller.
Se p u b licó prim eram ente un
prólogo (introductio), con nocio
nes generales y las cartas vespu-
cianas. En esa obra, el Nuevo
Continente es llamado por primera
vez Américi terrae, o sea: tierras
de A m érico. El lib ro com p leto
apareció en Estrasburgo en 1513.
Tanto éste como la Introductio
43
alcanzaron una gran difusión, con LOS VIAJES
sagrándose rápidamente el nombre DE LOS CASTELLANOS
de América.
El descu brim ien to hecho por
Colón determinó un intenso movi
Hasta 1503, Vespucio firmó Alberigo; miento hacia el Nuevo Mundo.
de allí en adelante substituyó ese nom Entre 1499 y 1502 se realizaron
bre por el de Amérigo. Algunos histo seis expediciones castellanas, co
riadores atribuyen el cambio a la impre
sión profunda que causó en él la noticia nocidas con el nombre de viajes
de la existencia de una cadena de mon menores. Exploraron las costas de
tañas ricas en oro, llamadas A m erik, la actual Venezuela, y una de ellas,
situada en Nicaragua. dirigida por Vicente Yáñez Pinzón,
Así, un sabio alemán, profesor de uní. tocó el Brasil en febrero de 1500,
universidad francesa, dio a la tierra ex dos meses antes de que lo hiciera
plorada por españoles y portugueses el
nombre de un marino italiano. América
una expedición portuguesa manda
nacía bajo el signo generoso de la cola da por Pedro Álvarez Cabral. Años
boración internacional. más tarde, los españoles fundaron
sUs- primeros establecimientos so traciones geográficas, firmaron una
bre el golfo de Darién, y en 1513, capitulación con el nuevo sobera
Vasco Núñez de Balboa cruzó el no, Carlos I de España y V de
istmo de Panamá y descubrió el Alemania, por la que se compro
océano Pacífico, que llamó mar metían a hallar la comunicación
del Sur. interoceánica buscada por Solís.
La flota, compuesta por 5 naves
EL CAMINO DE LA ESPECIERÍA y 265 tripulantes, zarpó de San-
lúcar de Barrameda el 20 de sep
Desde entonces, la principal pre tiembre de 1519. Hizo escala en
ocupación de los españoles consis las islas Canarias y tomó rumbo al
tió en encontrar un paso que comu sur, probablemente en demanda de
nicara el océano Atlántico con el vientos propicios, que no encontró,
Pacífico, recientemente descubier perdiendo varias semanas. Maga
to, a fin de llegar a las Indias por llanes, molesto por el contratiempo,
una ruta distinta a la que tenían se encolerizó ante un pedido de
monopolizada los portugueses. Esa explicaciones sobre la ruta seguida,
ruta fue llamada el camino de la que le hizo el segundo jefe, Juan
especiería, pues el principal obje de Cartagena, y ordenó su arresto.
tivo perseguido era alcanzar las El hecho dividió a la tripulación
Molucas, archipiélago de la Indo en dos bandos.
nesia y principal centro de pro En noviembre avistó el Brasil y
ducción de las especias: pimienta, recorrió su litoral, entrando a prin
canela, clavo de olor, muy codi cipios de enero de 1520 en el río
ciadas en esa época. de la Plata.
Magallanes creyó, seguramente,
Juan Díaz de Solfa creyó encon haber llegado al anhelado paso, sin
trar ese paso en 1516 al entrar que la comprobación hecha por
en el río de la Plata, pero se con Solís de que el presunto estrecho
venció de su error y pereció a era un río, pareciera desviarle' de
manos de los indios. su idea.
Pero la exploración cuidadosa
A lejo García, con algunos com
del estuario, hasta el río Uruguay,
pañeros náufragos de una de las
disipó sus esperanzas; ordenó en
naves de Solís, atravesó el sur del
consecuencia continuar viaje, y a
Brasil, el Paraguay y el Chaco, y
fines de mayo fondeó en el golfo
alcanzó los bordes del Imperio de
de San Julián. Allí sofocó con gran
los Incas. Pereció a su regreso,
victima de una emboscada.
MAGALLANES
Correspondió a Hernando de
Magallanes, marino portugués al
servicio de España, descubrir el
estrecho que com u n ica am bos
océanos.
Magallanes y el astrónomo Ruy
Ealeiro, encargado de las demos-
46
el mismo Mar del Sur descubierto hizo asesinar en un banquete a
por Balboa siete años antes. Maga Duarte Barbosa, cuñado y sucesor
lla n es tardó treinta y siete días en del malogrado jefe, y a los espa
recorrer el estrecho, al que bautizó ñoles invitados.
con el nombre de Todos los Santos Los demás se apresuraron a zar
y que hoy es designado con el suyo. par, bajo las órdenes del piloto
La travesía del P a c ífic o fue Juan Carvallo. Como a causa de
singularmente penosa: los marinos las pérdidas sufridas no podían tri
padecieron hambre y sed, hasta pular suficientemente los tres bar
llegar, en marzo de 1521, a un cos, incendiaron al más deteriorado.
archipiélago, que denominaron de Carvallo se dedicó a la piratería,
los Ladrones, porque los naturales con disgusto de sus subordinados,
del lugar, al subir a bordo, tomaron que acabaron por deponerlo. Gon
sin ambages cuanto objeto les lla zalo Gómez de Espinosa y Juan
mó lo atención. En el mismo mes Sebastián Elcano asumieron enton
la expedición alcanzó el archipié ces el mando de las dos naves
lago de San Lázaro, o de las Fili restantes. Luego de recorrer nu
pinas, nombre que recibió más tar merosas islas, anclaron en el puerto
de en honor de Felipe II. de Tidore, en las Molucas. Allí
El reyezuelo de la isla de Cebú resolvieron separarse. Gómez pro
se reconoció vasallo de Carlos V. curó alcanzar América, pero fue
Magallanes, en el deseo de com capturado por los portugueses; El
placerlo y demostrar a la vez el cano, con la Victoria, cruzó el océa
valor de sus soldados, atacó al so no índico, dobló el cabo de Buena
berano rival, del cercano islote de Esperanza y navegó en pleno
Mactán, pereciendo con siete com Atlántico, alejándose de los parajes
pañeros, el día 27 de abril, tras frecuentados por la escuadra del
una resistencia heroica. Para apla rey de Portugal.
car la cólera del inesperado ven La falta de víveres y de agua
cedor, el cobarde monarca de Cebú potable le obligó a tocar las islas
de Cabo Verde, donde el gober bamiento de la tierra”. Un tercero
nador detuvo a los marineros que naufragó y un cuarto volvió a Es
desem barcaron ; otros m urieron paña, tras muchas peripecias.
durante el viaje.
Los cuatro buques restantes lle
El 7 de septiembre de 1522, la
garon al Pacífico en mayo de 152&
V ictoria, con sólo 18 hom bres,
Loaysa y Elcano murieron a bordo
completamente exhaustos, entró en
de la nave capitana, que pudo lle
Sanlúcar de Barrameda, casi a los
gar a Tidore; dos se fueron a pique,
tres años justos de la partida.
y la última alcanzó la costa de
Carlos V otorgó a Elcano un escudo México, después de recorrer, por
coronado con un globo, que ostentaba, en primera vez, todo el litoral oestñ
latín, la siguiente leyenda: “Fuiste el de la América del Sur y Central.
primero en circundarme” . La expedición
Desde Cuba, los españoles des
de Magallanes, terminada por Elcano,
había c u m p lid o en efecto la primera cubrieron la península de Florida,
vuelta al mundo, y demostrado práctica en los actuales Estados Unidos;
mente la redondez de la Tierra. luego se internaron en ese país, y
en 1541 Hernando de Soto llegó
O t r o s v i a j e s . Una nueva flota
por primera vez a las orillas del río
salió de La Coruña en junio de
Misisipi. Otros navegantes reco
1525, mandada por frey García
rrieron el litoral mexicano. Los
Jufré de Loaysa, para repetir el
viajes posteriores se confunden con
recorrido de Magallanes. Elcano
las campañas de conquista.
figuraba en ella en calidad de
piloto.
CONFLICTOS ENTRE
La expedición soportó furiosos ESPAÑA Y PORTUGAL
temporales y vientos contrarios.
Un barco se perdió frente al estre T r a t a d o d e T o r d e s i l l a s . Al
cho de Magallanes; otro, impulsa conocer el papa Alejandro V I los
do por el vendaval, recorrió la cos resultados del primer viaje de Co
ta oriental de Tierra del Fuego lón, suscribió, en mayo de 1493,
hasta los 55° de latitud sur, donde vina bula que concedía a los Reyes
los marinos comprobaron “el aca Católicos las islas y tierras firmes
recien tem ente descubiertas o a LAS OTRAS EMPRESAS
descubrir, siempre que no hubiesen EUROPEAS EN AMÉRICA
sido adjudicadas por bulas ante
riores a otro soberano. La actitud L o s i n g l e s e s . Entre 1497 y
del papa concordaba con las teo 1501 diversas expediciones salidas
rías políticas de la época, por las de Inglaterra recorrieran el litoral
cuales correspondía al jefe de la atlántico de la América del Norte,
cristiandad otorgar la soberanía desde Florida hasta 1^ península
sobre los pueblos infieles o desco del Labrador, que costearon infruc
nocidos. tuosamente en busca de una vía
Poco después dictó una segunda marítima que condujese al Asia.
bula, destinada a deslindar las res Después de un intervalo de más
pectivas zonas de influencia de las de ochenta años, Gualterio Raleigh
coronas de Castilla y Portugal, las intentó fundar una colonia, sin con
que separó por un meridiano tra seguirlo. Bautizó con el nombre de
zado cien leguas al oeste de las Virginia, Tas tierras por él visitadas.
islas Azores y de Cabo Verde; la Más tarde se formaron en Londres
zona oriental correspondía a los dos compañías, destinadas a la ex
portugueses y la o ccid en ta l a plotación de esas regiones; una de
los españoles. ellas pasó luego al dominio real.
El rey de Portugal no aceptó La primera población estable de
esta resolución, y tras largas nego los ingleses fue Jamestown, a la
ciaciones firmó con los Reyes Cató entrada de la península de Chesa
licos el Tratado de Tordesillas, que peake (1 6 0 7 ). En 1620 un grupo
llevaba la línea del papa 370 le de exiliados por causas religiosas
guas al oeste del archipiélago de fundó a Nueva Plymouth, más al
Cabo Verde. norte.
L os ingleses llegan a la costa de Virginia: la ilustración muestra cóm o las islas costeras dificul
taban el acceso de loa barcos a tierra firme. Fue dibujada por De B ry (com o la de la pág. 3 9 )
e ilustraba el relato de uno de los descubridores de la comarca.
Posteriormente los reyes de In Unidos y con Jacobo Cartier entra
glaterra concedieron permiso para ron en el rio San Lorenzo, en 1534.
instalar nuevas colonias, y desalo Después de una larga interrupción
jaron por la fuerza a varios grupos Sam uel Cham plain reanudó las
de holandeses establecidos en la expediciones y en 1608 fundó la
región. En definitiva, sobre el lito ciu dad de Q uébec y p o c o más
ral atlántico se constituyeron trece tarde Montreal. Champlain había
colonias, con las ciudades de Bos llevado consigo algunos misioneros
ton, Nueva York y Filadelíia. Los franciscanos, a los que se unieron
ingleses ocuparon también Jamai los jesuitas. Estos religiosos mar
ca, en 1655, y otras islas de las charon a través de los bosques y
Antillas, y la parte occidental de descubrieron los grandes lagos.
la Guayana. Luego, con algunos aventureros,
descendieron por el río Misisipí,
L os f r a n c e s e s . Exploraron la desde sus nacientes hasta su con
costa norte atlántica de los Estados fluencia con el Arkansas. Roberto
Cavelier de Lasalle recorrió des tentativas para establecerse en
pués totalmente el río, hasta salir la Florida y en el Brasil, sin re
al golfo de México, y tomó pose sultado.
sión de la llanura meridional del
Misisipí, que llamó Luisiana, en L o s h o l a n d e s e s . El capitán
honor de su rey, Luis X IV . Se inglés Enrique Hudson, al servicio
formaron así dos colonias: la de de Holanda, exploró en 1609 el
Canadá o Nueva Francia al norte, río que hoy lleva su nombre. La
con capital en Montreal, y la de Compañía Holandesa de las Indias
Luisiana al sur, con capital en O ccid en tales fundó allí Nueva
Nueva Orleáns. Amsterdam, tomada por los ingle
En las Antillas los franceses ses en 1664, que le cambiaron el
ocuparon Haití, Martinica, Guada nom bre por el de Nueva York.
lupe y otras islas menores, y en Otras poblaciones del mismo ori
América del Sur, la parte oriental gen cayeron también en manos de
de la Guayana. Hicieron varias los británicos.
51
G rabado del siglo XVIII que muestra una población iroquesa asediada por las tropas francesas m a n
dadas por Champlain. Observe la em palizada y el río que protegen la aldea, y la torre desde la
cual actúan los atacantes.
52
CAPÍTULO III
LA H ER EN CIA PO LÍTICA
DE LOS
REYES C A T Ó L IC O S
53
Fragm ento de una extraña
joya, esculpida en piedra en
el siglo x v i. Representa a
Carlos V recibiendo el ho
m enaje de Francisco I de
Francia. (M u seo de Histo
ria del A r te de Viena / F o
to E. Schw enk.)
54
Estado actual de las ruinas de la ciudad ceremonial maya de Chichén Itzá.
55
Calendario solar azteca. ( M u seo d e An
tropología, M é x ic o .)
58
D esd e el r e cin to fortificado o “ pucará" de Tilcara, que controlaba el acceso a la quebrada de
H um ah u aca, al Altiplano y a los valles bajos jujeños, los indígenas opusieron tenaz resistencia a
los españoles.
39) P u e b lo s de la cu en ca
d e l P la ta . indios del Para
L os
ná. En la ribera del chaco santafe-
sino y correntino-entrerriano hasta
el delta.
Los del grupo guaycurú. Com
prendía a los timbóes, mocoretaes,
61
corondas, charrúas, etc.; cazadores Los guaycurúes, de tez y ojos
y pescadores, sabían secar y ahu claros, agrupados en rancheríos.
mar los pescados. Los hombres Sus rasgos típicos coin cid en con
iban desnudos, vivían en albergues los ya descriptos; los tupiguaraníes,
improvisados con esteras. extendidos desde el río Amazonas
al Plata y del Atlántico a la actual
Los del grupo guaraní. Ubica Bolivia; vivían en casas colectivas,
dos en la vertiente paraguaya del de muchas habitaciones; dormían
Paraná, Misiones y norte de Co en hamacas suspendidas de tron
rrientes. D e estatura m ediana, cos o postes. Cultivaban maíz, ba
lampiños, bronceados; cultivaban, tata, mandioca, porotos y además
en forma rudimentaria, maíz, man la yerba mate y el tabaco. Practi
dioca, zapallo, papa y algodón . caban la caza y la pesca y eran
Vivían de la caza y de la pesca. muy buenos canoeros. Las muje
L evan taban ranchos de ramas y res hilaban y tejían el algodón y
hojas. Los hombres se incrustaban la fibra del caraguatá; hacían ces
en el labio inferior el “tembetá”, tas y modelaban vasijas de barro.
cilindro de madera; se adornaban Formaban tribus dirigidas por “tu-
con plumas y collares de semillas bichás” (caciques).
y se pintaban la cara. Creían en Tupá, dios de los ra
Formaban tribus mandadas por yos y relámpagos, y en Sermé, que
caciques. Como armas empleaban había enseñado a los hombres el
arcos, flechas y garrotes. Adora cultivo del suelo y el trabajo ma
ban a un Ser Supremo y creían en nual. También practicaban la an
la inmortalidad; devoraban parte
tropofagia ritual.
de sus enemigos sacrificados (an
tropofagia ritual). H ablaban un Los chanáes y los charrúas ocu
idioma dulce y expresivo. En el paban el litoral desde Yapeyú has
delta se ubicó un grupo extraño ta el delta y se extendían por la
muy belicoso conocido por el nom república del Uruguay y parte del
bre de querandíes. litoral de la provincia. Los prime
ros, de alta estatura, vestían con
Los indios del Uruguay. Consti pieles, vivían en toldos, navegaban
tuyeron tres grandes naciones ubi en largas canoas de hasta cuarenta
cadas de norte a sur, desde el Bra remeros. No practicaban la agri
sil hasta el R ío de la Plata: cultura.
64
V ieja fotografía de un cacique alacaluf, vestido
con un manto de pieles de guanaco.
65
CONCEPTO POLÍTICO tierras descubiertas a los Reyes
DE "INDIAS" Católicos. Pertenecían a éstos en
dominio personal, y no a los paí
ses de Castilla y León.
Las Bases legales de los domi
nios españoles en el Nuevo Mun 3° ) El “poblamiento”. Para ha
do se afirmaron: cer efectivo el ejercicio del poder,
se dispuso la fundación de ciuda
1?) Según la teoría del Dere des y plazas fuertes y la concen
cho Divino, los soberanos ejercían tración de indígenas repartidos en
el poder por voluntad de Dios, la grupos numerosos entre los “enco
que era confirmada por el Papa. menderos”, con facultad de explo
Naturalmente, los caciques y jefes tarlos económicamente.
indígenas carecían de esa voluntad
divina, por lo que se consideró que 49) Dada la magnitud de la em
los países donde mandaban esta- presa la Corona dio al prin cip io
gan “sin dueño”. participación a los encomenderos
(el rey les “encomendaba” el cargo
2 °) Aplicando la teoría del De de administrar vastas comarcas)
recho D ivin o, el papa Alejan en condiciones minuciosamente re
dro V I otorgó la soberanía de las glamentadas. Comprendía un nú
cleo de indios confiados a un par treinta días de trabajo obligatorio.
ticular por la vida de éste y con El Consejo de Indias por la Real
frecuencia de uno o más sucesores. Cédula de 1618 las consagró defi
Debía atender a sus necesidades nitivamente.
materiales y civilizarlos. Recibía
com o retribución el producto del L a s r e d u c c i o n e s . Con los in
trabajo en su obsequio: “el servi dios no encomendados se crearon
cio personal”. las redu ccion es. Debían residir
Hubo dos formas principales: la dentro de un área de la que estaba
mita, trabajo en las minas durante p roh ib id o alejarse. Tam poco po
dos meses al año, y el yanaconaz- dían establecerse en esa zona per
go, cultivo del suelo y quehaceres sonas extrañas. Los gobernaba un
domésticos. Cabildo de indios p resid id o por
un cacique. Un cura d octrin ero
En el R ío de la Plata las prime
atendía el culto, y un corregidor
ras encomiendas ( o repartimiento
recau ¡aba un tributo anual sobre
de indios, co m o se d e c ía ) data
cada varón de 18 a 50 años.
ban de 1549, en la época de Irala.
Cerca de Buenos Aires se insta
Un censo de 1678 señalaba la exis
laron las reducciones de Santiago
tencia de 259 encomiendas con tre
de Baradero, con guaraníes del
ce mil indios en las gobernaciones
Delta, y la de Quilmes, con indios
de Buenos Aires y Tucumán. Ocho
diaguitas de ese nombre, traslada
veces se ordenó la supresión a par
dos desde Catam arca en castigo
tir de 1696, sin conseguirlo en la
por una sublevación.
práctica. Las últimas subsistieron
hasta 1803. Las “ ordenanzas de A lfa ro ", que legislaban so
En 1543, atendiendo a la apa bre el trato dado a los indios. ( M u seo d e la Casa
d e G obierno.)
sionada campaña de fray Barto
lomé de las Casas, Carlos V dictó
“Las Leyes Nuevas” que limitaban
la concesión de nuevas encomien
das y disponían el cese de las res
tantes a la muerte de sus dueños.
Los indios liberados quedarían ba
jo el dominio directo de la Corona.
La aplicación de estas leyes fue
resistida y cayeron en desuso. Fe
lipe III insistió en com b a tir los
abusos cada vez más graves de
los encomenderos. A ese efecto fue
designado F ra n cisco de A líaro,
quien en 1611 visitó el interior de
nuestro país, llegando hasta Bue
nos Aires y Asunción. En octubre
Promulgó las Ordenanzas de Alia-
To> que prohibían el “servicio per
sonal” de los indios. Sus artículos
limitaban severamente las atribu
ciones sobre el indio encomenda
do. Las reducían al cobro de un
tributo de cinco pesos anuales o
CONQUISTA DE MÉXICO los aztecas, situada en una isla del
lago Texcoco y retuvieron con ellos
Los españoles establecidos en al citado soberano, en prenda de
Cuba tuvieron pronto noticia de seguridad.
la existencia de un poderoso estado Velázquez mandó a M éxico un
indígena, el de los aztecas. Diego ejército con la misión de castigar
de Velázquez, gobernador de la a Cortés, que se había emancipado
isla, envió una expedición al man de su autoridad; pero la mayoría
do de Hernán Cortés, con el propó de sus componentes, tras breve
sito de conquistarlo. Cortés salió refriega, pasaron al bando del
de Cuba con 11 naves y 610 hom afortunado jefe y reforzaron sus
bres. En febrero de 1519 desem efectivos.
barcó en M éxico y fundó la pobla P o c o después los aztecas se
ción de V eracru z. Para evitar sublevaron, hirieron de muerte a
cualquier intento de regreso de sus Moctezuma y tras enérgicos com
vacilantes com pañ eros, destruyó bates obligaron a los españoles a
las naves, menos una destinada a evacuar Tenochtitlán, amparados
mantener las comunicaciones con por la obscuridad. Este episodio es
Cuba. conocido por la noche triste (30 de
L os aztecas creyeron ver en junio de 1520).
ellos la vuelta del dios del aire y El contraste fue reparado por
su comitiva, que venían a castigar Cortés al mes siguiente con la vic
los por los crímenes y faltas come toria de Otumba.
tidos. Atemorizado por eso M octe En 1521, Cortés habilitó una
zuma, jefe de los aztecas, quiso escuadra para completar el sitio de
detener á los invasores con regalos la capital azteca y después de 85
valiosos, pero sólo consiguió exci días de lucha entró en ella, a me
tar su codicia. Cortés marchó al diados de agosto; sobre sus ruinas
interior; muchas tribus se aliaron levantó la actual ciudad de México.
con él; otras fueron arrolladas. En En 1534 el país fue erigido en
noviembre los conquistadores en virreinato, con el nombre de Nue
traron en Tenochtitlán, capital de va España.
A m é r i c a C e n t r a l . Diversas
expediciones, encabezadas por Cor
tes o sus lugartenientes, conquis
taron Guatemala, El Salvador y
Honduras. Otros españoles, llega
dos de Panamá, ocuparon Costa
Rica y Nicaragua, completando la
posesión de la América Central.
Pi
de C ° prisionero a Atahualpa en la localidad
i*»ca ®^aniarca. Guarnan Pom a de A yala representa al
inertemente aherrojado.
E x p l o r a c i ó n d e l r í o A m a z o n a s . En
1541 Gonzalo Pizarro partió de Quito al
frente de una expedición, en buscp del
fabuloso país de la canela, señalado ha
cia el este de los Andes Al llegar al río
Coca mandó construir una nave y la con
fió a Francisco de Orellana, con la orden
de adelantarse a esperarlo. Orellana des
obedeció esas instrucciones, penetró en
el Amazonas y lo recorrió hasta llegar a
su desembocadura, en 1542. En el tra
yecto debió luchar con mujeres armadas
de arcos y flechas, que recordaban las
amazonas de la leyenda griega. D e ahí
el nombre del río.
Cabe señalar que los dos ríos más
grandes de América, el Misisipí y el
Amazonas, fueron descubiertos por espa
ñoles, con escasa diferencia de tiempo.
73
Puna, soportando terribles priva estaban pobladas por los indoma
ciones; atravesó los Andes, descen bles araucanos, quienes se opu
dió a los valles chilenos y dio la sieron decididam ente al avance
vuelta por el desierto de Atacama, español. En 1553 iniciaron las hos
sin encontrar los fabulosos tesoros tilidades, a las órdenes de Caupo-
con que había soñado. licán. Valdivia salió a combatirlos,
Pedro de Valdivia obtuvo auto pero fue vencido y capturado en
la batalla de Tucapel. Los indios
rización de Pizarro para intentar
lo sacrificaron, junto con los demás
de nuevo la empresa. Después de
prisioneros. Francisco de Villagra
cruzar el ya mencionado desierto
asumió el mando.
Je Atacama, fundó la ciudad de
Los araucanos formaron dos
Santiago el 12 de febrero de 1541.
ejércitos: uno quedó al sur, con
Los primeros tiempos fueron difí
Caupolicán; el otro, al mando de
ciles, por el continuo ataque de los
Lautaro, partió en dirección a San
indios y las conspiraciones de al
tiago, pero fue derrotado por Vi
gunos españoles descontentos. Val
divia afrontó con decisión todas las llagra, pereciendo el jefe indígena,
dificultades, y con algunos refuer Días antes había llegado a Chile,
zos venidos del Perú recorrió el con importantes refuerzos, un nue
vo gobernador: García Hurtado de
territorio hasta el río Maulé. Lue
Mendoza, hijo del virrey del Perú,
go regresó a aquel país, donde lu
quien em pren d ió una enérgica
chó contra la rebelión de Gonzalo
campaña contra C aupolicán. En
Pizarro.
1558 llegó frente al archipiélago
Regresó a Chile con más hom
bres y recursos, fundando varias de Chiloé y lo hizo explorar. Entre
ciudades, entre ellas Concepción, a los destacados con ese fin figuraba
la vez que mandaba ocupar el Tu- Alonso de Ercilla, más tarde famo
cumán en virtud de una concesión so autor del poema La Araucana,
recibida en premio de su reciente que canta las proezas de la con
actu ación en favor de la causa quista de Chile.
del rey. Caupolicán cayó en una embos
Las comarcas meridionales de cada y fue ejecutado.
Chile, bañadas por el río Bio-Bio, Los araucanos retrocedieron a las co
marcas del sur, y todos los intentos de
dominarlos resultaron vanos. Al fin, por
tácito acuerdo, quedaron dueños de la
zona del Bio-Bio e islas adyacentes, y
conservaron su independencia hasta mu
cho después de haberse constituido la
república chilena.
Durante el gobierno de Hurtado de
Mendoza fue co lo n iza d a la región de
Cuyo. El piloto Juan Ladrillero, nave
gando por el archipiélago austral y el es
trecho de Magallanes, completó el cono
cimiento del litoral del Pacífico.
CONQUISTA DEL
RIO DE LA PLATA
L a e x p lo r a c ió n . El litoral del
río de la Plata fue visitado por
las expediciones de Solís y Maga derecha del río de la Plata, donde
llanes. Alejo García recorrió un el 3 de febrero de 1536 fundó a
extenso tram o desde el litoral Buenos Aires. Las contrariedades
brasileño hasta los confines de la padecidas y su mal estado de salud
actual Bolivia. Entre 1526 y 1530 determinaron al año siguiente el
llegaron Sebastián Gaboto y Diego regreso de Mendoza, que falleció
García. El primero remontó el río en alta mar.
Paraná y parte del Paraguay, y Su segundo, Juan de Ayolas, pe
en la actual provincia de Santa Fe reció a su vez al regresar de una
fundó a Sancti Spíritus (Espíritu expedición a través del Chaco, en
Santo), primera población de blan la que había logrado tocar la tierra
cos en tierra argentina. Luego des del R ey Blanco, nombre con que
pachó partidas hacia el 'óeste, que era designado el inca por la leyen
recorrieron las orillas de los ríos da. Un grupo salido en su auxilio
Tercero y Cuarto hasta la actual desde Buenos Aires construyó,
provincia de Córdoba. García, ve frente a la desembocadura del Pil-
nido después, debió someterse a la comayo, en el Paraguay, el fuerte
autoridad de Gaboto y colaborar de la Asunción, convertido poco
con él. Pero destruido Sancti Spí después en ciudad.
ritus por los indios, y malogrados La personalidad más represen
algunos establecimientos de la cos tativa de este período fue Domingo
ta oriental del río de la Plata, Martínez de Irala, cuya influencia,
ambos jefes regresaron a España desde el gobierno o fuera de él,
por separado. predominó hasta su muerte. Des
pobló a Buenos Aires para concen
L a c o n q u i s t a . Fue iniciada trar en la Asunción a todos los es
por el adelantado don Pedro de pañoles, y tentó de nuevo cruzar
Mendoza, que al frente de una ex el Chaco. Cuando lo consiguió tu
pedición de 16 barcos y más de vo la desagradable sorpresa de
1500 hombres arribó a la orilla encontrar los dominios del Rey
U lrico Schmidel acom pañó a M endoza en su expedición al R ío de la Plata. A él pertenece este
dibujo del primitivo asiento de Buenos Aires, fortificada para resistir los ataques de los indíge
nas, quienes finalmente la destruyeron.
La colonización del interior se realizó disputando palm o a palm o el terreno a los indios. Este
grabado del jesuita F. Baucke muestra un fortín construido para contenerlos; observe la numerosa
caballada, que desde entonces constituye la riqueza del territorio.
76
Salta, San Salvador de Jujuy, La El rey de Francia, Carlos VIII, pre
Rioja y Catamarca. Sostuvieron tendió el reino de Ñapóles, como here
dero de sus antiguos señores de la casa
tres largas y encarnizadas guerras de Anjou, y su sucesor, Luis X II, el du
con los indios calchaquíes; algunas cado de Milán, por ser descendiente de
tribus fueron sometidas, y otras una familia soberana de ese estado. En
exterm inadas o transportadas al Ñapóles, los franceses chocaron con Fer
nando el Católico, primo del rey de ese
litoral. Intentaron repetidas veces, país y dueño de Sicilia; y en Milán, con
aunque sin resultado, ocupar la el emperador de Austria, Maximiliano,
porción del Chaco situada al sur de quien era vasallo el duque de esa
del Pilcomayo. ciudad.
