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VOCACION Y EFICIENCIA EN EL

LABORATORIO CLINICO EN BASE AL


VALOR TOLERANCIA

El laboratorio clínico es el lugar donde un equipo


multidisciplinario formado por el médico patólogo clínico
o analista clínico, los profesionales del laboratorio y los
técnicos en análisis clínicos, analizan muestras biológicas
humanas que contribuyen al estudio, prevención,
diagnóstico y tratamiento de las enfermedades. También
se conoce como laboratorio de patología clínica y utiliza
las metodologías de diversas disciplinas como la
bioquímica- también llamada química clínica -
hematología, inmunología y microbiología. En el
laboratorio clínico se obtienen y se estudian muestras
biológicas diversas, como sangre, orina, heces, líquido
sinovial (articulaciones), líquido cefalorraquídeo,
exudados faríngeos y vaginales, entre otros tipos de
muestras.

La tolerancia en el plano personal nos permite mirar el


pasado sin rencores y fortalecer la autoimagen como
sostén del bienestar presente y el crecimiento futuro. Es un
reto al que nos vemos abocados continuamente en los
campos más disímiles e insospechados tanto como
espacios laborales y personales que exigen poner en
práctica el valor de la tolerancia. El respeto es un principio
fundamental para la convivencia universitaria que conlleva
el imperativo de la tolerancia.
En el ámbito laboral la acción de promover la opinión y la
participación de la gente no solo contribuye a encontrar
soluciones más rápido y eficazmente sino que además
genera un alto nivel de compromiso hacia las tareas a
realizar en el laboratorio.

Existen diferentes situaciones que generan frustración en


los seres humanos y en el ámbito laboral, es muy común
que los colaboradores la experimenten ante las demandas
de sus compañeros, jefes y encargados, o por sus propias
expectativas.

Nos enfrentamos a situaciones de frustración desde que


somos niños, ya que requerimos satisfacer nuestras
necesidades fisiológicas básicas, como lo son los tiempos
alimentación, el aseo personal, los horarios de sueño, entre
otros. En estas edades es fundamental poder satisfacer
dichos aspectos de forma inmediata, ya que son la base
para generar seguridad y estabilidad emocional en
nosotros más adelante.

Sin embargo, seguimos evolucionando y en el proceso


descubrimos que no todos nuestros deseos o necesidades
pueden ser atendidas de igual manera, ni de forma
inmediata. Por lo que comprendemos que existen tiempos
de espera o circunstancias que no permiten la satisfacción
de los mismos; es en ese momento donde se desarrolla la
capacidad de tolerar situaciones de frustración. Ligado a
esta habilidad, algunos desarrollamos autonomía en las
acciones al ver que otros no les pueden solucionar sus
problemas o facilitar el cumplimiento de sus deseos, por lo
que generamos estrategias para lograr objetivos por sí
solo. Sin embargo, otras no son capaces de tolerar
molestias, exigencias, contratiempos, entre otras
situaciones, ya que éstos son percibidos como
obstáculos para satisfacer sus deseos por alcanzar un
objetivo o meta laboral.

También es importante reconocer el trabajo de otras


personas, dando retroalimentaciones, de manera tal que se
refuercen sus potencialidades, habilidades y esfuerzo para
alcanzar las metas. Esto generará confianza, seguridad y
aumentará sin lugar a dudas su tolerancia a la frustración.
También debemos evitar hacer comparaciones entre las
capacidades, metas o tiempos de otros colaboradores, pues
esto puede retroceder todo el trabajo previo que se ha
realizado para mejorar esta habilidad.

Es fundamental trabajar con estas personas desde sus


potencialidades y no desde sus debilidades, reconocer su
esfuerzo diario y generar pequeñas acciones de apoyo que
contribuyan a fortalecer su vocación, seguridad,
autonomía y autoestima.

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