de servir y no el de servirse debe ser el faro orientador de tu sinceridad.
2. Esfuérzate en despertar en ti y en todo lo que te
rodea el sentido ético latente en todo ser humano.
3. Crea un ambiente de cordialidad en la oficina,
siendo cortés, comprensiva y cooperativa.
4. Regocijate si eres responsable, reedúcate para
perfeccionar tus conocimientos. La responsabilidad es uno de los pilares donde descansa el éxito.
5. Entusiásmate, tu entusiasmo aumenta tu
eficiencia te permitirá cosechar grandes satisfacciones. 6. Se discreta y utiliza el tacto con todos, con tus superiores, con tus subordinados, con tus compañeros, con tus colaboradores, con las personas que atiendes y puedes ayudar.
7. Ama tu trabajo, amando tu trabajo amas al
prójimo y también a Dios.
8. Respetate a ti misma y respeta a los demás,
recuerda que así se gana el derecho a ser respetada.
9. Interésate sinceramente en todo lo que te rodea.
Este sincero interés te permitirá desarrollar al máximo todas tus personalidades.
10. Actúa con lealtad, pero que la máxima
expresión de tu lealtad no sea tu adhesión incondicional a una persona, sino a lo bueno, a lo correcto, a lo ético a lo justo.