Estallaron entonces diversas guerras,
La del oeste, procedente de Chi en las cuales el papa y los estados ita
le, dominó la región de Cuyo, don lianos se aliaron a uno u otro bando ri
de fundó las ciudades de Mendoza, val, procurando mantener el equilibrio
San Juan y San Luis. entre ellos, a fin de conservar la propia
independencia.
Las tres tendieron a fusionarse, Hasta 1513, las operaciones favorecie
en virtud de la fuerza centrípeta ron a los españoles, gracias a su hábil
que las atraía hacia Buenos Aires. general Gonzalo de Córdoba, apodado El
Los españoles cruzaron apenas gran Capitán; los franceses tuvieron, a
su vez, un notable hombre de guerra:
el paralelo 35 de latitud sur. La Gastón de Foix, muerto prematuramente
Patagonia fue objeto de varias ten en un combate, y un bravo jefe: B ay ar
tativas de conquista, todas malo do, llamado el caballero sin miedo y sin
gradas. reproche.
78
L os t u r c o s . El sultán Solimán dos y señores flamencos, se tras
el Magnífico (1520 a 1566), fue ladó de Gante a España, en 1517,
otro gran enemigo de Carlos V. Al para hacerse cargo del trono, fue
frente de su ejército, atacó reite recibido con cierta hostilidad. Las
radamente el imperio por el valle cortes y la opinión vieron con ma
del Danubio, llegando dos veces a los ojos el encumbramiento de los
las puertas de Viena. El príncipe extranjeros en los principales car
Femando, hermano menor de Car gos del Estado. Además se resis
los, logró contenerlos. tieron a soportar los grandes gastos
En el mar, la escuadra musul ocasionados por la política euro
mana, a las órdenes de un audaz pea del rey, determinada por su
corsario apodado Barbarroja, aco nuevo título de emperador, ajena
metió con igual brío. El empera a los intereses de España.
dor resolvió abandonar el Medite Carlos V se ausentó para asistir
rráneo oriental y fortificar la línea a la dieta de Worms, y entonces
Sicilia-Malta-Trípoli, para prote el descontento engendró una su
ger sus comunicaciones marítimas blevación, iniciada en la ciudad de
con Italia. En 1534, Barbarroja Toledo, y propagada rápidamente
perforó la defensa al apoderarse de a muchos lugares de Castilla. Los
Túnez, pero Carlos V consiguió rebeldes tomaron el nombre de
reconquistarla al año siguiente en comuneros, porque sostenían la li
una brillante campaña. N o tuvo bertad de las comunas o munici
la misma suerte su intento de des pios; mal organizados y divididos
alojar a los piratas berberiscos de por rencillas, fueron vencidos en
Argel, en 1541, pues la expedición, VMalar (abril de 1521). Su jefe,
de la que formaba parte Hernán Juan de Padilla, y los principales
Cortés, su frió un co m p le to de dirigentes, perecieron decapitados
sastre. en ese lugar.
AFIRMACIÓN
DEL PODER INTERIOR E l desastre de V illalar: perdida la batalla, loa je
fes com uneros, Juan de Padilla, B ravo y Maído*
nado (d e pie en el ce n tro ), se entregan a las
Cuando el joven Carlos, acom fuerzas leales al rey. (Cuadro d e M . "Picólo y
pañado por gran número de prela- L ó p ez .)
En la región de Valencia hubo cursos. El ejército español —sobre
otro m ovim iento, reprimido tras todo los tercios (regimientos de
porfiada lucha. infantería)— era reputado inven
Los municipios y las cortes per cible.
dieron gran parte de la influencia Además de las luchas contra
que conservaban; los altos puestos, Francia, Carlos V debió afrontar
sin embargo, volvieron a manos de la crisis religiosa promovida por
los españoles. Lutero en Alemania. Durante mu
La consolidación de su autori chos años se vio en la necesidad
dad en España permitió a Carlos V de contemporizar con los protes
ocuparse con mayor atención de tantes, absorbido por sus guerras
los asuntos exteriores. con Francisco I, pero en 1547 los
España fue entonces la primera derrotó en la batalla de Muhlberg.
potencia del mundo. Poseía en Eu Los vencidos lograron reaccionar,
ropa parte de Italia, Austria, Ale y en 1552, ayudados por Enrique
mania, los Países Bajos y Flandes; II, estuvieron a punto de capturar
en América, la conquista de M é al emperador en Innsbruck (T i-
jico, el Perú y otros países le ha rol). Éste renunció a someterlos,
bían proporcionado cuantiosos re acordándoles la libertad de cultos.
80
CAPÍTULO IV
81
Después de su abdicación, Carlos V llega al monasterio de Yuste, en cu yo claustro pasó los tres
últimos años de su vida. (Cuadro del pintor A larcón.)
p ersecu cion es contra los protes venta de lanas a los centros texti
tantes. les de Flandes e Italia, a la vez
En materia de política exterior que nacía la industria nacional de
obtuvo dos éxitos importantes: el
tratado de paz perpetua con los
suizos, que proporcionaron a Fran
cia excelentes tropas mercenarias,
y la alianza con los turcos, que le
aseguró una ventaja comercial y
cultural en Oriente —Siria, Asia
Menor y los Balcanes (llamados
en general el L eva n te)—, manteni
da hasta el comienzo del siglo xx.
INGLATERRA
82
los tejidos con la ayuda del minis más tarde, a los cuatro días del naci
tro cardenal W olsey. miento de su primer hijo, el infante don
Carlos. En 1554 celebró segundas nup
Con respecto a otras naciones, cias con María Túdor, reina de Ingla
Inglaterra inauguró su política de terra. En el momento de ceñir la corona
tenía veintinueve años.
equilibrio, y en ese sentido estuvo
Poseía una notable ilustración; habla
con España, contra Francia, y lue ba y escribía en latín y portugués y en
go a favor de ésta, contra aquélla, tendía el francés y el italiano; fue amigo
para impedir que cualquiera de las y protector de la cultura.
dos adquiriera un excesivo poder. Extraordinariamente laborioso y muy
Sucedió a Enrique un niño de desconfiado, quería enterarse de todos
los asuntos, que estudiaba con diligencia,
nueve años: Eduardo VI, domina pero era lento en decidirse; los cortesa
do por los calvinistas, y a la pre nos lo apodaron por ello “ prudente” ; los
matura muerte de éste, su herma enemigos, “irresoluto” .
na María I, Túdor, católica. Los Tenía un alto concepto del “ oficio de
cambios de credo de los monarcas rey, el más grande de todos” , y aunque
de trato cortés, sabía mantener las dis
originaron sangrientos disturbios. tancias hasta con sus más íntimos alle
gados.
Felipe II Taciturno, reservado, melancólico, po
cas veces se le vio reír; residió habitual
mente en las salas oscuras y frías, con
S e m b l a n z a d e l r e y . Carlos V, apariencia de celdas, del palacio de El
flamenco por nacimiento y educa Escorial. Profundamente r e lig io so , fue
ción, fue un soberano europeo y el campeón del catolicismo, eje funda
mental de su política.
militar. Nunca habló bien el cas
tellano, y la política continental
S u p r e s ió n de los fueros de
absorbió gran parte de su tiempo.
A r a g ó n . Eltem peram ento ab
Felipe II, nacido en Valladolid
solutista de F elip e II no podía
en 1527, fue, por el contrario, un tolerar las libertades que aún sub
monarca español y civil, que no
sistían en España. Suprimió prácti
abandonó la Península desde su
camente el poco poder conservado
ascensión al trono, ni se puso al
por las cortes y las comunas, y un
frente de sus tropas.
episodio, pequeño al principio, le
En 1543 contrajo enlace con su prima permitió acabar con las institucio
María de Portugal, quien murió dos años nes aragonesas.
Este cuadro de E lo r r ia g a
representa el m om ento en
que D on Juan de Lanuza,
bajo la v i g il a n c ia de los
soldados, se despide de los
suyos y parte hacia el pa
tíbulo.
84
Felipe II, ferviente católico, fue uno de los principales propulsores del m ovim iento reformista
de la iglesia apostólica romana. E l cuadro de Valdivieso lo representa presenciando el desarrollo
de un auto de fe desde una terraza de su palacio.
86
Una vez recuperada la salud, depositó enseñanza, secundaria y superior,
su espada a los pies de Nuestra Señora destinada a los hijos de nobles y
de Montserrat, cerca de Barcelona, y juz
gando insuficiente su cultura se dirigió burgueses ricos, e im partida en
a París para estudiar teología. Tenía en amplios colegios, de perfecta orga
esos momentos 57 años. P recozm en te nización, que alcanzaron pronto
calvo, la nariz prominente, las mejillas gran fama; a la propaganda entre
hundidas, los ojos de suave mirar, su as
pecto y fisonomía revelaban la intensi los disidentes o indiferentes y a la
dad del trabajo y la severidad de los conversión de los pueblos paganos.
ayunos y mortificaciones que, según su
biógrafo, el padre Rivadeneyra, le pro
Muchos miembros de la Compa
ducían frecuentes desmayos y lo lleva ñía de Jesús partieron en misión
ron en más de una ocasión al borde de a las comarcas lejanas de Oriente:
la muerte. India Asiática, China y Japón; la
primera se estableció en Goa (In
En la Universidad de París, don
dia Portuguesa). Los misioneros,
de se doctoró seis años más tarde,
pacientes, hábiles y dispuestos a
predicó con ardor a sus camaradas,
todos los sacrificios, consiguieron
seducidos en parte por el calvinis
introducir el catolicismo en países
mo. Con seis compañeros, entre los
que no lo conocían, y revelaron a
cuales figuraba San Francisco Ja
Europa las costumbres de pueblos
vier, fundó la orden, el 15 de agos
y razas casi ignorados, a los cuales
to de 1534, día de la Asunción,
iniciaron en la civilización occiden
confirmada por el papa en 1540.
tal. Su obra fue particularmente
Los estatutos redactad os por
notable en América. Actuaron efi
San Ignacio de Loyola prescriben
cazmente en las colonias francesas
una prolongada y cuidadosa pre
del Canadá, en California, en Ve
paración y una sumisión estricta
nezuela, Ecuador, Perú y Brasil.
a la voluntad de los superiores,
bajo las órdenes de un jefe, el ge En 1585 llegaron los primeros jesuítas
neral, dependiente del papa. a Santiago del Estero. En 1607 crearon
la provincia religiosa del Paraguay, con
Para llenar sus fines, los jesuítas asiento en San Ignacio Guazú, fundada
se dedicaron con preferencia a la dos años más tarde. Redujeron los in-
dios del Guayrá, en el Alto Paraná, pero San Jerónimo (la vulgata), con ca
hostilizados por los mestizos brasileños, rácter de único texto admitido; re
emigraron en 1631 hacia el sur, radicán
dose sobre el Paraná M edio y el Uruguay. conoció como dogma, o verdad que
no puede discutirse, no solamente
Una real cédula de Carlos III, las Sagradas Escrituras, sino tam
celoso, com o otros soberanos de bién las resoluciones del Pontífice
Europa del poder alcanzado por la y de los Concilios en materia re
orden, decretó en 1767 la expul ligiosa.
sión de los jesuitas, medida que se
Referentes al culto y al clero:
cumplió también en América. Las
respetó el uso del latín para la
misiones, privadas de sus directo
misa, pero ordenó que el sacerdo
res, decayeron inmediatamente.
te, desde el púlpito, dirigiera a los
fieles sermones en el idioma de
EL CONCILIO DE TRENTO éstos; sostuvo la existencia del cle
ro regular y de los conventos, y la
De 1545 a 1563 sesionó, con p roh ibición de casarse para los
largos intervalos, en la ciudad de religiosos; fijó en 25 y 30 años,
ese nombre, una gran asamblea de respectivamente, la edad mínima
prelados que fijó la posición del para tomar los hábitos y ser desig
catolicismo ante la Reforma. Sus nado obispo; dispuso que los pre
resoluciones fueron de dos órdenes. lados residiesen en el lugar de su
Referentes a la doctrina: man jurisdicción; acordó la creación de
tuvo los siete sacramentos; afirmó seminarios, con objeto de impartir
la presencia efectiva del cuerpo y a los futuros sacerdotes una ins
sangre de Cristo en la hostia y el trucción severa y completa, reco
vino consagrados, reservando la mendándoles que, además de sus
segunda especie para los sacerdo funciones, se empeñasen en difun
tes; decretó la conservación de las dir las enseñanzas cristianas.
imágenes, el culto de la Virgen y A los papas artistas y cortesanos
de los santos; conservó la traduc del Renacimiento, sucedieron los
ción latina de la Biblia hecha por místicos, de terrible energía: Pa
Una reunión del Concilio de Trento, celebrado entre 1545 y 1563 en la ciudad del mismo nombre.
blo IV, im petu oso e in flexible; indispensables para afrontar las
Pío V, sa n tificad o después, que dificultades de la época. Francisco
desfilaba en las procesiones, por murió en 1560, después de dieci
las calles de Roma, con los pies siete meses de reinado. Sus dos
desnudos y el sayal de los domi hermanos cayeron bajo la influen
nicos; Sixto V, que reunió, a fuerza cia de la madre, Catalina de M é-
de economías, un gran tesoro des dicis, princesa italiana, carente de
tinado a costear una expedición escrúpulos, ambiciosa, audaz y pre
contra los turcos. ocupada en mantener la autoridad
Pablo III había creado antes el real a toda costa.
tribunal de la Inquisición, formado El debilitamiento de esta autori
por seis cardenales, para reprimir dad, en efecto, había despertado en
la propaganda cismática. la alta nobleza católica y protes
tante —apoyada por sus parciales—
La Congregación del Index, co
el deseo de asumir el gobierno.
misión encargada de examinar los
Al frente de los calvinistas, lla
libros publicados y los que se pu
mados también hugonotes (proba
blicaran en lo sucesivo, redactó un
blemente del alemán eidgenossen:
catálogo de aquellos cuya lectura
los ju ra m en tad os), figuraban las
les estaba vedada a los fieles.
casas de Borbón, a la que perte
necían el príncipe Luis de Condé
y Enrique, rey de Navarra, y la de
LAS GUERRAS DE RELIGIÓN Montmorency, emparentada con el
almirante Gaspar de Coligny.
La g u e r r a e n F r a n c i a . Fran La familia de Guisa encabezaba
cisco II, Carlos IX y Enrique III, a los católicos: Francisco, duque
hijos de Enrique II, ocuparon su de esa casa, se hizo famoso con su
cesivamente el trono. Los tres re defensa de la ciu dad de M etz,
yes, jóvenes y enfermizos, carecie- cuando fue sitiada en 1552 por
Ton de la ca p a cid a d y energía Carlos V; el cardenal de l-,orena,
89
hermano de Francisco, poseía in Los hugonotes organizaron, pa
mensas riquezas; su sobrina, María ra defenderse, La Unión Calvinista,
Estuardo, reina de Escocia, había con un jefe militar y un consejo
contraído matrimonio con el rey electivo. Los católicos replicaron
Francisco II, durante el efímero fundando la Santa Liga, encabe
reinado de éste. zada por Enrique, hijo y heredero
Los Guisa fueron los verdaderos del duque Francisco de Guisa. Jo
soberanos de Francia. ven valiente, generoso y activo, no
Al poco tiempo de ceñir la co tardó en hacerse sumamente po
rona Carlos IX , se iniciaron las pular.
guerras. En una de ellas, Francis De hecho, la Unión Calvinista y
co de Guisa murió asesinado, y los la Santa Liga dividieron a Francia
calvinistas lograron mucha influen en dos gobiernos, anulando, o poco
cia sobre el rey, con la consiguien menos, el poder del rey legítimo.
te alarma de Catalina de Médicis. Éste se vio obligado a designar
Resuelta a elim inarlos, la reina lugarteniente general del reino al
madre organizó una matanza ge duque de Guisa, después de lo cual
neral de hugonotes, abandonados a ambos marcharon a Blois. donde
su suerte por el voluble monarca, debían reunirse los estados genera
que comenzó en la noche del 24 les, es decir, la asamblea de los
de agosto de 1572, día de San diputados del clero, la nobleza y la
B artolom é, y continuó hasta el burguesía.
día 26. Carlos IX falleció dos años
más tarde. Le sucedió Enrique III, Enrique III resolvió entonces salvar
inteligente e instruido, pero pro su trono eliminando al arrogante jefe
fundamente depravado. de la Liga. Una mañana de diciembre de
90
1588, el rey, que estaba en el lecho, lo ble, b u rlón, in capaz de guardar
mandó llamar. Al entrar el duque de rencor, con un gran concepto de
Guisa en el dormitorio, ocho gentiles-
hombres se alinearon, saludándolo con su autoridad, bajo apariencias cor
profunda reverencia, pero no bien hubo teses.
pasado, cayeron sobre él y lo acribilla
Venció a sus enemigos en las batallas
ron a puñaladas.
de Arques e Ivry, pero no pudo tomar a
Enrique III, una vez asegurado de la
París, ocupado por los españoles y liguis-
muerte del duque, se levantó de la cama
tas. En Ivry, al encabezar una carga de
y exclamó, dando un puntapié al cadá
caballería, el rey, que llevaba en el som
ver: “ ¡Y a no somos dos! ¡Ahora soy
brero un airón de plumas blancas dirigió
rey!”
a sus soldados una arenga famosa: “ Si
No lo fue mucho tiempo, pues mien
perdéis vuestras cometas, destinadas a
tras sitiaba París —sublevado ante la no
guiaros con sus sones, agrupaos en tom o
ticia del asesinato del duque-, un monje
de mi penacho blanco —les dijo—; lo en
llamado Jacobo Clément lo hirió mortal
contraréis en el camino de la victoria y
mente, en vengan za de aq u el suceso
del honor” .
(agosto de 1589).
91
Casi todos sus enemigos, opuestos a los España, y los estados generales,
planes de conquista de Felipe II, lo aca formados por diputados de las
taron inmediatamente.
provincias.
París cap itu ló en 1594, y la La propaganda protestante ganó
guarnición española que la defen prosélitos, sobre todo, en la parte
día evacuó la plaza. Al despedirla, norte; Carlos V trató inútilmente
el rey le dijo: “Recomendadme a de combatirla. Felipe II, además
vu estro señor, pero no volváis de proceder con energía contra los
más”. disidentes, envió guarniciones de
Por la paz de Vervins, firmada tropas españolas a las principales
en mayo de 1598, Felipe II reco ciudades, en reemplazo de las lo
noció al nuevo monarca francés. cales. Los nobles y los burgueses
de mayor prestigio gestionaron sin
S u b l e v a c i ó n d e l o s P a ís e s éxito un cambio de actitud.
B a j o s . L os Países Bajos —eran así
llamados por estar sus tierras a En 1566, doscientos jóvenes de la aris
escaso nivel del mar, y aun debajo, tocracia se presentaron armados ante la
duquesa Margarita de Parma, hermana
protegidas por diques— compren natural de Felipe II y gobernadora de los
dían dos partes: la del sur, Flan- Países Bajos, para pedirle nuevamente la
des, rica e industrial; y la del nor suspensión de las p rin cip a le s m edidas
te, pobre, poblada por pescadores. adoptadas contra las libertades del país.
Margarita, al verlos desfilar, no pudo
Estaban divididos en provincias, contener las lágrimas. Al advertirlo uno
gobernadas por asambleas de re de sus consejeros exclamó: “ ¿Puede aca
presentantes del clero, la nobleza so Vuestra Alteza temer a semejantes
y la burguesía: las ciudades goza mendigos?” Desde entonces, el califica
tivo les quedó como apodo que acepta
ban de amplia autonomía; el orden ron en gesto de desafío.
era mantenido por milicias reclu
tadas en el lugar. En Bruselas, la En vista de la inutilidad de sus
capital, residían el gobernador trámites, los descontentos tomaron
general, nombrado por el rey de las armas, saqueando algunas igle
92
Este cuadro de Rem brandt, famoso pintor renacentista de Amsterdam se conoce con el nombre
de “ La ronda nocturna” ; representa una com pañía de arcabuceros, con su capitán al frente.
Fueron éstos los hombres que se sublevaron contra la dom inación española. (R ijksm useum de
Am sterdam .)
94
En la época de Isabel I, la
flota inglesa alcanzó fama
mundial con el dom inio de
lo s m a r e s. Esta talla en
m adera del siglo XVI repre
senta el “ A rk R oy a l” (A r
ca R ea l), buque insignia de
la soberana. (M u seo Bri
tánico.)
95
tuguesa, se consideró sucesor legí destruido la actual crítica histórica
timo, y envió a ese país un ejército en forma documentada.
bajo el mando del duque de Alba, La vida de Felipe II fue amar
para combatir al pretendiente An gada, entre otros sinsabores, por
tonio de Crato, sobrino bastardo de la inconducta de su primogénito,
don Enrique. Los invasores triun el infante Carlos.
faron fácilmente; Portugal y sus
colonias pasaron ai dominio de Es De aspecto físico desdichado, la debi
paña, que las retuvo hasta 1640. lidad mental de este príncipe se agravó
La península ibérica quedó así uni por una lesión recibida en el cráneo al
caer desde lo alto de una escalera. En
ficada por más de medio siglo. su extravagante vanidad, que no se ave
nía con el papel, relativamente secunda
rio, propio de su estado y condición,
culpó a su padre de humillarle delibera
ÚLTIMOS AÑOS DE FELIPE II damente, cobrándole un odio profundo;
pensó asesinarlo y huir a Flandes, al
amparo de los calvinistas. La conspira
C ierto s escritores p resen ta n a ción, torpemente urdida, fue descubierta
F e lip e I I c o m o a u n m o n stru o , y y Felipe II no tuvo más remedio que or
denar la prisión del infante y procesarlo.
a su rein ad o c o m o u n p e río d o de
Antes de dictarse la sentencia, Carlos
i n i q u i d a d e s . E s la d e n o m i n a d a dejó de existir a consecuencia de una
leyen d a negra, c u y a s fa lse d a d e s ha violenta fiebre.
96
Algunos meses después falleció la prosperidad económica y de la
también la reina Isabel de Valois. potencia política de Inglaterra.
Felipe II, que no tenía hijos varo En el orden externo, estimuló y
nes, contrajo cuartas nupcias, en apoyó la insurrección de los Países
1570, con su prima Ana de Aus Bajos y ayudó a los protestantes
tria de la que tuvo el infante don franceses. La derrota de la Arma
Felipe. da Invencible le aseguró el domi
nio de los mares. En el orden
Isabel de Inglaterra
99
L a Compañía H olandesa de las Indias Occidental
envió en 1655 una em bajada a China, para gestión
un tratado com ercial. Los delegados volvieron impi
sionados por el fasto que rodeaba al emperador. (Gi
bado d e W . Hollar, 1 6 6 8 .)
100
H A C IA EL EQ UILIBRIO EUROPEO
102
R endición de la ciudad holandesa de Breda a las armas españolas; episodio ocurrido b ajo el
reinado de Felipe IV . Cuadro de Velázquez, artista de la corte que pintó los principales perso
najes de su época; vuelva a observar “ Las M eninas" (pág. 1 6 ). (M u seo del P rado.)
103
Tam bién la escultura y demás artes
plásticas florecieron en el Siglo de
Oro español: o b s é r v e n s e , c o m o
ejem plo, estos apóstoles del retablo
m ayor de la C a t e d r a l de Huesca.
( F o to A rc h iv o M a s.)
104
Fray Luis de León.
RICHELIEU
106
Arm ando du Plessis, cardenal de Richelieu,
ministro de Luis X II I .
110
En materia de religión, la paz Los Estuardo en Inglaterra
de Westíalia mantuvo el principio
de que cada país tendría la de su Como Isabel, última soberana
soberano, aunque concedió facili de la casa Túdor, murió soltera,
dades a los disidentes para emigrar. el trono pasó a Jacobo, rey de
En materia política, conservó la Escocia, hijo de María Estuardo,
organización federal y electiva del su pariente más próximo.
imperio y la división de Alemania En materia política, Inglaterra
en centenares de pequeños esta estaba regida por los derechos con
dos, y entregó porciones de terri sagrados en la carta magna sobre
torio alemán a Brandeburgo, que libertad individual e inviolabilidad
era uno de ellos, y a Suecia. Fran de la propiedad privada, y por la
cia recibió Alsacia, con excepción existencia del parlamento con fa
de su capital -Estrasburgo—, alcan cultad de dictar las leyes y votar
zando así el Rin. España reconoció los im puestos. En materia reli
la independencia de las Provincias giosa, sus habitantes se habían
Unidas, en los Países Bajos. dividido en anglicanos, católicos,
presbiterianos ( o puritanos) e in
dependientes, nueva secta pro
En la guerra de Treinta Años intervi testante.
nieron, por última vez, las bandas do Jacobo I, Estuardo, estaba con
mercenarios contratados por los llamados
“ condottieri” , empresarios que las ponían
vencido de la indiscutible autori
al servicio de los soberanos a cambio de dad del soberano “que tiene el po
dinero. der de encumbrar y abatir, de vida
El armamento sufrió notables trans y muerte, de juzgar a sus súbdi
formaciones, deb id a s principalmente a tos ... y en cambio es únicamente
Gustavo Adolfo. responsable ante Dios”. En con
La infantería comenzó a usar el mos
quete, arma más rápida y menos pesada secuencia, se propuso implantar el
que los antiguos arcabuces, y el cartucho, absolutismo en lo político, y el an<
que encerraba en un conjunto la pólvora glicanismo, con exclusión de todo
y la bala, y era disparado por percusión;
otro culto, en lo religioso, porque,
antes de esta modificación, el proyectil
se lanzaba con la combustión de un poco según una de sus expresiones ha-
de pólvora suelta, inflamada mediante
una mecha.
La artillería empleó cañones livianos,
de bronce, montados sobre cureñas con
ruedas, fácilmente transportables por ca
ballos uncidos al carro; se cargaban tam
bién con cartuchos.
En la táctica, fueron adoptados nue
vos métodos: durante las batallas, las
tropas no formaron ya en masas profun
das, sino en líneas delgadas que ofrecían
menor blanco a las balas y ampliaban el
radio de la acción; el abastecimiento y
la movilidad mejoraron considerablemen
te, permitiendo las marchas forzadas, las
operaciones a largas distancias y las cam
pañas de invierno.
La guerra revistió singular ferocidad
por el pillaje, y el maltrato de los habi
tantes. Alemania, particularmente arra
sada, tardó más de un siglo en restau
rarse.
bituales “sin obispo no hay rey” worth, conde de Straitord, y Gui
(n o bishop, no king), o sea que el llermo Laud, arzobispo de Canter
monarca carecía de fuerza suficien bury. El primero exigió impuestos
te si no incluía su dominio sobre arbitrarios, restableció otros, caídos
la Iglesia, a través del nombra en desuso, y creó el monopolio de
miento y dirección de los obispos. la venta de ciertos productos en
Las tentativas de Jacobo I cho beneficio de la corona; el segundo
caron con la oposición del parla acentuó la persecución contra los
mento, de los ciudadanos y de los puritanos. Estas medidas levanta
fieles de los diferentes credos, ex ron vivas resistencias.
cepto los del oficial. Cuando Jaco Entre las contribuciones restau
bo murió, en 1625, el reino se en radas figuraba el ship-m oney, o
contraba profundamente agitado. moneda del barco, impuesto desti
nado a sostener la escuadra, que
solamente debía pagarse en caso
de guerra.
CARLOS I Un gentilhombre, Juan Hamp
den, rehusó satisfacerlo por estar
la n ación en paz, y porque de
Le sucedió su hijo Carlos, quien
acuerdo con la carta magna, el rey
heredó las ideas y ambiciones de no tenía derecho a exigir ningún
su padre. Casado con Enriqueta impuesto sin la aprobación legisla
María, de Francia, princesa católi
tiva. Detenido y procesado por de
ca, hermana de Luis X III, parecía
sacato, los jueces lo condenaron a
inclinarse a la religión de ésta. la confiscación de sus bienes. El
La tirantez de las relaciones con juicio despertó gran interés y sus
las cámaras se agravó, por cuya citó apasionadas protestas.
razón el rey prescindió del parla
Dos años después, el desconten
mento al hacer la guerra a España
y luego a Francia, en ambas con to provocó en Escocia un movi
miento armado. L os puritanos,
resultado adverso. Los gastos oca
sionados por la lucha endeudaron
a Carlos I y le obligaron a convo
car al parlamento para obtener re
cursos. Éste, antes de votárselos,
le impuso la aceptación de la Peti
ción de Derechos, que recordaba
las libertades y las facultades del
pod er legislativo, reclamando su
respeto en lo sucesivo (1 6 2 8 ). Al
año siguiente, Carlos I lo disolvió.
Desde entonces, hasta 1640, go
bernó personalm ente, secundado
por sus ministros Tomás Went-
112
irritados por la política de Laúd, La revolución inglesa
ren ovaron un antiguo pacto -e l
covenant (convención)—, que los
comprometía a combatir por su fe,
organizaron un ejército e invadie Las derrotas del ejército real,
ron el norte de Inglaterra. sin embargo, obligaron a Carlos I
a citar de nuevo a las cámaras, las
Carlos I no estaba en condicio que, esta vez, permanecieron re
nes de hacer frente a los escoceses, unidas durante trece años (1640 a
pues chocaba con la hostilidad 1653), con un intervalo, siendo co
general del país y carecía de sufi nocido con el nombre de Parla
cientes tropas y dinero para equi mento Largo, por su contraste con
par refuerzos. el anterior.
Convocó entonces a los diputa Los lores y los comunes adop
dos en abril de 1640, pero en segui taron una actitud enérgica; los se
da rompió con ellos, clausurando gundos declararon que la cámara
las sesiones al mes siguiente. Por de que formaban parte no podría
su poca duración fue denominado ser disuelta sino por su propia vo
Parlamento Corto. luntad; los primeros procesaron
113
por alta traición a Strafford y a Ningún monarca inglés, de acuer
Laúd, y los condenaron a muerte, do con la costumbre, había entrado
sin que el rey hiciera nada por sin invitación en la cámara de los
salvarlos. Comunes, ni lo hizo después. El
Cinco meses después de la eje atropello sublevó al pueblo londi
cución de Strafford, ocurrió en Ir nense. El rey huyó de la ciudad
landa una m atanza de ingleses (enero de 1642), dando comienzo
por parte de católicos sublevados a la guerra civil, entre los caballe
(1 6 4 1 ). El hecho, atribuido a ma ros, favorables a Carlos I, y los
nejos de Carlos I, motivó la vota cabeza redonda, así denominados
ción de una ley: la Gran Amones por llevar los cabellos cortos, con
tación, o Memorial de Agravios, trarios al soberano. Los católicos
dirigida al monarca, que puntuali irlandeses apoyaron a los primeros,
zaba sus ilegalidades. Carlos I y los puritanos escoceses, a los se
respondió concurriendo personal gundos, por la adhesión de éstos
mente a la cámara de los Comunes, al Covenant.
en compañía de un destacamento
de soldados, a fin de proceder al
arresto de cinco de sus miembros,
jefes de la oposición.
CROMWELL
Una vez instalado en el sitial del pre
sidente, pidió a éste que le señalara los La lucha permaneció indecisa
culpados: “ No tengo ojos para ver, ni
hasta la intervención de Oliverio
lengua para hablar, sino cuando la cá
mara me lo ordena” , le contestó. “ Creo Cromwell, gentilhombre rural, de
que mis ojos son tan buenos como los cuarenta y cinco años de edad,
vuestros —exclamó el rey—, pero los pá miembro del parlamento, afiliado a
jaros han volado” . Los cinco diputados,
la secta de los independientes.
en efecto, avisados a tiempo, se habían
asilado en el palacio municipal de Lon
dres. Carlos I intentó apresarlos allí, al
día siguiente, fracasando de nuevo en De alta estatura, semblante rubicun
sus propósitos. do, picado de viruelas, voz ronca y de
bruscos ademanes, Cromwell impresiona
ba tanto por su fealdad como por su
energía.
Dotado de grandes condiciones mili
tares, organizó un cuerpo de ejército mo
delo, de ejemplar disciplina, basada en
la estricta observación de los principios
religiosos; sus soldados fueron llamados
costillas de hierro, por la resistencia con
que sus componentes sufrían los furiosos
mandobles de los caballeros.
115
La sala de la Cámara de los Comunes, representada en
el Gran Sello de Inglaterra. La inscripción d ice: “ 1651,
tercer año de libertad restaurada por gracia de D ios” .
(M u seo Británico.)
E l A c t a d e N a v e g a c i ó n . En
1651 el parlamento votó la ley co
nocida con este nombre. Disponía
que los barcos extranjeros sólo po
dían llevar a Inglaterra las mate
rias primas y los productos del
propio país; los provenientes de
otras partes, sobre todo de Améri
ca, Asia y África, debían ser trans
portados por buques ingleses úni
camente.
Esta im portante resolución,
mantenida hasta 1849, dio un im
En el primer período el gobierno pulso extraordinario a la navega
estuvo constituido por un consejo ción británica, de la que dependía
de estado, en cargado del poder la provisión de la mayor parte de
ejecutivo, del que formaba parte los productos requeridos para el
Cromwell, y por la cámara de los consumo y la industria nacional, y
Comunes, única representante del el servicio del comercio exterior.
poder legislativo, pues la cámara El Acta de Navegación provocó
de los Lores quedó suprimida. una guerra con Holanda, pues ésta
Los dos actos principales de la consideró que la medida arruinaría
república parlamentaria fueron la a su flota mercante, la principal de
pacificación interna y el acta de esa época. La ,lucha favoreció a
navegación. Inglaterra, cuyas escuadras consi
guieron notables triunfos.
La p a c i f i c a c i ó n i n t e r n a . En
julio de 1649, Cromwell desembar LA DICTADURA DE CROMWELL
có en Irlanda, partidaria de los Es-
tuardo, y la sometió después de
A raíz de un nuevo conflicto en
varias batallas, imponiendo terri
tre el ejército y la cámara, Crom
bles castigos. Las mejores propie
well la disolvió el 30 de abril de
dades fueron confiscadas y repar
1653, después de apostrofar vio
tidas entre colon os ingleses; los
lentamente a los diputados, a
dueños de las demás quedaron en
quienes gritó, como final de discur
condición de arrendatarios de per
so : “Partid, y que no se oiga hablar
sonajes británicos, que las recibie
más de vosotros”.
ron en donación.
El vencedor marchó en seguida Sobre la puerta cerrada de la
a Escocia para combatir a Carlos sala de sesiones, un desconocido
II, hijo del monarca ajusticiado, escribió: Se alquila esta casa, sin
que había sido proclamado rey; lo muebles.
derrotó fácilmente, obligándolo a A fin e s d e l m is m o a ñ o , la s tro
refugiarse en Francia. pas d e s ig n a r o n a C r o m w e ll lo r d
116
Oliverio Crom well, apoyado por el ejército, disuelve el parlamento inglés. (C ua
dro de B enjam ín W est.)
118
El siglo X V II señala el apogeo de Francia b a jo el cetro de
Luis X IV . Las demás naciones se esfuerzan por detenerlo.
En la po lítica europea com ienzan a in te rv e n ir: Rusia, que
avanza hacia occidente; Prusia, que adquiere gran im p o rta n
cia m ilita r; y H olanda, con su próspero comercio.
En el orden c u ltu ra l florecen, en p rim e r té rm in o , las letras
francesas; la ciencia y la filo so fía renuevan sus concepciones
y m étodos, in icia n d o una era fecunda de progreso.
119
La nobleza, ávida de riqueza y Alentada por los desórdenes de
honores, comenzó de inmediato a La Fronda, España decidió conti
conspirar, aprovechando el instan nuar la guerra contra Francia, a
te de debilidad por que pasaba la cuyo efecto retiró sus plenipoten
monarquía y el descontento causa ciarios ante el congreso de West-
do por la influencia de un extran falia, pero no alcanzó resultados
jero. Gran número de canciones y decisivos. En 1658, Mazarino con
libelos anónimos criticaron acerba- siguió la alianza de Inglaterra,
damente al cardenal, y las intrigas que le proporcionó un ejército de
y tumultos crearon un malestar 10 000 hombres. Así reforzado,
general, conocido con el nombre de Turena pudo derrotar a los espa
La Fronda, por haber sido compa ñoles en la batalla de las Dunas,
rados sus autores con los pilluelos cerca de Dunkerque.
que reñían en las calles valiéndose Al año siguiente se firmó la Paz
de hondas ( fronde, en francés).
de los Pirineos, con algunas venta
Las turbulencias de La Fronda jas territoriales para los franceses:
se prolongaron hasta 1652. El pa en ella se concertó el enlace de
pel principal correspondió al du Luis X IV con la infanta María
que de Enghien, más conocido con
Teresa, hija de Felipe IV. Maza
el título de príncipe Condé, quien
rino falleció poco después, en 1661.
no vaciló en requerir el auxilio de
los españoles. Por un momento,
Ana de Austria y su hijo huyeron
de París, abandonado en manos El imperialismo de Luis XIV
de los rebeldes. Mazarino debió,
más tarde, refugiarse en Alemania. EL ABSOLUTISMO MONÁRQUICO
Finalm ente, Condé, vencido por
Turena, se vio precisado a emigrar Mientras vivió Mazarino, Luis
y la familia real retornó poco des X IV lo dejó gobernar; pero des
pués a la capital, seguida por el aparecido su ministro, resolvió di
primer ministro. rigir personalmente el estado.
120
Un m osquetero pasea con su dama por la galería del
palacio. En el m omento histórico tratado en este ca
pítulo ubica Alejandro Dumas los episodios de su no
vela “ Los tres m osqueteros” .
Versalles no era una ciudad, sino el nom bre de un paraje que Luis X I I I com pró para construir un pabe
llón de caza. Su hijo, Luis X I V , convirtió el albergue deportivo de su padre en un suntuoso palacio
rodeado por jardines, adornados con estatuas y fuentes.
Juan Bautista Colbert. Constantemente preocupa
d o por sus múltiples asuntos, acogía con impacien
cia y frialdad a los visitantes, deseoso de abreviar
las entrevistas.
123
vinistas a Inglaterra, Holanda y nal cuyo monto variaba según la catego
Brandeburgo. ría de los contribuyentes, y el décimo,
impuesto sobre las rentas y ganancias.
Colbert reorganizó a fondo el meca
O r g a n iz a c ió n f in a n c ie r a . L os nismo financiero, haciéndole producir el
recursos del tesoro real provenían máximo: pero las incesantes guerras, las
grandes construcciones y el derroche de
del producto de num erosos im la corte consumían con exceso los ingre
puestos. Los principales eran: la sos. Para cubrir la diferencia, echó ma
talla real, pagada por los campe no de los empréstitos, y procedió a la
sinos y una parte de la burguesía, venta de empleos, muchos de los cuales,
completamente innecesarios, fueron crea
en p ro p o rció n al v a lor de sus dos a ese solo efecto.
inmuebles (casas y terrenos); la
talla personal, calculada sobre la D e s a r r o l l o e c o n ó m i c o . Las
fortuna global (incluyendo dinero industrias existentes se perfeccio
y toda clase de bienes); la gabela, naron y adquirieron impulso; otras
monopolio de la venta de la sal aparecieron con el apoyo del esta
por el estado, y las ayudas, perci do, mediante concesiones, premios
bidas sobre el precio del vino y las
bebidas. El rey vendía los dere
chos de cobra r la gabela y las
ayudas a em presarios llamados
fermiers généraux (hacendados ge
nerales), semejantes a los antiguos
publícanos de Roma.
El considerable rendimiento de estos
tributos no alcanzaba, sin embargo, a sa
tisfacer la voracidad del erario, por lo
que se crearon otros nuevos, como la
capitación (cápita: cabeza), tasa perso-
124
en dinero o exclusión del pago de El movimiento filosófico
impuestos. Entre las citadas indus y científico europeo
trias sobresalieron la tapicería (los
gobelin os de París), la sedería
(L ión ), la cerámica (porcelanas El siglo XVII registra en este
de Sèvres) y la fabricación de es orden grandes cambios. Al razona
pejos, encajes y, en general, todo miento abstracto sucede la obser
artículo de lujo. La labor en las vación directa de la naturaleza y
fábricas y talleres estaba regla la experimentación. Los sabios tra
mentada y era severamente vigila bajan, en su mayoría, sin relación
da por inspectores reales. con las universidades ni sujeción a
sus programas, y sin especializarse
El co m e r c io señaló, asimismo, en determinada rama del conoci
notables progresos, favorecido por miento. Muchos escriben sus obras
el aumento de la marina mercante, en el idioma nacional y no en latín,
que duplicó el número de sus na lo que permite su difusión entre el
ves, por la habilitación de nuevos público. Se forman asociaciones
puertos, como el de El Havre, en científicas que publican memorias
la desembocadura del río Sena, y y revistas. Los gobiernos inglés y
por la formación de grandes com francés favorecen especialm en te
pañías destinadas a traficar con este movimiento; el primero funda
América, África y Asia. la Sociedad Real, de Londres, y el
Observatorio de Greenwich, y el
Las colonias ta m p oco fueron
segundo la Academia de Ciencias
descuidadas: fue favorecida la emi
y el Observatorio de París.
gración a Canadá, M artin ica y
Guadalupe, y se fundó Luisiana, Los franceses Descartes y Pas
sobre el curso inferior del río Mi- cal crean las matemáticas superio
sisipí. res. El alemán Képler sienta las
leyes del sistema planetario solar;
el italiano Galileo construye el pri
mer telescopio y estudia las man
E l m e r c a n t i l i s m o . El minis chas solares, la vía láctea, las ne
tro Colbert desarrolló y aplicó una bulosas. El inglés Newton formula
doctrina económica conocida con la ley de la gravitación universal.
el nombre de mercantilismo. Se También la física registra pro
gún ella, la riqueza de una nación gresos, con la invención de la má
se obten ía v en d ien d o mucho y quina neumática, el termómetro, el
comprando poco, a fin de conse barómetro, el microscopio. El in
guir un saldo positivo, pagado en glés Harvey y el español Servet
oro. Para esto, el país debía tratar determinan el mecanismo de la
de producir todo lo que necesitaba, circulación de la sangre.
para bastarse a sí mismo, y con
quistar el mercado extranjero por
la perfección y baratura de los
artículos, o empleando la influen
cia política, y aun la fuerza.
125
Renato Descartes, célebre filósofo y m a t e m á tic o , nació en
Francia en 1596 y m urió en Estocolm o en 1650.
a jóvenes de la nobleza y de la
burguesía, que no tardó en conver
tirse en un prestigioso centro de
altos estudios.
La literatura francesa de este
siglo se caracterizó por la claridad
del estilo, la dignidad del tono, no
exento de énfasis y por el respeto
En la filo s o fía descu ellan el por los clásicos griegos y latinos.
francés Descartes, con su “Discurso El teatro ocupó el primer lugar. Las
sobre el método”, Spinoza, judío de representaciones se realizaban en peque
origen portugués, nacido en Ho ñas salas. El decorado -m u y sim ple- no
landa, y el alemán Leibnitz. El variaba en el transcurso del espectáculo;
así, los cinco actos de la tragedia El Cid
inglés Locke escribe obras de psi tenían por escenario una sencilla sala,
cología y educación, y otras sobre con cuatro puertas. A los costados de la
religión y política, de acentuada escena había una o más hileras de asien
influencia sobre los filósofos del tos para los espectadores privilegiados,
muchos de los cuales llegaban tarde y
siglo siguiente.
cambiaban saludos con los presentes, mo
lestando a los actores y resto del público,
que permanecía de pie en la sala.
EL MOVIMIENTO CULTURAL
P ed ro C orn eille, fue el primer
El siglo x vn fue particularmente gran autor dramático. Su principal
brillante para la cultura francesa. tragedia, El Cid, le dio inmediata
En 1635, el cardenal R ich elieu celebridad.
fundó la Academia de Letras, aún
existente. Tenía por principal mi Juan R a cin e se inspiró, sobre
sión depurar el idioma francés, fi todo, en el teatro griego; descolló
jar su correcto empleo y redactar con Fedra, tragedia ya tratada en
un diccionario. la antigüedad.
Mazarino dispuso en su testa Juan Bautista Poquelín, llama
mento la fundación de un colegio do Molière, hijo de un rico burgués
destinado a instruir gratuitamente de París, fue a la vez autor y actor,
Observación de las manchas solares con el telescopio de Galileo. Form aba el aparato un tubo
de setenta centímetros de largo, mediante el cual el sabio italiano pudo descubrir las manchas
del Sol, las fases de Venus y los satélites de Júpiter, todo un mundo sideral inexplorado por
sus antecesores. (B iblioteca del Observatorio de París / F oto D raeger.)
E l teatro era una de las principales diversiones de Luis X I V y su corte: a veces, el mismo rey partici
paba com o actor. E l grabado muestra la representación de la ópera “ A lceste” , de Quinault y Lully,
en el “ patio de m árm ol” del palacio de Versalles, que servía de m arco a la escena. N o preocupaba
la caracterización correcta de la época en que transcurría la acción. (B ibliot. N ac. d e Estampas, París.)
Corneille.
“JLliezer y R ebeca” , cuadro de N icolás Poussin (1 5 9 8 a 1 6 6 5 ), pintor francés de primer plano
en el siglo XII. E ligió sus temas en episodios de la Historia Antigua, en la Biblia (d e donde
proviene el tema del encuentro de Eliezer y R ebeca junto a la fuen te) y en las leyendas greco
rromanas. (M u seo del Louvre.)
128
Diez días después del nacimien Todo ciudadano podía usar del
to del príncipe, los protestantes derecho de petición, o sea de soli
ingleses pidieron a Guillermo de citar del rey amparo para sus legí
Orange, marido de la princesa M a timos intereses. La justicia sería
ría, que acudiese a defender la ejercida con rectitud y clemencia.
religión reformada. Guillermo des La Declaración de derechos fue
embarcó en Inglaterra con 14 000 leída a Guillermo y María en se
hombres, a fines de 1688. Jacobo sión solemne, y sólo después de
II huyó a Francia, sin oponer re haber éstos jurado respetarla, se
sistencia. procedió a su proclamación. El he
cho reviste extraordinaria impor
LA DECLARACIÓN tancia, porque inaugura un nuevo
DE DERECHOS principio: el de la soberanía na
cional, ya que los reyes adquirían
El parlamento proclamo reyes a el poder en virtud de un contrato,
María II y a Guillermo III en pa cuyas condiciones debían respetar,
ridad de mando, pues el príncipe y no por la fuerza de las armas o
de Orange no había querido acep por la voluntad de Dios, como ellos
tar el puesto secundario de rey pretendían.
consorte o, com o decía, “estar ata Otra ley, el bilí de tolerancia,
do por las cintas del delantal de acordó la libertad de culto a los
su esposa”. puritanos, presbiterianos e inde
Juntamente con la elección de pendientes, es decir, a los protes
los soberanos, las cámaras vota tantes que no pertenecían a la igle
ron la Declaración de derechos, sia oficial; los católicos quedaron
enumeración minuciosa de las li excluidos de sus beneficios.
bertades inglesas.
D e acuerdo con sus disposicio
nes, el rey no podía percibir im Europa frente a Luis XIV
puestos, ni suspender la aplicación
de las leyes, o sostener un ejército El imperialismo de Luis X IV
permanente, sin el consentimiento halló diversos motivos para pro
del parlamento. Éste debía reunir vocar guerras. Pueden citarse en
se con frecuencia, y la elección de tre ellos los siguientes.
sus miembros, lo mismo que los
debates, debían realizarse con ab La p o l ít ic a d e l a s f r o n t e r a s
soluta libertad. Proclamada por Ri-
n a t u r a l e s .
chelieu, consistía en fijar los lími
tes de Francia en los Pirineos, los
Alpes y la orilla izquierda del Rin,
es decir en accidentes geográficos.
Su cumplimiento hacía necesario
tomar Saboya, al sudeste, y los
Países Bajos, Luxemburgo, Lorena,
parte de Alsacia y el Franco Con
dado, al este y nordeste.
129
El paren tesco con la casa tanda, la de la Liga de Augsburgo
real de Luis X IV era
E spaña. y la de la Sucesión Española.
hijo de Ana, y esposo de María La primera, contra España, tuvo
Teresa de Austria, infantas espa com o pretexto la reclamación de
ñolas. En esa doble vinculación algunas comarcas, que según Luis
fundó su derecho a reclamar algu X IV debían devolverse a su esposa
nas posesiones y a intervenir en la por razones de herencia. Le valió
designación del nuevo rey de Es la ocu p a ción de una parte de
paña, cuando el trono quedó va Flandes.
cante por muerte de Carlos II, en
el año 1700. La guerra de Holanda comenzó
con la invasión de ese país por dos
La p r e p o n d e r a n c ia f r a n c e s a .
grandes e jércitos mandados por
El aumento del poder francés alar Turena y Condé. Los holandeses
mó a las demás naciones, porque detuvieron su avance inundando
amenazaba destruir el equilibrio vastas comarcas mediante la rup
europeo instaurado por los congre tura de diques que contenían las
sos de Westfalia; de aquí la forma aguas del mar cuyo nivel era más
ción de coaliciones generales para alto que el de las tierras.
combatirlo. Las principales potencias euro
peas in tervin ieron en favor de
La c u e s t i ó n r e l i g i o s a . La re Holanda, p rolon g a n d o la lucha
vocación del Edicto de Nantes y durante cinco años sin resultado
la persecución de los calvinistas decisivo. La paz p ro p o rcio n ó a
erigió a Luis X IV en campeón del Francia algunas ventajas territo
catolicismo y le acarreó la hostili riales en F landes y el F ranco
dad de las naciones protestantes. Condado.
Las principales guerras fueron La guerra de la Liga de Augs
cuatro: la de Devolución, la de Ho burgo, llamada así por la ciudad
130
donde la concertaron las naciones Borbón, su familia, privó al fin sobre to
adversas a Luis X IV , se originó do otro argumento.
Una mañana, en V ersa lles, contra
por las anexiones realizadas por riando los principios del ceremonial, el
éste, en violación de los compromi soberano hizo abrir de par en par las
sos contraídos. puertas de su gabinete de trabajo, dando
El promotor y principal perso acceso a la multitud de cortesanos que
habitualmente aguardaban en las gale
naje de la Liga fue Guillermo de rías. Una vez reunidos, tomó de la mano
Orange, que primero fue jefe del al duque de Anjou y exclamó: “ Señores,
gobierno holandés y después, se he aquí al rey de España” . Volviéndose
gún dijimos, rey de Inglaterra con en seguida a su nieto, le dijo entre otras
cosas: “ Sed buen español: es desde aho
el nombre de Guillermo III. Du ra vuestro deber, pero recordad que sois
rante nueve años los franceses lu francés, para mantener la unión de am
charon solos contra la mayoría de bas naciones” . Este concepto se concre
Europa. El cansancio general im tó con la frase: Ya no hay Pirineos.
puso la paz en 1697. Luis X IV Aunque el nuevo rey, Felipe V,
evacuó los territorios anexados, fue aceptado al principio por todos
con excepción de la ciudad y re los estados, excepto Austria —que
gión de Estrasburgo. mantenía los derechos del archi
duque Carlos—, algunas actitudes
de Luis X IV motivaron una nueva
LA SUCESIÓN ESPAÑOLA coalición contra él, en la que inter
vinieron Austria, Inglaterra, Ho
landa y los príncipes alemanes.
Carlos II quería con servar la
La guerra duró de 1702 a 1713.
integridad del imperio español, y En el curso de ella, entraron en la
al cabo de enconadas luchas diplo lucha Portugal y los Estados ita
máticas, designó heredero de todos lianos, que pasaron de uno a otro
sus dominios a Felipe, duque de
bando, quedando al fin la mayoría
Anjou, mediante un testamento re
de parte de la coalición.
dactado un mes antes de su muer
Las operaciones militares tuvie
te, ocurrida en noviembre de 1700.
ron por teatro a Alemania, los Paí
Luis X IV , que había consentido en el ses Bajos, el este y norte de Fran
reparto propuesto por Inglaterra (ver cia, y principalmente a España,
pág. 103), vaciló cinco días en aceptar donde se instalaron los dos preten
la decisión del difunto monarca español, dientes: Felipe V, en Madrid, y el
porque la violación de lo pactado traería
fatalmente la guerra; la ambición y el archiduque Carlos, en Barcelona,
deseo de dar otra corona a la casa de acompañados por sendos ejércitos
131
de naturales y extranjeros, que lán, Cerdeña y Nápoles. A Ingla
asolaron el país. terra se le confirmaba su soberanía
En 1704 los aliados emprendie sobre la isla de Menorca y el
ron la ofensiva con dos ejércitos: puerto de Gibraltar, conquistado
el austríaco, mandado por el prín en la guerra, y adquiría Terranova
cipe Eugenio de Saboya, y el anglo- y otras comarcas de América del
holandés, dirigido por Juan Chur- Norte, cedidas por Francia. Ade
chill, duque de Malbourough. Uni más, obtenía de España el derecho
dos en los Países Bajos, obtuvieron de establecer asientos en las prin
en 1706, la victoria de Ramillies, cipales ciudades de América, para
y en 1709, la de Malplaquet, e la venta de esclavos negros, cuyo
invadieron el norte de Francia; monopolio le era asegurado por
pero la línea Vauban, formada por treinta años, y de enviar anual
tres series de fortalezas, los detuvo mente a cada puerto americano un
durante dos años. navio de permiso, cargado de mer
En 1710, los franceses consi caderías.
guieron reaccionar: en ese año, el Inglaterra recabó, como se ve,
duque Luis de Vendóme derrotó el mayor provecho sobre todo en
completamente a los anglo-austría- materia comercial.
oos en Villaviciosa, al norte de
Francia perdió territorios y los
España; por su parte, el mariscal
excesivos gastos y los perjuicios
C laudio de V illars, rech a zó en
sufridos por el comercio marítimo
1712 al duque de Saboya en la
la sumieron en la miseria. Carlos
batalla de D enain, salvan do a
V I no aceptó el arreglo de la suce
París.
sión española hasta 1725, en que,
por el Tratado de Viena, reconoció
LA PAZ DE UTRECHT a su antiguo rival.
134
de Póltava. La lucha prosiguió, in Ejército: lo organizó siguiendo
terviniendo otros países enemigos el modelo prusiano, aunque con
de Suecia, y terminó con una paz taba también con los cosacos, cuer
que reconocía a Pedro el Grande po irregular de caballería; equipó
la posesión de diversas comarcas además una escuadra.
sobre el mar Báltico.
Iglesia: substituyó al patriarca,
El soberano ruso realizó dos via jefe de la iglesia ortodoxa, por un
jes por los principales países de consejo de sacerdotes, el Santo Sí
Europa, uno de incógnito y otro nodo, ante el cual tenía un repre
oficial, y dedicó toda su energía a sentante.
implantar en su país cuanto había
Economía y cultura: estimuló el
visto, sin admitir demoras, llegan
establecimiento de fábricas, la ex
do a emplear la violencia para
plotación de minas, la mejora de la
allanar torpezas o mala voluntad.
agricultura y la construcción de
Su obra abarcó diversos órdenes.
canales; erigió la Academia Naval,
Gobierno: creó un Consejo de la Escuela de Cirugía, la de Inge
Estado, de carácter consultivo, y niería. En 170'Efundo una nueva
diez colegios, especie de ministe ca p ita l: San P etersbu rgo (h o y
rios, formado cada uno por varias Leningrado), a orillas del Neva,
personas. Dividió a los funciona cerca del Báltico, y obligó a los
rios en catorce categorías, según nobles a levantar allí sus residen
el rango y la nobleza. Fundó un cias; un arquitecto francés cons
cuerpo regular de policía. truyó dos palacios, denominados
“de invierno” y “de verano”, para Westfalia, la independencia de las
residencia del Zar. Provincias Unidas, o sea la parte
septentrional de los Países Bajos.
Costumbres: hizo que los hom
bres recortaran los cabellos y las La nueva nación constituyó una
barbas y vistieran al modo euro república federal, con autoridades
peo, y que las mujeres abandona locales, de amplia autonomía.
ran el velo y el encierro; impuso Los Estados Generales, forma
a los cortesanos y funcionarios la dos por diputados de las provin
celebración de reuniones y fiestas. cias, sesionaban en La Haya y
dictaban las leyes, ejercían la re
La mayor parte de estas innovaciones presentación exterior y designaban
despertaron tenaz resistencia. Alexis, hi
jo del zar, se pronunció también contra
los altos jefes del ejército y la
las iniciativas paternas; los principales armada.
opositores fueron a ju s ticia d o s, algunos
El Pensionado (llamado así por
por la propia mano del soberano; Alexis,
condenado a muerte, pereció en la cár que percibía una pensión anual a
cel la víspera de su ejecución. título de sueldo), asesor y secre
Pedro el Grande f íeció en enero de tario de los Estados Generales, te
1725, a consecuencia de una pulmonía
contraída por arrojarse a las aguas del
nía funciones análogas a las de un
Neva, en pleno invierno, a fin de parti primer ministro.
cipar del salvamento de un barco próxi
mo a naufragar. El Estatúder, jefe del poder eje
Su obra política le sobrevivió, no así cutivo, aplicaba las leyes y vigilaba
la cultura, malograda casi por completo la administración.
poco después de su muerte.
Desde la época de Guillermo el Ta
citurno, este último puesto se hizo here
HOLANDA ditario en la familia de Orange, circuns
tancia que determinó la aparición de dos
tendencias: la orangista, partidaria de la
España r e co n o ció definitiva monarquía, y la republicana. Esta últi
mente en 1648, por la paz de ma predominó durante veinte años, pero
En la época del predom inio holandés, Amsterdam era un importantísim o centro com ercial. Este
grabado muestra una calle del siglo XVII: los escaparates de las tiendas, en las que se podía adquirir
cualquier producto, no importa de qué procedencia, estaban al alcance del peatón. En primer
término, un vendedor de anteojos; atrás, un zapatero.
Una escuela de niñas en el siglo x v n : la vieja maestra enseña a leer a un grupo
d e jovencitas sentadas en pequeñas sillas irregularmente distribuidas; ambiente m uy
distinto al de un aula form al de la actualidad. (Cuadro d e B osse.)
E dificio de la Casa de Contratación, en Sevilla. Fiscalizaba el com ercio con América y ejercía activi
dades equivalentes a las de un tribunal de justicia en las cuestiones relacionadas con el nuevo mundo.
E l Himno es cantado por primera vez en los salones de la señora M aría Sánchez de Thom pson. ( Óleo
de P. Subercasseaux, M u seo H istórico N acional.)
Portal de una típica casa colonial, que se halla
en la ciudad de La Paz, Bolivia.
139
E l virrey, junto con la Audiencia, constituía la
máxima expresión del poder político. (E l virrey
Francisco de T oled o, según Guarnan Pom a de
Ayala. )
140
de ausentarse el primero, y de seis meros miembros y luego se sortea
a veinticuatro “regidores”, según la ban cada dos años entre una lista
importancia de la población; com de comerciantes matriculados.
prendía un alférez real para las ce
remonias solemnes; el fiel ejecutor, L as a u t o r id a d e s e c l e s iá s t i
que atendía la existencia de provi cas. C om prendían arzobispados,
siones de primera necesidad; el al obispados, parroquias y curatis.
guacil mayor; je fe de p o licía , el En el Río de la Plata sólo se es
defensor de pobres, menores y au tablecieron los obispados de Asun
sentes; un síndico procurador, que ción (1 5 4 7 ), Tucumán (1 5 7 0 ) y
intervenía en asuntos judiciales, y Buenos Aires (1 6 2 6 ). En 1807 el
otros fu n cion arios. Duraban un de Tucumán se dividió en los obis
año, no percibían sueldo y no po pados de Córdoba y Salta.
dían ser reelectos de inmediato. El rey ejercía el derecho del Pa
Tenía muy amplias atribuciones tronato que lo facultaba para pre
ejecutivas, judiciales y administra sentar candidatos para la elección
tivas. En casos de graves y urgen de los altos cargos vacantes y con
tes peligros sus miembros podían ceder el Pase (es decir la aplica
invitar a los prin cip ales vecinos ción) de las bulas p on tificia s y
para tratar las medidas adecuadas. resoluciones de los concilios. Tam
En nuestro territorio alcanzaron bién admitir nuevas órdenes reli
gran im portan cia porque era la giosas, fundar iglesias, crear nue
única oportunidad de los colonos vos obispados, etc. La conversión
de intervenir en asuntos públicos. de los indios fue una de las preo
cupaciones más absorbentes de la
E l c o n s u l a d o . Era un tribunal empresa colonizadora. En 1522 los
que fue adquiriendo cada vez ma franciscanos fundaron en Texcoco
yor importancia en asuntos econó (M éx ico) la prim era escuela de
micos. El rey nombraba los pri catequización. Los m isioneros se
141
F a ch a d a d e la iglesia colonial de Tepotzotlán,
en M éxico.
cando hasta abarcar el oriente del Grande, con un total de 54 000 ki
Paraguay, nuestra actual provincia lómetros cu adrados y una cifra
de Misiones, la mitad oriental de máxima de 114 000 habitantes en
Corrientes y una ancha faja occi 1707. Sumaban 48 pueblos de los
dental de los actuales estados bra que 33 han subsistido. El gobierno
sileños de Santa Catalina y Río era ejercido por dos sacerdotes, el
rector, jefe de la administración, y
el maestro, en cargado de la ins
trucción y práctica del culto.
El trazado de cada pueblo obe
decía a un plano común, la vida
estaba regimentada en sus meno
res detalles. -'Los niños aprendían
a leer y escribir y luego se inicia
ban en un oficio y tareas agrícolas;
los más capaces eran instruidos en
las artes y en música. Para defen
derse organizaban m ilicias bien
armadas y disciplinadas, que más
de una vez aportaron sus contin
gentes a las luchas c o l o n ia l e s .
En 1767 el rey Carlos III ordenó la
expulsión de los jesuítas, arguyen
do que atentaban contra las autori-
143
dades laicas. Sus establecimientos con fu n dirse con otro del mismo
fueron repartidos entre otras órde nombre, lugarteniente de Irala en
nes religiosas o sujetos a las auto A su n c ió n ). L legó hasta Sancti
ridades civiles; el cambio determi Spiritus, sobre el Paraná, donde
nó una rápida decadencia. Heredia, subordinado de Mendoza,
se le sublevó y dio muerte, regre
sando al Perú.
En 1549, Juan Núñez de Prado
TUCUMÁN, CUYO p en etró hasta T u cu m án , donde
Y EL RÍO DE LA PLATA fundó la Ciudad del Barco, trasla
EN EL SIGLO XVI dada luego a Salta y por tercera
vez a Santiago del Estero. Fue de
El descubrimiento de Tucumán puesto y arrestado por Francisco
se debe a Diego de Almagro, veni de Aguirre, mandado desde Chile
do del P erú en su v ia je a Chile por Valdivia; trasladó nuevamen
(1 5 3 6 ). R e co rrió Jujuy, Salta y te a Ciudad del Barco a un lugar
Catamarca. En 1543, Diego de R o próx im o y le cam b ió el nombre
jas salió del Perú, quien se abrió por Santiago del Estero. Por una
paso contra la resistencia indíge Real Orden, V a ld iv ia consiguió
na. Murió a consecuencia de una una franja territorial de cien le
herida en una pierna por una fle guas de ancho que llegaba hasta
cha envenenada. Le sucedió Fran el meridiano de 64° y con eso Tu
cisco de Mendoza (que no debe cumán quedó d e p e n d i e n t e d e Chi-
144
le. Los españoles procedentes del del Tucumán dependiente del vi
norte protestaron por esta conce rreinato del Perú. Luego v o lv ió
sión y fueron atendidos por una allí el veterano Francisco Aguirre.
real cédula de Felipe II (agosto En mayo de 1565, su sobrino, Die
de 1563) creando la gobernación go de Villaroel, fundó la ciudad de
Tucumán.
En 1571, el virrey del Perú,
F ran cisco de T o le d o , encargó a
Jerónimo Luis de Cabrera la fun
dación de otras poblaciones. El 6
de julio de 1573 fundó Córdoba,
luego siguió hasta el Paraná, don
de se produjo su en cuentro con
Garay. Otro conqu istador, Her
nando de Lerm a, fundó Salta
(abril de 1582). Juan R am írez
de Velasco, capacitado gobernan
te, gobernó siete años (1 5 8 6 /9 3 ).
En su período fueron fundadas La
Rioja y Jujuy. El siglo se cerró
siendo gobernador Pedro de Mer
cado y Villacorta.
El siglo XVII se caracterizó por
tres sucesivas guerras encabezadas
por los calchaquíes durante un pe-
río de 35 años (1630-1665).
M onum ento a H ernando de Lerma erigido en la
ciudad de Salta.
145
La prim era (1630-1635), du nombre de Inca H ualpa. Consi
rante el gobierno de Felipe de Al guió interesar a M ercado y Villa-
bornoz, motivada por un castigo y corta, d icién d ole que hacía esta
humillación a los principales caci maniobra para ganar la confianza
ques que pasaron a saludarlo; fue de los indios y conseguir así que
particularmente feroz y se agravó le revelaran dónde tenían enterra
por una peste que hizo estragos en das enormes riquezas, que compar
ambos bandos. Fue finalmente so tiría con M erca d o. E n terad o el
focada por refuerzos llegados del virrey del Perú, ordenó el arresto
Perú. de Chamijo, que fue resistido por
La segunda, muy breve (1 6 5 7 / los indios. Tras arduas luchas lo
59), la promovió un in trigan te: capturaron y rem itieron a Lima,
Pedro Chamijo, muy interiorizado donde fue decapitado.
en la vida, idioma y costum bres La tercera, muy breve (1 6 6 5 /
indígenas. Se presentó titulándose 66) determinó un cambio de re
descendiente de los incas, con el sidencia de las tribus trasladadas
Sala capitular del cabildo de Asunción en la
que se aprecia el gran dosel con las reales ar
mas de España.
147
LA GOBERNACIÓN DEL RÍO Los sucesos político-económicos
DE LA PLATA más importantes fueron:
l 9 La p ráctica de contraban
Tenía por Capital a Buenos Ai do, o sea del comercio clandestino
res y comprendía: esta Provincia, con naciones extranjeras. Varios
Santa Fe, Entre Ríos, el Chaco, la gobernadores se dejaron tentar por
Banda Oriental y la Patagonia. las fructuosas ganancias y al tér
Hasta la creación del Virreina mino de su período fueron proce
to en 1776, es decir durante el pe sados y algunos castigados severa
ríodo de algo más de un siglo y mente.
medio, se sucedieron 32 goberna
dores, la mayoría de excelente de 2° Los piratas y corsarios asal
sempeño. taban y secuestraban barcos espa
Puede dividirse en dos perío ñoles y efectuaban desem barcos
dos: 1618-1680 y 1680-1776. para saquear poblaciones. En va
En el primer período se erigió rias ocasiones llegaron a amenazar
el Obispado de Buenos Aires por Buenos Aires. Los vecinos fueron
la Bula del papa Paulo V, siendo organizados militarmente y no po
su prim er titular fray Pedro de dían ausentarse de la ciudad sin
Carranza. permiso. El Fuerte (en el lugar
148
El fuerte de Buenos Aires en 1720. Contenía la residencia del virrey y alojaba una guarnición. En
el primer plano de este cuadro de Léonie Matthis puede observarse una procesión que atraviesa
la plaza.
149
sofocado por el nuevo gobernador, lipe, D uque de A njou, nieto de
don Pedro de Cevallos. Luis X IV , quien resultó vencedor
y ocupó el trono con el nombre
39 El litoral de la Patagonia fue de Felipe V. Éste ordenó al gober
recorrido por los padres jesuitas nador Juan de Valdés Inclán el
Quiroga, Cardiel y Strobel, apun desalojo de los portugueses de la
tando valiosos informes. El médi Colonia, conseguido tras seis me
co inglés Tomás Falkner, por su ses de sitio en marzo de 1705. Pe
parte, exploró La Pampa y se in ro negociaciones posteriores obtu
ternó hacia el sur. Vuelto a su pa vieron de Felipe V la devolución
tria publicó un notable libro sobre de la Colonia en 1716. Esta nue
los lugares recorridos . va ocupación debía durar 46 años.
Como los portugueses empeza
Los CO N FLICTOS CON PORTU ban a avanzar desde la Colonia en
GAL. El l 9 de enero de 1680, M a dirección al Atlántico, el goberna
nuel Lobo, gobernador de R ío de dor Zavala decidió cortarles el pa
Janeiro, fundó en la costa oriental, so fundando Montevideo, con fa
casi frente a Buenos Aires, la Co milias porteñas y otras traídas de
lonia de Sacramento. El goberna las Canarias, a fines de 1726. El
dor de Buenos Aires desalojó a los l 9 de enero de 1730 comenzó a ac
invasores en él mes de agosto. El tuar su primer Cabildo. Cambian
rey de Portugal protestó enérgica do de táctica, los portugueses se
mente y por el tratado de Badajoz fueron internando desde el norte y
obtuvo del m onarca español la fundaron la ciudad de San Pedro,
devolución de la plaza, realizada en la desembocadura de la laguna
en 1683. La segunda ocu p a ción de Los Patos.
duró 22 años. Durante ese perío Felipe IV, influido por su espo
do cesó de gobernar España la sa doña Bárbara de Braganza, hija
Casa de Austria, con la muerte del rey de Portugal, firmó en ene
en 1700 de Carlos II, que no dejó ro de 1750 el Tratado de Permu
descendencia directa. Estalló en ta, por el cual cedía en América
tonces una larga guerra entre pa inmensos territorios por la sola de
rientes de esa Casa y un Borbón, volución de la Colonia del Sacra
francés, que alegaba mayor paren mento. La absurda transacción pro
tesco. Ésta tuvo carácter interna vocó airadas protestas del propio
cional, pues Austria e Inglaterra hermano del rey, que debía suce-
apoyaron a Carlos de Habsburgo, derle con el nombre de Carlos III,
en tanto que Francia apoyó a Fe y de los jesuitas. El gobernador
EL TRATADO DE PERMUTA
Línea de Tórdesillas
_ ^ __ Línea del Tratado de
Perm uta
151
Pero el T ra ta d o de París de 9 000 soldados y tripulantes; con
1763 la devolvió, comenzando la ella intimó la rendición de la C o
cuarta y última ocupación portu lonia, acatada por sus defensores.
guesa de la Colonia, que duró ca El tratado de San Ildefonso con
torce años. firmó el triunfo.
La larga disputa inspiró a Car
los III la creación del Virreinato
del Río de la Plata, con carácter Consecuencias de estas guerras.
provisorio, y confió a Ceballos, pri Comprobaron el valor de los crio
mer titular del cargo, el mando de llos, quienes, salvo la expedición
una poderosa e x p e d ició n de 20 de Ceballos, sop ortaron solos la
barcos de guerra, 96 transportes y larga lucha.
. < ■ ' * P R O V IN C IA \
^CUZCO / DB
DE
A r e q u ip a / INT. V Loreto
° ¡: M u , ' i IN T . m
to " v “ ° X O S •, *
*J_A PAZ\ c OCHARAMJIA v.
\ „ . - ^ C o c h a b a m b a S la . C ru z d e fS S ie rra
.PAz/'‘von .M...izq u e,,-'y PRO V IN C IA \
I
\ ,P R E S .^ s / rK u v iiM tiM .
i i- v O C H U Q U IS A C A ( C h a r c a s )
o\ DE \
.•POTOSI \ C H A R C A S
A ta ca m a -o L ip e s s - ’ ^Tarija
C o b ija o (NT. DE
POTOSI/’ " " OV
^ KCHIQUITOS
S..SALVADOR 0?ánN N 2 I /
DE JUJUYO SALTA i 5 ! /
INT. DE
O DEL TU C U M A p ASUNCIÓN ¿
«SA LTA ! \ /O L.mm..
» 3/ !
»SAN M IG U E LDE _
_____ ./ V_ / ‘S. ' ,f PR O V . DE \
RIO
ConiaDÓ ‘. T U C U M A N o ■no......
í i V «*- j !
C p p o '•• DEL TUCUMAN
DEL TU CU M A N \¡ a' J—
T |LO
iLObS P U E B ÿ ïS G R A N D E
rUtDljV
S,.'FERNANDO .__.^írlOf'anrlolarra
°S G O .\D E L r n o R ,PMT'? ? '? Candelaria
DE CÁTAMARCAO ESTERO ^ CORRIENTES» » ^ ^ |S |0 N K
i _ S
La Capano
erena 0 I¡LA R I0 J A
|N° T DE N sj ¡ ' ¡
.'’c ó r d o b a d e l t u c u m a ñ
- n/
PRO V. \
i
\
o S. JUAN
° CO
ÓRD O BA
O / le S I
! F E °°
N
DE N.
< VALPARAISO O \M E N D 0 Z A g L u l$ , B a |a d a £ >
M ON TEVIDEO
SANTIAGO ° \ nc, ° u kh¡ J *
(Colonia
o o M aldon ado **
% y\ MONTEVIDEO 4,
(
(
/ *
~i \
*
o F u e rte C arm en
3 d e P a ta g o n e s
0 San José
/
Pto. D esead o
Islas Malvinas
V IR R E IN A T O
Estrecho de
M a g a lla n e s DEL
152 R IO DE LA PLATA
CAPÍTU LO VII
LAS N U EV A S
IDEAS
153
C arlos S econ d a t, b a r ó n de M on teaqu ieu .
V o lt a ir e , ya a n c ia n o . Escultura de
H oudon, que fuera contem poráneo de
aquél.
154
cutivo, que las hace cumplir, y el judi En el Contrato Social, su prin
cial, que las aplica en los conflictos entre
particulares. Es un sistema adoptado por
cipal obra desde el punto de vista
casi todas las constituciones posteriores. revolucionario, defendió el princi
Después de analizar las virtudes y de pio de la soberanía popular.
fectos de las distintas formas de gobier
no, aboga por la monarquía parlamenta
ria, de tipo inglés, que limita y fiscaliza
el poder del rey.
LA ILUSTRACIÓN
Francisco María Arouet de Vol- •LOS AVANCES CIENTÍFICOS
taire nacido en una localidad pró
xima a París, fue novelista, poeta, L a E n c i c l o p e d i a . La instruc
dramaturgo y filósofo. Combatió ción primaria había comenzado a
especialmente la intolerancia reli difundirse. En los países católicos
giosa e hizo un caluroso elogio de por obra de los religiosos, como
las libertades británicas. San José de Calasanz (1556 a
La influencia más grande en la 1648) en España, y San Juan Bau
propaganda revolucionaria corres tista de La Salle (1651 a 1719), en
pondió a Juan Jacobo Rousseau, Francia. En los países protestan
ginebrino, hijo de un relojero. tes, con intervención del estado.
Mientras los dos filósofos ante
Los folletos, los libros y los pri
riores eran ricos burgueses, que
meros periódicos eran leídos ávida
sólo pedían reformas moderadas,
mente, a veces en cafés y hosterías
Rousseau, de clase humilde, adop
ante grupos de analfabetos.
tó una actitud francamente sub
versiva en escritos ardientes y apa En el arte plástico predomina
sionados. D e ilustración irregular ron los franceses. La arquitectura
y carácter algo desequilibrado, co monumental europea de la época
mo lo demuestran sus fallas mora siguió el estilo de ese país. En la
les —expuestas por él mismo con pintura adquirió im portan cia el
singular franqueza en sus Confe pastel; los cuadros tratan temas
siones-, su in teligen cia genial, galantes y son de colores suaves;
aunque desordenada, ofrecía una W atteau fue el principal pintor del
mezcla exuberante de aciertos y género; La Tour es célebre por sus
paradojas. Criticó la vieja peda retratos.
gogía en Emilio, libro en que su Las letras produjeron novelas
giere un sistema de educación sin sentimentales o picarescas. En el
maestros, y una reforma religiosa teatro obtuvo gran éxito Beaumar-
basada en el culto del Ser Supremo. chais con su comedia El barbero
de Sevilla, que inspiró más tarde la
ópera de ese nombre a Rossini.
La música logró una notoriedad
jamás alcanzada hasta entonces.
Mozart fue uno de sus grandes
representantes.
Los avances científicos siguieron
el ritmo anterior. Las matemáticas
contaron con los trabajos de La-
place. En física, el francés Papín
155
P o co antes de morir, a los
37 años, W atteau pintó es
te cuadro, conocido con el
nom bre de “ La enseña de
Gersaint” . R e p r e s e n t a el
negocio de venta de cua
dros de su amigo Gersaint,
hecho por un encargo de
éste. El artista abandona
totalm ente los temas galan
tes de la m ayoría de sus
obras para brindar una ima
gen exacta y real de la so
ciedad de París en 1720.
(Palacio de Chaxlottenbur-
burgo, B erlín.)
El despotismo
ilustrado en Europa
159
La emperatriz M aría Teresa de Austria, rodeada por
sus numerosos hijos e hijas: entre ellas M aría Antonie-
ta, que luego sería reina de Francia. (Cuadro de
autor desconocido / Galería Pitti, Florencia.)
G uerra de la s u c e s ió n de
La nación polonesa se
P o l o n ia .
constituyó a fines del siglo XIV,
después de sostener luchas secula
res contra los tártaros. El país,
llanura sin límites naturales, esta
(1740 a 1780). Era afable, senci ba habitado por pueblos de dife
lla, inteligente, culta, enérgica y rentes razas, con predominio de los
laboriosa. Consiguió salvar la co eslavos, y de distintas religiones,
rona y conservó la integridad de con mayoría católica.
su territorio, menos la Silesia y
La sociedad comprendía dos clases ex
algunas regiones de Italia. Trabajó tremas: los siervos, sumidos en la más
empeñosamente en la unificación terrible miseria, y la nobleza, dividida a
de sus dom inios, m ediante la su vez en: los magnates, unas trescientas
cen tralización administrativa y familias, poseedoras de inmensos terri
torios, aldeas y castillos; nobleza media,
financiera. menos rica y poderosa, y baja nobleza,
Su hijo, José II, buen soldado, formada por una turba de aventureros,
gobernante activo y hombre de dueños de reducidos solares, cuya prin
proverbial sencillez de costumbres, cipal riqueza consistía en un sable y un
caballo.
fue asociado al trono en 1765, y Ejercían el gobierno un rey electivo,
reinó sólo desde 1780 a 1790. carente de poder, y la Dieta, asamblea
formada por el Senado y la Cámara de
Confiando ciegamente en los dictados los Nuncios; sus leyes no eran válidas si
de la razón quiso aplicar de inmediato no resultaban aprobadas por unanimi
un plan teórico y general de reforma, dad; con tal restricción fracasaban en sus
cuidadosamente elaborado por él. resultados casi todas las reuniones.
En el orden social abolió la servidumbre,
adjudicando a los campesinos la propie
dad de las tierras, a cambio de una renta En 1733, el trono fue disputado
que debían pagar a los antiguos dueños, por Estanislao Leczinski, suegro de
y estableció la igualdad de todos ante la Luis X V , rey de Francia, y por
ley y los impuestos.
Augusto III de Sajonia. La quere
En el orden político, dividió el estado
en trece gobernaciones, uniformemente lla originó una guerra de cinco
administradas, suprimió a las autoridades años, en la que intervinieron Rusia
locales, y declaró capital única a la ciu y Austria unidas contra Francia, y
dad de Viena. que terminó con la paz de Viena.
En el orden religioso, promulgó el
Edicto de Tolerancia de cultos, cerró nu Estanislao Leczinski renunció a la
merosos conventos y consagró la supre- corona, recibiendo en compensa-
160
Estanislao Leczinski, quien disputó con Augusto III
de Sajonia el trono polaco, para perderlo después de
cinco años de guerra. (Cuadro del si£io XVIII, existen
te en Versalles.)
G u erra de la s u c e s ió n de
A u s t r i a (1740
a 1748). Cuando
murió el emperador Carlos VI, fue
desconocida la Pragmática San
ción, que designaba heredera a su
hija María Teresa. Estalló enton
ces una guerra, en la cual Prusia,
Francia, España y algunos Estados
menores lucharon contra Austria,
apoyada luego por Inglaterra y
Holanda.
ción la Lorena, que a su muerte
Federico II se apresuró a con
debía pasar a su yerno. Augusto
quistar Silesia, objeto inmediato
fue reconocido rey de Polonia.
de sus am biciones m ientras un
Esta guerra demostró la incapacidad e jé rcito franco-alem án ocupaba
de P o lo n ia para defenderse, situación Bohemia y amenazaba a Viena.
que la ponía a merced del extranjero.
Prusia ambicionaba la región del Vístu María Teresa, con energía y deci
la inferior, a fin de unir Brandeburgo sión varoniles, marchó en 1741 a
con Prusia Oriental. Rusia deseaba la Hungría, en demanda de ayuda;
porción central, que la acercaba al oeste 100 000 hombres empuñaron las
de Europa. Austria, la parte sur, que
redondeaba sus fronteras de Bohemia y armas en respuesta a su pedido. Se
Hungría. Hubo tres repartos: en 1772, libró de su principal enemigo fir
1793 y 1795, participando de todos ellos mando la paz con el rey de Prusia,
Rusia y Prusia. Austria participó del y con los refuerzos húngaros pudo
primero y del tercero.
Polonia dejó de existir como nación -pasar a la ofensiva; sus tropas re
hasta nuestros días. cuperaron a Bohemia y llegaron
al Rin. A esta altura de la con jonia y numerosos príncipes alemanes.
tienda recibió la adhesión de Ingla Federico II, por su parte, obtuvo el
apoyo de Inglaterra, decidida, por riva
terra y Holanda.
lidades colon ia les, a obrar contra los
Federico II, considerando que franceses.
esa ayuda ponía en peligro sus El pase de Francia al partido de Aus
recientes conquistas, volvió a la tria y el de Inglaterra al de Prusia es
lucha derrotando a las fuerzas de conocido por la reversión de las alianzas.
María Teresa en dos grandes ba
tallas. Su in terven ción se llamó G uerra de los S ie t e A ños.
Segunda guerra de Silesia. Por su En 1756, el rey de Prusia precipitó
parte, los franceses combatieron, los acontecimientos, al ocupar Sa
en los Países B ajos, contra los jonia, para luego penetrar en Bo
anglo-holandeses. Al m ando del hemia.
mariscal Mauricio de Sajonia ob
tuvieron brillantes victorias, inicia Dos ejércitos lo amenazaron por
das por la de Fontenoy (1 7 4 5 ). La los flancos, pero los derrotó com
contienda terminó en 1748 con la pletamente: el fran co-sajón en
paz de Aquisgrán: Francia, a pesar Rossbach (noviembre de 1757) y
de sus éxitos, devolvió los territo al austríaco en Leuthen (diciem
rios ocupados durante la guerra; bre del mismo año), batallas ga
María Teresa fue reconocida como nadas por la aplicación de nuevas
soberana de Austria; Prusia quedó concepciones estratégicas, que con
en posesión de Silesia. sagraron a Federico II com o el
más grande militar de su tiempo.
La paz de Aquisgrán no satisfizo a No obstante sus victorias, pron
las potencias, que se prepararon para to fue acosado por otros ejércitos,
una nueva contienda. María Teresa per
rusos y austríacos. Gracias a la
seguía como principal propósito aislar a
Federico II para hacerle restituir lo que habilidad y rapidez de sus mar
le había tomado; para ello consiguió, chas consiguió enfrentarlos, pero
mediante hábiles negociaciones, la alian en 1759 no pudo evitar que las dos
za francesa, asegurada mediante el ma
trimonio de su hija, María Antonieta,
prin cip ales fuerzas enemigas se
con el delfín Luis, heredero del trono, y unieran y le infligieran un gran
la alianza de Rusia, Suecia, Polonia, Sa- desastre en K u n e r s d o r í . Los triun
162
F ederico II de Prusia, reputado por sus dotes de estratego, dirigió personalmente las campañas
m ilitares: este cuadro de F. Rocher lo muestra arengando a sus tropas, en m edio de la nieve,
antes de la batalla de Leuthen ( 1 7 5 7 ) , en la que derrotó al ejército austríaco.
163
El general inglés W olfe desplegó hábilmente sus tropas alrededor de la ciudad de Québec,
último baluarte francés sobre el río San Lorenzo. E n una encarnizada batalla, derrotó a su
adversario, el marqués de M ontcalm . Este cuadro de B enjam ín W est representa la muerte de
W olfe, en el m om ento de recibir la noticia de su triunfo. E n la lucha, también perdió la vida
su adversario.
C a rlos I I I d e E sp a ñ a , cu a d r o d e l p in to r alem án
(1T
A n to n io R . M e n g s . ( M u s e o d e l P r a d o , M a d r i d . )
Este reglamento protegía la construcción de bu
ques en España y daba prioridad a los peninsu
lares para el com ercio con las colonias.
L os PACTOS DE f a m i l i a . La Casa de
Borbón gobernaba en Francia, España y
las Dos Sicilias. Anteponiendo los inte
reses dinásticos a los de sus respectivos
estados, y con el objeto de apoyarse mu
tuamente en cualquier conflicto exterior,
sus reyes firmaron los pactos llamados
de familia. La alianza francoespañola,
concertada en Sevilla en 1729, fue rati
ficada por el tratado de El Escorial, y
nuevamente confirmada en París. Como
consecuencia de esos tratados las dos na
ciones se vieron recíprocamente obliga
das a intervenir en guerras que no les
interesaban de una manera directa.
168
\
j ? ) y de oro en Córdoba; de cobre
en Catamarca y de mercurio y azo
gue en Misiones.
L a p e s c a . N o llegó a constituir
una industria. En cambio se inten
tó la caza de la ballena y de los
lobos marinos en el litoral Atlánti
co (un partido de la provincia de
Buenos Aires conserva el nombre
de Lobería).
La i n d u s t r i a . Era ejercida en
pequeña escala en el seno de las
familias, con escasos obreros y
peones; participaban las mujeres
y los esclavos. En Buenos Aires y
los principales centros del interior
se obtenían tejidos, vinos y aguar
dientes, curtidos, platería, carretas,
L a m i n e r í a . Dentro del actual embarcaciones de poco calado, etc.
territorio argentino fueron explo La alfarería fabricaba ladrillos, ca
tadas en reducida escala minas de charros y tejas. Hubo fábricas de
oro y plata en Famatina (L a R ío - velas y jabones y molinos harine
U n grupo de marinos ha desem barcado en Puerto Deseado, y se entrega a la matanza de lobos de
mar, m uy abundantes en la zona. ( Grabado d e Ñ uño da Silva, 1586, publicado por “ M onum enta
ros. En todas partes se fabricaban L a s c o m u n i c a c i o n e s . L os via
dulces; Cuyo preparaba “orejones” jeros utilizaban simples senderos,
de durazno y ciruela. con escasísimos puentes; los arro
Los obreros trataron de organi yos se cruzaban por lugares vadea-
zarse en gremios; en 1788 se cons bles, a caballo o en carreta, balsa
tituyó, con aprobación superior, el o canoa o bien montado sobre una
de los plateros. Los zapateros no bolsa de cuero rellena de paja, lla
lo consiguieron por no ponerse de mada “pelota”, de la cual tiraba
acuerdo criollos y españoles sobre un ca b a llo. Un viaje de Buenos
la distribución de los cargos direc Aires a Mendoza duraba cuarenta
tivos. Faltaban obreros especiali días; a Salta, setenta.
zados; en 1796 se contrataron seis El transporte se hacía a lomo de
maestros curtidores de los Estados muía; carretas de altísimas ruedas
Unidos de América. tiradas por bueyes formaban lar
t
gas caravanas, guiadas por baquea Los blancos. Se distinguían, a su
nos, conocedores del rumbo a se vez, en españoles, criollos y extran
guir. Al term inar la jornada se jeros. Los españoles desempeñaban
instalaba el cam pa m en to, dispo casi la totalidad de las funciones
niendo los vehículos en forma de públicas; eran además propietarios,
cuadrado, dentro del cual se co comerciantes, industriales o profe
locaban los caballos; toda la noche sionales con estudios superiores.
se montaba guardia. Formaban la gran mayoría de los
A largas distancias encontrában “vecinos”, es decir “afincados” (en
se “postas”, destinadas al servicio casa propia) y miembros de la mi
de correos. Este servicio inició sus licia, esp ecie de guardia armada.
actividades en 1748. Había rama Los de menor categoría ejercían el
les a Asunción y Montevideo. El comercio al menudeo o se emplea
viaje se realizaba en “galeras”, de ban com o mayordomos de estan
caja pequeña y muy empinada; es cias o capataces de minas. Sus ras
taban montadas sobre tiras de cue gos característicos eran el fervor
ro, que mantenían la caja en sus religioso, el sentido del honor, el
penso. La correspondencia urgente apego a la tradición y el espíritu
se mandaba por “chasques”, famo guerrero.
sos por su velocidad. Los criollos, sus hijos nativos de
aquí, eran mirados con desconfian
za y apartados de los cargos oficia
les. Tenían el genio vivo, la afición
Vida, sociedad y cultura
a los esfu erzos físicos; un tanto
en el Virreinato dados a la holganza, derrochaban
los caudales acumulados por sus
Entraban en la composición de padres. D e aquí el dicho “padre
la sociedad tres razas; la blanca, pulpero, hijo caballero y nieto por
la indígena y la negra. D e su mez diosero”. Tenían una gran fe en la
cla resultó una gran variedad de grandeza futura del país y escaso
tipos, siendo los tres principales el resp eto por las disposiciones le
mestizo, de indio y blanco; el mu gales. •
lato, de negro y blanco, y el zam Los extranjeros: les estaba pro
bo, de indio y negro. hibido residir en A m érica, pero
171
Alcaldes del Cabildo de Buenos Aires, vestidos
con atuendos de c e r e m o n ia . ( D ib u jo d e F.
P a u cke.)
172
o cuartillo. Las monedas se acu En 1800 podía calcu larse que
ñaban en la ceca de Potosí. 15 000 personas sabían leer y es
cribir en el R ío de la Plata.
LA CULTURA La en señ an za s u p e r io r y es
r Lo que llam am os ense
p e c ia l .
Protom edicato de Buenos Aires, una de las creaciones del progresista virrey Vértiz. ( Fragm ento del
mural de A ntonio G onzález M oren o.)
Esta imprenta fue traída de C órdoba a
Buenos Aires después de la expulsión de
los jesuítas. Los ingresos que producía
se destinaban a sostener la Casa de N i
ños Expósitos.
E l p e r i o d i s m o . En la segunda S i •cv:
mitad del siglo x v n circularon en
'£ >
Buenos Aires hojas manuscritas; ¥
primero, clandestinas, y luego pú
K't
blicamente. El l 9 de abril de 1801 i ti
EN Q U E SE E X P L I- <fv*>"
apareció el primer número de un
periódico impreso llamado “El T e
I can todos los principios
'h
C a te c is m o e d ita d o e n la im p re n ta d e N iñ o s E x
KX CON LICENCIA.
Tú
$
p ó s ito s, la cu al te n ía el p riv ile g io d e p u b lica r
tod a s las cartillas y ca tecism os.
176
en todas las solem nidades. Los las ceremonias de recepción de las
miembros de la casa se reunían pa altas autoridades civiles y eclesiás
ra rezar el rosario, y los hijos an ticas, con fuegos de artificio, ca
tes de acostarse pedían la bendi rreras de caballos, etc. Las fiestas
ción a los padres. Los ayunos y familiares eran cuidadosam en te
abstinencias se observaban riguro preparadas; el obsequiante solía,
samente. en estos casos, solicitar a sus ín
La existencia se deslizaba tran timos la colaboración de sirvientes
quila y un tanto monótona, pero y el préstamo de vajilla. Los visi
eran frecuentes las diversiones pú tantes llevaban regalos y pasteles.
blicas como las corridas de toros, Las personas mayores jugaban al
con su circo especial en el Retiro, tresillo o a la malilla, en tanto que
los jóvenes organizaban partidas M arqu és de L oreto (1 7 8 4 /8 9 );
de lotería y prendas, o bailes don Nicolás de Arredondo (1 7 8 9 /9 5 );
de lucían suma gracia. Pedro M eló de Portugal y Villeux
La vida rural era esencialmente (1 7 9 5 /9 9 ); Antonio Olaguer Fe-
pastoril; las faenas ganaderas co liú (1 7 9 9 /9 9 ); Gabriel Cortés y
mo el rodeo, la marca y la doma del Fierro (1 7 9 9 /0 1 ); Joaquín del
provocaban la con cen tra ción de Pino (1 8 0 1 /0 4 ); Rafael de So-
mucha gente; se organizaban ver bremonte (1 8 0 4 /0 7 ); Santiago de
daderos torneos de habilidad y co Liniers (1 8 0 7 /0 9 ); Baltasar Hi
raje. Terminaban con carreras de dalgo de C isneros ( 1 8 0 9 /1 0 ) ;
sortija, juegos de pato y bailes. Francisco Javier de Elía (1 8 1 0 /
La “pulpería” —especie de alma 11), no reconocido por Buenos Ai
cén de comestibles, bebidas, y mul res, quedó en Montevideo. Sobre
titud de objetos domésticos, solía salió Vértiz, cuyas principales ini
ser centro de cantores y guitarre ciativas fueron citadas en diversas
ros. En ese medio rústico apare partes del libro; todos los demás
ció el gaucho, que fue al principio fueron funcionarios correctos, me
un fugitivo de las ciudades, aven reciendo especial mención del Pi
turero sin más amparo que sus do no, que falleció aquí, donde se ra
tes físicas y su cuchillo. El movi dicó su familia. Una de sus hijas
miento emancipador lo convirtió se casó con Rivadavia.
en el nervio de las guerras de la
independencia.
La independencia
CUADRO SINÓPTICO DE de Estados Unidos de América
LOS VIRREYES
178
U n grupo de jóvenes de
Boston, algunos de ellos
d is fr a z a d o s de indios,
arroja al mar un carga
m ento de té. El hecho,
a c a e c i d o en 1773, fue
uno de los desencade
nantes de la lucha por
la independencia.
180
CAPÍTULO VIII
LA R EV O LU C IÓ N
FR A N CESA
ANTIGU O R É G I M E N EN FR A N C IA
182
y la masa del pueblo, y por el
despotismo con que los soberanos
ejercían el poder.
Estos rasgos, menos acentuados
en algunos países com o Inglaterra,
Holanda y Suiza, alcanzaron en
Francia notable intensidad, consti
tuyendo lo que más tarde se llamó
antiguo régimen. Como en este
país originó una revolución de tras La nobleza, o segundo estado,
cendencia mundial, vamos a refe solía diferenciarse en rancia y nue
rirnos particularmente a él. va, según que sus títulos arranca
La sociedad francesa se dividía ran del feudalismo o de una dispo
en tres clases: el clero, la nobleza sición real más reciente. También
y el estado llano. se la distinguió por nobleza de
corte, la residente en Versalles con
El clero tenía a su cargo la ense el soberano, y nobleza de provincia,
ñanza, la beneficencia y el registro la radicada en sus tierras, donde
civil de las personas. Subsistía la vigilaba o dirigía las faenas rurales.
costumbre de proveer las dignida Los nobles tampoco pagaban im
des mayores con miembros de la puestos; solamente ellos ocupaban
nobleza, no sólo desprovistos de los grados del ejército, a partir de
vocación religiosa, sino, y en mu teniente; desempeñaban embaja
chos casos, hasta incrédulos. El das y recibían condecoraciones.
derecho de regalía, en virtud del Eran juzgados por tribunales espe
cual el soberano proponía al papa ciales, y con servaban sobre los
los candidatos para llenar las va campesinos buena parte de los de
cantes, favorecía estas designacio rechos de la época feudal.
nes. El alto clero disfrutaba de
cuantiosos recursos, proporciona El estado llano, o tercer estado,
dos por las rentas de las propie comprendía el resto de la nación:
dades eclesiásticas, los derechos veintitrés m illon es de personas
señoriales y el diezmo, especie de frente a los trescientos mil de las
impuesto cobrado sobre los pro dos primeras clases. Además de
ductos del campo. pagar la larga serie de impuestos,
El bajo clero, contrariamente al reseñada en las partes referentes a
anterior, recibía un sueldo escaso, Luis X IV y X V , debían entregar
llevaba una vida de privaciones y el diezmo a la iglesia, y el censo y
estaba formado generalmente por otros tributos a los nobles; en total,
hijos de labradores, que participa cuatro quintas partes de los ingre
ban de las angustias del pueblo, al sos, quedándoles apenas un quinto
cual apoyaron en el estallido de la para subvenir a sus necesidades.
revolución. El clero, que formaba Estaban som etidos, simultánea
el primer estado, no pagaba im mente, a la autoridad del rey, del
puestos fijos y tenía tribunales clero y del señor, lo que les coar
propios. taba toda libertad.
183
E l tercer estado aspiraba a alcanzar la igualdad cívica. P or eso, la lámina presenta a los nobles
(sim bolizados por las armas y el palacio B o r b ó n ), al clero (representado por objetos del culto
y la iglesia de N otre D a m e) y al estado llano (cu yos atributos son el barco m ercante y la riqueza
agropecuaria) colocados en un mismo nivel. (B ibliot. N ac. de Estam pas, París.)
L u is X V I , r ep resen ta d o c o n to d a la p o m p a cortesana.
( C u a d r o d e A . F . C a l l e t / M u s e o d e V e r s a l l e s .)
184
M aría Antonieta de Austria, a los 32 años de edad
según el retrato hecho por M adam e V ig é e -L e b r u n
(M u seo de Versalles.)
185
N écker realizó por primera
vez un balance de las fi
nanzas francesas. E l graba
do lo m u e s tr a r in d ie n d o
cuentas al rey. Éste eleva
los ojos b u s c a n d o inspira
ción en sus a n t e c e s o r e s ,
abrumado por el déficit del
p r e s u p u e s to . H a sta ese
m o m e n to , bastaba que el
rey lo ordenara para ob te
ner dinero de las arcas rea
les, sin ningún control de
•as existencias.
Nécker pronuncia un discurso ante los Estados Generales, el día 5 de m ayo de 1789, fecha
de la inauguración de las sesiones. (Cuadro d e A . Ciuder.)
Inmediatamente estalló un con LA ASAMBLEA CONSTITUYENTE
flicto sobre la manera de votar.
Los representantes del tercer esta
do reclamaban debates en una sala Los actos del 17 y 20 de junio
implicaban un alzamiento contra
única, y la aprobación de los pro
la autoridad monárquica; compren
yectos por mayoría de sufragios
diéndolo así, Luis X V I fue el 23 a
individuales; de esa manera tenían la sesión de los tres estados reu
asegurado el predominio, porque, nidos, para desaprobar en absoluto
además de ser seiscientos, conta la creación de la Asamblea Nacio
ban con la adhesión de muchos nal y reiterar la decisión de formar
sacerdotes y algunos nobles. El tres cámaras. Al terminar su dis
rey, por el contrario, ordenó la reu curso, declaró levantada la sesión;
nión de los estados en salas sepa los diputados de la nobleza y parte
radas, con lo que anulaba la supe del cle ro abandonaron la sala,
rioridad numérica de los diputados m ientras los demás, en cambio,
populares, reducidos al voto de su permanecieron en sus asientos.
cámara, frente a los dos votos de
la nobleza y el clero. Un funcionario de la corte se dirigió
Después de cinco semanas de entonces a Bailly -presidente de la reu
nión— y le dijo: “ ¿Habéis oído la orden
infructuosas gestiones, los delega del rey?” . “ M e parece —replicó Bailly—
dos del estado llano, “considerando que la nación congregada en asamblea no
que representaban el noventa y puede recibir órdenes” . Un noble pasa
seis por ciento de la nación”, se do al pueblo, Gabriel Honorato Riquetti,
conde de Mirabeau, orador de extraor
erigieron, el 17 de junio, en Asam- dinaria elocuencia, puesto de pie y enca
blea N acion al, d ecla ran d o que rándose con el funcionario, exclamó: “ Id
resolverían todos los asuntos in a decir a vuestro amo que estamos aquí
cluidos en los cuadernos y no sola por la voluntad del pueblo, y que solo se
nos arrancará por la fuerza de las bayo
mente los financieros, con la pre netas” , palabras acogidas con grandes
sencia de los otros estados o sin ella. aplausos por los asistentes y, al conocer
Luis X V I hizo cerrar la sala de las, por la muchedumbre aglomerada en
sesiones, pero los congresales, reu el exterior.
Luis X V I no se atrevió a emplear la
nidos el día 20 en una cancha de violencia, limitándose a manifestar, cuan
pelota, bajo la presidencia de Juan do le informaron de lo sucedido: “Y
Bailly, juraron “no separarse mien bien; si no quieren irse, que se queden” .
tras no quedase esta b lecid a la
Constitución del Reino”, episodio La energía del tercer estado con
conocido con el nombre de Jura cluyó por imponerse. El día 9 de
mento de la cancha de pelota. julio, la mayoría de los diputados
187
M irabeau in crep ^ a un funcionario de la
corte. (D ib u jo de C. Laplante.)
LA AGITACIÓN
REVOLUCIONARIA
Ilustración de autor anónim o: muestra la entrada de la familia real a París, después de su intento
de fuga. Gran cantidad de público se agolpa en torno a la carroza, dificultando su avance.
(B ibliot. Nac. de Estampas, París.)
ñado por el rey, con derecho a vetar.las El papa condenó la medida y
leyes aprobadas por la asamblea; el legis
excomulgó a los autores; el clero
lativo, formado por una cámara de dipu
tados, elegidos, sin distinción de clase, no quiso aceptarla; la Asamblea
por los contribuyentes directos, que se exigió entonces un juramento de
renovaba cada dos años totalm en te, y obediencia: ciento treinta obispos
el judicial, compuesto por magistrados
electivos.
y cuarenta mil sacerdotes se nega
ron a prestarlo. La iglesia francesa
quedó dividida en dos fracciones:
R e f o r m a s f i n a n c i e r a s . La ga la de los refractarios, enemigos de
bela, las ayudas y las aduanas inte la constitución civil, y la de los
riores fueron suprimidas, creándose juramentados, una ínfima minoría
en su reemplazo nuevas contribu que la aceptaba.
ciones, que debían ser abonadas en
proporción a las rentas personales.
Para saldar la enorme deuda
pública, la Asamblea decidió na LA ASAMBLEA LEGISLATIVA
cionalizar los bienes del clero y
emitir un papel moneda de circu La nueva Asamblea, creada por
lación obligatoria , los asignados, la constitución, inauguró sus sesio
hasta una cantidad igual al mon nes el l 9 de octubre. El elemento
to calculado de esos bienes. monárquico, que era mayoría, cho
có desde el primer momento con
R e f o r m a s e c l e s i á s t i c a s . La el pueblo de París, decidido a lle
Constituyente suprim ió los con var adelante la revolu ción , por
ventos y las comunidades religio cuya causa la cámara no alcanzó
sas, y votó la Constitución civil del a durar un año de los dos que le
clero, que redujo el número de correspondían ( l 9 de octubre de
obispos, los cuales debían ser ele 1791 a 20 de septiembre de 1792).
gidos por el mismo sistema em Los principales acontecimientos de
pleado para los diputados y sin in este período fueron los siguientes.
tervención del papa; además, como
la nacionalización de sus bienes L a s in t r ig a s d e l o s e m ig r a d o s
dejaba a los eclesiásticos sin recur Y LA GUERRA CON AUSTRIA. M u -
sos, les fijó un sueldo. Con ello la chos nobles abandonaron el reino,
iglesia perdía su libertad, convir incluso los hermanos del monarca,
tiéndose en una dependencia del y congregados en diversos puntos
estado. fronterizos, especialmente en Co-
191
blenza, conspiraron en secreta inte de la nación” , y escuchó impasible los
ligencia con Luis X V I. improperios que le dirigieron; no obstan
te, mantuvo los vetos cuya revocación le
En agosto de 1791, el rey de exigían.
Prusia y el emperador de Austria,
reunidos en Pillnitz (Sajonia), pu L A JORNADA DEL 10 DE AGOSTO.
blicaron un manifiesto condenan En el mes de julio, Prusia se alió
do la Revolución, aunque sin com con Austria y envió un ejército con
prometerse a atacarla. la intención de tomar París.
La Asamblea, en respuesta, pi
La noticia exaltó a los revolu
dió la internación de los emigrados
cionarios, que declararon la Patria
franceses residentes en las proxi
en peligro; los clubes sesionaron en
midades de la frontera. El sobe
forma permanente, y de las pro
rano austríaco rechazó con altane
vincias llegaron refuerzos. Los vo
ría la reclamación. El 20 de abril
luntarios de Marsella entraron en
de 1792, la legislatura le declaró
la capital cantando un himno, rá
la guerra.
pidamente divulgado con el nom
bre de La Marsellesa, compuesto
L a JORNADA DEL 20 DE JUNIO.
por un militar, poeta y músico,
Las tropas francesas invadieron los llamado Rouget de Lisie, mientras
Países Bajos austríacos, pero fue estaba de guarnición en Estrasbur
ron rechazadas. El contraste irritó go. Las secciones presentaron un
a los jacobinos, que lo atribuyeron ultimátum a la Asamblea exigiendo
a manejos del rey, y como éste la destitución del monarca; ante su
vetara algunas leyes destinadas a negativa, el 10 de agosto, tras un
aumentar la defensa, el 20 de junio sangriento combate con la guardia
exteriorizaron su descontento con suiza, encargada de su defensa, to
un gran desfile, so pretexto de ce maron por asalto las Tullerías. El
lebrar el aniversario del juramento rey y su familia buscaron amparo
de la Cancha de Pelota. en el recinto de la Asamblea, si
tuado en los fondos de los jardines
Los manifestantes forzaron la entrada del palacio; los diputados se lo
del palacio real de las Tullerías, llegando
hasta un salón donde estaba Luis X V I;
prometieron, pero bajo la presión
este consintió en ponerse un gorro frigio de los acontecim ientos, votaron
y en beber un vaso de vino “ a la salud horas más tarde la suspensión del
soberano y la convocatoria de una
convención especial, para juzgarlo
y modificar la constitución.
Acto continuo, la Asamblea de
signó un poder ejecutivo provisio
nal, en reem plazo del rey. Su
miembro más destacado era el abo
gado Santiago Dantón, presidente
de los cordeleros, y uno de los más
activos dirigentes de la jornada.
193
Durante la época revolucionaria los cafés fueron importantes centros de reunión, donde se discu
tía ardientemente los aciertos o errores de la gestión gubernamental, y se obtenía inform ación
acerca de la suerte de los ejércitos que com batían contra los enemigos extranjeros. (M u seo Car
navalet / F oto Bulloz.)
El triunfo de la bur
guesía significó también
una g e n e r a liz a c ió n de
sus formas de vida a un
sector más amplio de la
s o c ie d a d . Este cuadro
de Com bette representa
a una familia burgue
sa de la época. (M u seo
de Tours.)
La sentencia se cumplió el 21 de ene El tribunal revolucionario, con
ro de 1793, en la plaza llamada de la
Revolución (hoy de la Concordia). El
jueces y jurados elegidos por la
desdichado monarca demostró en sus úl convención, que juzgaba, sin ape
timos instantes una serenidad y firmeza lación, a los acusados políticos.
de que había carecido anteriormente; in
tentó dirigir la palabra a la muchedum
Los rep resen ta n tes en misión,
bre, pero su voz fue ahogada por el delegaciones de dos diputados, en
redoble de los tambores de la guardia viadas con plenos poderes, que ins
nacional; in stan tes después su cabeza peccionaban los ejércitos o los
caía bajo la guillotina, aparato adoptado
departamentos.
oficialmente para las ejecuciones, que
pronto adquiriría triste celebridad. Los comités de vigilancia, las
sociedades populares y los agentes
El conflicto entre los montañe nacionales: los dos primeros, inte
ses y los girondinos no tardó en grados por ciudadanos pertenecien
hacer crisis; los primeros, apoya tes a los clubes jacobinos; los últi
dos por la Comuna y las secciones mos, nombrados por la convención,
armadas, arrancaron de la intimi y todos, dedicados al espionaje, a
dada C on v en ción el arresto de las detenciones y a la aplicación
V ergn iau d y veintiocho colegas de medidas de fuerza.
(jornada del 2 de junio). Una ley llamada de sospechosos
autorizó el arresto de las personas
E l T e r r o r . Estalló entonces denunciadas como enemigos de la
una insurrección girondina cuyos república, aunque no hubieran ac
centros principales fueron Burdeos tuado abiertamente contra ella.
y Lión. Una joven de esta tenden El comité revolucionario conde
cia, Carlota Corday, asesinó a Ma- naba a muerte diariamente a gran
rat. Al movimiento vino a sumarse número de personas: solamente en
otro de carácter realista y católico, París, perecieron dos mil seiscien
surgido en la Vendée (región del tos veintisiete.
Loira inferior), y en Bretaña; tres
cuartas partes de Francia estaban Vergniaud y los girondinos subieron
en armas contra París, en tanto al patíbulo cantando La Marsellesa. Bai-
lly, el antiguo presidente de la Asamblea
que el territorio era invadido por Nacional, fue ejecutado en una rigurosa
varios ejércitos extranjeros.
Para poder afrontar tan graves
peligros, la Convención constituyó
el gobierno revolucionario, que es
taba integrado por los siguientes
organismos:
El comité de salvación pública,
encargado de los asuntos interio
res y exteriores. Lo componían 12
diputados, que duraban un mes en
sus cargos, pudiendo ser reelectos.
R ob esp ierre estuvo a su frente
de septiembre de 1793 a julio de
1794.
El comité de seguridad general,
compuesto también por diputados,
que vigilaba la conducta política
de los habitantes.
Los girondinos son conducidos a la guillotina. (Cuadro del pintor alemán Carlos Von P ito ty .)
C a í d a d e R o b e s p i e r r e . Los
montañeses no tardaron en formar
tres núcleos: el avanzado o rabio En materia religiosa combatió el
so, cuyo jefe era Jacobo Hébert, ateísmo, divulgado por los rabiosos,
preten día extrem ar aún más el e intentó fundar, siguiendo las
terrorismo; el moderado o indul ideas de Rousseau, el culto del Ser
gente, encabezado por Dantón y Supremo. El acto inaugural de la
Desmoulins, reclamaba en cambio nueva secta se celebró solemne
la cesación de las ejecuciones; el mente el 8 de junio. El calendario,
tercero respondía a Robespierre, y modificado el año anterior, había
contaba con el núcleo principal del substituido los nombres de los me
partido. Este último eliminó a sus ses por otros tornados de las prin
rivales en dos sem anas (24 de cipales manifestaciones del clima
marzo - 5 de abril); primero ca y la vegetación.
yeron los rabiosos y después los En materia política intensificó
indulgentes. las persecuciones contra los corrup
tores de las costumbres, cualquiera
Dantón, avisado del peligro que co
rría, no quiso huir, respondiendo a quie
que fuese su partido, a quienes el
nes se lo aconsejaban: “ ¿Por ventura se tribunal revolucionario podía con
puede llevar el suelo de la patria bajo denar a muerte, sin necesidad de
la suela de los zapatos?” . Su brillante pruebas. Comenzó entonces la era
defensa ante el tribunal revolucionario
del gran terror.
pareció inclinar los ánimos en favor su
yo; Robespierre, miembro todopoderoso La nueva orientación de Robes
del comité de salvación pública, preci pierre alarmó a muchos jacobinos,
pitó su ejecución.
culpables de irregularidades finan
Ya en el cadalso abrazó a Desmou
lins, sacrificado junto con él; el verdugo cieras y de llevar una vida de or
q u iso im p ed irlo. Miserable -exclamó gías y de vicios; por otra parte, el
Dantón-, ¿acaso impedirás que nuestras pueblo estaba ya cansado de tan
cabezas se besen en el canasto? Las ca
tas ejecuciones, que la pacificación
bezas de los guillotinados caían, en efec
to, dentro de un cesto común. interior y los triunfos exteriores no
justificaban.
Desde ese momento Robespierre Todos los que se sintieron ame
ejerció de hecho la dictadura; fa nazados por el misticismo sangui
nático e intransigente, procuró no nario del dictador se unieron para
ya la consolidación de la república, derribarlo. El 9 de termidor (mes
sino el triunfo de la virtud, apli del c a lo r -27 de julio de 1794) la
cando medidas politicorreligiosas, Convención, tras tempestuosos de
en colaboración con sus adeptos bates, ordenó el arresto de Robes
Saint-Just y Couthón. pierre. Libertado por la Comuna,
197
no supo organizar su defensa, y muerte; los sospechosos recupera
fue de nuevo detenido en la ma ron la libertad; el club de los ja
drugada del día 10, puesto fuera cobinos fue clausurado y los prin
de la ley y guillotinado esa misma cipales terroristas murieron a su
tarde con sus prin cip ales parti turno en el cadalso, entre ellos el
darios. cruel Fouquier-Tinville, acusador
A ello siguió la reacción termi del tribunal revolu cion ario. Dos
doriana; cesaron las sentencias de motines provocados por los monta
ñeses, con objeto de recuperar el
poder, fueron severamente repri
midos. La reacción despertó las
actividades de los realistas, encar
nadas en los petim etres ( petits
maîtres, señoritos), jóvenes perte
necientes a familias enriquecidas
durante la revolución, que ansia
ban ocultar su origen exagerando
la demostración de lealtad al an
tiguo régimen.
A pesar de todo, la Convención
se mantenía fiel a la república, y
para impedir la caída de ésta, de
cretó que en la nueva cámara a
elegirse, debían figurar dos terce
ras partes de los diputados que
cesaban.
Esto originó la jomada del 13 de
vendimiario (mes de la vendimia,
5 de octubre de 1795), organizada
por los realistas, movimiento rá
pida y enérgicam ente sofocado
por el jov en general Napoleón
Bonaparte. El 26 de ese mes, la Dispuso la fundación de Escue
Convención dio por terminada su las Centrales, destinadas a la se
tarea. gunda enseñanza, con el régimen
del internado, uno para cada de
LA OBRA DE LA CONVENCIÓN partamento.
En la cultura superior creó la
Escuela Normal, para preparar el
A pesar de una vida tan agitada,
profesorado de los futuros maes
la Convención llevó a cabo funda
tros, la Politécnica (facultad de
mentales reformas políticas, finan
ingeniería) y la de Salud (facultad
cieras y culturales.
de medicina); reorganizó fa Aca
demia Francesa y le agregó otras
O b r a p o l í t i c a . Promulgó dos
academias, cuyo conjunto formó el
constituciones republicanas: la del
Instituto de Francia.
año I (1 7 9 3 ), que no se aplicó, y
Adoptó el sistema métrico de
la del año III (1 7 9 5 ), que estable cimal.
ció el Directorio.
Creó el Conservatorio de Músi
Reorganizó el ejército, instituyó
ca y Declamación, la Escuela de
el servicio militar obligatorio, la
Artes y Oficios, los Archivos Na
unificación de las tropas y el as
cionales, el Museo del Louvre y la
censo por méritos.
Biblioteca Nacional.
Restableció el orden interior y
venció a las potencias extranjeras.
El Directorio
Procedió a la depuración de los
empleados administrativos, distri La nueva Constitución otorgaba
buyendo los puestos de los cesan el poder legislativo a dos cámaras:
tes entre los jacobinos. el Consejo de los Quinientos, que
discutía las leyes, y el Consejo de
O b r a f i n a n c i e r a . Aprobó el los Ancianos, que las aprobaba o
Gran libro de la deuda pública, rechazaba. El poder ejecutivo era
debido a Pablo Cambórt; era una desempeñado por un Directorio de
anotación ordenada de todas las cinco miembros, elegidos por el
deudas fiscales, redu cidas a un Consejo de Ancianos, de una lista
solo tipo, con interés uniforme. que le presentaba el de los Qui
Reguló el precio de los artículos nientos. El poder judicial conservó
de primera necesidad mediante la su organización anterior.
llamada ley del máximo, y fijó el Sólo tuvieron derecho a votar
m onto de los salarios obreros los ciudadanos m ayores de 21
por otra ley denominada del mí años, que supieran leer y escribir
nimo, medidas que fracasaron en la y pagaran impuestos directos con
práctica. lo que se restringía grandemente
Confiscó los bienes de los nobles el sufragio.
emigrados, y levantó empréstitos El nuevo gobierno lucho contra
forzosos entre los ricos. los realistas, deseosos de restable
Emitió cantidades enormes de cer la monarquía, y contra los ex
asignados, lo que redujo su valor tremistas, partidarios de un régi
adquisitivo a cifras irrisorias. men político más avanzado. Cada
vez que el Directorio reprimía una
O b r a c u l t u r a l . Estableció la de estas tendencias, la otra reco
enseñanza primaria, laica, gratuita braba su fuerza, y así, sólo pudo
y obligatoria. mantenerse con golpes de Estado
199
Barras, uno de los cinco m iembros del Directorio,
vistiendo el traje de ceremonias. (B ibliot. Nac. de
Estampas, Paría.)
L a g u e r r a c o n t r a E u r o p a . La
invasión prusiana de 1792 fue de
tenida, según dijimos, en la batalla
de Valmy. El general Dumouriez,
jefe del ejército francés, tomó la
ofensiva y ocupó los Países Bajos
austríacos, como consecuencia de
apoyados por el ejército, consisten la victoria de Jemmapes.
tes en la expulsión de diputados En 1793, Inglaterra, Holanda,
adversos, arrestos y destierros. España, Portugal, los reinos italia
Esta política, la angustiosa si nos de Cerdeña y Nápoles, y los
tuación financiera, las derrotas Estados alemanes, se unieron a
sufridas en una nueva guerra ex Austria y Prusia, formando la pri
terior, iniciada en 1799, la relaja mera coalición contra Francia. A
ción de la conducta y la desorga- los dos años, Prusia, España y Ho-
landa se retiraron. El resto de la chazados y obligados a reembar
coalición subsistió dos años más. carse; los austríacos, derrotados
Los aliados querían limitar la por el general Jourdán, en Wattig-
propaganda revolucionaria, que co
menzaba a difundirse en sus esta
dos, y por parte de algunos de
ellos, también desmembrar a Fran
cia en su provecho.
Pareció al principio que nada
podría con ten erlos. Dumouriez,
derrotado por los austríacos en la
batalla de Néerwinden, perdió los
territorios conquistados meses an
tes, y se pasó al enemigo.
Los prusianos recuperaron las
ciudades de la región del Rin; los
ingleses asediaron a Dunkerque;
los españoles cruzaron los Pirineos
y los austrosardos los Alpes; Tolón
fue tomada por una fuerza anglo-
española.
Pronto la situación cambió por
completo. Los ingleses fueron re-
202
CAPITULO IX
EL PERÍODO
DE N A PO LEÓ N
203
Napoleón era de mediana estatura, de nentes de la primera coalición a
mirada fulgurante, difícil de sostener; Inglaterra, Austria, C erdeña y
brusco en sus ademanes y siempre move otros estados italianos. A fin de
dizo e inquieto. D e una laboriosidad
incomparable, trabajaba hasta dieciocho dominar a los austríacos, Camot
horas diarias sin experimentar cansan planeó una marcha convergente de
cio. “He conocido el límite de mis bra tres ejércitos sobre Viena. Dos de
zos y de mis piernas —solía decir—, pero
ellos debieron replegarse; sólo que
nunca el de mi trabajo.” Su atención,
concentrada e intensa, le permitía aislar dó el del sur, situado en la frontera
cada asunto de los otros; comparaba su italiana, que acababa de confiarse
mente a un mueble con muchos compar a Bonaparte.
timientos, de los que sólo estaba abierto
Lo com p on ían cuarenta mil
uno por vez. Tenía una memoria asom
brosa y una imaginación potente, aso hombres, mal armados, desprovis
ciada, por raro contraste, a un espíritu tos de todo recurso, pero Napoleón
eminentemente práctico. Poseía una am logró infundirles ánimo y realizó
plia cultura general, pero fue notable,
sobre todo, por el genio militar. La am
con ellos una campaña que, al decir
bición lo absorbía por entero, y cuando de uno de sus generales, “le abrió
alcanzó el poder, no toleró ninguna in las puertas de la inmortalidad”.
gerencia ni consejo. Afable al principio, Deslizándose a lo largo del lito
tornóse seco y brutal; no reía nunca, y
en sus momentos de cólera empleaba
ral, cruzó los Apeninos e introdujo
términos groseros, en francés o italiano. una cuña entre los ejércitos aus
Los hombres, con raras excepciones, no tríaco y sardo, a los que derrotó
le merecían gran estimación. En la vida separadamente. El rey de Cerdeña
privada fue bondadoso y noble; afectuo
so y solícito con su familia, y generoso
pidió entonces la paz.
y agradecido con sus amigos. El triunfo de Lodi, obtenido en
mayo de 1796, le entregó la ciudad
de Milán y la Lombardía. En se
LA CAMPAÑA DE ITALIA guida sitió la fortaleza de Mantua,
llave estratégica de la llanura ve
Los tratados de paz de Basilea neciana; cuatro ejércitos, enviados
y La Haya redujeron los com po en socorro de la plaza, fueron suce
sivamente rechazados; el último, EXPEDICIÓN A EGIPTO
en Rívoli, en enero de 1797. Al
mes siguiente, la guarnición ca D e los antiguos enemigos, resta
pituló. ba solam ente Inglaterra. Bona
Después de conceder la paz al parte resolvió apoderarse de Egip
papa y a los pequeños estados del to, para con v ertirlo en base de
centro de Italia, a trueque de enor operaciones contra las posesiones
mes con trib u cion es, B onaparte británicas de la India.
marchó sobre Viena, arrollando En mayo de 1798 salió de T o
cuanto se oponía a su paso. Estaba lón, con una escuadra de cerca de
a menos de cien kilómetros de ella trescientas naves y treinta y cinco
cuando el emperador solicitó un mil hombres de desembarco. Lle
armisticio, ce le b ra d o en Leoben. vaba consigo una numerosa comi
La campaña de Italia duró un sión de sabios para estudiar el
año (abril de 1796-1797). En su
transcurso se libraron d ie cio ch o
batallas y sesenta y cinco comba
tes, en los que los franceses toma
ron cien mil prisioneros y seiscien
tos cañones.
En octubre, Austria firmó la paz
de Campo Formio, por la cual re
nunciaba a los Países Bajos y al
Milanesado. La república de Ve-
necia, que perdió su independen
cia, fue repartida entre los dos pac
tantes. Con el norte de Italia, el
Directorio organizó la República
Cisalpina.
país. Mediante una hábil manio austrorrusos mandados por el ge
bra burló la vigilancia de la flota neral Alejandro Sttvaiofí, recon
inglesa, conquistó la isla de Malta quistaron el valle del Po, mediante
y desembarcó en Alejandría, el 30 repetidas victorias, a la vez que los
de junio. austríacos se adueñaban del resto
Egipto, sometido nominalmente de la península; Holanda, conver
a Turquía, se hallaba en realidad tida por el Directorio en república
bajo el poder de los mamelucos, aliada, fue invadida por un ejército
jinetes guerreros, que form aban anglorruso; otro, compuesto por
una especie de institución feudal; austríacos y rusos, avanzó a tra
los franceses los deshicieron en la vés de Suiza.
batalla de Las Pirámides, cerca de A causa de las disensiones pro
El Cairo, pero su escuadra fue ani ducidas entre Suvaroff y los gene
quilada diez días más tarde por la rales austríacos, el comando aliado
del almirante Nelson, en la rada resolvió pasar a Alemania las tro
de Abukir. pas de estos últimos, situadas en
En 1799, Napoleón, aislado de Suiza, sustituyéndolas con las fuer
Francia, em pren d ió una expedi zas rusas de Italia. Pero los movi
ción a Siria, donde arrolló a los mientos no se combinaron debida
turcos, que habían entrado en la mente, y los austríacos dejaron
guerra como consecuencia de la in Suiza antes de la llegada de sus
vasión de Egipto. Un nuevo ejérci reemplazantes; el general Andrés
to otomano, conducido por barcos Massena, encargado de las opera
británicos, desembarcó en la proxi ciones en ese frente, aprovechó la
midad de Alejandría, con el propó circunstancia para derrotar, en Zu-
sito de aislarlo; enterado a tiempo, rich, a los rusos que quedaban
Napoleón fue a su encuentro y lo (septiembre de 1799), y luego a
venció en la misma playa. Suvaroff, que venía a reunírseles.
En agosto dejó el mando al ge
neral Kléber y volvió a Francia
burlando el bloqueo inglés.
Después de diversas peripecias,
Egipto fue evacuado por los fran
ceses en 1801. La expedición de
Bonaparte despertó al país de su
letargo secular. Provocó el estudio
de su lejana historia y lo encaminó
hacia el progreso.
La s e g u n d a c o a l i c i ó n . Mien
tras ocurrían estos sucesos, Ingla
terra organizó una segunda coali
ción, con Austria, Rusia, Turquía
y Nápoles.
La guerra comenzó desfavora
blemente para los franceses. En
Alemania, el archiduque Carlos,
hermano del emperador Francis
co II, d errotó a Jourdan en la
batalla de Stockach; en Italia, los
206
E l general Andrés Massena: decía que “ el
ruido del cañón le aclaraba las ideas” . (Cua
dro de A ntonio Groa / M u seo de Versalles.)
207
por el primer cónsul, preparaba exclusi rían en funciones hasta recibir la
vamente los proyectos de ley; el Tribu con firm a ción de dicho nombra
nado los discutía sin votar; el Cuerpo
Legislativo los votaba sin discusión, ate miento por el papa.
niéndose al informe presentado por una
comisión de tribunos; el Senado vigilaba Con su política religiosa, Bonaparte
el cumplimiento de la Constitución y se atrajo a la iglesia, poderoso sostén de
elegía a los cónsules, a sus propios inte la causa monárquica: “ los campesinos
grantes y a los del Tribunado y Cuerpo son más católicos que realistas —mani
Legislativo, tomándolos de una “ lista de festaba—, y a no mediar la Constitución
notabilidades” v otad a in d irecta m en te
civil del clero, habrían aceptado la revo
por el pueblo mediante un complicado lución” . En un plano más general, opi
sistema electoral. naba que “ una nación sin religión es
comparable a un barco sin brújula” .
Por otra parte, obteniendo del pontí
Napoleón reorganizó el país en
fice la renuncia de toda reclamación res
breve plazo con su acostumbrada pecto a las cuantiosas propiedades con
actividad. fiscadas al clero, Bonaparte prestaba un
servicio inmenso a sus dueños presentes,
E l C o n c o r d a t o . El Estado inquietos por la amenaza de posibles
re iv in d ica cio n e s , y se aseguraba su
francés se reconcilió con la iglesia adhesión.
católica por medio del Concordato
de 1801. De acuerdo con sus cláu
sulas, el papa Pío VII, ascendido E l C ó d ig o d e N a p o l e ó n . La
al solio pontificio en 1800, acep Convención y el Directorio habían
taba la nacionalización de los bie p ro y e cta d o un código, pero los
nes del clero, la asignación de un acontecimientos no les permitieron
sueldo a los sacerdotes, el jura dar térm ino a la em presa. En
mento de fid e lid a d al gobierno, 1800, Napoleón recogió la idea y
que éstos debían prestar al asumir nombró una comisión de seis emi
el cargo, y la facultad del primer nentes ju riscon su ltos; él mismo
cónsul para reglam entar ciertos presidió muchas reuniones e inter
actos externos del culto. En cam vino activamente en los debates.
bio, Napoleón declaraba que la re Finalmente, fue san cion ado en
ligión católica era la de la mayo 1804 con el título de Código Civil,
ría de los franceses, y disponía monumento jurídico que encierra
que los obispos, una vez designados en forma metódica y articulada los
por el poder ejecutivo, no entra principios del derecho privado, to-
Nauoleón, sentado,
y el representante
del papa P ío V II,
d e p ie, fir m a n el
Concordato, después
de largas y difíci
les n e g o c ia c io n e s .
(D ib u jo de W icar f
M u seo d e V ersa-
11—.)
La m ente organizadora de N apoleón trascendió a
todos los órdenes; durante el Consulado, en 1800,
se im plantó el uso del sistema m étrico decim al en
toda Francia. Su em pleo efectivo tardó en im po
nerse. (Cuadro de Labrouse.)
209
La batalla de Kohenlinden (diciem bre de 1 8 0 0 ). E l general M oreau, al frente de
las tropas francesas, triunfó sobre el ejército austríaco. (Grabado de Duplessis-
B erteauxJ
La coronación de Na
p oleón : con sus propias
manos se co lo có la dia
dem a im p e r ia l, y el
cuadro lo representa en
el m om ento en que co
rona a su esposa, Jose
fina. Detrás de él, sen
tado ante el altar, el
papa P ío V II. (Frag
m ento d é l c u a d r o de
Luis D avid.)
La revolución se hace cada vez más extremista (m o
vimiento hacia la izquierda hasta 1 7 9 4 ). Luego se
inicia la reacción (m ovim iento hacia la derecha) : co*
mienza b ajo Luis X V I ( 1 7 8 9 ) , culmina con Robes*
pierre (1 7 9 4 ) y termina con el em perador N apoleón 1
(1 8 0 4 ).
211
El almirante H oracio Nelson (1 7 5 8 -1 8 0 5 ), comandan
te de la armada inglesa que derrotó a N apoleón en
Trafalgar.
214
L>a entrevista de Tilsit.
N a p o l e ó n recibe a los
reyes de Prusia, Luisa
y F e d e r i c o Guillermo
III, y al zar A lejandro
de Rusia. En el rostro
de la reina se refleja
el pesar que le causa
la d e s v e n t a jo s a situa
ción en que ha queda
do P r u s ia d e s p u é s de
las d e r r o t a s s u frid a s .
(Cuadro de N . G osse.)
217
deras dificultades con que tropezaba el la del consejo de regencia. Al prin- í
emperador. Alejandro I, que prestó gran cipio existió el deseo de mantener ■
atención a estas noticias, decidió en con
secuencia mantenerse a la expectativa. la división de los tres órdenes: ;
clero, nobleza y estado llano, pero I
Napoleón cruzó los Pirineos con tras mucha deliberación, el consejo I
de regencia convocó una cámara I
180 000 hombres a fines de 1808;
venció a las tropas que le salieron única, formada por diputados titu
lares, elegidos por las partes libres i
al encuentro y ocupó Madrid. Una
del territorio, y otros, suplentes, en
parte de su ejército sitió a Zara
representación de las partes ocupa
goza, tomándola al cabo de cuatro
das por los franceses, y de América.
meses de heroica defensa, en la que
La asamblea se reunió a fines
pereció la mitad de la población.
de septiembre de 1810, cerca de
En enero de 1809, los austríacos,
Cádiz, adonde pasó el año siguien
com o lo había sospechado Napo
león, penetraron en el territorio de te, y adoptó el título de Cortea
Generales y Extraordinarias, decla
la Confederación del Rin, sin que
Alejandro tratara de detenerlos. rando que en ella residía la sobe
ranía nacional y que reconocía a
El emperador partió en seguida a
combatirlos. Fernando V II como único y legí
A principios de 1810, las fuerzas timo rey. Luego tomó juramento
francesas entraron en Sevilla. La al consejo de regencia, que siguió
junta residente en esa ciudad se actuando como poder ejecutivo.
trasladó a Cádiz, donde fue reem El 19 de marzo de 1812 las
plazada poco después por un con Cortes aprobaron una Constitución,
sejo de regencia. Es éste el mo considerada durante varias déca
mento de la sublevación de los das como modelo por los liberales
países hispanoamericanos, que con europeos. Comenzaba con la decla
sideraron perdida a España. ración de que: “La Nación españo
la es la reunión de todos los es
pañoles de ambos hem isferios”.
Confiaba el poder ejecutivo al rey,
EL MOVIMIENTO hereditario y sin responsabilidad,
CONSTITUCIONAL EN ESPAÑA y a un ministerio responsable ante
la cámara; el poder legislativo era
La difícil situación política crea desempeñado por un Consejo de
da por el conflicto entre Fernando Estado y una Cámara de Dipu
VII y su padre, hizo nacer, ya antes tados; el judicial gozaría de plena
de la entrevista de Bayona, la idea independencia. Aseguraba los de
de convocar las antiguas cortes. rechos individuales y la libertad
Consumado el atropello napoleó de imprenta. Otras leyes supri
nico, aquel propósito maduró en la mieron el Consejo de Indias y la
mente de las juntas y luego en Inquisición.
218
CAPITULO X
LOS ALBORES
R E V O LU C IO N A R IO S
219
Las fábricas i n g le
sas c o m e n z a r o n a
p r o d u c ir en abun
d a n c ia mercaderías
de d is t in t o s tipos
que n e c e s it a b a n
mercados que las ab
sorbieran.
E l patriota venezolano Francisco de Miranda, prisionero en La Carraca. Arrestado por los españoles
después de un frustrado intento de em ancipación, m urió en esa prisión de la ciudad de Cádiz en 1816.
( Cuadro de Antonio M ichelena.)
vasto proyecto de invasión a va 69) La expedición inglesa a Co
rios puntos de la América espa lonia del Cabo, a las órdenes del
ñola. Uno de ellos era Buenos Ai general David Baird, ocupó este
res. Por el momento quedó a la punto, lugar estratég ico porque
expectativa. dom inaba el paso del Atlántico
al océano In d ico. El alm irante
49) La guerra an glo-españ ola Popham, que comandaba la escua
(1796-1802). Sus principales epi dra, tuvo allí oportunidad de reco
sodios fueron la derrota de la es ger información de marinos y co
cuadra española en el cabo San merciantes que habían estado en
Vicente (1 7 9 7 ) y la ocupación de Buenos Aires; esto le sugirió la
la isla de Menorca en España, y idea de llevar a la práctica el an
T rin id ad, en las bocas del Ori tiguo proyecto de Miranda, apro
noco, en Venezuela. bado por Pitt. Convenció a Baird,
quien le cedió parte de las tropas
5 °) La agresión contra cuatro al mando del general Guillermo
fragatas españolas. El 5 de oc Carr Béresford, reforzadas con un
tubre de 1804, a la altura del ca destacamento de artillería de la
bo Santa María, cercano a Cádiz, guarnición de la isla de Santa Ele
un número igual de fragatas ingle na; en total unos 1 600 hombres.
sas de mayor poder las atacó, rin
diendo tres de ellas y volando la P r i m e r a i n v a s i ó n . El 8 de ju
Mercedes, a cuyo bordo perecieron nio entró en el Río de la Plata.
la esposa e hijos de Diego de Al- Después de vacilar entre dirigirse
vear, quien se salvó por hallarse a Montevideo o a Buenos Aires,
en otra de las naves, en compañía Popham se decidió por esta últi
de su hijo Carlos, de gran actua ma, por ser la capital del virrei
ción después en la Argentina. nato. El 25 desem barcaron en
La célebre victoria de Traíalgar Quilmes; al día siguiente se en
sobre la escuadra franco-española vió contra ellos algunas milicias al
por parte de la inglesa del almi mando de don Pedro Arce, que
rante Nelson, muerto en la acción fueron fácilmente desbandadas, y
(21 de octubre de 1805), aseguró los invasores cruzaron el Riachue
definitivamente la supremacía de lo por el Puente de Gálvez. Esa
Gran Bretaña. tarde el virrey Sobremonte salió
*
rio porteño, sobre todo la gente ford una columna de 500 hombres
joven, reaccionó apasionadamente que los dispersó el 10 de agosto
y de inmediato se aprestó a recha en la chacra de Perdriel (cerca
zar al invasor. Se comenzó a cavar del actual Campo de M a y o). Du
una galería subterránea por debajo rante la lucha, Pueyrredón cayó
del Fuerte y luego hacerlo volar bajo su caballo, alcanzado por las
con una cantidad de barriles de balas; pero salió ileso, salvado por
pólvora. En la campaña el joven uno de sus hombres.
criollo Juan Martín de Pueyrredón
llegó a reunir 700 gauchos mal ar Santiago de Liniers, oficial de la
mados. Contra ellos envió Béres- marina de guerra, consiguió pasar
a Montevideo donde el gobernador
de la plaza, Pascual Ruiz Huido-
bro, le proporcionó 500 soldados.
A ellos se sumó el corsario francés
Mordeille con 73 marineros. Pa
saron a la Colonia y de allí a ori
llas del río Luján; en la marcha
fueron agregándose los gauchos
dispersos de Perdriel y un número
siempre creciente de voluntarios.
El día 10 ocuparon el Retiro y,
tras una reorganización de los con
tingentes, atacaron el 12 de agosto
a los británicos, concentrados en
223
la Plaza Mayor; desalojados de llegada de los caudales proceden
allí se en cerraron en el Fuerte, tes de aquí originó el envío de re
donde izaron bandera de parla fuerzos. El prim ero p ro ce d ió a
mento. tomar M a ld on a d o, puerto de la
Salió Béresford y se adelantó Banda Oriental; luego llegaron su
hacia Liniers ofreciéndole su es cesivamente los de Samuel Ach-
pada, que le fue devuelta en señal muty, Whitelocke (nombrado go
de aprecio. Como Liniers otorgara bernador y general en je f e ) y
una capitulación que permitía el finalmente Roberto Craufurd.
reembarco de los vencidos con des A mediados de 1807 sumaban
tino a España, el vecindario y el 12 000 hombres, 20 naves de gue
Cabildo protestaron, y la resolu rra y 90 transportes.
ción quedó sin efecto. Los jefes P o c o después de su llegada,
fueron enviados entonces a Luján Achmuty atacó M ontevideo y lo
y los 1200 soldados rendidos se tomó por asalto después de una
distribuyeron en distintos puntos reñida lucha. Sobremonte no ha
del interior del país; Béresford y bía atinado a hacer nada eficaz
Pack, su segundo, consiguieron fu para detenerlos; ante esta nueva
garse a Montevideo, en ese m o prueba de incapacidad, las princi
mento en poder de los ingleses; el pales autoridades de Buenos Aires,
p rim ero regresó a Inglaterra y el sa cerd ocio y los vecinos más
el segundo se acopló a la nueva ilustres, reunidos en el Cabildo
invasión. abierto, resolv ieron destituirlo.
Traído a esta ciudad se lo recluyó
C a b il d o a b ie r t o del 14 de en un convento hasta su envío a
agosto. A los cabildantes regula España.
res se sumaron 100 vecinos nota Ante la inminencia de un nuevo
bles. Un enorme gentío ocupaba ataque, Liniers procedió a organi
la plaza, siguiendo ansiosamente zar militarmente a todo hombre
las deliberaciones. Decidieron con de 16 a 50 años, form an d o con
fiar el mando militar a Liniers y
el político a la Audiencia.
Enterados de que Sobremonte
se acercaba con refuerzos reclu
tados en el interior, le enviaron a
tres comisionados a su encuentro
para pedirle que con firm a ra los
nombramientos hechos y no entra
ra en la ciudad. Tras algunas va
cilaciones, Sobremonte accedió, di
rigiéndose a la Banda Oriental.
Mitre considera este acto como
“una verdadera revolución y la pri
mera en que ensayó sus fuerzas el
pueblo de Buenos Aires”.
S e g u n d a i n v a s i ó n . El entusias
mo provocado en Londres por la
224
Estas banderas fueron capturadas a los regimientos ingleses durante las invasiones de 1806-1807. ( ó le o
d e Tom ás del Villar q ue se conserva en el M u seo H istórico de Luján.)
225
El 7 de julio capituló White-
locke sobre la base -de la evacua
ción de Montevideo y todo el Río
de la Plata en el término de 2 me
ses. La defensa costó 302 muertos
y 514 heridos y causó al enemigo
alrededor de 2 500 bajas.
CONSECUENCIA DE
LAS INVASIONES
2 °) D espertaron el antagonis
mo entre españoles y criollos; unos
y otros se atribuían el mayor mé
tras un vigoroso combate. El gru rito de la victoria.
po central soportó durante el tra
yecto el fuego desde azoteas y ven
tanas; tam bién se v o lc ó agua y 3 °) Dejaron a los criollos orga
aceite hirviendo sobre éste. Con nizados militarmente con cuerpos
en condiciones de emprender cam
todo, cu atro colum nas llegaron
pañas de gran magnitud.
hasta el Retiro; otra se rindió ante
la iglesia de La M erced y la sexta
a tres cuadras de la de San Miguel. 4 °) Contribuyeron a la forma
El ala sur descendió por la ac ción de ideales de libertad; se tuvo
tual calle Belgrano hasta Perú y la conciencia de formar un estado
dobló hacia la plaza, pero no pudo independiente capaz de sostener su
pasar de la actual calle Alsina; sus soberanía.
restos se refugiaron en la Casa
de la Virreina Vieja (Belgrano y 5 °) Activaron el m ovim ien to
Perú), rindiéndose poco después. comercial. Durante la ocupación
La parte externa de este grupo británica salieron grandes carga
entró en la iglesia de Santo D o mentos de frutos del país y entra
mingo; rodeada la manzana por ron muchas y variadas mercaderías
los defensores y bombardeada du inglesas, lo cual trajo una eleva
rante 2 horas, terminó también por ción del nivel de vida, a la que no
rendirse. se quiso renunciar.
226
SU EX P A N S IÓ N
227
Fernando V II, rey de Espafia.
229
El movimiento libertador El día 21, Castelli y Martín R o
dríguez visitaron nuevam ente el
Fuerte, y el primero manifestó que
El 13 de mayo de 1810, noticias en comisión del pueblo y del ejér
llegadas a Montevideo anunciaban cito le exigían “ la cesación del
la invasión napoleónica de Anda mando del v irrein a to” . Cisneros
lucía y la inminencia de la caída reaccionó iracundo, exclamando:
de Cádiz, último baluarte de la “ ¡Qué atrevimiento es éste!”, pero
resistencia española. el fiscal de la Audiencia, Caspe, lo
El 18, Cisneros lanzó una pro condujo a otra habitación y lo per
clama recomendando calma y ape suadió a renunciar. Así lo hizo.
lando a la fidelidad de los vecinos. El mismo 21 se reunió el Cabil
El 19, Belgrano y Saavedra pi do y acordó convocar, al día si
dieron al Cabildo regular la con guiente, un “congreso general” con
vocación de otro abierto, con la participación de “la parte más sa
prevención de que si no se hacía na e importante del pueblo”; a
“lo haría por sí solo el pueblo”. este efecto se hicieron y repartie
Igual gestión realizó Castelli ante ron. p recip itad a m en te las invita
el Síndico Procurador del Cabildo. ciones.
Enterado Cisneros, reunió el 20
en el Fuerte a los jefes militares
para preguntarles si podía contar EL CABILDO ABIERTO
con ellos. Saavedra respondió con
tibieza y el virrey los despidió en DEL 22 DE MAYO
silencio. Después de una larga de
liberación nocturna, los patriotas
decidieron proceder. A las nueve se instalaron en la
galería alta del Cabildo, 251 de los
400 invitados; el gran número de
EL VIREY DE BUEN05-AYRES &c&c. ausentes correspondió a españoles,
que se abstuvieron de hacer abier
A to* to el debate; el obispo Lué abogó
LIALES Y GBNBROSOS PUEBLOS en favor de la absoluta obediencia
dei Vireycaso de Buano-Ay ros.
a España. Le replicó Castelli, y
se sucedieron otros oradores; final
mente se votó sobre si el virrey
debía ser reemplazado y por quién.
De los presentes sólo votaron 224,
por haberse ausentado los demás
en el curso de los debates. Dado
lo avanzado de la tarde se resolvió
reunirse al día siguiente para efec
tuar el escrutinio. Con variantes
personales, 115 votaron por la de
posición de Cisneros. Así se pro
clamó, pero con dos agregad os:
1° que sería el Cabildo quien de
signara la Junta de Gobierno, y
231
E l C a b ild o y la plaza despu és llam ad a d e M a y o co n stitu y e ro n el m a rco d e lo s aco n te cim ie n to s de 1810.
( Ó l e o d e C . C a r n a c i n i , q u e e v o c a su a s p e c t o en e s a é p o c a . )
Los m iembros de la Primera Junta: 1, Cornelio
Saavedra; 2, M ariano M oreno; 3, Juan José Pa
so; 4, M anuel B elgrano; 5, Juan José Castelli;
6, Juan Larrea; 7, D om ingo M atheu; 8, Manuel
Alberti, y 9, M iguel de Azcuénaga.
236
Con esto quedaron definitivamente Cerca de allí chocó contra una
rotas las relaciones. La campaña columna realista, venciéndola am
uruguaya se sublevó entonces; los pliamente en Las Piedras (18 de
primeros en hacerlo se pronuncia m ayo); luego sitió a la ciudad.
ron en lo que se llamó el “grito Elío solicitó entonces ayuda a la
de Asencio” (nombre del lugar) corte portuguesa, que mandó 3 000
el 28 de febrero de 1811, difun hombres que penetraron en terri
diéndose rápidamente. D e Buenos torio oriental. Al mismo tiempo
Aires enviaron tropas a las órdenes una escuadra realista bombardeó
de Rondeau. Buenos Aires sin causar mayores
daños.
A r t i g a s . José Gervasio Artigas, Manuel de Sarratea, enviado a
nacido cerca de M o n te v id e o en R ío de Janeiro con el apoyo de
1764, ingresó en el cu erp o de Lord Strangford, influyente emba
Blandengues, especie de policía ru jador inglés, gestionó el retiro de
ral. Actuó con Liniers en la Re los invasores, y ante la demora en
conquista y fue promovido al ran ser atendido negoció un arreglo di
go de teniente coronel. Vuelto a recto con Elío, quien accedió a fir
su patria, R on d ea u le c o n fió el mar un armisticio el 20 de octubre.
mando de su vanguardia y en ma Los patriotas evacuarían la Banda
yo marchó con ella sobre la ca Oriental y el jefe español haría re
pital uruguaya. tirarse a los portugueses. Artigas
237
“ É xodo del pueblo oriental” . ( Óleo de M elchor M éndez M agariños.) B ajo la conducción de Artigas,
millares de hombres y mujeres emigraron a Entre R íos. ( Palacio Legislativo de M on tevid eo.)
238
Cornelio Saavedra. ( Óleo de B. Marcal / M useo
Histórico N acional.)
M a ria n o M o r e n o . ( Ó l e o d e P
239
M ariano M oreno muere a bordo de la goleta inglesa en viaje a Inglaterra en misión diplom ática. Lo
asisten su hermano Manuel y Tom ás Guido.
M del 5 y 6 de
o v im ie n t o E l T r i u n v i r a t o . El fracaso de
La tirantez entre saave-
a b r il . las expediciones libertadoras alar
dristas y morenistas hizo crisis el mó la opinión y decidió un cambio
5 y 6 de abril. Elementos de los de g o b ie r n o : el poder ejecutivo
suburbios, manejados por algunos quedaba c o n c e n t r a d o en tres
“alcaldes” de barrio, se juntaron miembros; los otros componentes
en la Plaza Mayor en la noche constituirían una “Junta conserva
del 5 y la madrugada del 6 y pre dora”, con los diputados de las pro
sentaron una nota; el C abildo, vincias y los de la capital.
cómplice, la elevó al Fuerte, obte Los tres miembros electos fue
niendo la separación de los más ron Feliciano Chiclana, Manuel de
notorios demócratas y su reempla Sarratea y Juan José Paso, con
zo por algunos de sus cabecillas. tres ministros adjuntos: Bernardi-
g an M a r t ín retom a a la patria. ( D ibujo de
F ortany.)
241
Este antiguo grabado muestra el cuartel de R etiro, en donde San M artín disciplinó al regimiento
de Granaderos a Caballo. La elevada m oral militar infundida por el procer sirvió de ejem plo
a los defensores de la libertad nacional.
243
sacato a sus órdenes y lo apercibió Belgrano llegase del norte y Tris
severamente; Belgrano aclaró su tán del sur.
conducta e informó de su inmedia El 20 de febrero de 1813 se li
to retiro, agregando que acaso vol bró la batalla de Salta, muy encar
vería a flamear el día de una gran nizada, que terminó con una com
victoria. Así sucedió efectivamen pleta victoria de Belgrano. Al día
te, izándola después de la batalla siguiente se rindió lo que quedaba
de Tucumán, a principios del año del ejército realista: 2 generales,
siguiente. 7 jefes, 117 oficiales y 2 636 sol
dados. Éstos fueron puestos en li
bertad bajo juramento de no vol
T u c u m á n y S a l t a . En agosto
ver a combatir, aunque muchos no
de 1812 penetró por el valle de
lo cumplieron. Belgrano fue pro
Humahuaca un poderoso ejército
movido a general, pero rehusó el
realista, al mando del general Pío
ascenso. Se resolvió obsequiarle
Tristán. El día 23, Belgrano aban
40 000 pesos, suma entonces muy
donó Jujuy seguido por la masa
importante, que él dedicó a fun
de la población, episodio conocido
dar 4 escuelas.
com o el “éxodo jujeño”.
El 3 de setiembre la retaguar
dia patriota y la vanguardia rea V IL C A P U G IO Y A Y O H U M A . El
lista chocaron junto al río Las Pie virrey del Perú alistó un nuevo
dras. Como el éxito le favoreciera, ejército de 4 500 hombres puesto
Belgrano decidió esperar en Tu a las órdenes del general Joaquín
cumán, en lugar de retroceder has de la Pezuela. Éste consiguió sor
ta Córdoba, según las instrucciones prender a Belgrano en la pampa
recibidas de Buenos Aires. Allí se de Vilcapugio, acción que quedó
libró el 24 de setiembre una re indecisa por un tiempo y concluyó
ñida batalla, term inada con el con la derrota de los independien
triunfo patriota. Belgrano avanzó tes. Sin perder el ánimo, Belgrano
entonces en persecución del ene consiguió rehacer sus tropas y el
migo, y mediante acertadas manio 14 de noviembre trabó nueva lu
bras logró interponerse entre Tris cha en la pampa de Ayohuma.
tán, acampado en Salta, y el Alto Después de 3 horas de desespe
Perú, de tal manera que el frente rada pelea, nuestro ejército quedó
de lucha quedó invertido, como si virtualmente deshecho. Sus restos
Estado actual de la posta de Yatasto, declarada lugar histórico. A llí, Juan M artín de Pueyrredón
delegó el mando del E jército del N orte en M anuel Belgrano.
C o m b a t e d e San L o ren zo .
L le g a b a é ste con la fa m a de su
tr iu n fo e n S a n L o r e n z o , d o n d e , c o n
su r e g im ie n to d e G r a n a d e r o s a C a
b a llo con cen tra d o tra s la s t a p ia s
d e l c o n v e n t o , la n z ó u n a b r io s a c a r
ga q u e s o r p r e n d ió a l e n e m ig o , d e
s e m b a r c a d o p o c o a n tes. L o a ta có
245
Este óleo de Eduar
do de M artino mues
tra el com bate que
tuvo lugar frente a
M ontevideo entre la
escuadra española y
las naves de Guiller
m o Brown, que ob
tuvieron allí un re
sonante triunfo (m o
y o de 1 8 1 4 ).
246
potable; iniciadas las negociacio Los comienzos de nuestra
nes, Vigodet capituló el 24 de ju
nio de 1814, con 6 000 hombres
soberanía
y un enorme material bélico. Ro-
marate, segundo jefe naval, lo hizo
a su vez en Concepción del Uru LA ASAMBLEA DEL AÑO XIII
guay, donde se había refu gia d o
después de un encuentro en Mar Fue convocada por el Triunvi
tín García. rato; se formó con cuatro diputa
A p o g e o d e A r t i g a s . Aunque el
dos por Buenos Aires, dos por ca
caudillo oriental celebró un pacto da capital de provincia y uno por
con Alvear, no llegó a concretar cada ciudad menor. Tucumán, una
se. El Directorio destacó entonces de éstas, enviaría también dos co
contra él una columna al mando mo homenaje especial por el triun
del coronel Dorrego, pero fue ven fo obtenido allí.
cida en el combate de Guayabos. La Asamblea se reunió el 31 de
Artigas resolvió entonces evacuar enero de 1813, declarán dose so
la Banda Oriental, y se estableció berana, y eligió como presidente a
en el campamento de “La Purifi Alvear y como secretarios a José
cación”. Creó una bandera y un Valentín Gómez e Hipólito Viey-
escudo y asumió el título de “Pro tes. En el período de febrero a
tector de los Pueblos Libres”. Ex
noviembre votó 114 resoluciones;
tendió su influencia sobre Entre luego, perturbada por intrigas, con
Ríos, Corrientes y algunas antiguas cluyó por ser disuelta el 15 de
misiones jesuíticas y contó con la abril de 1815. Declaró libres a los
adhesión de los federales de Santa esclavos nacidos desde el día de su
Fe y Córdoba. El año 1815 seña inauguración y a los fugitivos de
ló el apogeo de su poder.
otros lugares “por el solo hecho
de pisar el territorio de las Provin
cias Unidas”; abolió la mita, el tri
buto, y todo otro gravamen que
pesara sobre los indios. Suprimió
los títulos de nobleza y los “ma
yorazgos”, que consagraban here
dero de todos los bienes de familia
al hijo mayor, en detrimento de
sus hermanos; ordenó la acuña
ción de monedas con el sello de
la Asamblea, que era nuestro es
cudo, y la inscripción “En Unión
y Libertad”, y en el reverso un
sol, rodeado por la leyenda “Pro
vincias del R ío de la Plata”.
Declaró feriado el 25 de mayo;
proclamó la independencia de la
Iglesia argentina de toda autori
dad eclesiástica española y regla
mentó la actividad de las órdenes
247
Anverso y reverso de las monedas acuñadas por la
Asamblea de 1 813: en una de las caras se destaca el
escudo, en la otra el sol.
E l Him no es cantado por primera vez en los salones de la señora M aría Sánchez de Thom pson. ( Óleo
de P. Subercasseaux / M u seo H istórico N acional.)
Artigas inaugura el congreso de Tres Cruces, celebrado en abril de 1813. D e allí surgieron las Ins
trucciones que portaban los diputados orientales. ( Cuadro d e Pedro Blanes V iale.)
M i s i o n e s d i p l o m á t i c a s . A fi
nes de diciem bre de 1814 par
tieron Belgrano y R ivad av ia en
249
misión diplomática frente a Ingla Alvear, ya en Córdoba, debió re
terra y Fernando VII, ya restable gresar a Buenos Aires.
cido en el trono. En Río de Janei Pero la Logia de allí impuso la
ro se les unió Manuel José García, renuncia a Posadas y lo reempla
y en Londres, Sarratea. Aquí las zó por Alvear; el acto fue en ge
gestiones pasaron por curiosas in neral repudiado en el resto del país
cidencias, sin resultados positivos. y, tras diversas agitaciones, el Ca
Belgrano regresó en noviembre de bildo de Buenos Aires, apoyado
1815 y Rivadavia inició gestiones por una parte de las propias fuer
para pasar a España, con la garan zas de Alvear, exigió la destitución
tía de que se respetaría su liber de éste, la disolución de la Asam
tad. Recién la obtuvo en mayo blea, y el arresto y proceso de Po
de 1816 y a poco de estar se pro sadas, sus ministros y numerosos
dujo en Tucumán la Declaración funcionarios.
de la Independencia; indignado el Alvear partió para Río de Ja
ministerio español, recibió la orden neiro, haciéndose cargo del mando
de salir inmediatamente del reino. Juan José Viamonte. El 20 de
abril de 1815, electores designados
R e n u n c ia d e P o s a d a s y d ir e c de entre cierto número de vecinos,
t o r io de A lvear. A le n t a d o por por decisión del Cabildo, confiaron
s u t r i u n f o c o n la t o m a d e M o n t e el cargo de Director Supremo a
v id e o , A lv e a r o b t u v o e l m a n d o d e l Rondeau, vigilado por una Junta
E j é r c i t o d e l N o r t e , q u e h a b ía d e de Observación de cinco miembros.
ja d o en m a n o s d e R o n d e a u , p a ra El 16 de mayo promulgó un Es
e m p re n d e r una n u e v a ca m p a ñ a al tatuto Provisional, organizando el
A lto P erú . P e r o la o f i c i a l i d a d d e país; su disposición más importan
d ic h o e jé r c ito se s u b le v ó m a n te te ordenaba la convocación de un
n i e n d o la j e f a t u r a d e R o n d e a u , y Congreso en Tucumán.
Rondeau no llegó a asumir el
mando, que quedó en manos de su
segundo, Álvarez Thomas, durante
11 meses (m ayo de 1815 a abril
de 1816). El principal aconteci
miento de este período consistió
en el enfrentamiento con Artigas,
apoyado en Santa Fe por Estanis
lao López, quien iba surgiendo a
su vez como primera figura. Se en
vió una expedición contra ellos a
cargo de Viamonte, la cual llegó
hasta la mencionada ciudad, don
de tuvo que rendirse. Siguieron
varias tramitaciones entre los ven
cedores que con clu y eron con la
renuncia de Álvarez Thomas y el
nombramiento de González Bal-
carce.
Este dibu jo de Alcides d ’ Orbigny muestra el aspecto que tenían, en la época de las guerras de la
independencia, las aldeas del A lto Perú (actualm ente B oliv ia ).
con algunas pocas tropas de línea, jurar a su oficialidad y tropa que
bajo la inteligencia genial y he seguirían p elea n d o hasta la vic
roica de Martín Miguel Güemes. toria.
Perteneciente a una de las princi
pales familias de ab olen g o, éste B u c h a r d o . Otra hazaña memo
estuvo en Suipacha y Huaqui y rable de esta época fue la campa
quedó de gu arn ición en Buenos ña realizada con la fragata La Ar
Aires, hasta que San Martín, con gentina, que duró 2 años (1 8 1 7 /
intuición genial, lo llevó consigo 19) y completó la primera vuelta
al tomar el mando en reemplazo al mundo después de haber reco
de Belgrano. rrido los archipiélagos del Pacífico
Todas las invasiones realistas, y su costa americana, venciendo a
dirigidas por sus mejores genera corsarios, desembarcando en varios
les (Pezuela, Olañeta, Canterac), puntos de California y M éxico y
entre 1814 y 1821, terminaron por sembrando el terror en el enemigo.
fracasar. El 7 de junio de 1821, En su viaje, rescató a la corbe
Güemes fue mortalmente herido, ta corsaria argentina Chacábuco,
muriendo el 17 de junio, en pleno detenida en las islas Hawai, y con
bosque, a la sombra de un cebil siguió que el rey del lugar recono
colorado; próximo a la agonía, hizo ciera la independencia argentina.
252
Los d iputados que fo rm a ro n el Congreso eran personas de
probado pa trio tism o . Como en todas las asambleas de la re
vo lución, predom inaban en el Congreso los eclesiásticos, en
tre ellos A n to n io Sáenz, Justo Santa M a ría de Oro, Cayetano
Rodríguez y Pedro Ignacio C astro Barros. T am b ié n fig u ra b a n
Juan José Paso, Tom ás de A nchorena y Pedro M edrano en la
representación bonaerense; Eduardo Pérez Bulnes en la co r
dobesa; José Colom bres, Pedro A rá o z y Pedro León G allo en
la de las provincias del T ucu m á n ; José Ignacio G o rriti, M a
ria no Boedo y Teodoro Sánchez de Bustam ante en la de Salta
y J u ju y ; José M a ria n o Serrano en la a lto p eru a n a , y Tom ás
Godoy C ru z, Juan M a rtín de Pueyrredón y Francisco Narciso
Lap rid a en la cuyana. Este ú ltim o fue presidente del Con
greso d u ra n te el' mes de ju lio de 1 8 1 6, en que fue d e cla
rada la independencia. Como en la Asam blea del año X I I I ,
los presidentes eran renovados cada mes.
253
Fachada de la Casa de Tucumán.
Hechos posteriores
D ir e c t o r io de P ueyrredón .
Al marchar a Buenos Aires mantu
vo en Córdoba una entrevista se
creta con San Martín, combinando
tellano, 1 000 en quichua y 500 los detalles de la Expedición Li
en aymará. Fue leída públicamen bertadora a Chile. Se instaló en la
te en sus dos partes y repartida Capital a fines de julio y gobernó
entre la gente ilustrada. los tres años de su duración legal,
siendo el único Director Supremo
que logró esto. Supo mantener el
S í m b o l o s p a t r i o s . El día 20 de
orden, reprimiendo una agitación
julio se consagró definitivamente
que amenazaba con recurrir a la
la Bandera N acional, Celeste y
violencia. Se vio obligado el 15 de
Blanca. Otra resolución del 25 de
diciembre de 1816 a ordenar el
febrero de 1818 agregó en la fran
destierro de Dorrego, seguido en
ja media un sol, por propuesta del
febrero de 1817 por el de otros
diputado Chorroarín.
agitadores.
Respecto al escudo, ya ha sido
tratado en otro pasaje. Se trabó
luego un largo y enojoso debate
sobre la forma definitiva de go
bierno, pues había partidarios de
adoptar una monarquía instalando
a un descendiente de los incas.
El proyecto contó con la simpa
tía de Belgrano, temeroso de que
una form a popu lar de gobierno
provocara distu rbios y revueltas
“por la falta de experiencia en el
ejercicio de esta forma”. La cues
tión fue resuelta el 15 de julio por
fray Justo Santa María de Oro,
quien manifestó que “no podía es
tablecerse una forma de gobierno
sin consultar de antemano la vo
luntad popular”.
256
“Artigas, fundador de la nacionali na conducta; dotada de amplios
dad oriental”. poderes, revisaba en apelación los
juicios menores. Esta Constitución
sólo fue aplicada en la práctica por
C o n s t i t u c i ó n d e 1819. Apro poco tiempo, y en forma parcial.
bada por el Congreso el 25 de ma Con todo fue el ensayo más com
yo, reconocía los tres poderes: el pleto y orgánico en su género an
legislativo, con dos cám aras: un terior a 1853.
senado, in tegrado por personajes
de categoría, y cámara de diputa
dos, elegidos a razón de uno por L o s CAUDILLOS DEL LITORAL.
cada 25 000 habitantes o fracción En el curso de los acontecimientos
que no bajase de 16 000. El Eje se destacaron dos figuras: en En
cutivo estaba a cargo de un Direc tre Ríos, Ramírez, vencedor de su
tor Supremo designado por ambas rival Eusebio Hereñú, apoyado por
cám aras reunidas en Asamblea. el Directorio, y en Santa Fe, Esta
Duraba cinco años y podía ser re nislao López-, contra éste se envió
electo por una sola vez; tenía la una columna al mando de Díaz
facultad de nombrar al gobernador Vélez, quien logró ocupar esa ca
de cada provincia pero de entre pital, pero quedó estrecham ente
una lista presentada por los res sitiado y a duras penas pudo aban
pectivos cabildos, y por sí solo los donar la ciudad, embarcándose en
obispos y demás empleados de la una flotilla enviada para socorrer
administración. lo. El 23 de julio de 1818, López
El Poder Judicial comprendía se instaló en el gobierno, que ocu
una Alta Corte, de miembros ina pó durante 20 años hasta su muer
movibles mientras observaran bue te, acaecida en julio de 1838.
D i r e c t o r i o d e R o n d e a u . La presentó su renuncia. Fue reem
reelección de Pueyrredón se vio plazado por Manuel de Sarratea,
frustrada debido a la tenaz oposi designado Gobernador de Buenos
ción de éste en aceptarla. Fue en Aires después de una serie de ne
tonces elegido Rondeau. Pidió a gociaciones que concluyeron con eí
San Martín que regresara de Chi Tratado del Pilar, firmado el 23
le, ya liberado por él, para que lo de febrero. Proclamó el sistema de
apoyase con su ejército. San Mar federación como forma de gobierno
tín cruzó la cordillera y avanzó y dispuso la pronta convocación de
hasta el sur de Córdoba. Ante la un Congreso Constituyente. Dis
hostilidad que encontró en el ca ponía además severas penas a la
mino, el descontento de la tropa y mayoría de los Directores supre
la falta de medios eficaces de lo mos y miembros de los anterio
comoción, suspendió la marcha y res congresos. La Junta de Repre
regresó a Chile (diciem bre). sentantes, elegida en la ciudad,
D ejó en San Juan al Batallón aprobó inmediatamente el tratado.
de Cazadores de Los Andes, que El 25 de febrero, Ramírez y Ló
se sublevó días más tarde, acatan pez entraron en Buenos Aires y
do la autoridad del coronel Maria “ataron sus caballos en las rejas
no Mendizábal. de la Pirámide de M ayo”. Perma
También fue llamado el Ejérci necieron cinco días en la ciudad,
to del Norte, pero se sublevó el 8 siendo objeto de agasajos. Quedó
de enero de 1820 y, a las órde com o gobernador Sarratea, pero
nes de Juan Bautista Bustos, pasó fue depuesto por un golpe militar
a Córdoba. a cargo de Balcarce. La decidida
actitud de Ramírez y López lo de
salojó a los pocos días, reponiendo
C a íd a d e l D i r e c t o r i o . López a Sarratea. Mientras tanto se reu
y Ramírez, reforzados por un gru nió la Junta de Representantes de
po de chilenos emigrados, partida la Provincia, que aceptó la renun
rios de José Miguel Carrera, y otro cia de aquél y su reemplazo por
de correntinos, derrotaron en Ce Ildefonso Ramos Mejía; simultá
peda, el 1° de febrero de 1820, a neamente un grupo de oficiales y
las fuerzas directoriales y avanza tropas impuso la designación de
ron sobre Buenos Aires. Rondeau Soler al Cabildo de Luján.
258
Ramos M ejía renunció; antes de La nueva ruta con ceb id a por
serle aceptada la renuncia, el Ca San Martín era un vasto semicírcu
bildo de Buenos Aires asumió el lo hacia el oeste, con dos momen
mando. Como Soler retenía el su tos: 1° ocupar Chile, que había
yo, el 20 de junio hubo tres gober caído nuevamente en manos de los
nadores simultáneos. Quedó en de- realistas a consecuencia del desas
fintiva Soler, pero inmediatamente tre de Rancagua; 29, pasar de allí
acudieron López, Alvear y Carrera a Perú, atacando Lima de frente.
y lo derrotaron en el sangriento Dos formidables obstáculos natu
com bate de Cañada de la Cruz. rales se oponían: la cordillera de
Después de otra serie de inciden los Andes y el Pacífico; montaña
cias y encuentros armados, a fines y mar.
de setiembre la Junta designó go En ese momento una grave do
bernador interino a M artín R o lencia lo abatió: intensas fiebres
dríguez. y repetidos vómitos de sangre. Le
concedieron licencia para pasar a
Córdoba; el clima y la esmerada
asistencia médica lograron mejo
Proyección continental rarlo.
E ntonces so licitó y obtuvo el
P l a n Sa n m a r t in ia n o . La bre nombramiento de gobernador in
ve estancia de San Martín en el tendente de Cuyo y se instaló en
Ejército del Norte bastó para que Mendoza, llevando a su lado a su
se convenciera de la imposibilidad esposa, que había quedado en Bue
de llegar hasta Lima por el Alto nos Aires, y trabando relaciones
Perú. Lo comprobaban las sucesi con las prin cip ales familias del
vas derrotas de Huaqui, Vilcapu- lugar. Remedios se con qu istó la
gio, Ayohuma y Sipe Sipe. Allí co simpatía de las damas, que la se
rrespondía una posición defensiva cundaron en felices iniciativas pa
y nada más. trióticas, com o la confección de la
Bandera del E jército de los Andes.
260
M onum ento a Fray Luis Beltrán, levantado en
la Alameda de la ciudad de Mendoza.
A cinco kilómetros de la ciudad de M endoza se encuentra el campo del Plum erillo, actualmente lugar
histórico. Esta fotografía muestra el pórtico de entrada.
Yesquero de oro que perteneció a San M artín.
( M u seo H istórico N acional.)
P a s o d e l o s A n d e s . Para des
pistar al enemigo se realizó por
seis lugares: dos al norte, dos al
centro y dos al sur. Los del centro
fueron los verdaderamente impor
tantes: el de Los Patos, a cargo de
San Martín y O’Higgins con el
grueso de las tropas, y el de Uspa
llata, con Las Heras al frente. Des
pués de sostener algunos combates
con destacamentos realistas avan
zados, ambas columnas se unieron
en San Felipe de Aconcagua, para
marchar directamente sobre San
tiago. Precipitadamente el enemi
go logró concentrar a 3 000 hom
bres, quienes al mando del general
Chifles de asta usados por San M artín en sus Maroto los esperaron en una me
campañas. (M u seo Histórico N acional.) seta frente al cerro de Chacabuco.
262
B a t a l l a d e C h a c a b u c o . Se li ros que habían quedado de reser
bró el 12 de febrero de 1817. San va, cargó temerariamente al ene
Martín concibió un ataque frontal migo, bajo una lluvia de balas,
dirigido por O’Higgins y otro sobre empuñando la bandera; O’Higgins,
el flanco izquierdo, dirigido por rehecho, acudió en su apoyo. En
Soler, para tomar por sorpresa al ese momento llegó la vanguardia
enemigo, cortándole en lo posible de Soler, que definió la victoria.
la retirada. Ahorrando detalles, di Los realistas sufrieron 500 bajas
remos que Soler tardó en llegar por y 600 prisioneros; las bajas patrio
obstáculos encontrados en el ca tas fueron solamente 12 muertos
mino, y que el choque frontal diri y 120 heridos. M arcó del Pont hu
gido por O’Higgins fue rechazado yó hacia Valparaíso, pero lo al
por Maroto. canzaron y capturaron. Los realis
Ante el inminente peligro, San tas se agruparon a las órdenes del
Martín, al mando de 250 granade coronel José Ordóñez; perseguidos
263
por Las Heras, al que más tarde se
unió O’Higgins, fueron derrotados
en el Cerro de Gavilán. Luego si
tiados en Talcahuano, puerto for
tificado, donde podían recibir re
fuerzos y víveres. Al cabo de 5
meses, O’Higgins intentó tomarlo
por asalto, pero fue rechazado, su
friendo graves bajas.
P r o c la m a c ió n de la in d e p e n
d e n c ia d e Se juró solem
C h ile .
nemente en Santiago el 12 de fe
brero de 1818, primer aniversario
de Chacabuco, y luego en las de
más ciudades.
I n v a s i ó n d e O s o r i o . En enero
de ese año llegó a Talcahuano el
general Mariano Osorio, del Perú,
con una e x p ed ición de más de
3 000 hombres. O’Higgins retroce
dió hacia el norte. Ordóñez, tras
una serie de marchas estratégicas,
decidió atacar al a n och ecer del
19 de marzo, por sorpresa, a los
patriotas, ya dirigidos p or San
Martín. Lo hizo en la llanura de
Cancha Rayada, provocando gran
confusión, capturando gran canti-
■
El Congreso recibió a San M artín en sesión solemne después de su retom o de Chile. ( Cuadro de
Giudice. )
pender del almirante Tomás Ale LA LIBERTAD DEL PERÚ
jandro Cochtane (Cókrein), aris
tócrata inglés, alejado de su país Al recibir San Martín la orden
por ruidosos escándalos privados. del Directorio de ir a sostenerlo
Con suma audacia e innegable pe con su ejército, decidió, el 2 de
ricia recorrió con la escuadra las abril de 1820, reunir una Junta
costas del norte de Chile y del de jefes y oficiales, manifestando
Perú, amagando dos veces atacar su p ro p ó sito de renunciar, por
el puerto fortificado de El Callao. negarse a intervenir en luchas
En febrero de 1826 se apoderó de internas de la Patria. La Junta,
Valdivia, baluarte español, que se presidida por Las Heras, aprobó
mantenía al sur de Chile; quedó así entonces “el acta de Rancagua”
asegurado el dominio del mar. (lugar de la reunión), declarando
r
La e s c u a d r a del P a cí
fico, a las órdenes de
Cochrane, transportó los
c o n t in g e n t e s militares
hasta el Perú. ( Bajo-
relieve. )
se sublevó contra el sistema des del interior del país. San Martín
pótico de Fernando V II y le obli envió contra ellos a una columna
gó a aceptar una constitución. Los dirigida por Domingo Tristán, pero
triunfadores creían que con ese éste fue derrotado el 7 de abril
cambio los patriotas depondrían de 1822 en la batalla de lea.
sus armas; comisionados con ese
objeto, enviaron delegados a distin B o l í v a r . En el norte del con
tos puntos de América. El del Pe tinente, Simón Bolívar consiguió,
rú, don Manuel Abreu, consiguió tras arduas luchas,, liberar a Nueva
que San Martín y Lerma se entre Granada con la victoria de Boya-
vistaran en Punchauca, el 2 de ju cá (7 de agosto de 1819), y a V e
nio de 1821. Pese a la cordialidad nezuela, su tierra natal, mediante
y recíproca estima manifestada por la encarnizada batalla de Carabo-
ellos y sus oficiales, no se arribó a bo (24 de junio de 1821).
un arreglo. Los españoles preten Destacó luego al general Anto
dían que, con el nuevo régimen, los nio José Sucre al Ecuador, pero la
patriotas aceptaran la dominación suerte de las armas le fue adversa
de la metrópoli, pero San Martín y debió firmar un armisticio. San
sostuvo com o condición previa la Martín le envió un refuerzo de
total independencia, por lo que fra 1 500 hombres al mando de Santa
casaron las negociaciones. Cruz; figuraba en éste un escua
Al mes siguiente, Lerma evacuó drón de G ranaderos a C aballo
Lima, dejando num erosos enfer quienes, a las órdenes de Lavalle,
mos en los hospitales. San Martín derrotaron en Río Bamba a un
no quiso ocuparla, hasta que lo so enemigo cuatro veces superior en
licitó una comisión de delegados número (21 de abril). Poco des
del Cabildo de la ciudad. Luego pués, el 24 de mayo, coronando
convocó al pueblo para que votase maniobras audaces en las faldas
si quería la independencia y así lo del volcán Pichincha, Sucre obtu
hicieron en un acta que llegó a vo la victoria de ese nombre y
reunir 5 000 firmas. ocupó la ciudad de Quito.
Entonces San Martín la procla
mó, en un solemne acto público,
el 28 de julio, desplegando por pri
mera vez la bandera por él conce
bida. El 2 de agosto tomó el título
de “Protector del Perú”. El 21 de
setiembre el general realista La
Mar^ entregó El Callao; varios ofi
ciales americanos al servicio de Es
paña pasaron a las filas indepen
dientes, y San Martín les recono
ció el grado. Uno de ellos, Andrés
Santa Cruz, tuvo después una des
tacada actuación en la política pe
ruana.
Mientras tanto Lerma, secunda
do por los prestigiosos generales
Valdés y Canterac, tomó posesión
Sim ón B olívar.
E n t r e v is t a de G u a y a q u il . E l mentos por el banquero Alejandro
26 de julio de 1822 se encontraron Aguado, amigo de su juventud, que
en ese puerto San Martín y Bolí le fijó una cantidad en pago del
var. Al día siguiente celebraron cargo de tutor de sus hijos meno
una larga conferencia. San Martín res, tarea que desempeñó escru
requirió la colaboración del héroe pulosamente. Más tarde Chile le
v en ezolan o, pero éste solamente dio de alta en su ejército, abonán
le ofreció una columna d(? 1 500 dole el sueldo correspon d ien te;
hombres, equivalente al auxilio de también el Perú cumplió con ese
Santa Cruz, contingente demasia deber. Pasó días serenos, muy vi
do exiguo para rematar con la vic sitado por viajeros de los tres paí
toria la campaña de la independen ses en que actuó, la mayoría hijos
cia del Perú. de personajes que había tratado.
Le ofreció entonces servir a sus Formaban una asidua familia, su «
órdenes, pero rehusó acepta rlo. hija Mercedes, el marido de ésta,
Por la noche se celebró un ban Mariano Balcarce, y las dos nietas,
quete; a poco de levantarse de la en Gran Bourg, quinta próxima a
mesa, nuestro libertador empren París.
dió el regreso a Lima. Al sentirse enfermo se trasladó
Una vez allí reunió un Congreso al puerto de Boulogne Sur Mer, en
Constituyente, abrió sus sesiones y procura de un clima más benigno,
dejó un pliego que contenía su re y allí falleció el 17 de agosto de
nuncia indeclinable al cargo. Fue 1850. Sus restos fueron repatria
ron vanas todas las gestiones para dos en 1880 y depositados en la
que lá retirase; finalmente la acep Catedral de Buenos Aires.
taron, otorgándole el grado de ge
neralísimo del ejército y un voto
de gracias por los servicios pres
tados.
Fin de la campaña
Esa misma noche partió a Chi emancipadora
le; tras una breve permanencia pa
só a Mendoza y finalmente a Bue El Perú independiente pasó por
nos Aires, donde rindió un piadoso un período de agitaciones violen
homenaje a su mujer, fallecida el tas, aprovechado por los realistas
3 de agosto de 1823. En 1824 par para tomar El Callao y por breve
tió para Europa con su hija M er tiempo también Lima'.
cedes, fija n d o su residen cia en Como último recurso se llamó a
Bélgica; en 1829 volvió a Buenos Bolívar, quien asumió la jefatura
Aires, pero ofendido por algunos militar en setiembre de 1823. Des
comentarios publicados por políti pués de una activa reparación del
cos que veían con inquietud su orden, y reforzado por tropas co
presencia, capaz de frustrar sus lombianas, en 1824 inició la ofen
am biciones, re so lv ió no desem siva, confiando el mando de las
barcar. tropas a su fidelísimo amigo Sucre,
Vuelto a Europa se radicó en quien el 9 de diciembre de 1824
Francia, donde vivió con sencilla obtuvo la victoria decisiva de Aya-
dignidad, ayudado en ciertos mo cucho.
270
CAPITULO XIII
A U T O N O M ÍA S PR O V IN CIA LES
Y U N ID A D N A C IO N A L
271
Rodríguez se empeñó en cele año 20. In clu sive h u bo por un
brar un acuerdo ron Estanislao Ló momento sim patizantes de una
pez, obtenido a cambio de la en monarquía, pero la Asamblea del
trega de 25 000 reses en concepto año X III anuló defin itivam en te
de “indemnización” por las pérdi esas aspiraciones al abolir los títu
das sufridas en la guerra contra el los de nobleza, blasones, mayoraz
Directorio. Las remesas se envia gos, etc. Se impuso entonces el
ron en 42 partidas entre 1821 y principio republicano, o sea del go
1823, con un total de 30 000 cabe bierno por la mayoría popular y
zas, superior en 5 000 a lo exigido. directa.
Rosas contribuyó eficazmente en
las entregas, por lo que el gobierno Federación. El proceso del po-
le abonó 37 500 pesos, y le donó blamiento originó distintas corrien
una estancia, llamada “del R ey”, tes: los venidos directamente de
hasta entonces del Estado. Santa España y los llegados de Perú y
Fe lo designó ciudadano honorario Chile; éstos nunca se íusionaron
y miembro perpetuo del Cabildo totalmente.
de esa ciudad. A la distinta procedencia se su
m ó: a ) el aislamiento de los cen
tros poblados, separados por largas
Proyectos para la unidad distancias desiertas y de tránsito
lento y difícil; b ) las distintas re
nacional giones naturales con su ecología
propia (relieve, clima, fauna, flo
Las aspiraciones políticas del ra, etc.); c ) la autonomía de las
momento pueden comentarse en Intendencias, cada una con su pro
dos palabras: Democracia y Fede pia política e intereses; d ) la im
ración. portancia política de los Cabildos,
que en casos de urgencia se veían
Democracia. La ausencia de me obligados a tomar resoluciones sin
tales preciosos de fácil obtención consultar a la autoridad central.
y de masas indígenas dóciles alejó
del R ío de la Plata a la nobleza P r e d o m in io de B uenos A ir e s .
ambiciosa de la Corte. Aquí sólo P o r su m a y o r p o b la c ió n c o n c e n t r a
vinieron, con pocas excepciones, os d a , r iq u e z a , c u lt u r a , a n t ig u o p r e s
curos hidalgos y pobres labriegos. t i g i o d e c a p i t a l d e v ir r e in a t o , p a p e l
La ganadería, principal fuente m i lit a r p r e d o m i n a n t e d e s d e la s in
de recursos, la escasa población y v a s i o n e s in g le s a s y s u s it u a c ió n d e
el enorme territorio, favorecieron puerto único p a r a la s c o m u n i c a c i o
la vida libre, el contacto con la na n e s c o n E u r o p a , B u e n o s A ir e s p re
turaleza y la independencia indi d o m i n ó s o b r e la s d e m á s c iu d a d e s
vidual. d e l in t e r io r .
El espíritu de mayo animó, pues, Este poder absorbente provocó
un movimiento libertador e igua la reacción de las provincias: se
litario. preguntaban si la revolución de
Pero la burguesía porteña, al mayo se limitaba a cambiar el yu
igual que la de algunas ciudades go español por el porteño.
del interior, procuró conservar en E l d e s c o n t e n t o o r i g i n ó a l o s cau
sus manos el gobierno y lo consi dillos. É s t o s n o e r a n a g i t a d o r e s
guió, no sin d ificu ltad , hasta el a n ó n i m o s ; e n la m a y o r í a d e l o s c a -
272
Iglesia de la localidad bonaerense de Pilar, don
de se firm ó el tratado que lleva su nombre.
273
R ío Seco. Pudiendo salvarse, ad fusilado en Mendoza, el 4 de se
virtió que su compañera, llamada tiembre de 1821. La desaparición
Delfina, había sido capturada, por de Ramírez y López contribuyó
lo que regresó para salvarla, y ca decididamente a la p a cifica ción
yó fulminado por un pistoletazo en general.
el corazón. Su cabeza embalsama
da fue exhibida por López en el
balcón de la Casa de Gobierno de G o b ie r n o de M a r t ín R o d r í
Santa Fe. guez (1 8 2 1 ). N o m b r ó m i n is t r o de
Carrera siguió hacia el oeste, G o b ie r n o a B e r n a r d in o R iv a d a v ia
pero al entrar en San Juan fue y d e R e la c io n e s E x te r io r e s a M a
derrotado en Punta del Médano y n u e l J o s é G a r c ía . E n e s e corto
274
Este m onum ento a M artín R odríguez se levanta
en la ciudad de Tandil.
277
Este grabado de D ’ Orbigny muestra un grupo de indígenas patagones y aucas (a u ca : sinónimo de
“ guerreros” aplicado a diversas tribu s), en la localidad de Carmen de Patagones.
G en eral G re g o r io L as H éras.
Portada de la Constitución de 1826.
P R E S ID E N C IA DE R IV A D A V IA
279
lo y lo derrotó en El Tala (octu comunes, entre los que se encon
bre de 1826). traba Quiroga, quien desem peñó
Alarmado por estos sucesos, el un destacado papel en la lucha que
Congreso resolvió destacar comi sofocó el movimiento. Así obtuvo
siones para entrevistar a 'cada go com o premio su libertad.
bernador, entregar un ejemplar de Vuelto a la provincia natal, lo
la Constitución de 1826 y expli designaron con el cargo de sargen
carles sus alcances. Quiroga devol to mayor de Milicias, con las que
vió el mensaje sin abrirlo; Bustos, venció a Lamadrid, primeramente
de Córdoba, lo pasó a la Legislatu en El Tala y por segunda vez en
ra, que rehusó examinarlo. Ibarra El Rincón. Luego consiguió some
insultó al delegado y le dio orden ter a su influencia, no sólo a La
de retirarse inmediatamente, mien Rioja, sino también a Tucum án,
tras que Estanislao López, por su Catamarca, San Juan y Mendoza.
parte, se limitó a consultar a su Pudo levantarse así contra Riva-
Legislatura, que igualmente lo re davia: el caudillo gaucho del inte
chazó. rior frente al presidente del Litoral.
Pese a estas enormes dificulta
Q u i r o g a . Fue éste uno de los des, más la perspectiva de una gue
principales protagon istas de las rra con el Brasil, Rivadavia, en los
guerras civiles. Natural de La Rio- 16 meses de su gobierno, ayudado
ja, formó parte del regimiento de por el Congreso, sancionó memo
Arribeños y después del regimien rables leyes, que en general no pa
to de Granaderos a Caballo, pero saron por el momento de ser pro
abandonó sus filas y volvió a San yectos, pero destinados a cumplirse
Luis, donde en 1819 fue encarce más adelante.
lado por sus fechorías. Entre ellas cabe citar:
En esta ciudad estaban confi
nados Marcó del Pont junto con 1®) La ley de enfiteusis: siste
otros generales y jefes realistas ma de entrega condicional de lotes
rendidos en C hile. En 1819 se de propiedad del Estado, a quie
sublevaron gracias al apoyo de al nes se comprometieran a ocuparlas
gunos vecinos con los que habían y trabajarlas personalmente. Paga
trabado cordiales relaciones. Apu rían un canon anual; si al cabo de
radas las autoridades locales, re veinte años aún la ocupaban, la
forzaron sus tropas con los presos adquirirían en propiedad absoluta
(aplicada solamente en Buenos Ai
res, pronto la alteró la especula
ción de mala fe).
Rosas liquidó el sistema, fijando
un plazo a los concesionarios para
comprar la tierra o devolverla al
Estado.
2®) Creación del Banco Nacio
nal, sobre la base del Banco de
Descuento, que era provincial. T e
nía el privilegio de imprimir papel
moneda de curso obligatorio; con-
Facundo Quiroga.
Bernardino Rivadavia. ( Óleo d e Prilidiano P uey-
rredón. )
r
reemplazar las casas privadas, in-
P e d r o I , e m p e ra d o r d e l B rasil.
“ E l juram ento de los 33 orientales” . Este óleo de Juan M . Blanes evoca el desem barco del pequeño
grupo de patriotas uruguayos en la playa de La Agraciada, en donde se juramentaron.
284
lenta indignación, que obligó a Ri- gobernador a Dorrego, el 18 de
vadavia a renunciar, el 27 de junio agosto de 1828. Éste tuvo que en
de 1827, con la orden de ausentar frentar una violenta campaña opo
se inmediatamente del país. sitora, que consideraba deshonrosa
Tras una leve tentativa de vol la paz con el Brasil. El desconten
ver, en tiempos de Rosas, inmedia to de la o ficia lid a d del ejército
tamente frustrada, Rivadavia de vencedor de Ituzaingó era mani
bió ausentarse de nuevo. Estuvo fiesto, y cundió la opinión de que
un tiempo en R ío de Janeiro, y se sublevaría al llegar a Buenos
pasó luego a Cádiz, donde falleció Aires.
el 2 de setiembre de 1845. Sus Enterado Dorrego, a quien acon
restos fueron repatriados en 1857, sejaron que licen ciase las tropas
y descansan en, un mausoleo de la antes de su arribo, consideró que
plaza Once de Setiembre. debía honrarlas con una recepción
Dorrego, en ese momento gober triunfal. Así fue acogida la prime
nador de Buenos Aires, envió otra ra división, al mando de Lavalle;
misión al Brasil, compuesta por pero el l 9 de diciembre éste mar
los generales Guido y Juan Ramón chó al frente de la misma para
Balcarce, con el poderoso auxilio ocupar el Fuerte.
de Lord Ponsonby, agente confi Dorrego huyó, mientras que sus
dencial del gobierno británico. Se ministros Guido y Balcarce enta
acordó un nuevo tratado de paz, blaron negociaciones. La tarde de
el 27 de agosto. La Banda Orien ese mismo día se reunieron los uni
tal sería reconocida com o “Repú tarios en la iglesia de San Roque
blica Independiente”, y los brasi y designaron gobernador a Lavalle,
leños proced erían a evacuar las agitando sus sombreros en medio
guarniciones que conservaban en de un gran griterío. También re
la Colonia y Montevideo. No se solvió la disolución de la Cámara
trató acerca de ningún tipo de in de Representantes.
demnización. El tratado fue acep El flamante gobernador salió en
tado por una convención nacional persecución de Dorrego, derrotan
reunida en Santa Fe en setiembre do en Navarro a las pocas fuerzas
de 1828. que lo acompañaban y tomándolo
Los uruguayos sancionaron una prisionero. Algunos personajes uni
C on stitu ción , aprobada por el tarios enviaron cartas a Lavalle
Brasil y la Argentina, y proclama aconsejándole que lo fusilara; con
da solemnemente el 18 de julio alevosía insinuaron que acaso no
de 1830. se atrevía a hacerlo.
El predominio federal
GOBIERNO DE DORREGO
R e v o l u c ió n d e l l9 d e d ic ie m
bre de1828. Vuelta Buenos Ai
res a su carácter de provincia, la
Cámara de Representantes eligió
M a n u e l D o rre g o .
Juan Lavalle.
286
muchos presos políticos que La- Pero la noticia de los triunfos
valle, para mayor seguridad, había de Paz envalentonó a los unita
embarcado en un pontón, condu rios, que n o aceptaron la lista
ciéndolos al campamento rosista compartida y se presentaron con
de La Ensenada (cerca de la ac una propia que triunfó holgada
tual ciudad de La Plata). mente. Contrariado, Lavalle anuló
Lavalle decidió entonces nego la elección y mantuvo en Barracas
ciar, y con su tradicional temeri otra conferencia con Rosas; acor
dad marchó solo al campamento daron que aquél renunciaría y se
de Rosas en Cañuelas, donde, ante ría reem p la za d o por Juan José
el asombro de los centinelas, pidió Viamonte.
ser llevado a la presencia de éste.
Como no estaba, se echó sobre su
catre de campaña y se quedó dor R osa s g ob ern a d or d e p r o v in
mido. Al volver Rosas, éste lo c ia .Ganado a la causa federal, en
despertó y entablaron una larga vez de llamar nuevamente a elec
conversación de la que resultó la ciones como lo había dispuesto La-
Convención de Cañuelas, que acor valle, Viamonte decidió restable
daba elegir una Cámara de Repre cer la que funcionaba durante el
sentantes de una lista de candida gobierno de Dorrego, disuelta por
tos, que una vez reunida eligiría la resolución unitaria del l 9 de di
gobernador a Félix Álzaga. ciembre de 1828. Sus componen
Juan M anuel de Rosas.
D e r r o t a d e lo s u n ita r io s .
Córdoba fue simultáneamente in
vadida por un ejército porteño de
4 000 hombres y fuerzas santafe-
sinas de López; de Santiago del
tes eligieron gobernador a Rosas Estero, donde había instaurado su
el 6 de diciembre de 1829 por 32 poder Felipe Ibarra, y nuevamente
votos contra 2, concediéndole “fa por Quiroga, desde Cuyo.
cultades extraordinarias”. El día 8 Los lugartenientes de Paz, quien
se hizo cargo del poder. se reservó para combatir a López,
fueron vencidos totalmente por las
fuerzas invasoras, que además su
blevaron al gauchaje de Córdoba.
La Liga Unitaria y la Federal El 10 de mayo, en el curso de
una escaramuza, habiéndose ade
Quiroga restableció su ejército y lantado Paz, fue engañado por las
en febrero de 1830 volvió a inva exclamaciones de una partida que
dir Córdoba, pero sufrió un defini lo saludó de lejos y se dirigió a su
tivo desastre en Oncativo (25 dfc encuentro. Al acercarse y advertir
febrero de 1830). En ese momen el error, volvió grupas, pero con
to habían llegado dos comisionados un tiro certero de boleadoras lo
de Rosas para tramitar un acuer derribaron y fue capturado cerca
do; Quiroga se refugió dentro de la de El Tío.
galera que los transportaba, que Lo llevaron a Santa Fe, donde
lo condujo a Buenos Aires. López lo trató con respeto. Su ac
El 31 de agosto, delegados de titud era calculada. Como todos
diez provincias reunidos en Cór los caudillos, admiraba y temía su
doba votaron una “Liga de Paz y gran capacidad militar; tenerlo a
Alianza”, designando a José María su disposición implicaba una ven
Paz supremo jefe militar interino, taja enorme sobre sus rivales.
hasta tanto se constituyera el país. Rosas no dejó de comprenderlo,
Frente a esto, los representantes y pidió su remisión a Buenos Aires
de Buenos Aires, Santa Fe y En para procesarlo en su carácter de
tre Ríos firmaron en Santa Fe, el Jefe Supremo de la Federación.
4 de enero de 1831, el llamado Una vez en su poder, lo confinó a
“Pacto Federal” o “Liga del Lito Luján, donde residió con cierta co
ral”; Corrientes envió su adhesión. modidad, aunque m uy v ig ila d o.
Se creó una Comisión Permanen Más adelante lo trasladó a Buenos
te, con amplias facultades, hasta Aires, le dio de alta en el ejército
tanto no se reuniera un Congreso y le toleró un domicilio privado.
General Federativo para constituir Alguien le aconsejó que visitara
definitivamente el país. Es éste a Rosas para agradecerle; tras mu
el congreso que debía con v oca r cho vacilar acudió a la casa parti
288
En el museo de Luján se conserva esta celda de
la cárcel, utilizada en época de Rosas. E n ella
fue recluido el general Paz.
289
Grabado popular de la época que representa a los “ colorados” de Rosas, grupo de gauchos discipli
nados militarmente.
P o l í t i c a e x t e r i o r . Restable
ció las relaciones con la Santa Se GOBIERNO DE BALCARCE
de, interrumpidas desde la Revolu
ción de Mayo. Nombró a Alvear
Fue elegido entonces goberna
nuestro representante en los Es dor Juan Ramón Balcaice, quien
tados Unidos de América, cargo asumió el cargo el 17 de diciembre
que ocupó hasta su fallecimiento.
de 1832. El nuevo mandatario ob
Nombró a Manuel M oreno Encar
servó una política propia, que lo
gado de Negocios en Inglaterra.
liberaba de ser simple instrumento
P rotestó en érgicam en te por el
de su antecesor. Fue apoyado por
atropello cometido contra las islas la clase moderada, y provocó la
Malvinas el 31 de diciembre de
reacción indignada de los rosistas,
1831, por la nave de guerra nor
quienes apodaron lomos negros a
teamericana Lexington, destacada
los de esa clase por usar levitas de
en misión de vigilancia contra pi
ese color. En la renovación de las
ratas y corsarios. D e acuerdo con
Cámaras ganaron los lomos negros,
una ley de 1821 decretó que todo
lo que motivó tumultuosas protes
extranjero, con más de dos años
tas, atribuyéndolo a fraude. Ei?
de residencia, propietario comer
ese momento, Rosas estaba ausen
ciante o en ejercicio de una profe
te en la Campaña del Desierto, y
sión liberal u oficio mecánico, de
su esposa, de genio arrebatado, no
bía enrolarse y servir en la “Guar
vacilaba en tramar intrigas.
dia Nacional” para garantir el or
den público. D aría m o tiv o más
tarde a un serio conflicto diplo
mático con Francia. LA CAMPAÑA DEL DESIERTO
En mayo de 1832, Rosas devol
vió las “facultades extraordinarias”. Rosas había concebido un vasto
Esa devolución, tras acalorado de proyecto de campaña contra los in
bate, fue aceptada con profunda dígenas. Desde Chile, dirigida por
290
el general Bulnes, desde el Cen REVOLUCIÓN DE LOS
tro por Quiroga y desde Buenos RESTAURADORES
Aires por el mismo Rosas. Los chi
lenos desistieron. Quiroga no acep El 11 de octu b re de 1833,
tó; las operaciones del Centro tu 10 000 hombres, entre militares y
vieron por principal ep isod io la civiles, se reunieron en Barracas al
derrota del ca ciq u e Y anquetruz mando del general Agustín Pinedo,
por Ruiz Huidobro, en Las Acolla sitiaron Buenos Aires, sosteniendo
radas (sur de San Luis). Allí se algunos combates con las fuerzas
detuvo por falta de recursos. locales. Esas laboriosas negocia
Rosas fue el único que llenó su ciones obtuvieron la renuncia de
cometido. Salió de la guardia del Balcarce. La Cámara de Repre
Monte el 22 de marzo y acampó sentantes lo reemplazó por Via-
en Napostá, algo al sur de Bahía monte, con carácter interino.
Blanca; de allí despachó columnas A éste le fue imposible mante
que recorrieron el río Colorado ner el orden: grupos de empon
hasta sus nacientes y el río Negro chados recorrían las calles al
hasta la confluencia del Neuquén anochecer, tiroteando las casas de
y el Limay. En su expedición res los contrarios a Rosas; por ello re
cató a unos 2 000 cautivos, causó nunció, el 3 de junio.
6 000 bajas y p or prim era vez, La Cámara de Representantes
aunque por poco tiempo, consiguió eligió entonces a Rosas, quien no
d e s p e j a r d e i n d i o s la p r o v i n c i a . aceptó; ta m p oco aceptaron sus
291
principales adeptos; finalmente el partidario del aplazam iento del
presidente de la Cámara, Manuel mismo.
V. Maza, se hizo cargo del mando. En noviembre de 1834 estalló
un conflicto armado entre el go
bernador de Salta, Pablo Latorre,
y el de Tucumán, Alejandro H e
ASESINATO DE QUIROGA
redia. Rosas convenció a Quiroga
de ir a reconciliarlos; a éste le gus
Tres caudillos locales aspiraban tó la idea, pues le daría prestigio,
a adueñarse del poder nacional: pero temía el riesgo de ser hostili
Rosas, López y Quiroga. López, zado por los Reynafé al cruzar
caudillo del litoral, necesitaba ex Córdoba. Calculó que podría evi
pandirse hacia el interior para dar tar el peligro con la rapidez de su
más cuerpo a su zona de influen marcha, que no daría tiempo de
cia; Quiroga, caudillo de la región preparar una emboscada. Efecti
andina, precisaba en cambio acer vamente, llegó sano y salvo a San
carse al litoral para tener acceso tiago del Estero, pero allí se en
al R ío de la Plata. teró de la derrota y muerte de
El primero m archaba hacia el Latorre, que hacía inútil toda ges
oeste, el segundo hacia el e ste: tión, y emprendió el regreso.
chocaron en Córdoba. Rosas que Había dado marco suficiente pa
dó a la expectativa, considerando ra organizar la emboscada: en Ba
la p osib ilid a d de una recíproca rranca Yaco, lugar agreste. El 16
destrucción. de febrero de 1835 fue atacado y
José Vicente Reynaíé, goberna muerto por una partida encabeza
dor de Córdoba, se inclinó en fa da por Santos Pérez. Todos los
vor de López. Mientras tanto Qui ocu pan tes de la galera fueron
roga, instalado en Buenos Aires, igualmente ultimados, tras lo que
donde hacía vida social, auspició desbarrancaron el veh ícu lo. Allí
la urgencia de la reunión de un fue encontrado Quiroga, y sepul
Congreso Nacional Constituyente, tado provisoriamente en una capi
en abierta contradicción con Rosas, lla cercana.
E xposición de los cadáveres de Santos Pérez y R eynafé, considerados culpables del asesinato de Fa
cundo Quiroga. ( Litografía de B acle, “ M onum enta Iconographica” .)
r
r ío S a la d o , e n co n ta cto con lo s N o poseía talento superior; es
g a u c h o s e in d io s . taba, en cambio, dotado de astucia
Desde 1811 asumió la dirección natural, espíritu práctico y profun
de esa estancia, donde aplicó se do conocimiento de los hombres
vera disciplina. En 1813 contrajo y sus pasiones. Era muy laborioso,
enlace con Encarnación Ezcurra, pero dedicaba mucho tiempo a pe
en quien encontró una compañera queños detalles de la administra
enérgica y decidida. ción, como vigilar el empleo de
D ejó entonces la casa paterna cada resma de papel usada en las
para formar con Juan Nepomuce- oficinas, o la cuenta de las velas
no Terrero una sociedad dedicada consumidas por un cura de cam
a la salazón de carne y pescado, paña. Nada escapaba a su control.
compraventa de frutos del país y Su insensibilidad moral incitó y
cría del ganado, que tuvo asiento autorizó los peores excesos contra
en la gran estancia “Los Cerrillos”, sus enem igos; amaba la broma
cerca de la localidad de Monte. mortificante y se rodeó de bufo
Vicente López lo nombró “Coman nes, a quienes sugería y azuzaba
dante General de Campaña”, que grotescas ocurrencias.
era tanto como entregarle toda la Aborrecía el desorden y procla
Provincia de Buenos Aires. maba frecuentemente “odio eterno
a los tumultos y obediencia a las
S e m b l a n z a d e R o s a s . Heredó autoridades constituidas”. Protegió
de la familia paterna los ojos cla los intereses de los estancieros lati
ros, el tipo rubio, la elegancia en fundistas, a cuya clase pertenecía.
el porte y los modales, y de la ma
dre, el espíritu terco y arrebatado
y el ansia de mandar. Usurpación de las M alvinas
Su larga permanencia en el cam
po le permitió tratar con igual as Don Luis Vernet se estableció
cendiente a la gente culta de los en Puerto Soledad con varias fa
salones porteños y al paisanaje de milias, ganado y útiles agrícolas;
las soledades de la pampa. en 1829 fue designado gobernador.
Aún se conserva este rancho de la estancia Los Cerrillos, que perteneció a la com pañía saladeril de
Rosas y Terrero.
D ocum ento que denuncia el ataque a la corbeta
“ Lexington” en Puerto Soledad. Publicado en
Buenos Aires, en 1832. ( M u seo de la Casa de
G obierno. )
La ciudad y la campaña
SOCIEDAD, ECONOMÍA
Y CULTURA
L a s o c i e d a d . La clase llamada
“decente” (altos funcionarios, je
fes militares, hacendados, comer
ciantes, sacerdotes, profesionales,
etcétera) mantenía las tradiciona
les relaciones de los bailes y ter
tulias de los que era principal fi
gura Manuelita, la hija de Rosas.
Éste se alojaba en una casa si
Tuvo que enfrentar varios atrope tuada en la esquina de las actuales
llos de cazadores furtivos de lobos calles Bolívar y Moreno, pero pa
marinos. Una fragata de guerra saba temporadas en otra residen
norteamericana “lo castigó” enton cia ubicada en Palermo, precisa
ces, d esem barcan do un destaca mente en el lugar donde ahora se
mento en P u erto Soledad, que levanta la estatua de Sarmiento.
arrestó a Vem et y seis de los prin Solía celebrar allí reuniones cam
cipales vecinos (31 de diciembre). pestres.
Rosas entabló una reclamación También eran comunes las ca
ante el gobierno de los Estados balgatas organizadas por la clase
Unidos de América y después de dirigente hasta San Isidro, en una
algunos trámites logró que éste la avenida a orillas del río llamada
mentara el hecho y reconociera la Pasaje de la Alameda (hoy Lean
soberanía argentina. dro N. Alem ) : concurría gran nú
En 1833 ocurrió otro atropello mero de personas, que la recorrían
con su m ad o por el capitán de la repetidas veces.
corbeta inglesa Clío. Valiéndose de Cabe citar también Los Santos
la imposibilidad de defensa, éste Lugares, cerca de la actual Villa
desembarcó en Puerto Soledad el Devoto, donde existía un campa
3 de enero y arrió la bandera ar mento militar permanente, depósi
gentina. to de armas y pertrechos. Éste
El gobierno protestó ante el en adquirió triste fama al ser emplea
cargado de negocios en Buenos Ai do como cárcel de presos políticos,
res mientras que Manuel Moreno, donde en ocasiones los fusilaban.
295
L a c l a s e h u m i l d e . Compren actual calle Belgrano, apodada su
día varios niveles, según la impor zona “el barrio del mondongo” o
tancia de sus actividades económi “del tambor”. Según el lugar de
cas: los abastecedores de carne África de donde los habían traído,
poseían playas de matanzas, carre formaban grupos con un “rey” o
tas, puestos de venta, etc. Se les una “reina” y una comisión encar
reconoció un tribunal propio para gada de celebrar ruidosas fiestas
resolver los asuntos referentes a donde se bailaba el “candombe”.
su ramo. Rosas y su hija concurrían a veces.
Los plateros, lomilleros y herre Los indios fueron tratados amis
ros tenían casi todos sus talleres en tosamente. Hacia el oeste de la
el barrio de La Concepción (sudes ciudad, acudían a ciertos puntos
te de la ciudad). para cambiar cueros, pieles, plu
Los negros, fanáticos admirado mas de avestruz, etc., por aguar
res de Rosas, residían en su ma diente, tabaco, y adornos de visto
yoría en la parroquia de Montse sos colores. El gobierno dedicaba
rrat, iglesia que se levanta en la unos dos millones de pesos anua
“ E l candom be fed era l". ( Cuadro de B on eo.) C om o contraste de la lámina anterior, un grupo de
negros, acompañándose por sus tambores tradicionales, baila el antiguo ritmo africano en presencia
de Rosas.
les para obsequiarles ropas, yerba, de” y el “British Packet”, órgano
azúcar, sal, reses, etc., que les eran de la colectividad inglesa.
entregadas por los pulperos de la En 1843 apareció “El Archivo
campaña. A m erica n o” , y durante un año
(1 8 3 7 /3 8 ) el semanario literario-
musical “ La M od a ” , de R a fa el
La c u l t u r a . En 1830 fue clau Corvalán.
surado el “Colegio de Ciencias M o Se destacaron el doctor Francis
rales”. En su lugar funcionó, años co Javier Muñiz, por sus estudios
más tarde, un “Colegio Republica sobre fósiles, y el tratamiento de
no Federal”, de carácter privado, enfermedades infecciosas, y Pedro
dirigido por el jesuita Padre Ma- de Angelis, por su ordenación y
jesté. publicación de documentos histó
En 1838 se dejó sin presupuesto ricos, fuente valiosa para los his
a la Universidad, que debió em toriadores del futuro.
plear recursos propios para seguir El teatro gozó de gran favor;
funcionando. Al mismo tiempo se llevaba a escena obras del reperto
suprimió el sueldo de los maestros rio español y tal cual traducción
de la ciudad y la campaña. Los de otras europeas. Al final del pe
padres o encargados de los alum ríodo rosista actuaron con gran
nos debieron subvencionarlos. aceptación compañías de óperas lí
También qu ed ó a ca rg o de la ricas venidas de Italia.
beneficencia la “Casa de Expósi
tos” y el “Asilo de Huérfanos”. La
entrada de libros del extranjero y L a e c o n o m í a . Buenos Aires go
los publicados en el país debían zó del cierre de la navegación de
ser aprobados previamente por la los ríos, que obligaba a las embar
Censura. caciones extranjeras a dejar allí
El número de periódicos, que sus mercaderías; su aduana cobra
alcanzaba en 1833 a 43, bajó a 3 ba los derechos de importación, an
solamente; en 1842: “La Gaceta tes que parte de ellas pasaran al
Mercantil”, “El Diario de la Tar interior.
297
M ientras el litoral y diversos de marcas y señales. Las principa
puntos del país sufrieron las con les industrias derivadas del ganado
secuencias de las guerras civiles, eran la saladera y la extracción de
faena de gran cantidad de ganado cueros.
para alimentar a los combatientes Se trató de extender el cultivo
y destrucción de talleres y centros del trigo. Rosas prohibió su im
fabriles, Buenos Aires, mantenida portación, salvo cuando su venta
al margen de esas luchas, siguió alcanzase un precio máximo, y aun
progresando, sobre todo en su ga así con permiso especial.
nadería. El comercio sufrió grandes os
En 1840, Claudio Stegmarrn in cilaciones; lo perjudicaron largos
trodujo ovejas y carneros de raza bloqueos de las escuadras inglesa
merina; en 1848, Guillermo White, y francesa durante los conflictos
el primer toro de raza Durham, sostenidos por ese motivo.
que se caracteriza por sus cuernos La moneda se desvalorizó con el
cortos. abuso de los billetes impresos. En
En 1844, Ricardo Newton ten 1851 alcanzaron un monto de 125
dió el primer alambrado, que sus millones; como carecían de respal
tituyó con ventaja a las antiguas do en metálico, la onza de oro, que
cercas de troncos y arbustos. Tam valía 114 pesos al subir Rosas, se
bién se ensayaron nuevos sistemas cotizó a su caída en 331.
La EDITORIAL KAPELUSZ S.A. dio término a la decimoquinta edición de esta obra, que
consta de 8.000 ejemplares, en el mes de febrero de 1980, en los Talleres Gráficos La Prensa
Médica Argentina, Junín 845, Buenos Aires.
K — 17.347
298